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Eduardo Moyano Estrada

(IESA-CSIC) Hacia un nuevo agrarismo

■ En este artículo, su autor analiza el La agricultura es un sector tan importante Auge y caída del “agrarismo
discurso “agrarista” y su evolución que su gestión no puede dejarse solo en tradicional”
desde una perspectiva histórica. manos de los agricultores, pero tampoco
Comienza analizando, en primer puede gestionarse adecuadamente sin Durante gran parte del siglo XX, y hasta co-
lugar, los principios ideológicos del ellos. Esta frase, que me gusta utilizar con mienzos de los años 1980, el “agrarismo” era
agrarismo tradicional, dominante frecuencia, refleja muchas de las cuestio- el discurso que predominaba en la mayor
en los países europeos hasta final nes que están hoy en el debate sobre la parte de los países europeos occidentales,
de la década de 1970, e impulsor de función de la agricultura en temas como manifestándose de muy diversas maneras
las políticas agrarias nacionales y el abastecimiento de alimentos, la lucha (en el folklore, la gastronomía, la política…).
de la PAC. En segundo lugar anali- contra el cambio climático, la restauración Según este discurso, la agricultura, y el
za la crisis del discurso agrarista de la biodiversidad vegetal y animal, el mundo rural asociado a ella, representaba
ante las externalidades negativas problema de la despoblación rural, el re- los valores esenciales de nuestra cultura, y la
de los modelos intensivos de agri- to de la digitalización o el desafío de la re- actividad agraria era valorada por su carác-
cultura y el avance del ecologismo. novación generacional. ter estratégico en la producción de alimen-
Finalmente, analiza la reacción ac- Son cuestiones que interesan no solo tos, justificándose así que fuera objeto de
tual del sector agrario, distin- a los agricultores, sino a la sociedad en una especial protección a través de las polí-
guiendo, de un lado, las actitudes su conjunto; de ahí que se sienta con- ticas agrarias. Se consideraba, además, que
de repliegue corporativista y, de cernida toda la población y no solo la el sector agrario era la base del desarrollo de
otro, la emergencia de un nuevo agrícola. la economía de los países no solo como re-
agrarismo, abierto al estableci- Pero los agricultores son un elemento ceptor de la maquinaria y de los paquetes
miento de alianzas con otros gru- esencial del territorio, por lo que sin ellos tecnológicos procedentes de la industria, si-
pos sociales y económicos. muchas de esas cuestiones no podrían ser no también como donante de gran parte de
gestionadas de manera adecuada. la mano de obra destinada a satisfacer las
No es este, por tanto, un debate sectorial, demandas de trabajadores en las nuevas
sino integral, un debate de país, en el que plantas y factorías industriales.
nos jugamos la competitividad de nuestro En ese largo periodo, los agricultores for-
Palabras clave: sistema alimentario, la preservación de maban el grupo social mayoritario en mu-
Agricultura | Ideologías agrarias | nuestros paisajes, la sostenibilidad de nues- chas comunidades locales, y sus organiza-
Sindicalismo | Políticas agrarias | tro medio ambiente y la cohesión de nues- ciones representativas eran reconocidas co-
España | Unión Europea. tros territorios. mo interlocutores privilegiados en las

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la transformación en regadío de las zonas de


