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Paradigmas de la administración. Una breve historia de la sociedad.

Considero importante e interesante la siguiente plática porque me he dado cuenta en


clase que a veces cuando dos personas hablan de un mismo tema, entienden algo
completamente distinto del mismo. Además de esta problemática, también existe una
postura del sujeto ante el conocimiento la cual puede coincidir o no con la del otro.
Cuando estos dos hechos se suman: no entender lo mismo y tener una postura diferente
ante el conocimiento, es entonces cuando se vive un choque paradigmático.
También me he percatado de la actual tecnificación de la Administración, con esto quiero
decir que a mi parecer la disciplina se ha reducido a un grupo de conceptos, teorías,
fórmulas y aplicaciones (tecnología) dejando de lado toda su riqueza histórica, cultural y
social. El esfuerzo de tecnificar u objetivar la Administración no ha sido un esfuerzo en
vano, de hecho trae consigo las grandes innovaciones del siglo XX y XXI. Pero qué les
parece si en esta plática vemos a la administración no como una técnica o algoritmo sino
como una capacidad humana que ha tenido diferentes expresiones en distintas
sociedades que permean hasta en lo más íntimo de nuestras vidas, la mayoría de las veces
de forma inconsciente.
Bajo esta perspectiva de la administración, como una capacidad que tiene todo individuo y
sociedad, nos permite pensar en las implicaciones al decir “hippie”, “punk”, “anarquista”,
“católico”, “socialista” o “liberal”. Es decir todas estas expresiones traen consigo un
entendimiento y una postura ante la administración que puede o no coincidir con la de los
otros. Lo que quiero decirles es que al ser seres cognitivos y afectivos, implica tener la
capacidad de planear, organizar, dirigir y controlar más la toma de decisiones en su vida
como ser individual y social.
Es por tal motivo que quiero motivarlos a darle un justo lugar a la disciplina, la cual se ha
presentado en todas nuestras sociedades. Aunque la teoría de la Administración es
relativamente joven a comparación con otras disciplinas o ciencias, su práctica tiene
vestigios desde el inicio de la humanidad. Es decir la Administración ha tenido y tiene
diferentes paradigmas que han moldeado a la sociedad en el transcurso del tiempo.
Es necesario para efectos de esta plática definir: ¿qué es un paradigma?, ¿qué sociedades
históricas se abordarán para cubrir una breve historia de la humanidad? y ¿cómo estas
sociedades con distintos paradigmas han entendido la Administración? Empecemos.
Paradigma
De acuerdo con Marín Ardila y Luis Fernando, en su artículo “la noción de paradigma”
(2007) se comenta que los paradigmas son especies de anteojos que nos hacen visibles y
audibles unos fenómenos y ocultan o dejan otros sobre un trasfondo inconsciente. Según
la Real Academia Española un paradigma es la teoría o conjunto de teorías cuyo núcleo
central se acepta sin cuestionar y que suministra la base y modelo para resolver
