LIBROS DE IMÁGENES DE DESTINO DE THOM GARDNER

Sanando el corazón herido

El viaje curativo

Viviendo la vida inspirada por Dios

Amor implacable

Altares del corazón

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 3

© Copyright 2017 – Jim Woodford con el Dr. Thom Gardner

Todos los derechos reservados. Este libro está protegido por las
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libro no se puede copiar ni reimprimir con fines de lucro o beneficio
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Dedico este trabajo a Mi Amigo Constante, mi Señor y

Maestro, Jesucristo por darme la oportunidad de servir Su
voluntad.
Le dedico este libro a mi preciosa esposa Lorraine, cuyo
amor eterno, paciencia infinita y fe en mí nunca podré pagar.
Estoy asombrado por la luz de Cristo en ti. Ahora me doy
cuenta de que fuiste mi primer ángel. Y a Joey y Jenny por la
alegría que traen a mi vida.
Para mi madre Ruby. Viuda a los 22 años, su amor por sus
hijos era valiente y hermoso.
 6

Expresiones de gratitud

Es prácticamente imposible reconocer y agradecer a todos

los que han contribuido a los eventos que cambiaron la vida
antes, después y durante la creación de este libro. Sabes
quién eres y te lo agradezco desde el fondo de mi corazón.
Sin embargo, sería negligente si no reconociera a esas
personas cuyo amor, bondad y aliento interminables me
recuerdan el cielo:
 Al pastor Doug y Faith Lamb, mis amigos
constantes, por hacer posible el viaje y este libro.
Eres gracia y amor en forma humana. Tus hijas y
sus familias reflejan el amor de Cristo que das tan
libremente.
 A mi cuñada Shelly y su esposo David Dunphy, por el
amor inagotable de Dios que veo en cada uno de
ustedes.
 A mis cuñadas Jean McMullen y Karen Pelletier y
al hijo de Jean, Matthew McMullen, quien junto
con Lorraine, Shelley y David me rezaron para
que volviera a la vida. Mi deuda es eterna.
 Para el socorrista y amigo Gerald Rousseau, por
su cariñosa ayuda a Lorraine en su hora de
necesidad, mi más profundo agradecimiento.
 A Vard y Eileen Gainor, cuya tranquila dignidad y
consejo sabio y atemporal revela la sabiduría de
una vida dedicada a Dios.

 Para el pastor Don Lamb de Lifegate Church y su

esposa Net. Tu calidez y amistad ilumina mi vida.
 Al pastor Steve Lindemuth y su esposa Danielle y
su hija Sami. Danielle, tus habilidades
organizativas son invaluables para mí. Sami,
gracias por ayudarme a ver mi viaje a través de
los ojos de un niño.
 Al pastor E Daniel Martin de Lifegate Church y su
esposa Ruth. Ambos son ejemplos de la bondad de
Dios para mí.
 A los pastores Luke y Bonnie Weaver de la iglesia
Village Lighthouse en Benton New Brunswick,
Canadá. Después de Lorraine, fuiste uno de los
primeros de mis amigos constantes en escuchar
mi historia. Tu invitación a compartir por primera
vez me cambió la vida. Gracias sinceramente por
presentarnos a su piadosa familia de Grace
Chapel en Pennsylvania.
 Al pastor Luke Weaver Sr. y su querida esposa Edna
de Grace Chapel. ¡Más de 90 años sirviendo a Dios
juntos! Tu fidelidad y ejemplo son abrumadores.
 Al pastor Mel Weaver y su esposa Rosemary de
Grace Chapel. Su ilimitado entusiasmo por Jesús
es un estímulo para todos nosotros.
 A Irene Weaver Maust Clark y su esposo, el doctor
Grant Clark. Su amor y hospitalidad reflejan lo que
 experimenté en el cielo. Y a su hijo Jonathan,
recientemente fallecido, que ahora está
experimentando las glorias del cielo.
 Al pastor Rob Roberge y su esposa Tina de
Living Hope Assembly por su amistad e interés
en mi experiencia.
 Al pastor Ray Hock y su esposa Winnie por su interés

y apoyo.
 Al pastor Al Frank de Conoy Brethren in Christ
Church. Tu sonrisa lista me recuerda la felicidad en
el cielo.
 A Tim Bartholomew, maestro extraordinario, y su
encantadora esposa Linda por la emoción de
dejarme contarles a sus estudiantes de la Biblia
sobre el cielo. ¡Momentos invaluables!
 Para Maddie Walter y su familia. Más de mis
amigos constantes. Es maravilloso ver la luz de
Dios tan brillante en alguien tan joven. Maddie,
¡eres una bendición para todos los que vienen a
conocerte!
 Para Amanda Ziegler y la amorosa madre de
Amanda, Patti Ziegler Wagner. Mientras Amanda
agonizaba en los brazos de su madre de una forma
agresiva de cáncer, le hablé de la belleza del cielo y
sus caballos. Amaba a su caballo y una expresión
de paz apareció en su rostro que fue maravilloso de
contemplar. Fue en ese momento que realmente me
di cuenta del poder de mi experiencia para dar
esperanza y gracia a los moribundos. Amanda,
 nunca serás olvidada. Vives en mi historia y en
nuestros corazones hasta que nos volvamos a
encontrar.
 A Sue y Perley DeMerchant, con quienes Lorraine y
yo tuvimos el privilegio de estar presentes por el
fallecimiento de su hijo Rob al cielo. Había resultado
herido en un accidente y las complicaciones lo
llevaron a un coma de 17 años . Sue y Perley
pasaron miles de horas junto a la cama de su hijo
durante esos muchos, muchos años. Ni una sola vez
perdieron la fe en Dios y nunca vacilaron su amor y
dedicación a su amado hijo. ¡Lo más cercano que
tenemos en esta tierra al amor de Dios es el amor
de una madre por su hijo! Por incontables horas
mirando y orando con su hijo, Sue pudo decir, a
pesar de su estado comatoso, cuando Rob estaba

escuchando. Mientras me sentaba al lado de Rob

y le hablaba del hermoso y sin dolor del cielo que
estaba a punto de ver, Sue y Perley dijeron que
Rob estaba tratando de sonreír en anticipación de
su viaje hacia Jesús. Después de su muerte,
muchas personas se acercaron para hablar de
cómo se sentarían en silencio con él y sentirían la
gracia y la paz que emanaban de su cuerpo
silencioso e inmóvil. Dios nos habla de muchas
maneras si tan solo nos detuviéramos a
escuchar.
En mi alma, lo veo corriendo por los verdes
pastos del Cielo con su perro… ¡¡¡POR FIN LIBRE
!!!
  Al Sr. Alden Kaley, un buen amigo con un
profundo amor por Dios, por su amistad,
generosidad y aliento en mi camino.
MENCIÓN ESPECIAL
 Un agradecimiento especial a mi coautor, el Dr.
Thom Gardner, ya su encantadora esposa Carol.
Thom, tu profundo conocimiento de la palabra de
Dios hizo de este un mejor libro y de mí un mejor
hombre.

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Contenido

 
Prólogo del Dr. Thom Gardner
INTRODUCCIÓN El viajero
CAPÍTULO UNO Volando en vacío

CAPITULO DOS Fuera de control

CAPÍTULO TRES Preparado entre el cielo y el infierno

CAPÍTULO CUATROEl rostro de los ángeles

CAPITULO CINCO Caminando con Ángeles

CAPITULO SEIS El pegajoso amor de Dios

CAPITULO SIETE La ciudad del cielo

CAPITULO OCHO Cara a cara con Jesús

CAPITULO NUEVE El viaje de regreso

CAPITULO DIEZ La vista desde este lado del cielo

Capítulo once Un intercambio de yugos

CAPITULO DOCE La vida intercambiada

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CAPÍTULO TRECE No es demasiado tarde

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Prefacio
POR DR. THOM GARDNER

Hace un tiempo, asistía a una conferencia de la iglesia en un

campamento en Pensilvania. Asistieron varios cientos de personas
, algunas las conocía y otras no. Me gusta tratar de conocer gente
que realmente no conozco. A la hora del almuerzo, recorrí el
comedor para encontrar una nueva cara con la que sentarme cuando
encontré a dos personas que no reconocí. Entonces, me invité a
sentarme con un amigo y comenzó una conversación. El hombre
frente a mí tenía una cara amigable y rápidamente entablamos una
conversación. Cuando nos presentamos, le pregunté de dónde era y
si era un pastor al servicio de una iglesia. La respuesta llegó
rápidamente. "No, mi nombre es Jim, y estoy en el área con algunos
amigos para compartir mi historia".
"¿Qué tipo de historia?" Yo pregunté.
Los ojos del hombre me brillaron y compartió: "Estuve en el
cielo durante once horas y conocí a los ángeles y a Jesús". No
hace falta decir que había captado toda mi atención. Durante los
siguientes minutos, mi nuevo amigo compartió su historia. Debo
admitir que a veces soy un poco escéptico ante historias como la
que escuché en la mesa del almuerzo. Pero la historia de este
hombre y sus modales fueron cálidos y genuinos. Las emociones
y las lágrimas que fluyeron mientras contaba su historia eran
reales. Durante los días siguientes, me reuní con Jim unas
cuantas veces y ni su historia ni sus modales cambiaron. Se
estaba volviendo claro que Jim tenía una historia convincente
que animaría al pueblo de Dios: una historia de transformación y
esperanza.
Como pastor y consejero formativo durante las últimas décadas,

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me he sentado al lado de la cama de personas que estaban muy

enfermas o que estaban falleciendo. Tomé las manos de
cónyuges e hijos mientras soltaban las manos de sus seres
queridos hacia lo que les esperaba. Ha sido una experiencia
mixta, ya que muchos tenían poca o ninguna idea de lo que había
al otro lado del velo.
La historia y la experiencia de Jim, sin embargo, no se limitan a
aquellos que están pasando de esta vida. Jim's es una historia de
mirar a Love a los ojos con la transformación resultante. Es una
historia del triunfo de la gracia de Dios a través de Cristo y de la
misión de Jim como viajero. Sobre todo, es una historia de la
máxima esperanza en una vida y un amor que proviene de la fuente
misma de ambos. La de Jim es una historia común a muchos de
nosotros que buscamos llenar el vacío de la vida y que deseamos
dispersar los miedos de vivir. Algunos se sienten vacíos, solos y
abandonados en un mundo cada vez más oscuro. Es un mensaje
para aquellos cuyos pies están atascados en el fango de la
vida, aquellos que sienten que debe haber más. ¡La historia de Jim
nos dice enfáticamente que la hay! El Mensaje , de Eugene Peterson,
captura nuestra situación en Efesios.

No fue hace tanto tiempo que estabas atascado en esa vieja

vida estancada de pecado. Dejas que el mundo, que no sabe
nada sobre vivir, te diga cómo vivir. Llenaste tus pulmones de
incredulidad contaminada y luego exhalaste desobediencia.
Todos lo hicimos, todos hicimos lo que teníamos ganas de
hacer, cuando teníamos ganas de hacerlo, todos en el mismo
 barco. Es una maravilla que Dios no perdiera los estribos y nos
acabara a todos. En cambio, inmenso en misericordia y con un
amor increíble, nos abrazó. Él tomó nuestras vidas
muertas por el pecado y nos dio vida en Cristo. ¡Hizo todo esto
por su cuenta, sin nuestra ayuda! Luego nos recogió y nos
puso en el cielo más alto en compañía de Jesús, nuestro
Mesías. 1

Ha sido y sigue siendo un placer conocer a mi amigo y

compañero de viaje, Jim Woodford. Mientras lees este humilde
libro, confío en que te envolverás en el amor de Cristo mientras
Jim te trae su experiencia y esperanza en el cielo. Ser alentado.
Hay mucho

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¡más!

1 Efesios 2: 1-6, El Mensaje

 15

INTRODUCCIÓN

El viajero

Permítanme decir al comienzo de esta historia que no soy pastor. No

soy predicador ni estudioso de la Biblia. Durante la mayor parte de
mi vida fui ignorante o ambivalente acerca de las cosas de Dios. La
explicación más simple de mí es que soy un viajero. He viajado por el
mundo muchas veces como piloto de línea aérea y empresario. Pero
el viaje que estoy describiendo aquí está mucho más allá de
cualquier altitud o velocidad que haya volado. Reflexiono ahora en
estos días sobre las palabras de un himno quizás familiar para
ustedes, “Bendita seguridad”: “¡Bendita seguridad, Jesús es mío! ¡Oh,
qué anticipo de la gloria divina! " 1 Por ninguna razón que pueda
entender, aparte del amor y la gracia de Dios, se me dio ese anticipo
de la gloria divina. Sigue siendo un misterio para mí por qué sería
así. Rezo para que la cuenta del cielo que estás a punto de
 dieciséis

Leer puede ser una garantía para ti de que el Cielo es real, y

todos los que acepten a Jesús como su Salvador verán lo
que yo vi y más. Recibirás más que un anticipo; ¡Tendrás todo
el banquete en Su mesa iluminado solo por la luz y la
presencia de Jesucristo mismo, para siempre!
Cada vez que vuelvo a contar este relato de mi experiencia, me
siento humilde. Fue y es milagroso. Razoné que lo que me sucedió
debería haberle sucedido a otra persona, alguien que había dedicado
su vida a servir a Dios y hacer avanzar su causa y su reino. El único
reino que había avanzado era el mío. Pero Dios me invitó a su
historia. Soy la prueba viviente de que Dios ama al pecador y hará
todo lo posible para traernos a Él si lo aceptamos completamente.
La vida me parecía bastante buena y disfrutaba de las cosas , pero ni
una sola vez sentí la necesidad de hablar con Dios, de cuestionar la
Creación, de involucrarme con otra cosa que no fuera yo mismo. Mi
único objetivo era la acumulación de riqueza y se me daba bien.

No importa cuántos cheques escribiera o

cuántos negocios hiciera, nada llenó el vacío.
Estaba vacío.
Nunca pensé que fuera una mala persona, pero
ciertamente no era una buena persona. Según todas las
cuentas, yo era un tipo normal, ni mejor ni peor que cualquier
otra persona. Oh, claro, podría escribir un cheque para una
organización benéfica de algún tipo, que probablemente
también sea egoísta. Mi único objetivo en la vida era tener
cosas . Tenía un yate. Tenía un avión y una colección de
autos deportivos británicos. Era piloto de aerolínea y viajé por
el mundo. Cuanto más tenía, más quería. Pero de alguna
manera, por muchas cosas que adquiriera, en el fondo de mi
alma había un vacío y un anhelo. No importa cuántos
cheques escribiera o cuántos negocios hiciera, nada llenó el
vacío. Estaba vacío.
Mientras sigue leyendo, mi relato puede parecer fantástico o
difícil de creer, demasiado bueno para ser verdad. Sin embargo,
es cierto. Debido a un problema médico,

17

Estuve sin actividad cerebral durante 11 horas, y durante ese

tiempo experimenté la gloria del cielo y un atisbo de la turbulenta
oscuridad del infierno. Aunque había volado a más de 30,000
pies en un avión muchas veces en mi carrera, ahora me elevé a
una altitud más allá del alcance de los instrumentos
aeronáuticos para indicar. En un momento, fui transportado a
través de un túnel de luz brillante hacia los campos y pastos que
rodean el cielo cuyos colores y sonidos desafían cualquier
descripción. Miré a los ojos de los ángeles y sí, vi el rostro de
Jesús. Mi experiencia no fue una alucinación, ni fue el resultado
de un coma inducido por drogas en Cuidados Intensivos. No fue
el resultado de la falta de oxígeno. De hecho, el personal médico
que me atendió quedó asombrado por lo sucedido porque
durante más de 11 horas no tuve señales de vida, ni ondas
cerebrales. Recientemente, me encontré con una de las personas
que atendieron mi cuerpo médicamente y escuché que me
llamaban: "Oye, Lázaro". A todos los efectos, estaba clínicamente
muerto. Me llevaron a un rincón y lo dejaron en un respirador para
que mis dos hijos pudieran venir del otro lado de Canadá a
despedirse de mí al menos en una cama de hospital.

Aunque pueda parecer extraño para las personas que

creen y sirven a Dios, les tengo envidia. Tuve que morir para
aprender lo que muchos de ustedes ya saben e incluso
pueden dar por sentado. Tuve que recibir un golpe en la
cabeza con el proverbial dos por cuatro antes de darme
cuenta de que estaba viviendo una vida vacía. Era como un
hombre en un buffet que se atiborra de las cosas de la vida
para no quedar nunca satisfecho. Y ahora estoy viviendo una
vida que es tan plena todos los días. A veces, mi experiencia
en el cielo todavía me parece surrealista, demasiado buena
para ser verdad. Pero es verdad. Me refiero a mí mismo como
un viajero porque eso es lo que soy. He viajado por el mundo
de este lado del cielo a velocidades que se acercan a la
velocidad del sonido. Ahora he viajado a la velocidad de la luz
de Cristo, quien me envió de regreso en una misión para
compartir este relato y Su amor.

He viajado a la velocidad de la luz de Cristo que envió

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yo de regreso en una misión para compartir este relato y

Su amor.

Este es mi relato de una experiencia extraordinaria. He tenido

la ayuda de mi amigo, el Dr. Thom Gardner, para contar esta
historia. Para ayudarlo a experimentar aún más mi historia, Thom
ha creado una pequeña reflexión llamada “Tome el viaje” al final
de cada capítulo. Tómese el tiempo para experimentar esta
reflexión y permita que el Espíritu de Dios acerque su corazón al
suyo.

Tomar el viaje
Al comenzar el relato de este extraordinario y
lleno de esperanza viaje al cielo, es importante afinar nuestra
brújula. Para hacerlo, lea este texto bíblico lentamente.
Piense en estas preguntas para poner su esperanza en lo que
está reservado para usted en el corazón de Dios.
 Toda la alabanza a Dios, el Padre de nuestro Señor Jesucristo.
Es por su gran misericordia que hemos nacido de nuevo,
porque Dios resucitó a Jesucristo de los muertos. Ahora
vivimos con gran expectativa, y tenemos una herencia
invaluable , una herencia que se guarda en el cielo para
ustedes, pura e incontaminada, más allá del alcance del
cambio y la decadencia. Y a través de su fe, Dios lo está
protegiendo con su poder hasta que reciba esta salvación, que
está lista para ser revelada en el último día para que todos la
vean. 2

Resalta o subraya cualquier palabra o frase que te llame la

atención en los versículos anteriores. ¿Qué dice la Escritura
sobre esas palabras? ¿Cuáles son sus expectativas para esta
vida y la próxima?

Notas
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1 Francis J. Crosby, "Blessed Assurance". Dominio publico.

2 1 Pedro 1: 3-5, NTV.

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CAPÍTULO UNO

Volando en vacío

Mis primeros recuerdos son de contemplar las nubes ondulantes

que se deslizan lentamente a través de un cielo azul prístino del
norte mientras yacía de espaldas en la nieve profunda que cubría
el paisaje alrededor de la cálida y acogedora casa de mis abuelos
en la provincia de Terranova y Labrador, Canadá. . Para algunos,
esta área es conocida por sus largos inviernos y breves veranos,
y la broma local era que el verano era un miércoles de 2 a 4 p.m.
Sin embargo, una vez que visita esta isla única, pronto se da
cuenta de que debe ser conocida por la calidez y amabilidad de
su gente y su legendaria hospitalidad. Leí en alguna parte que el
terreno difícil y el clima severo obligan a los habitantes a
desarrollar conjuntos de habilidades y una capacidad de
recuperación y amabilidad que raya en lo notable, y que
adecuadamente.

23

describe el carácter indomable de Terranova. No fue hasta el 31

de marzo de 1949 que Terranova se unió a Canadá, pero ese
espíritu de independencia e ingenio se ha mantenido, no muy
diferente al gran estado de Texas. Hasta ese momento,
Terranova era una colonia británica y la lealtad a la Reina de
Inglaterra sigue siendo una orgullosa tradición para muchos.
Durante la Segunda Guerra Mundial, la isla se convirtió en una
importante zona de lanzamiento para los convoyes de la Fuerza
Aérea y la Armada de los Estados Unidos en su camino a través
del Océano Atlántico para luchar contra las potencias del Eje en
Europa. Se construyeron una serie de grandes bases
estadounidenses y miles de personal estadounidense
experimentaron el encanto de su gente y la furia de su clima
cambiante. Qué irónico que los terribles eventos del 11 de
septiembre de 2001 trajeran a miles de estadounidenses a
Terranova una vez más cuando decenas de aviones de pasajeros
se vieron obligados a aterrizar en Gander, NL porque todas las
vías aéreas sobre los Estados Unidos continentales estaban
cerradas al tráfico aéreo comercial. Aviones de todo el mundo,
incluidas decenas de Estados Unidos, encontraron refugio en la
pista del aeropuerto de Gander.

Poco me di cuenta entonces de que mis viajes me

llevarían a algunos de los lugares más exóticos que la
tierra tenía para ofrecer y que eventualmente visitaría el
lugar más increíble de todos.
- ¡Cielo!
 Durante los primeros días de los aviones
propulsados por hélice , Gander era un aeropuerto bullicioso y
concurrido, ya que era una importante parada de repostaje para
las aerolíneas que cruzaban el Atlántico Norte en ambos
sentidos. No era raro ver estrellas de cine de esa época o
maharajás y reyes paseando por el aeropuerto estirando las
piernas después del largo vuelo transatlántico. Con la
introducción de los jets de largo alcance , Gander perdió gran
parte de su negocio internacional, pero siguió siendo un centro
importante en el Atlántico canadiense. El 11 de septiembre, la
ciudad de Gander, NL, tenía una población de aproximadamente
10,400 residentes y había 10,500 pasajeros varados que
necesitaban ayuda.

24

Con amor y compasión, este pequeño pueblo de Gander y los

pueblos circundantes abrieron sus pasarelas, corazones y
hogares y durante dos días se ocupó de cada persona sin
pedir ni esperar compensación. Estoy muy orgulloso de ser
un Terranova de Canadá.
Vivíamos con mis maravillosos abuelos paternos. Estaban tan
calientes como frío. Mi padre había fallecido cuando yo tenía dos
años, pero Dios me había bendecido con una madre maravillosa.
Cuando miro hacia atrás a las soleadas laderas de hace mucho
tiempo, me doy cuenta del amor que nos dio y los sacrificios que
hizo por nosotros. En aquellos días de principios de los años 50,
especialmente en el noreste, había poca red de seguridad social
para una joven viuda de 22 años con dos bebés, pero estaba
decidida a que nunca terminaríamos en un orfanato de niños.
Aunque nunca conocí realmente a mi papá, siempre lo extrañé.
Aunque mi abuelo era una gran figura paterna, no pude evitar
notar que no tenía un padre como los otros niños en la escuela o
los Boy Scouts. La escuela a la que asistí estaba a unos
cinco kilómetros a pie de donde vivíamos; Caminé con el frío en
la cara y la nieve crujiendo bajo mis pies. Detrás de la escuela, en
una colina, estaba el cementerio donde estaba enterrado mi
padre. A menudo escalaba la colina hasta donde lo colocaron
para descansar justo dentro de la puerta. Me sentaba allí y fingía
que él estaba conmigo y miraba hacia las distantes colinas
moradas al oeste y le contaba todos los lugares que visitaría
algún día. No me di cuenta entonces de que mis viajes me
llevarían a algunos de los lugares más exóticos que la tierra tenía
para ofrecer y que eventualmente visitaría el lugar más increíble
de todos: ¡el cielo!

También recuerdo caminar a casa después de la escuela a

través del frío adormecedor de los inviernos de Terranova
hasta donde mi mamá y mi abuela tendrían listo un tazón
caliente de pudín de tapioca. Esa casa cálida y esas manos
amorosas me dieron una sensación de abrazo que me
calienta aún hoy. Había una pizca de cielo en esa tapioca que
no reconocí en ese momento.
La tala para la planta de celulosa local fue la principal ocupación en
el centro

25

Bosques de Terranova, y mi abuelo estaba involucrado en el

negocio de adquirir troncos para el aserradero. En la década de
1950, había pocos tractores o skidders modernos, por lo que se
registraban con caballos pesados. Estos gentiles gigantes eran
algo común y muchas familias tenían equipos de caballos. Los
caballos arrastraron los troncos en grandes trineos a lugares en
los ríos helados y, en primavera, el hielo se derritió y los troncos
flotaron río abajo hasta la fábrica de celulosa. Así que crecí
rodeado de caballos durante toda mi infancia. Una gran ventaja
de crecer en ese lugar frío con todos los caballos y el estiércol:
había un suministro interminable de discos de hockey. Y, por
supuesto, muchos niños canadienses nacen con un palo de
hockey en la mano. Así que crecí en un ambiente de caza, pesca
y hockey. También asistimos a una iglesia católica, y experimenté
la escuela católica y las monjas. No era exactamente lo que
llamas un devoto seguidor de Cristo; era justo lo que teníamos
que hacer. Pero ya sabes, a pesar de lo remoto que estaba el
país, era mi hogar y me encantaba y todavía lo hago hasta el día
de hoy.

Nuestra familia vivía al borde de un río y un gran estanque.

En aquel entonces, muchas ciudades pequeñas no siempre
eran accesibles por carretera, por lo que la gente viajaba por
el norte en pequeños aviones. Había aviones en flotadores en
verano y ruedas o esquís en invierno. Fue genial haber
crecido en un área donde los aviones llegaban trayendo
personas y provisiones y tal vez algo emocionante. Para
muchos, esos aviones eran nuestra conexión con el mundo.
Me fascinaron los aviones desde muy joven. Desde el rugido
de los motores hasta la vista de un hidroavión rozando la
superficie del agua hasta un aterrizaje elegante, me enganché.
Hice todo lo que se me ocurrió para estar cerca de estos aviones.
Los barrí o ayudé a reabastecerlos. Cargué carga en
ellos, cualquier cosa para estar cerca de los aviones y sus
pilotos. Me estaba enamorando de la aviación y desde muy joven
me imaginé tomando el yugo —la columna de control del avión, si
se quiere— en mis manos para despegar en uno de estos
grandes pájaros y remontar el vuelo con la gracia de un aguila.
Había un número aparentemente interminable de

26

lagos en el norte como se puede ver en cualquier mapa de la

región. Estos representaban nuevos lugares para visitar. Leí todo
lo que pude conseguir sobre aviones. Me hice amigo de los
pilotos y algunos de ellos incluso me llevaron a volar con ellos
aquí y allá. Cuando tenía 11 años, tenía las manos en los
controles; no estaba solo, por supuesto, pero de todos modos fue
el día más emocionante de mi joven vida.
Como todos los niños y niñas que llegan a la mayoría de
edad, estaba lleno de pensamientos sobre las infinitas
posibilidades que se me presentaban, pero el sueño que tenía
en lo más profundo de mi corazón era convertirme en piloto
de monte. Aunque mi fascinación por la aviación era obvia
para todos, era un sueño que pensé que estaba mucho más
allá de la capacidad financiera de mi familia, por lo que me
resigné en silencio a “ algún día. “Otro obstáculo fue que mis
abuelos estaban aterrorizados de que yo muriera en un
accidente de avión, ya que con frecuencia se escuchaban
informes en la radio de que otro avión se había perdido con
mal tiempo y nunca más se supo de él. Habían perdido a un
hijo pequeño, mi padre, y no podían soportar la idea de perder
también a un nieto.

Fue un vuelo real , una empresa cooperativa

entre el hombre, los
aviones y los
elementos.
Mientras tanto, mi madre se había inscrito en la escuela de
secretariado y había trabajado duro para cuidarnos, y aunque
nunca lo dijo, como la mayoría de las madres, conocía el anhelo
en el corazón de su hijo. ¡Imagínense mi incredulidad y emoción
la noche en que me sentó y me dijo que había logrado pedir
prestado el dinero para enviarme a la escuela de vuelo! Además,
mis abuelos cedieron y acordaron que debería ir con la condición
de que volara bajo y lento. (Benditos sean sus corazones, tenían
buenas intenciones, ¡pero eso es probablemente lo más
peligroso que puede hacer un piloto!) ¡Entré en la escuela de
vuelo y me encantó! Cuando me gradué, probablemente era uno
de los pilotos comerciales más jóvenes de Canadá, pero debido
al seguro

27

regulaciones Tuve que esperar un año más antes de poder

volar comercialmente, así que pasé el tiempo cargando carga
y absorbiendo todo lo que pude sobre los aspectos
comerciales de los vuelos. ¡Por fin llegó el momento de volar
y cobrar por ello!
Finalmente, pude volar por mi cuenta. ¿Cómo puedo describir lo
que fue tomar el yugo del avión en mis manos, levantar toneladas de
acero de la pista o del agua? Para esos momentos, fue una
sensación de aprender a confiar en mí mismo, de tener el control.
Podía sentir el viento a mi alrededor y aprendí a volar el avión en
cooperación con el viento y los elementos. Sentí como si el avión
fuera parte de mí. Sabía lo que me decía el cielo. En esos primeros
días, realmente tenía que volar el avión sin la ayuda de
computadoras y aparatos electrónicos sofisticados. No había GPS;
todo fue por estima, un término apropiado porque un simple error en
la navegación podría desviarlo cientos de millas de su curso en un
desierto inexplorado. Disfruté especialmente volar el avión
modificado más antiguo de la Segunda Guerra Mundial. En esos
viejos aviones, podía sentir el viento en la cola y la resistencia de los
alerones (pequeñas secciones con bisagras en las alas). Fue un
vuelo real , una empresa cooperativa entre el hombre, los aviones y
los elementos.

