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CONCIENCIA FONOLÓGICA

El tema que elegí desarrollar es conciencia fonológica.

EL CONCEPTO DE CONCIENCIA FONOLÓGICA que se emplea para referirse al conocimiento


consciente de que las palabras están compuestas de varias unidades de sonido, así como a la
capacidad para manipular las distintas unidades del lenguaje hablado, incluye el término de
habilidades fonológicas, las cuales abarcan distintos segmentos fonológicos del lenguaje oral.

LA CONCIENCIA FONOLÓGICA es una habilidad pre-lectora clave para aprender a leer en


concreto, apoya el proceso de decodificación de una manera clara.

La conciencia fonológica es la habilidad metalingüística que permite reflexionar sobre el


lenguaje oral. Jiménez (2009) la define como la habilidad para reflexionar de manera
consciente sobre los segmentos fonológicos del lenguaje oral.

LA CONCIENCIA FONOLÓGICA es la habilidad que permite acceder a la estructura de la lengua


oral y ser consciente de los segmentos fonológicos de las palabras. Es sabido actualmente que
la conciencia fonológica es una habilidad necesaria para el aprendizaje de la lengua escrita.

Varios estudios apoyan el hecho que aproximadamente el 25% de los niños sin una instrucción
fonológica directa no tienen habilidades suficientes para encarar un proceso de lecto-escritura.

LA CONCIENCIA FONOLÓGICA ESTÁ FORMADA por diferentes componentes, los cuales


presentan distintos niveles de complejidad que vienen determinados por el tipo de unidad
lingüística sobre la que se efectúe la acción por parte del sujeto y de los procesos que se
realicen sobre ella. LOS PROCESOS FONOLÓGICOS INCLUIDOS DENTRO DE LAS HABILIDADES
FONOLÓGICAS se desarrollan en distintos niveles de complejidad cognitiva, que van desde un
nivel de sensibilidad para reconocer los sonidos que distinguen las palabras hasta otros de
mayor complejidad, que intervienen al segmentarlas o pronunciarlas omitiendo o
añadiéndoles fonemas.

Treiman (1991) propuso un modelo jerárquico y acotado, (ampliamente aceptado) que incluye
TRES NIVELES EN EL PROCESO DE ADQUISICIÓN DE LA CONCIENCIA FONOLÓGICA, Y QUE
SON: la conciencia silábica, la conciencia intrasilábica y la conciencia fonémica (Bizama,
Arancibia y Sáez, 2011, Defior y Serrano, 2011). En estos niveles se incluyen las distintas
unidades subléxicas (sílabas, rimas, ataques y fonemas). La conciencia silábica hace referencia
a la habilidad de segmentar, identificar o manipular conscientemente las sílabas que
componen una palabra. La conciencia intrasilábica se refiere a la habilidad para segmentar las
sílabas en sus componentes de onset y rima. La conciencia fonémica se corresponde con la
habilidad para segmentar y manipular las unidades más pequeñas del habla, lo que conlleva
darse cuenta de que las palabras habladas están constituidas por unidades sonoras discretas o
unidades mínimas no significativas (que son los fonemas.

2. Áreas de Trabajo Fonológico 

En relación a las distintas áreas que les comentamos en el apartado de desarrollo, verán
que trabajamos la conciencia fonológica en 5 áreas temáticas (ordenadas de más fáciles a
más difíciles)

1. Escucha activa: Hay que entrenar nuestra capacidad de escuchar los sonidos. La
conciencia fonológica hace referencia a la habilidad para notar/ manipular la
construcción del lenguaje NO la significación es por ello que debemos también
entrenar la habilidad para escuchar.

2. Frases y palabras:  Notar que el lenguaje está formado por frases y que estas a su vez
están formadas por unidades más pequeñas que son las palabras.

