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República Argentina - Poder Ejecutivo Nacional

Las Malvinas son argentinas

Resolución

Número: RESOL-2022-318-APN-DIRECTORIO#ENARGAS

CIUDAD DE BUENOS AIRES


Jueves 11 de Agosto de 2022

Referencia: EX-2019-07937826- -APN-GAL#ENARGAS. PETROURUGUAY S.A. - Recurso de


Reconsideración c. TFyC 2019, Primer Anticipo

VISTO el Expediente N° EX-2019-07937826- -APN-GAL#ENARGAS del Registro del ENTE NACIONAL


REGULADOR DEL GAS (ENARGAS), lo dispuesto en la Ley N° 24.076, su Decreto Reglamentario N°
1738/92, la Resolución ENARGAS N° 628/98, la Resolución N° RESFC-2019-44-APN-
DIRECTORIO#ENARGAS, y

CONSIDERANDO:

Que, en el Expediente del VISTO tramita el Recurso de Reconsideración con Alzada en subsidio interpuesto por
PETROURUGUAY S.A. (en adelante e indistintamente “PUSA” o la “recurrente”) contra la Resolución N°
RESFC-2019-44-APN-DIRECTORIO#ENARGAS del 21 de enero de 2019 y la Nota N° NO-2019-04061945-
APN-GA#ENARGAS del 22 de enero de 2019.

Que, por el Artículo 1° de la Resolución N° RESFC-2019-44-APN-DIRECTORIO#ENARGAS este Organismo


fijó el primer anticipo de la Tasa de Fiscalización y Control para el año 2019.

Que, dicha Resolución fue notificada a PUSA mediante Nota N° NO-2019-04061945-APN-GA#ENARGAS del
22 de enero de 2019, y recibida por ésta el 23 de enero de 2019 (IF-2022-73011050-APN-GAL#ENARGAS).

Que, el 5 de febrero de 2019 PUSA interpuso el Recurso de Reconsideración supra mencionado, mediante
Actuación Nº IF-2019-06946670-APN-SD#ENARGAS.

Que, previo relato de los antecedentes del caso, PUSA expresó que se constituye como “… una empresa
productora de hidrocarburos…”; que “…ha sido adjudicataria de diversas concesiones de explotación,
exploración y desarrollo complementario de hidrocarburos...”, y que “… de ninguna forma constituye un sujeto
licenciatario de transporte y/o distribución en los términos de los artículos 33 y 34 de la Ley 24.076 (…) tampoco
constituye una entidad comercializadora. Es decir, no existe acto administrativo alguno adjudicando a mi parte
la concesión interprovincial de transporte de hidrocarburos, de conformidad a las pautas y formalidades fijadas
por el artículo 4 del citado marco regulatorio sectorial”.
Que, también manifestó que “… PUSA no reviste el carácter de sujeto pasivo de la obligación impuesta por el
artículo 63 de la Ley 24.076, ni mucho menos puede ser calificado como transportista en virtud de resultar
propietaria de un gasoducto operado por una sociedad licenciataria que (…) se encuentra a cargo de la
cancelación del tributo que nos ocupa”.

Que, sostuvo que dentro de los obligados a pagar la tasa de fiscalización y control se encuentran los
almacenadores, transportistas, comercializadores, distribuidores y subdistribuidores, y que no alcanza dicha
normativa a los productores de hidrocarburos.

Que, se refirió a la tasa que pagan los subdistribuidores y los comercializadores de gas por encontrarse inscriptos
como tales ante el Organismo.

Que, agregó también que “… mediante los actos aquí impugnados el ENARGAS incurrió en el ejercicio de una
atribución ilegítima y, además, en un manifiesto exceso en el ejercicio de su facultad para determinar los
mecanismos de recaudación de la tasa, imponiendo la carga de su cancelación a sujetos que no revisten el
carácter de sociedades licenciatarias en los términos de la Ley 24.076, como tampoco –no obstante resultar
propietaria del gasoducto Colón Paysandú- prestataria (licenciataria) de un servicio público de transporte de
gas y/o de una actividad regulada”.

Que, señaló que “… desde mitad del año 2.017 PUSA no registra actividad comercial, es especial, de
producción” y que “el organismo carece además de informes contables vinculados a la actividad de
producción” de PUSA.

Que, luego de efectuar una reseña de impugnaciones por fijaciones de anticipos de la Tasa de Fiscalización y
Control de años anteriores, la recurrente adujo que “… los actos aquí impugnados resultan nulos de nulidad
absoluta e insanable, por encontrarse viciados en sus elementos competencia, causa, objeto, motivación, forma,
procedimiento y finalidad”.

Que, sostuvo, además, que tales elementos “… se encuentran viciados en virtud de la ilicitud de la delegación
conferida al ENARGAS, como asimismo, la inexistencia de causa ni motivo que justifique la inclusión de PUSA
en el marco de la Tasa de Fiscalización y Control prevista por la Ley 24.076 y, subsidiariamente, de la
manifiesta irrazonabilidad que de ella emana, sea para cargos y/o créditos. Y esto último, por sobretodo, ante la
inactividad de mi mandante como productora durante todo el 2.018 y en el corriente 2.019”.

Que, en efecto, señaló que “…a tenor de lo previsto por el artículo 63 de la Ley 24.076 y la irregular delegación
allí prevista, y al propio contenido de los antecedentes correspondientes a la Resolución ENARGAS 628/98 y a la
Resolución ex SE 447/98, el acto aquí impugnado resulta a todas luces contrario al ordenamiento legal vigente,
adoleciendo de manifiestos vicios en la causa y en el objeto”.

