Qué es un seguro de responsabilidad civil, tipologías y cuándo

contratarlo
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Todas las acciones tienen consecuencias, sean buenas o malas. En el primer caso,
solo cabe felicitarse, mientras que, para el seguro, conviene estar preparado. Aquí es
donde entran en juego un seguro de responsabilidad civil.
Imagina por un momento que una mala decisión termina en un proceso judicial. E
imagina que genera importantes gastos para nuestra economía personal o
empresarial.
Si esta situación desborda tu capacidad de pago, es importante contar con un seguro
de responsabilidad civil. Evidentemente, deberá incluir las coberturas necesarias,
como costes judiciales o incluso fianzas, llegado el caso.
Contar o no con un seguro de responsabilidad civil puede significar una gran
diferencia. Tanta como entre superar la situación o terminar en la calle sin recursos de
los que vivir.

Cuándo es necesario contar con un seguro de responsabilidad

civil
Lo primero que debes saber sobre los seguros de responsabilidad civil es que no
siempre es obligatoria su contratación. Por ejemplo, en nuestro país es común
contratar seguros de este tipo cuando se ejercen determinadas profesiones. Es el caso
de arquitectos y médicos.
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También es común su contratación para garantizar que circulamos seguros. Los

accidentes de auto pueden dar lugar a importantes indemnizaciones a terceros que
podemos evitar.
Recuerda que, aunque el accidente tenga el inconveniente de ver tu auto destrozado,
los daños materiales no lo son todo. Si hay personas involucradas, aunque sean de tu
familia, pueden exigir una importante indemnización.
No sería la primera vez que un accidente de auto termina con el fallecimiento de uno
de los involucrados. Como consecuencia, se dan millonarias reclamaciones por daños
que terminan arruinando al responsable. De poco o nada sirve que tuviera intención o
no de provocar el accidente.
E incluso, existe la obligación de contar con un seguro de responsabilidad andina si tu
empresa va a realizar viajes turísticos por los países que forman la región andina.
Por el contrario, es menos frecuente que los particulares tengan contratado un seguro
de RC. (Responsabilidad civil)
Como curiosidad, las familias numerosas son las que más seguros de este tipo suelen
contratar, al haber varios hijos en casa susceptibles de provocar daños.

Los seguros de RC en el ámbito profesional, cuándo contratar

En el ámbito profesional, aunque no siempre es obligatorio, son pocos los fondos de
inversión que deciden invertir en una empresa que no cuente con un seguro de este
tipo.
¿A qué se debe esta circunstancia? Las empresas no solo deben responder ante
terceros en caso de daños. Además, deben responder por las posibles negligencias de
sus empleados. Lógicamente, cuando más grande es la empresa, más cuidado tiene
con este tipo de eventualidades. Imagina una empresa con más de 100 empleados,
que, además, se dedica a dedica a la construcción.
Es más que probable que a lo largo de su existencia alguno de sus empleados cause
daños a terceros. Y también es más que probable que cuantos más empleados tenga
dicha empresas, más probabilidades hay de que el número de accidentes incremente.
Para los pequeños negocios las cosas son muy diferentes. No siempre se pueden
permitir un seguro de responsabilidad civil, pues sus economías están más ajustadas.
Sin embargo, no es una cuestión fácil de eludir, pues como hemos comentado, la
diferencia entre contar con un seguro de RC y no tenerlo puede comprometer el futuro
de la empresa.
A lo largo de este artículo vamos a ver diferentes tipos de seguros de responsabilidad
civil, tanto para particulares como para profesionales.

La responsabilidad civil en el Código Civil ecuatoriano

Lo primero que tenemos que destacar es que el Código Civil ecuatoriano establece la
obligación de reparar el daño cometido a un tercero, sea por negligencia, omisión o
mala fe.
Este daño a terceros puede provenir de un hecho propio, un hecho ajeno o un hecho
causado por animales o cosas de nuestra propiedad.
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Responsabilidad por un hecho propio

Por regla general quien tiene capacidad de obrar es quien debe asumir la
responsabilidad civil.
Sin embargo, existe una excepción frecuente, en la que un menor de dieciséis, pero
mayor de siete, sea considerado como responsable, pues se considera que hay
discernimiento y que está obligado a responder con sus bienes.
Así lo señala el segundo párrafo del artículo 2219 del nuestro Código Civil.
Por otro lado, las personas jurídicas asumen la responsabilidad de los miembros que
pertenecen a ellas, como empleados.

