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CAPÍTULO Amibiasis

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Marco A. Becerril Flores
Hilda Lizbeth Pérez Herrera
Andrés Salas Casas

Contenido
• Introducción • Respuesta del huésped a la infección
• Características generales del parásito • Diagnóstico
• Ciclo biológico • Tratamiento
• Mecanismos patogénicos • Prevención
• Manifestaciones clínicas • Epidemiología

de vista patogénico los agentes se llaman en realidad E. histo-


Preguntas de evaluación inicial
lytica, cuando es patógeno, y E. dispar si no lo es.
1. De las fases de E. histolytica, ¿por qué sólo el trofozoíto
ocasiona daño en un tejido?
2. ¿Por qué los portadores asintomáticos son los causantes Reseña histórica
de que la amibiasis no desaparezca de una región? El descubrimiento y la descripción inicial de la amibiasis se
3. ¿De qué forma la colagenasa que produce E. histolytica
contribuye a la disentería en una persona infectada? deben al médico ruso Fedor Lösch en 1873, quien sugirió
4. En caso de amibiasis hepática, ¿qué tratamiento se reco- que existía una relación entre E. histolytica y la amibiasis, al
mienda? infectar un perro con el parásito obtenido de un paciente.
5. ¿Por qué la prevalencia de personas seropositivas a E. his- Sin embargo, no logró reproducir la enfermedad y fue hasta
tolytica es menor que la prevalencia estudiada mediante
exámenes coproparasitoscópicos?
1891 cuando Councilman y La Fleur descubrieron la evidencia
clínica y patológica de la asociación de E. histolytica con
la disentería y el absceso hepático en humanos.
Introducción En 1893, Quincke y Roos descubrieron al parásito en su
forma de quiste. Más tarde, en 1913, Walter y Sellards de-
La amibiasis es una infección humana producida por el pro- terminaron que la transmisión de la enfermedad ocurre por
tozoario Entamoeba histolytica y afecta sobre todo al intesti- los quistes y no por los trofozoítos, que los portadores asinto-
no grueso, si bien puede dañar otras regiones del cuerpo. El máticos son los reservorios y responsables de la transmisión,
nombre científico del parásito se compone a partir de cuatro además de que existe un grupo de individuos de alto riesgo y
términos griegos que significan: Ent- “intestino”; ameba- que hay diferencias de virulencia en los parásitos.
“amoeba”, hist- “tejido” y lisis- “destrucción”, y por sí solo ex- En 1925 Emile Brumpt sugirió que había dos especies:
plica la naturaleza de la enfermedad que provoca. En verdad, una capaz de causar enfermedad invasora, Entamoeba histo-
el trastorno implica una destrucción de los tejidos intestina- lytica, y otra que nunca causa la enfermedad, a la que llamó
les. El protozoario se denomina ameba, pero se ha extendido Entamoeba dispar.
el uso menos riguroso de “amiba” y por consiguiente a la Sin embargo, las observaciones de Brumpt no fueron
enfermedad se le conoce como “amibiasis”. Desde el punto reconocidas en su momento, sino hasta la década de 1970-
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24 Parasitología médica • Capítulo 4

1979, cuando se acumularon observaciones que apoyaban la a)


hipótesis de Brumpt sobre la existencia de dos organismos
distintos. Tras la acumulación de datos bioquímicos, inmu-
nológicos y genéticos, en 1993 se publicó la descripción for-
mal de E. histolytica, separándola de E. dispar.
De estos hechos resalta, en primer lugar, la peculiar e
inteligente manera de pensar de Lösch quien tuvo la idea
de comprobar la infección de la amiba al inocular al perro
mediante vía rectal para provocar la disentería y observar úl- b)
ceras intestinales. El método científico señala que en ocasio-
nes es necesario experimentar y, aunque en la actualidad las
comisiones de ética y de protección de animales juzgarían
de modo desfavorable su método, fue la forma que este in-
vestigador ideó para demostrar que este parásito es el agente
causal de la disentería. A pesar de que falleció el animal con
disentería, Lösch siguió con su investigación hasta demostrar
la presencia del protozoario como causante de la enfermedad.
Figura 4-1. Fotografías de trofozoítos y quistes de E. histolytica.
a) Se observan trofozoítos que emiten seudópodos en examen di-
Características generales recto en fresco a partir de cultivo axénico (1 000 x). b) Se observa un
quiste tetranucleado teñido con Lugol a partir de muestras de heces
del parásito (100 y 400). c) Fotografía de trofozoítos de E. histolytica. Se observa
Durante su ciclo de vida, E. histolytica presenta distintos es- un trofozoíto que emite su seudópodo (1 000 x).
tados morfológicos sucesivos; no obstante, las dos fases más
importantes del parásito son: 1) el quiste, que es la fase de Cuando el trofozoíto se encuentra en un ambiente desfa-
resistencia (forma infectiva) y donde el parásito permanece vorable, se desprende de la mucosa e inicia el enquistamien-
inmóvil; 2) el trofozoíto, que es la fase móvil en la que se re- to en la luz del intestino grueso. Durante este proceso las
produce y durante la cual es capaz de causar daño al huésped células pierden movilidad, adquieren una forma esférica, se
(forma invasiva). deshidratan y excretan parte de las reservas alimenticias pre-
En el trofozoíto se distinguen dos capas: el ectoplasma, sentes en vacuolas digestivas, con lo que forman el prequiste,
que es hialino y se encuentra en estado de “gel”, y el endo- fase en la cual se comienza a sintetizar un polisacárido cons-
plasma, que está en fase “sol” y contiene los organelos del tituido de N-acetilglucosamina (quitina), que se deposita en
parásito (figura 4-1 a, b, c).* su superficie, teniendo como consecuencia la pérdida de mo-
El movimiento de los trofozoítos se debe a que en su vimiento y que cese su reproducción. Después se reproducen
ectoplasma se encuentran proteínas de actina y miosina, las sus núcleos, sintetizándose otro a partir del que posee el tro-
cuales se contraen en el extremo contrario a la dirección de fozoíto (quistes uninucleados inmaduros). Los quistes inma-
su desplazamiento. En esta fase, que le permite desplazarse duros presentan divisiones nucleares sucesivas y dan origen
debido a que su citoplasma se proyecta en dirección de su al quiste maduro tetranucleado que se elimina con las heces.
movimiento, se le denomina seudópodo. Durante este proceso el metabolismo del parásito no
El cambio de un estado morfológico a otro tiene lugar se detiene: parte de sus carbohidratos son almacenados en
por las condiciones y el medio en el que se encuentre. Mien- forma de glucógeno, el cual se emplea para obtener energía
tras que el trofozoíto se halle en un ambiente favorable en cuando se desenquista.
el que el pH se aproxima a 7.0, la temperatura es de unos Luego se reproducen sus núcleos; primero se sintetiza
37 °C, existe suficiente hidratación del medio y los nutri- otro a partir del que posee el trofozoíto, que en ese momento
mentos necesarios están disponibles, los productos resultan- se le conoce como quiste inmaduro binucleado; después se
tes de su metabolismo y la energía que obtiene se emplearán duplican los dos núcleos y entonces se observa un quiste ma-
en la reproducción del parásito. duro tetranucleado. La figura 4-2 ilustra esa transformación.

* “N. del E.: Las figuras marcadas en color rojo no aparecen en el impreso, pero el lector puede tener acceso a ellas en el Centro de Aprendizaje
en línea (On-line Learning Center)” vinculado con esta obra. La dirección de acceso es: <http://www.mhhe.com/medicina/becerril_parasi-
tologia4e> .”
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Debido a que en la fase de Entamoeba histolytica que resis- presentan cuatro núcleos, una pared celular de 125 a 150
te la desecación y temperatura menor a 37 °C se encuentra el nm de espesor y son muy resistentes a cambios ambientales.
quiste, éste representa la fase infectante del parásito. Los quistes Los quistes atraviesan el estómago, en donde son capaces de
tetranucleados (figura 4-2) contaminan alimentos y bebidas. tolerar los jugos gástricos; las enzimas hidrolíticas destruyen
la pared del quiste sin afectar su citoplasma y llegan has-
ta el íleon, en donde ocurre el desenquistamiento. De cada
Ciclo biológico quiste emergen ocho trofozoítos uninucleados denominados
La infección con E. histolytica inicia cuando una persona in- metaquísticos; se dividen por fisión binaria y se adhieren a
giere alimentos contaminados con materia fecal que contiene la mucosa intestinal, donde pueden vivir como comensales.
quistes maduros, los cuales tienen un diámetro de 8 a 20 μm, Cuando las condiciones son desfavorables, los trofozoítos se

Trofozoíto Prequiste Quiste Quiste Quiste


inmaduro con inmaduro maduro
un núcleo binucleado tetranucleado

Ambiente favorable Ambiente adverso


Figura 4-2. Transformación de trofozoíto en quiste.

Figura 4-3. Ciclo biológico y de transmisión de Entamoeba histolytica.


26 Parasitología médica • Capítulo 4

desprenden de la mucosa e inician el enquistamiento en la Adhesión


luz del intestino grueso.
El quiste maduro tetranucleado se elimina con las heces La adhesión a células epiteliales requiere de un mecanismo
y puede ser ingerido por otro individuo, lo que completa el específico donde se involucran moléculas presentes en la su-
ciclo biológico y de transmisión de E. histolytica (figura 4-3). perficie del parásito (adhesinas) y moléculas en la superficie
El hecho de que una persona aloje amibas en su intestino de la célula blanco (receptores).
no implica en todos los casos la aparición de molestias, las La adhesión es el primer mecanismo de patogenicidad
cuales dependen de la virulencia de las amibas y el estado de la amiba y regula la lisis de las células del hospedero de
del huésped. manera dependiente de contacto. En la adhesión participan
Desde el punto de vista del parásito, no todas las ami- dos proteínas con actividad de lectina; las lectinas son proteí-
bas son patógenas. Algunas son más agresivas que otras. Un nas glucosiladas localizadas en la membrana plasmática del
individuo infectado por cepas de amibas no patógenas no parásito, las cuales participan en la adhesión y en el control
evidencia síntomas, aunque tampoco se deshace fácilmente de la migración de los trofozoítos. Una de ellas es inhibida
de ellas. A estos pacientes se los conoce como potadores asin- por oligosacáridos de N-acetil-glucosamina; la otra lectina se
tomáticos. Otras personas pueden recuperarse de la infección inhibe por galactosa y N-acetil-glucosamina.
de modo espontáneo por mecanismos aún desconocidos. No Otras proteínas que participan en la adhesión de los tro-
obstante, cuando una persona se infecta con cepas patógenas fozoítos a la célula blanco son: la adhesina, la proteína rica en
las consecuencias son de mayor consideración, ya que pueden serinas de E. histolytica (srehp), el complejo ehcpadh y las
llevar a la muerte de la persona. Para entender este punto es proteínas de 90, 70, 50 y 24 kDa.
necesario conocer la patogenia de las amibas (mecanismos a
través de los cuales lesionan al huésped infectado). Citólisis dependiente de contacto
No se conoce bien el mecanismo exacto por medio del cual
Mecanismos patogénicos los trofozoítos amibianos lisan a la célula blanco, pero se sabe
El mecanismo patogénico de las amibas se da, aparentemen- que la temperatura es un factor importante para que el pro-
te, en tres pasos principales: la adhesión, el efecto citopático ceso se efectúe, ya que a 37 °C se observa el óptimo de dicho
dependiente de contacto y la fagocitosis (figuras 4-4 y 4-5). mecanismo.

Luz intestinal
Adhesión

pci
gr
col
Citólisis

Submucosa
Fagocitosis
N-ac-gl

Figura 4-4. Mecanismos patogénicos que emplea E. histolytica du-


rante una lesión intestinal. Abreviaturas: col, colagenasa; gr, glóbulos
rojos; N-ac-gl, galactosa–N-acetil-D-galactosamina; pci, proteína Figura 4-5. Mecanismo patogénico de las amibas: adhesión, efecto
formadora de canales iónicos. citopático dependiente de contacto y fagocitosis.
Amibiasis 27

Los microfilamentos amibianos les sirven a los trofozoí- de degradar IgA, IgG, IL-18 (clave en procesos inflamatorio,
tos para que puedan lisar a la célula blanco, ya que las cito- mediadora de la respuesta Th1, activadora de macrófagos y
calasinas B y D interfieren en su formación. El flujo trans- sección ifn) y subunidades del complemento como C3a
membranal de calcio es importante en la actividad lítica de y C5a. La EhCP5 también presenta actividad de enzima con-
los trofozoítos amibianos. vertasa de ILβ, la cual podría activar la cascada de las caspasas
La lisis de la célula blanco puede estar mediada, entre dentro de los hepatocitos causando apoptosis.
otros factores, por la actividad de cisteína proteasas, ya que
se ha observado que su secreción es un factor importante para Fagocitosis
determinar el grado de agresividad de los trofozoítos.
La fagocitosis tiene diversas funciones; muchos protozoarios
ingieren bacterias para cubrir sus requerimientos nutricio-
Amebaporo nales.
El amebaporo es un péptido compuesto por 77 aminoácidos Para E. histolytica, la fagocitosis puede ser de dos tipos:
y se conocen las isoformas A, B y C, las cuales se producen en a) uno no específico por medio del cual los trofozoítos ingie-
una proporción de 35:10:1. Las tres isoformas de la ameba- ren partículas como almidón, látex, hierro, etc., y el contac-
poro pertenecen a la familia de las proteínas del tipo saposina to inicial puede estar mediado por fuerzas electrostáticas, y
(saplip), que se caracterizan por tener un motivo conservado b) un mecanismo altamente específico donde intervienen
de residuos de cisteína unidos por tres puentes disulfuro que moléculas de superficie (adhesinas), que participan en el re-
permiten la interacción con lípidos. conocimiento y unión de los trofozoítos a la célula blanco.
El amebaporo en la amiba se encuentra en estructuras La fagocitosis de E. histolytica es un proceso multifacto-
similares a los lisosomas, de donde puede viajar a fagosomas rial en el que intervienen varios eventos, entre ellos la adhe-
o ser secretado al medio extracelular, donde se encarga de sión, la polimerización de ciertas proteínas del citoesqueleto,
dañar la membrana de las células blanco. El mecanismo la acción de enzimas digestivas y la exocitosis.
de acción de este péptido consiste en permeabilizar la mem-
brana mediante su inserción en la bicapa lipídica, donde se une
a fosfolípidos aniónicos; una vez unido a los fosfolípidos,
Amibiasis intestinal
se dan interacciones entre los mismos péptidos formadores En los casos sintomáticos, la intensidad es muy variable. La
de poros, es decir, una interacción péptido-péptido; ello tie- forma más clásica, aunque no la más frecuente, es la disen-
ne como resultado la formación de una molécula de mayor térica. Lo más habitual es que en un inicio muestre una sin-
tamaño, la cual da paso a un flujo anormal de iones y otras tomatología poco intensa, con anorexia, astenia, dolor abdo-
moléculas; en consecuencia, se crea un desbalance en el me- minal, alteraciones en el tránsito del intestino y diarrea no
dio intracelular que trae como resultado la muerte celular sanguinolenta. Estos síntomas reflejan simplemente la exis-
por choque osmótico. tencia de un proceso irritativo del colon y se trata de una fase
inicial de la enfermedad que puede prolongarse varios meses.
Cisteína proteasas
Un factor importante en la lisis celular inducida por la amiba
Amibiasis extraintestinal
son las cisteína proteasas. A la fecha se han reportado 20 ge- Mediante mecanismos moleculares aún no bien caracterizados,
nes que codifican para cisteína proteasas (EhCP1-EhCP19 y la los trofozoítos pueden atravesar la mucosa intestinal inva-
EhCP112), pero sólo ocho de ellas se han expresado in vitro. diendo los vasos sanguíneos de los tejidos más próximos y
La EhCP1 (27-35kDa), la EhCP2 (35kDa) y la EhCP5 (29kDa) son capaces de diseminarse hacia diferentes órganos causando
componen 90% de la actividad total de las proteasas del tipo abscesos, sobre todo en hígado.
cisteína en la amiba. Las EhCP1, 2 y 3 participan en la destruc- El absceso hepático amibiano es la manifestación ex-
ción de la matriz extracelular, donde degradan fibronectina, traintestinal más frecuente; habitualmente los pacientes se
laminina y colágeno, lo cual tiene como resultado la separación presentan con un cuadro clínico agudo o crónico, con dolor
entre células, facilitando así la invasión; además se sabe que abdominal en hipocondrio derecho asociado a síntomas cons-
estas tres proteasas participan en la fagocitosis. titucionales (pérdida de peso, mialgias y malestar general) y
La EhCP5 es la proteasa del tipo cisteína más estudiada fiebre; los síntomas gastrointestinales y la ictercia son raros.
de E. histolytica; se sabe que contribuye a la evasión de la La complicación más común es su rotura con extensión a pe-
respuesta inmune montada por el hospedero, ya que es capaz ritoneo, pleura o pericardio; también se han descrito fístulas
28 Parasitología médica • Capítulo 4

Incidencia
¿En cuáles organismos se conserva la proteína?
Los portadores funcionales a menudo tienen patrones de incidencia similiares

No hay homologación Secuencia de


detectable conservación al 100%

+ Grupo Fungimetazoa (91 taxa)


+Viridiplantae (12 taxa)
Plasmodium knowlesi
– Plasmodium vivax
– Plasmodium falciparum

Apicomplexa
– Plasmodium yoelii
Theileria parva
– – Theileria annulata

Eucariota
Cryptosporidium hominis
– – Cryptosporidium parvum

Tetrahymena thermophila

Stranenopiles
Phytophthora sojae
– Phytophthora ramorum

Thalassiosira pseudonana
– Phaeodactylum tricornutum

Dictyostelium discoideum

Anoebozoa
Entamoeba histolytica
Leishmania infantum

Trypanosoma brucei
Trichomonas vaginalis
ICP2
cp112
EHI_196580
EHI_193300
EHI_051730
rab8
dpp

Búsqueda de textos
Ingreso:

Base de datos
Co-ocurrencia

Experimentos
Fusión génica

Co-expresión

[Homologar]
ICP2 Inhibidor 2 de cisteína proteasa (EhICP2); inhibe el extracto de

Puntuación
Vecindario
trofozoíto soluble (123aa)

Portadores funcionales:
cp112 Cisteína proteasa (446 aa) 0.653
EHI_196580 Fosforibulocinasa/proteína de la familia de uridina cinasa (257 aa) 0.450
EHI_193300 Fosforibulocinasa/proteína de la familia de uridina cinasa (260 aa) 0.450
EHI_051730 Fosforibulocinasa/proteína de la familia de uridina cinasa (393 aa) 0.450
rab8 Familia Rab GTPasa (199) 0.446
dpp Dipeptidil-peptidasa (665 aa) 0.443

Figura 4-6. String de Entamoeba histolytica, con la finalidad de conocer las diferentes cisteína proteasas de este organismo, se realizó una
búsqueda en la plataforma www.expasy.org/

hepatobronquiales, absceso pulmonar, derrame pleural reac- Genoma. Bioinformática


tivo, trombosis de la vena hepática y obstrucción de la vena
cava inferior. El diagnóstico del absceso hepático amibiano de E. histolytica
se realiza por un cuadro clínico sugestivo, evidencia image- E. histolytica presenta una gran variabilidad fenotípica tanto
nológica del absceso (ecografía o tac), serología positiva para en cepas como en clonas. Los trofozoítos en cultivo cambian
E. histolytica y respuesta al tratamiento con nitroimidazoles. de fenotipo, pierden la virulencia cuando se cultivan en me-
Algunos estudios muestran que al llegar los trofozoítos al dio axénico, la cual recuperan al ser inoculados en hígado
hígado son rodeados por neutrófilos. La lisis de los neutrófilos de hámster; pueden aumentar o disminuir su capacidad de
y de los histiocitos de la periferia da origen a la necrosis; estas fagocitosis y presentar resistencia variable a la lisis por com-
células son reemplazadas en forma progresiva por macrófagos plemento humano. Clonas obtenidas de una misma pobla-
y células epitelioides hasta desarrollar un granuloma, lo que ción también presentan estos cambios, lo cual indica la gran
indica que el proceso de lisis de los hepatocitos es combinado variabilidad genética en este parásito.
y se debe tanto la capacidad histolítica de la amiba como a la El genoma de E. histolytica presenta un bajo contenido
lisis de los neutrófilos. de G + C (22.4%); está compuesto de cromosomas lineales
Amibiasis 29

y dna circular de diferentes tamaños que van desde 5 a el tratamiento por lo general resulta en una recuperación
60 kb. anatómica y funcional de la parte afectada, con muy poca o
E. histolytica posee un genoma rico en A + T con abun- ninguna cicatrización.
dantes palíndromos repetidos, así como gran heterogeneidad Las cepas de E. histolytica pueden efectuar todos, al-
genética entre clonas relacionadas genéticamente. gunos, uno o ninguno de los mecanismos anteriores. En la
Tras el advenimiento del proyecto de genoma humano actualidad se ha reclasificado a E. histolytica en dos grupos:
iniciado en 1990 se dio lugar a una nueva era en la investiga- uno patógeno y otro no patógeno. Al primer grupo se le ha
ción genómica, al ofrecer una gran cantidad de información dado propiamente el nombre de E. histolytica y al segundo
que ha tenido impacto en diferentes áreas de la investigación el de E. dispar. Desde el plano bioquímico, se ha tratado de
científica. encontrar moléculas que permitan separarlas en patógenas y
El Proyecto del Genoma Humano ha estimulado el desa- no patógenas, y lo anterior se ha logrado con “cimodemos”
rrollo de la genómica comparativa, cuyo propósito es enten- (poblaciones del microorganismo que pueden diferenciarse
der cómo las especies han evolucionado y cuál es la función por la síntesis de moléculas que estructuralmente son distin-
de los genes y las regiones no codificantes del genoma, me- tas, pero que realizan la misma función enzimática, lo que
diante el análisis y la comparación de genomas de diferentes significa que difieren desde el punto de vista genético pero
especies. Definir la estructura y función de los genes huma- no desde el fisiológico).
nos favorecerá el desarrollo de estrategias para predecir, pre- ¿Qué factores se han determinado como importantes
venir y combatir enfermedades humanas. Hasta el momento para que alguien padezca absceso hepático amibiano (aha)?
se ha completado la secuencia de los genomas de varios orga- La amibiasis tiene una distribución mundial, pero sólo al-
nismos, entre los que destacan algunas especies: mosca de la gunas personas desarrollan absceso hepático. La presencia de
fruta, gusanos, ratón, rata, perro, un gran número de hongos, HLA-DR3 (antígeno leucocitario humano) DR3 (es un com-
el mosquito transmisor del paludismo, así como del parásito ponente del gen alelo del haplotipo AH8.1), se ha asociado
que lo causa, el arroz, la semilla de la mostaza, una larga lista con mayor susceptibilidad para presentar la enfermedad. En
de bacterias, virus y por supuesto el genoma de la amiba. la mayoría de los casos, afecta a varones jóvenes.
Esta información, al ser analizada en diferentes bases de Se estima en 50 millones de infecciones anuales la inci-
datos, permite generar mayor conocimiento acerca de la pa- dencia mundial del absceso amibiano. En Europa y Estados
togenicidad de este organismo, y algunas de las proteínas Unidos los casos suelen circunscribirse a inmigrantes y via-
que son cruciales en sus factores de virulencia, tales como jeros procedentes de países donde la enfermedad es endémi-
algunas ATPasas, cisteína proteasas, entre otras. ca. El absceso hepático amibiano (aha) y otras enfermedades
En una búsqueda avanzada en cualquier base de datos amibianas extraintestinales son siete a 10 veces más frecuen-
de bioinformática es posible acceder a las secuencias de estas tes en la edad adulta, entre los 20 y 40 años, predominando
proteínas y obtener datos acerca de su conformación atómica en el sexo masculino; sin embargo, las razones de género aún
y molecular, estructura y datos bioquímicos, secuencias nu- no se han podido explicar.
cleotídicas o aminoacídicas, etcétera. Otras condiciones que afectan a la inmunidad mediada
por células, tales como extremos en la edad, embarazo, tera-
pia con corticosteroides, neoplasias y desnutrición aumentan
Absceso hepático la posibilidad de presentar afectación hepática.
La infección hepática resulta de la migración de trofozoí- El tratamiento de los abscesos hepáticos amibianos es
tos a través de la vena porta. En el absceso el parénquima mediante el uso de imidazoles como el metronidazol (durante
hepático está completamente sustituido por restos necróti- 7-10 días, 750 mg/8 h en adultos), seguido de un agente in-
cos con escasos trofozoítos y células inflamatorias. La lisis traluminal, como la paromomicina (durante otros siete días,
de los neutrófilos por las amebas libera productos tóxicos 500 mg/8 h), con 90% de éxito y en las fallas de este tipo de
no oxidativos que contribuyen a la destrucción del tejido. tratamiento el paciente es sometido a una laparotomía; pero
El color del fluido puede variar de amarillento hasta café recientemente la punción percutánea y la laparoscopia están
oscuro, con apariencia de pasta de anchoas. Los trofozoí- ganando terreno en la resolución de esta enfermedad.
tos sólo se encuentran en la pared del absceso. Una carac-
terística notable de la mayoría de las lesiones amibianas
es su poca tendencia a estimular la proliferación de tejido
Manifestaciones clínicas
conjuntivo o de sanar con formación de cicatriz. Esto es De acuerdo con los mecanismos patogénicos, es posible ase-
particularmente evidente en lesiones grandes, en las que verar que la amibiasis es variable en relación con los síntomas
30 Parasitología médica • Capítulo 4

que causa en el humano. De esta manera, la amibiasis pue- La colitis ulcerativa se puede confundir con la for-
de ser asintomática y sintomática. Para el primer caso cabe ma idiopática, enfermedad de Crohn, tuberculosis, ade-
afirmar que la persona está infectada por Entamoeba dispar y nocarcinoma y otros tumores intestinales. El diagnóstico
en el segundo caso por E. histolytica. Los parásitos pueden diferencial se basa en la ausencia de regeneración epitelial
establecerse sólo en el intestino grueso, pero las cepas más (seudopólipos) o proliferación de tejido conectivo (esteno-
patógenas son capaces de invadir otros órganos a través de va- sis y cicatrización). Las úlceras amibianas rara vez sangran.
sos sanguíneos, lo cual significa que la amibiasis sintomática Además, los parásitos no invaden el intestino delgado, de
puede ser intestinal y extraintestinal. tal forma que las lesiones sólo se presentan en el colon.
La colitis no disentérica crónica puede manifestarse
Amibiasis intestinal con años de diarrea sanguinolenta intermitente y no es po-
sible diferenciarla de la colitis ulcerosa. Los síntomas son
En este caso llegan a presentarse las siguientes condiciones: inespecíficos, puede haber náuseas, vómitos, malestar ge-
a) colitis no disentérica crónica, b) disentería o megacolon neral, dolor abdominal difuso o sólo diarreas —al inicio
tóxico, c) ameboma o granuloma amebiano, d) colitis fulmi- pastosas y poco frecuentes (4v/d), luego líquidas y cons-
nante con perforación, d) apendicitis y e) rectocolitis aguda. tantes—.
Los sitios más a menudo infectados por E. histolytica en El megacolon tóxico ocurre por uso inadecuado de
el intestino grueso son ciego, sigmoide y recto, quizá por- corticoides cuando se confunde colitis amibiana con una
que son regiones en las que hay menos tránsito intestinal. A enfermedad inflamatoria intestinal.
causa de estos mecanismos, los trofozoítos causan necrosis al La disentería fulminante es rara y casi siempre se
epitelio intestinal, penetran la mucosa y se dirigen hasta la diagnostica en personas de edad avanzada y en desnutridos
submucosa, punto en el cual se extienden en sentido perpen- o individuos que viven en zonas donde hay escasa o nula
dicular respecto de la dirección de su penetración, es decir, amibiasis. En estos casos se advierte destrucción intensa de
provocan una úlcera; por lo regular, la lesión que ocasionan la pared intestinal. Con mucha frecuencia hay perforaciones
tiene la forma de cuello de botella (figura 4-7). Alrededor múltiples en zonas muy extensas que se desarrollan hasta
del sitio de penetración se produce un foco inflamatorio que peritonitis.
conduce a edema redondeado con centro necrótico, lo que da El ameboma casi nunca se identifica, el organismo re-
una apariencia de lesión en forma de botón de camisa (úlceras acciona de forma exagerada contra la amiba y forma tejido
nodulares). Las úlceras miden entre 0.1 y 0.5 cm de diáme- de granulación que da lugar a zonas de estrechez, como un
tro. El centro necrótico suele estar lleno de tejido mucoide y pequeño tumor. Es una forma segmentaria rara de colitis
algunas veces hay sangre. Es común que el ciego y el colon amibiana crónica, es más común en ciego y colon ascen-
ascendente muestren úlceras irregulares, más que nodulares, dente y se presenta como una masa abdominal sensible que
que miden 1 a 5 cm de longitud, son serpiginosas y su cu- puede confundirse con un carcinoma de colon. Se localiza
bierta es de fibrina; se observa engrosamiento de la pared de en ciego y colon ascendente. La mucosa se observa delgada
la mucosa. y ulcerada, pero las siguientes capas de la pared intestinal
están engrosadas, edematosas y hemorrágicas. El peritoneo
está comprometido.
En la apendicitis amibiana se reconocen úlceras no-
dulares, con inflamación supurativa aguda. En resumen,
las cepas patógenas de E. histolytica utilizan diversos meca-
nismos para causar necrosis en el tejido infectado, lo cual
conduce a la formación de úlceras. Lo anterior genera una
reacción inflamatoria de grado y consecuencias variables.
La rectocolitis aguda tiene un cuadro de comienzo
agudo con diarrea disentérica, deposiciones sanguinolentas
y con mucosidades, de alta frecuencia (7 a 10 v/día). Acom-
pañado de dolor en hemiabdomen inferior o fosa ilíaca iz-
Submucosa quierda, así como tenesmo cuando hay compromiso rectal.
En ocasiones se acompaña de fiebre (33%), compromiso del
Figura 4-7. Lesión en forma de botón de camisa y cuello de botella. estado general y pérdida de peso.
Amibiasis 31

Amibiasis extraintestinal Después de una amibiasis hepática o pulmonar, los pará-


sitos pueden invadir el cerebro, habitualmente el lóbulo
Los parásitos se pueden desplazar hacia diferentes órganos, izquierdo, e inducir necrosis cerebral única o múltiple,
más a menudo a hígado, piel y mucosas, pulmón, riñón y ce- con dimensiones de 2 a 5 cm de diámetro, que son lesiones
rebro. Por lo general, la amibiasis cutánea se presenta en va- amarillentas con hemorragias.
rones homosexuales y pacientes con disentería. Se inicia con
úlceras en la región perineal y perianal con bordes irregulares
y necrosis en su base; se trata de lesiones muy dolorosas.
Respuesta del huésped
En casos de infección de ciego y colon ascendente por a la infección
amibas llega a producirse perforación hacia la cavidad peri- El huésped se defiende del parásito a través de mecanismos
toneal y precipitar una peritonitis; otras veces la perforación inmunológicos y no inmunológicos. Así, por ejemplo, en-
toma la dirección de vísceras huecas, como vesícula biliar, tre los mecanismos no inmunológicos está la producción
estómago, intestino delgado o bien el retroperitoneo, que de mucinas que produce una capa viscosa de moco con la
desencadena la diseminación a suprarrenales y riñón. finalidad de proteger al intestino; otro mecanismo es la mo-
El absceso hepático es la anomalía más común de la ami- tilidad intestinal y la presencia de microbiota endógena del
biasis extraintestinal y se produce porque los trofozoítos se hospedero.
diseminan por vía hematógena al hígado, en particular al ló- Los mecanismos inmunológicos involucran tanto al sis-
bulo derecho. Hay síntomas intestinales de manera invariable, tema inmune innato como al adaptativo.
por ejemplo, amibiasis ulcerativa del colon, cuando se desa-
rrollan abscesos hepáticos. En el tejido hepático se presentan
focos de necrosis por los trofozoítos. Martínez Palomo sugiere
Respuesta inmune innata
que en vez de denominarlo absceso hepático, debería llamarse del huésped
“necrosis ulcerativa hepática”, ya que en las lesiones hay más La respuesta innata es la primera en hacer frente a la los tro-
células nucleadas y eosinófilos, con material granular, que fozoítos de E. histolytica. Después de que penetran al epitelio,
polimorfonucleares, con material amarillento y consistencia las vías clásicas y alternas del complemento defienden al hos-
cremosa y espesa; en ocasiones es café si hay hemorragia. pedero de la invasión por el parásito.
Los trofozoítos se encuentran en los bordes irregulares La vía alterna del complemento se activa por C3, C5 y
de la lesión. El tamaño varía de 5 a 15 cm y casi siempre hay por la cisteína proteasa de 56 kDa de la amiba. A C3 y C5 se
sólo uno; no obstante, en necropsias se han observado múl- les considera potentes agentes quimiotácticos porque favore-
tiples abscesos. En el absceso hepático se llega a presentar cen el reclutamiento y activación de las células inflamatorias.
la siguiente sintomatología: fiebre 85-90%, dolor en cua- La cisteína proteasa degrada las anafilotoxinas C3a y C5a,
drante superior derecho 84-90%, hepatomegalia 30-50%; y la subunidad pesada de la lectina Gal/GalNAc impide el
pérdida de peso 33-50%; diarrea 20-33%; en la mayoría de ensamblaje de C8 y C9 para la formación del complejo de
los casos no hay diarrea concomitante. Como está cerca de la ataque a la membrana, previniendo así la lisis del parásito
cúpula diafragmática, puede perforar el diafragma (empiema mediada por complemento.
amibiano). La complicación más temida y severa es que el Existen otras células inflamatorias que también par-
absceso se rompa en comunicación con el pericardio y produ- ticipan en la respuesta inmune innata, como los neutrófilos,
cir pericarditis hasta ir a la forma fulminante: taponamiento que son las primeras células en llegar al sitio que ha sido
cardiaco y muerte. Puede experimentarse remisión y rege- ocupado por la amiba y probablemente son reclutados por
neración, aunque es posible la rotura que se dirige a cavidad la actividad quimiotáctica de un péptido de la membrana
peritoneal (que produce peritonitis) o la abertura hacia otras del parásito. También participan otras células, como los ma-
vísceras o cavidad torácica. La diseminación puede ocurrir crófagos, células nk y células nkt; por otro lado, también
por rotura o continuidad. se ha encontrado que los neutrófilos aumentan su actividad
Si hay rotura a cavidad torácica pueden presentarse in- amibicida cuando son estimulados por interferón gamma
fecciones pleuropulmonar, pericárdica y mediastínica. En (ifn-y), factor de necrosis tumoral alfa (tnf-α), lipopolisa-
la infección pulmonar el paciente realiza expectoraciones cárido (lps) o antígenos amibianos. Es común que los neu-
con presencia de material necrosado. Si la afección se con- trófilos no logren eliminar la infección amibiana debido a
fina al lóbulo izquierdo del hígado, entonces se extiende a que el parásito provoca la apoptosis y la lisis de los mismos.
la cápsula de Glisson, se adhiere al diafragma y se propaga Los macrófagos reconocen los componentes de la super-
a tórax, detrás del pericardio, con pericarditis consecuente. ficie de los trofozoítos a través de los receptores tipo Toll
32 Parasitología médica • Capítulo 4

(tlr)-2 y tlr-4.16. El lipopéptido fosfoglucano (lppg) de


la amiba es reconocido por los macrófagos a través de estos
receptores; esta interacción favorece la activación del factor
nuclear kappa B (nf-κB) y la liberación de interleucina (il)-8,
il-10, il-12p40 y tnf-α. Los macrófagos también recono-
cen el ácido desoxirribonucleico (dna) de E. histolytica, a
través del tlr-9; esto favorece la producción de tnf-α.

Respuesta inmune adaptativa


del huésped
Tanto la respuesta inmune humoral como la celular parti-
cipan en la defensa del hospedero contra la invasión por E.
histolytica. La producción de IgA contra el dominio de reco- Figura 4-8. Tejido hepático infectado por trofozoítos de E. histolytica
nocimiento de carbohidratos de la lectina Gal/GalNAc, se ha en el que se observa escasa reacción inmunitaria; en la parte inferior
relacionado con protección contra la infección y el desarro- se ve un trofozoíto rodeado de un halo de necrosis del tejido (1 000
llo de enfermedad. Los niños que forman estos anticuerpos y 400×).

tienen 85% menos reinfecciones que aquellos niños que no


poseen la IgA específica. En contraste, los anticuerpos IgA e litud con el cd59 humano, que es un antígeno que se en-
IgG séricos contra la lectina no parecen conferir protección. cuentra en los leucocitos que participan en la inhibición del
E. histolytica requiere de la activación de células T ensamblaje del complejo de ataque a la membrana C5b-C9
específicas del huésped, lo que conduce a la producción de del complemento. Las proteinasas de cisteína degradan las
las citocinas apropiadas y una citotoxicidad directa sobre anafilotoxinas C3a y C5a y son capaces de degradar a la IgA
la amiba. Para esto, las células T deben interactuar con las secretora y la IgG humanas, lo que impide la opsonización
células presentadoras de antígenos. Las células dendríticas de los trofozoítos.
son activadas por la lectina Gal/GalNAc, lo que provoca
un aumento en la expresión de moléculas coestimuladoras Diagnóstico
como cd80, cd86 y cd40 y de moléculas del cmh-ii. Tam-
bién la lectina favorece la producción de citocinas de tipo El diagnóstico se basa en hallazgos clínicos, pruebas de labo-
Th1, como la il-12 y el tnf-α; esto permite a las células ratorio y estudios de gabinete.
dendríticas estimular con mayor facilidad a las células T La amibiasis intestinal se diagnostica con exámenes co-
colaboradoras de tipo 1 (Th1). proparasitoscópicos: estudio directo en fresco si la muestra
En realidad, las amibas no activan una intensa respuesta es líquida, con revisión de moco y sangre. Se puede practicar
inmunológica y escasa reacción inflamatoria. La respuesta ce- colonoscopia, que consiste en realizar un raspado o biopsia
lular es baja, lo que explica la discreta reacción inflamatoria del borde de las úlceras (crateriformes, pequeñas, planas,
(figura 4-8). superficiales con bordes indeterminados y exudado blanco
Se sabe que los protozoarios son capaces de fagocitar leuco- amarillento).
citos del huésped; éste sintetiza anticuerpos, en particular IgG Es importante considerar que hay otras enfermedades
e IgA, cuya capacidad protectora es débil; aunque pueden tener cuyos síntomas se pueden confundir con amibiasis, de tal
valor diagnóstico, no contribuyen a eliminar a los parásitos. modo que debe considerarse el diagnóstico diferencial, por
ejemplo una infección por Shigella, Campylobacter, Salmonella,
Yersinia y E. coli invasoras; colitis ulcerosa y enfermedad de
Mecanismos del parásito Crohn; colitis isquémica; tuberculosis intestinal; cáncer
que contrarrestan la respuesta de colon.
En casos de amibiasis cutánea presente en recién nacidos
del huésped se recomienda el empleo de cucharilla rectal, instrumento
El parásito emplea varios mecanismos para evadir la reac- en forma de vara de vidrio de unos 30 cm de largo y 0.5
ción inmunitaria. Se han descrito mecanismos de evasión, los cm de diámetro cuyo extremo es aplanado. El dispositivo se
cuales escapan de los mecanismos de resistencia del huésped introduce en el recto unos 5 cm y se gira varias veces;
en el intestino; por ejemplo, la lectina amibiana tiene simi- se deposita el contenido colectado dentro en un tubo de vi-
Amibiasis 33

drio, que contiene solución salina isotónica, o bien la muestra tipo de amibiasis, intestinal asintomática, moderada o seve-
se observa directo en fresco entre portaobjetos y cubreobjetos ra, o extraintestinal (cuadro 4-1).
bajo el microscopio a 40×. El movimiento de los trofozoítos Para la amibiasis intestinal se emplean medicamentos
confirma el diagnóstico. A esta prueba se la conoce como que eliminan los quistes, como son iodoquinol, furoato de
“amiba en fresco”. diloxanida, paromomicina. En caso de rectocolitis invasora
Se puede confirmar el daño mediante rectosigmoidoscopia. se recomienda el empleo de metronidazol más un agente in-
Si la muestra es pastosa, se solicita una técnica de concentración. traluminal (para evitar la posibilidad que queden quistes). En
En casos de sospecha de amibiasis extraintestinal, por amibiasis extraintestinal se utiliza metronidazol. También se
ejemplo a nivel hepático, se lleva a cabo una prueba sero- pueden emplear 8-hidroxiquinolinas, dehidroemetina y clor-
lógica en la que se detectan anticuerpos mediante pruebas hidrato de emetina. Se está empleando la nitazoxanida con
inmunológicas, como elisa, inmunofluorescencia indirecta excelentes resultados en la forma intestinal, y tal parece que
o hemaglutinación indirecta; sin embargo, tienen una sensi- también es eficaz en la forma extraintestinal en tres tomas,
bilidad de entre 85 y 90%; por ello sólo esta prueba no per- una diaria de 500 mg, y en niños 100 mg diarios, con menos
mite el diagnóstico absoluto, se tienen que tomar en cuenta efectos colaterales que el metronidazol.
los antecedentes clínico-epidemiológicos. Se evalúa el daño Entre los compuestos de 8-hidroxiquinolinas se encuen-
mediante placa radiográfica, ultrasonido o gammagrafía, que tran yodoquinol (diyodohidroxiquinoleína) y clioquinol (yo-
no es específico de amibiasis, pues muchas otras causas origi- doclorhidroxiquinolona). Algunos recomiendan 20 días. El
nan daños intestinales y hepáticos. clioquinol se suministra en dosis de 500 a 750 mg tres veces
al día durante 10 días. En cantidades excesivas se puede cau-
sar neuritis óptica. Estos compuestos actúan como quelantes
Tratamiento sobre el hierro e impiden que lo utilice la amiba. No es re-
Una vez diagnosticada la amibiasis, debe instituirse un es- comendable en pacientes con intolerancia al yodo o daños
quema terapéutico, que depende del estado del paciente, el hepáticos, así como en personas con problemas anorrectales.

Cuadro 4-1 Cuadro terapéutico de la amibiasis.

Tipo de amibiasis Antiparasitario Dosis pediátrica Dosis en adulto

30-40 mg/kg/día, en 3 dosis, 600 mg/día por 20 días


Yodoquinol (de elección)
por 20 días

Quinfamida 3.4 mg/kg/día por 5 días 300 mg/día por 7 días


Asintomática 20 mg/kg/día repartido en 3 dosis/día 500 mg/día, por 10 días
Diloxanida
por 10 días

25-35 mg/kg/día repartido en 3 dosis, 25-35 mg/kg/día repartido en 3 dosis,


Furoato de paromomicina
por 7 días por 7 días

35-50 mg/kg/día, en 3 días por 7-10 500-750 mg/día por 7-10 días
Metronidazol
días

Tinidazol >3 años, 50 mg /kg/día, una Tinidazol 2 g/día por 3 días; yodoquinol
dosis/día por 3 días; yodoquinol 20 600 mg/día por 20 días
Moderada Tinidazol seguido de iodoquinol
mg/kg/día repartido en 3 dosis/día
por 10 días

25-35 mg/kg/día repartido en 3 dosis, 25-35 mg/kg/día repartido en 3 dosis,


Furoato de paromomicina
por 7 días por 7 días

35-50 mg/kg/día, en 3 días 750 mg/día por 7-10 días


Metronidazol
por 7-10 días

>3 años, 50 mg /kg/día, una dosis/día 2 g/día por 3 días; yodoquinol


Severa intestinal
Tinidazol seguido de yodoquinol por 3 días; yodoquinol 20 mg/kg/día 600 mg/día por 20 días.
o extraintestinal
repartido en 3 dosis/día por 10 días

25-35 mg/kg/día repartido en 3 dosis, 25-35 mg/kg/día repartido en 3 dosis,


Furoato de paromomicina
por 7 días por 7 días
34 Parasitología médica • Capítulo 4

La diloxanida se prescribe sólo en portadores de quistes pleuropulmonares, pericarditis y amibiasis cerebral. En


durante 10 días. No hay efectos secundarios graves, sólo mo- caso de abscesos hepáticos amibianos (aha) el tratamien-
lestias digestivas leves como flatulencia. to es fundamentalmente médico. Su objetivo es tratar la
La dehidroemetina actúa sobre la síntesis de proteínas enfermedad invasiva hepática y erradicar la colonización
de las amibas. Se recomienda como vía de administración intestinal, lo que se consigue con la administración de me-
la intramuscular profunda, una inyección diaria de 1 mg/ tronidazol durante 7-10 días (750 mg/8 horas en adultos),
kg de peso por 10 días. Los efectos secundarios son dolor y tanto en la enfermedad invasiva intestinal como en el aha.
molestias musculares, y en raras ocasiones problemas car- Esto debe seguirse de la administración de un agente intra-
diacos, razón por la cual se recomienda seguimiento elec- luminal, por ejemplo, de paromomicina, durante otros siete
trocardiográfico. días. La mayoría de los aha responden a este tratamiento.
El metronidazol actúa sobre los ácidos nucleicos de las La punción-aspiración del absceso, con colocación o no de
amibas y se administra por 10 días. Su resultado se observa drenaje percutáneo, está indicada en las siguientes circuns-
desde el tercer día, pero para asegurar el éxito se sugiere un tancias: en casos de duda diagnóstica con el absceso piógeno;
régimen no menor de cinco días. Sólo en casos graves se indi- absceso amibiano sobreinfectado; lesiones grandes (diáme-
ca por vía intravenosa. A veces hay alteraciones gastrointes- tro superior a 5 cm), o localizadas en lóbulo izquierdo por
tinales y se experimentan reacciones desfavorables al ingerir su riesgo de ruptura; ausencia de respuesta al tratamiento
bebidas alcohólicas. Es carcinógeno en animales de experi- médico (tras 5-7 días) o riesgo de ruptura inminente. En
mentación y no debe suministrarse en pacientes embaraza- ausencia de estas situaciones, debería evitarse su punción
das, menos aún durante el primer trimestre del embarazo, ni con el fin de evitar sobreinfecciones del aha. El tratamiento
en mujeres lactantes. quirúrgico sólo es preciso cuando existen complicaciones,
¿Qué está indicado en las diferentes afecciones amibia- por ejemplo, ruptura o sobreinfección no controlada médi-
nas? Debido a que no hay un medicamento que actúe con to- camente.
tal eficacia contra una forma amebósica, a lo largo del tiempo
los médicos han recomendado combinaciones de ellos o bien Prevención
el empleo de uno en ciertas ocasiones:
Debe considerarse el comportamiento humano que inte-
1. Para portadores asintomáticos o pacientes con síntomas
rrumpa el ciclo de transmisión. Si el parásito entra por vía
intestinales como diarrea se recomienda como primera
bucal, debe evitarse que las amibas se encuentren en ali-
elección yodoquinol o quinfamida y si no están disponi-
mentos y bebidas, y el contacto con materia fecal (descon-
bles, diloxanida o nitazoxanida.
taminar los alimentos con cloro). Hay que hervir el agua
2. En casos de colitis amibiana aguda (disentería amibiana)
para la preparación de bebidas y lavar de manera adecuada
se administra metronidazol además de dehidroemetina;
los utensilios para comer (cubiertos, vasos, platos, etc.). No
otra alternativa es dehidroemetina junto con yodoquinol
debe defecarse al ras del suelo ni arrojar papel higiénico usa-
y nitazoxanida.
do dentro de botes; después de defecar, el papel higiénico
3. Para amebomas se prescribe dehidroemetina, y en su de-
usado se debe ir junto con el agua de la taza del baño, o de
fecto, metronidazol, nitazoxanida o yodoquinol.
lo contrario las moscas pueden trasladar los quistes de ami-
4. En abscesos hepáticos puede suministrarse metronidazol
bas a los alimentos. Las manos se limpian antes de comer y
para pequeños o únicos; este fármaco, además de la de-
después de ir al baño. No deben manipularse los alimentos
hidroemetina, se emplea en abscesos múltiples. En casos sin lavarse antes las manos y hay que evitar las prácticas
graves también está indicado por vía intravenosa. sexuales de tipo bucal-anal. La defecación debe realizarse al
5. En la amibiasis cutánea se prescribe metronidazol con la menos en letrinas.
adición de dehidroemetina; no está confirmado el resul-
tado con nitazoxanida.
Se recomienda repetir la observación en heces un mes
Epidemiología
después. Si el parásito reaparece, entonces se sugiere admi- Hay dos preguntas que tienen verdadera importancia: ¿cuán-
nistrar yodoquinol. En casos de disentería desaparecen las ta gente está infectada con amibas? y ¿por qué es esencial
úlceras intestinales. conocer esta enfermedad parasitaria?
La intervención quirúrgica se indica si hay compli- La prevalencia de una infección (frecuencia) se refiere
caciones graves: apendicitis amibiana, amebomas, colitis al porcentaje de personas infectadas en una comunidad y
amebiana fulminante, absceso hepático y complicaciones representa la magnitud de sujetos infectados en una pobla-
Amibiasis 35

ción, así como el grado de transmisión del parásito entre las se producen en casos de amibiasis invasiva; por cada cin-
personas de una región. En México, la cifra más frecuente co portadores asintomáticos hay uno con síntomas. De cada
de prevalencia de infección varía entre 10 y 20% cuando 1 000 infectados hay un caso al año de amibiasis hepática.
se realizan estudios coproparasitoscópicos; sin embargo, al Esto depende de las regiones, sobre todo por sus condiciones
utilizar pruebas serológicas las frecuencias varían alrededor higiénicas, educativas y económicas. Las zonas de alta po-
de 10%. Quizá lo anterior se explique porque la gente infec- breza no cuentan con baños ni agua, y en los lugares de bajo
tada arroja quistes en forma intermitente y la mayor parte nivel educativo la gente desconoce cómo puede infectarse y
de los infectados es portador asintomático. Los anticuerpos es frecuente que su higiene sea deficiente.

