Yanet Hernández Alvarez / Enildo Díaz Lima

La Habana - Junio 2012

 







 >
DECLARATORIA DE AUTORÍA

Yo, Yanet Hernández Álvarez estudiante de la Facultad de Arquitectura

del Instituto Superior "José Antonio Echeverrría", declaro que
soy el autor del trabajo de diploma titulado "Pabellón Cuba:
Un espacio para el encuentro", y autorizo a esta institución a
hacer el uso que estime pertinente del referido trabajo.

Para que así conste,

firmo a los 13 días del mes de junio de 2012.

Yo, Enildo Díaz Lima estudiante de la Facultad de Arquitectura

del Instituto Superior "José Antonio Echeverrría", declaro que
soy el autor del trabajo de diploma titulado "Pabellón Cuba:
Un espacio para el encuentro", y autorizo a esta institución a
hacer el uso que estime pertinente del referido trabajo.

Para que así conste,

firmo a los 13 días del mes de junio de 2012.
 Rehabilitación del ‘‘Pabellón Cuba’’
espacio para el encuentro

Trabajo de Diploma

autores:

Yanet Hernández Álvarez

Enildo Díaz Lima

tutores:

Lic. Lourdes Rodríguez

Arq. Orlando Inclán Castañeda

Facultad de Arquitectura de La Habana

Instituto Superior Politécnico “José Antonio Echeverría”

Taller de Urbanismo. Dirección General de Proyectos de Arquitectura y Urbanismo.

Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana.

L a H a b a n a _ j u n i o 2 0 12
A nuestros padres por ser los arquitectos de nuestras vidas, por
el pasado, presente y futuro...
A los que ya no están y que hubiesen querido compartir este
momento.
(...) ‘‘Y dígase libro, y morirá un árbol, y dígase hotel
y un arrecife morirá, y dígase embalse y morirá una
cascada. Y al final, después de haber capturado todo
lo que queríamos, moriremos pobres’’.

Omar Pérez
 A nuestros padres y hermanos
A nuestra familia toda
A Leo por ser parte isdispensable en todo momento
A Alicia y Luisa por acogernos
A Rosy y Myde por formar parte de nuestro equipo
A Lourdes e Inclán por el tiempo y la experiencia
A la AHS, en especial a Víctor y Jaime
Al Arq. Humberto Ramírez
A Pablo y Magalys por la disposición bibliográfica
Al equipo del taller de urbanismo de la OHCH
A Tere y a Leonardo
A Eyla y Jordi por la distracción
A los profesores de la Facultad de Arquitectura
A todo aquel que de una forma u otra ha tenido que ver con este
trabajo
Y a nuestros compañeros de carrera por ser especiales
Resumen

En este trabajo se ofrece una reflexión teórica sobre

los cambios que han experimentado los pabellones
expositivos desde su surgimiento hasta la actualidad.
Se estudian sus antecedentes y tendencias estilísti-
cas, así como una serie de requisitos generales nece-
sarios para el cumplimiento de la función para la que
son diseñados. Algunos referentes para centros cul-
turales contemporáneos constituyen material de estu-
dio, como base de posteriores análisis y propuestas.
En el panorama mundial se muestran diversas actua-
ciones sobre el patrimonio construido, preservando la
esencia del inmueble a la vez que se establece una
conexión con formas más contemporáneas.

En el ámbito nacional se enfoca la actividad expositiva

enmarcando tres etapas fundamentales y claramente
diferenciadas: Colonia, República y Revolución. En
consecuencia, serán identificados los centros exposi-
tivos para dichas actividades que aún se mantienen
en uso. Se realiza un estudio-diagnóstico, donde se
generan los problemas y potencialidades de la zona
consolidada de La Rampa, todo a través de un siste-
ma multicapas que luego de superpuestas, arrojarán
los principales puntos a intervenir. Primero desde el
entorno urbano y luego (fundamentalmente) el arqui-
tectónico.

La propuesta de intervención se estructura en dos

partes: la revitalización cultural de La Rampa y en una
segunda parte, se desarrolla el diseño conceptual
para la rehabilitación del Pabellón Cuba, de forma tal
que se convierta en un centro dinamizador de la cultu-
ra de la zona y para la ciudad.
Índice
3.7.3 Mecánica 83
2.3.9 Redes técnicas e infraestructura 45 3.7.4 Corrientes débiles 84
_00 Introducción 07
2.3.10 Época de construcción y estilos 3.7.5 Sistema de red de datos 84
Situación problémica 09
arquitectónicos 45 3.7.6 Sistema de audio central 84
Problema 09
2.3.10.1 Grados de Protección 46 3.7.7 Sistema automático de detecció de incendios 84
Objetivo general 09
2.3.11 Elementos demográficos y factor social 47 3.8 Conclusiones parciales 85
Objetivos específicos 09
2.4 Manzana de estudio 47 _04 Conclusiones 86
Alcance 09
2.5 Pabellón Cuba 50 _05 Recomendaciones 87
Metodología de trabajo 09
2.5.1 Descripción del edificio 50 _06 Bibliografía
2.5.1.1 Orientación climática 52
_01 Capítulo 1: Estado del Arte _07 Anexos
2.5.2 Accesos 52
1.1 Pabellones expositivos 10 2.5.3 Principales visuales 52
1.1.1 Evolución histórica 10 2.5.4 Estado actual 52
1.1.2 Clasificación 17 2.5.4.1 Cubierta 53
1.1.2.1 Durabilidad 17 2.5.4.2 Elementos verticales 53
1.1.2.2 Emplazamiento 18 2.5.4 3 Elementos horizontales 53
1.2 Centros culturales 19 2.5.4.4 Pisos 54
1.2.1 Centro de Arte Contemporáneo Bolit 20 2.5.4.5 Escaleras 54
1.2.2 Centro cultural en Tondheim 20 2.5.4.6 Revestimientos 54
1.3 Edificios de ayer con funciones de hoy 21 2.5.4.7 Carpintería y herrería 55
1.3.1 Pabellón de la Navegación 22 2.5.4.8 Instalaciones 55
1.4 Ampliación 23 2.5.4.8.1 Electricidad 55
1.4.1 Ampliación del Museo Nacional 2.5.4.8.2 Climatización 56
Centro de Arte Reina Sofía 23 2.5.4.9 Estructura 56
1.4.2 Ampliación del Museo del Prado 25 2.5.4.10 Áreas exteriores 56
1.5 Recintos para exposición en Cuba 27 2.5.4.11 Mobiliario urbano 56
1.5.1 Colonia 27 2.5.4.12 Gráfica y señalética 56
1.5.2 República 27 2.6 Propuesta de acciones constructivas 56
1.5.3 Revolución 28 2.7 Síntesis de la problemática 57
1.6 Conclusiones parciales 30 2.8 Conclusiones parciales 58

_02 Capítulo 2: Análisis de sitio _03 Capítulo 3: Espacio para el encuentro

2.1 El Vedado: la Capital de la Capital 31 3.1 Regenerando La Rampa 59
2.2 La Rampa: Centro Cultural Recreativo 33 3.1.1 Fundamento teórico-conceptual 59
2.2.1 Surgimiento y evolución 33 3.2 Premisas de diseño 59
2.2.2 Distintos enfoques 35 3.2.1 Lineamientos regulatorios generales 60
2.3 Caracterización del contexto inmediato 37 3.3 Propuesta de intervención a escala urbana 61
2.3.1 Límites 37 3.3.1 Criterios medioambientales 62
2.3.2 Regulaciones urbanas 37 3.3.2 Mobiliario urbano 63
2.3.3 Trazado y estructura urbana 38 3.3.3 Gráfica urbana 63
2.3.4 Conexiones 39 3.4 Proyectos diamizadores 64
2.3.4.1 Circulación vehicular 39 3.5 Complejo Cultural Pabellón Cuba 65
2.3.4.2 Circulación peatonal 41 3.5.1 La ampliación 66
2.3.5 Perfil urbano 41 3.5.2 Los espacios 68
2.3.6 Tipologías arquitectónicas 42 3.6 Accesibilidad 81
2.3.7 Usos de suelo y equipamiento urbano 43 3.7 Instalaciones 83
2.3.8 Situación ambiental 44 3.7.1 Hidrosanitarias 83
2.3.8.1 Áreas verdes y espacio público 44 3.7.2 Eléctrica 83
Introducción
A lo largo de la historia, los edificios para exposicio-
nes no se concibieron siempre de la misma forma, ni
tuvieron el mismo carácter. Las primeras exposiciones
decimonónicas se caracterizaron por exhibirse en un
mismo recinto, pero las transformaciones y avances tec-
nológicos de la Revolución Industrial, provocaron una
explosión en el diseño arquitectónico e ingenieril pro-
piciando el surgimiento de las fantásticas estructuras
metálicas.
En ese sentido, la Tesis Doctoral de Alejandro Bernabeu
Larena: ‘‘Estrategias de diseño estructural en la arqui-
tectura contemporánea’’, ofrece importantes criterios
acerca del origen y desarrollo de las nuevas formas es-
tructurales y arquitectónicas desde el siglo XIX hasta la
actualidad, destacando el papel de la estructura en el
proyecto. Proceso que estuvo íntimamente ligado a la
aparición de nuevos materiales y sistemas estructura-
les, ensayados en principio con la arquitectura efímera
de los pabellones de exposición.
Los pabellones expositivos que fueron construidos
con carácter permanente, durante su vida útil han sido
adaptados a las necesidades de su tiempo, ya que su
comunidad ha sido partícipe de su historia y procesos
de cambios. Muchas de estas edificaciones han deve-
nido centros culturales importantes y continúan siendo
el corazón de su ciudad. Actualmente estos íconos de
su tiempo, enfrentan un alto deterioro y pérdida de
funciones, a lo que se une la incapacidad y falta de in-
terés de los gobiernos de gestionar de forma eficiente
su rescate. Por tanto, los inmuebles en esta situación
representan un gran reto de adaptación a las necesida-
des de hoy.
El Pabellón Cuba, en la zona de La Rampa, constituye
una muestra de la arquitectura del Movimiento Moderno
con estas problemáticas. Esta edificación ha sido trans-
formada atentando contra su programa arquitectónico
original y sufre hoy una degradación de sus servicios y
funciones -que no satisfacen a la población-, razón por
la cual debe ser objeto de intervención para rescatarla.
El tema del rescate de pabellones expositivos está con-
dicionado al reconocimiento que se le otorgara a estas
obras como representantes de edades de oro irrepeti-
bles en la historia. En el artículo de Ascensión Hernán-
dez Martínez ‘‘La arquitectura del Movimiento Moderno:
entre la desaparición y la reconstrucción. Un impacto
cultural de larga proyección’’, se definen disímiles ten-
dencias referidas a las intervenciones en los pabellones
expositivos del siglo XX. Producto de la mitificación de
edificaciones destacadas, se materializan diversos ti-
pos de intervención:
1. Restauración filológica, justificada por el carác-
ter emblemático de la edificación y que tras su restaura-
ción, acaba musealizándose. Se plantea una intención
de recuperar el estado original del edificio, desmante-
lando las modificaciones que ha experimentado a lo
largo del tiempo, en detrimento de su valor histórico y
documental. 7
estado
del
2. Respeto a la autenticidad material de la obra, arte
conservando sus transformaciones y deterioros, para
no falsear su historia.
3. Introducción de nuevos usos o restauración
próxima a la filología, pero cuidando en extremo la ca-
lidad técnica de la construcción, aprovechándose de
nuevos materiales y tecnologías para conservar y legar
en mejor estado el edificio por restaurar.
4. Restauración de obras trasplantadas de su lu-
gar de origen, perdiendo las referencias que las expli-
caban, hoy aisladas del contexto físico donde se levan-
taron.
Sin embargo, estas intervenciones se enfocan en la
reconstrucción de la obra con el posible riesgo de que
una vez terminada se produzca un abandono y por con-
siguiente, la paradójica necesidad de restaurar la re-
construcción. Esto tendría su explicación en la falta de
conexión con las necesidades de recepción y disfrute de
las generaciones actuales.
Algunos arquitectos han reivindicado el derecho a la
réplica como medio legítimo de apropiación de la arqui-
tectura histórica, es el caso de Ignasi Solá-Morales que
ha planteado que “la cultura del pasado ha de estar al
servicio del presente”. Pero la concepción de una arqui-
tectura museable donde los espacios sean sólo objeto
de miradas, no es factible en todos los casos. La res-
puesta debe ser una arquitectura acorde a las exigen-
cias funcionales de la comunidad que la habita, el cam-
bio de uso sería una forma de adaptación al presente.
Por su amplio espectro de posibilidades e impactos
en las ciudades a finales del siglo XX y en el presente
siglo, la rehabilitación es hoy una de las áreas de con-
servación de los Bienes Arquitectónicos y Urbanos más
importantes. Este procedimiento de rescate es cada vez
más frecuente, lo que acaba revitalizando el carácter de
su entorno, el nivel de vida de las personas y el edificio
acaba transformándose en un elemento dinamizador
local y/o en referente global.
De las definiciones del término rehabilitación para este
trabajo es de gran importancia la de Rafael Márquez en
su libro ‘‘Estudio de metodologías de la rehabilitación
de edificios del siglo XX. Caso Venezuela’’: proceso cons-
tructivo o tipo de operación que permite a un edificio ser
llevado a condiciones de habitabilidad o funcionalidad,
posibilitando su adaptación a nuevos usos, y depen-
diendo de la valoración histórica y presencia del edificio
surgirán cambios en cualquier parte del cuerpo edilicio
(…) asume la totalidad de los componentes internos y
externos de las preexistencias del edificio, incluyendo
modificaciones en el contexto inmediato de la edifica-
ción.
Esta definición dentro de las intervenciones asume
transformaciones en cualquier parte de la obra respecto
al uso, a los espacios tanto interiores como exteriores
siempre respetando la identidad y el valor documental.
Además incluye decisiones más complejas como la per-
manencia o no de las modificaciones a que ha sido ob-
jeto la obra durante su vida útil (preexistencias).
Asimismo son de interés los planteamientos de Juan
José Pool Gallo, en su Tesis de Maestría: ‘‘Rescate de
áreas patrimoniales en obsolescencia. La Unidad Veci-
nal Portales’’, donde precisa que toda intervención so-
bre el patrimonio construido debe tender a la conserva-
ción de su herencia cultural, y debe reconocer el cambio
de los escenarios, no pretender congelarlos ni detener-
los, es decir, generar una relación dinámica entre con-
texto contemporáneo y patrimonio. Cuyo aporte a este
trabajo radica en el enfoque de la intervención rehabili-
tadora con un nuevo lenguaje, en correspondencia con
el discurso antiguo.
Pero de forma general, para este trabajo tiene mayor
peso el enfoque de Juan Monjo Carrió: ‘‘La intervención
en los edificios, una actuación arquitectónica’’, que
define la intervención como una actuación ante todo
arquitectónica, considerando el edificio a la vez como
documento histórico, como conjunto de locales funcio- 8
nales y como objeto físico construido. En síntesis es- estado
del
pecifica que para recuperar una obra arquitectónica se arte
deben recuperar su aspecto y valor histórico (restaurar),
su funcionalidad (rehabilitar) y la función constructiva
de todos sus elementos (reparar).
Por otra parte, en el desarrollo del estudio diagnóstico
de la zona de La Rampa, resultaron imprescindibles las
Regulaciones Urbanísticas del Vedado (2007) y el artí-
culo ‘‘La Rampa. Nostalgia y rescate’’ (2003), de Ángela
Rojas e Isabel Rigol.
El primero aportó tanto la historia del proyecto original
del Vedado como sus normas regulatorias, redactadas
a favor de su conservación y legado a futuras genera-
ciones. Así como resalta de forma detallada en las edi-
ficaciones Grados de Protección I, las acciones a imple-
mentar a favor de su rehabilitación. En este sentido, el
artículo antes mencionado, describe fabulosamente la
zona de estudio La Rampa, abarcando casi la totalidad
de los edificios y los valores por los que son reconoci-
dos. Muchas de estos inmuebles adolecen hoy cierto
irrespeto a pesar de su condición de invaluables para
nuestra historia.
Situación Problémica
En la actualidad la zona de La Rampa, objeto de estu-
dio de este trabajo, mantiene su carácter de centro a
nivel de ciudad, aunque la restauración del antiguo
centro, haya conspirado contra la importancia alcanza-
da por la zona en la década de los 50 y los primeros
años del período revolucionario. Las transformaciones
de muchas de sus edificaciones, el deterioro físico-
funcional de los servicios que quedan y su decadencia,
trajo consigo la pérdida de servicios y funciones, ade-
más de la incapacidad para dar respuestas de carácter
social a las diferentes generaciones de cubanos que de
una forma u otra han hecho suya la tan concurrida área
de la Rampa.
Objetivos específicos
1. �����������������������������������������������
Analizar la evolución histórica de los pabello-
nes expositivos, los criterios acerca de centros cultu-
rales contemporáneos y las tendencias rehabilitado-
ras de estas arquitecturas a nivel mundial.
2. Realizar un diagnóstico del edificio que per-
mita definir criterios para la intervención.
3. Realizar una propuesta de intervención en el
edificio del Pabellón Cuba
Alcance
Propuesta de intervención arquitectónica a nivel de
ideas conceptuales para el caso de estudio, sin perder
de vista la relación del objeto con su contexto.

La zona y en esencial el Pabellón Cuba, ameritan un

análisis de revisión, desde criterios más contemporá- 9
neos, que se adapten a las nuevas necesidades de la estado
del
actual y futura ciudad. Devolverle su carácter de centro arte
cultural a la zona anima la propuesta que se hace en
este trabajo.

Problema
La pérdida de centralidad cultural de la zona y la deca-
dencia del Pabellón Cuba debido a la degradación de
sus servicios y funciones que no satisfacen a la pobla-
ción.

Objetivo General
Realizar una propuesta de intervención en el edificio
del Pabellón Cuba dentro del contexto de la Rampa
que le devuelva la imagen de centro cultural a escala
de ciudad.
 La Habana - Junio 2012

Í






>
1.1 Pabellones Expositivos
1.1.1 Evolución histórica
(...) No es fácil, pues, averiguar de que modo la
nación se expresa en éstos y otros edificios. En
cambio, los pabellones nacionales en las grandes
exposiciones presentan el problema químicamente
puro. Examinándolos y tirando del hilo que ellos nos
ofrecen, puede deshacerse la madeja de la “identi-
dad arquitectónica” (...)
Maria José Bueno, 1987: Prólogo
Las exposiciones son en la actualidad un medio cada
vez más atrayente y demandado por instituciones y
empresas, con el objetivo de difundir contenidos y
mensajes a su público. Las mismas constituyen el re-
sultado de un complejo sistema de conceptualización
e interpretación, diseño y organización, referencia y
comunicación, al mismo tiempo.
El análisis de términos como exposición y muestra
son de extraordinaria significación para este traba-
jo. Estos términos se definen como “manifestaciones
de carácter público en las que se exhiben productos
industriales, comerciales o artísticos’’. A veces se en-
tienden como sinónimos pero “una muestra, supone
la demostración de un producto durante cierto tiem-
po, y una exposición consiste en la exhibición de mer-
cancías a gran escala y suele durar varios días. Ambos
poseen carácter regional, nacional o internacional, y
pueden ser monotemáticas
1
o exponer gran variedad
de artículos” .
Diversos textos refieren que las exposiciones nacio-
nales de productos
2
de la industria en Europa de fines
del siglo XVIII , constituyen los antecedentes
3
de las
grandes exposiciones universales . Por su parte, las
exposiciones nacionales de la industria -desarrolla-
das desde los años sesenta del siglo XVIII- carecían
de un edificio único como contenedor permanente en
el que albergar sus productos, por lo que se ubicaban
en diferentes lugares.
Los emplazamientos fueron de gran centralidad: el
Campo de Marte, el Louvre, la Plaza de los Inválidos, en-
tre otros; por lo que su evolución advirtió un incremento
4
constante del volumen de elementos a exponer .
En la segunda mitad del siglo XIX, como tendencia ge-
neral, se puede plantear que se desarrollan tres tipos
fundamentales de exposiciones:
1. Exposición de productos industriales (ya
mencionada con anterioridad)
2. Exposiciones de carácter local (consagradas
a conmemorar algún acontecimiento histórico)
3. Exposiciones de carácter Universal (trascien-
den lo local y en muchos casos lo continental)
Con el inicio de las grandes exposiciones universales
-desde Londres (1851)- se ha revelado el potencial
artístico, económico, industrial, etc., de los países
participantes, representados por construcciones que
devinieron auténticos laboratorios de experimentos,
imprescindibles para desarrollar posteriores obras 1
10
permanentes. En efecto, la llamada arquitectura efí- estado
del
mera y en particular los pabellones de exposiciones, arte
han sido fundamentales para el desarrollo de la histo-
ria de la arquitectura (al menos desde mediados del
siglo XIX).
Según el Diccionario de la Real Academia Española,
un pabellón es “cada una de las construcciones o edi-
ficios que forman parte de un conjunto, como los de
una exposición, ciudad universitaria, hospital, cuar-
tel, etc.”. Durante el siglo XIX y en la actualidad, el tér- 1. http://www.expo92.es. Web oficial de la Expo 92’, fe-
brero 2006 (acceso 3/12/2011).
mino se amplía también a “extensas construcciones 2. La Exposición Nacional de los productos de la Indus-
ligeras y transparentes a menudo en5lugares públicos tria Francesa de 1798 en París, se considera la primera
exposición pública de los productos industriales france-
adjuntos a grandes equipamientos” . ses.Los ingleses organizan en el siglo XVIII exposiciones
industriales nacionales, con vocación más didáctica y
Los temas que abordan los pabellones expositivos cultural que mercantil.
3. Lasheras Peña, Ana Belén: España en París. La
son entre otros, aniversarios de hechos notables (in- imagen nacional en las exposiciones universales,
ventos, descubrimientos, batallas, etc.), conmemo- 1855-1900,Universidad de Cantabria, Santander, 2009.
4. Idem.
raciones de hechos locales (fundación de ciudades, 5. http://es.wikipedia.org/wiki, noviembre 2011 (acce-
so 8/12/2011).
apertura de instituciones, el trabajo de asociaciones
locales, de organizaciones diversas, de artistas o ar-
tesanos de la región, etc.). Para su concepción deben
tenerse presente entre ostros aspectos, el presupues-
to, un diseño que garantice su duración y el tipo de
exposición que vaya a albergar.

Con frecuencia, la arquitectura diseñada para las ex-

posiciones ha sido entendida con un carácter efíme-
ro, y condicionada en buena medida, por el empleo
de materiales y sistemas constructivos, que favore-
cen una económica y rápida respuesta constructiva.

© Archivo personal de los autores

En consecuencia, esta arquitectura permite ensayar

© www.wikipedia.com
toda clase de diseños, mejor cuanto más atrevidos y
espectaculares,6
con mayor libertad que en la arquitec-
tura definitiva .

Una obra clave en este sentido es el Crystal Palace Fig. 1. Palacio de Cristal. Londres, 1850-51. Joseph Paxton. Fig. 2. Torre Eiffel, Exposición Universal de París, 1889.

construido en Londres para albergar la Exposición

Universal de 1851, que supone la culminación de las
construcciones
7
de hierro y vidrio realizadas en el siglo
XIX . Esta obra constituye el antecedente de mayor
importancia como edificación proyectada para ferias
internacionales, cuya concepción estructural de espa-
cio interior continuo, ofrecía resistencia y posibilida-
des mucho mayores que las de los materiales estruc-
turales conocidos hasta entonces (piedra y madera).
En consecuencia se supera rápidamente la escala de
finamiento artístico; por lo que se le califica como la
exhibición mecánica más lograda hasta el momento.
No obstante, a pesar de estos resultados los arqui-
tectos mantuvieron el empleo de materiales tradicio- 11
nales (piedra, madera, ladrillo, yeso) durante mucho estado
del
tiempo, ya que las academias de las Bellas Artes con- arte
sideraban “poco artísticas” las estructuras diseñadas
por los ingenieros del siglo XIX.

© Bernabeu Larena, 2007.

las construcciones realizadas anteriormente, poten-
ciando 8un importante cambio en su planteamiento
formal . El Crystal Palace además va a condicionar
la realización del evento en un edificio único, rasgo
que no se repetiría en lo adelante, e introduce la con-
cepción de sistemas de producción y prefabricación
9
industrial .
El predominio de las construcciones de hierro y la
culminación del arte del ingeniero son constatados
en 1889 en París por la Torre Eiffel y la Galería de las
Máquinas (de Dutert y Contamin). Esta última repre-
senta un gran logro técnico y arquitectónico, donde
se logran compensar requisitos estructurales con re-
Este tipo de arquitectura que surge como alternativa
ante el proceso de industrialización, no era conside-
rada con valores estéticos por la burguesía, que sólo
las asociaba con temas arquitectónicos de carácter
productivo (industrias, mercados, almacenes, ferro-
carril, invernaderos, etc.). Son siempre temas de ca-
rácter “utilitario”. La arquitectura representativa de
la burguesía continúa afiliada al eclecticismo como
lenguaje.
Estas primeras exposiciones universales contribuye-
ron en gran medida a romper el concepto tradicional
de lo que se entendía por objeto exhibible, porque los
edificios expositivos presentaban tanto máquinas,
Fig. 3. Sala de Máquinas de la Exposición Universal de
París de 1889.
6. Hernández Martínez, Ascensión y María Pilar Poblador
Muga:´´Arquitectura efímera y fiesta en la Zaragoza de la
transición del siglo XIX al XX´´, Artigrama, No. 19, /s.e/,
2004, p. 155 a 195.
7. Bernabeu Larena, Alejandro:Estrategias de diseño
estructural en la arquitectura contemporánea. El trabajo
de Cecil Balmond, Tesis de Doctorado en Estructuras de
Edificación, Escuela Técnica Superior de Arquitectura,
Universidad Politécnica de Madrid, Madrid, 2007.
8. Idem.
9. Idem.
series de productos y objetos técnicos de diferente
uso, como diversos objetos artísticos. Aunque ya en
1855, se va a producir una ruptura entre los espacios
para el arte y para la industria, creándose un Palacio
de las Bellas Artes y un Palacio de Industria.
Hasta que años después, en la exposición universal de
1867 nacen de forma discreta los Pabellones Naciona-
les, que representan instalaciones
10
emblemáticas de
re años después M. L. Hantecceur en plena celebración
12
de la Exposición Universal de 1937 en París .
En efecto, los edificios de la Exposición Universal
parisina de 1900 eran esencialmente de estilo Art
Nouveau, cuyos diseños proyectuales estaban basa-
dos, tanto en la tendencia de la época de enmascarar
los elementos estructurales como en la búsqueda de
una arquitectura más impactante formalmente. Esto

los países participantes . En sus inicios estos edificios
acogen las oficinas de la comisión nacional del país en
cuestión y alguna sala expositiva, primando aún el es-
pacio destinado al Palacio de la Industria como centro
en el plan urbano del recinto de la exposición.
Estos Pabellones Nacionales, emergen por primera
vez en la historia de las exposiciones universales con
un papel trascendental, mostrando al mundo a tra-
vés de su arquitectura la identidad de las naciones.
Cada uno de ellos era autónomo y respondía a un pro-
grama arquitectónico específico.
El empleo de este modelo ferial tuvo gran relevancia,
por lo que cito las palabras de Luis Ángel Sánchez Gó-
mez en “Ciencia, exotismo y colonialismo en la Expo-
© www.zh.wikipedia.org
se aprecia en dos construcciones supervivientes, el
Grand Palais y el Petit Palais, que se siguen utilizando
para exposiciones de arte hoy en día.
Sin lugar a dudas, con el cambio de siglo van a ocu- Fig. 4. Grand Palais, Exposición Universal de 1900.
rrir transformaciones muy importantes. En este senti-
do se propone un profundo cambio de programa en
los pabellones expositivos -de “exposición-museo”
a “exposición-fiesta”-, intensificándose el pintores-
quismo, el exotismo y la variedad
13
de las instalaciones
y atracciones de la muestra .
Si en el pabellón tradicional el visitante era un espec-
tador pasivo y sin muchas posibilidades de intervenir,
fue con el inicio del siglo XX que las vanguardias artís- 12
ticas se cuestionan el modo de presentar los objetos

© www.zh.wikipedia.org
estado
del
sición Universal de París de 1878”: de exposición. arte

(…) rompe las barreras de la exhibición formal de es-
pacio único compartido y abre la espita de forma deci-
dida al empleo de dos de los recursos expositivos más
exitosos y recurrentes de las futuras ferias mundiales:
el nacionalismo arquitectónico reflejado a través de
esos pabellones nacionales y la representación exo-
tista de gentes, territorios y 11
países en una especie de
parque-ciudad mundial (…) .
Justamente como indica la cita, muchos de estos pa-
bellones se caracterizaban por la ostentación de ricos
colores y formas curiosas. Por lo que se plantea que
hasta 1900, los arquitectos diseñaban dichas obras
con excesos de enyesados y estucos, incluso después,
continuaron levantando sobre sus edificios montones
de “manteca fresca o crema de pastelero”, como refie-
“La evolución del arte y de los espacios expositivos 14
re-
fleja una estrecha relación entre ambas realidades” .
La evolución del concepto del pabellón –como espa-
cio expositivo que es– y las nuevas funciones que se
le fueron asignando, devienen procesos paralelos a
la evolución de la arquitectura. Evolución esta que,
primero estuvo ligada a las estructuras metálicas y a
la industrialización durante el siglo XIX, y luego a la
aparición del hormigón armado en el siglo XX. Así lo
demuestran los pabellones expositivos proyectados
durante las primeras décadas de este último siglo.
Como referentes de esta etapa se encuentran el pabe-
llón de L´Espirit Nouveau de Le Corbusier y el pabellón
ruso de Konstantín Stepánovich Mélnikov, ambos de
Fig. 5. Petit Palais, Exposición Universal de 1900.
10. Idem.
11. Sánchez Gómez, Luis Ángel: ´´Ciencia, exotismo y co-
lonialismo en la Exposición Universal de París de 1878´´,
Cuadernos de Historia Contemporánea, Vol. 28, Dpto. de
Prehistoria y Etnología Universidad Complutense,Madrid,
2006, p. 191-212.
12. Hantecceur, M. L (Consejero Técnico de la Exposi-
ción): ‘’La arquitectura en la Exposición de 1937’’, Arqui-
tectura, Año VI, No. 55, Colegio Nacional de Arquitectos,
La Habana, 1938, p. 51-58.
13. A finales del siglo XIX se constata un incremento con-
siderable de instalaciones para la diversión y el ocio de
los visitantes de las exposiciones universales. Incluso
los aspectos más pedagógicos son fuertemente influen-
ciados por la necesidad de dar recreo a los visitantes,
de lo que depende en gran medida, el éxito del evento
(N.A).
14. Bellido Gant, Mª Luisa: ¿Hacia dónde van los mu-
seos?, /s.e/, /s.f/, /s.p/.
la Exposición de Artes Decorativas de París en 1925,
posteriormente considerados verdaderos íconos del
Movimiento Moderno. Sus aportes esenciales radi-
caban en el rechazo a la estética decimonónica que
dominaba las artes decorativas, proponiendo formas
más modernas de 15
acuerdo con una nueva etapa y una
nueva sociedad .

Si bien la mayoría de los pabellones expositivos del

momento optaron por mostrar la arquitectura tradi-

©http//:es.wikiarquitectura.com
cional representativa de cada país, otros mantuvieron
el elogio a lo nacional pero con interpretaciones más
contemporáneas. En este sentido, la arquitectura tra-
dicional sufriría un giro inesperado durante la Exposi-
ción Universal celebrada en Barcelona en 1929 con el
Pabellón Alemán de Mies Van der Rohe, considerado Fig. 6. Pabellón alemán, Exposición Internacional , Barcelona 1929.
el verdadero protagonista del certamen.

Los aportes arquitectónicos de esta obra radican en el

predominio del espacio como una unidad abierta, el
uso de la planta libre, las largas ventanas, y la relación
con la naturaleza. Esta obra es indiscutiblemente la

© www.pabelondeespanaenbruselas.html
adaptación personal de su autor de soluciones tradi-
13

© Fotografía Brazil Builds, 1943

cionales, como levantar el edificio sobre una platafor-
ma y acceder mediante una escalinata, de la misma estado
del
forma que utiliza materiales nobles de arquitectura arte
palaciega como el mármol. Con este pabellón se van
a consagrar dos aspectos relevantes: la presencia del
muro16cortina y el juego abierto-cerrado de los espa- Fig. 7. Pabellón de Brazil, Exposición Internacional, New York 1939. Fig. 8. Pabellón español en la Exposición Intternacional
cios . de Bruselas, 1958.