Que, refirió a una “… arbitraria conducta observada por el organismo y el exceso incurrido en el ejercicio de sus
facultades”.

Que, sostuvo que “… tampoco podría admitirse la delegación legislativa en los términos del artículo 76 de la
Constitución Nacional, toda vez que –sin perjuicio de haber soslayado determinar el artículo 63 de la Ley 24.076
el quantum de la tasa en cuestión- resulta inválido adoptar tal temperamento en materia tributaria”.

Que, además, PUSA remarcó que “… el Poder Legislativo omitió prever cuál es la alícuota aplicable para la
fijación o determinación de la Tasa de Fiscalización y Control del ENARGAS, obstando el ordenamiento
constitucional la delegación del elemento esencial del tributo en cabeza del Poder Ejecutivo…” (Cf. Fallo CSJN
´Camaronera Patagónica S.A.´).

Que, la recurrente prosiguió señalando que “… se consideró a PUSA como una sociedad licenciataria de
transporte en los términos de la ley 24.076, a partir de resultar propietaria del gasoducto de exportación ‘Colón
Paysandú’, operado -en el ámbito de su licencia- por TGN…”. Y agregó que “…Ya existe una transportista a
cargo de la operación del referido gasoducto, conforme se desprende de la propia Resolución ENARGAS Nº
628/98. De avalarse la postura del acto impugnado, serían dos sujetos los que cancelarían idéntica Tasa”.

Que, además, sostuvo que la posición del ENARGAS vulneraría los principios de legalidad y de jerarquía
normativa, al tiempo que conculcaría los derechos de raigambre constitucional que asisten a la recurrente de
ejercer libremente el comercio.

Que, remarcó que “… el artículo 63 de la Ley 24.076 tampoco comprende a productores o a los presuntos
`gasoductos` entre los sujetos obligados a la cancelación de la Tasa de Fiscalización y Control del ENARGAS”.

Que, agregó que “… el artículo 63 de la Ley 24.076 creó el tributo y determinó su hecho imponible y los sujetos
pasivos, mas soslayando hacer lo propio respecto de su cuantificación, lo que quedó completamente librada al
arbitrio del ENARGAS, con mella irreversible sobre la garantía y el ordenamiento constitucional”.

Que, PUSA señaló que la alegada delegación conferida -en los que entendió eran términos del Artículo 76 de la
Constitución Nacional- al ENARGAS para la determinación del tributo “resulta contraria al principio de reserva
tributaria, no siendo susceptible de delegación tal atribución del Poder Legislativo, lo que impone su declaración
de inconstitucionalidad, descalificando ello el proceder de los organismos demandados”.

Que, finalmente, la recurrente solicitó además la suspensión de los efectos de todos los actos cuestionados, en los
términos del Artículo 12 de la Ley N° 19.549, e hizo reserva del caso federal.

Que, sin perjuicio de lo que seguidamente se explicitará, cabe adelantar que la pretensión seguida por PUSA no
encuentra andamiaje para obtener de este Organismo una resolución favorable.

Que, la cuestión bajo análisis radica en el carácter que reviste la recurrente como Prestadora de servicios de
transporte público de gas natural, tanto que -como se verá- le resultan ineludiblemente aplicables las normas
correspondientes de la Ley N° 24.076 y normas técnicas como la NAG 100, encontrándose sujeta al control y a la
fiscalización de este Organismo Regulador del servicio en cuestión, en lo que interesa.

Que, en efecto, PUSA pretende desendilgarse del pago de tasa, previsto y autorizado por normas de rango legal,
so pretexto de alegar una condición que invoca no revestir.

Que, desde ahora y como Autoridad Regulatoria y de Aplicación de la Ley N° 24.076, no caben dudas de que
PUSA es transportista, según se procederá, ciertamente, a explicar seguidamente para que cualquiera pueda
comprender que no se trata de un caso complejo o antojadizo sino de la aplicación de las normas
correspondientes.

Que, así, y previo al caso concreto de la autorización conferida -a solicitud de quien ahora impugna-, cabe indicar
que el ENARGAS, en el ámbito de su competencia, no tiene ni debe ejercer funciones asignadas a los Sujetos de
la Ley que resulten ser prestadores de servicios públicos; por ello, este Organismo de control se encuentra
impedido de abordar o ejercer funciones asociadas a la habilitación, operación y mantenimiento de activos
afectados a la prestación de los servicios públicos, siquiera de forma excepcional, transitoria o sustituta, ya que es
el mismo ENARGAS, quien por mandato legal debe ejercer funciones de regulación y control sobre tales Sujetos
prestadores.

Que, por ende, el ENARGAS controla y fiscaliza -conforme la ley de la que es Autoridad de Aplicación- a PUSA.
Por ejemplo, en esta línea de fundamento, las normas de seguridad incorporadas en el Código NAG resultan ser el
plexo normativo a través del cual el ENARGAS fija los estándares mínimos de cumplimiento obligatorio para los
distintos prestadores (del cual PUSA no es ajeno); siendo los propios prestadores quienes en ejercicio de sus
habilitaciones correspondientes (sean éstas, autorizaciones del regulador, concesiones, licencias, permisos) los
que deben llevar adelante las tareas relativas a la prestación de los servicios, entre las que se encuentran las
mencionadas habilitaciones, operación y mantenimiento de los activos e instalaciones involucradas.