3. Rimas: Es la primera sensibilidad hacia la musicalidad del lenguaje.

4. Conciencia de sílaba: la habilidad para notar, analizar y modificar las distintas sílabas
que conforman las palabras.

5. Conciencia de fonema: el objetivo final de todo el trabajo en materia de CF es


aprender a descifrar los distintos fonemas que conforman las palabras  

Se trabajarán las siguientes áreas según las etapas: 

De los 3 a los 4 años  

 Actividades de Escucha Activa

 Actividades de Frases y Palabras

 Actividades de Rimas

De los 4 a los 5 años 

 Actividades de conciencia silábica (en su mayoría)

 Actividades de conciencia de fonema (inicio)

De los 5 a los 6 años 


 Conciencia de fonema

En LAS LENGUAS DE ESCRITURA ALFABÉTICA como la nuestra, aprender a escribir requiere la


toma de conciencia de la estructura fonológica del habla

El lenguaje oral es un sistema de comunicación que se transmite culturalmente y se adquiere


de manera natural, mientras que la lectura y la escritura de las lenguas son habilidades cuyo
aprendizaje requiere de la enseñanza explícita. En la actualidad es conocida la relación
existente entre la lengua hablada y la lengua escrita, ya que ambas comparten un mismo
sistema, de aquí la importancia del desarrollo de la lengua oral como medio fundamental para
el acceso al aprendizaje de la lengua escrita.

Uno de los grandes retos a los que se enfrenta el niño cuando se inicia en el aprendizaje de la
lengua escrita es llegar a comprender la asociación que existe entre las letras (grafemas) y los
sonidos del habla (fonemas). Este logro requiere el desarrollo de habilidades fonológicas
facilitan la reflexión y la capacidad de manipular las subunidades de las palabras del lenguaje
hablado: sílabas, unidades intrasilábicas y fonemas. Son precisamente estas habilidades las
que le permiten al niño comprender las relaciones entre la lengua oral y la escrita.

La importancia de la conciencia fonológica en el aprendizaje del sistema de escritura se debe


a que las representaciones gráficas transcriben los sonidos del lenguaje oral, por lo que una de
las principales tareas a las que se enfrenta el alumno consiste en comprender el principio de
codificación, es decir, que las letras (grafemas) funcionan como señales de los sonidos
(fonemas) del habla, lo que conlleva la necesidad de desarrollar habilidades de conciencia
fonológica en sus distintos niveles, habilidades que constituyen una especial relevancia en el
aprendizaje del código escrito.

En sistemas alfabéticos como el español, en los que la escritura representa la estructura


fonológica del habla, el éxito en el aprendizaje lectoescritor implica que el niño sea capaz de
reconocer los componentes sonoros de su lengua. Es importante destacar que la ejercitación
en conciencia fonológica tiene un efecto positivo en la adquisición temprana de la lectura y la
escritura.

Por su parte, Signorini y Borzone (en Borzone, 2000) efectuaron estudios con niños hablantes
de español y mostraron una progresión, de menor a mayor grado de complejidad, de las
diferentes habilidades fonológicas medidas: identificación y producción de rimas,
identificación del sonido final, identificación de sonido inicial y segmentación silábica. En
definitiva, los niños desarrollan la conciencia fonológica inicialmente cuando se dan cuenta de
los sonidos del lenguaje, descubriendo que algunas palabras suenan de manera similar, es
decir, riman. Lo que desencadena una reflexión espontánea y deliberada sobre los sonidos de
las palabras, hasta que son capaces de llevar a cabo una segmentación silábica y
posteriormente fonémica.

Organización fonológica

Para Monfort y Juárez (1980) el aprendizaje  fonético está marcado por tres características
fundamentales: 

1º La globalidad del proceso, según la cual el niño adquiere los fonemas  globalmente y no
como una serie de unidades que se agregan unas a otras  analíticamente. Es decir, el niño no
aprende a pronunciar letras, sino palabras y  frases. 

Esto tendrá su importancia a la hora de aprender a leer también, de acuerdo con el   uso de los
métodos analíticos y los sintéticos. 

