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PRIMERO: A fin de mayor ilustración, se abordara los siguientes puntos relevantes: se


describirán los elementos típicos de los hechos punibles invocados, se hará un recuento
del cuaderno de revocatoria de suspensión de la pena del expediente número 1215-2015-
70, y finalmente se efectuara el análisis lógico jurídico de lo actuado en sede de ejecución,
con el objeto de determinar si concurren los requisitos de procedencia para formalizar y
continuar la investigación preparatoria, esto es si aparecen los indicios reveladores de la
existencia de un delito, que la acción penal no ha prescrito, que se ha individualizado al
imputado y que, si fuera el caso, se han satisfecho los requisitos de procedibilidad,
conforme lo indica el artículo 336 numeral 1 del Código Procesal Penal de 2,004.”.

SOBRE EL DELITO DE PREVARICATO: Señala que el prevaricato de derecho, se


materaializa cuando el juez o fiscal dicta resolución o emite dictamen manifiestamente
contrario al texto expreso y claro de la ley. El mismo, que contravenga la afectación de la
correcta administración de justicia. Además señala que desde el aspecto subjetivo, se
requiere la concurrencia de un actuar “DOLOSO”. Aquí se exige, en buena cuenta, que el
Juez o Fiscal sea consiente que la decisión adoptada rebasa los márgenes de la corrección
aplicativa del derecho que conoce, que se fundamente (…), en la aplicación de una ley no
vigente o inexistente en el ordenamiento jurídico (elemento cognitivo), de tal manera
que su voluntad está dirigida a realizar el tipo penal, en base a dicho conocimiento
(elemento volitivo); sin embargo, su respetado y honorable despacho, únicamente ha
considerado, que en el caso concreto (revocatoria de pena suspendida por una de carácter
efectiva- Expediente 1215-2015-70), ha considerado, la existencia de a contravención del
artículo 67 del Código Penal, que textualmente señala lo siguiente: “si el régimen de
prueba no fuere revocado será considerado extinguido al cumplirse el plazo fijado
y el juzgamiento como no efectuado”; el mismo que aparentemente, se habría
incurrido, sin embargo, debo precisar que en el caso concreto se emitió la resolución 10
de fecha 12 de setiembre de 2,018, el mismo que ha sido expedida en audiencia pública,
previamente convocada por el especialista de causa ante requerimiento de parte por el
Fiscal Provincial competente EDWIN GARCÍA PALOMINO: es así, que en dicha fecha se
desarrolla la citada audiencia, por encontrarse debidamente acreditado todo los sujetos
procesales (presente el representante del Ministerio Público, defensa pública del
sentenciado- MOISES ROJAS VELASQUEZ quien es el abogado defensor que tomo
conocimiento el proceso de audiencias anteriores y que presento depósitos judiciales de
pagos parciales por concepto de reparación civil, y que en la audiencia de revocatoria de
pena ha solicitado se dicte amonestación en contra de su patrocinado), quienes en todo el
debate, no ha cuestionado ni alegado la vigencia o extinción del periodo de prueba
limitándose a cuestionar el pago de reparación civil e incumplimiento de reglas de
conducta, es decir sin cuestionar otros extremos que los ya alegados [ver CD audio de
audiencia de fecha 12 de setiembre de 2,018 o transcripción del registro de audio de
la mencionada audiencia], denotándose así, que la instalación de audiencia y el debate
correspondiente ha sido llevado a cabo conforme a ley, ejerciendo ambas partes su
derecho de defensa y contradicción, además debo precisar que concluido el debate
respectivo, en la misma fecha de la audiencia se procede a expedir resolución diez de
fecha 12 de setiembre de 2,018, por la que se resuelve declarar procedente el
requerimiento de revocatoria de pena suspendida por la de carácter efectiva, postulado
