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12 La acción humana transform adora : ti trabajo v ia técnica


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Si todo emerge de la naturaleza, todos los seres vivos encuentran
en ella todos los medios que necesitan para su desarrollo. Ante tal

situación, todos los seres vivos, para mantener su propia condición
Á e dice que los animales están provistos de
t
biológica, tienen que promover una serie de actividades. Las for­ un sistema primitivo fijo de acciones, que son
C
mas que adoptan estas actividades dependen directamente de có­ los instintos o comportamientos innatos. El ser
mo estén constituidos orgánicamente en su especie. humano, por el contrario, cuenta con un se­
gundo sistema flexible de acciones que le per­
mite aprender y requiere el pensamiento y el
lenguaje. El siguiente texto de E ibl -E ibesfeldt ,
extraído de su obra Amor y odio (pág. 9), ilus­ ©
tra con precisión el comportamiento innato de é
los animales.
Los animales tienen un sistem a de necesid ad es elem entales
o rgán icas, tales como: comer, beber, procrear, etc., y disponen de "La ardilla de Europa central esconde nueces y
é
in stin to s o comportamientos innatos, que se realizan de modo avellanas en el otoño para provisión invernal.
idéntico en todos los miembros de una especie. Su finalidad es sos­ Al hacerlo así, sigue un patrón unitario: con la r
tener al animal en la naturaleza permitiéndole satisfacer eficaz­ nuez en la boca busca en el suelo hasta dar
mente sus n ecesidades. De este modo, los animales están perfec­ con la base de un tronco de árbol; entonces ©
tamente adaptados a su medio. Todo lo que a los animales les inci­ hace un agujero con las patas delanteras, echa ©
ta a actuar tiene exclusivamente una finalidad biológica, no están la nuez, la pone bien firme con el hocico y
dotados para desarrollar otras posibilidades. Por eso, cuando el después le vuelve a echar encima la tierra sa­ Q
animal no puede ejercer su actividad instintiva, no puede hacer cada. Las ardillas muy jóvenes no tienen este

nada más y se deja morir. comportamiento, porque llegan al mundo des­
nudas y ciegas. ©
Por el contrario, los seres humanos, como seres culturales
Repetidas veces he criado ardillas de modo € '
que somos, podemos seguir co n d u cta s ap ren d id as in telig en ­
que no tuviesen ningún ejemplo ni pudieran
te s o comportamientos que se adquieren con la práctica y que re­
tampoco tratar por sí mismas de esconder nue­
quieren el pensamiento y el lenguaje. Gracias a estas nuevas ©
ces. Pues a pesar de eso, dominan la técnica
conductas, el ser humano supera la eficacia de los instintos y
de ocultar las nueces, que es propia de su es­
puede transformar directamente la naturaleza para adaptarla ©
pecie. La primera vez que se les ofrecía nue­
mejor no sólo a la satisfacción de sus necesidades, sino, incluso, ces a las ardillas ya crecidas, se las comían in­ f .
de sus deseos. mediatamente. Pero ya hartas, empezaban a
©
esconderlas. Corrían dé acá para allá buscan­
do, hasta que empezaban a arañar en un rin­ é
cón de la jaula; a continuación soltaban la
nuez, la afirmaban con el hocico y volvían a
©
hacer los movimientos de echar tierra y apiso­ ©
narla con las patas delanteras, aunque no ha­
bían sacado nada de tierra del piso. Esto de­
muestra claramente que se trata de una cade­
na comportamental cuya programación se
transmite por herencia y se desenvuelve invo­
luntaria y automáticamente."
©
L o s a n im a le s es tá n p e r fe c ta m e n te a d a p ta d o s a
su m e d io . D isp o n e n d e u n s is t e m a in stin tiv o o
d e c o m p o r ta m ie n to in n a to q u e le s p e r m ite s a t is ­
fa c e r s u s n e c e s id a d e s e fic a z m e n te . L a c o n s tr u c ­
c ió n d e p r e s a s e s u n e je m p lo c la r o d e e s ta c a p a ­
c i d a d e n lo s c a s to r e s y r e s p o n d e a un m o d e lo o
p a t r ó n fi j o d e a c c io n e s .

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La acción humana transform adora : el trabajo y la técnica *í 2

De este modo, los seres humanos nos servimos de la naturaleza


para c r e a r en ella nuestro propio medio. Nuestros instintos han El trabajo, que ha superado el nivel de
quedado modificados de tal modo por la cultura que nuestras ac­ la actividad instintiva y que es exclusiva­
tuaciones en la naturaleza tienen una finalidad transbiológica y mente un obrar humano, transforma lo dado,
se dirigen, incluso, hacia lo superfluo. natural e inhumano, y lo adapta a las necesi­
dades humanas y, al mismo tiempo, realiza los
Si el ser humano no encuentra en la naturaleza aquello que de­ fines humanos en la naturaleza y en el mate­
sea, se esfuerza por crearlo. Para mejorar sus condiciones natura­ rial que esta misma le ofrece (...). El trabajo es
les de vida, el ser humano trabaja sobre la naturaleza para trans­ tanto transformación de la naturaleza como
formarla al modo hum ano. realización de los designios humanos en ella.
El trabajo es proceso o acción en el que, en
Mediante el trab ajo, pues, el ser humano interviene directa­ cierto modo, se constituye la unidad del hom­
mente sobre los medios que la naturaleza le ofrece para, transfor­ bre y de la naturaleza sobre la base de su recí­
mándolos, realizar en ella sus propios fines. 1Pqc. i 1 proca transformación: el hombre se objetiva en
el trabajo y el objeto es arrancado del contexto
natural originario, modificado y elaborado. El
. hombre alcanza en el trabajo su objetivación, y
2 ¿QUÉ ENTENDEMOS POR TRABAJO? el objeto es humanizado. En la humanización
8 de la naturaleza y en la objetivación o realiza­
ción de sus intenciones, el hombre constituye
La gran pluralidad de formas culturales que encontramos hace di­ el mundo humano. El hombre vive en el mun­
fícil definir con precisión qué podemos entender por trabajo. do de sus propios significados y creaciones,
En sentido am plio, se entiende que es trab ajo toda actividad mientras que el animal está atado a las condi­
hu m an a cu alqu iera que sea el m odo com o se ejerza. No obstante, ciones naturales.
suele considerarse que la actividad humana solamente se convier­ K. KosiK: Dialéctica de lo concreto,
te en trabajo cu an do requiere un esfuerzo, más o menos penoso, págs. 221-222
encaminado a producir un objeto útil con el que satisfacer necesi­
dades o deseos individuales o sociales.
® ¿Qué aspectos tiene el trabajo según el
En sentido m ás restringido, se entiende por trab ajo todo es­ texto?
fuerzo hu m ano ap lica d o a los objetos de leu n atu raleza p a r a produ-
bienes dispon ibles p a r a el consum o com unicándoles utilidad, y • ¿En qué consiste el trabajo com o activi­
valor. De este modo, el trabajo sería el tributo que el ser humano dad humana?
tiene que pagar para su superviviencia, pero gradas a él, en los • ¿Qué se entiende en el texto por m undo
bienes producidos quedaría una especie de marca representativa hum ano?

E l t r a b a jo , q u e s u p e r a l a a c t iv id a d in s tin tiv a ,
e s u n o b r a r e x c lu s iv a m e n te h u m a n o . M e d ia n te
e l t r a b a jo , e l s e r h u m a n o p r o d u c e b ie n e s q u e s a ­
t is fa c e n n e c e s id a d e s in d iv id u a le s o s o c ia le s . L a
n e c e s id a d e le m e n t a l d e te n e r v iv ie n d a e s s a t is ­
f e c h a d e m a n e r a fle x ib le e in te lig e n te co n e l t r a ­
b a jo c o o p e r a tiv o d e m u c h a s p e r s o n a s .
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La acción huma‘-i transform adora : el trabajo y la técnica

El ser humano depende tanto de sus productos que le resulta­


ría imposible sobrevivir sin la provisión regular de comida, bebi­ g g Para la mayoría de las personas en todas
da, vestidos, vivienda, etc. [Pqc- 2 ¡ las sociedades, la actividad productiva,
o trabajo, ocupa una parte de su vida mayor
Así pues, el trabajo comprende tres características: que cualquier otro tipo de actividad. En las so­
- Ser un elemento fundamental del ser humano, que transfor­ ciedades modernas estamos acostumbrados a
ma el medio natural para instalarse en él. que las personas trabajen en una gran variedad
- Ser una acción que se realiza de acuerdo con un plan; el tra­ de ocupaciones, pero esto sólo se ha producido
a raíz del desarrollo industrial.
bajador elige los medios con vistas a alcanzar un fin.
- Ser una actividad que requiere un esfuerzo corporal penoso La mayoría de la población de las culturas tradi­
y, en principio, obligado. cionales se ocupaba en una actividad principal:
la recolección o producción de comida (...).
Por tanto, el trabajo compromete al ser humano en cuanto tal y
se halla ligado al proceso de humanización en un doble sentido: el El trabajo puede definirse como la ejecución
Homo se hace Homo faber y, a la vez, hace posible la existencia de de tareas que implican un gasto de esfuerzo
mental y físico y quq tienen como objetivo la
un mundo humano.
producción de bienes y servicios para atender
a las necesidades humanas. Una ocupación u
oficio es el trabajo que se hace a cambio de
una paga regular o salario. En todas las cultu­
ras, el trabajo es la base del sistema económi­
co, o economía, constituido por aquellas insti­
El significado y la valoración que se ha hecho del trabajo ha expe­ tuciones que proveen a la producción y distri­
rimentado grandes cambios a lo largo de las épocas y culturas en bución de bienes y servicios.
las que se ha desarrollado la humanidad. A continuación vamos a A. G iddens : Sociología, pág. 525
analizar con brevedad solamente aquellas que consideramos que
están más próximas a nosotros.
• ¿Qué diferencia existe entre el trabajo
3*1 EL fRABAJO EN LA CULTURA CLÁSICA GRIEGA en las sociedades tradicionales y en las
sociedades modernas?
En los orígenes de la cultura griega se reconoce el trabajo como
actividad productiva que garantiza la supervivencia del ser hu­ • ¿Cómo se define el trabajo en el texto?
mano al transformar la naturaleza para satisfacer sus necesida­ • ¿Qué relación se establece en el texto
des. Así, el trabajo se valoraba como la contribución de todos los entre el trabajo, el oficio y la economía?
individuos a la prosperidad nacional. La agricultura y el comercio
eran las dos grandes actividades a las que se dedicaban los primi­
tivos griegos.
HESÍODO (hacia finales del siglo VIII a.C.), en su poema didácti­
co moral Los trabajos y los días, hace una exaltación del trabajo.
Éste no es ninguna deshonra para el trabajador; lo deshonroso es la J u a estructura de la sociedad perfecta que
inactividad. De este modo, los griegos de la época sentían el trabajo establece Platón se basa en la más rígida dis­
como un deber que tiene que ser ejercido por todos los ciudadanos. tinción de clases: cada individuo debe ocupar
Esta valoración del trabajo se mantuvo durante varios siglos. el lugar que le corresponde de acuerdo con los
intereses del Estado. A cada uno de los tres
Sin embargo, se fue perdiendo progresivamente a medida que,
grupos le corresponde una ocupación y la prác­
con las guerras, aumentó la afluencia de esclavos a los que se obli­
tica de una virtud específica.
gaba a ejercer las profesiones manuales que los ciudadanos libres
iban despreciando y que pasaban, así, a ser calificadas como tra­ Así, en la categoría inferior los trabajadores y
bajos serviles. comerciantes deben practicar la templanza; en­
cima de ella, la clase de los guerreros, que tiene
PLATÓN (428-347 a.C.), en L a República, clasifica a los indivi­ la función de defender, debe distinguirse por su
duos jerárquicamente en tres grandes grupos: valor; finalmente, la categoría superior, la de los
- Gobernantes: hombres libres de categoría superior que tie­ gobernantes filósofos, encargada de dirigir el
nen que ser los más sabios y los mejores, por lo que les co­ j. Estado, debe practicar la prudencia.
rresponde el gobierno de la ciudad.
La acción humana transform adora : e i trabajo y la técnica *1

- G u e r r e r o s : hombres libres de categoría intermedia que tie­


nen que ser los más valientes, por lo que les corresponde la Porque la filosofía, incluso hallándose

-
defensa de la ciudad. 1
T r a b a j a d o r e s : esclavos de categoría inferior que tienen que
ser moderados y templados, por ln que les corresponde la
B así maltratada, retiene una reputación
grandiosa en comparación con las otras técni­
cas, y a esto aspira mucha gente dotada de na­
turalezas incompletas; la cual, tal como tiene
obligación de trabajar para todos los ciudadanos.
el cuerpo arruinado por las técnicas art a n a ­
Esta desvalorización del trabajo se acentúa aún más dada la les, así también se halla con el alma emDotada
consideración que para los griegos tenía la belleza física. El traba­ y enervada por los trabajos manuales. ¿No as
jo conlleva esfuerzo y fatiga y, con frecuencia, el trabajador se sir­ esto forzoso? -¡Claro que sí! (...)
ve de útiles primitivos cuyo uso prolongado no favorece precisa­
Quedan entonces, Adimanto, muy pocos que
mente la armonía del cuerpo ni el cultivo de la mente.
puedan tratar con la filosofía de manera digna:
Por eso, PLATÓN consideraba que el trabajo manual era una ac­ alguno fogueado en el exilio, de carácter noble
tividad muy poco adecuada para la realización de los sublimes y bien educado, que, a falta de quienes lo per­
ideales de belleza y de virtud propios de la aristocracia de la épo­ viertan, permanece en la filosofía; o bien un
ca. El ciudadano libre y noble valora por encima de todo el o c i o , alma grande que nace en un Estado pequeño y
que le permite dedicarse plenamente al trabajo intelectual con­ desprecia, teniéndolos en menos, los asuntos
templativo, que constituye la verdadera sabiduría. IPqc. 31 políticos; o bien algunos pocos bien dotados
naturalmente que con justicia desdeñan los
ARISTÓTELES (383-322 a.C.) reconoce que el ser humano tiene demás oficios y se acercan a la filosofía.
necesidades que es preciso satisfacer mediante la activ id ad p ro ­
ductiva. Por tanto, la actividad manual y mecánica forma parte Platón: La República, 4 9 5d y 496 b
del conjunto de las actividades humanas y alguien en la ciudad
deberá dedicarse a ella; sin embargo, afirma también que la vida
propiamente humana está por encima de las necesidades materia­ • ¿Qué activid ad e s m encionadas en el
les. La verdadera acción humana está directamente relacionada texto son consideradas inferiores a la fi­
con la actividad contemplativa o sabiduría; sin ella no es posible el losofía? ¿Por qué razón?
ejercicio de la libertad ni el uso de la palabra en la asamblea ni in­ • ¿Por qué se afirma que la filosofía "retie­
tervenir en el gobierno de la ciudad.
ne una reputación grandiosa en com pa­
Así, para ARISTÓTELES, las mujeres y los esclavos, seres huma­ ración con las otras técnicas"? ¿Crees
nos inferiores, trabajan en la producción de los bienes necesarios, que esto sigue siendo así hoy en día?
mientras que los hombres, superiores por su condición de libres,
permanecen ociosos para atender a las acciones de gobierno y de
defensa de la ciudad. El trabajo manual siempre debe estar supe­
ditado al intelectual; por eso, el trabajador manual debe atender
continuamente las indicaciones del técnico.