secano y el consiguiente trasvase de mano
de obra desde las áreas rurales a las regio-
nes industriales (españolas o europeas).
A escala de la UE, el agrarismo se mani-
festaría con nitidez cuando se creó la PAC
(Política Agraria Común) a principios de los
años 1960 y se implementó su estructura ins-
titucional. En ella, el COPA-COGECA adqui-
riría un estatuto privilegiado de interlocutor
directo ante la DG-Agricultura de la Comi-
sión Europea, participando activamente en
el sistema de gobernanza de la PAC (comi-
tés consultivos agrícolas).
Con el citado proceso de modernización
agraria, impulsado por los avances científi-
cos y tecnológicos de la “revolución verde”
(1960-1970), se dio una situación paradóji-
ca. De un lado, aumentó de forma exponen-
cial la producción agrícola y ganadera, has-
ta el punto de que, en muchos países euro-
A escala de la UE, el agrarismo se manifestaría con nitidez cuando se
peos, entre ellos España, se alcanzó la
creó la PAC (Política Agraria Común) a principios de los años 1960 y se suficiencia alimentaria y se acabaron los
implementó su estructura institucional. En ella, el COPA-COGECA años de penuria.
adquiriría un estatuto privilegiado de interlocutor directo ante la DG- Pero, por otro lado, comenzó en la opinión
pública un proceso gradual de banalización
Agricultura de la Comisión Europea, participando activamente en el
de la agricultura, perdiendo el valor casi sa-
sistema de gobernanza de la PAC (comités consultivos agrícolas) grado que se le había conferido durante si-
glos. Para las nuevas generaciones, criadas
en la sociedad del bienestar, el lazo secular
instancias gubernamentales, tanto nacio- comarcas), le daba una sobrerrepresenta- entre producción agraria y consumo de ali-
nales como europeas. Los ministerios de ción al voto rural, otorgándole, por tanto, al mentos comenzó a deshilacharse, diluyén-
Agricultura encarnaban lo más granado del sector agrario una capacidad de influencia dose ese vínculo emocional y afectivo que se
discurso “agrarista”, formando, junto al sin- en las esferas políticas muy por encima de tenía con la actividad agraria y con todo lo
dicalismo agrario, un lobby poderoso en las su peso real en la economía. Dicha influen- que la agricultura y el mundo rural repre-
instancias políticas de toma de decisiones. cia se plasmaba en la participación de la pro- sentaban.
Su importancia como sector básico de la fesión agrícola en la cogestión de la política Además, la aparición de las primeras ex-
economía y el peso del coste de los alimen- agraria, una profesión encarnada en el sin- ternalidades negativas en los modelos in-
tos en la inflación hacían que la agricultura dicalismo mayoritario representado por el tensivos de agricultura mostró sus efectos
recibiera un trato especial en las instancias tándem que formaban la FNSEA y el CNJA, perniciosos sobre el medio ambiente, así co-
políticas, quedando excluida de las reglas de reconocidos por el gobierno como repre- mo la responsabilidad de esos modelos en
liberalización del comercio internacional sentantes del sector e interlocutores en las la erosión de los suelos, el deterioro del pai-
marcadas por el GATT y luego por la OMC dinámicas de concertación. saje y el agotamiento de los recursos natu-
(Organización Mundial del Comercio). Otros países europeos, como Italia o Ale- rales, con el consiguiente desequilibrio de
Países como Francia hicieron del “agra- mania, no llegaron a tal extremo, pero la pre- los ecosistemas. También comenzaron a ma-
rismo” su principal seña de identidad en ese sencia del discurso agrarista era bien visible nifestarse en el mercado mundial de ali-
periodo, y su agricultura impregnaba en- en los debates políticos y sociales de aque- mentos los primeros efectos disruptivos de
tonces no solo la economía, sino también llas décadas. En el caso español, las políticas las medidas proteccionistas de la PAC (pre-
la cultura, convirtiéndose además en el cen- económicas desarrolladas durante la se- cios de garantía, incentivos a las exporta-
tro de la agenda política y en el motor que gunda etapa del franquismo y los primeros ciones…).
impulsó el desarrollo de otros sectores de la gobiernos de la transición democrática La agricultura se convirtió, por ello, en el
economía durante los “treinta gloriosos” (1960-1980) se inspiraban también en el dis- centro de las críticas de ciertos grupos de
(1950-1980). El sistema electoral francés, ba- curso agrarista de la modernización pro- opinión: sobre todo, de las organizaciones
sado en pequeñas circunscripciones (casi ductiva, desarrollando servicios de exten- ecologistas (haciendo responsable al sector
600 arrondissements, equivalentes a nuestras sión agraria e impulsando la mecanización, agrario del deterioro del medio ambiente y

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los ecosistemas), pero también de los movi-


mientos “altermundistas” (atribuyéndole a
la agricultura y las políticas agrarias euro-
peas la causa de la pobreza en los países en
vía de desarrollo).
Asimismo, el cambio cultural experi-
mentado en las sociedades urbanas (con la
expansión de valores asociados, por ejem-
plo, al bienestar animal y la protección del
medio ambiente), así como las nuevas de-
mandas de los consumidores (respecto a la
calidad y salubridad de los alimentos) y la
creciente percepción de los territorios rura-
les como espacios de ocio y recreación, con-
tribuyeron a que la agricultura en tanto ac-
tividad productiva perdiera relevancia en
la escala de valores de la población europea.

