Está en la página 1de 7

JURISPRUDENCIA UNIDAD N° 2

"GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BSAS C/ PCIA DE TIERRA DEL FUEGO S/ CUMPLIMIENTO DE CONTRATO Y COBRO DE
PESOS" (AÑO 2007)
Hechos:
El gobierno de la CABA promueve demanda contra la Provincia de Tierra del Fuego porque se obligó a prestar asistencia
médica en hospitales a favor de pacientes derivados por Tierra del Fuego; y la Provincia no pagó las atenciones
realizadas.
Resolución de la CSJN: Se declara incompetente al entender que CABA no es una Provincia argentina y que conforme
los arts. 116 y 117 de la CN, La CSJN sólo interviene en cuestiones entre provincias por lo que las cuestiones que se
suscitaren entre CABA y una Pcia. deben tramitar ante los jueces del Estado Provincial que es parte, salvo que se
tratare de causas civiles o de manifiesto contenido federal; pero que la causa en cuestión es de naturaleza
administrativa (por ser un convenio que vincula a dos organizaciones estatales).
Conforme a la letra de la Constitución Nacional- la Ciudad Autónoma "no es una Provincia argentina por ende no le
corresponden las prerrogativas que la Ley Suprema reconoce únicamente a dichos estados locales de litigar en la
instancia originaria de esta sede", se sostuvo que admitir la competencia originaria por el hecho de que sea parte la
Ciudad Autónoma implicaría una equiparación entre dicho estado y las provincias, y por esta vía, una ampliación de la
competencia originaria de la Corte.
El régimen de gobierno autónomo con facultades propias de jurisdicción garantizado por el art. 129 de la Constitución
Nacional a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires no constituía un impedimento para que dicho estado no pudiera ser
sometido a la jurisdicción de los tribunales locales de alguna provincia.
Disidencia: Raúl Zaffaroni Entiende que la representación senatorial establecida por la CN a la CABA le da carácter de
ente federado
Disidencia: Carmen Argibay Señala: que el Procurador Fiscal dice que la Corte no debe intervenir porque en el
Convenio suscripto entre Provincia de Tierra del Fuego y CABA se estableció un Tribunal arbitral en caso de conflicto,
y que la cuestión no es civil sino de derecho administrativo.
Su criterio:
1-Obligar a CABA a someterse a los tribunales de la Provincia con la que litiga implicaría negarle su autonomía política
2-En otros juicios intervino la Corte por tratarse de Provincias aún cuando no fueran cuestiones civiles (es decir que
no tuvo un criterio tan restrictivo) o pleitos entre el gobierno nacional y las provincias con el fin de evitar conflictos
entre los Estados Federados, sin exigir que las controversias fueran de carácter civil.
CAMBIO DE PARADIGMA DE LA CORTE…….
ESTADO NACIONAL (ESTADO MAYOR GENERAL DEL EJÉRCITO) C/ MENDOZA, PROVINCIA DE S/ ACCIÓN
DECLARATIVA DE INCONSTITUCIONALIDAD.

Hechos: Se presenta el Estado Nacional –Estado Mayor General del Ejército- e inicia demanda contra la Provincia de
Mendoza a fin de que se declare la inconstitucionalidad de las leyes locales 6200 y 7422, por medio de las que se
estableció el carácter de "área natural protegida" y sujeta a expropiación en los términos de la ley 6045, a la Laguna
del Diamante en cuyo límites se encuentra un inmueble a nombre del Ejército Argentino. La aplicación de las normas
locales afecta la titularidad del referido inmueble e interfiere en la finalidad de un establecimiento de utilidad nacional
destinado al sistema de defensa nacional, según las previsiones contenidas en las leyes 23.554, 23.985 y concordantes.

