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QUE ES LA DIABETES?

La diabetes es una enfermedad que se presenta cuando el nivel de glucosa en la


sangre, también conocido como azúcar en la sangre, es demasiado alto. La
glucosa en la sangre es la principal fuente de energía y proviene de los
alimentos. La insulina, una hormona que produce el páncreas, ayuda a que la
glucosa de los alimentos ingrese en las células para usar como energía. Algunas
veces, el cuerpo no produce suficiente o no produce nada de insulina o no la usa
adecuadamente y la glucosa se queda en la sangre y no llega a las células.

Con el tiempo, el exceso de glucosa en la sangre puede causar problemas de


salud . Aunque la diabetes no tiene cura, la persona con diabetes puede tomar
medidas para controlar su enfermedad y estabilizarse sana.

ORGANISMO QUE LO GENERA: es originada por los genes, es decir hereditario.

IMPACTO BIOLOGICO, SOCIAL YECONOMICO:


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IMPACTO SOCIAL: Puede ser reducido si en el ejercicio del tratamiento se tiene


un control y apego adecuado, lo cual producirá de manera positiva una mejor
calidad de vida en el paciente diabético y en si familia. Debido a las
complicaciones que por esta enfermedad aparecen, resultan en un problema que
afecta al individuo y a su familia en un buen desarrollo social, afecta a la
productividad de las personas, sobre todo en edades más elevadas, asi mismo, el
sufrimiento personal y compartido por familiares crece considerablemente, lo cual
causa que la enfermedad sea tomada de una manera temerosa, con estrés y
angustia que perjudica en el agravamiento de los casos, lo que se requiere más
que la preocupación y el sentimiento de culpa, es aceptar el nuevo estilo de vida
completamente que resulta más fácil con el apoyo familiar y que dentro de las
recomendaciones y limitaciones del tratamiento el paciente realice su vida de
manera normal, sin la idea de que se encuentre incapaz de hacerlo, esto no solo
mejorara su calidad de vida, si no que evitara fastos económicos innecesarios.

IMPACTO ECONOMICO: La diabetes reduce las oportunidades de empleo de las


personas que la padecen y los salarios en todo el mundo. El impacto económico
de la diabetes, El impacto económico de la diabetes no sólo es una carga de gran
costo en los países de altos ingresos, sino también en los países de bajos y
medianos ingresos, donde las personas con diabetes y sus familias se enfrentan a
un alto costo del tratamiento. A nivel mundial, la diabetes golpea más a los pobres,
con una carga mayor de coste para las personas en los países de ingresos bajos y
medios. La carga económica de la diabetes aumenta con el tiempo. Así que las
primeras inversiones en prevención y manejo de la enfermedad pueden ser
particularmente valiosas. Para los países ricos y pobres, los resultados significan
que una mejor prevención y tratamiento de la diabetes tienen el potencial no sólo
de proporcionar buena salud, sino también beneficios económicos.
IMPACTO BIOLOGICO:

¿CUÁLES SON LOS DIFERENTES TIPOS DE DIABETES?

Los principales tipos de diabetes son tipo 1, tipo 2 y la diabetes gestacional.

Diabetes tipo 1

Con la diabetes tipo 1, el cuerpo no produce insulina porque el sistema


inmunológico ataca y destruye las células del páncreas que la producen. Por lo
general, se diagnostica la diabetes tipo 1 en niños y adultos jóvenes, aunque
puede aparecer a cualquier edad. Las personas con diabetes tipo 1 tienen que
usar insulina todos los días para sobrevivir.

Diabetes tipo 2

Con la diabetes tipo 2, el cuerpo no produce o no usa la insulina


adecuadamente. La diabetes tipo 2 puede aparecer a cualquier edad, incluso
durante la infancia. Sin embargo, este tipo de diabetes se presenta con mayor
frecuencia en las personas de mediana edad y en los ancianos. Este es el tipo
mas común de diabetes.

Diabetes gestacional

La diabetes gestacional afecta a algunas mujeres durante el embarazo. La


mayoría de las veces, este tipo de diabetes desaparece después de que nazca el
bebé. Sin embargo, cuando una mujer ha tenido diabetes gestacional, tiene más
probabilidad de sufrir de diabetes tipo 2 más adelante en la vida. A veces, la
diabetes que se diagnostica durante el embarazo es en realidad diabetes tipo 2.

