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VICIOS DEL

CONSENTIMIENTO
AB. AMBAR MURILLO MENA
CONSENTIMIENTO
• La voluntad es un requisito de la existencia del acto y negocio
jurídico, por ende del contrato. Autores que mantienen
estrictamente la teoría de la inexistencia, defienden que la
voluntad es requisito de la existencia, mientras que la
voluntad libre de vicios es requisito de validez de los actos y
negocios jurídicos.
• La manifestación de la voluntad o el consentimiento es la
conformidad entre el deseo interno de la persona y la
expresión externa para celebrar un determinado acto jurídico
y para que éste produzca los efectos jurídicos propios de él.
CONSENTIMIENTO
• Para Spota el consentimiento es la “declaración o
exteriorización de la voluntad unilateral que formula cada uno
de los contratantes; y es la conjunción de esas declaraciones
de voluntad unilaterales lo que da origen a la llamada
declaración de voluntad común”.
• Esta manifestación de la voluntad, debe coincidir con el deseo
interno de la persona, sin que medie ningún tipo de vicio que
invalidaría el acto jurídico, para el caso que analizamos, el
contrato en sí mismo, debiendo advertir que en el contrato,
existirán tantas declaraciones de voluntad como personas
participen en él.
• Artículo 1467 C.C.
CULPA
• Culpa es el término jurídico que, según Francesco Carrara, al
igual que la negligencia, supone la “voluntaria omisión de
diligencia en calcular las consecuencias posibles y previsibles
del propio hecho“.
• El concepto de culpa penal es semejante al de culpa civil: en
ambos casos la culpa se define por una omisión de la conducta
debida para prever y evitar el daño. Se manifiesta por la
imprudencia, negligencia, impericia o inobservancia de
reglamentos o deberes.
• n Derecho se define al delito culposo como el acto u omisión
que produce un resultado descrito y sancionado en laley
penal, a causa de no haber previsto ese resultado siendo
previsible, o se previó confiando en que no se produciría, en
virtud de no observar un deber de cuidado que debía y podía
observar según las circunstancias y condiciones personales.
CULPA
• El término “culposo” generalmente se utiliza en materia de siniestros y
seguros vehiculares, aunque también se utilizan acepciones como
delitos imprudenciales o no intencionales.
• FORMAS DE LA CULPA:
• Negligencia.– Descuido en el actuar. Omisión consciente, descuido por
impericia o dejar de cumplir un acto que el deber funcional exige. En
materia penal, es punible.

• Imprudencia.- Punible e inexcusable negligencia con olvido de las


precauciones que la prudencia vulgar aconseja, la cual conduce a
ejecutar hechos que, a mediar malicia en el actor, serían delitos.

• Impericia.- Falta de pericia. Pericia. Sabiduría, práctica, experiencia y


habilidad en una ciencia o arte.

• Inobservancia.- Consiste que al desempeñar ciertas actividades o


cargos, el sujeto omita cumplir los deberes impuestos por los
reglamentos u ordenanzas.
CULPA
• Elementos de la culpa.
• Conducta (activa u omisiva). Para que se configure la culpa es
necesario que exista una conducta voluntaria, es decir, que la acción
u omisión que realiza el sujeto activo debe poder ser referida a la
voluntad del ser humano.
• Nexo Causal. Se define como el nexo o relación que existe entre el
hecho que causa el daño y el daño en si, es una relación de causa
efecto, esta relación causal permite establecer hechos susceptibles
de ser considerados hechos determinantes del daño.
• Daño Típico. Es la lesión a un interés jurídicamente protegido.
• Falta de previsión. Es necesario que el hecho no deseado sea la
consecuencia de un comportamiento voluntario, contrario a las
normas o reglas de conducta que imponen al hombre una actuación
prudente y diligente en forma tal de evitar hechos dañosos.
• Clasificación de la culpa por su gravedad
• Es muy importante la clasificación de la culpa por su gravedad,
dado que en muchas ocasiones los contratos eximen de
responsabilidad para ciertos grados de culpabilidad. Es
habitual la distinción entre:

• Culpa grave o lata.


• Culpa leve.
• Culpa levísima.

