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El poder de la educación para transformar la sociedad.

De acuerdo con Jover (2013) la sociedad atraviesa un momento en el que la


hegemonía permea a todos los ámbitos que le competen, presenta una necesidad que
se torna urgente, la necesidad de que se ataque principalmente el fantasma de la
individualidad para así plantear desde el ámbito educativo un sentido más colectivo de
los procesos en que la sociedad interviene por lo que no solo se trata de una
propuesta, sino que también de una praxis.

El contexto que fundamenta esta necesidad se ve envuelto en lo que se (Jover, 2013)


denomina el esquema vital “vivir-trabajar-consumir” parece que las personas a través del
tiempo se han convertido en el blanco perfecto del consumismo, es decir que para el
orden capitalista actual nos define simplemente como un objeto al cual alienar de
acuerdo con el interés del mercado.

La sociedad, siendo ahora producto de un plan y un discurso político que apuesta por
una visión subjetiva que, como Fernández Duran afirma “ exalta el ego, el deseo
compulsivo de la felicidad, la obsesión por la eterna juventud, etc.” (Fernández Duran citado
por Jover, 2010, p. 86). Por el contario y gracias a la necesidad anteriormente
planteada, habría que concentrarse en fomentar las visiones que consideren lo
individual y lo colectivo en un ambiente en el que coexistan.

Así, se propone apostar más bien por la educación solidaria con un carácter
transformador talque sea capaz de enfrentar a la competitividad y el individualismo que
tanto se cuestiona. Desde esta perspectiva transformadora concepciones como la de
riqueza y conocimiento se resignifican para responder así a las verdaderas
necesidades de la sociedad, una sociedad que gracias al sistema capitalista ha roto
cada vez más con los lazos de comunidades de la reciprocidad como lo es el mundo
rural con meros intereses de desintegración.

Tras el paso del tiempo, un factor que en gran parte suma a la desintegración es el
contraste de realidades entre generaciones, parece que lo instantáneo y desmedido
caracteriza a la generación joven abriendo así un espacio seguro a la ideología
mercantil que no hace más que atentar contra la conciencia y la tolerancia de una
educación transformadora que incluya sistemas de orden social y económico con una
visión crítica.

Contrariando lo anterior, se estaría contribuyendo a la alienación del sistema actual y


no sería más que una complicidad al consumismo y la hegemonía, pues gracias a que
esta es la mejor estrategia de reproducción y en suma la más efectiva, la educación
recae una vez más en una educación bancaria en la que se deshumaniza a ella misma.
Además, por el avance siempre priorizado de la tecnológico y el avance de la ideología
virtual la praxis de esta educación transformadora y humanizadora se ve envuelva en
una nueva ola de pautas y desafíos a enfrentar.

“Los medios masivos de comunicación conforman las conciencias de la gente hasta el extremo
conocido de que si la gente cree que una cosa es real será real en sus consecuencias y
efectos. La hábil combinación de mensajes nihilistas en lo social pero hedonistas en lo
individual resulta eficaz.” (Jover, 2010, p. 92).

Tras esta cita, queda claro que los medios de comunicación desde su masividad juegan
un papel de educadores y formadores de la sociedad y sobre todo si se trata de valores
que van a fomentar el orden y el sistema que la rige. Es por esto que al investigar de
qué manera estos medios pueden intervenir en el proceso formativo (en cuestión de
valores) de las nuevas generaciones se abordarían y cuestionarían los proyectos
educativo-formativos del país transmitidos en ellos.

Así, esta investigación va a intervenir en el proceso formativo de valores sociales para


los niños y adolescentes y hasta cierto punto suma a una transformación de todos
estos contenidos que se transmiten a través de los medios de comunicación para
trabajar verdaderamente en la transformación del orden social actual. Además de lo
anterior, la manera de intervenir de esta investigación a la problemática ya planteada
va a ser encaminar cada vez más estos valores a un enfoque de la colectividad.

Esta claro que todo proceso formativo actual va a estar a expensas de lo que se
comparta en los medios de comunicación y la tarea principal de esta investigación no
se cierra en analizar el proceso, sino también en aportar a su mejora y transformación
de tal manera que tras su análisis se busca la utilización y la difusión de material
verdaderamente importante para la sociedad que se quiere formar.

Bibliografía.

 Jover D. (2017). El poder de la educación para transformar la sociedad. studylib.es.


https://studylib.es/doc/4559096/el-poder-de-la-educaci%C3%B3n-para-transformar-la-
sociedad.

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