Preguntas para reflexionar Bibliografía

1. ¿Cómo se evalúa la virulencia de una cepa? Arya R., Mehra A., Bhattacharya S. et al. Biosynthesis of
2. ¿Por qué no desaparece la amibiasis? Entamoeba histolytica proteophosphoglican in vitro. Mol
3. ¿Por qué no hay vacunas y buenos fármacos contra la Biochem Parasitol 26(1):1-8. 2003.
amibiasis?
Atías A. Parasitología médica. Chile: Ed. Mediterráneo, 1999.
Beaver P.C., Jung R.C., Cupp E.W. Parasitología clínica. 2a.
ed. México: Editorial Salvat, 1990.
Respuestas a las preguntas
de la evaluación inicial Dagci H., Ustun S., Taner M.S. et al. Protozoon infections
and intestinal permeability. Acta Trop 81(1):1-5. 2002.
1. Porque utiliza mecanismos patogénicos como la produc-
Gatti S., Petithorg J.C., Ardoin F. et al. Asymptoma-
ción de colagenasa y proteínas formadoras de canales
iónicos.
tic amoebic infection: Entamoeba histolytica or Enta-
2. Porque en ausencia de síntomas no se prescribe trata- moeba dispar? That is the question. Bull Soc Pathol Exot
miento y no se eliminan los parásitos, los cuales se arro- 94(4):304-307. 2001.
jan junto con las heces y se contamina el ambiente. Heckendorn F., N’Gorn E.K., Felger I. et al. Species-spe-
3. La colagenasa es una enzima que destruye la coláge-
cific field testing of Entamoeba spp. in an area of high en-
na, una molécula que constituye el tejido intercelular
del tejido conjuntivo. Los trofozoítos se desplazan por
demicity. Trans R Soc Trop Med Hyg 96(5):521-528. 2002.
la submucosa, ya que allí hay tejido conjuntivo y causan Martínez Palomo A. Amebosis. México: Ed. Panamericana,
alteraciones del funcionamiento del intestino grueso que 1989.
conducen a la diarrea.
4. Empleo de dehidroemetina. Nok A.J., Rivera W. Characterization of sialidase from Enta-
5. Porque en seropositivos se detectan anticuerpos contra el moeba histolytica and possible pathogenic role in amebosis. Para-
parásito, los cuales se sintetizan sólo en casos de amibia- sitol Res 89(4):302-307. 2003.
sis invasiva. Hay menos casos de amibiasis invasiva que Sánchez-Pobre P., Sáénz-López S., Salto E. et al. Absceso
intestinal, la cual se diagnostica mediante estudios copro-
hepático amebiano sobreinfectado sin antecedentes epide-
parasitoscópicos.
miológicos. Rev Esp Enferm Dig 96(11):796-800. 2004.
Willhoeft U., Buss H., Tannich E. The abundant polya-
denylated transcript 2 dna sequence of the pathogenic
protozoan Entamoeba histolytica represents a nonauto-
nomous non-long-terminal-repeat retrotransposon-like
element which is absent in the closely related nonpathoge-
nic species Entamoeba dispar. Infect Immun 70(2):6798-
6804. 2002.
CAPÍTULO Amibas de vida libre
patógenas y oportunistas
5
Patricia Bonilla Lemus
Elizabeth Ramírez Flores

Contenido
• Introducción • Diagnóstico
• Reseña histórica • Tratamiento
• Características generales del parásito • Amibas de vida libre como vectores de otros
• Mecanismos de infección patógenos
• Manifestaciones clínicas • Aspectos ecológicos
• Respuesta del huésped a la infección • Prevención
• Mecanismos del parásito para contrarrestar la • Epidemiología
respuesta del huésped • Caso clínico

la naturaleza y pueden encontrarse en suelo, agua y aire. Las


Preguntas de evaluación inicial
infecciones causadas por estas amibas comprometen cerebro,
1. ¿Por qué se denomina anfizoica a este grupo de amibas? ojos, pulmones y piel. Aunque el número de infecciones
2. ¿Tiene importancia la contaminación del agua en la proli- causadas por estos microorganismos es bajo en comparación
feración de las amibas de vida libre (AVL)?
con otros protozoos parásitos, la dificultad en su diagnóstico,
3. ¿Cuáles son los principales factores de riesgo de la que-
ratitis amibiana? el reto de encontrar tratamientos antimicrobianos eficaces
4. ¿Qué diferencia importante existe entre la encefalitis cau- y la morbilidad, así como la relativamente alta mortalidad
sada por Sappinia pedata y la causada por Acanthamoe- asociada a las infecciones cerebrales, han sido causa de pre-
ba spp. y Balamuthia mandrillaris? ocupación para los parasitólogos y el personal clínico y de
5. ¿Qué factores han favorecido la incidencia de las infec-
ciones causadas por amibas de vida libre en la población
laboratorio. Además, se ha demostrado que Acanthamoeba y
humana? Naegleria, entre otras avl, pueden actuar como vectores
y reservorios de virus, hongos y bacterias. Estos microorga-
nismos sobreviven e incluso algunos se multiplican dentro
Introducción de las amibas. De esta manera, las amibas proporcionan un
mecanismo de protección para evadir ambientes hostiles y
Las amibas de vida libre (avl) son protozoos, eucariontes, ae- un medio para transportarse y colonizar nuevos hábitat apro-
robios. También se les conoce como amibas anfizoicas porque vechando los mecanismos de dispersión de las avl.
tienen la dualidad tanto de vivir libremente en la naturaleza,
como la capacidad de inducir enfermedades en el ser humano
y en los animales (Page, 1988). Entre los distintos géneros Reseña histórica
de amibas de vida libre, sólo los siguientes cuatro están aso- A fin de analizar el estado actual de conocimiento sobre las
ciados con enfermedades humanas: Naegleria, Acanthamoeba, avl desde una perspectiva histórica, la evolución del conoci-
Balamuthia y Sappinia; dichas amibas están diseminadas en miento se puede dividir en periodos. El establecimiento de
37
38 Parasitología médica • Capítulo 5

estos periodos es arbitrario y sólo tiene como fin organizar el cación taxonómica moderna de las avl. En 1956, mientras
conocimiento que se tiene sobre las avl, principalmente las hacían investigaciones de virología, Jahnes y colaboradores
patógenas. notaron una contaminación espontánea por amibas en culti-
vos de tejido que causaba efecto citopático. En 1959, Chi y
Periodo de 1755 a 1849 su equipo reportaron fagocitosis selectiva de eritrocitos por
avl en cultivos celulares; notando que la amiba identificada,
En 1755 Rösel von Rosenhof registró la primera observación como Acanthamoeba castellanii producía placas similares a las
de avl, llamándola “pequeña proteus”, que después fue clasi- producidas por virus.
ficada como Chaos proteus por Linnaeus. En 1883, Ehrenberg Un suceso clave tuvo lugar en 1958, en los laboratorios
creó el género Amoeba y en 1841 Dujardin describió por pri- Eli Lilly en Indianápolis, donde se empleaban cultivos celu-
mera vez a las amibas limax. lares en pruebas de seguridad de la vacuna de la poliomielitis.
Culbertson observó la aparición de zonas de lisis en los culti-
Periodo de 1850 a 1899 vos y los atribuyó al virus; pero los ratones y monos inoculados
como parte de la prueba, murieron de manera inesperada.
Leidy (1879) en Pensilvania, Estados Unidos, y Penard
Los estudios histopatológicos revelaron que una amiba era la
(1890) en Francia hicieron descripciones más precisas de
causante de la muerte de los animales; más tarde se determinó
las amibas limax. En 1892, Fexner reportó un absceso en la
que la amiba pertenecía al género Acanthamoeba.
mandíbula de un individuo probablemente causado por avl.
Descubrir que las amibas después de una instilación in-
En 1899, Schardinger describió una amiba de vida libre con
tranasal en ratón podían invadir la mucosa olfatoria, migrar
flagelos que nombró Amoeba gruberi.
al cerebro y producir una meningoencefalitis fatal fue una
revelación impactante. Culbertson reportó los hallazgos y
Periodo de 1900 a 1949 sugirió que en vista de la exposición frecuente del humano
En 1900, Dangeard en Francia dijo que “nada es más difícil a estas amibas, sería necesario considerar posibles enferme-
que clasificar a una amiba”. En 1905, Vahlkampf describió dades en las personas, así como su neuropatogenicidad, con
amibas limax y el término se utilizó para todas las amibas lo cual predijo la posibilidad de ocurrencia de infecciones en
pequeñas que mostraban un movimiento semejante al de una humanos por avl, lo que fue demostrado unos cuantos años
babosa. En 1909, Näegler describió a Amoeba hartmanni. En después. Dicho descubrimiento dio la clave para el reconoci-
1911, Alexeieff estableció los géneros Hartmannella y Nae- miento de casos de encefalitis humana.
gleria. En 1965, Fowler y Carter en Australia reportaron los pri-
Para 1912, Alexeieff propuso el nombre genérico de meros cuatro casos de meningitis humana causados por avl,
Naegleria aplicado a las amibas que tienen la habilidad las cuales fueron identificadas post mortem como Naegleria fowle-
de transformarse a una fase flagelada temporal y que cuentan ri. Los tres primeros casos en Estados Unidos fueron reporta-
una división celular caracterizada por promitosis; la especie dos en Florida de 1965 a 1966 por Butt. En dos de ellos ob-
tipo fue Amoeba gruberi. El mismo año, Chatton y LaLung- servaron amibas en el líquido cefalorraquídeo, pero no les fue
Bonnaire describieron el género Vahlkampfia para las amibas posible cultivarlas. Del tercero se aisló una amiba identificada
limax que no presentaban fase flagelada. como una especie de Naegleria. Butt nombró a la enfermedad
Por 1930 el interés en las amibas limax empezó a decaer, como meningoencefalitis amibiana primaria (meap).
pero un hallazgo interesante reavivó el interés. Castellani en En 1966, en Australia, nuevamente Carter observó en el
Oxford, Inglaterra, reportó la presencia de avl en placas líquido cefalorraquídeo de un paciente amibas pertenecien-
de agar previamente inoculadas con levaduras y bacterias. tes a N. fowleri y, después de la muerte del paciente, obtuvo
Douglas la clasificó como Hartmannella castellanii y en 1931, desarrollo amibiano en cultivos inoculados con su tejido ce-
Volkonsky la diferenció de otras amibas y la nombró Acan- rebral y fluidos corporales. El análisis de los cultivos produjo
thamoeba castellanii. Este hallazgo fue trascendental, porque un hallazgo importante, pues este investigador observó que
el método de cultivo en placas de agar con bacteria fue adop- la amiba se transformaba temporalmente en un organismo
tado por los investigadores de estas amibas. flagelado. Esto estableció que las especies de Naegleria eran
ameboflageladas, además de que el logro de cultivar N. fowle-
ri fue crucial para identificar a estos organismos.
Periodo de 1950 a 1984 En 1967 Nelson y Jones, en Virginia, Estados Unidos,
Este lapso fue el más productivo en la historia de las avl. realizaron el primer aislamiento e identificación de Naegleria
Singh, en 1950 y 1952, estableció las bases para la clasifi- a partir de líquido cefalorraquídeo y tejido cerebral, antes
Amibas de vida libre patógenas y oportunistas 39

de la muerte del paciente. En 1968 fueron reportados ocho dad producida por Acanthamoeba como encefalitis amibiana
casos de meningoencefalitis en Richmond, Virginia, siete de granulomatosa (eag) para diferenciarla de la infección cau-
los cuales ocurrieron en los veranos de 1951 y 1952. Dos sada por Naegleria (meap) y sugirió el carácter oportunista
Santos realizó un estudio retrospectivo de los archivos del de Acanthamoeba spp.
Departamento de Patología del Colegio Médico de Virginia
desde 1920, que dio como resultado otros cuatro casos más
y determinó que el primero había ocurrido en 1937, con lo
Periodo de 1985 a la fecha
cual se demostró que la meap no era una enfermedad nueva, En 1990, en Estados Unidos, Visvesvara y colaboradores re-
tan sólo no se le había identificado hasta entonces. portaron el primer aislamiento de Balamuthia mandrillaris de
En 1968 se hizo el primer reporte en Europa; fue un es- un mandril y en 1991 el primer caso de infección en huma-
pectacular hallazgo realizado por erva en Checoeslovaquia, nos. La mayor parte de los casos en humanos se ha registrado
quien reportó 16 casos de meap que fueron diagnosticados en en el continente americano, algunos en Europa y en África
forma retrospectiva por sus características histopatológicas, sólo en primates.
clínicas y epidemiológicas. Sappinia diploidea, otra avl que por lo normal vive en
Es interesante señalar que se reportaron casos causados suelo contaminado por heces de ganado vacuno, fue iden-
por avl antes de reconocer su capacidad patógena. Derrick, tificada por Gelman y colegas en 2001 como causante de
en 1948, reportó un caso atribuido a Iodamoeba bütschlii y que encefalitis de un individuo joven. El paciente fue tratado con
después fue identificada como N. fowleri. Kernohan y cole- varios fármacos y sobrevivió.
gas, en 1960, reportaron un caso en Arizona, caracterizado
En 2009 Qvarnstrom y colegas reclasificaron a la espe-
por inflamación granulomatosa de tejido del sistema nervio-
cie como Sappinia pedata. El reconocimiento de Sappinia en
so central; originalmente se le atribuyó a Iodamoeba bütschlii,
la etiología de la encefalitis amibiana sugiere que hay otros
pero lo más probable es que haya sido derivado de Acantha-
agentes amibianos de enfermedad que aún no han sido iden-
moeba. De 1965 a 1966, Patras y Andújar en Texas reportaron
otro caso que se le atribuyó a Acanthamoeba pero después fue tificados. Lo anterior puede ser facilitado por el desarrollo de
identificado como N. fowleri. técnicas de identificación modernas como las de microscopia
En 1968, los reportes de aislamientos exitosos de N. y biología molecular, entre otras.
fowleri tuvieron un efecto estimulante en la investigación en
todo el mundo; se incrementaron los esfuerzos con propósitos Características generales
diagnósticos y epidemiológicos, además de que empezaron
a reflejarse en una terapia efectiva. Entonces, la atención se
del parásito
enfocó a las fuentes ambientales y las circunstancias en las
que ocurrían las infecciones. Naegleria fowleri
Las únicas especies involucradas en los primeros casos en Es la única especie de este género que se ha aislado de casos
humanos fueron del género Naegleria; aparentemente Acan-
de meningoencefalitis amibiana primaria (meap) en huma-
thamoeba no había estado involucrada en esos casos, de modo
nos. Tiene tres estadios en su ciclo de vida: trofozoíto o forma
que los esfuerzos se enfocaron a la búsqueda de casos que
vegetativa, flagelado y quiste (figura 5-1). El trofozoíto mide
evidenciaran la participación de Acanthamoeba. Kenney en
entre 10 y 25 μm y su locomoción se debe a seudópodos
1971, Robert y Rorke en 1973 y Stamm en 1972 reportaron
redondeados llamados lobópodos. El citoplasma es granular
los primeros casos en donde se identificó claramente a Acan-
thamoeba como responsable de la enfermedad y empezaron a con mitocondrias, lisosomas y vacuolas; el núcleo se localiza
surgir las diferencias clínico-patológicas entre los dos tipos en la parte central con gránulos de cromatina y un nucléolo
de infecciones. También se encontraron infecciones oculares esférico (figura 5-2A). Se reproduce por fisión nuclear y el
y de la piel causadas por Acanthamoeba. núcleo se divide por promitosis, proceso en el cual el nucléo-
En 1972, Carter presentó su memorable artículo y uno lo y la membrana nuclear persisten durante la división celu-
de los más interesantes presentados en la Real Sociedad de lar. El flagelado tiene forma de pera y es biflagelado, aunque
Medicina Tropical e Higiene de Londres, donde señaló que puede formar hasta 10 flagelos; en esta forma no se alimenta
las avl eran un claro ejemplo de cómo la brecha entre los y es reversible a la etapa de trofozoíto. Los quistes son estruc-
protozoos parásitos y de vida libre se puede acortar y estos turas de resistencia que se forman en respuesta a condiciones
últimos causar enfermedades en el humano. En 1980, Mar- ambientales adversas, son esféricos (7 a 15 μm de diámetro)
tínez (Pittsburgh, Estados Unidos) denominó a la enferme- y poseen una doble pared con uno o dos poros (figura 5-2B).
40 Parasitología médica • Capítulo 5

Acanthamoeba spp. A B
Con base en criterios morfológicos se han identificado más
de 24 especies pertenecientes al género Acanthamoeba y sólo
algunas son patógenas. Las más comúnmente aisladas son A.
castellanii y A. polyphaga. En su ciclo de vida presenta dos es-
tadios: trofozoíto y quiste (figura 5-3). El trofozoíto mide en-
tre 12 y 56 μm y se caracteriza por la presencia de seudópo-
dos finos denominados acantópodos. El citoplasma contiene
múltiples mitocondrias, lisosomas, ribosomas y vacuolas; el
núcleo vesicular tiene un nucléolo esférico localizado central-
mente (figura 5-4A, B). Los trofozoítos se dividen por fisión 10 μm 10 μm
binaria y la división del núcleo se realiza por mitosis, proceso
durante el cual el núcleo y la membrana nuclear desaparecen. Figura 5-2. Naegleria sp. A) Trofozoíto. B) Quiste; contraste de fases.
El quiste mide entre 8 y 29 μm de diámetro; presenta
una pared doble, entre cuyos componentes se encuentra celu- culo (figura 5-4C, D). Los quistes se forman como reacción
losa. La pared externa o ectoquiste es ondulada o arrugada, en a condiciones ambientales adversas, como desecación, falta
tanto que la pared interna o endoquiste puede ser estrellada, de alimento, presencia de agentes químicos (desinfectantes
poligonal, esférica u oval. Los poros se forman en la unión y antimicrobianos) y agentes físicos (calor, congelamiento y
del ectoquiste y el endoquiste y están cubiertos por un opér- radiación ultravioleta).

Balamuthia mandrillaris
El ciclo de vida comprende una fase de trofozoíto y una de
quiste (figura 5-5). El trofozoíto de B. mandrillaris mide en-
tre 12 y 60 μm, pero pueden alcanzar hasta 60 y 120 μm de
Trofozoíto largo. Tiene forma irregular, algunas veces presenta la forma
limax y en otras adopta un aspecto de araña con numerosos
seudópodos, sin ramificaciones. El microorganismo es uninu-
cleado con un núcleo vesicular; a menudo puede tener más
de un nucléolo. En cultivo celular también se han observado
trofozoítos multinucleados. Otros organelos presentes son la
mitocondria y el retículo endoplasmático, que contiene ri-
bosomas. El trofozoíto se reproduce asexualmente por fisión
Forma binaria y la división del núcleo se realiza por mitosis.
Quiste
flagelada El quiste mide entre 13 y 30 μm y carece de poros; en el
plano ultraestructural se reconoce una triple constitución, es
decir, una fina capa externa irregular o ectoquiste, una capa
interna densa y gruesa o endoquiste y una capa fibrilar amor-
fa media llamada mesoquiste. Durante la mitosis, el nucléo-
lo y la membrana nuclear permanecen intactos al principio,
pero desaparecen a medida que la mitosis continúa.

Neuroepitelio
olfatorio Sappinia pedata
La amiba originalmente clasificada como Sappinia diploidea,
MEAP en 2009 fue reclasificada como Sappinia pedata. En el úni-
co caso descrito de infección cerebral por S. pedata, se ob-
Figura 5-1. Ciclo de vida de Naegleria fowleri en casos de meningo-
encefalitis amibiana primaria. Esquema realizado por la bióloga Ma. servó que el manejo de ganado fue un factor importante en
del Rocío Ibarra Montes. la transmisión de la amiba; por lo que el ciclo de vida del
Amibas de vida libre patógenas y oportunistas 41

Quiste
Trofozoíto

EAG EAG
subaguda QA subaguda
o crónica o crónica
Neuroepitelio Neumonitis Neuroepitelio Neumonitis
olfatorio amibiana olfatorio amibiana
Úlceras en piel Úlceras en piel
Dermatitis amibiana Dermatitis amibiana

Vía sanguínea Vía sanguínea


EAG EAG

Figura 5-3. Ciclo de vida de Acanthamoeba spp. Esquema realizado Figura 5-5. Ciclo de vida de Balamuthia mandrillaris. Esquema
por la bióloga Ma. del Rocío Ibarra Montes. Abreviaturas: EAG, ence- realizado por la bióloga María del Rocío Ibarra Montes. Abreviaturas:
falitis amibiana granulomatosa; QA, queratitis amibiana. EAG, encefalitis amibiana granulomatosa.

parásito tal vez implique un huésped animal intermediario


(figura 5-6), a diferencia de las otras amibas de vida libre pa-
tógenas que no dependen de un huésped para la transmisión
y distribución de la enfermedad.
Su ciclo de vida comprende dos estadios: el trofozoíto y el
quiste; el primero mide entre 40 y 60 μm, sus seudópodos son
indistintos y presenta una película que se ondula cuando la amiba
se mueve. Una característica distintiva del microorganismo es la
presencia de dos núcleos colocados muy juntos uno respecto del Quiste
otro. En el citoplasma se observa una gran vacuola citoplasmá- Trofozoíto
tica, mitocondrias con característicos patrones tubulares y una
red parecida al aparato de Golgi. La microscopia de transmisión
¿Huésped
A C animal?
¿?
(heces)

Neuroepitelio
olfatorio

10 μm 10 μm
EA

Figura 5-4. Acanthamoeba sp. A, B) Trofozoíto. C, D) Quistes. Fo- Figura 5-6. Ciclo de vida de Sappinia pedata. Esquema realizado
tografía B tomada por Dafne Azar A. Vea wwwmhhe.com/medicina/ por la bióloga María del Rocío Ibarra Montes. Abreviaturas: EA, ence-
becerril_parasitología4e falitis amibiana.
42 Parasitología médica • Capítulo 5

electrónica muestra que los puntos de unión entre los dos núcleos El cuadro 5-1 muestra las características comparativas
comprimidos tienen hileras de filamentos cortos perpendiculares de las patologías causadas por las amibas de vida libre pa-
a las membranas nucleares aplanadas. Los trofozoítos se dividen tógenas.
por fisión binaria y la división del núcleo se realiza por mitosis.
Los quistes miden de 13 a 37 μm y se observan dos núcleos; Mecanismos de infección
pueden sobrevivir a los jugos gástricos durante su paso por el
estómago, así como a las emulsificantes propiedades de la bilis
del hígado; por tal razón, su presencia en las heces no es indi- Meningoencefalitis amibiana primaria
cativa de infección. Una vez en las heces que tienen abundancia Naegleria fowleri causa una infección aguda, necrotizante, he-
de bacterias las amibas pueden exquistar. Debido a su constante morrágica y, por lo general, de consecuencias fatales que afec-
presencia en las heces se le ha caracterizado como coprozoica. ta al sistema nervioso central, llamada meningoencefalitis

Cuadro 5-1. Características comparativas de las patologías causadas por las amibas de vida libre.

Acanthamoeba spp. Balamuthia Acanthamoeba spp.


Naegleria fowleri Sappinia pedata
(infecciones sistémicas) mandrillaris (infección del ojo)

Meningoencefalitis Encefalitis amibiana Encefalitis amibiana Encefalitis amibiana Queratitis amibiana


amibiana primaria granulomatosa (EAG); granulomatosa (EA) sin granulomas, (QA)
Enfermedad (MEAP) infecciones cutáneas y (EAG), infecciones posiblemente
nasofaríngeas cutáneas y infecciones
nasofaríngeas nasofaríngeas

Actividades en Inmunocompromiso, Inmunocompromiso, Insuficiente Uso de lentes de


agua termal o inmunosupresión inmunosupresión, información contacto suaves,
Factores de
contaminada lesiones en la piel abrasiones
riesgo
térmicamente contaminadas con corneales, exposición
suelo a agua contaminada

Examen de LCR Biopsia de lesiones, Biopsia de lesiones, Biopsia de lesiones, Raspado de la córnea
en búsqueda de neuroimagen, tinciones: neuroimagen, neuroimagen y cultivo, tinciones:
trofozoítos, tinción H&E, IFA, IIF de tejido tinciones: H&E, IFA, IIF blanco de calcoflúor,
Diagnóstico con H&E en vivo y de tejido Giemsa, azul de
tejido post mortem Evans. Técnica de
PCR. Microscopía
confocal

Días Semanas a meses Semanas a meses, No hay datos, Días


Periodo de
incluso dos años pero similar a
incubación
Acanthamoeba

Dolor de cabeza Dolor de cabeza, fiebre, Dolor de cabeza, Dolor de cabeza, Dolor intenso,
intenso, fiebre, náusea, vómito, cambios fiebre, convulsiones, fiebre, vómito, lagrimeo, sensación
náusea, vómito, de personalidad, hemiparesia, nivel cambios de de cuerpo
Síntomas rigidez de cuello, hemiparesia, letargo, deprimido de la personalidad, extraño, fotofobia,
cambios de afasia, ataxia conciencia, cambios náusea, fotofobia, visión borrosa,
personalidad de personalidad, visión borrosa enrojecimiento
coma

Anfotericina Combinación de Fluconazol, Azitromicina, PHMB, junto con


B intratecal, compuestos del grupo azitromicina, pentamidina, propamidina
miconazol, de los azoles, isotianato flucitocina, itraconazol, o hexamidina,
rifampicina de pentamidina, isotionato de flucitocina isotianato de
Tratamiento
flucitocina, azitromicina, propamidina, propamidina
sulfadiazina sulfadiazina, (Brolene)
gluconato de
clorohexidina

Pronóstico de Pobre Pobre Pobre Insuficiente Excelente


recuperación información

Abreviaturas: H&E, hematoxilina y eosina; IFA, anticuerpos inmunofluorescentes; IIF, inmunofluorescencia indirecta; PHMB, polihexametilén biguanida.
Amibas de vida libre patógenas y oportunistas 43

amibiana primaria (meap) o naegleriosis. El curso completo tinucleadas formando granulomas y abundantes trofozoítos
de la infección puede durar de tres a 10 días. y quistes alrededor de los vasos sanguíneos y en el tejido
La puerta de entrada de los trofozoítos, que son las for- cerebral necrótico.
mas infectantes, es mediante la aspiración de agua contami- La información sobre los mecanismos de patogenicidad
nada a través de las fosas nasales; los trofozoítos lisan e in- de B. mandrillaris es muy escasa; sin embargo, se ha reporta-
gieren eritrocitos y otras células mientras invaden la mucosa do que la actividad de metaloproteasas puede desempeñar un
olfatoria, migran a través del nervio olfatorio, atraviesan la papel importante en la degradación de la matriz extracelular
placa cribiforme, alcanzan el neuroepitelio olfatorio, avan- y así en la patología del snc.
zan hacia el espacio subaracnoideo y llegan al cerebro (figura El único caso de encefalitis causado por S. pedata e in-
5-1). En el cerebro, las amibas provocan edema y necrosis formado hasta el momento, ocurrió en un adulto masculino
hemorrágica por producción de hidrolasas lisosomales, pro- aparentemente sano, sin inmunosupresión; la única lesión
teasas, neuraminidasas, lipasas, elastasa, proteinasas y fosfo- que se apreció, en forma de tumor cerebral, se eliminó por
lipasas que degradan la mielina y provocan que la persona medios quirúrgicos. El examen histopatológico del tejido
invadida sufra daños graves e irreversibles. extraído mostró edema y necrosis hemorrágica con trofozoí-
Mediante fagocitosis se alimentan con voracidad y tos, pero no quistes, y no se observó evidencia de reacción
junto con la liberación de sustancias citolíticas provocan granulomatosa, por lo que se le ha denominado encefalitis
destrucción celular, en especial del tejido nervioso. Se amibiana (ea). Se cree que la puerta de entrada fue el tracto
ha descrito que durante la fagocitosis se forman unas estruc- respiratorio y que puede ser menos virulenta que las otras
turas fagocíticas llamadas amebostomas, que son capaces de amibas patógenas debido a que el paciente se recuperó por
“morder” e ingerir a las células del huésped. También se completo.
ha sugerido que N. fowleri produce unas proteínas forma-
doras de poros que causan lisis celular y otras sustancias Queratitis amibiana
citotóxicas. Lo anterior, así como su habilidad para evadir el
sistema inmune del huésped y migrar rápidamente puede La queratitis amibiana (qa) es una inflamación crónica de la
contribuir a su patogenicidad. córnea causada por varias especies del género Acanthamoeba
y aunque aún no se conocen con precisión los mecanismos
de patogenicidad involucrados, se ha descrito que su capa-
Encefalitis amibiana cidad de adhesión desempeña una función importante en
La encefalitis amibiana es una enfermedad oportunista cau- la patogenicidad. Las amibas introducidas en el ojo, se ad-
sada por varias especies de Acanthamoeba, B. mandrillaris y S. hieren a la superficie de la córnea, se infiltran en el estroma
pedata, con la diferencia de que en la infección causada por las por rompimiento del epitelio por un traumatismo menor
dos primeras se observa respuesta granulomatosa del huésped o abrasión del epitelio protector y, mediante actividad en-
a la presencia de la amiba, por lo que se le denomina encefali- zimática y fagocitosis, causan la necrosis del tejido. En ge-
tis amibiana granulomatosa (eag) o acantamebosis. neral, afecta un solo ojo y a menudo se confunde con una
Las vías de entrada de quistes y trofozoítos son: ulce- queratitis viral o micótica. Se ha demostrado que trofozoí-
raciones en la piel, tracto respiratorio bajo y neuroepite- tos del género producen diferentes enzimas como proteasas
lio olfativo (figura 5-2). A partir del punto de entrada, las y proteinasas, que pueden tener una función importante en
amibas se dispersan por vía hematógena hasta el snc, y las la qa.
áreas afectadas son el cerebro, el cerebelo y la base del cere- Una vez establecidas las amibas en el estroma corneal,
bro. Los mecanismos de la infección causada por Acantha- son difíciles de erradicar; puede haber recurrencia de la in-
moeba han sido poco estudiados; no obstante, se sabe que fección cuando el tratamiento antimicrobiano se reduce o se
liberan enzimas que producen necrosis del tejido cerebral suspende. Los pacientes pueden requerir de uno o más tras-
por acción enzimática inducida por hidrolasas lisosomales plantes corneales para reparar el daño, y en el peor de los
y fosfolipasas que pueden degradar los fosfolípidos de las casos se tiene que realizar la enucleación.
vainas de mielina, así como la liberación de otras enzimas Los lentes de contacto también pueden causar traumatis-
como proteasas, proteinasas y elastasas, cuya función no se mo mecánico o hipóxico que permite la invasión y destruc-
conoce muy bien. También se ha descrito la lisis de las cé- ción del estroma por la actividad fagocítica de las amibas.
lulas huésped por fagocitosis mediante amebostomas. En También la secreción lagrimal con actividad antimicrobiana
tejido post mortem se observa edema cerebral con necrosis reducida y contaminación bacteriana secundaria, son factores
hemorrágica, leucocitos polimorfonucleares y células mul- que pueden contribuir en el establecimiento de la qa.
44 Parasitología médica • Capítulo 5

Infecciones nasofaríngeas recurrente de la córnea y lesión de la córnea refractaria a an-


tivirales, antibacterianos y antimicóticos.
y cutáneas
Son provocadas por Acanthamoeba y Balamuthia y se desarro-
Respuesta del huésped
llan cuando las amibas, ya sea en forma de trofozoíto o de
quiste, se introducen por una lesión en la piel o por las fosas a la infección
nasales. Las amibas pueden permanecer localizadas pero en El mecanismo más importante en la respuesta inmunoló-
general se diseminan por vía hematógena a otras partes del gica contra las amibas patógenas es la activación de las cé-
cuerpo, en particular al snc, y no hay delimitación definida lulas capaces de eliminarlas por fagocitosis, en especial los
entre estas infecciones y la encefalitis. neutrófilos y macrófagos; otros caminos son la producción
de enzimas que facilitan la destrucción de las amibas junto
Manifestaciones clínicas con la presencia de anticuerpos anti-Acanthamoeba en suero
humano normal.
Naegleria y Acanthamoeba están ampliamente disemina-
Meningoencefalitis amibiana
das en la naturaleza, lo cual representa una continua fuen-
primaria te de estimulación antigénica. Esto explica la presencia de
El curso clínico de la enfermedad es rápido, el periodo de anticuerpos en suero humano contra tales géneros, sean pa-
incubación es de tres a cinco días y la muerte ocurre en un tógenos o no. La amplia dispersión de anticuerpos contra
periodo entre siete y 10 días. La enfermedad se caracteriza amibas de vida libre refleja su distribución global, aunque
por intenso dolor bifrontal o bitemporal de la cabeza, con también puede representar la presencia de anticuerpos de re-
fiebre, náuseas, vómito, rigidez de nuca, coma, convulsiones acción cruzada a antígenos indeterminados; por ejemplo, se
y al final la muerte. ha demostrado que existe reacción cruzada con antígenos de
Entamoeba histolytica. En la infección causada por N. fowleri,
Encefalitis amibiana el desenlace es tan rápido que no es posible conocer con pre-
cisión la función de los anticuerpos en la protección contra la
Desde el punto de vista clínico, la enfermedad es prolon- meap. Sin embargo, debido a que N. fowleri invade la mucosa
gada, crónica e insidiosa, que puede durar semanas o meses nasal, se puede sugerir que la IgA secretora desempeña una
en el caso de Acanthamoeba, e incluso años en el caso de B. función en la protección.
mandrillaris; el periodo de incubación se desconoce, aunque Debido a que las infecciones por Acanthamoeba son cró-
tal vez sea mayor de 10 días. Las manifestaciones clínicas se nicas, hay tiempo para que se desarrolle una respuesta de
caracterizan por dolor de cabeza, cambios de personalidad, anticuerpos; sin embargo, no se ha demostrado que sean pro-
fiebre leve, convulsiones, hemiparesia, nivel deprimido de la
tectores contra estas amibas. No obstante, se ha sugerido que
conciencia y coma. Los síntomas y signos son, en esencia,
tal vez interfieran con la adherencia, la actividad de fagocito-
los de una encefalopatía focal o local con notoria irritación
sis o la migración de las amibas y neutralicen los factores de
meníngea y encefalitis. El curso clínico puede confundirse
virulencia que producen. En la eag, las amibas aprovechan
con leptomeningitis bacteriana, meningitis tuberculosa o
una depresión inmunitaria del individuo: baja producción
encefalitis viral.
de anticuerpos, niveles atenuados del complemento, escasa
Las manifestaciones clínicas que se presentaron en el
producción de leucocitos, inhibición de la función de leuco-
único caso informado de S. pedata fueron muy semejantes a
citos y producción alterada de linfocinas. En pacientes con
las de Acanthamoeba y Balamuthia, pero además hubo dolor
de cabeza frontal, como en el caso de la infección causada por sida u otro tipo de inmunodeficiencia o inmunocompromi-
Naegleria. so, la reacción inflamatoria crónica es mínima y sin células
gigantes multinucleadas. La infección también puede ocurrir
en sitios donde los niveles de anticuerpos y complemento
Queratitis amibiana son bajos, como en el ojo. El suero humano normal es capaz
Se distingue por inflamación de la córnea, sensación de cuer- de lisar a N. fowleri y A. culbertsoni mediante activación de
po extraño, intenso dolor ocular, lagrimeo, enrojecimiento, la vía alterna del complemento, aunque en contraste, cepas
fotofobia, visión borrosa y congestión de la conjuntiva. Exis- altamente virulentas de N. fowleri son resistentes a la lisis
te un anillo de infiltrado estromal, rompimiento epitelial por el complemento.
Amibas de vida libre patógenas y oportunistas 45

Mecanismos del parásito res. Los niveles de glucosa por lo general son bajos y el con-
tenido de proteínas casi siempre es alto. La causa de muerte
para contrarrestar la respuesta suele ocurrir debido a presión intracraneal aumentada con
del huésped herniación cerebral que lleva a un paro cardiopulmonar y
El conocimiento de los mecanismos que permiten a las avl edema pulmonar.
patógenas contrarrestar la reacción inmunitaria aún es muy
escaso. Se ha demostrado la habilidad de N. fowleri para cap- Encefalitis amibiana
turar y degradar anticuerpos de su superficie, lo que permite
al organismo patógeno evadir las defensas inmunitarias del El diagnóstico clínico es difícil, de hecho, la mayor parte de
huésped. El suero humano normal es capaz de lisar a N. fowleri los casos se reconoce post mortem. El cuadro clínico pue-
y A. culbertsoni por activación de la vía alterna del complemen- de confundirse con tuberculosis cerebral, encefalitis viral,
to, aunque también se ha demostrado que cepas virulentas de cáncer y absceso cerebral; sin embargo, los antecedentes del
N. fowleri y Acanthamoeba spp. son resistentes a la lisis por el paciente, un cuadro respiratorio bajo, la falta de respues-
complemento. Tal resistencia se ha asociado a la presencia de ta al tratamiento administrado y algunas veces la presencia
glucoproteínas en la superficie de cepas patógenas. de nódulos cutáneos deben hacer pensar en acantamebosis.
En el análisis patológico se observan lesiones hemorrágicas,
necróticas, multifocales y reacción granulomatosa. Los es-
Diagnóstico tudios radiológicos y la tomografía axial por computadora
muestran múltiples zonas con densidad disminuida en cor-
Meningoencefalitis amibiana teza y parénquima, que corresponden a infartos cerebrales
y embolias sépticas. La observación de trofozoítos del lcr
primaria o trofozoítos y quistes del tejido cerebral mediante mi-
Debido a que la infección por N. fowleri a menudo es fatal en un croscopia de luz confirma el diagnóstico. Los patógenos de
periodo promedio de 10 días, hay muy poca respuesta de anti- Acanthamoeba también pueden cultivarse en medio nne. El
cuerpos a la presencia de amibas, por lo que los métodos seroló- diagnóstico post mortem se puede realizar por la observación
gicos son poco útiles como herramienta diagnóstica de la meap. de las amibas en secciones de tejido teñidas con H&E o por
El método más rápido y efectivo se realiza observando la técnica de inmunofluorescencia indirecta (iif) usando sue-
preparaciones de líquido cefalorraquídeo (lcr) recién ex- ro de conejo antiamiba, que es muy útil como herramien-
traído, en vivo o teñidas, mediante microscopia de luz, de ta diagnóstica por su especificidad en la identificación del
contraste de fases o con ambas. Los trofozoítos se pueden dis- agente etiológico.
tinguir de otras células por su forma limax y su movimiento En la eag como en la meap, el contenido de proteínas
progresivo. El lcr se puede teñir con hematoxilina y eosina en el lcr tiende a ser elevado y la concentración de glucosa
(H&E), con lo que puede visualizarse con claridad un nucléo- es de normal a baja. En el caso de la eag, predominan los
lo prominente, centralmente localizado y vacuolas contrác- linfocitos, en contraste con la meap, en la cual predominan
tiles y citoplásmicas. Las tinciones de Giemsa o de Wright los polimorfonucleares.
permiten ver el citoplasma teñido de azul claro y al núcleo B. mandrillaris no es fácilmente recuperada de lcr ni
de color rosa. En material centrifugado, las amibas se obser- se desarrolla en placas de agar con bacterias. Fragmentos de
van redondeadas y planas, sin seudópodos. El diagnóstico se biopsia pueden ser inoculados en cultivos de células anima-
confirma por aislamiento de trofozoítos (nunca quistes ni fla- les. El análisis de lcr en general revela pleocitosis linfocítica
gelados) del lcr o del tejido de biopsia cerebral. Uno de los con elevación de ligera a severa de proteínas y glucosa de
principales problemas para identificar a las amibas es que se normal a baja.
pueden confundir con macrófagos, células epiteliales o pasar Debido a que sólo se ha detectado un caso de encefalitis
inadvertidas como simples partículas de sedimento del lcr. por S. pedata, casi toda la información descrita hasta el mo-
Las amibas se pueden cultivar colocando unas gotas de mento se refiere a lo observado en la eag causada por Acan-
lcr en agar no nutritivo (nne) con Escherichia coli, a las cua- thamoeba y por Balamuthia.
les fagocitan sirviendo de alimento.
La meap es muy semejante a la meningitis bacteriana
y los resultados de laboratorio son muy similares; sin embargo,
Queratitis amibiana
los cultivos para bacterias son negativos. El lcr contiene leu- En la queratitis amibiana (qa), es muy importante el diag-
cocitos, sobre todo neutrófilos y leucocitos polimorfonuclea- nóstico temprano, para lo cual deben tomarse en cuenta ante-
46 Parasitología médica • Capítulo 5

cedentes, signos y síntomas. Con frecuencia se confunde con mado su eficacia en humanos. También se han utilizado con
la queratitis causada por hongos o herpes simplex, pero los cierta efectividad fluconazol, flucitocina, sulfadiazina, itraco-
análisis para bacterias, virus y hongos son negativos. nazol, isotionato de pentamidina y azitromicina.
El diagnóstico clínico en la etapa temprana de la qa En el caso de la eag causada por B. mandrillaris se han
se basa en la presencia de un patrón epitelial dendritifor- utilizado con cierto éxito flucitocina, fluconazol, sulfadiazina,
me. Después se desarrolla un infiltrado estromal en forma isotionato de pentamidina, gluconato de clorhexidina, poli-
de anillo, causado por leucocitos polimorfonucleares en hexametilén biguanida (phmb) y azitromicina, entre otros.
la zona afectada. Los análisis histopatológicos muestran En el único caso clínico causado por S. pedata se aplicó
queratitis necrosante aguda o subaguda, con inflamación azitromicina, pentamidina, itraconazol y flucitocina, y el pa-
granulomatosa del tejido corneal y congestión conjuntival. ciente sobrevivió.
Los trofozoítos y los quistes se localizan principalmente
en el estroma de la córnea. Se puede realizar un diagnós- Queratitis amibiana
tico rápido usando tinción tricrómica de Giemsa, tinción
de Wright, tinción blanca de calcoflúor o azul de Evans, El tratamiento no es sencillo debido a la resistencia de estos
así como anticuerpos fluorescentes en raspados corneales microorganismos a la mayor parte de los fármacos común-
y secciones de tejido de la córnea. Mediante microscopia mente usados contra bacterias, hongos, protozoos y virus.
confocal es posible ver quistes característicos. Como en el No obstante, algunos pacientes han sido tratados con éxito
caso de la eag, se puede cultivar Acanthamoeba colocando usando ketoconazol, miconazol, isotionato de propamidina
el raspado corneal en medio nne. (Brolene en Gran Bretaña) y phmb. También se han utilizado
En los últimos años se han desarrollado técnicas de bio- con cierta efectividad itraconazol, fluconazol, azitromicina,
logía molecular basadas en la detección específica y ampli- sulfametazina, isotionato de pentamidina (efectivo, pero no
ficación de material genético. Con base en el análisis de la bien tolerado por el ojo) y gluconato de clorhexidina (bien
secuencia de genes del ácido ribonucleico (rna) ribosomal, tolerado por el ojo, pero hay cepas de Acanthamoeba que
muestran resistencia). Las formas tróficas son más sensibles
el género Acanthamoeba se ha dividido en 17 genotipos dife-
a los antimicrobianos que los quistes; sin embargo, el glu-
rentes (T1 a T17). De acuerdo con este esquema de clasifica-
conato de clorhexidina y la phmb han mostrado excelentes
ción, la mayor parte de las infecciones humanas causadas por
efectos, tanto contra formas tróficas como contra quistes.
Acanthamoeba están asociadas al genotipo T4. La reacción en
El tratamiento antimicrobiano puede destruir formas
cadena de la polimerasa (pcr) se ha utilizado para detectar
tróficas, pero los quistes pueden recuperarse cuando la dosis
ácido desoxirribonucleico (dna) amibiano en tejido y mues-
y la intensidad de aplicación se reducen, por lo que se reco-
tras de lcr.
mienda que el tratamiento sea intensivo en la fase inicial y
mantenido por cinco o seis meses, dependiendo de la evolu-
Tratamiento ción del caso.

Meningoencefalitis amibiana Infecciones cutáneas


primaria Para acantamebosis cutánea se pueden aplicar de manera tó-
El único fármaco contra N. fowleri es el antimicótico anfote- pica itraconazol, flucitocina, ketaconazol y clorhexidina.
ricina B, pero es muy tóxico y sólo es eficaz cuando se admi-
nistra al inicio de la infección. Uno de los pocos sobrevivien- Amibas de vida libre como vectores
tes fue tratado con anfotericina B combinada con miconazol y reservorios de otros patógenos
y rifampicina.
Se ha demostrado que varias especies de amibas de vida li-
bre (avl), tanto patógenas como no patógenas, pueden ac-
Encefalitis amibiana tuar como vectores y reservorios de otros patógenos como
Aún no existe un tratamiento farmacológico eficaz; en ge- mimivirus y enterovirus; bacterias como Legionella pneu-
neral se han probado combinaciones de diferentes fármacos, mophila, Vibrio cholerae, Pseudomonas aeruginosa, Helicobacter
con diversos grado de éxito. Para la infección provocada por pylori y Mycobacterium avium, entre otras. De esta manera,
Acanthamoeba, el ketoconazol y el clotrimazol han mostrado las amibas protegen a las bacterias y otros microorganis-
cierta efectividad en estudios in vitro, aunque no se ha confir- mos de los biocidas ambientales y antibióticos aplicados
Amibas de vida libre patógenas y oportunistas 47

al huésped, y les proveen un medio para transportarse y blemente es la amiba con mayor distribución en la natu-
colonizar nuevos hábitats aprovechando los mecanismos de raleza. Se ha aislado de diversos tipos de agua: estanques,
dispersión de las avl. lagos, ríos, agua termal, agua subterránea, agua de mar, agua
de grifo, agua residual, canales de riego, tinas de hidrotera-
Aspectos ecológicos pia, piscinas, efluentes calientes de plantas termoeléctricas,
agua mineral embotellada e incluso de agua congelada.
Las avl tienen una distribución cosmopolita y son ubicuas También se ha aislado de diferentes tipos de suelo, se-
en la naturaleza. Su hábitat principal es el suelo y desde dimento oceánico, sedimento de lagos, lodos resultantes del
ahí pueden llegar al agua arrastradas por escurrimientos o tratamiento del agua residual, aire extramuros e intramuros,
transportadas por aire. En el agua se encuentran en mayor conductos de aire acondicionado, polvo de casas-habitación,
proporción en la microcapa superficial, debido a la abun- de composta y de raíz de lirio acuático.
dancia de nutrimentos y al establecimiento de quistes pro- Dos de las fuentes de donde se ha aislado Acanthamoeba,
venientes de la atmósfera y en menor proporción se encuen- el agua de grifo y lentes de contacto, están muy relaciona-
tran en los sedimentos. das con la incidencia de la qa. Las acanthamoebas patógenas
Los factores ambientales favorables para la mayoría de crecen bien a 37 °C, aunque pueden hacerlo a temperaturas
las avl son temperatura arriba de 20 °C, concentración mí-
mayores. Debido a la gran resistencia del quiste, Acanthamoe-
nima de oxígeno de 2 mg/L–1, pH cercano a la neutralidad
ba soporta condiciones ambientales extremas, por lo que es
y alimento suficiente (bacterias, algas, levaduras y/o materia
necesaria una concentración de cloro libre residual superior a
orgánica), aunque los quistes de Acanthamoeba toleran am-
2 mg/L–1 para inhibir su presencia en piscinas.
plios rangos de osmolaridad, temperatura, salinidad y pH.

