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Ciudad, fecha

Señor
JUEZ CIVIL MUNICIPAL (REPARTO)
E. S. D.

REF: Acción de Tutela para proteger el derecho a la salud en conexidad con el derecho a la
vida e integridad, la dignidad y la igualdad.

Accionante: M.
Accionado: ENTIDAD PROMOTORA DE SALUD _________

M., identificado con cédula de ciudadanía N° 000 de____, en calidad de sobrina del señor T.,
identificado con cédula de ciudadanía N° 000 de ____, atendiendo el ordenamiento jurídico
Colombiano y en especial invocando el artículo 86 de la Constitución Política de Colombia y con el
debido respeto a usted, manifiesto que formulo Acción de Tutela contra la ENTIDAD
PROMOTORA DE SALUD _________., solicitando se garantice en debida forma los derechos
fundamentales de la Salud, la Vida, la dignidad entre otros como a la igualdad, a la Seguridad Social
y a la Protección especial a las personas de la tercera edad en condiciones dignas.

HECHOS:

PRIMERO:  El señor T. quien tiene su domicilio y residencia en el municipio de _____, quien vive
solo, porque no tiene hijos ni esposa, empieza a sufrir un desmejoramiento grave de salud, por lo
que el señor P. quien también es sobrino del señor T., el día 8 de marzo de 2022, me llama
telefónicamente a contarme esa situación y voy ese mismo día hasta el municipio de ___y como lo
veo muy mal a mi tío, lo traigo a que sea atendido por urgencias en ___.

SEGUNDO: Lo llevo ese mismo día 8 de marzo de 2022 por urgencias a la Clínica ______ y el
diagnóstico que nos dan es que sufrió un Derrame Cerebral que le paralizó el lado izquierdo de su
cuerpo, tal como consta en la historia clínica con la que cuento y anexo.

TERCERO: Frente a ese diagnóstico, se ordena cirugía que se programa para el día 16 de marzo,
llegado ese día, es aplazada la cirugía porque faltaba el concepto del nefrólogo ya que se descubrió
que tenía una infección urinaria.

CUARTO: Desde el día del accidente cerebral hasta hoy, el señor T. ha desmejorado
completamente su salud, se encuentra internado con oxígeno permanente, conectado una sonda para
drenar desechos, movilidad muy escasa, no puede valerse por sí mismo, depende de las enfermeras
para comer, para asearse, utiliza pañal desechable y lo he visto amarrado a la cama porque ha
mostrado comportamientos de agresividad, veo que su estado de lucidez es muy escaso, inventa
cosas, parece que se encontrase en un estado demencial.

QUINTO: Los médicos tratantes de la Clínica ____, quienes a regañadientes me han dado mediana
explicación sobre la evolución de mi tío, como si uno no tuviera derecho a preguntar, y tampoco me
facilitaron la Historia Clínica actualizada hasta la fecha, porque me exigían gran cantidad de
requisitos, han decidido darle salida al señor T. sin considerar que la residencia y domicilio de mi tío
T. es en el municipio de _____, que sobrevive con los escasos recursos que recibe de una
paupérrima pensión, que él hacía su propia comida y demás actividades caseras, que se valía por sí
mismo y permanecía solo porque nunca se caso y no tuvo hijos, que los escasos familiares como
hermanos y algunos sobrinos, como es mi caso, no tenemos las facilidades logísticas, ni económicas
para llevarlo a nuestras casas o irlo a cuidar a su casa en ____.

SEXTO: Se ha pedido que algún familiar se haga cargo de Don T., como son los hermanos
L.___de 81 años de edad, pero ella se encuentra interna en el ancianato de la Fundación ___, pues
no tiene quien la cuide a ella, otro hermano es L. vive aquí en ___en el barrio ____ de 78 años de
edad aproximadamente, pero está enfermo por un derrame cerebral, no puede caminar y es
diabético por lo que es atendido por otros familiares porque no puede valer por sí solo, y el otro
hermano que le queda es G. quien reside en la ciudad de ___, de 73 años de edad, quien vino a ___a
ver a Don T., pero regresa hoy viernes a su residencia en la ciudad de ___, porque tiene a la esposa
en proceso de tratamiento contra el cáncer de mama. Los sobrinos, como mi caso, no podemos
llevarlo a nuestras casas o ir a _____ a cuidarlo o hacernos cargo de él económicamente, porque en
mi caso, soy una persona de 66 años de edad, enferma de artrosis, por lo que soy operada uno de mis
hombros, además tengo diabetes, enferma de la tiroides, entre otros males de salud que vienen con la
edad, la casa donde yo vivo no es mía, es de mis dos nietas que prácticamente quedaron huérfanas
porque su madre murió y el padre no se ha hecho cargo de ellas, ni puede hacerlo, físicamente no
tengo la fuerza para levantarlo, limpiarlo, cambiarle el pañal o llevarlo al baño, etc. y
económicamente no me alcanza para pagar una enfermera permanente que se necesita para asistir el
tratamiento médico que debe tener mi tío.