La influencia del ecologismo


Los ministerios de Agricultura han dejado de formar parte del lobby
Eso explica que en las tres últimas décadas,
y como reacción al predominio secular del agrario para transformarse en departamentos encargados de
agrarismo, se haya ido imponiendo un dis- gestionar un sector cada vez más complejo y diverso. Ello les obliga a
curso alternativo cada vez más contrario al abrir las puertas de la interlocución a otros grupos de intereses
desarrollo productivista de la agricultura. Es
(industria, comercio, gran distribución, redes de desarrollo rural,
un discurso basado en los principios del eco-
logismo militante y construido en los me- organizaciones ecologistas, consumidores…) en detrimento del
dios urbanos, aunque con estrechas alian- monopolio que tradicionalmente ha ejercido el sindicalismo agrario
zas con los movimientos de la agroecología en esta área de la representación
y con los grupos que practican la agricultu-
ra ecológica (muchos de ellos de origen tam-
bién urbano). munidades locales; la expansión de los mo- ella, además de los agricultores, otros gru-
Es un discurso que algunos califican de delos industriales en el sector agrario (oli- pos de intereses distintos de los agrarios:
“antiagrarista” en la medida en que no solo vares, viñedos y frutales en seto altamente biólogos de la conservación, cazadores, pro-
excluye a los agricultores vinculados a los mecanizados; macrogranjas y explotaciones pietarios forestales, fondos de inversión, em-
modelos convencionales e intensivos de ganaderas hiperintensivas…); la aplicación presarios promotores de actividades diver-
agricultura, sino que incluso los desprecia de la robótica en las labores agrícolas y su sas (turismo rural, deportes de naturaleza…),
(agribasching) por considerarlos beneficia- gradual externalización a empresas de ser- inversores en el área de las energías renova-
rios de unas obsoletas e injustificables polí- vicios; la distancia creciente entre produc- bles, consumidores… Es una comunidad de
ticas corporativas de carácter asistencial, tores y consumidores en el marco de la ca- intereses amplia y diversa en la que los agri-
atribuyéndoles, además, la responsabilidad dena alimentaria; la disminución de la in- cultores y sus organizaciones perciben que
del deterioro del medio ambiente, la con- fluencia política de las élites agrarias, tanto están perdiendo la influencia que histórica-
taminación de las aguas y el agotamiento de a nivel local como nacional y europeo; el mente habían tenido, sintiendo por ello frus-
los recursos naturales en su afán por extraer cambio de valores culturales en las socieda- tración, incomprensión y desprecio, cuando
de la naturaleza el mayor beneficio econó- des desarrolladas hacia el predominio de va- no acoso, por parte de esos otros grupos.
mico posible. lores “posmaterialistas” que, como he seña- Este sentimiento se manifiesta en oca-
Este discurso, en el que algunos analistas lado, sacralizan el medio ambiente y mitifi- siones tales como las siguientes: la declara-
ven ciertos rasgos de supremacismo ecolo- can la naturaleza como un espacio prístino ción de un territorio rural como zona ZEPA
gista, se aprovecha de la pérdida de in- que habría sido expoliado por el ser huma- (red Natura 2000) o reserva de la biosfera,
fluencia del agrarismo y se alimenta además no a través de actividades como la agricul- con las consiguientes restricciones a la acti-
de varios hechos: la reducción de la impor- tura y la ganadería. vidad agraria; la prohibición de la caza de
tancia de la agricultura en el PIB nacional; el Todo ello se refleja en la creciente am- ciertas especies consideradas dañinas para
descenso de la población agrícola, que pasa pliación de la comunidad de intereses aso- la cabaña ganadera, como el lobo; las cre-
a ser una minoría entre otras en muchas co- ciada a la agricultura, formando parte de cientes limitaciones a la utilización de de-