2º  El desfase entre el sistema perceptivo y el reproductivo. Es decir, que hay que  distinguir
entre lo que el niño percibe, y que es motivado por las emisiones del  adulto, y lo que el niño
emite y nosotros percibimos. 

El niño dice Tetesa en vez de Teresa, o paya, en vez de playa. Si nosotros le decimos Tetesa y
paya, lo desorientamos y no nos entiende. 

Es importante, por consiguiente, que el adulto no incurra en la autocorrección en   beneficio


del niño. 

Por otra parte, el proceso productivo del niño es mejor conocido, puesto que el   adulto lo
puede analizar con facilidad; mientras que el perceptivo es peor conocido,  porque se resiste
más al análisis. 

3º  Existe un orden de aparición y unas estructuras de desarrollo muy definidos;  casi iguales
en todos los países, aunque con rapidez variable entre los distintos  niños. 

El niño procede por oposiciones fundamentales. Y a través de ellas va afinando su  capacidad
articulatoria. 

Así, 

- a la apertura máxima /a/ se opone la apertura mínima /b, p, m/,  - a la pronunciación oral /p/,
la pronunciación nasal /m/, 
- al punto de articulación labial /p/, el punto de articulación dental /t/.  Estas oposiciones
básicas están presentes ya en el balbuceo. 

Conclusiones 

a) La adquisición de un fonema supone la adquisición previa de otros que le son Es decir, que
no se puede producir un fonema, si antes no se ha producido otro. 

Esto lo confirma también ERVIN-TRIPP (1966): 

 El primer contraste se da entre vocal y consonante.

 En posición inicial las oclusivas /p/ preceden a las fricativas /f/.  - La dental /t/ precede
a la sibilante /s/ y a la gutural /k/. 

 La nasal /n/ precede a la dental /d/. 

 Los grupos consonánticos o combinaciones generalmente aparecen tarde. 

 Los contrastes consonánticos en posición inicial aparecen antes que los intermedios o
finales. 

b) El sistema productivo del niño es un sistema cerrado y completo, aunque no coincida con el
del adulto.

En consecuencia, el niño atribuye, por ejemplo, a una letra dos sonidos distintos. La /t/, por
ejemplo, le sirve para realizar la /t/ y la /s/. Así el niño dice pata, correctamente y cata y meta,
por casa y mesa. 

c) Cada nueve adquisiciones del niño modifica la totalidad del sistema fonológico anterior, y,
en consecuencia, se inicia un período de crisis en el que el niño, para dar cabida al nuevo
fonema, incurre en una serie de fluctuaciones que puedan dar la impresión de regresión, hasta
que llega a la fijación definitiva de las adquisiciones precedentes y de las posteriores. El niño
fluctuará entre casa y cata; o entre pata y pasa, para acabar diciendo casa y pata, formas
correctas. 

DEFICIT FONOLÓGICO

Un estudio con niños de 5 años de clase media de la ciudad de Buenos Aires (Signorini y
Manrique, 1996), puso de manifiesto un patrón de dificultad en distintas tareas de conciencia
fonológica; en orden de dificultad creciente: reconocimiento de rimas, identificación de
sonidos iniciales y finales, segmentación fonológica y omisión de sonido inicial

En un trabajo sobre dificultades de lectura, Jiménez (1996) concluye que la tarea de identificar
sonidos iniciales en las palabras no está asociada al retraso lector, en cambio las tareas de
segmentación e inversión de fonemas diferencian a los buenos de los malos lectores.

Por su parte, Domínguez (1996b), en base a los resultados de un estudio de entrenamiento


con niños de 5 años, concluye que la enseñanza explícita de la conciencia fonológica a niños
prelectores, especialmente la omisión e identificación de fonemas, facilita el aprendizaje de la
lectura y la escritura.

 Dificultades en el componente fonético-fonológico 

Los niños pueden presentar problemas en el habla por fallas en el procesamiento (uso de la
información fonológica para procesar el lenguaje oral) o por fallas en la representación
fonológica (conocimiento almacenado acerca de los sonidos que componen una palabra,
necesario para su reconocimiento al ser oída y que nos permite también discriminarla de
palabras con sonidos similares). 