SÍNTOMAS

Los síntomas de la diabetes varían según cuánto se eleve tu nivel de glucosa


sanguínea. Es posible que algunas personas, en especial las que padecen
prediabetes o diabetes tipo 2, no experimenten síntomas. En el caso de la
diabetes tipo 1, los síntomas tienden a aparecer rápido y a ser más intensos.

Algunos de los signos y síntomas de la diabetes tipo 1 y tipo 2 son:

 Aumento de la sed

 Micción frecuente
 Hambre extrema

 Pérdida de peso sin causa aparente

 Presencia de cetonas en la orina (las cetonas son un subproducto de la


descomposición de músculo y grasa que ocurre cuando no hay suficiente
insulina disponible)

 Fatiga

 Irritabilidad

 Visión borrosa

 Llagas que tardan en cicatrizar

 Infecciones frecuentes, como infecciones en las encías o en la piel, e


infecciones vaginales

Aunque la diabetes tipo 1 puede aparecer a cualquier edad, suele aparecer en la


infancia o en la adolescencia. La diabetes tipo 2 (el tipo más frecuente) puede
aparecer a cualquier edad, aunque es más común en personas mayores de
40 años.

Factores de riesgo

Los factores de riesgo de la diabetes dependen del tipo de diabetes.

Factores de riesgo para la diabetes tipo 1

Aunque se desconoce la causa exacta de la diabetes tipo 1, los factores que


pueden indicar un mayor riesgo incluyen los siguientes:

 Antecedentes familiares. Tu riesgo aumenta si tu padre, tu madre o algún


hermano tienen diabetes tipo 1.

 Factores ambientales. Circunstancias como la exposición a una enfermedad


viral probablemente tienen alguna relación con la diabetes tipo 1.

 La presencia de células del sistema inmunitario que causan daños


(autoanticuerpos). Algunas veces, los familiares de personas con diabetes
tipo 1 se someten a una prueba de detección de autoanticuerpos de la
diabetes. Si tienes estos autoanticuerpos, tienes mayor riesgo de padecer
diabetes tipo 1. Pero no todas las personas que tienen estos autoanticuerpos
padecen diabetes.

 Ubicación geográfica. Ciertos países, como Finlandia y Suecia, presentan


índices más altos de diabetes tipo 1.
Factores de riesgo para la prediabetes y la diabetes tipo 2

Los investigadores no están completamente seguros de la razón por la que


algunas personas manifiestan prediabetes y diabetes tipo 2 y otras no. Sin
embargo, es evidente que ciertos factores incrementan el riesgo, como por
ejemplo:

 Peso. Mientras más tejido graso tengas, más resistentes serán tus células a
la insulina.

 Inactividad. Mientras menos actividad realices, mayor será tu riesgo. La


actividad física te ayuda a controlar el peso, utiliza la glucosa como energía y
hace que tus células sean más sensibles a la insulina.

 Antecedentes familiares. Tu riesgo se incrementa si alguno de tus padres o


hermanos tienen diabetes tipo 2.

 Raza o grupo étnico. Aunque no está claro por qué, personas de ciertos


orígenes, como las personas negras, hispanas, los indígenas
estadounidenses y asiático-americanas, corren un mayor riesgo.

 Edad. Tu riesgo aumenta con la edad. Esto puede deberse a que te ejercitas
menos, pierdes masa muscular y aumentas de peso a medida que
envejeces. Pero la diabetes tipo 2 también está aumentando entre los niños,
los adolescentes y los adultos jóvenes.

 Diabetes gestacional. Si desarrollaste diabetes gestacional cuando estabas


embarazada, aumenta tu riesgo de desarrollar prediabetes y diabetes tipo 2.
Si diste a luz a un bebé de más de 9 lb (4 kg), también corres el riesgo de
tener diabetes tipo 2.

 Síndrome de ovario poliquístico. Para las mujeres, tener síndrome de


ovario poliquístico (un trastorno frecuente caracterizado por períodos
menstruales irregulares, crecimiento excesivo de vello y obesidad) aumenta
el riesgo de desarrollar diabetes.
 Presión arterial alta. Una presión arterial de más de 140/90 milímetros de
mercurio (mm Hg) implica un alto riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.