Que, véase que fue, entre los motivos que pronto se desarrollan, que por Resolución ENARGAS N° 628/98 se
autorizó la extensión proyectada por TRANSPORTADORA DE GAS DEL NORTE (en adelante, “TGN”) y
PUSA en los términos y condiciones del Artículo 16 de la Ley N° 24.076, por el plazo que surge del acuerdo
celebrado entre las partes en torno a la construcción, propiedad, operación y mantenimiento del Gasoducto Colón-
Paysandú, de acuerdo con el marco regulatorio que surge de la mencionada Ley; su reglamentación por Decreto
N° 1738/92; el Modelo de Contrato de Licencia de Transporte de Gas Natural aprobado por Decreto N° 2255/92;
las Pautas para la Administración de Despacho, y demás resoluciones del ENARGAS.

Que, dicho ello, cabe propiciar que no existen dudas, como se verá seguidamente, en razón de que se trata de los
denominados “16 b) de transporte”, que PUSA ha sido y es un interesado de transporte y que la recurrente es una
transportista en los términos de la Ley citada y alcanzada por la correspondiente normativa regulatoria.

Que, de hecho, PUSA tiene la obligación regulatoria de dar riguroso cumplimiento a las previsiones fijadas, se
citan a modo no taxativo ni limitativo, por los Artículos 21, 31 y 86, su reglamentación y normativa
complementaria, particularmente en lo que a cuestiones técnicas se refiere al Código NAG integrado por la
Norma NAG 100, entre otras.

Que, mediante el Artículo 21 de la Ley Nº 24.076, se dispuso que “Los sujetos activos de la industria del gas
natural están obligados a operar y mantener sus instalaciones y equipos en forma tal que no constituyan peligro
para la seguridad pública, y a cumplir con los reglamentos y disposiciones del Ente Nacional Regulador del Gas.
Dichas instalaciones y equipos estarán sujetos a las inspecciones, revisiones y pruebas que periódicamente
decida realizar el ente, el que tendrá también facultades para ordenar la suspensión del servicio y la reparación
o reemplazo de instalaciones y equipos, o cualquier otra medida tendiente a proteger la seguridad pública. El
ente, según corresponda, podrá delegar el control de cumplimiento de los reglamentos y disposiciones que dicte.
En los respectivos pliegos de licitación, deberá indicarse las causales de extinción de la habilitación”.

Que, por su parte, mediante el Artículo 31 de la Ley Nº 24.076, se estableció que “Los transportistas y
distribuidores efectuarán el mantenimiento de sus instalaciones a fin de asegurar condiciones de operabilidad
del sistema y un servicio regular y continuo a los consumidores”.

Que, asimismo, mediante el Artículo 86 de la Ley Nº 24.076, se dispuso que “Las normas técnicas contenidas en
el clasificador de normas técnicas de Gas del Estado Sociedad del Estado (revisión 1991) y sus disposiciones
complementarias, mantendrán plena vigencia hasta que el ente apruebe nuevas normas técnicas, en reemplazo de
las vigentes, de conformidad con las facultades que le otorga el artículo 52, inciso b) de la presente ley”.

Que, en efecto, se trata de una extensión del sistema de transporte que tuvo su origen en una solicitud voluntaria
de PUSA a TGN con el objeto de proveer de gas natural a la Administración Nacional de Combustibles, Alcohol
y Portland (en adelante, “ANCAP”), empresa pública multinacional situada en la República Oriental del Uruguay,
encargada de explotar y administrar el monopolio del alcohol y carburante nacional, el cemento portland, así
como importar, refinar y vender derivados de petróleo.

Que, para ello, conforme surge de la motivación de la Resolución ENARGAS N° 628/98 -firme y consentida por
PUSA-, fue necesaria la extensión física del Sistema Norte desde su punto de interconexión con el Gasoducto
Troncal Entrerriano en las inmediaciones del cruce de las Rutas Nacionales Nros. 14 y 135 hasta la frontera
argentino-uruguaya en el Puente Internacional José Gervasio Artigas.

Que, no es ocioso reiterar que dicha resolución se encuentra firme y consentida, pues es la que otorga el carácter
de tal a PUSA, donde se trata que es una extensión física del sistema operado por la Licenciataria con el objeto de
transportar gas.

Que, PUSA está obligada a cumplir las tareas necesarias para que esas instalaciones se encuentren aptas conforme
a las normas de aplicación vigentes, en caso de ser la encargada responsable de la construcción de tales obras.

Que, es decir que PUSA, transporta gas, cobra por el servicio y se sujeta -en razón de aquello, al ser una
extensión de transporte- a la Ley N° 24.076 y normativa reseñada supra.

Que, esto último resulta muy relevante en el caso de autos en razón de la naturaleza jurídica atribuible a PUSA
como transportista. En nada influye que PUSA no posea adjudicada una licencia, sino que se trata del hecho de
ser una transportista regulada por el ENARGAS.

Que, se trata, en efecto, de la figura de terceros interesados, en este caso, terceros interesados de transporte, que
se encuentra consagrada en el inciso b) del Artículo 16 de la Ley N° 24.076, y su reglamentación por Decreto N°
1738/92, que no es novedosa. Ni antes, ni ahora; y entonces tampoco lo era para PUSA al momento de su
solicitud para la extensión del sistema de la transportista y la solicitud de transporte de gas. Esa resolución
(Resolución ENARGAS N° 628/98), como se expuso, se encuentra firme y consentida.

