Tradicionalmente, la crema de árnica ha sido utilizada desde la Edad Media como una

pomada analgésica y antiinflamatoria para aliviar el dolor muscular.

Usos de la crema de árnica: ungüento antiinflamatorio y analgésico

Sufrir el intenso dolor provocado por una torcedura es uno de los síntomas más
desagradables consultados con frecuencia en traumatología.

No siempre fue posible recurrir a los fármacos sintéticos para aliviar este padecimiento.

En la Edad Media, las molestias ocasionadas por traumatismos eran tratadas con árnica,
una planta que forma parte de la medicina tradicional.
https://nutricioni.com/que-beneficios-nos-ofrece-el-arnica-a-nuestro-organismo/

El árnica o Arnica montana, como reza su nombre científico, pertenece a la familia de las
compuestas y data desde hace miles de años.

Se le conoce popularmente como tabaco de montaña y es originaria de Europa. Desde su

reconocimiento, se le adjudican muchos beneficios para la salud.

Llega a medir 30 centímetros de longitud y tiene hojas cubiertas de pelos acompañadas

de flores de color amarillo anaranjado, cuyo aroma es similar al de la manzanilla.

Por su apariencia, algunos le llaman margarita de montaña. Dicha flor se utiliza por sí sola
o en conjunto con otras partes.

Con fines medicinales, se utilizan también sus raíces y rizomas. Han sido de gran ayuda
en el tratamiento del dolor muscular, sin embargo, su uso no se restringe a ello.

La crema hecha con la cabeza de la flor se puede emplear para tratar el dolor muscular,
los morados o hematomas y la inflamación de las articulaciones.

También se encuentra en aceites, geles y pomadas que alivian las dolencias musculares
y articulares.

Sirve como antiséptico para el tratamiento del acné, al tiempo que desinflama las lesiones
cutáneas generadas por este antiestético problema de salud.

Por tal motivo, el árnica ha demostrado pertenecer al grupo de los antiinflamatorios

naturales.
https://nutricioni.com/antiinflamatorios-naturales-que-benefician-tu-organismo/

Si deseas apartarte de lo sintético y alinearte con lo natural, usa árnica y consigue

notables mejorías en el alivio del dolor.

Pero, ¿de dónde proviene este maravilloso ejemplar?

Continúa leyendo y aprende más de esta ingeniosa cápsula de bienestar obsequiada por
la naturaleza.
Árnica en peligro de extinción

Desde sus orígenes, Europa ha sido por excelencia la cuna de crecimiento del árnica.

Arnica montana crece en las praderas y pantanos de las montañas europeas,

principalmente a un altura de 700 a 2.500 metros sobre el nivel del mar.

En América, se desarrolla en la parte oeste de las Rocallosas, especialmente en Wyoming

y Montana.

Sin embargo, en la actualidad ha ocurrido sobreexplotación de las poblaciones de árnica,

por lo cual se encuentran en peligro de extinción en muchos países.

Desde el año 1.998, la Sociedad Europea de plantas aromáticas y medicinales ha venido

mencionando que el árnica está en riesgo en gran parte del continente.

Alemania, Hungría, Bosnia, Lituania, Portugal, Países Bajos, Reino Unido y Ucrania
tienen bajos índices de floración, por lo cual dependen de Rumania y España.

Para su conservación, la Unión Europea ha establecido un conjunto de medidas de

preservación de la especie.

Según el reglamento oficial, se establece la normativa para aquellas especies cuya

recolección, explotación y exportación debe ser regulada.

Para estimular su producción, se están llevando a cabo ensayos para cultivar árnica en
zonas localizadas a una altitud de 1.000 metros sobre el nivel del mar.

De esta forma, se promueve el crecimiento de la planta y su preservación aún en terrenos

de baja rentabilidad.

Las estadísticas arrojan que a partir de 200.000 plantas por hectárea han llegado a
producirse hasta 1.200 kilogramos de árnica.

En Europa, el kilo de flor fresca alcanza un valor de 7,5 euros, lo cual genera un ingreso
bruto de 10.253 dólares.

De este modo, es notorio que su cultivo genera importantes ganancias materiales.

Al mismo tiempo, produce beneficios perennes para la salud que agradecerás de por vida.
https://nutricioni.com/arnica-beneficios-y-contraindicaciones-de-su-ingesta-oral/

Reconoce del árnica y aprende más acerca de sus propiedades. Sin duda alguna, es una
planta hermosa tanto por su apariencia como por su bondad.

Reconoce la planta de árnica

El árnica es una planta herbácea de entre 0,25 a 0,50 metros de altura. Además, tiene
una porción subterránea de crecimiento ramificado y horizontal llamado rizoma.
Éste tiene una longitud de 10 centímetros y un diámetro de 5 milímetros. En su parte
anterior, se aprecian anillos procedentes de las hojas de años previos.