Teniendo en cuenta que ninguno de nosotros tenemos la capacidad física, ni el lugar adecuado, ni
los recursos económicos suficientes, ni el conocimiento médico, ni podemos trasladarnos a la casa
de él en el municipio de ____ para asistirlo en el cuidado médico que mi tío T. requiere, hemos
decidido llevarlo a una casa geriátrica que nos cobra lo mínimo que puede cobrar por la atención
especializada para darle el cuidado y atención para mantener el tratamiento y la medicación.

Uno de los médicos que atendió a mi tío T. conceptuó verbalmente que el paciente requería cuidado
médico permanente asistido por personal de enfermería dadas sus condiciones de salud ya
comentadas, pero no han querido suscribir alguna orden de servicio que así lo diga, por lo que me he
visto obligada a acudir a su señoría para que ordene que el médico tratante que aparece en la historia
clínica conceptúe por escrito la necesidad del servicio médico permanente y me ayude a que la EPS
cumpla con su obligación de prestar pagar esos servicios médicos que requiere el paciente bajo estas
especiales y excepcionales circunstancias ya comentadas, haciéndonos la reposición de lo que
gastemos por el contrato en la casa geriátrica, porque necesita también de una cama especial con
rejillas, una silla de ruedas, pañales desechables, y demás elementos que usted podría indagar y
ordenar sean suministrados inmediatamente por la EPS tutelada.

PRUEBAS

Ruego al señor juez se sirva tener en cuenta las siguientes pruebas documentales:

- Copia de mi Cédula de Ciudadanía N° ____.


- Copia de Cédula de Ciudadanía de Don T.
- Copia de consulta a la administradora de los recursos del sistema general de seguridad social
en salud – ADRES donde se da cuenta de la afiliación régimen contributivo a la EPS.
- Copia Historia Clínica del 11 de septiembre de 2021 donde se puede observar el diagnostico
parcial y la remisión al especialista ortopedista y traumatólogo.
- Copia de resonancia magnética de la rodilla izquierda del 13 de diciembre de 2021 que
determina lesión condral Grado IV de la faceta media patela alta.

DERECHOS VULNERADOS

Estimo violado el derecho a la salud en conexidad con los derechos fundamentales a la vida, la
dignidad humana, la salud y seguridad social, entre otros consagrados en los artículos 1, 11, 48 y 49
de la Constitución Política de Colombia de 1991 y pertinentes.
EL DERECHO A LA SALUD COMO DERECHO FUNDAMENTAL

Inicialmente la jurisprudencia de la Corte Constitucional se caracterizó por diferenciar los derechos


susceptibles de protección mediante la acción de tutela y los derechos de contenido meramente
prestacional, los cuales para ser amparados por vía de tutela, debían tener conexidad con los
derechos inicialmente nombrados, es decir, los de primer orden.

En la Sentencia T-016 de 2007, la Sala Séptima de Revisión de esta Corporación, desarrolló el


criterio jurisprudencial sostenido por esta Corte, sobre el carácter fundamental de todos los derechos
sin distinguir si se trata de derechos políticos, civiles, sociales, económicos o culturales, así como
que dicha fundamentalidad tampoco debe derivar de la manera como estos derechos se hacen
efectivos en la realidad.

Acertadamente, la jurisprudencia de la Corte, para establecer la fundamentalidad del derecho a la


salud, se ha apoyado de instrumentos internacionales de distinto orden, por ejemplo por lo
estipulado en la Observación N° 14 del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, que
establece:

“La salud es un derecho humano fundamental e indispensable para el ejercicio de los demás
derechos humanos. Todo ser humano tiene derecho al disfrute del más alto nivel posible de salud
que le permita vivir dignamente. La efectividad del derecho a la salud se puede alcanzar mediante
numerosos procedimientos complementarios, como la formulación de políticas en materia de salud,
la aplicación de los programas de salud elaborados por la Organización Mundial de la Salud
(OMS) o la adopción de instrumentos jurídicos concretos”.

