Como pauta general están decorados con una temática
determinada y con un estilo muy definido, exclusivo y con buen
gusto. Así mismo, están ubicados en las ciudades en zonas emblemáticas y alejadas del turismo de masas. Con este enfoque se pretende que el cliente tenga una experiencia muy distinta a la que se puede encontrar en un establecimiento convencional.
Aunque no existe una definición estricta de hotel boutique, este
género hotelero tiende a tener algunas características comunes.
Principales características:
Los hoteles boutique se caracterizan por contar con pocas
habitaciones -mínimo de diez habitaciones y máximo de 100-. De esta forma, pueden prestar una atención personalizada para el cliente. Dónde encontrarlos
El hotel boutique está destinado a turistas y viajeros que
buscan la exclusividad y por este motivo el establecimiento se ubica en entornos singulares
Muchos de estos hoteles son antiguos edificios clásicos que han
sido remodelados para el alojamiento turístico
Los edificios suelen encontrarse en el centro de la ciudad, desde
donde el turista puede tener acceso directo a las zonas más dinámicas y de compras.
La moda del boutique hotel, cuyo origen se retrotrae a los años
80, suele ser más habitual en grandes ciudades. Algunos están instalados en casas o edificios históricos. Estilo y carácter propio
El boutique es un concepto de hotel con estilo y carácter propio.
Es muy difícil identificar a uno en otro. Cada boutique hotel está pensado para dar una imagen distinta.
Uno de los pocos puntos en común es que todos buscan la
modernidad de sus instalaciones. Atención personalizada
Los hoteles boutique ofrecen una atención personalizada a sus
clientes. Para cumplir con ese objetivo, cuentan con muy pocas habitaciones.
Es importante recalcar que todas estas características van en
la misma línea: ocupar el hueco dejado por las grandes cadenas hoteleras, adaptadas al turismo de masas. Nada de bullicio.
Íntimo y acogedor
El huésped puede disfrutar así de un ambiente de intimidad. Al
tratarse de espacios pequeños y edificios con muy pocas habitaciones, suelen ser valorados por lo acogedor de cada estancia.
Esta característica permite que el huésped sienta que está en
un lugar muy acogedor, donde es atendido de forma personal y el ambiente es relajado para olvidar del bullicio de los grandes resorts Diseño
La arquitectura y el diseño interior de un hotel boutique son
aspectos únicos como sus operaciones, pero siempre de lujo y a menudo combinando detalles históricos con elegancia chic. Las líneas en la estructura y en el interior del hotel pueden ser elegantes y contemporáneas o pintorescas y acogedoras, o incluso presentar una amalgama artística. Los hoteles boutique transmiten un estilo progresivamente vanguardista con una decoración minuciosa. Las habitaciones están decoradas individualmente y cuentan con ropa de cama de alta calidad y servicios exclusivos. Cultura
Como una extensión de la “personalidad única” de cada
propiedad, los hoteles boutique a menudo celebran el sabor local con un fuerte sentido de pertenencia, incorporando materiales de origen local y reflejando la herencia del lugar a través del color y el arte. Los hoteles boutique temáticos construyen toda la experiencia del huésped, desde la decoración hasta los servicios, en torno a un tema particular como el arte, la moda o los deportes. Clientela
Los tipos de viajeros que se sienten atraídos por los hoteles
boutique son tan particulares como los propios hoteles y tienden a ser igual de modernos. Los huéspedes que pertenecen a la generación Millennial o los padres de éstos que disfruten un diseño creativo, el carácter “estrafalario” y un servicio lujoso se sentirán como en casa en los hoteles boutique.
Posee un elevado poder adquisitivo y es una persona exigente
con la calidad de los servicios. Busca la exclusividad y un trato personalizado. Valora el arte en general, la buena mesa y las nuevas corrientes estéticas. En pocas palabras, es alguien con gustos sofisticados. Por otra parte, es más un viajero que un turista.
El hotel boutique tiene normalmente clientes directos, es decir,
aquellos clientes que contratan un alojamiento por ellos mismos y no a través de una agencia o tour-operador.