E n s u s o r íg e n e s , la c u ltu r a g r ie g a v a lo r a b a e l
tr a b a jo : la in a c tiv id a d e r a d e s h o n r o s a . M ás
a d e la n t e , la a flu e n c ia d e e s c la v o s , q u e e je r c ía n
p r o fe s io n e s m a n u a le s , c o n tr ib u y ó a c o n s id e r a r
e l t r a b a jo c o m o d e s p r e c ia b le , d e s v a lo r iz a c ió n
q u e e l i d e a l d e b e lle z a , d e l o s g r i e g o s y l a c o n ­
c e p c ió n d e l a p o l i s a c e n t u a r o n .
E n e s t a á n f o r a g r i e g a d e f i n a l e s d e s i g l o V I a .C .
s e r e p r e s e n ta la r e c o g id a d e l a a c e itu n a .
i

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SSRRí&jaaiMnn
I J» La acoón howah.» transformadora: el-trabajo y u río-ttc* ------ - ________-

En la É tica, A R IS T Ó T E L E S relaciona la felicidad del hombre con


las acciones que realiza el hom bre prudente, que es aquel que Precisados estos puntos, nos falta consi­
sabe en todo momento lo que conviene h acer y lo lleva a la p rá c ti­
ca. En la P olítica, al describir cómo debe ser el gobierno de la ciu­
dad, afirma que el trabajo manual es el adecuado tanto para los
B derar si todos deben participar en dichas
funciones (...), o cada una de esas funciones
debe atribuirse a distintos ciudadanos, o bien
algunas son necesariamente privativas y otras
instrumentos inanimados o artefactos como para los esclavos, pe­
ro en ningún caso es el adecuado para los ciudadanos. La misma comunes. No ocurre lo mismo en todos los re­
naturaleza contribuye a esta valoración al hacer que los cuerpos gímenes. Como hemos dicho, puede ocurrir
que todos participen de todas las funciones, y
de los ciudadanos sean erguidos, útiles para la vida política, y, en
que no participen todos de todas, sino ciertos
cambio, los cuerpos de los esclavos sean fuertes, aptos para los
ciudadanos, de ciertas funciones. Esto es lo
trabajos manuales. Llega así a explicar la esclavitud como un he­
que diferencia a los regímenes. Así, en las de­
cho natural. 1D q c . 4 1
mocracias, todos participan de todo, y en las
oligarquías ocurre lo contrario.
3,2 EL T R A B A JO EN EL C R ISTIA N ISM O
Ahora bien, como nos estamos ocupando del
La tradición cultural judía, a través del cristianism o, aporta una régimen mejor, y éste es el que puede hacer
nueva perspectiva de las relaciones que el ser humano mantiene más feliz a la ciudad, y la felicidad, según an­
con el mundo, creado y gobernado por Dios. El ser humano ocupa tes dijimos, no es posible aparte de la virtud,
un lugar privilegiado y le corresponde la responsabilidad de cola­ resulta evidente que en la ciudad mejor gober­
borar con su Dios en el devenir histórico de la creación. En este nada y que posee hombres justos en absoluto y
contexto, el trabajo adquiere un valor teológico que acentúa su di­ no según los supuestos del régimen, los ciuda­
mensión creativa, ausente anteriormente. danos no deben llevar una vida de obrero ni
mercader (...) ni tampoco deben ser labradores
En la B ib lia , el trabajo es considerado como algo fundamental los que han de ser ciudadanos (...).
en la vida humana. Recoge el aspecto negativo del trabajo por el
Pero hay también en las ciudades un elemento
esfuerzo, fatiga y dolor que conlleva y, también, por las condicio­
guerrero y otro que delibera sobre lo conve­
nes sociales en las que frecuentemente se ejerce, que hacen del
niente y que juzga sobre la justicia, y éstos pa­
mismo un peso abrumador y odioso. Relaciona directamente el recen ser principalmente partes de la ciudad.
trabajo con la caída y la consiguiente pérdida de la armonía del ¿Hemos de considerar también estas funciones
ser humano con la naturaleza. La dureza del trabajo sería, así, como distintas, o hemos de atribuir ambas a
una consecuencia del p eca d o: la penitencia que el ser humano tie­ los mismos ciudadanos? También aquí es evi­
ne que padecer ante la resistencia que la naturaleza le ofrece al dente que en cierto modo se deben atribuir a
ser dominada. Sin embargo, por encima de esta consideración ne­ los mismos, y en cierto modo a ciudadanos
gativa que ofrece el trabajo, aparece otra mucho más positiva y distintos.
acorde con los planes dé Dios en la creación. Así, el ser humano es
Aristó teles : Política, 1329a

• Según A r is t ó t e le s , ¿qué diferencia las


dem ocracias de las oligarquías?
• ¿Qué cualidades y actividades corres­
ponden a los ciudadanos? ¿Por qué?

F a m o s o ó l e o d e J e a n - F r a n q o is M i l l e t , E l A n ­
g e lu s . E n l a t r a d i c i ó n c r i s t i a n a , e l r e z o d e l A n ­
g e lu s , a m e d io d ía , s u p o n e u n a p a u s a en l a j o r ­
n a d a d e t r a b a j o c o n e l f i n d e d a r g r a c i a s a D io s
p o r t o d o s lo s b ie n e s q u e h a o t o r g a d o a lo s
hom bres. ___

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'.T

-------------------— ---------------------------------------------------------------------------------------------------------------- La a c c ió n h u m a n a t r a n s f o r m a d o r a : el t r a b a jo yu téc n ic a "1 S&

instalado por Dios en el Edén para que lo cultive y guarde, y,


cuando Dios ha ordenado el universo, se lo entrega al hombre pa­ Y dijo Dios: Hagamos al hombre a nues­
ra que lo ocupe y som eta, i Dqc. 5 1 tra imagen y semejanza; que domine los
peces del mar, las aves del cielo, los animales
En una proyección sin duda antropomórfica. Dios en la Biblia domésticos, los reptiles de la tierra. Y creó
aparece cansado tras los seis días de trabajo creador y el séptimo Dios al hombre a su imagen; a imagen de Dios
descansa. Al hombre le debe suceder lo mismo y, por eso, el Decá­ lo creó; hombre y mujer los creó. Y los bendijo
logo prescribe el sábado como día de descanso. El trabajo como y les dijo Dios-, creced, multiplicaos, llenad la
condición de la vida humana se impone a todos; los textos bíblicos tierra y sometedla; dominad los peces del mat,
estimulan el trabajo bien hecho y reprenden la ociosidad como de­ las aves del cielo, los vivientes que se mueven
gradación: el que no trabaje que no coma. sobre la tierra. El Señor Dios tomó al hombre y
lo colocó en el jardín de Edén para que lo
El trabajo, pues, sostiene y expande la creación y así debe ser guardara y lo cultivara; el Señor Dios dio este
asumido por el cristiano. Sin embargo, tras la caída del Imperio mandato al hombre: Puedes comer de todos
romano, cuando la Iglesia como institución toma el timón cultural, los árboles del jardín; pero del árbol del cono­
SAN AGUSTÍN (354-450) plantea ya que la ciudad terrena con sus cimiento del bien y del mal no comas; porque
valores materiales debe supeditarse a la ciudad celestial con sus el día en que comas de él, tendrás que morir.
valores espirituales. El trabajo manual, de nuevo, empieza a ser Al hombre le dijo: Porque le hiciste caso a tu
considerado degradante. mujer y comiste del árbol que te prohibí co­
En la Edad Media, los monasterios, verdaderos núcleos de la mer, maldito sea el suelo por tu culpa: come­
vida cultural y económica de la época, tenían el lema ora et la ­ rás de él con fatiga mientras vivas; brotarán
para ti cardos y espinas, y comerás hierba del
bora. La ocupación principal del monje es la oración, que condu­
campo. Con sudor de tu frente comerás el pan,
ce a la eterna contemplación de Dios; pero también debe traba­
hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella te
jar para no olvidar los sufrimientos que el pecado trajo a la vida
sacaron; pues eres polvo y al polvo volverás.
terrenal.
Libro del Génesis, 1, 26-28; 2, 15-17
Durante el feudalismo se fue imponiendo una estructura jerár­ y 3, 17-19
quica de la vida social dividida en tres estamentos:
- Clero: hombres privilegiados que se dedican a la oración y a
la cultura. • ¿En qué consiste la responsabilidad del
- N obleza: hombres guerreros que se reparten las conquistas. hombre en la Tierra?

- Labradores o agricultores: hombres rebajados a la condición • ¿Por qué la situación en la que se en­
de siervos al servicio personal de un señor, del que trabaja­ cuentra el hombre en el jardín de Edén
ban las tierras y a las que se hallaban sometidos. , . se identifica con la felicidad humana?.
• ¿A qué se debe que las relaciones del
hombre con el mundo sean duras y ago­
tadoras?

L a s o c ie d a d m e d ie v a l te n ía u n a e s tr u c tu r a
fu er te m en te je r á r q u ic a , p ir a m id a l. E n su b a se ,
u n a g r a n m a s a d e c a m p e s in o s se o c u p a b a d e l
d u r o t r a b a jo a g r íc o la m ie n t r a s lo s p r iv ile g ia d o s
- a l t o c le r o y n o b le z a - s e d e d ic a b a n a m a n t e n e r
e l o r d e n e s ta m e n ta l.
I

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9*
£

c
12 La ACCIÓN HUMANA TRANSFORMADORA: El TRABAJO Y U TECNICA

En la Baja Edad Media (siglos XIII, XIV y XV), con la apari­ * Gremio:
c
ción de los burgos, se desarrollan nuevas actividades artesanales i
Asociación que agrupaba a las personas de una mis­
y comerciales, que son promovidas por trabajadores libres asocia­ ma ciudad que ejercían la misma profesión. Su fina­ t
dos en grem ios*, lo que contribuye a dignificar su condición labo­ lidad era, además de la asistencia mutua de los aso­
ral y social. Nacen las artes y los oficios con sus maestros y apren­ ciados, el control: de las técnicas y calidades, del i
dices, y aparece el salario. volumen y de los precios de la producción, y del nú­
mero de maestros en el oficio.
c

3.3 EL T R A B A JO EN LA S S O C IE D A D E S M O D ER N A S
c
Durante la E d ad M oderna se produce una progresiva revaloriza­
ción del trabajo como actividad de todos y no ya de una sola clase €

D
Es evidente que en la palabra profesión,
social. El trabajo adquiere una dignidad desconocida hasta enton­ en el sentido de posición en la vida o de C
ces al ser considerado, incluso, como una bendición divina y signo una esfera delimitada de trabajo, hay cuando
de gracia para el creyente cristiano. menos una reminiscencia religiosa: la idea de€
una misión impuesta por Dios (...) es producto *
En el R en acim ien to aparecen en Europa los Estados moder­ de la Reforma (...). Según Lutero, es evidente
nos. Las monarquías centralizadoras tienen un planteamiento que la vida monástica no sólo carece por com­ €
económico nacional e internacional. Promueven políticas activas pleto de valor para justificarse ante Dios, sino C
con las que aumentar las riquezas y mejorar la satisfacción de las que además es el producto de un desamor
necesidades de sus súbditos. Se regulan los beneficios y los sala­ egoísta, que trata de sustraerse al cumplimiento €
rios, se favorece la creación y expansión de nuevas empresas, se de los deberes que precisa cumplir en el mundo

institucionalizan ferias y mercados y se promueven tratados de (...). El cumplimiento en el mundo de los pro­
comercio que aumentan la producción y la comercialización de los pios deberes es el único medio de agradar a i
productos. Europa extiende sus dominios por el resto del mundo
conquistando y colonizando América y Africa.
Dios, que eso y sólo eso es lo que Dios quiere, y
que, por tanto, toda profesión lícita posee ante
c
Dios absolutamente el mismo valor (...). l
Socialmente se favorece la iniciativa privada, el espíritu inven­
tivo y el desarrollo de la ciencia moderna. El empleo de procedi­ Afianzarse en la propia profesión se considera i.
ahora como un deber para conseguir en la lucha
mientos mecánicos trae consigo la especialización y la división del €
diaria la seguridad objetiva de la propia salvación
trabajo. Surge el cap italism o m e rca n tilista y con él una clase
y justificación; en lugar del pecador humilde y C
de burgueses que se enriquecen progresivamente.
abatido al que Lutero otorga la gracia si confía
£
La R eform a P ro te s ta n te contribuyó a desarrollar una nue­ arrepentido en Dios, se cultivan ahora esos san­
va valoración del trabajo como p ro fesió n . El trabajo manual, tos seguros de sí mismos, que vemos personifi­
considerado como deshonroso y propio de gentes sin recursos, cados en ciertos hombres de negocios de la era
dignifica ahora al ser humano al permitirle adueñarse del uni­ heroica del capitalismo y aún hoy, en ciertos
verso. En particular, el Calvinism o considera el éxito en los ne­ ejemplares aislados. En segundo lugar, como
gocios como señal de predestinación divina y la vida laboriosa medio principalísimo de conseguir dicha seguri­

como la única capaz de reconciliar al hombre pecador con su dad en sí mismo, se inculca la necesidad de re­
Dios. 1Poc. 6] currir al trabajo profesional incesante, único mo­ C
do de ahuyentar la duda religiosa y de obtener la
En estas socied ad es m odernas, el trabajo deja de ser un m e­ seguridad del propio estado de gracia (...). Dios
é
dio de supervivencia para pasar a ser el fin mismo de la vida. bendice a los suyos dándoles éxito en su trabajo. i
Gracias al trabajo se poseen bienes y se adquiere riqueza. La con­ M. Weber : La ética protestante, €
centración del beneficio en pocas manos favoreció la concentración págs. 85 y 160
de capitales y el nacimiento del hom bre económ ico, lejos ya de C
la valoración espiritualista anterior del trabajo. €
El progresivo uso de la tecnología y la instrumentalización del • ¿Qué se entiende en el texto por el tér­
mino profesión?

trabajo lograrán el máximo beneficio económico y con él la explo­
tación de los trabajadores, en especial de mujeres y de niños, con €
• ¿Qué valor tiene para L u t e r o el ejerci­
salarios de mera subsistencia que obliguen a seguir trabajando. cio de la profesión? f
Este nuevo régimen acabó siendo más deshumanizador que nin­
guno por las condiciones tan duras y miserables en las que vivían • ¿Qué relación se establece entre profe­ I
los proletarios, tanto en los propios centros de trabajo como en los sión y salvación? $
núcleos suburbiales de las ciudades.
I

266
------La acción humana transform adora : el trabajo y la técnica H

3.4 EL TRABAJO EN LA S SO C IE D A D E S C O N TEM P O R Á N EA S


¿En qué consiste, entonces, !a enajena­
En el siglo XIX, el capitalism o m ercantilista m oderno se transfor­
ma en el cap italism o in d u strial contem poráneo. Como siste­
ma económico se expande rápidamente por los países europeos y
sus colonias. Su progresiva expansión exigirá una mejor organiza­
B ción del trabajo? Primeramente en que
el trabajo es externo al trabajador, es decir, no
pertenece a su ser; en que, en su trabajo, el
trabajador no se afirma, sino que se niega; no
ción del sistema y una evolución del nivel económico de los traba­ se siente feliz, sino desgraciado; no desarrolla
jadores que, de sólo produ ctores, se irán convirtiendo en consum i­ una libre energía física y espiritual, sino que
dores que dan salida a la producción. mortifica su cuerpo y arruina su espíritu. Pdr
eso el trabajador sólo se siente en sí fuera del
Se puede comprender fácilmente por qué todas las ciencias del trabajo, y en el trabajo fuera de sí. Está en lo
momento, y con ellas también la filosofía, muestran un especial suyo cuando no trabaja y, cuando trabaja, no
interés por analizar el fenómeno del trabajo y las circunstancias está en lo suyo. Su trabajo no es así voluntario,
en las que se lleva a cabo. Así, el M arxism o nace como una crítica sino forzado, trabajo forzado. Por eso no es la
al sistema de producción capitalista burgués y alienta la organiza­ satisfacción de una necesidad, sino solamente
ción del movimiento internacional obrero. un medio para satisfacer las necesidades fuera
del trabajo.
K M A R X (1818-1883) considera que el trabajo como actividad
productiva constituye la dimensión esencial de la vida humana. Su carácter extraño se evidencia claramente en
Por medio del trabajo, el ser humano libre y conscientemente el hecho de que tan pronto como no existe una
transforma la naturaleza y se ap rop ia de ella hu m anizán dola. A coacción física o de cualquier otro tipo, se hu­
la vez, se realiza a sí mismo como miembro de una comunidad y ye del trabajo como de la peste. El trabajo ex­
de la especie humana, asegurándose su desarrollo y reproducción. terno, el trabajo en que el hombre se enajena,
La esencia humana se manifiesta en el trabajo como actividad vi­ es un trabajo de autosacrificio, de ascetismo.
tal. El trabajo hace que el ser humano sea lo que es diferenciándo­ En último término, para el trabajador se mues­
lo del animal y de las cosas. tra la exterioridad del trabajo en que éste no es
Sin embargo, la a ctiv id ad lab ora l en el sistema capitalista des­ suyo, sino de otro, que no le pertenece; en
humaniza al trabajador. El trabajo, en vez de realizar al trabaja­ que, cuando está en él no se pertenece a sí
dor, resulta ser una actividad de en ajenación, que impide que el mismo, sino a otro.
trabajador se reconozca en aquello que hace. El trabajo a sa la ria ­ K . Ma r x : Manuscritos de economía y filosofía,
do esclaviza al trabajador y lo reduce a una mercancía entre las pág. 109
mercancías, sometiendo así la esencia humana a las leyes del
mercado. Los productos del hombre se vuelven contra él y se esta­
blece una relación de hostilidad entre el ser humano, la naturale­ • Exp lica el sign ificado que tiene en el
za y los demás hombres. IDqc. t 1 texto el término enajenación.
• ¿Qué efectos produce en el trabajador
el fenómeno de la enajenación?

