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TEMA: La herencia cultural africana en la República Dominicana actual.

MATERIA: Historia de la cultura Dominica 1

NOMBRE: Jennifer Silverio German

MATRICULA: 100504950

PROFESOR: Cristino Diaz Rivas

FECHA: 22 de May de 2022


Análisis de la herencia cultural africana en la República Dominicana
actual.

Introducción

Quizás suena extraño creer que tenemos algunas costumbres, comidas, el pelo
afro y hasta el color de piel como una herencia africana. Quizás nos
preguntaremos cómo pudo ser posible que tengamos tantas cosas africanas,
incluyendo su color, que es el que predomina en nuestro territorio.
Un 12 de octubre del año 1942 ocurrió un acontecimiento muy importante para
el continente americano, este acontecimiento histórico ha sido denominado
como “El descubrimiento de América”. En esa fecha Cristóbal Colón al junto de
otros españoles llegaron a este continente, haciendo una ruta en todo el
continente en más de tres viajes, en su primer viaje alrededor del año 1943
llegó a Santo Domingo lo que denominó “La Española”.
Estos europeos saquearon la isla, e intercambiaron todo el oro qué teníamos
por espejos, esto lo hicieron con los habitantes de aquella época llamados
indígenas, a los cuáles utilizaron cómo esclavos, años más tarde se dieron
cuenta que los indígenas no eran suficientes para servirles, de modo que
decidieron traer más esclavos en este caso los negros africanos, de esa forma
llegan a la isla, a trabajar la tierra y a servirle a los españoles sin derecho
alguno.
La mezcla de raza nace básicamente así, por eso nuestro país tiene múltiples
colores de razas, por las mezclas entre africanos, españoles e indígenas. Estos
esclavos carecían de derecho, los españoles les prohibían todo, pero hay que
tener en cuenta que esos esclavos llegaron con sus creencias y las
conservaban, una de las herencias que aún conservamos de los africanos es
“la hechicería”, a pesar de que los españoles le impusieron la religión que
ellos practicaban y debían abandonar su propio credo para seguir el europeo,
estos mantuvieron sus creencias.
Desarrollo
“Es el 1550 en la isla de Santo Domingo y en la cocina de los amos la esclava
prepara la comida del mediodía. Toma la cebolla, la pica en finas rodajas (con
una técnica que impresionaría al mejor chef de la actualidad) la echa en la olla
y la pone a sofreír. En un recipiente prepara el escabeche y por último echa los
‘guandules’. Al hacerlo la nostalgia la invade, recuerda cuando era libre y
alimentaba a sus hijos con este grano, pero el olor de la cebolla frita la trae a la
realidad y con rapidez echa todo a la ‘paila’ que tapa para que coja sazón.
Aunque la esclava perdió su libertad, al ser trasladada a la isla en un buque
negrero, lo que no sabe es que su capacidad inventiva aportaría sabor, olor y
color a la comida de una nación que surgiría siglos después: República
Dominicana.”

Uno de los mayores aportes de los africanos a la cultura dominicana es el de la


gastronomía.
Para el chef Arturo Féliz, propietario del blog elfogoncito.net, la gastronomía
criolla es una mezcla de influencias que se unen para dar un resultado único.
“Con frecuencia nos referimos a los aportes hispanos y tainos e ignoramos la
influencia africana que está muy presente en el diario vivir. Nosotros que
disfrutamos de todo género de “cuajadas”, que usamos los sueros de leche y
que tanto disfrutamos de los ‘víveres’ ignoramos que estas son evidentes
influencias africanas”.
Féliz asegura que en el Oeste de África es donde se encuentran más
similitudes debido a que es fácil mirar un plato de comida de esa región y creer
que se está frente a un plato dominicano.
“El chenchén encuentran sus posibles ancestros en el “sadza” y el “nshima”.
Los pasteles en hoja, tan “dominicanos” encuentran en el “kenkey” un familiar y
hasta los bollitos de los sancochos tienen parientes como el “banku”. Además,
el sancocho, que se atribuye a la herencia hispana, también tiene sus
versiones en el oeste africano”.
Uno de los aspectos más importantes en los platos criollos es el sabor que
otorgan los condimentos. La canela, la menta, el clavo dulce y la malagueta,
compañera de caldos y sopas son para Féliz, expresiones de una amplia y
bella influencia culinaria africana.
El sociólogo Dagoberto Tejeda manifiesta que la mayoría de los dominicanos
no saben que cuando comen un pastel en hoja o un “mofongo” participan de la
herencia afrodescendiente. Además, destaca que las frituras, de gran
aceptación entre la población, las hicieron los mulatos. Para Tejeda el
problema no es quien lo trajo, ni quien lo hizo sino quien se adueñó y quien la
popularizó.
 “Este aporte africano es el que más presencia tiene, porque la música se baila
de vez en cuando, pero la gastronomía no, hay que comer todos los días”,
menciona Tejeda.
Al igual que Tejeda, Celsa Albert enfatiza la importancia de este proceso de
integración y de sincretismo el cual, mediante la comida, se ve desde el
desayuno hasta la cena.
“La comida que comemos es del esclavo que se liberó. Un ejemplo es el
ñame, muy importante para África, allá tienen la feria del ñame e incluso se
premia al que cultive el más grande. La mayoría de los productos que
consumimos son de origen asiático, de la dieta alimentaria africana. Cosas así
nadie las sabe y eso denota la ignorancia en estos temas”, puntualiza Albert.
La gastronomía, al igual que otros aportes afrodescendientes, no ha sido
reconocida por los dominicanos. En un artículo del Diario Libre de febrero de
2009, el sociólogo José del Castillo Pichardo escribió que, aunque los
dominicanos cuentan hoy con una rica y multifacética cultura culinaria, derivada
de un pasado de aportes, fusión e influencias de diversos grupos étnicos, el
esfuerzo nacional para destacar esta condición ha sido limitado. Ya como
forma deliciosa de conocer nuestra historia y afianzar sus valores tradicionales,
rindiendo culto a la máxima que reza: “dime lo que comes y te diré quién eres”.