Naegleria fowleri Balamuthia mandrillaris


Tiene distribución cosmopolita en suelo y agua, pero son Se conoce muy poco acerca de la distribución de B. man-
sensibles a condiciones ambientales extremas como deseca- drillaris en la naturaleza; tal vez son menos abundantes en
ción y pH muy elevados. La especie patógena se encuentra el ambiente que otras avl, lo que dificulta su aislamiento,
principalmente en aguas termales o calentadas de manera además de que son organismos de lento crecimiento y difícil
artificial (piscinas), aunque también se han encontrado en es- cultivo, que requieren medios de cultivo muy complejos
tanques, cascadas, manantiales, lagos y ríos con temperaturas o cultivos de tejido. Hasta el momento existen sólo dos re-
menores. Se ha aislado de agua de grifo, piscinas, agua resi- portes de su aislamiento en suelo.
dual, canales de riego, tinas de hidroterapia, lagos artificiales
y efluentes calientes de plantas termoeléctricas. Sappinia pedata
N. fowleri, la especie patógena del género, habita princi-
En el caso de S. pedata, se desconoce su distribución en el
palmente en ambientes acuáticos con temperaturas por arri-
ambiente; se ha aislado de suelo contaminado con heces de
ba de los 30 °C y es capaz de sobrevivir a temperaturas de
bovino, de otros animales y de humanos, y corteza de árbol.
45 °C, aunque la termotolerancia no es el único factor que
determina la patogenicidad de la amiba.
Se encuentra en aguas naturales de los trópicos y sub- Prevención
trópicos. En países templados y fríos prolifera durante la
N. fowleri ha mostrado una clara relación con la natación o
época cálida. Algunos estudios sugieren que el incremento
con cualquier otra actividad que permita la entrada de agua
brusco de temperatura, más que una temperatura elevada
por las fosas nasales, lo que podría ser relativamente fácil de
constante, es lo que realmente favorece la predominancia de
evitar. Además, el agua termal natural o calentada en forma
las naeglerias patógenas. En piscinas, la presencia de cloro
artificial que no haya sido clorada de manera adecuada puede
libre residual en concentraciones de 2 mg/L–1 puede inhibir
ser un reservorio para Naegleria. Aunque se ha visto que la
su presencia.
cloración no es necesariamente protectora, el mantenimiento
de niveles de cloro efectivos podría ayudar a minimizar el
Acanthamoeba spp. riesgo, lo cual es relativamente fácil en albercas, pero no en
Acanthamoeba es cosmopolita y está distribuida ampliamen- cuerpos de agua naturales, como lagos y lagunas.
te en la naturaleza; puede encontrarse en suelo y agua, e Para evitar la naegleriosis se recomienda la educación de
incluso en el aire, medio que le sirve de dispersión; proba- la población, difusión del conocimiento entre la comunidad
48 Parasitología médica • Capítulo 5

biomédica, cloración del agua de albercas (niveles continuos La mayoría de los casos de qa ocurre en individuos in-
de cloro libre residual de 2 mg/L–1 en agua a 26 °C), pH 7 y munocompetentes y 80% tiene el antecedente de uso de len-
limpieza adecuada de abastecimientos públicos de agua. tes de contacto cuyo manejo y mantenimiento es inadecua-
En el caso de la eag, la única recomendación es evitar do. Es un proceso multifactorial que incluye el uso de lentes
los factores de riesgo si se sabe que hay inmunosupresión o de contacto por largos periodos, falta de higiene personal,
inmunocompromiso. Se aconseja a los pacientes inmunode- limpieza inadecuada de los lentes de contacto y su estuche,
ficientes evitar la exposición al polvo y partículas de sue- empleo de agua de la llave para preparar soluciones salinas
lo que pueden acarrear quistes de las amibas oportunistas para el lavado de los lentes, exposición a agua contaminada y
al sistema respiratorio, así como evitar la contaminación de traumatismos menores del ojo.
heridas abiertas o quemaduras, con suelo. Para prevenir la Se han reportado casos de infecciones por avl alrededor
qa se recomienda seguir con todo cuidado las recomenda- de todo el mundo, principalmente en los Estados Unidos,
ciones del fabricante de lentes de contacto (uso, limpieza y Reino Unido, Australia, Nueva Zelanda, Bélgica y Repú-
mantenimiento) tanto de los lentes como de su estuche y no blica Checa y en menor proporción en India, África, Argen-
utilizarlos durante la práctica de deportes acuáticos y el baño tina, Venezuela, Puerto Rico, Cuba, Perú, Brasil, Colombia
en jacuzzi. En 2012 se incluyó a Naegleria y Acanthamoeba en y México.
la NOM-245-SSA1-2010 para agua de albercas. Hasta la fecha se tiene conocimiento a nivel mundial
de unos 300 casos de meap, 200 de eag por Acanthamoeba
spp., 150 de eag por B. mandrillaris, uno por S. pedata y más
Epidemiología de 5 000 de qa tan sólo en Estados Unidos y alrededor de
El número de infecciones causadas por las avl es relativa- 10 000 en todo el mundo. Con toda seguridad estas cifras
mente pequeño, si se considera que estas amibas están am- están subestimadas, en particular porque en muchos países la
pliamente distribuidas en la naturaleza, aunque es preciso realización de necropsias es mínima o no se practica y la qa
recordar que no todas las amibas del ambiente son patógenas. por lo general no se reporta.
La meap ocurre principalmente en niños y jóvenes en En México se tiene un registro aproximado de 33 casos
buenas condiciones de salud, con antecedente de natación de meap, 23 de ellos en Mexicali, los restantes distribuidos en
en sitios de agua naturales en el verano o piscinas con agua Sonora, Monterrey, Huetamo (Michoacán) y Tamaulipas.
calentada de manera artificial; también se han registrado ca- De 12 casos de eag por B. mandrillaris, cuatro se notifica-
sos relacionados con el lavado de la cara con agua contamina- ron en el Distrito Federal, cuatro en Jalisco, dos en Guanajuato,
da y con la inhalación de polvo. uno en el Estado de México y uno en Puebla. Existe registro de
La eag es una enfermedad oportunista, que puede ocu- un caso de eag por Acanthamoeba spp. que sobrevivió, otro
rrir en cualquier estación del año y no necesariamente está re- de una infección cerebral mixta en el que se identificaron Acan-
lacionada con historia reciente de exposición con agua dulce thamoeba spp. y Aspergillus spp. y cinco de qa. Además, se han
recreativa. La enfermedad se presenta en individuos inmuno- detectado Naegleria, Acanthamoeba y Hartmannella en pacientes
suprimidos o inmunodeficientes, como alcohólicos crónicos, asintomáticos; N. lovaniensis en un lactante y en individuos con
embarazadas, individuos con virus de la inmunodeficiencia quemaduras infectadas y rinitis; Hartmannella se observó en
humana (hiv), enfermos con síndrome de la inmunodeficien- un caso de encefalitis, pero no se pudo comprobar su función
cia adquirida (sida), lupus eritematoso sistémico o crónica- como agente causal de la enfermedad, y se informó de ami-
mente enfermos, como diabéticos. También se han descrito bas de la familia Leptomyxidae asociadas a un caso de anemia
casos de EAG sin evidencia de inmunodeficiencia. aplásica grave.

Caso clínico decimiento inició cinco meses previos al ingreso con crisis
Encefalitis amibiana granulomatosa (EAG) causado convulsivas parciales simples; se le practicó una resonancia
por Acanthamoeba spp. en Monterrey, Nuevo León, magnética nuclear cerebral que muestra tumoración fronto-
México parietal derecha. Fue tratado en forma ambulatoria hasta
que presentó deterioro progresivo del estado de conciencia,
Paciente masculino de 41 años, residente de Villa de San- con somnolencia, cefalea intensa universal y vómito.
tiago, Nuevo León, México. El paciente refiere tener una Reingresó con crisis convulsivas y con la tumoración
alberca en su casa, alimentada con agua de noria. Su pa- frontal referida con desplazamiento de la línea media.
Amibas de vida libre patógenas y oportunistas 49

La neurocirugía mostró lesión frontal derecha de aspec-


to neoplásico y se realizó lobectomía frontal. El análisis
patológico reportó absceso cerebral subagudo con tejido
de granulación, necrosis y la observación de amibas de T
vida libre. No se evidenció proceso neoplásico agregado.
Desde el punto de vista morfológico fueron iden-
tificados trofozoítos de Acanthamoeba spp. Se inició tra-
tamiento a base de rifampicina, trimetroprim/sulfame-
toxazol, fluconazol, metronidazol. Se realizó una segunda
intervención a los 13 días por nuevo deterioro neuroló- Figura 5-8. Inmunohistoquímica. Se observan varios
trofozoítos (T) con núcleo y nucléolo dentro de la pared de
gico y crisis convulsivas. Muestras de tejido cerebral se un vaso. 1 000 ×.
inocularon en medio agar no nutritivo con Enterobacter sp.
(nne); se incubaron a 25 °C por siete días en atmósfera
húmeda, con resultados negativos. Se realizó el mismo
procedimiento con el agua de la alberca y de la noria Preguntas para reflexionar
con resultados negativos para avl. También se elaboraron 1. ¿Por qué las amibas de vida libre no se transmiten por
preparaciones con improntas de tejido cerebral y fueron vía oral?
teñidas con coloración tricómica de Gomori, en las cuales 2. ¿Por qué es importante estudiar a las amibas de vida libre
se observaron trofozoítos de Acanthamoeba spp. patógenas?
Se agregó anfotericina B al tratamiento previamente 3. ¿Por qué a pesar de que las amibas de vida libre están
ampliamente distribuidas en el mundo y en el ambiente,
indicado y el paciente fue egresado para continuar con
el número de casos clínicos reportados es bajo?
tratamiento ambulatorio. Se descartó la presencia de 4. ¿El hallazgo de nuevas amibas de vida libre con potencial
hiv+/sida y se determinó CD4 con 277 células/ml. Dos patógeno se debe a que los cambios ambientales han in-
meses después, el paciente reingresó con datos de crá- ducido su patogenicidad o simplemente a que no había
neo hipertensivo y un nuevo desbridamiento del absceso herramientas para detectarlas?
5. ¿Por qué entre los miles de personas que utilizan piscinas
mostró glioblastoma multiforme con restos de absceso
o balnearios, sólo algunos desarrollan naegleriosis?
cerebral con trofozoítos de Acanthamoeba spp. (figura
5-7). Se confirmó la presencia de Acanthamoeba spp. en
el tejido cerebral del paciente mediante la técnica de in-
munohistoquímica, utilizando suero de conejo policlonal Respuestas a las preguntas
anti-Acanthamoeba (figura 5-8). de la evaluación inicial
Aunque no se pudo establecer la fuente de infección, 1. Se llaman amibas anfizoicas por su dualidad de vivir libre-
las manifestaciones y curso clínico del paciente, la presen- mente en el ambiente y su capacidad de inducir enferme-
cia de Acanthamoeba en el tejido cerebral y los resultados dades en el humano.
de la técnica de inmunohistoquímica muestran encefalitis 2. Sí, de manera específica, la contaminación térmica y la or-
gánica, ya que se desarrollan mejor a temperaturas altas
amibiana granulomatosa (eag) causada por amibas del y en presencia de materia orgánica, debido a que esta úl-
género Acanthamoeba. tima favorece la presencia de las bacterias (alimento prin-
cipal de las amibas en el ambiente) e incluso, la pueden
utilizar directamente como alimento.
T
3. Uso de lentes de contacto suaves, empleo de soluciones
salinas hechas en casa, abrasiones en la córnea, exposi-
ción a agua contaminada.
4. Acanthamoeba spp. provoca una respuesta granulomato-
sa en el huésped y Sappinia pedata, no.
5. La popularidad del uso de lentes de contacto, la aplica-
ción de fármacos inmunosupresivos en los trasplantes de
órganos, la generación de medicamentos que prolongan
la vida humana a un punto en el que el sistema inmune es
Figura 5-7. Lesión cerebral de glioblastoma multiforme con menos capaz de contrarrestar las infecciones.
restos de absceso cerebral con trofozoítos de Acanthamoeba
spp. Tinción H&E. 1 000×.
50 Parasitología médica • Capítulo 5

Bibliografía

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CAPÍTULO Amibas comensales
6
Adela Luisa Ruiz Hernández

Contenido
• Introducción • Síndromes relacionados con amibas comensales
• Características generales del hábitat de las amibas • Mecanismos de adaptación e inmunidad
• Las amibas y su relación con el huésped • Epidemiología
• Clasificación y géneros de amibas • Diagnóstico
• Mecanismo de transmisión • Tratamiento
• Ciclo biológico • Profilaxis
• Características morfométricas de las amibas • Caso clínico
comensales

morfológica y fisiológica que les permita su existencia; estos


Preguntas de evaluación inicial
cambios acumulados y la oportunidad de ejecutarlos sobre
1. ¿Cómo se define el comensalismo? un huésped idóneo, harán posible una exitosa relación y, si
2. ¿Cuáles son los géneros y especies de comensales halla- de relaciones entre especies se trata, algunas de éstas lo harán
dos con frecuencia en el humano y cuál es su hábitat? como organismos parásitos patógenos y otras como especies
3. ¿Cuál es el ciclo biológico general de estas especies y qué
formas poseen dentro de su ciclo? comensales.
4. ¿Qué características son importantes para diferenciar Los organismos que viven de forma independiente en
Entamoeba histolytica, Entamoeba dispar y Entamoeba sus hábitat naturales buscan su propio alimento, agua y otros
hartmanni? elementos necesarios para llevar a cabo sus procesos metabó-
5. ¿Qué recursos de laboratorio son esenciales para identifi-
car las amibas comensales?
licos. Se han descrito asociaciones homoespecíficas (indivi-
6. ¿Qué tratamiento se indica en caso de identificar amibas duos de la misma especie) entre los animales, y heteroespecí-
comensales en cavidad oral o en intestino? ficas (individuos de diferente especie); de forma particular las
7. Aun cuando Entamoeba dispar, Entamoeba coli, Ioda- asociaciones heteroespecíficas muestran mayor complejidad
moeba bütschlii y Endolimax nana no son amibas patóge-
y requieren para su descripción la comprensión de diversos
nas, ¿cuál es la importancia de su hallazgo?
8. ¿Con qué cuadros clínicos se asocia la presencia de E. gin- conceptos, como el comensalismo, foresis, simbiosis, mutua-
givalis? lismo y parasitismo.
En el presente capítulo se hará hincapié al comensalis-
mo, asociación simple realizada con base en el refugio, de-
Introducción fensa y mecanismos que permitirán a estas especies el sumi-
nistro de alimento. El término literalmente significa “comer
En la continua evolución a la que están sometidos todos los en la misma mesa” y el concepto puede ser considerado como
seres vivos, los diversos organismos también van desarrollan- un tipo de asociación que se da en la naturaleza, en la que dos
do procesos de adaptación, particularmente de naturaleza organismos de diferente especie viven juntos sin ser metabó-
51
52 Parasitología médica • Capítulo 6

licamente dependientes el uno del otro y donde tal ausencia –200 mV. El pH en el tubo digestivo puede variar desde 1.5
de dependencia metabólica es una importante diferencia en- en el estómago a 8.4 en el intestino grueso; los quistes de
tre una especie comensal y un parásito. las amibas y otros parásitos deben tolerar cambios severos y
El concepto de comensalismo básicamente se refiere a drásticos del pH al pasar en su trayecto desde la boca al intes-
una relación en la que uno de los participantes, el comensal, tino; por otro lado, el pH desempeña una función importante
adquiere cierto beneficio de su relación con el huésped, sin en el desenquistamiento de las amibas y otros protozoarios,
que este último sufra daño u obtenga beneficio de la misma. donde la presencia y acción estimulante de la bilis favorece
De acuerdo con la ubicación donde participa, en el huésped que ese desenquistamiento se realice de manera adecuada en
existen organismos comensales que habitan en su superficie y el duodeno.
que se denominan ectocomensales, así como otros que tras- Las propiedades y la gama de enzimas digestivas que de-
pasan barreras y se internan en el organismo del hospedero, gradan proteínas, grasas y carbohidratos, hacen un ambiente
llamados endocomensales. ideal para que el parásito entre en una competencia directa o
La especialización de la relación comensal comienza con indirecta con el huésped.
la conducta, donde multitud de factores ecológicos, de com- Una condición general para todas las amibas que se esta-
portamiento y los propios e inherentes a las necesidades de blecen en el intestino grueso, son precisamente las regiones
cada especie, ayudarán al acercamiento y contacto entre un del ciego y el colon, estas zonas parecen mostrar cierta inac-
organismo de diferente especie y un huésped, con la finalidad
tividad, en ellas puede apreciarse la presencia de una mem-
de establecer correspondencia y que prospere entre ambos la
brana mucosa con criptas y carente de vellosidades (existen
mejor relación huésped-parásito. Así, en el caso de las espe-
proyecciones a manera de vellosidad en el intestino grueso,
cies comensales (lo mismo que en las patógenas) los constan-
relacionadas con una función diferente a las que existen en
tes contactos con un huésped potencial han conducido a que
el intestino delgado). En este sitio el epitelio está protegido
los visitantes externos tengan una forma fácil para perma-
por esa capa de mucosidad de consistencia viscosa, propiedad
necer alojados en un ambiente que les proporciona espacio,
sustrato, abrigo, transporte o alimento. que la hace un sitio ideal de adhesión de diversos organismos,
La mayoría de las enfermedades parasitarias ocupan un entre ellos las amibas.
lugar importante en la práctica médica y son causa de diver- Otra condición a la que se enfrentan los microorganis-
sos padecimientos intestinales y extraintestinales (titulares) mos es a la respuesta inmune del huésped, en la que partici-
y donde la presencia en el intestino tanto de protozoarios pan diversos grupos de células, anticuerpos y otras proteínas.
comensales como de patógenos es la expresión de las esca- La mucosa intestinal posee mecanismos de defensa específi-
sas condiciones de higiene y saneamiento básico general que cos compuestos por el sistema inmune secretor común en las
muestra un individuo o una población. mucosas, las inmunoglobulinas (IgA, IgM e IgG), el tejido
linfoide presente desde la cavidad oral. Los mecanismos de
defensa inespecíficos están constituidos por barreras epite-
Características generales del hábitat liales, bilis, secreción pancreática, lisozima, moco, interferón
de las amibas y microflora intestinal. Ambos mecanismos interactúan de
El intestino, tanto del humano como de otros vertebrados, manera sinérgica ante la presencia de agentes biológicos aje-
puede ser considerado como uno de los espacios que ofre- nos y a esto no escapan las amibas. Las especies que superan
cen mayor peligro para un parásito; ese hábitat es oscuro; y controlan estas dificultades o evaden la respuesta inmune
muestra cambios fisiológicos relacionados con los hábitos tendrán la oportunidad de generar índices de reproducción
alimenticios del huésped; se encuentra casi libre de oxígeno elevados y los portadores de ellas serán elemento importante
en algunos segmentos como el intestino delgado y grueso, de su diseminación en el ambiente.
donde algunas especies de parásitos, entre ellas las amibas, Dentro del tracto intestinal debe también considerarse
requieren de ese ambiente para su metabolismo anaerobio. un elemento más que debe desafiar no sólo las amibas, sino
Además, en el intestino hay presencia de gases en can- cualquier otro parásito intestinal en su lucha por permanecer
tidades variables como el nitrógeno, hidrógeno, metano y en el huésped: enfrentarse a los movimientos leves o violen-
bióxido de carbono; este último se encuentra estrechamente tos que presenta en este segmento el tubo digestivo.
relacionado con la regulación de iones hidrógeno en los pa- Cada uno de estos caracteres solos o en acción conjunta
rásitos. El potencial de óxido-reducción del intestino grue- serán los que sufran los organismos comensales o patógenos,
so es importante para las amibas anaerobias y en este sitio protozoarios o helmintos que traten de vivir y reproducirse,
le es favorable que ese potencial se encuentre entre –195 y en este caso en un huésped humano.
Amibas comensales 53

Las amibas y su relación Por lo general muestran un comportamiento de orga-


nismos comensales; sin embargo, se ha observado que estas
con el huésped
especies son capaces de generar cuadros o patologías indeter-
Las amibas, en específico las que se ubican en el intestino, minadas, que pueden establecerse bajo ciertas circunstancias
tienen una amplia distribución en diversos ambientes y pue- en diversos grupos de edad.
den ser fácilmente ingeridas por el humano con alimentos o
bebidas contaminadas. Las adaptaciones fisiológicas y mor-
fológicas que presentan algunas especies de amibas pueden Mecanismo de transmisión
convertirlas en organismos que al inicio son de permanencia El mecanismo de transmisión de las amibas comensales in-
pasajera pero que después se convierten en parásitos perma- testinales es el fecalismo, lo que implica la contaminación de
nentes, desde la cavidad oral hasta el intestino; se alimentan alimentos, bebidas o fomites con materia fecal procedente
de bacterias y otros materiales orgánicos a través de la fagoci- de individuos que las alojan en su intestino y las eliminan
tosis, función que lleva a cabo el trofozoíto. La fase inmóvil o con las heces; esta situación se resume en el constante e im-
quiste puede contener material de reserva como vacuolas de
perceptible hábito de la coprofagia. Las especies son altamen-
glucógeno y barras cromatoidales.
te resistentes al medio ambiente e incluso ya estando dentro
Uno de los grupos más importantes y con el mayor nú-
del huésped pueden permanecer en el tubo digestivo por se-
mero de especies descritas es el género Entamoeba, ahí se ubi-
manas, meses e incluso años.
ca la amiba intestinal patógena del humano y de mayor dis-
tribución en el mundo. La mayoría de las especies diferentes En el caso particular de E. gingivalis la ausencia de una
a ella son consideradas como comensales. fase quística hace notar que el mecanismo de transmisión del
El Centro Nacional para la Información Biotecnológica trofozoíto puede ser directo de individuo a individuo a través
(ncbi) tiene identificadas y reconocidas 33 especies pertene- de algo tan simple como un beso o de forma indirecta como
cientes al género Entamoeba, de las cuales nueve pueden en- el uso compartido de utensilios como una cuchara o tenedor
contrarse en el tubo digestivo del humano y sólo E. histolytica e incluso por beber líquido varias personas del mismo reci-
se considera la especie patógena; algunas otras son comensa- piente.
les y las demás parasitan diversos animales y, ocasionalmente, En las amibas comensales la fase de quiste constituye
pueden encontrarse en las personas. Ya dentro del huésped, la forma infectante y resistente. Se han realizado estudios
por simple que sea algún mecanismo posible de daño de estas sobre la viabilidad del quiste, utilizando como modelo al
especies incipientes o comensales, todas ellas enfrentarán las de E. histolytica, esto debido a que son escasos los trabajos
barreras que fueron referidas en párrafos anteriores. hechos sobre los quistes de las otras especies amibianas. Los
quistes pueden resistir jugos gástricos y factores ambien-
Clasificación y géneros de amibas tales externos y las concentraciones habituales de cloro en
el agua. Sobreviven hasta cinco minutos a temperatura de
Las amibas comensales son complejos organismos unicelula- 50 ºC; en el agua pueden tolerar temperatura de 0 ºC por
res eucariotes, pertenecen al reino Protozoa, subreino Sarco- 90 días. Se mantienen viables en alimentos líquidos a tem-
mastigophora, phylum Amoebozoa, superclase Rhizopoda. Todos
peratura de 4 ºC durante 10 a 15 días. Los quistes pueden
los representantes de este grupo emiten proyecciones plas-
sobrevivir en las heces hasta ocho días a una temperatura de
máticas denominadas seudópodos, que le proporcionan una
20 a 40 ºC y hasta 40 días en temperaturas de 6 a 10 ºC. Los
forma de locomoción realizada por deslizamiento.
quistes pueden mantenerse viables durante varios meses en
Algunas especies diferentes a E. histolytica pueden colo-
nizar el tubo digestivo del humano; entre ellas se encuentran medios acuáticos adecuados y a baja temperatura. La posi-
amibas consideradas comensales o especies de otros anima- bilidad de transmisión por el agua es mayor en los trópicos,
les que accidentalmente llegaron a este huésped; entre ellas donde se han observado hasta más de 50% de portadores,
se cuentan las siguientes: Entamoeba bangladeshi, Entamoeba que en zonas más templadas, donde la prevalencia en la
chattoni, Entamoeba coli, Entamoeba dispar, Entamoeba gingiva- población general puede ser inferior a 10%.
lis, Entamoeba hartamnni, Entamoeba moshkovskii y Entamoeba Los quistes son relativamente resistentes a la desinfec-
polecki. Otras amibas, como Iodamoeba bütschlii y Endolimax ción y pueden no ser inactivados mediante los tratamien-
nana, completan el grupo de sarcodinos. Estos protozoarios tos de cloración aplicados por lo general en la producción de
forman trofozoítos y quistes, con excepción de E. gingivalis, agua de consumo. Los quistes pueden ser destruidos por yodo
que sólo desarrolla trofozoítos. y ebullición.
54 Parasitología médica • Capítulo 6

Ciclo biológico tiza una pared de mayor grosor. Durante el enquistamiento,


en el citoplasma se va incorporando material de reserva y en
El ciclo biológico de los protozoarios intestinales mues- forma gradual el protozoario adquiere la fase de prequiste,
tra dos etapas, el desenquistamiento y el enquistamiento, después la de quiste inmaduro y por mitosis la formación
procesos especialmente estudiados también en E. histolytica de un quiste maduro; esta forma será la que se expulse junto
(patógena), ya que al no mostrar las especies comensales un con la materia fecal. Tanto los trofozoítos como los quistes
patrón de patogenicidad que exija un mayor estudio, no se pueden salir al exterior con las heces; los primeros son formas
ha demandado una mayor profundidad en el estudio de este lábiles y mueren con rapidez, no así los quistes, que pueden
aspecto. resistir el medio ambiente exterior.
Después de que el quiste ha ingresado al huésped por
vía oral, es deglutido y transportado hacia el estómago, pos-
teriormente llega al intestino delgado y en todo este trayec- Características morfométricas
to la acción del ácido gástrico y de enzimas digestivas lleva de amibas comensales
a cabo la tarea de reblandecer y debilitar la pared quística.
En el género Entamoeba están comprendidas las amibas en-
En este recorrido el protozoario se ve sometido a los efectos
doparásitas; este grupo se caracteriza por la presencia de un
y modificaciones diversas que ya han sido mencionadas en
núcleo vesicular y un endosoma o cariosoma relativamente
párrafos anteriores. El conjunto de eventos físico-químicos
pequeño ubicado sobre o cerca del centro del núcleo; presen-
finalmente contribuirá a que emerjan de los quistes las for-
tan también gránulos de cromatina periféricos que revisten
mas móviles, los trofozoítos, mismos que continuarán su via-
de forma regular y/o irregular la cara interna de la membrana
je ayudados por el peristaltismo y serán transportados a otros
nuclear. Por general, el trofozoíto presenta un solo núcleo
segmentos intestinales como la luz del intestino grueso, don-
que conserva las mismas características nucleares del quiste;
de harán contacto con la superficie epitelial, llegarán a las
dependiendo de la especie, pueden apreciarse un citoplasma
criptas y así iniciarán ciclos de multiplicación y colonización.
vacuolado y otras inclusiones.
En esta zona la amiba encontrará el espacio y cierto grado de
protección, así como abundante moco.
Experimentalmente se ha observado en cultivos que la Entamoeba gingivalis
capacidad de fijación la poseen precisamente los trofozoí- Fue la primera amiba descrita en los humanos; en 1849 Gros
tos, incluso la fijación sobre diversos sustratos naturales o la aisló y describió en muestras procedentes de sarro denta-
inertes, como la colágena y la albúmina, así como al vidrio rio. Esta especie no forma quistes y su interés radica en el
y a plásticos. Al parecer, en ese proceso de adhesión están nicho ecológico especializado donde habita, la cavidad bucal.
involucrados mecanismos específicos e inespecíficos; los pri- Vive en las encías, tejidos peridentales y bolsas gingivales
meros se relacionan con la fijación de las amibas a células del cercanas a la base dental; de manera ocasional se puede en-
huésped, mediante interacción de moléculas presentes tanto contrar en las criptas amigdalinas. Respecto a la forma que
en la superficie del parásito como en la célula del huésped; muestra, la única fase existente es la de trofozoíto, que mide
los mecanismos inespecíficos se refieren a la participación de 10 a 20 μm de diámetro con un endoplasma granuloso y
de adhesión a superficies inertes. Mediante estudios bioquí- vacuolado; pueden observarse en su interior restos celulares,
micos se ha podido demostrar la presencia de una lectina leucocitos, bacterias y ocasionalmente eritrocitos; el ecto-
amibiana, proteína que reconoce carbohidratos específicos plasma es translúcido. Presenta un núcleo con una membra-
presentes en la superficie de las células intestinales del hués- na de apariencia remarcada a expensas de finos gránulos de
ped; también se ha podido determinar que esta lectina se cromatina; en el interior del núcleo se aprecia un endosoma
encuentra en concentraciones similares tanto en amibas pa- situado en la parte central. Cuando el trofozoíto se desplaza
tógenas como en no patógenas. mediante sus seudópodos, lo hace con movimientos muy rá-
El proceso de enquistamiento se lleva a cabo en la luz pidos, emitiendo proyecciones explosivas. Esta forma móvil
del intestino y éste se efectúa cuando los trofozoítos tienen de este comensal es muy similar a la de E. histolytica.
que enfrentar condiciones que no les son favorables para su
sobrevivencia, como ocurre con la deshidratación en el mi-
croambiente debido a la absorción de agua que se lleva a cabo
Entamoeba dispar
en la última porción del intestino grueso (hábitat de las ami- En 1925 Brumpt propuso diferenciar y clasificar dos especies
bas). El trofozoíto, para subsistir, inicia un proceso en el que del género Entamoeba, una patógena, E. histolytica (Schaudinn,
adopta una forma redondeada, la cual paulatinamente sinte- 1903) y otra no patógena, E. dispar, cuya morfología al mi-
Amibas comensales 55

croscopio óptico es idéntica en ambas. La diferenciación a este mensal, Entamoeba coli; el núcleo único del trofozoíto de En-
nivel se basa fundamentalmente en aspectos inmunológicos tamoeba hartmanni muestra un endosoma central y la croma-
y en patrones isoenzimáticos; esta hipótesis de dualidad pro- tina periférica se distribuye de forma homogénea. La medida
puesta por Brumpt no fue aceptada sino hasta 1993, cuando de los quistes oscila entre 5 y 10 μm de diámetro, pueden
se establecieron bases de diferenciación genómica, bioquímica estar vacuolados y demostrarse con una tinción permanente
e inmunológica, culminando con la propuesta de la separación los cuerpos cromatoides de aspecto baciloide o similares a un
de ambas especies. Se denominó a E. dispar como la especie no grano de arroz.
patógena y a E. histolytica como la patógena. Una diferencia evidente es que esta pequeña amiba no
A partir de entonces las nuevas técnicas moleculares fagocita eritrocitos y su desplazamiento por lo general es más
han permitido diferenciar con mayor claridad y precisión a lento. Aun cuando E. hartmanni es una especie comensal,
E. histolytica de E. dispar, determinándose para la primera es importante considerar, a partir del plano morfométrico,
mecanismos relacionados con su capacidad patógena como la que las formas de mayor tamaño de ella pueden confundir-
presencia de lectina galactosa-galactosamina (responsable de se con las formas de menores dimensiones que presenta E.
la adherencia), la presencia de polipéptidos solubles (ameba- histolytica, lo que podría llevar a establecer un diagnóstico
poros) que se insertan a la membrana celular e inducen lisis; equívoco y a un tratamiento impreciso o erróneo.
también se han caracterizado proteasas de cisteína capaces
de degradar diversos componentes de la matriz celular in- Entamoeba coli
volucradas también con la evasión de la respuesta inmune
(degradan IgA e IgG y anafilotoxinas C3a y C5a). Al parecer esta amiba fue observada por primera vez por
Por el contrario, en E. dispar la presencia de ameboporos Lewis en 1870, pero fue Gras (1877) quien realizó la primera
y proteasas de cisteína se encuentra en menor concentración y identificación y su descripción. Es un protozoario comensal
con menor actividad biológica, lo que hace suponer tiene un del intestino grueso y muy frecuentemente se observa en co-
impacto en la carencia de patogenicidad de esta especie. Exis- existencia con E. histolytica. En su calidad de amiba no pató-
ten también diferencias respecto al número de zimodemos gena, no provoca lisis tisular y se alimenta de bacterias, le-
identificados para diferenciar amibas patógenas de no pató- vaduras y otros protozoarios, rara vez de eritrocitos, a menos
genas. Prácticamente todos los individuos asintomáticos que que se encuentren cercanos a su medio. Su migración hacia el
eliminan quistes en heces tienen E. dispar. En la actualidad los intestino grueso es semejante a la que realiza E. histolytica y
criterios señalan que ante el hallazgo a la microscopia de estas en ocasiones puede confundirse con ella, lo que lleva a pres-
especies se debe referir como complejo E. histolytica/E.dispar. cribir tratamientos innecesarios o dejar sin tratamiento las
Las dimensiones y características morfológicas que pre- infecciones por E. histolytica.
senta E. dispar son iguales a las de E. histolytica; tiene una Entamoeba coli tiene una amplia distribución mundial,
fase de trofozoíto de 20 a 50 μm y con tinciones especiales se aunque su mayor frecuencia se registra en climas cálidos y
puede observar su único núcleo con endosoma fino y central, tropicales. Este comensal aparentemente nunca hidroliza el
cromatina periférica nuclear en forma de gránulos homogé- tejido de su huésped.
neamente distribuidos. Los quistes miden de 10 a 20 μm; Algunos autores consideran que esta amiba es más co-
presenta cuatro núcleos con el endosoma fino y central. mún que E. histolytica, con base en su mayor capacidad para
sobrevivir en ambientes de putrefacción y desecación.
En cuanto a sus características morfológicas, presenta las
Entamoeba hartmanni fases de trofozoíto, prequiste, quiste, metaquiste y trofozoíto
En el pasado se le denominó Entamoeba minuta (Woodcock, metaquístico.
1916); durante mucho tiempo a esta especie diversos autores la El trofozoíto mide entre 15 y 50 μm; si se observa vivo
consideraron la raza pequeña de E. histolytica. En 1958, Faust en heces disminuidas de consistencia, se reconoce un cito-
publicó una descripción detallada de esta amiba y estableció plasma viscoso y vacuolado y en ocasiones no es fácil diferen-
las diferencias morfológicas respecto a las de E. histolytica. ciar el ectoplasma del endoplasma o del núcleo; se desplaza
Entamoeba hartmanni habita en la luz del intestino grueso mediante movimientos lentos y emite seudópodos cortos y
y no es invasora. Desde el punto de vista morfológico es se- romos; es por esta característica propia del movimiento por
mejante, en las fases que posee, a E. histolytica; su diferencia lo que podría confundirse con E. histolytica. Las característi-
microscópica radica en su tamaño. E. hartmanni desarrolla cas nucleares se advierten mejor mediante tinción, con la que
trofozoítos de 4 a 10 μm de diámetro, tiene un citoplasma se observan la distribución irregular de la cromatina perifé-
vacuolado parecido incluso al que muestra otra amiba co- rica nuclear, el tamaño de los gránulos y la disposición so-
56 Parasitología médica • Capítulo 6

bre la membrana. El endosoma o cariosoma es relativamente entre 10 y 37 ºC, crece de manera favorable en medios hipo-
grande, con distribución de forma irregular y situado casi tónicos. Se ha señalado que esta amiba carece de histonas de
siempre de manera excéntrica; en ocasiones pueden recono- dna en su núcleo, elementos observables en los protozoarios
cerse gránulos dispersos de cromatina entre el endosoma y la en estado libre.
cromatina periférica. Con tinciones el interior del trofozoíto E. moshkovskii se ha aislado en heces de niños en Ban-
está vacuolado y en el endoplasma pueden distinguirse diver- gladesh, determinándose su frecuencia en 21% en heces sin
sas granulaciones. diarrea o disentería, lo que se sugiere que E. moshkovskii es un
El quiste mide de 10 a 30 μm de diámetro, muestra una parásito al parecer no patógeno y no invasivo. Sin embargo,
doble pared refráctil y el citoplasma carece de vacuolas. En es posible que pase inadvertida la alta prevalencia de infec-
preparaciones teñidas con Lugol los núcleos se observan con ción por E. moshkovskii, ya que la mayoría de esas infecciones
facilidad, ocho en promedio, aunque el número puede ser (74%) han sido infecciones mixtas donde está involucrado el
menor o mayor; el endosoma y la distribución de la croma- complejo E. histolytica/E. dispar o ambas.
tina periférica siguen los mismos patrones que el trofozoíto.
Algunas veces se puede advertir una masa de glucógeno y Entamoeba polecki
barras cromatoides en forma de astilla (figura 6-1).
Es una especie identificada en 1912 por Von Prowazek en
Checoslovaquia en las heces de dos estudiantes y las mismas
Entamoeba moshkovskii formas quísticas fueron encontradas posteriormente en ellos.
Este protozoario muestra una gran semejanza morfológica con E. Después de este hallazgo, no fue sino hasta 1949 cuando de
histolytica y E. dispar. E moshkovskii fue descubierta en una planta nuevo se reportaron pacientes humanos, sugiriéndose que los
de aguas negras en Moscú (1941), posteriormente fue reportada casos debieron haber existido antes; sin embargo, quizá no se
en Brasil y en Gran Bretaña. E. moshkovskii anteriormente había diferenciaron y fueron diagnosticados en forma errónea como
sido identificada y descrita como E. histolytica variedad Laredo causados por E. histolytica. Su hallazgo no se relacionó con
(Clark & Diamond 1991b) y desde entonces se consideró como patología alguna y se propuso que podrían cursar con una
una amiba de vida libre (avl) y que raras veces infectaba a leve sintomatología digestiva que pasara inadvertida.
humanos, particularmente mostrando su capacidad para crecer El hallazgo posterior de esta especie se relacionó con in-
a temperatura ambiente. Ha sido aislada de aguas negras y diver- fecciones en el cerdo y algunos primates (monos), aunque la
sos autores la han considerado una verdadera especie de vida infección también se había señalado en cabras, ovejas, reses
libre. Tiene su óptimo desarrollo cuando es cultivada a 24 ºC, y otros animales silvestres. Se hizo la propuesta de que cual-
quier agente que produzca infecciones en el humano causa-
pero se ha observado a 37 ºC, aun cuando puede crecer de manera
da por especies de amibas uninucleadas sea reportado como
adecuada, pero sin llegar a enquistarse.
“E. polecki-like”.
Esta amiba tiene una gran tolerancia a las diferencias de
Desde el punto de vista morfológico esta amiba es seme-
temperatura, se ha observado su variabilidad de crecimiento
jante a E. histolytica, E. dispar y E. coli, aunque E. polecki tiene
en forma característica quistes uninucleados que la hacen di-
ferenciarse con facilidad de las otras especies.
Los trofozoítos se asemejan a los de E. coli por el tipo
de movilidad que presentan, aspecto granular, vacuolas
citoplasmáticas e ingestión de bacterias. La emisión de seu-
dópodos de E. polecki suele ser lenta. En muestras teñidas
puede apreciarse un endosoma o cariosoma de localización
central y compacto; la distribución de la cromatina peri-
férica suele observarse a manera de finos gránulos sobre la
membrana nuclear y si se revisa con detalle la cromatina,
podrá comprobarse que se deposita en uno o en ambos polos
de la misma e incluso puede observarse la cromatina depo-
sitada y acumulada, dejando pequeños espacios entre ella,
haciendo una diferencia más con las otras especies simila-
Figura 6-1. Quistes de Entamoeba coli. Examen directo teñido con res. Los trofozoítos de E. polecki son redondeados y miden
lugol (40×). entre 12 y 18 μm.
Amibas comensales 57

El quiste es esférico, mide entre 12 y 15 μm y se caracte- El quiste es ovoide elipsoidal, aunque también los hay
riza por presentar un solo núcleo; pocas veces puede ser binu- esféricos; mide entre 6 y 12 μm de diámetro; teñido con lu-
cleado o tetranucleado y muestra la misma distribución de la gol, el citoplasma es finamente granular. Sus núcleos refrin-
cromatina periférica nuclear que tiene el trofozoíto. Se apre- gentes son evidentes, cuatro las mayoría de las veces, aunque
cia un abundante material cromatoidal dispuesto en barras, es posible encontrar menos (figura 6-2). En preparaciones sin
las cuales muestran extremos angulares con terminaciones teñir y debido al tamaño se puede confundir con E. hartmanni
puntiagudas e incluso se ha visualizado este material en for- y por ello se requiere una tinción permanente para establecer la
ma trenzada. Puede contener también vacuolas de glucóge- diferencia y el diagnóstico.
no, al igual que elementos dispuestos en forma de masas de
inclusión esféricas u ovoides y cuya naturaleza se desconoce.
Iodamoeba bütschlii
Este género fue establecido por Dobell en 1919 para referirse
Entamoeba chattoni a una especie de amiba que habitaba el intestino del humano.
Es una especie que comúnmente se encuentra en monos, pero Se ha mencionado que esta especie forma parte del grupo
de manera ocasional se han identificado infecciones en hu- de organismos comensales; sin embargo, existe en la biblio-
manos. Los cuadros que produce son semejantes a los que grafía un caso de muerte atribuida a esta amiba (Derrick,
causa Entamoeba histolytica. La presencia de esta amiba en las 1948); este hallazgo y notificación fueron discutibles, ya que
personas se relaciona con el contacto con monos. Su hallazgo se menciona que el agente identificado era una especie “pa-
y su identificación final se han establecido mediante estudios recida a” Iodamoeba; si bien la mayoría de especies de amibas
de identificación de secuencias de rrna; esta amiba presenta puede mostrar una vacuola de glucógeno en algunas fases de
quistes uninucleados. su ciclo, no es éste el único elemento para emitir un juicio
de identificación.
Endolimax nana Esta amiba recibe su nombre genérico gracias a su va-
cuola de glucógeno, que es evidente en su fase quística y que
Esta pequeña amiba fue identificada en 1908; sin embargo,
al teñirse con lugol pareciera ser su único contenido. Aunque
se reconocen las aportaciones hechas por Wenyon y O’Connor
las vacuolas de glucógeno se pueden reconocer en otras ami-
(1917) por realizar la primera designación específica a esta
bas intestinales, nunca muestran un contorno tan regular ni
amiba. E. nana es una especie exclusiva del humano y es con-
tan consistente como el que presenta Iodamoeba.
siderada comensal.
Los trofozoítos sin teñir no muestran características es-
E. nana es también un protozoario intestinal de pequeñas
pecíficas que permitan su identificación, miden entre 4 y
dimensiones y con una distribución mundial semejante a la
20 μm de diámetro, forman seudópodos hialinos y su movi-
que tienen otras amibas comensales. Se localiza en el intesti-
miento es muy lento; el citoplasma puede contener bacterias,
no grueso del humano, particularmente a nivel del ciego y se
pero no eritrocitos. Con tinción permanente se observa su
alimenta también de bacterias. Se han detectado especies dife-
rentes de Endolimax en gallina, cobayo, tortugas y cucarachas.
Producto del desenquistamiento de E. nana, emergen
cuatro trofozoítos poco móviles; cada trofozoíto es una fina
amiba de aproximadamente 6 a 15 μm de diámetro, casi
nunca rebasa los 10 μm; el ectoplasma lo constituye una
delgada capa que rodea al endoplasma granular; en prepara-
ciones en fresco esta fase emite seudópodos cortos y de movi-
miento brusco, aunque su desplazamiento es lento, motivo
por el cual adopta su nombre (que significa “enano, interno
y lento”). Su núcleo es pequeño, con un endosoma grande
ubicado en el centro o cercano a la periferia de la membrana
nuclear; en esta zona la cromatina marginal está dispuesta
de manera fina; es frecuente encontrar vacuolas alimenti-
cias. La forma de prequiste secreta una pared y algunas veces
pueden reconocerse pequeñas barras cromatoides curvas en Figura 6-2. Quistes de Endolimax nana. Tinción con hematoxilina
su interior. férrica (100×).
58 Parasitología médica • Capítulo 6

núcleo delimitado por una membrana fina y la tinción desta- establecer la función patógena de esta amiba. Dicha investi-
ca la presencia de un gran endosoma más o menos central y gación se fundamentó en el estudio de la presencia de E. coli,
en el extremo contrario, podrá apreciarse la vacuola. Si bien así como de condiciones que podrían ser susceptibles para
es redondo, el endosoma luce irregular y está rodeado por comprobar un cuadro de amibiasis en animales y donde la
una pequeña capa de gránulos de cromatina, cuya disposición flora intestinal estaba implicada de manera importante. En
anular queda localizada entre el endosoma y la membrana el estudio se emplearon cultivos de E. coli, reproduciendo un
nuclear. cuadro agudo de amibiasis intestinal en 100% de estos ani-
Los quistes son variados en cuanto a forma; los hay ova- males; se argumentó en estas investigaciones que Entamoeba
lados, piriformes o esféricos y miden de 6 a 15 μm; con una coli era una especie patógena bajo condiciones apropiadas y
tinción temporal como lugol es posible observar la vacuola asociadas a la presencia intestinal de Streptococcus haemolyticus,
de glucógeno en un tono café rojizo. Presenta un solo núcleo así como a la presencia de bilis, y donde esta mezcla de orga-
con endosoma central o excéntrico, y en ocasiones pueden re- nismos, hábitat y condiciones propias intestinales generaban
conocerse fibrillas acromáticas cercanas al endosoma. Con la un cuadro agudo de infección en los animales, que era seme-
tinción de hematoxilina férrica, el citoplasma se observa gris jante al que produce E. histolytica.
azulado y una gran zona clara que corresponde al espacio que En el caso particular de E. polecki, la probable patogenia
ocupaba la vacuola de glucógeno (figura 6-3). que genera esta especie no está demostrada y sólo se relaciona
su hallazgo en muestra de heces y mayormente limitada a
ciertas o escasas manifestaciones digestivas.
Síndromes relacionados con amibas E. gingivalis es una especie de cavidad oral cuya capa-
comensales cidad como organismo patógeno sólo se ha detectado en el
Aun cuando estos comensales pueden ser eliminados de forma campo odontológico, donde se observa el espectro clínico
abundante, se sabe que el individuo que los presenta no ma- relacionado con procesos periodontales como caries, pulpi-
nifiesta sintomatología; sin embargo, algunos reportes en la tis, estomatitis ulceronecróticas, gangrenas, incluso casos de
literatura señalan la detección de amibas comensales y su pre- osteomielitis en maxilar y otras patologías maxilofaciales.
sencia se ha asociado a diversas manifestaciones clínicas como Existen factores de riesgo que podrían estar involucrados
y que facilitan cuadros de infección por esta especie, como
dolor abdominal, hiporexia, diarrea acuosa, palidez, bruxismo
la diabetes mellitus, el tabaquismo, pacientes con quimio-
y prurito; cabe señalar que la referencia de estos datos clínicos
terapia anticancerígena, entre otros. E. gingivalis se ha rela-
se ha asociado cuando en un examen de heces se identifica a
cionado con tasas de infección hasta de 50% en procesos de
Entamoeba coli y Endolimax nana. El hallazgo de E. nana y su
gingivitis, y el diagnóstico de estos casos prácticamente se
relación con ciertos cuadros de diarrea crónica, enterocolitis
establece porque el paciente presenta una enfermedad perio-
o urticaria, hacen que se discuta su papel como patógeno.
dontal avanzada.
En relación con E. coli, en 1943 se realizó un estudio
Las poblaciones de esta amiba se incrementan cuando
experimental en animales (perros y gatos) con la finalidad de
existen procesos de piorrea alveolar o con el empleo de pró-
tesis dentales, más aún si éstas no reciben la limpieza ade-
cuada. Entamoeba gingivalis también se aísla de bocas sanas
y con buena higiene. Es posible reconocer esta especie com-
partiendo el mismo hábitat con Trichomonas tenax, así como
sospechar su presencia ante un cuadro de movilidad dental
generalizada, con aumento de volumen de la lengua, halito-
sis, hemorragias y prurito a nivel gingival, particularmente
en personas jóvenes.
Se han reportado amibas descritas como E. gingivalis en
frotis vaginales, así como en el cuello uterino de mujeres que
empleaban dispositivos intrauterinos; asociada con esta ami-
ba se ha identificado a Actinomyces, bacteria filamentosa.
Este comensal se ha aislado también en primates, perros
y gatos. Hoy en día un aspecto importante a considerar es la
Figura 6-3. Quistes de Iodamoeba bütschlii. Tinción con hematoxili- infección hiv/sida, en la cual la presencia de E. gingivalis se
na férrica (100×). manifiesta acompañando patologías bucales dada la marcada
Amibas comensales 59

inmunosupresión que puede observarse en multitud de casos por la División de Parasitología del Centro de Control de En-
relacionados con un inmunocompromiso. También se ha aso- fermedades Transmisibles (cdc) ante la presencia de especies
ciado no sólo a patologías inflamatorias dentales, sino a casos intestinales no patógenas.
de osteomielitis maxilar e incluso a síndromes pulmonares y Se conocen las altas prevalencias de las especies comen-
ginecológicos como endometritis y lesiones nodulares en el sales. En México, al igual que en otras partes del mundo, su
cuello uterino. incidencia es elevada, con porcentajes variados que depen-
den del área geográfica y el grupo de edad. Se han detectado
frecuencias de E. coli y E. nana de 20 hasta 80% y para I.
Mecanismos de adaptación
bütschlii de 5 a 40%. Llama la atención que en multitud de
e inmunidad estudios epidemiológicos la mayoría de ellos no muestra in-
En esta relación simbiótica entre huésped y comensal es pro- formación sobre E. hartmanni, tal vez porque no se diferencia
bable que se alcance un equilibrio favorecido en mayor grado o se diagnostica como E. histolytica. E. nana tiene índices de
hacia el visitante, observándose una generosa multiplicación frecuencia que pueden variar de 4 hasta 40%. No es raro el
del mismo. El huésped cuenta con mecanismos de defen- hallazgo en el examen microscópico de la presencia de dos o
sa activados para eliminarlo; finalmente, el comensal es un más especies, sean comensales o patógenas.
agente extraño y su presencia no favorece ninguna función La frecuencia de E. gingivalis varía de 10 a 95%, par-
en el huésped; por el contrario, toma nutrientes de él, sigue ticularmente en pacientes con patologías dentales. Al ser
colonizándolo, vive bien adaptado y desarrollando tolerancia parte de la microbiota oral se pueden encontrar de 10 hasta
hacia el huésped. Quizá se establezca una selección de tole- 32% en individuos con buena higiene bucal. E. gingivalis ha
rancia mutua o tolerancia de adaptación, y un prototipo de sido identificada en la cavidad oral de niños mexicanos (San
proceso de “selección” podría estar dirigido a identificar Luis Potosí) de tres a 14 años de edad, con una incidencia de
determinantes antigénicos que estén presentes en varias ge- 8.7%, y en este mismo grupo y compartiendo ese espacio a
neraciones; al parecer estos determinantes persisten en dichas T. tenax en 12.7%, presentando ambos protozoarios 1.3%.
especies comensales, con lo cual se podría estar estimulando E. moshkovskii tiene reportes de frecuencia de 21.1% en
el desarrollo de una inmunidad protectora, que lentamente niños con sintomatología gastrointestinal.
establece una correlación con los determinantes del huésped, E. polecki rara vez se encuentra en los humanos, tiene
y el resultado es que estas especies ajenas podrían estar siendo una epidemiología general relativamente impredecible. La
reconocidas como “propias”, por ejemplo cuando se mues- infección es mucho más común en las zonas rurales que las
tran antígenos comunes o compartidos. urbanas. Se ha estimado que en Nueva Guinea existe preva-
Tales antígenos, compartidos desde el punto de vista ge- lencia de 19% en la población; asimismo, se considera endé-
nético y proveniente de estas especies inocuas, se conocen mica en Camboya, Vietnam, Paquistán y Venezuela. En Es-
como antígenos “eclipsados”; por su parte, si proceden del tados Unidos el diagnóstico de esta especie ha incrementado
huésped se denominan antígenos contaminantes. Asimismo, su frecuencia.
es posible que la ausencia de reacción del huésped a estas
amibas se explique por la teoría de las manchas inmunoló- Diagnóstico
gicas “ciegas”, es decir, antígenos presentes en el microorga-
nismo a los que el huésped no reacciona porque no reconoce Tratándose de especies comensales y con la ausencia la ma-
su presencia. yoría de las veces de manifestaciones clínicas, no habrá nin-
guna sospecha de infección. El diagnóstico de las especies
intestinales sólo puede establecerse mediante la observación
Epidemiología microscópica de materia fecal, ya sea por un examen directo o
Las infecciones por diversas especies de amibas intestinales mediante una técnica coproparasitoscópica de concentración.
son producto del fecalismo, de una deficiencia en los hábi- Es importante realizar el estudio en una serie de tres mues-
tos higiénicos, de la inadecuada disposición de excreta y de tras. En caso de duda, y siempre que se disponga de reactivos
una pobre información sobre el parasitismo. Estos factores y colorantes, se recomiendan las tinciones de hematoxilina
favorecen la transmisión no sólo de especies comensales sino férrica o la tricrómica de Gomori, las cuales permiten obser-
también de las patógenas. La presencia en el intestino de orga- var con mayor claridad las estructuras que diferencian a las
nismos comensales indica un ciclo fecal-oral en el individuo; especies.
el hallazgo en la materia fecal de un individuo es un marcador Para el aislamiento y observación de E. gingivalis, las
indiscutible de contaminación fecal. Este enfoque es sostenido muestras se recogen directamente del material bucal (como
60 Parasitología médica • Capítulo 6

el sarro) o del que se forma entre las piezas dentales. Se aplica diagnóstico; por el contrario, es preciso describirle la manera
una gota de solución salina isotónica mantenida a 37 °C sobre en que llegaron estas especies (coprofagia y fecalismo) y se
un portaobjetos, se deposita el producto biológico, se mezclan instalaron en el tubo digestivo, ya que de la misma forma
la solución y la muestra con el extremo de un cubreobjetos como adquirió a los comensales, también puede adquirir a
y así se procede a la observación inmediata a seco fuerte. Al los patógenos.
igual que en el caso de las amibas intestinales, si se dispone Las infecciones por E. gingivalis deben estar dirigidas al
de tinciones, es preferible efectuar un frotis de la muestra. mejoramiento de la higiene bucal y a evitar el empleo de
Hoy en día, apoyarse sólo en el estudio microscópico utensilios ajenos como cucharas; de la misma forma evitar-
para distinguir diferencias entre estas especies, no es lo único se el compartir líquidos al beber del mismo vaso o de otros
ni lo más recomendable. En la actualidad se cuenta con nue- recipientes. Debe derivarse al especialista la atención de las
vas herramientas diagnósticas moleculares, entre las cuales infecciones dentales o paradentales.
están detección de antígeno, detección de anticuerpos, aná-
lisis de isoenzimas por electroforesis y tecnología de PCR
que pueden utilizarse para diferenciar con mayor precisión Caso clínico
las especies, en particular del género Entamoeba.
Paciente masculino que acude a consulta por presentar
un cuadro caracterizado por dolor bucal, manifiesta que
Tratamiento desde hace ocho días se le dificulta mantener su boca
aseada y que ha observado la presencia de un material en
No hay un tratamiento antiparasitario específico contra las
forma de una densa placa dental.
especies comensales; la atención en salud se enfoca en mejo-
Este material se aprecia incluso después de haber
rar los hábitos higiénicos. Sin embargo, es conveniente aten-
cepillado su dentadura y aplicado productos como en-
der el aspecto clínico que muestre cada paciente y en el cual
juague bucal. También manifiesta que aun después de la
se identifique constantemente a alguna de estas especies.
limpieza nota un desagradable sabor de boca y en oca-
Algunos especialistas sugieren aplicar un tratamiento
siones ha presentado sangrado en la encía superior des-
antiparasitario para eliminar especies comensales, atribuible
pués del cepillado dental. Señala también la presencia
este hecho al diagnóstico coproparasitoscópico y si bien los
de una pequeña lesión semejante a una úlcera, así como
comensales por lo general no producen sintomatología o pa-
halitosis y ataque al estado general con cefalea persis-
tología, viven y se alimentan de los productos alimenticios
tente. Acudió con especialista dental y le diagnosticó
que necesita el huésped.
parodontitis inespecífica, la cual fue tratada con antibió-
Entre los fármacos se sugieren los de uso habitual, como ticos y antiinflamatorios. El paciente regresó a consulta
el metronidazol y la quinfamida. pues no percibió mejoría y menciona que actualmente
Las infecciones odontológicas asociadas a E. gingivalis muestra síntomas de un cuadro gripal y deterioro de su
pertenecen al campo del especialista, quien determinará la cuadro odontológico, lo que aumenta el dolor dental y
situación particular de cada caso. la cefalea.