U n a d e la s c o n s e c u e n c ia s d e la R e v o lu c ió n I n ­
d u s t r ia l es la p r o le ta r iz a c ió n d e l tr a b a jo . E l
t r a b a jo a s a l a r i a d o s e c o n v ie r te e n m e r c a n c ía ,
s o m e t id a a la s le y e s d e l m e r c a d o : lo s s a l a r i o s s e
r e d u c e n a l lím ite v ita l y la s c o n d ic io n e s d e t r a ­
b a jo s e d e g r a d a n . L a ex p lo ta c ió n d e la m u je r y
e l t r a b a jo in fa n til so n m u es tr a d e e s ta d e s h u ­
m a n iz a c ió n ex trem a .
¡

267

$
’■ « * La acción humana transformadora: el trabajo y la técnica _ ---------- —'

Esta situación solamente se podrá superar mediante una trans­


formación revolucionaria de su sistema de producción y de' la socie­
dad clasista que lo sustenta. Esta tendrá lugar una vez que la clase
obrera, tomando conciencia de su situación, se organice y se apropie 1 desarrollo combinado de la informática y

de los medios de producción. Esto dará paso a una nueva sociedad las telecomunicaciones ha permitido estable­
sin clases y a un sistema productivo y de distribución de bienes que cer las bases tecnológicas de lo que se llama
hará posible el desarrollo integral de todas las capacidades del ser teletrabajo. Se trata de una forma de trabajo
humano y la satisfacción real de todas sus necesidades. no presencial que se caracteriza por la disper­
sión física de los trabajadores sin pérdida de
contacto con un núcleo centralizador gracias a
3*5 EL TR A B A JO EN LA A C TU A LID A D las telecomunicaciones. Es decir, cada agente
o grupo puede acceder a un nodo integrador
En la actualidad, la naturaleza y valoración del trabajo como acti­
remoto para recoger o depositar información.
vidad y su significado en la vida global del ser humano están su­
De esta forma es posible consultar una base de
friendo grandes transformaciones debidas, entre otros, a los si­ datos, intercambiar información mediante
guientes facto res: mensajería electrónica o videocomunicación,
- La excesiva división del trabajo, que ha traído consigo la enviar documentación elaborada o recogerla
progresiva despersonalización del trabajador, considerado para seguir trabajando en ella. Como es lógico,
como una pieza más dentro del proceso de producción. La ac­ la comunicación entre todos los agentes re­
tividad del trabajador es mecánica, monótona y repetitiva, y quiere normalmente un notable ancho de ban­
tiende a ser sustituida por equipos automáticos. da para ser eficaz, requisito que cumple la tec­
nología digital.
- El desarrollo y la aplicación de las n u evas tecnologías han
aumentado considerablemente la productividad al mismo Es difícil determinar el alcance de estos cam­
tiempo que han reducido la jornada de trabajo. El trabajador bios, que se suceden vertiginosamente. No
puede ahora atender también al manejo, diseño y fabricación obstante, es obvio que tendrán un gran impac­
de nuevas y más eficaces máquinas, para lo cual necesita de­ to social y laboral.
sarrollar su saber, una mayor formación.

a u t o m a tiz a c ió n c r e c ie n te d e lo s p r o c e s o s d e
p r o d u c c ió n a m o r t iz a m u c h o s p u e s to s d e t r a b a jo
a u n q u e a b r e p a s o a n u ev a s p r o fe s io n e s c u a lifi­
c a d a s y a la p o s i b i l i d a d d e r e d u c ir e l tie m p o d e ­
d ic a d o a l tr a b a jo . S in e m b a r g o , e l p le n o e m p le o
- e l d e r e c h o d e io d o s a l t r a b a jo - p a r e c e u n a le ja ­
n a u to p ía .

268
La acción humana transform adora: El trabajo y la técnica 1 2

- La universalización del consumo ha traído consigo que el


trabajo como actividad esencial del ser humano pase a ser Características del trabajo remunerado
valorado ahora como un medio para la adquisición dé bienes. - Dinero: Un sueldo o salario es el recur­
Esta relación trabajo-consumo como motor de crecimiento so principal del que dependen la mayoría de
económico ha hecho que en la actualidad más que trabajar lo las personas para cubrir sus necesidades. Sin
que interesa es tener un puesto de trab ajo. tal ingreso, las ansiedades a la hora de afron­
- El fenómeno del desempleo, consecuencia de la sustitución tar la vida cotidiana tienden a multiplicarse.
del trabajador por la máquina, que al vaciar de contenido el
- Nivel de actividad: El empleo a menudo pro­
derecho al trabajo incide en la reivindicación de un subsidio porciona una base para la adquisición y el ejer­
que garantice al ciudadano el poder seguir consumiendo cicio de conocimientos y capacidades. Incluso
dentro de un reparto más equitativo de la riqueza. cuando el trabajo es rutinario, ofrece un entor­
- La consideración de que el trabajo no lo es todo en la vida no estructurado en el que se pueden absorber
humana, que el trabajo no es au tosu ficien te, que quedan las energías de una persona.
otras muchas posibilidades, intereses y capacidades en la vi­
- Variedad: El empleo proporciona acceso a
da del ser humano que también es preciso atender, que, in­ contextos que contrastan con el entorno do­
cluso, tienen sus prioridades, por lo que es preciso generar méstico. En el entorno del trabajo, incluso
nuevos estilos de vida y nuevos puestos de trabajo. aunque las tareas sean relativamente monóto­
En nuestra sociedad, tener un puesto de trabajo continúa sien­ nas, los individuos pueden disfrutar al hacer
do muy importante como elemento estructurador de la personali­ algo diferente a las tareas de casa. El desem­
pleo reduce esta fuente de contraste con el
dad y del ciclo de actividades cotidianas. Un trabajo remunerado
ambiente doméstico.
mantiene la autoestima y el valor social de los individuos.
Por todo ello hay que seguir afirmando que el trabajo es un de­ - Estructura de tiempo: Para las personas en
un empleo regular, el día normalmente está or­
re ch o hum ano y que la sociedad tiene el d eb er de proporcionar­
ganizado en torno al ritmo del trabajo. Si bien
lo a todos sus miembros. IDqc.8 [
este ritmo puede a veces ser opresivo, propor­
ciona un sentimiento de dirección a las activi­
dades cotidianas. Quienes están sin trabajo
ACTIVID AD ES DÉ COM PRENSIÓN frecuentemente encuentran en el aburrimiento
un problema muy importante y desarrollan un
1. Define, en el contexto de este apartado, los siguientes términos sentimiento de apatía con respecto al tiempo.
y expresiones:
- Contacto social: El entorno de trabajo a me­
sistema de necesidades - sistema de acciones - mundo humano nudo proporciona amistades y oportunidades
- oficio - trabajo servil - estado - profesión - derecho humano de participar en actividades compartidas con
- hombre económico - puesto de trabajo - subsidio. otros. Al separar a una persona de su entorno
de trabajo, es probable que disminuya su cír­
2. Explica por qué se diferencian en el ser humano necesidades'y
culo de posibles amigos y conocidos.
deseos y cuál es la función que juega el trabajo en esta diferen­
ciación. - Identidad personal: El empleo usualmerite
se valora por el sentimiento de identidad social
3. ¿Por qué se afirma que el trabajo es una actividad propiamente
estable que ofrece. Para los hombres en parti­
humana?
cular, la autoestima muchas veces está vincu­
4. ¿Cómo evoluciona en la cultura1clásica griega el sentido y la va­ lada a la contribución económica que aportan
loración del trabajo? al mantenimiento del hogar.
i
5. Resume la concepción cristiana del trabajo. A. G iddenS: Sociología, pág. 548
i. 1
6. ¿Qué relación existe entre la reforma protestante y el ongen del \ ________________
capitalismo?
• Ordena, en función de las que conside­
7. Describe la situación del trabajo y del trabajador en la Revolu­ res más importantes, las seis característi­
ción Industrial. cas del trabajo remunerado.
8. ¿Cómo repercute en la valoración del trabajo la universalización • Explica los criterios en que te has basa­
del consumo? do para clasificarlas.

I
i

269

¡1
TRABAJO Y PROFESIÓN EN LA VIDA CONTEMPORÁNEA

El trabajo esla fuente di las riquezas. afirman los espe­ humanos adultos. La empresa produce bienes
cialista ai economía política. Lo es, en efecto, a la par
y servicios, pero sobre todo, produce sujetos y
que la naturaleza, que te provee de los materiales que él
hoy más que nunca se presenta la necesidad de
convierte ai riqueza. Pero el trabajo es muchísimo más
que eso. V lo es ai tal grado que, basta cierto punto, de­
producir sujetos políticos que posean la capaci­
bemos decir que el trabajo ha creado al propio hombre. dad de autogobernarse.

Federico Engels. A lo largo de los diversos capítulos del presente


El papel del trabajo ai la transformación del mono ei
libro hemos podido analizar cómo las palabras
hombre.
que cotidianamente utilizamos para comunicar­
nos tienen diversas acepciones dependiendo del
^ n las últimas décadas ha crecido de manera contexto en el que sean emitidas o del autor que
notable el interés por la reflexión ética en haga uso de ellas. Así, descubrimos que la pala­
JL s a íe l campo de la economía y, específica­ bra ética se emplea como adjetivo calificativo o
mente, de la empresa. No obstante, las opinio­ como el nombre de una rama de la filosofía; de
nes sobre este fenómeno se encuentran polari­ la misma manera, reflexionamos acerca de los
zadas : por una parte tenemos a los partidarios diferentes significados que se le ha atribuido al
del holocausto que aseguran que vivimos en una concepto de ser humano a lo largo de la historia
crisis absoluta de valores, que la empresa se ha y en las distintas culturas. El término "trabajo"
vuelto inhumana — prueba de ello es el cre­ opera de modo semejante al de los menciona­
ciente índice de desempleo mundial— y que es dos. Sin embargo, independientemente del co n­
urgente devolver a ésta los valores humanos que tenido que le otorguemos a esta palabra y de las
ha perdido. Por el otro lado, se hallan a los es­ características de la actividad definida con este
cépticos, quienes afirman que la ética no tiene vocablo, el trabajo posee una relación onto-
nada que ver con la economía, que los fines de lógica con la condición humana. Trataremos de
la empresa son sólo económicos y que sus meca­ demostrar esta afirmación analizado el concepto
nismos se regulan de modo independiente de de "trabajo" por medio de dos momentos: 1. A par­
los intereses de las personas. tir un análisis comparativo, demostraremos que
Nuestra opinión es que las posiciones extre­ la humanidad le ha dado diversos significados a
mosas no contribuyen a entender los problemas esta palabra en función de las culturas, por lo
y que intentar analizar el fenómeno económ i­ que las características de esta actividad son una
co y, sobre todo, laboral que hoy vivimos desde convención modificable, no estática. 2. A tra­
fuera de él no nos ayudará a comprenderlo en vés del análisis de las relaciones que tiene esta
forma cabal. Este capítulo está, entonces, diri­ actividad con la vida humana, verificaremos su
gido especialmente a los empresarios, profesio­ calidad óntica por la cual somos lo que hace­
nistas y trabajadores y su propósito es que todos mos,- y, con base en lo anterior, observaremos
ellos descubran dentro de su inserción en el los efectos que pueden tener en la constitución
ámbito económ ico y laboral el potencial que de los individuos concretos determinadas co n ­
tienen en sus manos pues la empresa no es sólo diciones laborales.
la fuente de la riqueza, sino, además, es la fuente Para iniciar esta doble reflexión proponemos
directa de la condición de existencia de los seres distinguir entre cuatro dimensiones de análisis:
CAPÍTULO 14 • TRABAJO Y PROFESIÓN EN LA VIDA CONTEMPORÁNEA

1. Dimensión emotiva. Sobre el sentido de la pala­


bra trabajo todos y cada uno de nosotros
tenemos alguna idea preconcebida. Si en un
salón de clase un profesor solicitara levantar
la mano a aquellos alumnos que trabajasen,
es probable que, sin dudarlo, cada uno sabría
si levantar la mano o no. En este nivel, en
nuestra época contemporánea todos damos
un significado a esta palabra y otorgamos un
valor a la misma, sea esto consciente o no.
El sentido individual, subjetivo que le con­
cedemos a este término y su valor es la pri­
mera dimensión a distinguir. Precisamente, A Cuando trabajamos, cuando actuamos, transformamos
por su carácter emotivo, en esta dimensión nuestro entorno.

solemos tener poderosas emociones en con­


tradas acerca de su sentido y emitir juicios trabajo humano esta liberación de energía
sustentados en la mera experiencia perso­ transformadora tiene dos sentidos.- uno tras­
nal. Juicios y emociones válidos para nues­ cendente que significa que produce un efec­
tra individualidad, pero insuficientes para to fuera del agente, y otro inmanente que se
adentrarnos en el problema social del tra­ entiende como el efecto que causa la acción
bajo. A lo largo de esta exposición no habla­ en el mismo agente. Cuando trabajamos,
remos de esta primera dimensión, pero cada cuando actuamos, transformamos nuestro
lector podrá, finalmente, llegar a problema- entorno pero, sobre todo, nos transforma­
tizar su percepción personal. Esta dimen­ mos a nosotros mismos, nos hacemos capa­
sión de interpretación cobra gran impor­ ces de seguir ejerciendo esa acción, al grado
tancia porque el trabajo ocupa una parte de llegar a ser un hábito. Y por último, aun­
esencial de nuestras vidas, mas no por ello que no menos importante, esta dimensión
podemos dejarnos envolver sólo por em o­ de trabajo implica desgaste y deterioro. No
ciones sin pasarlas por el tamiz del juicio hay trabajo que no deteriore y sí deteriore
crítico. en su liberación de energía.
2. Dimensión física. A parte de la idea consciente 3. Dimensión de la economía moderna. Una tercera
o inconsciente que poseamos acerca del tra­ dimensión se refiere a lo que en la actuali­
bajo o de la reflexión filosófica, económica, dad se entiende por trabajo en el ámbito
ética o moral, lo cierto es que a un nivel fí­ económico, es decir, al sentido que cualquier
sico fundamental, el trabajo es el fenómeno físico consorcio, compañía, empresa o industria
de liberación de energía transformadora sobre un entiende el día de hoy por trabajo, y que
objeto en un tiempo determinado. Esta dimensión será el sentido que se le demandará al indi­
que puede parecer realmente pueril no lo viduo aspirante a formar parte como em­
será tanto cuando la relacionemos con la pleado del mismo. En este nivel centramos
corporeidad del ser humano. En el caso del gran parte de nuestro análisis y discusión. A
LA IN\/e KiCIÓN DEL CONCEPTO DE TRABAJO