De manera similar se alcanza una expresión arquitec-
tónica nacional moderna en la Feria Mundial de New
York de 1939, donde el Pabellón Finlandés de Alvar
Aalto es aclamado como el interior más brillante e in-
novador, al combinar formas modernas con rasgos ar-
quitectónicos tradicionales de Finlandia. Por su parte,
el Pabellón de Brasil de Lucio Costa y Oscar Niemeyer
significó un punto culminante de la producción de
pabellones de Brasil, donde lograron convivir el libre
manejo de curvas sinuosas con la17interpretación de
elementos vernaculares brasileños .
Si las exposiciones universales parisinas de los úl- 15. Hernández Martínez, Ascensión: ´´La arquitectura
del Movimiento Moderno: entre la desaparición y la re-
timos años del siglo XIX representaban el conflicto construcción. Un impacto cultural de larga proyección´´,
entre las obras arquitectónicas e ingenieriles, en la Apuntes, Vol. 21, No. 2, /s.e/, 2008, p. 156-179.
16. Grandas Sagarra, Carme: Arquitectura para una ex-
exposición de Bruselas de 1958 esto es algo ya su- posición: Barcelona 1929´´, Artigrama, No. 21, /s.e/,
perado. El Pabellón de Francia de cubierta 18suspendi- 2006, p. 105-123.
da de doble curvatura inversa así lo ilustra . Resulta 17. Ramírez Nieto, Jorge: Intervalo nacional-moderno de
la Arquitectura Latinoamericana 1929-1939, Tesis de
de igual trascendencia el Pabellón de España en este Doctorado en Disertación sobre Patrimonio Construido,
evento, destacado por su racional, simple e ingenio- HafenCity Universitat, Hamburgo, 2009.
18. Bernabeu Larena, Alejandro:Estrategias de diseño
so sistema constructivo y donde el espacio se percibe estructural en la arquitectura contemporánea. El trabajo
como un bosque de luz de esbeltos
19
árboles y de una de Cecil Balmond, Tesis de Doctorado en Estructuras de
Edificación, Universidad Politécnica de Madrid, Madrid,
óptima espacialidad continua . 2007.
19. http://hablemosunpocodetodo.blogspot.com, di-
ciembre de 2010 (acceso 8/12/2011)
Otra obra determinante en este recorrido por los íconos
de la arquitectura de los pabellones expositivos lo cons-
tituye el Pabellón Philips también conocido como Poe-
ma Electrónico- de Le Corbusier, donde se evidencian
los tenues límites entre arquitectura y espectáculo.

© Bernabeu Larena, 2007

Con esta obra se sintetizan arquitectura, música, inge-
niería y artes visuales, valiendo de laboratorio de una
serie de operaciones constructivas, adelantándose a la
cultura multimedia
20
y al desarrollo de las técnicas digi- Fig. 9. Pabellón alemán en la Exposición Internacional de Fig. 10. Pabellón Fuji en la Exposición Internacional de
Montreal, 1967. Osaka, 1970.
tales actuales . En consecuencia, esto pone de moda
como lenguaje o tendencia del momento. En años pos-
teriores la prefabricación y el alarde estructural tuvieron
fuerte presencia en un gran número de pabellones. Así
se aprecia en el Pabellón de Alemania y el de Estados
Unidos, en la exposición universal de 1967 en Montreal.
Este último diseñado como una enorme cúpula geodé- 21
sica ideal para contener grandes grupos de personas .

© Bernabeu Larena, 2007

En la segunda mitad del siglo XX se produce la aparición
de materiales como el PVC, el PTFE o el ETFE, lo que in-
fluyó que en 1970 en la exposición universal de Osaka,
se mostraron estructuras en su mayoría inflables y ten- Fig. 11. Pabellón itinerante de IBM, 1981. Fig. 12. Arco triarticulado de madera

sionadas, y en general diseños futuristas e innovadores

y policarbonato. 14

© Arquitectura en el Parque, 2006

característicos de los principales arquitectos japoneses estado
del
de esa época. Con esta arquitectura se ofrecían nuevas

© Bernabeu Larena, 2007

arte
posibilidades para enfrentar el constante problema de
las grandes luces.

En las últimas décadas del siglo XX ocurren procesos

de experimentación muy importantes, que se extien-
den hasta nuestros días. En muchos casos se vieron
empleados materiales no convencionales y en otros se
utilizaron los ya conocidos pero de formas poco habi-
tuales. Uno de los mejores ejemplos de estas obras ex-
perimentales lo22constituyen los pabellones itinerantes
y/o temporales .
En esta línea de experimentación se insertan el Pabe-
llón itinerante de IBM (1981) -donde se compatibilizan
Fig. 13. Pabellón Temporal (2002). Toyo Ito y Cecil Fig. 14. Serpentine Gallery 2005. Alvaro Siza y Eduardo
Balmond. Souto de Moura.
Fig. 15. Serpentine Gallery 2010.
Jean Nouvel.
20. Pérez Oyarzun, Fernando: ´´Pabellón Philips. Bru-
selas, Bélgica´´, ARQ Obras y Proyectos, /s.e/, /s.f/, p.
54-59.
21. Las cúpulas geodésicas están compuestas por la
unión de pequeños perfiles estandarizados que se en-
samblan con facilidad y no poseen soportes interiores
por lo que constituyen estructuras idóneas para lograr
grandes espacios (N.A).

© www.architizer.com
transparencia (policarbonato empleado con función 22. Bernabeu Larena, Alejandro:Estrategias de diseño
estructural), ligereza y solidez (madera y aluminio)-, el estructural en la arquitectura contemporánea. El trabajo
de Cecil Balmond, Tesis de Doctorado en Estructuras de
Pabellón del Futuro (1992) –cuyo diseño estructural Edificación, Universidad Politécnica de Madrid, Madrid,
2007.
se basa en la combinación de un material antiguo (la
piedra) y uno más reciente (el acero)- y los pabellones
temporales de la Serpentine Gallery.
Los pabellones con estas características al poder ubi-
carse en cualquier emplazamiento de la ciudad (o bien
fuera de esta) constituyen por demás un fenómeno de
escala local. Su estructura, similar a una tienda de cam-
paña, podrá desmantelarse y volverse a reinstalar en
cualquier sitio.
Estas obras que pueden calificarse de pequeño for-
mato, muestran que también el arte público engran-
dece a la ciudad e interesa al visitante, logrando que
se involucre con el tema tratado por su imagen atra-
yente y sugestiva.
Indiscutiblemente, el pabellón expositivo es un edifi-
cio versátil, que como ente cultural ha estado domi-
nado por los cambios sociales, económicos, políticos
e ideológicos, producidos a lo largo de la historia. A
pesar de las distintas mutaciones que los pabellones
han sufrido, no cabe duda de que es en el siglo XX
cuando éstos han ocurrido de una forma más rápida
e intensa. Se produjo una ruptura con las tendencias
tradicionales, donde lo más importante era el objeto
y su información. Lo que resultó en investigaciones
constantes para que el público se sintiera atraído por
la exposición y tomara parte en ella.
Se usan para ello diversos métodos pertenecientes
al campo del diseño: grandes espacios y la sucesión
de estos; pasar de un sitio a otros por la sugerencia
visual o virtual; pocos elementos; poca decoración
aplicada o casi ninguna; limpieza de formas; estética
minimalista; alarde tecnológico; economía de recur-
sos y especialmente desarrollo del espacio para la ex-
perimentación arquitectónica. Todo lo anterior con el
propósito de “convertir la exposición en algo
23
ameno y
educativo sin perder el sentido estético’’ .
Los pabellones de exposición asumen nuevos retos en
su concepción formal, ahora su marcado carácter efí-
mero va a transmutarse por el permanente. Por lo que
se van a diseñar en mayor medida para albergar un
uso posterior, con la correspondiente identificación
© Arquitectura y diseño de exposiciones, 2011
por una imagen propia. Los pabellones para muestras
internacionales comienzan a incluir espacios modu-
lares destinados en un futuro a oficinas y dirigidos a
empresas de sectores innovadores, así como zonas 24
para otros usos comerciales, restaurantes y ocio .
En el recién comenzado siglo XXI puede decirse que se
continúa como tendencia la imagen heredada del siglo
anterior. En nuestros días el diseño proyectual de estos Fig. 16. Pabellón de España, Exposición Universal Shanghai 2010.
edificios basado fundamentalmente en la preocupación
por realizar construcciones eficientes energéticamente
y de reducido impacto medioambiental constituye una
constante. Se ha generalizado la tendencia conocida
como la “filosofía de las tres erres”: reducir, reutilizar
y reciclar.
© www.arquitecturaviva.com
Muchas de las instalaciones en las últimas Exposiciones
Universales han sido desmontadas o vendidas como
material de construcción; recicladas, construidas con
materiales de usos anteriores (cajas de frutas, tablones
de obra, restos de productos agrícolas, troncos seccio-
Fig. 17. Pabellón de España en Floriade 2012. 15
nados de árboles procedentes de incendios forestales, estado
del
cañas, etc.), además de nuevamente reinstaladas en al- arte
guna otra parte, con lo que se logran exposiciones muy
respetables con el medio ambiente.
Los pabellones expositivos de los últimos años han sido
proyectados como edificios espectáculo, empleando en
gran medida premisas de desarrollo sostenible y perdu-
rable, a la vez que se envuelve al visitante en interiores
dominados puramente por la tecnología –de luces, pro-
yecciones, sensaciones-, con énfasis en la maleabilidad
y la artificialidad de los materiales.
© www.arqhys.com
Es evidente que otra tendencia bastante generalizada
es la de manejar criterios de Alarde Tecnológico, resul-
tando el pabellón expositivo un laboratorio de investi- Fig. 18. Pabellón digital del agua. Expo Zaragoza 2008.
gación y propuesta formal–expresiva, además de posi-
23. Alonso, Luis: Diseño de exposiciones. Concepto, ins-
bilitar la experimentación con técnicas y métodos poco talación y montaje, Ed. Alianza, Madrid, 2003 p. 25-36.
ortodoxos. 24. Ocejo, José Enrique: Expo, el territorio aragonés y su
proyección europea, Ed. I.T., 2007.
Se puede hacer alusión al Pabellón Digital del Agua, que
no se concibió para ser vivido, sino que es más bien una
máquina de última tecnología que alberga una oficina
de turismo y un punto de Información. Su apariencia es
la de una cortina de agua, donde se aprecia que las di-
ferencias entre pared y puerta desaparecen.
“Las fachadas se pueden convertir en un elemento
continuo que se abre y se cierra de manera interactiva.
Incluso el agua es dinámica: puede exhibir gráficos,
patrones, y texto”, lo cual nos exige “una revisión pro-
funda de nuestros conceptos sobre los esquemas de
las ‘aberturas’,
25
sean estos accesos, puertas, ventanas o
marcos” .
Otro aspecto de este tema lo constituyen definiciones
muy recientes y generalizadas acerca del espacio ar-
quitectónico. Se habla de “efecto pantalla”, que es
aquel que prioriza automáticamente la experiencia
directa y sensorial del espacio, de los materiales y de
la luz.
Esta tendencia en los espacios expositivos puede
apreciarse en la obra de Jean Nouvel fundamental-
mente, con una arquitectura transparente y etérea
insertada totalmente dentro de la naturaleza. Se pue-
den mencionar como referentes el Musée des Arts
Premiers en el Quai Branly, París (1999-2006), la pro-
puesta para el concurso del Museo de la Evolución
Humana en Burgos (2000) y de Zaha Hadid, el Museo
Temporary Guggenheim, en Tokio (2001).
Los dos últimos, consistían en museos en una monta-
ña o, más bien, un museo con forma de montaña, con
un logrado efecto de desaparición o inmaterialidad
del edificio dentro de la naturaleza. En estas propues-
tas se prevé frecuentemente la vegetación y el color
obtenido de ella como elementos arquitectónicos
26
cla-
ves, logrando una especie de Land Art .
Por otra parte se define la “hiperarquitectura’’ como
una arquitectura en movimiento, de espacios que flu-
yen a través de un “continente” electrónico y del edi-
ficio como terminal de un mundo digital. Esta última
tendencia se identifica en obras como el Pabellón del
© La expresión de una línea museística singular
Agua (Nox, 1997) o los “Glass Video Pavillion” (Tschu-
27
mi y Hadid, 1990-1994) en Groningen, Holanda .
Estas definiciones surgen producto del cuestiona-
miento de la relación hombre-tecnología en el que-
hacer de la arquitectura contemporánea, propiciando
que la definición tradicional de espacio arquitectóni-
co sea puesta en duda en propuestas de arquitectos
de todas las latitudes. Estas tendencias se sustentan Fig. 19. Musée des Arts Premiers en el Quai Branly, París (1999-2006) - Jean
Nouvel.
en la búsqueda de las relaciones espaciales y forma-
les entre la arquitectura y los medios virtuales, de la
cual surge un nuevo lenguaje a través de edificios me-
© La expresión de una línea museística singular
táforas o edificios chips
28
a los que se ha recurrido en
los últimos tiempos .
Tanto el “efecto pantalla’’ como la “hiperarquitectura’’
llevan inmersas las nuevas tecnologías de la informa-
ción y la comunicación -valores en principio positivos
de la globalización-, y pueden conducir hacia fenóme-
nos que tienen repercusión en los espacios expositi-
Fig. 20. Museo de la Evolución Humana en Burgos (2000), Jean Nouvel.
vos. Las nuevas tecnologías llevan al desarrollo de lo
virtual, que puede imponerse sobre la realidad pre- 16
sencial. El espacio virtual es ya un hecho. La actividad estado
del
presencial que lleva implícita la contemplación direc-
© La expresión de una línea museística singular
arte
ta de la obra de arte, puede obviarse en ocasiones
y convertirse en un espacio ritual, concibiéndose de
forma cada vez más frecuente el espacio expositivo
como espacio experimental.
Ambas tendencias tratan acerca de los medios para
exhibir, ya sea el edificio o continente, como la ex-
posición o el contenido. El “efecto pantalla’’ hace
Fig. 21. Museo Temporary Guggenheim, Tokio (2001). Zaha Hadid.
énfasis en las sensaciones, los materiales, la luz y
el paisaje natural, que fundamentan las nuevas ne-
cesidades de recepción, disfrute e interacción entre 25. http://www.dwp.qaop.net, junio 2008 (acceso 3/
diciembre/2011).
el público y la exposición. Mientras que la “hiperar- 26. La expresión de una línea museística singular, en
quitectura’’ mediante la tecnología y los medios vir- ´´Las diversas expresiones del museo portátil. Entre la
papiroflexia, la inmaterialidad y la piel mutante´´, /s.e/,
tuales, logra espacios de cultura viva y participativa /s.f/, p.354-405.
insertados en un mundo digital, con una expresión 27. Barría Chateau, Hernán: El espacio Inter-Medio, Pro-
yecto Dirección de Investigación UBB, Facultad de Arqui-
formal impresionante. tectura, Construcción y Diseño, Universidad del Bío Bío,
Concepción, Chile, 2001.
28. Idem.
Indudablemente, los límites de la práctica exposi-
tiva son cada vez más indefinidos y menos concre-
tos, por lo que la concepción interior de los edificios
para exposiciones debe caracterizarse por espacios
amplios, unitarios, diáfanos y flexibles para favore-
cer una cómoda distribución. Además es requisito
indispensable comprender las nuevas necesidades
del público actual para lograr que se establezca un
contacto eficiente con el mismo.
La importancia de los pabellones expositivos en la
arquitectura radica en las condiciones con las cua-
les se generan: poseen un desarrollo conceptual
y tiempos de construcción muy cortos, además de
períodos de uso breves. Porque en teoría, si estos
edificios son concebidos para desmontarse poste-
riormente, será imposible que el tiempo deje hue-
lla sobre ellos y sólo constituirán un referente en
la memoria de aquellos que lo visitaron. Lo cual no
ocurre en los que se conciben como obras de carác-
ter permanente.
La ventaja de su construcción consiste en el gran
número de visitantes que convoca, además de lo-
grar la confluencia de los medios de comunicación
y la trascendencia mediante los escritos de historia-
dores y teóricos de la arquitectura. El análisis formal
de este tipo de edificación dada su escala, relación
técnico-constructiva y su condición de arquitectura
donde prima la difusión de un significado nacional,
arroja resultados esenciales para este trabajo.
Se puede afirmar que en términos de investigación
histórica, el pabellón expositivo constituye un do-
cumento de análisis historiográfico y muchas veces
se convierte –sobre todo si permanece- en patrimo-
nio de gran valor histórico-cultural para una ciudad.
1.1.2 Clasificación de los pabellones exposi-
tivos
Los pabellones expositivos se clasifican de acuer-
do a su duración y emplazamiento.
© www.surcalahistoria.wordpress.com
© www.expo2010china.com
Fig. 22. Pabellón de la Navegación, Expo Sevilla 1992. Fig. 23. Theme Pavilion, Expo Shanghai 2010.
1.1.2.1 Durabilidad
Existen diferentes tipos de pabellones, definidos
por sus actividades y hasta por su público. Entre
ellos encontramos los de carácter temporal y los
permanentes.
© www.commons.wikimedia.org
Pabellón Permanente:
Es el término empleado para distinguir los pabe-
llones proyectados a largo plazo de los de menor
plazo o temporales. Los temas que abordan los 17
Fig. 24. Centro Cultural de la Expo Shanghai 2010.
pabellones permanentes son aquellos que permi- estado
del
tan alargar su funcionamiento una vez acabada la arte
exposición, es decir, que su función sea similar a
su uso futuro.
Estos edificios una vez concluida la exposición
se convierten en sedes de museos o de exposi-
ciones artísticas temporales, como el Pabellón de
la Navegación (Sevilla 1992), el Theme Pavilion,
el Pabellón Chino, el Centro Cultural de la Expo
(Shanghai 2010), entre otros, que constituyen el
legado de las exposiciones para el espacio público
de las ciudades.
Pabellones Temporales:
© www.expo92.es
Este término implica un plazo más breve de uso,
pudiendo ser días, semanas o meses. El diseño
de estos pabellones tiende a ser más innovador Fig. 25. Pabellón de China, Expo Shanghai 2010.
y atrevido. En este caso se encuentran los pabe-
llones de España y del Reino Unido en la Exposi-
ción Universal de Shanghai 2010. Además, tienen
la capacidad para ser controvertidos y actuales; y
en su montaje presentan novedosos materiales y
técnicas de exposición.

1.1.2.2 Emplazamiento
Existen criterios diversos de clasificación de los
pabellones expositivos en cuanto a su forma. Un
tipo de pabellones temporales son los itinerantes,
diseñados para ser desplegados en distintos luga-
res.

La construcción de un pabellón itinerante exige:

que su estructura sea fácilmente montable y des- Fig. 26. Pabellón de Esaña, Exposición de Shanghai 2010.
montable, y que se realice un estudio de viabili-
dad, con valoraciones de mercado y gastos deri-

© La expresión de una línea museística singular

vados de su organización, seguridad, embalajes y
mantenimiento.Las ventajas de estos pabellones
consisten en la cantidad de personas por los que
son visitados y la variedad de públicos según los
diversos lugares donde se montan. 18
estado
del
Producto de estas ideas de “museos portátiles”, arte
pabellones temporales y arquitecturas experimen-
tales se han creado una especie de “contenedores Fig. 27. Pabellón Odawara (1990), en Kanagawa de Shigeru Ban.
nómadas’’, tildados de arquitectura espectacular

© www.expo92.es
que constituyen el principal objeto a exhibir. Tam-
bién se trata de trasladar museos completos, cuyo
contenedor se realiza con materiales efímeros,
Fig. 29. Pabellón del Reino Unido, Exposición de Shanghai 2010
más no desechables, fácil de transportar y volver29
a montar y que llegan a constituir hitos urbanos .

Para los proyectos de este tipo se han empleado,

© Archivo personal de los autores

producto de la constante experimentación con ma-
teriales inusuales: cartón, papel de alta resisten-
cia (adecuados tanto ecológica como económica-
mente), containers
30
(estandarización + movilidad), 29. La expresión de una línea museística singular, en
entre otros . ´´Las diversas expresiones del museo portátil. Entre la
papiroflexia, la inmaterialidad y la piel mutante´´, /s.e/,
Fig. 28. Pabellón del libro.
/s.f/, p.354-405.
30. Fernández Galiano, L.: Contenedores a la deriva,
/s.e/, 2003, p. 34-35.
1.2 Centros culturales

En los últimos tiempos, los espacios para el arte y la cul-

tura se han visto convertidos en meras anécdotas y lo
que realmente importa al público es la peregrinación al
edificio, contar que se estuvo ahí. La capitalización de la
cultura y los edificios-espectáculo de nueva planta con
firma Pritzker marcan la pauta desde las últimas décadas
del siglo XX, y la lista del star system: Siza, Gehry, Nouvel,

© Angel Marcos
Hadid, Meyer, Foster, Isozaki, Libeskind, Herzog & De
Meuron, consolida la imagen de estos espacios como
puros monumentos modernos.
Fig. 30. Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León, MUSAC (2005).

En contraposición a lo anterior se ha logrado un proce-

so de reciclaje de arquitecturas con el fin de rescatar
construcciones arruinadas, que poseen valor histórico-
patrimonial o no, y se han recuperado como admirables
espacios para el arte. Estas actuaciones han posibilitado
experiencias que después se aplicarán en futuras inter-
venciones.

© Esquema elaborado por los autores

© Archivo personal de los autores

Los centros culturales son concebidos como espacios
abiertos a la comunidad con el objetivo de promover
valores artístico-culturales, con un carácter multidiscipli- 19
nario, donde se desarrollan actividades culturales y de estado
del
creación, talleres e formación artísitica y difusión en los arte
diversos ámbitos de la cultura, así como apoyo a orga- Fig. 31. Esquema en planta del MUSAC con la relación de patios interiores y Fig. 32. Centro Georges Pompidou, París (1971 - 1977).
nizaciones de la cultura. Actualmente son muy diversos plazas.

sus programas arquitectónicos, sin embargo los espa- 31

cios que con mas frecuencia los integran son los salones
de exposiciones, los puntos de encuentro para asociacio-
nes culturales locales, oficinas, cine, auditorio, librería,
bar, centro de documentación, restaurante, cafetería,
etc., muchas veces situados al aire libre y en mayor inte-
no . Si bien en algunos casos que se pretende seguir la
triunfante estela del fenómeno Bilbao da resultado, se ha
demostrado que los proyectos que mejor funcionan son
aquellos que crecen y se desarrollan con las necesidades
del entorno.

racción con el entorno.
Con frecuencia el edificio producto del estupendo dise-
ño o de la atractiva y novedosa tecnología, pasa a ser él
mismo protagonista del hecho artístico, en detrimento de
las obras en exhibición, para lo que supuestamente fue
© www.arquitecturaviva.com
En este sentido el Centro de los Centros ha sido, induda-
blemente, la factoría Pompidou de Renzo Piano y Richard
Rogers. Su aporte radica en haber consagrado la mitad
del terreno a una plaza (necesaria para un barrio tan den- Fig. 33. Proyecto para Centro cultural en Vitória,Brasil de Mendes da Rocha
so), además de exteriorizar la arquitectura y sus servicios con Metro.

creado. Pero es un hecho probado que la creación artísti- dotándole de gran transparencia, que aún hoy funciona
ca no necesita de invernaderos climatizados, sino por el social y culturalmente a pesar de las contradicciones que 31. Aramburu, Nekane: Un lugar bajo el sol. Los espacios
contrario de la utilización experimental del espacio urba- provoca. para las prácticas creativas actuales. Revisión y análisis,
Ed. Nekane Aramburu, Buenos Aires,2008.
Girando precisamente alrededor de esta idea de “plaza
pública” se encuentra el proyecto del Forum for Music,
Dance, and Visual Culture en Gante (2003/2004) de Toyo
Ito y Andrea Branzin. El modelo es el de una gran plaza
(el lugar en el que antiguamente se realizaban represen-
taciones y conciertos), una especie de ciudad interior de
alta tecnología a la que se puede acceder desde varias
direcciones con la libertad de ir a escuchar o participar
activamente.

En proyectos recientes para centros culturales, la concep-

ción de la plaza pública es un rasgo común y eficaz. En
algunos se truecan los volúmenes en torno a una plaza
central e interactúan de esta forma con la ciudad y los
edificios circundantes, en otros el edificio se encuentra
suspendido sobre la misma.

© www.arquitecturaviva.com
De forma general, se ha demostrado en diversos proyec-
tos que los espacios culturales deben ante todo consti-
tuirse como un “espacio urbano”, donde predominen los
flujos (espacio nodo), los espacios de múltiples escalas,
ultra flexibles, con la inclusión de actividades de capaci- Fig. 34. Proyecto: Centro de Arte Contemporáneo Bòlit, Josep Llinàs. Girona
2011.
tación para artistas, educadores y público en general. Los
espacios para la cultura y el arte deben ser construidos albergará la librería, el33bar y el centro de documentación, 20
como espacios virtuales, de acceso tecnológico y expe- abriéndose a la plaza . estado
del
rimental, además de prever espacios32para la crítica, la arte
producción y la interacción disciplinar . Se propone un sistema de fachada doble ventilada que
cubrirá todo el edificio como solución a la falta de vanos.
La relación con el entorno citadino está dada fundamen-

1.2.1 Centro de Arte Contemporáneo Bòlit (España)
Con un edificio de formas geométricas que compensa la
falta de volumen con el movimiento y la expresividad de
las cubiertas, el proyecto de Josep Llinás resultó ganador
del concurso celebrado en noviembre de 2010 y organi-
zado por el Ayuntamiento de Girona para la construcción
© www.arquitecturaviva.com
talmente por la gran plaza, que separa al edificio de la
calle y que posee un carril interno para ciclos. La plaza se
diseñó en principio con el objetivo de obtener una gran
superficie descubierta válida para albergar cualquier
actividad, a la vez que constituya un espacio más, total- Fig. 35. Proyecto para un Centro cultural en Trondheim (Noruega).Henning
mente abierto para los apretados edificios del entorno. Larsen. 2012.

de la nueva sede del Centro Cultural Bòlit, en Girona.

La propuesta del estudio barcelonés desarrolla en altura
un volumen que se organiza en dos crujías asimétricas; la
mayor de ellas, escalonada por una cubierta en forma de
dientes de sierra, que aporta luz cenital a la sala principal
de exposiciones situada en la primera planta; la menor,
con una sucesión de cubiertas tradicionales a dos aguas,
1.2.2 Centro cultural en Trondheim (Noruega)
La propuesta del estudio danés de Henning Larsen con el
paisajista noruego Gullik Gulliksen para dos edificios cul-
turales en el nuevo distrito centro de Trondheim la tercera
ciudad más poblada de Noruega ha sido la ganadora en
32. Idem.
el concurso de ideas fallado en el año en curso. El com- 33. http://ww.arquitecturaviva.com, febrero 2011 (acce-
so 18/3/2011).
plejo cultural está formado por una serie de volúmenes
cuadrados en torno a una plaza central, naturalmente
iluminada. Igualmente se desarrolla en la propuesta una
gran plaza pública, que el jurado ha destacado como una
adecuada utilización del potencial del lugar y34la interac-
ción con la ciudad y edificios circundantes . Además
con gran peso en el empleo de las áreas verdes.