Que, dicho ello, además del propio acto antes mencionado, la normativa aplicable al caso está integrada por el
Artículo 16 de la Ley N° 24.076 y su reglamentación por Decreto N° 1738/92, el numeral 8.1.3 de las Reglas
Básicas de la Licencia de Transporte de Gas Natural, aprobadas por Decreto N° 2255/92, y el Punto 20 del
Reglamento del Servicio de Transporte de Gas Natural, aprobado también por Decreto N° 2255/92.

Que, dicho plexo normativo regula, en lo que interesa, la construcción de obras de magnitud no previstas en las
habilitaciones de las Licenciatarias de Transporte de Gas.

Que, de conformidad con dichas normas, los prestadores del servicio público de transporte de gas deben solicitar
al ENARGAS, en casos como el de marras, la aprobación de los Acuerdos de Conexión y de Operación y
Mantenimiento, así como la autorización de inicio de proyectos de construcción de la Obra de Magnitud.

Que, para una mejor ilustración, respecto de la figura y de su encuadre, que es utilizada desde el año 1995 ante un
cuestionamiento específico de una Licenciataria de Transporte, aquella fue detallada en extenso en la Resolución
ENARGAS N° I-180/2008.

Que, en esa oportunidad se resaltó que, en orden a la normativa aplicable, se considera tercero interesado de
transporte a toda persona jurídica de derecho privado, constituida conforme a las leyes de la República Argentina
en materia societaria, que solicite de manera fehaciente a la Transportista, la conexión de un gasoducto –obra de
magnitud de su propiedad- al sistema de transporte de aquella.

Que, asimismo, se expuso que, tal como lo dispone el inciso b) del Artículo 16 de la Ley N° 24.076, “Para el
caso de obras no previstas en la respectiva habilitación, las cooperativas y los terceros interesados en su
realización deberán arribar a un acuerdo con el prestador de la zona que corresponda, y someterlo al ENARGAS
para que autorice. De no existir acuerdo el ENARGAS resolverá la cuestión en un plazo de TREINTA (30) días,
disponiendo dentro de los QUINCE (15) días la realización de una Audiencia Pública”.

Que, asimismo, el Punto 3) de la reglamentación del Artículo 16 por el Decreto N° 1738/92, dispone que, “A
menos que se hubiese dispuesto de otra manera en la habilitación respectiva, si se trata de instalaciones para el
Transporte de Gas no previstas en la habilitación correspondiente el Transportista no será obligado a ampliar
sus instalaciones, pero sí a permitir la construcción de instalaciones de conexión y medición que el ENARGAS
determine, cuyo costo quedará a exclusivo cargo de quien las solicite”.

Que, en el caso de las extensiones físicas de los Sistemas de Transporte a favor de los terceros interesados -como
es el caso de estas actuaciones-, la operación y mantenimiento queda a cargo de la Licenciataria de Transporte
quien recibe un canon por parte del tercero interesado que es el titular del ducto y es quien transporta el gas, en
este caso particular, desde el punto de recepción hasta el de entrega en la frontera con la República Oriental del
Uruguay.

Que, las Licenciatarias de Transporte, si bien no están obligadas a extender sus instalaciones (numerales 8.1.3 y
20.1.1 de la Licencia de TGN), tienen posibilidad de realizarlo con la previa autorización del Organismo en los
términos previstos en las normas aplicables.

Que, en tal sentido, el ENARGAS autorizó en este caso (y en otros variados) a que un tercero interesado
construya un gasoducto que conecte al sistema de transporte local para llegar (y transportar gas) a la frontera con
la República Oriental del Uruguay (en el caso de PUSA).

Que, al respecto, corresponde citar lo establecido en el Punto 20 del Reglamento del Servicio de Transporte de
Gas Natural, aprobado por Decreto N° 2255/92: “El Transportista estará obligado a permitir el acceso a sus
instalaciones y servicios sobre una base no discriminatoria. Todo productor, almacenador, distribuidor, gran
consumidor o cargador que tuviere una fuente de abastecimiento de gas o instalación susceptible de ser
conectada directamente a las instalaciones del Transportista podrá requerir que se practique tal conexión sujeta
a los requisitos y condiciones establecidas en la Ley N° 24.076, el Decreto Reglamentario y la reglamentación
del ENARGAS y lo dispuesto en el presente Reglamento. El Transportista deberá cumplir tal requerimiento, con
excepción de los casos de inviabilidad técnica, y todos los costos directos e indirectos de la instalación serán
soportados por la parte que requiere tal conexión. Ninguna conexión realizada conforme al presente Artículo
dará derecho a requerir al Transportista una ampliación de sus instalaciones de cualquier naturaleza, ni el
Transportista estará obligado a transportar el gas de tal conexión a menos que la capacidad existente del
gasoducto lo permitiere y de conformidad con las modalidades de servicio establecidas en este Reglamento, en
las Condiciones Especiales del (los) servicios que resulten de aplicación, y en el (los) Contrato (s) de Servicio
celebrado (s)”.

