GESTI0NARSE A SI MISMO – Peter Druker ENSAYO

Nunca me había cuestionado tanto respecto a en que soy realmente buena, ¿soy
buena en lo que yo creo que soy buena? ¿Cómo hacen las personas para saber en
qué son buenos? ¿Estoy malgastado mi tiempo tratando de ser buena en lo que no
soy buena? ¿Cuáles son mis valores? ¿Qué pasa después de terminar la
universidad y empezar la vida laboral? ¿es tan importante relacionarte con los
demás? ¿y si llegas a los 20s y aun no sabes que quieres hacer?
Son preguntas que surgieron después de leer Managing Oneself, se sabe que hoy
en día, vivimos en una sociedad en la cual el más fuerte es el que "sobrevive” ante
todo y sobresale, es decir que el que mejor preparado está, tendrá un camino más
fácil que recorrer en el ámbito laboral y en prácticamente todos los aspectos de la
vida cotidiana, de acuerdo a la profesión que alguien realiza, de acuerdo al entorno
dónde vivas, de acuerdo a la familia que tengas, de acuerdo a cómo manejas tu
vida y todos esos casos en general.
Además de tener que ser el más fuerte, también se necesitan diferentes
capacidades y valores que nos ayuden en las relaciones con otras personas,
debemos ser consciente de que una organización no se rige por una sola persona,
de que el la oficina no solo estarás tú, de que en la calle no irás caminando solo,
por eso debemos aprender a relacionarnos y adaptarse a las demás personas que
están en nuestro entorno con el fin de mejorar todas estas situaciones para ser más
eficientes en compañía y mantener un ambiente sano para todos. La mayoría de las
personas, ya sea que trabajen para una empresa o solas, interactúan y necesitan
trabajar de manera efectiva con otros. Tienes que asumir la responsabilidad de tus
relaciones, y eso significa dos cosas. Primero, debes aceptar que las demás
personas son personas como tú, con sus fortalezas, valores y formas de hacer las
cosas. Para ser eficaz, debe comprender estos aspectos de sus compañeros de
trabajo. Te gusten o no, es tu responsabilidad observar y descubrir porque las
organizaciones de hoy apuestan por la confianza y el entendimiento entre las
personas. En segundo lugar, debe ser responsable de comunicarse con ellos, as
preguntas siguen siendo la mejor forma de conocer y comprender a los demás.
También algunos malos hábitos lo convierten en un empleado menos efectivo, que
necesita para deshacerse de esos malos hábitos. Incluso puede descubrir si tiene
problemas de comportamiento que le dificultan comunicarse con los demás. La
etiqueta, los pequeños detalles como decir "por favor" o "gracias" pueden hacer que
dos personas trabajen juntas, quieran o no. Hay gente muy inteligente que no
consigue eso.
Dejando un poco el ámbito de relacionarse y eso, seguimos en algo bastante
importante dónde surgió esto: ¿Qué pasaría si dedicamos el tiempo y la energía
que gastamos tratando de ser mejores en lo que no somos y la utilizamos en
perfeccionar en lo que realmente somos bueno?
No vale la pena invertir en áreas donde no tienes talento porque en el mejor de los
casos serás mediocre. Se necesita más esfuerzo para pasar de malo a más o menos
que para pasar de bueno a excelente.
Es importante que se concentre en sus fortalezas y trabaje para mejorarlas. Debe
detectar las pequeñas lagunas ocultas en sus fortalezas que pueden verse nubladas
por una arrogancia excesiva y tomar las medidas necesarias para adquirir las
habilidades y los conocimientos necesarios para llenarlas. No se puede rendir bien
en aquello en lo que somos débiles, debemos desempeñar de acuerdo a nuestras
fortalezas. La mayoría de la gente cree saber para qué es buena. Suelen
equivocarse. Más a menudo, la gente sabe en qué no es buena y, aun así, hay más
gente que se equivoca que la que acierta. La gente tiene poca necesidad de conocer
sus puntos fuertes.
Revelando nuestras propias cualidades y carencias, de las que podemos aprender
a corregirlas, podemos encontrar un ambiente de trabajo en el que nos sintamos
cómodos. Lo más importante es comprender nuestras fortalezas y debilidades y
descartar nuestro error común de enfocarnos en nuestras debilidades, pensando
que en realidad son nuestras fortalezas para actuar.
Así mismo, nuestro desempeño depende meramente de nuestras fortalezas. Todas
las personas tienen metas propias, pero es difícil encontrar a alguien que tenga muy
claro cuál es el camino más adecuado para lograrlas y para hacerlo en el tiempo
establecido desde un principio. Es importante recalcar que nuestra personalidad y
la forma en la que actuamos en casa, recae de forma directa en nuestro desempeño.
En este artículo, Peter F. Drucker comparte con nosotros un enfoque de la
autorreflexión en el ámbito profesional que ayuda a las personas a pensar más en
sus habilidades, conocimientos, puntos fuertes y capacidades con el fin de lograr un
mejor rendimiento y competitividad en el ámbito laboral y en la organización;
también nos ayuda a gestionar y controlar mejor nuestras decisiones y acciones
antes de completar una tarea o asignación con el fin de lograr resultados efectivos
que conduzcan a resultados perfectos.
Para concluir, todos nosotros seres humanos a medida que vamos creciendo vamos
adquiriendo mas experiencias a lo largo de nuestra vida, el hecho de que fracases
en algo en lo que creías que era lo tuyo, que no veas oportunidades porque sientes
que ya diste todo tu potencial o que simplemente no te encuentres cómodo en este
lugar no quiere decir que todo está malo o que no eres bueno para nada o que no
hay manera de levantarse de ese fracaso, si aprendemos a ser personas eficientes,
independientes, pensadoras, que sepamos convivir con los demás, que no dejemos
de intentar hasta averiguar en que somos realmente buenos y potenciar eso de una
manera espectacular hasta llegar al punto de considerar que lo haces perfecto y
que en realidad eso es lo tuyo y que por eso viniste a este mundo, esas capacidades
no se logran solas, debes ser una persona constante y que adquiere conocimiento
diariamente, organizada y que sabe manejar el poder de su mente, quizá la mayoría
se sienta frustrado por fracasar pero el fracaso no es más que una caída en la mitad
de una escalera que va de subida.