problemas y avanzar en el conocimiento.
El filósofo norteamericano Thomas Kuhn dice que “un paradigma es lo que los miembros
de una comunidad científica comparten, y, recíprocamente, una comunidad científica
consiste en hombres que comparten un paradigma”. Es decir son un conjunto de valores y
saberes compartidos colectivamente, usados, implícita o explícitamente, por una
comunidad. Al decir compartidos significa también convalidados.
Podemos decir que un paradigma es:
a) Algo que está constituido por los descubrimientos científicos universalmente
reconocidos que, durante cierto tiempo, proporcionan a un grupo de investigadores
problemas tipo y soluciones tipo.
b) El conjunto de las creencias, valores reconocidos y técnicas que son comunes a
los miembros de un grupo dado. Es poseer una representación colectiva o vivir en una
cosmovisión o ideología.
Las teorías científicas se destacan no solamente por las leyes y las aplicaciones, también
son cruciales aspectos como las comunidades científicas, las convicciones, creencias y el
periodo histórico en que aparecen las teorías. La ciencia no es sólo la formulación de
leyes, sino lo que comparte una comunidad en términos de lenguaje, de visión, de
socialización y de valoración.
El conocimiento por naturaleza es discusión, quiero decir que se necesita del choque de
dos ideas para generar conocimiento. La ciencia no es una sucesión continua y
acumulativa del saber, sino que responde más a dos grandes y diferenciados momentos:
la ciencia normal y la ciencia revolucionaria.
Los periodos normales se caracterizan por el dominio de métodos de investigación bien
establecidos, condicionantes tanto de los problemas a tratar como de la manera de
solucionarlos. En este periodo no sólo se constituye el paradigma, sino que también se
produce una acumulación de conocimiento. En contraste con ello, los momentos
revolucionarios suceden cuando ciertas experiencias o fenómenos no se asimilan a esas
rutinas de la normalidad, se empieza a desconfiar de los procedimientos normales y se
postulan teorías alternativas que permitan resolver, bajo otra visión, las anomalías
detectadas. Es el momento en que nos persuade una nueva forma de abordar la
problemática en cuestión; la siguiente etapa será la de la conversión, donde nos
adherimos a una nueva forma de ver, reinterpretando el mundo.
Científicos que pertenecen a paradigmas diferentes ante un mismo conjunto de estímulos,
que se pueden considerar idénticos para ambos, tienen sensaciones diferentes.
En conclusión, un cambio de paradigma trae consigo un cambio de la percepción del
mundo.
Para Edgar Morín el paradigma nos hace actuar, pensar y hablar con comprensibilidad y
coherencia; asegura nuestro fondo básico de creencias y; define las reglas de juego, es
lógico. Y por último Ideológico, pues el paradigma es una matriz de ordenación de ideas.
El paradigma es inconsciente, irriga al pensamiento consciente, lo controla y, en ese
sentido, es también supra consciente.