] ’
I í •
esta dimensión le llamaremos "significado André Gorz expuestas en su libro Metamorfosis del
del trabajo en la economía moderna o en el trabajo. Bústjueda de sentido1 y las complementare­
sistema de producción capitalista". mos con algunas otras. Precisamente, lo que
4. Dimensión antropológico-Jilosófica. Por último, Gorz plantea en|iu texto es que no siempre le
se halla la dimensión que alude a las relacio­ hemos dado eí-mtsmíb sentido a esta actividad y
nes indisolubles entre la actividad identifi­ lo que se entienda por trabajo en la época co n­
cada como trabajo y la condición humana. temporánea es una construcción que empezó a
En este ámbito, realizaremos un análisis de elaborase en el siglo XVIII,- que se transformó en
las posibles repercusiones del concepto de el siglo XIX y que se consolidó y extremó en los
trabajo en la condición contemporánea del siglo XX y XXI. Es 'decir, la forma en com o esta­
ser humano. A esta dimensión le llamare­ mos acostumbrados a relacionarnos y a realizar­
mos "significado del trabajo para la antropo­ nos por medio del trabajo es una invención pro­
logía filosófica". ducto de ciertos intereses económicos, que hoy
es urgente que revisemos y replanteemos.
Durante el presente análisis sobre el trabajo, Antes de emprender este viaje por la his­
el ejercicio de la profesión y su relación con la toria es necesario agregar que, por lo común,
vida de las personas en la época contemporánea, cuando hacemos una revisión de algún proceso
algunas preguntas que saldrán a la luz y acerca de histórico, difícilmente evitamos la tentación de
las que conviene comenzar a reflexionar serán: valorarlo en relación con nuestro presente y lle­
Para uno mismo, ¿qué es el trabajo?, ¿qué dife­ gar a la conclusión progresista de que si es pa­
rencias y qué similitudes vamos encontrando sado ha sido de alguna manera superado. Lo que
entre la idea propia del trabajo y lo que iremos pretenderemos ahora es intentar descubrir, dife­
descubriendo que es esta actividad para la eco ­ renciar y repensar las características de concep­
nomía moderna, las empresas que contratan y la tos anteriores, sus ventajas y sus desventajas en
vida profesional?, ¿qué puede aportar a la reali­ términos de realización humana, de convivencia
zación de la vida la concepción del trabajo de la social, de salud y de calidad de vida.
antropología filosófica?, ¿de qué modo el tra­
bajo afectará el carácter, el físico, las expectati­ Siglo V a.C.
vas de vida de las personas concretas?, ¿qué se
puede conseguir mediante el trabajo?, ¿qué exi­ La primera referencia que se suele tener acerca
girá de cada uno el trabajo remunerado?, ¿qué de una organización de trabajo es la de la Grecia
factores no se podrán obtener mediante el tra­ clásica de los siglos V y IV a.C. En esa época, las
bajo remunerado? actividades de administración, procesamiento
de los alimentos, cuidado de los animales, etc.,
LA IN V EN C IÓ N DEL C O N C E P T O eran actividades ligadas a la necesidad de la su­
DE TRABAJO pervivencia física. El mundo griego privilegiaba
la actividad contemplativa por sobre la activi­
Para hacer una revisión histórica del conteni­
do que se le ha ido dando a este término, nos 1 Gorz, A ndri Metamorfosis <tel trabajo Bihqmdn JeI sentiJo Crítica Je
apoyaremos fundamentalmente en las ideas de la razin.econimica, Madrid, Editorial Sistema, 1991.
CAPÍTULO 14 • TRABAJO Y PROFESIÓN EN LA VIDA CONTEMPORÁNEA

dad física y material, por lo que el trabajo que se Sin embargo, 1:1 conocimiento de la condi­
requería para la supervivencia era considerado ción del trabajo e i el siglo v a.C. puede utili­
una actividad, si bien ineludible e indispensable, zarse ahora como espejo para cuestionar las
indigna para los hombres libres. Por lo anterior, características y valoraciones de nuestra propia
el trabajo lo llevaban a cabo las mujeres — aso­ condición. Por eje ripio, al revisar la visión grie­
ciadas, por su condición física, a la necesidad— ga, lo primero que resalta es la carencia de liber­
y los esclavos. En cambio, los hombres libres, los tad, valor que para nosotros no sólo es supremo,
ciudadanos, no trabajaban en este sentido físico, sino que es el principio esencial con base en el
sino que se dedicaban a actividades dignas de cual se erige toda ruestra cosmovisión moderna.
su condición: la filosofía, la política, la poesía, la Pues bien, tendríamos que preguntarnos qué
vida pública. Por su condición de necesidad uni­ entendemos por libertad, qué tanto somos libres
da a la naturaleza, el trabajo se efectuaba en foma hoy, para qué somos libres, qué hacemos con
privada, no era remunerado, y lo que se obtenía nuestra libertad, y quizá descubriríamos que la
a cambio era protección, alimentación, vestido, forma en como nos organizamos social, econó­
vivienda, continuidad y cierta solidaridad,- no mica y políticamente no es tan distinta de la que
obstante, se carecía de libertad, de movilidad so­ regulaba a la sociedad esclavista de la antigua
cial, económica o geográfica y de remuneración Grecia. Tal vez llegaríamos a la conclusión de
monetaria. que ciertos modos de organización laboral no
Hoy, estas desventajas nos podrían parecer son tan distintos de los del siglo V a. C.
enormes, pero debemos ubicar este concepto
del trabajo en su contexto. Pensemos en la G re­ Concepción judeccristiana
cia del siglo V, en el mundo del siglo v. ¿Qué co ­
nocimientos geográficos podía tener un habi­ Desde otro punto de vista, podemos hablar de
tante común de la antigua Atenas?, ¿qué poder la concepción del trabajo de la cosmovisión
de movilización?, ¿qué riesgos podría correr si judeocristiana. Ésta no se ubica en un tiempo
se aventuraba a ir más allá de las fronteras de su determinado en la historia ya que aunque pode­
propia ciudad? Evidentemente, las expectativas mos encontrar su fuente en el Génesis bíblico,
de vida de este ciudadano eran muy distintas a es una idea que perdura en la actualidad en mu­
las que podemos tener en la actualidad acerca de chas de las cultura; e individuos, sean éstos cre­
estos temas. Por ello, ¿para qué le podría servir yentes o no. Si seguimos el mito bíblico, pode­
en realidad el dinero, para qué podría servirle mos hallar que des pués de haber sido cometida
la movilidad, la libertad, si no deseaba salir la desobediencia de la primera pareja en el jar­
de Atenas,- para que le servía la acumulación de dín del Edén, el castigo infligido consistió en
capital si ni siquiera conocía esos conceptos? Su conseguir la subsií :encia sólo a partir del sudor
vida estaba predeterminada aun desde antes de de la frente. Así, el trabajo se convierte en el cas­
nacer y por ello tenía una seguridad: sabía qué tigo que debe cumplirse y la relación con Dios
sería de su vida. ¿Cuántos hoy podemos saber en una relación transaccional de padre e hijo,
qué será de nuestra vida?, ¿cuánto tiempo más con todas las implicaciones que puede entrañar
estaremos en el trabajo actual? Las comparacio­ la permanente minoría de edad de la humanidad
nes resultan inapropiadas. entera.
LA INVENCIÓN DEL CONCEPTO DE TRABAJO

Si traducimos estas ideas religiosas al ámbito ha dejado en su lugar al Papa para vigilar la bon­
del trabajo, éste se entiende como una actividad dad del reino de la Tierra. Dado el poder de la
no deseada de la que constantemente se busca Iglesia en la Europa de esa época, era el Papa
escabullir, y en unas relaciones patrón-empleado, quien ungía al rey y le otorgaba el poder sobre
supervisor-obrero, de padre autoritario a hijo las tierras en nombre de Dios como mandato
desobediente que trata siempre de realizar el divino y así, sucesivamente y de manera descen­
mínimo esfuerzo, por lo que el padre debe estar dente, el rey a la nobleza y a los señores feudales
continuamente detrás de él, indicándole lo que quienes, finalmente, tenían la posesión de las
debe o no hacer. El trabajo es una forma necesa­ tierras y todo lo que ellas contuvieran: plantas,
ria de conseguir los bienes indispensables para animales y siervos. Al otro lado del foso, fuera
la vida, pero no es el fundamento de la existen­ de las fronteras del reino o del feudo, el siervo
cia. D icho en otras palabras: "se trabaja para vi­ estaba prácticamente muerto, por lo que no le
vir, no se vive para trabajar". quedaba más que someterse a las órdenes de la
A pesar de que podemos descubrir numero­ autoridad.
sas desventajas en una relación de autoritarismo, Ésta era una cosmovisión completamente
dependencia e inmadurez, una gran ventaja de jerárquica del orden del mundo, y como cosm o­
esta concepción judeocristiana es que abarca visión teológica, absolutamente incuestionable,
una cosmovisión comunitaria del ser humano, lo cuyos valores primordiales eran la obediencia
que significa que concibe al ser humano como a la autoridad, la disciplina, la pertenencia, la
parte de la creación del mundo plasmada por seguridad, la tradición. Aunque pueda parecer
Dios, es el hijo predilecto y la humanidad es una conceptualización muy anticuada, hoy día
una gran familia. Con base en estas creencias es la visión que se halla en el fondo de muchas
podemos encontrar en esta perspectiva un sen­ empresas contemporáneas de los más diversos
timiento de solidaridad, de unidad, de reci­ tamaños: desde la empresa familiar fundada por
procidad, que no existe en otras concepciones, el abuelo o bisabuelo y que es la fuente de la ri­
además de considerar otros ámbitos de la vida y queza de toda la familia, la cual hereda su direc­
no sólo el productivo-remunerativo. Desde este ción,- hasta las empresas trasnacionales que obli­
punto de vista, la solidaridad y la calidad de vida gan a sus empleados a someterse a regímenes tan
son conceptos que hoy en día se vuelve necesa­ autoritarios que o entregan su vida a la empresa,
rio recuperar. como en una antigua cruzada, o están fuera.

Concepción medieval Concepción protestante

En el mismo tenor de la concepción judeocris­ La perspectiva judeocristiana posee una variante


tiana, podríamos detenernos en la interpreta­ que podríamos llamar protestante que, aunque
ción medieval del trabajo. En los siglos V y XV, surge de esa misma concepción, modifica por
la cosmovisión occidental que prevalecía, y que completo los conceptos acerca del trabajo que
nos fue heredada hasta nuestros días dada su tiene la primera definición. En general, desde el
hegemonía política y económica, es la de un punto de vista protestante, el trabajo ya no es un
universo creado absolutamente por Dios, quien castigo, la actividad obligada a realizar,- más
CAPÍTULO 14 • TRABAJO Y PROFESIÓN EN LA VIDA CONTEMPORÁNEA

bien, es el único medio individual por el que se Siglo XVIII


puede ser salvado. Cabe destacar la calidad de
cosmovisión religiosa de esta concepción, lo En este siglo inicia el capitalismo fabril en Eu­
que quiere decir que para el individuo regido ropa, por un lado con el esfuerzo de siervos y jo r­
por la visión protestante del trabajo, éste no es naleros que producían bienes de consumo y ser­
una actividad más, sino la actividad que le co n ­ vicios indispensables para la vida que requerían
cederá o no la salvación eterna. ser siempre renovados y, por otro lado, con los
En la actualidad, esta concepción se ha secu­ artesanos propiamente, quienes producían bie­
larizado, mas no ha perdido su fuerza,- sino que, nes y obras duraderas. Comienza a establecer­
despojada ya de la exclusividad de pertenecer a se la diferencia entre los jornaleros y/o peones
alguna Iglesia protestante, la visión del trabajo pagados por su trabajo y los artesanos que se
como sentido de la vida se ha extendido en el hacían pagar su obra. Así, da inicio la conocida
espíritu del sistema de producción capitalista cadena de producción, pero aún distinta a la que
contemporáneo. Las ventajas que sin duda pode­ hoy conocemos. En el siglo XVIII la materia pri­
mos encontrar en esta interpretación van desde ma le pertenecía al productor, quien no sólo la
una alta capacidad de trabajo — por supuesto, si poseía, sino que tenía un amplio conocimiento
en ello se incluye la salvación eterna— , hasta el de ella y muy probablemente también la había
desarrollo de virtudes com o el ahorro, el asce­ producido, de la misma forma que producía sus
tismo, la responsabilidad, la puntualidad, la ho­ medios de producción, conocía su óptimo fun­
nestidad y altos estándares de calidad. cionam iento y él mismo los hacía funcionar
No obstante, la desventaja que este tipo de transformando la materia prima en el producto.
opción presenta es que se reduce a una actividad Y, finalmente, poseedor del producto, lo consu­
individualista dada la búsqueda solitaria de la mía según sus necesidades. He aquí un círculo
salvación particular, lo que también puede co n ­ virtuoso en el que el trabajador se hace en el
ducir al individuo a problemas por su incapaci­ proceso de trabajo y lo que produce lo produce
dad de solidaridad en las relaciones interperso­ para sí mismo.
nales debido a su alta competitividad. En esta El trabajo en este inicio del capitalismo no
visión "se vive para trabajar y los resultados sólo era un modo de subsistencia, sino todo un
siempre serán más importantes que el individuo, modo Je vida tradicional y los límites de la produc-
su contexto y sus emociones" Además, este
concepto del trabajo lo podemos ubicar como el
problema psicosocial del adicto al trabajo o
"workoholic" (persona que ha perdido todos los
vínculos con el exterior en todos los ámbitos de
su vida y que sólo se siente a gusto sumergido en
el trabajo. Éste se vuelve la razón de su vida y,
aunque puede ser altamente exitoso por sus
estándares de calidad, es un individuo disfun­
cional que no puede entablarcontacto ni siquiera
consigo mismo). A Sistema de producción fabril. Siglo XVIII.
i
1
LA INVENCIÓN DEL CONCEPTO DE TRABAJO

tividad eran los límites del consumo, sólo un pe­ acuerdo con la'vocación es una garantía del
queño excedente era mercancía intercambiable. ejercicio de la libertad individual, o en realidad
Al ser un modo de vida que otorgaba identidad obedece a detehmnantes sociales y/o eco n ó­
a un grupo casi siempre familiar, los valores que micos? ;. '■
se privilegiaban eran el conservadurismo, la tra­ i
dición, la continuidad, y se observaba como con­ Siglo XIX ' .
trario a lo debido cualquier intento de inno­
vación y forma de competencia, no se permitían En el siglo XIX el espíritu del capitalismo cambia
técnicas ni máquinas nuevas, pues al ser un mo­ del fabril incipiente al de la racionalización ex­
do de vida familiar, ¿cómo competir entre her­ trema de todo el proceso de producción. Surge
manos, cóm o negociar o regatear salarios entre un nuevo elemento en el esquema: el capitalista,
familia? Aunque ya se habla de un capitalismo el individuo que ha acumulado capital producto
inicial, éste todavía no estaba regido por la ra­ del trabajo sobrante y con ello ha adquirido la
cionalidad económica que le caracterizará con posesión de todos los elementos del sistema
posterioridad, y pese a que era un medio de sub­ de producción, despojando al productor de la
sistencia, entrañaba aún más que esto: era un me­ tenencia de los medios y apropiándose de su
dio de cohesión, identidad y solidaridad comu­ trabajo para que ya no trabaje para sí mismo,
nitaria. sino para el capitalista. Con esta nueva fórmu­
Com o resulta evidente, esta manera de con­ la, se desvanece el círculo virtuoso del sistema
cebir el trabajo presenta varias ventajas, como la de producción fabril y principia el sistema de
ausencia de tensión que produce la competencia producción capitalista moderno sustentado en
extrema, la solidaridad, lealtad, seguridad, co n­ dos principios: 1. Máxima acumulación de capi­
fianza, especialización del trabajo y el recono­ tal, y 2. Máxima producción. En este sentido,
cimiento al trabajador. Sin embargo, desde la Gorz señala:
perspectiva contemporánea, esta concepción
también tiene sus desventajas, la principal es la La novedad del "espíritu del capitalism o" es la
falta de movilidad profesional y con ello, eco­ estrech ez unidim ensional, in d iferen te a toda
nómica, social y espacial. No obstante, tendría­ consideración que no sea la co n table, co n la que
mos que analizar qué tanto el ideal de movilidad el em presario capitalista lleva la racionalidad
en estos cuatro ámbitos es una realidad hoy en econ óm ica hasta sus últimas con secu en cias.3
día en la mayoría de los países y qué tanto esta
movilidad se da de Jacto en dirección ascendente Específicamente, el nuevo espíritu del ca­
o sólo en dirección descendente. Por ejemplo, pitalismo convierte en número contable, ma­
pensemos en la falta de posibilidad real de as­ nejable y programable todos los elementos del
cender en la escala económica a partir de la o b ­ proceso del sistema de producción, incluso el
tención de una profesión y, por el contrario, en trabajo humano,- y en su búsqueda de mayores
tantos profesionistas que en lugar de estar ejer­ ganancias y máxima productividad, reducirá
ciendo com o médicos, abogados o contadores, costos en todos los momentos del sistema inclu-
subsisten como conductores de taxi. ¿Qué tanto
en nuestros días la elección de una profesión de 3 Gorz, A.O/), d i., p. 32.