A lo largo de mi carrera como piloto, he volado 42 tipos

diferentes de aviones. Comencé a volar en un Aeronca Chief
en la patrulla de líneas de transmisión y luego subí a los
distintos tipos de hidroaviones Cessna y luego al viejo
caballo de batalla del norte, el Noorduyn Norseman. Luego al
Beaver y luego a su primo mayor el de Havilland Otter y luego
al bimotor Otter. Desde allí me ofrecieron la oportunidad de
volar un bombardero acuático. ¡Salté sobre eso! Ahora he
aquí la emoción en su máxima expresión cuando aprendí el
fino arte de combatir incendios forestales furiosos con un
hidroavión anfibio PBY Catalina consolidado de la Segunda
Guerra Mundial convertido, conocido en el servicio
canadiense como el Canso.
Durante el invierno, fui al sur y me quité el polvo en los
aviones Stearman y Grumman Ag Cats y Pawnee y viví la vida de
un piloto gitano. Volé todo lo que pude. Los días de la tormenta
pueden

28

han terminado, pero probé esa rara alegría de mirar un nuevo

horizonte cada mañana y dormir bajo el ala del avión cada
noche. Tuve el privilegio de trabajar con algunos de los
mejores aviadores de antaño , los últimos de una raza
moribunda. Luego vino la oportunidad de volar un DC-3, y de
todos los aviones que he volado, este sigue siendo mi
favorito. Por primera vez pude llevar un uniforme real como
segundo oficial.
La gente me dice que he llevado una vida realmente
interesante, pero para mí solo estaba haciendo lo que amaba
hacer. Si uno es lo suficientemente afortunado en esta vida como
para ganarse la vida haciendo algo que le encanta hacer todos
los días, ¡entonces es una verdadera bendición! Me las arreglé
para superar muchos rasguños, desde fallas mecánicas hasta
volar a través de tormentas de nieve cegadoras, pero ni una sola
vez los pasajeros a mi cuidado dejaron de llegar al suelo de
manera segura conmigo en los controles. Algunos de los mejores
consejos que recibí fue de mi abuelo, quien me dijo que
mantuviera la cabeza gacha, la boca cerrada y escuchara con
atención a cualquiera que tuviera más experiencia práctica en
volar que yo. Aprendí mucho de esas "águilas viejas" que me
ayudaron muchas, muchas veces, y les debo una deuda que
nunca podré pagar.

Finalmente, fui a Seattle para entrenar en los aviones 737

ya que había alcanzado mi calificación de jet. Una vez que
obtuve 2.000 horas en un 737, despegué hacia Inglaterra y
volé para una compañía llamada Kenting Aviation. Viví fuera
de Londres y volé por todo el mundo como piloto en aviones
de carga y aviones propulsores. Los tiempos parecían
bastante buenos para un piloto de jet joven y enérgico. Tenía
el control y sostenía las vidas de cientos de almas en mis
manos mientras agarraba el yugo del avión. Acumulé miles
de horas en los controles antes de retirarme.

Probé esa rara alegría de mirar un nuevo

horizonte cada mañana y dormir bajo el ala del
avión cada noche.
Entonces, tuve una vida aparentemente interesante y divertida, pero
lo último en mi

29

la mente era Dios. Volaríamos del día a la noche y

aterrizaríamos en algún lugar exótico. En ese momento,
estaba soltero, las azafatas eran hermosas y estaba
interesado.
Recuerdo haber volado sobre el Mar de China Meridional,
mirando desde mis instrumentos hacia la negrura del cielo que
estaba perforado por innumerables estrellas que parecían caer
en el límite donde terminaba el cielo y comenzaba el mar. Podrías
suponer que hubiera tenido la presencia de ánimo para suponer
que podría haber alguien responsable de todo esto, tal vez un
Creador. Pero en mi arrogancia, no podía ver más allá de esa
oscuridad vacía. Sin embargo, sutilmente, impregnando la
oscuridad indefinida fue la conciencia de que debe haber algo
más que esto.
Disfrutaba las cosas , pero ni una sola vez sentí el impulso de
hablar con Dios, de cuestionar la Creación, de involucrarme con
otra cosa que no fuera yo mismo. Mi único objetivo era la
acumulación de riqueza, y era bueno en eso, habiendo invertido
en varias oportunidades comerciales. Sin embargo, habría en el
fondo una sensación de vacío y anhelo de algo más. Lo descarté,
pensando que significaba que necesitaba un avión nuevo, un
barco nuevo, un Jaguar nuevo, así que salía, lo compraba y
jugaba con él durante dos o tres días y aún así volvía el anhelo.
Una de las gracias salvadoras de Dios fue conocer a mi
preciosa esposa, Lorraine. Hacia el final de mi carrera como
piloto, estaba montando a caballo en el campo en un río
helado. Mientras cabalgaba a través del frío, el vapor salía de
las fosas nasales de mi caballo, vi a una hermosa mujer
también a caballo. Ese encuentro aparentemente casual en la
nieve fue el llamado del destino, y ella alteró el curso de mi
vida.

Aunque había volado a las mayores alturas en un

poderoso avión de pasajeros para ver la curvatura
real de la tierra, no entendía que había algo más.
Mucho más.
Fui bueno con mi familia. Les di todo lo que pude.

30

Lorena tenía un trasfondo espiritual diferente al mío. Mientras

asistía a la iglesia católica por tradición y obligación, Lorraine
tenía una relación profunda con Jesucristo. Ella y sus hermanas
siempre tuvieron una sólida educación cristiana. Pero cuando
Lorraine y sus hermanas iban a la iglesia, yo me iba o salía en
barco o en avión. Fui educado, pero nunca quise tener nada que
ver con todo ese "asunto de la iglesia". Para ser honesto, pensé
que mi cuñada, Shelly, era ingenua cuando hablaba de confiar en
Jesús para todo. Ella y su esposo, David, eran dos de esas
personas que vieron la mano de Dios en todo. Estaban llenos de
alegría. Razoné que para las personas inteligentes, algún tipo
religioso había hecho un verdadero trabajo de venta con ellos.
Shelly era la calidez y la amabilidad personificadas y una gran
cocinera además de eso, pero ella y Lorraine tenían una alegría y
una profundidad más allá de mi comprensión. Ni una sola vez me
pregunté de dónde venía la fe de estas dos increíbles mujeres.

Aunque estaba rodeado por la bondad de Dios, nunca lo

vi. Desde el amor de mi maravillosa madre hasta la calidez de
la casa de mis abuelos y el amor de mi esposa Lorraine, no vi
ni reconocí mucho más que la rutina de la vida. La vida era
una cosa más que tener. Aunque había volado a las mayores
alturas en un poderoso avión de pasajeros para ver la
curvatura real de la tierra, no entendía que había algo más.
Mucho más.

31
 Tomar el viaje
Muchos de nosotros tenemos un sentido de la futilidad de
la vida, que la vida es una búsqueda interminable de algo
más de lo que tenemos o sabemos. Incluso aquellos que
tienen una fe fuerte encuentran que su relación con Aquel
que les dio vida oscila entre lo milagroso y lo mundano. Hay
una búsqueda para encontrar algo que nos llene ; la hierba
siempre parece más verde en otro lugar. Nuestra experiencia
favorita es la próxima experiencia. Parece que salimos del
estacionamiento con un auto nuevo y notamos otro auto más
deseable antes de llegar a la siguiente señal de alto. Sin
embargo, no es algo más, mucho más para nosotros. El
anhelo en nuestros corazones proviene de Aquel que nos
añora.

El anhelo en nuestros corazones proviene de Aquel que

nos
añora.

Tómate unos minutos para conectarte con este anhelo en

el corazón de Dios de conocerte y de conocerlo y
experimentarlo. Lea las palabras de Isaías lentamente para sí
mismo.

Por lo tanto, el Señor anhela ser misericordioso contigo, y

por eso espera en lo alto para tener compasión de ti.
Porque el Señor es un Dios de justicia; ¡Cuán
bienaventurados son todos los que le anhelan! 1

Resalta cualquier palabra o frase que te llame la atención.

¿Qué piensas de la verdad de que el Señor anhela que estés
conectado con Él? ¿Se siente esto cierto para usted
personalmente? ¿Hay otras formas en las que ha tratado de
llenar algún vacío en su vida? ¿Cosas?
 32

Relaciones Hay una bendición para aquellos que anhelan la

presencia de Dios en sus vidas.

Para una mayor reflexión

Nuestros corazones anhelan un hogar y descanso.
Este anhelo y búsqueda en nuestro corazón es
como un GPS, un "Sistema de Posicionamiento de
Dios", que nos dice qué tan cerca o lejos estamos
de casa. A veces damos un giro equivocado en
nuestra búsqueda para llenar este anhelo, pero
este GPS programado por la misericordia y el
anhelo del corazón de un Padre recalcula y nos
lleva de nuevo a casa. 2

Ahora, visualízate en el mismo salón del trono del Cielo de

pie ante Jesús. Mientras estás con Él, pídele a Jesús que te
revele su anhelo de conocerlo con mayor profundidad.
Mientras Él da a conocer Su corazón anhelante, siéntese en
silencio concentrándose en el rostro de Jesús.

Oración
Padre santo y misericordioso. Anhelo conocerte cara a cara.
Confieso que he tratado de satisfacer mi corazón con cosas
menores que no llegan a Tu presencia en mi vida. Te pido que
me reveles todo lo que haya perseguido para llenar este
anhelo en mi corazón que solo Tú puedes cumplir. Calmo mi
corazón ahora para escuchar Tu Espíritu. Amén.

Notas
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1 Isaías 30:18

2 Thom Gardner, Viviendo la vida inspirada por Dios : una invitación a descansar en
la mesa (Ship-pensburg, PA: Destiny Image, 2010), 28.
 35

CAPITULO DOS

Fuera de control
Estoy inclinado y atormentado por el dolor. Todo el día
camino lleno de dolor. Una fiebre furiosa me quema y mi
salud está quebrantada. Estoy exhausto y
completamente destrozado. Mis gemidos provienen de
un corazón angustiado. 1

¿Alguna vez te has despertado por la mañana habiendo

dormido en una posición extraña que te ha dejado el brazo
entumecido y con hormigueo? Se siente como si le hubieran
inyectado novocaína o algún otro agente. No puede hacer
nada con su brazo hasta que vuelva la sensación, lo que
suele suceder con bastante rapidez. Es extraño cuando le
dices a tu brazo que haga algo y no te escucha.
 36

Una mañana me desperté y sentí entumecimiento y

hormigueo en ambos brazos y piernas. Anteriormente, si me
había despertado con un brazo que se había entumecido,
podía sacudirme y la sensación volvería rápidamente. Pero
algo andaba muy mal en esta mañana en particular hace
unos años. Fue un sentimiento extraño. Empecé a
cuestionarme : ¿qué había hecho? ¿Cómo pudo haber
resultado mi posición de dormir en este tipo de
entumecimiento de todas mis extremidades?
Unas horas después, me sentía muy mal y empeoré a medida que
avanzaba el día. Como un chico típico, pensé que esta sensación
simplemente desaparecería. No fue así. Tal vez tuve algún tipo de
error. Esto fue un domingo. Cuando la enfermedad no desapareció el
lunes, fui al médico. Me examinó y, pensé, confirmó mi
diagnóstico: que tenía gripe. Regresé a casa para esperar a que
pasara la enfermedad, pero no se fue. Regresé al médico unos días
después y me aseguró que era gripe y que desaparecería. Pero se
estaba volviendo obvio que algo andaba muy mal. Estaba en las
garras de algo más siniestro. Me estaba debilitando cada día.
El día diez volví de nuevo al médico. Esta vez me derrumbé en
el estacionamiento del consultorio del médico. Una persona
amable me arrastró a la oficina. Lorena, una enfermera, insistió
en que esto no era la gripe y que iba a ver a un neurólogo. Había
recibido toda la atención del médico y finalmente trajeron a un
neurólogo para una mirada más profunda. El neurólogo ordenó
una punción lumbar para extraer algo de líquido cefalorraquídeo.
El médico regresó con los resultados de las pruebas que ordenó
y me di cuenta de que algo andaba muy mal por la expresión de
su rostro. Dijo: "Al principio, cuando se presentó clínicamente,
pensamos que tenía esclerosis múltiple", lo que en sí mismo no
es bueno. “Pero las pruebas revelaron que tienes una
enfermedad muy rara, por lo que a tu médico le habría resultado
difícil diagnosticar tu enfermedad. Has contratado a
Guillain-Barré ".

Esta enfermedad fue muy rara. Lleva el nombre de los dos

médicos franceses, el Dr. Guillian y el Dr. Barré, que aislaron por
primera vez la enfermedad en París en los años 40. Con esta
enfermedad, su propio sistema autoinmune ataca su

37

cuerpo. Destruye la vaina de mielina en el tallo cerebral , una

especie de aislamiento que cubre el haz de nervios. La vaina
de mielina permite el correcto funcionamiento del sistema
nervioso. Cuando la mielina se daña, los impulsos nerviosos
disminuyen y la célula nerviosa comienza a marchitarse. Es
como una banda de cables eléctricos entretejidos que pierden
su aislamiento y comienzan a cortarse entre sí. La EM
también puede resultar de las vainas de mielina dañadas.
Quizás por eso el médico creyó originalmente que tenía EM.
La vaina de mielina alrededor de mi tronco cerebral estaba
hecha jirones y rasgada. Mi sistema nervioso estaba fuera de
control.
El pronóstico de esta rara enfermedad era desalentador. Si se
diagnostica en un período corto de días, el tratamiento es una
plasmaféresis, un procedimiento de purificación de sangre e
inmunoglobulina intravenosa. Esto elimina el problema, pero puede
resultar en un período de parálisis. La recuperación es posible, pero
con efectos persistentes. Sin embargo, si la enfermedad no se
identifica dentro de esa ventana estrecha, puede resultar en una
parálisis ascendente que comienza con las piernas y sube por el
cuerpo para paralizar los pulmones. El final de la enfermedad puede
ser la muerte. Como dije, sombrío. Se ha realizado muy poca
investigación médica en Guillain-Barré porque es una enfermedad
muy rara. Quienes la padecen simplemente tienen que aprender a
vivir con ella.

Pero como todo y en cualquier otro momento de mi

vida, pensé que
podía tener el
control.
Mientras el médico me explicaba la enfermedad, dijo palabras
que me llevaron a una escalofriante desesperanza: “Jim, es
demasiado tarde para ti. Has perdido esa oportunidad y me temo
que estás condenado a una vida de dolor ". Pero en mi arrogancia
pensé, no puede ser tan malo. Lo arreglaré. En ese momento, debería
haberme arrodillado y rogarle a Dios por ayuda. Pero como todo y en
cualquier otro momento de mi vida, pensé que podía tener el control.
En cualquier caso, los médicos probaron la plasmaféresis. Esto se
hizo varias veces en un esfuerzo por aliviar o

38

erradicar el virus de mi cuerpo que estaba causando la

enfermedad. A pesar de sus mejores intentos de tratamiento,
terminé con cierto grado de parálisis. Mis dedos comenzaron
a curvarse, por lo que pegaron palos a mis dedos para
mantenerlos rectos. Pasé de ser alguien que alguna vez tuvo
el control de un avión de alta potencia a alguien que ni
siquiera podía lavarme la cara. No podría hacer nada sin la
ayuda de una enfermera o una auxiliar de enfermería o
Lorraine, mi esposa. Finalmente, mi vida y mi cuerpo estaban
fuera de mi control. No pude acelerar más allá de este. Había
estado en muchos problemas antes, con motores fallando o
incluso en ocasiones en las que lancé mi avión de bombardeo
de agua directamente a un incendio forestal. Pero no hubo
control de esta catástrofe. Mi vida iba a estar en una espiral
descendente. Me sentí humilde e impotente y, peor aún,
dependía de otras personas, lo cual era un sentimiento
desconocido para mí.
Cuando salí del hospital y volví a casa, hice todo lo posible por
seguir las órdenes del médico. Era un desastre, de verdad.
Incluso levantarse de la cama era una prueba dolorosa. Tendría
que levantarme de la cama sobre mis manos y rodillas y
arrastrarme hasta el tocador y luego que alguien me ayudara.
Una vez más, me sentí tan indefenso como un niño pequeño. Fue
horrible. Para controlar la enfermedad, tuve fisioterapia con los
médicos probando todo tipo de fármacos neurológicos. Incluso
tuve tratamientos privados de cámara hiperbárica para curar y
controlar el dolor. Pero nada detuvo el dolor. Mi sistema nervioso
era como un montón de cables y circuitos eléctricos sin
aislamiento, todos en cortocircuito a la vez. Cada impulso de mi
cerebro de mover las manos o los pies o, en algunos casos,
incluso parpadear, me producía dolor. No estoy hablando de
dolor molesto o molesto. Estoy hablando de introspección,
desgarrador, gritando en medio del dolor nocturno. En los
momentos muy malos tuve que mudarme a otro dormitorio por
miedo a mantener despierta a Lorraine. Dejé un cinturón de cuero
junto a mi cama para morderlo cuando el dolor fuera intenso y
así no gritar en medio de la noche. Nunca supe que existiera un
dolor así. El tormento fue un infierno constante en la tierra.

39

Dejé un cinturón de cuero junto a mi cama para

morderlo cuando el dolor fuera intenso y así no
gritar en medio de la noche.
La parálisis y el dolor afectaron toda mi vida, incluso la
forma en que caminaba. Junto con Guillain-Barré viene
arrastrar el pie, así que cuando caminaba, mi pie derecho se
arrastraba detrás de mí.
El dolor empeoraba, con ocasiones engañosas ocasionales en
las que el dolor disminuía un poco solo para regresar con una
venganza. Sabía cuándo se avecinaba una recaída y dolor, pero
nunca oré. Solo mordí más fuerte y me musculé desde el
principio. Yo nunca oré. Esto se convirtió en una nueva realidad
de vida para Lorraine y para mí. Mi habla fue arrastrada. No pude
tragar nada más que líquidos durante mucho tiempo, pero me
obligué a hacer los ejercicios para poder moverme un poco. Al
final, y con gran ayuda y esfuerzo, pude volver a enseñarle a mi
cuerpo a caminar.
Pensé para mí mismo: Oh, estas son las cartas que me han
repartido. He tenido una buena racha hasta ahora . La mayoría de
los pilotos son personas pragmáticas porque lidiamos con la
realidad de mantener un avión en el cielo. Aprendes a vivir con lo
que te traen los cielos. Lo intentas, y si falla, colapsas, que así
sea.
Estaba loco de dolor. En última instancia, los médicos me
recetaron narcóticos potentes para tratar mi dolor constante que
me alteraba la vida . Esta fue una experiencia extraña para mí.
Debido a mi amor por volar, nunca bebí alcohol ni tomé drogas de
ningún tipo. Lo más fuerte que tomé fue una aspirina. No haría
nada que pudiera poner en peligro la carrera que amaba. No
obstante, me recetaron narcóticos. Las drogas hicieron que el
dolor fuera manejable para que pudiera vivir y funcionar. No
eliminaron el dolor, pero lo atenuaron. Con la medicación, por
primera vez tuve algo que me permitiría quedarme dormido en
lugar de quedarme despierto con dolor durante varias horas.
Pero parecía que cuanto más tomaba de esas cosas, más
necesitaba mantener un nivel de manejabilidad. Pronto yo

40
Lamento decirlo, comencé a mentirle a Lorraine. Me
preguntaba si tomaba mi medicación, pero de hecho a veces
tomaba tres veces más para tener algún tipo de capacidad
para funcionar. Me dirigía por un camino fatal. En poco
tiempo, las cosas se pondrían muy serias.

Me dirigía por un camino fatal. En poco tiempo, las

cosas se
pondrían muy
serias.

Una tarde recibí una llamada de una empresa de

topografía con respecto a unos marcadores de tierra que me
pidieron que aprobara. A última hora de la tarde, me arrastré
hasta mi camioneta y conduje hasta la propiedad. Llegué a la
cima de la colina y, por un momento, me cautivó la imagen
del sol dorado poniente. Estacioné la camioneta y me senté
allí durante unos minutos, reuniendo el valor para mover mi
cuerpo y preparándome para otra ola de dolor que
seguramente vendría.
Mientras me preparaba para el dolor, miré hacia abajo y vi un
recipiente lleno de mi analgésico en la consola de la camioneta.
No me di cuenta de que a lo largo de los meses de tomar estos
medicamentos fuertes había desarrollado tolerancia y toxicidad
en mi cuerpo. Era una ironía estar sentado en mi camioneta
viendo la hermosa puesta de sol mientras al mismo tiempo
estaba atormentado por el dolor. Buscaba la paz. Entonces,
razoné, si tomaba algunos más, tal vez detendrían el dolor. Me
estaba volviendo débil y cansado en la batalla contra el dolor y la
parálisis de mi enfermedad. No estaba tratando de suicidarme;
Estaba tratando de matar el dolor implacable.
Recuerdo estar sentado en mi camioneta y mirar la puesta de
sol y tomar varias pastillas. Más tarde, después de mi
experiencia, supe que la botella de opioides estaba casi vacía.
Había intentado todo lo posible bajo el sol para obtener algún
tipo de alivio y no pude encontrarlo a menos que tomara estos
narcóticos. Mi mente estaba en no querer ser una molestia para
nadie y tal vez tratar de encontrar algún tipo de control sobre mi
dolor. Una vez más, yo era mi último recurso. Mi única esperanza
estaba en mí y en las drogas.

41

De repente, después de haber ingerido muchas pastillas,

en lugar de alivio comencé a sentir una sensación diferente.
La planta de mis pies comenzó a arder, y el ardor subió por
mis piernas y luego por mis muslos involucrando toda la parte
inferior de mi cuerpo. Algo estaba terriblemente mal, había
hecho algo catastróficamente malo. Mi cuerpo se estaba
apagando. Era como si la cabina de mi camión se estuviera
llenando de agua y yo me estuviera ahogando, jadeando por
aire. Me estaba muriendo ... estaba solo.

1 Salmo 38: 6-8, NTV

 42

Tomar el viaje
Estoy inclinado y atormentado por el dolor. Todo el
día camino lleno de dolor. Una fiebre furiosa me
quema y mi salud está quebrantada. Estoy exhausto
y completamente destrozado. Mis gemidos
provienen de un corazón angustiado. 2
Cuando tenemos dolor, nos envuelve. Cuando sentimos
dolor, pasamos al modo de autoconservación . El dolor nos
controla a nosotros, a nuestras familias y la vida de todos
gira en torno a ese dolor. Vivimos desesperados por
detenerlo. Es como si estuviéramos en la oscuridad; no
vemos nada más que el dolor siempre presente .
Las personas con dolor físico están en una búsqueda
desesperada de cualquier medio de alivio. Las personas
atrapadas en el dolor de la vida pierden la visión y, por lo tanto,
están desesperadas por tener esperanza. El salmista continúa
diciendo: “Tú sabes lo que anhelo, Señor; escuchas todos mis
suspiros. Mi corazón late salvajemente, mis fuerzas fallan y me
estoy quedando ciego ". 3 Cuando sentimos dolor, no podemos
ver el futuro; solo vemos la igualdad del momento y nos
sentimos atrapados.

Era como si la cabina de mi camión se estuviera

llenando de agua y yo me estuviera ahogando,
jadeando por aire. Me estaba muriendo ... estaba
solo.
 Pero en la oscuridad del dolor también hay silencio, y es en el
silencio donde, si podemos escuchar, escuchamos la voz de Dios. La
oscuridad y la desesperanza ponen fin a nuestra capacidad natural.
Billy Graham dijo una vez: "Cuando llegamos al final de nosotros
mismos, llegamos al principio de Dios". 4 En la oscuridad tratamos
de ver con ojos naturales. Nos agitamos contra el

43

oscuridad y desesperanza. Nos sentimos como si

estuviéramos solos en nuestro dolor, ya sea físico o el dolor
de la vida.

Reflexión adicional
Había un hombre en el Antiguo Testamento, un profeta de
Dios poderoso en hechos, derrotando y enviando falsos
profetas en un encuentro de poder en la cima de una colina.
Aunque había hecho cosas poderosas por Dios, sucumbió a
las mentiras del enemigo y huyó asustado hasta que llegó a
una cueva. La cueva era un lugar de oscuridad donde la
visión natural tenía que cesar. Ahora hubo terremotos,
vientos y fuego.

"Señor, ¿eres tú?" Elijah dijo con su voz alta y temblorosa.

Pero no hubo respuesta. Luego, al terremoto se unió un
fuego del cielo, como el fuego que Elías mismo había
invocado unos días antes. "¿ Eres tú ... Señor?" La voz de
Elijah ahora se convirtió en un grito. "¿Eres tu?" Nada. Se
tapó los oídos con las manos para acallar los sonidos
ensordecedores. Cuando las perturbaciones naturales y
sobrenaturales estaban en su punto máximo, cuando
parecía que no podía hacerse más fuerte, un sonido
comenzó a filtrarse a través de la bravuconería. Era débil,
pero tan definido como el sonido de un solo violín
 tocando una nota alta sostenida por encima del
estruendo de una orquesta completa. El sonido pareció
crecer, no más fuerte, pero más prominente a medida que
continuaba. Con el tiempo, se transformó en un susurro
entrecortado que pareció distraer toda la atención de
Elijah de la tormenta, tanto que le hizo ponerse de pie,
taparse los oídos y entrar en la boca de la cueva para
escucharlo mejor. Era como si la tormenta de su
confusión interior estuviera siendo envuelta, abrazada, en
suavidad. El sonido, mientras ahogaba la tormenta, era
como el sonido que había escuchado a un centenar de
madres pronunciar a sus bebés que lloraban. Fue como si
Elijah

44

Escuché el sonido de la voz de Dios susurrando

suavemente: “Shhhhhh, Elijah. Estara bien. Estoy aquí ...
estoy aquí ... Shhhhhhh ". 5

¡No estas solo!

Considere su propio viaje por la vida y cualquier área que
parezca estar fuera de su control. Pueden estar en una relación,
enfermedad física o finanzas. Quizás estés en una cueva de
miedo o desesperación. Ha llegado al final de su visión natural y
su capacidad de ver su camino a través o manejar sus
circunstancias o dolor, ya sea físico o emocional. Has llegado al
final de ti mismo. Puede que te sientas atrapado como Jim o
como Elías que llegó a una cueva en la montaña de Dios.
Sin embargo, en este lugar de tinieblas, el Señor quiere
revelarse a ti de nuevo. Detengámonos un momento y
respiremos hondo. Tranquiliza tu corazón y tu mente lo mejor
que puedas. Entra en la cueva con Elijah. ¿Hay fuertes vientos o
tierra temblando bajo tus pies que te desalojan de las
seguridades de la vida, las cosas con las que siempre has
contado? Quizás estas sean sus habilidades naturales o talentos
o recursos materiales. ¿Dónde te sientes atrapado como estaba
Jim? Lea el Salmo 38: 6-8 nuevamente. Haga una pausa y
considere cualquier palabra o frase que le llame la atención.
¿Estás atormentado por algún tipo de dolor? ¿Está de duelo por
una pérdida o una relación o quizás por su salud? ¿Has llegado al
final de ti mismo? Tómese un tiempo en la presencia de Dios
para permitir que el tumulto y la confusión se calmen y escuche
el sonido del apacible silencio. Shhhhh. No estas solo.

Notas
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2 Salmo 38: 6-8, NTV

3 Salmo 38: 9-10,

NTV

4 Billy Graham, Hope for a Troubled Heart (Nashville, TN: Thomas Nelson, 1991), Capítulo 11.
5 Thom Gardner, Sanando el corazón herido: superando los obstáculos a la intimidad con Dios
(Shippensburg, PA: Destiny Image, 2005), 96-97.

47

CAPÍTULO TRES
 Preparado entre el cielo y el
infierno
Porque nos rescató del dominio de las tinieblas y
nos trasladó al reino de su Hijo amado, en quien
tenemos redención, el perdón de pecados. 1

Mientras el sol se ponía lentamente en el día y en mi vida, surgió

un impulso, un amanecer involuntario desde lo más profundo de
mí. Por primera vez en mi vida, traté de levantar los brazos hacia
el sol poniente. Una fuerza más grande que yo surgía de un lugar
que nunca reconocí en toda mi vida. Algún instinto espiritual que
despertaba estalló en palabras; no tengo claro si las dije en voz
alta o no. Estas fueron las primeras tres de las seis palabras que
me llevarían a la presencia de Dios. Pero yo

48

Levanté la mano y dije: "Dios, perdóname". Lo último que

recuerdo es hundirme y golpearme la cabeza con el volante.
No sé cuánto tiempo estuve inclinado sobre el volante,
pero me incliné hacia atrás y me senté derecho de nuevo. La
quema se había ido. Podría ver. Me sentí realmente bien. De
hecho, ¡me sentí genial! Pensé: Vaya, ese medicamento
realmente funcionó. Sintiéndome rejuvenecido, salí de la
camioneta y caminé a unos 15 pies de distancia. Sentí como
si me hubieran quitado una especie de prenda pesada y
húmeda, dejándome ligera y viva.
Sintiéndome más vivo de lo que me había sentido durante
mucho tiempo, me volví y miré hacia el camión y vi que la puerta
del camión estaba cerrada, aunque no recordaba haberla
cerrado. Al mirar más de cerca, parecía que había un cuerpo
desplomado sobre el volante. La cabeza estaba vuelta hacia mí y
vi que salía sangre de la boca. En ese momento, me enojé al
pensar que había alguien en mi camioneta. ¿Qué o quién era
este? ¡Estaba lleno de ira y rabia! ¿Quién se atrevería a subir a mi
camión sin mi permiso y tendría el descaro de quedarse
dormido? En mi rabia, me dirigí hacia la camioneta para abrir la
puerta y darle a esta persona una parte de mi mente. Mi
indignación fue abrumadora.

Levanté la mano y dije: "Dios, perdóname".