Sociedad:
Sobre las sociedades que se abordarán para cubrir una breve historia de la humanidad,
me parece pertinente hablar de tres paradigmas históricos, de los cuales algunos todavía
coexisten.
Los grandes imperios antes del dominio del monoteísmo. El imperio Católico. El estado
positivista.

De los grandes imperios antes del dominio del monoteísmo católico: Para este escenario
analizaremos las “máximas de reyes y generales” del libro “Obras morales y de
costumbres” de Plutarco, historiador del primer siglo después de Cristo.
Decía Ciro, el primer Rey de Persia (530 a.c.), que “quienes no tenían intención de
procurarse bienes a sí mismos estaban obligados por necesidad a procurárselos a los
otros; y que no conviene que gobierne a nadie aquel que no es mejor que los
gobernados.”
“Ciro no permitió que los persas, a pesar de sus deseos, ocuparan un territorio llano y
suave, en lugar del suyo montañoso y áspero, alegando que las semillas de las plantas y las
vidas de los hombres se asimilan a su tierra de origen.”
Semíramis (800 a.c.), Reina de Asiria, se preparó su propia tumba y grabó en ella esta
inscripción: <Cualquier rey que necesite dinero, que abra este monumento y coja cuanto
quiera.> Darío lo abrió, pero no encontró dinero, sino otra inscripción que decía así: <Si no
fueras malvado y avaricioso, no habrías movido los restos de los muertos.>
Sobre Alejandro el Magno, Rey de Macedonia (350 a.c.) se comenta que “Ada, Reina de
los carios, se honraba en mandarle siempre comidas y pasteles preparados
extraordinariamente por artistas y especialistas en cocina. Pero él le dijo que tenía
mejores cocineros: para el desayuno, la marcha nocturna, y para el almuerzo, el frugal
desayuno.”
En estos cuatro ejemplos podemos estacar distintas características del paradigma que se
vivía en ese entonces: Primero es de destacar que es una administración orientada a la
guerra y conquista. Como segundo elemento destaco su carácter Politeísta donde las
distintas religiones interactuaban como la egipcia, griega, romana, entre otras. Como
tercer aspecto destacaría el énfasis en la virtud humana, es decir en tener tanto un
rey/líder como una comunidad fuerte, sabia, humana, virtuosa. También existía un
aprecio por la formación continua, literalmente un amor por el conocimiento, la filosofía.
La sociedad se jerarquizaba entre Reyes, sacerdotes, militares, ciudadanos, niños,
mujeres, esclavos.
El imperio Católico: Con la siguiente anécdota de Alejandra de Hipatia intentaré ligar y
exponer el primer choque paradigmático de esta exposición: Del politeísmo al
monoteísmo. “La biblioteca de Alejandría había nacido en el siglo III a.c. y durante cerca
de seiscientos años fue el centro de la cultura, de la inteligencia en el mundo. El último de
los directores de ese importantísimo centro no fue un hombre; fue una mujer: Hipatia.
Nació en Alejandría el año 370 d.c., además de ser matemática, física y astrónoma, fue la
directora de la escuela de filosofía neoplatónica de Alejandría. La ciudad de Alejandría, en
la época de Hipatía estaba enteramente bajo el dominio de Roma. La iglesia cristiana
comenzó a convertir a mucha gente con el pretexto de extirpar la influencia y cultura
pagana. En un momento determinado, Hipatia se convirtió en el centro de las tormentas
sociales, debido a que, ante los ojos de la Iglesia, era ejemplo viviente de todos los males,
de todos los vicios y conductas que habían sido origen de las desgracias de los
alejandrinos. Cirilo, el arzobispo de la ciudad, la veía con odio, por sus virtudes y logros;
porque se había convertido en el paradigma de la cultura y de la ciencia agnóstica y anti
dogmática, que la iglesia cristiana asociaba al paganismo y la herejía. Un día en el año 415
d.c. fue emboscada por una turba fanática de la Iglesia de Cirilo para lincharla. Después la
turbamulta enardecida tomó por la fuerza la biblioteca y le prendió fuego. La memoria, la
razón, la curiosidad científica desaparecieron del mundo. A Cirilo, la iglesia lo convirtió en
santo, y todos los días nueve de febrero se celebran y recuerda su nombre.”
El gran paréntesis entre la ciencia griega de Atenas y Alejandría de los siglos IV a.c. hasta
IV d.c., y el renacimiento europeo, que surge en el siglo XV, debe entenderse cabalmente
como un periodo de receso y de incubación de la inteligencia humana también conocido
como oscurantismo. Es decir la ciencia no murió sino que buscó un sitio mejor para
reflorecer. Buscó un talento y una mentalidad diferente, en este caso con los árabes.
Así pasaron mil años en el que el dominio mundial predominaba en manos de la religión
Católica-Cristiana (que de hecho hablar de estas dos palabras ya es en sí un problema
paradigmático). ¿Qué características se puede destacar de este paradigma? Las siguientes:
Una sociedad que es el centro del universo, incluso se cree en que la tierra es plana y todo
destino sea bueno o malo es consecuencia de un plan divino de Dios. Así todo fenómeno
científico y administrativo se justificaba por palabra y orden divina. Surge la inquisición
como un movimiento que buscaba callar otras formas de pensamiento para así imponer el
monoteísmo ante el politeísmo. Las mujeres descendieron de su papel divino para
convertirse en objeto de Dios. Se valora la fe no la inteligencia. La sociedad se seguía
rigiendo por Reyes, Sacerdotes, militares, ciudadanos, niños, mujeres, esclavos. También
destaco que la vida religiosa implicaba un contrato de por vida con específicos votos como
el claustro, la castidad o el bautizo.