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terminados herbicidas (como el glifosato); nisteriales, de tal modo que la regulación del cultores siguen afectados por los mismos
la autorización de importaciones de pro- sector agrario acaba siendo, de hecho, obje- problemas que antes del coronavirus (pre-
ductos agrícolas procedentes de países ter- to de intervención de otras estructuras de cios bajos, altos costes de producción, asi-
ceros; los crecientes controles administrati- gobernanza. metría en su relación con la industria y la
vos de la actividad agraria, percibidos por los En la UE, el sistema de gobernanza de la gran distribución, escasa rentabilidad de las
agricultores como muestra de desconfianza PAC también ha cambiado y ya no es patri- explotaciones, competencia de los produc-
hacia ellos… monio del sector agrario, sino diverso y com- tos foráneos…).
Este proceso de cambio va, además, partido por otros grupos de intereses. De he- Es por todo ello que los agricultores se
acompañado en el ámbito político-institu- cho, la DG-Agri no tiene ya como exclusivo sienten no solo no reconocidos suficiente-
cional de reformas significativas en la es- interlocutor al COPA-COGECA, sino que mente por la sociedad, sino también igno-
tructura de gobernanza. En este sentido ve- comparte la interlocución con otros grupos rados, cuando no despreciados por lo que ca-
mos cómo los ministerios de Agricultura han agrarios (como las organizaciones sectoria- lifican de supremacismo de los grupos eco-
dejado de formar parte del lobby agrario pa- les o las de la producción ecológica). Por su logistas, grupos que, en opinión de muchos
ra transformarse en departamentos encar- parte, el proceso de codecisión (trílogos) pa- agricultores, solo se relacionan con la natu-
gados de gestionar un sector cada vez más ra la aprobación de las políticas comunes raleza desde el confort de las ciudades y los
complejo y diverso. Ello les obliga a abrir las abre la puerta a la participación activa del despachos académicos de los intelectuales
puertas de la interlocución a otros grupos de Parlamento Europeo, y no solo a su comisión y profesores universitarios. Muchos agricul-
intereses (industria, comercio, gran distri- de agricultura (ComAGRI), sino también a la tores perciben, además, que estos grupos
bución, redes de desarrollo rural, organiza- de medio ambiente (ComENVI), cada vez tienen cada vez mayor influencia en las ins-
ciones ecologistas, consumidores…) en de- más influyente en todo lo relacionado con la tancias políticas de decisión, tal como ob-
trimento del monopolio que tradicional- PAC. servan en temas tales como la orden de in-
mente ha ejercido el sindicalismo agrario en Los agricultores perciben todo ello como clusión del lobo en la lista de especies pro-
esta área de la representación. una pérdida, como una falta de reconoci- tegidas, aprobada a espaldas del sector
En algunos países se ha llegado incluso a miento de la función cuasi sagrada que cre- ganadero, la normativa sobre purines o el
la práctica desaparición de los ministerios en aún desempeñan en las sociedades mo- etiquetaje de Nutriscore, por citar solo al-
de Agricultura, quedando las competencias dernas en todo lo relacionado con la pro- gunos ejemplos.
en materia agraria disueltas en un magma ducción de alimentos. La alta valoración Asimismo, la aprobación, sin consultar al
diverso de áreas competenciales. En otros social recibida por su contribución al abas- sector agrario, del documento sobre el Pac-
países, aunque se haya mantenido la es- tecimiento alimentario durante la pande- to Verde Europeo, y en especial la estrategia
tructura tradicional de la gobernanza agra- mia Covid-19 les satisface sin duda, pero la “De la granja a la mesa”, está causando te-
ria, la realidad es que se van trasladando en sienten más como un reconocimiento de la mor entre los agricultores, debido a las fuer-
un goteo constante materias relacionadas cadena alimentaria en su conjunto que del tes restricciones que puede suponerles en
con la agricultura a otros departamentos mi- sector productor, que ve cómo muchos agri- materia de uso de fertilizantes o plaguicidas.

