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FUNDAMENTOS DE CONTRATACIÓN PÚBLICA EN SALUD

JULIETH TATIANA PERALTA SABOGAL

JUANA PAOLA CUADRADO CARTAGENA

(ESTUDIANTES)

JHONNY WALYT CRUZ RIVERA

(DOCENTE)

TEORÍA DE LA CONTRATACIÓN

ESPECIALIZACIÓN EN AUDITORÍA EN SALUD

FUNDACIÓN UNIVERSITARIA DEL ÁREA ANDINA

II SEMESTRE

INTRODUCCIÓN
Un contrato es un acuerdo de voluntades que genera, modifica o extingue obligaciones tanto

del contratista como del contratante. De acuerdo a esto, la contratación pública se define

como el hecho de realizar un acto jurídico entre dos partes ya sean del sector público o

privado para cumplir con unas obligaciones derivadas de un bien o un servicio.

De esta manera, la contratación estatal se vincula con el sector salud por medio de

licitaciones y acuerdo de voluntades ya preestablecidos entre las instituciones prestadoras de

servicios de salud y las entidades promotoras de salud que aportan herramientas y

mecanismos que aseguren la salud y el bienestar de los usuarios. (Escobar, R. 1999).

OBJETIVOS
Identificar cuales son los fundamentos principales para la contratación en salud de Colombia

y qué cambios se han generado durante el tiempo de su vigencia.

Identificar y conocer la normativa vigente en contratación pública, como la identificación de

un contrato y estructura.

Analizar la importancia de la contratación pública e integrar al sistema de salud y protección

social vigente en Colombia.

IMPACTO SOBRE LA CONTRATACIÓN EN SALUD EN COLOMBIA


La importancia de la contratación pública en Colombia para la prestación de servicios en

salud, se configura con la naturaleza jurídica para la contratación pública en la prestación de

servicios, en Colombia surgen varias leyes principales una de ellas es la Ley 100 de 1993, por

la cual se crea el sistema de seguridad social integral y se dictan otras disposiciones, esta ley

definió la seguridad social como un servicio público obligatorio, cuya dirección,

coordinación y control está a cargo del Estado y que será prestado por las entidades públicas

o privadas en los términos y condiciones establecidos en la presente ley (Art. 4). Por otra

parte, estableció las funciones de las instituciones prestadoras de servicios de salud para

prestar los servicios en su nivel de atención correspondiente a los afiliados y beneficiarios

dentro de los parámetros y principios señalados en la presente ley (Art. 185).

El sistema de contratación que se adopte entre las EPS y las IPS tienen claras incidencias

sobre la calidad y el costo de los servicios, sin embargo, la relación entre estas dos se tornaba

cada vez más compleja y una de las principales causas de esta tensión se debía a escasa

normativa para regular las relaciones contractuales, especialmente en lo relacionado a la

contratación con la propia red de prestadores, ya que por lo general siempre hay terceros que

se encargan de estas contrataciones. Con el fin de garantizar calidad y eficiencia en sus

servicios, estas instituciones deben cumplir con las funciones establecidas, ya que hace parte

de su calidad idónea, para que sus afiliados y beneficiarios cuenten con las mejores

condiciones en los servicios requeridos. Pero esto dependerá de que tanto ofrecen a su

personal, ya que los contratos para los trabajadores de la salud son bastantes conflictivos, ya

que la mayoría de ellos son por prestación de servicios y no brindan garantías para el

personal, porque su contrato puede estar por 3 o 6 meses y no hacen renovación, lo que

implica una nueva búsqueda de personal para el área faltante y una demora en la atención

para sus pacientes y/o usuarios.


Por otra parte, la ley 80 de 1993 dispone las reglas y principios que rigen los contratos de las

organizaciones estatales, estas organizaciones estatales están conformadas por las siguientes

entidades: La Nación, las regiones, los departamentos, las provincias, el distrito capital y los

distritos especiales, las áreas metropolitanas, las asociaciones de municipios, los territorios

indígenas y los municipios; los establecimientos públicos, las empresas industriales y

comerciales del Estado, las sociedades de economía mixta en las que el Estado tenga

participación superior al cincuenta por ciento (50%), así como las entidades descentralizadas

indirectas y las demás personas jurídicas en las que exista dicha participación pública

mayoritaria, cualquiera sea la denominación que ellas adopten, en todos los órdenes y niveles

la presente ley (Art. 2), la cual para fines de contratación debe cumplir con lo siguiente;

cumplimiento de los cometidos estatales, la continua y eficiente prestación de los servicios

públicos y la efectividad de los derechos e interés de los administradores, es por ello que los

servidores públicos tendrán en consideración que al celebrar contratos y con la ejecución de

los mismos, las entidades buscan el cumplimiento de los fines estatales, la continua y

eficiente prestación de los servicios públicos y la efectividad de los derechos e intereses de

los administrados que colaboran con ellas en la consecución de dichos fines.(Art. 3).

