Profesor: Manuel Vallejos Sección 30 CORE: Literatura y Humanidades I En el transcurso de este ensayo, se enlazará la obra Hamlet, escrita por William Shakespeare, con Antígona, cuyo autor es Sófocles, además de ser relacionada con Odisea, redactada por Homero, analizando específicamente dos puntos en común, la traición y la venganza, ya sea desde un punto de vista justiciero o con el objetivo de dañar al otro. Hamlet es una obra cuya trama se basa en que el personaje principal desea vengar la muerte del rey de Dinamarca, su padre, quien ha sido asesinado por el hermano de este. Por otro lado, el argumento de Antígona consiste en la búsqueda de la justicia para el hermano del personaje principal, quien ha fallecido, y no se le quiere otorgar una muerte digna, y, por último, en la Odisea, se narra el viaje de Ulises de regreso a su hogar en Ítaca, luego de la guerra de troya y posteriormente, cuando es recibido en su hogar, se presencia un conflicto entre él y los pretendientes de Penélope, su esposa. La historia de Hamlet, a pesar de que la vemos como un hecho muy antiguo y lejano a nosotros, aún sigue ocurriendo, pero de una manera más oculta y moderada. Claudio, actúa como el tradicional político que desea obtener el poder de forma corrupta, cometiendo actos en contra de otros, ya sea para conseguir votos en las elecciones, aprobar leyes que se ajustan a su cargo político o condición socio-económica, o distintos objetivos que ellos tengan en mente. Lo anterior con la finalidad de obtener aprobación propia o social, puesto que se pasa a llevar a nuestra propia familia, como sucede en este caso, buscando además esconder los hechos cometidos, ya sea mediante amenazas o la muerte de algún individuo. Cabe resaltar que en la actualidad no es común ver muertes por ocultar información u obtener el poder, pero sí sucede, al igual que las transacciones de dinero incorrectamente realizadas. Desde otra perspectiva, Hamlet es quien buscar la justicia dentro de estas situaciones, esto se puede apreciar en el momento en que Hamlet expresa: “En cuanto a este señor que está ahí, me arrepiento, pero los cielos lo han querido así, a fin de castigarme a mi con esto, y a este conmigo, para que sea yo su azote y su ministro. Lo arrumbaré y responderé debidamente por esta muerte que le di. Así que buenas noches otra vez. Tengo que ser cruel, solo para ser bueno. Ahora empieza lo malo, y falta lo peor” (Shakespeare 189), refiriéndose a su tío Claudio, quien traicionó a su hermanó y lo asesinó por obtener el poder. Así es como podemos apreciar que Hamlet busca la venganza hacia su tío, debido a que se enteró que este lo había asesinado. El rey Claudio obtiene el reinado debido a esta acción, la cual infringe todos los límites de lo que se define como una persona correcta e integra. No obstante, esto no es lo único que causa, puesto que debido a que Hamlet quiere vengarse, asesina y utiliza a otros personajes para lograrlo, debido a que se confunde y mata a Polonio (causando la locura de Ofelia) y no a su tío, incluso arriesga su propia vida y la de su madre, a la cual le dice que abra los ojos y no se deje llevar por la manipulación del rey. Al fin y al cabo, a pesar de que Hamlet estaba intentando vengar a su padre, no fue conveniente, puesto a que destruye la composición de la casa real de Dinamarca, esto debido a que surgen varias muertes y sucesos que afectan en mayor grado que tan solo la muerte de su padre, como lo es la muerte de Polonio, al cual Hamlet confunde con su tío, además de la muerte de Gertrudis, que fallece a causa de beber vino envenenado, el cual también iba dirigido a causar la muerte del rey Claudio, por otro lado, la lucha entre Hamlet y Laertes con espadas envenenadas causa el fallecimiento de ambos. Cabe destacar que Ofelia, la enamorada del príncipe Hamlet, se vuelve loca posterior a la muerte de Polonio, e incluso se refieren a ella y su estado expresando: “Ah, este es el veneno de una pena profunda, todo esto lo origina la muerte de su padre. (…) Para empezar, la muerte de su padre, tras eso, vuestro hijo que se va, autor el mismo violentísimo de su propia fundada ausencia; la gente turbia, torpe y retorcida en sus ideas y rumores en torno a la muerte de nuestro bien Polonio. (…) La pobre Ofelia desgarrada de sí misma y de su sano juicio, sin el cual no somos más que estampas o meramente bestias” (Shakespeare 217 - 219) Considero que todo lo acontecido no debió ocurrir solo por querer vengar algo que estaba hecho, si Hamlet hubiera tenido un pensamiento racional y no hubiese dejado que los sentimientos y emociones salieran a flote, la venganza nunca hubiera sido la mejor opción, puesto que trajo consecuencias mayores para casi todos los personajes, en especial a Hamlet. Todos estos antecedentes pueden ser relacionados con distintas obras, en este caso nos enfocaremos en Antígona y Odisea. En Odisea se puede analizar como la venganza por parte de Ulises hacia los pretendientes de su esposa, luego de que llegue a su tierra, es efectuada con él disfrazado de vagabundo y, en conspiración de su hijo Telémaco, esto, puesto que estos quieren casarse con su esposa y así, obtener sus riquezas y su lugar de poder dentro de Ítaca. Cabe