En el mismo sentido, la Constitución de 1991, contempla estos criterios cuando en el artículo 49,
estipula:

“La atención de la salud y el saneamiento ambiental son servicios públicos a cargo del Estado. Se
garantiza a todas las personas el acceso a los servicios de promoción, protección y recuperación de
la salud”.
“Corresponde al Estado organizar, dirigir y reglamentar la prestación de servicios de salud a los
habitantes y de saneamiento ambiental conforme a los principios de eficiencia, universalidad y
solidaridad. También, establecer las políticas para la prestación de servicios de salud por entidades
privadas, y ejercer su vigilancia y control”.

Por esta razón, el derecho a la salud marca una pauta esencial para que las personas puedan
desarrollarse y gozar de bienestar, esto implica que el derecho a la salud viene a relacionarse con
todas las esferas de la vida de un ser humano, pues si no goza de buenas condiciones físicas,
psicológicas y sociales, no va a ser una persona protegida en su derecho, por ello cuando se niega un
procedimiento o no se permite suministrar lo necesario para recuperar su salud, se habla de la
vulneración de la misma, es aquí donde el juez puede hacer efectiva su protección por vía de tutela
cuando los encuentre amenazados o vulnerados.

De igual manera y enfatizando la protección constitucional del derecho a la salud como derecho
fundamental, la Sentencia T-200 de 2007, menciona las dimensiones de amparo de este derecho,
para lo cual estableció:

“…En abundante jurisprudencia esta Corporación ha señalado que la protección ofrecida por el
texto constitucional a la salud, como bien jurídico que goza de especial protección, tal como lo
enseña el tramado de disposiciones que componen el articulado superior y el bloque de
constitucionalidad, se da en dos sentidos: (i) en primer lugar, de acuerdo al artículo 49 de la
Constitución, la salud es un servicio público cuya organización, dirección y reglamentación
corresponde al Estado. La prestación de este servicio debe ser realizado bajo el impostergable
compromiso de satisfacer los principios de universalidad, solidaridad y eficiencia que, según
dispone el artículo 49 superior, orientan dicho servicio.”

En el mismo sentido, como fue precisado por esta Sala de revisión en sentencia T-016 de 2007, el
diseño de las políticas encaminadas a la efectiva prestación del servicio público de salud debe estar,
en todo caso, fielmente orientado a la consecución de los altos fines a los cuales se compromete el
Estado, según lo establece el artículo 2° del texto constitucional.

“(ii) La segunda dimensión en la cual es protegido este bien jurídico es su estructuración como
derecho. Sobre el particular, la jurisprudencia de esta Corporación ha señalado que el derecho a la
salud no es de aquellos cuya protección puede ser solicitada prima facie por vía de tutela. No
obstante, en una decantada línea que ha hecho carrera en los pronunciamientos de la Corte
Constitucional, se ha considerado que una vez se ha superado la indeterminación de su contenido –
que es el obstáculo principal a su estructuración como derecho fundamental- por medio de la
regulación ofrecida por el Congreso de la República y por las autoridades que participan en el
Sistema de Seguridad Social; las prestaciones a las cuales se encuentran obligadas las instituciones
del Sistema adquieren el carácter de derechos subjetivos…”.

Se trata entonces de una línea jurisprudencial reiterada por esta Corte, la cual ha establecido que el
derecho a la salud es un derecho fundamental, que envuelve como sucede también con los demás
derechos fundamentales, prestaciones de orden económico orientadas a garantizar de modo efectivo
la eficacia de estos derechos en la realidad. Bajo esta premisa, el Estado a través del Sistema de
Seguridad Social en Salud, proporciona las condiciones por medio de las cuales sus asociados
pueden acceder a un estado de salud íntegro y armónico.
Es por ello que la Corte Constitucional ha precisado que la salud puede ser considerada como un
derecho fundamental no solo cuando peligra la vida como mera existencia, sino que ha resaltado que
la salud es esencial para el mantenimiento de la vida en condiciones dignas.

En conclusión, la Corte ha señalado que todas las personas sin excepción pueden acudir a la
acción de tutela para lograr la efectiva protección de su derecho constitucional fundamental a
la salud. Por tanto, todas las entidades que prestan la atención en salud, deben procurar no solo de
manera formal sino también material, la mejor prestación del servicio, con la finalidad del goce
efectivo de los derechos de sus afiliados, pues la salud comporta el goce de distintos derechos, en
especial el de la vida, el de la igualdad y el de la dignidad; derechos que deben ser garantizados por
el Estado Colombiano de conformidad con los mandatos internacionales, constitucionales y
jurisprudenciales.