En la parte inferior, hay numerosas raicillas filamentosas y ásperas rodeadas de corteza.

Tiene hojas de forma ovalada con ápice redondeado y bordes dentados cubiertas de
pelos.

Las flores son de color amarillo anaranjado y se hacen visibles hacia la primavera. Tienen
un aroma parecido al de la manzanilla y su esencia es de color amarillo a azul verdoso.

Contiene ácido cafeico y clorogénico, flavonoides como la astragalina, minerales y

arnicina. Esta última se encuentra en las flores y es responsable de su sabor amargo.

La arnicina es el componente principal, por lo cual es el componente activo con mayor

actividad farmacológica.

El cultivo del árnica depende del terreno seleccionado. Es recomendable arar y rastrear la
tierra para plantar las semillas.

Algunos sostienen que pueden sembrarse en dos fases. Luego de la germinación de las
semillas, deben trasladarse al terreno definitivo.

Es preferible sembrarlas en otoño con una separación de 40 a 80 centímetros entre planta

y planta.

La cosecha debe realizarse desde el atardecer a la mañana del siguiente día, ya que el
pedúnculo es más tierno.

Es importante retirar la maleza de forma periódica. Asimismo, debe supervisarse la

aparición de plagas.

La más frecuente es la mosca del árnica o Tripeta arnicivora, la cual pone sus huevos en
las flores, evolucionando a larvas que destruyen los frutos rápidamente.

La bibliografía sostiene que se deben utilizar insecticidas con fines preventivos y

curativos, siempre y cuando cumplan con los estándares fijados en la Unión Europea.

La curación de la planta no debe demorarse, ya que la mosca del árnica provoca su

debilitamiento y reduce su valor comercial.

Garantizar la preservación de las especies vegetales permite que por muchas más
generaciones podamos disfrutar de lo maravilloso que es contar con ellas.

Bondades de la crema de árnica

Tal y como hemos visto, el árnica es una planta de la cual se han obtenido las más
variadas presentaciones.

Pomadas, aceites, geles y lociones han sido ampliamente utilizadas para curar
moretones, esguinces y dolor muscular.
Ha demostrado ser altamente beneficiosa al actuar como analgésico, antiinflamatorio y
antimicrobiano.

Además de esto, tiene capacidad rubefaciente, es decir, estimula la circulación sanguínea

en el área en la que se aplica.

Lo anterior explica que el árnica impida la formación de hematomas y moretones o que en

caso de que ya se hayan instaurado, puedan desaparecer tempranamente.

La crema de árnica debe aplicarse por vía externa para tratar desgarres musculares,
moretones en los ojos, artritis y acné.

El efecto de reducción de la inflamación puede ser bastante rápido gracias a sus

compuestos orgánicos.

Luego de su aplicación es posible apreciar relajación casi instantánea de los músculos

comprometidos, lo cual la hace una pomada muy apreciada por los atletas.

Para quienes sufren a causa de la artritis, la crema de árnica reduce el dolor articular,
facilitando la movilidad y reduciendo la hinchazón.

También sirve como un excelente analgésico para aliviar el dolor corporal en general.

Algunos sostienen que la crema de árnica participa en la recuperación de las hemorragias

internas, ayudando a sanar los vasos sanguíneos rotos en el interior de la piel.

Con ello, desaparecen los hematomas y la antiestética apariencia de los capilares y las
manchas de la edad.

Es muy beneficiosa para quienes padecen de enfermedades en la piel como el eccema, la

psoriasis, el acné y otros.

Incluir árnica es una de las más sabias decisiones que puedes tomar para hacer frente al
dolor en cualquiera de sus intensidades.

Hazlo parte de tu botiquín y aplícalo diligentemente para conseguir alivio inmediato.

Recuerda que el árnica es una joya de la naturaleza que no puedes dejar de probar.

Úsala y dale alegría a tu cuerpo.

Recurre a analgésicos y antinflamatorios naturales

Frecuentemente, somos objeto de caídas accidentales, especialmente cuando se practica

alguna actividad deportiva o cuando se pierden destrezas con el paso de los años.

La inflamación y el dolor provocado por las torceduras es uno de los principales motivos
de consulta en la emergencia médica.

Su oportuno alivio hace posible la incorporación a las rutinas habituales. Para ello, [p10a]
es una potente mezcla de hierbas y raíces que reducen la inflamación.
[p10t] contiene celadrina una sustancia que lubrica las articulaciones, restableciendo su
movilidad y flexibilidad, especialmente en los pacientes con artritis reumatoidea.

El té verde de [p10a] reduce el estrés y mejora las habilidades de concentración. También

hace frente a los radicales libres y disminuye los niveles de colesterol.