Los contratos estatales, al igual que los civiles y mercantiles, se componen de elementos

esenciales, accidentales y de la naturaleza y, para que surtan efectos jurídicos, deben

cumplirse con los esenciales, a saber: capacidad, consentimiento, objeto y causa, pues “si

faltan consentimiento, y/u objeto, y/o causa y/o los demás propios de cada acto jurídico”,41

el acto será considerado inexistente. Estos deben cumplir a su vez con los elementos de

validez del contrato: capacidad, consentimiento libre de vicios, objeto y causa lícitos,

establecidos en el (Artículo 1503 del Código Civil).


En esta ley se desprenden varios tipos de contratos estatales, los cuales son actos jurídicos

generadores de obligaciones que celebren las entidades, estos contratos son: contratos de obra

(entidades estatales para la construcción, mantenimiento, instalación y, en general, para la

realización de cualquier otro trabajo material sobre bienes inmuebles), contratos de

consultoría (entidades estatales referidos a los estudios necesarios para la ejecución de

proyectos de inversión), contratos por prestación de servicios (entidades estatales para

desarrollar actividades relacionadas con la administración o funcionamiento de la entidad),

contrato de concesión (entidades estatales con el objeto de otorgar a una persona llamada

concesionario la prestación, operación, explotación, organización o gestión, total o parcial, de

un servicio público, etc) y encargos fiduciarios y fiducia pública, cada uno de estos contratos

tienen sus funciones respectivas que deben ser cumplidas, sin embargo, hay entidades que les

resulta más viable utilizar un tipo de contrato para todo su personal y así ofrecer un contrato

repetitivo.

Es por ello que para el 2007 nace una nueva ley, la Ley 1150, la cual dicta otras disposiciones

generales que aplican en la contratación de servicios públicos, según la Ley 1150 de 2007 y

el Decreto reglamentario 1510 de 2013, determinan la gestión contractual pública,

considerando que el Derecho a la Salud es un bien público que debe garantizar el Estado en

Colombia, las relaciones contractuales para la prestación del servicio de salud, se determinan

en procesos de planeación según naturaleza de los diferentes objetos contractuales, la

utilización de mecanismos que permitan el aprovechamiento de economías de escala e

indicadores para evaluar la utilización de eficiente de los recursos (administrativos y

presupuestales). Esta ley cuenta con algunas modificaciones basadas en la Ley 80 de 1993

para su eficiencia y transparencia.


En Colombia se viene enfrentando muchas falencias respecto a sus servicios y atención en

salud, aunque existan leyes anteriormente mencionadas, el sistema evidencia problemas

financieros que comprometen la estabilidad de distintas Entidades Promotoras de Salud

(EPS), lo cual lleva a que los servicios ofertados a sus pacientes y/o usuarios los afecte

directamente. Sin embargo, también se ha evidenciado problemas relacionados con la

contratación, han llevado a que se generen problemas de corrupción que afectan los recursos

y la capacidad operativa de las instituciones Prestadoras de Servicios de Salud (IPS), lo que

lleva a que los contratos o mecanismos de contratación no brinden el objetivo principal.

Es por ello que nace la siguiente pregunta ¿Qué tanto se ven afectados los pacientes y/o

usuarios cuando no les brindan la atención en alguna especialidad determinada?

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) “La salud es un estado de completo

bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”

(OMS). El sistema de salud en Colombia enfrenta distintos problemas que compromete la

calidad de los servicios que ofertan las IPS, ya sea porque no existan recursos económicos

para la contratación de personal, lo que implican la negación del servicio o implican mayores

esfuerzos para su acceso, obligando al paciente a recurrir a mecanismos como la tutela o

derecho de petición o porque sus instalaciones no son idóneas para una atención a sus

afiliados y beneficiarios. Es que garantizar que los contratos lleven a una gestión eficiente,

implica mejorar de forma directa la calidad en salud, y materializar este derecho fundamental

(González, 2017).