¿Alguna vez ha tenido un sueño en el que intentó caminar o

correr pero parecía que sus pies no podían o no podían moverse?
En lugar de un paso, solo pude dar unos centímetros con gran
dificultad. Cuanto más luchaba por moverme, más resistencia
sentía. Al mirar hacia abajo a mis pies, parecía como si estuviera
mirando a través de mis zapatos, y podía ver el suelo debajo de
ellos. Supongo que debí haber pensado que era el resultado de la
medicación que había tomado. Intenté avanzar de nuevo, y muy
lentamente me acerqué al camión. No puedo comenzar a
describir mi susto y asombro porque la puerta del camión estaba
cerrada y bloqueada por dentro. Miré un poco más de cerca y me
di cuenta: ¡ Soy yo! yo estaba

49

de alguna manera fuera de mi cuerpo físico. Pero podía ver,

podía sentir, tenía todas mis facultades pero ningún dolor de
ningún tipo. ¿Que era esto? ¿Cómo podría ser esto? Estaba
soñando?
Mientras miraba con asombro, un millón de pensamientos
pasaron por mi mente. Tan pronto como empecé a tratar de
orientarme, tuve la sensación de que empezaba a
levantarme. Ahora, como piloto, soy un buen juez de la
altitud. En segundos, estaba arriba y mirando hacia abajo en
la plataforma del camión. Luego estuve a 1.500 pies de altura
y luego a 2.000 pies y me levanté cada vez más rápido.
Podía mirar hacia abajo y ver mis pies, pero cuando miré
hacia arriba vi el túnel de luz que he aprendido que han
informado muchos que han tenido experiencias
cercanas a la muerte . Apareció un círculo dorado de unos 60
pies de diámetro; el centro giró hacia adentro, revelando una
entrada a una inmensa distancia. Cuando lo miré, se abrió, y
comencé a ganar velocidad y me deslicé hacia el túnel. Fue
como ser un niño recordando la primera vez que bajé por un
tobogán de túnel. Me deslicé por el borde y entré en el túnel.
Pero esto no fue en el patio de una escuela; este era un túnel
de luz. Como piloto, también soy un buen juez de la velocidad
del aire, sin embargo, no había ningún tipo de viento o
sacudidas como volar esos viejos aviones hacia los
incendios forestales en mis días de bombardeo de agua. Me
sentí como si estuviera yendo a un mínimo de mil millas por
hora, pero totalmente en silencio y, nuevamente, sin
sensación de viento. Mi ser estaba inclinado hacia atrás en
un ángulo de aproximadamente 45 grados , viajando con los
pies por delante dentro de este túnel de luz. Dentro del túnel
había lo que solo podría describir como una nube
arremolinada en el interior, pero más sólida que una nube.

Apareció un círculo dorado de unos 60 pies de

diámetro; el centro giró hacia adentro, revelando
una entrada a una inmensa distancia.
Una vez más, tenía plena cognición, siendo plenamente consciente
de dónde estaba y

50
teniendo mi mente y mis sentidos. Mientras avanzaba como un
cohete, sentí una luz enfocada al final del túnel. Había un aire de
expectación entretejido con terror. Aun así, consciente de la
sobredosis de medicación que había tomado, pensé para mis
adentros: Ya lo has hecho. ¿Qué hay al final del túnel? No estaba
acostumbrado a que me llevaran a donde no quería ir. Aquí, en
este viaje inesperado hacia la luz a la que me acercaba a
tremenda velocidad, estaba una vez más fuera de control. Esto
no es como perder un motor sobre el océano; este es el gran
problema, el verdadero negocio. Esta vez no estaba sujetando el
yugo de un avión. La arrogancia del control y el mando en mi vida
fue embriagadora. Muchos pilotos son conocidos por ello. Esta
fue una sensación completamente nueva para mí.

Un aterrizaje suave
De repente, mi viaje relámpago a través del túnel comenzó
a desacelerarse y supe que algo trascendental estaba a
punto de suceder. A medida que me acercaba al final del
túnel, la abertura se ensanchaba y desaceleré desde una
velocidad vertiginosa a un aterrizaje suave y suave de pie de
nuevo. Estaba parado ante la luz al final (o salida) del túnel.
Estaba cubierto de niebla, pero obviamente era un portal y
sabía que tenía que atravesarlo. Ante mí había un paisaje
verde brillante con luz. Como haría cualquiera al entrar en un
lugar desconocido, levanté con cuidado el pie y miré hacia
abajo para ver que estaba de pie sobre la hierba verde más
increíblemente hermosa y perfectamente cuidada que nadie
podría imaginar. (Tal vez eso es lo que se quiere decir cuando
la gente dice: "La hierba siempre es más verde en el otro
lado".) Para mi asombro, cuando puse mi pie en la hierba, la
luz se extendió por debajo de mi pie. La luz estaba por todas
partes.

Ahora la atmósfera lúgubre reverberó con el

sonido chirriante de las puertas del infierno que
 me atravesaron y me llenaron de un terror que
me estremeció el alma .
51

Derecha e izquierda, cielo o abismo

Al dar mi segundo paso sobre la hierba, el túnel desapareció
detrás de mí. Ante mí, parecía como si alguien hubiera dibujado
una línea, una línea media que separaba la derecha de la
izquierda. A la derecha, una luz brillante pero suave se filtra a
través de una niebla sutil. Pero a la izquierda, el suelo se
inclinaba hacia abajo y se alejaba bruscamente hacia una grieta
de profunda oscuridad. Las paredes de esta grieta eran de una
textura negra, reluciente, similar al carbón . Ahora la atmósfera
lúgubre reverberó con el sonido chirriante de las puertas del
infierno que me atravesaron y me llenaron de un terror que me
estremeció el alma .
Mientras miraba hacia la izquierda y hacia abajo, la empinada
pendiente desapareció en una masa de nubes negras hirvientes y
turbulentas. Era como mirar en una secadora llena de ropa dando
vueltas una y otra vez. Estaba oscuro y rodaba rápidamente cuesta
arriba como si viniera a adelantarme. De esta oscuridad turbulenta
surgió una enfermedad y un olor espantoso , un hedor a muerte,
desesperanza y cosas muertas hace mucho tiempo. La oscuridad
hervía hacia mí cada vez más rápido. Esta nube negra, masiva
y que cambia de forma a mi izquierda estaba llena de una presencia
oscura y húmeda que impregnaba una profunda oscuridad. La
oscuridad contenía un frío húmedo desprovisto de vida y calidez. Me
pareció como si estuviera parado en la cúspide de la boca podrida
del Infierno y el mal. De esta oscuridad salió una criatura de
descripción espantosa, y supe que venía por mí. Sus ojos se
enfocaron en mí y brillaron como carbones encendidos. Abrió su
horrible boca y quedé hipnotizado por el horror de la saliva que
goteaba de sus colmillos. Tenía hambre de mi alma.

Mientras miraba a mi derecha con desesperación, el paisaje

no podría haber sido más diferente. Todos, en un momento u
otro, nos hemos levantado temprano en una mañana de verano
para encontrarnos con una hermosa niebla que se cierne sobre
los árboles y los campos. Los pilotos lo llamamos "efecto suelo".
Gotas de rocío cubren la hierba y hay la promesa de otro
hermoso día. Si bien es posible que no veamos claramente el sol,
sabemos que está allí iluminando y llenando

52

la brillante niebla matutina. Mientras estaba en el meridiano

entre el cielo y el infierno, instintivamente me volví hacia la
derecha y hacia la luz.

Susurros de la oscuridad
Cuando me volví hacia la luz, pude escuchar el murmullo de
voces oscuras que salían de esta niebla húmeda. Al principio, las
voces eran apagadas y poco claras, como si estuviera escuchando
palabras pronunciadas en la habitación contigua a través de una
pared delgada. No pude distinguir lo que estaban diciendo, pero
había múltiples voces irreconocibles , susurros de la oscuridad. Me
volví y me dirigí hacia la derecha y el paisaje luminiscente mientras
las voces siniestras se volvían más claras e insistentes. Las voces
me hablaban con una cualidad sibilante directamente como si una
serpiente me estuviera hablando, invitándome a entrar al pozo.
Comencé a percibir las voces que decían: “Jim. Jim. ¡Jim! ¡Jim!
Rápido, ven por aquí. Por aquí Jim. Ven con nosotros, ven con
nosotros ".
 Sentí el raspado agudo de una garra o garra
bajando por la parte posterior de mi hombro.
Ahora realmente comencé a temblar. Intenté alejarme del
pozo y acercarme a la luz. Pero cuanto más me alejaba del
pozo y las voces, más fuerte e insistente era su tono. A la
temida invitación se le sumó un ataque físico. Sentí el
raspado agudo de una garra o garra bajando por la parte
posterior de mi hombro. Mientras tanto, las voces se hicieron
más fuertes, la invitación burlona más desesperada, “Jim, ven
con nosotros. ¡Estamos aquí por tí! ¡Aquí es donde usted
pertenece!" Las voces parecían estar llenas de una extraña y
regocijada emoción, anticipando algún evento espantoso.
Cuanto más me volvía hacia la luz, más la oscuridad intentaba
arrastrarme hacia su hedor nauseabundo. Con la garra afilada en mi
espalda y el chillido de voces demoníacas a mi alrededor, sentí como
si el mal hubiera

53

yo. Cuando la libertad de mi alma estaba siendo atacada, estas

palabras surgieron del mismo lugar profundo que cuando dije, “
Dios me perdone ” en mi camioneta. Grité: "¡ Dios me ayude !" Seis
palabras llenas de poder.
En el instante en que pronuncié estas palabras, la luz de mi
lado derecho se volvió más brillante, la oscuridad se retiró
inmediatamente a la grieta a unos treinta metros de distancia
y las voces se detuvieron. El tono de mis palabras era
suplicante, suplicante y proveniente de un lugar de total
impotencia. No había nada en mí que pudiera haber evadido
la espantosa fatalidad de ese oscuro pozo. Yo pertenecía allí.
Mi vida se había centrado en mí. Ahora estaba suplicando a
Dios por ayuda. Suplicar es una palabra que ya no usamos
mucho. Fue una petición impotente y miserable. "¡Dios
ayúdame!" Me quedé sin opciones. Para mi asombro, y en
medio de mi desesperación, Dios respondió a mi desesperada
súplica.

Puntos de luz
En el instante en que clamé a Dios, tres puntos de luz aparecieron
detrás de esa neblina brillante a mi derecha como si mi grito hubiera
señalado su surgimiento, como si estuvieran esperando y
vigilándome. Aparecieron como el surgimiento de la estrella de la
mañana que aparece poco antes del amanecer, que se ha utilizado
como punto de partida para la navegación desde la antigüedad. Al
principio, estos puntos de luz eran distantes y sin forma, moviéndose
rápidamente hacia mí desde tres posiciones diferentes y
convergiendo hacia mí. Había una luz probablemente a 40 grados,
otra a unos 180 grados y otra a unos 270 grados. Cuanto más rápido
se acercaban a mí, más brillantes se volvían. Cuando los puntos de
luz se acercaron a mi posición, su luz se intensificó e inundó más
allá de mí y sacó a la criatura de la oscuridad. Cuando la luz brillante
golpeó a la criatura y la oscuridad, chilló y rugió de dolor. La criatura
y el hedor que la impregnaba retrocedieron violentamente y se
apresuraron a bajar por la grieta, desapareciendo en la oscuridad
como una rata corriendo.

54

por un hoyo! El mal no podía soportar la luz que se acercaba.

¡La oscuridad y el mal no pueden existir a la luz de Dios!

Cuando la libertad de mi alma estaba siendo

atacada, estas palabras surgieron del mismo lugar
profundo que cuando dije, “ Dios me perdone ” en
 mi camioneta. Grité: "¡ Dios me ayude !" Seis
palabras llenas de poder.
Había mirado al abismo, a la mismísima boca del infierno,
casi atrapado en su perniciosa persecución de mi alma.
Ahora estas tres luces estaban aumentando de tamaño,
viniendo hacia mí a una velocidad tremenda y tomando una
forma asombrosa. Alguien me había escuchado y tuve la
sensación de que se trataba de una partida de búsqueda y
rescate que venía a buscarme. A medida que las tres luces se
acercaron, comenzaron a adquirir una forma brillante y
gloriosa. El terror y la negrura del pozo estaban siendo
reemplazados por asombro y emoción. Mi corazón saltó de
alegría cuando tres luces se convirtieron en tres formas
distintas.

1 Colosenses 1: 13-14

55
 Tomar el viaje
¿Alguna vez te han puesto en una posición en la que te
sentiste impotente, arrastrado o abrumado por un poder
sobre el que no podías hacer nada? Dios, la fuente de toda
luz y vida, nos ve en nuestras batallas con la oscuridad del
pecado y el esfuerzo propio. A veces estamos sobre nuestras
cabezas y necesitamos que un grupo de rescate venga a
buscarnos.
De todos los atributos de Dios, debemos recordar que Él es
heroico, que viene a nuestro rescate. Estamos encerrados en la
torre del maligno, y Jesús llega en un semental blanco para
salvarnos. Desde los primeros capítulos de la historia humana en
la Biblia, Dios es un campeón salvador. Rescató a toda una
nación de las garras del enemigo al abrir el Mar Rojo ante sus
ojos. La gente escapó de una muerte segura o del cautiverio y el
enemigo fue destruido, con carros y todo. Cuando estábamos
atrapados en el pecado y el esfuerzo propio, Jesucristo vino
cabalgando sobre la colina en un caballo blanco con Su
estandarte: el amor desplegado en la brisa. Él es un héroe.

¡La oscuridad y el mal no pueden existir a la luz de

Dios!

Hay preciosas promesas para aquellos cuyos pies están

atrapados en la oscuridad, cuando nos encontramos al borde
de la oscuridad. Tiene poco que ver con nosotros y más con
la realidad de la salvación heroica en Cristo, nuestro Héroe
Mesías. Escuche las palabras del apóstol Pablo cuando
describió nuestro rescate:

Porque nos rescató del dominio de las tinieblas y

nos trasladó al reino de su Hijo amado, en quien
tenemos redención, el perdón de pecados. 2
 56

Piense en las luchas que tiene. ¿Dónde llama la oscuridad

tu nombre? ¿Dónde te sientes abrumado? ¿Qué escuchas las
palabras de las Escrituras que te invitan a hacer? Tómate
unos momentos para meditar en la invitación de Dios. A
medida que la luz de Dios se mueve hacia ti, deja que te
abrume mientras ves cómo la oscuridad regresa al abismo.

Para una mayor reflexión

Para que llegue el grupo de rescate, debemos reconocer
nuestra necesidad de ser rescatados. Nosotros, de manera
similar a Jim, podemos estar solos al borde de la oscuridad.
Tenga en cuenta que Dios siempre da el primer paso hacia
nosotros. Él nos ama y nos rescata de su propia naturaleza, que
es el amor. Jesús es el héroe de la historia que nos vio perdidos
al borde del pozo. Vio las garras del infierno mientras intentaban
arrastrarnos hacia la oscuridad. Esperó a que llamáramos para
pedir ayuda, sabiendo que no podríamos hacerlo solos. Cristo, el
Héroe, no fue motivado para rescatarnos por nuestra elocuencia
de habla o buenas acciones acumuladas, sino únicamente sobre
la base de Su propia naturaleza, que es el amor. Lea y reflexione
sobre estas palabras.

Dios da el primer paso hacia nosotros con

misericordia. Es una especie de amor romántico, de
verdad. Él conoce las torres oscuras del pecado y la
separación en las que estamos encerrados y se
propone rescatarnos. Está dispuesto a ensuciarse las
manos, como lo hizo al principio cuando recogió ese
polvo y sopló en él. Dios vino con misericordia a
rescatarnos de nosotros mismos. El mismo amor
entrecortado que nos creó es precisamente lo que nos
permite estar con Él. 3
 En pocas palabras, Cristo el héroe nos rescató porque
necesitábamos ser rescatados. El único requisito es que nos demos
cuenta de esa necesidad y le llamemos como lo hizo Jim: "Dios
perdóname , Dios ayúdame". Al llamar a Jesús, nuestro Salvador, Él
nos llama no solo para rescatarnos de la destrucción eterna.

57

sino a una nueva vida llena de poder y asombro. Él nos ha

llamado a salir de las tinieblas a la luz de Su presencia en el
ahora de Dios. Y cuando Él nos lleva a la luz de Su presencia,
vivimos en esa luz aquí y ahora de este lado del Cielo.

Pero ustedes son una raza escogida, un sacerdocio

real, una nación santa, un pueblo que pertenece a
Dios, para que puedan proclamar las excelencias de
Aquel que los llamó de las tinieblas a Su luz
maravillosa. 4

Oración
Mi bondadoso Héroe, Señor Jesucristo, te agradezco por
verme al borde de la oscuridad. Reconozco que no puedo
rescatarme. Te llamo ahora y te pido que seas mi héroe. En
palabras de Jim, "Dios me ayude , Dios me perdone". Por Tu
misericordia, llévame a la luz de Tu presencia para vivir allí
siempre momento a momento. Gracias por ser mi héroe.
Amén.

Notas
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2 Colosenses 1: 13-14

3 Thom Gardner, Relentless Love: Unfolding God Passion, Presence, and Glory
(Ship-pensburg, PA: Destiny Image, 2012), 50.
4 1 Pedro 2: 9
 60

CAPÍTULO CUATRO

El rostro de los ángeles

¿Qué personas deben pensar en ellas, simples
mortales que deben cuidar de ellas? Sin embargo, los
hiciste solo un poco más bajos que Dios y los
coronaste de gloria y honor. Les diste a cargo de todo
lo que hiciste, poniendo todas las cosas bajo su
autoridad. 1

Mientras observaba las tres luces converger en mi posición a una

velocidad tremenda, se me ocurrió una nueva preocupación basada
en mis instintos de pilotaje adquiridos durante mucho tiempo .
Comencé a preocuparme de que pudieran necesitar poner un alerón
para reducir la velocidad y lograr un aterrizaje seguro y adecuado.
Solo un hábito, supongo. Cuando las tres luces comenzaron a tomar
forma, me di cuenta de que eran más que puntos

61

de luz saliendo de la distancia. Estos no eran una especie de

ovnis. ¡Eran ángeles! Observé con asombro cómo llegaron a
un aterrizaje suave y perfecto justo en frente de mí. Frente a
mí había tres criaturas indescriptiblemente hermosas. ¡Si tan
solo pudiera pintar lo que vio el ojo de mi mente! Las
criaturas mostraban colores brillantes más allá de la paleta
de cualquier artista para reproducir.

En ese momento, supe que Dios había

escuchado mi súplica: "Dios, ayúdame". Caí de
rodillas abrumado por el asombro y la gratitud
sobre la suave hierba verde del cielo.
¿Cómo puedo explicar estos seres indescriptibles? Las
palabras terrenales me fallan. Los tres ángeles se deslizaron
hacia mí sin hacer ningún sonido, aunque su movimiento creó
una estela ondulante iluminada con una luz pura. Los ángeles no
eran todos idénticos; cada uno era ligeramente diferente al
siguiente. ¡El primer ángel más cercano a mí medía unos tres
metros de altura! Me cautivó la belleza de su rostro y su porte
real. Sus rasgos eran perfectos y su rostro brillaba con el amor
de Dios. El segundo ángel, de unos 12 pies de altura, hizo que
abriera aún más los ojos con asombro. Él, como el primero,
estaba vestido con una sencilla prenda tejida más ligera que una
tela. Ahora los otros dos se hicieron a un lado y el tercer y más
alto ángel se paró frente a mí, de unos 15 pies de altura. Estaba
vestido de manera algo diferente a los otros dos que lo
precedieron. (Tenga en cuenta que digo "él", pero su género no
era distinto ni importante). Este claramente estaba al mando y
tenía una autoridad mayor. Estos tres eran ángeles magníficos,
representantes gloriosos de la luz y el amor del trono del cielo.

En ese momento, supe que Dios había escuchado mi súplica:

"Dios, ayúdame". Caí de rodillas abrumado por el asombro y la
gratitud sobre la suave hierba verde del cielo. La luz celestial
ondeó a lo largo del suelo bajo mis rodillas dobladas, fluyendo
hacia y mezclándose con la luz brillante de los tres ángeles ante
mí. Si bien gran parte de su apariencia era similar a

62

lo que reconocemos sobre los ángeles, también hubo

muchas facetas que trataré de describir.
Imagina un rostro que no sea ni masculino ni femenino,
que lleve lo mejor de ambos sexos. Rostros increíblemente
regios y majestuosos, con cabello muy claro y brillante y una
luminiscencia de santidad que brilla desde adentro: la luz
misma de Dios. Estaban vestidos con las túnicas blancas
más elegantes. Utilizo el color blanco para describir sus
rostros, cabello y túnicas, pero era más que un color; fue una
plenitud de gloria que no tiene nada que ver con el color. El
color es un término inadecuado para describir la apariencia
de estos seres envueltos en un brillo radiante.
Ahora los tres ángeles se movieron y comenzaron a deslizarse
hacia mí. Me puse de pie e instintivamente extendí mi mano como
para tocar la realidad de su presencia. Cuando extendí la mano, el
ángel más pequeño se acercó a mí. (Pequeño es un término relativo;
medía diez pies de alto.) Mientras me maravillaba de este brillante y
brillante estar tan cerca de mí, se acercó a mí colocando su mano en
mi brazo como para tranquilizarme y conectarme. Su mano
descansó suave pero cálidamente sobre mi antebrazo por un
momento. Y luego habló sin palabras a mi corazón, diciendo: "No
temas, James, somos tus amigos constantes". Este no fue un
encuentro casual con tres ángeles cuyo turno llegó en la rotación de
ángeles ese día. ¡Ahora entendí que me habían sido asignados desde
mi nacimiento! El toque de la mano del ángel en mi brazo envió una
cálida sensación de seguridad y consuelo a través de mí: cuerpo,
alma y espíritu. Cuando su brazo rodeó mis hombros, sentí como si
50 abuelas me abrazaran simultáneamente con un toque de tapioca.
(De hecho, olí tapioca). Me recordó el consuelo que sentí cuando un
niño pequeño entraba por la puerta de la casa de mis abuelos en un
frío día de invierno para ser recibido por mi madre y mi abuela con
ese cálido y reconfortante olor a pudín de tapioca. . Fue un
pensamiento tan cálido y reconfortante que Dios, en Su infinito
cuidado y compasión, supo que mi primer vistazo y experiencia del
Cielo sería tan abrumador que Él puso ante mí cosas que amaba
como un

63

niño para calmar mi corazón. El cielo comenzaba a sentirme

más familiar, como un hogar para mí.
Los ángeles que experimenté no tenían alas con plumas
de la forma en que los artistas pueden haberlas retratado en
una pintura. Más bien, vi que tenían dos agujas de luz dorada
que subían desde la parte posterior de sus hombros que
irradiaban una luz, haciendo brillar sus cabezas. Esto creó un
efecto sobre sus cabezas que se asemeja a un halo. Lo que
vemos como un halo es el resplandor de las agujas de sus
alas de luz dorada creando un arco de oro sobre sus cuerpos.
Quizás el aspecto más asombroso de la apariencia de
estos tres ángeles fueron sus ojos. Eran del violeta más
profundo, una mezcla de colores describibles e
indescriptibles, colores tanto del cielo como de la tierra.
Estos ojos transmitían una calma real que era tan profunda
en el amor y la compasión como en el color, moviéndome a
sentir como si yo fuera la única persona que había nacido. ¡Y
esos ojos maravillosos nunca parpadearon!

Cuando su brazo rodeó mis hombros, sentí

como si 50 abuelas me abrazaran
simultáneamente con un toque de tapioca. (De
hecho, olí tapioca).

El ángel guerrero
Había, entre los tres seres impresionantes, uno que
literalmente estaba cabeza y hombros por encima de los otros
dos. Como mencioné anteriormente, medía unos 15 pies de
altura con prendas que eran ligeramente diferentes. No solo era
más grande, sino que claramente tenía una presencia dominante
, más seriedad. Sus ropas eran más distintas y regias, y cuando
se acercó a mí, la luz de su túnica ondeó como la luz de la luna
en el agua. Los otros dos ángeles se inclinaron hacia él,
inclinándose levemente y apartándose del camino mientras se
acercaba. Su vestimenta era sutilmente diferente en que su

64

La prenda era más brillante que la de los otros dos. El

dobladillo de las mangas de su prenda también era dorado
con hilos de púrpura que lo atravesaban bordados con
intrincados y hermosos detalles.
Sobre su manto y sobre su hombro había una faja de oro y un
cinturón del mismo color alrededor de la mitad del manto. Hubo
algunos detalles notables que lo distinguieron como el
responsable. Este llevaba una vaina al costado. No puedo decir
que vi una espada de la manera que podríamos esperar en la
vaina, pero había lo que parecía ser un instrumento o arma
compuesta de la luz más pura y brillante. (Quizás George Lucas,
creador de Star Wars, tuvo un encuentro angelical que inspiró el
sable de luz). La forma del arma con vaina estaba más allá de mi
experiencia y habilidad para describir. Lo mejor que podía ofrecer
era que era una espada de luz. Tenía un medallón alrededor del
cuello; más tarde supe que se llamaba gorjal y tenía la forma de
una luna creciente en posición horizontal. Esta era una pieza de
armadura de batalla como la que usaban los guerreros en la
antigüedad para proteger el área de la garganta. Esta pieza
estaba grabada con letras de algún tipo de otro idioma que no
pude descifrar, ¡pero las marcas parecían brillar como si
estuvieran vivas! Este ángel mandatario había venido preparado
para luchar contra la oscuridad que me había amenazado, y
había ganado.

Quizás el aspecto más asombroso de la

apariencia de estos tres ángeles fueron sus ojos.
Eran del violeta más profundo, una mezcla de
colores describibles e indescriptibles, colores
tanto del cielo como de la tierra.
El ángel guerrero se acercó a mí y me sentí empequeñecido
por su estatura física mientras miraba hacia mí. De repente, para
mi gran asombro, el ángel cedido por los demás se inclinó ante
mí, ¡ante mí! ¿Cómo podría ser esto? Me considero el más bajo
de los bajos, un simple hombre humilde. No era un santo hombre
de Dios que había pasado un minuto

sesenta y cinco

perseguirlo o incluso darle la hora del día. No puedo retratar

con precisión mis sentimientos en este momento suspendido
en la eternidad. ¡Este asombroso ser lleno de la luz y las
perfecciones de Dios se inclinó ante mí! ¿Quién soy?
Me sentí bastante pequeño en comparación con la inmensa
estatura del ángel guerrero. Luego empezó a hablar, no como tú y
yo podríamos hablar. Su boca no se movió, ni hubo una voz
audible. Más bien, hubo una comunicación o transferencia de
pensamiento de espíritu a espíritu. Sabía lo que estaba diciendo
cuando sus pensamientos entraron en mi propia mente. La
comunicación estaba en un nivel más profundo de lo que podían
expresar las palabras audibles y terrenales. Su comunicación
superó el mero lenguaje como si viniera de alguien que me
conocía muy bien. No era diferente a la conexión que
experimentan algunas parejas casadas después de años de estar
juntas que se conocen tan bien que uno escucha el corazón del
otro e incluso puede terminar sus frases. (Algunos pueden
encontrar eso irritante). Sin embargo, el tono espiritual de esta
voz innata era rítmico y tranquilizador. Sus pensamientos
resonaron en mí. Su comunicación parecía formada de forma
sencilla, pero con una especie de decoro o gentileza victoriana.

Con mi corazón asentado en la presencia de este

encuentro celestial, surgió una pregunta de mi propio
corazón. Le pregunté al ángel: “¿Cómo pudiste inclinarte ante
mí? Tú que vives aquí en este lugar, en la presencia de Dios ”.

No puedo retratar con precisión mis sentimientos

en este momento suspendido en la eternidad.
¡Este asombroso ser lleno de la luz y las
perfecciones de Dios se inclinó ante mí! ¿Quién
soy?
Lo que escuché a continuación me humilló más allá de toda
descripción. “James” , dijo, “el hombre fue creado por el mismo aliento de
Dios. La luz de la esencia de Dios está en ti. Esa luz se empaña con el
pecado y se aleja de Dios. Pero la luz todavía está en ti y en toda la
humanidad. Cuando nos inclinamos ante ti, estamos honrando la luz
 66

de Dios en ti ". Comencé a comprender que estos seres

poderosos y majestuosos estaban asombrados por
nosotros, por el hombre mortal. ¡La misma luz que iluminaba
el jardín del cielo y que llenaba a los ángeles estaba en mí! Lo
que movió al ángel a inclinarse ante mí no fue nada sobre mí;
era la luz de Dios. Las huestes del cielo nos asombran.
Somos preciosos y únicos más allá de nuestra comprensión
mortal.
Todo lo que me rodeaba en el cielo estaba lleno de luz,
desde los ángeles hasta las flores e incluso la hierba sobre la
que me encontraba. La pregunta "¿Quién soy yo?" estaba
siendo respondido de la manera más inesperada. Soy
simplemente alguien a quien Dios escuchó clamar por
perdón y ayuda. Soy uno para quien Dios desterró las
tinieblas de regreso al abismo del infierno. Todavía no había
visto una pequeña fracción de las maravillas que me
mostrarían, cada una más asombrosa que la anterior.

1 Salmo 8: 4-6
 67

Tomar el viaje
Es difícil para los humanos comprender verdaderamente
su posición ante Dios. A menudo olvidamos que fuimos
creados por y para el amor de Dios. Tal vez te hayas hecho la
misma pregunta que Jim se hizo a sí mismo: "¿Quién soy yo?"
O tal vez algo como "¿Qué ve Dios en mí?" La respuesta a esa
pregunta es tan simple como transformadora. ¡Lo que Dios ve
en ti es Él mismo! Somos mucho más que la suma de las
cosas físicas de las que estamos hechos. Con las alegrías y
los desafíos de la vida diaria, a veces perdemos de vista
quiénes somos o quiénes Dios nos ha creado para ser.
Escuche las palabras del salmista:

¿Qué personas deben pensar en ellas, simples

mortales que deben cuidar de ellas? Sin embargo,
los hiciste solo un poco más bajos que Dios y los
coronaste de gloria y honor. Les diste a cargo de
todo lo que hiciste, poniendo todas las cosas bajo su
autoridad. 2

La pregunta "¿Quién soy yo?" estaba siendo

respondido de la manera más inesperada. Soy
simplemente alguien a quien Dios escuchó
clamar por perdón y ayuda.
Parece que el salmista hizo el mismo tipo de pregunta. “¿Qué son
las personas? Como dijo Jim en su historia, los ángeles nos
asombran de alguna manera. Saben algo sobre nosotros que
necesitamos saber; llevamos el aliento mismo de Dios! Ese aliento
se nos quedó sin aliento cuando el hombre cedió a la tentación de la
serpiente en el Edén. Hagamos esto personal: fuiste creado por el
aliento de Dios. Fuiste creado para llevar Su luz como

68

brillante como los ángeles que Jim encontró. Fuiste creado

con libre albedrío, pudiendo elegir tu propio camino. Mire las
palabras del salmista con un poco más de atención.
Fuiste coronado con la gloria y el honor de Dios. Tienes un
valor eterno. Fuiste creado para gobernar las obras de la creación
con tremenda autoridad. Fue por usted que el Padre envió a su
Hijo, Jesús, para rescatarlo de la oscuridad si tan solo lo llamaba.
Tú eres el que está sentado con Cristo como escribió el apóstol
Pablo:

Pero Dios, siendo rico en misericordia, por su gran amor

con el que nos amó, aun cuando estábamos muertos en
nuestras transgresiones, nos dio vida juntamente con
Cristo (por gracia has sido salvo), y nos resucitó con Él, y
nos sentó con él en los lugares celestiales en Cristo Jesús,
para que en los siglos venideros pudiera mostrar las
riquezas incomparables de su gracia en su bondad para
con nosotros en Cristo Jesús. 3

Cuando no conocemos o experimentamos nuestra

verdadera naturaleza e identidad en Dios, podemos
desanimarnos y tratar de llenar nuestro vacío con cosas;
tratar de crear una identidad para nosotros mismos
separados de Dios. Fuiste creado para llevar la luz de Dios a
través de Cristo. Fuiste creado para vivir y reinar con Cristo.