por el representante del Ministerio Público en contra del sentenciado Angelo Cabrera
García, por el delito de Homicidio Culposo en agravio de Celestino Trujillo Atachagua, y se
dispone su ubicación y captura a nivel nacional, regional y local, debiendo cumple pena
con sentencia efectiva, por el plazo de tres años, la misma que se computara a partir de
su captura policial correspondiente; siendo esta resolución judicial puesta a conocimiento
de los sujetos procesales (Ministerio Público, defensa técnica del sentenciado, parte
agraviada y la propia parte sentenciada), conforme es de verse de fojas 97 a 100,
específicamente al sentenciado en su domicilio real señalado en autos, conforme es de
verse de la cedula de notificación N° 30333-2018.JR-PE., y aviso judicial donde se
consigna casa material noble, puerta de metal color negro y sin número de suministro
eléctrico, por el cual se deja la resolución 10 a fojas tres, por debajo de la puerta con
fecha 18-09-18; demostrándose así, como primer hecho: a) Que el magistrado
investigado, no ha actuado MANIFIESTAMENTE con actuar doloso y con el fin de
favorecer a ninguno de los sujetos procesales: Según la Real academia dela Lengua
española “manifiesto”, es lo que esta descubierto, es patente o claro. Por ello, el legislador
nacional ha puesto expresamente un límite a la tipicidad del prevaricato, es decir no
cualquier acto de aplicación de ley, no cualquier cita de pruebas o hechos falsos, no
cualquier cita de ley derogada o supuesta será prevaricato. Aun en la hipótesis de que el
acto objetivamente considerado sea manifiestamente contrario a la ley, pueda
plantearse un error sobre el tipo. Se trataría de una causal de atipicidad, antes de
inculpabilidad, edificada sobre la equivocación respecto de la interpretación de un
elemento normativo del tipo1. En ese orden de ideas, se tiene, que respecto a la actuación
judicial del magistrado investigado se ha sujetado al rol de Juez, por haber dirigido la
audiencia de revocatoria de pena conforme al reglamento de audiencia, y por haber
resuelto conforme al debate sostenido en audiencia, en cuya audiencia ninguna de las
parte a puesto a conocimiento de que el régimen de prueba del presente proceso penal se
encontraría vencido; en ese sentido, si bien es cierto, que el A quo, ha incumplido su
deber de juez de expedir resoluciones fundadas en derecho, no es menos cierto, que dicha
exigencia de derecho no determina a la concreción de una de las formas de realización de
prevaricato, por cuanto en el caso de la audiencia de fecha 12 de setiembre de 2,018, es el
propio Representante del Ministerio Púbico como defensor de legalidad, quien sustenta
oralmente su pretensión de revocatoria de pena suspendida por una de carácter efectiva,
asimismo es el propio abogado defensor del sentenciado Angelo Cabrera, quien en todo
momento sustenta su requerimiento de revocatoria de pena como si el proceso penal se
encontraría dentro del periodo de prueba vigente, y que por el contrario el abogado
defensor requiere una amonestación a efectos de que cancele el pago total de la
reparación civil, demostrándose así, que la expedición de la resolución 10 de fecha 12 de
setiembre de 2,018, ha sido expedida conforme a los lineamientos que establece la
Resolución Administrativa N° 014-2017-CE-PJ de fecha 11 de enero del año 2,017:
“Reglamento del Nuevo despacho Judicial del Módulo penal Corporativo de las Cortes
Superiores de justicia de la República”, por lo que en mérito a dicho Reglamento, se ha
cumplido la regla prevista en el artículo 77, 78 y 81,dónde exclusivamente el magistrado
suscrito, ha garantizado y respetado, el acceso al derecho de defensa, igualdad de armas
y derecho de contradicción sino también, que el Juzgador, ha emitido resolución final,
tomando en cuenta, el sustento del requerimiento fiscal y contradicción de la defensa