 Niveles anormales de colesterol y de triglicéridos. Si tienes niveles bajos


de lipoproteínas de alta densidad o de colesterol "bueno", tu riesgo de
desarrollar diabetes tipo 2 será mayor. Lo triglicéridos son otro tipo de grasas
que se transportan en la sangre. Las personas con niveles altos de
triglicéridos afrontan un riesgo elevado de padecer diabetes tipo 2. Tu médico
puede informarte cuáles son tus niveles de colesterol y de triglicéridos.
Factores de riesgo para la diabetes gestacional

Las embarazadas pueden desarrollar diabetes gestacional. Algunas mujeres


presentan un mayor riesgo que otras. Algunos de los factores de riesgo de la
diabetes gestacional son:

 Edad. Las mujeres mayores de 25 años presentan un riesgo mayor.

 Antecedentes familiares o personales. Tu riesgo aumenta si tienes


prediabetes (un precursor de la diabetes tipo 2) o si algún familiar cercano,
por ejemplo alguno de tus padres o hermanos, tiene diabetes tipo 2. También
corres un mayor riesgo si has tenido diabetes gestacional durante un
embarazo anterior, si has dado a luz a un bebé de gran tamaño o si tu bebé
nació muerto y no se pudo determinar la causa.

 Peso. El sobrepeso antes del embarazo aumenta el riesgo.

 Raza o grupo étnico. Por razones que no se comprenden bien, las mujeres


de origen afroamericano, hispánico, indígena estadounidense o asiático son
más propensas a desarrollar diabetes gestacional.

Tratamientos para la diabetes tipo 1 y tipo 2

El tratamiento para la diabetes tipo 1 implica la colocación de inyecciones de


insulina o el uso de una bomba de insulina, controles frecuentes del nivel de
glucosa en la sangre y el cálculo de hidratos de carbono. El tratamiento de la
diabetes tipo 2 implica, principalmente, cambios en el estilo de vida y el control del
nivel de glucosa en la sangre, junto con medicamentos para la diabetes, insulina o
ambos.

 Control del nivel de glucosa en la sangre. Según tu plan de tratamiento,


puedes controlar y registrar tu nivel de glucosa en la sangre hasta cuatro
veces al día o con más frecuencia si tomas insulina. Un control riguroso es la
única manera de asegurarte de que tu nivel de glucosa en la sangre se
mantenga dentro del rango objetivo. Las personas que tienen diabetes tipo 2
y no se colocan insulina suelen controlarse el nivel de glucosa en la sangre
con mucha menos frecuencia.

Las personas que reciben un tratamiento con insulina pueden elegir controlar
sus niveles de glucosa en la sangre con un control continuo de glucosa.
Aunque esta tecnología aún no ha reemplazado por completo al medidor de
glucosa, puede reducir bastante la cantidad de pinchazos en los dedos
necesarios para controlar la cantidad de glucosa en la sangre y proporcionar
información importante sobre las tendencias del nivel de glucosa en la
sangre.

Incluso con un tratamiento cauteloso, los niveles de glucosa en la sangre


pueden cambiar de manera impredecible. Con la ayuda del equipo de
tratamiento de la diabetes, aprenderás cómo cambia tu nivel de glucosa en la
sangre en respuesta a los alimentos, la actividad física, los medicamentos,
las enfermedades, el consumo de alcohol, el estrés y, en el caso de la mujer,
las fluctuaciones en los niveles hormonales.

Además del control diario de los niveles de glucosa en la sangre, el médico


probablemente te recomiende un estudio de hemoglobina glicosilada (HbA1c)
periódico para medir tu nivel de glucosa en la sangre promedio de los últimos
dos o tres meses.

Al comparar este nivel con los análisis reiterados diarios de glucosa en la


sangre, el estudio de HbA1c indica el grado de eficacia general de tu plan de
tratamiento para la diabetes. Un nivel de HbA1c elevado puede indicar la
necesidad de cambiar tu régimen de medicamentos orales o de insulina, o tu
plan de comidas.
Tu meta de HbA1c puede variar según la edad y diversos factores más, como
la presencia de otras enfermedades. Sin embargo, para la mayoría de las
personas con diabetes, la American Diabetes Association (Asociación
Estadounidense de la Diabetes) recomienda un nivel de HbA1c inferior
al 7 %. Pregúntale al médico cuál es tu meta de HbA1c.