Reflexión adicional
 Tómese unos minutos y lea el siguiente párrafo sobre su
verdadera naturaleza e identidad.
Desde el momento en que respiramos por primera vez, el
Eterno no pudo apartar los ojos de nosotros. ¡Le dejamos
sin aliento! Amados, Dios es un Dios personal que nos
creó en Su propio aliento eterno para la comunión más
íntima con Él. Imagina

69

esto: la primera conciencia consciente de Adán fue

que el Creador lo besó vivo. Somos la
interpretación que el Artista hace de sí mismo: sus
huellas aún estaban frescas en nosotros. Conocía
cada contorno de nuestra forma y cada
pensamiento en nuestros corazones. ¿Pueden
imaginarse conmigo que cuando Adán se encontró
con Dios en el frescor del día (ver Génesis 3: 8), el
mismo aliento de Dios que lo formó brotó en él y
fue exhalado hacia Él en alabanza;
"Hhhhhhaallelujah". 4

Tómese unos minutos y reflexione sobre este párrafo.

Cálmate lo mejor que puedas, desechando las preocupaciones y
el diálogo interno del día. A medida que se acomoda, observe la
respiración que entra y sale de sus pulmones. ¿Puedes
imaginarte que este es el mismo aliento de Dios que estás
inhalando y exhalando? Permita que la respiración penetre
profundamente en su interior para encontrar cualquier lugar de
cansancio o duda. Eres la interpretación del artista de sí mismo.
Llevas Su luz y Su amor. Los ángeles se inclinan ante ti. Se te han
asignado ángeles desde que naciste. Llevas un eterno peso de
gloria.
 Oración
Padre celestial, te pido perdón por olvidar tu aliento dentro
de mí. Te pido que me ayudes a vivir con la conciencia
consciente de Tu respiración. Te doy las palabras críticas o
de juicio que he dicho sobre mí o sobre otras personas. Te
doy gracias porque me has coronado de gloria. Te doy
gracias porque me hiciste reinar con tu Hijo Jesús. Te doy
gracias porque estoy sentado junto a Jesús y porque la
oscuridad se ha puesto debajo de mis pies. Ahora te doy
honor y alabanza devolviéndote tu aliento, ¡aleluya! Amén.

Notas

70

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2 Salmo 8: 4-6,

NTV 3 Efesios

2: 4-7

4 Gardner, Relentless Love, pág.48.

72
 73

CAPITULO CINCO

Caminando con Ángeles

Y la ciudad no necesita sol ni luna, para la gloria de Dios
ilumina la ciudad, y el Cordero es su luz. Las naciones
caminarán a su luz, y los reyes del mundo entrarán en la
ciudad en toda su gloria. Sus puertas nunca se cerrarán al
final del día porque allí no hay noche. Y todas las naciones
traerán su gloria y honor a la ciudad. No se permitirá que entre
ningún mal, ni nadie que practique la idolatría vergonzosa y la
deshonestidad, sino solo aquellos cuyos nombres están
escritos en el Libro de la Vida del Cordero. 1

¿Cómo es el cielo? El cielo es como la tierra, pero diez mil veces

diez mil más hermoso y sereno. Las vistas más grandiosas y
 74

Los paisajes de la tierra son sólo vagas pistas de la belleza que

Dios ha preparado para nosotros en el Paraíso. El aspecto más
inesperado del paisaje celestial fue que los colores tenían sonido
y los sonidos tenían color, creando un espectro sensorial que
abrumaba mi ser con una sensación de asombro.
De nuevo, el ángel al mando se inclinó ante mí en un gesto de
invitación, diciendo: "¿Caminarías con nosotros?" Asentí con la
cabeza en señal de aceptación. Entonces el ángel se volvió
graciosamente y señaló con el brazo la dirección en la que quería
que fuera. Ahora, con un ángel a cada lado de mí y el ángel alto
directamente detrás, comenzaron a llevarme a un paisaje de una
belleza inimaginable. Me estaba olvidando del túnel y del foso
que había detrás de mí y estaba totalmente presente para
quienes acudían a mi camino.

Visión IMAX
El cielo no es un globo o una esfera, por lo que no hay un
horizonte que desaparece en el paisaje. El cielo es un
panorama continuo que se expande hasta el infinito en todas
direcciones. Sin embargo, pude ver las características justo
frente a mí con gran claridad. Era como si el concepto de
distancia fuera expulsado del Cielo y la eternidad. El cielo
existe en una dimensión espiritual más allá de nuestra
experiencia terrestre. Cosas como colores, tiempo, tamaño
relativo y distancias son términos finitos que no son
realmente útiles para describir la naturaleza infinita del Cielo.
Mientras caminaba por el sendero con los ángeles, hubo un
gran aumento de mi capacidad para ver no solo lo que estaba
frente a mí, sino también en todas las direcciones a la vez. Había
visión periférica completa en todos los lados, atrás y antes sin
girar la cabeza en ninguna dirección. Fue más una conciencia
panorámica. No puedo explicar el nivel de claridad y conciencia
en el cielo. Vemos todo aquí en esta vida principalmente en una
perspectiva superficial y bidimensional . La visión en el cielo me
permitió ver con mayor profundidad. Había 360 grados de visión
que solo puedo comparar con estar en un cine IMAX sin
limitación en

75

profundidad o distancia. Era como si pudiera ver la única flor

de una flor en la ladera de una montaña distante, y al mismo
tiempo ver esas imágenes directamente frente a mí. Mis ojos
se convirtieron en microscopio y teleobjetivo
simultáneamente.

El paisaje del cielo

El paisaje del cielo estaba salpicado de características
reconocibles como la apariencia de montañas, árboles, flora
de todo tipo, arroyos y arroyos llenos de agua azul brillante y
cristalina. Todas las características del paisaje circundante
se llenaron de una deslumbrante variedad de colores y
sonidos más allá de la paleta de cualquier artista o el
manuscrito de un compositor, todo dispuesto en un banquete
multisensorial bajo un cielo azul brillante pero sin sol. En mi
opinión, el azul era un azul más profundo de lo que estaba
acostumbrado a ver en el cielo. No
más oscuro, más profundo.

Los pétalos de cada flor eran translúcidos, como

vidrieras. Las flores eran nacaradas. El color de
cada flor se fusionó con el color de la siguiente,
una debajo de la otra.
 Mientras caminábamos, apareció ante mí este sencillo sendero
del bosque rodeado de una exuberante hierba verde. Puede que
simple no sea la mejor descripción, ya que de hecho fue un camino
de colores abigarrados e impresionantes. Había capullos de flores
de una variedad vertiginosa que bordeaban el camino a ambos
lados. Árboles adornados con hojas iridiscentes colgaban sobre el
paisaje circundante por el que estábamos caminando. Estaba en una
sobrecarga sensorial y tuve que hacer una pausa para contemplar el
paisaje con los ángeles a cada lado de mí. Se detuvieron para
permitirme absorber lo que estaba viendo. Mientras miraba las flores
a lo largo del camino, al principio estaba confundido. Me pareció que
las flores eran todas una masa de color. Pero descubrí, al inclinarme,
que los pétalos de cada flor eran traslúcidos, como vidrieras. Las
flores eran nacaradas. El color de cada flor se fusionó con el color de

76

el siguiente, uno debajo del otro. Habría una flor roja y debajo de
ella había una flor amarilla y luego una flor azul y luego la verde
con el tallo. La apariencia de las flores me recordó a vidrieras
multifacéticas de todos los colores mezclados entre sí,
proporcionando matices de variedades conocidas pero
indescriptibles de colores y colores que se fusionan con otros
colores. Me detuve para estudiarlos un poco más de cerca. Uno
de los ángeles vio que estaba obviamente paralizado y abrumado
por la maravilla de las flores y sonrió con deleite. A medida que
avanzábamos lentamente, los ángeles señalaron varios aspectos
de esta flora indescriptible.
Las flores no solo tenían color; también tenían sonido.
Acompañando la belleza visual hubo un concierto de música
improvisada creada por los pétalos de las flores, movidas por
la constante y suave brisa que llenaba el paisaje. Tenía la
sensación de que las flores cantaban una melodía original e
infinitamente fluida sin cadencia ni conclusión. Le dije a The
Guardian: "¿Eso es música?"

El alto ángel guerrero describió la alegría como

vivir al borde de una gran risa motivada por una
conciencia constante de la presencia de Dios.
Dijo: “Sí, James, las flores y todo el cielo están tan felices de
que estés aquí. Están llenos de alegría. Te están cantando ". ¡A mi!
El alto ángel guerrero describió la alegría como vivir al borde de
una gran risa motivada por una conciencia constante de la
presencia de Dios. No puedo evitar sonreír pensando en esa
definición. Experimento ese sentimiento incluso hoy al recordar
mi experiencia en el Cielo.
También había arroyos o pequeños arroyos de agua de unos
tres a cuatro pies de ancho. No eran profundos. El agua era de un
azul brillante. Los guijarros que yacían en el lecho de los arroyos
eran de color dorado. El agua se iluminó desde el lecho del arroyo
con una luz que ascendía hacia arriba mientras riachuelos de luz
bailaban sobre la superficie del arroyo. El agua hizo

77

sonido también. Estos arroyos componían también una oferta

musical espontánea y tintineante que acompañaba nuestros
pasos por el paisaje. El ángel describió estos arroyos como el
"agua viva de vida". Me dijeron que estos arroyos
desembocaban en un río central más grande que fluía debajo
de la sexta puerta del gozo hacia la ciudad del cielo. Cada
flujo estaba conectado con todos los demás, tal como
nosotros lo estamos entre nosotros. Las flores, la brisa e
incluso los arroyos cantaron juntos creando un concierto
sinfónico que resonó en todo el paisaje del cielo, fluyendo y
cayendo en cascada hacia el trono de Dios.
 Mientras continuaba examinando las flores, me incliné
hacia ellas y la fragancia más maravillosa salió de ellas.
Como todo lo demás que experimenté en el jardín del cielo,
me esfuerzo por compararlo con lo que tenemos en la tierra.
La fragancia podría compararse con un recuerdo de estar
rodeado de flores de jazmín de olor dulce que experimenté en
el Pacífico Sur o tal vez el olor del incienso quemado durante
la misa católica que recuerdo cuando era niño. Tenía un
efecto dulce y poderoso, pero no abrumador. Era la penetrante
fragancia del amor que impregnaba todo lo que me rodeaba
en el cielo. Era un aroma que llenaba mis sentidos y fluía junto
con la brisa. Me volví hacia el ángel de mi izquierda y le dije:
"Huelen tan bien".
El ángel dijo: "Sí, Santiago, ese es el aroma de la santidad".
Todo en el cielo refleja el amor y la naturaleza de Dios,
desde los colores sobre los colores hasta la fragancia de las
flores, la constante serenata de música y la asombrosa
pureza de las corrientes de agua que fluyen a través del cielo.
La ciudad misma está iluminada por la presencia misma de
Dios. Sin sol, ni luna, ni estrellas, solo la luz de Dios y del
Cordero. Todas las cosas, cada entrada sensorial, inspirada y
con la firma de Dios.

Luz eterna del cielo

78

Como piloto durante muchos años, primero me entrenaron

para orientar mi posición geográfica mediante el uso de las luces
mayores y menores en los cielos. Para mi gran sorpresa, no había
ninguna fuente de luz natural en el cielo. No había sol, luna,
estrellas u otra fuente celestial. Todo, y me refiero a todo, estaba
infundido y rebosante de la luz de Dios. La luz sale de
todo, desde la hierba y las flores hasta los ángeles.
¡Absolutamente todo está lleno de luz y no hay oscuridad en
absoluto! Como la luz venía de todo, no había sombras. Pero
imagina por un momento mirar el paisaje y no hay sombras de
ningún tipo. Todo en el cielo se reveló con una claridad óptica
deslumbrante. Tampoco hay sombra de duda o incredulidad, ni
sombra de vergüenza, ni sombra de muerte. Esta luz
que todo lo penetra es como la luz de la verdad que destierra
cualquier sombra de falsedad. No hay necesidad de sombra o
refugio de un sol abrasador porque no hay sol. No hay necesidad
de esconderse del mal tiempo en el cielo. No hay clima. La luz se
sintió como el amor cálido y gentil de Dios. Puedo imaginar que
el cielo es como el jardín del Edén. Físicamente, la temperatura
era como una constante de 72 grados.

Todo, y me refiero a todo, estaba infundido y

rebosante de la luz de Dios. La luz sale de
todo, desde la hierba y las flores hasta los ángeles.
Al compartir esta experiencia aquí y allá, me han preguntado:
"Bueno, ¿no se te permitió un período de descanso en el cielo?"
Eso supondría que de alguna manera estaba cansado o cansado.
La respuesta simple es que no era necesario como lo es aquí en
la tierra con todos nuestros cuidados, preocupaciones y
limitaciones físicas. No era consciente de ningún dolor, angustia
o fatiga de ningún tipo. De hecho, la única emoción llevada a los
recintos del cielo es el amor. Para mi conciencia, mi cuerpo era
más una mezcla de espíritu y carne y, por lo tanto, no había
cansancio ni fatiga física, pero podía moverme como lo hacía en
mi cuerpo terrenal.

79

Aunque no estaba cansado, a lo largo del camino había

pequeños nichos o áreas donde uno podía hacer una pausa
para una reflexión meditativa, nidos de concentración
silenciosa como lo haría una persona al atardecer o al final
de un día completo. Estos espacios se acurrucaron
suavemente en la flora verde y variada y se llenaron con la
música del alegre saludo del cielo. Sin embargo, el día no
tiene fin y la luz eterna en el cielo. Hay descanso en el abrazo
de la amorosa luz del cielo.
Encantado, me reuní con las vistas y los sonidos del
paisaje del cielo que se extendían delante de mí y a mi
alrededor en todas direcciones. Mientras caminábamos
llegamos a un gran prado en medio del jardín del cielo.
Estaba rodeado por una vista familiar que había estado
conmigo en la tierra durante la mayor parte de mi vida, una
vista que fue un deleite para mí y que me hizo sentir como si
el Cielo y este recinto del paraíso fueron creados solo para
mí. ¡Había caballos en el cielo!

Este recinto del paraíso fue creado solo para mí. ¡Había
caballos en el
cielo!
1 Apocalipsis 21: 23-27, NTV

80
 Tomar el viaje
Y la ciudad no necesita sol ni luna, porque la gloria de Dios
ilumina la ciudad, y el Cordero es su luz. Las naciones
caminarán a su luz, y los reyes del mundo entrarán en la
ciudad en toda su gloria. Sus puertas nunca se cerrarán al final
del día porque allí no hay noche. Y todas las naciones traerán
su gloria y honor a la ciudad. No se permitirá que entre ningún
mal, ni nadie que practique la idolatría vergonzosa y la
deshonestidad, sino solo aquellos cuyos nombres están
escritos en el Libro de la Vida del Cordero. 2

El relato de Jim sobre el cielo está lleno de la palabra luz .

La luz parece estar en todo, desde los ángeles hasta la hierba.
No había oscuridad de ningún tipo en el cielo. Las Escrituras
nos dicen que, "Dios es luz, y en Él no hay tinieblas". 3 En
verdad, la presencia de Dios no está reservada solo para el
cielo. Su amor te rodea incluso mientras lees estas palabras.
A la luz de Su amorosa presencia no hay sombra, miedo,
vergüenza o duda. Solo existe el anhelo del corazón de Dios
de caminar contigo como lo hizo con Adán en el jardín con la
brisa del día. Me imagino que antes de que la tierra se
corrompiera, quizás también cantaban los arroyos y las flores.
Imagínese caminar por la vida, a través de su vida diaria
rodeado y bañado en la luz de Dios como lo experimentó Jim,
donde cada paso y cada momento contenía una nueva
maravilla para ser asimilado. De hecho, el mundo en el que
vivimos aquí y ahora podría ser un vista previa del cielo
mientras volvemos la atención hacia Dios y nos alejamos de
todas las cosas que nos distraen. Mientras estemos aquí en
la tierra, podemos aprender a estar atentos y presentes a las
maravillas que nos rodean ahora.

81
 Para una mayor reflexión
Al mismo tiempo, la multitud del Cielo cantaba una
continua alabanza antifonal a la santidad y gloria de
Aquel que habitaba en una luz inaccesible. La
atmósfera alrededor del trono se llenó del dulce aroma
de algo como casia y canela. Fue una visión de
absoluta pureza y luz, entronizada y llenando todos los
sentidos y más allá. 4

Tómate un minuto y considera que en este momento

Aquel que te creó desea que salgas de las sombras y vivas a
la luz de Su presencia. Él te está llamando "de las tinieblas a
su luz maravillosa". 5 De las sombras de la duda y la
incredulidad, de las sombras de la vergüenza, de las sombras
de la muerte misma. Él está estableciendo Su trono incluso
ahora en ti.
Tomemos unos minutos y salgamos de las sombras. Tranquiliza
tu corazón lo mejor que puedas. Siéntese un momento y observe
cómo la respiración que entra y sale de su cuerpo se refresca
momento a momento. Ahora, tome conciencia de los sonidos que le
rodean. Sonidos de la naturaleza, incluso sonidos de la actividad
normal de la vida. Toda la naturaleza puede testificar claramente de
la presencia y naturaleza de Dios. El apóstol Pablo dijo: "Porque
desde la creación del mundo, sus atributos invisibles, su poder
eterno y su naturaleza divina, se han visto claramente,
entendiéndose por lo que ha sido creado". 6
Ahora escuche con atención. Reconozca que el cielo está
orquestando los sonidos a su alrededor. Mientras se sienta en la
presencia de Dios, déjese bañar por la luz de Dios. Vístete como
una prenda de Su presencia, como Adán y Eva se vistieron a la
luz de Su presencia antes de la caída. Ahora siéntese rodeado y
bañado por la luz de la presencia de Dios y permita que el calor
del amor de Dios lo cubra mientras se sienta en Su presencia.
 Oración

82

Señor misericordioso. Ayúdame a ser consciente de Tu

presencia incluso aquí y ahora en la tierra. Ayúdame a caminar
contigo como lo hiciste con Adán y Eva. Déjame caminar a la
luz del Cordero de Dios. Déjame descubrir las maravillas que
has puesto a mi alrededor incluso en este mundo imperfecto y
caído. Con esta oración, me vestí de Cristo. Amén.

Notas
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 84

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2 Apocalipsis
21: 23-27, NTV 3 1
Juan 1: 5
4 Gardner, Relentless
Love, 97.5 1 Pedro
2: 9-10 6 Romanos 1:20

85
 CAPITULO SEIS

El pegajoso amor de Dios

Hace mucho tiempo el Señor le dijo a Israel: “Te he amado, pueblo
mío, con
un amor duradero. Con amor inagotable te he atraído
yo mismo." 1

Mientras caminaba junto a los ángeles, deslumbrado por el

camino del cielo, me volví más consciente del amor de Dios con
cada paso. Dios fue tan misericordioso y amable conmigo al
conocer las experiencias traumáticas que precedieron a mi
excursión a las maravillas del cielo. Era consciente de las
experiencias de salir de mi cuerpo mortal y de la monotonía de la
tierra y moverse a la velocidad de la luz a través del túnel. Era
consciente de la sobrecarga sensorial del paisaje caleidoscópico
del cielo. Pero mas que

86
que Dios estaba al tanto de todo lo que me había pasado
desde los primeros momentos de mi vida. Conocía mis
intentos de dominar mi propia vida ante mi falta de un padre
terrenal. El cielo era un reflejo del amor y el corazón de Dios.
Las revelaciones del alcance de Su bondad se hicieron más
personales y conmovedoras. Literalmente.

Cuando retiré mi mano, la luz del cuerpo del ángel

se aferró a mi mano. Era como si el amor de Dios
que llevaba esta asombrosa figura angelical se me
pegara. ¡Dios nos ama con un amor pegajoso!
En un momento, mientras caminaba por el sendero, movido por la
paciencia y la hospitalidad de los ángeles, extendí la mano para
tomar la mano del ángel al mando como lo haría con cualquier
amigo. La naturaleza íntima del amor y la compasión de Dios me fue
revelada con lo que sucedió a continuación. Para mi gran deleite,
cuando toqué al ángel fui consciente de una cálida sensación que
invadió todo mi ser. No me sentí como si hubiera cruzado un límite
de propiedad celestial. La experiencia es difícil de expresar con
palabras terrenales. Era más que un calor físico; era una sensación
de hogar. Curiosamente, cuando retiré mi mano, la luz del cuerpo del
ángel se aferró a mi mano. Era como si el amor de Dios que llevaba
esta asombrosa figura angelical se me pegara. ¡Dios nos ama con un
amor pegajoso! El amor se aferró a mí e insinuó que quería atraerme
hacia sí mismo. El amor me deseaba , para recuperar cualquier parte
de mí que estuviera separada de él. Era un amor que me conocía
mejor que yo mismo, un amor que me amaba más de lo que yo me
amaba a mí mismo. Me quedé allí mientras la luz se aferraba a mi
mano; mirando mi mano; mirando al ángel; mirando el amor elástico
y pegajoso de Dios. Finalmente me solté y esta luz de amor rebotó
en el brazo del ángel. La expresión del rostro del ángel era la de
alguien que me había presentado un momento precioso por primera
vez. Dios fue tan bondadoso, tan hospitalario, tan consciente de mi
corazón. El sentimiento de deleite me conectó con el ángel y el ángel
conmigo. Anhelo esa conexión incluso ahora.
 87

Dios es tan bondadoso que volvió a poner algo frente a mí

que me consoló en medio de la montaña rusa emocional de
mi muerte. Mientras caminábamos, nos acercamos a una
pequeña elevación a lo largo del camino. En la cima de la
colina llegamos a una cerca de riel dividido como en nuestra
granja de caballos en New Brunswick, Canadá. El ángel más
alto me hizo un gesto con la mano haciendo que la manga de
su prenda cayera ligeramente hacia atrás. Escuché la voz del
ángel decir: "James, mira".
Seguí su mirada hacia este prado lleno de exuberante hierba
verde que relucía al ser movida por la constante brisa. Ahora,
trotando en medio de esta idílica escena, estaban tres de los
caballos más hermosos que he visto en mi vida. Uno de los
caballos era de un blanco puro y se parecía a Silver, el caballo del
llanero solitario. Parecía el más dispuesto a conectarse conmigo.
Había otro que tenía una especie de color bayo. Luego hubo un
palomino. Los tres animales eran el pináculo de su raza, y todos
también estaban impecablemente cuidados. Estaba emocionado
y reconfortado. Qué mejor manera podría haberme hecho sentir
el cielo como en casa que llevarme a un prado con hermosos
caballos que han sido una parte tan importante de mi vida. Me
recordaron al impresionante caballo árabe blanco que llevó a mi
esposa, Lorraine, a nuestro primer encuentro en ese río helado.
Siempre había estado rodeado de caballos, y sin importar a
dónde volara en el mundo o donde viviera, desde Canadá hasta
mi tiempo en Inglaterra, siempre he tenido y amado a los
caballos. Los caballos eran más que mascotas para mí; eran una
conexión con algo poderoso pero personal, desde su olor familiar
hasta su poder y, sin embargo, su capacidad para responder al
más mínimo empujón en la dirección. Son fieles y no hacen
preguntas. Simplemente están allí con gracia y nobleza.
 Ahora el ángel guerrero hizo un pequeño movimiento con la
mano, y las cabezas de los caballos se levantaron e
instantáneamente estaban en la cerca. No sé a quién designa Dios
para cuidar de los caballos en el cielo, pero estaban hermosamente
arreglados y parecían emanar la luz del cielo. Estaría encantado de
cuidarlos cuando me establezca allí. Mientras los caballos se
movían

88

a través del pasto, la hierba bajo sus pies brillaba. Fue

surrealista. Las tres bellezas se acercaron a mí en la cerca
con la blanca a la cabeza. Estoy seguro de que mi rostro
estalló en una sonrisa ante su acercamiento. Una vez leí que
un caballo es nobleza sin vanidad, amistad sin envidia y
belleza sin vanidad, un sirviente dispuesto, pero nunca un
esclavo. ¡Si las personas fueran como caballos!

Cuando retiré mi mano, la luz que estaba en el

caballo se aferró a mí hasta que estuvo a unas seis
pulgadas de distancia y luego regresó al pelaje de
esta gloriosa criatura.
Mientras miraba sus ojos brillantes, sentí que sabían de mi amor
de toda la vida por los de su clase y ahora estaban devolviéndole ese
amor mil veces más. Pasé la mano a través de la cerca y el caballo
blanco acarició mi mano y se acercó con un nítido saludo como si
estuviera diciendo: "Es bueno verte". Pasé mi mano por su elegante
cuello y comencé a acariciar su impresionante abrigo. Fue como
poner mi mano en una luz sedosa. Un sentimiento maravilloso
recorrió mi mano y mi brazo, como cuando toqué al ángel. Lo más
asombroso fue que nuevamente, cuando retiré mi mano, la luz que
estaba en el caballo se aferró a mí hasta que estuvo a unos quince
centímetros de distancia y luego regresó al pelaje de esta gloriosa
criatura. Esto fue lo mismo que cuando toqué al ángel. Otro ejemplo
del pegajoso amor de Dios que una vez más fluía sobre mí incluso de
estos magníficos animales. No hay suficientes superlativos para
describir a estos animales en los relucientes pastos del cielo. Fueron
exquisitos y me cautivó.

Una vez más, Dios y las huestes del Cielo me mostraron

una hospitalidad increíble y generosa al llevarme a los
caballos en un prado. Dios quería que me sintiera cómodo
mientras me adaptaba a la luz del cielo. Fue como salir de la
oscuridad de mi vida terrenal al resplandor del calor
inspirado por el amor del cielo . ¡Qué bueno es Dios!
Vi caballos en el cielo, pero ninguna gente que conociera. he estado

89

Pregunté desde mi experiencia en el cielo si vi a alguien de mi

familia que había fallecido. No hice. No vi a mi abuela ni a mi
abuelo, a quienes amaba mucho, ni a mi padre, a quien amaba
pero nunca conocí realmente. Los veré a todos en mi próxima
llegada al cielo cuando murieron en la fe. La razón puede ser que
los ángeles sabían que no me quedaría. Para otros, los miembros
de la familia pueden encontrarse con aquellos que están viviendo
en el Cielo como su hogar eterno.

Estelas de oración
Mientras me encontraba en este hermoso paisaje del cielo,
los instintos de mi piloto intentaron orientarme y configurar el
hermoso cielo azul del cielo. Pero no había luces, estrellas,
soles ni lunas. Tenga en cuenta que la bóveda del cielo y el
horizonte son únicos en el sentido de que la expansión
continúa por la eternidad sin efecto de la distancia. Estaba
tratando de orientarme en el cielo sin sol. En mis muchos
años navegando por el cielo de la tierra en la cabina, había
adquirido una brújula interna para encontrar la dirección y la
orientación geográfica. Pero ahora mi confusa brújula interior
preguntó: “¿Estoy al noreste? ¿Estoy al suroeste? Pero todavía
estaba en modo tierra.
Luego, mientras escudriñaba la bóveda del cielo, vi algo así
como rayos de luz brillante que subían directamente. A mi
piloto le parecieron estelas de condensación como las que
podría haber visto en los cielos terrestres detrás de un avión.
Las estelas de vapor son el vapor de agua en el escape de los
motores a reacción que se congelan en cristales en la
estratosfera. Nos aparecen en la tierra como finas rayas de
nubes. Pero estas estelas en el cielo eran muy diferentes.
Eran más brillantes y parecían pintar el cielo del cielo como
rayas verticales, no horizontales como podría haber visto en
la tierra. Y además, no hay aviones en el cielo.
Miré al ángel guerrero y señalé hacia arriba, preguntando:
"¿Qué son esos?"
Su respuesta me hizo llorar. "James, esas son las oraciones de tu

90

familia para tu alma. Están subiendo al cielo ante Dios incluso ahora ”.
Eran estelas de oración. En el resplandor de la gloria del cielo,
casi había olvidado mi vida terrenal. Más tarde supe que cuando
le contaron a Lorraine lo que me había sucedido, que no tenía
esperanzas, ella y sus hermanas Shelly, Jean y Karen; mi cuñado
David; y el hijo de Jean, Matthew, se reunieron en nuestra casa
para orar en un círculo de oración. Había seis en el círculo de
oración y había seis estelas de oración que subían al cielo.
Fueron guiados a orar para que el Señor me enviara de regreso.
Parece que el grupo estaba orando de acuerdo con lo que Dios ya
había decidido hacer. Nuestras fieles peticiones a Dios pintan la
bóveda del cielo como estelas de oración que se elevan ante
Dios mientras oramos.