Interviene en el procesamiento de las proteínas a través de su contenido de bromelina,

una sustancia proveniente de las piñas que facilita la absorción proteica.

Por otra parte, la Boswellia serrata es una hierba originaria de África y Asia cuya resina es
rica en ácido boswelico antiinflamatorio.

La planta de la vid aporta extracto de resveratrol. Esta sustancia tiene efecto antioxidante
y actúa como un antiséptico natural en la piel de la uva negra.

Se le ha relacionado con la reducción del riesgo de desarrollar diabetes e hipertensión.

Además se le confiere un importante papel en la terapia antienvejecimiento.

Contiene cúrcuma, una especia hindú con propiedades antiulcerosas, digestivas y

protectoras de la piel, el hígado y el corazón.

La raíz de jengibre es un antiinflamatorio natural que mejora la circulación, acelera el

metabolismo y refuerza el sistema inmunológico.

Por último, el skullcap es un suplemento ideal para combatir la ansiedad, el estrés y el

insomnio.

Así que si deseas complementar la aplicación de árnica, puedes recurrir a [p10t], un

auténtico suplemento natural que te ayudará a dejar atrás el dolor físico y emocional.

Vive libre de tensiones y mantente siempre sano día tras día. ¡Lo mereces!

Usos de la crema de árnica

La recolección de árnica tiene lugar luego de la floración. Debido a su toxicidad, se

desechan las flores y se utilizan solamente las hojas.

También las raíces son aprovechables; contienen derivados del timol por lo que se utilizan
como fungicidas y conservantes.

La crema de árnica es una pomada que goza de gran aceptación a nivel mundial.
Constituye un verdadero ejemplo de analgesia natural.

En la actualidad, se describen distintas especies de árnica con contenido de helenalina y

lactona, como es el caso de Arnica montana y Arnica chamissonis.

Estos componentes son ingredientes fundamentales para preparados antiinflamatorios en

casos de contusión o magulladuras.

Aún hoy no se han comprobado sus efectos en el sistema nervioso, lo que sí es una
realidad comprobable es que representa un remedio contra los golpes y hematomas.
En caso de traumatismos, la pomada de árnica debe aplicarse sobre la superficie
afectada.

Actúan como efectivos vasodilatadores de los capilares sanguíneos de la piel, por lo que
reducen la magnitud de los hematomas.

La crema de árnica se utiliza por vía externa como antiinflamatorio, astringente y

antiséptico.

Ha demostrado ser un potente eliminador de hongos. La pomada e infusión de árnica

contribuyen a la curación del pie de atleta.

Mezclada con ortiga o jaborandi ayuda a crecer el cabello, fortaleciendo su raíz y

aportándole brillo.

Resulta increíble que una pequeña planta sea capaz de aportar tanta variedad de
beneficios.

La naturaleza es sabia y nos brinda todo lo que necesitamos para obtener alivio de las
dolencias que nos aquejan.

Utiliza la crema de árnica y anda por la vida libre de limitaciones.

Aplicación de la crema de árnica

La crema de árnica goza de gran prestigio no sólo en la herbolaria sino también en la

medicina tradicional.

Para su uso debemos seguir ciertas pautas de aplicación que cumplan el objetivo de
aliviar el dolor y la inflamación sin irritar la piel.

Se recomienda como antiséptico, antinflamatorio, desinfectante y cicatrizante. Sin

embargo, es necesario aprender a sacar partido de esta planta sin dañarse en el intento.

En caso de traumatismos directos, se genera un aumento de calor en el área afectada, lo

cual conlleva a la acumulación de sangre.

Con esta reacción, la piel se enrojece y aparecen los hematomas. Para evitarlo, la
aplicación de la crema de árnica favorece la circulación y evita que la sangre se deposite.

A falta de crema, podemos preparar una infusión y humedecer un paño que luego ha de
ser aplicado en la zona del golpe.

También en caso de dislocación o reuma, la colocación de una fina capa de árnica

acompañada de un pequeño masaje facilita la absorción y alivia el dolor.

Aplicar aceite o pomada de árnica facilita la resolución del edema ocasionado por
traumatismos.
Como hemos visto, la crema de árnica es de aplicación tópica. No obstante, se han
descrito casos en los cuales el uso tópico incorrecto ha causado úlceras en la piel.

Por lo antes mencionado, cuando se afecta la mucosa, deben utilizarse las flores a modo
de infusión.

Pero, ¡atención!, no para beberse sino para embeber compresas y colocarlas sobre la
zona comprometida.

De este modo, es posible reducir la inflamación de la mucosa genital, la boca y el ano sin
tener que tomar la preparación.

La crema de árnica es una forma maravillosa de favorecer la curación de las lesiones

musculares de manera natural.

Mereces sacar provecho de tu cuerpo y sanar rápidamente. Pruébala y anda libre de

aflicciones por la vida.