© www.unperroviejo.wordpress.com
Los espacios interiores son extensos y se desarrollan en
varios puntales, creándose locales muy bien iluminados
que potencian una interesante relación interior-exterior,

a la vez que ostentan gran transparencia. Con una exten-
sión de 39.000m2, el proyecto, cuya finalización está pre-
vista para el 2015, albergará espacios bastante diversos.
Entre los que se encuentran salas para exposiciones,
puntos de encuentro para asociaciones culturales loca-
les, oficinas, un cine, un35aparcamiento subterráneo y una
terminal de autobuses .
© Roland Halbe
Fig. 36. Museo Nacional Colegio de San Gregorio (España), edificio de
Fig. 37. Centro Cultural San Martín, Buenos Aires.
azoteas.
En los proyectos de rehabilitación actuales, se sigue una
marcada tendencia, la de lograr una clara diferenciación
entre materiales nuevos que representan el “remedio” y

1.3 Edificios de ayer con funciones de hoy
La nostalgia por lo perdido ha sido reflejada durante la
historia de la arquitectura, a través del rescate de obras
emblemáticas e íconos de su tiempo. Durante el siglo XX
el nacimiento de la arquitectura del Movimiento Moderno
trae consigo obras paradigmáticas que llegan a nuestros
días gracias a sus valores. Obras que tienen más de 50
años y otras que por su deterioro o desaparición han sido
intervenidas o reconstruidas para poder ser disfrutadas
por las nuevas generaciones.
© www.unperroviejo.wordpress.com
materiales viejos que representan la “enfermedad”. En
las nuevas propuestas se obtiene una apariencia clara-
mente moderna, deben ser distinguibles y reversibles,
gracias al empleo de tecnologías y materiales que pue-
dan ser retirados sin dañar la estructura original existen- 21
te. estado
del
Fig. 38. Museo del Louvre, París. arte
En la región latinoamericana, Argentina posee buenas
intervenciones en este campo, es el caso del Centro Cul-
tural San Martín, con una anexión que incorpora nuevas
funciones. Este complejo cultural es considerado como

© El acero en la rehabilitación, 2008

Mundialmente las experiencias en el proceso rehabilita-
dor han venido enriqueciéndose con una variedad de so-
luciones en usos y escalas que establecen nuevos retos
y posibilidades, importantes avances del conocimiento,
así como recursos tecnológicos disponibles que llevan a
un importante nivel esta actividad. Además a este proce-
so han aportado muchos arquitectos de fama internacio-
nal con nuevas soluciones basadas en la sostenibilidad,
con la máxima eficiencia de recursos y conservación de la
energía, así como expresiones36novedosas de vanguardia
de la estética contemporánea .
uno de los mejores edificios con los que cuenta la ciudad
y uno de los principales focos de la movida cultural desde
su inauguración en 1970. Asimismo, en Europa el Museo
del Prado y el Museo del Louvre constituyen referentes
emblemáticos que han superado la instancia individual
para convertirse en hitos urbanos expandidos y comple-
jizados a través de intervenciones a lo largo del tiempo.
De la misma forma, se transforman muchos pabellones
de exposición, inicialmente concebidos para un evento
en especial, deviniendo en centros expositivos adapta-
dos a las necesidades y usos de hoy. Obras referentes
en este sentido son el Pabellón de la Navegación y el
Fig. 39. Centro Cultural y de Exhibiciones “Century Hall” en Alemania, trans-
formación de un antiguo edificio industrial.
34. http://ww.arquitecturaviva.com, enero 2012 (acceso
18/3/2012).
35. Idem.
36. Márquez, Rafael: Estudio de metodologías de la re-
habilitación de edificios del siglo XX. Caso Venezuela.
Una aproximación a la puesta en valor de los bienes edi-
ficados modernos y contemporáneos, /s.e/,Maracaibo,
2011.
pabellón Cajasur, ambos en suelo español, que son hoy
recuperados.
El primero constituye un edificio histórico protegido, ob-
jeto de una amplia remodelación que lo convirtió en un
37
Centro de Congresos y Eventos . Intervención planteada
como “el reto de adaptar un edificio pensado para algo
efímero, para la Exposición Universal del 92, a la reali-
dad actual y convertirlo en edificio permanente, lo que
ha requerido ordenar los espacios”,
38
así lo indica su Arq.
Guillermo Vázquez Consuegra . Mientras que el segun-
do se refiere a la adaptación del actual pabellón a Cen-
tro de Convenciones y Exposiciones de Córdoba, cuya
intervención consta de una ampliación mediante un ala
de cuatro plantas de instalaciones congresuales con dos
auditorios, un área de oficinas y servicios, y un área ex-
39
positiva .
En el orden cultural la adecuación a los requerimien-
tos actuales trasciende la preservación de la identidad
comunitaria, local o nacional a través del rescate de la
arquitectura y el urbanismo, pues incorpora en ello la sal-
vaguarda del patrimonio intangible que representan las
costumbres y tradiciones.
1.3.1 Pabellón de la Navegación
La Exposición Universal de Sevilla de 1992 dio respues-
ta a su objetivo temático (recordemos su lema: “la Era
de los Descubrimientos”), con la construcción de varios
pabellones, entre ellos el de la Navegación. El arquitec-
to Vázquez Consuegra encargado de diseñar el edificio
lo concibió como un gran contenedor de exposiciones
a orillas del Guadalquivir, prácticamente a ras del agua,
ofreciendo al río su fachada principal.
La reapertura del Pabellón de la Navegación, uno de los
emblemas de Expo’92, contribuirá a aumentar la oferta
cultural y turística de la ciudad. Este edificio fue objeto
de una remodelación integral para convertirse en centro
cultural y de ocio, además sus instalaciones se actuali-
zaron y modernizaron para satisfacer las necesidades de
© http://www.culturadesevilla.blogspot.com
© http://www.turismodesevilla.com
Fig. 40. Pabellón de la Navegación después de su remodelación.
las prácticas expositivas contemporáneas. La torre anexa
al inmueble también se incluyó en el proyecto de musea-
© http://esasevilla.blogspot.com
lización. El mismo autor del edificio se ha encargado de
la reforma utilizando acero y cristal como materiales prin-
cipales. Los espacios que conforman el pabellón están
caracterizados por un elevado minimalismo, neutralidad
y completa ausencia de decoración. Todos estos espa-
cios no existían en 1992, son de nueva creación y sirven
de comunicación entre unas zonas y otras. 22
estado
del
Exteriormente el pabellón ha sufrido pocas modificacio- arte
nes: un nuevo acceso de acero y vidrio en voladizo. En el
interior es donde el edificio ha sufrido un mayor cambio.
© http://www.culturadesevilla.blogspot.com
Se ha vuelto a su estructura original y en el nivel superior
se alberga un nuevo museo de la Navegación, reservado
para la exposición permanente del Centro, que gira en
torno a la Navegación y su evolución desde el descubri-
miento de América hasta nuestros días. Para ello se han
diseñado cuatro salas que van contando al visitante, de
forma didáctica e interactiva, diferentes aspectos de la
navegación.
Fig. 41. Imágenes del proyecto de remodelación.
La planta inferior del edificio, que da al río, será un
amplio espacio diáfano de unos 3000 m2 destinado a 37. http://es.wikipedia.org/wiki, mayo 2011 (acceso
20/2/2012).
eventos temporales, ya sean congresos o exposiciones 38. http: //www.sevillaactualidad.com, septiembre
temporales. Para ello se ha diseñado un sistema de pa- 2011 (acceso 7/3/2011).
39. http://pdf.diariocordoba.com, marzo 2012 (acceso
neles móviles que permitirán acotar diferentes salas más 4/03/201).
pequeñas destinadas a congresos, mientras que siempre 40. http://www.culturadesevilla.blogspot.com, enero
2011 (acceso 20/5/2012).
quedará una amplia 40estancia de 1000 m2 para las expo-
siciones temporales .
La primera sala es sin dudas la más espectacular con un
mar de luces que, por medio de la tecnología LED, con-
sigue crear todo un mundo de sensaciones. La segunda
sala recupera parte de los contenidos de la Expo’92 para
mostrar la evolución de la tecnología naval desde 1500
hasta la actualidad. En la tercera sala la temática será la
vida a bordo de un buque. La última sala del Pabellón
ubicada frente al río muestra la evolución histórica de la
ciudad de Sevilla en relación con el mismo.
El Pabellón de la Navegación fue creado con unas expec-
tativas de visitantes y usos difícilmente alcanzables hoy
en día, por lo que se decidieron adecuar los contenidos a
nuevos usos. El diseño museográfico apeló a las sensa-
ciones del visitante, mostrando todos los aspectos rela-
cionados con la Navegación.
En el proyecto también se optó por la creación de un es-
pacio alquilable que suponga una fuente de ingresos
para el Pabellón, al mismo tiempo que suple el vacío exis-
tente en la ciudad, ya que hasta ahora Sevilla no cuenta
con una sala de exposiciones temporales de grandes
dimensiones. Pero además de exposición permanente,
congresos, exhibiciones temporales, también se conci-
bieron espacios para el ocio, como dos restaurantes, una
cafetería, una mediateca y algunas aulas didácticas.
Para facilitar la entrada al complejo se creó un nuevo
acceso principal por el Camino de los Descubrimientos
(hasta ahora el Pabellón contaba con múltiples accesos,
pero ninguno principal), una avenida que actualmente
presenta un pésimo estado de conservación pero que
está llamada a convertirse
41
en uno de los epicentros de la
vida social sevillana .
1.4 Ampliación
Según diversas publicaciones, la ‘’rehabilitación’’
involucra una amplia gama de intervenciones donde
el bien cultural puede transformarse para adaptarse
a los cambios y nuevas necesidades, dependiendo
de visiones locales o globalizadas.
La ampliación es empleada como estrategia que
permite mejorar y expandir las capacidades del edi-
© Arquitectura Viva, No. 103, 2005
ficio. En este proceso de adaptación a nuevos re-
querimientos, se recurre en unas ocasiones al ado-
samiento de preexistencias
42
y en otras a la inclusión
de nuevos componentes . A este tipo de extensio-
nes, como estrategias parasitarias de ocupación
sobre lo existente, de apareamiento con lo antiguo,
Fig. 42. Imagen aérea de la nueva ampliación.
también se le conoce como encabalgamientos. Que
además implica similaridad y simultaneidad 43
de ta-
maños, fuerzas, tensiones y situaciones con lo
preexistente.
© www.peiespaa2011marcelacarvajal.blogspot.com
1.4.1 Ampliación del Museo Nacional Centro de
Arte Reina Sofía, Madrid (2005)
Frente a la construcción compacta y cerrada del anti-
guo edificio, la ampliación se materializa en un jue-
go de materiales reflectantes y el vidrio, tornándose
los protagonistas. Los arquitectos que concibieron el
proyecto fueron el francés Jean Nouvel, Alberto Me- Fig. 43. Ampliación del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Madrid.
23
dem y el grupo b720. Esta extensión además de dar estado
del
respuesta a las necesidades de espacio y cualifica- arte
ción planteadas por el centro, se emplaza en el barrio
con la pretensión de transformar el entorno urbano.
El museo se extiende desplegando una enorme cu-
bierta, bajo la cual se sitúan tres nuevos edificios y
una plaza pública, lugar de encuentro abierto a la ciu-
© www.carpinteriascte.com
dad. La estructura de los edificios se concibió de ace-
ro laminado. Mientras que la cubierta con voladizos
de hasta 36 metros, se confeccionó con una estructu-
ra de vigas metálicas de alma llena, que varía desde
3.4 metros de altura en el área central
44
hasta reducirse Fig. 44. Imágenes dela obra.
a 5 cm en el perímetro exterior .
41. Idem
42. Mazzolani, Federico M.: El acero en la rehabilitación,
La ampliación, que muchos madrileños dicen que /s.e/, Naples, Italia, 2008.
“parece una gasolinera” por la forma y los materia- 43. Gausa, Manuel y otros: Diccionario Metápolis de Ar-
les utilizados, contrasta fuertemente con el edificio quitectura Avanzada, Universidad Politécnica de Madrid,
Madrid, /c. 2002/, p.186.
Sabatini, mucho más sobrio y en el que lo único que 44. ‘’Ala con arte. Ampliación del Museo Reina Sofía’’,
Arquitectura Viva, No. 103, /s.e/, Madrid, 2005, p. 104.
destaca son los emblemáticos ascensores de cristal
por los que se accede al interior del Reina Sofía. El
exterior del nuevo edificio es de metal rojo y gris y de
cristal.

Al sur se encuentra la biblioteca, donde el juego de

la luz es fundamental, propagándose por lámparas
de grueso cristal labrado o filtrada por las enormes
vidrieras revestidas por estores de acero perforado.

© www.madrimasd.org
© www. flickriver.com
Al oeste se encuentra el edificio de reunión y encuen-
tro, conformado como un estuche de formas tensa-
das y ángulos redondeados. Y al norte, comunicado
Fig. 45. Detalle de fachada. Fig. 47. Acceso secundario.
directamente con el museo matriz, se ubica el tercer
volumen que aloja en tres niveles las exposiciones
temporales con espacios variados y fáciles de utili-
zar, gracias a mamparas móviles y luces escondidas
en muros y techos. En general, con las obras de am-
pliación se añadieron al museo 84.048m2 de super-
ficie.

Para la construcción de la obras se recurrió a materia-

les y técnicas especiales como: el GRP (fibra de vidrio

© www.hogarismo.com
24

© www.blogs.ya.com
con poliéster), que recubre el edificio del auditorio;
las lamas de protección de fachadas de aluminio ex- estado
del
truido; los dados de vidrio del techo de la biblioteca y arte
la cubierta revestida de aluminio y zinc. Fig. 46. Ampliación del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Madrid. Fig. 48. Acceso pricipal.

Sin embargo, este constituye un claro ejemplo de que

la ampliación de museos no está siempre relaciona-
da con la mayor atención al arte, ya que actualmente inversamente proporcional al valor que presta al arte
posee más espacio representativo pero menos acti- (al optar por obras de dudosa capacidad innovadora,
vo. Gran parte de sus locales se alquilan, incluidos o ya expuestas, o exposiciones historicistas de baja

el claustro y el jardín. En la ampliación, muchos de
los espacios construidos, como las terrazas, no sólo
se alquilan cuando el museo está cerrado, sino que
nunca son accesibles al público.
El museo en ese caso sirve de envoltura para cobijar
una triste realidad: su ampliación es obra pagada con
dinero público
45
pero es para el disfrute exclusivamente
privado . El aumento de su representatividad como
espacio de arte (especialmente con la ampliación) es
© www.eduardodiclerico.blogspot.com
calidad intelectual e incluso visual).
Los vecinos lo usaban como lugar de paseo, especial-
mente el jardín. El edificio se podía recorrer por sus
escaleras y claustros, sin tantas barreras ni guardias.
El Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía es un
ejemplo de la desaparición progresiva del arte en su Fig. 49. Croquis del autor.
interior. Al intentar identificar la causa de que el mu-
seo funcionaba mejor, lo más distintivo es que era
45. Aramburu, Nekane: Un lugar bajo el sol. Los espacios
más público. para las prácticas creativas actuales. Revisión y análisis,
Ed. Nekane Aramburu, Buenos Aires, 2008.
1.4.2 Ampliación del Museo del Prado, Madrid
(2007)

La ampliación propuesta para el Museo del Prado de

Madrid, ha sido obra del arquitecto Rafael Moneo.
Esta ampliación es la más importante en sus casi 200
años de historia. El nuevo inmueble libera al antiguo
proyectado por el arquitecto Juan de Villanueva, de

© www.plataformaarquitectura.cl
los programas adicionales del museo, tales como la
cafetería, el auditorio o la tienda, y los traslada al nue-
vo edificio, junto a nuevas salas de exposición.

Desde su creación en 1819, el Museo del Prado había

ido creciendo de una manera sistemática pero siem-
pre modesta, quedándole pendiente hasta ahora aco-
meter una ampliación realmente significativa como

© www.plataformaarquitectura.cl
las que otros museos históricos de su categoría ha-
bían ido desarrollando sucesivamente en las últimas
décadas del siglo XX.

La fórmula de ampliación ingeniada por Moneo pro-

pone, respetando el antiguo edificio, su entorno y las Fig. 50. Planta de acceso y sección de la ampliación del Museo Nacional del

© www.bolsilandia.blogspot.com
arquitecturas colindantes (la Iglesia de los Jerónimos Prado.
y la Academia Española), unir el Museo con un com- 25
plejo formado por una construcción de nueva planta estado
del
y el Claustro restaurado de los Jerónimos. La solución arte
dada, que ha permitido al Museo extenderse en la to-
talidad de la única área disponible en sus inmediacio- Fig. 52. Accesos al museo.
nes, libera además la fabrica original permitiendo que
ésta se vea como Villanueva la proyectó.

La nueva ampliación conecta con el edificio de Vi-

llanueva por la parte trasera de este cuerpo central,
rompiendo así el eje longitudinal del museo. Esta
conexión se realiza de manera subterránea, aprove-
chando el desnivel entre el antiguo Convento de los
Jerónimos y el Museo del Prado. Desde el exterior,
el enlace entre los edificios antiguo y nuevo queda

© www.plataformaarquitectura.cl

© www.plataformaarquitectura.cl
oculto por una plataforma ajardinada que remite a los
jardines del siglo XVIII ofreciendo una perspectiva ur-
bana que se funde con el vecino Jardín Botánico.

Fig. 51. Ampliación del Museo del Prado, Madrid. Fig. 53. Lucernario central en las salas de exposición.
Por otra parte, el ‘‘cubo de Moneo’’ cuya superficie
exterior se diseñó con materiales a vista (ladrillo y
granito) está edificado en torno al antiguo Claustro de
los Jerónimos y alineado con la fachada de la Iglesia
de los Jerónimos. D esta forma es posible ver desde el
exterior parte de la arquería restaurada y restituida.

En su interior se desarrolla una sorprendente ocupa-

© www.matritense20.wordpress.com
ción del terreno disponible: tres plantas de acceso pú-

© www.plataformaarquitectura.cl
blico unidas por una doble escalera mecánica y otras
cinco entreplantas para servicios internos del museo.
La presencia predominante de piedra de Colmenar y
bronce sirve de nexo con las calidades constructivas
de la fábrica primitiva de Villanueva.
Fig. 54. Arquería restaurada formando parte del área expositiva.

El desarrollo de la actividad expositiva y cultural del

Museo se amplía extraordinariamente con la incorpo-
ración de más de 22 000m2 de superficie (un incre-
mento de más de un 50%), lo que permite una mejor
disposición de los diferentes servicios públicos y fun-
ciones relacionadas46
con la exhibición y conservación
de las colecciones .

La propuesta de Moneo se caracteriza por su contem- 26

© www.plataformaarquitectura.cl
poraneidad, latente en el uso de tecnologías de avan- estado
del

zada para el logro de iluminación, transporte vertical
y texturas. La lectura visual se refuerza por la elimina-
ción de las fuertes soluciones de luz artificial que son
sustituidas por lucernarios. Prácticamente todas las
salas de exposición reciben luz natural mediante un
gran lucernario que atraviesa todo el edificio.
El museo vigoriza su función como centro de promo-
ción de las artes y la cultura al ampliar sus instala-
ciones docentes, de exposición pública y sus salas
de eventos. Las funciones por niveles y espacios se
pueden resumir en:
Nivel -1: Vestíbulo principal, auditorio, cafetería, tien-
da, puesto de información, sala de exposiciones.
Nivel 0: Salas de exposiciones, jardines (exterior).
© www.spaineurope.net
arte
Fig. 55. Áreas exteriores del Museo del Prado, Madrid.
Nivel 1: Claustro de los Jerónimos, salas de restaura-
ción.
Esta propuesta solucionó con gran eficacia la amplia-
ción de los necesarios espacios. La creación de nive-
les subterráneos le ha brindado al Museo del Prado
de Madrid una gran funcionalidad y amplitud en sus
actividades. Esta solución por su contemporaneidad
presenta una coherente utilización de los colores y
materiales, además de una buena solución para la
falta de luz natural en la nueva propuesta.
46. http://www.plataformaarquitectura.cl, enero 2011
(3/12/2011)
1.5 Recintos para exposición en Cuba
El tema de los recintos expositivos en Cuba posee un
carácter disperso por lo poco conocido y divulgado.
Para lograr mejor comprensión del contenido, es ne-
cesario adscribirse a las tres etapas fundamentales
por las que transitó nuestro país en su historia: la Co-
Además de esta, Cuba tuvo participación en las Ex-
posiciones Universales de Filadelfia, Estados Uni-
dos (1876), Barcelona, España (1888), París, Fran-
cia en dos ocasiones (1889 y 1900), siempre con
los productos característicos de la economía de la
época: tabaco, azúcar, alcohol, chocolate, asfalto,
maderas, ron, vinos, obras científicas de ingenie-

© American Photo Studios

lonial, la República y la Revolucionaria. ría, meteorología, café, cacao y otros.

1.5.1 Colonia 1.5.2 República

En Cuba durante la Etapa Colonial las ferias y ex-
posiciones tuvieron distintas formas de manifesta-
ción, muy relacionadas con el comercio con la Me-
trópoli y el desarrollo económico de las diferentes
regiones españolas. Ya desde mediados del siglo
XIX, predominan las ferias de agricultura y ganade-
ría, con Camagüey como principal región y luego se
extiende a la capital, con la adición de productos
industriales. Estos eventos de exposición estuvie-
Igualmente, el tema expositivo alcanza gran relevan- Fig. 56. Centro Gallego de La Habana, actual Gran Teatro.
cia entre la población emigrada de España, ya que
durante el período se crearon sociedades con objeti-
vos de carácter cultural
48
y social, y con un fuerte com-
ponente nacional . Con el cambio de siglo, surge
una verdadera tipología arquitectónica con persona-
lidad propia referida a las sedes de las sociedades
regionales españolas y los clubes sociales en La Ha-
bana.

© Archivo personal de los autores

ron matizados por su condición colonial.
Hacia el año 1851, la mayor de las Antillas fue lla-
mada a participar en la primera exposición univer-
sal en el londinense Crystal Palace como entidad
española. Los preceptos coloniales se expresaron
también en los métodos para ordenar los objetos
en las exposiciones, en tal dirección las muestras
“cubanas” se agruparon en torno al local de España
y como tal lo dictaminaron las ordenanzas del go-
bierno colonial para asistir al Concurso de Chicago
en 1893.
Este proceso se vio favorecido por factores como la
recuperación económica y los avances tecnológicos
en la construcción. En este caso se encuentran el 27
edificio del Centro Asturiano (actual Museo Bellas estado
del
Artes Universal) -proyectado por Manuel del Busto y arte
realizado entre 1924 y 1927-, y el edificio del Centro Fig. 57. Centro Asturiano de La Habana, actual Museo de Bellas Arte Univer-
sal.
Gallego (actual Gran Teatro de La Habana) -realizado
entre 1907 y 1915.
Estas sociedades regionales españolas contribuye-
ron a mantener el arraigo cultural de los inmigrantes

© Archivo personal de los autores

Los criollos elaboraron propuestas que perfilaban
su inclusión en las exhibiciones. Con sus enseres
ellos hacían notar los lazos de rechazo o manco-
munidad con la Metrópoli, sus productos no se re-
ducían a las riquezas naturales del suelo como se
quería destacar desde el centro colonial, sino que
incluían obras de arte y literatura, géneros artesa-
nales o elaborados por la industria local, muchos
47
de ellos premiados y mostrados con orgullo .
desperdigados en las grandes urbes, al tiempo que
difundieron las formas de vida y costumbres de sus
regiones de procedencia, destacándose
49
activamente
gallegos, catalanes y vascos .
En los primeros años de la República se inauguran
edificios sedes de importantes compañias, con una
novedosa distribución de actividades de exposición
en salones y almacenes, junto a la función comercial
y administrativa en oficinas, todo dentro de una es-
tructura única.
Fig. 58. Lonja del Comercio de La Habana.
47. Historia de la Cámara de Comercio, /s.e/,La Habana,
/s.f/, /s.p/.
48. Sallé Alonso, Mª Ángeles y Ángeles Van den Eynde:
La emigración española en América: historias y lecciones
para el futuro,/s.e/, ,2009.
49. Monterroso Montero, Juan M.: De Galicia a Cuba. La
percepción del arte y arquitectura a través de la prensa
cubana (1875_1910), /s.e/, /s.f/, p. 103-134.
Como referentes clave se encuentran la Lonja del Co-
mercio (1909) y el Edificio Bacardí (1930), este últi-
mo de estilo Art Decó, donde seguido del vestíbulo
se accedía al “salón de exposiciones decorado con
pilastras de capiteles dorados, vigas de sección
50
esca-
lonada y lámparas finamente diseñadas’’ . En estos
casos se va a ver asociado el tema expositivo con la
actividad comercial.
En las exposiciones universales desarrolladas en la
estapa, el Pabellón Cubano de la Feria de Sevilla de
1929 de Govantes y Cabarrocas, representa el proce-
so de renovación arquitectónica previo al Movimiento
Moderno, que partiendo del eclecticismo desembocó
en el neocolonial, como una tendencia precursora de
la búsqueda de una arquitectura nacional.
Sus aportes residen en la armoniosa escala de sus es-
pacios y en la evidente reinterpretación de elementos
tomados de la arquitectura colonial (pisos de mármol
blanco, maderas preciosas, techos de armaduras, es-
caleras de balaustres torneados, balcones cubiertos
con tejadillos, etc.) con el propósito de apoyarse en
el pasado.
También se tiene noticia de las Ferias Ganaderas don-
de se manifiesta los adelantos alcanzados en este
sector. La mayor representante en este sentido es la
Feria Agropecuaria de Rancho Boyeros (1920-1930),
cuyos pabellones expositivos lucen aún hoy su Eclec-
ticismo Neocolonial y sus naves de crianza, como evi-
dencia de la arquitectura industrial del siglo XX. Este
recinto –el más importante de su tipo en el país– está
estructurado por unidades autónomas dispuestas en
torno a una gradería para el Rodeo y otras demostra-
ciones.
Vale acotar que, como resultado del entusiasmo de
la joven república y el proceso de concientización
nacional también se crean espacios para resguardar
el patrimonio nacional, uno de ellos es el Museo de
Bellas Artes (1913). El mismo durante 40 años se
instauró en diferentes lugares, hasta que en 1954 se
© Archivo personal de los autores
© blog.sevillasigloxx.com
Fig. 59 Edificio Bacardí, La Habana. Fig. 60. Pabellón Cubano en la Exposición Iberoamericana de Sevilla, 1929.
crea la sede diseñada por el arquitecto Alfonso Rodrí-
guez Pichardo y a finales del siglo XX se dividió en dos
grandes núcleos: cubano y universal, albergando sólo
obras de las Artes Plásticas.
© Archivo personal de los autores
1.5.3 Revolución
Después del triunfo revolucionario, la feria y las expo-
siciones en general, tienen una mayor participación 28
popular, además de los productores están presentes estado
Fig. 61. Pabellón cubano en la Exposición Internacional de Montreal, 1967. del
artesanos, farmacéuticos, mecánicos, vinicultores, arte
reposteros, inventores, entre otros. Se amplían las te-
máticas expositivas y se sistematizan los eventos, los
que van a tener lugar tanto en el extranjero como en
suelo nacional.
Las primeras ferias en que Cuba participó en el ex-
tranjero tras el triunfo de la Revolución se califican de
grandes acontecimientos. El primer antecedente de
una exposición presentada por el Gobierno Revolucio-
nario en el extranjero fue la de Nueva York en el propio
© Los autores
1959. Sólo un año después, en 1960, ya la Isla acudía
a las ferias de Belgrado y Zagreb, ambas en Yugosla-
via. Hasta que en 1963 se le encargan las exposicio- Fig. 62. Pabellón Cuba , La Rampa (2012).
nes siguientes a la Cámara de Comercio.
De esta forma, la imagen y los productos cubanos via-
jaron a Casablanca (Marruecos, 1963); Osaka (Japón, 50. http://es.wikipedia.org/wiki, junio 2011 (acceso
3/12/2011).
1964); Damasco, Trípoli, Argel y Bagdad; América Lati-
na, el Caribe, Asia, África Subsahariana y las ciudades
feriales más51
importantes de las naciones de Europa
Occidental . Los pabellones que nos representaron
igualmente en la EXPO-67, en Montreal, y EXPO-70, en
el Japón, además de su transitoriedad, fueron obras
aisladas en escala única desde el momento mismo de
su concepción.
Las exposiciones y ferias realizadas en territorio na-
cional tuvieron como sede diferentes edificios ya
existentes. En 1960, la extinta Unión de Repúblicas
Socialistas Soviéticas (URSS) montó, en el Palacio de
Bellas Artes, la primera gran exposición extranjera
en el país, recordada aún como un acontecimiento y
donde mostraron una amplia panorámica de aquella
Unión de Repúblicas. A ésa sucedieron, en la misma
sede, otras exposiciones de China y Checoslovaquia.
Así también otras52
de la RDA montada en el Parque
Zoológico de 26 .
Hasta que en la temprana fecha de 1963 se constru-
ye, en ocasión del VII Congreso de la UIA, eI Pabellón
Cuba, que constituye el principal testimonio de una
construcción cubana para exposiciones permanentes.
Muchas de las mejores obras proyectadas para fines
expositivos, dentro de las que se incluye el Centro
Nacional de Exposiciones Permanentes EXPO-CUBA,
se han
53
ubicado casi siempre en la periferia de la ciu-
dad . No obstante, este centro es un proyecto clave y
de muy buena acogida por el público, que se mantie-
ne en uso hasta nuestros días.
Su estética basada en el empleo de estructuras metá-
licas (estereocelosías de producción nacional), acoge
el principio de flexibilidad y neutralidad en el espacio
interior de sus 21 pabellones ramales y el Pabellón
Central (de 8 400m2), cuyo proyectista principal fue
el Arq. Humberto Ramírez. Sus instalaciones se desa-
rrollan en más de 80 000m2 de construcción en 30 ha
54
de terreno .
El recinto consta de un eje fuertemente marcado a lo
largo del que se dispone el Pabellón Central, para co-
nectar los pabellones ramales, 12 de los cuales son
de 30m x 60m; 7 de 30m x 30m y 2 de 30m x 90m.
Posee Centro de Convenciones, anfiteatro al aire libre
para 500 personas, Centro de Información, parque de
diversiones, una micropresa, cafeterías, restaurantes,
© Archivo personal de los autores
plazas, un tanque mirador, entre otros.
Otras instalaciones de la ciudad que desarrollan estas
actividades son el Palacio de las Convenciones de La
Habana, sede de numerosos congresos y eventos na-
cionales e internacionales (salud, educación, cultura) Fig. 63. Palacio de las Convenciones de La Habana.
y PABEXPO, su Centro de Exposiciones, con 5 salas cli-
matizadas de diferentes capacidades unidas entre sí.
Hoy tienen lugar anualmente decenas de ferias y salo-
nes especializados a lo largo de todo el territorio, las
mismas se desarrollan en edificaciones existentes,
donde se acomodan los espacios para estos fines.
Muchos de estos recintos han dejado de funcionar o
© http://www.cubaweb.cu
necesitan dar nuevas respuestas para los diversos pú-
blicos, como es el caso del Pabellón Cuba.
29
Fig. 64. Centro de Exposiciones del Palacio de las Convenciones, PABEXPO. estado
del
arte
© www.arquitecturacuba.com
Fig. 65. Pabellón cubano en la Exposición Internacional de Shanghai, 2010.
51. Historia de la Cámara de Comercio, /s.e/,La Habana,
/s.f/, /s.p/.
52.Idem
53. Coyula, Mario: El Trinquenio Amargo y la ciudad dis-
tópicaautopsia de una utopía, La Habana, conferencia,
marzo del 2007, ISA.
54. Duverger, Heriberto: EXPOCUBA, High Tech?; Sí hay!,
Arquitectura Cuba,No. 373, /s.e/, La Habana,/s.f/, p.5-
11.
1.6 Conclusiones parciales

El pabellón expositivo posee un contenido de difusión
nacional extraordinario. Ha constituido a lo largo de
su evolución un auténtico laboratorio de experimen-
tación, donde se ensayan sistemas constructivos, ma-
teriales y tecnologías novedosas con especial influen-
cia en la arquitectura definitiva de la ciudad.
Los pabellones para exposición de carácter perma-
nente son edificios versátiles cuyo diseño es influen-
ciado por los diversos cambios sociales, económicos,
políticos e ideológicos en el transcurso su vida útil.
Este tipo de edificios demuestra que el arte público
engrandece a la ciudad e interesa al visitante, des-
plegando un proceso que ya es asimilado como usual
en las sociedades de hoy: la relación arquitectura-
medios virtuales, hombre- tecnología y espacio inte-
rior-exterior. Relaciones que hacen que se desborde
la función y alcance una escala más allá de la propia
edificación, la urbana.
y contemporaneidad. Un recurso clave en estos casos
es la utilización del espacio urbano, donde predomi-
nen los flujos, los espacios de múltiples escalas y de
carácter ultra flexible.
En el caso particular de Cuba, la actividad expositi-
va y en especial los espacios dedicados al arte y la
cultura, han tenido gran auge y diversidad durante las
distintas etapas de la historia. Pero actualmente la
construcción de nueva planta para edificaciones con
estos propósitos se encuentra ligeramente detenida,
y las que existen acogen como pueden las actividades
expositivas, predominando la rehabilitación de obras
de la zona hitórica de la ciudad.

En las últimas décadas estos edificios emblemáticos,

en su mayoría devenidos patrimonio de gran valor 30
histórico-cultural para la ciudad, son rescatados y estado
del
convertidos en complejos culturales. Las tendencias arte
más recientes en este campo de la arquitectura están
estrechamente relacionadas con la preocupación por
realizar construcciones eficientes energéticamente y
de reducido impacto medioambiental. A la vez se ha
estado gestando una forma de exponer contenidos
fuera de las edificaciones, usando el espacio público
para eventos poco usuales y experimentales (biena-
les de arte, instalaciones artísticas, escultura urbana,
etc.).