Celsa Albert menciona una lista de alimentos muy cercanos a la cultura “afro”:
La preferencia por el arroz blanco costumbre del área de Guinea en África,
aunque también se hace compuesto, es decir, con colores y canes.
El uso cotidiano de carne y manteca de cerdo. La Guinea en los últimos años
se ha convertido en un componente poco frecuente, debido a su extinción.
El uso de la salsa ata de origen nigeriano, similar al escabeche. En África se
usa para echar por encima a los alimentos. Igual uso se da en Quisqueya.
El plátano, de origen asiático, común en África, donde se come con frecuencia
frito o hervido. Además, el utensilio utilizado para macerarlo es el pilón de
origen africano.
Es de común uno en África el bollo, preparado de harina o plátano en forma de
masa, adicionándole condimentos como ajíes y friéndolo en grasa, en Nigeria
se le llama “akara”.
Concón: En Nigeria, África y en República Dominicana lleva el mismo nombre y
es el mismo plato, la diferencia es en Nigeria se escribe con k (konkón).
El guandul: su origen se encuentra en el norte de África Oriental o en la India;
la palabra proviene del vocablo kikongo “wandu”. 
Otra herencia qué aún conservamos son “Las velas”, “El mal de ojo”, “los
ensalmos” “El culto a los muertos”, “Altar en nuestros hogares”, todas
estas creencias qué aún se conservan en la mayoría de los lugares de nuestra
isla son una herencia de los esclavos africanos.
Conservamos también algunas tradiciones del carnaval, que de hecho han sido
declaradas patrimonio nacional de la humanidad, los ritmos de los tambores es
una herencia africana, en la música nos dejaron el gagá qué sigue vigente en la
mayoría de los bateyes dominicanos.
Adoptamos de ellos el poner padrinos, madrinas, como también los juegos de
San. Hemos heredado algunas expresiones tales como: bemba, abombarse,
mangú, quimbambas. Cargar los niños en la cintura etc.

Un estudio realizado en 2014 por José María Santos Rovira, Universidad de


Lisboa - Academia Dominicana de la Lengua, nos habla que en Republica
Dominicana hay vocablos conocidos y utilizados en el país que son de origen
africano, tales como:
 Abombarse, con el significado de pudrirse la comida.

 Bemba, con el significado de labio prominente.

 Bongó, con el significado de tambor pequeño.

 Burundanga, con el significado de magia y hechicería.

 Cachimbo, con el significado de pipa de fumar.

 Champola, con el significado de zumo de frutas.

 Chévere, con el significado de bonito.

 Gandul, con el significado de un tipo específico de habichuela.

 Guarapo, con el significado de zumo de la caña de azúcar.

 Malagueta, con el significado de pimienta.

 Marimba, con el significado de instrumento musical.

 Motete, con el significado de algo de poco valor.

 Ñame, con el significado de comer.


 Ñáñara, con el significado de llaga.

 Vudú, con el significado específico de la magia negra que practican los


haitianos.

Dice que su estudio demuestra que no existe un español afrodominicano.


Existe sólo el español dominicano, con sus variedades regionales y sociolectos
diversos, que incluye términos de origen africano.

Los tambores: ritmo heredado de los africanos.

Heredamos algunas tradiciones del carnaval.


El plátano de origen asiático y común en África, lo comen frito y hervido.

Sazones y sofritos heredados de la gastronomía africana.


Conclusión

Cómo podemos ver tenemos más costumbres africanas de lo que podemos


imaginar, y además de eso al pasar de los años siguen vigentes. Y se han ido
inculcando de generación en generación.
A lo largo de estas páginas hemos intentado mostrar las influencias africanas
presentes en el Caribe hispánico. Estas influencias son obvias en los niveles
étnico, cultural y gastronómico, como también algunas influencias a nivel
lingüístico que si bien no son utilizadas en todo el país, son conocidas por
diferentes personas dependiendo su edad, región y su nivel sociocultural.

Bibliografía:

https://todoporelarterd.com/cultura-africana-algunas-costumbres-adoptadas-
por-los-dominicanos/#:~:text=Otra%20herencia%20qu%C3%A9%20a
%C3%BAn%20conservamos,herencia%20de%20los%20esclavos
%20africanos.

https://listindiario.com/ventana/2011/08/27/201259/gracias-a-las-manos-
africanas

file:///C:/Users/migue/Downloads/1336-1743-1-PB.pdf

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