Nuestras fieles peticiones a Dios pintan la bóveda

del cielo como estelas de oración que se elevan
ante Dios mientras oramos.
Con una suave mirada de reproche en esos hermosos ojos
violetas, el ángel me dijo que, tristemente, la humanidad está
perdiendo las ganas de orar. Dijo que nos hemos convertido en la
tierra en una cultura de gratificación instantánea. Con nuestros
llamados avances en tecnología, la comunicación está ahora en
la punta de nuestros dedos y queremos todo ahora. Sin pensar
en las consecuencias, oramos a Dios por alguna petición el
domingo y si no aparece el martes, pensamos que a Dios no le
importa o no está escuchando. Eso simplemente no es cierto.
Dios escucha cada una de nuestras peticiones y, de hecho, se
registra y se anota en los pasillos del conocimiento. Nuestros
abuelos y antepasados conocían el poder, el valor y la
importancia de la oración. Después de un duro día de trabajo, se
reunían con la familia al atardecer para leer la Biblia, meditar en
la Palabra de Dios y en ese tiempo de descanso también orar.

Hoy, después de un día ajetreado en el que tenemos unos

minutos tranquilos, enviamos mensajes de texto, Facebook o nos
llamamos. No hay nada de malo en eso, pero debemos recordar
que esos raros momentos de tranquilidad están en nuestras
ocupadas vidas y están orquestados por Dios. Como si estuviera
diciendo: “Aquí estoy, hija Mía; Dime

91

acerca de tu día, y lo pondré en orden y te daré una paz que

sobrepasa todo entendimiento ". Si quiere una prueba de que
la oración funciona, ore por otra persona y observe lo que
sucede. Dios ama la oración desinteresada. Dios ama la
"rodilla-cota de malla".
El amor de Dios ilumina todo en el cielo. El amor de Dios es
pegajoso, emana de todo, desde ángeles hasta caballos en los
pastos del cielo, y nos lleva al corazón de Dios. Nuestras
oraciones, motivadas por ese mismo amor, ascienden al cielo en
estelas de oración encontrando su camino hacia el trono de Dios.
Hablaré más adelante sobre la naturaleza de la oración que llega
al cielo. La oración siempre se escucha en el cielo, la oración
nunca se olvida.

Ahora, cuando me volví hacia el ángel, el paisaje que me rodeaba

se abrió de nuevo ante mí y vi la ciudad magnífica , la ciudad del
cielo.

1 Jeremías 31: 3, NTV

92
 Tomar el viaje
Hace mucho tiempo, el Señor le dijo a Israel: “Los he
amado, pueblo mío, con amor eterno. Con amor
inagotable te he atraído hacia mí ". 2
Dios nos ama con un "amor pegajoso". Es eterno. No se
cansa ni se desgasta. El amor quiere traernos de regreso a
Él, un amor que nos atrae más profundamente al corazón de
Dios. Este amor, como se describe en las Escrituras, es un
amor eterno y eterno sin principio ni fin. Hablamos mucho de
la palabra amor en estos días. Amamos algún tipo de comida
o amamos a alguien que hace algo por nosotros. Podemos
decir que amamos el clima. Pero el amor de Dios fluye de Su
misma naturaleza. Juan dice: "Dios es amor". 3
Antes de que naciéramos, Dios decidió amarnos. Fuimos
creados con amor para ser amados. Sí, tropezamos y
estamos destituidos del amor y la gloria de Dios, pero Él nos
levanta de nuevo y nos trae a Él. Incluso cuando la vida
parece injusta, cuando otros nos abandonan , nuestros
rostros aparecen ante un misericordioso Padre Celestial.
“Porque mi padre y mi madre me han abandonado, pero el
Señor me llevará”. 4
Como Jim compartió de su experiencia en el cielo, el amor de
Dios nos atrae a una conexión con él. El amor pegajoso y elástico
de Dios nos atrae hacia Él. Jim compartió que el amor de Dios se
le pegó y también permaneció con él. Otra cosa asombrosa fue
la hospitalidad y la compasión que caracterizaron la actitud de
Dios hacia Jim. Recuerde que Jim no había hecho nada para
servir a Dios hasta ese momento. Sin embargo, es seguro decir
que el amor de Dios que Jim experimentó en el cielo ha tenido un
efecto profundo.

93
sobre él y ha cambiado su vida.
Otro aspecto conmovedor del amor de Dios es que nos hace
un hogar. O tal vez podríamos decir que nos hace sentir como en
casa incluso en este mundo donde somos extraños y
alienígenas. Considere la bondad de Dios que recibió a Jim con
tapioca y caballos en el cielo. Que hermoso.

Tómese un minuto ahora y lea lentamente el párrafo

siguiente, en voz alta si es posible.

Reflexión adicional
Ser amado por Dios es ser el reflejo de su misma
naturaleza. Él es amor, como dicen las Escrituras. ¡La
declaración más irrevocable e importante de nuestro
currículum es que somos amados por Dios! Esto es lo
mejor de nosotros. El amor del Padre comenzó en Su
corazón y avanzó hacia nosotros sin pensar en el mérito
de su objeto. No hay porque en el amor de Dios por
nosotros. Podemos dejar de lado todas las razones por
las que Dios nos ama personal e íntimamente. 5

Ahora permítete estar lo más callado que puedas. Tome una

respiración profunda y relajante y reflexione sobre este capítulo y
el párrafo que acaba de leer. Deja a un lado las preocupaciones
del día, ya sea que el día quede atrás o adelante. Esté presente
en este momento. Quizás te descalificas del amor de Dios o de
las personas. Quizás crea que no ha hecho lo suficiente. Lo mejor
de tu currículum no es lo que has hecho, sino que eres amado
simplemente por ser tú mismo. En humildad debemos agregar
que solo podemos amar a Dios porque Él nos amó primero. 6

Permítase ser tocado por el pegajoso amor de Dios ahora mismo

mientras lee estas palabras.

Oración
Dios misericordioso y Padre, te agradezco que tu amor por mí
 94

No depende de lo que haga o dé ni de cómo luzca. Me acerco

a Ti en este momento y creo que Tu amor pegajoso se aferrará
a mí y me atraerá hacia Ti. Te doy gracias, Jesús, por el amor
pegajoso. Te doy gracias porque en Tu amor pegajoso no hay
"porque". Amén.

Notas
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 95

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2 Jeremías 31: 3, NTV 3

1 Juan 4: 8,16 4 Salmo

27:10 5 Gardner, Amor

implacable , 62. 6 1

Juan 4:19

97
 CAPITULO SIETE

La ciudad del cielo

Que tú, arraigado y cimentado en el amor, puedas
comprender con todos los santos cuál es la anchura, la
longitud, la altura y la profundidad, y conocer el amor de
Cristo que sobrepasa el conocimiento, para que seáis llenos
de toda la plenitud de Dios. 1

Ver a mi familia y amigos orar por mí desde la vista del cielo

penetró en mi corazón la realidad de su amor por mí. Mientras
estaba cautivado por esta humilde efusión de amor, sentí un
suave tirón en mi codo. Me volví para ver al ángel de 13 pies
mirándome con esos brillantes ojos violetas. La silenciosa
maravilla del momento fue interrumpida por las palabras
comunicadas por este ángel, diciendo: "James, mira". Él agitó a
propósito

98
su brazo hizo que la manga de su túnica se moviera hacia
atrás y una enorme piscina reflectante perfectamente circular
apareció ante mí. Al principio, pensé que era un panel plano
de vidrio hasta que el ángel hizo un gesto sutil con la mano
que provocó que una onda se moviera por la superficie de la
piscina.

En un momento, estaba de alguna manera, no

puedo explicar cómo, arriba y mirando hacia abajo
en la Ciudad del Cielo. Estaba obteniendo una vista
aérea muy parecida a la que hubiera tenido como
piloto mientras me acercaba a una ciudad o en un
patrón de espera.
En un momento, estaba de alguna manera, no puedo explicar
cómo, arriba y mirando hacia abajo en la Ciudad del Cielo. Estaba
obteniendo una vista aérea muy parecida a la que hubiera tenido
como piloto mientras me acercaba a una ciudad o en un patrón
de espera. Estaba contemplando el corazón de la ciudad en todo
su glorioso esplendor. Los muros que rodeaban la ciudad santa
eran notablemente gruesos como si nada pudiera prevalecer
contra ellos. Me dijeron que, de hecho, el paisaje increíblemente
hermoso se llamaba paraíso o "jardín amurallado". Una visión
general de la ciudad se desplegó ante mí, ya que ocasionalmente
nos precipitábamos para un primer plano de aspectos
particulares de la ciudad, y con mi visión mejorada pude ver todo.
Lo que observé se parecía a un enorme parque con edificios que
no se entrometían en el paisaje sino que se fusionaban con la
belleza del mismo.

La ciudad del cielo era inmensa. En realidad, no caminé

por las calles del cielo, pero me dieron algo así como un
recorrido virtual en alta definición con un detalle infinito pero
íntimo. Intentaré describir mi vista de la ciudad del cielo
desde la mayor altitud hasta mi descenso al nivel de la calle,
por así decirlo.
 Desde el punto más alto, la ciudad del cielo se me apareció
como un grupo de varios círculos concéntricos masivos de
bulevares dorados separados por otros círculos de exuberantes
vías verdes. Estaba intercalado aquí y allá con cascadas de
cascadas de cristal brillante con meandros suaves

99

vías fluviales. Las calles no eran del color dorado cobrizo de

la tierra, sino de un oro al que se habían eliminado todas las
impurezas, lo que resultaba en un tono más suave y apagado.
Sobre este inmenso grupo de círculos que alternaban del
dorado al verde había intersecciones en forma de cruz .
Dentro de estos inmensos círculos, se podían ver pasarelas y
edificios más pequeños.
Permítanme decir aquí que es una tarea abrumadora describir
incluso el concepto de tiempo y espacio en la ciudad del cielo.
¿Cómo puedo describir las dimensiones del espacio cuando no
hay límite? Tanto el tiempo como el espacio se centraban
principalmente en el momento presente que tenía delante.
Aunque estaba consciente de la inmensidad de la ciudad del
cielo, había una intensidad para experimentar el ahora de Dios
tanto en el tiempo como en el espacio. Tendré que dejar
cualquier explicación adicional a los teólogos y eruditos. Solo
puedo ofrecer lo que experimenté y describirlo con escasas
palabras terrenales.
Vi muchos edificios. Algunos tenían columnas
majestuosas y grandes arcos, como podríamos ver en el
Partenón de Grecia. Pero estas estructuras no estaban
hechas de piedra labrada como en la tierra. El material de
construcción emanaba un brillo suave, a diferencia de los
materiales duros y fríos como el mármol o la piedra. Estos
edificios exudaban el amor y la calidez de Dios. Allí me sentí
bienvenido.

Tanto el tiempo como el espacio se centraban

principalmente en el momento presente que tenía
delante. Aunque estaba consciente de la inmensidad
de la ciudad del cielo, había una intensidad para
experimentar el ahora de Dios tanto en el tiempo como
en el espacio.

El ángel que estaba conmigo me guió en un recorrido por algunos

de los aspectos de la ciudad, respondiendo las preguntas que me
vinieron a la mente antes de que pudiera formularlas. Me di cuenta
de edificios específicos a medida que los encontramos. Los edificios
se utilizaron para diferentes propósitos. Entre ellos había salas de
gran conocimiento, salas de aprendizaje, salas de curación y salas
para la música donde se podía escuchar todo tipo de música , de lo
que querríamos.

100

escuchar como clásico, muy moderno, indescriptible. Este flujo

de música se fusionó sin esfuerzo con cada sonido en el Cielo
para convertirse en una melodía que refleja el amor de Dios, todo
fluyendo hacia una luz brillante que parecía ser el trono de Dios.
A medida que las calles doradas se acercaban al trono, su color
se volvía más transparente como una especie de cristal.

Salones del conocimiento

Nos encontramos con un hermoso edificio hecho del
mismo material reluciente que los demás. Le pregunté al
ángel: "¿Qué es este magnífico edificio?"
 Él respondió: “James, este es el salón del conocimiento. Es el
depósito de todas las oraciones y peticiones que la humanidad envía al
cielo y al trono de Dios ”. Me tranquilizó saber que Dios nunca pierde
nada. Entonces, el conocimiento del que se habla es el conocimiento
de Dios del corazón del hombre y sus anhelos más profundos, que
están catalogados allí. Junto con las oraciones, hubo relatos de las
acciones de personas buenas y malas. Una vez más, Dios no pierde
nada. Los pasillos del conocimiento son donde se guardan los libros
de cada una de nuestras vidas.

Salas de aprendizaje
Mientras seguíamos nuestro camino, el ángel señaló otro
edificio, al que se refirió como salas de aprendizaje. Algunos de
los que llegan al cielo pueden estar contentos con simplemente
disfrutar de la acogedora hospitalidad y las maravillas del cielo.
Hay otros que, a lo largo de su vida terrenal, encontraron gran
gozo en aprender. Estas almas tal vez deseen seguir creciendo y
aprendiendo. Hay bibliotecas de asombrosas dimensiones llenas
de conocimiento desde los inicios de la creación. Las salas de
aprendizaje también contienen volúmenes de todo lo que se ha
escrito sobre Dios y Jesús, donde estos estudiantes pueden
profundizar en los misterios incalculables de Dios.

101

Salas de curación
Para mi sorpresa, también hubo salas de curación. Esto no
fue para la curación física, ya que todas las enfermedades
físicas y el dolor han desaparecido del cielo. Estos salones
son para la curación de las almas que llevaron una vida
dolorosa y que pudieron haber aceptado a Jesús incluso en
sus últimos momentos. Algunas almas estaban tan
traumatizadas por un momento realmente difícil en la tierra
que necesitaban un período de adaptación en el Cielo, y
fueron atendidas en los pasillos de curación. Es posible que
hayan estado atrapados en drogas o traumas de todo tipo.
Muchos, como yo, clamaron a Dios en sus últimos momentos
de vida en la tierra. Dios es tan bondadoso y misericordioso.
En el Cielo, “Él limpiará toda lágrima de sus ojos, y no habrá
más muerte ni tristeza ni llanto ni dolor. Todas estas cosas se
han ido para siempre ". 2

Lugares para morar en el cielo

Me han preguntado muchas veces desde que compartí mi
visión del cielo: "¿Viste mansiones para personas en el cielo?"
La respuesta es que todo el cielo es una morada. Hay casas
de una especie que fluían con todo el paisaje del cielo. Las
casas parecían estar hechas con hermosos colores pastel sin
bordes afilados de ningún tipo. Estaban redondeados en una
especie de estilo de adobe y todos fluían juntos hacia el
paisaje. (Algunos jóvenes me han preguntado si eran como
"casas hobbit").
Las casas no parecían ser un factor importante en la ciudad del
cielo. No hay días de lluvia en la ciudad del cielo, no hay clima, no
hay tormentas u otras cosas de las que los humanos se refugien en
la tierra. No necesitamos refugios ni mansiones. Somos seres de luz
y espíritu en el cielo, pero tenemos una forma definida. Mientras
estaba en el cielo, no estaba atado por ningún tipo de cuerpo físico
como en la tierra. Sin embargo, hay lugares tranquilos donde
podemos ir para estar con nuestros seres queridos o para meditar
sobre el amor y los misterios de Dios. Pero

102
no hay nada de lo que debamos refugiarnos.

Los ciudadanos del cielo

Durante mi visita guiada al cielo vi a mucha, mucha gente. Los
ciudadanos del Cielo son seres de luz que reflejan la apariencia
de todas las nacionalidades y razas, personas de todas las
lenguas y tribus. Algunos caminaban del brazo mientras otros se
reunían en grupos familiares de sus seres queridos terrenales.
Los rostros de la gente se llenaron del amor y la vida del Cielo.
Cada persona que vi parecía tener un propósito. Esta no era la
apariencia de caminar penosamente a trabajar por un cheque de
pago; era una mirada de alegría y una dulce anticipación de
deleite, como un niño en la mañana de Navidad. Algunos llevaban
libros, otros instrumentos musicales de todo tipo. Su propósito
era simplemente ser quienes eran sin ninguna carga ni
pretensión. Todo lo que debían hacer en el cielo servía como un
acto de adoración a Cristo. Todos ellos estaban vestidos con
prendas de luz resplandeciente y todos estaban impregnados de
una sensación de descanso.

Los ciudadanos del Cielo son seres de luz que

reflejan la apariencia de todas las
nacionalidades y razas, personas de todas las
lenguas y tribus.

Había algo en su apariencia que me desconcertó. Me volví

hacia el ángel y le pregunté: "¿Son todos de la misma edad?"
Habría adivinado a principios de los 30.
El ángel respondió con una hermosa y asombrosa respuesta.
Dijo: "Sí, Santiago, tanto amó Dios a Jesús y su sacrificio por la
humanidad que decretó que nadie en el cielo sería mayor que la edad
que tenía Jesús cuando murió". Entonces, todo el mundo en el cielo
parecerá tener poco más de treinta años. Algunos podrían
preguntarse cómo podríamos identificar a un tío o abuelo de 95 años
que falleció antes que nosotros. De alguna manera, en el espíritu,
 103

reconocerlos y ellos a usted. En el cielo, somos más

reconocidos de alma a alma que por edad o apariencia.
Hubo algunas excepciones. Había unos pocos que parecían
ser mayores y más distinguidos. El ángel explicó que estos eran
algunos de los profetas y patriarcas de la Biblia. Las otras
personas retrocedieron en deferencia mientras pasaban. Sus
túnicas de luz tenían una cualidad pastel para ellos. Otra notable
excepción a los que parecían estar en la treintena eran los niños.
¡Y había niños jugando por todas partes! Había algunos que eran
muy pequeños, incluso bebés.

La enfermería
Nos acercamos a otro edificio que tenía características
diferentes a las anteriores que habíamos visto. El edificio que
teníamos ante nosotros estaba iluminado con ondas alternas de
luz suave que brillaban en su superficie de rosa a azul y de nuevo
a rosa. Le pregunté: "¿Qué es este edificio?"
El ángel respondió: "Esta es la guardería".
"¿Guardería?" Dije asombrado.
"Si."
"¿Cómo y por qué habría una guardería en el cielo?" Yo pregunté.
El ángel dijo: "Esta es la guardería para las almas de los
bebés abortados u otros bebés abortados o perdidos en su
inocencia". Continuó diciéndome que la luz de Dios estaba en
cada uno de estos bebés y que la luz anhela regresar a la
Fuente: Dios mismo. Ellos son cuidados y criados aquí en el
amor de Dios. Eventualmente son libres de unirse a la
población general del Cielo.
Le pregunté: "¿Son como hijos de la tierra?"
 El ángel sonrió y se rió, respondiendo: “Son como niños en
la tierra. Y Jesús ama a estos niños ".

104

El ángel dijo: "Esta es la guardería para las almas

de los bebés abortados u otros bebés abortados o
perdidos en su inocencia".

Me dijeron que aquí es donde van las almas de los niños

abortados hasta que puedan entrar en la plenitud de su
propósito en el Cielo. Maduran como en la tierra pero mucho
más rápido ya que son seres de luz. No se trata de desarrollo
físico; se trata de crecer en su propósito en el cielo. Una vez
más, es difícil comprender o explicar el paso del tiempo o la
madurez dentro de un Cielo atemporal. Pero un
niño de dos años es como un niño de seis en la tierra.
Algunos de los que llegan a la madurez eligen quedarse allí
para ayudar a otras pequeñas almas en su viaje hacia la
madurez en el cielo. Dios en su amor e infinita misericordia
tiene un lugar para estas pequeñas almas. Imagínense la
alegría de una madre o un padre que finalmente entra al cielo
solo para encontrar al niño que perdieron caminando hacia
ellos, completamente adulto, con los brazos extendidos para
recibirlos en un abrazo celestial.

Habitantes peludos de la ciudad del cielo

Con todas las maravillas del cielo que he compartido con la gente
desde mis experiencias allí, tengo que decir que una de las
preguntas más comunes que recibo con respecto a la ciudad del
cielo no es sobre los edificios o las personas. La gente pregunta
invariablemente: "¿Veré a mi mascota en el cielo?" Los humanos
compartimos la vida y el cariño con nuestras mascotas. La verdad, vi
perros y gatos y otros animales por todas partes, sin mencionar los
hermosos caballos. No hay un lugar separado para ellos. Si tienes
algo que amaste mucho en la vida y te devolvió ese amor, te saludará
en el cielo. No, no son humanos, pero de alguna manera representan
amor para nosotros. Dejaré a los teólogos una vez más resolver la
teología. Solo puedo informar de lo que experimenté. No sé qué me
va a decir Dios cuando aparezca con 11 caballos que he amado
tanto en mi vida. Recuerde, cualquier criatura que tuviera la
capacidad de traer alegría y

105

El amor devuelto a ti de alguna manera te saludará en el Cielo.

Si tienes algo que amaste mucho en la vida y te

devolvió ese amor, te saludará en el cielo.
El cielo en su paisaje, su diseño y su residencia es
hermosa. Es un gran parque y una ciudad que se extiende en
inmensas dimensiones hacia la eternidad. El ambiente es de
amor y alegría. Pero para mí, en mi experiencia del cielo, me
esperaba la mayor alegría al estar cara a cara con Jesús.

1 Efesios 3: 17-19 2

Apocalipsis 21: 4, NTV

 106

Tomar el viaje
Para que ustedes, arraigados y cimentados en el amor, puedan
comprender con todos los santos cuál es la anchura, la
longitud, la altura y la profundidad, y conocer el amor de Cristo
que sobrepasa el conocimiento, para que sean colmados de
todos los plenitud de Dios. 3

Los teólogos han intentado durante milenios describir el amor

de Dios y las glorias del cielo. La Biblia entera es la biblioteca de
libros cuyo único propósito es ayudarnos a comprender el
corazón y el plan de Dios para las personas. En la descripción del
cielo, el amor se ve en todas direcciones y dimensiones. En la
Escritura anterior, el apóstol Pablo deseaba que pudiéramos
experimentar la dimensión completa del amor de Cristo. Al
reflexionar sobre las imágenes y dimensiones del cielo descritas
en este capítulo, déjese llevar más allá de su comprensión y vea
el amor de Dios como lo que realmente es: eterno en los cielos.
Es más amplio, más largo, más alto y más profundo de lo que
podemos describir en términos terrenales. La única manera de
describir el amor de Dios aquí es experimentarlo por fe sabiendo
que está más allá de todo lo que podemos pedir, pensar o
imaginar. Sin embargo, te rodea incluso en este momento
mientras lees estas palabras. Deja que el amor de Dios llene el
paisaje de tu vida.

Reflexión adicional
Aquí hay algunas cosas en las que podría reflexionar sobre el
amor de Dios. Así como el ángel proporcionó el recorrido virtual
de las dimensiones de la ciudad del cielo, permita que el Espíritu
de Dios le muestre las dimensiones de Su amor por usted. El
apóstol Pablo fue muy detallado en su descripción de la

107

amor de Dios por nosotros. Tómese un tiempo para reflexionar

sobre su descripción en la que utilizó términos que de otro modo
podríamos usar para describir las dimensiones de un edificio. El
amor de Dios tiene anchura, longitud, altura y profundidad.
 La amplitud del amor de Dios. Tómese unos
momentos para permitir que el amor de Dios llene
cada parte de su vida, desde su trabajo, su familia y
amigos, hasta los actos mundanos de la vida diaria.
Su amor es amplio y llena todos los aspectos de la
vida. Pídale al Espíritu Santo que le revele cualquier
área de su vida que necesite ser bañada en el amor
de Dios.
 La duración del amor de Dios. Reflexione ahora
sobre la realidad de que Dios lo ha amado todos los
días de su vida, incluso en los lugares de dolor o
arrepentimiento. Deja que el amor de Dios llene tus
recuerdos desde tu niñez hasta el momento
presente. Su amor es largo, cubriendo nuestras
vidas de principio a fin. A veces es útil ver nuestras
vidas en segmentos a lo largo de una línea de
tiempo. Para reflexionar sobre su vida, utilice esta
sencilla línea de tiempo a continuación marcada en
años de su vida. Piense en las formas en que
experimentó el amor de Dios en esos años o, si no
lo experimentó, cubra esos años reconociendo el
amor de Dios allí.
 El amor de Dios es más elevado. El amor de Dios es un
amor espiritual , un amor que está más allá de nuestra
capacidad para realizarlo o devolverlo en la misma
medida que nos lo dio Dios. Siéntese consciente de su
corazón por unos momentos, permitiéndose
simplemente recibir el amor de Dios basado en Su
gracia a través de la obra terminada en la cruz de
Jesucristo. ¿Dónde tratas de ganarte o pagar el amor
de Dios? ¿Dónde necesita recibir la gracia o extender la
gracia a otras personas, no

108

basado en tu actuación o en la de ellos, sino

simplemente en la gracia y el deseo de Dios de
amarte?
 El amor de Dios es más profundo. El amor de Dios
desea penetrar profundamente en nosotros para
impregnar cada pensamiento y motivación de nuestro
corazón. Sea intencional en recordar el amor de Dios
que rodea y empapa profundamente su vida en cada
momento. El amor de Dios es más profundo en ti de lo
que te imaginas. Las Escrituras nos dicen que "lo
profundo llama a lo profundo". 4 El profundo amor de
Dios quiere empapar cada parte, cada área, cada
palabra que pronuncias, cada motivación de tu corazón
y cada momento de tu vida.

Que las palabras que salen de mi boca y las

cavilaciones de mi corazón encuentren tu graciosa
aprobación, oh Eterno, mi Roca, oh Eterno, mi
Redentor. 5
 Oración
Dios misericordioso, gracias por amarme con un amor
amplio, un amor largo, un amor elevado y un amor
profundo. Le pido a Tu gracia que cubra todos los
aspectos de mi vida y que sane cualquier área o
momento de mi vida cuando no estaba consciente de
Tu amor. Te entrego todos esos tiempos y lugares.
Déjame caminar en la realidad de ese amor en cada
momento por Tu gracia. Amén.

Notas
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3 Efesios 3: 17-19 4

Salmo 42: 7 5 Salmo

19:14, VOZ

111

CAPITULO OCHO

Cara a cara con Jesús

 Así, el Señor solía hablar con Moisés cara a cara, como un hombre
habla con su amigo. 1

Estaba absorto en la majestuosidad y dimensión pura de todo lo

que había visto, tanto que perdí la pista del ángel más alto que
me había estado guiando a través del cielo. Estaba asombrado
por las flores y de nuevo fui consciente de la brisa y el suave
sonido del acompañamiento musical del cielo a mi alrededor que
fluía hasta el mismo trono de Dios. Cuando me di la vuelta, noté
que el guardián más alto estaba a poca distancia detrás de mí en
una pequeña elevación. Me volví hacia él y lo vi inclinándose con
reverencia hacia una figura que era incluso más alta que él. Me
pregunté si esto era todavía

112

otro ángel. Pero tan brillante como era la túnica del otro
ángel, la prenda de esta figura era tan brillante como el sol.
Su porte era noble, y una luz dorada emanaba de esta figura
haciendo que la luz de los otros ángeles pareciera tenue en
comparación. Hijo-luz .

Aunque no pude ver Su rostro, hubo una

percepción profunda y conmovedora que me
conectó con Él casi de inmediato. Entonces,
cuando el fluir de esta luz y amor me tocó, mi
espíritu saltó al darme cuenta de que estaba en la
presencia del Señor del cielo y la tierra:
¡Jesucristo! ¡La luz a mi alrededor era Luz de Hijo!
Con asombro, di la vuelta a la derecha y me tambaleé
lentamente por el camino hacia la figura. Esta luz dorada fluía
hacia arriba y fuera de la figura como una fuente, cayendo en
cascada hacia abajo y formándose a su alrededor. El flujo
dorado abarcó todo alrededor de la figura. Incluso cuando la
luz convergía con las flores alrededor de la figura, aunque ya
estaban floreciendo, florecían aún más alto y más
bellamente. Las flores se estiraron hacia él. Esta luz dorada
del Hijo fluyó de Él con las propiedades del líquido. Observé
fascinado y asombrado cómo esta luz se abría paso
lentamente por el camino inclinado hacia mí. Mientras se
agrupaba alrededor de mis pies, de repente me sentí lleno del
conocimiento de que esta figura increíble no era otro que
Jesucristo, el Hijo del Dios Viviente. Tuve que acercarme.

Solo había dado unos pocos pasos cuando me di cuenta

de que los ángeles habían venido detrás de mí y me habían
retenido suave pero firmemente.
El rostro de esta figura se me ocultó al principio. Pero había
un brillo ondulado que lo rodeaba, como se puede ver en la
superficie de una carretera en un caluroso día de verano. Su
rostro estaba de perfil para mí. Aunque no pude ver Su rostro,
hubo una percepción profunda y conmovedora que me conectó
con Él casi de inmediato. Entonces, cuando el flujo de este

113

la luz y el amor me tocaron, mi espíritu saltó al darme cuenta

de que estaba en la presencia del Señor del cielo y de la
tierra: ¡Jesucristo! ¡La luz a mi alrededor era Luz de Hijo!
De nuevo, las palabras son inadecuadas para describir la
apariencia y el porte del unigénito Hijo de Dios. No era una imagen
de la Biblia para niños ni un personaje legendario. Me quedé sin
palabras ante Su aparición, aunque todavía no podía ver Su rostro.
Llevaba una sencilla pero hermosa prenda blanca sin costuras con
una faja roja. No parecía haber un dobladillo en esta brillante prenda,
sino una especie de niebla dorada que fluía en su base. Entonces los
ángeles se inclinaron levemente y retrocedieron en reverencia a
Jesús y se arrodillaron. ¡Todo quedó en silencio ante el Rey de Reyes
y Señor de Señores!
De repente, el resplandor desapareció del rostro de Jesús
y se volvió completamente hacia mí. Los ángeles que me
habían escoltado eran hermosos, pero ahora el rostro de
Jesús estaba ante mí.
Ver Su rostro fue la cúspide de mi viaje al cielo. ¡Y qué
cara! Este rostro era toscamente hermoso pero
sorprendentemente humano. Su cabello no era tan largo
como hubiera esperado al ver muchas pinturas e imágenes
que representan a Jesús. Su cabello era castaño y rizado
justo por encima del cuello de su bata.
Ahora, mientras estaba delante de Jesús, me sonrió. La
sonrisa más radiante, hermosa y amorosa, como la que un padre
o una madre le darían a un hijo o una hija. Era abrumadoramente
hermoso, y sentí la calidez de Su sonrisa fluyendo a través de mí.
Su sonrisa reflejaba un amor incondicional por mí, alguien que
nunca, jamás lo había reconocido, que se había apartado de Él en
cada paso de mi vida terrenal.