Producto de las necesidades de adecuación al presen-

te, la rehabilitación con adaptación a nuevos usos es
una de las formas de intervención más suscitadas en
los últimos años. Esta recuperación del ambiente cul-
tural de las ciudades, incluye necesarias modificacio-
nes del contexto inmediato del edificio, de forma tal
que se genere una relación dinámica entre patrimonio
 La Habana - Junio 2012

Í







>
2.1 El Vedado: la Capital de la Capital
(...) A veces, en espacios interiores, aquellos már-
moles cedían su lugar a los mosaicos que, como
alfombras de Persia, resplandecían con motivos
florales o geométricos en la decoración de salas,
salones, alcobas… En coherente y precioso orden,
los jardines daban acceso a las escalinatas que
precedían a los pórticos, y muchas de aquellas
residencias contaban con torres y caballetes cubi-
ertos con tejas verdes vidriadas.
Eusebio Leal
´´Delimitado en forma natural por el cauce del río Almen-
dares, ese territorio se encontraba amparado por estra-
tégicas elevaciones, esparcidas por la naturaleza como
para asegurar un teatro de operaciones´´, así describe el
Historiador de la Ciudad de La Habana la zona que hoy
conocemos como El Vedado; que no debe su surgimien-
to como el resto de las ciudades hispánicas a una plaza
como centro geográfico y funcional.
El área donde se ubica el actual Vedado, surge inicial-
mente como un suburbio próximo al núcleo primario de
la Villa de San Cristóbal de La Habana y debe su nombre
a su propia ubicación: era lo Vedado, lo prohibido para
transitar una vez que las murallas se cerraban en la no-
che.
Los orígenes de El Vedado se encuentran en el novedoso
proyecto del reparto El Carmelo, presentado a las autori-
dades el 8 de abril de 1859 bajo la autoría del ingeniero
civil urbanista Luis Iboleón. El Carmelo concebido como
un suburbio y tan lejos de una población ya existente, se
produjo gracias a la oportuna construcción de un nuevo
medio de transportación en el mismo año, el ferrocarril
urbano.
Este barrio estaba destinado a albergar principalmen-
te la función residencial, aunque se dedicaron ´´diez
manzanas y media para actividades públicas, dos para
iglesias, tres para mercados, una para parque, una para
colegio, una para hospital, la mitad de una para cuartel y
dos para la estación del ferrocarril urbano (…)
© Ministerio de la Construcción
© El Proyecto de El Vedado
Fig. 66. Etapas de conformación del actual reparto El Vedado. Fig. 67. Calle 23 en la década del veinte del siglo XX..
El proyecto definitivo consistió en la parcelación de un
territorio de 156 hectáreas en 105 manzanas cuadradas
de 100 m por 100 m, ordenadas en una retícula perfecta
con calles de 16 m, orientadas aproximadamente a 45º
en relación con el norte, para disminuir los efectos de la
© Ministerio de la Construcción
insolación y aprovechar el régimen de brisas predomi-
55
nantes .De esta forma, siendo previamente estableci- 31
do en el proyecto un trazado y una ordenanza estrictos, la rampa
situación
se concretó en Cuba un nuevo y moderno modo de hacer actual
ciudad.
Fig. 68. Vista aérea de El Vedado en 1926.
A partir de este momento se introducen cambios sus-
tanciales como fueron la identificación de las calles por
números y letras, una solución de extrema sencillez (im-
pares las paralelas al mar y pares las perpendiculares a
este). Además de subdividir las manzanas en suástica,
© Fototeca, Archivo Nacional de Cuba
´´con doce lotes regulares rectangulares, siendo los de
las esquinas de mayores dimensiones´´. Pero quizás ´´la
obligatoriedad del portal de cuatro metros,del jardín de
cinco metros y del arbolado
56
público en las aceras´´ fuera
lo más significativo .
En 1860 el barrio El Carmelo es objeto de una prolonga- Fig. 69. Fragmento de El Vedado, c. 1940.
ción, a la que se lenombra El Vedado, donde se conciben
ya en menor
57
proporción, manzanas para actividades pú- 55. Zardoya Loureda, María Victoria: “La ley y el Orden”, en Regu-
blicas . Posteriormente surgenen1883 y 1885 los ba- laciones Urbanísticas. El Vedado, Ed. Boloña y Unión, La Habana,
2007, p. 34.
56. Idem.
rrios Medina y Rebollo respectivamente, ambos herede-
ros de la retícula y reglamentaciones precedentes.
El Vedado fue el primer barrio habanero proyectado con
una estructura completamente planificada, donde la
residencia individual es el elemento principal. La edifi-
cación se encontraba exenta en el lote y rodeada por al
menos un pasillo lateral, fenómeno que surge de forma
de la ciudad compuesto por El Carmelo (1859), El Vedado
(1860), Medina (1883) y Rebollo (1885), conocido des-
pués bajo el nombre genérico de El Vedado, fue la pieza
59
más importante de urbanización colonial en Cuba´´ .
Desde fines del siglo XIX, la zona asume un carácter re-
creativo muy fuerte debido a su borde costero, devenido
importante destino de veraneo para los habitantes de la

más o menos espontánea, donde se edificaban vivien-
das unifamiliares de uno o dos niveles, que se asemeja-
ban a las quintas de El Cerro.
En 1914 se ponen en vigor las ordenanzas sanitarias,
que completaban las ya vigentes, normando los aspec-
tos relacionados con el abastecimiento y evacuación de
las aguas en la ciudad, la necesaria ventilación de las
edificaciones y estableciendo la obligatoriedad de pasi-
llos laterales y de un 33% como mínimo de superficie
descubierta en cada lote. Por lo que en su momento, El
Vedado se convierte en el barrio aristocrático por exce-
© Fuente desconocida
ciudad. La ubicación de baños en el litoral proliferó e in-
crementó la presencia de servicios de apoyo a esta fun-
ción, incluyendo hospedaje. Lo que causó que la zona
más próxima al litoral no se urbanizara por un tiempo. Fig. 70. Rápido crecimiento urbano del barrio hasta el año 1914. Plano de
Ciudad de La Habana.
Ya en la primera década del siglo XX se produce un ace-
lerado proceso de ocupación del barrio, catalizado por
dos importantes sucesos: la construcción de la Colina
Universitaria (unión definitiva de El Vedado con la Ha-
bana Antigua) y la construcción del puente sobre el Río
Almendares (vía de comunicación con el municipio de
Marianao). Hecho que constituye un acertado pivote ur-

© Francisco García
lencia de la ciudad de La Habana. bano entre los dos fragmentos de ciudad tan distintos.

Como expresara el Historiador de la Ciudad ´´La estricta
delimitación de frentes, portales y pasillos laterales y de
fondo, el patio trasero que, por la sumatoria de los patios
privados, deviene pulmón de la manzana, permiten una
libertad formal dentro de un marco urbano preestable-
cido garante
58
de una fluidez en la lectura de los volúme-
nes´´ .
El crecimiento de la nueva urbe hacia el sur condiciona
En la medida en que la arquitectura moderna se fue in-
troduciendo en Cuba, proyectistas y propietarios recla- Fig. 71. Fragmento de Plano de La Habana, año 1951. 32
maron la construcción de edificios cada vez más altos. la rampa
situación
Pero pocos permisos fueron concedidos a tal efecto, actual
como es el caso del edificio Radio Centro, construido en
1947 y justificado por la función que albergaba.
En 1952 se promulga la Ley- Decreto de la Propiedad
Horizontal, con la cual se multiplicaba una y otra vez el

la aparición de la Calzada de Medina, hoy calle 23, de
primer orden y en sentido paralelo al mar. La calle 23 ad-
quiere especial connotación, convirtiéndose en la cuarta
calle de primer orden del barrio. Por lo tanto se puede
decir que se llegó a conformar una ´´supercuadrícula de
circulaciones principales que subdividió el barrio en blo-
ques de cinco a siete manzanas de lado´´ con las vías L,
12 (que posteriormente asumen gran jerarquía funcio-
nal), Línea, 23, Paseo y G.
Enunciando los grandes valores del barrio el arquitecto
Mario Coyula resume con acierto: ´´el territorio al oeste
valor del suelo. Las edificaciones de mayor altura en el
barrio de El Vedado y que definen parte de su tipología,
se concentraron hacia el Malecón (última zona en ocu-
parse), y en la zona comprendida
60
entre las calles L, 27
de noviembre y el mar .
Otras instalaciones que por su cantidad y calidad fueron
caracterizando El Vedado del siglo XX fueron los teatros
y salas de cine, los restaurantes y cafeterías, y finalmen-
te los hoteles. Según Mario Coyula, ´´el barrio fue asu-
miendo un papel cada vez más importante dentro de la
capital, combinando las ventajas de una zona que ya se
© Fuente desconocida
Fig. 72. Calle 23.
57. Idem.
58. Leal, Eusebio: Prólogo de Regulaciones Urbanísticas. El Veda-
do, Ed. Boloña y Unión, La Habana, 2007.
59. Coyula, Mario: Más acá del río y bajo los árboles a la sombra
de un Vedado que ya no es más, en Regulaciones Urbanísticas. El
Vedado, Ed. Boloña y Unión, La Habana, 2007, p. 61.
60. Según la Ley- Decreto de la Propiedad Horizontal (1952), el
territorio es dividido en dos zonas: la primera comprendida entre
las calles L, 27 de noviembre y el mar, en la que se permitió una
altura que fuese menor o igual que el doble del ancho de la calle,
más una fracción que no excediera de dos metros para comple-
tar un piso. El basamento podía elevarse hasta un metro y veinte
centímetros de la acera, tomando como base el punto medio del
terreno (N.A).
había convertido en central con la
61
amplitud, el verde y la
calidad de vida de un suburbio´´ .

El Vedado fue conformándose como un tejido mixto,

donde se mezclaron diversas funciones de carácter ter-
ciario. Hoy El Vedado, como parte del municipio Plaza de
la Revolución está inscrito dentro de los territorios que
conforman la Zona Central de la ciudad yconstituye un
muestrario de gran valor, que preserva símbolos de la
arquitectura cubana del siglo XX, especialmente de los
estilos ecléctico y moderno. Fig. 73. Esquina de 23 y N, 1963. Fig. 75. Estudios para ubicar el Pabellón Cuba, 1963.

En consecuencia con ello, la Comisión Nacional de Mo-

numentos lo ha declarado Zona de Valor Histórico-Cul-
tural. Sin embargo, a pesar del deterioro de muchas de
sus edificaciones, la homogeneidad del barrio subsiste,
pero corre el peligro de desaparecer por las constantes
agresiones de todo tipo a las que hoy está sometido.

2.2 La Rampa: Centro Cultural Recreativo

© Fototeca del M.O.P

La zona de La Rampa, tal como hoy la vemos y la vivimos,
es heredera de aquel barrio de la aristocracia habanera
de finales del siglo XIX que fue tomando cuerpo con el
paso de los años. La Rampa es como comúnmente se
le conoce al tramo final de la calle 23 debido a la pen-
diente del terreno hacia el mar. Esta calle termina en la
intersección con el Malecón y la Calzada de Infanta, que
había sido el límite oeste de la ciudad central a princi-
pios del siglo XX.
2.2.1 Surgimiento y evolución
Fig. 74. El Vedado de 1958. Fig. 76. La Rampa hacia Malecón, edificio Ambar Motors, 1958. 33
la rampa
situación
actual
de la ciudad comienza a fines de los años cuarenta, al
inaugurarse el complejo cinematográfico y de radiodi-
fusión –Radiocentro– en 23 y L; obra que constituyó el
primer edificio de oficinas en utilizar los códigos arqui-
tectónicos del Movimiento Moderno (eventualmente
empleados en algunas viviendas privadas).

© Biblioteca Raúl Martínez Villena

Durante la primera década del siglo XX, se produce una
acelerada ocupación de la zona este del barrio de El
Vedado, desde la calle J hasta N. Este proceso impli-
có el autorizo de decretos excepcionales para el cum-
plimiento del requisito de jardín y portal, debido a las
condiciones topográficas del terreno en cuestión.
El desarrollo de La Rampa se inicia con la construcción
en 1922 del Edificio Alaska, hoy tan solo un recuerdo.
Pero su auge como uno de los centros de animación
Posteriormente, durante los años 1950 se completa el
último tramo desde L hasta el mar y en poco tiempo La
Rampa, concentra un conjunto importante de funcio-
nes culturales, recreativas y administrativas. Razón por
la cual desplaza a los anteriores focos de animación Fig. 77. Estudios para ubicar el Pabellón Cuba, 1963.
–tradicionalmente el conjunto Parque Central, Manza-
na de Gómez, Capitolio, Paseo del Prado y el animado
sector comercial alrededor de Galiano, Neptuno y San
Rafael- y concreta el papel de centro moderno y cosmo- 61. Coyula, Mario: Más acá del río y bajo los árboles a la sombra
polita de La Habana. de un Vedado que ya no es más, en Regulaciones Urbanísticas. El
Vedado, Ed. Boloña y Unión, La Habana, 2007, p. 61.
En la década de 1950 comienza a desarrollarse la ar-
quitectura racionalista del Movimiento Moderno, en la
que aparecen edificios en altura que cambian el perfil
habanero. Poco tiempo después y para confirmar la vo-
cación de la zona, se levanta el Hotel Havana Hilton,
que contribuye a la jerarquización de la zona y a un ra-
dical cambio de escala. Luego se construye ´´un shop-
ping mall, instalación hasta entonces poco común en
La Habana, con excepción 62
de la vieja Manzana de Gó-
mez del ring habanero´´ en la propia esquina de 23 y Fig. 78. Centro Comercial La Rampa, 1963. Fig. 80. Estudios para ubicar el Pabellón Cuba, 1963.
Malecón, que se convierte en lugar de moda.

Uno de los acontecimientos más notables fue el Cine

Arte y Cinema La Rampa, ubicado en la esquina de 23
y O, diseñado por Gustavo Botet. El mismo constituye
una excelente solución en un espacio tan reducido,
además de poseer comunicación directa con la cafete-
ría Wakamba, una de las primeras en establecer el self
service o autoservicio en la ciudad. Lo que enmarca la
creciente influencia americana de que éramos sujeto,
hasta en los prácticas gastronómicas.

La función hotelera no cesó con el Havana Hilton, sino

que tiene fuerte presencia en la zona con hoteles me-
nores como el Capri, el Saint John´s, El Vedado y el Fla-
mingo, conformándose una zona turística. Se dilucida-
ba un eje turístico-recreativo de muy alto nivel, así lo
demuestra el planteamiento siguiente: ´´en La Rampa
se podía pasear, comer en un buen restaurante chino,
polinesio, francés o criollo, merendar en una cafetería
al estilo de New York. Los noctámbulos podían darse
tragos y bailar en los sótanos hábilmente adaptados a
Fig. 79. Esquina de 23 y M, 1963. Fig. 81. Cine La Rampa, 1963. 34
la rampa
situación
posiciones. El Salón de mayo traía las novedades de actual
París´´.
En esos años acontece la celebración del Congreso
de la UIA en 1963 y La Rampa es su escenario princi-
pal, motivo por el cual se inaugura el Pabellón Cuba y
se logran nuevas aceras de granito lavado con obras

© Biblioteca Raúl Martínez Villena

cabarets, (…), comprar objetos exóticos en la tienda In-
dochina(…), adquirir finas porcelanas o cristales dane-
63
ses en la Casa Dinamarca, comprar libros de moda´´ .
Pero como lo afirma Graciela Pogolotti, el esplendor de
La Rampa se produjo en los sesenta:´´las artes visua-
les se volcaban sobre la ciudad. Al talento de los pin-
tores se sumaba el despliegue del cartel (…). El arte se
integraba a la cotidianidad de la vida. Espacio abierto
y flexible, el Pabellón Cuba mostraba espléndidas ex-
empotradas de artistas plásticos cubanos. Además el
antiguo hospital Reina Mercedes había sido sustituido
por Coppelia, la catedral del helado en 1966, obra del
arquitecto Mario Girona. Se realizó una audaz conver-
sión de la funeraria Caballero en centro cultural por Joa-
quín Rallo y Roberto Gottardi. Fig. 82. Esquina 23 y O, 1963.
Poco después ocurre una pérdida del valor cultural y
social de la zona al predominar la actividad adminis-
trativa que ocupa la mayor parte de sus edificios y que
62. Rigol, Isabel y Ángela Rojas: ´´La Rampa. Nostalgia y rescate´´,
recesa al atardecer. También decayó la calidad de las Arquitectura y Urbanismo, Vol. XXIV, No. 3, /s.e/, La Habana, 2003.
63. Idem.
funciones gastronómicas y de esparcimiento, muchos
de los centros nocturnos fueron convertidos en lugares
de almacenamiento u oficinas. No obstante, a partir de
los noventa, la zona comienza a resurgir muy tímida-
mente, ´´los hoteles se llenan, se reparan mejor o peor,
se abren nuevos restaurantes y cafés, tiendas de souve-
nirs. Pero no se logra64capturar de nuevo el espíritu cul-
tural de los sesenta´´ .
La Rampa constituye un extraordinario ejemplo del pa-
trimonio intangible transmitido a través de las genera-
ciones cubanas. Magistralmente se ha planteado que
´´La Rampa constituye un testimonio de carácter excep-
cional vinculado
65
a la evolución histórica de la ciudad de
La Habana´´ . No obstante, en las décadas posteriores
a la del 50, se continúo con nuevas inserciones arqui-
tectónicas, algunas inadecuadas y de muy baja calidad
estética, otras bien acertadas y de alto valor expresivo.
En La Rampa los edificios poseen diversos valores. El
Radiocentro fue el ´´primer edificio público racionalista
de Cuba y exponente de algunas soluciones agrada-
bles, como la comunicación interior con la calle M y la
posibilidad de caminar por un nivel diferente del de la
acera´´. Por su parte, el Habana Libre ´´tuvo probable-
mente el lobby más atractivo de todos los hoteles cuba-
nos. Un espacio interior con virtudes de exterior y que
constituyó durante mucho tiempo un socorrido lugar
de transición desde L a 23´´. Pero de la arquitectura
cubana después del 1959, el Pabellón Cuba de Juan
Campos, podría ser uno de los más interesantes edifi-
cios, ya que ´´el gran valor de La Rampa no está en 66los
recuerdos que provoca, sino en la calidad de ellos´´ .
Otro de los atractivos de La Rampa, es la irregularidad
de alturas, que propician un subir y bajar constante,
mediante lo cual se logran agradables visuales de la
ciudad. No obstante, esta zona posee grandes proble-
mas funcionales como son las dificultades para cruzar-
la, la pendiente del terreno. Resumiendo con acierto,
se ha expresado que La Rampa ´´es un símbolo con una
extraordinaria carga emocional, pocos
67
edificios valio-
sos y varios problemas funcionales´´ .
2.2.2 Distintos enfoques
Estudios de intervenciones anteriores en la zona La
Rampa a lo largo de los años comenzó a caer en el olvi-
do, a pesar de suprivilegiada ubicación y su magnífica
infraestructura reciclable. El análisis de sus problemáti-
cas, las diversas propuestas para su rehabilitación y la
recuperación de su centralidad han venido estudiándo-
© Jorge Alain García Alonso
se desde hace más de una década, tanto por la Facultad
de Arquitectura de La Habana como por otras entidades
interesadas o estudiosos de temáticas urbanas, como
el arquitecto Andrés Duany.
“La Rampa. Tránsito hacia el futuro” de las diplomantes
Evelyn González Rapetti y Maureen de León y la tutoría
de las profesoras Isabel Rigol y Ángela Rojas fue uno de
los primeros trabajos de diploma que aborda este sec-
tor de El Vedado. Posteriormente el arquitecto Lee Cott,
profesor de la Universidad de Harvard condujo, junto
© Liván Parra Molina
con el profesor Mario Coyula, en La Habana, un taller
con estudiantes de esa universidad.
En el curso 2002-2003 y también dirigidos por las pro-
fesoras Rigol y Rojas, los estudiantes Liván Parra y Jorge
Fig. 83. Tesis de Grado (2003). Propuestas para la calle 23, en los tramos J a
L, y O a Malecón. 35
Alain García, llevan a cabo su tesis de grado con el obje- la rampa
situación
tivo de proponer lineamientos generales y regulaciones actual
de diseño para la zona. El primero estudia el tramo de la
calle O hasta el mar, mientras que el segundo trabaja el
tramo de la calle 23 entre L y K.
Ambas tesis examinan y diagnostican la zona, desde
todos los puntos de vista. La estudian en el marco de la
ciudad, determinando sus debilidades y potencialida-
des, tanto en el orden funcional como visual. Uno de los
objetos fundamentales del análisis, fueron las furnias
de La Rampa como atributos especiales de la zona, que
ofrecen variadas posibilidades funcionales y de diseño.
En el 2003, a los cuarenta años de construido el Pabe-
llón Cuba, se realizó un encuentro de gran significación
para rememorar el Congreso de la UIA de 1963 que
tuvo lugar en La Rampa. Se celebró un debate entre 64. Idem.
65. Idem.
estudiantes y profesionales que abarcó temas como la 66. Idem.
67. Idem.
necesidad de acometer acciones para la revitalización
de la zona objeto de estudio, la demolición del edificio
Alaska y la posibilidad de incorporar ese espacio al Pa-
bellón Cuba, en función de la importancia
68
de recuperar
lugares para el amplio uso público .

En el mismo año se presentó otro trabajo de diploma,

“Un proyecto singular para recuperar la céntrica esqui-
na de 23 y M, Hotel Rampa”, de los diplomantes Rei-
naldo Aguiar y Manuel García, en el sitio que ocupó el
antiguo Edificio Alaska. El proyecto arquitectónico con-
sistió en una torre de alojamiento hotelera de la Catego-
ría Premium Cuatro Estrellas Plus, de 250 habitaciones
y 20 pisos.

La propuesta, logró en su momento una expresión

con¬temporánea, integrándose al entorno de manera
armónica, preservando a su vez los valores arquitec-

© Revista Cimientos. La Habana, No. 8, año 5, 2004.

tónicos de identidad nacional y socio cultural del sitio.
Este proyecto resultó Premio de la Ciudad de La Habana
de Arquitectura e Ingeniería, en el año 2003.

Su elemento más importante desde el punto de vista de

enganche urbano resultó el plano rectangular en el cen- 36
tro de las dos torres, que conservaba la altura original la rampa
situación
del antiguo Alaska, en una clara y sutil referencia históri- actual
ca. Además fachada mantenía una proporción de vanos
similar a la del Radio Centro, que no necesariamente re- Fig. 84. Imágenes de T.D. ¨Proyecto Hotel Rampa¨. Autores: Aguiar Rinaldo y

© Dayman Pedrero, Graciela García y Alejandro Esquijarosa, 2009

sultó acertada.Por otra parte, la función propuesta para
el nuevo edificio quizás no fuera la más necesaria en
esa zona, por el contrario, si en su concepción se hubie-
ra tratado más el basamento desde la perspectiva urba-
na, siguiendo una tendencia muy común en la zona, la
propuesta estaría más acorde a las necesidades de hoy.
Gracía Manual, 2003.
Este proyecto proveía nuevos puntos de énfasis a escala
urbana dentro del eje que forma la Rampa, mediante el
empleo de códigos contemporáneos reinterpretando la
arquitectura del contexto.

Más recientemente, en 2009, los arquitectos Graciela
García, Dayman Pedrero y Alejandro Esquijarosa, pre-
sentan un proyecto para el terreno contiguo a la Helade-
ría Coppelia, en las calles 23 y K. La propuesta consistió
también en una torre, esta vez de apartamentos de 16
niveles, con un basamento que acoge funciones comer-
ciales y estacionamientos. Una plaza pública, que sirve
de transición del espacio urbano y cualifica al edificio.
Es evidente el propósito de intervenir en La Rampa, que
debido a su privilegiada ubicación y carácter urbano,
requiere revitalizar su imagen y potenciar sus valores.
Como expresara Felicia Chateloin en su artículo Movi-
miento Moderno en la Habana. Génesis y conservación, Fig. 85. Propuesta de edificio de viviendas 23 y K. Arqs. Dayman Pedrero,
‘’es hoy la rehabilitación y no la construcción de nueva Graciela García y Alejandro Esquijarosa, 2009.
planta el «plato fuerte» para hacer ciudad, así la con-
servación de la arquitectura del Movimiento Moderno 68. Cárdenas, Eliana: UIA 63, encuentro 40 aniversario. Arquitec-
tura y Urbanismo, Vol. XXIV, No. 3, ISPJAE, La Habana, 2003.
debe superar
69
muchas incertidumbres en el medio pro-
fesional’’ .
2.3 Caracterización del contexto inmediato
La zona de análisis perteneciente al Consejo Popular
La Rampa, en lo adelante sector de análisis ocupa un
área aproximada de 0.37 km².
2.3.1 Límites
Limita al Norte con la línea costera del Malecón, al
Este con la Calzada de Infanta, hasta su intersaección
con la calle 25. Limita al Sureste con la calle 25, si-
guiendo por el eje de esta última hasta intersecar la
calle I, con orientación Suroeste. Limita al Noroeste
con las calles 21 (en su tramo de I a L) y 19 (en su
tramo L a Malecón). De Noreste a Sureste está com-
prendida desde la Avenida Malecón hasta la calle I.
Y la manzana de estudio, que integra la zona antes
mencionada se encuentra definida por las calles 21,
M, 23 y N.
2.3.2 Regulaciones Urbanas
Además de los ya citados, el barrio de El Vedado ha
sido objeto de otros estudios y análisis donde se han
discutido ideas acerca de su transformación y conser-
vación llegándose a resultados bastante significati-
vos. Un ejemplo claro de esto son las Regulaciones
Urbanísticas para El Vedado, publicadas en el 2007.
Desde la última década del siglo XX, la necesidad de
actualizar los instrumentos de gestión urbana, a fin
de hacerlos máscomprensibles y de fácil aplicación
arrojó este documento regulatorio detallado, donde
se controlan la ocupación de las manzanas, lainten-
sidad en el uso, la altura de las edificaciones y sobre
todo su imagen.
En el documento de las Regulaciones Urbanísticas
para El Vedado se destacan aspectos tales como la
salvaguarda de la imagen de El Vedado, por sus ex-
cepcionales valores ambientales y urbanos; la con-
© www.googleearth.com
servación de la parcelación original como uno de los
elementos de máxima preservación; la conservación
y desarrollo de los espacios públicos; la recuperación
© www.googleearth.com
y potenciación de la centralidad del área y la preser-
vación
70
de la función residencial y de la vida comuni-
taria . Este documento constituye un elemento cla-
ve para el desarrollo de la ciudad, ya que se recogen
todas las normativas necesarias para las futuras in- 37
tervenciones, tanto de conservación como de nueva la rampa
situación
inserción. actual
Como elemento inicial para cualquier plan de desa-
rrollo urbano futuro se han establecido cuatro zonas
de Regulación de Intensidad Urbana (RIU), el sector
de análisis está incluido en la Zona de Intensidad Ur-
bana III (alta). La Rampa corresponde a la Zona Cen-
tro-Ciudad y es parte integrante de la zona protegida,
clasificada como Zona de Valor Histórico-Cultural,
en consecuencia se ha listado un grupo de valiosas
obras con Grados de Protección I, II, III y IV en todo
© www.googleearth.com
el barrio.
En el sector de análisis las regulaciones urbanas del
municipio establecen un grupo de artículos referidos
Fig. 86. Microlocalización de la zona de centro La Rampa.
a criterios reguladores generales y específicos, así
69. Chateloin, Felicia: “Movimiento Moderno en la Habana. Gé-
como elementos a considerar en las intervenciones nesis y conservación”, docomomo_Cuba, No. 4, diciembre 2005,
2005.
para todas las escalas del espacio urbano. Pero en 70. Nota editorial, p. 13, Regulaciones Urbanísticas. El Vedado,
Ed. Boloña y Unión, La Habana, 2007.
ocasiones estos elementos llegan a ser verdadera-
mente rígidos y frenan formas contemporáneas de
intervención, e impiden la adecuación de la zona a
futuras y necesarias demandas para la ciudad.
En este caso se encuentran las restricciones acerca
de las ampliaciones, remodelaciones y crecimien-
tos en edificios con grado de protección, el empleo
obligatorio de técnicas y materiales tradicionales, la
prohibición de modificación de las áreas exteriores,
la introducción de nuevos elementos siempre en es-
pacios secundarios, entre otros.
Asimismo, las regulaciones urbanas del borde cos-
tero a que pertenece, especifican tres zonas diferen-
ciadas entre las que se encuentra el tramo entre el
Hotel Nacional y Calle G o Avenida de los Presidentes,
donde se norma que los futuros edificios con ‘’fines
de lucro’’ correspondientes a la Zona Centro-Ciudad
y que pertenezcan a la zona de Alta Intensidad de In-
tervención deben71
desarrollar Parques y Paseos Coste-
ros adyacentes .
Sin embargo, el alcance de este trabajo deja a un
lado el tramo del Malecón, ya que constituye tema
suficiente para otras investigaciones, aunque resulta
importante destacar la necesidad de este tipo de es-
pacios públicos para la zona.
Resulta de vital importancia ante cualquier interven-
ción en edificaciones de carácter patrimonial, reco-
Fig. 88. Panorámica de la esquina de 23 y L, zona de gran centralidad.
nocer y preservar sus valores, que van más allá de
su expresión formal y arquitectónica. Debe tenerse
en cuenta el vínculo indisoluble que existe entre el
inmueble y la significación para la memoria histórica
del lugar donde está emplazado y para las distintas
generaciones que han sido y que serán usuarios del
mismo, por lo que se debe trabajar en el reconoci-
miento y recuperación de los valores patrimoniales
de cada obra.
En el repertorio analizado, el tratamiento arquitectó-
nico en los edificios apunta hacia el mantenimiento
del contenedor histórico como evidencia de la época
que les dio vida, introduciendo elementos contempo-
ráneos ya sea con un lenguaje más o menos discreto
y reinterpretando creativamente los valores de los
edificios en el contexto actual.
Fig. 87. Plano de intensidades urbanas.
2.3.3 Trazado y Estructura Urbana
El sector de análisis presenta una morfología urbana
bastante peculiar, se relacionan dos tramas de la ciu-
dad bien distintas, produciéndose el encuentro entre
la retícula cuadrangular perfecta de El Vedado con 38
otras áreas de mayor irregularidad como Centro Ha- la rampa
situación
bana o la propia Colina, con manzanas que tienden a actual
formas rectangulares y trapezoidales. Esto proporcio-
na cierta irregularidad en el trazado urbano: la Calza-
da de Infanta, el promontorio del Hotel Nacional y la
calle 25 son las vías que definen la forma irregular de
algunas manzanas de la zona.
71. El borde costero de El Vedado: un enfoque de desarrollo coop-
erado, Esquema, p. 83, Regulaciones Urbanísticas. El Vedado, Ed.
Boloña y Unión, La Habana, 2007.
El sector de análisis se desarrolla a través de un sis-
tema de calles o vías de disímil jerarquía, desde la
más amplia, la calle 23 (de primer orden); la calle
L, como vía colectora (de segundo orden) hasta las
restantes, que constituyen vías de carácter local (o
internas).
Las manzanas comprendidas entre las calles 21 y 23
se diseñaron de forma rectangular, de 130 m x 100 m
con una parcelación en bandas, probablemente para
evitar que la calle 23 coincidiera con las numerosas
furnias de la zona, y en su tramo final, próximo al
mar, con el promontorio de la batería de Santa Clara.
Estas manzanas se ocuparonpor lotes dispuestos en
forma de suástica, con presencia de pasillo lateralco-
mo es característico en la zona.La trama urbana ha-
cia el sureste se hace más compacta y la ocupación
del suelo es mucho mayor a medida que se acerca al
límite con el municipio de Centro Habana.
La línea de fachada de esta parte de la calle 23 se
establece mediante edificaciones de altura conside-
rable y la no existencia de parterres, sustituidos por
los ponches producto del alto tránsito peatonal. Las
calles en sentido sureste-noroeste perpendiculares
a la calle 23, son de menor sección y delimitan man-
zanas en su mayoría regulares.
El sector de análisis de forma general, presenta una
estructura de manzanas semicompacta, donde la
edificación ocupa el 67% de lasuperficie cubierta
de la parcela, obteniéndose el 33% descubierto res-
tantea partir de jardines, patios, patinejos, pasillos
laterales o de fondo.Sin embargo, en la parte noreste
de dicho sector (límite con el municipio Centro Ha-
bana) las manzanas presentan otras características
morfológicas.
Esto ocurre específicamente en la calle O, desde 21
hasta 27; las calles P y Humboldt en toda su exten-
sión; la calle 25, desde Calzada de Infanta hasta
calle O y tramos de la calle 27, desde Calzada de
Infanta hasta calle J donde existe una tipología ur-
banística de transición, correspondiente con la zona
del 15 % de superficie descubierta bajo el régimen
de medianería y la trama urbana es más compacta.
2.3.4 Conexiones
Esta zona se destaca como sitio estructurador del
transporte a escala de la ciudad. Hoy el transporte
público interno se basa en una amplia pero insufi-
ciente red de metrobuses y ómnibus urbanos, que
conectan mediante las arterias principales los pun-
tos y centros más importantes de la ciudad.
Esta insuficiencia y mal funcionamiento de los siste-
mas de transporte público en general, ha traído con-
sigo un incremento de automóviles, generando con- Fig. 89. Plano de tipos de mazana.
flictos funcionales que agreden al medio ambiente,
al sistema vial, al espacio público y al entorno. La
vialidad del sector de La Rampa se encuentra influi-
da por las diferentes vías que lo recorren. Estas últi-
mas se clasifican en arterias principales, menores,
colectoras y locales.
39
2.3.4.1 Circulación Vehicular la rampa
situación
actual
Las arterias principalespermiten los movimientos
de tránsito a través del área de la ciudad que no se
permiten por vías expresas. Poseen de cuatro a seis
carrileras de 3.50 m y están dotadas de parterres y
aceras de 1.50 m como mínimo cada uno. Pueden-
poseer ciclovías de 2.25 m de ancho y son diseñadas
para velocidadesmoderadas de 70 a 79 Km/h, con Fig. 90.Plano de llenos y vacíos.
doble sentido de circulación de tránsito. Es el caso
de lasavenidas 23 y Malecón.
Las calles colectoras son aquellas que penetran en
la vecindad distribuyendo viajes o canalizándose ha-
cia las arterias principales o menores. Poseen hasta
cuatro carrileras desde 3.00 m a 3.50 m y la calzada
es de 6.00 m a 14.00 m de ancho. Poseen parterres
y aceras de 1.50 m como mínimo cada uno y son di-
señadas para velocidades medias y bajas de 50 a 59
Fig. 91. Imagen urbana de parte de La Rampa.
Km/h dentro de laszonas residenciales, comerciales
y otras. Es el caso de las calles L y 19.

Las vías locales o internas poseen hasta dos carri-

leras de 3.00 m a 3.50 m y la calzada es 6.00 m a
7.0m, con parterres y aceras de 1.5 m como mínimo
cada uno.Están diseñadas para los niveles más ba-
jos de velocidades de 30 a 49 Km/h y no seadmite el
transporte colectivo por ómnibus. Pueden calificarse
como callesresidenciales y comerciales. Ejemplo de
ello son las calles I, J, K, M, N, O, P, Hospital, Hum-
boldt, 21 y 25.

