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Un vagabundo entró en un huerto de naranjas para robar algunas naranjas. Al ser atrapado por tres guardianes sucesivos, cada uno le hizo entregar la mitad de sus naranjas restantes más media naranja adicional. A pesar de esto, al final el vagabundo se encontró con dos naranjas.
Un vagabundo entró en un huerto de naranjas para robar algunas naranjas. Al ser atrapado por tres guardianes sucesivos, cada uno le hizo entregar la mitad de sus naranjas restantes más media naranja adicional. A pesar de esto, al final el vagabundo se encontró con dos naranjas.
Un vagabundo entró en un huerto de naranjas para robar algunas naranjas. Al ser atrapado por tres guardianes sucesivos, cada uno le hizo entregar la mitad de sus naranjas restantes más media naranja adicional. A pesar de esto, al final el vagabundo se encontró con dos naranjas.
Un vagabundo furtivo entró en un huerto de naranjas para robar algunas naranjas. Al
salir tropezó con un guardián, compadecido por su necesidad, le dejo pasar haciéndole entregar la mitad de las naranjas que llevaba y otra media naranja. Con un segundo guardia consiguió por lastima de sus ruegos, que también le dejase pasar, pero dándole también la mitad de las naranjas que tenía más media naranja. Y lo mismo exactamente le sucedió con un tercer guardia. Después de esto el ladronzuelo se vio en el campo libre y en posesión de dos naranjas