Pretensión del Estado Nacional (Actora):


La expropiación dispuesta y las restricciones domínales que se establecen y las perturbaciones que ocasionaría la
aplicación de esas normas provinciales en las actividades y fines de un establecimiento evidencian la incompatibilidad
de aquellas con la finalidad de utilidad nacional y traería aparejada la violación de los arts. 31, 75, incs. 27 y 30, 121 y
126 de la C.N.
Solicita: El dictado de una medida cautelar que impida cualquier inscripción registral que declare como Área natural
Protegida a bienes inmuebles de propiedad del Estado Nac -Ejército Argentino y que evite actos de hecho del gobierno
provincial que afecten el uso y pacífica posesión sobre el inmueble.

Responde La Provincia de Mendoza:


La ley 7422, definida como "norma ampliatoria" del área natural protegida creada por la ley 6200, con el alcance de
la ley 6045, mantiene un modelo de vida característico productivo de la Provincia de Mendoza, donde se han
desarrollado actividades turísticas, agrícolas, agroindustriales, ganaderas y de servicios, conjuntamente con las
relativas a los fines y objetivos del Ejército Argentino, como institución de raigambre histórica y constitucional arts. 75
inc 10 y 27, 99 inc. 2° y 14 de la C.N.

C.S.J: Está en tela de juicio la interacción de las potestades federales y las competencias (concurrentes) con las
provincias y si existe manifiesta afectación o interferencia concreta al fin público concebido a un establecimiento de
utilidad nacional. El ejercicio de las competencias concurrentes que la Constitución Nacional consagra en los arts.
41, 43, 75, incs. 17, 18, 19 y 30, y 125, importan la interrelación, cooperación y funcionalidad en una materia común
de incumbencia compartida como es el caso de la protección del medioambiente en un área en donde se encuentra
una parte de un establecimiento de utilidad nacional. Esta Corte ha sostenido que el sistema federal importa
asignación de competencias a las jurisdicciones federal y provincial, no implica subordinación de las provincias al
gobierno central pero sí coordinación de esfuerzos y funciones dirigidos al bien común general

Resolución: Rechaza la demanda y argumenta:

1- La competencia originaria de esta Corte prevista en los arts. 116 y 117 de la C.N.
2- El art. 41 y 121 de la C.N. establece que es deber de las autoridades proveer una Protección amplia al Medio
Ambiente, las provincias delegaron a la Nación la competencia para dictar las normas que contengan los
presupuestos mínimos de protección ambiental y aquellas conservaron la potestad de dictar las normas necesarias
para complementarlas, en esa línea de ideas se sanciona de la ley 25.675 de presupuestos mínimos.
3- El art. 124 C.N la Provincia de Mendoza, de conformidad con el poder que no delegó a la Nación y debido a ser la
titular del dominio originario de los recursos naturales existentes en su territorio declaró área natural protegida
(leyes 6200 y 7422) a la zona de Laguna del Diamante.

El Ejército Argentino pretende aplicar en el inmueble de su propiedad únicamente la ley 25.675 el mínimo de tutela
ambiental y desconocer que la provincia conservó la potestad de dictar normas Ambientales complementarias debido
a que es la titular del dominio originario de los recursos naturales que se encuentran en su territorio, el art. 75, inc.
30, de la C.N establece que "Las autoridades provinciales y municipales conservarán los poderes de policía e imposición
sobre estos establecimientos de utilidad nacional en tanto no interfieran en el cumplimiento de aquellos fines", y esta
Corte ha dicho que las actividades en los establecimientos de utilidad nacional no cuentan con inmunidad absoluta
ante la potestad de imposición general que se impone a las provincias y el menoscabo al fin público concebido ha de
ser efectivamente demostrado por quien lo alega, por lo tanto no hay violación a las normas constitucionales, ya que
hay un menoscabo en la utilización del predio no una imposibilidad de uso.

Disidencia del señor presidente doctor don Carlos Fernando Rosenkrantz.