En esencia, el flujo vehicular se mantiene constante

Fig. 94. Concentraciones de personas en puntos de transportación.
durante todo el día y los niveles de tráfico se com-
portan distintamente en cuanto al flujo y el tipo de
vehículo. Las intersecciones identificadas como más
Fig. 92. Plano de los tipos de vía.
importantes son: 23-Infanta-Malecón, 23 y L, 23 y M.
De estas intersecciones todas están semaforizadas.

Las arterias más transitadas son: Calle 23, 25, L, 27

de Noviembre y J donde se concentran la mayor can-
tidad de servicios, coincidiendo con paradas de au-
tobuses. Sin embargo, las calles K y 27 presentan un 40
volumen de tráfico vehi-cular menor. la rampa
situación
actual
De esta forma, y a través del estudio y análisis rea-
lizado, se puede llegar a una primera conclusión
declarando a la zona como un área altamente tran-
sitada vehi¬cularmente, con grandes flujos hacia y
desde diferentes direcciones y con puntos de conflic-
to vehículo – vehículo.

Fig. 93. Plano de población flotante. Fig. 95. Circulación vehicular en La Rampa.

Fig. 96. Panorámica del eje 23. Alto volumen de tráfico en La Rampa.
2.3.4.2 Circulación Peatonal
La circulación peatonal del área está determinada
además de por sus residentes, por los trabajadores
de las entidades ubicadas en la misma, los pasean-
tes y turistas que son numerosos en algunos lugares,
además por personas que cruzan la zona o que ha-
cen cambios de rutas de transporte, ya que es con-
siderado un importante punto de intercambio o de
transbordo en la ciudad. Estas circulaciones hacen
diferenciar las zonas donde se acumulan la mayor
población flotante, evidenciándose a su vez, las
áreas de mayor circulación peatonal.
La zona cuenta con fases peatonales y cebras que
aunque son insuficientes para la protección y prio-
ridad del peatón, en los períodos de mayor circula-
ción peatonal se incrementan las demoras de la cir-
culación vehicular, produciéndose un gran conflicto
peatón-vehículo, que alcanza valores desfavorables.
Llegado a este punto podemos afirmar, que además
de que la zona representa una gran oportunidad de
comunicación y conexiones, determinada por su im-
portante sistema vial a escala sectorial y de ciudad,
también es víctima de un gran conflicto peatón-vehí-
culo, que se agudiza por la falta de señalética, fases
Fig. 97. Perfil urbano de La Rampa (tramo Malecón - calle J)
y pasos peatonales, rampas para discapacitados,
etc.
2.3.5 Perfil Urbano
En el sector de análisis la imagen urbana se carac-
teriza esencialmente por edificios de gran altura,
tanto de apartamentos, oficinas como alojamiento
hotelero pertenecientes al Movimiento Moderno.
La altura promedio es de 7 niveles, no obstante re-
saltan los edificios más altos, que pueden alcanzar
alturas desde 30 a 100 m, convirtiéndose en hitos
urbanos.
Las características físicas de la calle 23 en este sec-
tor y las propias construcciones han establecido un
perfil que varía con la presencia de edificaciones
que alcanzan entre seis y ocho niveles, lo que uni-
do al carácter de estas arterias, influye en que sean
las más densamente pobladas y transitadas.
La Rampa logra percibirse concierta coherencia vi-
sual, debido principalmente al diseño original de
las edificaciones, las alturas de puntal, los recur- 41
sos estilísticos basados en la sobriedad, el ritmo la rampa
situación
de vanos, aleros, quebrasoles, balcones, etc. actual
Pero a pesar de la continuidad espacial que la ca-
racteriza, el incumplimiento de las regulaciones
urbanas en los últimos años por parte de la pobla-
ción y de algunos organismos estatales, han aten-
tado contra ésta, evidenciándose la colocación de
marquesinas y elementos ajenos a la edificación,
la apropiación del espacio público y la colocación
de puntos de venta en kioscos sin el mínimo dise-
ño.

Según los criterios expresados en las Regulacio-

nes Urbanas del sector de análisisel crecimiento Fig. 100. Civil-Pública_ esquina de 23 y L.

en altura está permitido, y se regula a partir de los

seis niveles tomando como referente la tipología
del edificio torre característico de El Vedado mo-
derno, asumiendo sus atributos de esbeltez y la
horizontalidad de balcones y basamentos. Esto
resulta un elemento clave para realzarla imagen
urbana de la zonapor medio de proyectos más con-
temporáneos.

Fig. 98. Plano de altura de las edificaciones.

2.3.6 Tipologías Arquitectónicas Fig. 101. Civil-Pública_ calle 23.

En la zona la gama de tipologías arquitectónicas 42

no es tan variada como pudiera pensarse. Predo- la rampa
situación
minan las tipologías Civil-Pública y la Doméstica, actual
producto del marcado carácter residencial y de la
presencia de numerosos servicios. Aunque existen
las tipologías Industrial y Militar, pero concebidas
como formas improvisadas, que no llegan a cons-
tituir un referente de valor alguno (talleres, naves,
almacenes con cubiertas ligeras).

Fig. 102. Civil-Pública_ Calle N.

La civil-pública predomina a lo largo del eje 23,
que desde sus inicios ostenta funciones comercia-
les y de servicios de carácter terciario, la mayoría
a escala de ciudad. No es en vano que se conoce a
la zona como Centro Cultural Recreativo La Rampa,
además de área de centralidad a escala de ciudad
y polo turístico a la vez. La doméstica se ubica ma-
yormente en las vías de carácter local, reflejándo-
se tanto en viviendas unifamiliares como en edifi-
cios multifamiliares. Fig. 99. Plano de tipologías arquitectónicas.
Fig. 103. Doméstica_ Calle 21.
2.3.7 Usos de Suelo y Equipamiento Urbano

El área de estudio desde su surgimiento y por su vo-

cación evolucionó como centro a escala de ciudad.
Hasta hoy predomina la tipología civil-pública en la
zona, justificada por la presencia de grandes servicios
y la ocupación de suelo en planta baja principalmente
destinada a usos públicos de todo tipo.

Dentro de la infraestructura de equipamientos y ser-

vicios, la zona cuenta con gran variedad de funciones Fig. 106. Recepción del MINSAP (antigua tienda Indo-
china).
a escala de ciudad y de barrio, resumidas en gastro-
nomía, comercio, administración, educación, cultura,
comunicación, hotelería, aseguramiento, producción
y servicios básicos. Con predominio sobre todo de los
tres primeros, dejando a un lado el propósito original
de un carácter mayoritariamente cultural.

A pesar de que en la zona está creada una infraestruc-

tura para servicios, aún estos no son suficientes, ni
cumplen con las demandas y necesidades de la po- Fig. 104. Plano de uso de suelo.
blación, tanto la residente como la de paso. Otra pro-
blemática que debemos reflejar en cuanto a los ser-
vicios de la zona es que estos se han degradado y en 43
muchas ocasiones no responden a la sociedad actual. la rampa
situación
Por lo que constituye una necesidad urgente plantea- actual
da además por las regulaciones urbanas fortalecer el
nivel de los servicios y rescatar las funciones de equi-
pamiento y servicios, conteniendo su actual deterioro
y restringiendo los cambios de uso.
Fig. 107. Banco Exterior de Cuba (fachdas totalmente
Según las regulaciones específicas de la Zona de In- inexpresivas).

tensidad III, se encuentran prohibidas las funciones

de agricultura urbana, producción, almacenes y talle-
res (excepto artesanales y de artistas). Esta última se
produce en la zona, por tanto se incumplen las nor-
mativas.

Generalizando, uno de los problemas de mayor impor-

tancia es que la zona debido a sus servicios presenta
gran protagonismo, atrayendo a las personas durante
el día, mientras que en horas de la noche muy pocos
son los que prestan atención al público. Esta proble- Fig. 105. Plano de horario de uso de los servicios. Fig. 108. IACC (antiguo Centro Comercial La Rampa).
mática se agrava además, por el gran número de ser-
vicios estatales de oficinas y ministerios que recesan
en la tarde su actividad, y por la falta de divulgación y
programación de actividades que establezcan una re-
lación más directa entre los individuos, los servicios,
y por tanto, la arquitectura.

2.3.8 Situación Ambiental

En la zona no existen graves problemas de contamina-
ción ambiental debido a que el borde marítimo consti-
tuye uno de sus límites, por lo que se puede decir que
La Rampa constituye de manera general un ambiente
altamente cualificado. Sin embargo, la contaminación
de la zona más bien es producto de la alta confluen-
cia de vehículos, de transporte urbano que emite gran
cantidad de gases (CO2) a la atmósfera,
72
además de
producir altos niveles de ruido .
El sector de análisis no se encuentra afectado por las
penetraciones del mar, entre otros factores debido a
su condición de acentuada pendiente.La zona más
vulnerable en ese sentido es la avenida Malecón, que
pertenece a la Zona Primaria de riesgo en ese aspecto.
No obstante, el fondo edificado se encuentra afectado
por el aerosol marino.
2.3.8.1 Áreas verdes y espacios Públicos
Los espacios verdes que deben funcionar como el lu-
gar de encuentro y/o reunión, donde las personas son
el objeto protagónico de la sociedad, en este caso son
subutilizados por los residentes del barrio. Un deno-
minador común de la zona resulta la ineficiencia de
los mismos debido a la carencia de mobiliario urbano,
iluminación, limpieza y señalética. Igualmente, algu-
nos presentan problemas de accesibilidad, ya que
para una supuesta seguridad se encuentran cercados,
alterando así el concepto de área verde o espacio pú-
blico.
En la zona de análisis los grandes espacios públicos
y áreas verdes realmente escasean, con algunas ex-
Fig. 110. Parada de ómnibus con graves problemas de
equipamiento.
Fig. 111. Parada de ómnibus con ausencia total de
mobiliario.
Fig. 109. Plano de espacios públicos y áreas verdes.
cepciones como el micro parque El Quijote (23 y J) y el 44
área del borde costero del Malecón. Según los datos la rampa
situación
del uso de suelo, las áreas verdes y espacios públicos actual
ocupan aproximadamente un 22% del área total de
análisis. Dentro de las zonas verdes se incluyen los
solares yermos, u otros que han sido convertidos en Fig. 112. Puntos de transportación con ausencia total de
mobiliario.
parqueos provisionales y que corresponden a funcio-
nes que han sido sustituidas o edificios que se en-
cuentran en ruinas, siendo estos una oportunidad
que permite considerar planes futuros en cuanto al
completamiento del verde urbano de la zona.
Se puede concluir que la escasez de estos espacios
constituye un potencial y una gran oportunidad a te-
ner en cuenta para cualquier futura intervención. Don-
de deberá lograrse una articulación tal y como sucede
en el resto del eje 23 entre la red de espacios públicos Fig. 113. Punto de ETECSA sin mobiliario de bancos.
y los elementos del sistema verde de la trama, como 72. Fernández Lores, Yuliem e Ibelise Carraceo Contreras: “Estudio
de accesibilidad en espacios urbanos contenidos en Rutas Carac-
uno de los elementos que representan la esencia cul- terísticas del Centro Histórico de la Habana Vieja. Pautas de Dise-
ño”, Tesis de Diploma, La Habana, ISPJAE, Facultad de Arquitec-
tural de su desarrollo urbano. tura, 2010.19. Regulaciones Urbanísticas. El Vedado, Ed. Boloña y
Unión, La Habana, 2007.
2.3.9 Redes técnicas e infraestructura
Las redes e infraestructuras de la ciudad, y en par-
ticular las de la zona de estudio, han sido víctimas
del paso del tiempo, presentando un cierto índice
de deterioro, que se agrava por la falta de manteni-
miento y cuidado.
El Vedado está servido por el sistema Cuenca Sur,
Meireles Nuevo y Vento; respecto a los servicios
de alcantarillado sanitario y drenaje pluvial la zona
está conectadaal sistema central de alcantarillado,
cuya descarga exterior se efectúaen la Playa del Chi-
vo y casi todas las áreas poseen sistema de drenaje
pluvial.
El servicio energético se garantiza por las subesta-
ciones Tropical y Plaza, para una demanda de 54
MV y 41 MV respectivamente. El servicio de gas es
otorgado por la Planta no. 1 “Melones” para el gas
manufacturadoy los servicios de telefonía lo garanti-
za la central Vedado modernizada y la nuevacentral
telefónica de Plaza de la Revolución.
El transporte en la zona debe entenderse como un
sistema de rutas internas que confluyen y que proce-
den de otros municipios de la ciudad, por lo que una
de sus funciones principales es vincular este centro
con el resto de los subcentros de la capital, compor-
tándose como una zona de tránsito e intercambio
de rutas. Aquí concurren un total de 4 Ómnibus Ur-
banos y 6 Metrobuses, concentrándose sus paradas
en las inmediaciones de la manzana de Coppelia y
del Cine La Rampa.
Igualmente, existe una carencia de infraestructura
en cuanto a paradas de ómnibus, mobiliario urba-
no y parqueos de forma general. En el caso de las
paradas de ómnibus la inmensa mayoría carecen
de techos y asientos que permitan a los pasajeros
protegerse del sol y la lluvia. El equipamiento urba-
no al igual que en el resto de la ciudad es escaso,
sobre todo en lo que respecta a mobiliario urbano,
señalética y luminarias, cuestión que afecta mucho
la seguridad, comodidad y orientación ciudadana.
2.3.10 Época de construcción y estilos arquitec-
tónicos
Los estilos arquitectónicos presentes coexisten ar-
mónicamente ya que son edificaciones la mayoría del
Movimiento Moderno, producto de la tardía urbaniza-
ción de La Rampa. Dentro de la arquitectura moderna
de la década de 1940 y 1950 merecen ser destaca-
dos ejemplos paradigmáticos como:el ICRT, antiguo
Edificio Radiocentro (1945-1947) de Junco, Gastón y
Domínguez; la Facultad de Economía de La Habana,
antiguo Retiro Odontológico (1953) y el MINSAP, an-
tiguo Seguro Médico (1956-1958), ambos de Quinta-
na, Rubio y Pérez Beato; el Hotel Capri (1957) de José
Canavés Ugalde; el Habana Libre, antiguo Habana
Hilton (1958) proyectado por la firma Welton Beckett
and Associates, entre otros.Todos por sus proporcio-
nes y esbeltez constituyen remate de perspectivas
desde puntos muy lejanos de la zona.
Los materiales predominantes son el hormigón y la- 45
drillo con enlucido y sistemas estructurales de pór- la rampa
situación
ticos. El estado general de las edificaciones, oscila actual
entre regular y bueno, salvo algunaexcepción.Estas
edificaciones han sufrido transformaciones con los
años, debido a indisciplinas urbanísticas y sociales,
que desde el punto de vista técnico constructivo pue- Fig. 114. Equipamiento urbano de la zona.
den y deben ser reversibles. La presencia de estos
cambios por fortuna, no devalúa la zona como con-
junto.
De forma general, el estado técnico constructivo de
la zona se puede considerar como bueno, represen-
tando un 80% del total edificado, esto se debe a la
reciente construcción de las edificaciones del sector,
que aún no han requerido profundas intervenciones,
salvo algunas excepciones en los edificios altos o en
las manzanas de tipología compacta que limitan con
Centro Habana, degradados por el aerosol marítimo y
la falta de un mantenimiento continuado.
Fig. 115. Parada de ómnibus urbanos.
2.3.10.1 Grados de protección

En la zona de La Rampa se destacan los frentes de calle

de alto valor urbano, ya que reúnen edificios con Gra-
dos de Protección I y II, y otros que, más que por su valor
arquitectónico, adquieren significación por su carácter y
valor urbano y ambiental. Todos en conjunto represen-
tan la esencia cultural de un desarrollo urbano que se
gestó reproduciendo la imagen de diferentes períodos. Fig. 118. Cine Yara_ Grado de Protección I.

De la misma forma la zona posee en diversas esquinas

edificios que dotan de valores arquitectónicos y urbanís-
ticos a la intersección de ciertas vías.

Dentro de las obras clasificadas con Grado de Protección

I se encuentran:el ICRT; la UNAICC, antiguo Colegio de
Arquitectos (1944-1947) de Fernando de Zárraga y Ma-
rio Esquiroz; la Facultad de Economía de La Habana; el
Hotel Nacional de Cuba(1925-1930), el cine La Rampa, Fig. 119. Pabellón Cuba_ Grado de Protección I.
el Pabellón Cuba, el edificio sede del MINSAP, el Habana
Libre, y la heladería Coppelia (1966) de Mario Girona.
Fig. 116. Plano de edificaciones con grados de protección.
Entre las obras con Grado de Protección II se encuentran:
el MINCEX, el Ministerio del Trabajo y la Seguridad So-
cial, el Centro Internacional de Prensa, el Hotel Capri, el 46
Ministerio de Justicia, el Hotel Vedado, algunos edificios la rampa
situación
de viviendas como el de la esquina de 23 y L, de 23 y actual
J, entre otros.Estos elementos urbanos presentan gran
potencial, debido a su funcionamiento como puntos
dinamizadores y generadores de nuevas actividades y Fig. 120. Hotel Hababa Libre_ Grado de Protección I.
servicios que enriquecen la zona y a la vez la ciudad.

Las edificaciones con Grado de Protección I se definen

como: ‘’bienes de alto valor que deberán conservarse
íntegramente, y en los que se autorizarán y recomenda-
rán las actividades que fundamentalmente
73
tiendan a su
conservación y restauración’’ .

En otras palabras deben tenerse en cuenta ciertos crite-

rios para intervenir en ese tipo de edificaciones. Los más
importantes son: lograr la máxima conservación posible,
sin falsos históricos; mantener el significado cultural del
sitio; revelar los valores estéticos e históricos; revalori- Fig. 121. Retiro Médico_ Grado de Protección I.
zar el patrimonio sin desvirtuar su naturaleza; resaltar 73. Regulaciones Urbanísticas. El Vedado, Ed. Boloña y Unión, La
Fig. 117. Plano de estado de conservación de las edificaciones. Habana, 2007.
sus características; optimizar su aprovechamiento; res-
petar las características formales del edificio; realizar un
estudio histórico del inmueble y conservar sus relacio-
nes con el entorno.
2.3.11 Elementos demográficos y factor social
Los usuarios de la zona se componen por los estudian-
tes de la Universidad de La Habana, cuyos horarios regu-
lan los flujos de alumnos, profesores y demás personas
que la visitan durante la mañana y la tarde. Otros gru-
pos de usuarios lo conforman los propios residentes del
lugar,la población flotante que se traslada hacia el lugar
y la población extranjera, huéspedes de las instalacio-
nes hoteleras.
Los patrones de conducta y hábitos de todos estos
grupos son muy diversos, pero la dinámica urbana se
mantiene invariable durante todo el día. En las horas
noctur¬nas los jóvenes principalmente pasean por la
calle 23 y visitan los centros nocturnos y cines cercanos,
convirtiéndose estos en puntos de encuentro.
2.4 Manzana de estudio
Una vez observado, caracterizado y detallado todo
lo referente al sector de análisis, será imprescindi-
ble realizar estudios a un nuevo nivel. Si el sector
pertenecía a una escala urbana, en lo adelante se
abarcará una escala arquitectónica: la manzana
como unidad específica de estudio.
La manzana a tratar es en la que se encuentra el
enigmático Pabellón Cuba, enclavada en una zona
Fig. 123. Panorámica del eje 23 desde calle L hasta N.
de alta intensidad urbanística, con frentes de ca-
lle de granvalor urbano (calle 23 y calle N). Posee
dimensiones de 106m por las calles 23 y 21, y de
136m por M y N. Es un área de topografía irregular,
dada por el tipo de terreno de la zona.
La forma de la manzana es regular con tendencia
a la rectangularidad, su tipología semicompacta,
con presencia de pasillo lateral en todos los casos.
Actualmente la ocupan nueve edificaciones, de las
cuales cuatro pertenecen a funciones administrati-
vas (oficinas), tres son de viviendas (una de ellas
con derrumbes parciales), una constituye el centro
cultural Pabellón Cuba y la última funciona como
parqueo (originalmente albergaba la función de vi-
© www.googleearth.com
vienda con el edificio Alaska). De forma general, se
encuentra ocupada por diversas funciones de carác-
ter administrativo.
Fig. 122. Microlocalización de la manzana de estudio en La Rampa.
Por la calle 21 la función predominante es la de vi-
vienda; por la calle M, todas las edificaciones origi-
nalmente de viviendas, fueron convertidas a ofici-
nas del PCC, así mismo se ocupó el lote de esquina
como parqueo improvisado para dicha organizacion, 47
donde antes existía el edificio Alaska. Por la calle N la rampa
situación
y por la avenida 23 se encuentra el Pabellón Cuba, actual
que atraviesa al edificio de la sede de la Asociación
de Hermanos Saíz (AHS) y de oficinas de la radio.
La manzana de estudio al encontrarse enmarcada
por ciertas vías, posee invariables flujos de circu-
lación peatonal y vehicular, tanto en horario diurno
como nocturno. Sin embargo, dos de sus esquinas
son semaforizadas (23 y M, 23 y N) y con paso pea-
tonal a través de cebras, por lo que ocurren ocasio-
nalmente conflictos vehículo-peatón. Sin embargo,
la calle 21 tiene un carácter totalmente contrapues-
to.

Arterias:

Avenida 23: arteria de doble sentido de circulación

en toda su extensión, con aceras que oscilan entre
4.0 m y 4.5 m. Posee 20 m de ancho con sendas
para cada sentido de circulación de tres carrileras
cada una de 3.5 m. Las aceras oscilan entre 3.0 m y
4.5 m. La franja de jardín es pavimentada, con algu-
nos casos excepcionales, además la vegetación en
aceras es de tipo ponchada.

Calle M: vía de un solo sentido de circulación en el

tramo de análisis, con aceras de 2.0 m. El ancho de
la calle es de 6.5 m con dos sendas para circulación
y una de parqueo. La franja de jardín es variable (de
4.0 m a 6.0 m), no posee vegetación en aceras.
Fig. 124. Áreas exteriores de la manzana de estudio.
Vías locales (trazado vial de la zona residencial):
48
la rampa
situación
actual

Fig. 125. Plano de uso de suelo de la manzana.

Fig. 126. Secciones de vía de la manzana de estudio.

Calle N: vía de un solo sentido de circulación en el
tramo de análisis, con aceras que oscilan de 2.0
m a 4.5 m. El ancho de la calle es de 6.0 m con
dos carrileras para circulación vehicular y una de
parqueo. La franja de jardín es de 4.0 m y 5.0 m,
además no posee vegetación en aceras.

Calle 21: vía de un solo sentido de circulación en el

tramo de análisis, con aceras de 2.0 m a 2.5 m. El
ancho de calle es de 6.5 m, con dos carrileras para
circulación vehicular y dos de parqueo (2.5 m). La
franja de jardín es en una acera de 4.0 m y en otra
de 6.0 m, además no posee vegetación en aceras.

La manzana de estudio constituye un punto de

gran jerarquía respecto a las relaciones urbano-ar-
quitectónicas, ya que muestra una escala perfecta
mediante la arquitectura del Pabellón Cuba. Posee
un perfil urbano bastante variado en alturas y esti-
los, se combinan viviendas de estilo ecléctico, con
obras del Movimiento Moderno.
Fig. 127. Estudio de asoleamiento en la mazana a intervenir.
les. Por la calle N, la imagen de fachada del edificio
sede de las oficinas del Pabellón Cuba y de la radio, se
encuentra en deterioro. Y por la calle 23 se encuentra
el edificio a intervenir: el Pabellón Cuba.

Las tipologías arquitectónicas que posee la manza-
na son la civil-pública y la doméstica. Las edifica-
ciones de vivienda de la calle 21 han sufrido gran-
des transformaciones: divisiones en su interior,
añadidos de diferentes épocas y deterioros por la
falta de reparaciones y mantenimiento.
Mientras que por la calle M, se conservan mejor las
fachadas y portales originales, pero sólo porque el
cambio de uso que sufrió fue para oficinas estata-
La manzana se encuentra influenciada por los vientos
procedentes del mar, debido a su cercanía. El mobi- 49
liario urbano de la manzana es insuficiente, no exis- la rampa
situación
ten lugares de estancia, ni gráfica urbana o señalética actual
identitaria (sólo propaganda política), las luminarias
son insuficientes, la iluminación nocturna es muy po-
bre, producto de lo cual la zona desaprovecha su voca-
ción. Las áreas verdes características de la Zona de In-
tensidad Urbana III, se presentan en ponches, franjas
de jardín e interior de manzana poco visibles.

Fig. 128. Elevaciones de la manzana del Pabellón Cuba.

2.5 Pabellón Cuba
El Pabellón Cuba, obra del arquitecto Juan Campos
Almanza, se concibió como la sede de la exposición
cubana del más importante congreso internacional
a realizarse en Cuba después del triunfo de la Revo-
lución: elVII Congreso de la Unión Internacional de
Arquitectos (UIA) en 1963, cuyo tema era ´´La Arqui-
tectura en los Países en Desarrollo´´. Su proyectista
responsable fue el arquitecto Juan Campos Almanza.
Los cálculos estuvieron a cargo del ingeniero Maximi-
no Isoba; como proyectista responsable de la exposi-
ción estuvo Enrique Fuentes.
2.5.1 Descripción del edificio.
Técnicamente la obra se resolvió con un sistema de
columnas de hormigón armado de sección cruciforme
-que alcanzan hasta 14 m de altura- y que soportan
vigas de 26 m de luz y losas de hormigón aligerado,
ambas fundidas en plantas industriales. La sencillez
de la concepción y una gran eficiencia permitieron ter-
minar la obra en solo 72 días incluyendo el mobiliario
compuesto por butacas y bancos de listones de made-
74
ra que ya no están en su lugar de origen .
Fig. 129. Acceso principal del Pabellón Cuba.
Sus autores han declarado en más de una ocasión
que: “hemos tratado que fuese una arquitectura lim-
pia, sencilla, sobria, monumental, que no fuese sólo
funcionalismo, sino expresase la solución en función
de los materiales disponible. Hormigón, mármol, 75
si-
porex, jardinería, agua, vidrio y alguna madera” .
El edificio se erigió con el empleo de una técnica mix-
ta, las columnas se fundieron en el lugar y se dejaron
con el material a vista, mientras las vigas de hormigón
armado y el techo de hormigón ligero se prefabrica-
ron en plantas industriales. Las grandes vigas de 26
m fueron postensionadas en el lugar y pesan 26 ton.
Las alturas de las columnas van desde 7m hasta 14 m.
Un elemento que llama mucho la atención lo consti-
tuye que la retícula de Siporex en el techo (hormigón
ligero) forme parte del diseño. Justificado más que
nada por la necesaria integración entre los dos pabe-
llones, la obtención de efectos de iluminación y que
permitiera colgar ciertos elementos de las exposicio-
nes.
Esta obra posee una admirable solución techada pero 50
abierta, y con un fuerte componente de áreas verdes Fig. 131. Esquema de flujos de vehicular y peatonal. la rampa
situación
actual
Fig. 132. Acceso secundario por la esquina 21 y N.
74. Sanz Araujo, Lucía: Pabellón Cuba: sencillez, elegancia, cu-
banía. Colaboradora de Radio Rebelde: web@radiorebelde.icrt.
cu, 24 de Julio de 2009.
Fig. 130. Visuales hacia el Pabellón Cuba desde la calle N. 75. Idem.
 51
la rampa
situación
actual

Fig. 133. Archivo fotográfico del Pabellón Cuba.