 Insulina. Las personas que tienen diabetes tipo 1 necesitan una terapia con
insulina para sobrevivir. Muchas personas que tienen diabetes tipo 2 o
diabetes gestacional también necesitan tratamiento con insulina.

Existen muchos tipos de insulina disponibles, entre ellos, la insulina de corta


acción (regular), la de acción rápida, la de acción prolongada y otras
opciones intermedias. Según lo que necesites, el médico puede recetarte una
combinación de tipos de insulina para usar a lo largo del día y de la noche.

La insulina no puede tomarse por vía oral para bajar la glucosa en la sangre
porque las enzimas del estómago obstaculizan su acción. A menudo, la
insulina se inyecta utilizando una jeringa y una aguja fina o con una pluma
para insulina (un aparato que se asemeja a una lapicera).

Una bomba de insulina también puede ser una opción. La bomba es un


dispositivo que tiene el tamaño aproximado de un teléfono celular pequeño y
se usa en la parte externa del cuerpo. Cuenta con una sonda que conecta el
reservorio de insulina a un catéter que se introduce por debajo de la piel del
abdomen.

Ahora también existen bombas sin sondas que funcionan de manera


inalámbrica. Programas la bomba de insulina para que dosifique cantidades
específicas. Puede ajustarse para que administre más o menos cantidad de
insulina según los alimentos que se ingieren, el nivel de actividad y el nivel de
glucosa en la sangre.

En septiembre de 2016, la Administración de Alimentos y Medicamentos de


Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) aprobó el primer páncreas
artificial para personas con diabetes tipo 1 de 14 años o más. En diciembre
de 2019, se aprobó un segundo páncreas artificial. Desde entonces, se han
aprobado sistemas para niños mayores de 2 años.
El páncreas artificial también se conoce como administración de insulina en
circuito cerrado. Este dispositivo implantado conecta un medidor de glucosa
continuo (que controla los niveles de glucosa en la sangre cada cinco
minutos) a una bomba de insulina. El dispositivo libera automáticamente la
cantidad correcta de insulina cuando el medidor indica la necesidad.

Actualmente, se están estudiando más sistemas de páncreas artificiales


(circuito cerrado) en ensayos clínicos.

 Medicación oral y otros medicamentos. En ocasiones, también se recetan


otros medicamentos por vía oral o con inyecciones. Algunos medicamentos
contra la diabetes estimulan el páncreas para que produzca y libere más
insulina. Otros inhiben la producción y la liberación de glucosa del hígado, lo
que significa que necesitarás menos insulina para transportar la glucosa a las
células.

Otros incluso bloquean la acción del estómago o de las enzimas intestinales


que se encargan de la descomposición de los hidratos de carbono, o hacen
que los tejidos estén más sensibles a la insulina. La metformina (Glumetza,
Fortamet u otros) es, por lo general, el primer medicamento que se receta
para la diabetes tipo 2.

Se puede indicar otra clase de medicamentos llamados inhibidores de


SGLT2. Estos evitan que los riñones reabsorban la glucosa en la sangre. En
lugar de esto, la glucosa se excreta en la orina.

 Trasplantes. El trasplante de páncreas puede ser una opción para algunos


pacientes que tienen diabetes tipo 1. También se están realizando estudios
sobre el trasplante de islotes. Con un trasplante de páncreas exitoso, ya no
necesitarías una terapia con insulina.

Sin embargo, los trasplantes no siempre son exitosos, y estos procedimientos


representan riesgos graves. Necesitarás medicamentos inmunodepresores
para el resto de la vida con el fin de evitar que tu cuerpo rechace el órgano.
Estos medicamentos pueden tener efectos secundarios graves; por ello, los
trasplantes generalmente se reservan para las personas cuya diabetes no se
puede controlar o para aquellas que además necesitan un trasplante de
riñón.
 Cirugía bariátrica. Aunque no se considera específicamente un tratamiento
para la diabetes tipo 2, las personas que la padecen y que también son
obesas y tienen un índice de masa corporal mayor que 35 pueden resultar
beneficiadas con este tipo de cirugía. Las personas que se han sometido a
una cirugía de baipás gástrico han visto importantes mejoras en sus niveles
de glucosa en la sangre. Sin embargo, todavía se desconocen los riesgos a
largo plazo de este procedimiento y los beneficios para los pacientes que
tienen diabetes tipo 2.
Tratamiento para la diabetes gestacional

El control de tu nivel de azúcar en sangre es fundamental para mantener la salud


del bebé y evitar complicaciones durante el parto. Además de mantener una
alimentación saludable y hacer ejercicios, tu plan de tratamiento puede incluir el
control del nivel de azúcar en sangre y, en algunos casos, el uso de insulina o
medicamentos de administración oral.