Entonces vi el aspecto más sorprendente e inolvidable

del rostro de Jesús: sus ojos. Los ojos de Jesús
brillaron con azul, dorado y verde, llevándome a una
profunda sensación de eternidad.

114

Entonces vi el aspecto más sorprendente e inolvidable del rostro

de Jesús: sus ojos. Los ojos de Jesús brillaron con azul, dorado y
verde, llevándome a una profunda sensación de eternidad. Los ojos
de Jesús se llenaron de un amor implacable por mí, por ti. Estos ojos
que nunca habían visto mi devoción o adoración, que nunca se
habían encontrado con mis ojos buscándolo. Sus ojos me decían
mucho, y mientras miraba más profundamente vi algo que me
conmovió entonces y me hace llorar incluso ahora, años después.
En esos ojos había un pozo de compasión y dolor. Hubo dolor
por aquellos que no lo habían reconocido o reconocido. Había
tristeza por cómo había vivido personalmente mi vida sin Él:
tanto tiempo y vida perdidos y desperdiciados. Sin embargo,
sentí un gran amor por mí que me envolvió tanto que sentí que
era la única persona que había nacido. En esos momentos
suspendidos en la eternidad, yo era Su único enfoque. Este
mismo amor está disponible para todas las personas que lo
conocen y se vuelven hacia Él. Y con este amor lleno de gracia
fluye el perdón para todos.
Ahora el ángel alto se paró frente a Jesús, y mientras se
inclinaba, sacó algo de la manga de su túnica. Parecía ser un libro
muy delgado de algún tipo, que luego el ángel abrió para que Jesús
lo leyera. Era tan delgado como el menú de un restaurante local. No
sé cómo, pero de alguna manera supe que este era el libro de mi vida
lleno de cosas buenas y malas. Era un volumen delgado con escasas
entradas de cualquier bondad o amor que había mostrado por mi
prójimo. Mi corazón se hundió y mi alma fue aplastada con la más
increíble vergüenza. Había invertido mi vida en mí mismo, en su
mayoría ignorante de las necesidades de otras personas a mi
alrededor. Cuando Jesús comenzó a leer, el ángel volvió su rostro
hacia mí, enfocando esos hermosos ojos violetas en mí. Entonces
escuché su voz en mis pensamientos diciéndome: "James, ¿qué
hiciste con la vida que mi Maestro te dio?" Lamentablemente, no
tuve respuesta.

Me paré cara a cara con Jesús, expuesto. Me embargó una

profunda desesperación y me pregunté cómo podía habitar tanta
indiferencia en presencia de tanto amor. Sin embargo, Jesús nunca
se refirió a la delgadez de ese libro. Nunca me miró con vergüenza ni
me juzgó. La verguenza

115
y los lamentos eran míos, no de él. Me había juzgado y condenado a mí
mismo.
En medio de este encuentro cara a cara, otro sentimiento fluyó de
Jesús: ¡alegría! Su rostro estaba al borde de una sonrisa, y supe que
Su corazón debía impartirme Su gozo. Su alegría no tenía nada que
ver con el volumen de cosas buenas que había hecho, ya fueran
buenas o malas. Mientras Jesús leía el libro en silencio, mi vida se
desarrolló ante mí. Las palabras que leyó se convirtieron en
imágenes que saltaron de las páginas del libro y entraron en mi
mente: imágenes de eventos desde la primera infancia hasta los días
más recientes antes de mi experiencia en el cielo. Como dicen, mi
vida pasó ante mis ojos.
Jesús no tardó en leer el libro delgado de mi vida. Se
había inclinado hacia adelante y ahora se enderezó con el
ángel ahora inclinándose más profundamente. Aunque la
estatura de Jesús no aumentó, parecía ser aún más alto para
mí. El libro estaba ahora cerrado y el ángel volvió a colocar el
libro en la manga de su túnica ... y desapareció.
Estaba lleno de anticipación, ya que parecía que Jesús estaba a
punto de hablarme. Es esa sensación en el aire antes de una
tormenta que llega durante un caluroso día de verano justo antes de
un trueno. Entonces, escuché la voz de barítono más elegante y
profunda diciendo mi nombre: "James". Ahora me hablaba de forma
audible , no como una transferencia de pensamientos. Escuchar esa
voz diciendo mi nombre penetró hasta lo más profundo de mí. Jesús,
el Hijo de Dios, pronunció mi nombre. Su voz me hizo tambalear por
un momento, y quise arrodillarme como lo hicieron los ángeles
cuando Jesús apareció por primera vez, pero los ángeles me
mantuvieron en posición vertical. Cuando Jesús pronunció mi
nombre, me tendió la mano con la palma hacia arriba y hacia mí en
un gesto de invitación. Traté de seguir adelante y no pude. Estaba
paralizado de asombro. Pero cuando Jesús extendió Su mano, vi la
luz radiante de Su manto brillando a través de un agujero en Su
muñeca, la muñeca que había sido clavada en la cruz por mí. Por
todos nosotros. No era un agujero ensangrentado o irregular, sino
claramente una cicatriz de forma extraña que voluntariamente tomó
sobre sí mismo. En el momento en que me di cuenta de que era la
cicatriz de la crucifixión, me inundó una abrumadora sensación de
profunda tristeza, culpa y vergüenza. Sentí tristeza

116

por la forma salvaje en que mi pecado lo había matado. Me

sentí culpable por ignorar Su sacrificio toda mi vida. Sentí
vergüenza por la vida que había llevado. Fue un momento tan
personal e intenso que fue como si hubiera sostenido el
martillo y clavado los clavos en Su cuerpo.

Pero cuando Jesús extendió su mano, vi la luz

radiante de Su manto brillando a través de un
agujero en Su muñeca, la muñeca que había sido
clavada en la cruz por mí.
Ahora Jesús me miró directamente con ojos llenos de
compasión y amor. Algo que cambió la vida sucedió en ese
breve encuentro. Cuánto anhelo volver a ver esos ojos. Todo
lo que había buscado durante toda mi vida se cumplió en
esos ojos y en las palabras que me dijo.

El sabe mi nombre
Ahora Jesús fijó toda su atención en mí y habló: “Santiago…
hijo mío… este no es tu momento. Vuelve ... y cuéntales a tus
hermanos y hermanas ... de las maravillas que te hemos mostrado
". Si bien estas palabras fueron breves, tuvieron un largo
significado para mí. Aunque Jesús no me habló muchas
palabras, fueron poderosas y transformadoras.
"James." Escuchar al Dios que creó todo pronunciar mi
nombre tuvo un profundo significado para mí. Sabía mi
nombre. No era una mancha anónima de la humanidad.
¡Tenía un nombre y Él lo estaba hablando! Cuando Jesús
pronunció mi nombre, sentí mi valor en Sus ojos. Jesús sabe
quién soy. Cuando Jesús pronunció mi nombre, fue como si
yo fuera la única persona que había nacido. Sus siguientes
palabras vertieron vida en mi corazón vacío y cumplieron un
anhelo que ahora estoy comprendiendo.

James, hijo mío, todavía no es tu momento. Regresa

y cuéntales a tus hermanos y hermanas de las
maravillas que hemos mostrado.

117

tú."

"Mi hijo." Había anhelado conocer a un padre, un padre. Desde

mis días escolares, cuando ocasionalmente subía la colina hasta
el cementerio donde estaba enterrado mi padre terrenal, quería
un padre. Muchas veces, anhelaba escuchar a mi padre
responder las preguntas frecuentes que tienen todos los niños.
Aunque tuve una gran figura paterna en mi abuelo, todos los
niños notan la ausencia de un papá. Los papás le enseñan a un
niño cómo lanzar una pelota o estabilizarlos mientras aprenden a
andar en bicicleta. Ser llamado hijo también me hizo parte de la
familia de Dios y me dio una nueva identidad y propósito más allá
de mí mismo.
"Este aún no es tu momento". Esto significó para mí que
llegaría un momento en el que volvería a encontrar el cielo
como mi hogar por la eternidad ... para vivir en el "ahora" de
Dios para siempre. Siempre presente. Siempre conocido.
Cómo anhelo y anhelo ese momento en que volveré a ver a
Jesús cara a cara, viviendo en la ciudad del Rey por la
eternidad. Pero sus siguientes palabras me llevaron del gozo
al dolor.
“Regresa y cuéntales a tus hermanos y hermanas de las
maravillas que te hemos mostrado”. Sus palabras no fueron una
sugerencia; eran una misión y yo era su agente. Debo volver a mi
pregunta: ¿quién soy? ¿Quién soy yo para decirle a alguien algo
sobre Dios y el cielo? No soy predicador ni estudioso de la Biblia.
De hecho, no he hablado ante multitudes de cristianos o iglesias.
En opinión del mundo, no era una mala persona, pero podría
llevar la ética al límite en un trato comercial. La vida se trataba de
mí. Ahora, habiendo recibido esta comisión de boca de Jesús, se
reveló mi arrogancia Antes de mi experiencia con el cielo y

Las experiencias y el corazón del Cielo habían iniciado un

proceso de transformación y compasión en mí. Aunque
puedo contar esta gran historia, la mayor evidencia de su
veracidad es mi propia transformación. Llevo el cielo en mi
corazón conmigo a toda la vida. Cuando miro a los ojos de
otras personas, no puedo evitar recordar los ojos de Jesús
mientras estábamos cara a cara.

La asignación
Ahora, tambaleándome en algún lugar entre el miedo y la
alegría, traté de acercarme a Él, pero los ángeles me
detuvieron. Había interpretado que Jesús se acercó a mí
como una invitación. Pero la mano que se extendió hacia mí
para revelar las cicatrices de Su pasión ahora giraba hacia
arriba con Su palma hacia mí. Mi corazón se detuvo.
Mi corazón se entristeció. ¿Cómo es posible que me
despidan? Finalmente había vuelto a casa; mi anhelo se
estaba cumpliendo en ese momento. Comencé a suplicar
entre lágrimas a Jesús: “Señor, por favor déjame quedarme.
No seré ningún problema. Jesús, déjame quedarme contigo ".
Los ángeles ahora me estaban reteniendo, y recuerdo que traté
de luchar para superarlos para llegar a Jesús. Fue bastante inútil
resistir a los ángeles que eran más del doble o tres veces mi tamaño.
Para mi asombro, cuando me volví una vez más para suplicarle a
Jesús, ya no estaba allí. En su lugar estaba el ángel más alto que
había reaparecido de repente. Me miró con ternura amorosa y con
algo de tristeza dijo: "Lo siento, James, pero tienes que irte". Mientras
hablaba, extendió sus alas, vestido con un inmenso poder y
autoridad, pero bloqueando mi camino hacia adelante.
Lo siguiente que supe fue que estaba en el mismo túnel
que me transportó al cielo viajando en esa misma velocidad
silenciosa y sin viento. Y luego me di cuenta de un rostro
diferente y una voz mucho menos suave se elevó hacia mí:
“¡James! ¡James!"

119

1 Éxodo 33:11
 120

Tomar el viaje
Así, el Señor solía hablar con Moisés cara a cara, tal
como un hombre habla con su amigo. 2
Piense, por un momento, en el Señor del Cielo y la tierra
que sostiene el libro de su vida lleno de los actos y actitudes
de su vida en la tierra. ¿Qué vería en ese libro? Entonces,
comprenda que Su gozo no depende del contenido de su
libro, ya sea grueso o delgado. Es cierto que las obras de
cada uno serán reveladas, 3 pero el gozo del Señor proviene
de Su carácter. ¡Él es alegría! "Por el gozo puesto delante de
Él [Jesús] sufrió la cruz". 4
Al reflexionar sobre este capítulo, piense en el gozo que el
Señor tiene en usted; no lo que has hecho o logrado: ¡tú!
Concéntrate en esa alegría. Su gozo es estar cara a cara contigo.
Cuando estaba siendo clavado en la cruz, estaba pensando en ti.
Eras el gozo puesto delante de Cristo. Inspire el gozo del Señor
mientras está parado en Su presencia. Deja que tu gozo sea
pleno en Jesucristo. Vive a partir de ahora como si no tuvieras
nada que perder.

Reflexión adicional
Entre Abba y nosotros está la maraña del
rendimiento y las muchas formas en que hemos
intentado ganar lo que ya era nuestro. Del mismo
modo, la pasión del Padre por ver nuestros rostros
está obstruida por el pecado, el esfuerzo propio y
 los problemas que surgen de las amargas raíces de
las heridas del pasado. Esta basura no se puede
pasar por alto y dejar de lado; debe llevarse a la
acera con el resto de la basura. 5

121

Visualice el momento en que se encuentre cara a cara con

Jesús. Ahora imagine que el Señor le está hablando
directamente a usted las palabras de la Escritura anterior.
¿Qué le oye decir? ¿Cuál es el tono de su voz para ti?
¿Escuchas un tono de regaño? ¿O es su voz más invitante?
¿Te encuentras tratando de impresionar a Jesús con las
obras que has hecho? Las Escrituras nos dicen que las cosas
que hacemos por Jesús son como ropa sucia.

Todos estamos infectados e impuros con el pecado.

Cuando mostramos nuestras buenas obras, no son
más que trapos de inmundicia. Como hojas de
otoño, nos marchitamos y caemos, y nuestros
pecados nos barren como el viento. 6
Es el gozo de Cristo que podamos estar cara a cara con Él
mientras Adán caminaba en preciosa comunión con Él en el
frescor del día. En lugar de hacer obras para Jesús,
pensemos en hacerlas con Él. Escuche nuevamente el tono y
las palabras de Su voz. Si lo desea, lea el Salmo 19: 7-10 para
ver el carácter de la voz de Dios. Lo he condensado aquí para
ti.

El sonido de la voz de Dios

Cuando escucho a Dios hablándome, Su voz es:
 Sanando — invitándome a Dios mismo.
 Claro, lo que me permite responder.  Bien,
 dándome alegría.  Puro, iluminándome sobre mí
mismo.  Duradero: verdadero, justo, limpio,
dándome confianza.  Deseable, dulce,
acercándome, resultando en adoración. 7

Cuando Dios nos habla, nos atrae hacia Él. ¡Es su mayor gozo
y deseo que lo conozcamos y caminemos con él para siempre!

122

Oración
Misericordioso Señor, deseo estar cara a cara contigo, vivir en
Tu presencia momento a momento. Mientras estoy cara a cara
contigo, te pido que todas las nociones falsas que tengo de ti
sean sanadas. También te doy todas las cosas que he hecho
por ti para tratar de ganar el favor que es mío gratuitamente
por tu gracia y sacrificio solo en la cruz. Te agradezco por
saber mi nombre. Amén.

Notas
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2 Éxodo 33:11
3 1 Corintios 3:13 4

Hebreos 12: 2

5 Gardner, Viviendo la vida

inspirada por Dios , 84. 6 Isaías 64:
6, NTV
7 Gardner, Sanando el corazón herido , pág. 65.
 125

CAPITULO NUEVE

El viaje de regreso
Conozco a un hombre en Cristo, que catorce años atrás, ya sea
en el cuerpo, no lo sé; si fuera del cuerpo, no lo sé, Dios lo sabe-
el tal fue arrebatado hasta el tercer cielo. Y sé cómo un
hombre así —ya sea en el cuerpo o fuera del cuerpo, no lo sé,
Dios lo sabe— fue arrebatado al Paraíso y escuchó palabras
inexpresables, que un hombre no puede pronunciar. 1

De vuelta en el túnel
Con la voz del ángel aún resonando en mi corazón, fui
arrastrado de regreso al mismo túnel que me llevó a los campos
del cielo, y me sentí como
 126

aunque viajaba incluso más rápido que antes. Podía ver la luz
al final del túnel, aunque era una luz terrenal más tenue. Este
no sería un aterrizaje tan suave como mi viaje al cielo. Me
estaba deslizando por el túnel y comenzaba a sentir algo que
casi había olvidado mientras estaba en el cielo: dolor. En
esos momentos, no se pensaba en la misión de contarles
nada a mis hermanos y hermanas , solo la reintroducción a
mi vida terrenal.

El mundo y mi cuerpo físico se sentían como un

lugar frío, húmedo y viscoso para vivir. Comencé
a sentir una abrumadora sensación de pérdida
del cielo.
Ahora la euforia del cielo, los ángeles y el rostro de Jesús
estaba siendo reemplazada por el descenso a mi cuerpo
físico y el dolor. Sentí algo extraño en mi rostro, una bofetada
que crecía en intensidad con cada golpe. Más tarde me
dijeron que el médico estaba tratando de reanimarme
dándome una bofetada. Era como si me estuvieran dando a
luz de la forma en que se estimula a un niño recién nacido.
Quizás eso es lo que experimenta un bebé recién nacido al
pasar de la seguridad del útero a este mundo frío. Era como
si realmente estuviera naciendo de nuevo.
El mundo y mi cuerpo físico se sentían como un lugar frío,
húmedo y viscoso para vivir. Comencé a sentir una
abrumadora sensación de pérdida del cielo. Gradualmente,
pude sentir la máscara de oxígeno, destinada a llevar aire,
que en realidad parecía obstruirla. Mi cuerpo estaba cubierto
por una sábana blanca. Con cada respiración y latido de mi
corazón, los recintos del Cielo se volvían más débiles. Me
estaba sofocando en mi cuerpo terrenal. Al mismo tiempo, la
libertad ilimitada del cielo estaba siendo reemplazada por un
extraño sentimiento de cautiverio.
La realidad completa de lo que había sucedido estaba
empezando a caer en la cuenta. Estaba conectado a un respirador y
cuando comencé a respirar por mi cuenta, la alarma comenzó a
sonar. ¡Para sorpresa de todos, estaba vivo! Como pudo esto

127

¿ser? Me había ido y ahora estaba de vuelta. Aparentemente,

escribieron: "Once horas sin signos de actividad cerebral". Sin
embargo, aquí estaba yo, ¡vivo!
Es imposible describir el contraste entre dónde me
encontraba y dónde había estado momentos antes. La
música de las flores del cielo fue reemplazada por sonidos
frenéticos de actividad médica. El calor del hogar del cielo
fue reemplazado ahora por un lugar frío y hostil. Las suaves
voces de los ángeles eran ahora sonidos de términos
médicos que me conciernen, y la calma del jardín del cielo
era ahora un laberinto personal de confusión. ¿Qué me
estaba pasando?
Mi primer pensamiento lúcido fue: ¿Dónde está Lorraine? El
hospital llamó a mi esposa desde la habitación tranquila y le
explicó lo que había sucedido para asombro médico de todos.
(Oirá esto desde la perspectiva de Lorraine en el siguiente
capítulo.) Lorraine entró corriendo. Traté de hablar con ella pero
mi voz y mi aire estaban obstruidos, ya que me habían intubado
porque no podía respirar por mi cuenta.

Agarré la mano de Lorraine y dije: "Lorraine, estaba

en el cielo ... vi a Jesús ... ¡Jesús tenía
caballos!"
 Estaba de regreso pero en muy mal estado. Mi cuerpo físico
estaba gravemente enfermo. Al menos uno de mis pulmones se
había derrumbado y tenía un caso terrible de neumonía. Pasé
mucho tiempo en la UCI. Tenía tubos en la garganta y no podía
hablar para contarle a nadie mi experiencia. Cuando recuperé el
conocimiento, me quitaron los tubos. Agarré la mano de Lorraine
y dije: "Lorraine, estaba en el cielo ... vi a Jesús ... ¡Jesús tenía
caballos!"
Lorena dijo: "No sé qué viste, pero has estado hablando de ver
a Jesús". Ella dijo: “Te conozco mejor que nadie. No pude
entender lo que estabas diciendo ". Los tubos realmente
rompieron mis cuerdas vocales. Pero tan pronto como pude
hablar en algún grado, seguí contándole esta historia. Parecía
desesperado por informar de lo que había visto.

128

Uniendo la historia
Una parte asombrosa de mi experiencia fueron los médicos que
se sorprendieron por mi regreso y recuperación. Siempre estaré
agradecido por la atención profesional y compasiva que recibí
mientras estaba en el hospital. Desde los médicos hasta el resto del
personal médico, la atención fue de primera. Al principio, mis
perspectivas de recuperación o incluso de la vida misma eran
escasas. A todos los efectos, me había ido. No tuve actividad
cerebral durante varias horas.
Al principio, cuando desperté, la historia de mi experiencia fue
tan desconectada como conectada a los dispositivos médicos.
Tengo la mente analítica de un piloto y un hombre de negocios, y
siempre estoy tratando de resolver las cosas para conseguir mi
posición correcta. Algunos aspectos —los ángeles, las flores y
sobre todo los ojos de Jesús— estaban intactos, aunque fuera de
secuencia. La cantidad de tiempo fue un misterio para mí. Otros
con experiencias similares han reportado eventos que tomaron
horas cuando en realidad estuvieron ausentes por solo minutos.
No creo que el tiempo sea muy importante en el cielo y en el
reino del Espíritu. Vivimos nuestra vida según el reloj como
criaturas del tiempo lineal. En el cielo, el pasado, el presente y el
futuro se derrumban en un eterno ahora. Nadie mira su reloj allí.
Finalmente, comencé a juntar las líneas de tiempo y la secuencia
de la experiencia.

El pastor Luke Weaver, Jr., dirige una iglesia a 50 minutos

de nosotros. Nuestras hijas han hecho rodeo juntas. Antes de
mi experiencia, lo conocía casualmente, pero prestaba poca
atención a sus actividades espirituales o su posición. Era “uno
de esos cristianos” y pastor. No quería tener nada que ver con
eso. El pastor Luke había venido al hospital antes para orar
con Lorraine y preguntar si había algo que pudiera hacer.
Cuanto más tiempo pasaba de mi experiencia, más empecé a
tratar de encontrarle sentido. Me había estado cuestionando
sobre la realidad de todo lo que vi. ¿Fue
inducido por drogas? ¿Fue una alucinación? Cuando el pastor
Luke me visitó, comencé a contarle sobre el informe del médico,
que el personal médico no había hecho nada que lo hubiera
inducido.

129

alucinación. De hecho, no hubo actividad cerebral. Luke luego

me dijo lo más importante que había escuchado desde mi
experiencia en el cielo: "Jim, te creo". Esto me dio el valor
para seguir compartiendo mi experiencia.
Una vez que estuve lo suficientemente bien, me senté a la
enorme mesa de la cocina del pastor Luke y dije: "Luke, estoy
realmente preocupado de que haya algo mal en mí".
 "¿Qué te molesta?" Luke preguntó.
Le respondí: “Luke, me despierto en algún lugar alrededor
de las 3:00 am de mi sueño recordando y casi reviviendo mi
experiencia en el cielo. Empiezo a escribir con furia. Luego
me levanto por la mañana y leo lo que he escrito. He llenado
más de cinco diarios. Hay tanto y es tan vívido. Luke, ¿soñé
todo esto? ¿Es esta mi imaginación? Ha sido un viaje tan
psicológico para mí ".

¿Soñé todo esto? ¿Es esta mi imaginación?

Le leí algo de mi diario a Luke con su esposa Bonnie

sentada cerca. Como sucede muchas veces, la sabiduría
comenzó a fluir de ella. Ella dijo: “Jim, mira, la experiencia
que tuviste fue tan abrumadora, tan abarcadora de tus
sentidos, que si Dios hubiera querido que supieras todo eso
de una vez, no podrías haberlo soportado. No podrías haberlo
tomado. Te habrías volado la cabeza ". Y ella tenía razón. Fue
como muchas personas que tienen una experiencia
impactante que requiere tiempo para desarrollarse y
comprender.
No, no me he convertido en el sabio que vino del cielo. Hay
muchas cosas que vi y escuché en el cielo que aún no
comprendo. Intento compartir mi experiencia lo mejor que
puedo. Es probable que nunca comparta algunos que no
entiendo. Hay verdades eternas que todavía trato de comprender
con una mente terrena . Mientras estaba en el cielo, era como si

130

la información se estaba descargando en mi alma. Sin

embargo, no tengo todas las respuestas a todas las
preguntas que la gente me ha hecho sobre el cielo. Todavía
lucho con la pregunta, "¿Quién soy yo?" (que Dios me permita
experimentar todas estas maravillas del cielo).
A medida que transcurría nuestro tiempo juntos, el pastor
Luke se sentaba a la mesa conmigo mientras yo compartía los
detalles emergentes de lo que podía recordar. Como dije
anteriormente, había comenzado a recordar y registrar los
detalles de todo lo que experimenté en el Cielo en varios
volúmenes de un diario personal. Tenía poco o ningún
conocimiento bíblico, pero a medida que surgieron los detalles
de la experiencia, el pastor Luke me remitió a las Escrituras. Por
ejemplo, cuando mencioné que no hay sol ni una fuente de luz
celestial en el cielo, el pastor Luke me refirió al libro de
Apocalipsis. "Y la ciudad no tiene necesidad de sol ni de luna que
la alumbren, porque la gloria de Dios la ha iluminado, y su
lámpara es el Cordero". 2 Cada parte de mi experiencia comenzó
a aclararse con la guía de Luke. Él se convirtió en un mentor para
mí al igual que su maravillosa y piadosa familia ampliada de
Grace Chapel en Pensilvania. Siempre estaré agradecido por el
corazón paciente de Luke mientras me escuchaba a mí y al
Espíritu Santo al mismo tiempo, comenzando a dar sentido a lo
que aprendí en el cielo. La mayor parte de lo que aprendí fue
sobre el corazón de Jesús y mi relación con él.

Tuve la experiencia más extravagante, luego tuve

que regresar y aprender sobre lo que había
experimentado. El ejemplo vino antes de la
lección.
Me doy cuenta de que mi proceso al armar toda mi historia fue el
inverso de cómo aprende la mayoría de la gente. La mayoría de las
veces leemos y estudiamos un tema, luego tenemos alguna
experiencia o lección práctica para reforzar lo que hemos aprendido.
Pero en este caso, tuve la experiencia más extravagante, luego tuve
que regresar y aprender sobre lo que había experimentado. El
ejemplo vino antes de la lección. Fue como ser enviado
 131

a una tierra extranjera donde no sabía el idioma, pero aprendí

más a medida que estaba inmerso en ese país y cultura.
Lo que me queda es el anhelo de la presencia de Jesús. Sin
embargo, incluso en esta vida en la tierra, por la que estoy
agradecido, he llegado a la certeza de que hay más: que hay un
anhelo en ambos lados del velo de reunirnos con Cristo por la
eternidad, de ver esos ojos asombrosos. de nuevo y escuche la voz
resonante de Jesús pronunciando mi nombre una vez más. Estoy
agradecido por la vida que tengo ahora y que se me haya
encomendado la misión de contarles todo lo que experimenté. El
anhelo del cielo persiste y el conocimiento de que fui creado para
amar y ser amado por Dios.
No hay una explicación médica o práctica para lo que me
sucedió o incluso por qué sucedió. Pero el cumplimiento de
mi anhelo está ahora tan cerca como mi recuerdo de mi
experiencia del Cielo y Jesús. Es tan cercano como
pronunciar el nombre de Jesús. Jesús.

1 2 Corintios 12: 2-4 2

Apocalipsis 21:23
 132

Tomar el viaje
Conozco a un hombre en Cristo, que catorce años atrás, ya sea
en el cuerpo, no lo sé; si fuera del cuerpo, no lo sé, Dios lo
sabe- el tal fue arrebatado hasta el tercer cielo. Y sé cómo un
hombre así —ya sea en el cuerpo o fuera del cuerpo, no lo sé,
Dios lo sabe— fue arrebatado al Paraíso y escuchó palabras
inexpresables, que un hombre no puede pronunciar. 3

Los seres humanos siempre nos esforzamos por comprender

e interpretar nuestras vidas en términos humanos. Si la vida no
cuadra, entonces algo debe andar mal. Podríamos imaginar la
confusión de los primeros seguidores de Jesús en la tierra que
no pudieron sumarlo todo a pesar de que tenían el maestro más
grande de la historia. Las Escrituras nos dicen que Jesús vino a
su propio pueblo y lo extrañaron por completo. 4 ¿Cuánto más
difícil es para nosotros tratar de interpretar o comprender las
realidades espirituales que nos rodean? Las cosas del Espíritu de
Dios son espirituales y no siempre son discernibles para el
entendimiento del hombre. Jesús sopló el Espíritu y el
entendimiento a sus primeros seguidores. Deberíamos pedirle el
mismo aliento.

Reflexión adicional
Las mentes más brillantes no pueden sondear los
misterios de Dios. Escuche al apóstol Pablo:
Hermanos, consideren su llamamiento, que no hubo muchos
sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni muchos
 nobles; pero Dios ha elegido lo necio del mundo para
avergonzar a los sabios, y Dios ha elegido lo débil del mundo
para avergonzar a los sabios

133

las cuales son fuertes, y lo vil del mundo y lo despreciado que

Dios escogió, lo que no es, para anular lo que es, para que
nadie se gloríe delante de Dios. 5

Tómese el tiempo para dejar su deseo de comprender el misterio

de Dios y simplemente experimentar a Dios en el misterio. ¿Cómo
deberíamos hacer esto? Simplemente cierre los ojos y pronuncie
conmigo el nombre que está sobre todos los nombres
: Jesús. Jesús. Permítete ver Su rostro y escuchar Su voz. Permite
que el profundo anhelo de tu corazón se conecte con Su corazón.
Jesús dice: “He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguien oye mi
voz y abre la puerta, entraré y cenaré con él, y él conmigo ”. 6

Oración
Misericordioso Señor Jesús, te agradezco por cada paso
de mi viaje espiritual, incluso aquellos en los que tropecé y
me desvié del camino. Estoy asombrado por Tu generosa
gracia que me llama de regreso a Ti y la forma en que
continúas revelándome. Deseo vivir cerca de Ti en todo
momento. Amén.