por la calle 23. Su concepto se basó en utilizar los tres
espacios principales como una exposición resumida
de la historia del país, donde antes de entrar en el
edificio N era la etapa de formación de nuestra cultura
y el túnel del edificio se utilizaba para exhibir acen-
tuadamente la tétrica etapa de la tiranía batistiana.
Luego el triunfo de la Revolución se abría como una
explosión de luz76y alegría en el área mayor que abre
para la calle 21 .
El Pabellón Cuba conjuga gran sencillez formal con
elegante monumentalidad. Esta bra sin recurrir a ele-
mentos pintoresquistas hace referencia a la tradición
arquitectónica cubana según el arquitecto, mediante
los grandes aleros, las galerías, la carpintería de per-
sianas, la evocación del zaguán y la de los techos ar-
tesonados sugerida por la trama cuadricular de vigas
de soporte, y sobre todo por los portales, elemento
del que el edificio parece ser sublimación a escala ur-
bana.
Esta intención de respeto a la ciudad y de integración
a sus valores constituye la esencia de la inteligente
sobriedad del edificio, resuelto con un sistema de co-
lumnas cuya sección cruciforme refuerza la evocación
77
del minimalismo miesiano presente en la obra .
2.5.1.1 Orientación climática
El conjunto por la condición de funcionar como ar-
quitectura abierta, con fachadas sin cierres, sólo par-
ciales, es afectado por las condiciones climáticas del
medio (precipitaciones, asoleamiento, viento) impi-
diendo el desarrollo de muchas actividades (exposi-
ciones, charlas, reuniones, permanencia de obras por
la inseguridad, etc.).
2.5.2 Accesos
La edificación se encuentra en una zona de gran cen-
tralidad, su acceso principal se realiza por la calle 23
a través de una escalinata de 10 escalones. El Pabe-
llón Cuba posee también un acceso directo por la ca-
lle N, a través de otra escalera. Este último solamente
es usado para el servicio de cafetería improvisada que
hoy existe. Además hay otra entrada por el fondo de
la parcela que constituye el acceso de servicios por la
calle 21.
Los accesos de público presentan gran deterioro, de-
bido a la vegetación desordenanda y con crecimien-
to descontrolado, provocando que prácticamente se
pierda la imagen del edificio.
2.5.3 Principales Visuales
El edificio se destaca en el eje 23 por sus proporcio-
nes de fachada, y por la escala de portal público que
posee. En el interior del edificio se juega con las nive- 134. Esquema de análisis de la ventilación.
les de percepción desde la terraza una vez que se ac-
cede al nivel superior, sin embargo la descontrolada
vegetación impide las visuales directas hacia la gale-
ría principal donde se desarrolla la mayor parte de los
eventos. De la misma forma, por la calle N la exhube-
rante vegetación (aunque en fachada Noreste) impide
en gran medida la lectura del inmueble por el usuario.
52
2.5.4 Estado actual la rampa
situación
actual
Actualmente el edificio tiene algunos indicios de
deterioro, sin presentar daños graves, sin embargo,
sus problemas son esencialmente funcionales. En el
proyecto original no se previeron servicios sanitarios
públicos, de almacenamiento, ni la entrada de perso-
nas discapacitadas por las fuertes pendientes de su
acceso principal.
Esta obra debe ser sujeta a rehabilitación, porque de
no hacerse, el tiempo y los cambios de la sociedad lo
harán sufrir los procesos de la obsolescencia. Hoy las
necesidades ciudadanas van más allá de unn espa-
cio expositivo, imploran por un centro cultural para el
disfrute de todos, de carácter multidisciplinario e in-
novador que funcione como un espacio de encuentro
y no de tránsito. Fig. 135. Gráfico del flujo peatonal dentro del Pabellón Cuba.
77. Luis Rodríguez, Eduardo: La Arquitectura del Movimiento Mod-
erno. Selección de Obras del Registro Nacional. Docomomo_Cuba.
Ediciones Unión, 2011.
Entre los servicios que ofrece la institución se encuen-
tran: sala de cine, de navegación, un espacio dedica-
do al Salón de Mayo y una galería de exposiciones que
por sus dimensiones sólo se utiliza para la exposición
de piezas de pequeño formato; y además posee una
cafetería. Lo antes mencionado se encuentra en el
tercer nivel del edificio de N, que constituye parte del
pabellón Cuba desde su concepción en 1963.
Sin embargo, todos estos espacios se crearon sin un
análisis profundo de las consecuencias que acarrea-
ría. Esta serie de cambios ha ocasionado problemas
de funcionalidad y ambientales enalgunos de los lo-
cales, hoy el inmueble se encuentra de alguna manera
agredido y en función de esto es que se trabajará. Se
desea devolverle la imagen original en la medida que
la nueva intervención lo permita.
El Pabellón Cuba carece de servicios claves (no conce-
bidos en el proyecto original) como espacios para la
venta de libros, para las manifestaciones de las artes
escénicas y venta de objetos de arte o souvenirs (que
actualmente se realiza en quioscos improvisados).
Por lo tanto estos requerimientos han sido listados y
se ha hecho un Plan de Necesidades a satisfacer del
cliente, en este caso la Asociación de Hermanos Saíz
(AHS).
Este edificio de Grado de Protección I, se encuentra
en buen estado, tanto interior como exteriormente,
a pesar de verse afectado por su cercanía al mar, la
falta de mantenimiento y por el intenso uso que se le
ha dado a lo largo de su vida útil. El inmueble se ha
mantenido desarrollando la actividad para la que fue
concebido. Esta defectación que se ha realizado es de
carácter visual y por tanto posee diversas limitantes.
2.5.4.1 Cubierta
El edificio presenta cubierta plana, esta solución se
encuentra en las dos galerías, ambas con sistema de
enrajonado y soladura, propiciando que la cubierta
sea transitable. Existe pretil en todo el perímetro de
cada una de las galerías.
Se le aplicó pintura impermeable como solución adi-
cional, aunque por la falta de mantenimiento exhibe
en algunos puntos algún deterioro. Pero de manera
general, la rasilla que forma la soladura se conserva
en buen estado. El desagüe del edificio se produce
como se concibió en su proyecto original, por una es-
pecie de canales prefabricadas espaciadas a cierta
distancia por los lados de cada galería. Sobre cubierta
no existe ningún elemento adicional. Las principales
lesiones que se presentan son humedad, suciedad y Fig. 136. Solución de cubierta con desagues.
rasillas desgastadas.
2.5.4.2 Elementos Verticales
La estructura vertical de la edificación es de columnas
de hormigón armado de sección cruciforme. En el in-
terior del edificio de la calle N, existen muros diviso-
rios de diversos materiales que no son los originales y
que aparecen actualmente a raíz de sucesivas modifi-
caciones por las que ha transitado el inmueble en su
explotación como centro permanate para exposicio- 53
nes. Estos son de madera, panelería ligera y bloques la rampa
situación
de hormigón. actual
En general la estructura de columnas se conserva en
perfecto estado constructivo, y mantiene en todos los
casos el material original de construcción, sin moti-
vo ornamental alguno. Las principales lesiones son
algunas suciedades por encontrarse el material a vis-
ta, por lo que debe proderse a su limpieza total. Ade-
más de poseer desprendimientos ligeros producto de Fig. 137. Columnata de la galería de acceso al edificio.
agresiones mecánicas en la parte inferior de algunas
columnas.
2.5.4.3 Elementos Horizontales
La estructura horizontal de entrepiso y cubierta es de
hormigón armado. Esta última compuesta por vigas
de 26 m de luz y losas de hormigón aligerado, ambas
fundidas en plantas industriales. Los techos están
Fig. 138. Visuales hacia el Pabellón Cuba desde la calle N.
compuestos por una solución de casetonado, que se
encuentra en buen estado.
En la galería de entrada del edificio debido a la falta
de mantenimiento se han producido algunos despren-
dicmientos de pintura, dando un aspecto de suciedad
y deterioro. De forma general los techos presentan un
buen estado constructivo, pero no decorativo.
En el tercer nivel del edificio de N, perteneciente al
Pabellón Cuba, la solución de entrepiso es de losa de
hormigón armado y los techos presentan falso techo
integral, todos en perfecto estado debido a su recien-
te colocación. Las principales lesiones apreciadas en
los techos son las suciedades, los desprendimientos
de pintura y revestimientos y algunos abofamientos.
2.5.4.4 Pisos
El edificio presenta varios tipos de pisos en su com-
posición, que van desde terrazo gris y blanco, hasta
pisos de mármol gris claro. Los pisos de terrazo blan-
co se encuentran en los accesos principales, rampas
y escaleras, y de color gris claro en los pisos interiores
de las galerías del edificio. Los pisos de losas de már-
mol cuadradas de 870 mm de lado, se encuentran
en las zonas intermedias para conectar los espacios y
también hay escaleras de este material.
Dentro de los espacios más afectados se encuentran
los pisos de los accesos y escaleras con manchas y
porosidad su superficie. Otras lesiones encontradas
fueron suciedades, pequeñas grietas en algunas losas
de mármol y desgastes. El piso del actual área de ba-
ños públicos localizada al exterior, posee un mal esta-
do, ya que está constituido por losas cuadradas para
interior, de 330 mm de lado, color blanco soportando
las condiciones del ambieten exterior, gran desgaste,
grietas, roturas y falta de algunas piezas
2.5.4.5 Escaleras
Realmente las esaleras no son de grandes dimensio-
nes ni apreciable jerarquía, están situadas tanto al
exterior en los accesos como en el interior formando
un juego de alturas respetando la topografía. Las inte-
riores son de mármol gris muy claro y también de te-
rrazo blanco, ambas de igual material en huella y con-
trahuella de 300mm. Las hay de una y de dos ramas.
Sólo la de dos ramas posee brandas de aluminio, a
900mm de altura, las cuales se encuentran partidas
en los empates. Generalizando, los mayores proble-
mas son las manchas, suciedades y desgastes. Las
causas fundamentales que propician estas lesiones
son la antigüedad de la edificación, la falta de mante- Fig. 139. Escalera de acceso al segundo nivel.
nimiento y la caída al suelo de objetos pesados.
2.5.4.6 Revestimientos
Colores y materiales: el diseño del Pabellón se enfoca
en la sinceridad de los materiales, las superficies lisas
y los ángulos rectos. La carpintería fue sustituida por
otra de aluminio con imitación al color de la madera
(carpintería original). Predominan los colores grises
y el blanco, además del rojo en el túnel-galería que
Fig. 140. Escalera de una rama. Fig. 141. Detalle de unión de galería
túnel al piso. 54
atraviesa el edificio de N, no obstante, la percepción la rampa
situación
del conjunto es de deterioro y falta de mantenimiento. actual
Pintura: sobre la terminación exterior del edificio no
hay aplicada ninguna pintura, se mantiene con su tex-
tura original, o sea el material a vista aunque un poco
manchada por la polución y la humedad debido a la
agresividad del medio. En el interior sucede lo mismo
Fig. 142. Deterioro del piso de Fig. 143. Detalle de piso interior con
con las columnas, sin embargo, la pintura sobre los baños. exterior.
techos y casetonado no se encuentran en buen esta-
do.
Recubrimientos: no existe diversidad de recubrimien-
tos, los mismos están dados por láminas de madera
muy finas en la escalera de dos ramas y en muros exte-
riores existen algunos motivos. Sus principales lesio-
nes radican en la suciedad y falta de mantenimiento.
Fig. 144. Detalle deunió de piso interior con exterior.
2.5.4.7 Carpintería y herrería
El Pabellón Cuba por su carácter totalmente abierto,
posee poca carpintería. La original era madera y fue
sustituida por una de aluminio imitación al color de
la original, donde se combinan puertas de persianería
fija con paños de vidrio fijo con marquetería de alu-
minio. No esxisten puertas de acceso en el inmueble.
Por otra parte las zonas de servicio poseen puertas
de tablero de madera, bien conservadas. De manera
general, debido a que la presencia de carpintería es
escasa y la que exite fue recientemente sustituida,
esto no constituye ningún problema.
Herrería: la que hoy existe no es del proyecto original,
ya que la concepción del edificio era lo más abierta
posible, con la excepción de las imprescindibles ba-
randas del segundo nivel, que se encuentran partidas
en diversos puntos.
La mayoría de los espacios poseen rejas de seguridad
que no son originales del edificio y que en algunos ca-
sos mantienen un alto nivel de corrosión y de falta de
pintura. Entre las causas principales de estas lesiones
tenemos la falta de mantenimiento, la influencia del
aerosol marino y el intemperismo.
2.5.4.8 Instalaciones
La mayoría de las instalaciones del edificio si bien
no son muy antiguas, se encuentran al descubierto
en áreas exteriores susceptibles de sufrir daños y de
conspirar contra la est{etica del espacio. En general,
la mayoría de las instalaciones han sufrido transfor-
maciones debido al proceso de conformaci{on de
nuevos espacios, la mayoría temporales, pero estas,
a la par que resuelven el funcionamiento inmediato
de las mismas provocan otro tipo de problemas, ya
que en la mayoría de los casos quedan expuestas y
provocan afectaciones directas a la edificación.
Sistema de suministro de agua: el Sistema de Distri-
bución de agua está compuesto por una cisterna bajo
el nivel del suelo, electro-bomba y dos tanques de
asbestocemento en la cubierta de una caseta que fun-
ciona como garita de control del acceso de servicios.
Aunque se han realizado reparaciones recientes, el
sistema está funcionado con algunas deficiencias y
no con los caudales deseados, se considera que esto
se debe a la presencia de incrustaciones que han dis-
minuido la sección útil de las tuberías y por tanto su
capacidad. Además de encontrarse expuestas todas
las tuberías.
Fig. 145. Cableado de red eléctrica Fig. 148. Deterioro de los estanques.
expuesta.
Sistema de evacuación de aguas pluviales: sistema
compuesto por canaletas fijadas a los pretiles en cu-
bierta por donde se vierte gran volumen de agua de-
bido a sus proporciones y la cantidad de las mismas.
El agua vertida cae sobre el pavimento exterior directo
a numerosas rejillas colocadas exactamente bajo las
cajuelas, y van directo a la red exterior de drenaje plu-
vial.
Los problemas que se evidencian en la instalación
son: fugas de agua en los inodoros debido a imper-
fecciones en los herrajes y algunos de los muebles
sanitarios presentan desgaste. 55
Fig. 146. Carpintería existente (no Fig. 149. Deterioro del cableado del
original) casetonado. la rampa
situación
2.5.4.8.1 Electricidad actual
La alimentación se realiza a través de Pizarra General
de Distribución (PGD), de donde salen las canalizacio-
nes de forma aérea hacia los puntos de alimentación.
De cada una de las pizarras salen los circuitos que
alimentan las luminarias, tomacorrientes y/o equipos
específicos en cada uno de los locales. Fig. 147. Mal estado de los tomaco- Fig. 150. Deterioro de las rejillas de
rrientes. desagues.
El cableado en las columnas que se encuentran so-
bre el terreno se localiza soterrado, aunque muchas
de estas tuberías plásticas se encuentran expuestas.
También la red se extiende hacia todo el casetonado
de los techos, donde por la línea de columnas está
situada una canaleta de ancho aproximado 200mm,
que funciona como distribuidora. Casi la totalidad de
las columnas en su base posee dos conexiones (to-
macorrientes) para las exposiciones.
Fig. 151. Herrería no original del edificio.
Las pizarras se mantienen en buen estado, sin embar-
go muchas instalaciones se encuentran expuestas,
sobre todo en la galería del acceso principal. Excepto
algunos locales que se han reparado en fecha recien-
te, en el resto de los mismos los mecanismos (toma-
corrientes e interruptores), se encuentran en mal esta-
do, faltan mecanismos, tapas.
2.5.4.8.2 Climatización
En el edificio existen en la actualidad diferentes siste-
mas individuales de climatización de expansión direc-
ta, del tipo ventana y del tipo Splits. Esto se encuentra
en el tercer nivel del edificio de N, que forma parte del
complejo.
Entre los problemas están la ubicación inadecuada de
estos equipos, que en su gran mayoría se encuentran
en buen estado técnico y funcionando de forma sa-
tisfactoria. No obstante, todos los equipos de climati-
zación, provocan afectaciones directas a las fachadas
de la edificación, principalmente estéticas.
2.5.4.9 Estructura
Fachadas: muy poco deterioro, en paredes y en aleros,
presentando un estado de conservación muy bueno.
El estado de conservación del edificio es bueno.
2.5.4.10 Áreas Exteriores
En la obra se salvaron los desniveles de la topografía
accidentada mediante un recorrido peatonal sinuo-
so. La labor de paisajismo correspondió al arquitecto
Lorenzo Medrano, que planteó la solución como área
de exposiciones con dos pabellones, enlazados por
un túnel que atraviesa el edificio de la calle N por su
tercer piso. Uno de los pabellones se concibió como
jardín techado, mientras el otro como un volumen se-
miabierto. En el proyecto original se utilizó la flora cu-
bana en todas sus 78manifestaciones, se usaron cerca
de 200 variedades .
Actualmente la vegetación consiste en cheflera, uva
caleta, diversas especies de palma, arbustivas, y
otras especies de mediano y gran tamaño, sin ningún
criterio de diseño en cuanto a su ubicación, además
de su crecimiento desmedido y sin control ha ocasio-
nado daños en el pavimento circundante. La ilumina-
ción artificial es bastante deficiente, sólo se utiliza en
la noche a través de grandes reflectores ubicados en
la parte superior de algunas columnas.
Fig. 152. Quioskos de ARTEX que agreden el espacio.
2.5.4.11 Mobiliario
El mobiliario existente que ha sido insertado, pre-
senta baja calidad y pocos recursos de diseño. Ade-
más se han colocado sobre las áreas verdes diversos
quioscos para la venta rápida de alimentos.
2.5.4.12 Gráfica y señalética
Fig. 153. Único diseño de bancos del Pabellón Cuba.
Hoy no se puede hablar de una señalética, además
se encuentran conviviendo diferentes estilos gráficos
que no se corresponden con la identidad del Pabellón
Cuba.
56
2.6 Propuesta de acciones constructivas la rampa
situación
actual
Acciones emergentes
En la estrategia trazada para la intervención del in-
mueble se prioriza la eliminación de las causas que Fig. 154. Inclusión de una pérgola de madera si respeto al diseño original.
provocan humedad, filtraciones y salideros, que in-
cluye el cambio de las instalaciones técnicas, ya que
esta es un agente desencadenante de otras lesiones
importantes en la edificación. Para las propuestas de
acciones constructivas se asumen tres etapas.
Primera etapa: En esta etapa se desarrollan todas las
acciones de reparación de lesiones con soluciones
sencillas y de rápido cumplimiento y que no afecten o
dependan del movimiento de otros elementos.
Fig. 155. Ausencia total de señalética en el edificio.
78. Sanz Araujo, Lucía: Pabellón Cuba: sencillez, elegancia, cu-
banía. Colaboradora de Radio Rebelde: web@radiorebelde.icrt.
cu, 24 de Julio de 2009.
Segunda etapa: En esta etapa se realizan todas aque-
llas acciones que impliquen cambios espaciales, re-
paración de lesiones mas graves o ampliaciones.

Tercera etapa: En esta etapa se dará cumplimiento

a todas aquellas acciones que se vinculen con las
terminaciones, dígase reparaciones o colocación de
piso, pintura y, cambios en la carpintería, herrería o
elementos decorativos.

2.7 Síntesis de la Problemática

La síntesis de la problemática que brinda el sitio, dará
la posibilidad de establecer las ideas conceptuales y
lineamientos reguladores que regirán la propuesta de
intervención. La alta centralidad de la zona, determi-
nada por la confluencia de arterias de gran importan-
cia a nivel de ciudad, colectoras de flujos significan-
tes, tanto vehiculares como peatonales. La variedad
de servicios y funciones, su particularidad de centro,
así como el volumen de transporte hacen de ella una
zona de ocio recreo, intercambio y cruce.

La zona de La Rampa en la actualidad mantiene su 57

carácter de centro a nivel de ciudad, sin embargo el la rampa
situación
deterioro físico-funcional de sus edificaciones y ser- actual
vicios atentan contra esto. La zona y en esencial el
Pabellón Cuba, ameritan una intervención desde cri-
terios más contemporáneos, que se adapten a las
nuevas necesidades de la actual y futura ciudad.

El Pabellón Cuba como institución permanente de

exposiciones, que engloba además diversas activida-
des de ocio y recreo, debe convertirse en centro por
excelencia de las manifestaciones culturales y artísti-
cas en la zona de La Rampa.
2.8 Conclusiones parciales

Producto del análisis realizado a todas las escalas
desde la urbana hasta la arquitectónica, se han po-
dido fijar los problemas y potencialidades que serán
los determinantes para la posterior etapa de proyecto.
El valor histórico y la gran centralidad urbana del área
en el transcurso del tiempo, destacada por sus tradi-
ciones y la gran confluencia de visitantes, a pesar de
su decadencia, constituyen su principal ventaja. Esto
es producto de su estratégica ubicación, estrecha-
mente vinculada al borde costero del Malecón y las
importantes conexiones que establece con el resto de
la ciudad. Otro de los atractivos de La Rampa, es la
irregularidad de alturas y la flexibilidad de sus espa-
cios.
tonos); instauración del confort y configuración de
ambientes pro-arte (mobiliario actualizado en función
de sus cualidades plásticas, filtros de luz), etc.
El edificio a intervenir posee la ventaja de su populari-
dad, por lo que constituye una oprtunidad de conver-
tirse en Centro Cultural por excelencia de la ciudad.
La actualización de todas sus funciones y espacios,
incluso potenciar algunos crecimientos puede ser una
estrategia clave de intervención.

Sin embargo, sus problemas no son pocos: la inacce-

sisibilidad, la decadencia de funciones (sustituidas
por sedes estatales y ausencia de las culturales-re-
creativas), el desaprovechamiento de lotes y edifica-
ciones de esquina, el deterioro físico de fachadas, la
mala calidad de los espacios y servicios actuales, en- 58
tre otros son algunos de ellos. la rampa
situación
actual
El Pabellón Cuba adolece de problemas, esencial-
mente funcionales, que atentan contra el objetivo de
la institución como ente cultural de la zona. Su progra-
ma original, como tuvo logros también tuvo desacier-
tos. Hoy deben ser sumadas las funciones que falta-
ron y adecuar las existentes a las nuevas necesidades
de disfrute de hoy.

El edificio cuenta con las posibilidades tecnológicas

específicas de su tiempo, hoy insuficientes, por lo que
la actualización de estos recursos representaría una
gran parte de la inversión. La introducción de solucio-
nes debe responder a varios tipos de necesidades: ex-
presión objetiva del arte contemporáneo (sistemas de
proyección de video y audio, luminarias específicas);
soporte al trabajo de administración (aplicación de
las redes telefónicas para la conexión a Internet por
 La Habana - Junio 2012

Í







 >


3.1 Regenerando La Rampa
(...) El espacio urbano de producción cultural pue-
de actuar como un sitio de conservación
de latencias. Lo latente son aquellas realidades
potenciales que están allí, pero
que pueden ser difíciles de ver. Éstas necesitan una
renovada actitud de conservación,
que no mira la historia como una línea, sino como
yuxtaposición de realidades
y tiempos. Conservación no de lo que hay, sino de
lo que puede haber.
Diego Barajas
La propuesta de intervención se ha estructurado en
dos partes. La primera, con el objetivo de definir
la revitalización de imagen de La Rampa a escala
urbana, y en una segunda parte, se desarrolla el di-
seño conceptual para la rehabilitación del Pabellón
Cuba, de forma tal que se convierta en un centro di-
namizador de la cultura de la zona y para la ciudad.
3.1.1 Fundamento teórico-conceptual
La zona de La Rampa es reconocida como impor-
tante centro de ciudad, debido a que en los sesen-
ta se convirtió en escenario de funciones lúdicas,
recreativas y culturales, integradora de servicios
comerciales y equipamientos diversos a escala de
ciudad y de barrio, pero sobre todo generadora de
constantes relaciones e intercambios sociales.
Un poco de ese carácter se ha mantenido hasta
hoy, pero con el paso del tiempo se ha sumido en
decadencia. La pérdida de funciones y el deterioro
de las que quedan, motivan la propuesta del pre-
sente trabajo.
En la actualidad, a pesar de que esta área ha sido
objeto de estudio de diferentes investigaciones
urbanas y arquitectónicas, la mayoría de las inter-
venciones realizadas y el carácter propuesto para
ellas se sigue interpretando de forma fragmentada
o dividida. Por lo tanto el fundamento conceptual
de esta propuesta de intervención, está encamina-
do a lograr un eje con fuerte atractividad basada en
la cultura y el ocio.
Esto debe materializarse con el rescate de antiguos
servicios y espacios públicos animados, y la reha-
bilitación de la manzana del Pabellón Cuba como
complejo cultural recreativo. Donde esta última
funcione realmente como elemento dinamizador
e integrador, a escala urbana en la zona, y como
nexo conector entre las edificaciones preexistentes
de la propia manzana.
Estas actuaciones para llevarse a cabo, deberán
incluir ‘‘proyectos de acupuntura’’, que constitu- Fig. 156. Esquema conceptual de la manzana como punto diamizador de la
yen proyectos de pequeña escala pero con voca- zoa.
ción reproductiva y que además tienen caráter
experimental. Estas intervenciones se aplican en
muchos casos a programas de mejora del espacio
público y del paisaje urbano: acupuntura urbana
por sumatoria de proyectos mínimos. Mientras que
la segunda parte y más importante, se basa en la
creación de un gran espacio de encuentro, de ca-
rácter abierto y participativo. 59
un espacio
para el
3.2 Premisas de diseño encuentro
El diseño de la propuesta está fundamentado a
través de la recuperación de la centralidad cultural
del área, teniendo en cuenta sus potencialidades,
el rescate de los valores y funciones perdidas, la in-
corporación de nuevas funciones compatibles y el Fig. 157. Esquema conceptual de los espacios interconectados dentro de la
ordenamiento de sus espacios públicos. Para ello manzana y en explosión hacia el exterior.
se establecen algunas premisas específicas que
ayudarán a un mejor entendimiento.
- Generar un sistema ininterrumpido de espacios
públicos animados, que permitan la percepción
homogénea del espacio. Esto con el objetivo de
potenciar el carácter de centralidad de la zona a
escala de ciudad, con la respectiva mejora de la
calidad del ambiente urbano, las condiciones de
habitabilidad y el intercambio social.
- Recalificar la imagen urbana de la zona a través
de la ocupación de lotes vacíos con la incorpora-
ción de nuevas edificaciones y el crecimiento en
altura e incorporando soluciones en fachada que
reduzcan los costes de mantenimietno y de consu-
mo energético durante la vida útil del inmueble.
El objetivo fundamental de esta primera parte radi-
ca en recuperar la esencia perdida de la zona, que
hoy funciona sin un criterio unificado en cuanto a
diseño de identidad, mobiliario, áreas exteriores y
espacio público en general.
- Potenciar la manzana del Pabellón Cuba como un
complejo cultural recreativo a escala de ciudad,
con la presencia de áreas abiertas y la permeabili-
dad del espacio.
- Adaptar el Pabellón Cuba a las nuevas necesida-
des de recepción y disfrute de todo tipo de públi-
co, respetando la mesura y ligereza de su diseño
original.
- Retomar en los nuevos espacios la flexibilidad,
multifuncionalidad e interconexión característica
de los edificios de La Rampa, pero con criterios de
la contemporaneidad.
De esta forma la propuesta para la rehabilitación
del inmueble se convierte en la herramienta para
devolverle la centralidad urbana que un día tuvo la
zona, a nivel de ciudad.
3.2.1 Lineamientos regulatorios generales
Para detallar aún más la dimensión de la propues-
ta de intervención se relaciona una serie de linea-
mientos de carácter específico, que ordenan y re-
gulan las diferentes acciones que se desarrollarán.
1. Devolver e integrar la imagen urbana, partiendo
de que las intervenciones que se realicen en ella,
deben prever la escala de ciudad a la que respon-
de esta zona.2. Basar el proceso de (re)generación
de centralidad en la creación de proyectos de acu-
puntura, asociados a las áreas públicas que hoy
presentan mayores conflictos, resaltando las edifi-
caciones y funciones existentes más significativas.
3. Incorporar criterios de sostenibilidad que tengan
en cuenta la reducción de fuentes contaminantes.
4. Modificar los usos de suelos:
- Recuperar los originales en la mayor medida po-
sible, para contribuir a la memoria histórica de La
Rampa.
- Mezclar los diferentes servicios con las viviendas
para lograr que la zona tenga un uso continuo de-
terminado por sus habitantes y a la vez por sus vi-
sitantes.
- Definir en planta baja servicios que no ce-
sen su función al atardecer (comercios,
cafeterías,restaurantes, servicios especializados,
galerías de exposición de pequeño formato, etc.) 60
un espacio
para el
5. Lograr una contnuidad visual en este tramo del encuentro
eje 23, de forma tal que se entienda como un reco-
rrido directo lo mismo ‘‘Rampa arriba’’ que ‘‘Ram-
pa abajo’’.
6. Potenciar al Pabellón Cuba como nodo y punto
dinamizador de la cultura y el ocio en la zona, ade-
más de espacio de flujos e intercambio.
7. Realizar transformaciones en las edificaciones
de la manzana, en correspondencia con el pro-
grama asociado a un complejo cutural recreativo,
potenciando cambios de función, construcción de
nueva planta y devolución del aspecto original de
algunos inmuebles.
8. Incorporar el espacio de esquina de 23 y M (an-
tiguo edificio Alaska) al Pabellón Cuba potencián-
dolo como espacio de transición.

9. Proponer una unidad y coherencia visual con

respecto a los elementos que componen la man-
zana y la zona en general (pavimentos, mobiliario,
iluminación, señalética).

10. Tener en cuenta una dinámica promocional y

propagandística de las disímiles actividades que
se realizarán en el inmueble, apoyado de un ade-
cuado y atractivo trabajo de señalética, que ayude
a complementar su buen funcionamiento.

11. Darle al Pabellón Cuba un sentido más con-

temporáneo, donde la edificación se vea como una
extensión de la calle, del espacio público y como
proyección de sus elementos interiores.

12. Considerar al inmueble, catalogado como Gra-

do de Protección I, el máximo monumento a resal-
tar, pero con la inclusión de técnicas contemporá-
neas de diseño del espacio, y resaltando por sobre 61
todo el espacio de exposición. 158. Esquema de intervención a escala urbana en La Rampa. un espacio
para el
encuentro

3.3 Propuesta de intervención a escala urbana

Teniendo en cuenta los aspectos analizados con
anterioridad, se propone la (re)generación de la
centralidad cultural a través de diversos ‘‘proyec-
tosdinamizadores’’, encaminados a destacar algu-
nos puntos en el eje.La propuesta de intervención
para la recuperación de esta área, a la cual se le
reconoce su potencial como patrimonio urbano, se
estructura en cuatro partes:
1. Identificación del Problema
2. Diagnóstico
3. Escenario
4. Propuesta de intervención
cindible y concluye en una propuesta donde se
recalifica la imagen de esta zona consolidada. La
segunda parte del trabajo se centra en el Pabellón
Cuba en particular, influenciado directamente por
el discurso de las facahadas del contexto. De ahí la
importancia de solucionar a nivel de imagen urba-
na los espacios cercanos al inmueble.
La propuesta se concebirá para potenciar este cen-
tro polifuncional a escala de ciudad, como espacio
de congregación y encuentro ciudadano, donde
exista una red diversificada de servicios culturales,
comerciales y recreativos.

El análisis de estas etapas -las primeras tres fue- Las actuaciones físicas en la zona estarán encau-
ron analizadas en el capítulo anterior- es impres- sadas a generar espacios de convivencia y sociabi-
lidad, donde lo público sea usado, construido so-
cialmente según las necesidades de las personas,
donde habrá más actividad de recreo, de comercio,
… en definitiva de vida. Así mismo, se fusionarán
los recursos del estilo Moderno de las edificacio-
nes preexistentes con nuevas intervenciones con-
temporáneas, lo que evidenciará la mixtura y la
dinámica de dicho centro.

La estrategia de intervención para La Rampa par-

te de dos de los componentes fundamentales del
espacio público: los elementos constitutivos artifi-
ciales o construidos (plazas, plazoletas y parques)
y de los elementos complementarios (vegetación,
mobiliario urbano y señalización), además de in-
cluir algunas propuestas de imagen para la edifica-
ciones existentes.

Se rehabilitarán esencialmente dos puntos del

eje que funcionarán como áreas dinamizadoras.
Estos puntos que corresponden con los proyectos Fig. 159. Plan general.
de acupuntura son aquellos que actualmente pre-
sentan mayor deterioro en los servicios y fuciones.
Igualmente se recomienda que las vías convergen- 62
tes hacia la zona, sean dotadas de ciertos servicios un espacio
para el
especializados para reforzar la mixtura de funcio- encuentro
nes.

Para materializar el esquema de intervención será

necesario realizar un análisis por capas de algunos
de los temas que intervienen en el diseño urbano,
comparando situación actual con la propuesta.

3.3.1 Criterios medioambientales

Partiendo de la premisa de lograr que la zona de
estudio se comporte como un contenedor verde y
que a su vez forme parte de la red de espacios pú-
blicos a escala local se deben realizar intervencio-
nes como:

- Mantener y repoblar los espacios verdes en la Fig. 160. Plano de llenos y vacíos.
zona, sobre todo en su parte más cercana al bor-
de costero, que por la falta de mantenimiento y la
mala elección de las especies se encuentra casi
inexistente.

- Potenciar el uso de vegetación en cubierta y fa-

chada, para lograr la disminución de las tempera-
turas que entran a los locales de las edificaciones.

3.3.2 Mobiliario urbano

Los criterios de diseño del mobiliario propuesto

para La Rampa se fundamentan en la continuidad
de los espacios. La zona para ser identificada en
este sentido, debe incorporar en algunos puntos Fig. 161. Actual espacio de tránsito peatonal, acera del eje 23. Fig. 162. Propuesta para área de tránsito y estancia peatonal, acera del eje
nuevas áreas de descanso, con bancos, luminarias 23.

(a escala peatonal) y otros elementos que constitu-

yen el mobiliario urbano.

El carácter del mobiliario en la propuesta siempre

respeta la imagen urbana del entorno, incluso se
integra fácilmente por la ligereza, singularidad y
racionalidad de su diseño, además accesible para 63
todos. un espacio
para el
encuentro
Así mismo se propone el punto de información o
‘‘Cartelera Cultural’’, en sustitución de quioskos al Fig. 163. Actual espacio de tránsito peatonal y punto de transportación. Fig. 164. Propuesta para espacio de tránsito peatonal con la inclusión de un
costado de espacios con gran tránsito de personas punto de información y señalética urbana.

como las paradas. Y que además constituya un hito

en la circulación del peatón,haciendo más accesi- ha recibido mantenimiento en algunos años. La so-
ble la cultura en la zona, y que todos sean informa- lución propuesta es darle mantenimiento y algunas
dos por servicios de calidad especializados como reparaciones a los soportes de este tipo para que
este, que hoy aquí no existen. funcionen como informacionales y de publicidad.

3.3.3 Gráfica urbana Además se instalarán murales de escala diferen-

La gráfica por su parte, aunque hoy sólo referida a
contenidos políticos y no informacionales, se pro-
pone con un carácter distintivo, según el lugar don-
de se ubique y la escala. Los remates de muchos
edificios en la zona poseen la infraestructura metá-
lica para tal fin, pero se encuentra deteriorada y no
ciada con obras de la cultura cubana para reforzar
la ientidad del lugar y mostrar a los visitantes el
arte nacional. De forma general, deberá incorporar-
se la cultura al diseño urbano, como se hizo en los
sesenta con los mosaicos de La Rampa.
3.4 Proyectos dinamizadores

Los edififcios existentes constituyen la trama urbana,

definen su imagen y carácter, y representan el mayor
potencial de actuaciones dentro de este modelo urba-
no consolidado. En dos puntos del eje de análisis se
propone un cambio de imagen para sus servicios, que
como se ha dicho antes, carecen de calidad de diseño
y por tanto la imagen de la zona es pobre al respecto.

El primer punto corresponde al tramo de la calle 23 en-

tre Calzada de Infanta y cale P. Este punto constituye
uno de los accesos a La Rampa desde la ciudad anti-
Fig.166. Propuesta de equipamiento urbano para espacio de jardín pavi-
gua, por lo que debe tratarse con carácter diferenciado. Fig. 165. Actual espacio de jardín pavimentado en la esquina de 23 y O.
mentado en la esquina de 23 y O.
Es un área que no tiene el tratamiento adecuado en
cuanto a infraestructura de servicios, calidad y funcio-
namiento de espacios públicos, por lo que no se evi-
dencia la permanencia y el disfrute de las personas.