pública del sentenciado Angelo cabrera García e incluso teniendo en consideración lo
vertido por la defensa pública de la parte sentenciada, quien en dicha audiencia se limita
en forma expresa a solicitar amonestación en contra de su patrocinado. Por tanto se
determina que son las propias partes procesales quienes han inducido al magistrado
investigado a incurrir en error o vicio procesal, es decir a expedir una resolución
judicial contraria a derechos, e incluso la parte sentenciada pese haber interpuesto
recurso de apelación no ha fundamentado dicho recurso impugnatorio, y que dicha
omisión solo debe ser de relevancia a la defensa de la parte sentenciada; Asimismo el
propio sentenciado ha sido puesto a conocimiento de la resolución 10, en su domicilio
real (ver cédula de notificación N° 30333-2018.JR-PE), demostrándose así, que las
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Código Penal Comentado
propias partes procesales consideraban que la resolución diez, no les causaba ningún
agravio, por no haber cuestionado o reclamado contra dicha resolución en primera
oportunidad, sino en fecha posterior. De allí que en el caso concreto, no se cumple lo
examinado en la Jurisprudencia recaída en el Exp. N° 3412-97 de fecha 12 de mayo
de 1,998, El Juez Penal ha expedido en forma indebida resolución favorable para
el otorgamiento del beneficio de libertad provisional sin antes pronunciarse
respecto a la denuncia ampliatoria efectuada por el Fiscal provincial y la medida
de coerción que correspondía, transgrediéndose el artículo 77 del Código de
Procedimientos Penales y artículo 182 y 183 del CPP; por cuanto la conducta del
magistrado investigado, surge como consecuencia de la oralización del requerimiento del
Fiscal Provincial Penal- revocatoria de pena suspendida por una de carácter efectiva en
contra del sentenciado Angelo cabrera García, quien en todo sus sustento oral
únicamente señala que la parte sentencia no ha cumplido con el pago total de la
reparación civil fijado en la sentencia condenatoria por el delito de Homicidio culposo y
que ha incumplido con la reglas de conducta fijadas en dicha sentencia, por lo que
solicita en forma expresa y oral revocar la pena privativa de libertad de carácter
suspendida por una de carácter efectiva; asimismo su abogado defensor público (Moisés
Rojas Velásquez) quien únicamente en el traslado del citado requerimiento, como
argumento de defensa, preciso que se debe amonestar a su patrocinado, a afectos de
requerir al sentenciado Angelo Cabrera , para que cumpla con la totalidad de los S/.
400.00 soles, asimismo dentro del presente cuaderno se aprecia que el abogado defensor
público es quien consignado dos depósitos judiciales de pago parcial de reparación civil
mediante escrito de fecha 20 julio 2017 depósito judicial N° 2017000701075 por cinco mil
soles y mediante escrito de fecha 21 de julio de 2,017 la suma de S/. 4,658.00 mediante
depósito judicial N° 2017049000765, incluso el requerimiento del representante del
Ministerio Publico ha sido reprogramado en distintas oportunidades; demostrándose así,
que la defensa pública tenía pleno conocimiento del trámite de la ejecución del
sentenciado Angelo Cabrera, aspecto por las cuales, se concluye, que su honorable y
respetable despacho, no ha considerado dichos extremos, que constituyen en
actuaciones procesales, que demuestra que la conducta del magistrado
investigado, surge como consecuencia de una estructurada o edificada sobre la
base de la equivocación o error de la aplicación de la norma legal (artículo 59.3
del CPP), por parte del titular de la acción penal corroborado por la defensa
técnica de la parte sentenciada; máxime, si en la investigación preliminar no se ha
demostrado que dicha decisión jurisdiccional haya sido para beneficiar a alaguna de los
sujetos procesales.

