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1.Introduccion, 2.La teoria del acto juridico consigo mismo en el Peru, 2.2. Requisitos para
la validez del acto jurídico consigo mismo dentro de los actos pertinentes que establecen el
ordenamiento jurídico, 2.3. Efectos del autocontrato, 2.4. Anulabilidad del acto jurídico
consigo mismo, 2.4.1. Las causas de nulidad, 2.5. El acto jurídico consigo mismo según las
distintas legislaciones extranjeras, 2.5.1. El acto jurídico en la legislación cubana, 2.5.2. El
acto jurídico en la legislación Italiana, 2.6.1. El acto jurídico en la legislación del salvador,
2.5.2. El acto jurídico en la legislación Argentina, 2.6.1. La inscripción del autocontrato en
registros públicos como un mecanismo de protección a las partes interesadas, 2.6.2.
Representación, 3.Conclusiones, 4.Bibliografías, 5.Referencias.
RESUMEN
Por medio de este análisis sobre el acto jurídico consigo mismo tocaremos temas que se
involucran para la realización de este acto, la invalidación y la buena aplicación de este acto
jurídico. Actualmente este tema es muy poco estudiado en el ámbito jurídico peruano a
diferencia de otros tipos de actos jurídicos que tienen mayor relevancia hoy en día.
El estudio del Acto jurídico consigo mismo requiere necesariamente la valoración necesaria
de la figura protagonista que es el representante que realiza el acto doble.
Palabras clave: Acto jurídico consigo mismo, representante, autocontrato, efectos, poder,
voluntad, validez, voluntades, ambas partes, anulabilidad, legislación e inscripción, contrato,
ordenamiento, código civil, representación, ordenamiento jurídico, voluntad, eficacia, sujetos
naturales, persona, anulabilidad, esferas jurídicas.
Abstract
Through this analysis of the legal act with itself, we will touch on issues that are involved in
carrying out this act, the invalidation and the proper application of this legal act. Currently
this topic is very little studied in the Peruvian legal field, unlike other types of legal acts that
are more relevant today.
The study of the legal act with itself necessarily requires the necessary assessment of the
leading figure who is the representative who performs the double act.
INTRODUCCION
Hoy en día muchas personas que no estudian el ámbito jurídico, desconocen este tipo de
contrato donde solo actúa una persona en representación de comprador y vendedor,
actualmente está regulado en el artículo 166 del código civil.
Este acto jurídico consigo mismo también llamado autocontratación tiene una gran tradición
histórica por la práctica mercantil, usualmente usado por los banqueros y comisionistas con
autorización de sus clientes para contratos en nombre propio o de representado.
Ubicándonos desde una vista doctrinal nos es evidente los reparos en la paradoja conceptual
donde supone del contrato celebrado por una única persona.
Este acto generalmente se usa con frecuencia en el tráfico jurídico en España, la doctrina trató
de construir la figura a base de posibilidades teóricas.
Con el apelativo de autocontrato se comprende el fenómeno por el cual una persona celebra
un contrato denominado consigo mismo.
De modo que, el término manifiesta la idea de un sujeto que se obliga frente al mismo, que
manifiesta las dos declaraciones, diferentes y normalmente opuestas, en otros términos, es el
caso del representante que ejecuta el negocio en nombre del representado y en el suyo propio.
Con esta noción se determina que el contrato consigo mismo (del griego auto, de autos,
propio, mismo), es aquel acto jurídico que su vinculación es atípica, “celebrado por una sola
persona que obra a la vez como parte directa o como representante de otra, o como mero
representante de las partes en cuyo nombre realiza la operación convencional” (García, 2005,
como se citó en Castellanos, Melo, Micolta, Mosquera, Rodríguez, 2017).
Ejemplo: Juan quiere comprar una casa pero por falta de tiempo le otorgar el poder a Pepe,
para que pueda realizar el acto jurídico, pero Pepe tiene una propiedad que desea vender, así
que ya teniendo la facultad otorgada por Juan realiza el autocontrato en representación de
Juan como comprador y Pepe como vendedor, obteniendo la satisfacción de ambas partes.