Profilaxis
La salud profiláctica suele enfocarse en impedir una infección Discusión
por especies patógenas; tal es el caso de las diversas medidas E. gingivalis, protozoario comensal de cavidad bucal, se en-
higiénicas para el control de E. histolytica. Aplicando estas cuentra formando parte de la microbiota bucal; sin embargo,
medidas también se previene la infección por especies co- se ha aislado en mayor proporción en pacientes con diversas
mensales. patologías de esta zona. Esta especie se ha identificado en
Es recomendable sugerir a la persona extremar las me- 10% en personas sanas; su frecuencia aumenta con los malos
didas higiénicas personales, así como evitar el consumo de hábitos de higiene bucal y con la edad. Se ha encontrado
alimentos en la vía pública o de dudosa preparación, y con- hasta en 85% de los pacientes con periodontitis y en 77% de
sumir agua hervida, lavar frutas y verduras. Es indispensable periodontitis y HIV. Su presencia también se ha relacionado
el mejoramiento sanitario de la comunidad contando con la con casos de gingivitis necrosante.
adecuada disposición de excreta. Las manifestaciones clínicas asociadas con una infección
No es conveniente señalar al paciente que el hallazgo de en cavidad oral por E. gingivalis incluyen la dificultad del
protozoarios comensales intestinales resta importancia a ese paciente en mantener su boca aseada y con la formación de
Amibas comensales 61

pequeñas o grandes placas que se regeneran rápidamente aun cluso impedir que el individuo se habitúe a una sintomatolo-
después del cepillado o de la aplicación de procedimientos de gía caracterizada por cuadros de fatiga y cefaleas, lo que con-
control de la placa dentobacteriana, además del desarrollo lleva a una evolución de mayor deterioro periodontal y a que
de un sabor desagradable en la boca referido como “sabor a al aplicar un tratamiento convencional posterior, la respuesta
ajo” y la persistente halitosis. Se observa que las encías san- no sea favorable. El retraso en la atención de estos casos podría
gran con facilidad y por el medio en que se encuentra llegan empeorar la salud dental y el estado general del paciente.
a formarse ulceraciones, además de otras manifestaciones que Estudios realizados en ratas infectadas con E. gingivalis
van desde la sequedad bucal hasta ardor en ojos y datos de han mostrado diversos cambios titulares importantes como
fatiga y cefaleas frecuentes. erosión, infiltración de células inflamatorias, hiperplasia
Los cuadros referidos a la presencia de E. gingivalis seme- epitelial del canal gingival y formación de abscesos perio-
jan a un cuadro gripal reciente o repetitivo. El aislamiento e dontales con resorción ósea. Aun cuando estos datos no se
identificación de E. gingivalis debe realizarse para aplicar el han demostrado en humanos, es importante ubicarlos en el
tratamiento adecuado y evitar el deterioro del paciente e in- campo de la prevención.

Preguntas para reflexionar Respuestas a las preguntas


de la evaluación inicial
1. ¿Qué situaciones podrían propiciar que especies comen-
sales se tornen patógenas para el humano? 1. Es una relación simbiótica entre dos organismos en la
2. ¿Qué función pueden desempeñar las reacciones inmuni- que uno, el comensal, se alimenta y vive dentro de otro, el
tarias celular y la humoral ante la presencia de estas ami- huésped, que no recibe beneficio ni sufre daño.
bas? 2. Entamoeba gingivalis, que habita en la cavidad bucal. En-
3. De forma experimental, ¿qué sucedería si los trofozoítos tamoeba dispar, Entamoeba coli, Entamoeba hartmanni,
de estas amibas entraran en contacto constante sobre un Endolimax nana e Iodamoeba bütschlii que se alojan en
tejido y en las mismas condiciones en que lo hace E. his- el intestino grueso.
tolytica? 3. Las formas que presentan son las de quiste, metaquiste,
4. ¿Cuál es la problemática real que muestra la presencia de trofozoíto y prequiste, con excepción de E. gingivalis que
amibas comensales en México? sólo desarrolla trofozoítos. El ciclo inicia con la ingestión
5. ¿Cuál es la epidemiología que muestra E. gingivalis como del quiste, que al llegar al intestino delgado se desenquis-
especie comensal en el campo de salud odontológica y ta y libera trofozoítos metaquísticos que se transportan
que se relacione en la patogenia general humana? hacia el intestino grueso; ahí se multiplican por fisión bi-
naria y algunos pueden redondearse para enquistarse y
salir al exterior con las heces.
4. Básicamente el tamaño, aunque E. histolytica y E. dispar
presentan las mismas dimensiones tanto quiste como tro-
fozoíto. E. hartmanni es de menor tamaño y tanto ésta
como E. dispar no fagocitan eritrocitos.
5. Entamoeba gingivalis se identifica en un examen directo
de material dentario, y las amibas intestinales mediante
un examen de materia fecal o realizando frotis y tinciones
permanentes.
6. No se administra tratamiento antiparasitario; la atención
radica en mejorar los hábitos higiénicos.
7. Su presencia en el humano es un marcador indiscutible
de contaminación fecal y coprofagía. Hay probabilidad de
padecer infección por especies patógenas, ya que se ad-
quieren por el mismo mecanismo.
8. E. gingivalis se ha asociado no sólo con procesos odonto-
lógicos incluyendo osteomielitis maxilar, sino también con
patologías pulmonares, ginecológicas como endometritis
y su presencia a nódulos en el cuello.
62 Parasitología médica • Capítulo 6

Bibliografía

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CAPÍTULO Giardiasis
7
Martha Ponce Macotela
Mario Noé Martínez Gordillo

Contenido
• Introducción • Diagnóstico
• Características generales del parásito • Tratamiento
• Ciclo biológico • Prevención
• Mecanismos patogénicos • Epidemiología
• Manifestaciones clínicas • Caso clínico
• Respuestas del huésped a la infección
• Mecanismos del parásito que contrarrestan la
respuesta del huésped

millones de personas infectadas. Algunas evidencias sugie-


Preguntas de evaluación inicial
ren que este protozoario flagelado se separó temprano de la
1. ¿Qué otros sinónimos tiene Giardia intestinalis? línea principal de los eucariontes. No tiene mitocondrias ni
2. ¿Cuántos estadios tiene este parásito en su ciclo de vida? aparato de Golgi característicos, carece de hidrogenosomas
3. ¿Cómo se adquiere la infección y cuál es el estadio in- y peroxisomas. Produce su energía por glucólisis anaeróbi-
fectante?
4. ¿La giardiasis es una zoonosis? ca; además, el ácido ribonucleico recombinante (rnar) y sus
5. Describa tres mecanismos del huésped para evadir los ribosomas tienen mayor similitud con el ácido ribonucleico
efectos patogénicos de los trofozoítos. (rna) y ribosomas de los procariontes.
6. Mencione tres formas mediante las cuales el parásito Se han descrito varias especies. Filice (1952), con base
evita la agresión del huésped.
7. Describa tres factores que influyen en la producción de
en la morfología del trofozoíto y del cuerpo medio, descri-
la malabsorción intestinal. bió tres especies: a) G. muris, parásito de roedores y aves; los
8. ¿Por qué es fundamental que la población infantil no pa- trofozoítos son más redondos que largos, con cuerpos medios
dezca giardiasis? pequeños y redondos. b) G. agilis se encuentra en anfibios;
9. ¿Por qué para algunos pacientes se solicitan estudios
los trofozoítos son alargados y delgados, sus cuerpos medios
coproparasitoscópicos en series de cinco?
10. ¿Qué conductas son recomendables para prevenir la tienen forma de lágrima. c) G. duodenalis infecta a mamífe-
giardiasis? ros, entre ellos el humano; los trofozoítos son piriformes y
los cuerpos medios tienen la forma de uña de martillo. Pos-
teriormente se describieron dos especies en aves G. ardea y
Introducción G. psittaci, y otra en roedores, G. microti, que tienen el cuerpo
medio en forma de uña de martillo, pero con características
Giardia intestinalis (sinonimia: G. lamblia, G. duodenalis) es que los discriminan. G. ardea sólo tiene un flagelo caudal y
un parásito cosmopolita y exitoso. La Organización Mundial G. psittaci carece del flanco ventrolateral. Los quistes de G.
de la Salud (oms) calculó que desde 1988 hay más de 250 microti presentan dos trofozoítos y la secuencia del gen de la
63
64 Parasitología médica • Capítulo 7

pequeña subunidad del rna ribosómico es diferente a la de medios de cultivo puros; es así como precisa su morfología.
las otras especies. La oms propuso denominar Giardia intesti- Huw Smith, más tarde, realiza una tinción con metanol-
nalis al parásito de humanos y es el término que se usa en este violeta favoreciendo las descripciones morfológicas del pro-
capítulo (Boreham et al., 1990). tozoario. Vale la pena destacar la labor incesante de Leeuw-
Mediante el uso de herramientas moleculares se han des- enhoek para demostrar la presencia de una gran variedad de
crito siete ensambles en el grupo morfológico G. intestinalis: microorganismos, entre ellos Giardia lamblia y reportarlo a
los ensambles A y B son zoonóticos, parasitan a humanos y la academia científica más importante de su época. Es nota-
animales; los ensambles C y D se describieron a partir de ble su creatividad para fabricar un microscopio simple a tra-
trofozoítos obtenidos de perros; el ensamble E en rumiantes, vés del tallado del vidrio hasta darle la curvatura, quizá con
porcinos y equinos; el ensamble F en felinos y el ensamble maniobras artísticas, colocando la lente entre dos placas de
G en ratas. latón o plata para observar, entre otros materiales, sus propias
Actualmente se conoce la mayor parte del genoma de heces diarreicas, las cuales contenían trofozoítos del parásito.
G. intestinalis del aislado wb C6 (ensamble A) y avances del También debe destacarse que Dobell, un científico escéptico
genoma del aislado gs-h7 (ensamble B, atcc50581) (Fran- e igualmente hábil en el laboratorio, pudo tener cultivos axé-
zén et al., 2009). El nivel de similitudes y diferencias entre nicos para demostrar la morfología de Giardia.
ensambles pone en la palestra de la discusión el estatus taxo-
nómico del parásito. Características generales del parásito
G. intestinalis tiene dos estadios durante su ciclo de vida: el
Reseña histórica trofozoíto, que es la forma trófica o vegetativa que produce
El descubrimiento de Giardia lamblia se remonta a la segun- las manifestaciones clínicas, y el quiste, que es la estructura
da mitad del siglo xvii, época en la que un holandés sin es- de resistencia y transmisión. El trofozoíto es piriforme, mide
tudios de ciencia y que mantenía su economía en el trabajo entre 12 y 15 μm de longitud, 5 a 9 μm de ancho y 1 a 2 μm
de telas, se dedicaba como aficionado al tallado de lentes, en de espesor, es aplanado o cóncavo ventralmete y dorsalmente
el que empleaba materiales que pulían el vidrio y le permi- es convexo; tiene dos núcleos, cuerpos basales, cuatro pares
tían darle la curvatura, con ello ampliaba las imágenes de de flagelos, cuerpo medio y vacuolas periféricas (figura 7-1).
cualquier objeto, lo que le permitía observar con más de- El disco suctor se encuentra en la región anteroventral del
talle las estructuras de materiales que a simple vista no se trofozoíto; es cóncavo, ligeramente asimétrico y compuesto
alcanzan a ver. Se trata de Anton van Leeuwenhoek, nacido de tubulina, giardinas y otras proteínas contráctiles; la cresta
en Delft, Holanda, en 1932. Científico curioso, persistente y lateral delimita la región periférica del disco.
quisquilloso de la ciencia, a pesar de que en esa época se le
consideraba un hombre poco culto debido a que sólo hablaba
el holandés cuando la gente de gran cultura conocía el latín.
Con relación al descubrimiento de Giardia lamblia, el 4 de
f
noviembre de 1681 Leeuwenhoek escribe una carta a la Real
Sociedad, traducida y leída en inglés el 9 de noviembre, seña- n
lando lo siguiente: “[…] I have sometimes also seen tiny creatures
moving very prettily; some of them a bit bigger, others a bit less, than cm
a blood-globule but all of one and the same make. Their bodies were
somewhat longer than broad, and their belly, which was flattish,
furnished with sundry little paws, wherewith they made such a stir
in the clear medium and among the globules, that you might even
fancy you saw a woodlouse running up against a wall; and albeit
they made a quick motion with their paws, yet for all that they
made but slow progress”.
Desde luego que Leeuwenhoek no señala el nombre del
parásito; sin embargo, Clifford Dobell, biólogo hábil en el
trabajo del laboratorio, en 1932 describe y explica las obser-
vaciones de Leeuwenhoek indicando que se trata de Giardia Figura 7-1. Trofozoítos con tinción de Giemsa. Abreviaturas: cuerpo
lamblia después de que mantiene a este microorganismo en medio (cm), flagelo (f) y núcleo (n).
Giardiasis 65

Recientemente se publicó que posee genes que codifican para


la síntesis del colesterol (Hernández y Wasserman, 2006).
El quiste es de forma ovoide, mide entre 8 y 12 μm
n de longitud, 7 a 10 μm de ancho y la pared es de 0.3 a 0.5
μm de espesor. Se compone de una capa filamentosa exter-
na y otra membranosa interna, la primera cubierta de fila-
a
mentos de 7 a 10 nm, N-acetilgalactosamina y proteínas
n de pared quística y otras de 88 y 102 kDa. Se observan de
n dos a cuatro núcleos, vacuolas, cuerpos basales, axonemas,
fragmentos del disco suctor y cuerpo medio; entre la pared
y la membrana plasmática se identifica un espacio lacunar
(figura 7-4) (Adam, 2001).
n

A B C

cl ds

fvl
Fv
Fc
Figura 7-2. Microscopia electrónica de transmisión. La sección
coronal de los trofozoítos muestra el disco suctor (flechas gruesas), Fc
núcleos (n), axonemas (a), cresta lateral (cl), flanco ventrolateral (fvl) y
vesículas dorsales (flechas delgadas). Cortesía de A. González-Maciel
y M. Ponce-Macotela. Figura 7-3. Microscopia electrónica de barrido de trofozoítos de
Giardia intestinalis. A) En la región ventral se observa el disco suctorio
(ds) y los flagelos ventrales (fv). B) Superficie dorsal lisa. C) Superfi-
Ambos núcleos son activos; desde el punto de vista de cie dorsal con protuberancias y digitaciones del citoplasma. Flagelos
la transcripción son similares y tienen la misma cantidad caudales (fc). Cortesía de Y. Rufino-González y B. Mendoza-Garfias.
de dna. Se han descrito genes de la meiosis implicados en
fenómenos de reducción, lo que sugiere que cada núcleo
es diploide y el trofozoíto tetraploide. Recientemente se
describió un nucléolo atípico (grumos de heterocromatina
en contacto con la membrana nuclear) y algunos genes co-
dificadores de este organelo. Los flagelos surgen de un cuer-
po basal, con axonemas que tienen la estructura típica de
9 + 2. El cuerpo medio está formado por microtúbulos que
confieren soporte al citoesqueleto. Las vacuolas periféricas
se encuentran por debajo del plasmalema ventral, dorsal
y entre los lóbulos del disco adhesivo; algunas contienen
proteincisteinasas (quizá tengan función lisosomal). Debi- cm
do a que la membrana de las vacuolas es similar a la del
plasmalema, se ha sugerido que hay intercambio de sustan-
cias entre las dos. En el citoplasma también hay ribosomas,
microtúbulos, endomembranas y depósitos de glucógeno.
El flanco ventrolateral está alrededor del disco suctor con
probable función contráctil (figuras 7-2 y 7-3). Se ha docu-
mentado la presencia de un aparato de Golgi en trofozoítos
en fase de enquistamiento (Adam, 2001).
Los trofozoítos no sintetizan de novo: sales biliares, nu- Figura 7-4. Quiste teñido con lugol en el que se observan dos nú-
cleótidos, aminoácidos y micronutrientes como el hierro y zinc. cleos y fragmentos del disco suctorio.
66 Parasitología médica • Capítulo 7

Ciclo biológico Otra forma de traumatismo lo constituye la pérdida de


la continuidad del epitelio intestinal que puede estar indu-
Los quistes que salen del organismo del huésped con las heces cida por alteraciones en la resistencia transepitelial debido al
de humanos y animales contaminan el agua y los alimentos. debilitamiento de las uniones fuertes de la zonula occludens,
El mecanismo de infección es por fecalismo. La dosis mínima o por hiperplasia de células caliciformes; este fenómeno pro-
infectiva es de 10 quistes; la activación se inicia cuando los duce huecos tan grandes que permitirían el ingreso de trofo-
quistes pasan por el estómago y se exponen al pH ácido; se zoítos al epitelio intestinal. Por sí misma, la discontinuidad
desenquistan en el duodeno debido al cambio a pH alcalino. epitelial produce despolarización de las membranas, desequi-
El proceso es rápido y los trofozoítos se dividen asexualmente librio electrolítico, hiperperistaltismo y diarrea.
por fisión binaria longitudinal después de salir del quiste y
en ocasiones antes de terminar su salida. Las sales biliares y el
colesterol favorecen su crecimiento, lo que promueve la colo- Enzimático
nización de duodeno, yeyuno e incluso íleon. La duración del Los trofozoítos de G. intestinalis secretan proteinasas que
ciclo celular varía entre seis y 20 horas o más (Feely, 1986; pueden contribuir al daño de los enterocitos de varias formas:
Ponce-Macotela et al., 1990). El enquistamiento se inicia de- dañando las células del epitelio intestinal o actuando como
bido a la escasez de colesterol; es probable que la carencia del caspasas para promover la apoptosis. Otras enzimas, como las
colesterol en la membrana citoplasmática active la expresión sulfatasas, fosfatasa ácida, hidrolasas, tiolproteinasas, pueden
de genes codificadores de las proteínas del enquistamiento favorecer la adherencia del parásito al epitelio intestinal de-
(Luján et al., 1998). Cuando los quistes se excretan con las bido a que atacan a las glucoproteínas de los enterocitos y al-
heces ya son infectivos (figura 7-5). teran la integridad de las microvellosidades. Giardia modula
las interacciones proteína-proteína mediante las proteínas de
Mecanismos patogénicos superficie variables (vsp, por sus siglas en inglés) que tienen
una secuencia lim o estructuras ring formando enlaces coor-
Giardia causa daño por diferentes mecanismos, como trau- dinados con iones divalentes, considerados micronutrientes
mático, enzimático, tóxico, formación de barrera mecánica, esenciales para el hospedero.
competencia con el huésped, ruptura de uniones celulares y
apoptosis (Farthing, 1997; Eckmann y Gillin, 2001; Adam,
2001; Buret et al., 2002; Chin et al.., 2002; Ponce-Macotela
Tóxico
et al., 2008). Otro mecanismo que explica los síntomas y la atrofia de
las vellosidades es el que inducirían las toxinas de Giardia.
Traumático Aunque todavía no se ha logrado aislar alguna, se ha obser-
vado que el medio de cultivo en donde crecieron trofozoí-
La adhesión y colonización de trofozoítos de Giardia al in- tos produce alteraciones en el epitelio intestinal. Además,
testino, está mediada por factores físicos y bioquímicos En se ha descrito el gen de una proteína variable de superficie
el primer caso, la adherencia se produce por la presión nega- (crp136) que tiene secuencias repetidas que codifican un
tiva del disco suctor (como el de una ventosa), generada por péptido que tiene una homología de 57% con una sarafo-
la fuerza hidrodinámica secundaria a la actividad constante toxina. Las sarafotoxinas son péptidos pequeños que se en-
de los flagelos ventrales; este mecanismo también explica la cuentran en venenos de diversos organismos. Sin embargo,
adherencia de los trofozoítos al plástico y el vidrio, cuando la homología encontrada es con el veneno de Ataraspid eng-
crecen en cultivos in vitro. gadensis y el envenenamiento por la mordedura de esta ser-
En la adhesión mediada por mecanismos bioquímicos piente ocasiona dolor abdominal, diarrea, vómito, náuseas,
participan las proteínas contráctiles del disco suctor: giar- síntomas semejantes a los observados en la giardiasis.
dinas, actina, miosina, tropomiosina y vinculina. El daño
bioquímico mediado por lectinas se debe a la interacción es-
pecífica entre las células intestinales y el parásito. Esta inte-
Barrera mecánica
racción produce exfoliación, lisis celular, aumento del índice Debido a la gran superficie de absorción de las microvellosi-
mitótico y aplanamiento de las microvellosidades. Giardia dades es difícil pensar que los trofozoítos formen una barre-
posee una lectina (taglina) de 28 a 30 kda que se une a un ra mecánica que impida la absorción total de los nutrientes;
receptor de membrana que contiene residuos de manosa-6- sin embargo, cuando las condiciones de crecimiento de los
fosfato. trofozoítos son óptimas, se multiplican en forma vertigino-
Giardiasis 67

ión
n gest
I

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B C D

El
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ac

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E

I H G F

Figura 7-5. Ciclo biológico. A) Quistes en el ambiente. B) Quiste activado por pH ácido (estómago) y pH alcalino (duodeno). C) Última fase de
salida del trofozoíto; quiste vacío (qv) y trofozoíto (t). D) Trofozoíto en división. E) Inicio de la colonización. F) Trofozoítos llenos de vesículas en
proceso de enquistamiento. G) Reacomodo del disco suctorio. H) Quistes en formación. I) Quiste maduro.

sa. En duodeno y yeyuno, la bilis favorece el crecimiento de entre las uniones celulares y el citoesqueleto es muy impor-
Giardia, por lo que algunas zonas podrían estar cubiertas tante para la regulación de permeabilidad paracelular. Se ha
de trofozoítos. demostrado que los trofozoítos de Giardia desorganizan las
uniones celulares a nivel de la ZO-1 e incrementan la per-
Ruptura de uniones celulares meabilidad transepitelial.

Las proteínas implicadas en las uniones celulares del epitelio


intestinal son: zonula occludens (ZO-1) cingulina, ocludina
Apoptosis
y claudinas. La ZO-1 es una proteína de membrana periféri- Recientemente se demostró que Giardia induce apoptosis
ca que interactúa en la unión de la claudina con la F-actina en enterocitos y es dependiente de caspasa-3. Se ha propues-
del citoesqueleto. La función de intermediaria de la ZO-1 to que la apoptosis puede ser otra causa de aumento de la
68 Parasitología médica • Capítulo 7

permeabilidad intestinal. También se ha establecido que la deshidrogenasa; la reducción de la primera provoca menor
muerte celular por apoptosis contribuye a la resolución de producción de atp; la falta de energía en las células da lu-
la inflamación. Este tipo de muerte celular se ha correlacio- gar a una disminución de la absorción intestinal de carbo-
nado con la ruptura de uniones celulares a nivel de la ZO-1 hidratos y aminoácidos. Cuando se reduce la concentración
e incremento de la permeabilidad epitelial; además, el efecto de glucosa-6-fosfatodeshidrogenasa, se altera la biosíntesis de
proapoptótico de Giardia podría explicar la carencia de in- lípidos y otras macromoléculas que son necesarias para la in-
filtrado inflamatorio en tejido intestinal colonizado por este tegración de las membranas celulares.
parásito.
Manifestaciones clínicas
Hiperplasia de células caliciformes El periodo prepatente es de nueve días, el de incubación de
Se ha observado que Giardia estimula el incremento de 12 a 19 días y el de infección dura algunas semanas a varios
células caliciformes. La hiperplasia de células caliciformes meses; esta parasitosis puede ser asintomática o sintomática
deriva en alteraciones en la continuidad epitelial, provo- con fase aguda o crónica. En la giardiasis aguda puede haber
cando un debilitamiento de las uniones celulares, lo que una gran diversidad de signos y síntomas. En una serie de 400
aumenta la posibilidad de que algún trofozoíto de Giardia pacientes pediátricos con giardiasis pura, Álvarez-Chacón en-
pueda penetrar el epitelio. contró dolor abdominal (69.3%), diarrea (48.38%), hiporexia
(45.89%), meteorismo (32.67%), náuseas (21.45%), flatu-
Competencia con el huésped lencia (11.97%), estreñimiento (11.47%), vómito (9.98%),
peso bajo (9.48%), palidez de tegumentos (8.48%), borbo-
Los trofozoítos compiten con el huésped por las sales biliares; rigmos (4.49%) y talla baja (3.24%). El dolor abdominal
su disminución en el intestino altera la formación de micelas es epigástrico y transprandial inmediato; las evacuaciones
y se produce malabsorción de las grasas, con la consecuente son explosivas, profusas, acuosas al principio y después es-
esteatorrea (eliminación de grasas en la materia fecal). Tam- teatorreicas, fétidas, sin sangre ni moco. Debido a que al-
bién compiten por colesterol y fosfolípidos, ya que Giardia gunas manifestaciones clínicas en esta fase son semejantes a
no los puede sintetizar de novo. Tampoco sintetiza aminoá- las provocadas por virus (rotavirus), bacterias (Campylobacter,
cidos ni nucleótidos, y cuando los necesita los adquiere del Helicobacter pylori, Escherichia coli toxigénica) y otros parásitos
medio. Para la producción de energía, además de metabolizar (Entamoeba histolytica, Cryptosporidium), es necesario realizar
glucosa, utiliza aspartato, alanina y arginina. diagnóstico diferencial y considerar el largo periodo de incu-
Para Giardia la cisteína es un aminoácido fundamental bación, el tiempo prolongado de los síntomas, y la ausencia
porque es un componente de las vsp, en donde forma en- de fiebre y sangre en heces.
laces disulfuro; las vsp están involucradas en la interacción La giardiasis crónica puede durar varios meses y es de-
proteína-proteína y en el manejo de iones divalentes, espe- vastadora en la población infantil, porque el dolor abdominal
cialmente Zn2+, Fe2+, Ca2+. Evidentemente, la carencia de Fe se exacerba durante la ingestión de los alimentos y los niños
impactará en la función de la hemoglobina y la carencia de dejan de comer, además de que presentan meteorismo, dis-
Zn en muchas enzimas que lo requieren como cofactor. Se ha tensión abdominal, flatulencia fétida, malestar general, aste-
descrito que el Zn desempeña importantes funciones en el nia, adinamia, pérdida de peso, talla baja y déficit cognitivo.
mantenimiento y desarrollo cerebral. Las evacuaciones son blandas, esteatorreicas y fétidas. Puede
Todos estos mecanismos contribuyen al daño epitelial y alternarse con periodos de estreñimiento o evacuaciones de
a la malabsorción. La atrofia de las vellosidades y el recam- consistencia normal. En esta fase, los pacientes pueden desa-
bio acelerado de los enterocitos debido al aumento del índice rrollar malabsorción de vitaminas A y B12, micronutrientes
mitótico generan enterocitos inmaduros con producción en- como hierro y zinc, proteínas, lípidos y carbohidratos, sobre
zimática defectuosa o disminuida. Estudios experimentales todo lactosa, sacarosa, maltosa e isomaltosa. Los individuos
en animales infectados con Giardia mostraron reducción de que cursaron con malabsorción de lactosa pueden mostrar
la actividad de las disacaridasas: maltasa, isomaltasa, sacara- intolerancia a la leche, por lo que se recomienda no inge-
sa, trehalosa, lactasa, isomaltasa y glucoamilasa. Además, se rir productos lácteos durante los primeros 30 días después
encuentran disminuidas las enzimas producidas en las micro- del tratamiento. El diagnóstico diferencial se establece con
vellosidades: glucoamilasa, isomaltasa y atp-asa basolateral enfermedad celiaca, esprue, enteritis tropical, úlcera duode-
de la bomba Na + /K +. También están atenuadas las enzi- nal, hernia hiatal, e infecciones por Cryptosporidium, Isospora y
mas celulares: isocitrato deshidrogenasa y glucosa-6-fosfato Strongyloides stercoralis.
Giardiasis 69

Hay algunos informes de giardiasis relacionados con ur- Los trofozoítos de Giardia evitan el ataque proteolítico
ticaria, artritis, arteritis retiniana, iridociclitis, colecistitis y mediante dos mecanismos: inhiben a la tripsina y se pro-
pancreatitis (Wolfe, 1992; Hill, 1993). tegen con sus proteínas variables de superficie (vsp), ricas
en cisteína, aminoácido que proporciona gran estabilidad es-
tructural porque forma puentes disulfuro. Además, las vsp se
Respuestas del huésped
unen al zinc, cuya carencia en el ambiente intestinal inhibe
a la infección la función de las carboxipeptidasas dependientes de este me-
En la interacción huésped-parásito, el huésped cuenta con tal. Los trofozoítos evitan la agresión del no debido a que
mecanismos inespecíficos y específicos para eliminar al pa- consumen la arginina, que es necesaria para la formación de
rásito; por ejemplo, en el duodeno las sales biliares actúan no mediante la ons. La tiolproteinasa de Giardia hidroliza
como detergentes e inhiben el crecimiento de los microorga- a las proteínas y rompe las inmunoglobulinas a nivel de la
nismos. Los ácidos grasos libres (productos de la lipólisis) y bisagra, lo que facilita la evasión de la reacción inmune del
las proteinasas (carbopeptidasas) dañan las membranas cito- huésped. Otro mecanismo de evasión de la respuesta inmune
plasmáticas de microorganismos invasores. Las células cali- está mediado por el recambio de las proteínas variables de
ciformes productoras de moco protegen la mucosa intestinal superficie (Eckmann y Gillin, 2001).
de alimentos, virus, bacterias y parásitos. Los enterocitos
producen óxido nítrico (no) a partir de arginina mediante la Diagnóstico
óxido nítrico sintasa (ons) y lo liberan hacia la luz del intes-
tino; el no y sus derivados, nitratos y nitritos, son potentes Después del minucioso examen clínico y epidemiológico, en
antiparasitarios; además, regulan la integridad de la mucosa el que se consideran la diarrea de larga evolución, pérdida de
y el tono vascular del intestino. peso, malabsorción, hábitos higiénicos deficientes y fuentes
Debido a que Giardia estimula la vía alterna del comple- de agua no potable para beber, el desafío en el laboratorio
mento, las IgG3 e IgM lisan a los trofozoítos en presencia de será encontrar quistes, trofozoítos de Giardia en las heces, o
complemento. La eliminación del parásito se ha correlaciona- ambos; trofozoítos en sondeo duodenal, por cápsula de Beal
do con la IgA secretora; además, los macrófagos de las placas o de biopsia del intestino delgado, e indirectamente por co-
de Peyer, en presencia de anticuerpos anti-Giardia, fagocitan proantígenos y secuencias de dna específicas de Giardia me-
grandes cantidades de trofozoítos que mueren por mecanismos diante la reacción en cadena de la polimerasa (pcr) (Wolfe,
oxidativos. Los macrófagos activados por ifn-a fagocitan a 1992; Hill, 1993; Faubert, 1996; Thompson, 2004).
los trofozoítos, aunque en este proceso también se dañan los
enterocitos (Eckmann & Gillin, 2001; Farthing, 1997). Estudios coproparasitoscópicos
En pacientes con evacuaciones blandas o diarreicas se indi-
Mecanismos del parásito ca examen directo en fresco y hay mayor probabilidad de
que contrarrestan la respuesta encontrar trofozoítos. Los estudios coproparasitoscópicos
del huésped (cps) cualitativos de concentración, como flotación (sulfato
de zinc) o sedimentación (formol-éter), se llevan a cabo en
Giardia es de los pocos microorganismos que colonizan un pacientes con evacuaciones de consistencia formada o semi-
ambiente tan hostil como el intestino delgado. Estudios in formada y es muy posible encontrar quistes. La sensibilidad
vitro muestran que las sales biliares favorecen su crecimiento. en los cps se incrementa cuando se analizan varias muestras
El parásito necesita colesterol para la biogénesis de sus mem- de diferentes días: con una muestra la sensibilidad es de 76
branas, y se sugiere que emplea sales biliares como acarrea- a 86%; con dos, de 90%, y con tres hasta de 97.6%. Según
doras de colesterol y fosfolípidos, aunque recientemente se estos datos, el número mínimo de estudios cps para descartar
ha documentado que posee material genético para la síntesis la giardiasis es de tres. Si los resultados son negativos y el
de colesterol. En el ambiente intestinal puede haber pocos cuadro clínico es consistente con esta parasitosis, se deberá
ácidos grasos libres (lipólisis) debido a que los trofozoítos solicitar una serie de cinco estudios.
producen un inhibidor de la lipasa pancreática; además, el
parásito se protege de los ácidos grasos libres porque induce
el incremento de células caliciformes, pero algunos compo-
Sondeo duodenal
nentes del moco también pueden dañarlo, como se ha visto Si los estudios coproparasitoscópicos son negativos, se pue-
en Entamoeba histolytica y Nipostrongylus brasiliensis. de realizar sondeo o aspirado duodenal con biopsia, ante-
70 Parasitología médica • Capítulo 7

riormente y de forma tradicional se emplea la cápsula de Tratamiento


Beal. En este primer caso se utiliza una cápsula de gelatina
que contiene 90 cm de hilo de nailon y un contrapeso al El tratamiento debe establecerse en pacientes con giardiasis
final. El paciente en ayuno deglute la cápsula con alguna asintomática o sintomática, debido a que en ambos casos los
trofozoítos crean un ambiente adverso para los procesos de ab-
bebida (té) y el extremo del hilo se sujeta en la mejilla con
sorción, lo que se traduce en diferentes grados de malabsorción
cinta adhesiva; se le indica que camine durante cuatro horas
y déficit del desarrollo intelectual. Hasta el momento no hay
para que la cápsula se desintegre en el estómago, el hilo
un antigiardiásico específico y los antiparasitarios utilizados
llegue hasta el duodeno y el contrapeso se expulsará con las
han sido los derivados de la naranja de acridina, nitroimida-
heces. El hilo se extrae impregnado con líquido duodenal zoles, nitrofuranos, bencimidazoles y nitrotiazol (cuadro 7-1).
(color amarillo) y moco. El líquido del hilo se exprime en Todos producen efectos adversos y por su uso indiscriminado
una caja de Petri, se coloca una alícuota en un portaobjetos están apareciendo cepas resistentes (Gardner y Hill, 2001).
y se buscan los trofozoítos mediante microscopia de con- La quinacrina se utilizó como antigiardiásico desde la
traste de fases. década de 1940-1949. Se han propuesto dos mecanismos de
El aspirado duodenal es un método invasivo, ya que se acción: 1) el medicamento se intercala en el dna de los trofo-
requiere anestesia para la endoscopia, pero la ventaja es que zoítos, con lo que se inhibe la síntesis de los ácidos nucleicos;
se obtiene más fluido y al mismo tiempo se puede obtener 2) interactúa con los lípidos de las membranas y aumenta su
tejido para el estudio histopatológico. permeabilidad. La dosis en adultos es de 100 mg tres veces
al día, durante siete días, y en niños es de 6 mg/kg/día, tres
Estudio inmunológico veces al día durante 10 días. La eficacia es de 90 a 95%.
Puede causar náuseas, vómito y dolor abdominal, y también
El estudio inmunológico tiene la ventaja de que pueden de- pigmentación amarilla de piel, esclerótica y orina. La derma-
tectarse pequeñas concentraciones de antígenos en heces; la titis exfoliativa y la psicosis tóxica son poco frecuentes; está
prueba elisa que reconoce el antígeno GSA-65 tiene sensi- contraindicada en niños menores de cinco años.
bilidad de 98% y especificidad de 100%. El metronidazol se utiliza en la giardiasis desde la
década de 1970-1979. El mecanismo de acción incluye tres
Estudio molecular fases: 1) entrada del metronidazol al trofozoíto por difusión
pasiva; 2) reducción del grupo nitro. El transporte de electro-
Para el diagnóstico molecular basado en la detección del nes depende de la piruvato ferrodoxina oxidorreductasa (pfor)
dna de Giardia en materia fecal mediante la pcr, se han y la ferrodoxina (Fd). La pfor cataliza la descarboxilación del
usado genes que codifican enzimas, como la glutamato piruvato a acetil-CoA y CO2, y de modo paralelo reduce la
deshidrogenasa (gdh) y la triosa fosfato isomerasa (tpi), Fd. En la vía normal, la Fd es la captadora de electrones. El
proteínas como la giardina y el gen de la pequeña subuni- metronidazol reemplaza a los protones como captadores de
dad del rna ribosómico. La amplificación del gen de la tpi electrones y reduce el grupo 5-nitro a su radical nitro tóxi-
brinda sensibilidad de 94% y la amplificación del gen de co; 3) efecto citotóxico del producto reducido; el radical nitro
la gdh puede detectar los siete ensambles descritos hasta el tóxico interactúa con la doble hélice del dna y da lugar a la
momento. pérdida de estructura y ruptura de las cadenas helicoidales.

Cuadro 7-1. Esquemas de tratamiento para Giardia con diferentes fármacos.

Antiparasitario Dosis pediátricas Dosis en adultos

Quinacrina 6 mg/kg/día, 3 veces/día por 10 días 100 mg, 3 veces/día por 7 días

Metronidazol 7.5 mg/kg/día, 3 veces/día por 5-7 días 250 mg 3 veces/día por 7 días

Tinidazol 50 mg/kg (sin pasar de 2.0 g/día), por 2 días 2.0 g/día en una toma/día, 2 días

Furazolidona 8 mg/kg/día, 3 veces/día por 10 días 400 mg/día, 4 veces/día por 7-10 días

Albendazol 400 mg/día (una toma) 400 mg/día, una toma

Mebendazol 200 mg, 3 veces/día, por 5 días 200 mg, 3 veces/día por 5 días

Nitazoxanida 200 mg, 2 veces/día, por 3 días 500 mg, 2 veces/día por 3 días
Giardiasis 71

La dosis en adultos es de 250 mg tres veces al día por de 95 a 100%. Los efectos adversos son náuseas y vómito. El
siete días; en niños es de 7.5 mg/kg/día, tres veces al día mecanismo de acción es semejante al del albendazol.
por cinco o siete días; su eficacia es de 90 a 97%. Los efec- La nitazoxanida es un antiparasitario de amplio espec-
tos adversos son: náuseas, sabor metálico, dolor abdominal, tro. El primer informe de su uso en México se publicó en
mareo, cefalea y actividad genotóxica. Se contraindica en 1997. La dosis en niños es de 200 mg dos veces al día, du-
personas que beben alcohol porque induce el síndrome del rante tres días, y en adultos es de 500 mg dos veces al día por
acetaldehído (disulfiram). Algunas pruebas sugieren que la tres días; su eficacia es de 65 a 72% y presenta escasos efectos
resistencia se asocia a disminución de pfor y Fd; también adversos. Se sugiere que el mecanismo de acción es similar al
pueden intervenir los genes mdr (multi drug resistance). observado con los 5-nitroimidazoles.
Otro derivado imidazólico es el tinidazol, que se tolera
mejor que el metronidazol. La dosis en adultos es de 2.0 g
y en niños de 50 mg/kg (sin pasar de 2.0 g); en ambos casos
Tratamientos alternativos
se administra en una sola toma por día y el tratamiento dura Debido a que se están seleccionando cepas resistentes y a que
dos días; su eficacia es de 95 a 100%. Los mecanismos de la mayoría de los fármacos producen efectos secundarios, es-
acción y de resistencia son semejantes a los descritos para el tán bajo investigación otras alternativas. Las plantas son una
metronidazol. fuente importante para la búsqueda de principios activos, ya
La furazolidona se emplea como antigiardiásico desde la que 25% de los medicamentos utilizados a nivel mundial
década de 1950-1959. La dosis en adultos es de 400 mg/día, provienen de éstas. Se ha documentado que orégano, gua-
cuatro veces al día por siete o 10 días; en niños es de 8 mg/kg/ yaba, muicle, ajo y geranio, entre otras, pueden ser buenos
día, tres veces al día durante 10 días; su eficacia es de 89 candidatos para la obtención de nuevos fármacos antigiar-
a 92%. Los efectos secundarios son: náuseas, vómito, dia- diásicos (Ponce-Macotela et al., 1994; Harris et al., 2000;
rrea y malestar general; puede provocar urticaria y colora- Calzada et al., 2005).
ción oscura de la orina. En individuos con disminución de la
glucosa-6-fosfato deshidrogenasa puede causar hemólisis in-
Prevención
travascular. El fármaco inhibe a la monoaminooxidasa (mao)
y no debe suministrarse cuando se consumen inhibidores de La giardiosis en países desarrollados es epidémica y en paí-
la mao. Si se ingieren bebidas alcohólicas puede precipitar el ses en desarrollo es endémica. Para prevenirla es necesario
efecto disulfiram. Dosis elevadas y prolongadas son mutagé- dotar a todas las comunidades de servicios públicos adecua-
nicas en bacterias y carcinógenas en roedores. Se ignora cuál dos, como: drenaje, agua potable y pavimento, además de
sea el mecanismo de acción, pero se sugiere que es mediante instituir programas educativos nacionales para promover
la reducción del grupo nitrotóxico de la furazolidona por la los hábitos de higiene personal (lavarse las manos antes de
nadh oxidasa. El producto reducido daña varios componen- consumir algún alimento y después de defecar). Es necesario
tes celulares y al dna. El mecanismo de resistencia se asocia a desinfectar todas las frutas y verduras que se consumen sin
un defecto de la absorción del fármaco o al incremento de las cocción. Asimismo, debe evitarse el riego de las hortalizas
enzimas del ciclo tiol que lo destoxifican. con aguas residuales. El método más seguro y económico de
El albendazol se utiliza contra la giardiasis desde 1986; obtener agua para beber es la ebullición (debe hervirse por
su absorción por vía oral es insuficiente, pero se incrementa lo menos 10 minutos). La filtración es un método excelente,
con la ingestión de comidas ricas en grasas. La dosis en niños ya que retiene a los quistes de Giardia e incluso a bacterias
y adultos es de 400 mg/día (una sola toma), y su eficacia enteropatógenas. Otras formas de purificar el agua incluyen
es de 97 a 100%. Los efectos adversos son trastornos diges- el uso de compuestos halogenados, como yodo o cloro (Hill,
tivos, vértigo, urticaria, alopecia y elevación transitoria de 1993).
las transaminasas. El albendazol actúa sobre las proteínas del
citoesqueleto. Cuando el fármaco se une a la tubulina, inhibe
la polimerización de la proteína y altera la formación de los
Epidemiología
microtúbulos, lo que induce la fragmentación del disco suc- La oms ha informado que en el mundo hay 280 millones de
torio. Además, los bencimidazoles se unen al dna de Giardia personas con giardiosis sintomática y que en América, Asia
y anulan la actividad de la topoisomerasa ii. y África se infectan 500 000 personas al año. En los países
El uso de mebendazol en la giardiosis se inició a finales desarrollados la prevalencia es de 2 a 5% y en los países en
del decenio de 1980-1989. La dosis en adultos y niños es de desarrollo está entre 20 y 69%. En México se informó fre-
200 mg, tres veces al día durante cinco días; su eficacia es cuencia de 7.4 a 68.5% (Tay et al., 1994; Cifuentes et al.,
72 Parasitología médica • Capítulo 7

2000). La giardiosis es una parasitosis zoonótica reemergen-


te, pues entre los animales que infecta se encuentran los pe- Caso clínico
rros y gatos, que son los que con mayor frecuencia conviven
Aportación del caso clínico:
con las personas. El mecanismo de infección es el fecalismo y
Dra. Diana Sotelo V.
la transmisión por vía hídrica es la causante de la mayor parte
de los casos, toda vez que los cuerpos de agua se contaminan Antecedentes. Paciente femenino de tres años de edad
con heces humanas o de animales. En las estancias infanti- cuyo lugar de residencia es Magdalena Tlacotepec, Oaxa-
les la infección sigue la ruta oral-fecal directa; además, los ca (Istmo de Tehuantepec). Va al corriente de acuerdo con
niños que no controlan esfínteres y que se introducen en las su edad y esquema correspondiente; goza de alimentación
piscinas pueden ser diseminadores de quistes. Otras vías im- adecuada. Su vivienda cuenta con fosa séptica y convive
portantes son los manipuladores de alimentos y la transmi- con dos perros. La paciente aún no controla esfínteres.
sión sexual en homosexuales. Esta parasitosis afecta de modo Antecedentes clínicos. Desnutrición de moderada
preferencial a la población infantil; es común en pacientes a leve y de larga evolución, con deficiencia psicomotora,
hipoagammaglobulinémicos y turistas cuando viajan a países deambulación hasta los dos años siete meses, lenguaje
endémicos (Hill, 1993). limitado a monosílabos, hospitalizada un año antes por
Los trofozoítos y los quistes de Giardia aislados del hu- salmonelosis. Presentó aftas orales medio año antes del
mano y otros mamíferos son indistinguibles desde el punto padecimiento actual.
de vista morfológico. A fin de discriminarlos y explicar la Padecimiento actual. La paciente presenta náuseas e
epidemiología de esta parasitosis se han utilizado diversas hiporexia transprandial con un año de evolución. Vómito
herramientas bioquímicas y moleculares. ocasional, meteorismo y flatulencias de predominio ves-
En el grupo morfológico G. intestinalis se han descrito pertino, se desconoce si existe dolor en epigastrio, irritable
siete ensambles (a-g) mediante amplificación de genes que con tendencia al llanto, somnolienta y asténica. Evacuacio-
codifican proteínas variables de superficie (vsp): gen de la glu- nes de consistencia pastosa que se alternaban con evacua-
tamato deshidrogenasa (gdh), gen de la triosa fosfato isome- ciones normales, sin rectorragia ni melena; no hay datos de
rasa (tpi), gen de la pequeña subunidad del arn ribosómico, esteatorrea. Presentó cuadros con aumento en la frecuencia
polimorfismos de los fragmentos de restricción (rflp) y se- de las evacuaciones y disminución de consistencia de uno
cuenciación. a dos días de evolución, sin datos de deshidratación, los
Ensamble A con los subtipos a-i y a-ii (zoonótico); en- cuales remiten de manera espontánea. Su edad aparente es
samble B (zoonótico); ensambles C y D (en perros); ensamble menor a la cronológica; muestra palidez de tegumentos, no
E (en bovinos, caprinos, ovinos, porcinos); ensamble F, que cooperadora, con máculas hipocrómicas en regiones de ex-
infecta a felinos, y ensamble G, encontrado en ratas. Tal vez posición solar; resto de los sistemas sin signos patológicos.
en el futuro se describan otros ensambles con nuevos grupos El seguimiento del peso y la talla se muestran en el
genéticos. Además, los estudios de genotipificación serán cuadro 7-2.
de gran importancia, ya que generarán información obje- Diagnóstico.
tiva que permitirá entender la dinámica de las poblaciones 1. Sintomático: probable parasitosis.
parasitarias y ayudará a controlar o eliminar a este parásito 2. Signológico: desnutrición y retraso psicomotor.
(Adam, 2001; Ey et al., 1996; Ponce-Macotela et al., 2002).

