I

Me pediste que cambiara

inmediatamente junte todo el dinero posible,

comencé a trabajar

me inyecte botox, me quite la panza, me puse culo

para ser a la semejanza e imagen tuya.

Higienicé mi cuerpo, volví a ser virgen delante de tus ojos, pura y casta.

Mujer bien, fui enigmática, guardé silencio, silencios prolongados.

‘Enigmas de la deseosa’ confluían en tu mente

nunca supiste mis deseos, porque no preguntaste.

Ahí estaba yo, dispuesta a ti.

Se te olvidó que era una asesina por naturaleza y que el fin vendría pronto.

Que no tengo miedo y no soy víctima de nada ni de nadie

 II

tengo las caderas amplias para parir niñes sanos y gordos.

no tengo tetas para alimentarlos.

tengo las caderas amplias para no parir y que en mi muera mi generación.

no fui amamantada.

tengo fijaciones orales

me toco una teta para quedarme dormida

en lo santo y lo profano solo deseo hacer las paces con este cuerpo.

no es fácil morir y nacer del barro una vez más.

no quiero parir a mi madre que me pare a mi

me revelo tocando mi cuerpo fragmentado

en miles de vidrios y espinas.

 III

Sueño en un sueño sumergido

Oí la plegaria de una boca mentirosa

¡Oh! Cómo afilaba su lengua.

Palabra amarga

Asaeteando a escondidas,

No hay temor en su alma

Dice palabras dulces. ¿Quién la ha de ver?

He callado mi alma, he cerrado mis ojos para no ver

Sin embargo, mis oídos no se han adormecidos.

Pido al cielo que me guardé y guardé mi espíritu para no desmayar ante tanta injusticia.
 IV

Damisela del jardín de Las Camelias

Bello es tu jardín con el que pintas de color tu calle.

Damisela de Las Camelias.

Princesa del Under

Amiga de las vecinas que ya están por partir,

¿Cuántos amigxs han estado en tu jardín que ya no están?

¿Cuántos mates has tomado junto a tus amores mientras ves caer las flores de su capullo?

Llegan en otoño y se van en primavera.

Sabes secretos que te los murmuran las flores.

No escondas en tu capullo, Princesa.

Tus amores ahora son ángeles viéndote del cielo,

no temas, tus muertos están contigo y tú con ellxs.

 V

La osadía, vertebra fundamental de mi ser.

La osadía de florecer una y otra vez.

La osadía para gesticular mi propia narrativa del sentir y del decir.

Me quiebran en miles, con piedras punzantes, me duele.

-Mutó -desde mi vientre me gesto.

No ha nacido hombre en la tierra para quebrantarme el espíritu.

Mutilada, quebrada, despedazada

Pareciese repetirse la escena, a pesar de ello

VIVO

Aunque no quieras decir mi nombre

Existo violentamente

Aunque te niegues aceptarlo

EXISTO

Por los siglos de los siglos

Amén
 VI

Mis ancestras dicen que uno tiene la mirada que desnuda el alma

Que desvela los secretos que nadie sabe

Lo siento y me duele.

Obstinados en su propio designio.

Pasa que muchas veces miro sin querer

mirar con los ojos del alma, ver sin querer hacerlo.

Es revelador y doloroso.

Son certezas que nadie sabe solo esas personas y yo.

A medida que voy mutando lo veo con más claridad.

No veo otra respuesta del vivir sin no sentir al otrx.

 Pero hay cosas que mi alma no sostiene

cuando los actos son hechos pensados con maldad y odio.

Prolongan en mi dolor /enfrentamiento definitivamente no puedo guardar silencio.

De soberbia nada, de prudente mucho, de vergüenza poco.

Pido encarecidamente cada día que diosito

me guarde mi corazón de paloma

que jamás me olvide de amar con tanta intensidad y de sentir tan bonito.

Pido que siga siendo revelado mi enigma a los corazones más puros e inmorales de esta

tierra.

Que prevalezca mi reinado, se preserve en los confines de la Tierra.

Al igual que el reinado de las otras reinas que están en el Sur, en el Norte , en el Este y en

el Oeste.
 VII

Si pudiera lamerme la cara lo haría

Me pondría miel y luego me comería.

Volvería a contarte que mis órganos internos son pequeños en relación con mi cuerpo

De mis pies diminutos

Seguiría especulando, porque nací tan bella

dentro de una flor que se renueva cada cierto tiempo.

He hecho lo imposible por renacer en lo absoluto

Es entonces cuando nace mi erotismo de lo absurdo

De seguir soñando con ser otra

Nunca he sido mi enemiga, a cada una que he sido la he abrazado tan fuerte.

He lamido sus yagas, curando las heridas.

Sigo buscando el placer, en cada segundo que respiro.

Habit-ando con ternura y amor

Pisando fuerte

¡Pisa fuerte!

BELLAKA