pirámide estratégica nos ayuda a “aterrizar” los conceptos para que dejen de
ser aspiraciones y poéticos para convertirse en actividades cuantificables y que contribuyan de manera imprescindible a los resultados que se esperan.
El punto más alto de la pirámide estratégica de un banco es la misión por qué
existe la empresa. Es el fin último. Típicamente es abstracta y no es alcanzable, pero sirve como referencia del punto al que se debe llegar. Los valores son los que son importantes para la empresa y sirven para orientar las acciones y comportamientos de toda la institución. La misión y los valores son únicos y no expiran. Es decir, son siempre importantes. Aunque se pueden reformular, no es necesario estarlos actualizando periódicamente. La visión es la aspiración hacia el futuro. Es un enunciado alcanzable que anticipa cómo vemos a la empresa dentro de los siguientes años. La visión es generalmente a largo plazo, lo cual, dependiendo del contexto y giro de la institución, es de más de diez años. La estrategia identifica cómo se logra diferenciar entre la visión y donde estamos ahora. Por lo que, para poder articular una estrategia, es necesario tener un entendimiento de la situación actual. Hay que tener claro en qué mercado participamos, el contexto y las tendencias. Se debe identificar como funciona nuestro entorno y fuera de él (proveedores, competidores y clientes). También se debe hacer un análisis para entender el posicionamiento competitivo y buscar ya sea actuales o por desarrollar, que el mercado valore. Con estos elementos se logra tener un entendimiento de la dinámica actual y ahora sí se pueden articular los cómo alcanzar la visión. La estrategia depende de la situación actual y está es dinámica conforme se van logrando los objetivos y evoluciona el entorno, por lo tanto, la estrategia es a mediano plazo y se pudiera estar renovando cada 4-6 años. Una vez que se tiene bien definida la estrategia, se debe revisitar el modelo de negocio para identificar como se va a crear, entregar y capturar el valor. En el corazón del modelo de negocio está la propuesta de valor los productos y servicios de una empresa que crean valor para un segmento del mercado y es la razón porqué un cliente voltea a ver nuestra oferta en vez que a la competencia. Para desarrollar una propuesta de valor, primero se debe segmentar el mercado y decidir estratégicamente a qué segmentos se quiere atender. Se tiene que entender a sus clientes e identificar lo que quieren, sus necesidades y sus miedos para así poder diseñar propuestas de valor con atributos, beneficios y experiencias alineadas a nuestro mercado meta. Debe contener diferenciadores para que los clientes prefieran una propuesta de valor sobre la de la competencia. Es importante mencionar que una empresa puede tener más de una propuesta de valor, inclusive más de un modelo de negocio para lograr atender a sus clientes. Las iniciativas son las oportunidades identificadas que se desean perseguir. Para cada una de ellas, se debe hacer un caso de negocio a nivel macro para poder dimensionar el impacto y lo requerido para implementarlas y así poderlas priorizar.
Las tácticas, son las guías detalladas de las actividades y procesos que se
necesita hacer para aterrizar las iniciativas. Si se hace la analogía que la estrategia es la cabeza, las iniciativas serían los brazos y las tácticas serían las manos. El plan de implementación contiene más detalle ya que incluye quién y cuándo se harán las actividades listadas en las tácticas. Y, por último, para poder gestionar la pirámide de la estrategia, se necesitan tener métricas para medir el éxito, y corregir el rumbo cuando no se esté dando como se planeó. Las métricas se deberán estar monitoreando constantemente para tener una foto actualizada de la situación actual, y con la cual se podrán hacer los ajustes a la estrategia cuando se requiera.
Pensamiento Crítico: Utiliza modelos mentales para desarrollar tomas de decisiones efectivas y habilidades de resolución de problemas. Supera los obstáculos cognitivos y las falacias en los sistemas para pensar con claridad en tu vida cotidiana.