Que, de la normativa aquí señalada, los aspectos más importantes a destacar son los siguientes: 1) El
Transportista no puede negarse a la conexión de sus instalaciones con las de un tercero interesado (principio del
“Acceso Abierto”, Artículo 26 de la Ley N° 24.076, su reglamentación por Decreto N° 1738/92 y el punto 20 del
Reglamento del Servicio de Transporte –aprobado por Decreto N° 2255/92). 2) El Transportista debe llegar a un
acuerdo con el tercero interesado, de lo contrario el Ente debe resolver el conflicto de acuerdo al procedimiento
establecido en el inciso b) del Artículo 16 de la Ley N° 24.076. 3) El Transportista no está obligado a realizar
extensiones del Sistema de Gasoductos (aunque ello no implica que le esté vedado, sino que deberá obtener la
autorización expresa del Organismo –Artículo 16 de la Ley N° 24.076-). 4) Los costos directos e indirectos de la
instalación deben ser soportados por quien la solicita por aplicación del punto 20 del Reglamento del Servicio de
Transporte, aprobado por Decreto N° 2255/92 (en este caso, el tercero interesado). 5) Los terceros interesados no
poseen una Licencia de Transporte (toda vez que el PEN no les ha conferido una Licencia), sino que, en virtud de
adquirir, conforme el Artículo 16 inciso b), la calidad de transportista, con lo que ello lleva asociado en el caso, el
ENARGAS les otorga –como en autos- una autorización sobre una extensión del Sistema de Gasoductos de una
Licenciataria. 5.1) En consecuencia, es un tercero interesado de transporte que, por lo tanto, extendió físicamente
el sistema licenciado y vende la capacidad de transporte de su gasoducto, independientemente de que la operación
y mantenimiento estén a cargo de la Licenciataria de transporte (en este caso, TGN); siendo incluso que ambos
sujetos transportistas deben cumplir con las disposiciones legales aplicables a dichos sujetos. Ello, en efecto,
conlleva una TARIFA asociada, no presta el servicio de transporte gratuitamente. PUSA en este caso, como
tercero interesado de transporte, no sólo es dueño del ducto respectivo, sino que dispone como transportista del
negocio de vender la capacidad de transporte de su gasoducto y cobrar por esta capacidad de transporte. Es que la
explotación del servicio sólo es pretendible (o al menos resultaría del caso) en aquellos casos que suponen una
actividad económica, que toma a su cargo el prestador a cambio de una retribución: el producto de las tarifas o
precio (según el caso conforme la norma aplicable) pagado por los usuarios. Y es evidente, de conformidad con
todas las normas citadas, que ello tiene asociado el cumplimiento de la Ley N° 24.076, conforme sea el caso. 6)
Las obligaciones que se encuentran a cargo del tercero interesado se imponen al momento de dictar la Autoridad
Regulatoria el acto administrativo que aprueba -como es en este caso- la solicitud de extensión en torno a la
construcción, propiedad, operación y mantenimiento del Gasoducto Colón-Paysandú, en los términos del acuerdo
arribado entre PETROURUGUAY y TGN (Cf. Resolución ENARGAS N° 628/98); estas obligaciones
básicamente consisten en el cumplimiento de las disposiciones referidas al Acceso Abierto e implican el
sometimiento a la regulación que atañe a aquellas transportistas que tienen licencia, en lo pertinente.

Que, es indudable que el acceso abierto en materia de transporte de gas natural deriva de la Ley N° 24.076 y
concordantes.

Que, en consecuencia, no es para nada menor, volver a mencionar que el ENARGAS, no tiene ni debe ejercer
funciones asignadas a los Sujetos de la Ley -prestadores de los Servicios Públicos de Transporte y Distribución-,
no solamente porque de hacerlo incurriría en un exceso de su competencia legal, sino porque además ello
conllevaría a ejercer la doble función de prestador y contralor, lo que a las claras resulta incompatible; por lo
tanto PUSA, al ser un Sujeto regulado, se encuentra sujeto a control y fiscalización de este Regulador y las
normas dictadas por el ENARGAS -en ejercicio de las funciones que la Ley le asigna- deben ser respetadas y
cumplidas de manera permanente por parte de cualquier prestador, sin excepción.

Que, respecto concretamente al pago de la Tasa de Fiscalización y Control que deben abonar los “terceros
interesados” de transporte previstos en el Artículo 16, inciso b) de la Ley N° 24.076, debe tenerse en cuenta que
en orden a lo allí dispuesto y a las normas citadas que regulan su actividad, son transportistas (extensión del
sistema licenciado) y por ende actúan como transportistas también en la medida que su negocio consiste en
vender y cobrar por la capacidad de transporte de su gasoducto. Esto es, valga la redundancia, cobran por
capacidad de transporte, aunque sólo tengan una autorización del ENARGAS y no una licencia ni concesión de
transporte otorgada por el Poder Ejecutivo (Cf. Artículo 11 de la Ley N° 24.076).
Que, va de suyo que como el transporte de gas natural es un servicio público (Artículo 1° de la Ley N° 24.076), la
operación y mantenimiento la debe realizar la Licenciataria de Transporte de la que se conecta, quien tiene a su
cargo la policía de seguridad, en orden a que esa responsabilidad se extiende hasta el “City Gate” de una
Distribuidora, o a las instalaciones del consumidor, o en este caso hasta la frontera argentina. En razón de que
PUSA no es el consumidor del gas que transporta la Licenciataria hasta la conexión con el tercero interesado, la
policía de seguridad de aquella se debe extender hasta la frontera.

Que, ello no influye en lo antes explicado.

Que, lo mismo ocurre con la figura del Subdistribuidor, que a pesar de no estar incluido en los Artículos 9° y 63
de la Ley N° 24.076, pagan la tasa de fiscalización y control en razón de que prestan el servicio público de
distribución, en orden a la autorización conferida por el ENARGAS, que los controla y los fiscaliza, al igual que a
los terceros interesados de transporte.

Que, debe advertirse que la norma no prevé para el caso del transporte, que el tercero interesado realice la
operación y mantenimiento del ducto, pero se reitera y es además medular que mantiene la titularidad del ducto y
transporta el gas hasta el punto de entrega.