Resolución: Hacer lugar a la demanda seguida por el Estado Nacional -Ejército Argentino- contra la Provincia de
Mendoza y declarar la inconstitucionalidad de las leyes locales, argumenta:

La decisión sobre el fondo de este litigio tiene como contexto la interacción de las competencias federales y locales,
según la distribución que resulta del art. 75, inc. 30, de la C.N. el Congreso dicta la legislación necesaria para el
cumplimiento de los fines específicos de los establecimientos de utilidad nacional en el territorio de la República. Las
autoridades provinciales y municipales conservarán los poderes de policía e imposición sobre estos establecimientos,
en tanto no interfieran en el cumplimiento de aquellos fines.
Respecto de esta situación el Tribunal debe resolver si la Provincia de Mendoza se ha mantenido dentro de los límites
establecidos por el art. 75, inc. 30, que en lo sustancial implica la exclusión de la jurisdicción provincial cuando su
ejercicio interfiere con el propósito de interés público propio del establecimiento de utilidad nacional.
Aun cuando los Estados provinciales tengan el dominio de los recursos naturales art.124C.N y solo hayan delegado en
la Nación la fijación de los presupuestos mínimos ambientales arts. 41 y 121, resulta insoslayable que las disposiciones
y resoluciones nacionales que regulan la actividad del Ejército Argentino deban aplicarse sobre él, de manera que
quede resguardada la previsión contenida en el art. 75, inc. 30, sin menoscabar, impedir, perturbar, dificultar, frustrar
o entorpecer los fines federales que determinaron la creación y la continuidad del establecimiento, el deber en que se
encuentra el gobierno nacional de asegurar el derecho a un ambiente sano, en los términos del art. 41 de la
Constitución, y ha sido reglamentado por la ley 25.675, cuyas reglas, fines y principios le resultan plenamente exigibles.
En el marco del Sistema Federal Ambiental, establecido en su art. 23, se impone al gobierno nacional, de las provincias
y de CABA la carga de actuar de manera coordinada en el desarrollo de las políticas ambientales tendientes al logro
del desarrollo sustentable.

Disidencia de la señora vicepresidenta doctora doña Elena I. Highton de Nolasco

Resuelve: Hace lugar a la demanda, La Provincia de Mendoza carece de facultades para expropiar el inmueble en
cuestión sujeto a la jurisdicción del gobierno federal. Argumenta:

Se debe afirmar que las disposiciones dictadas en virtud del poder de policía que se pretende atribuir a la Provincia de
Mendoza, interfieren en el ejercicio de las funciones que ejecuta el Estado Nacional. La provincia por vía legislativa
altera la naturaleza y el destino del bien, sin haber acreditado fehacientemente de qué modo concreto aquel genera
una afectación que debe ser controlada, o incluso corregida.

1- El art. 16 de la ley 6045 La autoridad de aplicación de la presente norma propondrá integrarse al manejo y gestión
de las áreas de jurisdicción nacional compatibilizando los objetivos que fije en la materia el gobierno nacional con
los del gobierno provincial". La mención de las medidas que la legislación local impide, evidencian que existe una
incompatibilidad efectiva entre los alcances de dicha legislación y la finalidad específica y propia del
establecimiento.
2- Art. 31 de la C.N dada la incompatibilidad puesta de resalto, se debe dar preeminencia a la tutela ambiental que
pesa sobre el Estado Nacional, a quien le resultan aplicables y le son exigibles el cumplimiento de la ley 25.675.
3- Art. 41 de la C.N obliga a proteger el medio ambiente en los establecimientos del Ejército como es el caso que nos
ocupa.
4- Aun cuando los Estados provinciales tengan el dominio de los recursos naturales art.124C.N y solo hayan delegado
en la Nación la fijación de los presupuestos mínimos ambientales arts. 41 y 121, resulta insoslayable que las
disposiciones y resoluciones nacionales que regulan la actividad del Ejército Argentino deban aplicarse sobre él,
de manera que quede resguardada la previsión contenida en el art. 75, inc. 30, sin menoscabar, impedir, perturbar,
dificultar, frustrar o entorpecer los fines federales que determinaron la creación y la continuidad del
establecimiento, el deber en que se encuentra el gobierno nacional de asegurar el derecho a un ambiente sano,
en los términos del art. 41 de la Constitución, y ha sido reglamentado por la ley 25.675, cuyas reglas, fines y
principios le resultan plenamente exigibles.
5- La ley 7422, disposición normativa que constituye la declaración de utilidad pública a esos fines, la que debe ser
descalificada por inconstitucional, lo cierto es que la norma citada está vigente toda vez que una provincia no
puede declarar la utilidad pública de un establecimiento de utilidad nacional, que no ha sido formalmente
desafectado de esa finalidad por la autoridad nacional, sin lesión al sistema federal la facultad expropiatoria sea
una de las reservadas por las provincias dentro de su territorio, y la autonomía de estas no admite interferencia
federal conforme el reparto de los poderes nacionales y provinciales que resultan de los arts. 75, inc. 12, 121 y
122 de la C.N ya que tal atribución cede cuando el inmueble pertenece al Estado Nacional y en él funciona un
establecimiento de utilidad nacional.