Galdres (2019) afirmó lo siguiente:
Para que el contrato consigo mismo sea válido no es necesario la determinación de los
elementos esenciales del contrato, sino es suficiente que, de la autorización a que el
representante concluya un determinado negocio consigo mismo, el representado haya
tomado conocimiento de las medidas o riesgos del negocio en cuestión, riesgo que se
encuentra balanceado por la confianza del representante, lo que sería compatible con
un margen de discrecionalidad del representado en determinación del contenido del
contrato. (p. 222)
El acto jurídico resulta de la voluntad misma del representante y del representado y para
apreciar su eficacia es necesario remitirse a cada una de esas voluntades, el acto jurídico
obran en nombre y por cuenta de otra persona, en otros términos, tiene intención de obrar por
un tercero y manifiesta su intención a aquel con quien contrata, con respecto a este tipo de
acto jurídico, se puede celebran por una persona, pudiendo ser tanto como la parte interesada
y el representante de la otra parte o representante de ambas partes, la primera es una
representación simple y la siguiente se le denomina como una representación doble.
1) Poder para representar a una persona sobre bienes muebles o inmuebles de interés
particular
Poder de disposición de una persona sobre dos patrimonios, ya sea por poseer un poder o
tener la facultad de representación.
2) Existencia de dos patrimonios independientes
3) Una declaración de voluntad ha de ser exteriorizada para que tenga validez en el campo
jurídico
Una caracterización del autocontrato es que no posee reglas particulares y naturalmente solo
se basa en cambiar, fundar, o perecer relaciones jurídicas entre un conjunto o más
patrimonios independientes. Es imposible diversificar los efectos que generaría el
autocontrato, debido a que los efectos del autocontrato dependen mucho del negocio que se
esté efectuando o llevando a cabo.
“Con los nombres de contrato consigo mismo y autocontrato se conoce a la afectación que
realiza una sola voluntad en dos o más esferas jurídicas, por la posibilidad que tiene el titular
de esa única voluntad, en virtud de la representación, de alterar además de la suya, otras
esferas jurídicas al crear, transmitir, modificar o extinguir entre ellas relaciones obligatorias”.
(R. Coello comunicación personal , 2011, pp 14-15)
El auto contrato sería una herramienta compuesta por dos caras para las corporaciones
debido al poder que tiene los representantes legales en este tipo de transacciones, por
cuanto lo sitúa en una posición idónea para satisfacer únicamente sus intereses
personales o particulares, que al permitir desviarse el poder otorgado, conlleva al
conflicto de interés generando riesgos por los actos emitidos e incurriendo a sanciones
jurídicas. (Castellanos, 2017, pp 13-15)
Esta figura actualmente está comprendida en el Art. 166 del Código civil Peruano donde nos
habla de la anulabilidad del acto jurídico del representante consigo mismo.
Es anulable el acto jurídico que el representante concluya consigo mismo, en nombre propio
o como representante de otro, a menos que la ley lo permita, que el representado lo hubiese
autorizado específicamente, o que el contenido del acto jurídico hubiera sido determinado de
modo que excluya la posibilidad de un conflicto de intereses.
El ejercicio de la acción le corresponde al representado.
Conforme a lo visto en el Art. 166 de nuestro Código civil Peruano donde prevé el
autocontrato y lo considera anulable salvo que:
1. La ley lo permita
2. La autorización específica del representado en el contrato de representación donde
explica de manera clara el contenido.
3. Contenido determinado dentro del acto jurídico donde excluya la posibilidad del
conflicto de intereses.
Una interpretación del artículo anterior se ratifica que en el supuesto que se desarrollará un
contrato consigo mismo el hecho sería considerado nulo aspecto que estaría establecido en la
sección quinta del código civil artículo 67° inciso ch al fundamentar que aquellos actos
jurídicos se considerarán nulos si son realizados en contra de una prohibición legal.