El médico también controlará tu nivel de azúcar en sangre durante el parto. Si tu


nivel de azúcar en sangre aumenta, es posible que el bebé libere altos niveles de
insulina, lo cual puede dar lugar a un bajo nivel de azúcar en sangre
inmediatamente después del nacimiento.

Tratamiento para la prediabetes

Si tienes prediabetes, las elecciones de un estilo de vida saludable pueden


ayudarte a disminuir el nivel de glucosa en la sangre hasta alcanzar niveles
normales o, al menos, evitar que aumente hasta los niveles observados en la
diabetes tipo 2. Mantener un peso saludable con ejercicio y una alimentación
saludable puede ayudar. Hacer por lo menos 150 minutos de ejercicio por semana
y perder aproximadamente un 7 % de tu peso corporal pueden prevenir o retrasar
la diabetes tipo 2.

A veces, los medicamentos, como la metformina (Glucophage, Glumetza y otros),


también son una opción si tienes un riesgo elevado de padecer diabetes, como
cuando la prediabetes empeora o cuando tienes una enfermedad cardiovascular,
enfermedad por hígado graso o síndrome de ovario poliquístico.
En otros casos, se necesitan medicamentos para controlar el colesterol (estatinas)
y para la presión arterial alta. El médico puede recetarte una dosis baja de aspirina
para ayudarte a prevenir las enfermedades cardiovasculares si tu riesgo de
padecerlas es alto. No obstante, optar por un estilo de vida saludable sigue siendo
fundamental.

PREVENCIÓN:

¿Cómo puedo prevenir o retrasar la aparición de la diabetes tipo 2?


Si está en riesgo de desarrollar diabetes, es posible que pueda evitarla o
retrasarla. La mayoría de las cosas que debe hacer implican un estilo de vida más
saludable. Si realiza estos cambios, obtendrá además otros beneficios de salud.
Puede reducir el riesgo de otras enfermedades y probablemente se sienta mejor y
tenga más energía. Los cambios son:

 Perder peso y mantenerlo. El control del peso es una parte importante de la


prevención de la diabetes. Es posible que pueda prevenir o retrasar la diabetes al
perder entre el 5 y el 10% de su peso actual. Por ejemplo, si pesa 200 libras (90.7
kilos), su objetivo sería perder entre 10 y 20 libras (4.5 y 9 kilos). Y una vez que
pierde el peso, es importante que no lo recupere
 Seguir un plan de alimentación saludable. Es importante reducir la cantidad de
calorías que consume y bebe cada día, para que pueda perder peso y no
recuperarlo. Para lograrlo, su dieta debe incluir porciones más pequeñas y menos
grasa y azúcar. También debe consumir alimentos de cada grupo alimenticio,
incluyendo muchos granos integrales, frutas y verduras. También es una buena
idea limitar la carne roja y evitar las carnes procesadas
 Haga ejercicio regularmente. El ejercicio tiene muchos beneficios para la salud,
incluyendo ayudarle a perder peso y bajar sus niveles de azúcar en la sangre.
Ambos disminuyen el riesgo de diabetes tipo 2. Intente hacer al menos 30 minutos
de actividad física cinco días a la semana. Si no ha estado activo, hable con su
proveedor de salud para determinar qué tipos de ejercicios son los mejores para
usted. Puede comenzar lentamente hasta alcanzar su objetivo
 No fume. Fumar puede contribuir a la resistencia a la insulina, lo que puede llevar
a tener diabetes tipo 2. Si ya fuma, intente dejarlo
 Hable con su proveedor de atención médica para ver si hay algo más que
pueda hacer para retrasar o prevenir la diabetes tipo 2. Si tiene un alto riesgo, su
proveedor puede sugerirle tomar algún medicamento para la diabetes

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