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Es un temor que se ha visto agravado con el ro corte poujadista) y que en otros países se el acceso de las mujeres a la titularidad de
interés de la Comisión y el Parlamento de in- ha expresado de forma más pacífica en las las explotaciones y a los órganos directivos
cluir los objetivos de dicho Pacto Verde en grandes manifestaciones de finales de 2019 de las organizaciones profesionales y coo-
las negociaciones de la nueva PAC, en de- y principios de 2020. perativas, y que son conscientes de que no
trimento de las ayudas directas. Es evidente que esta reacción corporati- pueden afrontarlos ellos solos encerrándo-
Por su parte, el tema de incluir la “condi- va no encaja con el signo de los tiempos, ni se en un mundo rural que ya no existe. Es por
cionalidad social” como un añadido a las ya con las grandes tendencias de cambio eco- ello una reacción que intenta construir
fuertes exigencias ambientales (greening) nómico y cultural, y que corre el riesgo de puentes con otros grupos y que aspira a cre-
para el cobro de las ayudas del primer pilar verse enquistada en un programa de reivin- ar relaciones de confianza y capital social ti-
de la PAC es percibido también por los agri- dicaciones sin salida. Pero es también evi- po "bridging".
cultores como una nueva injerencia y una dente que refleja el malestar que existe en- Son agricultores que, además de produc-
prueba evidente de desconfianza respecto tre amplios grupos de agricultores. Es un tores, se sienten parte de la sociedad; que
del sector productor. El sector la considera, malestar que no puede, ni debe, ser ignora- comparten las bondades y deficiencias del
además, una medida innecesaria por cuan- do, ni por los responsables políticos ni por sistema de bienestar; que observan las difi-
to que todos los titulares de explotaciones los representantes del sindicalismo mayori- cultades de sus hijos e hijas para sacar ade-
están obligados a cumplir la legislación la- tario, a fuer de ver un sector agrario en per- lante sus proyectos de vida, y que están de-
boral, y el no hacerlo les haría incurrir en fla- manente estado de revuelta, con los disrup- cididos a participar en los debates sobre las
grante ilegalidad a perseguir por la Inspec- tivos efectos colaterales que ello puede oca- grandes cuestiones que afectan hoy a la agri-
ción de Trabajo. sionar. cultura. Perciben que son cuestiones que no
En ese contexto pueden observarse dos Es, además, un movimiento de reacción son ya patrimonio exclusivo del sector agra-
formas de reacción por parte de los agricul- emocional (tipo "bonding", según la termi- rio, sino que forman parte de las preocupa-
tores y sus organizaciones: una, de repliegue nología del enfoque del capital social), difí- ciones e intereses de la sociedad en su con-
corporativista y, otra, de apertura hacia un cil de contrarrestar con razones, y al que so- junto.
nuevo agrarismo. lo le valen los hechos: mejores precios, re- Reconocen sus problemas en tanto pro-
ducción de costes, protección de los ductores, pero están decididos a buscar el
productos nacionales, relajación de los con- modo de solucionarlos en alianza con otros
Repliegue hacia un agrarismo troles medioambientales, eliminación de las grupos sociales. Ven, por ejemplo, la PAC co-
corporativista prohibiciones a las actividades tradiciona- mo una red de seguridad para la renta de los
les, levantamiento de las restricciones a la agricultores, aunque no entienden que su
Encontramos, en efecto, una reacción de- actividad agraria… Esa es su fuerza en tanto deriva ambientalista se haga en detrimen-
fensiva, de repliegue corporativista, de ce- banderín de enganche para muchos “agri- to de las ayudas directas, lo cual no les im-
rrar filas ante lo que perciben como un aco- cultores al límite”, más también su debilidad pide valorar positivamente el programa
so desde fuera del sector agrario. Es una re- en tanto son reivindicaciones imposibles de agroambiental o la figura de los “ecoesque-
acción que puede verse como una especie de canalizar y de aceptar por parte de los po- mas”. Ven también la PAC como una opor-
resentimiento ante lo que perciben como su- deres públicos, cuyas competencias son más tunidad para impulsar fórmulas de coope-
premacismo de los ecologistas, sintonizan- limitadas de lo que creemos. ración con la comunidad científica para la
do políticamente con el populismo de dere- resolución de problemas específicos en el
cha (FN en Francia, Vox en España), cuyos marco de los “grupos operativos” de la AEI,
partidos encuentran en el malestar agrario Bases de un nuevo agrarismo pero eso no les impide criticarla. Por ejem-
un buen caldo de cultivo, un buen caladero plo, critican que no se les ofrezcan alternati-
de votos. Pero es también una reacción que De otro lado, vemos una reacción no corpo- vas a los productores para que puedan adap-
amenaza con romper la unidad interna de rativista, sino abierta y en constante bús- tarse al marco regulatorio del nuevo Pacto
los sindicatos agrarios mayoritarios, tal co- queda de alianzas con grupos y movimien- Verde en materia de fertilizantes o plaguici-
mo ya está ocurriendo con la emergencia de tos sociales no vinculados directamente con das, por lo que abogan por participar en su
nuevos sindicatos, receptivos al discurso del la actividad agraria, pero presentes de algu- implementación en vez de rechazarlo sin
agrarismo corporativista. na forma en los debates sobre la agricultu- más, exigiendo de la Comisión Europea la fi-
Su actitud contraria al proceso de globa- ra y los territorios rurales. Son agricultores jación de periodos transitorios.
lización, su reivindicación de la soberanía de muy diversas características sociales y Son asimismo conscientes de la asimetría
nacional en materia de protección en fron- económicas, pero que se esfuerzan por re- de los agricultores dentro de la cadena ali-
teras o el ensalzamiento de los valores tra- novar el discurso agrarista intentando com- mentaria, pero apuestan por una mejor ver-
dicionales asociados al mundo rural (como prender la complejidad de los tiempos ac- tebración de la producción a través de for-
la caza) son elementos de este discurso cor- tuales; que asumen los retos y desafíos que mas asociativas más eficientes abogando
porativista, que se ha manifestado de forma se les plantea en materia de innovación tec- por la negociación con el resto de los actores
virulenta en países como Francia (con el mo- nológica, cambio climático, digitalización y del sistema alimentario (industria, distribu-
vimiento de los “chalecos amarillos” de cla- renovación generacional; que apuestan por ción…) en el marco de las denominaciones