“GOBIERNO DE LA CIUDAD AUTÓNOMA DE BUENOS AIRES C/ CÓRDOBA, PROVINCIA DE S/ EJECUCIÓN FISCAL”

Hechos: CABA inicia juicio ejecutivo contra la provincia de Córdoba para el cobro de $ 205.535,01 más intereses, costos
y costas, manifiesta que el título ejecutivo, consiste en el certificado de deuda n° 730 emitido de acuerdo con la ley
local 2808 art. 5° por la dirección legal y técnica del ministerio de salud local. El juez interviniente intima a la Provincia
al pago de la suma demandada, más el 30% en concepto de intereses y costas, o a oponer excepciones en el mismo
plazo, bajo apercibimiento de llevar adelante la ejecución.

Córdoba: Córdoba y opone excepción de incompetencia, alega que como estado autónomo, la provincia no puede ser
sometida a los tribunales locales de la Ciudad autónoma de Buenos Aires. Niega la existencia y legitimidad de la deuda
reclamada y opone las excepciones de inhabilidad de título y falta de legitimación pasiva.
En cuanto el tribunal competente, sostiene que el caso corresponde o bien a la competencia originaria de la CSJN o
bien a los jueces locales de la Provincia de Córdoba, pero en ningún caso a la jurisdicción de los tribunales de la Ciudad
Autónoma 116 y 117 de la C.N.

CABA: La actora, se opone a la procedencia de la excepción de incompetencia. Expresa que el objeto del presente
proceso es una cuestión de derecho público local que en modo alguno puede válidamente someterse a otra
jurisdicción que no sea la de la CABA, si se lo hiciese se violaría el art 129 de la C.N.
Juzgado de Primera Instancia: declara su incompetencia para entender en las presentes actuaciones y ordena su
remisión a esta Corte Suprema de Justicia de la Nación.

Resuelve CSJN: Se declara que la presente causa corresponde a la competencia originaria de esta Corte, prevista en el
art 117 de la CN. Argumenta:

1-En 1994 la CABA adquirió un nuevo estatus constitucional expresado en el art. 129 de la C.N reformada en cuanto
establece que "Ella ciudad de Buenos Aires tendrá un régimen de Gobierno autónomo con facultades propias de
legislación y jurisdicción, su jefe de gobierno será elegido directamente por el pueblo de la ciudad. El Congreso de la
Nación convocará a los habitantes de la CABA para que mediante los representantes que elijan a ese efecto dicten el
estatuto organizativo de sus instituciones"
2- En el 2007 esta Corte resolvió que la CABA no tiene el mismo derecho que las provincias a la competencia originaria
de la Corte Suprema, en esta oportunidad se presenta uno supuestos excepcionales que exige que esta Corte
modifique la doctrina de un precedente.
3-El caso "Nisman" este Tribunal decidió que los jueces nacionales con asiento en la CABA no son equiparables a los
jueces federales a los efectos de declarar la admisibilidad del recurso extraordinario cuando media denegación del
fuero federal, reconoció que las limitaciones jurisdiccionales de la CABA son producto de una situación de hecho, la
inexistencia de un poder judicial local que pudiera juzgar todas las causas regidas por los códigos nacionales del art.
75,inc 12 de la C.N esta Corte reconoció en "Nisman" que CABA tiene una aptitud semejante a la de las provincias
argentinas para ejercer plenamente la jurisdicción para realizar la autonomía que le fue concedida por el art. 129 de
la Constitución.
4-Determina las razones por las que CABA… Es ciudad por sus características demográficas. Es ciudad constitucional,
porque es la única designada expresamente por su nombre y con atributos específicos de derecho público en la C.N,
a diferencia de las otras ciudades que son aludidas genéricamente al tratar los municipios de provincia. Y es ciudad
constitucional federada, porque integra de modo directo el sistema federal argentino conjuntamente con los restantes
sujetos políticos que lo componen, tanto los de "existencia necesaria" o "inexorables", cuya identificación y regulación.
5-La reforma de 1994 introduce a la ciudad como un actor autónomo del sistema federal y al hacerlo modifica la
premisa de que la unión nacional requería suspender la participación de la ciudad como sujeto autónomo, el status
de "ciudad constitucional federada". Dota a la ciudad de autonomía "de legislación y jurisdicción", y por esta vía la
incluye en el diálogo federal prevé la distribución de recursos de la coparticipación impositiva con la ciudad art. 75
inc2 C.N. o la posibilidad de la intervención federal en su territorio para garantizar la forma republicana de gobierno
(art. 75, inc. 31), transforma radicalmente la naturaleza política y jurídica de la CABA que pasa a gobernarse por una
Legislatura y un Jefe de Gobierno elegido directamente por el propio pueblo de la ciudad.
6- El art. 117 de la C.N no debe ya postularse como un obstáculo para conceder a la CABA el privilegio federal de litigar
en instancia originaria ese rigor no debe llegar al punto de afectar la vigencia de otras normas constitucionales, como
sería en este caso el art. 129.

“GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES C/ ESTADO NACIONAL (PODER EJECUTIVO NACIONAL) S/ ACCIÓN
DECLARATIVA DE INCONSTITUCIONALIDAD”

El día 16 de abril del corriente año se presentó el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires e inició una
acción declarativa en los términos del art. 322 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación contra el Estado
Nacional, a fin de obtener la declaración de inconstitucionalidad del art. 2º del decreto de necesidad y urgencia
(DNU) 241/2021 del Poder Ejecutivo Nacional, que modificó lo dispuesto en el art. 10 del decreto 235/2021 y
estableció –en su último párrafo– la suspensión del dictado de clases presenciales y de las actividades educativas no
escolares presenciales en todos los niveles y en todas sus modalidades, desde el 19 hasta el 30 de abril de 2021,
inclusive, en el ámbito del aglomerado urbano denominado “Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA)” definido
en el art. 3º del decreto 125/2021.

Afirmó, en lo sustancial, que la norma impugnada viola de manera flagrante lo dispuesto por la Constitución
Nacional, en cuanto garantiza el respeto de la autonomía de las provincias mientras estas aseguren la educación
primaria (art. 5º), y garantiza y establece específicamente la autonomía de la Ciudad de Buenos Aires (art. 129).

Destacó que el DNU cuestionado no presenta ninguna prueba o estudio para justificar la decisión adoptada; que no
pueden verse avasalladas de manera arbitraria e injustificada.
Consideró que el decisorio nacional es inconstitucional por haber sido dictado sin necesidad. Agregó que el decreto
en cuestión supone una forma vedada u oblicua de intervenir la jurisdicción autónoma de la Ciudad de Buenos Aires
lo cual, de ser esa la intención, también debía realizarse mediante la sanción de una ley del Congreso Nacional, ya
que este órgano no se encuentra en receso.