Responsabilidad por hechos ajenos

En el artículo 2220 del Código Civil se establece que toda persona es responsable de
las acciones de las personas que están a su cuidado.
Así, por ejemplo, los padres son responsables de las acciones de sus hijos, y los
dueños, de las de sus mascotas o animales a su cuidado. Si se da el caso de
familiares que vivan de forma habitual con nosotros, como abuelos o nietos, también
es responsabilidad de sus cuidadores las negligencias que puedan cometer.
La responsabilidad por daños causados por animales y cosas, se encuentra regulada
por los artículos 2226 y siguientes del Código Civil ecuatoriano.

La importancia de contratar un seguro de RC

Aunque nuestro país no posee una fuerte cultura aseguradora a nivel particular, es
cierto que cada vez son más los que prefieren vivir tranquilos frente al futuro.
Es el caso de las empresas, que pueden ver comprometido su futuro económico antes
reclamaciones de responsabilidad civil.
En el caso de las familias, la situación es aún más grave, pues no podemos prever lo
que sucede a nuestro alrededor.
También es importante destacar el caso de las pequeñas empresas, donde una
reclamación en este sentido puede terminar con su actividad económica e incluso con
el futuro de toda una familia. Por eso, cada día es más común encontrar familias y por
supuesto, profesionales, que no dan un paso sin tener una póliza de seguro de
responsabilidad civil.
Viven más tranquilos y saben que el futuro les sonríe.

Tipos de seguros de responsabilidad civil

Existen muchas circunstancias en las que se hace necesario contar con un seguro de
responsabilidad civil.
Hay que distinguir por tanto diferentes tipos de seguros, tanto para el ámbito privado
como para el ámbito empresarial o público.
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Vemos uno a uno los tipos de seguros a los que puedes optar y qué funciones
cumplen.

Seguros para particulares

Como hemos comentado con anterioridad, somos responsables de nuestras acciones,
así como de las derivadas de las personas que están a nuestro cuidado.
La primera gran categoría de seguros de responsabilidad civil la forman los seguros
del hogar.
Casi todos los seguros de este tipo incluyen coberturas relacionadas con la
responsabilidad civil, como es el caso del seguro del hogar de Oriente Seguros.
Los incendios o la rotura de tuberías, por ejemplo, pueden causar daños a la
propiedad de nuestros vecinos que deberíamos asumir nosotros en caso de no contar
con un seguro del hogar.
También es el caso de las obras que llevemos a cabo en nuestra casa, que pueden
tener repercusiones. La cobertura por responsabilidad civil también se encarga de ello.

Tipos de seguros para particulares

En los seguros de hogar se suele hacer una distinción importante.
Por un lado, estaría en seguro de responsabilidad inmobiliaria, que nos ayudaría a
indemnizar los daños de nuestra vivienda.
Sería el caso de accidentes muy típicos, como la caída de una maceta desde
un balcón, o un accidente provocado por un elemento arquitectónico de nuestro
hogar en malas condiciones.
El seguro de responsabilidad civil individual y familiar, cubre al asegurado y a
su familia o a las personas que están bajo su cuidado.
En este caso, el seguro cubre también a las mascotas y los daños que puedan
ocasionar tanto dentro como fuera de las viviendas.
En lo que respecta al número de personas que quedan incluidos en este tipo de
seguros, lo normal es que se incluyan a los familiares que vivan con el asegurado,
incluidos, por ejemplo, los abuelos.

Seguros para profesionales

Existen casi tantos tipos de seguros de responsabilidad civil como actividades
profesionales. Un abogado necesitará un seguro diferente al de un periodista o un
médico, porque las posibles infracciones de estos profesionales distan mucho entre sí.
Existen dos grandes categorías de seguros de responsabilidad civil para empresas.

Tipos de seguros de responsabilidad civil profesional

En primer lugar, encontraríamos el de tipo general. Cubre cualquier reclamación que
podamos incurrir a un tercero de daños materiales o personales.
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Además, este tipo de seguros generales cuentan con una serie de servicios
adicionales que los hacen más atractivos, como la asesoría legal. Aparte de los
seguros profesionales generales, existen seguros específicos que cubren
determinadas eventualidades profesionales, como es el caso de los médicos o
arquitectos.

La aseguradora Oriente Seguros del Ecuador, cuenta con varios de estos seguros
específicos, como el seguro de construcción, que, entre otras cosas, ofrece coberturas
de responsabilidad civil ante los daños y/o lesiones causados a terceros y/o sus
propiedades durante la realización de un contrato determinado.
Se trata solo de una de las coberturas de un seguro mucho más amplio, como las
coberturas personales o los daños a la maquinaria de los proveedores del tomador del
seguro de construcción.