.......
CAPÍTULO 14 • TRABAJO Y PROFESIÓN EN LA VIDA CONTEMPORÁNEA

A Sistema de p ro d u cció n . Siglo XIX.

yendo a la fuerza de producción del mismo tra­ dad del proceso de producción se develó en su
bajador. verdadera irracionalidad porque lo sacrifica
El nuevo espíritu del capitalismo significó todo, incluso al ser humano mismo, en pos de
ventajas muy atractivas para la nueva sociedad sus objetivos: el hombre — el capitalista, tam­
burguesa europea, pues la máxima cuantifica- bién— existe par; el negocio y no el negocio
ción del proceso permitió el cálculo y la planea- para la vida. Sin embargo, a pesar de eso, se pre­
ción y, por ende, mayor productividad, eficacia, senta un desarrollo en otros ámbitos de la cul­
y en consecuencia, mayor acumulación de capi­ tura que de otro modo hubiera sido imposible:
tal, mayor libertad y movilidad económica, el reduccionismo unidimensional de la raciona­
social y espacial. lidad económica propia del capitalismo tendrá
Aunque, en contraste, para los desposeídos una capacidad potencialmente emancipadora
de los medios de producción representó falta de en cuanto hace "tabla rasa" de todos los valores
libertad, individualismo, competencia cada vez y fines irracionales que permiten el despliegue
más fuerte, deslealtad, tensión, inseguridad, de­ de las conciencias de clase, género y raza. N in­
sigualdad, y que la productividad fuera un valor guna autoridad, creencia, o ideología tendrá la
por encima del propio trabajador. fuerza que le .c ie re el paso a la emancipación
propiciada por el espíritu del capitalismo, pues
Siglo XX la racionalidad liberal compañera del capita­
lismo se conformó como la condición hege-
Para el siglo XX se llegó al capitalismo extremo. mónica de validación de cualquier condición,-
En este siglo, el trabajador ya no sólo era un ejemplo de esta fuerza emancipadora fue el sur­
desposeído de los medios de producción, sino gimiento y consolidación de la burguesía sobre
un apéndice de la máquina. La famosa racionali­ el poder y condición de la nobleza de los países
LA INVENCIÓN DEL CONCEPTO DE TRABAJO

europeos del siglo XX. No habrá obstáculo que la plusvalía de la mercancía por encima del pro­
le cierre paso a la idea de libertad. pio ser humano, incluso del consumidor, el indi­
Desde el siglo XIX fue necesario convertir el vidualismo, el consumo masivo, la competencia
trabajo en una abstracción mensurable para desleal, la estratificación ahora a nivel mundial
poder ser calculada, se requirió ver el trabajo y no sólo nacional, la desigualdad, la tensión, la
como una entidad en sí misma separada de quien inseguridad.
la realiza. En la actualidad, el trabajo como cate­ Llegamos, pues, a la perspectiva del trabajo
goría económ ica cuantificable está absoluta­ en la economía moderna. Como ya lo m encio­
mente separada de la persona viviente del traba­ namos, para André Gorz el trabajo tal como lo
jador, por ello cifras como 5 000 desempleados entendemos hoy es una invención de la moder­
producto del cierre de la planta de GM en Flint, nidad con todo y sus características, valores y
Estados Unidos, en los años ochenta, es un nú­ contravalores. De entre todas las actividades
mero más que no desvela a ningún accionista. que el ser humano debe realizar para la conser­
Pero, aunque esto es un hecho, no deja de ser vación de su vida y para el desarrollo de sus
cierto que cada unidad de esos 5 000 desemplea­ facultades humanas (actividades todas ellas suje­
dos es un individuo concreto, una vida humana. tas a la definición dada del trabajo en el nivel
El en siglo XX, la categoría económica y físico más elemental, como liberación de ener­
antropológica del trabajo verán su más profunda gía sobre un objeto durante un tiempo determi­
escisión y con ello se perderá el concepto del nado que le transforma y con ello el ser humano
trabajo com o donador de motivación, objetivo transforma su mundo y a sí mismo para poder
y sentido de la vida humana. No obstante, en subsistir), la concepción moderna del trabajo y
este siglo ya no es, como en el anterior, la pro­ el tiempo concedido a ésta excluye:
ductividad el valor supremo que rige al siste­
ma de producción capitalista, este valor ahora 1. Toda tarea diaria necesaria para el manteni­
será sustituido por el de la mano invisible del miento y reproducción de la vida: activida­
mercado. des de aseo y limpieza personal, actividades
Lo anterior significa que en el siglo xx no relacionadas con la alimentación, el ejerci­
basta con ser productivo para acumular capital, cio, el mantenimiento de la salud, el cui­
ahora ser productivo no necesariamente implica dado de los menores.
estar en el mercado y estar en el mercado es el 2. Toda labor relacionada con un cometido
nuevo ideal. Marx se equivocó, no era la dic­ voluntario o interés de importancia privada:
tadura del proletariado, sino la dictadura del voluntariado, actividades políticas, educa­
consumidor la que regiría los destinos de la eco­ ción, cultura en general.
nomía mundial. Por supuesto, un consumidor 3. Todo trabajo doméstico o artístico.
enajenado por el dominio de los intereses crea­
dos de la mercadotecnia. El consumidor es el Estos tres tipos de actividades son indispen­
nuevo eje que determina el sentido del trabajo y sables para la producción y reproducción de la
los nuevos valores son la movilidad, la diversi­ vida humana y no pueden ser prescindibles.
dad, la creatividad, la innovación, la moda. Pero A pesar de eso, el trabajo en la concepción
en ello seguimos descubriendo la falsa libertad, moderna se reduce a un solo criterio: la remune­
CAPÍTULO 14 • TRABAJO Y PROFESIÓN EN LA VIDA CONTEMPORÁNEA

ración económica. Sólo es considerado trabajo ción implica mucho más que un problema de
propiamente hablando lo que es retribuido con agenda.4
dinero, por lo tanto, ninguna de las actividades
mencionadas lo es, aunque sean necesarias para C O N C EP C IÓ N A N TR O PO LÓ G ICA
la conservación y reproducción de la vida hu­ DEL TRABAJO DE KARL MARX
mana.3 Pero, ¿qué se requiere para que una deter­
minada actividad sea pagada? Al inicio de la presente reflexión planteábamos
la posibilidad de que existiera una relación entre
• Que la actividad y/o su producto sean co n­ la actividad denominada trabajo y las caracterís­
siderados útiles para otro, no sólo para el ticas de nuestro ser específico. Si esto es así,
productor. entonces las condiciones del trabajo y la manera
• Por lo anterior, que la actividad y/o su pro­ en como éste se realiza actualmente modifican
ducto sean públicos y por ello el productor de una u otra forma nuestra condición y exigen
sea conocido públicamente en una red alta­ modos específicos de ser en el mundo que per­
mente competitiva. mitan adaptarnos a un estilo de trabajo para es­
• Que la actividad y/o producto sean enaje­ tar en él. En una posición extremosa, pensado­
nados (separados de su productor y entre­ res como Jeremy Rifkin5 consideran que estamos
gados) a otro. cerca de llegar al fin del trabajo no sólo como
tradicionalmente se le entiende, sino incluso al
El trabajo remunerado será, entonces, la fin de la actividad como tal, pues, cada día que
única fuente de la riqueza monetaria o pecunia­ pasa dejan de existir, materialmente hablando,
ria y cualquier otra actividad — por indispensa­ miles y miles de plazas de trabajo, por lo que,
ble que sea— será remitida al tiempo sobrante según él, de manera irremediable en el futuro
que no ocupe el tiempo del “verdadero trabajo prescindiremos de éste como categoría confor-
productor de dinero". El problema que encon­
traremos es que el "trabajo productor de dinero" 4 Hasta aquí hemos realizado el recorrido de la invención del
cada día ocupará más tiempo e irá reduciendo al trabajo desde la perspectiva del mundo europeo. Esta trayec­
toria tiene una justificación: el modo de concebir el trabajo en
mínimo el tiempo de "trabajo no productivo". El
la economía moderna globalizante tiene su base histórica en la
tiempo del trabajo y el tiempo de vivir están economía hegemónica de occidente. Sin embargo, considera­
desunidos, desvinculados y en franca com pe­ mos pertinente dado el objetivo de corroborar nuestra afirma­
ción inicial sobre la condición histórico-cultural del término,
tencia. Si bien esto presenta a simple vista un
revisar la concepción de los antiguos mexicanos, ya que no
problema que podríamos calificar en términos podemos negar la influencia que aún ejercen estas tradiciones
simplistas como de planeación del tiempo o eco ­ sobre la vida cotidiana de muchos grupos sociales mexicanos

nomía del tiempo, revisemos el concepto antro­ En este contexto, revisar esta interpretación nos permitirá apre­
ciar otras formas de organización económica y rescatar lo que
pológico del trabajo y veamos cóm o esta situa- nos puede aportar a la posibilidad de pensar otras maneras de
organización para una mejor calidad de vida. Dada la extensión
1 Ninguna de las actividades que realiza la familia con respecto pertinente del presente estudio, no es posible en estos momen­
al cuidado y mantenimiento de sí misma son consideradas tra­ tos ahondar en la concepción del trabajo del M éxico antiguo.
bajo,- por ejemplo, piénsese en el tiempo que debe ser dedicado Queda pendiente esta reflexión para aquellos que deseen efec­
al cuidado del hogar, al cuidado de la pareja, a la educación de tuarla.
los hijos, etcétera. 1 Rifkin, Jeremy. El fu ifel trabajo, Barcelona, Paidós, 1997.
CONCEPCIÓN ANTROPOLÓGICA DEL TRABAJO DE KARL MARX

madora de la vida humana, si no hacemos algo Entre marzo y agosto de 1844, cuando Marx
por transformar la situación. acababa de publicar Introducción a la Crítica de la
— Para profundizar en la acción del trabajo filosofía del Derecho de Hetjel y Crítica de la filosofía del
como cualidad intrínseca del ser humano, parti­ Derecho de Hegeí, redactó los manuscritos que
remos de la reflexión del pensador que dedicó su constituyen el borrador dé una obra que jamás
vida a este asunto: KarI Maní* llegó a publicar y que conocemos desde su pu­
A más de 150 años de la'producción de su blicación póstumá en 1932 com o Manuscritos
obra, KarI Marx es hoy, todavía, uno de los filó­ económico-filosóficos de 1844, De hecho, los prime­
sofos del que más interpretaciones contradic­ ros lectores de Marx conocieron los Manuscritos
torias y apasionadas se han hecho. Si bien su tiempo después de haber leído El capital, y algu­
obra es de difícil lectura,6 ha producido tonela­ nos de los conceptos humanistas fundamentales
das de manuscritos interpretativos, los cuales que planteó en el primer texto no los volvió a
van desde el acendrado repudio y ridiculización, manejar en obras posteriores.
hasta la más ferviente y, por ello, deformadora De acuerdo con un contrato con su editor,
adoración. Marx se proponía publicar una obra unitaria de
Por otro lado, los acontecimientos geopolí- crítica de la política y de la economía política.
ticos sucedidos en las últimas dos décadas son La parte política estaría constituida por su Crítica
empleados por la ideología neoliberal como de la filosofía del Derecho de Hegel, escrita el año ante­
prueba irrefutable de la falsedad o, por lo menos, rior. Los Manuscritos son el borrador de la parte
craso error, de la propuesta de Marx. Estas inter­ de la economía,- y en un trabajo especial — señala
pretaciones ideológicas confunden su concepto Marx en el prólogo— intentaría exponer la tra­
materialista — reivindicador de la condición bazón del conjunto, la relación entre las diver­
material del ser humano— con una despresti­ sas partes. Este proyecto no se efectuó.
giada y peyorativa concepción determinista de Hasta 1844, Marx sabía muy poco de eco­
la historia,- asimismo, confunden la filosofía pro­ nomía,7 a diferencia de su colaborador Federico
piamente de Marx con el marxismo. No obs­ Engels que al menos ya había tenido contacto
tante, ¿es la filosofía de Marx un pensamiento directo con la creciente industrialización inglesa
superado, cancelado o aún puede darnos ele­ — en aquellos años la más desarrollada— . Marx
mentos para pensar de otro modo el trabajo? provenía de una Alemania principalmente agra-
Consideramos que Marx todavía tiene mucho
qué decirnos para profundizar en la relación 7 C abe mencionar que, como ciencia del enriquecim iento, la
econom ía adopta formas diversas a lo largo de la historia de
entre el trabajo y nuestro ser.
acuerdo con los cam bios que operan en el sistema real de enri­
Para abordar la perspectiva antropológica quecimiento. Así, pasamos de una economía monetaria que ve
del trabajo que propone Marx, llevaremos a la riqueza en la acumulación de oro y plata, a una economía
mercantilista de intercam bio hasta el siglo XVIII, siglo de la
cabo una lectura de uno de sus textos de juven­
Revolución industrial que da paso a una economía política libe­
tud, los Manuscritos económico-filosóficos de 1844. ral con los economistas Adam Sm ith, David Ricardo, James
M ili, Prevost, M ac Culloch, Say, entre otros. Incluso, Sm ith es
6 Esta lectura se complica aún más porque la obra no fue publi­ llamado por Engels com o el Lutero de la economía política — y
cada en vida y su textos aparecieron sin seguir el orden crono­ después por Marx en los Manuscritos— por haber comprendido
lógico de su producción,- estos inconvenientes pueden ser la que es el trabajo humano y no algo exterior al hombre la fuente
causa de que su obra sea poco leída. de la riqueza.
CAPÍTULO 14 • TRABAJO V PROFESIÓN EN LA VIDA CONTEMPORÁNEA