Cuadro 7-2. Tabla de seguimiento del peso y talla de la paciente en el caso clínico.

2007 Peso (kg) Normal (kg) Talla (cm) Normal (cm) Peso/talla Peso/edad Talla/edad Desnutrición
02-ago 4.625 62 bajo bajo normal moderada
15-dic 5.55 66 bajo bajo bajo moderada
2008
18-mar 6 68 bajo bajo bajo moderada
2009
03-mar 8.4 10.500 a 13 76 80 a 95 bajo bajo bajo moderada
2010
enero 10.5 82 bajo bajo bajo leve
01-mar 11 12.500 a 16 82 89 a 105 bajo bajo bajo leve
Giardiasis 73

Respuestas a las preguntas


3. Sindromático: desnutrición.
de la evaluación inicial
4. Etiológico: coproparasitoscópicos en serie de tres po-
sitivos a Giardia duodenalis. 1. Giardia lamblia y G. duodenalis.
5. De certeza: Giardiasis y desnutrición moderada. 2. Dos: trofozoíto y quiste.
3. Por fecalismo, fundamentalmente por vía hídrica, ali-
Plan de manejo y tratamiento. Inició tratamien- mentos contaminados y por transmisión directa ano-
to en diciembre de 2009; mejorar hábitos higiénicos y mano-boca. La fase infectante es el quiste (estructura
dar agua hervida. Metronidazol, 15 mg /kg /3 veces al de resistencia, diseminación y transmisión).
día/7días. Dihexazina, 5 ml antes de los alimentos. Fe+ 4. Sí, porque los trofozoítos del grupo morfológico G. intes-
tinalis se encuentran en una gran variedad de mamífe-
2 mg /kg/día. Referida al servicio de rehabilitación-esti-
ros, incluido el humano.
mulación temprana. 5. En el duodeno y yeyuno hay sales biliares que actúan
Seguimiento. Febrero 2010. cps negativos a Giar- como detergentes; las proteinasas y los ácidos grasos
dia duodenalis. libres rompen las membranas celulares, y las inmuno-
Pronóstico. Bueno. globulinas atacan a los trofozoítos.
6. Giardia consume sales biliares, rompe inmunoglobuli-
nas e inhibe las proteinasas y lipasas.
7. a) La atrofia de las microvellosidades da lugar a la forma-
Preguntas para reflexionar ción acelerada de enterocitos; éstos, al llegar inmaduros
a la superficie, producen enzimas defectuosas que no
1. ¿La Giardia intestinalis que infecta al humano es la misma pueden desdoblar a los carbohidratos; b) los trofozoítos
que parasita a otros mamíferos? consumen sales biliares e inhiben la lipólisis, por lo que
2. ¿Por qué hay portadores asintomáticos? los ácidos grasos no se absorben, y c) las proteínas va-
3. ¿Por qué no se notifican brotes epidémicos en países riables de superficie de los trofozoítos necesitan de los
subdesarrollados? metales como el zinc, por lo que se atenúa su absorción.
8. La giardiosis puede dejar secuelas irreversibles en los
niños, por ejemplo talla baja, pérdida de peso y déficit
intelectual.
9. Porque la eliminación de los quistes en la materia fecal
es irregular.
10. Proporcionar servicios públicos adecuados a la pobla-
ción, hervir o filtrar el agua para beber, lavarse las manos
antes de consumir alimentos y después de defecar, y evi-
tar el consumo de alimentos en la calle.
74 Parasitología médica • Capítulo 7

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CAPÍTULO Tricomoniasis urogenital,
intestinal y bucal
8
Paz María Salazar Schettino
Martha Irene Bucio Torres

Contenido
• Introducción • Diagnóstico
• Características generales de los parásitos • Tratamiento
y ciclos biológicos • Prevención
• Mecanismos patogénicos y patología urogenital • Epidemiología
• Cuadro clínico • Caso clínico
• Respuesta del huésped a la infección
• Mecanismos del parásito que contrarrestan
la respuesta del huésped

fase de trofozoíto, el cual presenta forma oval o piriforme,


Preguntas de evaluación inicial
con tres a cuatro flagelos anteriores y un quinto que recorre
1. De las tres especies del género Trichomonas, ¿cuál es el cuerpo hacia el extremo posterior y forma una membrana
causante de la tricomoniasis intestinal? ondulante; además, presenta un axostilo proyectado hacia el
2. ¿Cuál es el principal mecanismo patogénico de T. vagina-
extremo posterior. Se reproduce por fisión binaria longitudi-
lis y del cual dependen sus mecanismos de citotoxicidad
e invasividad? nal, primero en el núcleo, después el complejo cinético y, por
3. ¿Qué muestra biológica se estudia para confirmar el último, el resto de los organelos.
diagnóstico de tricomoniasis urogenital? El hábitat de T. tenax es la cavidad bucal, el de T. hominis
4. ¿Cuál es el tratamiento antiparasitario en casos de trico-
el intestino grueso y el de T. vaginalis el tracto genitourinario.
moniasis urogenital?
5. En caso de invasión hacia otros órganos por T. tenax, En 1836 y 1837, Donné descubre a Trichomonas vaginalis y crea
¿cuál es el órgano más afectado? el género taxonómico; Müller en 1773 a Trichomonas tenax y en
1939 Dobell la clasifica; respecto a Trichomonas hominis, Da-
vaine la observó por primera vez en 1854 y no fue reconocida
Introducción hasta 1860 (figura 8-1).

La tricomoniasis en humanos es causada por tres especies del


género Tricomonas (T. hominis, T. tenax y T. vaginalis); T. va- Reseña histórica
ginalis causa la única enfermedad parasitaria de transmisión Cuando en la primera mitad del siglo xix se presentaban en-
sexual en el humano y las otras especies se consideran comen- fermedades en los seres humanos, los investigadores trataban
sales. de averiguar la causa, sobre todo si era de tipo infeccioso, por
Estas especies son parásitas exclusivas del humano y es- lo que el microscopio era un elemento crucial para la detección
tán diseminadas ampliamente en la naturaleza, por lo que de microorganismos. En 1836 un médico francés, de nombre
se consideran cosmopolitas. De este género sólo se conoce la Alfred François Donné, tuvo la certeza de identificar un proto-
75
76 Parasitología médica • Capítulo 8

una explicación médica a las enfermedades; su creatividad


le permitió, incluso, fabricar un microscopio ensamblado de
bolsillo. En 1869 Hoffman confirmó la estructura de Tricho-
monas vaginalis mediante la creación de la tinción con fucsi-
na y carmín. Siempre defendió el uso del microscopio en el
médico cirujano. Estudios de la leche materna aplicados en
la pediatría, observaciones al microscopio de la sangre y es-
tudios sobre leucemia le condujeron a pensar que bastaba con
observar bajo el microscopio una muestra del paciente para
explicar, entender o diagnosticar una enfermedad.
A B C

Características generales
de los parásitos y ciclos biológicos
Figura 8-1. Trofozoítos de Trichomonas. A) T. tenax; B) T. hominis;
C) T. vaginalis. Trichomonas tenax
(Müller, 1773; Dobell, 1939)
zoario flagelado en secreciones producidas en órganos genitales El trofozoíto es el más pequeño de las tres especies, de forma
de hombres y mujeres; publicó sus observaciones dirigiéndose, oval o piriforme, con diámetro mayor de 6 a 12 μm. Presenta
en ese entonces, a la Academia de Ciencias cuyo titulo de la cinco flagelos, cuatro anteriores libres y el quinto localizado
publicación decía: “Animacules observes dans les matieres purulen- en el borde de la membrana ondulante sin salir del cuerpo;
tes et le produit des secretions des organes genitaux de l’homme et de
la costa se encuentra al lado de la membrana ondulante. El
la femme in the journal, Comptes rendus de l’Académie des sciences”.
complejo cinético se encuentra en el extremo anterior del
Aunque no señaló con precisión el significado patológico de
parásito, de donde se originan los flagelos; el axostilo recorre
la enfermedad que causaba, sí pudo describir los rasgos mor-
el cuerpo para emerger en forma libre en su parte posterior;
fológicos del parásito así como el medio ácido en el cual podía
posee un núcleo ovoide, vesicular y un citostoma en el lado
sobrevivir. Su colega y zoólogo profesor Dujardin le acuñó el
nombre de tricomonas en referencia y parecido a los Tricodes y opuesto de la membrana ondulante (Haro, 1995) (figura 8-1,
las Monas en alusión a organismos flagelados, pues tricho signi- A). El mecanismo de transmisión no se conoce bien, pero se
fica “cabello”. Más adelante Ehrenberg, profesor de protozoo- presupone que es directo.
logía en Berlín, le dio el crédito a Donné y propuso el nombre El hábitat de este parásito es el tejido gingival; en el
de “vaginalis” por el lugar de colonización del parásito. pasado se consideraba que no era patógeno para los humanos,
La contribución de Donné deriva de su capacidad de hasta que en 1867 Leyden y Jaffe confirmaron el primer caso
observación y su interés de investigador, así como a la im- de invasión del tracto respiratorio. Walton y Bacharach, en
portancia que le dio al microscopio, pues sabía que gracias a 1963, realizaron una revisión de 1867 a 1942 con el informe
este instrumento le sería posible observar células que darían de tres casos nuevos además de los 30 casos previos de afec-

Figura 8-2. Ciclo biológico de Trichomonas tenax.


Tricomoniasis urogenital, intestinal y bucal 77

ción pulmonar (citado por Hersh, 1985). De 1942 a 1985, lismo cuando el trofozoíto en forma “quiescente” se ingiere
existen 17 comunicaciones más al respecto con patologías no con alimentos o bebidas que actúan como amortiguadores de
sólo pulmonares sino de otros órganos y que involucran a las pH, como la leche, atoles y papillas, o bien en individuos que
tres especies. A la fecha, cada vez es mayor el número de casos sufren estados de hipoclorhidria o aclorhidria transitorios o
con invasión a otros órganos con diagnósticos de neumonía, permanentes.
bronquiectasia, absceso pulmonar, bronquitis, empiema, me- El Dr. Álvarez Chacón, en estudios realizados en el Ins-
ningitis, fibrosis pulmonar, hígado, bazo y absceso subfréni- tituto Nacional de Pediatría de la Ciudad de México, lo re-
co (citado por Hersh, 1985). Existen también informes de fería como productor de patología gastrointestinal en niños,
invasión hacia la glándula submaxilar (Duboucher, 1995), sobre todo lactantes con cuadros diarreicos en quienes no se
nódulo linfático cervical (Duboucher, 2000) (figura 8-2); el había comprobado una relación con otros parásitos o bacte-
aislamiento del parásito se ha realizado en expectoración, por rias patógenas y que cedieron al tratamiento con metronida-
lavado bronquial, fluido pleural, parénquima pulmonar e in- zol. El diagnóstico en estos casos se establece con facilidad
cluso de sangre y líquido cefalorraquídeo (lcr) (citado por mediante estudio coproparasitoscópico directo en fresco (fi-
Hersh, 1985). gura 8-3). Por otro lado, Memik en 1968 citó cuatro casos
de invasión pulmonar por esta especie (citado por Osborne,
1984), Jacobsen confirmó otro de un absceso subhepático
Trichomonas hominis (Jacobsen, 1987) y Polivoda otro de invasión pulmonar (Po-
(Davaine, 1860) livoda, 1987).
El trofozoíto mide de 8 a 14 μm de diámetro mayor y tiene
de tres a cinco flagelos anteriores y otro que se extiende a lo Trichomonas vaginalis
largo de la membrana ondulante para emerger libre en el ex-
tremo posterior; el axostilo se localiza en la región posterior, (Donné, 1836-1837)
la costa es gruesa a lo largo de la membrana ondulante y en el Es la especie más grande de las tres; tiene forma oval o pi-
lado opuesto se observa el citostoma; el núcleo es ovoide con riforme, con un diámetro mayor de 7 a 20 μm, si bien pue-
un cariosoma central (Haro, 1995) (figura 8-1, B). de alcanzar hasta 32 μm (Honigberg, 1964). El trofozoíto
El periodo de incubación varía de tres a 30 días; este muestra cinco flagelos, cuatro anteriores libres y uno recu-
parásito es considerado un comensal del intestino grueso que rrente a lo largo de la membrana ondulante sin extremo libre
no invade mucosa, aun cuando hay notificaciones de casos y que ocupa, junto con la costa, el tercio anterior del cuerpo;
de necropsias en las que se ha encontrado en forma tisular. En el citoesqueleto está compuesto de tubulina y fibras de ac-
estos últimos la transmisión se lleva a cabo tal vez por feca- tina. El núcleo está situado en la parte anterior del cuerpo
con los gránulos de cromatina ordenados en forma de flor
y contiene cinco cromosomas. El axostilo es una estructura
delgada, hialina, en forma de sable, que se inicia en el núcleo
y atraviesa en forma longitudinal el cuerpo del parásito para
terminar en la porción posterior.
La costa es una estructura delgada opuesta al axostilo
(Haro, 1995); ambos son estructuras de sostén con gran can-
tidad de gránulos siderófilos; estos organelos son negativos a
la catalasa, lo que indica que carecen de peroxisomas y pro-
ducen moléculas de hidrógeno llamadas hidrogenosomas,
con actividad metabólica importante en la fermentación del
piruvato, ya que este organismo carece de mitocondrias. Los
gránulos paracostales y paraaxostilares se hallan dispues-
tos en tres hileras paralelas y hay además gránulos de glucó-
geno observables mediante microscopia electrónica de trans-
misión. En este parásito se demostró actividad de hidrolasa
y que tiene estructuras similares a los lisosomas (fagoso-
mas). El citostoma de esta especie es pequeño y poco eviden-
Figura 8-3. Ciclo biológico de Trichomonas hominis. te (figuras 8-1, C y 8-4).
78 Parasitología médica • Capítulo 8

Figura 8-5. Ciclo biológico de Trichomonas vaginalis.

huésped depende de este contacto; sin embargo, se desconoce


si es a partir de este momento cuando se liberan las sustancias
citotóxicas. El reconocimiento de las proteínas de la matriz
extracelular como la laminina y las fibronectinas se correla-
ciona con la invasividad. Cabe enfatizar que a este parásito
se le han comprobado más de 23 proteasas, la mayor parte
cisteín proteasas, algunas involucradas en los mecanismos
Figura 8-4. Trofozoíto de Trichomonas vaginalis en exudado.
de citotoxicidad, hemólisis, evasión de la respuesta inmune y
en los procesos de citoadherencia (Uribarren T, 2010).
Al respecto, la proteasa de cisteína de 30 kDa (CP30),
El mecanismo de infección más frecuente es la trans-
necesaria en el proceso de adhesión del parásito a la célula del
misión del trofozoíto en forma directa de una persona a otra
epitelio vaginal y del ectocérvix, se localiza en la superficie
por contacto sexual; sin embargo, debido a su presencia en
del parásito; degrada proteínas del microambiente vaginal,
menores de edad e incluso en recién nacidos, existen referen-
fibronectina, colágena IV y hemoglobina; es inmunogénica y
cias que plantean la transmisión por medio de fomites (ropa,
se encuentra en la secreción vaginal (Arroyo, 1995; Álvarez-
agua, toallas e instrumentos de aseo vaginal y exploración
Sánchez, 2000; Mendoza-López, 2000). Además, existe un
ginecológica) o durante el parto. El hábitat en mujeres va-
mosaico de moléculas proteicas superficiales del parásito (ad-
gina y uretra, en tanto que en varónes la próstata, vesículas
hesinas) que se unen a receptores de la matriz extracelular de
seminales y uretra, sitios en los que se alimentan principal-
la célula huésped y a carbohidratos; tal mecanismo depen-
mente de bacterias, leucocitos y células de descamación. En
ocasiones, los macrófagos fagocitan T. vaginalis y cuando se de de tiempo, temperatura y pH.
relaciona in vitro con Neisseria gonorrhoeae, se ha comprobado Fueron estudiadas cuatro adhesinas (AP65, 51, 33 y
la fagocitosis y pérdida de viabilidad de ésta por el parásito 23) que son las más importantes como ligandos para la cé-
(Francioli, 1983); se constató, también in vitro, la producción lula huésped; al respecto, la proteasa de cisteína de 65 kDa
de citotoxinas secretadas por T. vaginalis con capacidad de (CP65) fue identificada y caracterizada como una de las mo-
lisar células cultivadas en monocapa (Krieger, 1985). léculas que participan en la citotoxicidad del parásito hacia
La acidez normal de la vagina (pH 4-4.5) dificulta el es- la célula epitelial; dicha enzima se localiza en la superficie
tablecimiento del parásito, pero una vez establecido provoca del parásito, se une a la superficie de las células del epitelio
un cambio con tendencia hacia la alcalinidad (pH 5-6) y de vaginal y se activa en los límites del pH de la vagina y tiene,
ahí su frecuencia en mujeres embarazadas (figura 8-5). además, la capacidad de degradar fibronectina, colágena IV
y es inmunogénica en mujeres infectadas (Engbring, 1996,
Ardalan, 2009).
Mecanismos patogénicos y patología Llama la atención que la CP30 se regula en forma ne-
Este parásito es el más estudiado dentro de las patologías gativa por altas concentraciones de hierro, en tanto que las
de transmisión sexual de origen no viral. La mayoría de adhesinas se regulan de modo positivo en las mismas concen-
las cepas presentan baja patogenicidad, razón por la cual un traciones. Fue reconocida y caracterizada como adhesina, otra
alto porcentaje de individuos infectados permanece asinto- proteína referida como de 118 kDa (AP118) que se induce en
mático; la aparición de síntomas se debe algunas veces a la presencia de altas concentraciones de hierro y es responsable
asociación con infecciones bacterianas. de la adhesión del parásito con la laminina (Costa, 1988). Por
Los mecanismos citopatogénicos en el epitelio vaginal se otro lado, se ha demostrado que las proteasas de T. vaginalis
han estudiado desde la década de 1940-1949. La relación pa- son capaces de degradar las cadenas pesadas de IgG e IgA
rásito-célula huésped se inicia por un mecanismo de reconoci- secretora; esta degradación se observó al colocar los parásitos
miento y adhesión; el efecto citotóxico del parásito en la célula lisados o el sobrenadante de aislados que degradaban las Ig
Tricomoniasis urogenital, intestinal y bucal 79

en presencia de inhibidores de proteasas, con lo que se abolía trado leucocitario dan lugar a erosión y descamación de las
la degradación; esta actividad proteolítica también fue detec- células superficiales lo que, aunado a la sobreinfección bac-
tada en pacientes con tricomoniasis. teriana, produce el exudado característico. Este parásito pro-
Se ha observado que los hidrogenosomas, organelos si- voca la generación de atipias celulares en epitelio vaginal y
milares a la mitocondria en los que se lleva a cabo el proceso cuello uterino, consistentes en displasias (Honigberg, 1984),
de oxidación fermentativa, pueden modificarse morfológica- lo cual puede predisponer a carcinoma del cuello uterino. Se
mente en ausencia de hierro y por la calasina (presente en el ha observado que la tricomoniasis es un factor de riesgo para
ciclo menstrual), ya que ésta es una proteína que destruye los adquirir tanto el virus del herpes simple tipo 2 como el del
microfilamentos. hiv, origen de las lesiones premalignas y malignas del cuello
En el contacto inicial, el parásito sufre una transforma- uterino y, por otra parte, la capacidad de fagocitar y lisar a
ción ameboide con producción de seudópodos acorde con Neisseria gonorrhoeae (Francioli, 1983). El cuadro 8-1 muestra
los contornos de las células epiteliales; este hecho revela el un resumen de los mecanismos patogénicos.
efecto citopático del parásito en el epitelio seguido por la
regulación de la síntesis de adhesinas, lo que sugiere la exis-
tencia de un sistema de transducción; se ha demostrado que Cuadro clínico
la citotoxicidad ocurre en el contacto de T. vaginalis con las El periodo de incubación varía de cinco a 30 días. La infec-
células epiteliales de la vagina y que este mecanismo es es- ción con frecuencia ocurre en forma asintomática, entre 25
pecífico de especie. Las adhesinas se concentran en la parte y 50% de las mujeres infectadas permanecen asintomáticas,
opuesta de la membrana ondulante y los microfilamentos del mientras que en los hombres estas cifras se elevan hasta 50
parásito lo hacen en este sitio de unión con el epitelio vaginal. y 90%. Los casos sintomáticos pueden presentarse en forma
A T. vaginalis se le comprobó no sólo la fagocitosis de aguda o crónica en ambos sexos; en ocasiones, después de su
células del epitelio vaginal, sino además de neutrófilos, eri- aparición los síntomas desaparecen pero persiste la infección
trocitos, bacterias y por otro lado la capacidad de internali- subclínica. El parásito ha sido aislado casi en todas las estruc-
zar virus viables tales como el virus de la inmunodeficiencia turas del tracto genitourinario.
humana (hiv), Micoplasma e incluso se ha sugerido también En mujeres la sintomatología inicia con disuria y leuco-
como vector para el virus del papiloma (Moodley, 2002; Uri- rrea hialina y espumosa, que al evolucionar se torna lechosa
barren, 2010). o purulenta y fétida, con expulsión de gases por la vagina
También ha sido identificada una familia de genes que debido a la sobreinfección bacteriana; se acompaña de prurito
codifican estas cisteína proteasas con siete secuencias distin- vulvovaginal intenso y dolor localizado, además de dispare-
tas, lo que sugiere diversidad en la actividad de estas enzimas unia, anafrodisia y algunas veces nicturia e insomnio. A la
(Mallinson, 1994; Engbring, 1996). exploración ginecológica se observan edema y eritema de los
Desde el punto de vista histopatológico, este parásito labios con afección de las glándulas de Skene y de Bartholin;
produce degeneración y destrucción celular en el epitelio la vagina y el cuello uterino se tornan friables con lesiones
vaginal, con lo que se genera una respuesta inflamatoria a edematosas y hemorragias puntiformes descritas como “cue-
expensas, sobre todo, de polimorfonucleares y escasos eosi- llo en fresa”. En algunos casos no hay lesiones aparentes. Los
nófilos; estas alteraciones generan una respuesta vascular im- síntomas se intensifican antes o después de la menstruación.
portante con la presencia de puntos hemorrágicos y edema En pacientes masculinos, cuando hay síntomas, lo más
de la mucosa, con aparición de placas eritematosas que a la frecuente es encontrar cuadros de uretritis, prostatitis o epi-
exploración han sido descritas “en fresa”. Este edema e infil- didimitis con escasa secreción transuretral.
En la mujer algunas complicaciones son la presencia de
Cuadro 8-1. Resumen de mecanismos patogénicos. absceso perinefrítico y si hay infección en el embarazo ha
1) Adhesión a laminina y fibronectina ocurrido ruptura prematura de membranas y neonatos con
AP65, 51, 33 y 23, son adhesinas, hay mayor activación con bajo peso, así como infección del producto en el canal de
hierro parto, de hecho, alrededor de entre 2 y 17% de productos
AP118, adhesina a fibronectina y se activa con hierro
femeninos de madres infectadas desarrollan vaginitis, habi-
2) Citotoxicidad por cisteín-proteasas
CP30 proteasa que se adhiere y degrada fibronectina, colágena tualmente asintomática (Petrin, 1998; Moodley, 2002). La
IV y hemoglobina Trichomona vaginalis también se encuentra involucrada en ca-
CP65 es citotóxica, degrada fibronectina y colágena IV, dis- sos de neumonías, faringitis, bronquitis y rinitis en recién
minuye su activación con hierro
nacidos y adultos (Bellanger, 2008; Carter, 2008), aunque
3) IgGasa e IgAsa
con menor frecuencia que T. tenax. También se ha observado
80 Parasitología médica • Capítulo 8

que las pacientes infectadas fácilmente seroconvierten a hiv Mecanismos del parásito
positivo; en varones se comprobó esterilidad reversible, en-
tidad clínica que a menudo se asocia con otros padecimien-
que contrarrestan la respuesta
tos de transmisión sexual, como la infección por Chlamydia del huésped
trachomatis (15-28%) y Neisseria gonorrhoeae (10%) (Swigard, Las infecciones repetidas con T. vaginalis en humanos no con-
2003), Candida (50%) (Gómez-Barrio, 2002) y Gardnerella fieren inmunidad protectora, aun cuando se ha comprobado
vaginalis (Núñez, 2007), entre otras. la existencia de anticuerpos y células mediadoras de la res-
puesta inmune en suero y secreción vaginal (Petrin, 1998).
Las proteasas de T. vaginalis degradan las inmunoglobulinas
Respuesta del huésped a la infección
IgG e IgA presentes en la vagina, un mecanismo de evasión del
La laminina (glucoproteína localizada en la base del epite- parásito. El cdf es inmunogénico y el suero humano reactivo al
lio vaginal) promueve la adhesión, diferenciación, forma y parásito y a las inmunoglobulinas bloquea su actividad de ata-
motilidad en células normales y se ha demostrado que tiene que. Pese a que la vagina es un medio adverso para los parásitos,
propiedades quimiotácticas. T. vaginalis puede sobrevivir y reproducirse en virtud de su capa-
La mucosa vaginal es pobre en nutrientes para los pará- cidad para contrarrestar el sistema inmunitario. Uno de los meca-
sitos y T. vaginalis no tiene la capacidad de sintetizar lípidos, nismos inmunes del huésped es la activación de la vía alterna del
por tanto, utiliza al eritrocito como fuente de hierro y ácidos complemento con efecto citopático; se ha encontrado C3 humano
grasos; la lisis del eritrocito está mediada, al parecer, por recep- fijo a la superficie del parásito. La sangre menstrual es la única
tores proteicos ubicados en la superficie de ambas células. La fuente de complemento, ya que el moco cervical es deficiente en
hemólisis, que es un fenómeno dependiente de contacto-tempe- éste; por otro lado, el hierro sobrerregula la expresión de cisteína
ratura, cuya actividad más elevada ocurre a los 37 ºC, consiste proteasas, las cuales degradan el factor C3 del complemento en la
en tres etapas: la primera es la unión de ambos receptores, la superficie parasitaria, lo que permite contrarrestar la destrucción
segunda la liberación de una perforina parasitaria (quizá cis- mediada por el complemento; además, este parásito, como otros,
teína proteasa) con capacidad de formar poros en la membrana varía de manera fenotípica. Existen otros mecanismos mediante
del eritrocito y, por último, la separación de la célula huésped los cuales T. vaginalis elude al sistema inmunitario, como son la
con la consecuente lisis celular, lo que confirma el hecho de liberación de cisteína proteasas que degradan IgG, IgM e IgA,
así como la secreción de antígenos solubles altamente inmuno-
que las proteasas de superficie son necesarias para el ataque a
génicos cuya liberación puede neutralizar anticuerpos o linfoci-
la célula huésped.
tos T citotóxicos. Asimismo, puede recubrirse con las proteínas
Los mecanismos independientes de contacto más im-
plasmáticas del huésped, lo cual impide el reconocimiento del
portantes, relacionados también con la patogenia, son el
parásito por el sistema inmunitario (Petrin, 1998).
pH, metabolitos ácidos y el llamado factor de ataque celular
(cdf). Este último es una glucoproteína extracelular de 200
kDa, lábil al calor y al medio ácido con efecto citopático in Diagnóstico
vitro, cuya actividad se presenta a un pH de 5.0 a 8.5; posee El interrogatorio y una buena exploración clínica son orien-
relevancia clínica debido a que el pH durante la tricomonia- tadores en estos casos. Es factible aislar al parásito en el exu-
sis se eleva a 5.0. dado vaginal y la orina de mujeres, mientras que en varones
También se ha observado que la protección que en con- es posible detectarlo en los líquidos seminal, prostático y uri-
diciones normales ejerce Lactobacillus acidophilus en la vagina nario, a veces incluso en la secreción transuretral.
no existe en la tricomoniasis, por lo que se ha sugerido la El parásito puede permanecer viable por 24 horas en
fagocitosis bacteriana por el parásito o destrucción por las la orina, por lo que el aislamiento en estos casos es sencillo
proteasas del cdf; el aumento de éste se correlaciona con la después de centrifugar la muestra. En este padecimiento se
gravedad de los síntomas en la vaginitis. La producción observa el parásito mediante examen directo en fresco, donde
del cdf se vincula con la concentración de estrógenos en la se aprecia el movimiento característico del trofozoíto.
vagina, ya que in vitro disminuye este factor en presencia de Es recomendable utilizar la tinción de la secreción para
b-estradiol, lo que explicaría la presencia de síntomas duran- apreciar las estructuras parasitarias más importantes para el
te el embarazo y la menstruación, cuando los niveles estrogé- diagnóstico específico, de preferencia la hematoxilina férrica
nicos se encuentran bajos. Esto último también da cuenta de o el tricrómico de Gomori.
una atenuación de los síntomas con la aplicación vaginal También puede recurrirse al cultivo (medios de Dia-
de estradiol, aun sin erradicar la infección (Petrin, 1998). mond, Trichosel o Hollander), en donde se obtiene creci-
Tricomoniasis urogenital, intestinal y bucal 81

miento en dos a siete días. Estas formas se reproducen por fi- Dado el incremento en el número de casos de las de-
sión binaria longitudinal, sin la desaparición de la membrana nominadas enfermedades de transmisión sexual (ets), se re-
nuclear. En medios de cultivo se han encontrado trofozoítos comienda realizar acciones de educación para la salud a la
redondos sin flagelo, otros con flagelo y división nuclear, e población en riesgo.
incluso algunos con flagelo y múltiples núcleos.
También puede realizarse detección de anticuerpos espe- Epidemiología
cíficos en suero mediante las técnicas de elisa o inmunofluo-
La Organización Mundial de la Salud (oms) refiere en
rescencia indirecta. Actualmente se están utilizando en otros
498 900 000 el número total de casos nuevos por año de in-
países pruebas de diagnóstico rápido y reacción en cadena de
fecciones de transmisión sexual curables (sífilis, gonorrea, cla-
la polimerasa (pcr). midiasis y tricomoniasis); esta última, con la estimación de
276 400 000 casos. En México, a diciembre de 2012, el Sis-
Tratamiento tema Nacional de Vigilancia Epidemiológica refiere 109 976
Debe instituirse de manera simultánea a la pareja, incluso si casos; los estados más afectados son Veracruz (13 978), seguido
no hay síntomas. Hasta hace unos años el medicamento de de Puebla (12 788) y Estado de México (9 518) (suive/dge/
elección era el metronidazol, pero en la actualidad, debido Secretaría de Salud/Estados Unidos Mexicanos, 2012).
a la toxicidad comprobada de éste y a los casos de resisten- Este parásito tiene una resistencia relativamente alta a las
cia (se ha comprobado la existencia de cepas resistentes al condiciones ambientales; el trofozoíto muere a temperaturas
metronidazol), se recomienda, en caso de ser factible, el uso superiores a 40 °C, pero resiste hasta cinco días a 0 °C y duran-
de otros fármacos antiparasitarios por vía sistémica (Petrin, te varias horas entre 17 y 30 °C, y hasta 24 horas en la orina.
1998). El cuadro 8-2 muestra las dosis adecuadas de tres di-
ferentes antiparasitarios.
Caso clínico
Prevención Antecedentes. Paciente femenina de 36 años de edad, ori-
Dado que el contacto sexual es la forma más frecuente de ginaria del estado de Veracruz, que acude a consulta por
transmitir la infección, el problema más importante es la presentar sintomatología genitourinaria. Al interrogatorio
promiscuidad, por lo que es necesario administrar el trata- refiere que su padecimiento inició ocho días antes con se-
miento a todos los compañeros sexuales del paciente; el uso creción vaginal, en un inicio de color blanquecino sin olor
del condón es una buena alternativa para la prevención no característico pero que posteriormente se fue haciendo de
sólo de estos casos, sino de todos los padecimientos de trans- color verde amarillento y fétido. También refiere prurito in-
misión sexual (Gottlieb, 2004). tenso, disuria y dispareunia, en ocasiones salida de gas por
En años recientes se logró inducir inmunidad experi- vagina. Entre los antecedentes de importancia cita una vida
mental en ratones, lo cual creó expectativas favorables con sexual activa desde los 18 años de edad y cinco compañeros
fines de vacunación. Esto ha llevado a desarrollar la vacuna sexuales. Afirma que su pareja sexual no presenta síntomas.
denominada Solco Trichovac, preparada a partir de lactoba- Por último informa que cursa alrededor de 12 semanas de
cilos inactivados para inducir la producción de anticuerpos, embarazo.
con lo que T. vaginalis, sin el efecto adverso de la flora nor- Exploración física. La paciente presenta lesiones por
mal lactobacilar de la vagina, presenta menor crecimiento. rascado en genitales externos, especialmente labios mayo-
A la fecha, se esperan aún resultados clínicos más precisos al res; el cuello uterino (cérvix) tiene lesiones eritematosas con
respecto (citado por Petrín, 1998). hemorragias puntiformes y exudado con las características
ya descritas.
Cuadro 8-2. Antiparasitarios y dosis en adultos. Diagnóstico. El médico procede a tomar la muestra de
fondo de saco posterior de vagina para solicitar al laboratorio
Antiparasitario Dosis en adulto el estudio de exudado vaginal correspondiente. Se cita a la
a) Por vía oral 500 mg cada 12 h durante 7 días paciente volver en cuanto se obtengan los resultados de la-
Tinidazol
b) Por vía vaginal, 300 mg/día durante 3 días boratorio. Tres días después el laboratorio reporta trofozoítos
Nimorazol 20 mg/kg/día durante 5 días de Trichomonas vaginalis.
Tratamiento. Se establece el tratamiento antiparasita-
Intestinal: 20 mg/kg/día, c/8 h, durante 5 días
Metronidazol Urogenital: 250 mg, c/8 h, 7 días o, de otra
rio correspondiente junto con su pareja, tomando en consi-
forma, 2 g en una sola dosis. Dosis máxima 4 g deración el embarazo.
82 Parasitología médica • Capítulo 8

Preguntas para reflexionar


Duboucher C., Farto-Bensasson F., Chéron M. et al. Lymph
1. ¿Qué factores intervienen para que la infección por T. node infection by Trichomonas tenax: report of a case with co-
vaginalis clínicamente sea más evidente en pacientes de infection by Mycobacterium tuberculosis. Hum Pathol 31:1317-
sexo femenino que en los de sexo masculino? 1321. 2000.
2. ¿Qué importancia reviste esta parasitosis en cuanto a la
presencia de lesiones premalignas y malignas en mujeres? Engbring J.A., O’Brien J.L., Alderete J.F. Trichomonas vagina-
3. Acorde con las conductas actuales de comportamiento lis adhesin proteins display molecular mimicry to metabolic
sexual, ¿es o puede ser la tricomoniasis un problema sa- enzymes. Toward anti-adhesion therapy for microbial disea-
nitario? ses. Nueva York, Estados Unidos: Kahane and Ofek Plenum
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1. Trichomonas hominis. Glottlieb S.L., Douglas M.J., Foster M. et al. Incidence of her-
2. Mecanismos de adhesión. pes simplex virus type 2 infection in 5 sexually transmitted
3. En mujeres, exudado vaginal y orina; en varones, líquido disease (std) clinics and the effect of hiv/std risk-reduction
seminal, prostático e incluso orina. counseling. J Infect Disease 190:1059-1067. 2004.
4. Tinidazol: 500 mg cada 12 horas durante siete días; nimo-
Gómez-Barrio A., Nogal-Ruiz J.J., Montero-Pereira D. et
razol: 20 mg/kg/día durante cinco días; metronidazol: 20
mg/kg/día durante cinco días. al. Biological variability in clinical isolates of Trichomonas
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2:33. 1987.
CAPÍTULO Balantidiasis
11
Marco A. Becerril Flores
Gabriela Pedrero Huerta

Contenido
• Introducción • Diagnóstico
• Características generales del parásito • Tratamiento
• Ciclo biológico • Prevención
• Mecanismos patogénicos • Epidemiología
• Manifestaciones clínicas • Caso clínico

tes, lo clasificó dentro del grupo de Paramecium otorgándole


Preguntas de evaluación inicial
el nombre de Paramecium coli. En 1861 Rudolf Leuckart, na-
1. ¿Qué región del cuerpo humano invade Balantidium coli? turalista alemán y fundador de la parasitología moderna, des-
2. ¿Cuáles son las manifestaciones clínicas más frecuentes cribió un microorganismo con una morfología similar que
de la balantidiasis? estaba presente en el intestino de cerdos (figura 11-1). Poco
3. ¿Cuál es la vía de entrada en los humanos?
4. Además de humanos, ¿a qué otras especies infecta el
después, en 1862, el médico suizo Stein clasificó a los dos
parásito? microorganismos, tanto al observado en heces humanas como
5. ¿Cuál es la fase infectante de Balantidium coli?

Introducción
La balantidiasis (o balantidosis) es una infección producida por el
protozoario ciliado Balantidium coli, capaz de infectar, además de
humanos, a cerdos, primates y otros animales. A pesar de que es
cosmopolita, no está bien definida su prevalencia, aunque se ha
asociado a la presencia de animales. Es importante considerar la
cercanía de humanos con animales, por ejemplo, aquellas personas
que trabajan en zoológicos, rancherías, el campo, etc. La infección
intestinal hace de la balantidiasis una parasitosis en la cual influye la
higiene, pues se transmite por un mecanismo fecal-oral; cabe aclarar
que hay otras enfermedades que son parecidas a esta infección.

Reseña histórica
Figura 11-1. Karl Georg Friedrich Rudolf Leuckart (1822-1898).
En 1857 el médico suizo Malmsten lo describió por primera Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Karl_Georg_Friedrich_
vez tras encontrarlo en las heces disentéricas de dos pacien- Rudolf_Leuckart.

111
112 Parasitología médica • Capítulo 11

al de origen porcino, dentro del mismo género: Balantidium caso de peristoma y citostoma) y como organelos táctiles (en
(del griego balanto, “bolsa”), y desde entonces se denomina el caso de los cirros).
Balantidium coli. Otras estructuras cruciales para comprender la naturale-
La infección por este parásito se presenta en zonas de za del parásito son sus vacuolas, que pueden ser contráctiles
pobre infraestructura sanitaria y mala higiene, aunque no es o digestivas. Las primeras son unidades membranosas con
exclusiva de estas regiones; principalmente se encuentra en túbulos que recogen las sustancias de desecho del parásito
regiones de clima tropical y subtropical, así como en lugares presentes en su citoplasma y que lo inflan al almacenarlas
donde hay crianza de cerdos. La especie que fue encontrada (diástole); cuando el saco central se llena de desechos, enton-
en cerdos (Balantidium suis) es idéntica a la encontrada en ces el túbulo cercano a la superficie de la célula permite que
humanos Balantidium coli, aunque también se han encontra- por allí se expulsen hacia el exterior de la célula (sístole). Sólo
do infectando otros organismos mamíferos como ratas, chim- presentan una o dos vacuolas contráctiles y siempre ubicadas
pancés, orangutanes y, de manera poco frecuente, en perros junto a la membrana plasmática. Las vacuolas alimenticias
y gatos; no obstante, cabe mencionar que se han encontrado pueden ser fagocíticas si ingieren partículas grandes y pino-
otros huéspedes infectados con diversas especies de Balanti- cíticas si consumen partículas pequeñas y solubles. Además,
dium: cobayos (Balantidium caviae), cucarachas (Balantidium el ciliado tiene numerosos tipos de lisosomas, primarios y
blattarum)¸ peces, pájaros y anfibios. De hecho, se han des- secundarios. Los primeros se originan en el retículo endo-
crito hasta 50 especies. El padecimiento que produce es in- plásmico y los segundos son resultado de la fusión de los pri-
testinal y puede ocasionar la muerte. El desconocimiento de meros con los fagosomas. Otras vacuolas importantes son los
esta infección y sus características ocasiona que prevalezca en peroxisomas. En la región posterior hay una abertura llamada
las regiones donde ya existe y que la gente se siga infectando, citopigio, que hace la función del ano de los mamíferos.
por lo que es un importante problema de salud. Las estructuras que también son esenciales son los mu-
Balantidium coli es el protozoario más grande que produ- cocistos, que tienen forma de barras y se localizan por debajo
ce enfermedad a humanos. Desde el punto de vista taxonó- de la película (en la superficie celular); éstos se expulsan y se
mico se ha clasificado con base en datos morfológicos, tipo piensa que dan lugar a la formación del quiste e intervienen
de huéspedes y polimorfismo, de acuerdo con el ambiente en en la adhesión a alimentos y la fijación del parásito. Son es-
que se desarrolla; sin embargo, hoy día se cree que los mi- tructuras membranosas que participan en la infección.
croorganismos se clasificarán realizando estudios moleculares Balantidium coli posee dos núcleos: un macronúcleo
basados en secuencias de genes de la pequeña subunidad de que posee la información genética para regular las funcio-
rnar y espaciadores transcritos. nes del parásito (alimentación y regeneración), cuya forma
semeja un frijol, y un micronúcleo esférico, localizado en
Características generales la parte media junto al macronúcleo; su función es almace-
del parásito nar información genética para la reproducción del parásito.

Balantidium coli presenta dos fases en su ciclo de vida: tro-


fozoíto y quiste (figura 11-2). El trofozoíto mide 80 a 150
μm de largo × 60 a 120 μm de ancho. Los cilios, igual que
los flagelos de protozoarios, están formados por microtúbulos
cilíndricos y rectos dispuestos en pares, uno central y nueve
alrededor del central. Los microtúbulos, cuya composición es
de α y β tubulina, se mueven de manera sincronizada, son
mucho más cortos que los flagelos y se encuentran en mayor
cantidad. Cada cilio se origina de una estructura básica que
contiene ácidos nucleicos y es denominada cinetosoma; cada
uno se interconecta mediante fibrillas llamadas cinetodes-
ma. Al conjunto cilio-cinetosoma-cinetodesma se lo conoce
como cinetia, la cual recibe la energía de la hidrólisis del atp,
lo que ayuda a que el cilio se mueva de modo sincronizado.
A toda esta organización se le denomina infraciliatura. Los
cilios se distribuyen en hileras que le sirven al microorganis-
mo para desplazarse y facilitan la ingestión de alimentos (en Figura 11-2. Trofozoíto de Balantidium coli.
Balantidiasis 113

Tiene la facultad de reproducirse de manera asexual y


sexual. La división celular asexual de B. coli es por fisión bi-
naria de tipo transversal, en la que por un lado se separa la
parte anterior, donde se encuentra el citostoma, y por el otro
su región posterior, donde se observa al citopigio. La región
anterior se desarrolla formando una nueva región posterior, en
tanto que ocurre lo contrario para la región posterior, con lo
que se originan dos células hijas. El parásito se desplaza reali-
zando movimientos rotatorios sobre su mismo eje. La repro-
ducción sexual es por medio de conjugación (figura 11-3).
El quiste tiene una forma esférica o levemente ovoide y
mide de 40 a 60 μm; sin embargo, el tamaño puede variar e
incluso se ha observado que llegan a medir más de 200 μm y
están cubiertos por una pared quística. Es importante mencio-
nar que durante el enquistamiento, los cilios no desaparecen
ni se retraen, como los flagelados que se enquistan. El quiste
es viable a temperatura ambiental durante uno a dos días.