• Artículo 29 Código Civil


FUERZA
• La fuerza es el segundo vicio del consentimiento contemplado
en nuestro Código Civil a partir del artículo 1472, así si el error
es un vicio del conocimiento, la fuerza es un vicio de la
libertad.
• De acuerdo con De Gásperi, se denomina “…violencia a la
coerción grave, irresistible e injusta ejercida sobre una
persona para determinarla contra su voluntad, a la realización
de un acto jurídico”;
• Vial la define como “… los apremios físicos o morales que se
ejercen sobre una persona destinados a que preste su
consentimiento para la celebración de un acto jurídico”.
• Alessandri, la fuerza es “la presión que se ejerce por medios
físicos o morales sobre la voluntad de un individuo, para
obligarlo a ejecutar un acto jurídico determinado”.
FUERZA
• Autores como Alessandri citado en el párrafo anterior, sostienen que
lo que constituye el vicio del consentimiento es el temor infundido
en la víctima, siendo la fuerza la causa, y el temor el efecto. Quien
actúa de determinada manera por temor al cumplimiento de una
amenaza que le causa o le causará sufrimiento, entonces tiene
viciado su consentimiento.
• El 1473 C.C. contiene los requisitos por los cuales la fuerza se
constituiría en un vicio del consentimiento:
• Deber ser capaz de producir una impresión fuerte en una persona
de sano juicio, tomando en cuenta su edad, sexo y condición.
• Se puede decir que la amenaza debe ser creíble y que anuncie un
mal irreparable y grave para que constituya un vicio de
consentimiento. Debe revestir gravedad ya sea de su persona o se
tema por los seres queridos.
LA PRUEBA DE LA CULPA
• En lo referente a la prueba, cabe mencionar que en el caso de
la culpa, el incumplimiento de la obligación hace suponer que
el deudor no empleó el cuidado y diligencia necesarios. Así se
colige de lo señalado por el inciso final del Art. 1590, cuya
parte pertinente dice lo siguiente: "la prueba de la diligencia o
cuidado incumbe al que ha debido emplearlo; y la prueba del
caso fortuito al que lo alega".
• Sobre el onus probandi, a diferencia del dolo en que el
acreedor está en la obligación de probar la mala fe del deudor
al incumplir la obligación, para el caso de la culpa, como
acabamos de ver, es al deudor, es decir a quien ha debido
emplear la diligencia y cuidado necesario, a quien incumbe
actuar las pruebas que le eximan de la responsabilidad.
DOLO
• El artículo 29 C.C., en su inciso final, define al dolo como la
intención positiva de irrogar injuria a la persona o propiedad
del otro, es decir, la intención de causar daño, a sabiendas de
ello.
• Así como el error vicia el conocimiento, la fuerza la libertad,
podríamos decir que el dolo vicia la buena fe contractual,
porque a través de maniobras la una parte induce a la otra a
celebrar un acto o contrato, que no lo haría si conociera las
condiciones que rodean dicho acto o contrato.
• Según Claro Solar citado por Alessandri, el dolo como vicio del
consentimiento “es toda especie de maniobras reprobadas
por la buena fe, que una persona emplea para hacer que otra
incurra en un error que la determine a contratar”.
DOLO
• Es importante indicar que el dolo necesariamente lleva la
intención en el fuero interno de causar daño o injuria a la
persona o su patrimonio en beneficio de quien realiza estas
maniobras, y que estas maniobras, una vez que se prueben
demostrarán la verdadera intención del contratante.
• Al respecto siguiendo a Alessandri, hay una primera
clasificación entre dolo positivo y negativo, siendo el primero
aquel por el cual hay una acción positiva de causar daño; y, el
segundo, aquel por el cual hay una abstención o silencio de la
parte contratante, que induce a la otra a celebrar el contrato.
• Del artículo 1474 C.C. se desprenden los requisitos para
considerar cuándo el dolo opera como vicio del
consentimiento:
DOLO
• Debe ser obra de una de las partes: Esta es una diferencia
fundamental con la fuerza, pues no importa de dónde
provenga la fuerza, sea de la parte contratante o de un
tercero, ésta siempre viciará el consentimiento; no así en el
dolo, que debe provenir necesariamente de una de las partes.
• Determinante, en el sentido de que sin él no hubieran
contratado: Determinante en el sentido de que sin él no
hubiera operado el contrato o el acto jurídico, por lo que se
agregaría que debe ser eficaz, es decir para que haya dolo el
contrato debe haberse perfeccionado. El dolo además debe
existir al momento de celebración del contrato, porque es un
vicio del consentimiento.
• Este inciso permitió que la doctrina establezca una clasificación del
dolo, en dolo principal o determinante y dolo accidental.
• El dolo principal o determinante es aquél que es obra de uno de los
contratantes, y además aparece claramente que sin él no se hubiera
celebrado el contrato; de aquí su nombre de determinante: sin él, es
decir, si el contratante que ha sido víctima del dolo hubiera conocido
el verdadero estado de las cosas, no habría contratado.
• El dolo incidental o accidental a que se refiere el inciso 2de ese
artículo, es aquel a que falta alguno de los requisitos necesarios para
ser principal: ser obra de uno de los contratantes y ser determinante
del contrato. A esta conclusión se llega considerando los términos
que emplea el legislador: “en todos los demás casos”, o sea, en
todos aquellos en que no se reúnan copulativamente los requisitos
antes enunciados.
DOLO
• El artículo 1475 C.C., manda a que el dolo debe ser probado,
pues su existencia no se presume, situación contraria al tema
de la culpa.
• Al igual que en el error y la fuerza, este vicio del
consentimiento produce la nulidad relativa.

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