Que, al otorgarse la autorización de conexión con el sistema de transporte de TGN mediante Resolución
ENARGAS N° 628/1998, se destacó para PUSA que la extensión física autorizada se otorgaba en los términos del
Marco Regulatorio que surge de la Ley N° 24.076, su reglamentación por Decreto N° 1738/92, el Modelo de
Licencia de Transporte de Gas Natural aprobado por Decreto N° 2255/92, las Pautas para el Despacho y demás
resoluciones (Cf. Artículo 1° de la citada Resolución).

Que, nótese que el Modelo de Licencia de Transporte de Gas Natural, aprobado por Decreto N° 2255/92, dispone
en su numeral 4.2.15 que dentro del “Régimen de Prestación del Servicio”, la empresa debe “Abonar la Tasa de
Control y cumplir con el régimen de seguros previsto en el Artículo 5.3”.

Que, se advierte, además, y esto también es relevante, que las partes habían previamente acordado la pertinencia
del cobro de la Tasa en relación a la actividad realizada por el gasoducto de y por PUSA.

Que, cabe citar aquí la doctrina de los actos propios, conocida en latín bajo la fórmula “non venire contra factum
propium” que proclama el principio general de derecho que establece la inadmisibilidad de actuar contra los
propios actos hechos con anterioridad; es decir, prohíbe que una persona pueda ir contra su propio
comportamiento mostrado con anterioridad para limitar los derechos de otra, que había actuado de esa manera
movido por la buena fe de la primera.

Que, constituye, en efecto, aquella, un límite del ejercicio de un derecho subjetivo, de una facultad, o de una
potestad, como consecuencia del principio de buena fe y, particularmente, de la exigencia de observar, dentro del
tráfico jurídico, un comportamiento consecuente.

Que, debe aclararse que la Tasa de Fiscalización y Control que abona TGN, no incluye la actividad que realiza
respecto del gasoducto de PUSA, y por ello no existe doble pago ni la alegada doble imposición. Término, por
cierto, este último, de naturaleza tributaria, que por las características de estos casos queda de plano descartado de
todo análisis literal e interpretativo.

Que, surge evidente que la negativa a abonar la Tasa de Fiscalización y Control por parte de PUSA resulta un
incumplimiento a lo dispuesto en la Resolución ENARGAS N° 628/98, y a todo marco regulatorio citado, motivo
por el cual las sumas debidas pueden, conforme las normas correspondientes, ser ejecutadas por este Organismo
en sede judicial.

Que, por otra parte, la Tasa de Fiscalización y Control constituye uno de los ingresos que, de acuerdo con lo
establecido en el Artículo 62 de la Ley N° 24.076, conforman los recursos del ENARGAS.

Que, en el caso de PUSA se han respetado todos los requerimientos legales, conforme a lo dispuesto por la Ley
N° 24.076 y particularmente según lo establecido en el Artículo 63 de su Decreto Reglamentario “El Ente
determinará los mecanismos de recaudación y administración de la Tasa de Fiscalización y Control. Los
excedentes que puedan resultar de la ejecución presupuestaria serán asignados al ejercicio siguiente…”.

Que, en efecto, el Artículo 62 de la Ley Nº 24.076 determina, entre los recursos del ENARGAS, la tasa de
inspección y control creada por el Artículo 63, conforme lo allí dispuesto, cuya reglamentación por Decreto Nº
1738/92 prevé que los excedentes que puedan resultar de la ejecución presupuestaria sean asignados al ejercicio
siguiente.

Que, el ENARGAS se encuentra alcanzado por la Ley de Administración Financiera y de los Sistemas de Control
del Sector Público Nacional N° 24.156, conforme lo estipulado por su Artículo 8º, inc. a), siendo la Oficina
Nacional de Presupuesto (ONP), el órgano rector del Sistema Presupuestario del Sector Público Nacional.

Que, de acuerdo con los Artículos 59 inc. e) y 61 de la Ley Nº 24.076, el ENARGAS debe formular su
presupuesto anual de gastos y cálculo de recursos, el que se elevará a aprobación del Poder Ejecutivo Nacional
(PEN), para su posterior inclusión en el Proyecto de Ley Nacional de Presupuesto del ejercicio correspondiente.

Que, un dato no menor, es que el presupuesto del ENARGAS es aprobado por LEY DEL CONGRESO.

Que, la ONP tiene a su cargo, entre otras competencias, la facultad de dictar las normas técnicas para la
formulación, programación de la ejecución, modificaciones y evaluación de los Presupuestos de la
Administración Nacional, analizar los Anteproyectos de Presupuesto de los organismos que la integran, y
proponer los ajustes que considere necesarios, como también preparar el Proyecto de Ley del Presupuesto General
y fundamentar su contenido.

Que, la formulación del Anteproyecto se hace de acuerdo a los lineamientos de política presupuestaria previstos
por esta Autoridad Regulatoria, sujeto a un límite en el nivel de gastos, que se encuentra dentro de la esfera de
potestades del ENARGAS, determinable en base a razones de oportunidad, mérito o conveniencia.

Que, posteriormente ese Anteproyecto es consolidado por el Poder Ejecutivo Nacional y elevado al Congreso de
la Nación, para que sea aprobado por las Cámaras de Diputados y Senadores, a fin de convertirlo en Ley.

Que, dicho ello, si bien PUSA, no ha presentado los Estados Contables del año 2008 al presente, conforme surge
de cada una de las resoluciones que determinan la Tasa de Fiscalización y Control, y particularmente -en este
caso de la Resolución N° RESFC-2019-44-APN-DIRECTORIO#ENARGAS, el monto en dicho concepto está
calculado en base a los últimos Estados Contables disponibles por este Organismo y que fueron presentados por
PUSA, los cuales corresponden al año 2007.