Figura 11-3. Proceso de reproducción por conjugación para Balan-


tidium coli. Ciclo biológico
La fase infectante de B. coli al humano es el quiste y ocurre
En la región anterior tiene una estructura que funciona a cuando la persona ingiere alimentos y bebidas contamina-
manera de boca (se denomina citostoma) y un peristoma das (figura 11-4). Una vez que el parásito llega al estómago,
que lo rodea que permite la incorporación de partículas ali- la pared quística es destruida pero emerge el trofozoíto, el
menticias. cual se desplaza con gran movilidad debido a la presencia

gr

Figura 11-4. Ciclo biológico de Balantidium coli (g.r., glóbulos rojos; m, macronúcleos).
114 Parasitología médica • Capítulo 11

de los cilios hasta alcanzar el intestino grueso; en la luz in- se dividen dos veces, de modo que ahora el parásito tiene
testinal se divide en repetidas ocasiones por fisión binaria cuatro micronúcleos y cuatro macronúcleos; 6) por último,
o por conjugación. Si encuentra un ambiente deshidratado cada parásito se separa, llevándose un juego de núcleos: un
su enquistamiento se ve favorecido, de manera más específi- micronúcleo y un macronúcleo, de modo que cada célula ori-
ca a nivel de recto y sigmoides. Debido al peristaltismo, el gina cuatro más. Mediante la conjugación el parásito genera
quiste es expulsado junto con las heces. Si las evacuaciones progenie con más diversidad genética y mayor capacidad de
son diarreicas, la fase del parásito expulsado es el trofozoíto, supervivencia.
debido a que un ambiente hidratado favorece su presencia y
no alcanza a enquistarse (figura 11-5). El ciclo se completa si
el individuo parasitado realiza la secuencia mano-ano-boca,
Mecanismos patogénicos
es decir, de forma directa como sucede en los niños o al co- Sus mecanismos patogénicos son mecánicos y líticos. Para los
mer alimentos sin lavarse las manos (autoinfección externa). primeros, el parásito posee gran movilidad por sus cilios; si
Si el individuo prepara los alimentos para otras personas es a esto se añade que es un parásito muy grande, el resultado
probable que las infecte (heteroinfección). Es posible que el es el movimiento del trofozoíto y sus choques con la pared
fecalismo a ras del suelo favorezca la transmisión a animales intestinal estimulan el parasitismo de forma tal que no hay
como el cerdo y orangutanes, entre otros. tiempo para que se resorba el agua y las heces se eliminan
La transmisión puede ocurrir cuando animales como cer- líquidas (diarrea).
do, chimpancé, rata u otro, eliminan al parásito, lo disemi- A nivel lítico, en Balantidium coli se ha demostrado la
nan en el ambiente y contaminan a humanos. presencia de hialuronidasa. La rápida adaptación y reproduc-
El ambiente intestinal es un lugar propicio para la re- ción del parásito favorecen la aparición de síntomas, puesto
producción del parásito, ya que el ciliado realiza metabolis- que hay más parásitos infectantes. Es posible que otras enzi-
mo anaerobio y utiliza carbohidratos para obtener energía. mas contribuyan a destruir tejidos. También se observa gran
La reproducción ocurre por fisión binaria transversal, aunque eliminación de moco y, si las lesiones llegan a vasos sanguí-
también se reproduce de manera sexual por conjugación (fi- neos, entonces aparece diarrea con moco y sangre (disente-
gura 11-3). Esta última incluye varios pasos: 1) se unen dos ría). Balantidium coli ulcera la mucosa intestinal de manera
ciliados a través de sus respectivas membranas plasmáticas, intensa. Las úlceras son planas y redondas, con aspecto aftoso
principalmente por su citostoma; 2) los macronúcleos de am- y tamaño variable. Esto se explica porque, a diferencia de
bos se desintegran mientras que el micronúcleo que queda Entamoeba histolytica, el ciliado es muy grande y no penetra
se comienza a dividir una sola vez; 3) a continuación cada con facilidad en los vasos sanguíneos, pero causa sangrado;
célula tiene dos núcleos, uno de ellos se intercambia con la además, es de cuello ancho y con bordes. Las hemorragias se
otra célula, perdiendo uno; 4) entonces se separan los parási- deben a la invasión vascular, con bordes edematizados. En
tos, cada uno con un micronúcleo; 5) el protozoario sinteti- la lesión hay escasa infiltración de neutrófilos, linfocitos y
za su macronúcleo y tanto este último como el micronúcleo eosinófilos (figura 11-6). El parásito permanece de manera

Figura 11-5. Trofozoíto de Balantidium coli; preparación teñida con Figura 11-6. Corte histológico de intestino de cerdo infectado con
eosina-azul de metileno (40×). trofozoítos de Balantidium coli, teñido con HyE (10×).
Balantidiasis 115

indefinida, ya que hay gran cantidad de bacterias para ali- proteolítica presente en el parásito. Lo anterior favorece la
mentarse. Si Balantidium coli es muy virulento, tiene la capa- formación de abscesos, ulceración y perforación del intestino,
cidad de atravesar la pared intestinal y provocar peritonitis, con lo que se presenta una patogenia similar a las infeccio-
o también puede cruzar pulmón, hígado, ganglios mesenté- nes por Entamoeba histolityca. Se ha demostrado que secreta
ricos y apéndice. cisteína, serina, ácido aspártico y metaloproteasas, las cuales
Se ha demostrado que los trofozoítos de cepas se adaptan penetran en las paredes y tejidos subyacentes del intestino.
y reproducen con mayor rapidez y generan más síntomas. Las perforaciones y las hemorragias de B. coli son consi-
Desde luego, el huésped tiene función importante para que deradas de consecuencia fulminante, pues estadísticamente
se manifieste la balantidiasis. Entre las condiciones de los conducen a una tasa de defunción de 30%; en estos casos
humanos que promueven la parasitación se encuentran hi- fatales se ha asociado a sepsis secundaria por infección del
pocondrio o aclorhidria gástrica, infección crónica, desnutri- intestino. Cabe mencionar que B. coli puede encontrarse en
ción, alcoholismo y dieta del huésped rica en carbohidratos y sitios extraintestinales como el apéndice, y en raras ocasiones
pobre en proteínas. en el hígado y el tracto genitourinario, produciendo infec-
ciones en vagina, útero y vejiga, así como en la extensión
Manifestaciones clínicas directa del área rectovaginal. Las infecciones de los pulmones
pueden llegar a producir necrosis.
Existen algunos factores que favorecen la infección por Ba-
lantidium coli, como son el estado nutricional del paciente,
aclorhidria, alcoholismo o cualquier enfermedad crónica, así Diagnóstico
como la flora bacteriana intestinal y la carga parasitaria.
B. coli tiene una morfología que permite su fácil identifi-
El periodo de incubación varía de días a semanas; según
cación, ya que es de gran tamaño y además presenta una
Swartzwelder, en la balantidiasis existen tres formas clínicas:
movilidad en espiral característica suya; asimismo, en pre-
1. Asintomática. Se reconoce con más frecuencia en pa- paraciones en fresco son fácilmente identificables con una
cientes psiquiátricos y hospitales. baja resolución del microscopio (x 100). La colecta de estas
2. Crónica. La diarrea alterna con estreñimiento y las he- muestras se lleva a cabo a partir de heces diarreicas, las cuales
ces muestran moco sin sangre; hay náuseas, vómito, ano- quizá contengan a los trofozoítos, aunque dicha recolección
rexia, cefalea y astenia. debe realizarse por varios días, ya que la excreción del parási-
3. Aguda. Se identifican disentería y múltiples deposi- to puede ser errática, y si las heces son sólidas o semisólidas,
ciones de sangre y pus, acompañadas de náuseas, dolor suele encontrarse a los quistes. Es importante reunir los datos
abdominal, tenesmo y pérdida de peso, pujo, úlceras, fie- clínicos, por ejemplo, la presencia de disentería es un signo
bres, malestar general, deshidratación y postración. de gran valor. En el laboratorio se realizan exámenes en fres-
En forma fulminante ocurren deshidratación, deterioro co de las heces y cultivos similares a los de E. histolytica. La
del estado general y la muerte. En los lugares donde existe endoscopia y la biopsia son de utilidad (rectosigmoidoscopia,
más balantidiasis predominan las formas asintomática y cró- inmunofluorescencia indirecta y hemaglutinación indirecta).
nica. En ocasiones se informa abdomen agudo quirúrgico por
perforación o apendicitis aguda que produce la muerte del
paciente. También se ha reportado colitis crónica y poliposis
Tratamiento
inflamatoria de recto y sigmoides, así como una masa intra- Los medicamentos más suministrados son los que se mues-
pulmonar (Ladas, 1989). tran en el cuadro 11-1; las tetraciclinas son el antiparasitario
El patógeno ha sido aislado de las vías urinarias de pa- de elección.
cientes que padecían uretritis, cistitis y pielonefritis, e infec- Hay evidencias de que la nitazoxanida (un antiparasi-
tados por citología cérvico-vaginal. tario de amplio espectro), administrada junto con un anti-
Se estima que los casos fatales representan 30% de los helmíntico, puede constituir otro tratamiento eficaz para la
pacientes infectados. La disentería puede ocasionar choque balantidiasis.
y la muerte. Las condiciones que hacen más vulnerable al
paciente infectado son alcoholismo, desnutrición, enferme-
dades crónicas e inmunodeficiencias.
Prevención
Muchas de tales manifestaciones están acompañadas por Para evitar esta infección se requiere seguir las reglas de hi-
pérdida de peso, tenesmo y heces con sangre. En el intestino giene personal, ya que el agua potable tiene la cantidad de
se presentan hemorragia y perforación debido a una enzima cloro necesaria para la eliminación de este microorganismo,
116 Parasitología médica • Capítulo 11

Cuadro 11-1. Medicamentos utilizados en el tratamiento de la balantidiasis.

Antiparasitario Dosis pediátrica Dosis en adulto

40 mg/kg/día repartidos en 4 dosis (máximo 2 g), 500 mg/día repartidos en 4 veces al día,
Tetraciclina* por 10 días por 10 días

750 mg/día repartidos en 3 veces al día,


Metronidazol 35-50 mg/kg/día repartidos en 3 dosis, por 5 días por 5 días

30-40 mg/kg/día (máximo 2 g) repartidos en 3 650 mg/día repartidos en 3 dosis, por


Iodoquinol dosis, por 20 días. 20 días

* El uso de tetraciclinas se contraindica en embarazo y en niños menores de ocho años; se recomienda administrar las tetraciclinas una
hora antes o dos horas después de las comidas.

aunque se ha observado que no se elimina al quiste del Ba- ca, este de Irán y, en general, áreas del Medio Oriente. Nueva
lantidium. Es necesario lavarse las manos antes de comer y Guinea tiene una prevalencia entre los criadores de cerdos
después de ir al baño, pero sobre todo de inmediato después de 28% y entre los pobladores del Altiplano Boliviano es de
de la manipulación de animales, principalmente cerdos, pri- 29%. No es tan frecuente como la amibiasis, aunque se han
mates y roedores. Debe omitirse al máximo el contacto con identificado brotes en varios países.
animales (cerdo y primates), para lo cual los trabajadores de La parasitosis se ve más favorecida en zonas tropicales o po-
los rastros y zoológicos deben usar el equipo necesario para bres y de escasa urbanización, en presencia de cerdos parasitados
protegerse: batas, guantes, cubrebocas, cofias o gorros. y otros animales. Entre los animales que pueden infectarse con
Es necesario que la gente que vive en poblados pequeños Balantidium coli se encuentran chimpancés, primates, ratas, co-
observe condiciones sanitarias adecuadas para la crianza de los bayos y, desde luego, el cerdo. Los lugares que se han reportado
cerdos, no permitiendo que éstos estén cerca o en los alrededo- con mayor parasitación son Filipinas, Bolivia y Papúa-Nueva
res de los ríos, ya que pueden defecar y contaminar las aguas Guinea. En México se han informado casos de infección en
que abastecen poblados o municipios. Asimismo, los traba- niños. Las prevalencias de infección varían de 1 a 5%. En el
jadores de poblaciones pequeñas o zoológicos deben solicitar norte del altiplano de Bolivia, la región de Aymara, lugar donde
estudios coproparasitoscópicos para descartar la enfermedad. la gente acostumbra la crianza de cerdos, se estudiaron 2 124
Hay que recordar que este parásito puede causar disen- niños en edad escolar de 22 comunidades; la mitad de las cuales
tería, un problema que puede ser grave. Es importante la tuvo niños infectados con B. coli y la prevalencia varió de 1 a
eliminación adecuada de las heces y evitar la defecación a 5.3%; la mitad de los cerdos examinados mostraban parasitosis.
ras del suelo. La gente que se dedica a la crianza de cerdos En humanos, se ha presentado en sujetos positivos al
debe tomar en cuenta separar el hábitat de estos animales virus de inmunodeficiencia humana (hiv) y con problemas
de las zonas donde habita el hombre. La fuente de agua de dentales. También se ha identificado en hospitales psiquiá-
consumo para los humanos debe estar aislada del lugar donde tricos. Entre los factores que conducen a la balantidiasis hu-
se encuentren los cerdos. Se recomienda hervir el agua para mana se encuentran los siguientes:
consumo. Es importante que en las escuelas se indiquen a los • Contacto entre cerdos y humanos.
niños las medidas higiénicas adecuadas. Una mejor infraes- • Deficiente infraestructura sanitaria en las comunidades; es
tructura sanitaria evitará los riesgos de infección, así como de gran importancia que exista deposición adecuada del
el control sanitario para la crianza de cerdos. excremento de cerdos y humanos que puedan contaminar
Es relevante mencionar que al estar presente en aguas el ambiente, sobre todo las fuentes de agua y los cultivos
residuales, puede encontrarse en el lodo, en forma de quistes. agrícolas.
• Climas tropicales y subtropicales, donde el calor favorece
Epidemiología la sobrevivencia de los quistes.
La balantidiasis no es muy común en humanos, aunque que Sin embargo, el parásito también puede sobrevivir en
está muy distribuida en todo el mundo, así que cabe decir otras condiciones menos favorables; de ahí que se hayan en-
que es de distribución cosmopolita. Aunque la prevalencia es contrado personas parasitadas en Dinamarca, Polonia y en
de 0.02 a 1%, en realidad no es un microorganismo muy pa- general donde se favorece la ruta oral-fecal.
togénico y varía de una región a otra, la mayor prevalencia se Entre los factores responsables de brotes de balantidiasis
encuentra en Filipinas, Papúa-Nueva Guinea, Latinoaméri- humana cabe mencionar los siguientes:
Balantidiasis 117

• Problemas serios de sanidad (contaminación del medio • En áreas urbanas los pacientes son personas inmunosupri-
ambiente). midas (enfermos con hiv) y la forma de contagio es de un
• Instituciones donde hay personas asiladas (orfanatos, asilos portador asintomático a un individuo inmunosuprimido. Es
de ancianos, etc.) en donde la presencia de cerdos es nula pero importante mencionar que hay cepas patogénicas y no pato-
el personal puede ser portador no sintomático, pues si mani- génicas, y estas últimas se asocian con una prevalencia baja.
pula la comida y no tiene la suficiente higiene puede enfer-
mar a otras personas vía el mecanismo patogénico oral-fecal.

Caso clínico trofozoítos presentaron macronúcleos redondos, ovales


En el año 2000, los doctores María Cano Rosales, Juan o arriñonados; la membrana parasitaria era gruesa y ci-
Medina Flores y Joaquín Narváez Soto publicaron un caso liada. El diagnóstico fue balantidiasis e ileítis ulcerone-
fatal de balantidiasis de una niña de dos años y cuatro crótica.
meses, que ingresó al hospital con 15 días de evolución El tratamiento que recibió fue parenteral con am-
caracterizada por fiebre, deposiciones semilíquidas con picilina y amikacina para la sepsis, y metronidazol por
moco, al inicio sin sangre pero a los pocos días con ras- vía oral para la balantidiasis. Al no haber mejoría, al
tros de sangre. Se realizó examen coproparasitoscópico que sexto día se amplió la cobertura antibiótica con ceftazi-
mostró Balantidium coli y se dio inicio al tratamiento por dima, amikacina y tetraciclina, además de transfusión
siete días con medicamento que desconoce el familiar; la de plasma, albúmina, infusión de dopamina y vitamina
paciente tuvo náuseas, por lo que recibió cotrimoxazol. K. Cursó afebril, con pobre tolerancia oral, vómitos y
Fue hospitalizada con el diagnóstico de infección del trac- diarreas, además de deshidratación a pesar de fluido-
to urinario y recibió tratamiento con amikacina; cursó con terapia. Al quinto día presentó fiebre, dolor y disten-
vómitos y deposiciones líquidas con sangre, pero los fami- sión abdominal, rha disminuidos; se colocó una sonda
liares solicitaron el alta voluntaria. La paciente nació con nasogástrica (sng) a gravedad (fue descartado un cuadro
ano imperforado con fístula rectovaginal, colostomía a los quirúrgico) y se manejó como íleo metabólico. Al sexto
tres meses, anoplastia a los seis meses y segunda anoplastia día la paciente estaba somnolienta, con respiración aci-
por estenosis a los 12 meses. No tuvo contacto con cerdos. dótica, movilización de secreciones y drenaje bilioso por
Al examen físico se observó abdomen rha (+), sng. Al séptimo día fue enviada a la sala de operaciones
blando, depresible, hígado 2 cm, colostomía a doble (sop) por obstrucción intestinal, hallándose bridas y ad-
boca funcional en hemiabdomen izquierdo, así como herencias peritoneales con lesión isquémica ulcerativa a
tono muscular disminuido, sin signos meníngeos ni fo- 30 cm de la válvula ileocecal, por lo que fue sometida
cales. El hallazgo anatomopatológico mostró segmento a ileostomía.
de intestino delgado de 12 cm de longitud por 2 cm de Pasó a la Unidad de cuidados intensivos (uci) con
espesor. Otros datos fueron los siguientes: serosa con- choque séptico, evolución desfavorable y necrosis parcial
gestiva con áreas de exudado fibrinoso; mucosa necró- de la ileostomía. La paciente se observó quejumbrosa,
tica, ulcerada, hemorrágica; pared intestinal edematosa. con distensión abdominal e ileostomía no funcional; fue
Al microscopio los cortes muestran íleon con mucosa intubada por distrés respiratorio y a los 15 días de hos-
necrótica, ulcerada, en forma de matraz, hemorrágica y pitalización pasó de nuevo a sop por obstrucción intes-
supurada. En los bordes de las áreas necróticas y ulcera- tinal, hallándose perforación del cabo distal del íleon y
das de la mucosa hubo presencia de quistes y trofozoítos peritonitis. Presentó bradicardia severa en sop y se le
de Balantidium coli. Los quistes tenían formas ovaladas, realizó masaje cardiaco. Regresó a uci y falleció tras cua-
estructura compacta con uno o dos micronúcleos; los tro horas en el posoperatorio. No se realizó necropsia.
118 Parasitología médica • Capítulo 11

Preguntas para reflexionar Respuestas a las preguntas


de la evaluación inicial
1. ¿Qué ocupación está en mayor riesgo de infección por
Balantidium coli? 1. Balantidium coli se establece en el intestino grueso.
2. ¿Cuáles son las razones por las que el agente patógeno 2. El cuadro clínico es agudo, crónico y asintomático. Por lo
realiza reproducción sexual? ¿Es necesaria? general se observan diarrea, dolor abdominal, náuseas y
3. ¿Por qué no hay tantos casos de balantidiasis informados disentería.
en las publicaciones de México? 3. Bucal.
4. Chimpancés, cerdos y roedores.
5. El quiste.

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1989;34(10):1621-1623.
CAPÍTULO Criptosporidiosis
12
Rosamaría Bernal Redondo
Marco Antonio Becerril Flores

Contenido
• Introducción • Diagnóstico
• Características generales y ciclo biológico del • Tratamiento
parásito • Prevención
• Mecanismos patogénicos y manifestaciones clínicas • Epidemiología
• Infección extraintestinal • Caso clínico
• Respuesta del huésped a la infección

transporte epitelial alterado y la cascada de efectos modu-


Preguntas de evaluación inicial
ladores en la lámina propria. La manifestación clínica más
1. ¿Cuál es la especie de Cryptosporidium que infecta a hu- notable es la diarrea acuosa secretora. Las manifestaciones
manos? clínicas están modificadas de acuerdo con el estado inmuno-
2. ¿Por qué es un parásito emergente? lógico del huésped; se autolimita en pacientes inmunocompe-
3. ¿Cuál es la principal complicación en pacientes con HIV-
tentes y puede evolucionar a choque hipovolémico y muerte
SIDA?
4. ¿Cuáles son los síntomas más comunes en pacientes in- en los pacientes con inmunosupresión e inmunocompromi-
munocompetentes? so. Las especies patógenas para el humano son: C. hominis,
5. ¿Cuál es la técnica parasitoscópica más utilizada para el 70%; C. parvum, 20%; C. meleagris, C. canis y C. felis, menos
diagnóstico de la criptosporidiosis? de 10%. Las especies de Cryptosporidium más importantes se
muestran en el cuadro 12-1.

Cuadro 12-1. Especies de Cryptosporidium y sus huéspedes


Introducción naturales.

Los protozoarios del género Cryptosporidium fueron descritos Microorganismo Huésped natural
por Tyzzer en 1907 en el estómago de ratones y reporta-
dos como C. muris. Pertenecen al phylum Apicomplexa, son C. muris Ratones y ratas
microorganismos intracelulares estrictos de la superficie lu- C. parvum Bovinos y humano
minal del aparato digestivo del humano y otros animales, y
su desarrollo es monoxeno con reproducción asexual y sexual. C. hominis Humano
Es un patógeno emergente presente en individuos inmuno- C. meleagridis Aves, mamíferos y humano
competentes y en pacientes inmunocomprometidos. La infec-
ción se adquiere por la ingesta de ooquistes que contaminan C. serpentis Reptiles
agua y alimentos, y también se presenta por transmisión de C. nasorum Peces
una persona a otra. La patología es la combinación de un
119
120 Parasitología médica • Capítulo 12

Características generales y ciclo


biológico del parásito
Cryptosporidium presenta reproducción asexual durante su ciclo
de vida denominada esquizogonia y reproducción sexual lla-
mada gametogonia y esporogonia, con varios estadios. Las
fases asexuales son trofozoíto, esquizonte I y II, y merozoítos;
las fases sexuales son microgametocitos y macrogametocitos,
que se convierten en microgameto y macrogameto, cigoto y
ooquiste con cuatro esporozoítos (ver ciclo de vida). Los es-
porozoítos y merozoítos presentan complejo apical. Las fases
asexuales y sexuales son de vida intracelular; la única fase que
sobrevive fuera de la célula huésped es el ooquiste (figura 12-1). Figura 12-1. Ooquiste de Cryptosporidium parvum teñido con Kin-
La fase infectante del parásito es el ooquiste, que contiene youn (1 000×).
cuatro esporozoítos desnudos; es eliminada en las heces que
contaminan agua y alimentos (figura 12-2). El ooquiste de pa- realizan la penetración activa en un enterocito de la mucosa
red gruesa ingresa al huésped por vía oral. El ooquiste sufre intestinal y se ubican por debajo de la membrana externa de
una transformación en el trayecto del estómago hacia el intes- las microvellosidades, en el “borde en cepillo”. Durante el
tino delgado; dicha transformación consiste en la destrucción proceso, el esporozoíto se transforma en trofozoíto y queda
de la pared, y los esporozoítos se liberan. Esto se debe a fac- dentro de una vacuola parasitófora en una localización in-
tores como ambientes reducidos, presencia de enzimas, sales tracelular pero no intracitoplasmática. En la región de con-
biliares, estrés osmótico, agentes oxidantes, cambios bruscos tacto parásito-célula se origina el organelo alimentador, el
de temperatura y un pH de 2.0 (estómago). cual mantiene unido al parásito con el enterocito y probable-
Mediante el complejo apical, constituido de conoide, mente se encarga del intercambio de materiales entre ambas
anillos polares, roptrias y microtúbulos, los esporozoítos células, sobre todo para que sobreviva el parásito.

Esquizonte I Esquizonte II
Macrogametocito
Merozoito

Trofozoito Microgametocito
Macrogameto

Microgameto
Esporozoito
Cigoto
HOMBRES Y ANIMALES
Q. delgado
Quiste MEDIO AMBIENTE
maduro
Ooquiste
grueso

Ooquiste

Figura 12-2. Ciclo biológico de Cryptosporidium hominis.


Criptosporidiosis 121

El trofozoíto inicia un proceso de reproducción asexual, hominis, 20% por C. parvum y menos de 10% por C. meleagri-
esquizogonia (también denominado merogonia), durante el dis, C. felis y C. canis. El periodo de incubación es de cinco a
cual divide su núcleo tres veces y forma una célula octanu- 14 días, lo cual se explica por la rapidez con que se realizan
cleada en un tiempo de 16 horas, la que recibe el nombre las esquizogonias y se forman los ooquistes.
de meronte I o esquizonte I. Cada núcleo del esquizonte I Todas las fases en el desarrollo de Cryptosporidium son
(meronte) viaja hacia la periferia, se rodea de membrana plas- intracelulares del ápice de las vellosidades intestinales; por
mática e incluye un complejo apical compuesto por anillos tanto, el principal mecanismo de daño es la adhesión, pene-
polares, micronemas y roptrias, además de microtúbulos, nú- tración, multiplicación y ruptura de los enterocitos. Desde
cleo, mitocondria atípica sin dna, retículo endoplásmico y el punto de vista histopatológico, se identifica una atrofia de
ribosomas. El metabolismo es glucolítico, carece de enzimas microvellosidades intestinales, cambios en el revestimiento
del ciclo de las pentosas y no presenta fosforilación oxidativa. epitelial, disminución de las enzimas del borde en cepillo y
Contiene monofosfato de adenosina cíclico (camp) y calmo- mucosa hiperémica. Este suceso desencadena edema e hiper-
dulina (CaM) para el transporte de calcio. Puede sintetizar trofia de las criptas de Lieberküm, con formación de células
poliamidas y tiene enzimas para convertir nucleósidos en nu- cuboideas o escamosas (o ambas) para reemplazar el epitelio
cleótidos. Se provee de nutrientes del enterocito. dañado, transporte epitelial alterado y efecto sobre células de
Los ocho merozoítos se liberan de la célula huésped e in- la submucosa intestinal como mononucleares, neutrófilos, lin-
fectan por separado a nuevos enterocitos adyacentes; repiten la focitos y células plasmáticas de la lámina propria. El infiltrado
esquizogonia o merogonia y cada uno forma otro esquizonte inflamatorio induce la liberación de citocinas e interleucinas
(meronte), ahora llamado esquizonte II o meronte II, que en que atraen a los mediadores, alteran la absorción de agua y
tan sólo 24 horas da origen a cuatro merozoítos esféricos y pe- sodio y potencian la secreción de agua y cloro, lo cual origina
queños, morfológicamente similares a los primeros merozoítos. diarrea acuosa secretora. La diarrea es definida como tres a
Cada merozoíto derivado del esquizonte II se libera e introduce cuatro evacuaciones por día, alteradas en su consistencia.
a una nueva célula enteroepitelial y puede repetir una esquizo- La respuesta a la interacción huésped-parásito está rela-
gonia o iniciar la gametogonia con la formación de macroga- cionada con el estado inmunológico del individuo. En perso-
metocitos (femenino) o microgametocitos (masculino). nas inmunocompetentes aparentemente sanas se puede pre-
Las células sexuadas diploides se han formado 36 a 48 horas sentar una forma clínica asintomática sólo detectada por la
después de la infección. Los microgametocitos contienen hasta eliminación de ooquistes, o desarrollarse gastroenteritis agu-
16 núcleos y los macrogametocitos sólo uno. En el caso de los da con vómito, diarrea acuosa, dolor abdominal, flatulencia,
primeros, sus núcleos migran a la periferia, y luego brotan y malestar y mialgias, a lo cual se agrega deshidratación leve.
adquieren forma de “bala” y se convierten en nuevas células lla- Este cuadro clínico es más frecuente en niños menores de
madas microgametos (de 1.4 × 0.4 μm), que tienen un núcleo cinco años y es el que se observa en guarderías. La duración
haploide compacto central y están rodeados de microtúbulos. de los síntomas es de una a dos semanas, y la eliminación de
Por otro lado, los macrogametocitos se agrandan y sintetizan ooquistes persiste por una a cuatro semanas. En general, el
numerosos gránulos de amilopectina y cuerpos formadores de periodo que tardan en eliminarse los ooquistes en las heces es
pared para transformarse en macrogametos haploides. El mi- el doble del tiempo que duran los síntomas, que es de una a
crogameto sale de la célula huésped y penetra a la célula que cuatro semanas contra una a dos semanas, respectivamente.
contiene un macrogameto; se lleva a cabo la fecundación para Las manifestaciones clínicas agudas son más severas en pa-
formar el ooquiste (diploide) 72 horas después de la infección. cientes con inmunosupresión e inmunodeficiencia adquirida,
Se ha observado la presencia de dos tipos de ooquis- sobre todo en aquellos que tienen cuentas de CD4+ <50 cél/
tes, 20% con pared delgada y 80% con pared gruesa. Los mm3; dichas manifestaciones se inician con diarrea acuosa
ooquistes de pared delgada no abandonan el huésped y son secretora que puede presentarse de manera profusa, con la
responsables de los ciclos de autoinfección interna muy per- eliminación de más de 10 litros de heces líquidas/día que
sistentes en personas con inmunodeficiencia; los ooquistes origina deshidratación; ésta puede evolucionar a un choque
de pared gruesa se excretan con las heces. hipovolémico y sobrevenir la muerte.
La desnutrición y las infecciones como rubéola y saram-
Mecanismos patogénicos pión ocasionan inmunosupresión transitoria en los niños me-
nores de cinco años; en estos casos suele haber diarrea persis-
y manifestaciones clínicas tente que se mantiene de 14 a 30 días.
Se requiere de 100 a 130 ooquistes para iniciar una infección. En casos de sida, la criptosporidiosis se disemina en
De la criptosporidiosis presente en humanos, 70% es por C. todo el tubo digestivo. Cuando el paciente sobrevive a la in-
122 Parasitología médica • Capítulo 12

fección aguda, los ciclos de autoinfección interna a expensas mune en circulación y submucosa intestinal, lo cual ocasiona
de ooquistes de pared delgada originan diarrea crónica que inhabilidad para limitar la infección.
convive con el paciente durante muchos años. La respuesta humoral más duradera se debe a IgG
en individuos con diarrea crónica y expulsión de ooquistes.
Las inmunoglobulinas son detectadas a partir de los 15 días
Infección extraintestinal
de la infección y persisten por varios meses. La respuesta me-
En sujetos positivos a virus de inmunodeficiencia humana diada por IgM e IgA es corta, con duración de pocas semanas.
(hiv) se han encontrado infecciones por Cryptosporidium en La respuesta inmunitaria con la presencia de IgA secretora ha
vesícula biliar, lo cual puede conducir a colecistitis alitiásica sido detectada en secreción duodenal y calostro con un papel
y colangitis esclerosante. Los principales síntomas son fie- protector contra esporozoítos.
bre, ictericia, dolor a nivel del cuadrante superior derecho sin
irradiar al hombro y vómito. Hay elevación de bilirrubina en
suero y de enzimas hepáticas si la infección se desarrolla en la Diagnóstico
vesícula biliar. También suele reconocerse dilatación y engro-
samiento de la vesícula y conductos biliares. Por lo regular Métodos parasitológicos
aparece la infección en conductos pancreáticos, lo que provo-
ca pancreatitis.
o parasitoscópicos
Sólo en pacientes con virus de inmunodeficiencia huma- Debido a que todo el ciclo de vida del parásito se desarrolla
na-síndrome de inmunodeficiencia adquirida (hiv-sida) se en el tubo digestivo, las formas parasitarias son identificadas
ha reportado criptosporidiosis pulmonar. El paciente mani- en productos biológicos intestinales. En un inicio se realiza-
fiesta tos, ronquera y disnea; los parásitos se han demostrado ba el diagnóstico etiológico mediante la observación de la
en esputo, aspirado y lavado bronquial, secreción broncoal- fase esquizogónica en biopsias de intestino delgado. Al des-
veolar y exudado alveolar. En estos pacientes el mecanismo de cubrir el ciclo de vida completo, se observó que los ooquis-
transmisión se explicaría a través de inhalación de ooquistes tes (4 a 6 μm) eran eliminados en grandes cantidades en la
o podría tratarse también de casos de autoinfección externa. materia fecal y el diagnóstico se enfocó a demostrarlos. Si las
heces no se revisan con prontitud o se analizan días después
de la obtención, entonces se pueden conservar en una solu-
Respuesta del huésped ción de dicromato de potasio al 2.5%, en la que se preservan
a la infección por dos a seis meses sin perder su potencial infeccioso.
La presencia de los trofozoítos y esquizontes dentro de las En cambio, en formol al 10% en solución amortigua-
células epiteliales en la mucosa del intestino induce la res- dora o saf (acetato de sodio, ácido acético glacial y formol)
puesta inmune innata con la formación de quimiocinas se puede mantener la morfología del parásito, pero se pierde
como il-8, il-10, gro-α (oncogén regulador del crecimien- su viabilidad. Es preciso asumir que el individuo con sínto-
to) y rantes estimulador de linfocitos T; éstos actúan so- mas está infectado con millones de parásitos. Al desconocer
bre fibroblastos, macrófagos y polimorfonucleares de lámi- la cantidad mínima necesaria para precipitar la aparición de
na propria que producen citocinas, como il-4, interferón γ, los síntomas, la presencia de ooquistes en un examen de he-
tnf-α (factor de necrosis tumoral alfa), tgf-β (factor de ces recientes es suficiente para realizar el diagnóstico. Sólo
crecimiento transformante beta), prostaglandinas (pge2), ra- en casos de estudios epidemiológicos es posible identificar a
dicales libres de oxígeno e intermediarios del camp. Todos personas asintomáticas infectadas con C. hominis o C. parvum,
estos mediadores químicos potencian a las células secretoras para lo que es conveniente emplear técnicas de concentra-
de cloro e inhiben la absorción de sodio; finalmente se altera ción, como la de flotación de heces con sacarosa, la de sedi-
el balance de absorción/secreción de agua y origina la diarrea mentación de Ritchie y la de flotación con sulfato de zinc o
secretora. cloruro de sodio saturado.
En el individuo inmunocompetente la respuesta inmune Debido al tamaño tan pequeño que presentan los ooquis-
se autolimita y deja una inmunidad sólida ante la reinfec- tes (4 a 6 μm), las preparaciones de técnicas coproparasitos-
ción. En el paciente con inmunodeficiencia congénita o ad- cópicas (cps) no ayudan mucho a precisar su identificación y
quirida, la infección avanza y ocasiona un cuadro grave que es posible confundir al patógeno con otros microorganismos.
lleva a la muerte o se mantiene como una infección crónica. Para ello es necesario realizar la tinción de Ziehl-Neelsen,
En el paciente con inmunodeficiencia adquirida por hiv se que emplea calor para favorecer la penetración del colorante
presentan deficiencias de linfocitos t cd4+ del sistema in- fucsina en el ooquiste; en esta técnica los ooquistes adquieren
Criptosporidiosis 123

Figura 12-3. Ooquistes de Cryptosporidium parvum teñidos con Kinyoun (40×).

un tono rojo cereza en un fondo de color verde o azul (colo- parasitófora, en la cual se aloja el parásito dentro del entero-
rante de contraste). cito. Cabe recordar que se trata de un parásito intracelular
Una modificación a esta técnica es la de Kinyoun, la estricto, y además está protegido por la vacuola parasitófora.
cual emplea la fucsina fenicada que no requiere de calor; es Más de 30 fármacos han sido ensayados contra la infección
una técnica rápida en frío muy utilizada en la actualidad, por C. parvum y C. hominis en modelos in vivo y en pacien-
considerada el “estándar de oro” (figura 12-3). tes. En individuos inmunocompetentes, la criptosporidiosis
De las tinciones fluorescentes sobresalen la de Truant es autolimitada y las personas suelen curarse en tres sema-
de auramina-rodamina y la tinción con naranja de acridina. nas de manera espontánea. En niños la infección sintomática
Se utiliza también la técnica de conatin (concentración, se favorece si hay desnutrición, y con frecuencia se observa
aclaramiento y tinción; figura 12-4), que permite, a través diarrea, que persiste durante más de un mes; en tales casos
de una técnica de Ritchie, concentrar a los ooquistes de heces lo recomendado es la restitución de agua y electrólitos. Se
recientes, aclarar con hidróxido de sodio 0.2 N y finalmente puede administrar un antiparasitario de acción luminal como
teñir con la tinción de Kinyoun. Al observar al microscopio, la nitazoxanida por tres días. Sin embargo, actualmente los
se descubren los esporozoítos contenidos en el ooquiste. medicamentos suministrados con mayor frecuencia a los pa-
cientes con inmunocompromiso e inmunodeficiencia adqui-
rida se mencionan a continuación (cuadro 12-2).
Métodos inmunológicos
• Paromomicina. Aminoglucósido de acción luminal y es-
y moleculares casa absorción. Actúa sobre los ribosomas del parásito y
A fin de realizar el diagnóstico de la criptosporidiosis en heces
se cuenta con métodos inmunodiagnósticos orientados a de-
tectar ooquistes, como inmunofluorescencia indirecta (ifi), o
métodos para captura de antígeno mediante inmunoensayo en-
zimático (elisa) y aglutinación con látex; en todos ellos se em-
plean anticuerpos policlonales o monoclonales. La sensibilidad y
especificidad de la ifi es de 95%, y para la captura de antígeno
por elisa con un anticuerpo monoclonal anti-C. parvum es de
90%. Se emplean técnicas de elisa para la determinación
de anticuerpos IgG séricos y la concentración de anticuerpo sólo
es detectable en pacientes con procesos crónicos.
Se han descrito varios métodos moleculares para la detec-
ción de dna del parásito; los más utilizados como diagnóstico
están basados en la reacción en cadena de la polimerasa (pcr) de
tipo convencional, con especificidad para C. parvum y C. hominis.

Tratamiento
La baja o nula acción de muchos fármacos antiparasitarios y
antibióticos se favorece por la acción protectora de la vacuola Figura 12-4. Ooquistes de C. hominis con la técnica de CONATIN.
124 Parasitología médica • Capítulo 12

detiene la síntesis de proteínas. Se administran 500 mg/6 Prevención


horas/28 días (no exceder de 2 g/día).
• Azitromicina. Macrólido. Se une a la subunidad 50S ri- La criptosporidiosis es una parasitosis de transmisión fe-
bosomal y detiene la síntesis de proteínas. Se administran cal-oral, en cuya diseminación el fecalismo desempeña un
importante papel. Es necesario evitar la contaminación de
500 mg/día.
alimentos con heces humanas o de otros mamíferos con los
• Espiramicina. Macrólido. Inhibe la síntesis de proteínas.
que existe transmisión cruzada, cuidar la higiene personal
Dosis de 50 mg/kg/día/15 días.
y tomar en cuenta las reglas sanitarias correspondientes: in-
• Roxitromicina. Macrólido. Los resultados de eficacia son
gerir alimentos cocidos, las frutas y verduras que se comen
muy limitados. La dosis es de 300 mg/4 semanas. crudas estar bien lavadas y desinfectadas, y sobre todo beber
• Trimetoprim/sulfametoxazol. 10 mg/kg/día/10 días. agua purificada. Debe extremarse la higiene en las guar-
• Nitazoxanida. Un nitrotiazol del que se absorbe 40%. Se derías y sitios con hacinamiento y cuidar a los pacientes
administra por vía oral en suspensión para niños mayores inmunocomprometidos en las salas de hospital para evitar
de un año, 100 mg/12 horas/3 días. En niños de peso supe- la transmisión nosocomial. Asimismo, es pertinente omitir
rior a 30 kg la dosis corresponde a tabletas de 200 mg/12 el contacto con animales y lavarse las manos después de
horas/3 días; para adultos, 500 mg/12 horas/3 días. En pa- su manipulación, sobre todo tratándose de ganado bovino,
cientes con hiv-sida el esquema es de 14 días. perros y gatos. La ingesta de ostiones, almejas y mejillones
En los pacientes con inmunodeficiencia adquirida la es un factor de riesgo para adquirir criptosporidiosis; se re-
mejora en la respuesta inmune favorece la erradicación del comienda no comerlos crudos.
parásito. Es importante mantener cuentas de cd4+ mayores
de 180 cél/mm3. El tratamiento en los pacientes con sida Epidemiología
incluye además el empleo de am3, un inmunopotenciador
En 2004, la Organización Mundial de la Salud (oms) reconoció
liberador de interferón γ que tiene un efecto sinérgico con
el impacto mundial de infecciones parasitarias como criptos-
el fármaco; su acción aumenta la resistencia a C. hominis. La
poridiosis y las incluyó dentro de la Iniciativa de Patógenos
terapia haat (highly active antiviral therapy), que incluye una Desatendidos (Neglected Pathogen Initiative). Como se dijo en la
proteasa antirretroviral, produce disminución e inhibición introducción, la historia para Cryptosporidium la inició Tyzzer
del desarrollo de C. hominis cuando es administrada a pacien- hace 100 años con la observación de ooquistes en contenido
tes con sida. En algunos estudios en que se han empleado gástrico de ratones; fueron denominados C. muris. Después, el
inhibidores de proteasa como ritonavir, saquinavir e indina- mismo autor observó ooquistes en el contenido intestinal de
vir, se ha obtenido una drástica reducción de la parasitosis. ratones; los consideró una especie diferente y la llamó C. par-
Por último, se ha utilizado la terapia de administración vum; durante muchos años fueron las únicas especies conocidas.
de anticuerpos anti-IgA provenientes de calostro bovino En 1971, Vetterling identificó a C. wrari en cobayos y
inmunizados contra este patógeno; los resultados han sido Bird a C. felis en gatos. Bird y Smith describieron el ciclo de
muy contradictorios. Las investigaciones para la síntesis de vida de C. felis en cortes histológicos de intestino de gato.
nuevos compuestos y los ensayos de eficacia de muchos fár- Durante varias décadas se pensó que la criptosporidiosis en
macos ya existentes no han arrojado resultados finales. humanos estaba asociada sólo a los manejadores de ganado

Cuadro 12-2. Resumen del tratamiento antiparasitario.

Antiparasitario Adultos Niños

Paromomicina 500 mg/6 horas/28 días No hay experiencia

Azitromicina 500 mg/día/3 días, una toma/día 10 mg/kg/día, 3 días (una toma/día)

Espiramicina 50 mg/kg/día/15 días No hay experiencia

Roxitromicina 300 mg/día/4 semanas, 150 mg c/12 h 5 a 10 mg/kg/día, c/12 h

Trimetoprim/ 160 mg de TMP + 800 mg de SMZ, c/12 h/10 días 10 mg/kg/día de TMP o 50 mg/kg/día de SMZ, c/12 h/10 días
sulfametoxazol

Nitazoxanida 500 mg/12 horas/3 días Mayores de 1 año y menores de 30 kg: 100 mg/12 horas/3 días
(en HIV [+], por 14 días) Menores de 30 kg: 200 mg/12 horas/3 días
Criptosporidiosis 125

bovino, hasta que Meisel y colaboradores demostraron en fomites. Se ha demostrado también la transmisión de perso-
1976 el primer caso de criptosporidiosis humana en un niño na a persona, la cual se favorece en guarderías y nosocomios.
inmunosuprimido con diarrea. En ese mismo año, Nieme Además se ha documentado la transmisión por la ingesta de
detectó al parásito en un paciente inmunocompetente. Para mariscos bivalvos como ostiones, almejas y mejillones.
1979 se habían descrito más de 20 especies en la naturaleza, Probablemente la mayor transmisión sea por agua. Se
con especificidad de huésped, con un huésped dominante. han presentado 165 epidemias de origen hídrico, en donde
La situación se resolvió cuando Levine estableció una es- los desinfectantes utilizados a concentraciones usuales son
pecie de Cryptosporidium por grupo zoológico, refiriéndose a poco eficaces contra el parásito. Sólo se eliminan si se em-
Cryptosporidium de mamíferos, aves, reptiles y peces por sepa- plean las siguientes concentraciones: formol al 10%, amonio
rado. Upton y Current describieron en 1985 a C. parvum en al 5 a 10%, cloro en concentración de 80 ppm a 25 °C, ozo-
ganado bovino y lo consideraron, junto con C. muris, como no a razón de 1 ppm por 6 a 10 minutos. A temperatura de
las especies prototipo de los mamíferos. 4 °C los ooquistes sobreviven por más de cuatro meses; sólo
La primera clasificación molecular de genotipificación pierden la viabilidad a temperaturas de congelación (–20 °C)
fue realizada por Peng en 1997, en el estudio de 39 aislados o superiores a 65 °C por 30 minutos o más. La filtración
de humanos y de varios huéspedes animales; diferenció a C. mediante filtros de arena que remueven de 91 a 98% de los
parvum genotipo 1 como humano y al genotipo 2 como zoo- ooquistes resulta superior a la desinfección.
nótico. Un estudio similar en el Reino Unido, realizado por Debido a la gran diseminación de ooquistes que conta-
McLaughlin en el año 2000, identificó 40% de C. parvum de minan el agua y pueden llegar fácilmente a gran número de
genotipo 1 y 60% de genotipo 2. La biología molecular basa- personas en una población (epidemia de Milwaukee, 1995),
da en genes como el ssurrna, gp60, cowpi, actina, hsp70, se ha considerado a Cryptosporidium sp. como un agente de
permitió a Morgan y Ryan la clasificación de C. hominis como bioterrorismo.
un genotipo antroponótico exclusivamente humano y lo sepa- La criptosporidiosis se ha reportado en todo el mundo;
raron de C. parvum, genotipo zoonótico de varias especies de se muestra una diferencia en prevalencia en los países desa-
mamíferos que incluyen a humanos. Las especies zoonóticas, rrollados y aquellos en vías de desarrollo. La incidencia en 12
en donde se ha demostrado transmisión cruzada con humanos países europeos ha sido calculada en 3.3 casos/100 habitan-
son C. parvum, C. meleagrides, C. canis y C. felis. De modo que tes; en Estados Unidos se estima en 300 000 casos al año. En
se conserva el criterio de Levine, y los criptosporidios de aves y México se desconoce la prevalencia nacional y los primeros
reptiles no pueden infectar a mamíferos ni viceversa. reportes fueron en pacientes con hiv-sida. Diversos estudios
Entre las especies que infectan a las personas se ha de- en población abierta dan a conocer prevalencias de 5 a 15%;
mostrado transmisión animal-animal (C. parvum), animal- se estima que en Centroamérica y Sudamérica existen preva-
humano (C. parvum y C. hominis) y humano-humano (C. lencias de 5 y 10%. La infección es más frecuente en niños
hominis). La infección de criptosporidiosis se adquiere con menores de cinco años que en adultos (en promedio, 3 contra
la ingesta de ooquistes que contaminan agua, alimentos y 0.8%, respectivamente).

Caso clínico Padecimiento actual. Es atendida en la guardería


Antecedentes. Paciente femenino de 1 año, 11 meses, que por presentar diarrea aguda acuosa, no fétida, sin moco
presentó diarrea aguda acuosa; originaria y residente del ni sangre, de inicio súbito; tuvo cinco evacuaciones en 24
Distrito Federal. El departamento en el que vivía contaba horas, con astenia, adinamia e hiporexia. Muestra palidez
con todos los servicios sanitarios. Acude a guardería de la leve de tegumentos y deshidratación leve de mucosas, así
institución desde los 40 días. Recibió alimentación al seno como abdomen blando distendido y doloroso a la palpa-
materno por seis meses y fue ablactada a los cuatro meses; ción profunda. Es trasladada al servicio de hidratación oral
actualmente está integrada a la dieta familiar, adecuada del mismo lugar de trabajo de los padres.
en calidad y cantidad. Sus antecedentes heredofamiliares Diagnóstico. Para buscar el agente causal de la
son: madre de 30 años de edad, con carrera técnica con- diarrea aguda acuosa se realizó coprocultivo, investigación
cluida, trabajo administrativo, sana; padre de 32 años, de rotavirus, leucocitos en moco fecal, cps de concentra-
profesionista, sin toxicomanías, sano. Ambos trabajan en ción y tinción de Kinyoun. En la tinción con Kinyoun
una clínica de atención de segundo nivel, además tiene se observaron ooquistes de Cryptosporidium hominis, con
una hermana de cuatro años de edad, clínicamente sana. estructuras redondas de 4 a 6 mm teñidas en rojo con la
126 Parasitología médica • Capítulo 12

fucsina básica modificada. La técnica de elisa para captu- tratamiento con nitazoxanida, 200 mg/cada 12 horas/3
ra de antígeno de Cryptosporidium sp., con resultado de 3.4 días. A las 24 horas toleró líquidos por vía oral e inició
udo (valor de corte 0.15 udo), fue considerada positiva. consumo oral de alimentos. La tinción de Kinyoun con-
Tratamiento. Permaneció con hidratación oral. En tinuó con ooquistes de C. hominis por dos semanas y fue
los pacientes inmunocompetentes la diarrea se autolimita negativa a la quinta semana.
de dos a tres días después de su presentación. Se inició

Preguntas para reflexionar Respuestas a las preguntas


de la evaluación inicial
1. ¿Qué fase del parásito debe analizarse para obtener una
vacuna contra la criptosporidiosis? 1. Cryptosporidium hominis.
2. ¿Qué conducta debe seguirse para controlar la criptospo- 2. Infección que surgió a finales del siglo XX y se ha incre-
ridiosis humana? mentado en el siglo XXI.
3. Si un paciente asintomático presenta ooquistes de C. par- 3. Deshidratación, choque y muerte.
vum en sus heces, ¿es recomendable el tratamiento anti- 4. Diarrea aguda acuosa.
parasitario? 5. Técnica de Kinyoun.

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CAPÍTULO Isosporosis
13
Horacio Dorantes Peña
Marco A. Becerril Flores

Contenido
• Introducción • Cuadro clínico
• Morfología • Diagnóstico
• Ciclo biológico • Tratamiento
• Patogenia • Epidemiología

sarrolla patología en el humano, afectando células epiteliales


Preguntas de evaluación inicial
de intestino delgado, sobre todo en personas inmunocompro-
1. ¿Cuál es la fase infectante de Isospora belli en el hu- metidas; por otra parte, en huéspedes inmunocompetentes
mano? la infección suele ser autolimitada.
2. ¿Cuál es el cuadro clínico más frecuente?
3. ¿Cuáles son las regiones más parasitadas por isospo- Los estudios moleculares en primates y algunos carnívo-
rosis? ros han demostrado que Isospora tiene mayor relación con la
4. ¿Qué antiparasitario se recomienda para la isosporosis? familia Sarcocystiidae; por este hecho, en un tiempo tal vez no
5. ¿Qué técnica se emplea para el diagnóstico de la isos-
porosis?
lejano sea transferido a esa familia y al género Cystoisospora.