mencionar que, para obtener el poder, estos también intentan matar a Telémaco, para que así, puedan gobernar libremente, sin que nadie se oponga. Es así como podemos deducir que los pretendientes realizan ciertas acciones guiados por obtener un poder, ya sea político o social, sin que lo hayan adquirido honestamente y por sus propios medios, con el fin de hacer un mal uso de esto, posteriormente, a pesar de que no estaban capacitados para ello ni tenían un interés sensato en gobernar de manera correcta y consecuente en el reino, sino solo tener este título para aumentar su orgullo. De esta forma es como en la obra podemos apreciar lo que pensaba Telémaco en relación a lo expuesto anteriormente: “(…) Y cuantos imperan en la áspera Ítaca, todos pretenden a mi madre y arruinan nuestra casa. Mi madre ni rechaza las odiosas nupcias ni sabe poner fin a tales cosas, y aquellos comen y agotan mi hacienda, y pronto acabarán conmigo mismo.” (Homero 16), a lo que posteriormente responde Atenea: “¡Oh dioses! ¡Qué falta no te hace el ausente Odiseo, para que ponga las manos en los desvergonzados pretendientes!” (Homero 17), denotando como es que los pretendientes no tienen alguna buena intención e incluso solo desabastecen y se aprovechan de las riquezas de su propio hogar. Por otro lado, podemos relacionar los temas expuestos con la obra Antígona, en la cual la traición y justicia está presente. Antígona desea ir en contra de la ley, pero en este caso no intenta aprovecharse de la situación, sino pedir justicia por su hermano, Polinices, al que se le impidió tener una sepultura digna, después de muerto. Es por esto que a Antígona se le castiga, por rendirle culto. En la narración, la venganza se produce desde los dioses hacia Creonte, puesto que su hijo termina sufriendo por la muerte de Antígona, su gran amor y finalmente muere, es por esto que Creonte termina lamentándose de lo que el mismo causó: “Oh desgracia de mis malos consejos. Hijo mío, tan joven y de tan temprana muerte. Has muerto, te fuiste por mi funesta decisión, no por la tuya” (Sófocles 89). Es por lo anterior que, antes de querer hacer valer nuestro honor, debemos pensar en las consecuencias que podemos causar, y tomar decisiones asertivas pensando en nuestro bienestar y en el de los demás individuos. La venganza, la traición y la justicia son temas que abarcan las tres obras leídas, por lo que me parece muy importante destacar como, hasta en la actualidad, siguen aconteciendo. Principalmente en el ámbito político y económico, los humanos nos dejamos llevar por obtener poder y riquezas, las cuales nos dan una felicidad que es momentánea y pasajera, y que usualmente trae consecuencias perjudiciales, por lo menos a largo plazo. El querer vengarse de alguien, tal como sucedió en las narraciones, suele conllevar un desenlace totalmente fuera de los esperado, sin aportar beneficio alguno. A pesar de que esto solía ser más potente en épocas antiguas y sociedades orientales, tal vez por su propia cultura y religión, sigue sucediendo, aunque creamos que estamos en una sociedad más avanzada, nos falta mucho progreso en la forma de pensar y controlar nuestras emociones. Sin embargo, a pesar de que la venganza en todas las obras se llevo a cabo, en distintas ocasiones esto podría no haber sucedido si es que el amor no hubiera estado presente, puesto que se podría haber evitado el sufrimiento por parte de los personajes, al no existir afecto de forma romántica hacia otra persona. Aunque, como bien sabemos, el amor romántico siempre estará presente, el haber formado lazos y una relación específica dentro de la obra, conllevo a poder concretar la respectiva venganza o traición planeada. En otro ámbito, hablando acerca de las riquezas y bienes que se poseían, fueron un factor determinante para llevar a cabo la venganza. En repetidas ocasiones, se traicionó debido a que alguien deseaba poseer lo que otro tenía, incluso hablando del poder, pero implicando una represalia severa, como lo fue la muerte de distintos personajes. Es por lo anterior que me lleva a pensar en cuán ambicioso es el ser humano por tan solo poder mantener un “honor” frente a la sociedad, sin pensar en qué es lo que nos hará realmente felices a largo plazo, o lo que nos mantendrá con la mente libre de culpas. Personalmente, creo que esta situación se puede extender a la situación de nuestro país debido a que distintos políticos han llegado al poder, pero a la vez se han obsesionado con la riqueza, siendo personajes corruptos, que incluso llegaron a ser acusados constitucionalmente. Por otra parte, considero que muchos políticos desean llegar a obtener el poder, pero no tienen las capacidades realmente necesarias para hacerlo y mucho menos la experiencia para afrontarlo, muchos de ellos tienen la motivación, pero esto no es suficiente puesto que se postularon a un cargo meramente para aumentar su ego, y no así, para realmente servirle y contribuir a la ciudadanía. A pesar de que la corrupción en Chile se oculte, de todas formas, estos actos saldrán a la luz, o en un caso extremo, traerá consecuencias negativas hacia quien desee engañar a los demás y traicionar a otros mediante el mal uso del poder político y económico.