b) De la existencia del DOLO como elemento cognitivo u elemento volitivo:

El autor Rojas Vargas, comenta respecto del elemento a sabiendas del artículo 418 del
Código Penal. “Existiendo ley expresa sobre un determinado aspecto de la
regulación jurídica o del desempeño funcional, que es (debe ser) de conocimiento
del magistrado, y en tal contexto este desacata el texto expreso de la norma, para
optar un criterio personal o discrecional o simplemente para apartarse del cauce
legal, ello será suficiente para configurar un marco de actuación infractor de la
norma penal, por el tipo penal 418 (…)”; En, tal sentido, en el caso materia de análisis,
se desprende, que existe ausencia del dolo en la conducta del magistrado Adler
Justiniano Guerra, por cuanto, si bien es cierto que el A quo, debe conocer el derecho, no
es menos cierto, que en la audiencia pública de revocatoria de pena, se encontraban
presente el Ministerio Publico y defensa pública del sentenciado Angelo cabrera García,
en cuyo debate ninguno de los sujetos procesales (Ministerio público ni defensa pública
de la parte sentenciada), han cuestionado o reclamado o alegado sobre el vencimiento del
periodo de prueba, por cuanto ambos sujetos procesales consideraban que el expediente
1215-2015-97, se encontraría dentro del periodo de prueba, por lo que el extremo del
vencimiento del periodo de prueba no ha sido materia de debate y consecuentemente no
ha sido analizado ni sustentado en la motivación interna y/o externa de la resolución 10
de fecha 12 de setiembre de 2,018; aspecto por el cual se demuestra que en la
conducta o comportamiento desplegado por magistrado investigado en la audiencia
de revocatoria de pena de fecha 12 de setiembre de 2,018, no se advierte CRITERIO
PERSONAL O DISCRECIONAL para apartarse del texto expreso del artículo 59.3 del
Código Penal, por cuanto la motivación y sustentación de la resolución 10, se
encuentra conforme a lo solicitado por el Fiscal Provincial Penal de Leoncio Prado y
ante la posición de la defensa pública de parte sentenciada, quien únicamente
requería una amonestación en contra de su patrocinado, y que específicamente
dichas partes procesales no han alegado aplicación o interpretación distinta del
artículo 59.3 del Código Penal. Por ello se determina que en el caso concreto, no
existe indicio alguno o acto de investigación cierto, que acredite que el Juzgador, ni
el Fiscal ni abogado defensor, hayan actuado a SABIENDAS o con intensión
MANIFIESTA de contravenir norma expresa de que el periodo de prueba del
sentenciado se encontraría vencido, y que vía interpretación o cita de alguna norma
desvíe la aplicación del citado dispositivo legal. Más aún, si en los actos procesales
del presente proceso penal, no se advierte indicio alguno que demuestre en forma
evidente que la expedición de la resolución 10, haya sido con fine de favorecer a
alguna de las partes procesales, ya que dicha resolución no genera beneficio de
libertad, excarcelación devolución de bien u otro a fin similar; Además debo precisar
que la falta de DOLO del magistrado suscrito, se demuestra con el hecho de que la
resolución 10, de fecha 12 de setiembre de 2,018, no sólo ha sido notificado al abogado
defensor dela parte sentenciada, quien pese haber interpuesto su recurso de apelación y
haberse reservado su derecho de fundamentación legal y procesal, vencido el plazo no ha
cumplido con fundamentar su recurso impugnatorio de apelación, demostrándose así su
desinterés o renuncia tacita a acceder a la mencionado medio impugnatorio. Asimismo
por el hecho de haberse puesto a conocimiento de la parte sentenciada, el contenido de la
resolución 12 en su domicilio real señalado en auto, ver cedula de notificación de fojas 99
a 10 del expediente 1215-2015-97; en ese sentido, con el debido respeto, a vuestra
honorable Fiscalía dela Nación, me permito sostener lo siguiente, que el delito de
prevaricato no se configura, por el siguiente hecho: i) El Fiscal provincial competente, al
sustentar su requerimiento fiscal de revocatoria de pena suspendida por una de carácter
efectiva, en ninguno de sus extremos alega o cita la aplicación del artículo 67 del Código
Penal, sino únicamente postula su revocatoria de pena por incumplimiento del pago de
reparación civil y reglas de conducta fijadas en la sentencia conformada. (ver registro de
CD audio de fecha 12-09-19 y demás anexos) ii) El abogado defensor público del
sentenciado Angelo cabrera García, al ejercer su derecho de defensa técnica únicamente
ha requerido que se dicte en contra de su patrocinado una amonestación hasta requerir
la cancelación del pago de reparación civil total de cuatrocientos soles. (ver registro de CD
audio de fecha 12-09-19, acta de audiencia y demás anexos); c) la parte sentenciada no
ha fundamentado su recurso de apelación contra la resolución diez, y el propio
sentenciado pese haber tomado conocimiento de la mencionada resolución, ha
renunciado tácitamente a ejercer su recurso impugnatorio de apelación y contrariamente
acepta la conformidad de la resolución 10. En tal sentido, LA formalización y
continuación de la investigación preparatoria se refiere al tipo penal de prevaricato,
subsumido a una ley expresa en este caso al artículo 67 del Código Penal, sin embargo
dicha norma sustantiva no ha sido invocada por el magistrado investigado ni por las
partes intervinientes en la audiencia de revocatoria de pena de fecha 12 de setiembre de
2,018, y que ante dicha circunstancia, la mencionada norma (art. 67CP), no ha sido
invocada ni sustentada en el debate ni la fundamentación dela resolución 10 de fecha 12
de setiembre de 2,018, con lo que se demuestra en forma evidente que el recurrente, en
ningún momento ha hecho cita expresa u oral del artículo 67, así como tampoco ha
realizado MANIFIESTA interpretación de mala fe respecto a la citada norma
sustantiva( Régimen de prueba vencido) y que jamás se ha realizado un argumento
forzado para la materialización de la resolución 10. Por tanto, concluyo, que es
indispensable considerar por su despacho, tener en cuenta el propósito que ha guiado al
magistrado investigado para dictar o expedir la resolución 10, por lo que al analizarse
todo aquello que pertenece a la dirección de voluntad del autor, se aprecia, que la
voluntad de revocar la pena suspendida a una efectiva no ha sido decretada de
oficio sino por petición expresa y oral del Fiscal Provincial Penal competente, y por
la propia conformidad de la defensa técnica de la parte sentenciada, quienes
indujeron a error al magistrado suscrito.