Otros servicios que incluyen los seguros de responsabilidad civil

Es importante destacar que este tipo de seguros no solo incluye la responsabilidad
civil subsidiaria.
Además, la inmensa mayoría de ellos incluye otros servicios como la asesoría jurídica.
No es cuestión menor, pues la asesoría jurídica en nuestro país puede llegar a ser
cara, especialmente si nos vemos envueltos en un pleito a resultas de daños a
terceros causados por nosotros o las personas a nuestro cargo.
En este sentido, contar con una asesoría que nos ayude a tomar decisiones
relacionadas con nuestro negocio es importante.
Si, por ejemplo, recibimos una queja de alguien que nos adjudica responsabilidad civil,
el asesoramiento puede salvarnos de muchos dolores de cabeza. Nadie mejor que un
experto en este tipo de reclamaciones podrá orientarnos para saber si merece la pena
llegar a un acuerdo extrajudicial o si la reclamación que nos presentan tiene peso
como para llegar a un juicio largo y costoso.

Proceso a seguir en caso de adjudicación de responsabilidad

civil
Las aseguradoras en Ecuador, deben resarcir las indemnizaciones que legalmente
deban cumplir el pago a terceros por lesiones corporales, daños materiales y/o muerte.
Por eso, el primer paso es comunicar el hecho a la compañía de seguros.
Cuanto antes se notifique al asegurador de la ocurrencia de algún evento susceptible
de generar una reclamación por responsabilidad civil, más fácil será obtener la
indemnización.
Cabe mencionar en este sentido que no todas las reclamaciones llegan hasta las
cortes. Con frecuencia, las partes afectadas llegan a acuerdos extrajudiciales en las
que se pactan indemnizaciones que también deben ser subsanadas.
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En cualquier caso, con cortes o sin ellas, es preciso realizar el reporte del siniestro.
Deberás proporcionar la información detallada del accidente a la compañía de
seguros.

Dependiendo de los hechos y la forma en que se presenten, la aseguradora puede

solicitar varios documentos.
Entre ellos, documentos personales, certificados de policía, cuerpo de bomberos,
informes forenses, informes médicos y documentación de la víctima. Además,
necesitará las facturas que soporten los gastos en que se incurrió como consecuencia
directa del siniestro.

Cómo elegir una compañía aseguradora de confianza

La importancia de la aseguradora o del corredor de seguros es vital a la hora de
contratar un seguro de responsabilidad civil.
Es esencial contar con la presencia de alguien que domine el lenguaje técnico.
Además, debe entender cómo funcionan los términos de una póliza de seguros.
Es bueno tener en cuenta que este tipo de cobertura no solo indemniza el daño
evidente a terceros. Imagina por ejemplo que se ha producido un accidente de tráfico
con daños a terceros. En el transcurso de la investigación del siniestro se pone de
manifiesto que el accidente ha sido provocado por un fallo en el sistema de frenos.
Eventualmente, una póliza de responsabilidad civil puede garantizar cobertura para el
fabricante del tornillo. ¡O al mismo fabricante de los frenos!
La casuística de este tipo de involucraciones puede llegar a ser muy compleja. Si eres
una empresa que fabrica productos con ingredientes o elementos que proceden de
otros proveedores, debes estar cubierto.
Lo más probable es que a su vez, tus proveedores también lo estén. Así, toda la
cadena de responsabilidades quedaría cubierta por un seguro de responsabilidad civil
para empresas.

Un caso real de responsabilidad civil en Ecuador

Pongamos como ejemplo de esta cadena de acontecimientos un caso que ocurrió en
Ecuador.
Un cultivador de peces, compró alimento para sus crías a un fabricante en particular.
Con el correr de las semanas, notó que sus peces no se estaban desarrollando dentro
de los patrones normales. Llegó a la conclusión de que el problema radicaba en la
comida que había comprado.
Como consecuencia, solicitó una indemnización por los daños causados. La
investigación concluyó que el alimento suministrado por el proveedor presentaba
deficiencias que no podían ser adjudicadas a ese fabricante. El ingrediente causante
del fallo había sido adquirido a su vez a otra compañía.
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¿Qué sucedió? La aseguradora del primer distribuidor indemnizó al fabricante de

alimentos para peces. Así, quedaron cubiertos los gastos en que incurrió al satisfacer
la reclamación del cultivador.

Además, la compañía de seguros del fabricante que suministró el ingrediente

defectuoso, indemnizó a su vez a dicho fabricante. De esta forma, todos los
involucrados en el siniestro quedaron satisfechos.

Conclusión
Imagina que sucede algo similar en tu empresa o negocio.
Imagina además que las cantidades implicadas sean significativas. Pueden poner en
peligro la salud financiera de los intervinientes en la cadena de distribución.
Especialmente si no cuenta con una póliza de responsabilidad civil.
Por eso es tan necesario contar con una compañía solvente. Una que cumpla con
todos los requisitos para dar cobertura de responsabilidad civil.
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