Aludió a la insuficiencia, por los motivos económicosociales y educativos que señaló, de la escuela virtual para tener
por cumplida la obligación de prestar el servicio de educación, y a la evidencia científica que demostraría que la falta
de presencialidad ocasiona un grave perjuicio a los niños, niñas y adolescentes en cuanto a su evolución psicológica,
interpersonal y social.

Enumeró diversas disposiciones de los tratados de derechos humanos con jerarquía constitucional; mencionó las
recomendaciones de organismos internacionales; según las cuales, las escuelas debían ser lo último en cerrarse.

Explicó que las medidas sanitarias que deban adoptarse en los establecimientos educativos en el ámbito de la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) se encuentran reservadas a su jefe de gobierno y no al Poder Ejecutivo
Nacional.

Esgrimió que el art. 129 de la Constitución Nacional solamente limita la autonomía local cuando el ejercicio de sus
facultades impida o dificulte aquellas que ejercen las autoridades nacionales.

Observó que, según lo dispuesto en el art. 2º del DNU 241/2021 (que sustituyó al art. 10 del DNU 235/2021), las
provincias pueden decidir sobre la continuidad o suspensión de las clases presenciales, pero la Ciudad no, lo que –a
su juicio– constituye una clara violación al principio de igualdad; traiciona el espíritu del federalismo y lesiona
gravemente el necesario equilibrio entre los integrantes de la República.

Insistió en que la norma impugnada es inconstitucional por ser palmariamente contraria al principio de razonabilidad
(art. 28 de la Constitución Nacional), ya que no hay datos científicos

Finalmente, pidió que se dicte una medida cautelar mediante la cual se disponga la inmediata suspensión de los
efectos del art. 2º del DNU 241/2021 en cuanto dispuso la suspensión de las clases presenciales en el ámbito de la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y que se ordene al Estado Nacional abstenerse, hasta el dictado de la
sentencia definitiva y firme, de llevar a cabo cualquier conducta que implique ejecutar la norma cuestionada.

En fecha 20 de abril los copresidentes de la “Asamblea Permanente por los Derechos Humanos”, invocando dicho
carácter, presentaron el escrito titulado “Se presentan como amicus curiae”, explicando los motivos por los cuales
consideran que la entidad que presiden posee un interés legítimo en el asunto y solicitando que se admita su
intervención en el proceso en la calidad alegada, en los términos de la acordada 7/2013, a los fines de aportar
argumentos jurídicos para la resolución de la cuestión. Dicha presentación fue agregada en el expediente a los fines
de ser considerada por el Tribunal en su oportunidad.
El día 25 del mismo mes, y alegando la misma condición, se presentaron las personas que allí se identificaron,
invocando su condición de integrantes del colectivo denominado “Padres Organizados”.
Por su parte, el día siguiente, se efectuaron sendas presentaciones, también como “amigos del tribunal”, del
presidente de la “Asociación Civil Nace Un Derecho” y del señor Oscar Alfredo Atienza, en su carácter de médico
cirujano. En cada una de las presentaciones referidas los presentantes explicaron los motivos por los cuales
consideran poseer un interés legítimo en el asunto.