Cabe agregar que la escritura irregular e


incompleta y la publicación de los Manuscritos
ofrecen una serie de problemas causantes de las
diversas y polémicas interpretaciones que se
han presentado de éstos. Podemos encontrar al
respecto tres posturas: 1. Una especie de reivin­
dicación del jover Marx al subrayar el huma­
nismo de este texto y declararlo como una de las
expresiones más a- cas del marxismo auténtico,
2. Al contrario, una visión reprobatoria de este
texto por considerarlo como moralista o huma­
nista abstracto en sentido peyorativo, 3. Una
postura intermedia que pretende interpretar los
Manuscritos no como un humanismo puramente
especulativo, sino como un paso dentro del pro­
ceso de formación del pensamiento de Marx, y
rescatar lo que queda aún vigente en ellos. Esta
última es nuestra postura, por lo que intentare­
mos realizar ese re ;cate.
Así pues, refle* ;onar acerca del concepto de
A La escritura irregular e incompleta y la publicación trabajo en la obra ce Marx requiere partir de su
de los Manuscritos de Marx generaron problemas que, concepción antropológica, ya que de esta última
a su vez, son causa de las diversas y polémicas
depende directamente la primera. Por ello, ini­
interpretaciones que se han suscitado en torno a ellos.
ciaremos la lectur; de los Manuscritos económico-
filosóficos de 1844 esclareciendo la concepción
ria y con una clase trabajadora más bien arte­ antropológica de s.i autor. Aunque se pueda de­
sanal. cir que los Manuscritos son un texto em inente­
En este contexto y motivado por la necesi­ mente humanista, Marx no plantea de manera
dad de abordar temas económicos más allá de explícita una antro oología— ni tampoco lo hace
la especulación filosófica abstracta alejada de la en el resto de su oora— . Sin embargo, sí debe­
realidad, Marx inicia la lectura de los grandes mos reconocer que la pretensión de Marx al ha­
economistas de su época siguiendo el hábito es­ cer la crítica a la economía política de su época
colar de resumir y anotar aquellas partes que fue devolver al hombre el status c¡uo que había
más le interesaban. Marx adopta una actitud crí­ perdido y ocupado el capital. De este modo,
tica hacia la economía política burguesa usan­ podemos rastrear a lo largo de los Manuscritos los
do los propios términos de ésta y descubriendo diferentes elementos que caracterizan al ser hu­
las contradicciones y prejuicios que emanan de mano en Marx:
ellos. En esencia, acusa a la economía política
burguesa de fundarse en un hecho que no ex­ a) El ser humano e; fundamento de sí mismo. El ser
plica: la propiedad privada. humano no tiene un origen divino y aunque
CONCEPCIÓN ANTROPOLÓGICA DEL TRABAJO DE KARL MARX

Marx usa conceptos como esencia, natura­ d) El ser humano es, entonces, un ser histórico no
leza, etc., también habla de que el ser hu­ determinado por fuerzas exteriores divinas
mano se hace a sí mismo por medio del tra­ o naturales.
bajo en la sociedad. Esta idea ya se había e) El ser humano es un ser genérico que tiene con­
desarrollado en el ensayo El papel del trabajo en ciencia de sí y del otro como ser genérico.
la transformación del mono en hombre, en el que f) El ser humano es un ser universal, total y libre.
además de exponerse históricamente la co n­ Universal en tanto que lo que lo constituye
dición de homo faber del ser humano gracias es compartido por la humanidad entera sin
a la mano que trabaja y que permite el de­ distinción de raza, sexo, edad, o condición
sarrollo de potencialidades humanas muy económica. Total, en cuanto que su realidad
distintas a las animales, se explica el hecho es una totalidad y no un conjunto dualista,
histórico de la sociabilidad y del lenguaje sino un sistema de elementos interrelacio­
humano, así como la génesis de la propie­ nados en el que lo que afecta a una parte del
dad privada. sistema, afecta a la totalidad del mismo. Y
b) El ser humano es un ser material. En oposición libre, en cuanto que las condiciones de su
a la tradición racionalista que va desde Pla­ existencia no están fijadas por causas exter­
tón hasta Hegel, para- Marx el ser huma­ nas divinas o naturales, sino que son pro­
no está constituido por una corporeidad ducto de los actos que realiza y que produ­
que lo inserta dentro de la naturaleza. Es un cen su vida.
ser material en oposición al naturalismo de g) Por todo lo anterior, la oida humana es vida
Feuerbach que todavía opone sujeto-objeto productiva. Y la vida productiva es la vida
y presume la superioridad del ser humano consciente de sí y creadora de más vida, po-
sobre la naturaleza. Y con este concepto rei­ tenciadora de todas las facultades humanas.
vindica la corporeidad humana. Para Marx, Desde el surgimiento del ser humano, éste
la relación entre ser humano y naturaleza se ha desarrollado debido al trabajo produc­
no es unidimensional, pues el ser humano tivo que lo hace consciente de sí y que po­
transforma a la naturaleza, pero es natura­ tencia sus capacidades para crear un mundo
leza también y, por ello, su condición está humano.
regida por las mismas leyes que ésta. La
relación entre el ser humano y la naturaleza Marx esclarece todas estas cualidades del
es dialéctica. ser humano cuando lleva a cabo su crítica a la
c) El ser humano es un ser sociable. La sociedad es el economía política, como deducción de lo que
individuo y el individuo es lo social, pero no debería ser y ha sido enajenado en el modo de
como un tipo de determinismo social. Si producción capitalista. De acuerdo con Marx,
bien el ser humano transforma su mundo estas caracterizaciones son deducidas del orden
cuando las condiciones sociales y materia­ de lo real y de la praxis, por lo que se podría cri­
les son dadas para ello, es el ser humano el ticar que su antropología es idealista, especula­
que produce esas condiciones, hace la his­ tiva, que busca reivindicar una "esencia" que
toria y la sociedad. nunca se ha visto. El asunto sería: ¿es Marx un
CAPÍTULO 14 • TRABAJO Y PROFESIÓN EN LA VIDA CONTEMPORÁNEA

filósofo idealista-esencialista o es un filósofo mos decir que el trabajo ha creado al propio


materialista-histórico? hombre.'
Para contestar esta disyuntiva podemos
hacer una observación aún más delicada: de en­ Propiamente, el ser humano ha llegado a ser,
tre las cualidades que Marx expone acerca del y continúa siendo, en la historia gracias a que
ser humano, podemos distinguir entre una di­ la fuerza de sus necesidades la ha transformado
mensión dada, fija y una dimensión por realizar en fuerza de trabajo y ésta, a su vez, en nuevas
en la condición humana: la concepción especu­ condiciones humanas. Aquello por lo que el ser
lativa del ser humano que se halla en los Manus­ humano es humano consiste en la producción
critos coexiste con otra concepción dinámica pura como tal. Como se puede observar, enri­
histórico-social. Si bien encontramos elementos quece el concepto de producción, pues a través
"esenciales" — dimensión fija del ser humano— del trabajo el ser humano no sólo produce obje­
que se conservan a lo largo de la historia, co ­ tos, sino que se produce a sí mismo,- produce
mo que el ser humano es un ser material, lo que “humanidad",- así, el ser humano es humano por­
implica una corporeidad sujeta a las leyes natu­ que es productor, y la vida humana es humana si
rales, que se hace en el trabajo, con una conciencia es productiva, productora de "humanidad".
reconocida o no y determinado y construyendo Por todo lo anterior, la definición de trabajo
en sociedad, estos elementos los descubrimos de Marx desborda los límites de la ciencia eco­
como constitutivos del ser humano, pero desa­ nómica para entrar en el ámbito de la antropo­
rrollados de distinta forma a lo largo de la histo­ logía filosófica. El término abarca más allá de la
ria — dimensión dinámica histórico-social— : actividad laboral remunerada y se refiere a todos
los constitutivos humanos son una base de po­ los actos humanos creadores de vida, promoto­
tencialidad a partir de la cual desarrollamos res del desarrollo de las potencialidades huma­
nuestra "humanidad". nas. Entonces, el trabajo no sólo es la fuente de la
Y es precisamente en la acción, en el tra­ riqueza, además tiene una doble función ortológica pues le
bajo, como el ser humano potencia sus capaci­ da su ser al hombre y por medio de e1 exterioriza su
dades, dinamiza su vida productiva, sus consti­ interioridad.
tutivos elementales. El texto de su amigo Engels, Dicho con otras palabras y en primera per­
El papel del trabajo en la transformación del mono en sona, la definición de Marx confirma lo que ha­
hombre, no puede ser más claro situando al tra­ bíamos señalado al principio de la presente
bajo en la condición fundadora de la realidad reflexión. Nuestra acción tiene una doble dimen­
humana. sión: la primera y fundamental es que cuando
actuamos, nos transformamos, desarrollando y
El trabajo es la fuente de toda riqueza, afirman especializando nuestras capacidades, produci­
los especialistas en economía política. Lo es, en mos un efecto inmanente puesto que la acción
efecto, a la par que la naturaleza, que le provee queda en nosotros mismos: nos damos nuestro
de los materiales que él convierte en riqueza.
Pero el trabajo es muchísimo más que eso. Y lo 1 Federico Engels. El papel del trabajo en la transformación del mono en
es en tal grado que, hasta cierto punto, debe­ hombre. C ali, C olom bia, Ed. Andreus. 1979, p. 166.
CONCEPCIÓN ANTROPOLÓGICA DEL TRABAJO DE KARL MARX

ser. Y en segundo lugar, cuando actuamos mo­


dificamos nuestro entorno creando un mundo
humano en el cual vivir, por un efecto trascen­
dente: exteriorizamos nuestro ser, proyectamos
nuestras ideas, emocione^-y-sentimientos en los
objetos que creamos. Precisamente en esta rela­
ción ontológica entre nuestros actos y nuestro
ser se fundamenta la responsabilidad ética, ya
que mediante nuestra acción,-en forma irreme­
diable, nos construimos como agentes de nues­
tra propia condición. ¡Qué responsabilidad ma­
yor que ser nuestros propios autores!9
Marx había imaginado al ser humano que
A Al trabajar modificamos nuestro entorno
fundamentalmente existe y produce en sociedad y creamos un mundo humano en el cual vivir.
debido a que él pertenecía a una familia agrícola
y este punto de vista lo hace observar que den­
tro del sistema de producción capitalista el tra­ diaria descubre una serie de contradicciones que
bajador no sólo es un ser extraviado y extraño la misma ciencia no podía explicar dentro de sus
de sí mismo, sino que además, su concepción del mismos principios. De este modo, en sus estu­
trabajo com o productor de vida, no puede darse dios de economía Marx devela varios trasfondos
en este sistema, puesto que el trabajador existe ocultos:
sólo com o recurso, mercancía y capital. El ex­
tremo de semejante abstracción se halla en el • Hasta entonces, la historia de la eco n o­
hecho de que el trabajador, en lugar de "exterio­ mía había sido la de una ciencia que decla­
rizar" su vida de modo productivo, está constre­ raba tener como objetivo el incremento de
ñido a aumentar el trabajo y a alienarse.10 la riqueza del ser humano. En teoría, se plan­
Después de intentar esclarecer la antropo­ teaba cómo hacer más rica — materialmen­
logía filosófica de Marx y la relación tan estre­ te hablando— a la humanidad, pero en la
cha que se establece entre el trabajo y ésta, po­ práctica esto no era así. No fue sino hasta
demos apreciar que la perspectiva con la que que leyó a David Ricardo que descubrió cla­
Marx interpreta los problemas de la economía ramente la realidad "inhumana" y "cínica" de
política en los Manuscritos es un enfoque desde el una economía política burguesa cimentada
ser humano,- por ello, cuando comienza a estu- en el principio naturalista infundado de la
propiedad privada que es, desde su punto de
’ Más tarde diría Jean-Paul Sartre que la existencia precede a la
esencia, somos lo que hacemos libremente, por lo que estamos
vista, el fundamento de toda la economía
irrem isiblem ente condenados a construir nuestras existen­ política burguesa.
cias, a ser libres. (C/r. Sartre, Jean Paul. El «ísífiicia/ismo es un • Posteriormente, con Adam Smith, revela
humanismo, M éxico, Ediciones Q uinto Sol, 12ava. reimp., 1994,
que el principio de la propiedad privada no
pp. 31-41).
10 C/r. Lowith, Karl. De Htpel a Nietzscbt, Buenos Aires Editorial es objetivo (divino) sino subjetivo (humano),-
Sudamericana, 1980, pp. 382-383 este principio es el trabajo acumulado. Pero
CAPÍTULO 14 • TRABAJO Y PROFESIÓN EN LA VIDA CONTEMPORÁNEA

Marx intenta ir más allá, no se conforma El concepto de enajenación con el que Marx
con descubrir el fundamento de la propie­ califica al trabajo en la forma de producción
dad privada, sino que pretende demostrarlo. capitalista no es nuevo, Rosseau lo utiliza para
• Al hacer un análisis del salario del obrero, fundamentara la sociedad, el hombre enajena su
detecta — entre otras cosas— su depaupe­ libertad para vivir en sociedad. Hegel lo emplea
ración inherente al sistema capitalista. En como fase necesaria de la autoconciencia, y
cuanto al análisis de la ganancia del capital, Feuerbach habla ;le la enajenación de las facul­
desmiembra el concepto de capital como tades humanas er la figura de Dios. Aunque in­
trabajo acumulado y descubre que este tra­ fluido por Hegel y principalmente porFeuerbach,
bajo acumulado no es cualquiera sino el el concepto de er ajenación de Marx se separará
ajeno, el del trabajador. claramente de ellos. En los Manuscritos la ena­
jenación en el trabajo es la categoría a la que
Estas contradicciones que se manifiestan en acude Marx par; explicar las contradicciones
el plano real, la economía política las ha justifi­ reales de la economía política burguesa. Así,
cado llevándolas al plano de lo natural, afir­ para él, enajenación tiene el sentido fundamen­
mando que la desigualdad económica es reflejo tal de dar de sí, vaciar-se, salir de sí y en ello, dis-
de la desigualdad entre los seres humanos, lo tanciar-se, separar-se, hasta desconocer-se.
mismo que la competencia y la acumulación. En una primara instancia, para Marx, todo
Sin embargo, todo el trabajo de Marx consistió el sistema de producción capitalista surgido en el
en demostrar que esto no era así, sino que se siglo XIX y fundamentado en la acumulación de
trataba de una construcción histórica. Esta insis­ capital es un sistema enajenado a diferencia del
tencia de Marx era producto del hecho que sistema de producción fabril del siglo anterior
tanto lo inquietaba: la pobreza cada vez más porque, al ser el capitalista el poseedor de los m e­
extendida pese a las promesas de la ideología dios de producción, el trabajador tiene que ena­
capitalista en ciernes. Y, por este camino, c o ­ jenar — separarse de— su fuerza de trabajo para
mienza a surgir la veta del concepto que impul­ darla a otro a cambio de un salario. De la misma
sará toda su filosofía posterior: la enajenación. manera, la materia prima, el proceso, y sobre
La economía política burguesa había escin­ todo, el produelo ya no le pertenecen, por lo
dido la vida productiva humana poniendo por que la concepc ón antropológica de trabajo
una parte al ser humano y, por otra, al obrero, pa­ imaginada por Marx como productor de oida, no
ra quedarse sólo con el obrero como productor, puede darse debido a que el trabajo es un pro­
pues sin esta escisión las fuerzas productivas no ceso que en su ¡otalidad es entregado, en aje­
hubieran alcanzado el nivel de desarrollo de los nado, al capitalis ::a.
tiempos modernos. El propio Marx sostuvo en Pero para comprender más cabalmente el
su madurez que el capitalismo era una etapa ne­ sentido que Maix otorga a este término para
cesaria para producir las condiciones materiales esgrimir su fiero ataque contra el sistema de
que posibilitaran una producción al servicio del producción cap ¡alista surgido en el siglo XIX,
hombre. Podríamos ubicar, entonces, los Manus­ profundicemos en los cinco tipos de enajena­
critos de 1844 como un análisis de los fundamen­ ción que encuentra en la forma de producción
tos del trabajo y de su condición histórica. capitalista. Cabe destacar que, un par de siglos
CONCEPCIÓN ANTROPOLÓGICA DEL TRABAJO DE KARL MARX