DERECHO PENAL ULTIMA RATIO: El Derecho Penal es la última ratio, debiendo ser el
último recurso que debe de utilizar el Estado cuando se carece de otros menos lesivos.
Aunque el Derecho Penal sólo debe proteger bienes jurídicos, esto no quiere decir que
todo bien jurídico tenga que ser protegido por el Código Penal, así como, tampoco que en
todas las violaciones a los bienes jurídicos penalmente tutelados deba de tener
intervención el Derecho Penal. En ese marco de ideas, por el error de la expedición de la
resolución 10 de fecha 12 de setiembre de 2,018, La Jefatura de ODECMA mediante
resolución número 11 de fecha 21 de abril de 2,021, ha impuesta sanción disciplinaria de
multa en contra del magistrado Adler Justiniano Guerra.

Además cabe precisar que la presente conducta no es de relevancia penal sino de vía
extrapenal, el mismo que he sido pasible de sanción disciplinaria, por no configurarse los
elementos subjetivo para la perpetración del delito de Prevaricato, no existe dolo o
intención de causar daño al sentenciado, y no existe ideación o planificación con el Fiscal,
Defensor Público o parte agraviada, para dictar una revocatoria por un supuesto
incumplimiento de pago de reparación de una suma irrisoria suma de 400.00 soles; y que
únicamente ha existido un error conjunto de omisión de verificar el vencimiento del
periodo de prueba; y que pese a ello, este error ha sido puesto incluso a conocimiento del
sentenciando con fecha cedula de notificación N° 30333-2018.JR-PE., y aviso judicial
donde se consigna casa material noble, puerta de metal color negro y sin número de
suministro eléctrico, por el cual se deja la resolución 10 a fojas tres, por debajo de la
puerta con fecha 18-09-18, y que desde dicha fecha hasta su posterior detención a tenido
tiempo suficiente para solicitar la nulidad o impugnación de la resolución 10, sin
embargo dicha parte tampoco ha cuestionado de forma inmediata la citada resolución,
convalidando tácitamente su expedición, como si esta hiciera sido dictada en forma
regular.

FUDAMENTOS JURIDICOS:

Artículo 149 y 150 del Código procesal Penal.

Jurisprudencia recaída en el Exp. N° 3412-97 de fecha 12 de mayo de 1,998.

Recurso de Apelación N° 20-2015-Puno. “La decisión que se cuestiona será inidónea para
afectar el bien jurídico protegido por el delito de prevaricato, puesto que el proceso habría
concluido por decisión del titular de la acción penal, por lo que el hecho imputado (la
emisión de la resolución) , más allá dela errada posición jurídica que adopto, no manifiesta
una suficiente gravedad ni necesidad de pena”. Fundamento. 5.3. y 5.4.

II. MEDIOS PROBATORIOS:

1.- El mérito probatorio del acta de audiencia pública de revocatoria de pena del
sentenciado Angelo cabrera G de fecha 12 de setiembre de 2,018, conteniendo resolución
10, para fines de acreditar la realidad de los hechos, dónde se demuestra evidentemente
la inducción a error, por parte del Fiscal Provincial Penal de Tingo María, y defensa
técnica activa del defensor púbico Moisés Rojas Velásquez, quienes oral o expresamente
no citan la aplicación del artículo 67 del Código Penal.

2.- El mérito probatorio de la trascripción íntegra del registro de audio de la audiencia


pública de fecha 12 de setiembre de 2,018 recaída en el expediente 1215-2015-97, para
fines de acreditar la sustentación de la revocatoria pena conforme al artículo 59.3 del
Código Penal por parte del Fiscal Provincial Penal de Leoncio Prado y posición técnica por
parte de la defensa púbica de la parte sentenciada.

3.- las cedulas de notificación de fojas 97 a 100 del expediente 1215-2015-97-2JIP.,


dirigidas específicamente al sentenciado en su domicilio real, quien en fecha anteriores a
realizado pago parciales por concepto de reparación civil, con fines de acreditar que el
citado sentencia a tomado pleno conocimiento de la resolución 10 de fecha 12 de
setiembre de 2,018, pese a ello no ha cuestionado contra dicha resolución así como
tampoco su abogado defensor.

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