Desde otro punto de vista, al analizar el tema de la contratación en el sector salud, permite

visibilizar problemáticas que son la causa de la mala calidad en la atención, dado que se ha

argumentado deficiencias en la ejecución de contratos como una barrera para acceder a un

servicio de salud oportuno y de calidad, esto hoy en día es muy complejo ya que la
metodología de contratación no brindan garantías suficiente y no cumplen con su objetivo

principal. En particular, se podrá identificar como las falencias en la contratación se han

convertido en barreras de acceso a una atención oportuna, constante e integral, principios

abordados por el sistema obligatorio de aseguramiento de la calidad en salud (Ortega y

López, 2016).

Conocer dichas barreras es el primer paso para formular recomendaciones que permitan

superarlas, especialmente cuando el sistema atraviesa una profunda crisis, por los manejos

ineficientes de las empresas promotoras de salud (EPS) que han mostrado una incapacidad

para administrar los recursos conforme a la demanda de atención de las comunidades

(Caicedo, 2013). Estos hallazgos encontrados, permitirán a las entidades prestadoras de

servicios de salud, evitar contrataciones que generen riesgos financieros y legales, dado que

en ocasiones para los que desconocen la ley se cometen errores que pueden ser sancionados

afectando así a las entidades como a sus representantes legales.

Día a día se podrá recapacitar en la conveniencia de escoger un tipo o modalidad de

contratación considerando sus alcances, costos y sobre todo como cada modalidad aporta a la

eficiencia en la prestación de servicios de salud, garantizando siempre el bienestar de sus

pacientes y/o usuarios y que las ESP y las IPS garantice siempre el derecho fundamental de

salud. Porque las falencias generadas y reflejadas en la contratación conforman barreras de

acceso a la atención, lo cual tiene un gran impacto en la calidad de los servicios prestados al

paciente o usuario, por lo que más adelante impactará cuando la enfermedad haya avanzado,

es por ello que pensar en una atención oportuna garantiza el uso adecuado de los recursos

para prestar los servicios de salud.

CONCLUSIONES:
● Es indispensable conocer del manejo teorico y practico en el tema, para el desarrollo

de nuestras competencias profesionales en el área a desempeñar como futuros

profesionales en Auditoria en Salud, por lo que es esencial mantener el ejercicio

constante de aprendizaje como de ejecutar dicho conocimientos para llegar a

comprender de la mejor manera posible los diferentes aspectos positivos, negativos y

las barreras que se pueden presentar en una realidad, los retos que se presentan a la

hora de tomar decisiones frente al desarrollo contractual en el desarrollo de un

producto o prestación de un servicio en cualquiera de los ámbitos de salud.

● La contratación sigue y seguirá siendo una herramienta de control y vigilancia en el

desarrollo entre las relaciones que surgen del estado y a nivel particular, con la

finalidad de garantizar el cumplimiento de ciertos acuerdos para la prestación de un

servicio que aseguren la conservación de bienes de la organización y del estado al

cual fueron entregados contractualmente. Aunque los decretos y leyes ayudan a que

los administradores de las entidades de salud privados se beneficien de ciertos

recursos públicos.

BIBLIOGRAFÍA
● Gutiérrez C, Molina C G & Wüllner A. 1995. Las formas de contratación entre

prestadoras y administradoras de salud: sus perspectivas en el nuevo marco de la

seguridad social. Bogotá: Fundación Social, Fundación Corona, Fundación para la

Educación Superior – FES-, Fundación Restrepo Barco.

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2022]. Disponible en: https://es.slideshare.net/vivipaty555/sistemanacional-de-salud-

4530779

● Congreso de la República de Colombia. (1993). Ley 100 de 1993. Artículo N °4 y

Artículo N°185. Bogotá Colombia.

● Congreso de la República de Colombia. (2007). Ley 1150 de 2007.

● Congreso de la República de Colombia. (1993). Ley 80 de 1993. Artículo N°2.

● Escobar, R. (1999). Teoría general de los contratos de la administración pública.

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● Organización Mundial de la Salud (2018) Definición del concepto de salud.

Recuperado el 10 de octubre de 2019 de:

https://www.who.int/es/about/who-we-are/frequentlyasked-questions.

● González A. G. (2017) Comparación de sistemas de pago convenido en los costos de

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Bogotá.

● Ortega V. C., López D. V. (2016). Barreras de acceso en servicios de salud del

régimen subsidiado hospital Engativá. Universidad Santo Tomás, Bogotá Posgrados

en Seguridad Social y Salud Pública Programa de Especialización en Auditoria de

salud. Colombia.
● Caicedo H. M. (2013). Redes de contratación de servicios de salud en Colombia: un

análisis para el régimen subsidiado. Universidad del Valle, Departamento de

Economía. Santiago de Cali.

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