Reseña histórica
Isospora belli fue por primera vez observada por Hake en
Introducción
1839; Virchow y Kjellber la describieron en 1860 en el in-
Los conocimientos acerca de las parasitosis intestinales testino delgado del humano y en 1881 Schender estableció
se modificaron sustancialmente con el advenimiento del el género Isospora.
complejo virus de inmunodeficiencia humana-síndrome Es en 1915 cuando Woodcock y Wenyon mejoraron su
de inmunodeficiencia adquirida (hiv-sida), pues se de- descripción; en 1923 Wenyon, con base en los resultados ob-
mostró la presencia de protozoos de tipo oportunista, cla-
tenidos sobre la etiología de la epidemia de diarrea de las
sificados dentro del género Coccidia, los cuales presentan
tropas británicas a su paso por Turquía durante la Primera
la característica común de que sus ooquistes son la forma
infectante. De sus diversas especies son patógenos para el Guerra Mundial, le asignó el nombre de Isospora belli, del la-
humano Crystosporidium, Cyclospora, Sarcocystis, Toxoplasma tín bellium (“guerra”). Por otra parte, Magatha y Faust iden-
e Isospora. tificaron su distribución geográfica, en tanto que Barkdale y
Isospora produce isosporosis, la cual es una infección Routh reconocieron su patogenicidad. En 1966 Gana descri-
consecutiva a parásitos protozoarios pertenecientes al phylum bió el curso de la enfermedad y en la actualidad se determinó
Apicomplexa. Las especies más conocidas son I. hominis, I. na- que la diarrea crónica producida por I. belli debe considerarse
talensis, I. canis, I. felis e I. belli; esta última es la única que de- como definitoria de sida.
127
128 Parasitología médica • Capítulo 13

Morfología dos nuevos núcleos vuelven a reproducirse y así sucesivamente


hasta tener un número suficiente de núcleos.
I. belli se caracteriza por tener ooquistes ovoides y algunos de Esta célula huésped infectada recibe el nombre de esqui-
aspecto fusiforme de 20 a 30 μm de longitud por 10 a 20 μm zonte; cuando éste ya tiene suficientes núcleos, cada uno se
de ancho; posee una pared de doble capa y en su interior se rodea de membrana plasmática y organelos para dar lugar a
observa una masa esférica, granular, con un núcleo redondo un merozoíto, de manera que la célula huésped es formada
y claro (figura 13-1). Durante el proceso de maduración el con numerosos merozoítos en su citoplasma. Los merozoítos
núcleo se constituye en dos porciones y más tarde la masa se liberan de cada esquizonte y vuelven a infectar nuevas cé-
granular da origen a dos células hijas o esporoblastos, cada lulas intestinales para realizar otro ciclo esquizogónico. No
una de las cuales forma una pared gruesa que se convierte en se sabe cuántos ciclos debe realizar; sin embargo, en cierto
esporas, las cuales contienen cuatro esporozoítos curvos momento el merozoíto se diferencia en microgametocito o
en forma de salchicha. macrogametocito, que son células precursoras sexuales.
Observaciones morfológicas realizadas con microscopio Entonces sufren una nueva diferenciación y se convierten
tanto óptico como electrónico han demostrado que esqui- en microgameto y macrogameto, respectivamente. Esto se ve-
zontes, merozoítos, gametocitos y ooquistes tienen la mis- rifica con mayor precisión en nódulos mesentéricos. Un micro-
ma disposición general del núcleo y las demás estructuras, gameto puede liberarse y dirigirse a una célula enteroepitelial
incluido el complejo apical del merozoíto, que se observa en infectada con un microgameto, al cual penetra; ambos se fusio-
otros coccidios. nan, dando lugar a un huevo o cigoto que comienza a rodearse
de pared quística, lo que origina el denominado ooquiste. Los
Ciclo biológico ooquistes se liberan a la luz intestinal y salen junto con la ma-
teria fecal. El ciclo de Isospora se completa cuando un individuo
La fase infectante para el humano son los ooquistes maduros, se lleva las manos a la boca (autoinfección externa) o contamina
producto de la reproducción sexual del parásito. alimentos que ingerirán otras personas (heteroinfección), aun-
El mecanismo de infección de Isospora belli para el humano que también se piensa que en el intestino delgado se lisan y
es fecal-oral cuando la persona ingiere alimentos contamina- liberan los esporozoítos del ooquiste (autoinfección interna).
dos con excremento humano. El ooquiste pasa a través de todo
el sistema digestivo hasta llegar al duodeno (figura 13-2); con
anterioridad, las paredes del ooquiste y los esporoquistes fue- Patogenia
ron digeridas gracias a la acción del jugo gástrico. Los esporo- El parásito ha sido encontrado con mayor frecuencia en célu-
zoítos que se encuentran en el interior de los esporoquistes las epiteliales de la porción distal del duodeno y proximal de
se liberan, y al encontrar a las células enteroepiteliales las pe- yeyuno, invadiéndolas tanto en las criptas intestinales como
netran y comienzan a realizar la esquizogonia (merogonia) en en las vellosidades y sólo en pocas veces en la lámina propia.
la que cada parásito dentro del citoplasma de la célula huésped La células parasitadas son destruidas en la mucosa del intesti-
comienza a dividir su núcleo sin dividir su citoplasma; estos no delgado y éste puede encontrarse normal o aplanado, exis-
tiendo un infiltrado celular, lo que significa que el organismo
está tratando de responder a una infección y a una agresión
importantes. Mediante estudios histopatológicos se han do-
cumentado acortamiento de las vellosidades, hipertrofia de
las criptas e infiltración de la lámina propia con eosinófilos,
polimorfonucleares y linfocitos.
El grado lesivo que produce depende de la cantidad de
parásitos que provocan destrucción del epitelio intestinal e
hipertrofia de las criptas. Se piensa que la lesión se debe más
a la inflamación como reacción del huésped, que al hecho de
que el parásito secrete sustancias que lo dañen.

Cuadro clínico
El periodo de incubación es de siete a 11 días y semeja una
Figura 13-1. Ooquiste de Isospora belli con un esporoblasto. gastroenteritis viral. La presencia del parásito en el tejido
Isosporosis 129

3
Ooquiste
4

Figura 13-2. Ciclo biológico de Isospora belli.

causa aumento del peristaltismo que produce diarrea, lo cual Diagnóstico


lleva a la pérdida de peso, esteatorrea y lientería. Desde el
A fin de detectar ooquistes se utilizan estudios coproparasi-
punto de vista clínico, la expresión de la isosporosis puede
toscópicos (cps), y debido a su morfología y gran tamaño se
ser de corta a larga duración, con lapsos de diarrea que dura
pueden identificar sin dificultad en directo o con la técnica
algunos días o incluso años; la sintomatología se manifiesta de Faust; sin embargo, también es posible identificar el pa-
por diarrea acuosa sin sangre y escasa mucosidad de 10 o más rásito en biopsia de intestino. Las heces son grasas y líqui-
evacuaciones en 24 horas, acompañada por dolor abdominal das; suele emplearse la técnica de Ziehl-Neelsen, mediante la
tipo cólico, febrículas, náuseas y vómitos ocasionales, aunque cual aparecerán los esporoquistes teñidos de rojo escarlata y
con poca frecuencia, también pueden presentarse flatulencia, el resto transparentes. La tinción rápida con ácido tricrómico
anorexia, mialgias y dolor de cabeza. y uvitex 2B permite establecer con precisión el diagnóstico
La infección crónica se relaciona con esteatorrea, malab- de esta enfermedad.
sorción, pérdida de peso y trastornos electrolíticos. Se ha in- Otras pruebas útiles son la tinción de auramina-rodami-
formado de algunos casos de muerte. na fluorescente; tinción acidorrápida modificada de Kinyoun;
Debe sospecharse la presencia de isosporosis cuando hay microscopia ultravioleta autofluorescente (una prueba rápida
para identificar I. belli), sulfato de zinc o flotador de azúcar (la
diarrea con eosinofilia (más de 50% de los pacientes la presen-
técnica de concentración de heces más sensible) y la prueba de
tan). El padecimiento se relaciona por lo común con estados
reacción en cadena de la polimerasa (pcr) en tiempo real (que
de inmunocompromiso de afección variable, en especial insu- ha resultado promisoria en estudios recientes).
ficiencia de células T y sida. Al parecer, los ciclos de desa-
rrollo esquizogónicos y esporogónicos pueden continuar de
manera simultánea durante periodos indefinidos.
Diagnóstico clínico diferencial
Las formas extraintestinales son muy raras; sin embar- Es preciso realizar el diagnóstico diferencial de las siguientes
go, se han informado en pacientes con sida; asimismo, se enfermedades:
considera como un patógeno transmitido por vía sexual por • Amibiasis
práctica asociada con el contacto oral-anal. • Giardiasis
130 Parasitología médica • Capítulo 13

• Criptosporidiosis y abuso de trimetoprim con sulfametoxazol, así como pre-


• Microsporidiosis sencia en los pacientes de linfoma o leucemia y ser recepto-
• Sarcosporidiosis res de órganos para trasplante.
• Estrongiloidosis La única especie que afecta al ser humano es Isospora be-
• Infección enterocólica por Yersinia lli; empero, Elson Dew (1953) encontró Isospora natalensis en
• Enfermedad de Crohn individuos de Sudáfrica. Al parecer, puede infectar a perso-
• Diverticulitis nas de cualquier edad. Aunque no se conoce la prevalencia,
• Gastroenteritis eosinofílica diversos estudios señalan frecuencias de 0.5 a 10%. Cabe re-
• Gastroenteritis bacteriana cordar que el parásito ingresa en el humano por vía oral al
• Síndrome de colon irritable ingerir alimentos y bebidas contaminados. No infecta a otros
• Colitis ulcerativa animales; los parásitos del género Isospora que infectan a pe-
• Intoxicación alimentaria rros y gatos son I. canis, I. ohioensis e I. burrowsi, y además I.
felis para el gato. La prevalencia en comunidades estudiadas
Histología es variable; en pacientes con sida de Haití y diversas partes
de África fluctúa entre 8 y 20%; en Estados Unidos es de 1 a
Los hallazgos histológicos, a pesar de no ser específicos, 3%. En Nueva Guinea-Bissau, el país con mayor prevalencia
muestran atrofia de la mucosa intestinal, acortamiento de las de sida por hiv-2, es de 11% (Lebbad, 2001).
vellosidades, criptas hipertróficas e infiltradas de eosinófilos
en la lámina propia.

Preguntas para reflexionar


Tratamiento
1. ¿Qué factores están influyendo para que la frecuencia de
Hay dos opciones principales de tratamiento, mismas que se
esta parasitosis sea baja, a pesar de ser una infección in-
muestran en el cuadro 13-1. testinal?
2. ¿Qué tipo de sustancias habrá en el interior del parásito
que impida su tinción con Lugol en un examen en fresco, a
Cuadro 13-1. Opciones de tratamiento para la isosporosis.
diferencia de las amibas u otros protozoarios intestinales?
3. ¿De qué factores depende el daño lesivo en los tejidos
Antiparasitario Adultos Niños del huésped, de la cantidad de parásito, de sus mecanis-
Trimetoprim/ 160 mg/800 mg, 10 mg/50 mg/kg/día, mos de toxicidad, de la respuesta inmune del huésped, de
sulfametoxazol 4 veces/día por 2 a 4 veces/día por mecanismos inespecíficos de resistencia u otros factores?
10 días 10 días

Pirimetamina 75 mg/día, por No recomendado


10 días
Respuestas a las preguntas
de la evaluación inicial
Epidemiología
1. La fase infectante es el ooquiste.
Pese a que la isosporosis es más frecuente en climas tropi- 2. Diarrea, pérdida de peso, astenia, debilitamiento y náu-
cales, se puede encontrar en cualquier parte del mundo. En seas.
la actualidad se han descubierto más casos de infección por 3. Regiones de gran pobreza y marginación.
4. Cotrimoxazol.
este parásito en pacientes inmunodeficientes, sobre todo
5. Tinción rápida con tricromos.
positivos al hiv; otros factores predisponentes son el uso
Isosporosis 131

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CAPÍTULO Ciclosporosis
17
Martha Ponce Macotela
Leticia Riverón Negrete
Mario N. Martínez Gordillo

Contenido
• Introducción • Diagnóstico
• Características generales del parásito • Tratamiento
• Ciclo biológico • Prevención
• Mecanismos patogénicos • Epidemiología
• Manifestaciones clínicas

nos fueron en 1979; en la década de 1980-1989 se reportaron


Preguntas de evaluación inicial
como organismos parecidos a cianobacterias, algas azul verde
1. ¿A qué Phylum pertenece este parásito? o coccidias productoras de diarrea y la frecuencia se incre-
2. ¿Cuál es la fase infectante? mentó después de los primeros casos del síndrome de inmu-
3. ¿Cómo se adquiere la infección? nodeficiencia adquirida (sida) (Soave et al., 1986; Shlim et
4. ¿Cuál es el hábitat de Cyclospora?
5. ¿Por qué se produce la diarrea? al., 1991; Bendall et al., 1993; Connor et al., 1993; Berlin
6. ¿Cuál es el método más adecuado para establecer el et al., 1994). Después, a estas nuevas coccidias obtenidas de
diagnóstico? pacientes con diarrea se les asignó la especie C. cayetanensis
7. ¿Cuáles son las diferencias morfológicas entre los (Ortega et al., 1994).
ooquistes de Cryptosporidium y los de Cyclospora?
El género Cyclospora se ubica en el infrarreino Alveolata
8. Describa tres conductas para prevenir la ciclosporosis.
y en el phylum Sporozoa, sinonimia con Apicomplexa (Cava-
lier-Smith, 1998) y mediante el análisis filogenético basado
en la secuencia del gen de la pequeña subunidad del rna
Introducción ribosómico se demostró que C. cayetanensis guarda estrecha
Cyclospora cayetanensis es un protozoario parásito emergente relación con Eimeria, parásito de aves (Relman et al., 1996).
que produce diarrea al humano (Ortega, Sánchez, 2010).
Desde la primera descripción de Cyclospora spp. en roedo- Características generales del
res (1870) hasta el momento se han descrito varias especies
en diferentes hospederos: C. viperae, C. babaulti, C. scinci, C.
parásito
tropidonoti, C. zamenis, C. schneider y C. niniae en reptiles, Como todos los esporozoarios, C. cayetaneneis tiene varios es-
C. glomericola en diplópodos, C. caryolytica, C. talpae, C. mega- tadios: ooquistes no esporulados, ooquistes esporulados, espo-
cephali, C. ashtabulensis y C. parascalopi en mamíferos insectí- rozoítos, esquizontes, merozoítos y gametos. Los ooquistes no
voros, C. anglomurinensis en roedores, C. cercopitheci, C. colobi esporulados (estadio diagnóstico) son esféricos, miden entre 8
y C. papiones en primates no humanos y C. cayetanensis en y 10 μm de diámetro, en el centro se observa una estructura
Homo sapiens (Eberhard, 1999; Lainson, 2005). Es probable semejante a una mórula y se caracterizan por presentar doble
que los primeros casos reportados de ciclosporosis en huma- pared cuyo grosor es de 113 nm, la pared externa (de 63 nm)
159
160 Parasitología médica • Capítulo 17

Figura 17-1. Ooquistes de Cyclospora Figura 17-2. Ooquiste en proceso de Figura 17-3. Ooquiste esporulado con dos
cayetanensis en un CPS directo en fresco, maduración observado mediante microsco- esporoquistes y doble pared.
note la doble pared y que las estructuras pia electrónica de transmisión. CI, cubierta
son refringentes (flechas). 40X. interna; CE, cubierta externa.

es rugosa y la interna (de 50 nm) es lisa. En un estudio mor- múltiples microgametos (semejantes a espermatozoides) que
fométrico realizado con ooquistes de una muestra de un pa- fecundan a los microgametos, se forman los cigotos que se ro-
ciente, se midieron 100 ooquistes y el diámetro promedio fue dean de una pared quística y darán lugar a los ooquistes no es-
de 8.44 ± 0.146 μm (figura 17-1). Los ooquistes esporulados porulados (estadio diagnóstico, de resistencia y de dispersión).
(estadio infectante) contienen dos esporoblastos, cada uno con Cuando los enterocitos se rompen, se liberan los ooquistes que
dos esporozoítos (figuras 17-2 y 17-3). Los esporozoítos miden se eliminarán con las heces (figura 17-4).
1.2 μm de ancho por 9.0 μm de longitud. Los esporozoítos y
merozoítos presentan núcleo con nucléolo y un complejo api-
Ingestión
cal constituido por micronemas y roptrias (Ortega et al., 1993; de agua
Ortega et al., 1994; Ponce-Macotela et al., 1996). Ooquiste contaminada
esporulado

Ciclo biológico
Cyclospora es un parásito intracelular obligado y el ciclo com- Contaminación
pleto requiere de un solo huésped. del agua o de
los alimentos
Los ooquistes no esporulados que se eliminan con las heces
no son infectantes, es necesario que transcurran de cinco a 15
días para que maduren a ooquistes esporulados (estadio infec- Ooquiste
tante) (Ortega et al., 1993; Ponce-Macotela et al., 1996). La in- no esporulado
fección se adquiere cuando se consumen alimentos sin cocción Excreción de
ooquistes
o agua de beber contaminados con ooquistes esporulados (Or- con las heces
tega, Sánchez, 2010; Mansfield, Gajadharb, 2004; Herwaldt,
2000). El proceso de desenquistamiento se inicia en el estó-
mago (pH ácido) y se completa en el intestino delgado (pH
4 1
alcalino); de cada ooquiste se liberan cuatro esporozoítos que 7
invaden a las células epiteliales del intestino delgado (duodeno 5 3 2
y yeyuno). Dentro de éstas se llevan a cabo dos generaciones de 6

esquizontes (reproducción asexual), en la primera se forman Figura 17-4. Ciclo biológico. En el recuadro inferior se esquema-
de seis a ocho merozoítos y en la segunda son cuatro merozoí- tizan las fases que se desarrollan en los enterocitos. 1) Ooquistes
tos que infectan a otros enterocitos y darán lugar al ciclo espo- esporulados exquistados y liberación de esporozoítos. 2) Enterocitos
invadidos por esporozoítos. 3) Esquizontes. 4) Lisis de enterocitos y
rogónico (reproducción sexual) en donde se desarrollan los mi-
liberación de los merozoítos. 5) Invasión de los merozoítos a otros
crogametocitos (masculino) y macrogametocitos (femenino). enterocitos. 6) Formación de gametocitos. 7) Lisis de enterocitos y
El microgametocito sufre un proceso de exflagelación y surgen liberación de ooquistes no esporulados.
Ciclosporosis 161

Mecanismos patogénicos tolimita o persiste por 40 días o más. También presentan


náuseas, vómito, dolor abdominal en el cuadrante superior
En la ciclosporosis se conoce poco de los mecanismos patogé- derecho, estreñimiento, malestar general, hiporexia, astenia,
nicos, pero se ha propuesto una cascada de acontecimientos adinamia, cefalea, fiebre, vértigo y pérdida de peso; dicha
que ocurren cuando los parásitos intracelulares obligados in- parasitosis también puede ser asintomática. En pacientes in-
vaden a los enterocitos. Cuando los esporozoítos entran, las munocomprometidos, en particular los positivos al virus de
células epiteliales liberan citocinas (il-8) que activan a inmunodeficiencia humana (hiv), la diarrea es más prolon-
los fagocitos locales; los cuales atraen y reclutan a otros fago- gada, con lapsos de cinco días hasta 12 meses y se intensifica
citos del torrente sanguíneo hacia la lámina propia. Los leu- el dolor abdominal, malabsorción intestinal, deshidratación
cocitos activados liberan factores solubles que incrementan y pérdida de peso. Además, se han descrito casos de asocia-
la secreción intestinal de cloro y agua e inhiben su absorción. ción de ciclosporosis con colecistitis acalculosa, síndrome de
Algunos mediadores, como histamina, serotonina y adenosi- Reiter y Guillain-Barré (Ortega, Sánchez, 2010; Herwaldt,
na, afectan la secreción y absorción porque actúan directo so- 2000; Ponce-Macotela et al., 1998; Hart, 1990; Bendall et
bre las células epiteliales. Además, el factor activador de pla- al., 1993).
quetas, prostaglandinas y leucotrienos modulan la actividad
de los nervios entéricos e inducen secreción intestinal me-
diada por neurotransmisores. Asimismo, la invasión, mul-
Diagnóstico
tiplicación y liberación de los parásitos produce lisis de los El estadio diagnóstico es el ooquiste no esporulado que se
enterocitos infectados. elimina con la materia fecal. Para identificarlo se puede re-
Además, los linfocitos T activados afectan el crecimien- currir a las siguientes técnicas: a) estudio coproparasitoscó-
to de las células epiteliales, producen atrofia de las vellosida- pico directo en fresco o de concentración; b) esporulación; c)
des e hiperplasia de las criptas, sucesos que provocan tanto autofluorescencia; d) tinción de Ziehl-Neelsen, y e) reacción
el aumento de peristaltismo como la disminución de la ab- en cadena de la dna polimerasa (Hart, 1990; Pollok et al.,
sorción de los nutrimentos. En biopsias de la región distal de 1992; Orlandi et al., 2003; Ortega, Sánchez, 2010).
duodeno y yeyuno se ha identificado inflamación aguda de la a) Coproparasitoscópicos. En los coproparasitoscópicos
lámina propia, de leve a moderada, con presencia de neutró- directo en fresco o de concentración, los ooquistes se ven
filos. También hay inflamación crónica difusa, con incremen- esféricos, no asimilan el colorante de lugol, miden de 8 a
to de células plasmáticas en la lámina propia e incremento 10 μm de diámetro, contienen un material de apariencia
focalizado de linfocitos intraepiteliales. En la superficie del granular que es refráctil, semejante a una mórula, y po-
epitelio, cerca de la punta de las vellosidades hay vacuoli- seen doble pared (figura 17-1). Los ooquistes de Cryptospo-
zación focal, pérdida del borde en cepillo y alteración de ridium son difíciles de observar en preparaciones efímeras,
la morfología de las células, de columnares a cuboides. Asi- debido a que su diámetro es muy pequeño (3 a 6 μm).
mismo, se observa atrofia parcial de las vellosidades con b) Esporulación. Cuando se observan ooquistes no espo-
hiperplasia de las criptas; la relación vellosidad-cripta es de rulados, pero el diagnóstico es dudoso, es factible confir-
0.6:1 a 1.5:1, en tanto que en individuos normales la rela- marlo mediante la esporulación. Las muestras de mate-
ción es de 3:1 a 4:1. Todas estas evidencias explican la diarrea ria fecal se homogenizan con dicromato de potasio (2.5 a
y la malabsorción de los nutrimentos (Connor et al., 1993, 5%), se incuban a temperatura ambiente y los ooquistes
1999; Goodgame, 1996; Ortega, Sánchez, 2010). con dos esporoblastos (esporulados) se pueden encontrar
desde los cinco a los 15 días (figura 17-3).
Manifestaciones clínicas c) Tinción. Si el diagnóstico mediante coproparasitoscó-
picos de concentración se dificulta, una opción es recu-
Con base en el conocimiento inferido de los brotes, el perio- rrir a la tinción de Ziehl-Neelsen modificada. Con esta
do de incubación es de siete días (límites entre uno y nueve técnica los ooquistes de Cyclospora adquieren diferentes
días). Las manifestaciones clínicas persistirán desde algunos tonalidades, que van desde la ausencia de coloración, pa-
días, semanas e incluso meses, ya que dependen de las condi- sando por un rosa tenue, hasta alcanzar un color rojo
ciones del huésped (edad y estado nutricional) y de la canti- intenso (figura 17-5). El diagnóstico diferencial se debe
dad de ooquistes ingeridos. establecer con Cryptosporidium, cuyos ooquistes se tiñen
En pacientes inmunocompetentes, la diarrea es acuosa también de color rojo intenso. Otra estrategia es la sus-
y explosiva (en promedio seis evacuaciones por día) y quizá titución de carbolfucsina por safranina, en este caso to-
se alterne con evacuaciones semiformadas. La diarrea se au- dos los ooquistes toman un color anaranjado.
162 Parasitología médica • Capítulo 17

d) Autofluorescencia. Una característica de los ooquistes ñalar que los ooquistes de Cyclospora son más resistentes que los
de Cyclospora es que autofluorescen con luz ultraviole- ooquistes de Cryptosporidium. El dióxido de cloro (4.1 mg/litro)
ta. Los ooquistes fluorescen de color azul celeste cuando inactiva a Cryptosporidium, pero no inhibe la esporulación de Cy-
se exponen a filtros de 330-380 nm. Los ooquistes de clospora. La concentración de cloro que se utiliza para potabilizar
Cryptosporidium no autofluorescen (figura 17-6). el agua tampoco la inactiva. La temperatura desde 4 a 23 ºC y el
e) Molecular. En Cyclospora la amplificación del gen de la calentamiento a 96 ºC durante 45 segundos tampoco afectan
pequeña subunidad del rna ribosomal (18S rrna) con los el proceso de esporulación de Cyclospora.
oligonucleótidos cycf1e/cycr2b seguido de una segun- Para inactivar los ooquistes de Cyclospora se recomienda
da amplificación con los oligos cycf3e/cycr4b genera un la exposición de los alimentos y el agua de beber a temperatu-
producto de ≈300 pb y la restricción con la endonucleasa ras extremas: congelamiento a –20 ºC por dos días, a –70 ºC
MnlI permite diferenciar a Cyclospora de Eimeria. El análi- durante 60 minutos y calentamiento a 70 ºC durante 15 mi-
sis del polimorfismo de un solo nucleótido (snp) en mues- nutos. Otras estrategias son filtrar el agua para beber, fomen-
tras de pacientes ha mostrado coinfección con Cyclospora tar los buenos hábitos higiénicos, que las frutas y verduras
de diferente especie a C. cayetanensis. Para el diagnóstico se rieguen con agua potable además de sancionar a cualquier
molecular también se ha utilizado el ITS2 dna. productor que utilice aguas residuales o no potables (Huang et
al., 1995, Ortega et al., 2008; Ortega, Sánchez, 2010).
Tratamiento
El tratamiento de elección es el trimetoprim (tmp) con sul-
Epidemiología
fametoxazol (smx) que se administra durante siete días con- La ciclosporosis es una parasitosis que se transmite al consu-
secutivos. La dosis en niños es de 5 mg/kg de peso para tmp mir alimentos y agua contaminados. No hay transmisión di-
y 25 mg/kg de peso para smx cada 12 horas. En adultos es de recta oro-fecal de persona a persona porque los ooquistes que
160 mg de tmp y 800 mg de smx cada 12 horas (Hoge et al., se eliminan con la materia fecal no son infectantes y necesi-
1995). Otro fármaco es la nitazoxanida, la dosis en niños y tan de varios días para esporular. Es probable que los insectos
adultos es de 200 y 500 mg cada 12 horas, respectivamente, actúen como transmisores mecánicos.
durante siete días (Zimmer et al., 2007; Díaz et al., 2003). En países desarrollados esta parasitosis ocurre en forma
epidémica y los brotes se han presentado en primavera-verano.
En Estados Unidos y Canadá, en el decenio de 1990-1999,
Prevención se registraron más de 150 brotes epidémicos provocados por
Los informes de los brotes de ciclosporosis en países desarrolla- el consumo de frutas y verduras (frambuesas, fresas, lechu-
dos demostraron que esta parasitosis se adquiere por beber agua ga, chile pimiento, albahaca y cilantro, entre otros) y agua de
y consumir frutas y verduras contaminadas. Es importante se- beber con ooquistes de Cyclospora (Huang et al., 1995; Ho et

Figura 17-5. Tinción de Ziehl-Neelsen. Ooquistes con asimilación Figura 17-6. Autofluorescencia de color azul celeste de los ooquistes
heterogénea al colorante; la tonalidad varía desde rojo intenso, pa- de Cyclospora cayetanensis expuestos a la luz ultravioleta. 40X.
sando por un rosa pálido, hasta la ausencia de tinción.
Ciclosporosis 163

al., 2002). Algunos de los brotes epidémicos se han vinculado tes adultos con HIV, tres con diabetes y dos sin inmunocom-
con el consumo de frutas y verduras importadas de países en promiso (Sifuentes et al., 1996). En un estudio diseñado para la
desarrollo, como Guatemala y México. Por otro lado, se ha do- búsqueda de parásitos en 104 pacientes adultos ambulatorios
cumentado que algunos pacientes con ciclosporosis residentes con diagnóstico reciente de infección por HIV, se encontró una
de Estados Unidos o Inglaterra en algún momento tomaron prevalencia de Cyclospora del 16.3%. En el Instituto Nacional
vacaciones en países en desarrollo (Guatemala, Haití, Puerto de Pediatría se encontró en cuatro niños inmunocompetentes;
Rico, México, Nepal, Nueva Guinea, Paquistán e India). llama la atención que uno era residente de Taxco y dos habían
En México los reportes son fundamentalmente de casos regresado de vacaciones de Acapulco (Ponce-Macotela et al.,
clínicos, no hay reportes de brotes epidémicos. En el Instituto 1996, 1998). Otro estudio realizado con 272 niños del Estado
Nacional de Nutrición se identificó a Cyclospora en siete pacien- de México encontró una frecuencia de 3% (Díaz et al., 2003).

Preguntas para reflexionar


Caso clínico
1. ¿Es Acapulco una zona endémica?
Paciente masculino de tres años ocho meses de edad, origi-
2. ¿Por qué no es factible la transmisión directa (oro-fecal)
nario y residente del Distrito Federal, México. Su nivel so- de persona a persona?
cioeconómico es medio y tiene buenos hábitos higiénicos. 3. ¿Por qué es difícil diagnosticar la ciclosporosis?
Padecimiento actual. Presenta un cuadro clínico
de evolución crónico, caracterizado por dolor en meso-
gastrio transprandial y posprandial inmediato, que dura Respuestas a las preguntas
aproximadamente dos horas y que cede de manera espon- de la evaluación inicial
tánea, sin fiebre, con hiporexia, meteorismo, prurito nasal
y bruxismo. 1. Pertenece al Phylum Sporozoa, también denominado Api-
complexa.
También presentó evacuaciones diarreicas, sin moco
2. La fase infectante es el ooquiste esporulado.
ni sangre, tres veces al día durante uno a tres días que se 3. La infección se adquiere por ingerir agua o alimentos con-
autolimitan y que repetían a las dos a tres semanas. Los taminados con ooquistes esporulados.
datos de la exploración física fueron los siguientes: peso, 4. Cyclospora es un parásito intracelular que se encuentra
12.5 kg (por abajo del percentil 3); talla, 99 cm (percentil dentro de los enterocitos, sobre todo en el yeyuno.
25); abdomen blando, no doloroso y sin visceromegalias. 5. La diarrea se produce por varios factores: como produc-
to de la lisis de los enterocitos invadidos y por la acti-
El resto de la exploración fue normal. vación de fagocitos que liberan factores solubles que
Exámenes de laboratorio. La biometría hemática incrementan la secreción de cloro y agua e inhiben la
estaba dentro de límites normales. También se realizó es- absorción.
tudio coproparasitoscópico (cps) de concentración flotación 6. Se recomienda la tinción con Ziehl-Neelsen modificada.
(Faust) y cps directo en fresco. Se encontraron estructuras 7. Los ooquistes de Cyclospora miden 8 a 10 μm de diáme-
tro, presentan doble cubierta, no asimilan el lugol, con la
esféricas, de 8-9 μm de diámetro, no refráctiles, que no tinción de Ziehl-Neelsen adquieren afinidad diferencial al
asimilaron el lugol y con una doble pared. colorante (la tonalidad oscila entre su ausencia y el co-
La tinción con Ziehl-Neelsen modificada mostró es- lor rojo intenso) y autofluorescen con luz ultravioleta. Los
tructuras con diferentes grados de asimilación del colo- ooquistes de Cryptosporidium miden 3 a 6 μm de diáme-
rante; desde las que no se tiñeron, pasando por un rosa tro, son difíciles de observar en campo claro, con la tin-
ción de Ziehl-Neelsen se tiñen de color rojo intenso y no
pálido, hasta las intensamente teñidas de rojo.
autofluorescen.
La esporulación de las estructuras (dos esporoblastos 8. Hervir o filtrar el agua para beber, lavar las verduras que
por ooquiste) se observó después de 15 días de haberlas se consumen sin cocción y congelar las frutas a –20°C du-
puesto en dicromato de potasio al 5%. rante dos días.
Diagnóstico. Ciclosporosis.
Tratamiento. Trimetoprim con sulfametoxazol: 5-25
mg/kg de peso/cada 12 horas/7días.
Control. 1) Parasitológico: una semana después de
haber terminado el tratamiento los cps fueron negativos.
2) Clínico: asintomático. Se da de alta por curación clínica
y parasitológica.
164 Parasitología médica • Capítulo 17

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CAPÍTULO Historia de la parasitología
1
Marco A. Becerril Flores

Contenido
• Introducción
• Antecedentes históricos
• Principales descubrimientos

microorganismos en diferentes orígenes y que forman parte


Preguntas de evaluación inicial
de la biosfera. Conforme la gente se extendía hacia nuevas
1. ¿En qué época de la historia se descubrió la mayoría de regiones, entraba en contacto no sólo con la flora y la fauna de
los helmintos? esas zonas, sino también con los microorganismos presentes
2. ¿En qué periodo histórico empezaron los descubrimien- en vegetales, animales, tierra o agua; de igual modo, algunos
tos de las enfermedades secundarias a protozoarios?
animales infectados se convertían en fuente de contaminación
3. ¿Qué es la paleoparasitología?
4. Mencione uno de los primeros protozoarios observados para las personas cuando interactuaban con ellos. Los insectos
al microscopio. que portaban algún patógeno lo transmitían, sea que los hu-
manos se alimentaran o se protegieran de ellos. Así, cuando
un grupo contraía la infección por un parásito, lo adoptaba y
Introducción transportaba a otros sitios o lo diseminaba a otras personas o
animales. En otras palabras, la migración de la gente conducía
La historia permite conocer el pasado, comprender el presen- a la transportación del microorganismo infeccioso hacia nue-
te y prever hasta cierto punto el futuro. En este capítulo se vas áreas en las que habitualmente no se encontraba.
muestra la secuencia en que surgieron los conocimientos de Cuando las personas padecían un problema de salud por
la parasitología actual. No se incluyen todos los sucesos rele- la infección de un microorganismo, una preocupación evi-
vantes, con fechas y nombres de los personajes que llevaron dente era la aparición de síntomas. En ese momento la gente
a cabo los descubrimientos de los parásitos, ni los ciclos bio- trataba de conocer las causas de la enfermedad, el origen de
lógicos o las técnicas de diagnóstico. Esa información puede sus síntomas y la forma de curarse. Las primeras observacio-
encontrarse en tratados completos que los detallan (Grove, nes de enfermedades parasitarias proceden con toda seguri-
1990; Ackernecht, 1965; Chernin, 1977). Sin embargo, en dad del mismo inicio de la historia, cuando alguien advirtió
este capítulo se sintetiza, de manera global y con base en una que la materia fecal contenía gusanos en forma de lombrices
perspectiva crítica y significativa, la manera en que se desa- de tierra (Ascaris lumbricoides), o que eliminaba en sus heces
rrolló la parasitología y algunos ejemplos de sus experiencias organismos en forma de cinta de varios metros de longitud
más representativas. (tenias). Sin embargo, no fue sino hasta que el microscopio
A medida que los humanos fueron desplazándose en di- hizo posible reconocer los parásitos no observables a simple
ferentes direcciones, tuvieron que adaptarse a las condicio- vista, cuando fue posible identificar las causas de los signos y
nes ambientales de una zona particular y alimentarse de sus síntomas de la afección, como diarrea mucosa y sanguinolen-
fuentes naturales. Hoy se sabe que existe una amplia gama de ta, fiebre o vómitos.
1
2 Parasitología médica • Capítulo 1

Antecedentes históricos hepáticos, tal vez consecutivos a amibas. A fines del siglo xi
d.C., Avicena mencionó casos de disentería relacionada con
La aparición de la parasitología se relaciona con la historia mis- absceso hepático. En cuanto a la leishmaniasis, se han hallado
ma de la humanidad; por tanto, se puede dividir como sigue: descripciones de las lesiones en lápidas del siglo vii a.C. De
a) Edad Antigua (4000 a.C. a 476 d.C.), desde el descubri- igual manera, hay documentos de médicos orientales y ára-
miento de la escritura en el Oriente hasta la caída del Imperio bes, como Avicena, que hacen referencia a lesiones ulcerosas,
Romano; b) Edad Media (476 a 1453 d.C.), que concluye con secundarias a infección por Leishmania. En relación con el
la capitulación del Imperio Bizantino al caer Constantinopla; paludismo, se tiene noticia de las fiebres periódicas en China
c) Edad Moderna (1473 a 1789 d.C.), que se extiende desde (2700 a.C.) e Hipócrates lo menciona en el siglo v a.C.
el Renacimiento hasta la Revolución Francesa, y d) Edad Con- Muchos de estos grandes hallazgos se conservan en la
temporánea, desde la ilustración hasta la actualidad. forma en que se registraron; por ejemplo, en el papiro, fa-
Los hallazgos parasitológicos en la Edad Antigua se re- bricado en el antiguo Egipto a partir de la planta Cyperus
fieren a la presencia de gusanos que pueden observarse a sim- papyrus. En otras culturas, como las de India, China y Japón,
ple vista y que están presentes o se eliminan con las heces. la escritura fue esencial para consignar tales informaciones.
Se conocen varios registros al respecto. El papiro de Ebers Otro suceso importante fue el descubrimiento de productos
es de los más antiguos (1500 a.C.) y ahí se hallaron las pri- naturales que permitían expresar en tinta los pensamientos.
meras descripciones de parásitos que afectan a las personas, Todo esto explica que los primeros registros parasitológicos
además de detalles de enfermedades de posible origen parasi- procedan de esas civilizaciones. Sin embargo, el papel, los
tario, tal vez gusanos intestinales. Uno de ellos es, sin duda, el colorantes y la escritura no fueron los únicos requisitos para
nematodo Dracunculus medinensis, del que se describe su natu- iniciar los estudios en parasitología; era necesario que las
raleza infecciosa y la manera de extraerlo de la piel. personas se preguntaran por el origen de las cosas. Sólo en
Los estudios de Hipócrates (460-375 a.C.) también con- ese sentido se explica la aparición de filósofos y otros pen-
tienen descripciones de gusanos presentes en peces, animales sadores, como Hipócrates, Aristóteles, Sócrates y Platón, y
domésticos y humanos. De igual modo, Lucrecio notificó la luego Avicena, Rhazes, Galeno y otros más. En el imperio de
palidez en los mineros, quizá consecutiva a infecciones por Alejandro Magno la cultura helénica extendió sus territorios
uncinarias. Los documentos de médicos latinos también al Oriente, hasta que en el año 146 a.C. la eclipsó la invasión
son valiosos. Celso (25 a.C. a 50 d.C.) y Galeno de Pérga- romana. La Edad Antigua finalizó con el colapso del Imperio
mo (129-200 d.C.) comunicaron la existencia de helmintos, Romano; este periodo tuvo carácter militar y la historia de la
como Ascaris lumbricoides, Enterobius vermicularis y Taenia. parasitología aún no registraba hechos decisivos.
Al parecer, los médicos árabes Rhazes (850-923 d.C.) El conocimiento de las parasitosis en la Edad Media
y Avicena (980-1073 d.C.) describieron a Ascaris lumbricoi- como problema de salud no avanzó demasiado. Sólo en la
des, Enterobius, Taenia y Dracunculus medinensis. Una estatua Biblia hay referencias sobre la existencia de Dracunculus me-
del faraón Mentuhotep II en Egipto, hacia el año 2000 a.C., dinensis, que se describe como una “serpiente dragón” que
sugiere que sufrió elefantiosis. La esquistosomosis es otra pa- eliminó a los judíos en el Mar Rojo después del éxodo de
rasitosis que se detalla desde esa época en el papiro de Ebers, Egipto (1250 a 1200 a.C). En los siglos x y xi, los trabajos
en el que se encuentra la palabra “aaa” que pudiera referirse a de médicos árabes, basados en los textos romanos y griegos,
la “descarga del pene” relacionada con la presencia de sangre ya se referían a este mismo helminto y al padecimiento lo de-
en la orina y cuyos remedios se basaban en el antimonio, o nominaban “vena podrida” o “vena de Medina”. En esa época
quizá a la esquistosomosis hematobia. la gente trataba de apoyarse en ideas que espiritualmente tie-
Aunque los primeros parásitos observados fueron hel- nen mucha fuerza: el poder lo ejercía la Iglesia y se corría el
mintos, en virtud de su tamaño macroscópico, también se riesgo de que la explicación de la vida en razón de la natura-
registraron enfermedades causadas por protozoarios, si bien leza condujera a la calificación de hereje y a la hoguera, como
no se logró reconocer el agente causal. Por ejemplo, un do- lo ordenó la Santa Inquisición en el siglo xiii. Numerosos
cumento escrito en sánscrito alrededor del año 1000 a.C. se libros, quizá registros de fenómenos naturales, irrumpieron
refiere a la presencia de diarrea con moco y sangre en un indi- en el conocimiento científico.
viduo, posiblemente una infección amebiana. A este mismo
padecimiento se alude en textos de Babilonia y Asiria, en los
que se refieren problemas de sangre en heces (antes del siglo
Principales descubrimientos
vi a.C.). En sus trabajos, Hipócrates informa de abscesos he- En el Renacimiento, dentro de los grandes descubrimientos,
páticos y perianales. Galeno y Celso describieron los abscesos Carl von Linné (Linneo) describió seis gusanos: Ascaris lum-
Historia de la parasitología 3

bricoides, Ascaris vermicularis (Enterobius vermicularis), Gordius A partir del Renacimiento, alrededor de los siglos xv y
medinensis (Dracunculus medinensis), Fasciola hepatica, Taenia xvi, se observaron grandes adelantos acerca de las enferme-
solium y Taenia lata (Diphyllobothrium latum). En el siglo xvii, dades parasitarias. Un factor determinante que permitió di-
el médico inglés Edward Tyzon detalló la anatomía de As- fundir la información fue el invento de la imprenta, en 1435,
caris lumbricoides, igual que el italiano Francesco Redi. En por Gutenberg. Tal vez el poder de la Iglesia que detentaron
1674, Georgius Velschius, estudió a Dracunculus medinensis los papas León X y Julio II influyó para la consolidación del
(cuadros 1-1 y 1-2). Renacimiento y el surgimiento de pensadores como Voltaire,

Cuadro 1-1. Relación cronológica de los acontecimientos más relevantes de la parasitología.

Parásitos Fecha Hechos relevantes y otras denominaciones

1828 Se encontró como larva enquistada en músculos de cadáveres humanos en necropsias en Lon-
dres (Peacock), Hilton (1833) y Paget (1835).
1835 Richard Owen la describió por primera vez y le dio su denominación.
1844 Von Siebold y Dujardin (1945) propusieron que en el ser humano se encontraba la fase larvaria
del parásito.
1846 Joseph Leidy (Filadelfia) la encontró en carne de cerdo y la relacionó con su aparición en el
humano.
1853-1860 Leuckart y Virchow (1856-1860) demostraron parte del ciclo biológico al infectar diversos ani-
Trichinella spiralis males y probar que en pocos días los quistes se convierten en adultos después de la infección.

1860 Friedrich von Zenker demostró la presencia del parásito en relación con síntomas (practicó una
necropsia en una mujer que al parecer había muerto de tifoidea, y en ambas fases intestinales
halló larvas en los músculos); se hizo evidente una relación de la infección con la ingestión de
salchicha.
1897 Brow refirió la eosinofilia en la triquinosis.
Finales de 1800 y Virchow calculó 90% de infecciones en Alemania.
principios de 1900

1771 Linneo la describió.


1887 Grassi notificó su ciclo biológico.
1916 Ranson estimó 6% de infecciones en Estados Unidos.
Trichuris trichiura
1923 Fülleborn detalló su ciclo biológico.
1934 Hasegawa también describió su ciclo biológico.
1978 Los CDC informaron 11 brotes de origen común.

1876 Normand lo identificó en heces de soldados franceses que presentaban diarrea frecuente. En la
necropsia de cinco de ellos se encontró en la pared del íleon, en conductos pancreáticos y biliares.
Bavay le dio el nombre de Angillula stercoralis y el de A. intestinalis al encontrarlo en los tejidos.
1879 Grassi y Perroncito (1880) y Leuckart (1882) demostraron que los desperdicios eran fases dis-
Strongyloides tintas del mismo parásito y reconocieron un ciclo parásito y otro de vida libre.
stercoralis 1900 Askanazy demostró que las hembras depositan las larvas en la pared del intestino y no en la luz
intestinal.
1899-1914 Loos, Durme, Ranson y Fülleborn demostraron el ciclo vital desde la entrada en el organismo de
las personas hasta su establecimiento en el intestino.
1933 Faust descubrió todas las fases de desarrollo y diferenciación sexual de la generación parasitaria.

1914 Fülleborn sugirió que las larvas rabditoides en la región perianal pueden convertirse en infec-
Strongyloides tantes (autoinfección).
1928 (1932-1936) Nishigoni y Faust señalaron que es posible la autoinfección interna desde el intestino.

1600 a.C. Papiro de Ebers; lo describió por primera vez el médico persa Avicena (980-1037 d.C.).
1843 Dubini lo describió con precisión.
1878 Grassi y Parona notificaron la forma de diagnosticar la infección a partir de las heces.
1880 Perroncito señaló el desarrollo desde el primer estadio hasta la larva filariforme.
Ancylostoma 1886-1887 Leichtenstein demostró que las larvas filariformes se desarrollan en el intestino delgado hasta
duodenale ser adultas.
1896-1897 Arthur Loos trabajó en el laboratorio de Salud Pública de Alejandría, Egipto; ahí se infectó
accidentalmente por contacto de su piel. Explicó la ruta completa al experimentar con A.
caninum en perros y describió las fases completas del parásito desde la infección cutánea.

(Continúa)
4 Parasitología médica • Capítulo 1

Cuadro 1-1. Relación cronológica de los acontecimientos más relevantes de la parasitología (Continuación).

Parásitos Fecha Hechos relevantes y otras denominaciones

Necator americanus 1902 Stiles lo describió como nueva especie.


Ancylostoma
caninum

Enterobius 1758 Fue descrito por Linneo.


vermicularis

1758 Fue descrito por Linneo.


Ascaris lumbricoides
1954 Takata detalló la infección humana.

1893 Leuckart lo describió a partir de ejemplares colectados de un nativo de Ghana, en África.


Onchocerca volvulus 1915 Robles lo describió en Guatemala; también lo relacionó con la ceguera.
1926 Blalock demostró que lo transmite Simulium.

Cuadro 1-2 Relación cronológica de los descubrimientos de platelmintos y trematodos.

Parásito Fecha Hechos relevantes y otras denominaciones

1847 Fujii lo mencionó por primera vez.


1890 Yamagiwa (1893), Kurimoto y Fujinami (1904) encontraron en pacientes los huevos del
parásito como causa de la enfermedad.
1903 Kasai identificó los huevos en las heces de los pacientes.
Schistosoma
1904 Fujinami halló la hembra en la vena porta de pacientes.
japonicum
1905 Logon diagnosticó el primer caso en China.
1909 Fujinami y Miyagawa (1912-1913) y Miyairi y Suzuki (1913-1914) demostraron el ciclo
biológico.
1924 Faust y Melany aportaron detalles de la biología y patogenia del parásito.

1851 Bilharz encontró los gusanos en venas mesentéricas de un nativo de El Cairo. Después se
demostró que eliminaba los huevos en la orina.
S. haematobium 1894-1914 Loos contribuyó con el ciclo biológico, pese a que otros, como Harley y Cobbuld, aseguraban
y S. mansoni que había moluscos que actuaban como huéspedes.
1915-1918 Leiper demostró las dos especies y diferenció los huevos morfológicamente; describió la
infección cutánea y reconoció un molusco como huésped intermediario.