Cuando esto ocurre nos encontramos con dificultades fonológicas relacionadas con el
procesamiento auditivo, las representaciones léxicas, o con la presencia de procesos de
simplificación fonológica que afectan su inteligibilidad. Se trata de dificultades en la
organización de los sonidos que no le permite establecer contrastes en el lenguaje. Estos
problemas se diferencian sustancialmente de las dificultades relacionadas con la articulación
de los sonidos. Aquí el problema es de naturaleza fonética, generalmente causado por
dificultades práxicas y motoras. 

En cambio, las dificultades fonológicas van más allá de un problema articulatorio ya que
aunque el niño tenga la habilidad para producir ciertos sonidos puede no ser capaz de
utilizarlos correctamente en el contexto lingüístico adecuado. 

Debemos añadir que los niños que presentan dificultades fonológicas suelen manifestar
también retraso en otros componentes del lenguaje, principalmente en el léxico semántico,
puesto que la memoria fonológica es fundamental para almacenar en el  diccionario interno
las representaciones léxicas (recuerdo del vocabulario)

Déficit fonético 
- Es la dificultad para identificar los contrastes entre fonemas, permitiendo un mejor ajuste   a
la pronunciación correcta de estos. 

- Algunos autores hablan de una dificultad en la “Discriminación auditiva”, que permite 


distinguir entre palabras que contiene fonemas parecidos fonéticamente, ejemplo:
/tubo/  por /cubo/.  

- Los niños presentan una gran dificultad en recordar las características de los sonidos que  
oyen, y la manera en que han producido esos sonidos.   

- Se distinguen 4 niveles de conocimiento fonológico: 

1) Rima o aliteración: dos palabras o pronunciaciones comparten un mismo grupo de  sonidos.
Se adquiere antes del inicio en el aprendizaje de la lectura, alrededor de los 4 o 5  años. 

2) Conocimiento silábico: capacidad para operar con los segmentos silábicos de las palabras. 

3) Conocimiento intrasilábico: tiene que ver con el reconocimiento de la consonante inicial y


de la rima (la primera vocal y las consonantes que le siguen). 

Este es un nivel intermedio entre el conocimiento de rimas y el conocimiento fonémico.

4) Conocimiento fonético o segmental: conocimiento de la palabra como una secuencia de


segmentos fónicos. Este tipo de conocimiento se adquiere sólo con la lectura. 

- La dificultad fonológica estaría dada por un mal manejo y conocimiento de las estructuras
lingüísticas básicas, como son las sílabas y los fonemas.  

- Algunas causas de las dificultades de aprendizaje son debido a factores de índole


socioculturales y económicos. 

- Las familias de los niños con dificultades de aprendizajes presentan mayor índice de
desorganización de la vida en el hogar y de comportamientos neuróticos y problemas
socioemocionales. 

- Los padres tienen expectativas negativas acerca del futuro escolar de sus hijos, debido a  las
dificultades que presenta. 

- Ambientes socioculturales deprimidos. 

- Tiene que ver con el tipo de lenguaje de la familia y el feedback correctivo.   - Puede presentar
problemas auditivos (sensoriales o perceptivos) 

- Puede presentar resfríos frecuentes u otitis reiteradas.  


- Errores frecuentes en la pronunciación de algunos sonidos.(rotacismo, sigmatismo). 

- A veces característica de voz atípica. 

- A veces existe alguna alteración anatómica visible en las estructuras que  intervienen en el
habla. 

- Puede presentar problemas respiratorios (respirador bucal) 

- El tipo de error es siempre constante.

CONCLUSIÓN

En conclusión, concebiremos la conciencia fonológica, como aquella conciencia, que tiene cada
persona sobre los sonidos de su propia lengua, lo que implica discriminaciones reflexivas;
facilitando, de esta manera, el establecimiento de los patrones de correspondencia letra-
sonido, implícitos en el proceso de lectura y escritura.

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