¿Hay oportunidades laborales para peruanas?

Los aspectos básicos como la educación, la salud y el empleo no llegan

CONTEXTO
a todos los peruanos y peruanas por igual. Además de los problemas como el
embarazo precoz y los estereotipos de género que impiden el desarrollo
integral de la mujer se encuentra la brecha en el mercado laboral. Esta ha ido
disminuyendo paulatinamente; pero, aún no es insuficiente. Persisten
INTRODUCCIÓN

nociones tradicionales respecto al trabajo de las mujeres. La principal idea es CONTROVERSIA

que el compromiso de la mujer con su función materna y el rol doméstico
interfiere negativamente en su desempeño laboral, incluso se cree que los
costos laborares de las mujeres son más altos en comparación con la de los
hombres. Esta percepción tiene fuerte presencia entre los empresarios,
puesto que incide significativamente en el proceso de selección laboral. De
TESIS
modo que existe discriminación de género en el ámbito laboral contra la
mujer debido a la cultura machista. A continuación, explicaremos las razones
ANTICIPO
que fundamentan nuestro punto de vista.
En primer lugar, cada vez más mujeres acceden al mercado laboral
en el Perú, pero en condiciones poco favorables. El Instituto Nacional de
Estadística e Informática (INEI) detalla que la población de mujeres
I.P.
trabajadoras se ha incrementado de 4 millones 996 mil, en el 2001, a 6
ARGUMENTO
ESTADÍSTICO

millones 896 mil en el 2014; pese a estos avances, la mujer sigue siendo
rezagada: solo el 22.3% tiene un empleo formal. Fruto de esta segregación es
que la mayor fuerza de trabajo femenino se encuentra en el ámbito informal
I.S.
y mal remunerado. Además, las cifras revelan que el trabajo doméstico es
responsabilidad de las féminas; en otras palabras, las mujeres dedican más del
50% de su tiempo a atender la casa; mientras que los hombres, solo el 24%.
Estos dígitos reflejan la exclusión social que sufren las mujeres, ya que
favorece la situación de pobreza. En ese sentido, esta extenuante labor I.T.
doméstica obstaculiza la realización de proyectos profesionales.

En segundo lugar, se educa para que la mujer sea profesional, pero

sin desligarse del trabajo doméstico. Esta opresión que sufren las féminas se
manifiesta desde la infancia, ya que, se impone juguetes sexistas. Por ejemplo,
los anuncios publicitarios incentivan la compra de cocinas, licuadoras,
ARGUMENTO

AUTORIDAD

planchas de juguete para las niñas. El sociólogo Guardia (2002) señala: “El
trabajo fuera del ámbito doméstico solo ha significado mayor trabajo y
DE

responsabilidades, pero no mayores derechos frente a un modelo tradicional

que continúa definiendo a las mujeres en el ámbito puramente doméstico y
en el papel de esposas y madres” (p.209). Esto significa que, si bien es cierto,
existe una mayor conciencia de los derechos de las mujeres, estos no están
debidamente reconocidos. Esta tarea enfocada desde una perspectiva de
género tradicional exige un nuevo contrato basado en la igualdad y la justicia.
 En tercer lugar, La cultura patriarcal no brinda a la mujer
oportunidades para desarrollarse profesionalmente. Esta situación genera
una mínima participación en cargos gerenciales. Muchas veces aun teniendo
ARGUMENTO

la misma preparación de un hombre no se le da oportunidades de ascenso, ni

CAUSAL

salarios igualitarios por políticas de la empresa. Por ello, cuentan con mínimas
aspiraciones lo que ocasiona que opten por oficios de poca trascendencia.
Inclusive, las mujeres profesionales no se preocupan por continuar con su
educación ni por lograr grados académicos de maestrías y doctorados. En
suma, hay un porcentaje mínimo de féminas que lidera empresas.

En síntesis, tanto hombres como mujeres deben ser vistos con

ojos de una sociedad igualitaria, donde sus deberes y derechos sean los REITERACIÓN
DE TESIS
mismos para que así tenga una igual competencia en el mercado laboral.
Lamentablemente, las cifras demuestran que las mujeres vienen siendo
relegadas en cuanto a su trabajo. Por ello, la gran mayoría se desempeñan en
CONCLUSIÓN

puestos informales con pésimos sueldos que no son más que un maltrato. Por SÍNTESIS
otro lado, no se le brinda las mismas oportunidades que los varones.
Sobretodo, no se tienen acceso a los ascensos a cargos importantes, ni un
salario de acuerdo a sus obligaciones. Considero prioritario una redefinición
de tareas, responsabilidades y derechos en el entorno laboral. Es importante
que se visibilice este problema; ya que, la mujer es una fuerza vital para el REFLEXIÓN
desarrollo de la sociedad.