después, podemos aplicar perfectamente estos cuando el producto vale más que el trabaja­
tipos de enajenación al modo en el que estamos dor, la repercusión en la creación y mante­
acostumbrados a trabajaren la actualidad, y que, nimiento de puestos de trabajo relaciona­
evidencian todavía la relación entre el trabajo y dos con servicios que hoy las máquinas
la realidad existencial del individuo concreto:*11 pueden efectuar.13
• Enajenación del trabajador en relación cotí el proceso
• Enajenación del trabajador en relación con el pro­ de producción en la que el trabajo no es visto
ducto de su trabajo. El producto del trabajo no como actividad formadora del trabajador
es un objeto para consumo del trabajador, sino como ajena a él,- como una actividad
sino que lo ve como algo ajeno e, incluso, coercitiva y como pérdida de sí mismo en
opuesto a sí. Enajenación en la que, cuanto el trabajo. Si el acto de trabajo es lo que le
más produce, menos consume, cuanto más otorga su ser al trabajador y su posibilidad
valor crea, menos vale él,- cuanto más for­ de expresión, la enajenación en el acto de
mado su producto, más deformado él; cuan­
to más perfecto el objeto, más bárbaro él,-
de El Salvador confeccionando ropa para Tbe Gap y otras com ­
cuanto más poderoso el trabajo, más impo­ pañías. Su patético sueldo era de 56 centavos de dólar por
tente él,- cuanto más ingenioso el producto, hora." (H erber, Bob. “Sweatshop Beneficiaries”, New Yodt Times,
2 4 de julio de 1995,- citado en Velásquez, Manuel G. Ética ¡le los
más bruto y siervo el trabajador. Tal es el
negocios, M éxico, Pearson Educación, 4 ' ed., 2000, p. 486).
caso, por mencionar un ejemplo, de no po­ 11 Efectos de la modernidad. Las telecomunicaciones que surgie­
cas empresas que ocupan personal tan pau- ron para mejorar la vida del ser humano, ahora lo dejan sin

pérrimamente pagado que ni trabajando trabajo: la incorporación de alta tecnología y la búsqueda de


competitividad en las com unicaciones locales y regionales
toda su vida puede el obrero soñar con con­
llevó al recorte de cien mil puestos de trabajo en las compañías
sumir el producto que ha creado con sus telefónicas de los Estados Unidos a mediados de 1995. La auto­
propias manos.12 O, desde otra perspectiva, matización de los servicios telefónicos, el servicio de videos
interactivos de información y entretenimiento por encargo, así
com o las computadoras y los equipos tecnológicos de recono­
" Existen algunas condiciones que han cambiado en la realidad cim iento de voz han comenzado a desplazar a los tradicionales
económ ica actual que no quedan del todo bien diferenciadas en operadores humanos en los servicios de telefonía. Aunque el
los análisis marxistas usuales. Por ejemplo, considerar que hay desarrollo de este sector y de otros de la "autopista de la infor­
una separación completa entre trabajo y capital cuando se trata m ación' supondrán la creación de empleos, de momento el
de empresas contemporáneas. El trabajo no es solamente el tra­ resultado es una pérdida neta de puestos de trabajo en las com ­
bajo físico, también existe el trabajo intelectual y hoy se habla pañías telefónicas.
mucho del trabajo directivo o empresarial, por lo que no es El desempleo en el mundo ha alcanzado en la actualidad
válido equiparar el trabajo no físico cón el capitalista. La dife­ (1997) su nivel más elevado desde la gran depresión de los años
rencia entre propiedad y dirección en las empresas me parece treinta. [...] Esta cifra puede crecer dramáticamente entre hoy
que es útil, y la dirección queda en el campo del trabajo, no en y el final de siglo, puesto que millones de recién llegados al
el del capitalista. (N. del E ). mundo laboral se encuentran sin posibilidades de trabajo,
11 “Los cien to s de miles de jóvenes trabajadores (en su mayor muchos de ellos victimas de la revolución tecnológica que está
parte de sexo fem enino) de Centroam érica que ganan una sustituyendo, a pasos agigantados, a los seres humanos por
bicoca y a menudo viven en la miseria, han sido una bendición máquinas en la práctica totalidad de sectores económ icos e
absoluta para ejecutivos de compañías de ropa estadounidense industrias de nuestra economía global. [...] las nuevas tecnolo­
com o Donald G. Ficher, director ejecutivo del imperio de Tbe gías en el campo de los ordenadores y de las telecom unicacio­
Gap y Banana Repnblic, quien vive en gran lujo y se pagó a sí nes están, finalmente, produciendo los impactos largamente
mismo más de 2 millones de dólares en 1994. Judith Viera es anunciados sobre el mercado laboral y sobre las economías
una chica de 18 años que trabajaba en una planta maquiladora nacionales [...]. (C/r Rifkin, J. Op cit., p 17).
CAPÍTULO 14 • TRABAJO Y PROFESIÓN EN LA VIDA CONTEMPORÁNEA

producción provoca la pérdida de sí como Dentro de los efectos de la relación entre el


ser humano. Si el proceso es atomizado al trabajador y el proceso de producción, inclu­
máximo perdiendo su relación con el pro­ so aunque no siguiéramos la idea de Marx de
ducto final, si el proceso de producción es la enajenación, el desplazamiento del tiempo
rutinario y repetitivo,- en fin, si el proceso de humano por el tiempo mecánico produce un
producción se empobrece y pierde su sen­ efecto relacionado con la definición del trabajo
tido, la vida humana se empobrece y pierde como fenómeno físico, pues todo trabajo co n­
su sentido. siderado como liberación de energía produce
un desgaste y un deterioro físico y psicológico
Una de las características de la forma de tra­ en el agente, más aún si el modo de trabajo es
bajo contemporáneas es la división del trabajo a mecánico y rutinario. Cuando las jornadas de
un nivel de atomización, especializando el tra­ trabajo rebasan las 8 horas y el tiempo de tra­
bajo en una actividad únicamente. En el co n ­ bajo invade el de otras dimensiones de la vida
texto de la atomización del trabajo y de los pro­ humana, los efectos en el deterioro y desgaste
cesos de globalización industrial, es común el son psíquicos y físicos, llevándonos a la enaje­
caso de que una sola planta realice un elemento nación — desconocimiento— como seres auto-
aislado del producto final, el cual terminará su conscientes, lo cual constituye el siguiente tipo
trayecto al otro lado del planeta después de de enajenación.
haber recorrido la gran cadena internacional
de producción. • Enajenación del trabajador como ser genérico. El
Así como la atomización se ha llevado a un trabajo enajenado enajena al ser humano
grado extremo, tenemos también la m ecani­ como ser genérico, como ser consciente de
zación y la rutinización del proceso de produc­ sí perteneciente a un género y convierte la
ción, de tal manera que el trabajador adopta la vida humana en un simple medio para su
forma de ser de la máquina, se ajusta a ella vi­ subsistencia física. Para Marx, la vida pro­
viendo un tiempo mecánico distanciado — ena­ piamente humana es la del hombre como
jenado— del tiempo humano. Cumple con un ser consciente de sí y del otro, vida crea­
ritmo preestablecido que lo conduce a la pér­ dora y promotora de vida, vida productiva
dida de su capacidad de producción creativa. Si que es la vida del género humano y cuando
partimos del principio de que el trabajo le pro­ el ser humano se enajena incluso con res­
porciona su ser al ser humano, y si el modo de pecto a sí mismo, se separa de sí, su vida ya
trabajo en la economía contemporánea está ato­ no es creadora de vida, ya no es un fin en sí
mizado, es rutinario, mecánico y, por lo tanto, ca­ misma, sino un medio para la producción
rente de sentido, entonces el ser que produce es de objetos. La enajenación del trabajador
un individuo limitado, mecanizado sin posibili­ como ser genérico produce un efecto al­
dades de pensamiento creativo. Peor aún, parece tamente dañino en su carácter: la pérdida
como si precisamente éstas fueran las caracterís­ de contacto consigo mismo y la imposibi­
ticas que los nuevos puestos de trabajo exigen de lidad de restablecerlo,- y, con ello, la im­
un trabajador para que pueda soportar el ritmo posibilidad de tener cualquier experiencia
de trabajo en la sociedad contemporánea. existencial verdaderamente auténtica, todo
-- LA CONFORMACIÓN DE LA IDENTIDAD EN EL TRABAJO MODERNO

I %
lo cual se traduce en un estado permanente • Enajenación del no trabajador (capitalista). Si
de estrés.14 el trabajo, le aporta su ser al ser humano y el
• Enajenación del trabajador con respecto a los otros. capitalista no trabaja propiamente, sino que
Que el ser humano se enajene com o ser ge­ enajena eP producto de la fuerza de trabajo
nérico entraña, tambjiérvhque enajena (des­ de otro, entopees el capitalista no realiza una
conoce) al otro como ser genérico. Las re­ vida productiva en términos de la propues­
laciones interpersonálesí de una persona ta de Marx. Aunque la enajenación de éste
enajenada de sí sólo pueden ser enajenadas no es activa cóm o la del trabajador, de igual
en relación con otra-persona. De otra ma­ modo se manifiesta un tipo de enajenación
nera no se podría explicar, por ejemplo, el — desvinculación— debido a la relación
surgimiento y auge de los famosos reality que el capitalista establece con cada uno de
shows como "Big Brother". En este caso, el los elementos del sistema de producción. El
espectador adicto a estos programas tiene producto no es el resultado de su propia ac­
una incapacidad patológica para entablar tividad, sin embargo, le pertenece y le inte­
contacto consigo mismo y sus problemas resa como mercancía y el trabajo com o acti­
reales y sólo puede interesarse por lo que le vidad lucrativa.15 Por último, el capitalista
ocurre a un personaje del espectáculo, a se enajena en un mundo de mercancías y de
pesar de saber que lo reality de estos espec­ necesidades creadas, extrañas a sus nece­
táculos es una farsa. En este contexto, los sidades humanas y a su productividad vital.
medios de comunicación ya no cumplen
con su función com o reproductores de la LA C O N FO RM A C IÓ N DE LA IDENTIDAD
cultura ni están a la altura de su responsabi­ EN EL TRABAJO M O D ERN O
lidad social. El propósito auténtico de los
medios de comunicación reproducido a tra­ Si hoy todavía nos puede parecer un tanto pesi­
vés de estos programas es la reproducción al mista la crítica que en el siglo xix Karl Marx hizo
infinito del espectador (trabajador) enaje­ al modo de trabajo en el sistema de producción
nado com o ser genérico y, en consecuencia,
enajenado con respecto a todos los otros. 15 En 1996 la revista Ncwswrck publicó un artículo titulado
"American's Corporate Killers” , los hombres que habían supri­
mido más de medio millón de plazas de trabajo en ese año.
Encabezaba la lista Robert Alien C E O de ATfcT con un salario
14 "La hipereficiente economía basada en [a alta tecnología acaba de $ 3 ,3 6 2 ,0 0 0 di. que en enero de 1996 había "producido”
con el bienestar físico y mental de millones de trabajadores en 4 0 ,0 0 0 desempleados. Reducir el costo de la mano de obra es
el mundo. La International Labor O rganizaron afirma que 'la también producir eficientem ente. (Sloan , Alian. "T h e H it
tensión se ha convertido en uno de los temas de salud m is M en”, N twsum i Nueva York, vol. C X X V Il, núm. 9, febrero, 26,
serios en el siglo XX'. [...] D e acuerdo con lo establecido por el 1996, pp. 10-14.) Este caso nos demuestra cóm o el administra­
informe de la ILO, [...], los crecientes niveles de estrés laboral dor del capital o C E O no establece una relación existencial con
son el resultado del rápido ritmo fijado por las nuevas máquinas el trabajo y, a través de él, con todos los elementos que integran
tanto en las fábricas com o en las oficinas. [...] Los altos niveles el proceso,- por el contrario, para él el giro de la empresa en sí
de tensión nerviosa a menudo conducen a diferentes problemas es intercambiable, lo mismo se puede invertir en la industria
de salud, incluyendo entre los más frecuentes úlceras duodena­ tabacalera que en la telefónica, los empleados de la empresa no
les, hipertensión arterial, infartos de miocardio y apoplejías. son seres humanos con una realidad existencial única e impres­
También, tienen com o consecuencia el abuso de alcohol y de cindible, son sólo recursos que hay que eficientizar y la manera
drogas.” (Riflcin, J. Op cil., pp. 227-228). en com o ha logrado hacerlo es despidiéndolos.
CAPÍTULO 14 • TRABAJOY PROFESIÓN EN LA VIDA CONTEMPORÁNEA

capitalista de su época, estaba lejos de imaginar gestaban en los individuos en empresas tradicio­
las condiciones de trabajo a las que llegaríamos nales que ofrecían una atractiva carrera a sus
a finales del siglo XX y principios del XXI, al grado empleados prácticamente de "por vida" con el
de que Jeremy Rifkin llega a afirmar el "fin del que ahora ofrecen y hasta exigen las empresas
trabajo". en el capitalismo contemporáneo.
Aunque aún no podemos hablar de la inexis­ Con base en la propuesta de Sennett pode­
tencia de! trabajo, las condiciones actuales ya mos analizar la conformación de la identidad
tienen repercusiones que es urgente revisar y exigida por las err presas actuales y los efectos
transformar o al menos imaginar nuevas formas que dichas exigencias producen en los indivi­
de identidad para adaptarnos a ellas. duos. Este análisis 1o sintetizaremos en dos ámbi­
La identidad de los seres humanos concre­ tos estrechamente interrelacionados: la tempo­
tos es una construcción que se va transforman­ ralidad y la espacialidad.
do por medio de procesos simbólicos relacióna­ La conformación y apropiación de la iden­
les e institucionales. No obstante, más allá de tidad se relaciona de manera directa con la capa­
imaginarios simbólicos, debemos reconocer la cidad del individuo de poder narra su vida, de
emergencia de constitutivos humanos que tras­ efectuar una construcción mental de los pasajes
cienden las categorías espacio-temporales y cul­ de su vida estableciendo entre ellos una conexión
turales,- constitutivos humanos indispensables suficientemente auloconvincente, dirigida hacia
para la existencia y la convivencia humana, tales un sentido determinado. Con base en esta narra­
como la vida, la corporeidad, la colectividad tiva, el individuo podrá juzgar si su vida ha va­
privada (relaciones de parentesco) y pública, la lido la pena o no. Con razón afirma Paul Ricoeur,
comunicabilidad, la necesidad de pertenencia, el gran intérprete ce la existencia:
la sexualidad,- todos ellos capacidades que deben
potencializarse en la vida productiva propuesta [...] la com pre isión de sí es narrativa de un

por Marx. extrem o a otrc C om prend erse es apropiarse


La construcción y apropiación de la identi­ de la historia d:- la propia vida de uno. Ahora
dad se realiza gracias a diversos agentes mode­ bien, com prender esta historia es hacer el relato

ladores de ésta, los cuales difieren en niveles de de ella [...]. Es a ;í com o nos hacem os lectores de
influencia dependiendo de la edad del indivi­ nuestra propia vida
duo. Así, tenemos que en la niñez los agentes
modeladores dominantes son la familia y la Lograr el reíalo coherente de uno mismo
escuela,- en la adolescencia son los amigos y los requiere de las dimensiones espacio-temporales
medios de comunicación (televisión, música, para ubicarlo en términos de relación y de sen­
cine, internet) y, por último, en la edad adulta el tido. Con respecte' a la construcción interna del
mayor agente modelador y afirmador de la iden­ yo, ubicamos un espacio presente, un punto en
tidad es el lugar de trabajo. la infinidad de po? bilidades en el que posamos
El sociólogo estadounidense Richard Se- nuestro hoy y a partir de ese espacio, trazamos
nnett en su obra La corrosión del carácter. La conse­ 14 Ricoeur, Paul. “Autocc mprensión e historia', en T. Calvo y R.
cuencias personales del trabajo en el nuevo capitalismo Ávila (eds.), Paul Ricorur.- los caminos Je la interpretación, Barcelona,