1879 La describió De Brie.


Fasciola hepatica 1882 Su ciclo vital lo detallaron Levokort y Thomas (1883).
1957 Reinhord enumeró sus antecedentes históricos.

quien promovió “la razón y el progreso”, y Michelet, el cual En 1681, Antonj van Leeuwenhoek descubrió al pro-
afirmó que el Renacimiento era la comunión del hombre con tozoario Giardia lamblia en heces diarreicas de él mismo.
el mundo y promovió la aparición de la Ilustración. También Francesco Redi expuso su teoría de la generación espontánea,
debe señalarse la época de la Enciclopedia que crearon los fi- en la que sostenía que los organismos derivan de material
lósofos franceses Diderot y D’Alambert, entre 1771 y 1772. inerte. Estos hallazgos fueron apoyados por el pensamiento
Surgieron artistas como Leonardo Da Vinci, Rafael y Miguel filosófico y humanista de Andreas Vesalio, a quien el descré-
Ángel, quienes fueron metódicos e ilustraron el cuerpo hu- dito del dogma escolástico lo llevó a la experimentación. En
mano como parte de la belleza de la naturaleza. esa época se afirmó que el ser humano es un creador de ideas,
Maquiavelo, en su obra El Príncipe, así como otros escri- más que sólo un manipulador de material, y que por ello es
tores, dieron consejos para mantener el poder en las naciones capaz de esculpir, pintar, escribir y experimentar. Entre 1765
monárquicas, las cuales de hecho surgieron y detentaron el y 1776, Lazzaro Spallanzani refutó la teoría de la generación
poder absoluto. Otros intelectuales, como Montesquieu y espontánea y señaló que el aire puede transmitir microorga-
Rousseau, promovieron ideas que sirvieron de fermento para nismos que luego se desarrollan en un medio adecuado. Sin
la Revolución Francesa. En el ámbito microbiológico, Giro- duda, los individuos tienden a conocerse a sí mismos y al
lamo Fracastoro, en 1546, propuso la existencia de micro- mundo; observan y experimentan, y son capaces de debatir
organismos invisibles como causa de enfermedades, y en el ideas. En estas ideas reside también la razón por la que triun-
siglo xvi se registró la filariasis linfática. fó la Revolución Francesa.
Historia de la parasitología 5

La Edad Contemporánea, que comenzó en 1789 con la en las personas inmunosuprimidas es notablemente mayor
toma de la Bastilla, marcó el inicio de hallazgos muy im- la diseminación del parásito. En 1836, Forbes identificó a
portantes para la ciencia, en especial en la parasitología. Dracunculus medinensis en el agua y lo describió, y en 1870
Schwann y Schleiden desarrollaron su teoría celular entre se reconoció su ciclo biológico a partir de crustáceos. El ci-
1838 y 1839. En 1798, el cirujano de la armada francesa, clo completo de Dracunculus fue descrito por el bacteriólogo
A.J. Renoult, describió los primeros casos de hematuria en Dyneshvar Atmarán Turkhud en 1913, quien inoculó a vo-
la esquistosomiosis manifestada entre los soldados, y en ese luntarios humanos con Cyclops infectados.
mismo año Edward Jenner probó su vacuna contra la viruela. Patrick Manson, en 1877, detalló el ciclo biológico de
A finales del siglo xvii, Edward Tyson explicó la morfo- los nematodos que causan la filariasis; éste es uno de los ma-
logía de las tenias y su fisiología. Entre 1847 y 1850, Sem- yores hallazgos en la historia de la parasitología. Sus investi-
melweis sugirió el uso de antisépticos para evitar que las gaciones se basaron en los trabajos de Fedchenko con la dra-
madres que daban a luz sufrieran fiebre puerperal. En 1858, cunculosis y abrieron la puerta a los ciclos del paludismo y el
Virchow sostuvo que todas las células proceden de una mis- arbovirus. En 1863, Jean Nicolas Demarquay descubrió las
ma célula. En 1861, Pasteur demostró que los organismos no filarias en el hidrocele y, en 1866, Otto Henry Wucherer, en
surgen por generación espontánea, y en 1859 Darwin publicó la orina. El adulto de estas filarias que producen elefantiasis
El origen de las especies. Entre 1881 y 1882, Pasteur descubrió lo describió Joseph Bancroft en 1876. No obstante, Manson
el bacilo de la tuberculosis y preparó la vacuna contra el car- pensó que el mosquito se depositaba en el agua, y que al es-
bunco. En 1884 se publicaron los postulados de Koch, y en capar las larvas, los humanos se infectaban cuando la bebían.
1885 Pasteur preparó la vacuna contra la rabia. Además, En 1900, el parasitólogo Thomas Bancroft localizó filarias en
en 1862, el médico francés Joseph Davaine demostró, con el las partes bucales del mosquito. A principios del siglo xx se
uso de parásitos, que la transmisión de Ascaris lumbricoides se describió la infección y la enfermedad por esquistosomiosis
debía a la ingestión de sus huevos; el italiano Giovanni Bat- causadas por las tres especies.
tista Gras se infectó a sí mismo con huevos de Ascaris lumbri- En cuanto a los trematodos, su descubrimiento (ocurri-
coides, y después de varias semanas los halló en su excremen- do entre 1874 y 1918) se relacionó con Paragonimus wester-
to. Hacia 1922, el médico japonés Shimesu Koino, quien mani, que Ringer reconoció en pulmones humanos en 1879;
también se incubó el parásito, describió su ciclo biológico. en 1880, Manson y von Baelz encontraron los huevos de este
Alrededor de 1838, el médico italiano Angelo Dubini parásito en el esputo, así como de Clonorchis sinensis y especies
notificó la presencia de uncinarias en seres humanos y en de Opistorchis. Entre 1916 y 1922, varios japoneses describie-
1854 Wilhelm Griesinger explicó esta enfermedad. Más ron la participación y los ciclos de caracoles, en particular
adelante, en 1879, el veterinario italiano Edoardo Perroncito Semisulcospira. A mediados del siglo xix, Küchenmeister in-
describió la infección en mineros. Arthur se infectó de ma- formó las diferencias entre T. solium y T. saginata, y en 1784,
nera accidental a finales de 1800 y demostró que la transmi- Johan August mencionó la relación con protozoarios y sus
sión tiene lugar a través de la piel. En 1821 se reconoció el enfermedades.
papel de Trichinella spiralis en las infecciones en cerdos, y en El médico ruso Friedrich Lösch descubrió el agente cau-
1835 James Piaget descubrió que el gusano infecta al huma- sal de la amebosis mediante experimentos en perros. En Egip-
no, aunque el informe lo redactó Richard Owen. En 1859, to, entre los años 1885 y 1896, el médico griego Stephanus
Rudolf Virchow detalló la fase adulta de este organismo y Kartulis identificó amebas en las úlceras de pacientes con
Zenker propuso que los humanos contraemos la infección al disentería y reprodujo este padecimiento digestivo en gatos
comer carne cruda de cerdo. cuando les inoculó los parásitos por vía rectal.
En 1876, el médico francés Louis Alexis Normand dio a En 1859, Vilém Lambl describió morfológicamente a
conocer la fase larvaria de Strongyloides stercoralis y la enferme- Giardia, y en 1902 el parasitólogo estadounidense Charles
dad que produce, y la fase adulta lo fue por el profesor Arthur Wardell Stiles la relacionó con la diarrea. Entre 1914 y 1918,
René Jean Baptiste Bavay. En 1883, Karl Georg Friedrich se descubrieron quistes de Giardia en las heces de soldados
Rudolf Leuckart notificó las generaciones alternantes de la caídos en la Primera Guerra Mundial, los cuales fueron capa-
fase parasitaria y de la vida libre del parásito. Durante 1901 ces de infectar animales de experimentación e inducir sínto-
y 1902, el médico belga Paul van Durme descubrió que la mas similares. En 1926, el médico Reginald Miller demostró
infección se desarrolla a través de la piel, y Loos se infectó a que los niños infectados con Giardia padecen malabsorción y
sí mismo para demostrar que la ruta de entrada es a través de otros son portadores. El médico inglés John Atkins, en 1721,
la piel y la presencia de las larvas a los 60 días de infección. reconoció por vez primera la actual enfermedad del sueño
Más adelante, en la década de 1940-1949, se demostró que que producen los tripanosomas africanos, y Thomas Win-
6 Parasitología médica • Capítulo 1

terbottom, en 1803, la denominó enfermedad del “letargo presentan una relación cronológica de los descubrimientos
negro”. Griffith Evans, en 1881, observó tripanosomas en más importantes de la parasitología.
caballos y camellos y los refirió como causantes de la afec- Es importante señalar que la paleoparasitología ha de-
ción. En 1894, el cirujano de la armada inglesa David Bru- mostrado la existencia de parásitos en momias, como huevos
ce investigaba un brote de nagana, enfermedad semejante al de A. lumbricoides (2227 a.C.) y de Ancylostoma (3350 a.C.)
“sura” en el ganado, y encontró los tripanosomas en la sangre en coprolitos humanos, y gusanos de Dracunculus en momias
de las reses, así como de perros infectados. En 1891, Gustave egipcias. La biología molecular permite demostrar la presen-
Nepveu reconoció los parásitos en la sangre humana, y Frie- cia de ciertas especies en registros biológicos antiguos.
drich Kleine demostró, en 1909, el papel transmisor de las Es preciso destacar que siempre hubo ideas predeceso-
moscas tsé-tsé en el ciclo biológico. ras o pensamientos que llevaron a los descubrimientos de las
Ronald Ross y David Thompson, en 1911, describieron enfermedades parasitarias. Los primeros fueron filósofos y
las olas sucesivas de la parasitemia. La enfermedad de Chagas más adelante surgieron científicos con un espíritu de expe-
se remonta a 1907, cuando el médico brasileño Carlos Cha- rimentación. Con todo, la época de los grandes hallazgos de
gas describió el parásito, la transmisión y la enfermedad. En la parasitología data de los años posteriores al Renacimiento
1824 se notificó el kala-azar en la India. Antes de estas fechas y sobre todo del periodo contemporáneo, con toda seguridad
se confundía el kala-azar con el paludismo. En 1900, el mé- porque ahora se dispone de mejores herramientas y es posible
dico militar escocés William Leishman y el profesor de fisio- establecer analogías, como en el caso de Manson y sus insec-
logía Charles Donovan descubrieron este patógeno en el bazo tos transmisores de enfermedades.
de pacientes infectados. En 1921, los hermanos Edouard y La finalidad de este capítulo es mostrar la evolución del
Ettiene Sergent demostraron que los mosquitos del género pensamiento humano que condujo a descubrir los parásitos y
Phlebotomus transmiten a Leishmania. Fue hasta 1941 cuando las enfermedades que provocan. En síntesis, primero se des-
se demostró que la picadura es el modo de transmisión. En cubrieron los parásitos, luego sus infecciones y, por último,
1911, Gaspar Vianna encontró en Sudamérica parásitos dis- su ciclo biológico y la epidemiología.
tintos de los hallados en África y Medio Oriente y les dio el
nombre de Leishmania braziliensis. En 1922 se descubrió que
el transmisor es Lutzomyia. Preguntas para reflexionar
Los parasitólogos franceses Charles Nicolle y Louis He-
bert Manceaux descubrieron Toxoplasma gondii al buscar un 1. ¿Es posible esperar acontecimientos aún no demostrados
que podrían ser clave para explicar el comportamiento de
reservorio de Leishmania en el roedor gondi. Por otro lado,
los parásitos conocidos?
Alfonso Splendore lo encontró en conejos en Brasil en el mis- 2. ¿Por qué en la época renacentista tuvo lugar la mayor
mo año de 1909. El médico checo Josef Janku estableció, parte de los descubrimientos? ¿Tuvo influencia en ello el
en 1923, un nexo entre la infección y la presencia de este pensamiento de los filósofos de esos siglos?
parásito. Fue hasta 1937 cuando Arne Wolf y David Cowen 3. A pesar de la tecnología actual, ¿por qué aparecen toda-
vía nuevas enfermedades infecciosas que no es posible
descubrieron Toxoplasma en un caso congénito. Su ciclo bio-
describir por completo?
lógico fue descrito en 1970 por William McPhee, Hutchin-
son, Jack Frenkel, Harley Sheffield, Gerhard Piekarsky y J.P.
Overdulve en un trabajo colectivo.
En 1912 se dio a conocer Cryptosporidium parvum, cuando Respuestas a las preguntas
el parasitólogo americano Edward Ernest Tyzzer lo encontró de la evaluación inicial
en las glándulas gástricas de un ratón de laboratorio; el crédi- 1. En las épocas antigua y moderna; en la Edad Media son
to del primer registro de infección humana les correspondió, escasas las contribuciones.
en 1976, a Nime y Meisel. En 1979, el parasitólogo inglés 2. Entre los periodos renacentista y moderno.
3. Es el estudio de hallazgos parasitológicos en restos fó-
Richard Ashford demostró la presencia de Cyclospora cayeta-
siles.
nensis en pacientes de Papúa, Nueva Guinea, y en 1986 se 4. Giardia lamblia.
aisló en heces de pacientes con sida. Los cuadros 1-1 y 1-2
Historia de la parasitología 7

Anexo
Evolución de la Parasitología en el microscopio la sangre de uno de los soldados que había
recaído de paludismo y observó cuerpos esferoidales en cuyo
algunas enfermedades altamente interior había corpúsculos que se movían activamente; eran
diseminadas glóbulos rojos infectados. Ya antes había observado cuerpos
en forma de media luna en el interior de los eritrocitos. En
Paludismo (malaria) sus propias palabras Laveran describía “[...] en la periferia
de ese cuerpo había una serie de filamentos finos y transpa-
Se trata de una de las enfermedades que históricamente tie- rentes que se movían muy rápido y que, indiscutiblemente,
nen trascendencia no sólo desde el punto de vista del padeci- tenían vida”. En ese momento creyó que eran bacterias; sin
miento, sino también desde la perspectiva histórica. En este embargo, en 1885 se descartó la presencia de bacterias como
caso los protagonistas principales son dos grandes investiga- causantes del paludismo, los investigadores tardaron 10 años
dores: Laveran y Ross. en descubrir que el causante del paludismo podía ser trans-
Charles Louis Alphonse Laveran nació en París, Francia, mitido por un mosquito.
el 18 de junio de 1845 (figura 1-1); fue hijo de un cirujano Laveran fue ganador del Premio Nobel en 1907 por ha-
militar, quien obtuvo su título de médico en 1867, en la ber puesto al descubierto al agente del paludismo. Murió en
Escuela del Servicio de Sanidad de Estrasburgo. Participó en París el 18 de mayo de 1922, a los 76 años de edad.
la Guerra franco-alemana de 1870 y asistió como cirujano Ronald Ross nació en Almora, la India, el 13 de mayo
militar al sitio de Metz. Esto le permitió adquirir el entrena- de 1857 y aunque estudió Medicina en Inglaterra siem-
miento para participar con militares. Otro dato importante pre deseó ser literato (figura 1-2). En 1879 se graduó de
es que fue profesor en la Escuela del Val-de-Gráce en 1874, ya médico en la Escuela de Medicina del Hospital San Bar-
que esto le permitió entender desde el punto de vista magis- tolomé de Londres. Prestó sus servicios médicos en su país
terial las causas de enfermedades, entre ellas las infecciosas. en 1881 cuando ya Laveran había descrito el causante del
Para 1878 fue enviado a Argelia bajo la comisión de investi- paludismo. Fue un hombre de vasta cultura y escritor. Para
gar las causas del paludismo, pues acechaba a gran parte de 1892 empezó a estudiar las causas del paludismo; en 1894,
la población. durante una visita en Inglaterra, conversó con un médico
A pesar de conocer las carencias que existían en ese en- quien le planteó su teoría de la transmisión del paludismo
tonces, pero con la certeza de que el microscopio era una he- a la gente a través de picaduras de mosquitos. Comenzó a
rramienta útil para aquellos que querían investigar, procedió estudiar mosquitos, revisando de manera exhaustiva a los
a revisar clínicamente a soldados y muestras de sus fluidos, insectos. Los crió para asegurarse que no estuvieran infecta-
entre ellos su sangre. En noviembre de 1880, revisaba bajo dos por el parásito y les daba de comer sangre de pacientes
infectados. Después de dos años revisó los estómagos a los
insectos y en 1897 halló la primera evidencia: observó que
en las hembras de los mosquitos del género Anopheles se en-
contraba el parásito con movimientos muy activos.
En 1898 describió la presencia de estructuras a las que
denominó “esporas” y que se alojaban en las glándulas saliva-
les del mosquito; de esta manera supone que la picadura del
mosquito transmite el parásito. De este modo las autoridades
sanitarias pudieron empezar a controlar la transmisión. En
1902 Ross fue recompensado con el Premio Nobel de Fi-
siología o Medicina, y en 1907 se hizo acreedor de nuevo al
mismo reconocimiento.
Ross, además del trabajo científico, dedicó algún tiem-
po a escribir novelas, poemas, dramas y piezas de teatro.
Figura 1-1. Charles Louis Figura 1-2. Ronald Ross Murió a la edad de 75 años en Londres, el 16 de septiembre
Alphonse Laveran (1845-1922). (1857-1923). de 1932.
8 Parasitología médica • Capítulo 1

Vale la pena mencionar que durante la época en que es-


tos autores describieron el hallazgo del parásito, otros inves-
tigadores debaten su teoría, el principal de ellos el italiano
Ettore Marchiafava, secundado por Celli, Golgi y Grassi,
quienes suponían la infección por un micrococo. Para pro-
fundizar más, el lector puede revisar la nota histórica de Wal-
ter Ledermann D: Laveran, Marchiafava y el paludismo. Rev
Chil Infect 2008;25(3):216-221; y la página de internet: bvs.
sld.cu/revistas/his/vol_2_99/his15299.htm

Teniasis-cisticercosis
Desde los tiempos de Aristóteles ya se describía la presencia
de cisticercos en el cerdo y durante siglos aparecieron muchas Figura 1-3. Charles Jules Henry Nicolle.
descripciones acerca de la presencia de las tenias en fase adul-
ta en heces humanas, así como la presencia de cisticercos en hmanias; por lo cual llamaron Leishmania gondii a otros pa-
el encéfalo de gente infectada; sin embargo, llama la atención rásitos que ya se identificaron en ese entonces. Splendore, de
saber que el agente causal de la cisticercosis y la teniasis es el forma independiente, observó estos microorganismos en te-
mismo. Los dos investigadores que lograron dar a conocer jidos de un conejo muerto con parálisis en Brasil. Manceux y
el ciclo biológico fueron Küchenmeister y Leuckart. Nicolle lo reportaron también como el mismo toxoplasma
En la década de 1850-1859, en Alemania, Küchenmeister y así, juntos, demostraron la presencia de lo que ahora se
pidió a las autoridades de una prisión dar de comer a una mu- conoce como Toxoplasma gondii. Una tercera observación fue
jer condenada a muerte 75 cisticercos en los tres días consecu- reportada en topos por Mine en Japón en 1908.
tivos anteriores a su ejecución. Durante las primeras 48 horas Es importante resaltar que primero fue observado por
después de su muerte se practicó una necropsia de la mujer Laveran en 1900 en cortes histológicos de bazo y médula ósea
y en sus intestinos encontró 10 adultos de las tenias. Repitió de gorriones de Java, los cuales se infectaron con otro parási-
su experimento con otros presidiarios y ocurrió algo similar. to: Haemamoeba; sin embargo, aunque lo reportó así, es pro-
Leuckart, por su parte, empleó proglótidos de adultos de bable que más bien se haya tratado de toxoplasma. Aunque
Taenia saginata y se las dio de comer a becerros; en sus órganos es interesante esta demostración, quizá lo es aún más otros
observó cisticercosis masiva en los órganos de los becerros. dos aspectos: que era un parásito causante de toxoplasmosis
Los huevos contenidos en los proglótidos se habían convertido humana y su ciclo biológico.
en cisticercos. Lo anterior demuestra que el descubrimiento de Entre 1908 y 1937 se demuestra su transmisión expe-
parásitos requiere que el investigador realice experimentos rimental empleando homogenados de cerebro del animal
atrevidos y tenga en mente las fuentes de transmisión de la infectado a través de las vías intraperitoneal, intracraneal y
enfermedad en cuestión (www-lab.biomedicas.unam.mx/cis-
subcutánea; en ello se observaba un incremento en la virulen-
timex/s10-5gene.html).
cia del parásito; es probable que hayan observado que ratones
muertos eran comidos por otros dentro de la misma jaula de
Toxoplasmosis experimentación y que se incrementaba la virulencia, sospe-
Otra referencia fascinante en la historia de la Parasitología es chando la vía oral al consumir carne cruda.
sobre un parásito intracelular que a la fecha todavía levanta Entre los animales que se estudiaron para investigar la
especulaciones y dudas: Toxoplasma gondii. La historia indica transmisión se reportan monos, ratas, cuyos, ratones, gondis,
que los primeros que reportaron su presencia fueron el fran- los cuales mostraron mayor susceptibilidad; sin embargo, fue
cés Charles Jules Henry Nicolle (figura 1-3) y L. Manceaux interesante saber que estos últimos son herbívoros, por lo
en 1909. que la transmisión no sólo era a través de consumo de carne.
En ese entonces se intentó identificar varios microorga- Un dato importante resultó al observar que los gondis esta-
nismos cuando se observaba que algún espécimen presentaba ban más infectados en invierno que en verano, por lo cual se
un problema. Nicolle —que era director del actual Instituto pensó que la temperatura climática hacía al huésped más su-
Pasteur— y Manceux observaron en tejidos de sangre, bazo e ceptible o que había transmisión por artrópodos, esto último
hígado de gondis (rodeores que habitan el sureste de Túnez) debido a que en sangre de los gondis se observaron parásitos;
tejidos invadidos por organismos que tenían la forma de leis- finalmente se demostró que no había tal transmisión.
Historia de la parasitología 9

Tomando en cuenta que la transmisión podría ser a través do la infección en ellos. Carlos Chagas comenzó a examinar
de la ingestión de carne cruda y considerando a los roedores clínicamente a la gente de la zona estudiada. En dos niños
como huéspedes, se pensó en que los gatos y perros podrían encontró los flagelados y con su sangre pudo inocular a rato-
ser infectados. Después de cinco años de investigaciones in- nes, en los cuales pudo observar al parásito en sangre. De esta
tensas, Frenkel y colaboradores en 1970 dedujeron el ciclo manera comprueba el ciclo biológico y demuestra el trans-
biológico completo de Toxoplasma gondii; dio de comer ratones misor. Aunque en un principio se pensó que se transmitía a
infectados a gatos, de modo que en sus heces encontró los través de la picadura, varios años después se demostró que el
ooquistes del parásito uno a cinco días después de la infección. insecto lo transmite a través de las heces.
Así, en realidad los esfuerzos para descubrir el ciclo biológico Todos los eventos históricos aquí presentados demues-
de este parásito tuvieron lugar recientemente y todavía per- tran cómo se lograron los descubrimientos cruciales que co-
manecen enigmas relacionados que deben dilucidarse. mentan. En ocasiones se marcan las fechas y el hallazgo con-
cluyente de un descubrimiento, pero pocas veces es evidente
Enfermedad de Chagas cada importante suceso en detalle y qué hizo pensar a los
investigadores que lo que estaban observando era novedo-
Entre los acontecimientos históricos de la Parasitología, uno so. Transportarse a la época de los científicos es apasionante
de los principales descubrimientos fue el de esta enfermedad. desde su propia perspectiva, sin dejar de lado la emoción que
Dos investigadores que dieron la pauta fueron los doctores sintieron al demostrarlo.
Oswaldo Goncalves Cruz y Carlos Justiniano das Chagas en
el año de 1909; de ahí el nombre de la enfermedad. En las
propias palabras del doctor Das Chagas, presentadas en su Bibliografía
publicación Nova tripanozomiaze humana. Estudos sobre a mor-
folojia e o ciclo evolutivo do Schizotrypanum cruzi n. gen., n. sp., Ackernecht E.H. History and geography of the most important
ajente etiolojico de nova entidade mórbida do homen pelo: diseases. Nueva York: Hufner, 1965.
Bryon C.P. The Papyrus Ebers (translated from the German).
Em 1907 fomos incumbidos pelo director Dr. Oswaldo Gon- London: Goeffrey Blos, 1930.
calves Cruz, de executar a campanha anti-paludica nos servicos
de constrcao da Estrada de Ferro Central do Brazil, na rejiao Chernin E. Milestones in the history of tropical medicine
norte do Estado de Minas Geraes. and hygiene. Am J Trop Med Hyg 26:1053-1104. 1977.
Cox F.E.G. History of human parasitology. Clin Micro Rev
Cuando llegaron a la zona de estudio los habitantes les indi-
15:595-612. 2002.
caron la presencia de insectos hematófagos que les picaban,
llamados barbeiros. Pernoctaron y se dieron cuenta de su pre- Cox F.E.G. History of human parasitology. En: Cox FEG,
sencia y procedieron a su captura. Examinaron el contenido Krier JP, Wakelin D (eds.). Topey and Wilson’s microbiology
and microbial infections. 9a. ed., vol. 5. Parasitology. London:
de tales insectos y observaron la presencia de parásitos:
Arnold, 3-18. 1998.
Examinando o conteúdo do intestino posterior de exempla- Cox F.E.G. The Wellcome Trust illustrated history of tropical
res de conorrinos, colhidos em Minas Geraes, no interior de disease. London: The Wellcome Trust, 1996.
habitacoes humanas, verificamos ali a prezenca de numerosos
flajelados com os carateres morfolojicos de critidias… Grove D.I. A history of human helmintology. Wallingford,
United Kingdom: CAB International, 1990.
Los ejemplares fueron enviados al Dr. Oswaldo Cruz, quien Hoeppli R. The knowledge of parasitic infections from an-
empleó el contenido para infectar macacos, y entre 20 y 30 cient times to the 17th centuries. Exp Parasitol 5:398-419.
días después el animal presentó en su sangre flagelados con 1956.
morfología similar. Infectaron otros animales, reproducien-
CAPÍTULO Aspectos generales
de la parasitología
2
Marco A. Becerril Flores

Contenido
• Introducción • Parasitismo
• Mutualismo • Parasitología
• Comensalismo • Interacción parásito-huésped
• Foresis

ganismos. Por ejemplo, si estos últimos se encontraban en


Preguntas de evaluación inicial
la tierra, el agua o sobre una superficie de un objeto o un
1. ¿Qué tipos de simbiosis existen en la naturaleza? animal, otro organismo mayor entró en contacto con ellos
2. ¿Cómo se clasifican los parásitos? al beber el agua, recogerlos de la tierra, alimentarse de un
3. ¿Cómo se clasifican los huéspedes?
vegetal o animal, y los incorporaba a su cuerpo. Si ambos
4. ¿Cómo se clasifican los protozoarios?
5. ¿Cómo se clasifican los helmintos? permitían la relación, entonces ésta se mantenía hasta que
alguno moría; el más pequeño generaría descendientes.
No obstante que el microorganismo permanecía en los
Introducción tejidos de otro y se reproducía, como cualquier otro, secretaba
y excretaba diversas sustancias, las cuales podrían desencade-
Desde los albores de la historia las personas han intentado nar distintas reacciones que beneficiaban o perjudicaban al
sobrevivir en este planeta y conseguir alimento de las dife- otro organismo. De este modo, las diferentes formas de crear
rentes fuentes existentes en su entorno. Para ello han lucha- relaciones recibieron nombres específicos. Sin embargo, dos
do contra diversas contrariedades ambientales. De acuerdo individuos forman en general una asociación y las consecuen-
con la “selección natural” de Charles Darwin, el más fuerte cias son variables. En la actualidad la asociación entre dos
—esto es, el más adaptable— sobrevivió y el más débil desa- organismos de diferente especie recibe el nombre de simbiosis
pareció. En el medio que lo rodeaba se encontró con otros (Schmidt, 1995) y las distintas simbiosis toman denominacio-
organismos vivos que integraban la flora y la fauna, de tal nes diferentes de acuerdo con los resultados de la asociación.
manera que se vio obligado a convivir con ellos. Algunas fuentes bibliográficas consideran a la simbiosis como
Al igual que el humano, las demás especies de animales una especie de mutualismo en donde las dos especies que
también aprendieron a sobrevivir en la naturaleza en convi- conviven se benefician, como es el caso del pez payaso y las
vencia con otros y desarrollaron habilidades necesarias para anémonas; el primero le da limpieza a la anémona al tiempo
obtener sus alimentos mediante la caza. Los organismos mi- que ésta le da alimento y protección al pez; sin embargo, es
croscópicos se desarrollaron en un ambiente que les propor- evidente que se benefician pero no dependen uno del otro.
cionara los nutrimentos necesarios para su reproducción y Las asociaciones pudiesen dar consecuencias contrarias
permanencia en dicho ambiente. En tanto, los organismos a la esperada, por ejemplo, dado que el pez payaso no de-
más grandes adquirieron de forma accidental a los microor- pende de la anémona y viceversa, en cualquier momento se
11
12 Parasitología médica • Capítulo 2

abandonan y otro organismo puede modificar este ambiente, ped y le inflige daño. También en esta forma de simbiosis el
por lo que se puede convertir en parasitismo, o bien —como huésped es de mayor tamaño que el parásito. En un sentido
ha sucedido desde el punto de vista evolutivo— adaptarse estricto, el hiv es un parásito, ya que sobrevive dentro de
convirtiéndose en comensalismo. Es por eso que la simbiosis los linfocitos T de la persona y le causa daño. Vibrio cholerae
es separada de las demás relaciones y se le define como una también es un parásito puesto que es una bacteria que vive
asociación entre dos organismos de diferente especie sin im- a expensas del ambiente del intestino y, como consecuencia,
plicación negativa o benéfica. provoca lesión. Histoplasma capsulatum es un hongo que pro-
duce enfermedad en el humano y, por tanto, es un parásito.
Mutualismo
Parasitología
Es la asociación en la que ambos simbiontes son dependientes
entre sí y resultan beneficiados. Un ejemplo son las termitas, Pese a los ejemplos anteriores, la virología se encarga de es-
en cuyo intestino existen protozoarios hipermastiginos que tudiar los virus, la bacteriología las bacterias y la micología
digieren la celulosa que contiene la madera y los productos los hongos. Para facilitar el estudio y sistematización, la pa-
de esta digestión los utiliza la termita para su alimentación. rasitología es la parte de la biología cuyo objeto de estudio
Por otro lado, la termita provee un ambiente favorable para es el parasitismo producido por protozoarios, helmintos y
el desarrollo del protozoario. Uno no vive sin el otro: si se re- artrópodos. Si éstos son capaces de inducir enfermedades en
mueve el hipermastigino del intestino, la termita es incapaz animales, su campo de investigación se extiende a la para-
de digerir la madera y en consecuencia muere. sitología animal, o a la parasitología vegetal si se trata de
enfermedades en plantas. Cuando los organismos provocan
afecciones en las personas, la rama que los estudia es la para-
Comensalismo sitología médica. De manera particular, si se investigan as-
En esta relación uno de los simbiontes (denominado comensal) pectos más cercanos a la relación entre médico y un paciente
vive a expensas de otro (llamado huésped) sin causarle daño. afectado por una enfermedad parasitaria, la parasitología se
El comensal es de menor tamaño que su huésped. En este sen- torna clínica. Existen trastornos parasitarios en el humano
tido, no debe confundirse el organismo comensal con la flora que se inician a través del contacto con animales, que tam-
habitual, ya que esta última representa poblaciones que forman bién sufren la parasitación y la enfermedad; en consecuencia,
parte natural del huésped e incluso lo protege de infecciones; dichos animales son capaces de transmitir la anomalía a las
en contraste, los comensales no se encuentran normalmente en personas. Estos padecimientos de animales transmitidos al
los tejidos del huésped y éste los adquiere de forma accidental, hombre se conocen como zoonosis.
de hecho, representan contaminación e incluso infección. Un Es importante aclarar que un protozoario, helminto o
ejemplo es Endolimax nana, organismo que infecta al humano artrópodo es un parásito bajo ciertas condiciones; de otro
en su intestino y sobrevive gracias a que se alimenta de bac- modo, puede infectar a un individuo y permanecer como co-
terias y sustancias orgánicas e inorgánicas que se encuentran mensal, siempre que la infección se entienda como el esta-
en la luz intestinal, sin ocasionarle trastornos al huésped. No blecimiento, reproducción y sobrevivencia de un organismo
produce daño pero tampoco es normal que esté infectando. dentro o sobre los tejidos de un huésped. Para que el parasi-
tismo tenga lugar, es decir, en la que el huésped sea afectado,
deben cumplirse distintos requisitos en relación con el pará-
Foresis sito y el huésped.
Esta simbiosis se observa cuando el huésped transporta a un 1. Dosis o cantidad de inóculo. Para que se induzca un
organismo denominado foronte, más grande éste que aquél. daño en el huésped el parásito debe infectar en una can-
Como ejemplo puede referirse el caso de Musca domestica, la tidad mínima; algunos parásitos deben encontrarse en
cual transporta entre sus patas o tórax bacterias y protozoarios cantidades superiores a 1 × 106 para ocasionar daño; a
que actúan como forontes y los traslada hacia un sitio en el que otros les basta con uno o dos. Si el mecanismo se basa en
pueden ser foco de infección para las personas. toxinas, entonces la infección depende de la cantidad de
toxina necesaria para producir el trastorno.
2. Factores de virulencia. Hay especies de parásitos que
Parasitismo en la naturaleza se presentan en la forma de diferentes
En esta asociación la interacción ocurre cuando un organismo cepas que pertenecen a la misma especie. A pesar de que
llamado parásito vive a expensas de otro denominado hués- cada cepa es un grupo de organismos con características
Aspectos generales de la parasitología 13

biológicas, bioquímicas, moleculares o genéticas bien les a las personas pero no a la inversa, como ocurre
definidas, dentro de la misma especie del parásito hay con Toxoplasma gondii, que infecta al humano como
cepas que poseen la capacidad de lesionar y otras que no quiste presente en los tejidos del cerdo, res o ave, pero
la tienen, esto es, existen cepas patógenas y no patóge- los animales no se infectan con los toxoplasmas que la
nas, respectivamente. La patogenicidad (capacidad para persona adquiere.
infligir daño) de un parásito depende de los factores de d) De acuerdo con el número de huéspedes que em-
virulencia; entre éstos, de manera general, se pueden plea para completar el ciclo biológico: a) mo-
mencionar los siguientes: noxeno, si el parásito sólo requiere un huésped para
• Moléculas de superficie que le permitan al parásito ad- completar su ciclo; en este caso el nematodo Trichuris
herirse a la superficie de los tejidos del huésped. trichiura es un ejemplo, ya que el ciclo sólo se verifica
• Enzimas que degradan los tejidos del huésped. en las personas; b) polixeno o heteroxeno, cuando
• Mecanismos moleculares que superan las defensas del el ciclo biológico exige la participación obligada de
cuerpo humano. varios huéspedes, como las especies de Gnathostoma,
• Rapidez de su reproducción (mayor a la reproducción que necesitan la intervención de felinos, copépodos,
de las células del huésped). peces, entre otros (Bush et al., 1997).
• Secreciones que alteran la fisiología de los tejidos del e) En relación con el tiempo que pasa un parásito
huésped y que actúan como toxinas. en su huésped. Accidental, si el huésped donde
• Espacio físico ocupado y que obstruye el funciona- se encuentra no es el habitual; temporal, si utiliza
miento normal de una persona infectada. a un huésped para subsistir pero luego lo abandona;
• De manera mecánica, los movimientos del parásito permanente, cuando vive toda su existencia en el
pueden lastimar los tejidos del huésped. mismo huésped, como Toxoplasma gondii, que no se
• Competencia por los alimentos que se encuentran en separa del huésped hasta que muere.
el medio. Los huéspedes, por su parte, también reciben di-
3. Fase del parásito. No todas sus fases son infectivas y ferentes denominaciones:
patógenas para el humano. 1. Accidental. El alojamiento que suministra al pa-
En relación con el huésped, el parasitismo se desa- rásito es circunstancial.
rrolla si aquél muestra la suficiente susceptibilidad al 2. Intermediario. Permite el establecimiento de fa-
parásito; de lo contrario, a pesar de que sea patógeno ses inmaduras o asexuales del parásito.
y se encuentre en una dosis suficiente o mayor, el daño 3. Definitivo. Posibilita el establecimiento de las
al huésped no ocurre porque éste no es susceptible. Por fases maduras o sexuales del parásito.
ejemplo, el hiv es un virus que infecta a personas, pero 4. Completo. Actúa como definitivo e intermedia-
no a gatos o perros. rio.
Los parásitos reciben distintos nombres: 5. Paraténico. Alberga al parásito sin que éste se
a) De acuerdo con la localización, dentro o sobre los desarrolle en alguna fase (se dice que es de trans-
tejidos del huésped, un organismo es endoparásito porte).
si se desarrolla en el interior y ectoparásito si aparece 6. Reservorio. Permite que el parásito conserve
en la superficie del huésped. su naturaleza infectiva para el humano (Euzeby,
b) Respecto de su reproducción, pueden dividirse en: 1997).
intracelulares o extracelulares, cuando se reprodu-
De igual modo, a los ciclos biológicos se los designa con di-
ce en el interior o fuera de una célula huésped, respec-
ferentes nombres (Atías, 1999; Tay, 2002).
tivamente, pero en sus tejidos.
c) Es posible clasificarlos también por el número de es- 1. Homogónico. Todas las fases del parásito son parasita-
pecies de huéspedes que pueden parasitar: a) es- rias o de vida libre.
tenoxeno, si su ciclo de vida requiere la transmisión 2. Heterogónico. Hay alternancia de fases (de vida libre y
de animales al humano (y desde luego se desarrolla parasitaria) en el parásito.
en este último para regresar al animal); un ejemplo es
Taenia solium, que infecta al cerdo en la fase larvaria y
se desarrolla en la fase adulta en la personas, en cuyas
Interacción parásito-huésped
heces se elimina el huevo que infecta de nueva cuenta La interacción parásito-huésped tiene que ocurrir bajo condi-
al cerdo; b) eurixeno, cuando se transmite de anima- ciones necesarias y las más de las veces el contacto es acciden-
14 Parasitología médica • Capítulo 2

tal; no obstante, el parásito puede buscar alimento y, si exis- 15 en un año, la incidencia es de 15 infectados por cada
ten sustancias que libera el huésped necesarias para aquél, 100 pacientes.
se dirige en su dirección y se establece sobre o dentro de él. 3. Densidad. Es el número de individuos de una especie
Para el primer caso puede considerarse como huésped al pro- particular de parásito en una unidad de muestreo medida
pio humano: cuando la persona se encuentra con el parásito, a partir de un huésped o un hábitat en unidades de área-
este último ingresa por alguna vía y trata de sobrevivir; en volumen o peso. Por ejemplo, la parasitemia de ratones
otras palabras, ocurre una infección (establecimiento, sobre- infectados con Trypanosoma cruzi se puede informar en
vivencia y reproducción en los tejidos del huésped), la cual términos de densidad de infección (número de parásitos
genera cambios en el huésped que provocan una diversidad por mililitros de sangre).
de reacciones en él. La interacción parásito-huésped se crea 4. Intensidad de infección. Es el número de sujetos de
en un microambiente. una especie particular de parásito en un huésped infec-
Puede ser de utilidad el ejemplo de la fasciolosis: el pa- tado y se expresa en números enteros de parásitos que se
rásito Fasciola hepatica infecta al humano cuando se encuentra encuentran en cada huésped. A esta unidad la han deno-
enquistado en plantas acuáticas; si son comestibles, como los minado los parasitólogos carga parasitaria o nivel o radio
berros, la persona se infecta; más tarde, después de diversos de infección.
fenómenos dentro de su organismo, elimina al parásito en sus 5. Intensidad media. Es la intensidad promedio de una
heces. Si defeca en un cuerpo de agua sin movimiento que especie específica de parásito que se presenta entre los
contenga caracoles del género Lymnaea, el parásito se desa- miembros infectados de una especie particular de hués-
rrolla en su interior para después salir y al enquistarse infecta ped, o bien el número total de parásitos en una muestra,
a la persona. En este ejemplo, la presencia del humano que dividida entre el número de huéspedes infectados con ese
defeca al ras del suelo, de caracoles y plantas acuáticas crea un parásito. Por ejemplo, si tres ratones están infectados:
ambiente que en términos ecológicos resulta esencial. uno con 1 000, otro con 100 y otro con 100, la inten-
Por otro lado, el parásito sobrevive dentro de los teji- sidad promedio es la suma de las tres intensidades (100
dos del caracol y el humano, pero en cada huésped existen + 1 000 + 100 = 1 200) entre el número de huéspedes
diferentes fases del parásito; en consecuencia, cada huésped infectados con ese parásito: 1 200/3 = 400. La intensidad
representa un microambiente distinto. Los términos que de- promedio es de 400.
ben considerarse para definir con precisión las características 6. Abundancia. Es el número de individuos de una espe-
de un macroambiente o microambiente son los siguientes: cie particular de parásito en un huésped, tanto si está
el sitio o localización del parásito es la región espacial o infectado como si no. Por ejemplo, si de tres huéspedes
topológica en un huésped donde un parásito se colecta. Se uno tiene 100 parásitos de una especie, otro 1 000 de la
diferencia del hábitat, que se refiere al ambiente típico local misma especie y el otro no tiene parásitos, la abundancia
en el cual se encuentra el parásito. Otro término que no es es 100, 1 000 y 0. La descripción es individual para cada
claro en ocasiones es nicho, un concepto que alude a su papel huésped.
y la forma de adecuarse o adaptarse dentro de una comunidad 7. Media abundancia. Es el número total de parásitos en-
particular. Para conocer la importancia de las parasitosis en tre el número total de individuos de una población. En
una región geográfica, dato que es crucial, sólo se explican el ejemplo anterior, serían 1 100 parásitos entre 3 y la
en forma cuantitativa, razón por la cual es necesario definir abundancia media sería de 367 parásitos de esa especie
términos que permitan estimar la magnitud de la existencia (Bush, 1997).
de una infección parasitaria: Es importante señalar que otros conceptos de la interac-
1. Prevalencia. Es el número de huéspedes infectados con ción parásito-huésped también son relevantes y suelen con-
uno o más individuos de una especie particular de pa- fundirse: colonización es el establecimiento de una pobla-
rásito o grupo taxonómico dividido entre el número de ción de parásitos en un sitio donde antes no había al menos
huéspedes examinados de la misma especie parasitada. un parásito; esto no significa que se reproduzca, sobreviva
También se aplica a infecciones. Se puede expresar como y extienda, caso en el cual se trataría de una infección. Un
porcentaje, en términos de proporción sobre 100%. huésped se coloniza al ser infectado. Este término es contra-
2. Incidencia. Es el número de nuevos huéspedes que se rio al de extinción, que se refiere al huésped que ya no tiene
infectan con un parásito particular durante un interva- ningún individuo del parásito. Para la colonización el pará-
lo específico dividido entre el número de huéspedes no sito debió desplazarse por sí solo o bien un agente lo trans-
infectados presentes al inicio de ese lapso. Por ejemplo, portó. En este mismo sentido, la transmisión es el transporte
si de 100 sujetos que ingresan a un hospital se infectan o acarreo de un parásito a un huésped sin importar si ya está
Aspectos generales de la parasitología 15

colonizado por la misma especie del parásito. La colonización última o las dos últimas letras; los nombres de enfermeda-
se aplica a un huésped, una población de huéspedes o una des bien establecidas históricamente se conservan como hasta
especie de huéspedes. ahora, por ejemplo, el paludismo, enfermedad de Chagas,
En una región geográfica pueden existir comunidades larvas migrantes, etc. Los padecimientos parasitarios que se
(una comunidad incluye más de una población de diferen- estudian en adelante se adecuan a estas consideraciones.
tes organismos que viven juntos en una unidad de espacio- Es importante considerar que originalmente los pará-
tiempo). En una comunidad puede haber una diversidad de sitos se clasificaron con base en características morfológi-
especies, término que alude a la composición de una comuni- cas con la ayuda de las descripciones ultraestructurales o de
dad en términos del número de especies presentes. comportamiento, así como características ecológicas; en la
Las infecciones parasitarias que se desarrollan en el hu- actualidad estudios de biología molecular permiten mayor
mano deben denominarse de forma tal que se las pueda iden- aproximación. De este modo, a manera de ejemplo, a Dien-
tificar. Algunas reciben el nombre por razones históricas, tamoeba fragilis en el pasado se la consideraba un protozoario
como la amebiasis, nombre que se relaciona con el agente agrupado dentro de las amebas; sin embargo, ahora es claro
causal de la enfermedad, a las amebas; sin embargo, en térmi- que se trata de un flagelado. Pneumocystis carinii era consi-
nos comunes se les llama “amibas” y por consiguiente “ami- derado como protozoario apicomplexa y recientemente fue
biasis”. Otras reciben el nombre de acuerdo con la especie clasificado como un hongo oportunista.
de parásito que produce la enfermedad y la zona en donde se Los parásitos se agrupan como protozoarios, helmintos y
desarrolla, como el caso de la tripanosomosis americana, que artrópodos. En el pasado se consideraba a los organismos
sólo afecta al continente americano. Otras veces la denomi- agrupados en cinco reinos: Monera, Protista, Animalia, Fungi
nación se explica por la fase del parásito que ocasiona la in- y Plantae; los estudios filogenéticos basados en biología mo-
fección, como la cisticercosis. Algunas más toman su nombre lecular señalan que los grupos de organismos eucariotes de-
del parásito infectante, como la giardiasis, cuyo agente causal rivan de los procariotas. Por lo que un grupo de expertos
es el protozoario Giardia. propuso clasificar a los eucariotes indicando los organismos que
Con la finalidad de unificar la nomenclatura de las en- se originaron a partir de ellos, y dentro de éstos se encuentran
fermedades parasitarias, la Asociación Mundial por el Avance los animales, plantas y hongos. Los protozoarios se caracteri-
de la Parasitología Veterinaria publicó en 1988 una termi- zan por ser organismos unicelulares, eucariotes y carecen de
nología estandarizada de afecciones parasitarias de animales y pared celular. El grupo de expertos en protozoología que recla-
en 1991 la Federación Mundial de Parasitólogos la aprobó sificó a los protozoarios labora en diferentes países del mundo y
y la hizo extensiva a las enfermedades del humano y anima- publicó su clasificación taxonómica en 2005 (Sina et al., 2005).
les (snopad, del inglés Standardized Nomenclature of Parasitic Los seis grupos son los siguientes: Opisthokonta, Amoebo-
Diseases). De esta manera se acordó que debe emplearse el zoa, Excavata, Rhizaria, Archaeplastida, Chromalveolata.
sufijo -osis y el plural –oses; esta terminación debe agregarse En el cuadro 2-1 se presenta dicha clasificación, destacando
al taxón del nombre del parásito y omitir, si es necesario, la los grupos de microorganismos de importancia médica.

Cuadro 2-1. Clasificación taxonómica de parásitos incluyendo protozoarios y metazoarios (Sina et al., 2005).

Ejemplos de géneros de
Supergrupo Organismos importantes que agrupa
parásitos de importancia médica

Opisthokonta Animales, hongos, coanoflagelados y mesomycetozoa Microsporidios

Amebas, slime moulds, amebas testadas, algunos ameboflagelados, Sappinia, Acanthamoeba, Balamuthia,
Amoebozoa
algunas especies que no tienen mitocondrias Entamoeba, Endolimax

Oxymonadidos, parabasálidos, diplomonadidos, jakobidos y otros Giardia, Dientamoeba, Trichomonas,


Excavata
flagelados, heterolobosea Naegleria, Leishmania, Trypanosoma

Rhizaria Foraminíferos, muchos son radiolarios y cercozoa con filópodos No hay

Archaeplastida Glaucophyta, algas rojas, algas verdes y plantas No hay

Se divide en Alveolata (ciliados, dinoflagelados, apicomplexa) y Apicomplexa (Plasmodium,


Chromalveolata Estraemenopilos (algas cafés, diatomeas, hongos zoospóricos Cryptosporidium, Cyclospora),
y opalínidos), Haptophyta y Cryptophyceae Ciliophora (Balantidium)
16 Parasitología médica • Capítulo 2

Dentro del reino animalia se encuentran dos grupos que uno excretor similar al de los trematodos, con la excepción
desempeñan un papel relevante como parásitos del humano: de que no desembocan en vesícula excretora. También el sis-
los helmintos y los artrópodos. tema nervioso es similar. Debido a que el cuerpo se confor-
Helminto significa “gusano”; dentro de estos organis- ma con diferente número de proglótidos, se dice que es un
mos existen tres phyla: Platyhelminthes, Nematoda y Acan- helminto polizoico, a diferencia de los trematodos, que son
tocephala. El nombre de Platyhelminthes significa “gusano monozoicos; el cuerpo se denomina estróbilo. En la parte an-
plano”. En los platelmintos se incluyen varias clases y los terior se encuentra, a manera de cabeza, el llamado “escólex”,
parásitos de importancia médica se localizan en las clases órgano que contiene las estructuras de fijación.
Trematoda (trematodos) y Cestodaria (cestodos). Los nematodos pueden ser hembras o machos, por lo que
El término “trematodo” procede de dos términos que se los considera dioicos, a diferencia de los platelmintos,
significan “agujero” y “atravesar”, y se refiere a los órganos que son monoicos (hermafroditas). También poseen sistemas
de fijación, de cuyo número y localización en su cuerpo de- excretor, nervioso, reproductor y además su sistema digestivo
pende su clasificación. Son aplanados en la región dorsoventral comienza con una boca y termina en un ano; esto es, son más
y tienen forma foliácea (hoja de vegetales). Están cubiertos por evolucionados. Otra diferencia notoria es que sus órganos no
una capa celular llamada “tegumento”, que no es más que un están en un parénquima, sino en un seudoceloma que contie-
sincitio recubierto de microvellosidades que incrementan el ne fluidos que forman parte de su metabolismo.
área de absorción, ya que tienen un sistema digestivo primiti- La interacción huésped-parásito es muy compleja y mo-
vo. En el interior de su cuerpo hay un parénquima, en el cual difica la condición inicial del huésped, la del parásito y su
se alojan todos sus órganos. No tienen sistema respiratorio ambiente. En todo caso, el parásito encuentra casi siempre
pero sí sistemas nervioso, excretor, digestivo y reproductor. El el medio necesario para sobrevivir o es eliminado dentro o
sistema digestivo consta de una ventosa oral, que se continúa fuera del huésped.
con una faringe y luego con esófago y al final con intestinos
ciegos, puesto que no terminan en ano. Su sistema excretor
lo forman células ciliadas que confieren la apariencia de una
Preguntas para reflexionar
“flama” y su función es eliminar los productos de desecho en
el citoplasma. Dado que están interconectados con túbulos 1. De las características morfológicas, moleculares, estruc-
colectores que, a su vez, desembocan en conductos colectores, turales y bioquímicas, ¿cuáles se utilizarían como primera
y todos en una vesícula excretora, es posible la eliminación de opción para identificar una especie con rasgos morfológi-
cos similares a otros?
los productos de desecho.
2. Dentro de los parámetros cuantitativos que pueden ex-
El sistema nervioso está compuesto de un par de gan- plicar la cantidad de parásitos de una especie que afecta
glios cerebroides de los cuales surgen tres pares de cordones a un individuo, ¿cuál se emplearía para expresar la viru-
nerviosos a lo largo de todo el parásito, y su función es recibir lencia?
los estímulos que le permiten reaccionar. En relación con el 3. ¿Qué criterio debe seguirse para saber si un huésped es
definitivo o intermediario con base en las herramientas
aparato reproductor, casi todos son hermafroditas y sólo en
moleculares?
algunos, como Schistosoma, hay machos y hembras. Por lo
regular tienen dos testículos, de cada uno de los cuales surge
un conducto eferente; de ahí se derivan conductos por los que
transcurren los espermatozoos hasta desembocar en un cirro Respuestas a las preguntas
para copular con el órgano femenino; ambos se encuentran de la evaluación inicial
en un poro genital. En el aparato femenino desembocan los 1. Mutualismo, comensalismo, foresis y parasitismo.
espermatozoos, cuya función es fecundar los óvulos produci- 2. Los parásitos se clasifican en endoparásitos o ectopará-
dos por los ovarios. Los trematodos atraviesan por varias fases sitos, intracelulares o extracelulares, estenoxenos, eurixe-
nos, monoxenos, heteroxenos, accidentales, temporales y
larvarias que reciben distintos nombres (miracidio, esporo-
permanentes.
quiste, redias, cercarias, etc.) y la fase adulta, en la que se 3. Los huéspedes se clasifican en accidentales, intermedia-
maduran los órganos de reproducción. rios, definitivos, completos, paraténicos y reservorios.
Los cestodos atraviesan por las fases de huevo y larvaria, 4. Los protozoarios de importancia médica se ubican en los
que se llaman de distinta manera, y la adulta. El adulto está phyla Sarcomastigophora, Microspora, Apicomplexa, Ci-
liophora.
formado por unidades conocidas como “proglótidos”, cada
5. Los helmintos se clasifican en cestodos, trematodos (den-
una con todos los órganos reproductores. Estos gusanos po- tro de los platelmintos), nematodos y acantocéfalos.
seen también un sistema nervioso dispuesto en cordones y
Aspectos generales de la parasitología 17

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