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El ambicioso castigado.

Un campesino se dirigía a la feria del pueblo, pensando tristemente que el


dinero que llevaba en su bolsa no era suficiente para comprar el marranito
que tanto quería .Para llegar al pueblo era menester cruzar un puente. Al pie
del puente se encontraba un viejecito que le dijo:

“Yo conozco tu problema y te puedo ayudar a resolverlo, la único que tienes


que hacer es cruzar el puente y al final tu dinero se habrá duplicado “, y ¿a
cambio de que?, le pregunto el campesino;
“cuando llegues al otro lado toma 32 monedas y lánzalas al rio, yo me
encargare de recogerlas.
El campesino cruzo el puente y al final sintió que su bolsa pesaba más que al principio, y
satisfecho lanzo las 32 monedas al rio, pero la ambición le cegó y pensó voy a echar
otra vueltecita y lo hizo, y su dinero se duplico y pago las respectivas 32 monedas, pero
tenía que volver a cruzar el puente para seguir su camino al pueblo, y lo hizo pero al
cruzar el dinero se duplico, y tuvo que volver a pagar , pero en el momento que pago se
dio cuenta que su bolsa quedaba vacía, loco de dolor y frustración subió hasta lo más
alto del puente y se arrojo de cabeza al rio y murió.

Y en ese momento el viejecito que en realidad era el diablo cobró su verdadera


recompensa que era el alma del ambicioso.
Moraleja : cuando la suerte te sonría no abuses.
¿Cuántas monedas tenía el campesino antes de conocer al anciano?

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