El código civil Italiano en los artículos 1394 y 1395, estos códigos regulan la
autocontratación como una institución
2.6.1. EL ACTO JURÍDICO EN LA LEGISLACIÓN DEL SALVADOR
Diversos autores discrepan que tal figura es un dislate jurídico, ya que una persona no es
capaz de dividirse o separarse en dos, en otras palabras, que actúe como el representado y
admita por el mismo, como una de las partes del convenio o contrato y al mismo tiempo sea
representante y consienta por sí mismo, estableciéndose en la parte opuesta.
El auto contrato también se hace presente en la legislación Argentina donde todavía no regula
de manera específica el acto jurídico consigo mismo, en el código civil Argentino en el
artículo 1918 y 1919 donde nos habla de la prohibición de este acto de autocontrato en los
casos donde de manera casuística juzga que existe la posibilidad que los interese del
representado se pueda ver relacionados.
Este prohíbe en los distintos tipos contractuales que sucesivamente tipifica, a saber:
compraventa, locación, sociedad, mandato, contrato oneroso de renta vitalicia, fianza, gestión
de negocios, cesión de créditos y permuta.
Art.1918.- No podrá el mandatario por sí ni por persona interpuesta, comprar las cosas que el
mandante le ha ordenado vender, ni vender de lo suyo al mandante, lo que
éste le ha ordenado comprar, si no fuese con su aprobación expresa,
Art.1919.- Si fuese encargado de tomar dinero prestado, podrá prestarlo él mismo al interés
corriente; pero facultado para dar dinero a interés, no podrá tomarlo prestado para sí, sin
aprobación del mandante.
La inscripción del auto contrato en registros públicos puede servir como un mecanismo de
protección para las partes interesadas porque:
b) Para un mayor control de los mismos sobre el particular, evitar que quede en voluntad
de solamente de la persona que hace el negocio jurídico consigo mismo.
2.6.2. REPRESENTACIÓN
En roma al representante se le denominaba cognitor era aquel que realizaba algo por otro, la
representación de origen voluntaria para los jurisconsultos romanos era una imposibilidad
jurídica, en el derecho germánico el legislador alemán decide otorgar a la representación
voluntaria la calidad de institución jurídica independiente y en el código civil de 1852
influencia romanística y napoleónica legislo la representación legal en relación a la sociedad
conyugal, la patria potestad y la guarda de menores e incapaces.
El acto jurídico puede ser realizado por uno mismo pero también puede ser realizado porque
el derecho lo permite a través de otra persona a quien debemos otorgarle facultades amplias
para que realice este negocio, o acto a nuestro nombre y los efectos que recaigan de esta
manifestación de voluntad van a afectar nuestra esfera jurídica, nuestros intereses mas no el
del representado por eso es que se le llama el milagro jurídico de la bilocación que nos
permite estar en varios lugares y realizar diferentes actos a la misma vez.
El término “representación” desciende del latín “representatio onis” el cual supone la acción
y/o efecto de representar, reemplazar a uno.
Por otro lado, la representación de la facultad permite que una persona represente a dos partes
y finalice con un contrato teniendo su voluntad única o sola. Del mismo modo, “la
representación” es aquella autorización que la ley concibe, o también por el sujeto interesado
a través de un acto jurídico, en donde el representante tiene condiciones y facultades para
poder reemplazar al representado y lograr ocupar su puesto como sujeto de la relación
jurídica.
3.CONCLUSIONES
El término auto contrato es una figura muy complicada ya que esté afecta a terceras personas
cuando su aplicación no es la adecuada, logra un efecto de un contrato “consigo mismo”, ya
que, un sujetó es aquel que representa dos voluntades diferentes. El auto contrato guarda
relación directa con el llamado contrato del mandato, ya que, hace referencia a que la misma
persona ostenta dos diferentes voluntades.
En palabras simples, la figura del autocontrato aparece cuando un mismo sujeto interviene en
un negocio jurídico otorgando más de dos o dos calidades jurídicas.
La legislación comparada que utilizamos en la presente información fue sustancial ya que nos
ayudó a lograr una mejor comprensión del tema, en virtud, que de tal manera se logra ver las
ventajas y desventajas de la regulación expresa y tácita del antes mencionado.
4. BIBLIOGRAFÍAS
5. REFERENCIAS