compara el tipo de carácter y de valores que se Antropos, 1991, p. 42


LA CONFORMACIÓN DE LA IDENTIDAD EN EL TRABAJO MODERNO

una línea temporal desde nuestro presente diri­ raíces". Esta metáfora debe entenderse en dos
gida hacia el pasado y explicamos, justificamos sentidos: 1. "tierra" que somos por ser un cuerpo
los eventos pretéritos en función de la explica­ que se va formando y 2. "tierra" que habitamos.
ción de nuestro momento actual. De la misma De modo conjunto, estos dos sentidos implican
manera, trazamos una línea hacia el futuro e la "tierra por y en la que echamos raíces". Por lo
imaginamos e interpretamos nuestras posibili­ tanto, la identidad interior de cada individuo
dades,- el futuro es continuamente proyectado requiere la conjunción indisoluble de tempora­
en cada uno de los actos presentes. En otras lidad y espacialidad en la cual narrarse y en su
palabras, el pasado es presente en la reconfigu­ narración encontrar su sentido.
ración que hace de él el recuerdo y el futuro es A partir de este primer momento de cons­
presente en lo que de proyección idealista tiene trucción interior, el individuo puede entonces
el presente. En este sentido, la acumulación de construirse en relación con lo otro. Por medio
experiencias nos va dando la posibilidad de in­ de los procesos simbólicos relaciónales e insti­
terpretaciones más coherentes para nosotros tucionales establecidos en la comunicación,
mismos, por estar más interrelacionadas con pone en común su necesidad de pertenencia,
sucesos del pasado. la cual lo lleva a contraer relaciones de com ­
Este horizonte de nuestra propia temporali­ promiso, solidaridad y responsabilidad, pues se
dad va cambiando de extensiones dependien­ trata, en este caso, de la construcción, de la na­
do de la edad del individuo. Cuando se es joven rración de su propia historia. De esta manera,
parece com o si el pasado no tuviera mucha im­ pueden encontrar sentido los principios de jus­
portancia, pues las perspectivas a futuro son ticia, reciprocidad, compromiso, solidaridad y
enormes. Por el contrario, cuando el individuo responsabilidad ya que dentro del relato de la
llega a la edad adulta, los paradigmas tempora­ propia vida los otros también son personajes sin
les se modifican en forma radical y su mirada los cuales no existe narración coherente y sufi­
vuelve a la reflexión de los hechos acumulados. cientemente satisfactoria, pues hasta en el mo­
En ambas condiciones, el relato, es decir, el or­ nólogo hay otros personajes.
denamiento que hacemos de nuestra vida es lo Volviendo a Sennett, éste describe el tipo
que permite la apropiación de la identidad. de carácter y de valores que se gestaban en los
O curre lo mismo con la espacialidad,17 a individuos en empresas que ofrecían una atrac­
través de la cual proyectamos nuestro ser en la tiva carrera "de por vida", lo que propiciaba la
percepción e interrelación que tenemos con el temporalidad y espacialidad necesarias para in­
espacio, nuestro espacio. Como seres materia­ tentar el relato de las propias vidas de sus emplea­
les que somos, con una corporeidad dada que dos. Relato que correspondía a una línea progre­
más que ocupar un espacio, vive una espaciali­ siva en el tiempo. Por el contrario, las empresas
dad, vamos construyendo y apropiándonos me­ contemporáneas solicitan de sus empleados dos
diante nuestros actos de una "tierra para echar características indispensables, contrarias a los
paradigmas narrativos del pasado: juventud y
17 D e hecho, los conceptos de temporalidad y espacialidad son
movilidad.
dos dimensiones inseparables de la persona. C om o el relato
literario, el relato de nuestra vida es el lugar en el que se hace Hoy en día, por varias razones principal­
visible el sentido de nuestra temporalidad existencial. mente financieras, es mucho más valioso poseer
CAPÍTULO 14 • TRABAJO Y PROFESIÓN EN LA VIDA CONTEMPORÁNEA

Específicamente, escuchamos las voces de


quienes dicen que las formas del trabajo han
cambiado en cuanto a la temporalidad y a la
espacialidad y el "sentido del trabajo" se ha per­
dido y con ello el sentido de nuestras vidas. Pero
siendo una actividad de la que depende no sólo
la riqueza necesaria para nuestra supervivencia,
sino también la conformación de nuestras pro­
pias identidades, más que hacer un llamado al
retorno de la tradición narrativa, conviene ana­
lizar qué nuevas formas de pensarnos necesita­
mos para seguir construyendo nuestras identi­
A. Hoy en día, por varias razones — principalmente
financieras— , es mucho más valioso poseer juventud que dades.
experiencia. En este sentido, la novela, género que sur­
gió en el siglo XIX a la par que los nuevos para­
juventud que experiencia debido a que la juven­ digmas de la modernidad, vivió en la segunda
tud se amolda perfectamente a los nuevos para­ mitad del siglo XX la fatalidad de ver cumplido el
digmas de productividad, dinamismo, salud, aper­ presagio de su propia muerte. Mas la novela no
tura a nuevas tecnologías, y también, hay que sucumbió, sin perder los fines para los cuales fue
decirlo, menores compromisos económ ico fa­ creada, se nutrió de las nuevas formas que le exi­
miliares, menores salarios, etc. Asimismo, poseer gía la realidad imperante, se convirtió en un
una movilidad absoluta en todos los sentidos y híbrido selectivo que digería todo aquello que
en todos los niveles, incluso en la flexibilidad de le permitiera conservar el único propósito que le
horario y en el llamado tele-trabajo, amplía las daba sentido: la reproducción poética de la vida.
posibilidades de contacto y disponibilidad,- pe­ Ya no se trataba de una narración lineal inin­
ro, en forma simultánea, impide por completo terrumpida, dominada por un narrador omnis­
establecer una narración lineal con pretensiones ciente que dictaba el sentido y dirigía el camino
progresistas, que otorgue sentido a la vida y una de todos los personajes ajenos a él, como un
comunicación profundamente existencial que Dios todopoderoso más allá del mundo, tal cual
no se limite a los formulismos tecnológicos. era la tradición literaria hasta principios del
En este mismo orden de ideas, podemos siglo X X. Ahora, surgía la multiplicación de su­
continuar haciendo una recia crítica a las nuevas jetos narradores y la proliferación de formas
exigencias de las empresas en el capitalismo ac­ literarias con diversos sentidos o, incluso, sin
tual,- sin embargo, si en verdad queremos cons­ sentido aparente, que conforman un todo a la
truir de manera enriquecedora nuestras identi­ manera de una colmena constituida de celdas
dades particulares de modo realista, las formas independientes, pero unidad en la finalidad de
de narración tradicionales tanto en la literatura propiciar el lugar de la vida de la abeja.
como en la narración de nuestra propia vida ya La pregunta es: ¿de qué manera puede hacer
no funcionan para reproducir la realidad que lo mismo el trabajo? Es decir, sin perder su defi­
vivimos, pues la realidad ha cambiado. nición no sólo de fuente de la riqueza, sino, en
LA CONFORMACIÓN DE LA IDENTIDAD EN EL TRABAJO MODERNO

)
esencia, de fuente del ser del hombre y el medio que evidencia la necesidad de un cambio de pa­
por el que éste exterioriza su vida, ¿cómo pode­ radigmas. ;
mos explotar lo mejor de las nuevas formas de En este orden d e:ideas, se nos presentan dos
trabajo para la conformación de una identidad situaciones: : \ {
con la que se esté conforme y?¿(üé sirva.de vehí­
culo para la participación ciudadana? Superar el 1.
.f; •
¿Cómo superar la' crisis que presenta el cam­
paradigma epistemológico y ético dominante­ bio de situacipn para la conform ación de
mente vertical de sujeto opuesto al o b jeto 18 y identidades e incluso evitar que se presente
sustituirlo por el nuevo paradigma de sujetos una crisis así?
emergentes que mediante un proceso de auto- 2. ¿Cómo equiparse para afrontar las nuevas
gobernación19 direccionan y determinan su sen­ condiciones y construir con y en ellas nue­
tido, sin perder de vista el cuidado de los cons­ vas identidades suficientemente satisfac­
titutivos básicos condición de posibilidad de su torias?
ser y de su potencialización (la vida material y
espiritual, el sentido de pertenencia y la comu­ Para enfrentar estos dos momentos Gilíes
nicabilidad). Esto puede parecer difícil de con­ Lipovetsky en su libro Metamorfosis de la cultura
cebir debido a la cosmovisión judeocristiana del liberal. Ética, medios de comunicación, empresa nos pro­
trabajo a la que estamos acostumbrados como pone una opción. Lipovetsky afirma que en la
sociedad,- sin embarlo, como ya lo hemos men­ época actual vivimos una singular paradoja: por
cionado, los hechos en el ámbito del trabajo nos un lado un acendrado individualismo, el culto a
obligan a intentarlo. la persona, al cuerpo y al consumo que a algunas
Para contestar esta pregunta podemos hacer buenas conciencias hace exclamar "¡la pérdi­
uso del concepto de "crisis". Aplicamos este da de los valoresl",- y al mismo tiempo, el resur­
concepto al estado de relación en el que las for­ gimiento del interés por reafirmar valores, por la
mas con las que concebim os y explicamos las proliferación de credos, de voluntariados, et­
cosas ya no corresponden e incluso "chocan" cétera.
con la realidad. Usar este concepto puede tener Lipovetsky considera que un m ejor modo
dos repercusiones: 1. Puede resultar ser un con­ de comprender el fenómeno para resolverlo,
cepto "cegador" que no nos permita resolver superarlo y al mismo tiempo valerse de él para
nuestra situación, o 2. Podemos utilizar su po­ resolver las dos situaciones planteadas es distin­
tencialidad creativa la cual nos permite pensar guir entre los dos tipos de individualismo que
de otro modo. La "crisis" es, pues, una ruptura tanto han influido en nuestra época. Para él, es
evidente que, por un lado, existe un tipo de indi­
vidualismo irresponsable que tiene todas las
'* El narrador omnisciente que concibe y da cuenta de un mundo
ajeno a él, al que puede dominar y determinar, o trasladado al
características de culto a la persona, al cuerpo, a
ámbito de la empresa, el paradigma epistemológico y ético de la libertad individual, etc., que resulta en una
un directivo capaz técnica y moralmente que dicta el destino y especie de mónada autista sin posibilidad de
la conducción de los subordinados incapaces e ignorantes.
contacto con nada ni nadie. Junto con este indi­
” Los recientes estudios sobre¿utogobernación, gobernación y/o
gobernanza ofrecen un terreno epistemológico fértil para pro­ vidualismo irresponsable, se encuentra otro tipo
fundizar en este nuevo paradigma. de individualismo que tiene sus límites en el
CAPÍTULO 14 • TRABAJO Y PROFESIÓN EN LA VIDA CONTEMPORÁNEA

individualismo y libertad del otro. Es decir, lugar que ha us.irpado el capital. Además del
sigue teniendo como principio máximo la liber­ valioso análisis «le Fromm, el libro presenta los
tad individual, pero considera que para que ésta M anuscritos,de tal modo que el lector puede con­
pueda darse requiere de un marco de referencia sultar directame - te el texto de Marx.
o estado de derecho común que garantice que
existirán permanentemente las condiciones de Gorz, André. M etam orfosis del trabajo. Búsqueda del sen­

posibilidad de la libertad individual tanto como tido. Crítica de la razón económ ica.

la de los demás. Este tipo de individualismo res­


ponsable es el que se manifiesta en los volun­ En este libro el lector puede encontrar las fuen­
tariados, en los movimientos ecologistas, etc. tes del análisis h stórico-crítico realizado en este
Debemos, entonces, acotar el individualismo capítulo. En la última parte del texto, Gorz pro­
irresponsable y promover formas de relación pone nuevas formas de visualizar la esencia del
que propicien el individualismo responsable. capitalismo en relación con la vida humana con
Y es aquí donde retomo la propuesta inicial el fin de proponer otros sentidos al trabajo.
de este trabajo de reflexión: promover que el
empresario y el trabajador descubran el poten­ Gorz, André. M iseria; del presente, riqueza de lo posible.

cial creativo y productivo que tiene la empresa,


y todo lo que ésta implica, como fuente de ri­ En esta sugestiva obra, Gorz hace una fuerte crí­
queza y también como fuente de poder humano, tica al estado a< cual del trabajo partiendo de la
político20 y social. Así, la "crisis" que vivimos idea de Jeremy Rifkin sobre el fin del trabajo,
será el germen de una reforma social necesaria para proponer I;. reapropiación del trabajo en un
para llevar a cabo la transformación política y sentido marxista de trabajo como fuente del ser
económica que tanto anhelamos. del hombre en el que potencializa sus capacida­
des y proyecta su ser creando un mundo humano.
SUGERENCIA BIBLIOGRÁFICA Gorz propone la necesidad de revalorar otras
actividades humanas que el trabajo “capitalista"
Fromm, Erick. M a rx y su concepto del hombre. ha dejado fuera y que, sin embargo, son necesa­
rias para la vida humana.
En este texto, el famoso filósofo Erick Fromm
abstrae las características que constituyen el Lipovetsky, Gilíes. AIetamorfosis de la cultura liberal. Ética,
concepto de Marx sobre el ser humano. Fromm medios de com unioición, empresa.

parte de la idea expresada en este capítulo acerca


del carácter plenamente humano de los M anus­ Lipovetsky, famoso crítico conocido por sus
critos de 1844 y pone en evidencia el objetivo obras La era del >acío, El imperio de lo efímero, El cre­

que le parece busca Marx a través de su obra: la púsculo del deber (también muy recomendable),
reconstitución del ser humano como principio y entre otras, noí ofrece en este pequeño texto
fin de la economía, para con ello restituirle el cuatro conferer das en tomo al tema de la ética
y la empresa contemporánea. El más interesante
10 La empresa puede ser fuente para consolidar el poder de la
de ellos: "Muerte de la moral o resurrección de
sociedad civil de autogobernarse más allá del gobierno del
Estado. los valores: ¿qué ética aplicar en nuestros días?"
BIBLIOGRAFÍA

hace una fuerte crítica a la búsqueda de una ética por la fragmentación del tiempo posmoderno
universal por parte de las empresas, tan de moda en la que el pasado (la experiencia) es más un
en nuestros días. No obstante, Lipovetsky señala defecto que una cualidad, el éxito sólo es el del
que es necesario tratar de sacar provecho de esta día anterior y siempre se debe empezar de cero,
pretensión moralizante de la empresa. el trabajo en equipo exige relaciones superfi­
ciales. El desprendimiento de todo: fracasos,
Rifkin, JeTemy. El fin del trabajo. éxitos, relaciones, etc. viviendo siempre en la
superficie, impide las relaciones de comunidad,
En este libro, el autor realiza un análisis de los solidaridad, etc.,Sennett hace una propuesta
efectos que el desarrollo de las tecnologías han controversial basada en las potencialidades del
producido en el ámbito del trabajo, poniendo en conflicto, maneja tablas y datos estadísticos muy
duda el futuro de éste-, al menos tal como hoy lo útiles e interesantes.
concebimos. Aunque es una obra extensa, este
texto tiene la ventaja de utilizar un lenguaje sen­ BIBLIOGRAFÍA
cillo enriquecido con referencias y datos de
casos reales aún vigentes. Fromm, Erick. M<irx y su concepto del hombre, M éxi­
co, Fondo de Cultura Económica, 4a. reimp.,
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estudioso preocupado por dos de los temas que ---------- . M iserias del presente, r¡(jueza de lo posible, Paidós,
suelen olvidar los economistas, el bienestar y la Bs.As., 1998.
equidad. Este título explica las relaciones indiso­ Herber, Bob. “Sweatshop Beneficiaries", N eto York
lubles entre ética y economía, pese a la visión de Times, 2 4 de julio de 1995,- citado en Velásquez,
algunos por defender la independencia que, ase­ Manuel C . Etica de los negocios, México, Pearson
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