Que, además, la fijación de la Tasa de Fiscalización y Control es en base a la información proporcionada por el
propio Sujeto regulado a través de sus ingresos brutos. Es, por consiguiente, ajustado a derecho el quantum de la
Tasa de Fiscalización y Control, a los fines de resguardar el normal funcionamiento del Organismo y las
competencias que le son propias, que incluyen a PUSA.

Que, respecto a la declaración de inconstitucionalidad del Artículo 63 de la Ley N° 24.076 planteada por PUSA,
cabe traer a colación que la Procuración del Tesoro de la Nación (PTN) dictaminó oportunamente (conf.
Dictámenes 262:176) que, a diferencia del Tribunal Fiscal de la Nación, la Administración carece de una facultad
atribuida por la Ley para expedirse respecto de la inconstitucionalidad de las leyes.

Que, en ese sentido, el ENARGAS no tiene competencia para analizar y resolver el pedido de declaración de
inconstitucionalidad del Artículo 63 de la Ley N° 24.076, en tanto en el sistema jurídico argentino el control de
constitucionalidad funciona sobre la base del control judicial, y tal potestad no se extiende a los órganos
administrativos.

Que, asimismo, la PTN expresó que, a tenor del principio de división de poderes, cualesquiera que sean las
facultades del Poder Ejecutivo para dejar sin efecto actos contrarios a las leyes, no le corresponde pronunciarse
sobre la inconstitucionalidad de ellas, por revestir el control de constitucionalidad de las normas emanadas del
Poder Legislativo una facultad privativa del Poder Judicial (conf. Dictámenes 202:9, 240:158, 262:176 y
285:112).

Que, ahora bien, sin perjuicio de lo expuesto, cabe recordar que la Corte Suprema ha dicho que el agravio
constitucional no puede invocarse cuando: 1) el mismo deriva de la propia conducta discrecional del interesado;
2) ha mediado renuncia a su alegación; 3) quien formula la impugnación se ha sometido anteriormente sin reserva
alguna al régimen jurídico que ataca; 4) quien formula la impugnación no es titular del derecho presuntamente
lesionado, y 5) no subsiste el interés personal en la causa, sea por haber cesado la presunta violación al derecho,
sea por haberse derogado la norma cuya inconstitucionalidad se alegaba, etc. con lo que la cuestión judicial a
resolver se ha tornado “abstracta” (Bidart Campos, Germán “Control de Constitucionalidad”, “Manual de la
Constitución Reformada”, Editorial Ediar, Buenos Aires, 1996, t.1, Cap. V).

Que, en ese sentido, cabe destacar que PUSA, al momento de dictarse el acto que autorizó la conexión del
gasoducto con el sistema de Transportadora de Gas del Norte S.A. (Cf. Resolución ENARGAS N° 628/98), ya
tenía conocimiento de que debía pagar la Tasa de Fiscalización y Control, por lo que debió haber previsto dicho
costo.

Que, en orden al análisis efectuado, corresponde señalar que los actos administrativos impugnados no adolecen de
los vicios endilgados.

Que, es así que este Organismo ejerce la competencia que le otorgan los Artículos 16 y 63 de la Ley N° 24.076,
en razón de que el primer artículo mencionado fue precisamente el que ha utilizado PUSA para solicitar al
Organismo que apruebe la conexión al sistema de TGN, y así ha obtenido la figura del tercero interesado previsto
expresamente en la normativa (Artículo 16 de la Ley N° 24.076 y el inciso 3 de su reglamentación por Decreto N°
1738/92), resultando por ello ser sujeto de la industria de gas, debiéndose ajustar a las normas vigentes (Artículo
1° de la Resolución ENARGAS N° 628/98).

Que, en relación con la causa de la imposición del pago de la Tasa de Fiscalización y Control, debe señalarse que
la misma surge específicamente de la normativa mencionada tal lo explicitado en los puntos anteriores.

Que, en cuanto a la motivación, en tanto resulta ser la manifestación expresa de la causa, aquélla ha sido puesta
en conocimiento de PUSA desde el dictado de la Resolución ENARGAS N° 628/98, y por las Resoluciones
impugnadas, considerando que al momento de requerir al Organismo la conexión aprobada por la Resolución
mencionada, se presume que PUSA tenía conocimiento de la normativa aplicable como “tercero interesado de
transporte”, siendo esas normas citadas en forma reiterada desde la constitución de PUSA como sujeto de la Ley
N° 24.076.

Que, en mérito a las consideraciones aquí vertidas, cabe concluir que las razones esgrimidas por la recurrente
revelan una mera discrepancia, no alcanzando a enervar la legitimidad del acto que se impugna, razón por la que
corresponde el rechazo íntegro del Recurso de Reconsideración planteado por PETROURUGUAY S.A., y la
elevación de las actuaciones a la Secretaría de Energía del Ministerio de Economía de la Nación para la
correspondiente resolución del recurso de Alzada interpuesto.

Que, finalmente y para mejor proveer, corresponde citar algunas consideraciones realizadas por la Alzada en la
Resolución N° RESOL-2022-349-APN-SE#MEC del 6 de mayo de 2022, que en su Artículo 1° rechazó el
recurso de alzada interpuesto por TRANSPORTADORA DE GAS DEL MERCOSUR S.A. contra la Resolución
ENARGAS N° 369 del 3 de julio de 2019 por la cual se desestimó el recurso de reconsideración interpuesto por
la reclamante contra la Resolución ENARGAS Nº 153 del 18 de julio de 2018 que fijó el tercer anticipo de Tasa
de Fiscalización y Control para el año 2018.