El estado positivista: Después de distintos movimientos independentistas de la corona y


revolucionarios, se empezó a conocer la sociedad democrática y positivista. Es decir una
sociedad regida por la voz del pueblo y en función de la razón, en específico de la ciencia.
Es en este momento de la historia, a partir del siglo XVIII donde se empieza a manifestar
un avance exponencial en el uso y creación de tecnología. Comenzó con la máquina de
vapor, después con la electricidad, seguida de la radio y telecomunicaciones hasta la
actual inteligencia artificial.
Ha existido un debate fundamental ante este paradigma: ¿el estado debe Redistribuir la
riqueza o Generarla? Estamos hablando de la lucha de clases, de distintos sujetos a los
anteriores paradigmas: en lugar de rey, presidente; en lugar de comerciante,
emprendedor; de esclavo a obrero; de sacerdote a científico. Un ejemplo de esto es el
pensamiento bipolar de “socialista o capitalista”, “comunista o neoliberalista”. Curioso
fenómeno porque la actual potencia económica mundial, China tiene tanto rasgos
comunistas como una expansión comercial globalista de libre mercado con una
penetración exitosa. ¿Si todos formamos parte de una sociedad porque no todos gozamos
de sus beneficios?, ¿Qué pensamiento rige aquella sociedad? ¿El estado debe de cuidar al
mercado o debe dejarlo ser libre, sin restricción alguna para que se auto regule por
aquella “mano invisible” de la cual habló Adam Smith? ¿Tenemos derecho a tener
propiedad privada o nuestro esfuerzo debe verse reflejado para el bien de la comunidad
en general y no de una familia? ¿Es sano tener una sociedad donde la mitad de la
población vive en pobreza y que de la otra mitad solo el uno por ciento sea realmente
rico? ¿Tener acceso a la salud debería de ser un derecho o una comodidad? ¿Las empresas
deben de ser del estado o privadas? Con este bombardeo de preguntas podemos empezar
a definir cuáles son las características de este paradigma: orientado a los resultados
eficaces, la inmediatez, el reconocimiento de un mundo complejo culturalmente, los
salarios y el empleo, la actitud emprendedora, la lucha de clases, la sobreproducción y
consecuentemente una sociedad de consumo. Aquí se discute la moral de la propiedad
privada.
¿Estado? A la par de las ideas previas de estado también existe el cuestionamiento de la
necesidad de un Estado, ¿es posible una sociedad sin estado?, es así que surgen
movimientos como el pensamiento anarquista o las comunidades autosustentables y
autónomas. Incluso es necesario comentar el caso de las micronaciones. Con esto quiero
decirles que cuando alguien asume una postura o señala una postura anarquista,
realmente se está hablando (o puede observase como) de un paradigma administrativo o
de gestión. Este pensamiento en resumen plantea la siguiente problemática: si todos
formamos parte de una misma comunidad ¿por qué no todos gozamos de la misma
capacidad de toma de decisiones?, se pone en tela de juicio la figura paternal/maternal
del estado y mercado, peguntándose cómo sería posible vivir sin esa sombra que vigila
cada una de nuestras acciones y que nos han llevado a un ritmo de vida consumista.
Ahora sí ya tenemos elementos para usar los lentes paradigmáticos y observar distintos
fenómenos bajo sus ópticas.

Para entender los paradigmas administrativos, pensemos en las siguientes palabras:


Herencia:
Trabajo:
Familia:
Sociedad:
Administración: ¿para quién y por qué?

Quiero destacar que estos paradigmas co-exsiten y los he escuchado en clase, los he
escuchado salir de mi boca. Esta plática es una invitación de entender a la administración
como un fenómeno complejo que tiene que ver con el otro, EL OTRO. Si bien la
administración individual existe, la noción de administración es algo social, hemos
validado dicho conocimiento. Así que la próxima vez que hablen de administración con
otra persona, piensen desde qué paradigma tú estás hablando y de qué paradigma el otro
te escucha, ¿están hablando o entendiendo lo mismo?

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