Por tanto, el objetivo es lograr que en ella se produz-

ca un intercambio de funciones y de personas, que le
aporten un uso adecuado y merecedor de las potencia-
lidades que nos brinda esta área. La propuesta deberá
proveerla de funciones que incrementen el flujo pea- 64
tonal, aprovechando las brisas costeras y las visuales un espacio
para el
directas hacia el mar. encuentro

En la actualidad a pesar de albergar importantes fun-

ciones como son el Ministerio del Comercio Exterior
(MINCEX), el Banco Exterior de Cuba (BEC) y el Instituto
de Aeronáutica Civil de Cuba (IACC), esta parte del eje
no posee prácticamente tránsito de personas. El suelo
está ocupado por instituciones que brindan servicios
sólo a una minoría de la población y además recesa al
atardecer, por lo que se evidencia una subutilización y
cierto deterioro del espacio público.
En cuanto a funciones:
- La incorporación de funciones comerciales y exposi-
tivas, que se vuelquen a los espacios públicos con de-
pendencias gastronómicas.
Fig. 167. Actual espacio de de cafetería en la calle M. Fig. 168. Propuesta de espacio de cafetería en la calle M.
- Incluir servicios de recreación durante la noche como
bares, centros nocturnos, etc.
En este caso se propone el cambio de función del ac-
tual Instituto de la Aeronáutica Civil de Cuba, a su fun-
ción original. Este inmueble constituye una pieza inva-
luable que pocos conocen, ya que fue el primer centro
comercial de la zona. Es de extraordinaria importancia
devolverle su función original, debido tanto a su rele-
vancia histórica, como a que posee la infraestructura
necesaria para ser aprovechada. Además la función ac-
tual recesa como tantas otras en la zona al atardecer, y
no concuerda con las actividades de cultura, comercio,
recreación y ocio de La Rampa.

En este sentido el edificio del frente, el Ministerio del

Comercio Exterior, aunque desde su creación albergara
la función de oficinas, en planta baja no ocurre abso-
lutamente nada. En la totalidad de los casos los vanos
se encuentran totalmente cerrados, dando la espalda
a la acera y afectando el concepto de permeabilidad,
flexibilidad y transparencia de los espacios en la zona.
Por tanto se propone, albergar en planta baja y aprove-
chando la galería que se conforma, la función comer-
cial o de otro tipo que mantenga la animación de esta
Fig. 169. Actual Instituto de la Aeronáutica Civil de Cuba. Fig. 170. Propuesta de cambio de función del IACC a Centro Comercial.
parte en la noche.

El espacio en este tramo deberá ser a la vez lugar y

trayecto, oferta material y simbología, poseedor de
comercios dotados de cierta especialización, confor-
mando espacios colectivos abiertos. De este modo la
arquitectura propiciará elementos cualificantes y dife-
renciadores. El contacto con el mar le brindará a esta
zona un alto valor, siendo visitados frecuentemente, ya
sea por los ciudadanos residentes como por los visi-
tantes. 65
un espacio
para el
En los lugares más concurridos de la zona de estudio, encuentro
como las paradas de ómnibus, donde hoy existen di-
versas construcciones ligeras, sin calidad de diseño
alguna, se propone la ubicación de Puntos de Infor-
mación, para propagandizar los programas culturales y
recreativos, y otras actividades que estarán ocurriendo
en La Rampa.

3.5 Complejo Cultural Pabellón Cuba

La propuesta se centra en una intervención más
detallada. Esta constituye el segundo proyecto de
acupuntura en la zona. Es objetivo de la propuesta,
que la manzana del Pabellón Cuba funcione como
núcleo generador de centralidad y condensador de
funciones a gran escala. Su importancia radica en
las potencialidades de su localización, escala mo-
numental, valores tangibles e intangibles, popula-
Fig. 171. Actual Banco Exterior de Cuba. Fig. 172. Propuesta de cambio de función en planta baja a servicios comer-
ciales y recreativos.
ridad y grado de uso desde su puesta en funciona-
miento.
Hoy por hoy, con un área de aproximadamente 1.4
ha, la manzana de forma rectangular, carece de fun-
ciones generadoras de centralidad. Posee vivendas transitables con niveles de percepción y visuales
por la calle 21, sedes de instituciones estatales por amplias de la plaza central. Espacio que concentra
la calle M, oficinas de la radio por la calle N, además monumentalidad, multifuncionalidad, intercambio,
de encontrarse el lote de esquina de 23 y M vacío flujos, encuentro y expresión volumétrica contem-
(parqueo temporal). El resto de la manzana está poránea.
ocupado por el Pabellón Cuba, con un área actual
aproximada de 6880 m2 y en la propuesta se incre- 3.5.1 La ampliación
menta hasta 10485m2 ya como complejo cultural
que acogerá nuevos espacios. Se pretende mantener una línea de respeto absolu-
to a las pautas marcadas por el diseño original del
Fig. 174. Gráfico que muestra la flexibilidad de espacios para las diversas
El buen estado en que se encuentra la estructura ori- pabellón, con la inclusión de un café en su acceso funciones.
ginal del inmueble permite la aceptación de solucio-
nes y la experimentación formal y conceptual, esta
vez desde el contraste o contraposición de cánones
modernistas y contemporáneos para conformar un
gran complejo cultural recreativo. La solidez y sen-
cillez del diseño original aportan un alto grado de
confiabilidad para el sostenimiento de la propuesta.

Otro elemento que favorece la nueva función es la

excelente relación interior-exterior, que tiene cabi-
da sobre todo en la producción artística más actual.
También para la disposición de talleres, actividades
teóricas o de otra índole, la presencia de jardinería 66
a vista, áreas abiertas y la permeabilidad es agra- un espacio
para el
decida por su efecto de relajación, libertad y natu- encuentro
ralidad.

De estructura abierta, la propuesta posee generosos

espacios interiores comunicados directamente con
espacios exteriores, consiguiendo un equilibrio ar-
tístico entre paisaje y construcción arquitectónica.

La herramienta teórico conceptual de esta inter- Fig. 175. Estrategia de interconexión entre los espacios.
vención constituye la conexión entre los diversos
espacios de la manzana. Conexión que está dada
por suforma, desdoblándose unos sobre otros, aca-
riciando las formas rectas del Pabellón Cuba e inser-
tándose por absoluto contraste en el contexto.

A través de un eje central vertebrador, se vinculan

espacios de diversas funciones en distintos nive-
les, creándose un juego de alturas y plataformas Fig. 173. Gráfico que muestra la conexión de espacios en la manzana.
principal por la calle 23, un espacio sobre la cubier-
ta de la galería posterior que funcionará como alqui-
lable para eventos de recepción al aire libre, y ade-
más se rescata la función de cafetería en la esquina
de la parcela que da a N y 21, sólo que esta vez bajo
el casetonado de la galería posterior.

La nueva construcción se ha planteado como una

inserción que responda a diversos programas y ac-
tividades, al mismo tiempo si es necesario. Todos
los espacios se disponen de forma sincera, abierta
e interconectados unos con otros.

El criterio vertebrador fue el de crear nuevos espa-

Fig. 176. Estrategia de Intervención en la manzana..
cios para funciones diferentes, donde sea posible
realizar lo mismo actividades expositivas como de
ocio y recreación. Esto supone una escasa decora-
ción para no competir con la función en cada caso.
La sinceridad de materiales, su expresión a vista, el
empleo de superficies y formas puras y elementales, Fig. 178. Maqueta de la propuesta desde calle 23.
la flexibilidad, la posibilidad de accesibilidad cultu-
ral y la multitud de usuarios para los que se ha dise-
ñado constituyen el espíritu de la propuesta.
67
La ampliación comprende un salón de eventos flexi- un espacio
para el
ble, que se puede convertir en tres salas indepen- encuentro
dientes, un núcleo de servicios sanitarios públicos,
una edificación de almacenamiento con oficinas
y un auditorio. Además se icluye la adecuación de
dos edificios preexistentes cuya intervención radi-
ca en el cambio de uso, de oficinas de instituciones
gubernamentales a diversas funciones relacionadas
con el arte, ocio y la cultura. Los servicios que alber-
garán son: centro de información, talleres artísticos,
librería, oficinas de instituciones culturales y sala de
navegación.

Como elemento básico se emplea la multifuncionali-

dad, donde se mezclan oferta cultural convencional
(centro de exposiciones, espectáculos) con espa-
cios interactivos y de creatividad, talleres de forma-
ción y comercios. La intervención se concibió para Fig. 177. Plano uso de suelo propuesto.
atraer nuevos públicos, facilitando el acceso de fa-
milias enteras, niños, gente mayor, usuarios no ha-
bituales del consumo cultural. Además se retoman
en la manzana puntos atractivos como terrazas con
área de mesas y un café.

La plantación de palmeras, la utilización de baldo-

sas de hormigón coloreado y la repetición del meca-
nismo modular con diferencia de alturas en el pavi-
mento, inspirado en las búsquedas minimalistas,
son suficientes para generar vida ciudadana.

El impacto sobre el entorno es decisivo, con la co-

rrespondiente mejora de los servicios públicos y
de la seguridad, de aparición y modernización de
actividades, logrará la sensibilización de una par-
te de la población residente a la oferta cultural. La
concepción de estos espacios totalmente abiertos y
participativos, constituye la mejor manera de crear
ambientes seguros.

3.5.2 Los espacios

Áreas exteriores 68
En la manzana actualmente las áreas verdes ocupan un un espacio
para el
38% del total de la misma. Las integran las franjas de encuentro
jardín de las viviendas e instituciones y el Pabellón Cuba.
En la propuesta se maneja el criterio de mantener dicha

Fig. 179. Maqueta de la propuesta desde calle 21.. Fig. 180. Elevaciones propuestas.
cifra, e incluso lograr u incremento sobre la misma. El
empleo de pavimentos permeables con junta verde,
cubierta verde en el basamento de uso público, la ubi-
cación en ponches alternados con grandes espacios de
jardín fundamentan la propuesta de las áreas exteriores
de la manzana. Esta alcanza un 40%, incrementándose
en un 2% respecto a la cifra existente actualmente.

E la propuesta se decide el empleo de especies de pal-

ma mayormente. Esto coincide con la vegetación que
existe en la zona, lo que evidencia que a pesar de la fal-
ta de mantenimiento resisten de forma satisfactoria las
condiciones climáticas severas de La Rampa. Los crite-
rios de su utilización son: realce de los accesos, lineali-
dad, facilidad de recorridos, raíces poco profundas, fácil
adaptación, ciclio de vida perenne y agradable estética.
Las especies propuestas son: Pandanus_utilis, Livisto-
na_merrillii, Chamaerops_humilis y Rhapis_excelsa (de
izquierda a derecha). Estas son ubicadas en los diferetes
espacios exteriores tratados como plazas.

69
un espacio
para el
Fig. 181. Comparación entre las áreas exteriores existentes (izquierda) y las propuestas (derecha). encuentro

Fig. 182. Especies de palmas propuestas.

Acceso por esquina 23 y M
La demanda social por edificios más sostenibles efi-
cientes energénicamente, ha resultado en una ten-
dencia en el sector constructivo para las edificaciones
existentes.
En la actualidad, gran parte de la ciudad presenta de-
ficiencias energéticas que afectan la calidad de vida
de sus ciudadanos, a la vez que disparan el consumo
energético asociado fundamentalmente a la climati-
zación. Esto lleva a plantear acciones de rehabilita-
ción urbana como alternativas de mejora.
Fig. 183. Plaza de acceso al complejo cultural por la esquina de 23 y M.
Según diversos estudios, existe una relación directa
entre el incremento de la temperatura del aire en las
ciudades y los flujos de calor generados por la ma-
quinaria de acondicionamiento de los espacios, el
transporte, etc. de las ciudades. Estos factores son
los responsables directos del efecto ‘‘isla de calor’’ en
el entorno urbano, fenómeno derivado a su vez de los
cambios térmicos en la superficie de los materiales.
La aplicación de la vegetación en la envolvente del
edificio se fundamenta en la concepción del elemento
vegetal como un material vivo, cuyo comportamiento
70
un espacio
para el
encuentro
Fig. 184. Plantas por niveles del Sector 1.
constituye una herramienta eficaz para combatir la
problemática citada.

En relación a esto se propone para el basamento una

contundente volumetría de hormigón a vista, lo que
además de suponer un acierto para un espacio públi-
co de elevado tránsito peatonal e intensidad de uso,
(terminaciones duras), se logra suavizar su aspecto
por la vegetación de la plaza y por la concepción de
una cubierta jardín transitable.

El basamento dialoga con el medio urbano y se abre

a las circulaciones, de modo que la mitad se destina
a vestíbulo del edificio torre (de alquiler de oficinas) y
la otra mitad a una galería de tiendas de artículos de
arte y souvenirs. Estos espacios se desarrollan en un
único nivel.

En este caso el proyecto apuesta por dos elementos

de relación urbana-arquitectónico. Uno de ellos, el
acceso de esquina, que interactúa con el peatón me-
diante la sensación de movimiento de su pavimento, Fig. 185. Vista superior del basamento del edificio de oficinas en 23 y M, como espacio público transitable.
convirtiéndose en potencial plaza pública. Esta última
71
un espacio
para el
encuentro

Fig. 186. Fotomontaje de la propuesta para el acceso de 23 y M en el entorno.

será tratada como espacio de transición, relaciona es-
pacial y visualmente la calle con el edificio. En esta
solución se aprecia gran parte de la fuerza del proyec-
to, el volumen estricto del basamento tratado como
espacio público, unido a la diversidad de alturas y ni-
veles de percepción.

El otro elemento de relación urbana es la configura-

ción espacial de fachada del edificio de nueva planta,
respetando la altura de puntal del Pabellón Cuba. Este
espacio se ha resuelto simplemente como un vacío,
en el cual se emplea cubierta verde, con pavimento
transitable para configurar espacio peatonal con otros
niveles de percepción de la zona.

De forma general, se puede decir que este edificio

permite el uso de su basamento como espacio pú-
blico, de diálogo y encuentro ciudadano, además de
propiciar las visuales directas hacia la columnata del
Pabellón Cuba.

También la propuesta de nueva planta del basamen- Fig. 187. Espacio de esquina propuesto para 23 y M.
to en la esquina de 23 y M, constituye un espacio de
transición, abierto al entorno, sin control de acceso 72
pero articulado con el equipamiento cultural, entre la un espacio
para el
galería comercial y el espacio público viario, de forma encuentro
tal que permite el ingreso casi imperceptible a otros
espacios.

Fig. 188. Plaza de acceso de 23 y M.

Auditorio

La integración urbana de este edificio se concibió a

manera de contraste, sin embargo, las proporciones
de las fachadas del perfil fueron estudiadas y reinter-
pretadas con formas contemporáneas. El acceso prin-
cipal enmarca las alturas de las edificaciones del con-
texto con un entramado de elementos lineales, con el
fin de interesar al usuario y destacar al edificio.

El auditorio comparte escenario con el espacio de la

plaza central, característico de los teatros contempo-
ráneos.Los camerinos y demás espacios de servicios
se desarrollan al costado de escenario, ya que este
tiene la peculiaridad de funcionar lo mismo para la
plaza pública del Pabellón Cuba que para el audito-
rio en sí, incluso si el evento es de gran envergadura
para ambos a la vez. Los espacios de jardín y portal
se disponen como espacio único, donde se realia la
compra de boletos de. El auditorio posee capacidad
para 390 personas, repartidas en dos niveles.

73
un espacio
para el
encuentro

Fig. 189. Referencia visual para el auditorio. Teatro, por Mecanoo. Fig. 190.Plano en plata del Sector 2.
Sala multiuso
Se concibió de forma tal que pueda albergar diversas
funciones, diseñada con gran permeabilidad para ob-
tener mayor relación con el espacio exterior a través
de una fachada móvil, que posibilita subdiviciones
dentro del propio espacio. Además, estos parametos
constituyen soportes a de la exposición en curso. Su
cubierta es transitable, conectando diferentes es-
pacios. La estrcutura por la cual es soportada es de
postes y tensores, buscando la mayor flexibilidad es-
pacial.
Fig. 191. Plaza de acceso de 23 y M, con soportes para divisioes y gráfica a la
vez.
Fig. 192. Detalle de división con rueda de rodillo simple.
Servicios sanitarios públicos
Son concebidos debido a que en el programa original
del Pabellón Cuba no existían. A pesar de su ubica-
ción en la parte central de la manzana, no es de notar,
ya que se conforma bajo una gran rampa transitable
que luego conforma las cubiertas de otros espacios
propuestos. Las termiaciones interiores son a vista,
siguiendo el lenguaje de la obra original. E l mobilia-
rio sanitario se concibe de acero ioxidable debido a la
intensidad de uso y facilidad de matenimiento.
Fig. 193. Referencia visual del baño público, Pabellones Públicos, Rafael
Iglesias, 2003.
Fig. 194. Imagen volumétrica de los servicios sanitarios públicos.
Bloque administrativo
Ubicado en el acceso de servicios por la calle 21, tam-
bién funciona como espacio de almacenamiento y
recepción de equipamiento para las exposiciones. Su
concepción se fundameta en la necesidad de un espa-
cio de almaceamieto y de oficinas propias del persoal
del inmueble, que no se contemplaba en el programa
original del Pabelló Cuba. Se itegra por analogía a la
línea de fachada por la calle 21, con presencia de por-
tal privado.
74
un espacio
para el
encuentro
Fig. 195. Referencia visual de oficinas de un taller de arquitectura.
Escenario

Volumétricamente se resuelve como una gran cinta

que se doble y desdobla formando además la sala de
eventos flexible y el sector de baños públicos. Conec-
tor de la plaza central y el auditorio, pudiendo encon-
trarse presente mayor cantidad de personas para una
misma puesta en escena.

Cafetería

Se encuentra bajo el casetonado del Pabellón Cuba,

las visuales desde esta son interesantes, ya que se
aprecian diversos edificios del entorno cuyo estilo y
gracia se mantienen hasta hoy. El mobiliario es de
acero inoxidable por econtrarse en el exterior, y su
servicio se extenderá hasta el horario nocturno. Como
elemeto separador entre la cafetería y el área de ex-
posiciones se encuentra el estanque, que se decide
matener del proyecto original. El servicio será de co-
modas ligeras, ya que su área de preperació es muy
Fig. 196. Plano en planta del sector 3.
pequeña.

75
un espacio
para el
encuentro

Fig. 197.Fotomontaje de la cafetería ubicada con frente a la calle 21. Fig. 198.Mobiliario propuesti para la cafetería.
Plaza en esquina 21 y N

Se abre el espacio hacia la esquina, retomando las

visuales del proyecto original, cuyos recursos de di-
seño fueron una gran escalinata que se convierte a la
vez en mobiliario.

La vegetación sigue un ritmo de ponches de forma re-

gular, respetando las circulaciones desde que se ac-
cede por la escalinata hasta entrar al pabellón. En el
centro, dejando espacio para las obras de arte se por-
pone vegetación (palmácea) de cierta altura, mientras
que en los bordes se sitúa otra de menor altura para
delimitar el espacio y mantener las visuales desde y
hacia la exposición.

Totalmente permeable y en relación directa con la

plaza se concibió el espacio de cafetería, en la zona
Fig. 199. Situación actual de la esquina de 21 y N.
trasera del inmueble (que actualmente está ocupa-
da por quioskos). El mobiliario de la plaza consta de
papeleras metálicas y bancos que asemejan piedras
dispersadas por el espacio para evitar competir con la
exposición en curso.
76
El pavimento será de hormigón (antideslizante), si- un espacio
para el
guiendo la estética de los materiales a vista de la obra encuentro
en rehabilitación. Lo mismo ocurre con los bancos. Se
decidió mantener elementos originales del Pabellón
Cuba como el estanque, los elementos que funcionan
como puentes a pequeña escala, la carpintería (no es
la original pero posee idénticas proporciones), las ter-
minaciones, entre otros.

Fig. 200. Vistas de la propuesta para la plaza en esquia de 21 y N.

 77
un espacio
para el
encuentro

Fig. 201. Vistas de la propuesta para la plaza en esquia de 21 y N.

Acceso principal

En el acceso principal no se generaron grandes cam-

bios, debido a que se decidió mantener en la ma-
yor medida posible la imagen original del Pabellón
Cuba: el rito de la columnata, el material a vista, la
restauraci{on de la vegetaci{on hoy tan depauperada,
los pisos de terrazo blanco y mármol gris, y los recu-
brimientos de madera en la escalera hacia el segundo
nivel.

La intervención se basa en la inserción de una pla-

taforma a la que se ingresa seguida de la escalinata
desde la acera, la que cumplirá la función de Café
para los usuarios que aunque no deseen entrar a la
exposición puedan disfrutar de un espacio más en el
eje de disfrute y relajación. El área de servicio será de
carácter ligero y reversible, asemejando una obra de
arte más dentro del inmueble.

78
un espacio
para el
encuentro

Fig. 202. Plano en planta del Sector 4. Fig. 203. Vista de la propuesta para el acceso principal.
El mobiliario de gran sencillez formal y baja altura
para que funciones como un recibidor más bien que
como cafetería común. Esta plataforma se conecta
con la original mediante un puente muy similar a los
de la galería de exposiciones posterior del inmueble.
El criterio respecto a la vegetación fue el de mantener
la mayor cantidad de especies posible, y enfatizar al-
gunas según su posición en el acceso.

Se procede a la restauración de la vegetación, ya que

en las condiciones actuales se encuentra muy degra-
dada. Se proponen especies de palma, alguna de las
que hoy existen en el jardín techado del acceso prin-
cipal.

79
un espacio
para el
encuentro

Fig. 204. Vista de la propuesta para el acceso principal.

Plaza central

La idea del proyecto ha sido la transformación del

espacio en una plaza de gran sencillez formal, con
mobiliario integrado que parece salir del propio pavi-
mento. Esta estrategia ayuda a resolver la transición
entre la rígida construcción preexistente y la estruc-
tura maleable propuesta. El agua bajo el escenario, la
vegetación puntual, el mobiliario que por su diseño
pareciera ausente, son los elementos vertebradores
de esta concepción de plaza.

El nuevo proyecto se define por una volumetría irre-

gular y contrastante, que dialoga con la plaza central
tomando dimensiones urbanas, con una escala que
siempre respeta al edificio preexistente.

Este gran espacio con una retícula en el pavimento

que enfatiza linealidad, intercala las diversas depen-
dencias (escenario, sala de eventos flexible y bloque
de baños públicos) caracterizadas por su gran per-
meabilidad. El equipamiento previsto será de bancos,
papeleras, ponches de césped, arbolado de copa alta
y de sombra, además de luminarias ubicadas lineal- 80
mente, para lograr un mejor entendimiento del espa- un espacio
para el
cio. encuentro

Fig. 205. Vista de la plaza central propuesta.

Exposiciones
Dos conceptos importantes y problemáticos de los lu-
gares destinados a la exposición de obras de arte, son
la iluminación y la circulación. Sin embargo, este edi-
ficio funcionará como ‘‘plaza no techada’’, donde las
exposiciones serán de gran formato y podrán exhibir-
se lo mismo en interiores que en las áreas exteriores.
En este caso no deben tenerse en gran consideración
aspectos como la entrada de luz, las sombras, las re-
flexiones en las obras de arte, ni la conservación de
las mismas. No obstante, las circulaciones y los reco-
rridos no deberán obstruirse, las características de la
vegetación (de copa alta, la caída de las hojas, etc.),
el concepto de la exposición, entre otros serán teni-
dos en cuenta para poder ubicar las obras de la forma
más óptima.
La fluidez en la circulación del público visitante, se
soluciona proponiendo la nueva contrucción alrede-
dor de la plaza central, así se evitan las aglomeracio-
nes delante de una obra. Las gamas de color usadas,
tanto en la propuesta como en el inmueble en reha-
bilitación, crean un ambiente relajado y propicio a la
contemplación de las obras expuestas.
En las exposiciones ningún elemento debe interrum-
pir la mirada o la visión de la obra por parte del pú-
blico. Además, independientemente de la altura del
sol en el horizonte, variable según las horas del día y
las estaciones del año, con el carácter abierto de los
espacio y la situación de obras en el exterior, permite
el máximo aprovechamiento de la luz.
3.6 Accesibilidad
Para lograr un entorno accesible se debe poder llegar
al lugar deseado con la mayor normalidad posible.
Una vez allí, se debe poder acceder y luego utilizar
las instalaciones existentes. En la propuesta todos lo
recorridos deberán tener en su incio la información
correspondiente al trayecto (dónde conduce, tipo de
pavimento, tiempo de recorrido aproximado, si es que
hay lugares de descanso intermedio, si existen baran-
das para el apoyo). Ninguna pendiente en los recorri-
dos peatonales supera el 12%, ya que sería inviable el
recorrido con la silla de ruedas.
En los espacios propuestos se establecen recorridos
libres de peldaños (rampas) y con ancho suficiente,
para el paso de usuarios en silla de ruedas. No se pro-
ponen elementos sobresalientes en las superficies
verticales a una altura inferior a los 1.90 m, de modo
que se generen recorridos libres de obstáculos.
Las rampas contituyen una solución complementaria
a las escaleras, son fundamentales para que los usua-
rios en silla de ruedas puedan acceder a los distintos
niveles, pero además resultan de gran utilidad para
circular con maletas, coches de niños, carros, etc. La
rampa deberá tener un borde de 10 cm, en la base
ambos costados, para evitar que la rueda de la silla
caiga por los bordes.
81
Todas las rampas y escaleras constan de pasamanos un espacio
para el
continuos, lo que aumenta la sensación de seguridad encuentro
del usuario, evitándose uniones de material y bordes
filosos en todos los casos. Los pasamanos tendrán
dos alturas, una a 0.70 m del suelo para niños y otra
a 0.95 m para adultos. Los pasamanos de las escale-
ras de acceso a los nuevos espacios serán continuos,
además se implementarán cambios de textura en los
peldaños de inicio y fin de la misma.
Para que todas las personas con problemas de mo-
vilidad o usuario de silla de ruedas pueda acceder a
los establecimientos de la manzana, se disponen es-
tacionamientos reservados.
Pavimentos
Los pavimentos en todos los locales y plazas son lo
más continuos posible, sin presencia de grava o are-
Fig. 206.Esquema de accesibilidad en la propuesta.
na, donde se dificultaría maniobrar la silla de ruedas
o caminar con bastones. Se concibieron antideslizan-
tes, tanto en condiciones secas como húmedas, de
constitución compacta cuyo material es el hormigón.

Los revestimientos de los suelos a pesar de ser dife-

rentes, se diseñaron con forma de grandes listones,
separados 13 mm, para evitar accidentes o pédidas
de equilibrio.

Mobiliario

El mobiliario está dispuesto de manera que no entor-

pece la circulación y pueda ser usado con la mayor
comodidad y seguridad posible, además se encuentra
sobre pavimento compacto. Las áreas de descanso se
ubican retiradas de la circulación principal en la ma-
yoría de los casos. Los bancos de las plazas poseen
respaldo y permiten la continuidad visual de los reco-
rridos peatonales.

Ascensor

El ascensor de la propuesta se caracteriza por tener 82

un recorrido hacia él accesible y libre de obstáculos,
los objetos de exposición serán colocados de forma
que se cumpla esto. El frente del ascensor en caso de
esxposiciónes tendrá un largo y ancho libre de 1.40-
1.50 m (necesario para realizar giro sobre el eje de la
silla de ruedas). La puerta posee un ancho de 1.0 m,
la cabina de 1.60 m x 1.30 m (para 5 personas). Las
botoneras se ubican a una altura de 90 cm, además
los números contrastarán con el fondo y serán sobre
relieve. Además tendrá pasamano en su interior.
Servicios Sanitarios
El lavamanos se instalar{a a una latura de 80 cm,
manteniendo una altura libre inferior para así aproxi-
marse el usuario en silla de ruedas. La grifería pro-
puesta es de tipo monomando, donde una sola pie-
za emite agua fría y caliente, de diseño sencillo para
que las personas con problemas en manos y muñecas
Fig. 207. Esquemas para la propuesta de espacios accesibles. un espacio
para el
encuentro
(artritis) las utilicen. Los espejos se ubican a 90 cm
del piso, para que niños, usuarios en silla de ruedas y
adultos los utilicen sin distinción.
Auditorio
Para la atención al público (venta de entradas, mos-
trador en locales de venta, información, etc.) el mos-
trador-mesón no puede tener una altura única, para
atender a personas de pie y sentadas al mismo tiem-
po. La zona más alta para personas de pie, de 1.20 m
y la baja, para niños y usuarios en sillas de ruedas de
0.80 m, con espacio libre bajo el mesón para que la
silla se aproxime de 0.75 m.
En el auditorio también existen espacios destinados
a personas con discapacidad. A pesar de ser las bu-
tacas fijas, se disponen varios lugares para la silla de
rueda. Cada espacio será de 0.85 x 1.25 m, ubicados
próximos a la salida, y el recorrido hacia ella libre de
obstáculos.

Vegetación

Las especies vegetales de la plaza central son de copa

alta para evitar accidentes a personas con capacidad
de visión reducida. Las demás especies se encuen-
tran situadas en área de jardín donde no se transita.

3.7 Instalaciones

3.7.1 Hidráulica - Sanitaria

El sistema está compuesto por la cisterna, equipos de
bombeo y tanques elevados. Cuenta además con la
reserva contra incendio. La evacuación de las aguas
pluviales en la cubierta se produce por drenajes que
botan hacia las áreas exteriores, para lo que se esta-
blecen las pendientes requeridas en el sistema de en- 83
rajonado y soladura. En la cubierta del basamento la un espacio
para el
evacuación de las aguas se realiza a través de bajan- encuentro
tes adosados en la parte posterior de las columnas. Fig. 208. Esquema de espacios accesibles.

3.7.2 Eléctricidad
Se ubican en el semisótano con acceso por el parqueo
los locales para el grupo electrógeno, Pizarra General
de Distribución (PGD) y transformadores. Todas las ca-
nalizaciones eléctricas como son tuberías, bandejas
portacables, registros, etc. serán de PVC. Se utilizarán
cables de cobre del tipo blando, aislamiento termo-
plástico, 90 grados centígrados, con baja emisión de
humos.

3.7.3 Mecánica
En el edificio se trata de garantizar el mayor confort a
través de la ventilación natural, favorecida sobre todo
por las condiciones climáticas del borde costero en
que se ecuentra el edificio. Sin embargo, existen al-
gunos locales que deben ser climatizados ya que sus
características y requerimientos lo exigen (oficinas,
etc.).
3.7.4 Corrietes débiles
Todos los sistemas excepto el de redes y telefonía,
son controlados y vigilados desde el local de control
general ubicado entre la recepción y el área adminis-
trativa de la instalación. El cableado de estos sistema,
excluyendo el de redes, transita por los clósets para
corrientes débiles dispuestos en el núcleo central de
circulaciones.
3.7.5 Sistema de red de datos
3.7.7 Sistema Automático de Detección de Incen-
dios (S.A.D.I.)
Con el objetivo de proteger el inmueble de un posible
principio de incendio, dispondrá de un Sistema Au-
tomático de Detección de Incendio, formado por una
central de incendio automática ubicada en el local de
control general. Esta central estará compuesta por:
panel de control de detección de incendios, detecto-
res automáticos en todos los locales y circulaciones,
detectores del tipo óptico en los clósets eléctricos, de
temperatura en el parqueo y detectores lineales en el
vestíbulo, pulsadores por todo el edificio colocados
cada 15 m aproximadamente. La señal de evacuación
será acústica, tipo mensaje o tipo sirena dependien-
do del caso y será además visual para personas con
discapacidad auditiva.

El sistema constará de nodos de distribución ubica-

dos en el local de servidores, encargados de concen-
trar la información de todas las computadoras, sobre
todo en la sala de navegación. Se ubicarán además
puntos de redes WIFI para acceder de forma remota al
servidor ubicado en el local de redes, ya se a desde 84
el interior de los locales como desde las áreas exte- un espacio
para el
riorres. encuentro

3.7.6 Sistema de Audio Central

El edificio constará con un sistema central de audio
distribuido por toda la edificación. Este sistema tiene
como objetivo suministrar música variada para am-
bientar las áreas del edificio y brindar todo tipo de in-
formación necesaria. En el local de control general en
el bloque central, se colocan: la computadora, los am-
plificadores y atenuadores estos últimos se disponen
para los locales o pisos que lo requieran. Se colocarán
proyectores de sonido en todas las áreas de circula-
ción de la torre y en los cuatro niveles del basamento,
priorizando las áreas de circulación, todos los locales
del nivel de recreación, el vestíbulo del edificio y el
comedor. El micrófono para avisos e informaciones se
localiza en la recepción o carpeta
3.8 Conclusiones parciales

El Pabellón Cuba es una edificación de notable va-

lor arquitectónico y cultural que se ha perdido con
el paso de los años. Por lo que un proyecto para su
rehabilitación deberá más que nada resultar en la
revitalización cultural de La Rampa y en un centro di-
namizador de la cultura de la zona y para la ciudad.

