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CASO ROSENDO RADILLA PACHECO.

Rosendo Radilla fue un destacado líder social del municipio de Atoyac de Álvarez,
Guerrero. Donde la mayoría de su vida se dedicó al cultivo y venta de café cereza,
contribuyendo a la mejora de las condiciones de salud y educación de su pueblo,
ante esto se le atribuye que impulso la construcción de una escuela primaria y un
hospital para los ciudadanos. Fue un escritor de corridos en los cuales siempre
reflejo su indignación ante las injusticias de su pueblo donde relataba las
condiciones deplorables en que este vivía, denuncio abusos y organizaba a la
gente para exigir sus derechos.

A pesar de su gran desempeño como ciudadano y siempre luchar por la igualdad


social el 25 de agosto de 1974 surge un hecho terrible para su persona donde se
presenta una detención y desaparición del señor Rosendo Radilla donde
ilegalmente interviene un retén militar de la Secretaria de la Defensa Nacional, la
detención fue presenciada por su hijo Rosendo Radilla Jr.en la carretera de
Atoyac, este pide explicación de lo que se le acusa el oficial militar le atribuye por
el hecho de componer corridos a Lucio Cabañas donde ocasiona desorden público
contra el Estado, desde entonces se desconoce su paradero. Mi punto de vista
aquí es que claramente se habla de un acto que no tiene como tal un fundamento
legal que merezca una sanción como es la privación de la libertad puesto que el
oficial jamás mostro como tal un papel que avale la detención del señor Rosendo
donde aclare el porqué de su presunta detención, y se visualiza un abuso de
autoridad por parte del Cuartel Militar.

Ante este suceso han pasado 45 años donde su familia y personas cercanas no
han parado con la búsqueda y exigir a las autoridades dar con su paradero, debido
que están en todo su derecho de exigir la verdad de tal detención que ocasiono la
desaparición de esta persona, donde si pide justicia tanto para él como para las
demás personas desaparecidas en ese transcurso de tiempo, nuevamente se trata
de un caso donde se manifiesta la desaparición forzada de una persona pero lo
más lamentable aquí es que fue provocada por nuestras mismas autoridades
donde su función es salvaguardar la integridad y seguridad de sus ciudadanos.
Las autoridades de ese entonces se muestran muy ineficientes debido que hasta
la década de 1990 la familia Radilla pudo realizar sus denuncias formales ante las
autoridades como la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, la
Procuraduría General de la Republica y la Procuraduría General de Justicia del
Estado de Guerrero. Pero hasta la fecha se han tramitado 6 denuncias penales
ante las distintas instancias, sin embargo los resultados han sido negativos puesto
que ninguna ha imputado ningún delito a alguna persona, ni de Rosendo Radilla y
ni de cientos de desaparecidos de la Guerra Sucia, esta guerra fue un terrorismo
del Estado Mexicano donde encamino a detener, torturar, desaparecer y ejecutar a
todo aquel que manifestara apoyo a los movimientos campesinos en las décadas
de 1960 y 1970, donde se percibe una gran violación a los derechos humanos una
total impunidad.

Se tuvo la oportunidad de hacer justicia en este caso en agosto del 2005 pero la
Fiscalía Especial consignó el caso como privación ilegal de la libertad en su
modalidad de plagio o secuestro al juez civil, sin embargo el proceso fue llevado
ante la justicia militar con base a su resolución. Ante esto los representantes de la
familia interpusieron una demanda de amparo pero esta fue desechada con la
justificación de que las víctimas no pueden recurrir al amparo para impugnar la
competencia de los tribunales militares, en lo que se determinó que Rosendo
Radilla había fallecido, sin contar con un cuerpo físico que avalara dicha
resolución.

Ante la falta de respuesta efectiva del gobierno mexicano a las recomendaciones,


el 15 de marzo de 2008 la CIDH presentó una denuncia ante la Corte
Interamericana de Derechos Humanos contra el gobierno mexicano por violación
del reconocimiento de derechos humanos de personalidad legal (art. 3), derecho a
la vida (art. 4), derecho a la integridad personal (art. 5), derecho a la libertad de la
persona (art. 7), derecho a la seguridad jurídica (art. 8) y el derecho a la protección
judicial (art. 25) relativo al Deber de respetar los derechos (art. 1.1), todos
consagrados en la Convención Americana sobre Derechos Humanos. En lo que
respecta a los representantes de las víctimas, están demandando al gobierno
mexicano no solo por sus derechos bajo la Convención Interamericana, sino
también porque viola lo impuesto por la Convención Interamericana sobre
Desapariciones Forzadas.

El caso de Rosendo Radilla fue muy influyente por tanta injusticia e insuficiencia
de las autoridades ante esto, pues la Corte IDH emitió una sentencia condenando
al Estado Mexicano por sus grandes violaciones a los Derechos Humanos y de
igual manera por contener órdenes para que en México se realizaran cambios
estructurales para revindicar la vida pública del país.

Concluyendo ante este caso se pudo percibir que en muchas ocasiones el


desempeño por parte de nuestras autoridades es insuficiente para que nosotros
como ciudadanos podamos exigir nuestros derechos por temor a represiones por
parte del Estado, ya que se supone que funge como el principal protector de uno
mismo y que este busca salvaguardar nuestra integridad, pero al contrario en este
caso de impunidad las autoridades no ocuparon los instrumentos y mecanismos
que se les brindan para la búsqueda de un individuo para dar con su paradero,
pero es evidente que no hicieron uso de ellos porque eran involucrados,
mostrando una vez más que las autoridades de nuestro país no son tan confiables
como deberían ser. La búsqueda de un individuo claro está que debe ser
obligatoria pero con Rosendo Radilla fue todo lo contrario.

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