EL DERECHO A LA VIDA EN CONDICIONES DIGNAS

La dignidad humana es un fundamento del Estado colombiano por lo que es necesario que se refleje
en todas las actuaciones que emanan de las autoridades, así como de servicios públicos esenciales
como la salud, cuya prestación debe garantizar.

La dignidad humana, comprende tres objetos concretos de protección:

 La autonomía o posibilidad de diseñar un plan vital y de determinarse según sus


características, que traduce “vivir como se quiera”.
 La presencia de ciertas condiciones materiales concretas de existencia, es decir, “vivir
bien”.
 La intangibilidad de los bienes no patrimoniales, integridad física e integridad moral, en
otras palabras, “vivir sin humillaciones”.

Es entonces la dignidad humana derecho fundamental, principio y valor. Como menciona la Corte
Constitucional en sentencia T- 940 de 2012, respecto de la dignidad:

“A grandes rasgos, la dignidad humana como derecho fundamental implica la correlatividad entre
la facultad de exigir su realización en los ámbitos a los que atañe y el deber de propiciarlos; como
principio puede entenderse como una de los fundamentos que dieron origen a la aparición del
Estado colombiano de hoy, así como un mandato de optimización, cuya realización se debe
propender en la mayor medida posible; finalmente, como valor, la dignidad representa un ideal de
corrección al que tiende el Estado y que le corresponde preservar”.

La dignidad humana en el Estado colombiano constituye una de las bases y de los presupuestos
ontológicos para su existencia, siendo piedra angular para el desarrollo del contenido de otros
derechos fundamentales y deberes estatales y particulares dispuestos en la carta; por ello el concepto
de dignidad humana se liga con otros, para lograr la mayoría de esferas dentro de la realidad, y no
quede en mera teoría.

Para el caso que se busca tutelar, el derecho a la salud, el cual debe ser entendido, ya no solo como
un derecho o servicio con el que se pretende la preservación de la existencia, sino como un derecho
fundamental que coadyuva a la realización de la dignidad humana y de la existencia en condiciones
dignas.

FUNDAMENTO JURÍDICO

Esta acción de tutela se encuentra fundamentada en el artículo 86 de la Constitución Política de


Colombia y en los decretos 2591 de 1.991, 306 de 1.992 y 1382 de 2000.

COMPETENCIA

Es usted competente, señor Juez, por la naturaleza constitucional del asunto y por tener jurisdicción
en el lugar donde tuvieron ocurrencia los hechos que vulneran o amenazan el derecho fundamental
invocado según el artículo 37 del decreto 2591 de 1991. Así mismo es usted competente de
conformidad por el inciso segundo del numeral 1 del artículo 1 del Decreto 1382 de 2000.

PRETENSIONES

Con fundamento en los hechos relacionados, solicito al señor Juez disponer y ordenar a nuestro
favor lo siguiente:

PRIMERO: Tutelar el derecho fundamental a la salud por conexidad con el derecho fundamental a
la salud, la vida e integridad, la dignidad humana, la igualdad y el derecho a la salud.

SEGUNDO: Ordenar a la ENTIDAD PROMOTORA DE SALUD. y/o quien corresponda,


manifieste que es necesaria la atención por parte de un cuidador o de una enfermera o auxiliar de
enfermería y asumir los costos por cuanto la familia no puede hacerlo

TERCERO: Ordenar a la ENTIDAD PROMOTORA DE SALUD. y/o quien corresponda, que


autorice ---, de forma urgente.

CUARTO: Las demás que su Señoría vea a bien ordenar en pro de la defensa de los derechos
involucrados.

JURAMENTO

Cumplimiento al artículo 37 de Decreto 2591/91. Manifiesto bajo la gravedad del juramento que no
he intentado ante otra instancia de tipo judicial acción de tutela por las mismas causas y donde se
consideren los mismos hechos.

ANEXOS

Sírvase su señoría tener como anexos los documentos descritos en el capítulo de pruebas.

NOTIFICACIONES
ACCIONANTE: Mi residencia se encuentra ubicada en. Celular:. e-mail: manzana __, Casa __
barrio ___

ENTIDAD PROMOTORA DE SALUD ____.: -------Dirección.

De su Señoría, cordialmente,

M.
C.C. N° --- de Pasto Nariño
Celular: 3---
e-mail:

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