Que, al respecto, la Alzada señaló que “… el ENARGAS adecuadamente expresó que no le corresponde al
PODER EJECUTIVO pronunciarse sobre la inconstitucionalidad de las leyes, por revestir el control de
constitucionalidad de las normas emanadas del PODER LEGISLATIVO una facultad privativa del PODER
JUDICIAL, conforme al principio de división de poderes…” (la negrita es propia).

Que, expresó además que “… de acuerdo con el Artículo 51 de la Ley Nº 24.076 y su reglamentación aprobada
por el Decreto Nº 1.738 de fecha 18 de septiembre de 1992, el ENARGAS goza de plena autarquía, tanto
presupuestaria como administrativa…”.

Que, también indicó en sus considerandos que “… se ha expresado la doctrina: ‘Dada la naturaleza de los entes,
el control de la administración es sólo de legitimidad, verificando si se han observado los límites del quehacer
regulado o los límites impuestos al ejercicio de facultades discrecionales. La acción controladora se restringe a
verificar la conformidad o disconformidad de los actos con las exigencias del sistema normativo. Técnicamente
no es admisible el control de mérito, conveniencia u oportunidad, pues en ello el ente autárquico tiene ilimitados
poderes discrecionales’ (DROMI, R., "Derecho Administrativo", p. 470, Ed. Ciudad Argentina, Buenos Aires,
1995)”.

Que, asimismo, señaló que “… en relación a la nulidad planteada respecto de la Resolución Nº 369/19 del
ENARGAS, la Procuración del Tesoro de la Nación sostiene que, ‘las nulidades de los actos administrativos
deben analizarse de modo restrictivo, y en principio, prefiriendo la validez y subsistencia del acto atacado’
(Dictámenes: 262:548; 256:134; 266:212)”. Y agregó que “… el Artículo 12 de la Ley Nacional de
Procedimientos Administrativos Nº 19.549, sostiene que: ‘El acto administrativo goza de presunción de
legitimidad; su fuerza ejecutoria faculta a la Administración a ponerlo en práctica por sus propios medios –a
menos que la ley o la naturaleza del acto exigieren la intervención judicial- e impide que los recursos que
interpongan los administrados suspendan su ejecución y efectos, salvo que una norma expresa establezca lo
contrario. Sin embargo, la Administración podrá, de oficio o a pedido de parte y mediante resolución fundada,
suspender la ejecución por razones de interés público, o para evitar perjuicios graves al interesado, o cuando se
alegare fundadamente una nulidad absoluta’”.

Que, por último, en relación al planteo de inconstitucionalidad respecto del Artículo 63 de la Ley Nº 24.076, la
Alzada expresó que “… no resulta viable en este ámbito siendo ello competencia del PODER JUDICIAL (…) por
lo expuesto, cabe señalar que, los argumentos esgrimidos por la impugnante en su recurso, han sido
adecuadamente tratados y rebatidos por el ENARGAS, pudiéndose concluir que el acto impugnado fue el
resultado del ejercicio de facultades regladas y que no se advierte ilegalidad o arbitrariedad en su dictado, por
lo que resulta procedente el rechazo del recurso de alzada interpuesto por la firma TRANSPORTADORA DE
GAS DEL MERCOSUR S.A., contra la Resolución Nº 369/19 del ENARGAS…” (la negrita es propia).

Que, el Servicio Jurídico Permanente de este Organismo ha tomado la intervención que por derecho corresponde.

Que el ENTE NACIONAL REGULADOR DEL GAS es competente para resolver el presente Recurso de
Reconsideración, en virtud de lo dispuesto en el Artículo 84 del Reglamento de Procedimientos Administrativos –
Decreto N° 1759/1972 (T.O. 2017), el Decreto N° 278/2020, el Decreto N° 1020/2020 y el Decreto N° 871/2021.

Por ello,

EL INTERVENTOR

DEL ENTE NACIONAL REGULADOR DEL GAS

RESUELVE:

ARTÍCULO 1°: Rechazar el Recurso de Reconsideración interpuesto por PETROURUGUAY S.A. contra la
Resolución N° RESFC-2019-44-APN-DIRECTORIO#ENARGAS del 21 de enero de 2019 y la Nota N° NO-
2019-04061945-APN-GA#ENARGAS del 22 de enero de 2019, por las razones expuestas en los considerandos
del presente acto.

ARTÍCULO 2°: Elevar el Expediente N° EX-2019-07937826- -APN-GAL#ENARGAS a la SECRETARÍA DE


ENERGÍA del MINISTERIO DE ECONOMÍA DE LA NACIÓN, para que en ese ámbito se tramite y resuelva el
Recurso de Alzada incoado en subsidio.

ARTÍCULO 3º: Notificar la presente resolución a PETROURUGUAY S.A., en los términos del Artículo 41
del Reglamento de Procedimientos Administrativos - Decreto N° 1759/72 (T.O. 2017). Registrar y archivar.

Digitally signed by BERNAL Federico


Date: 2022.08.11 18:05:47 ART
Location: Ciudad Autónoma de Buenos Aires

Federico Bernal
Interventor
Directorio
Ente Nacional Regulador del Gas

Digitally signed by Gestion Documental


Electronica
Date: 2022.08.11 18:06:03 -03:00

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