Notas
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3 2 Corintios
12: 2-4 4 Juan
1:11
5 1 Corintios 1: 26-29 6

Apocalipsis 3:20
 136

CAPITULO DIEZ

La vista desde este lado del cielo

LA HISTORIA DE LORRAINE

Ahora bien, al que puede hacer mucho más

abundantemente de lo que pedimos o pensamos, según el
poder que obra en nosotros, a él sea la gloria en la iglesia
y en Cristo Jesús por todas las generaciones por los
siglos de los siglos. Amén. 1

Mi sueño fue inquieto. Estaba muy cansado de trabajar horas

extra en el hogar de ancianos de cuidados a largo plazo donde
presto servicio. Jim dijo que podría ir al cine y aún no había
vuelto a casa. Me había despertado varias veces
 137

durante la noche. Algo estaba mal. En un momento, pensé que

escuché a alguien traqueteando en la cocina y asumí que era Jim. En
algún lugar temprano en la mañana, mi lugar de trabajo me llamó y
me despertó para siempre, pero Jim todavía no estaba en casa. Me
levanté y miré alrededor de la casa y afuera. Jim solía estar
despierto cuidando nuestros caballos temprano en la mañana. Pero
él no estaba ahí. Su camioneta no estaba allí. ¿Donde estuvo el?
Comencé a llamar al celular de Jim repetidamente, pero no hubo
respuesta.
Caminé rápidamente de un lugar a otro; mi corazón comenzó
a llenarse de ansiedad, mi pulso aumentaba y mi respiración se
hacía menos profunda con cada paso. Rodando en el fondo de
mi mente estaba la oración que ofrecí poco tiempo antes.
Aunque Jim no era una persona profundamente espiritual
entonces, al menos había ido a la iglesia de vez en cuando. En
los últimos años, sin embargo, se había preocupado más por su
negocio y su dolor y se había alejado aún más de todo lo que
tuviera que ver con Dios o la iglesia. Años antes, había
comenzado a orar: "Señor, si debes quebrantar a Jim para
rehacerlo, hazlo". Ahora, mi petición de los últimos años para
quebrar a Jim me llenaba de culpa. ¿Le había pasado algo? ¿Fue
este el cumplimiento de mi oración? ¿Fue culpa mía? ¿Dónde
estaba Jim? Tenía el mal presentimiento de que algo andaba
terriblemente mal.

Entrando en alarma total, llamé a mi hermana, Shelley, pero

hablé con su esposo, David. Me contó que Shelley también se
había despertado varias veces durante la noche para orar,
aunque no sabía para quién ni para qué. Pero había un sentido de
intercesión urgente en su oración. De la nada, otra hermana,
Jean, también se despertó para una oración urgente. Ella sintió
que Dios le estaba diciendo que llamara a David y Shelley de
inmediato. Jean pensó que su carga de oración podría haber sido
por nuestro padre, que estaba enfermo y en el mismo hospital al
que finalmente llevarían a Jim. Agregué una llamada para pedirle
consejo a un amigo de la familia, un bombero, Gerry, quien me
dijo que llamara a la Real Policía Montada de Canadá (RCMP).
La RCMP vino a la casa y habló conmigo y consiguió el número
del teléfono celular de Jim para que pudieran usarlo para encontrar
su ubicación. Pronto allí

138

Era un grupo pequeño en nuestra casa: tres de mis hermanas,

uno de sus hijos y un cuñado. Nuestro amigo el bombero
estaba cerca, pero no estaba con nosotros en el círculo de
oración. Éramos seis cuyas manos se encontraron en el
medio de nuestra cocina mientras formamos un círculo para
orar por Jim. Ninguno de nosotros tenía idea de lo que había
sucedido ni de lo que Jim estaba experimentando en ese
momento en el cielo. Mientras buscaban a Jim, Matthew, el
hijo de Jean, Shelly, su esposo David que dirigía la oración,
otra hermana, Karen, y yo nos tomamos de la mano y oramos
para que encontraran a Jim pronto, con vida y a salvo. David
dirigió la oración de que si era la voluntad de Jesús, nos
enviaría a Jim de regreso. No teníamos idea de lo que
encontraría pronto la RCMP.
Mientras nos abrazábamos en oración, alguien llamó a la
puerta. Era un alguacil de la RCMP. Entró a la casa con una
mirada de preocupación en su rostro. Se quitó el sombrero y
dijo: “Hemos localizado a su esposo, la Sra. Wood-ford, y no
se ve bien. Pudimos irrumpir en el camión donde lo
encontramos. Los paramédicos están trabajando en él y hay
un latido débil, pero no se ve bien. Lo están llevando a la
unidad de trauma del hospital ". Una cosa que había
complicado la condición médica de Jim era que hacía mucho
frío y estaba en su camioneta sin abrigo.
Éramos seis cuyas manos se encontraron en el
medio de nuestra cocina mientras formamos un círculo
para orar por Jim.
Ninguno de nosotros tenía idea de lo que había
sucedido ni de lo que Jim estaba
experimentando en ese momento en el
cielo.

Con eso, el alguacil me llevó a la unidad de trauma del

hospital. Mi hermana Karen estaba conmigo. Todo fue surrealista
para mí, como si estuviera viviendo una especie de terror
nocturno. Estaba entumecido y en estado de shock. Cuando
llegamos, el médico entró en la habitación tranquila adyacente a
la unidad de trauma para hablar conmigo. El alguacil se quedó a
mi lado mientras hablaba con el

139

médico. Ni el médico ni yo teníamos idea de lo que le había

sucedido a Jim. El médico me preguntó si Jim estaba
tomando algún tipo de medicamento y le describí lo que
había estado tomando. Se quedó escuchando, tratando de
hacerse una idea de lo que había sucedido. Pero ahora no
había nada que hacer por Jim.

Después de horas sin actividad cerebral, ¡los ojos

de Jim se abrieron de repente! ¡Sus diversos
sistemas comenzaron a funcionar una vez más!
¡Quedamos todos asombrados!
 Lo trasladaron de la unidad de trauma a la UCI. Un asistente me
acompañó a una habitación tranquila fuera de la UCI. Allí, un médico
me habló con voz amable y me dijo: “Sra. Woodford, su marido no
tiene signos cerebrales. Está clínicamente fallecido y ha sido
intubado. Mantenemos su respiración y su corazón en marcha, pero
no por mucho tiempo. No hay nada que podamos hacer por Jim.
Tendrás que dejarlo ir. Si tiene a alguien que quiera ver a Jim antes
de que lo desconecten, pídale que venga de inmediato ". Para
entonces, los riñones de Jim y el resto de su cuerpo habían
comenzado a fallar. Como enfermera registrada, sabía lo que
significaban estos signos : no había esperanza.
Actualicé a mis hermanas sobre la condición de Jim y el
informe del médico. Mientras tanto, mis hermanas en casa,
Shelly y Jean, continuaron orando para que Jim fuera
completamente restaurado. Son guerreros de oración
implacables y fieles.
Ahora me llevaron a la habitación para ver a Jim. Aunque
había sido un enfermero registrado durante años, me sorprendió
ver a Jim conectado a varias máquinas. Este fue un espectáculo
extraño para mí. Jim siempre estuvo lleno de vida, independiente,
seguro. Era conocido como "Diamond Jim". Parecía que podía
hacer o arreglar cualquier cosa o manejar cualquier problema.
Incluso frente a problemas serios, Jim decía: “Eso no es gran
cosa; Podemos arreglarlo." Ahora yacía inmóvil y quieto. Su firma
de vida se había reducido al único pitido del monitor cardíaco.
¿Cuántos pitidos más serían

140

¿Habrá hasta que escuchemos esa última y larga señal y se

iría? Las palabras de mi oración seguían viniendo para
perturbarme: "Señor, si debes, rómpelo para rehacerlo".
 Yo también oré para que Jim fuera restaurado a pesar de
que, como enfermera, entendí las palabras del médico. Recé
para que Dios restaurara a Jim y que no se viera afectado de
ninguna manera. Todo lo que podía hacer ahora era orar,
mientras sentía la culpa de mi oración, "Romperlo para
rehacerlo". De repente, una de las enfermeras de la UCI se
acercó a mí y me dijo: “Sra. Woodford, por favor venga aquí
rápidamente ". Ahora había médicos corriendo por todas
partes. Después de horas sin actividad cerebral, ¡los ojos de
Jim se abrieron de repente! ¡Sus diversos sistemas
comenzaron a funcionar una vez más! ¡Quedamos todos
asombrados!
Empecé a preguntarme cuánto de Jim podría quedar todavía
allí. Tenía muerte cerebral y gran parte de su cuerpo se había
apagado durante muchas horas. Ahora, con los ojos abiertos, Jim
estaba tratando de hablarme, pero estaba intubado y no podía
hablar. Después de un tiempo, mientras su respiración mejoraba
lentamente, le quitaron el respirador pero lo mantuvieron en
espera. Jim estaba luchando por hablar con una voz áspera y
áspera, así que incliné la cabeza para escuchar con atención y,
para mi asombro, escuché a Jim decir: "¡Vi a Jesús, y Jesús tiene
caballos!" Nada de esto tenía sentido para mí en este momento.
No tenía idea de lo que Jim había visto o experimentado. Todavía
me preguntaba cuánto de él estaba allí. Me estaba sintiendo
agradecido y sabía que estaba viendo el poder de Dios y que Él
había respondido nuestras oraciones.

Jim parecía desconcertado y miraba frenéticamente a su

alrededor para orientarse. Comenzó a derramar lo que había
visto en el cielo. El maravilloso equipo médico estaba
tratando de mantener a Jim tranquilo y silencioso, pero él
estaba emocionado e insistente en contar todo lo que
sucedió. Tenía al menos un pulmón colapsado y estaba lleno
de neumonía. No se iría a ningún lado pronto.
Mientras tanto, mi hija, que es amiga del pastor Luke Weaver
 141

hijas, había preguntado si pasarían y orarían por Jim. Estaban en

la ciudad ya solo unos minutos del hospital donde estaba Jim.
No estaban totalmente al tanto de lo que había sucedido, pero se
les permitió entrar unos minutos para orar por Jim. Jim no
recuerda claramente su visita. Ninguno de nosotros se dio
cuenta de que Dios tenía un plan para Jim.
Jim estuvo en el hospital durante semanas tomando
antibióticos y tosiendo una sustancia parecida al alquitrán de la
neumonía y el pulmón colapsado. Lo ayudé en el hospital porque
estaba muy enfermo. Tuvo que moverse con un andador.
Finalmente, Jim fue dado de alta y regresó a casa. Ese fue el
comienzo de otro tipo de temporada, una temporada para
encontrar un propósito en todo lo que le había sucedido a Jim y
todo lo que había visto y oído en el cielo.
Jim estaba una vez más muy débil y en recuperación. Su
actividad comercial casi desapareció y las cosas
comenzaron a colapsar financieramente a nuestro alrededor.
Mientras tanto, un amigo llegó a nuestra casa y preguntó por
Jim: "Lorraine, ¿qué vas a hacer?". Debo admitir que en ese
momento no sabía lo que íbamos a hacer, pero sabía que
Dios era digno de confianza y que tenía un propósito para
todo lo que había sucedido. Mi constante aliento para Jim
fue: "Te trajeron de regreso con un propósito". ¿Qué tan bien
estaría Jim? Tuvimos que esperar para ver cómo se
recuperaba.

Dios tenía un propósito para la experiencia y el

regreso de Jim, y pondría a las personas donde
debían estar para ayudar con la misión que se le
asignó.
 Jim se estaba recuperando físicamente
sorprendentemente bien, pero estaba confundido y deprimido
y decía: “Aquí todo es gris. No quiero estar aqui. No sabes lo
que he visto. ¿Que voy a hacer? ¿Cómo le digo a la gente lo
que he visto? "
Seguí diciendo: "Hay una razón por la que estás de regreso".
La única experiencia de Jim de hablar en público había sido en
algunas reuniones seculares de

142

empresarios.
El Señor fue misericordioso en la forma en que satisfizo
nuestras necesidades y gastos. Pude conseguir turnos
adicionales y pudimos vender cosas que ya no
necesitábamos, como barcos y coches. Sin embargo, Jim
todavía estaba deprimido. A menudo llamaba a casa desde el
trabajo para asegurarme de que estaba bien. Pero Jim estaba
en un lugar de transformación y reajuste a su vida terrenal.
Decía cosas como: "Si hubieras visto lo que vi ... escuchado
el canto de las flores ... visto colores más allá de la tierra ...
es difícil vivir en este lugar gris".
Llegué a casa muchos días y encontré a Jim sentado con
la cabeza entre las manos, abatido y deprimido, sin querer a
nadie cerca. Le recordaría que Dios lo envió de regreso para
difundir lo que había visto. Él respondía: “No sé nada sobre la
Biblia. No soy un hombre santo ni un predicador ".
Jim pensó que lo ridiculizarían o, peor aún, que lo considerarían
prosperando con su experiencia con Jesús en el cielo. Mi respuesta
siempre fue que Dios tenía un propósito para la experiencia y el
regreso de Jim y que pondría a las personas donde debían estar para
ayudar con la misión que se le asignó. “Él nos mostrará”, dije. Mis
oraciones comenzaron a dirigirse hacia la misión: Señor, ayuda a Jim
a responder a Tus palabras y llénale del Espíritu Santo. Las oraciones
ahora cambiaron. Responde, llénate del Espíritu.

Dio un paso fuera de sí mismo y sintió como si

alguien más estuviera
hablando a través de él.

Pronto, un par de compañeros de trabajo comenzaron a

pedirle a Jim que viniera y hablara de su experiencia. No iría.
Luego, se le pidió a Jim que hablara en la iglesia del pastor Luke.
Una vez más, se mostró reacio, pero fue y algo trascendental
sucedió en ese entorno seguro. La presa estalló y Jim comenzó a
compartir libremente. Fue como si Jim se sintiera lo
suficientemente seguro como para apartarse del camino y dejar
que Dios hablara a través de él. Él dijo que él

143

salió de sí mismo y sintió como si alguien más estuviera

hablando a través de él. Jim estaba recordando las glorias
del cielo y, poco a poco, los recuerdos y las lágrimas brotaron
con una nueva emoción. Había comenzado a cumplir el
mandato que Jesús le había dado: "Santiago, hijo mío, ve y
cuenta a tus hermanos y hermanas de las maravillas que te
hemos mostrado". Había encontrado un nuevo propósito en
su vida.
Desde el comienzo de este viaje, Dios respondió nuestras
oraciones incluso antes de que nos uniéramos en nuestra
cocina. Reconozco que mi oración para romper y rehacer a
Jim comenzó en el corazón de Dios. El hecho de que mis
hermanas fueran llamadas a orar en medio de la noche fue
evidencia del plan de Dios. Nuevamente, si mi lugar de
trabajo no hubiera llamado, no me habría despertado y
notado que Jim no estaba en casa esa noche que pasó en el
camión. Dios estaba trabajando a través de todo.

Dios tiene un plan y ahora trabajamos juntos para

perseguirlo a Él y a Su plan.
Me hago la misma pregunta que Jim se hace a sí mismo:
"Señor, ¿quién soy yo?" Todo esto ha tenido un efecto asombroso
en Jim. Se está volviendo mucho más gentil, más cariñoso,
paciente, empático, amable y tierno conmigo y con otras
personas. Sin mencionar que Jim se ha convertido en un buen
cocinero. ¡Bromeamos diciendo que en lugar de convertirse en un
vegetal, ahora los cocina!
Esta experiencia nos ha cambiado a los dos. Como
enfermera registrada en cuidados a largo plazo , he servido a
muchos que están en las últimas horas de la vida y en
transición hacia la eternidad. Ahora me encuentro rezando
por ellos con aún más compasión y llevándoles la paz. Dios
es verdaderamente bueno. Tiene un plan. Ahora podemos ver
la mano de Dios en cosas como Jim viendo nuestras
oraciones por él como estelas en el cielo mientras
estábamos parados en el círculo de oración en nuestra
cocina.
Dios tiene un plan y ahora trabajamos juntos para
perseguirlo a Él y a Su plan.
144

1 Efesios 3: 20-21
 145

Tomar el viaje
Ahora bien, al que puede hacer mucho más
abundantemente de lo que pedimos o pensamos, según
el poder que obra en nosotros, a él sea la gloria en la
iglesia y en Cristo Jesús por todas las generaciones por
los siglos de los siglos. Amén. 2

Es bueno para nosotros que Dios no esté limitado por

nuestra imaginación. Jesús oró "en la tierra como en el cielo".
A veces no nos damos cuenta de que estamos atrapados en
el plan de Dios como lo estaba Lorena cuando comenzó a
orar: "Señor, rómpelo para rehacerlo". El plan y el poder de
Dios están trabajando en nosotros y alrededor de nosotros.
Debemos estar más tranquilos para escuchar la voz del
Espíritu y ser parte de ese plan.
Hay poder de acuerdo. Cuando unimos nuestras manos
para orar, es como si abriéramos un portal de comunicación
con el corazón de Dios. Lorena y su familia estaban orando
de acuerdo con lo que Dios ya se había propuesto hacer.

Reflexión adicional
Lea este breve párrafo y permítase estar en silencio para
escuchar la voz del Espíritu. Medite en las Escrituras a
continuación y permita que el Señor le hable personalmente a
través de palabras, pensamientos, imágenes o cualquier otro
medio que elija.
 De nuevo os digo que si dos de vosotros se ponen de acuerdo
en la tierra en cuanto a cualquier cosa que pidan, les será
hecho por mi Padre que está en los cielos. Porque donde se
juntan dos o tres

146

juntos en mi nombre, estoy en medio de ellos. 3

Oración
Misericordioso Señor, oro para que mi corazón pueda confiar
en Tu amor por mí para que pueda, a través del Espíritu Santo,
estar orando de regreso a Ti lo que está en Tu corazón. Que mi
oración sea un reflejo de tu amor y establezca tu reino en la
tierra. Amén.

Notas
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2 Efesios 3: 20-21 3

Mateo 18: 19-20, KJV

 149

Capítulo once

Un intercambio de yugos
Venid a Mí todos los que estáis cansados y cargados, y Yo
os haré descansar. Carguen con Mi yugo y aprendan de Mí,
que soy manso y humilde de corazón, y encontrarán
descanso para sus almas. Porque mi yugo es fácil y ligera
mi carga. 1

Ahora he tenido un par de años para procesar y comprender mi

experiencia. Todavía hay preguntas sin respuesta en mi mente,
como, ¿Por qué yo? Igual podría haber fallecido y haber caído en la
grieta del infierno y la destrucción eterna que encontré en el otro
extremo del túnel de luz. Esas garras que salieron del pozo pueden
haberme arrastrado a las fauces de la oscuridad. Pero no lo hicieron.
La gratitud no
 150

Comienzo a describir mi actitud hacia Dios por salvarme con

una petición tan débil: "Dios perdóname , Dios ayúdame".
Meditaré sobre esta cuestión hasta que me retire antes de
que Jesús de nuevo, esta vez con una sola vía billete y la
situación de residencia en el Cielo. (El Dr. Thom hablará más
sobre esta pequeña solicitud un poco más tarde).
Mucho de lo que quiero compartir en este capítulo tiene que
ver con lo que aprendí sobre el corazón de Dios mismo. Las
palabras que me habló directamente Jesús en el cielo fueron
pocas. Pero todo el cielo, desde los ángeles hasta el paisaje del
cielo lleno de luz, todo comunica algo del corazón y el amor de
Dios. Por lo tanto, en este capítulo quiero relatar lo que se me dio
acerca de Dios mismo a través de todos los aspectos que he
descrito anteriormente. Todos estos aspectos son ecos del
corazón de Dios. ¿Qué dice mi experiencia en el cielo acerca de
Dios y Su Hijo Jesucristo? ¿Cómo me han cambiado estas
realidades y la forma en que veo la vida después de mi
experiencia en el cielo? Los comentarios no son largos, pero
hablan mucho del corazón de Dios. Thom agregará un versículo
de las Escrituras para reflexionar al final de cada una de las
verdades que he aprendido. La instrucción es simple: lea y
reflexione sobre las Escrituras y cómo podrían convertirse
también en parte de su vida.

Dios es:

Un amigo constante
En primer lugar, una frase que fue dicha una y otra vez por
los ángeles en el cielo fue la de "amigo constante". Dios es un
amigo constante y los amigos comparten la vida juntos. Los
amigos se influyen unos a otros. Los amigos están ahí el uno
para el otro. A través de mi experiencia en el cielo, ahora soy
consciente de que no hay aspectos sin importancia en
nuestras vidas. Sé que Dios está cerca de mí y, solo por
pedirlo, hablará en cualquier parte de mi vida. Dios es
constante y es un amigo.

151

Leer y reflexionar

Ya no los llamo esclavos, porque el esclavo no sabe lo que

hace su amo; pero os he llamado amigos, porque todas las
cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer. 2

Un Dios de gracia y perdón heroicos

Dios rebosa gracia y perdón. Dios es el Dios que nos
responde en nuestras circunstancias más espantosas
: cuando el barco se hunde y se hunde bajo las olas, Dios nos
rescata. Dios y Su Hijo, Jesús, son románticos eternos. Se
está moviendo hacia nosotros incluso cuando no lo
esperamos. Respondió a mi llamado de ayuda en la cúspide
del infierno en la más mínima solicitud.
Dios no se dejó intimidar por mi apatía de toda la vida y la
falta de atención a su amor por mí. Dios es el Dios de las
segundas y terceras oportunidades y más. Por supuesto, mi
insensible falta de atención tuvo consecuencias para mí y para
los demás en el panorama de mi vida. (Thom profundizará más
sobre esto en el próximo capítulo.) No hice nada para merecer un
vistazo del cielo y el escape del infierno. Todos estos fueron el
generoso amor y la gracia de Dios para mí. Pero sí pienso en
todas las personas a las que podría haber ayudado con los
recursos que tenía anteriormente. Simplemente no vi a Dios ni a
las personas a mi alrededor de una manera significativa. La vida
se trataba de mí. Pero Dios, quien me conocía mejor que yo
mismo, me permitió ver las maravillas de Su reino celestial, que
todavía lucho por asimilar o describir. Hizo esto con la más
mínima solicitud de perdón. Me ha revelado Su extravagante
gracia. Por esa misma gracia, se lo revelaré a otras personas.

Dios, que me conocía mejor que yo mismo, me permitió

ver las maravillas de Su reino celestial.

Leer y reflexionar

152

Invócame en el día de la angustia; Yo te libraré y tú

me honrarás. 3

Dios de la hospitalidad compasiva

Dios nos encuentra donde estamos y nos trae a Él con
compasión. Durante mi experiencia en el cielo, Dios me hizo
sentir "como en casa" al traerme cosas familiares del álbum
de la historia de mi vida, como el pensamiento del pudín de
tapioca y los caballos en los pastos del cielo. El cielo se
presentó como un lugar cálido y hospitalario. Dios conocía la
dimensión del ajuste del viaje al cielo y todos los desafíos
médicos que enfrenté y que llevaron a mi fallecimiento. Dios
me hizo sentir cómodo, como si pusiéramos las comidas
favoritas de los invitados a la cena en la mesa. Es un
pensamiento humillante que la entidad más poderosa del
universo eligiera hacerme sentir como en casa. Dios nos
conoce. Él conocía los caminos que recorrí en mi vida y me
abrió un camino hacia Él. Dios conocía bien mi vida.

Es un pensamiento humillante que la entidad más

poderosa del universo eligiera hacerme sentir
como en casa.
 Dios conocía el anhelo en el corazón de este niño sin
padre. Dios conocía mis inútiles intentos de satisfacer el
anhelo vacío dentro de mí que traté de llenar con más cosas.
Respondió a mi vacío llenándome de asombro. Dios es un
Dios de hospitalidad compasiva.
Leer y reflexionar

Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de

misericordias y Dios de todo consuelo, que nos consuela en todas
nuestras aflicciones para que podamos consolar a los que están
en cualquier aflicción con el consuelo con que nosotros mismos
son consolados por Dios. 4

153

Dios de lo imposible
Dios me ha cambiado por dentro y por fuera. Ha cambiado mi
vida en una dirección totalmente nueva. Con Dios nada es imposible.
Me enfrenté a un obstáculo de salud que me limitaba y que
eventualmente podría haberme quitado la vida. Dios es el Dios de lo
imposible. No puedo describir el contraste entre el dolor y la parálisis
increíble e incapacitante de mi enfermedad y la curación que
experimenté en el cielo. Aunque los indicios de la enfermedad aún
están en mi cuerpo físico, no tengo síntomas de ella. Mi
recuperación ha desconcertado a los médicos y ha bendecido a mi
familia. Pero también estaba viviendo un dolor emocional y una
parálisis, que Él está sanando. Cuando volví a la vida en mi cuerpo
físico, tuve un período de recuperación, pero no había síntomas de la
enfermedad en mi cuerpo. Mi curación fue el residuo del cielo
enviado conmigo, una evidencia del amor de Dios. El Dios eterno
tomó un piloto retirado y lo está transformando en un mensajero del
amor y la gracia de Dios. Está centrando mi atención en las personas
que me rodean. Me está transformando en una epístola viviente para
hablar de Su corazón que se expresa en cada aspecto del Cielo.
Estoy verdaderamente convencido de que nada es imposible para
Dios.

Leer y reflexionar

Porque en verdad les digo, si tienen fe del tamaño de una

semilla de mostaza, le dirán a esta montaña: "Muévete de
aquí para allá", y se moverá; y nada te será imposible. 5

La fuente de toda luz y amor

Cada aspecto del Cielo estaba bañado e irradiando la luz de
Dios. Una de las cosas sorprendentes que me quedan es que no
existen las tinieblas ni las sombras en el cielo. No hay tinieblas
en Dios. La luz expresa el corazón y la naturaleza misma de Dios.
A mi regreso a la vida en mi cuerpo físico fui consciente de un
gris y falta de la brillante

154

colores que había experimentado en el cielo. Mis ojos y mi

alma se acostumbraron a la luz de Dios.

La luz de Dios en cada uno de nosotros hizo que

los ángeles inclinarse ante mí : para nosotros.
Esto ha cambiado mi forma de ver la vida. Intento ver la
luz de Dios en cada persona, independientemente de su
posición o condición en la vida. La luz de Dios en cada uno
de nosotros hizo que los ángeles se inclinaran ante mí, ante
nosotros. A la luz de Dios no hay pretensión; solo hay amor.

Leer y reflexionar
 Este es el mensaje que hemos escuchado de Él y les
anunciamos, que Dios es Luz y que en Él no hay tinieblas. 6

Dios de la Alegría
Todo en el Cielo irradiaba no solo la luz y el amor de Dios, sino
también alegría. Joy se definió como "vivir al borde de una gran
risa". Qué descripción. La Fuente de mi gozo es la seguridad de
que Dios se preocupa por mí, sacándome de las preocupaciones
de la vida diaria. No es que estas cosas no sean importantes; es
que ahora están sumergidos bajo el cuidado de Dios. Vivir con
alegría es como montar mi hermoso caballo bajo el brillante cielo
canadiense. Existe la sensación de que me están llevando. La
alegría se ha infiltrado en las pequeñas cosas de la vida: ¡la
alegría de mi matrimonio, la alegría de las cosas comunes como
respirar el aire en un fresco día de invierno o respirar, punto! Cada
día es un desarrollo de saber que Dios tiene mi vida entre manos.
Dios es el Dios del gozo.

Leer y reflexionar

Me darás a conocer el camino de la vida; en tu presencia es

155

plenitud de gozo; Delicias para siempre en tu diestra. 7

Dios del ahora

Creo que la mayoría de la gente tiende a vivir en el pasado o
en el futuro, ya sea arrepentida o preocupada. El cielo y Dios
están enfocados en el "ahora". El tiempo y las dimensiones del
Cielo parecían estar todos enfocados en el momento presente.
Cosas que veríamos como distancia física aquí en la tierra
estaban a mi alcance solo para alcanzarlas. Pude ver una sola
flor en la ladera de una montaña que podríamos ver a millas de
distancia. Todos los aspectos sensoriales, colores, olores,
sonidos se fusionaron en un concierto que llenó todos los
sentidos en el momento presente de la eternidad. La eternidad
parecía ser el eterno ahora. No hay arrepentimiento ni vestigio del
pasado ni preocupación por el futuro. Aunque Dios vive en el
momento presente con nosotros, no hay nada perdido. Dios
escucha y considera valiosos cada pensamiento y oración de
nuestro corazón. No se pierde nada. No hay oraciones perdidas,
bebés perdidos, lágrimas perdidas, actos de bondad perdidos.
Todos están presentes y eternos con Dios. Cada aspecto del
cielo me envolvió con una manta del amor íntimo de Dios por mí.
Dios es el Dios del ahora.

No hay oraciones perdidas, bebés perdidos, lágrimas

perdidas, actos
de bondad
perdidos.

Leer y reflexionar

Estoy contigo siempre, incluso hasta el fin de los tiempos. 8

Dios nos trae a descansar en sí mismo

Mis experiencias en el Cielo me comunicaron el amor de Dios
de una manera multisensorial , tanto que penetró mi vida
profundamente. De hecho, tuve que morir para vivir de verdad.
Las experiencias revelaron a Dios y a Jesucristo,

156

Su Hijo, como mi amigo, heroicamente misericordioso,

compasivo, un Dios de lo imposible, fuente de amor y alegría,
y que está presente con nosotros en todo momento. Todo
esto me llevó a descansar en Dios.