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de origen y de las estructuras interprofesio- con la empresa Lidl para la promoción del los fondos de recuperación y resiliencia (next
nales, y mediante mejores y más eficaces fór- aceite de oliva a precios dignos, por encima generation) procedentes de la UE.
mulas contractuales. de los costes de producción). En ese contexto es más necesario que
Saben además que gran parte de nuestra En esa búsqueda de alianzas se presen- nunca renovar las bases del discurso agra-
agricultura tiene vocación exportadora y de- tan ante los demás y ante la sociedad con el rista, realzando la importancia de la agri-
pende de la existencia de mercados abiertos orgullo de ser y sentirse agricultores, pero cultura en el bienestar de la sociedad y en el
y transparentes. Asimismo, apuestan por in- no desde la pretendida supremacía moral desarrollo y cohesión de los territorios, pero
troducir nuevas prácticas agrícolas (produc- del agrarismo corporativo, sino desde la haciéndolo no desde un repliegue hacia va-
ción integrada, agricultura de conserva- conciencia de que la agricultura es un asun- lores de un mundo ya pasado, sino desde
ción…), así como tecnologías de precisión pa- to de todos y no solo de los que trabajan la una apertura hacia el futuro, con todas sus
ra reducir los costes (energéticos y tierra y gestionan lo mejor que pueden sus contradicciones y oportunidades.
productivos) y mejorar la eficiencia y la com- explotaciones. Sentirse agricultores no les Para ello es importante que ese discurso
petitividad de las explotaciones. ciega ni les hace caer en la ensoñación de encuentre receptividad en los grupos so-
Además, impulsan formas innovadoras verse diferentes, ni tampoco les impide sen- ciales a los que se dirige y en las correspon-
de relación con los consumidores, como los tirse ciudadanos que forman parte de una dientes instancias políticas, transformando
circuitos cortos, y diversas modalidades de comunidad más amplia de valores com- las palabras en hechos. Precisamente por no
interacción con la sociedad civil y el mundo partidos. ser un discurso emocional, sino construido
cultural (campañas de apadrinamiento a de- sobre la base de las razones y los argumen-
terminadas especies de árboles, programas tos, necesita que su esfuerzo de convicción
etnológicos en el campo de la olivicultura y Reflexiones finales se traduzca en resultados tangibles para po-
la viticultura, ferias de arte, degustaciones der así contrarrestar el discurso corporati-
gastronómicas a pie de granja…). Entre el repliegue corporativista de unos y el vista que se extiende entre los agricultores.
No es esta, por tanto, una reacción cor- agrarismo abierto y renovado de otros dis- Por eso, es preciso que los poderes públi-
porativista y excluyente como la otra, sino curren hoy los debates sobre el papel a des- cos sean especialmente sensibles a lo que
consciente de la complejidad del escenario empeñar por la agricultura ante los grandes representa este nuevo agrarismo, recono-
en que les ha tocado vivir a los agricultores retos que tiene la UE y que tiene España co- ciéndole con hechos el importante papel
y abierta a la búsqueda de alianzas con otros mo país. Y todo ello a la espera de que se im- que desempeñan las organizaciones profe-
grupos sociales (por ejemplo, la participa- plemente la nueva PAC pos-2021, se aprue- sionales en la articulación del sector agra-
ción de algunas organizaciones agrarias en ben los Planes Estratégicos, finalice el pe- rio y en la necesaria interlocución social y
el Foro Rural Mundial o el acuerdo de UPA riodo de pandemia y sepamos aprovechar política. ■

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