En fecha 26 de abril el Estado Nacional contestó la demanda y solicitó su rechazo. Después de efectuar un
“señalamiento” respecto de la competencia originaria declarada por esta Corte en la causa y de efectuar una
negación genérica y particular respecto de los hechos expuestos en la demanda, defendió la constitucionalidad del
decreto de necesidad y urgencia federal 241/2021, tanto en su dimensión de legalidad como en la de razonabilidad.
A partir de la situación epidemiológica que describió, intentó justificar el objeto de la norma discutida, así como el
ámbito de aplicación territorial decidido para las medidas allí dispuestas (“región del AMBA”). Explicó que la norma,
en cuyo eje subyace el fin de restringir el tránsito y la circulación de personas, se dictó en ejercicio de la competencia
sanitaria de emergencia.
Manifestó que no podía dejar de señalarse que “la CABA ha consentido todos y cada uno de los Decretos dictados
entre los años 2020 y 2021, anteriores al DNU N° 241/2021” (página 71 del escrito de contestación de demanda).
En fecha 29 de abril el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires respondió el traslado referido en el punto anterior.
En su escrito la actora expuso que los informes acompañados por la demandada no refieren específicamente a la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires sino a la extensión geográfica del “AMBA” que, si bien la abarca, no debe ser
contemplada de manera genérica debido a que la situación epidemiológica difiere en las distintas realidades que la
comprenden. Sostuvo que corresponde que la Ciudad de Buenos Aires sea tratada como una jurisdicción autónoma a
la que le competen consideraciones particulares inherentes a su condición como tal, independientemente del
movimiento poblacional que se produce entre las distintas jurisdicciones.

En la misma fecha señalada en el punto anterior el señor Procurador General de la Nación interino dictaminó:
En su dictamen consideró que –en virtud de los fundamentos que allí desarrolla y en el marco de la doctrina de este
Tribunal referida a los decretos de necesidad y urgencia– los argumentos expuestos en la norma refutada no
alcanzan para fundar un estado de necesidad que permita legitimar la suspensión; no cabe tener por configurada la
existencia de las circunstancias fácticas descriptas en el art. 99, inciso 3°, de la Constitución Nacional.

Esta demanda corresponde a la competencia originaria de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, según los
arts. 116 y 117 de la Constitución Nacional.

Que al ser el federalismo un sistema cultural de convivencia, cuyas partes integrantes no actúan aisladamente, sino
que interactúan en orden a una finalidad que explica su existencia y funcionamiento, el ejercicio de las competencias
constitucionalmente asignadas debe ser ponderado como una interacción articulada.

El armónico desenvolvimiento del sistema federal de gobierno depende de la “buena fe”, de la “coordinación” y de
la “concertación” recíproca entre los distintos estamentos de gobierno (Nación, Provincias, Ciudad de Buenos Aires y
municipios).

Cabe en primer término recordar que a partir de la reforma del año 1994 la Ciudad de Buenos Aires adquirió el
status constitucional que se expresó en el nuevo artículo 129, según el cual “tendrá un régimen de Gobierno
autónomo con facultades propias de legislación y jurisdicción, y su jefe de gobierno será elegido directamente por el
pueblo de la ciudad”.

La Corte estableció que la Ciudad Autónoma de Buenos Aires tiene un puesto equiparable al de las provincias en el
sistema normativo que rige la jurisdicción de los tribunales federales y, por lo tanto, el mismo derecho a la
competencia originaria de esta Corte establecida en el artículo 117 de la Constitución Nacional.

Resulta evidente la consolidación de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires como sujeto del federalismo argentino
en tanto “ciudad constitucional federada”.

La Ciudad Autónoma de Buenos Aires integra de modo directo la federación argentina, surgiendo sus competencias
no por la intermediación de los poderes nacionales -como antes de la reforma constitucional de 1994-, sino del
propio texto de la Constitución Nacional (cfr. art. 129 Constitución Nacional) y de las normas dictadas en su
consecuencia.

En el particular marco de análisis que marca la Constitución para definir la competencia de la Ciudad Autónoma de
Buenos Aires, cabe señalar que de los límites que impone la capitalidad no surge ningún obstáculo para que esta
decida sobre la modalidad presencial o virtual en que corresponda llevar a cabo la educación en su territorio.

Al momento de la inclusión del citado art. 75 inc. 19 en la Constitución Nacional, la atribución de esa competencia
educativa al Congreso de la Nación no significó desconocer las competencias provinciales para regular sobre esa
materia.