Esta forma de proceder constituye la vía de revertir la

situación actual que presenta la zona y en especial el
edificio, sumidos en un deterioro más funcional que
físico. Con el incremento en La Rampa de nuevas
funciones, el cambio de uso de diversas edificacio-
nes, dando paso fundamentalmente a actividades
recreativas, lúdicas y terciarias, se producirán cam-
bios de carácter e imagen de gran significación.

La flexibilidad en los espacios y la mixtura, entre

las inserciones contemporáneas propuestas , los
elementos preexistentes y de valor patrimoial, el
aprovechamiento de los valores ambientales y pai-
sajísticos que presenta el área; el mejoramiento del
sistema de espacios públicos y el verde urbano; el 85
estímulo social que representan los nuevos cambios un espacio
para el
en el entorno construido, son los elementos que da- encuentro
rán la nueva imagen a La Rampa.

La incursión en un programa para Comlejo Cultural

Recreativo que abarque toda la manzana, abre las
puertas a las necesidades de las generaciones ac-
tuales y futuras. La conexión entre los espacios, la
permeabiliadad, flexibilidad y el carácter público de
los mismos, permite la mezcla de los distintos tipos
de usuarios, de distintas edades, con distintos moti-
vos, a distintas horas, que es fundamental para con-
seguir espacios con un nivel de uso adecuado du-
rante el día y para generar verradera vida ciudadana.
Conclusiones generales marcó a generaciones de ciudadanos y puede aún
prestar un servicio de calidad si es al menos consi-
En nuestros días, una de las problemáticas que preva- derado.
lecen en las ciudades es la degradación de sus áreas
centrales, incluso el descuido de edificios emblemá-
ticos, siendo este uno de los principales problemas
sociales, económicos y culturales que enfrentan.

En la contemporaneidad, para solucionar esta situa-

ción se realizan disímiles investigacioes y proyectos
encaminados a su rehabilitación. El proceso de re-
habilitació se caracteriza por ser el responsable del
resurgir de los valores, tanto por el rescate de los ele-
metos preexistentes como por la inserción de nuevas
formas y significados.

La Rampa, y dentro de esta el Pabellón Cuba, a pe-

sar de poseer elementos en ocasiones desfavorables,
estudiados en el diagnóstico reúne grandes valores y
oportunidades que constituirán la base para transfor-
marlo en un cenro dinamizador de la cultura.

En la propuesta para la rehabilitación del Pabellón

Cuba, a nivel de ideas conceptuales, se muestra un 86
camino posible para la valorización de este moumen- un espacio
para el
to. Su capacidad adaptativa para responder a crite- encuentro
rios contemporáneos brinda una vía a la que se diri-
ge el país respecto a las prácticas arquitectónicas.
Una de las ventajas de este tipo de actuación es que
contribuye a la conservación del medio ambiente, ya
que muchos de los materiales permanecen en uso y
no son desechados de tal manera que no contami-
nan.

La intención de la propuesta es crear un complejo de

cultura y recreación a partir de la ampliación en la que
se icluirán nuevas funciones acordes a las prácticas
más contemporáneas, la rehabilitación de los espa-
cios públicos de la manzana y creando espacios para
todos, lo mismo para las presetes como para las fu-
turas generaciones. Pero más que una propuesta la
importancia de este trabajo radica en hacer reflexio-
nar acerca del rescate de una obra emblemática y que
Recomendaciones

1. Realizar mayor divulgación, estudio y protección de

las obras del Movimieto Moderno cubano, sobre todo
aquellas que tienen estrecha relación con el desarro-
llo socio cultural de las diversas generaciones.

2. Utilizar las ideas propuestas y las que han servido

de precedente a este trabajo, como base para el desa-
rrollo de futuras intervenciones.

I3. ncrementar en gran medida las acciones que favo-

rezcan y faciliten los procesos de rehabilitación arqui-
tectónica de forma general.

4. Intervenir el edificio con el fin de evitar que conti-

núe su deterioro.

87
un espacio
para el
encuentro
Bibliografía
Libros
Alonso, Luis: Diseño de exposiciones. Concepto, insta-
lación y montaje, Ed. Alianza, Madrid, 2003 p. 25-36.
Aramburu, Nekane: Un lugar bajo el sol. Los espacios
para las prácticas creativas actuales. Revisión y análi-
sis, Ed. Nekane Aramburu, Buenos Aires,2008.
32. Idem.
Bellido Gant, Mª Luisa: ¿Hacia dónde van los museos?,
/s.e/, /s.f/, /s.p/.
De Lecea, Ignasi: Arte público, ciudad y memoria,
Ayuntamiento de Barcelona, 2004.
Fernández Galiano, L.: Contenedores a la deriva, /s.e/,
2003, p. 34-35.
Fernández, Jesús de Benito, Javier García Milá y otros:
Manual para un entorno accesible, Fundación ACS,
Madrid, 2005.
Gausa, Manuel y otros: Diccionario Metápolis de Ar-
quitectura Avanzada, Universidad Politécnica de Ma-
drid, Madrid, /c. 2002/, p.186.
La expresión de una línea museística singular, en
´´Las diversas expresiones del museo portátil. Entre
la papiroflexia, la inmaterialidad y la piel mutante´´,
/s.e/, /s.f/, p.354-405.
Lasheras Peña, Ana Belén: España en París. La
imagen nacional en las exposiciones universales,
1855-1900,Universidad de Cantabria, Santander,
2009.
Luis Rodríguez, Eduardo: La Arquitectura del Mov-
imiento Moderno. Selección de Obras del Registro
Nacional. Docomomo_Cuba. Ediciones Unión, 2011.
Manito, Félix: Cultura y estrategia de ciudad. La cen-
tralidad del sector cultural en la agenda local, Centro
Iberoamericano de Desarrollo Estratégico Urbano,
2006.
Márquez, Rafael: Estudio de metodologías de la re-
habilitación de edificios del siglo XX. Caso Venezu-
ela. Una aproximación a la puesta en valor de los
bienes edificados modernos y contemporáneos,
/s.e/,Maracaibo, 2011.
Montaner, Josep María: Repensar Barcelona, Ed. UPC,
Barcelona, 2003.
Monterroso Montero, Juan M.: De Galicia a Cuba. La
percepción del arte y arquitectura a través de la prensa
cubana (1875_1910), /s.e/, /s.f/, p. 103-134.
Ocejo, José Enrique: Expo, el territorio aragonés y su
proyección europea, Ed. I.T., 2007.
Pujadas Muñoz, Joan J.: ¿Ciudades acogedoras? Trans-
formaciones urbanas, imaginarios y actores sociales,
XVI Congreso de Estudios Vascos, 2006.
88
Regulaciones Urbanísticas. El Vedado, Ed. Boloña y un espacio
Unión, La Habana, 2007. para el
encuentro
Sallé Alonso, Mª Ángeles y Ángeles Van den Eynde: La
emigración española en América: historias y lecciones
para el futuro,/s.e/, 2009.
Revistas y artículos
‘’Ala con arte. Ampliación del Museo Reina Sofía’’, Ar-
quitectura Viva, No. 103, /s.e/, Madrid, 2005, p. 104.
Cárdenas, Eliana: UIA 63, encuentro 40 aniversario.
Arquitectura y Urbanismo, Vol. XXIV, No. 3, ISPJAE, La
Habana, 2003.
Chateloin, Felicia: “Movimiento Moderno en la Ha-
bana. Génesis y conservación”, docomomo_Cuba, No.
4, diciembre 2005, 2005.
Ciccolella, Pablo e Iliana Mignaqui: Globalización y
transformaciones de la centralidad histórica en Bue-
nos Aires. Revista de la Organización Latinoamericana
y del Caribe de Centros Históricos, No. 3, abril 2009,
pp. 91-101.
Coyula, Mario: Más acá del río y bajo los árboles a la
sombra de un Vedado que ya no es más, en Regula-
ciones Urbanísticas. El Vedado, Ed. Boloña y Unión, La
Habana, 2007, p. 61.
Duverger, Heriberto: EXPOCUBA, High Tech?; Sí hay!,
Arquitectura Cuba,No. 373, /s.e/, La Habana,/s.f/,
p.5-11.
Grandas Sagarra, Carme: Arquitectura para una ex-
posición: Barcelona 1929´´, Artigrama, No. 21, /s.e/,
2006, p. 105-123.
Hantecceur, M. L (Consejero Técnico de la Exposición):
‘’La arquitectura en la Exposición de 1937’’, Arquitec-
tura, Año VI, No. 55, Colegio Nacional de Arquitectos,
La Habana, 1938, p. 51-58.
Hernández Martínez, Ascensión: ´´La arquitectura
del Movimiento Moderno: entre la desaparición y la
reconstrucción. Un impacto cultural de larga proyec-
ción´´, Apuntes, Vol. 21, No. 2, /s.e/, 2008, p. 156-
179.
Hernández Martínez, Ascensión y María Pilar Poblador
Muga:´´Arquitectura efímera y fiesta en la Zaragoza de
la transición del siglo XIX al XX´´, Artigrama, No. 19,
/s.e/, 2004, p. 155 a 195.
Pérez Oyarzun, Fernando: ´´Pabellón Philips. Bruse-
las, Bélgica´´, ARQ Obras y Proyectos, /s.e/, /s.f/, p.
54-59.
Pesci, Rubén: ‘‘Espacios públicos, el alma de la ciu-
dad’’, Ambiente Digital, No. 103.
Rigol, Isabel y Ángela Rojas: ´´La Rampa. Nostalgia y
rescate´´, Arquitectura y Urbanismo, Vol. XXIV, No. 3,
/s.e/, La Habana, 2003.
Sanz Araujo, Lucía: Pabellón Cuba: sencillez, elegan-
cia, cubanía. Colaboradora de Radio Rebelde: web@
radiorebelde.icrt.cu, 24 de Julio de 2009.
Zardoya Loureda, María Victoria: “La ley y el Orden”,
en Regulaciones Urbanísticas. El Vedado, Ed. Boloña
y Unión, La Habana, 2007, p. 34.
Tesis de Diploma
Bernabeu Larena, Alejandro:Estrategias de diseño es-
tructural en la arquitectura contemporánea. El trabajo
de Cecil Balmond, Tesis de Doctorado en Estructuras
de Edificación, Escuela Técnica Superior de Arqui-
tectura, Universidad Politécnica de Madrid, Madrid,
2007.
Choy, Olivia, Daniel de La Regata y Kiovet Sáncez:
‘‘Propuesta de distrito cultural para un sector de alta
centralidad en Centro Habana’’, Tesis de Diploma, La
Habana, ISPJAE, Facultad de Arquitectura, 2007.
89
De Armas, Ángela y Ruslán Muñoz: ‘‘Aulario para la un espacio
Universidad de La Habana’’, Tesis de Diploma, La Ha- para el
encuentro
bana, ISPJAE, Facultad de Arquitectura, 2011.
Fernández Lores, Yuliem e Ibelise Carraceo Contreras:
“Estudio de accesibilidad en espacios urbanos con-
tenidos en Rutas Características del Centro Histórico
de la Habana Vieja. Pautas de Diseño”, Tesis de Di-
ploma, La Habana, ISPJAE, Facultad de Arquitectura,
2010.
Fuentes Valdés, Louis Javier: ‘‘Re-uso adaptativo del
Movimiento Moderno. Reconversión de la antigua
Iglesia Luterana de 7ma y 60 a Centro Cultural Comu-
nitario’’, Tesis de Diploma, La Habana, ISPJAE, Facul-
tad de Arquitectura, 2009.
García González, Adriana: ‘‘Ideas conceptuales parala
rehabilitaci{on del edificio Felipe Poey de la Univer-
sidad de La Habana’’, Tesis de Diploma, La Habana,
ISPJAE, Facultad de Arquitectura, 2011.
Gato Mesa, Michel: ‘‘Ideas conceptuales para la re-
habilitación del edificio Enrique José Varona de la
Universidad de La Habana’’, Tesis de Diploma, La Ha-
bana, ISPJAE, Facultad de Arquitectura, 2011.
Iglesias Machín, Ma. Josefa: Iluminación Artificial
Museográfica y Ergonomía Visual. Museo de Arte Co-
lonial. Tesis Maestría en Conservación y Explotación
de Edificaciones, La Habana, ISPJAE, Facultad de Ar-
quitectura, 2010.
Lorenzo Gil, Rafael: ‘‘Rehabilitación de la Casona de
Linea en el Centro Cultural Raquel Revuelta’’, Tesis de
Diploma, La Habana, ISPJAE, Facultad de Arquitectura,
2009.
Ramírez Nieto, Jorge: Intervalo nacional-moderno de
la Arquitectura Latinoamericana 1929-1939, Tesis de
Doctorado en Disertación sobre Patrimonio Construi-
do, HafenCity Universitat, Hamburgo, 2009.
Sitios de internet
http://www.expo92.es. Web oficial de la Expo 92’, fe-
brero 2006 (acceso 3/12/2011).
http://es.wikipedia.org/wiki, noviembre 2011 (ac-
ceso 8/12/2011).
http://hablemosunpocodetodo.blogspot.com,
diciembre de 2010 (acceso 8/12/2011)
http://www.dwp.qaop.net, junio 2008 (acceso 3/
diciembre/2011).
http://ww.arquitecturaviva.com, febrero 2011 (ac-
ceso 18/3/2011).
http://ww.arquitecturaviva.com, enero 2012 (acceso
18/3/2012).
http://es.wikipedia.org/wiki, mayo 2011 (acceso
20/2/2012).
http: //www.sevillaactualidad.com, septiembre 2011
(acceso 7/3/2011).
http://pdf.diariocordoba.com, marzo 2012 (acceso
4/03/201).
http://www.culturadesevilla.blogspot.com, enero
2011 (acceso 20/5/2012).
41. Idem
http://www.plataformaarquitectura.cl, enero 2011
(3/12/2011)
http://es.wikipedia.org/wiki, junio 2011 (acceso
3/12/2011).
http://arquitecturacuba.blogspot.com, 9 de septiem-
bre de 2008 (3/12/2011).
http://www.paseosporlahabana.com, 2004 (22/en-
ero/2012).
90
Otros un espacio
para el
encuentro
Boudeguer Simonetti, Andrea y Francisco Supúlveda
Donoso: Manual de Accesibilidad Turística para per-
sonas con movilidad reducida y discapacidad, Pro-
grama de Turismo Municipal, Chile.
Barría Chateau, Hernán: El espacio Inter-Medio,
Proyecto Dirección de Investigación UBB, Facultad de
Arquitectura, Construcción y Diseño, Universidad del
Bío Bío, Concepción, Chile, 2001.
Borja, Jordi: Gobierno y planeamiento de los territo-
rios metropolitanos, conferencia, 2005.
Coyula, Mario: El Trinquenio Amargo y la ciudad dis-
tópicaautopsia de una utopía, La Habana, conferen-
cia, marzo del 2007, ISA.
El borde costero de El Vedado: un enfoque de desar-
rollo cooperado, Esquema, p. 83, Regulaciones Ur-
banísticas. El Vedado, Ed. Boloña y Unión, La Habana,
2007.

Historia de la Cámara de Comercio, /s.e/,La Habana,

/s.f/, /s.p/.

Leal, Eusebio: Prólogo de Regulaciones Urbanísticas.

El Vedado, Ed. Boloña y Unión, La Habana, 2007.

Mazzolani, Federico M.: El acero en la rehabilitación,

/s.e/, Naples, Italia, 2008.

Nota editorial, p. 13, Regulaciones Urbanísticas. El

Vedado, Ed. Boloña y Unión, La Habana, 2007.

Revitalización del Centro Histórico de Zaragoza y su in-

tegración en la candidatura a la Capitalidad Cultural
Europea 2016, Anexo II: Movilidad, p. 84.

Sánchez Gómez, Luis Ángel: ´´Ciencia, exotismo y

colonialismo en la Exposición Universal de París
de 1878´´, Cuadernos de Historia Contemporánea,
Vol. 28, Dpto. de Prehistoria y Etnología Universidad 91
Complutense,Madrid, 2006, p. 191-212. un espacio
para el
encuentro
Sanz Araujo, Lucía: Pabellón Cuba: sencillez, elegan-
cia, cubanía. Colaboradora de Radio Rebelde: web@
radiorebelde.icrt.cu, 24 de Julio de 2009.
Anexos
Entrevista a Arq. Humberto Ramírez:
La Habana, 2011.
1. Participación Cubana en Exposiciones Internacio-
nales.
La participación de Cuba antes de la Revolución, inclu-
so antes de la Neocolonia, en la etapa colonial, Cuba
participó en un pabellón vendiendo azúcar, tabaco y
demás, a pesar de su condición de colonia. Luego en
1929, el pabellón fue de estilo Neorococó, muy bien
concebido, que demuestra lo que se hacía en aquella
época. Y después no es hasta Montreal, 1967, que fue
un proyecto muy bueno. Luego en Osaka 1970, Japón,
se hizo un pabellón que pasó inadvertido, debido a
las condiciones en Cuba en aquel momento. Pero no
por eso de menos calidad, se produjo con elementos
prefabricados comprados de estereocelosía de módu-
los de 30 x 30 cm. Cuyos proyectistas fueron Emilio
Escobar (Director del Equipo), un estudiante de quin-
to año, Alfonso Alfonso, dos recién graduados Oscar
Hernández y yo. Y luego tuvo lugar una gran obra que
fue la de Montreal ´67. Ahora, la más reciente partici-
pación fue en Shanghai 2010, lo cual fue aberrante,
porque independientemente de la situación económi-
ca imperante, y de queel hecho de haber participado
ya sea algo, no justifica la calidad de la obra. Creo que
lo que se podía hacer era unirse a un pabellón, que
era lo que se hacía en los últimos años, porque a mi
entender la obra no era buena. Lo primero es que un
pabellón no puede tener puertas, ni ventanas. Si hay
que ponerlas debe hacerse todo concebido dentro del
mismo sitema expositivo. Era preferible hacer como el
resto de los países antillanos, que se unieron en un
pabellón único.
Pero si considero como obra de extraordinaria partici-
pación al pabellón de Mies de 1929, sin embargo no
es lo que hoy se conoce como un pabellón de exposi-
ciones.
2. Un poco hablando de la evolución histórica de los
pabellones de exposiciones, ¿qué nos puede decir?
El salto mundial que se dió, y que constituye un hito
en la historia de la arquitectura, fue con el Palacio de
Cristal, que es una lástima que hoy no exista. Tam-
bién es representativo en Montreal el Pabellón de
EE.UU, con la cúpula geodésica de Fuller. Y luego en
la Expo ´70 de Osaka, se hicieron cosas muy buenas,
se aprecia la obra de Kenzo Tange. (...) Por su parte
el pabellón de Le Corbusier que también es un hito,
el de la Phillips, el Pabellón Poema Electrónico. En la
Expo 1998, en Lisboa también se utilizaron mucho las
tensoformas. Y más recientemente en Shanghai los
pabellones chino, que fueron espectaculares. (...) Se
destaca el de México, Venezuela, el de los ingleses, el
de España, que era de mimbre. Y volviendo un poco
atrás, en la Expo de Sevilla se usaron muchas tenso-
formas. (...) También se dan los pabellones digitales,
por ejemplo en la Feria de Zragoza del Agua en 2008,
pero que no se llegó a hacer, se quedó en proyecto.
3. ¿Cree usted que el tema ecónomico en Cuba sea
signo de no poderse lograr un buen pabellón exposi-
tivo?
No, para nada. De hecho estuve reflexionando acerca
del tema del patrimonio en Cuba, en una charla real-
izada en la Casa de las Tejas Verdes, impartida por Isa-
bel Rigol, y lo sostuve en el programa radial, de que no
es el problema económico lo que afecta mayormente
en este sentido, sino es un problema de diseño. Creo
incluso que era preferible no haber participado en la
Expo de Shanghai (...)porque si aquello se hubiera
diseñado por muy modesto que fuera. Ya te digo lo
que hay no es un pproblema económico, sino de dis-
eño.
4. En un principio las Exposiciones Universales se
hacen para mostrar invenciones y desarrollo del país
anfitrión, pero por ejemplo en el año 2000, en la Expo
Hannover, se muestran pabellones con la tendencia
al desarrollo sostenible y a tratar los problemas actu-
ales que amenazan a la humanidad.
También desde el punto de vista tecnológico se han
hecho cosas muy buenas a mi juicio, por ejemplo en
una exposición en Japón en los noventa, donde el
pabellón de la Sony era un gran televisor de micro-
chips, que en aquellos años era una gran novedad, no
cabe dudas. Incluso la facha la situaron al oeste, para
demostrar que a pesar del brillo del sol, la pantalla
podía verse. Indudablemente las Exposiciones Inter-
nacionales, han dado hitos en lo que a tecnología se
refiere. (...)
5. ¿Qué problemas cree usted que tiene el Pabellón
Cuba?
Es importante establecer un nexo más directo, porque
hasta ahora lo que hay son kioskos en la entrada y en
otros lugares, por lo que toda esa área realmente se
pierde desde el punto de vista funcional y además la
áreas verdes están muy deterioradas, lo que da una
imagen muy poco agradable. Los estanques no fun-
cionan, pero ese es un tema que es sucede a menudo
en el país, y cito a la Casa de las Tejas Verdes, que
es una maravilla como quedó, y ya los estanques no
funcionan. Después está la conexión que fue muy in-
teligente, de situar el túnel atravesando el edificio de
la calle N, donde se encuentran las oficinas del centro.
Otro aspecto, para seguir con los problemas que le
veo, el salón principal que es único, no cabe duda
que es muy lindo, la escala que tiene sobre todo,
además todo el purismo de formas, y otros elemen-
tos, las columnas que no se tocan, arquitectónica-
mente es un buen diseño, siempre tuvo una influencia
muy grande, que nosotros lo criticamos, yo cuando
aquello era estudiante cuando se hizo, de la obra de
Bacardí de Mies Van der Rohe. Indudablemente tiene
una influencia bastante marcada de ese edificio. En-
tonces, tiene un problema que no está resuelto, que
es la protección ante el clima, o sea, la lluvia, el sol.
Yo recuerdo cuando el Slón de Mayo, que fue una de
las exposiciones más grandes y más importantes, que
hubo que cerrarlo, porque el tiene una cosa muy linda
que es el panel de influencia japonesa de madera que
lo bordea, al menos en la parte de la calle, y este no
protege. O sea, cualquier exposición que se ponga
tiene ese handycap, de falta de protección que es fun-
damental. Yo creo que si en algo pueden ayudar en
este proyecto sería en este problema de la protección.
6. En el Pabellón Principal se concibió un gran hueco
para que el agua de lluvia vertiera directamente sobre
el estanque, que actualmente está techado de una
forma que no es la correcta.
A mí se me encargó un proyecto de aruitectura textil
o tensoformas, que es a lo que en los últimos años
me he dedicado en esta empresa, para el Pabellón
Cuba, que era proteger con lona, ya que la lona es un
elemento que no cambia la forma del edificio, que sí
se debe mantener, pero al mismo tiempo protege. Yo
en aquel moemto planteé una serie de lonas que ro-
dean fundamente la parte de atrás del Pabellón Cuba,
y que salían de la placa, que iban al panel de madera
y cristal. De manera que se proteja y se mantenga este
prisma fuerte. Este material realmente protege tanto
del sol, lluvias, viento. En aquel caso no pidieron nada
acerca del hueco central. (...)
Pero esto del lucernario por supuesto que el cierre
del hueco se puede producir con textil, o cristal, poli-
carbonato, o cualquier elemento que al menos sea
traslúcido, de manera que mantenga esa sensación
linda para la que se diseñó. Y los puentes que dan
paso sobre el estanque asemejaban un costillar de
madera.
7. El espacio posterior del Pabellón Cuba, hoy no
mantiene su concepción original, toda esa libertad
que tenía de ver al Hotel Capri, lo que es una lástima.
Indudablemente cayó en todo lo que se hace hoy, de
poner kioskos en todos los lugares. De hecho hace
poco pasé por ahí, y descubrí que se retomó la fun-
ción de la cafetería donde existía inicialmente, lo que
creo correcto desde el punto de vista de mantener el
servicio. Sin embargo, la forma en que está no es la
más apropiada para este lugar. Y también ví que se
puso un escenario de conciertos, que también puede
ser una buena idea. Y después está toda la jardinería,
que se encuentra en muy malas condiciones.

8. Acerca del tema topografía, está dado porque el
suelo es roca, y al menos en el Pabellón Cuba, las co-
lumnas se apoyan directamente sobre la roca, y los
pedestales se aprecian casai afuera, sobre el suelo.
Pero nosotros tenemos una preocupación acerca del
tema, porque tenemos información de un proyecto
para hotel, en el lote del antiguo edificio Alaska.
Primero no sé, eso no lo puedo responder. Pero si sé
que al derrumbar el antiguo edificio Alaska, no se hizo
mucho incapié en arreglarlo, creo yo más por un prob-
lema de seguridad. Porque cuando aquello Fidel iba
casi todos los días al ICRT. Este al ser un edificio alto,
de viviendas, en una calle tan estrecha (M), era incon-
trolable en cuanto al tema seguridad. Pero alguien
me comentó que sí, que realmente ese edificio se en-
contraba en malas condiciones y había que tumbarlo.
Pero bueno, no es que fuera una obra de extrema im-
portancia. Pero sí, el problema radica, como digo yo,
en la muela quitada, por lo que esa idea de ustedes al
incorporarlo me parece muy buena.
9. Si, es que nosotros a este espacio lo vemos como
que debe albergar una función pública, es decir, un
espacio de encuentro ciudadano, como ocurre en
todo el eje 23, que se suceden parques, y espacios
públicos. Queremos mantener ese carácter, que esta
obra se abra hacia la ciudad, que hoy no lo hace. Y
otra razón es el tema de la accesibilidad, ya que una
persona que tengas dificultades motoras, le es difícil
el acceso por la entrada de la calle 23, la principal,
por lo que actualmente sólo puede acceder por la es-
quina de N y 21. Est se alivia al realizar esta conexión
con el lote Alaska, que se encuntra al nivel del piso
de exposiciones del Pabellón Cuba. ¿Considera usted
que un pabellón se debe rehabilitar?
Sin lugar a dudas, lo que creo es que hay que mejo-
rarle las funciones, desde el punto de vista de la pro-
tección porque su funciones se ven muy limitadas por
este tema.
10. Debido al Grado de Protección I que tiene el Pa-
bellón Cuba, nos hace reflexionar acerca del tema de
rehabilitarlo por el hecho de ser uno de los edificios
más representativos de la zona, pertenece al Mov-
imiento Moderno, y además fue contruido en la Revo-
lución en el año 1963. ¿Qué cree usted al respecto?
¿Se debe mantener intacto o puede tener cambios?
Yo pienso que la arquitectura debe irse adaptando a
las diferentes etapas, al igual que sucede en la vida.
En la medida, en que todos estamos de acuerdo en
que realmente tiene un valor desde muchos puntos
de vista, y la representatividad que tuvo en su mo-
mento por el Congreso de Arquitectos (UIA), o sea, por
una serie de valores que posee, hay que ser muy cui-
dadosos con lo que se haga. Hay obras en las que en
definitiva, las funciones no se pueden llevar a cabo,
y lo que hay es que hacerlas funcionar, cueste lo que
cueste, incluso si es en contra de su imagen arquitec-
tónica, pero pienso que este no es el caso. O sea, que
el Pabellón Cuba hasta ahora ha funcionado, con sus
limitaciones. Lo que se haga debe hacerse con un cri-
terio de funcionar, pero que a su vez mantenga sus
características primarias. Lo que si hay tener cuidado
con las nuevas funciones que albergue el espacio del
antiguo edificio Alaska, ya que independientemente,
de que se hacen espectáculos como conciertos y
demás presentaciones, el ruido afecta a las vivien-
das de los alrededores. Por tanto, tener en cuenta los
horarios determinados para este tipo de funciones en
estas zonas céntricas de la ciudad. Incluso entre las
funciones que podrían pensarse sería la de salas de
cine, que creo que no tiene.
Si pienso que la entrada principal del edificio, requi-
ere algún elemento de atención, a nivel urbano, de
llamada, es decir, grandes pantallas, de forma tal
que exista una interacción con el peatón. No con el
carácter de que la persona que pase se ponga a ver,
pero sí para al menos informar acerca de lo que se
muestra dentro, y que magnetice desde el punto de
vista del color, luces, imagen. Porque realmente esta
gran entrada, no es más que un gran vestíbulo. Recu-
erdo que en una ocasión, hubo una reunión a la que
fuimos todas las personas que tuvieron relación con
el evento del Congreso de Arquitectos, del año 1963,
donde participé como parte de la delegación de Cuba
como estudiante. Y realmente el pabellón central no
es un ligar agradable para reunirse. O sea, la escala
y el problema acústico que posee, lo hacen bastante
incímodo para reuniones. Quizás si se piensa en al-
gún techo que pueda bajar, o al menos darle la escala
en momentos determinados, y a la vez buenas condi-
ciones acústicas.
Tambíen se podría de acuerdo a la actividad que se
desarrolle, puede haber un color, si se usa ilumi-
nación LED en los casetonados. Además todo esto de
un área de conciertos me parece muy buena, incluso
el pabellón central puede ser hasta un área de bailes.
La idea es que se comporte como un espacio que se
utilice abiertamente, me recuerda al Rockefeller Cen-
ter, con área de patinaje, con una pista por supuesto,
que es un lugar donde la gente pueda ir a conversar.
Pudiera pensarse para solucionar el tema de la protec-
ción, en pequeñas estereocelosías de aluminio, que
se diseñen como mecanismo, y en momentos deter-
minados se puedan cerrar, para lograr hermetizar esto
un poco y a la vez mantener y recuperar su imagen
original, como parque techado que muy bien ustedes
pretenden.
forma que se hace con los cines en tiempo del Festival
de Cine, donde se evidencia una clara conexión. Pero
siempre partiendo de la idea de que haya algo arqui-
tectónicamente que los enlace. Desgraciadamente se
han cerrado muchas funciones, como lo fuera el Cen-
tro Comercial La Rampa, que hoy es un edificio de la
Aeronáutica Civil de Cuba (IACC).
Ese fue el primer Centro Comercial que se hizo en La
Habana. Este era un centro muy agradable, donde se
podía acceder del vestíbulo por una escalera helicoi-
dal, al Hotel Nacional, y que poseía una serie de pa-
tios interiores. También el ICRT era como un Centro Co-
mercial, cuya entrda principal era la cafetería, además
el edificio tenía barbería, peluquería, tiendas, farma-
cia en la misma esquina, la cual ya no existe, y es un
espacio que en la ciudad siempre es utilizado. Estaba
el Restaurante El Mandarín, una discoteca, que era
donde vendían discos. Todo eso era un edificio co-
mercial con entrada totalmente libre. Si todo eso se
pudiera recuperar, cosa que es una utopía, fuera muy
interesante. El cine La Rampa, también tenía una con-
exión con la cafetería Wacamba, por donde también
existía una taquilla para venta de entradas (...) Al igual
que en el Habana Libre, con la galería de tiendas, que
era muy abierto y de carácter participativo.

Por ejemplo PABEXPO posee las condiciones ideales

de un lugar de exposiciones: es hermáticamente cer-
rado, tiene aire acondicionado, además de encon-
trarse relativamente cerca del centro de la ciudad.
No es el caso de EXPOCUBA, que siempre ha tenido
el handycap de encontrarse muy alejado, lo cual fue
algo muy discutido. Para esta obra existían diversas
propuestas de ubicación: en Alamar, en una antigua
vaquería en la Vía Blanca, también se consideró el
Parque Metropolitano, y la tercera era su ubicación
actual.

Me parece muy bien, debido a las condiciones que

tiene, tratar de hacer un eje urbano de actividades
donde el Pabellón Cuba sea lo principal, y después
el parque del lote de esquina que ustedes proponen,
el Coppelia, el Parque del Quijote, o sea, de la misma