Su yugo se caracteriza por la humildad y la

dulzura. Es un yugo que no es una carga ni una
restricción.
Aunque puedo contar la historia, no habrá mayor evidencia de
su veracidad que mi propia llegada a descansar en Jesucristo.
Descanso que sentí como si hubiera encontrado el hogar que
siempre había deseado. El anhelo permanece conmigo
constantemente, me saca de la cama todos los días; me motiva a
compartir lo que experimenté. Ahora, este mismo anhelo me
acompaña cuando me siento junto a los que están en transición
al cielo.
La mejor manera de entender y expresar el descanso en el
que he entrado es decir que hubo un intercambio de yugos en
mi vida. Donde tuve el yugo, la columna de control de un
avión en mis manos desde una edad temprana, ahora el yugo
de Jesús vino sobre mí. Significaba que Dios ahora me
estaba guiando. Su yugo se caracteriza por la humildad y la
dulzura. Es un yugo que no es una carga ni una restricción. Es
un yugo de caminar junto a Jesús bajo un yugo de amor. No
es un yugo de más cosas o esfuerzo. Es un yugo que no se
desgastará. A riesgo de repetirme, es un yugo de amistad,
gracia, compasión, hospitalidad, amor, alegría y presencia
constante.
No hay forma de concluir este libro ya que mi experiencia
continúa desarrollándose con cambios en mi corazón y mi vida,
haciéndome más Su hijo. No soy un estudioso de la Biblia ni un
predicador. Pero soy alguien que ha vislumbrado el cielo que me
cambiará para siempre. Mi experiencia en el cielo no se trataba
de mí; se trataba de Dios. Oro para que mi viaje les traiga la
esperanza del cielo mientras continúan su propio viaje hasta que
todos veamos a Jesucristo, cara a cara, nuestro amigo constante.
 157

Venid a Mí todos los que estáis cansados y cargados, y Yo

os haré descansar. Carguen con Mi yugo y aprendan de Mí,
que soy manso y humilde de corazón, y encontrarán
descanso para sus almas. Porque mi yugo es fácil y ligera
mi carga. 9

Notas
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 158

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1 Mateo 11: 28-30

2 Juan 15:15 3

Salmo 50:15

4 2 Corintios
1: 3-4 5 Mateo
17:20 6 1 Juan 1:
5 7 Salmo 16:11 8
Mateo 28:20 9
Mateo 11: 28-30

160
 CAPITULO DOCE

La vida intercambiada
Es imposible pararse en un huracán y no reorganizarse el
cabello. Eso podría describir el efecto de la experiencia que
tuve en el cielo. Cada célula de mi cuerpo, cada pensamiento
de mi mente, el propósito mismo de vivir todos los días ha
sido alterado en el huracán de la amorosa presencia de Dios.
Me están reorganizando día a día.
Dios ha sanado mi cuerpo de la enfermedad que sufrí antes de mi
experiencia con Jesús. Ha desaparecido desde mi regreso del cielo.
Curiosamente, los médicos dicen que todavía tengo la proteína que
indica Guillain-Barré en mi cuerpo, pero no tengo síntomas. No tengo
dolor ni parálisis, excepto por el hecho de que tengo un desafío
cronológico (mayor). No necesito nada más fuerte que una aspirina
de vez en cuando para el desgaste normal de la vida en este cuerpo
sin gloria. De hecho, mi salud y energía en general

161

son geniales.
 Mi experiencia personal en el cielo con los ángeles y en la
presencia de Jesús ha alterado la forma en que veo la vida en
algunas áreas principales: cómo veo a Dios, cómo me veo a
mí mismo, cómo te veo a ti y cómo veo la vida en general. .

Cómo me veo a mí mismo

Escribí sobre esto en un capítulo anterior , que mi
experiencia reveló el amor y el carácter de Dios, pero también
ha cambiado profundamente la forma en que me veo a mí
mismo y mi vida en general. He mirado a los ojos de Jesús al
ver su bondad. Es imposible mirar a los ojos a las personas
sin recordar los ojos de Jesús. Estoy aprendiendo a ver con
sus ojos.
Quizás la mayor área de crecimiento en mí es la compasión
por las personas. Las personas pueden parecernos parte del
paisaje. Relacionarse con las personas puede ser como conducir
por una carretera por la que hemos conducido tantas veces que
empezamos a desconectarla de nuestra conciencia. El problema
es que perdemos gran parte de la vida con solo conducirla. Ahora
me veo a mí mismo como alguien que está lleno de la vida que
encontré a los ojos de Jesús.

Solo soy un hombre que ha vislumbrado su gloria

y ahora desea compartirla con un mundo solitario
y cansado.
Cuando los ángeles revelaron la luz de Dios en mí, me considero
amado por Dios. Estoy lleno en lugar de vacío. Hay una pintura que
he visto muchas veces de Jesús parado en una puerta y tocando que
refleja una declaración en las Escrituras. Había visto la imagen
muchas veces pero nunca supe su fuente bíblica o su significado
personal para mí. 1 De hecho, Jesús vino a llamar a la puerta de mi
corazón durante toda mi vida. Siguió llamando hasta que lo vi cara a
cara. Le he abierto la puerta y le he invitado a entrar
 162

y siéntate a la mesa conmigo.

La influencia de Jesús se extiende a todos los aspectos
de mi vida. Estoy aprendiendo a caminar en el amor que vi en
Sus ojos. Ahora leo la Biblia con regularidad, no solo para
dominar el texto, sino como un recordatorio y un reflejo del
amor que encontré que impregna todo en el Cielo. No soy
predicador ni profeta ni experto en el cielo. Solo soy un
hombre que ha vislumbrado su gloria y ahora desea
compartirla con un mundo solitario y cansado.

Cómo veo a otras personas

¡Puedo verte! Puedo ver la luz de Dios en ti. Las personas
no son máquinas para usar en nuestras vidas; son preciosos
y están llenos de la luz de Dios. ¿Cómo podemos ignorar
eso? Estoy creciendo en la capacidad de aceptar a las
personas como lo hace Jesús, tal como son y sin juzgar. El
amor y la conexión que siento por las personas que conozco
ahora pueden ser abrumadores. No hay personas
incidentales. Todos fuimos creados a propósito con un
propósito.
Con esta visión de las personas, estoy creciendo en la
capacidad de sentir el dolor que las personas experimentan en
sus corazones humanos. Puedo sentir el dolor porque los estoy
viendo. La profundidad del dolor que llevan consigo. Siento el
impulso de aquietar sus corazones, de hacerlos sentir cómodos
en el amor de Dios, de hacerles saber que son vistos y
valorados, que portan la luz de Dios.

Si aceptara todos los innumerables miles de

millones de actos de bondad, ayudando a los
enfermos, cuidando a los ancianos, amando a su
 hermana, amando a su hermano, ayudando a su
pastor, siendo parte de una comunidad cristiana,
sería abrumador.

Tuve una conversación con uno de los ángeles que no he

mencionado anteriormente en este libro. Dije: "En la tierra, me
despierto por la mañana y

163

ver las noticias de la carnicería de la noche anterior. Hay

tanto odio, asesinatos, asesinatos y deshonras. ¿Por qué
Dios no ha regresado y reclamado la tierra como lo prometió?
"
El ángel me miró con una sonrisa sabia y burlona y
respondió: "Dios aún no ha terminado con la tierra".
Dije: “¿Cómo no puede terminar? ¿No ve Él lo que sucede
todos los días en ese lío allá abajo? ¿Por qué no lo arreglaría?
"
Levantó la mano para calmarme y dijo: "James, lo que la
humanidad no se da cuenta son los innumerables actos de
bondad que ocurren cada segundo de cada minuto de cada
hora de cada día de la tierra". Y luego hizo un movimiento con
las manos, extendiéndolas ante mí como para mostrar algo.
Él dijo: “Si tomaras todos los incontables miles de millones
de actos de bondad, ayudando a los enfermos, cuidando a los
ancianos, amando a tu hermana, amando a tu hermano,
ayudando a tu pastor, siendo parte de una comunidad
cristiana, sería abrumador. Todos están registrados en el libro
de tu vida. Entonces, si tomaste todo el mal del mundo que
crees que es tan dominante, es así de grande ". (Hizo un
gesto apretando el pulgar y el índice para mostrarme cuán
pequeño es el mal en proporción).
 Cuando nos damos cuenta de que llevamos la luz de Dios en
nosotros, ya no hay necesidad de vivir para acumular cosas. Ya no
somos personas ensimismadas que luchan por impresionar a la
gente; somos amados por Dios y eso es bastante impresionante.
Cuando sabemos que somos amados, podemos caminar con la
misma humildad simple que hizo Jesús en la tierra, quien sabía que
Su Padre lo amaba.

Como veo la vida

La vida solía ser esta cosa gris por la que caminaba a diario
tratando de salir adelante o estar por delante de los demás. La vida
ahora está llena de alegría. Puedo vivir al borde de una carcajada
como dijo el ángel. he visto

164

el efecto que tiene esta historia en las personas que la escuchan.

Hay una notable sensación de esperanza y alegría cuando la
gente escucha mi historia del cielo. La historia les da a los
oyentes la realidad de algo más que la rutina: una sensación
tangible de esperanza por lo que está por venir. No solo eso, sino
evidencia tangible de transformación en el aquí y ahora mientras
experimentamos el amor de Dios. Cientos de personas me han
dicho que sienten paz y tranquilidad cuando se paran cerca de mí
o me abrazan. Vuelven a escucharme una y otra vez para
experimentar ese sentimiento. Me siento honrado por esto, pero
la verdad es que no soy yo. Un rastro de la serenidad del cielo y la
bondad de Dios de alguna manera ha viajado conmigo de regreso
a la tierra. Lo siento todos los días.
Recuerdo una conversación con un médico de 90 años que, al
escuchar la historia, recordó su práctica médica de 60 años
recordando la bondad de Dios que había visto innumerables
veces. El rastro de cuidado amoroso detrás de él ahora era
evidencia del amor que tenía ante él en la eternidad.
Hay un intercambio que ha tenido lugar y me ha dado un
nuevo propósito y misión para la vida. Desde que me comprometí
con mi misión de contar mi experiencia en el cielo, he sido
llamado a los lechos de muchas personas en transición al cielo.
Cuando les hablo de las maravillas del cielo, los ángeles y el
rostro de Jesús, reciben una paz. Puedo decirles qué esperar o
qué buscar. A veces, contar la historia ha llevado a los
moribundos a una relación más estrecha con Jesús y les ha
permitido aceptar la oferta de Jesús para aquellos que están
cansados de venir a Él, y en esas horas finales de la vida
encontrar fe en Él.

Un rastro de la serenidad del cielo y la bondad de

Dios de alguna manera ha viajado conmigo de
regreso a la tierra. Lo siento todos los días.
Ha habido un cambio de vida para mí en esta experiencia.
También hay uno para ti a medida que conoces a Jesucristo y todas
las maravillas que nos esperan a todos en el cielo, pero que también
son nuestras en el aquí y ahora.

165

entrega nuestra vida a Jesucristo.

1 Una pintura llamada “La luz del mundo” inspirada en Apocalipsis 3:20, “He aquí,
estoy a la puerta y llamo”, de William Holman Hunt, 1853.
 166

Tomar el viaje
A medida que somos restaurados en Dios, ocurren varios
cambios. Estos me recuerdan la descripción de Jim del
efecto de su historia en él mismo y en aquellos que han
experimentado el cielo a través de su historia. Lea la
colección de intercambios divinos que son nuestros mientras
vivimos bajo el reinado de la mano de Cristo. Incluí todo el
pasaje para que pudieras ver de dónde venían los
intercambios.
El Espíritu del Señor Soberano está

sobre mí, porque el Señor me ha

ungido.
para llevar buenas nuevas a los pobres.
Me ha enviado para consolar a los

quebrantados de corazón y para

proclamar que los cautivos serán

liberados y los presos serán liberados.

Me ha enviado a decirles a los que

lloran que ha llegado el momento del

favor del Señor,

y con él, el día de la ira de Dios contra sus

enemigos. A todos los que lloran en Israel,
 Él dará una corona de hermosura por

cenizas, una bendición gozosa en lugar

de luto, una alabanza festiva en lugar

de desesperación.

En su justicia, serán como grandes robles que

el Señor plantó para su propia gloria. 2

167

Reflexión adicional
Note los intercambios en estos versículos. Jesús también
citó este pasaje que se encuentra en el Evangelio de Lucas.
Su misión es nuestra misión: compartir las buenas nuevas,
consolar a los quebrantados de corazón, escoltar a las
personas fuera de la oscuridad y liberarlas de la
desesperanza, consolar a los que están de luto y decirles que
Dios los favorece o los ama. A cambio, recibimos belleza en
lugar de cenizas, alegría en lugar de duelo, alabanza en lugar
de desesperación.

Oración
Señor Jesus. Te agradezco los intercambios que tengo
contigo. Permíteme llevar el consuelo de tu presencia y
amor a los quebrantados de corazón. Deja que tu vida a
través de mí sea una luz que saque a las personas de la
desesperanza. Permítanme llevar consuelo a quienes
han experimentado pérdidas y caminar con ellos a
través de las luchas de la vida. Deja que mi vida sea de
gozo y alabanza mientras confío en tu amor por mí.
Para tu gloria, amén.
 Notas
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2 Isaías 61: 1-3, NTV

 170

CAPITULO TRECE

No es demasiado tarde
LA REFLEXIÓN DE THOM

Mi vida comenzó como cualquier otro hombre

bajo la mirada amorosa de una madre
En algún lugar entre ahora y entonces yo
Perdí al hombre que podría haber sido
Tomé todo lo que no era mío para
tomar pero el Amor cree que no es
demasiado tarde Solo uno de
nosotros merece esta cruz, un
sufrimiento que debería
pertenecerme En lo profundo de este
hombre al lado del que cuelgo está el
 171

lugar donde la vergüenza y la gracia chocan

Y es una hermosa agonía que
Él crea que no es demasiado
tarde para mí. 1

Seis palabras conducidos a un hombre de una camioneta a la

gloria del cielo y de la cara de Jesucristo: “Dios, perdona
me-dios me ayude.” No había mucho rastro de servicio fiel o
práctica religiosa detrás de él. No había mucha evidencia para
construir un caso de salvación a partir de un archivo de
buenas obras. Entonces, ¿cómo puede ser que este hombre
vea el cielo y mucho menos esté cara a cara con Jesucristo,
nuestro amigo constante? Sería justo preguntar: ¿cómo
podría alguno de nosotros hacerlo?
Mi interés en esta historia comenzó en una conversación en la
mesa del almuerzo con un hombre que nunca había conocido y
resultó en ayudarme a escribir un libro que nunca tuve la intención de
escribir. Lo que nos unió y culminó en este libro fue la evidencia de
una conversión sincera y continua en la vida de un piloto jubilado que
tuvo una experiencia increíble. Él fue y no es un teólogo sistemático.
Él es un colega "ragamuffin", para usar el término de Brennan
Manning. Como escribió Michael W. Smith en el Prólogo del
Evangelio Ragamuffin de Manning , "Todos somos unos ragamuffin, y
todos estamos eternamente envueltos en los brazos de la gracia de
Dios". 2 En una palabra, el objetivo de esta historia, como todas
nuestras historias que tienen la esperanza de experimentar todo lo
que Jim ha experimentado, es la gracia: una gracia radical que
atrapa la vida, transforma el destino, no se gana y es
escandalosamente libre. Una gracia que dice: ¡ No es demasiado
tarde!
 Algunos pueden sentirse incómodos con este tipo de gracia y
buscar en las Escrituras dónde debemos trazar la línea antes de
entrar en el reino del “ágape descuidado” o “gracia grasienta”. Tal
vez pregunten: “¿Hasta dónde podemos llegar con la gracia hasta
que se convierta en licencia? ¿Es la gracia solo una tarjeta de
"salir del infierno gratis"? Como dijo el apóstol Pablo: “¿Qué, pues,
diremos? ¿Continuaremos en el pecado para que la gracia
aumente? ¡Que nunca lo sea! " 3 No obstante, Grace dice: " No es
demasiado tarde ".

172

A medida que me familiaricé con la historia de la vida de Jim,

me acordé de otro hombre que luchó hasta que tuvo una
conversión que cambió su vida : John Newton. Newton fue el
compositor del conocido himno "Amazing Grace". La madre de
Newton falleció cuando él era muy joven, aunque le dio una base
espiritual desde la que vivir. El padre de Newton era capitán de
barco y rara vez estaba en casa, por lo que Newton creció sin una
influencia paternal constante. John Newton pasó años buscando
la paz, tratando de encontrarla en los placeres carnales.
Experimentó muchos altibajos en su vida temprana, casi siendo
ahorcado por deserción de la Armada británica en un momento.
Era un hombre que buscaba sentido y paz en las cosas de la vida.
Para el mundo, Newton era un hombre muy exitoso, pero por
dentro estaba lleno de dudas y miedo.

Finalmente, Newton se convirtió en el capitán de un barco

que transportaba esclavos desde África. Una noche hubo una
terrible tormenta de la que Newton creyó que no
sobrevivirían. Lloró por sí mismo y por los pasajeros de su
barco en medio de la tormenta, y de alguna manera Dios
salvó milagrosamente el barco. Este drama fue el comienzo
de la conversión de Newton que culminó en su
arrepentimiento del comercio de esclavos y se volvió a Cristo.
4 Aunque John Newton piloteó barcos de esclavos durante
muchos años, la asombrosa gracia de Dios lo recibió en
medio de una fuerte tormenta. Grace dijo: No es demasiado
tarde .

Conversión
En el relato de Jim, su viaje al cielo y al corazón de Dios comenzó
cuando clamó: "Dios, perdóname". Esto, aunque escaso, fue un acto
de reconocimiento de que Jim no podía salvarse ni ayudarse a sí
mismo. Fue un acto de arrepentimiento y conversión. El
arrepentimiento es apartarse de nuestro antiguo camino hacia Dios.
Wayne Grudem definió la conversión de esta manera: "La conversión
es una sola acción de apartarse del pecado en arrepentimiento y
volverse a Cristo en la fe". 5 No analizaré cada palabra de la solicitud
de perdón de Jim y

173

gracia. He visto el fruto de ello en una vida y una relación con

Cristo que está creciendo. La conversión es pasar de una fuente
de energía a otra.
Jesús nos dio una gran ilustración de la conversión en los
evangelios cuando describió el crecimiento en el reino de
Dios. Dijo que después de plantar una semilla en el suelo, una
cuchilla atravesó el suelo. Antes de que la semilla atraviese el
suelo, vive de sus propios recursos. La conversión puede
compararse con una semilla que atraviesa el suelo para
conectarse con el sol para su mayor crecimiento a través de
la fotosíntesis. Cuando atraviesa el suelo, está conectado al
sol, la mayor fuente de energía y crecimiento. 6 La conversión
es pasar de una potencia menor a una potencia mayor. Esta
conversión a la fuente mayor requiere apartarse de uno
mismo y volverse hacia Dios. Este cambio se conoce como
arrepentimiento. 7

La conversión es pasar de una potencia menor

a una potencia mayor.
¿Es posible que alguien se vuelva hacia Cristo en los
últimos momentos posibles de la vida y encuentre el Cielo?
Eso requeriría una gracia verdaderamente asombrosa. La
gracia de Dios nos lleva a todos al mismo nivel. Estamos en
gracia por fe o clamando a Dios con profunda confianza.
Escuche la descripción de Pablo de nuestra posición.
Por tanto, puesto que la fe nos ha hecho justos a los ojos de
Dios, tenemos paz con Dios por lo que Jesucristo nuestro
Señor ha hecho por nosotros. Debido a nuestra fe, Cristo nos
ha traído a este lugar de privilegio inmerecido en el que nos
encontramos ahora, y esperamos con confianza y alegría
compartir la gloria de Dios. 8

Cuando Jim se presentó ante Cristo en el cielo, fue solo sobre la

base de su llamado a Dios con su débil petición: "Dios, perdóname",
luego "Dios, ayúdame". En esa petición más fina, Jim vio la mayor
gloria de Dios;

174

Su excelencia dijo: ¡ No es demasiado tarde !

La otra cruz
Considere la otra cruz en los evangelios. El día que Jesús
fue crucificado, otros dos fueron crucificados junto con
Él, uno a su derecha y otro a su izquierda. Lea el relato de la
Biblia:
 Uno de los criminales que fueron ahorcados allí lo insultó
diciendo: “¿No eres tú el Cristo? ¡Sálvate a ti mismo y a
nosotros! " Pero el otro respondió y, reprendiéndole, dijo:
“¿Ni siquiera temes a Dios, ya que estás bajo la misma
sentencia de condenación? Y en verdad estamos sufriendo
con justicia, porque estamos recibiendo lo que merecemos
por nuestras obras; pero este hombre no ha hecho nada
malo ". Y él decía: "Jesús, acuérdate de mí cuando vengas
en tu reino". Y le dijo: "De cierto te digo que hoy estarás
conmigo en el paraíso". 9

Puedo imaginarme a este hombre colgando entre la vida y la

muerte en agonía y miedo desesperado junto al Rey de Reyes en
ese árbol cruel. Estaría luchando por cada respiración, lleno de
un dolor indescriptible incluso con el más mínimo
movimiento; cada respiración era un recordatorio de que podría
ser la última. Entonces los pensamientos del hombre se volvieron
hacia Aquel que sangraba a su lado. Volvió su rostro hacia el
Cristo crucificado. En medio de su agonía, el hombre de la otra
cruz, el crucificado con Cristo, se reunió con suficiente aliento
para emitir una petición final, vacilante pero llena de fe . "Jesús,
acuérdate de mí". La respuesta llegó sin un momento de
deliberación de Aquel que era la encarnación del amor del Padre
en la tierra. "Hoy estarás conmigo en el paraíso".

Volvió su rostro hacia el Cristo crucificado. En

medio de su agonía, el hombre de la otra cruz, el
crucificado

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con Cristo, reunidos con suficiente aliento

para emitir una petición final, vacilante, pero
 llena de fe .
¿Sobre qué base se le dio al hombre de la otra cruz la
seguridad del cielo? No hay evidencia en el relato de que el
hombre pudiera bajar de su cruz para hacer algunas buenas
obras. No podía entrar al edificio de una iglesia y encontrar un
altar para pronunciar una oración formal de salvación. No
sabemos de ningún entrenamiento formal que el hombre tuviera
en las cosas de Dios. No tuvo tiempo de escribir un cheque por el
diezmo. Estoy bastante seguro de que no pudo recitar los cinco
puntos del calvinismo o el Camino romano a la salvación. ¿Es
posible, entonces, que sea así de simple, que un hombre clamó
en desesperada agonía y culpa a Cristo y fue salvo? ¿Estará en el
mismo cielo que, digamos, el apóstol Pablo o Martín Lutero? Me
doy cuenta de que a muchos lectores les puede resultar ofensivo
pensar que podría ser así de simple: que el hombre de la otra
cruz fue “salvo” sobre una base tan débil. La gracia se inicia en el
más mínimo pedido del hombre para la mayor gloria de Dios.
Grace dijo: No es demasiado tarde.

Grace nos pone a todos en igualdad de condiciones. Es el

único medio de salvación. Esto no significa
universalismo, que todos están automáticamente adentro.
Existe la necesidad de la convicción de pecado, el
arrepentimiento (volverse hacia Cristo en la fe), lo que resulta
en la conversión, lo que lleva a la justificación basada
únicamente en la sangre de Jesucristo.
El hombre de la otra cruz reconoció su pecado al decirle al
otro "criminal" que merecía la muerte (condena). Luego se volvió
hacia Jesús (arrepentimiento), reconociendo que Jesús era el
Rey, y luego, con fe, gritó que Jesús lo “recordaría” (confesión de
fe). Jesús respondió a su fiel petición y tomó su pecado sobre sí
mismo, y ese día el hombre en la otra cruz vio el mismo paraíso
que vio Jim.
La llamada del hombre de la otra cruz fue una llamada
desesperada, como Jim, que fallecía en la cabina de su
camioneta. Fue un grito desesperado proveniente de una
profunda conciencia de la distancia entre

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él mismo y el reino de Dios. En ese momento final, invitado por el

Espíritu de Dios en lo profundo de él, Jim se volvió hacia Dios.
“Vuélvanse a mí y sean salvos, todos los términos de la tierra; porque
yo soy Dios, y no hay otro ". 10
Las palabras de la canción de Steven Curtis Chapman,
"How Love Wins", expresan las palabras del hombre que fue
crucificado con Jesucristo y dan expresión a lo que le
sucedió a un hombre que pasó de la camioneta a la gloria del
cielo y que ahora cuenta su hermanos y hermanas de las
maravillas que se le mostraron en el cielo.

Grace nos pone a todos en igualdad de

condiciones.
Es el
único
medio de
salvación.

Reflexión adicional
Lea estas palabras lentamente y reflexione sobre su
propia necesidad de la gracia que dice: No es demasiado
tarde.
Mi vida comenzó como cualquier otro hombre
bajo la mirada amorosa de una madre
En algún lugar entre ahora y entonces yo
Perdí al hombre que podría haber sido
 Tomé todo lo que no era mío para
tomar, pero el amor cree que no es
demasiado tarde Solo uno de
nosotros merece esta cruz, un
sufrimiento que debería
pertenecerme En lo profundo de este
hombre al lado del que cuelgo es el
lugar donde la vergüenza y la gracia
chocan Y es hermosa agonía que Él
cree que no es demasiado tarde para
mí. 11

Nuestra entrada al reino de los cielos se produce cuando nos

damos cuenta de nuestra necesidad y volvemos la cabeza hacia
la cruz de Cristo, recordando que

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Jesús es el Rey y le pide que nos recuerde. No es demasiado

tarde para que nos volvamos hacia Cristo ahora.
 ¿Hay un profundo anhelo de paz en tu corazón?
No es demasiado tarde .
 ¿Necesita su corazón la curación de los pecados
y errores pasados? No es demasiado tarde .
 Tal vez esté diciendo: "Nunca he sido una
persona religiosa ni he servido a Dios". No es
demasiado tarde .
 Tal vez tu vida esté atrapada en algún tipo de
trampa o en un lío enredado. No es demasiado
tarde .
 Tal vez hayas vivido con tus propias fuerzas y no
hayas encontrado un propósito en la vida. No es
 demasiado tarde .
 Tal vez hayas ido a la iglesia toda tu vida pero
nunca te conectaste realmente con el corazón de
Jesucristo. No es demasiado tarde.
 Quizás mientras ha estado leyendo este libro se
ha dado cuenta de un anhelo por el Cielo y el
rostro de Jesucristo en su corazón. No es
demasiado tarde .
 Cualquiera que sea la profunda necesidad o
anhelo que haya en su corazón, el Señor dice:
"No es demasiado tarde".

Oración
Jesús, me doy cuenta de que he tratado de vivir mi propia vida
a mi manera. Extrañé lo mejor de ti para mi vida. Te admito
ahora que ya no puedo hacerlo solo, y confieso que he pecado
y no merezco el cielo. Estoy cansado de intentar demostrar mi
valía ante ti y ante el mundo. Te pido ahora que me salves y
me sanes y me des la gracia de llegar a ser como Tú. Te
agradezco por amarme, por invitarme a

178

te amo también. Elijo vivir para ti ahora y estaré en tu

presencia un día en el cielo para alabarte por
siempre. Te agradezco que no es demasiado tarde
para mí. Oro esto en Tu precioso nombre, Señor
Jesús. Amén.

Notas
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1 Steven Curtis Chapman, “How Love Wins”, Música inspirada en The Story (Capital
Christian Music, EMI Christian Music Group, Inc., Word Entertainment LLC, Provident
Label Group, 2011).
2 Brennen Manning, El Evangelio Ragamuffin: Buenas noticias para el desaliñado, golpe plano, y
quemado
(Colorado Springs: Multnomah Books,
2008), 8. 3 Romanos 6: 1-2
4 Basado en el libro de Jonathan Aitken, John Newton, from Disgrace to Amazing
Grace (Wheaton, IL: Crossway Books, 2007).
5 Wayne Grudem, Doctrina Bíblica; Enseñanza esencial de la fe cristiana (Grand
Rapids, MI: Zondervan, 1999), 311.
6 Marcos 4: 26-29

7 El arrepentimiento en el idioma hebreo es teshuvá, de la raíz shuv, que

significa volverse. 8 Romanos 5: 1-2, NTV
9 Lucas 23: 39-43 10
Isaías 45:22 11 Chapman,
“Cómo gana el amor”.

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Sobre Jim Woodford

James Woodford nació en Newfoundland, Canadá. Al perder a su

padre cuando tenía dos años, James creció en la casa de sus
abuelos maternos. James desarrolló una fascinación por los
aviones a una edad temprana, ya que había un muelle de
hidroaviones al borde del río donde vivía la familia. James se
convirtió en uno de los pilotos con licencia más jóvenes en
Canadá con una carrera de vuelo que comenzó a los 19 años.
James voló en aviones pequeños a los lagos remotos de las
provincias, ya que generalmente no había otras rutas disponibles,
especialmente en los inviernos duros. Poco a poco se abrió
camino para volar aviones más grandes hasta que se convirtió en
capitán de una importante aerolínea. Habiendo volado desde
Toronto a Tombuctú, James viajó mucho. James también ama
los caballos y ahora reside en New Brunswick, Canadá con su
esposa Lorraine y varios caballos. James viaja por América del
Norte y del Sur animando al cuerpo de Cristo con su relato de su
experiencia en el cielo, y también ha sido un consuelo para las
familias de quienes han perdido a sus seres queridos
asegurándoles las glorias del cielo y el amor de Dios en
Jesucristo.

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Para más información sobre Jim

Woodford
 www.jimwoodford.com

www.facebook.com/pg/Jim-Woodford

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Sobre Thom Gardner

Thom Gardner ha ministrado como maestro bíblico o pastor

desde 1986 y ahora es presidente de Restored Life Ministries,
Inc., un ministerio dedicado a la formación espiritual holística.
Viaja internacionalmente para equipar a los líderes de todo el
cuerpo de Cristo dirigiendo retiros y seminarios de capacitación
utilizando sus técnicas de encuentro interactivo con la presencia
de Cristo a través de las Escrituras. Es autor de varios libros,
entre ellos Sanando el corazón herido, Amor implacable, Viviendo
la vida inspirada por Dios , El viaje sanador y Todo lo que crece.

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Para obtener más información

sobre Thom Gardner y
Ministerios Vida Restaurada,
Inc
 Que hacemos
www.restoredlifeministries.com/events

Porque hacemos lo que hacemos-

www.restoredlifeministries.com/services

Recursos—
www.restoredlifeministries.com/resources

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