Que corresponde a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires —al igual que a las provincias— la atribución para decidir
sobre los modos de promover y asegurar la educación de sus habitantes. El artículo 125 de la Constitución Nacional
establece que “Las provincias y la ciudad de Buenos Aires pueden conservar organismos de seguridad social para los
empleados públicos y los profesionales; y promover el progreso económico, el desarrollo humano, la generación de
empleo, la educación, la ciencia, el conocimiento y la cultura” (resaltado añadido).

El citado decreto enuncia que fue dictado “con el fin de contener y mitigar la propagación de la epidemia de COVID-
19 con el objeto de preservar la salud pública”.
La Convención Constituyente de 1994 plasmó en el artículo 129 de la Constitución Nacional, tales atribuciones
legislativas sanitarias le corresponden asimismo a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en su carácter de “ciudad
constitucional federada”.

Que tanto la autonomía de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para definir la modalidad educativa como la
atribución federal para atender a una emergencia sanitaria deben entenderse en el marco del federalismo que
ordena la Constitución Nacional.

La distribución de competencias en un Estado federal como el nuestro, y la complejidad de aspectos que pueden
converger en una misma realidad, exigen que el preciso deslinde de competencias se haga atendiendo
cuidadosamente a las circunstancias de cada caso.

Las normas adoptadas por las autoridades nacionales no solo no deben contradecir a la Constitución ni a los tratados
internacionales sino tampoco invadir el ámbito competencial de las provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos
Aires.

Corresponde examinar en este caso la invocación de la competencia sanitaria por parte del Estado Nacional al dictar
el DNU 241/2021 para regular sobre los modos de garantizar la educación.
El reconocimiento de las atribuciones regulatorias sanitarias de la Nación no significa que alcance con la mera
invocación de la salud para sellar la validez de su pretendido ejercicio.
La Administración se encontraba obligada a explicar, la adecuada proporcionalidad entre el objeto de la decisión y su
finalidad.

Las alegaciones ensayadas sobre la cantidad de personas que utilizaron el transporte público de manera coincidente
con el inicio de las clases presenciales, la circulación masiva de personas entre el Gran Buenos Aires y la Ciudad de
Buenos Aires, o el aumento de la proporción de casos de COVID-19 en personas de trece (13) a dieciocho (18) años y
de veinte (20) a veintinueve (29) años, sin mayores explicaciones sobre la particular incidencia relativa de la
educación presencial en la propagación del COVID-19, no alcanza para justificar el ejercicio de una competencia
sanitaria federal.

El art. 2° del DNU 241/2021, la falta de justificación suficiente para ejercer una competencia sanitaria que alcance
a suspender la modalidad presencial de la educación en la Ciudad deja al descubierto que, en este caso, el Estado
Federal en lugar de ejercer una atribución propia invadió una que le resulta ajena.

La previsión del “AMBA” como un área susceptible de adopción de políticas específicas en materia epidemiológica
por el Estado Nacional a través del art. 3° del DNU 125/2021 no puede ser entendido como la constitución de una
“región” en los términos del art. 124 de la Constitución Nacional, ni puede implicar una alteración de las
potestades provinciales o de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Este Tribunal se encuentra obligado a velar porque se respete el sistema institucional de división de poderes que
establece la Constitución (art. 1°), tanto en su aspecto material en el marco del sistema republicano de gobierno
(ramas legislativa, ejecutiva y judicial), como en su dimensión territorial propio del sistema federal argentino (en
el que se articulan de manera coordinada las potestades del Estado Nacional, provincias, Ciudad Autónoma de
Buenos Aires y municipios).

Oído el señor Procurador General de la Nación interino, se hace lugar a la demanda respecto del planteo referido
a que en el caso concreto se violó la autonomía de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Con costas en el orden
causado (art. 1° del decreto 1204/2001). Notifíquese, comuníquese esta decisión a la Procuración General de la
Nación y, oportunamente, archívese.

Que, en materia de educación, las competencias también son concurrentes.

También podría gustarte