Está en la página 1de 3

ADN

Ácido desoxirribonucleico (ADN), material genético de todos los organismos celulares y


casi todos los virus. El ADN lleva la información necesaria para dirigir la síntesis de
proteínas y la replicación. Se llama síntesis de proteínas a la producción de las proteínas
que necesita la célula o el virus para realizar sus actividades y desarrollarse. La replicación
es el conjunto de reacciones por medio de las cuales el ADN se copia a sí mismo cada vez
que una célula o un virus se reproduce y transmite a la descendencia la información que
contiene. En casi todos los organismos celulares el ADN está organizado en forma de
cromosomas, situados en el núcleo de la célula.

Estructura

Cada molécula de ADN está constituida por dos cadenas o bandas formadas por un elevado
número de compuestos químicos llamados nucleótidos. Estas cadenas forman una especie
de escalera retorcida que se llama doble hélice. Cada nucleótido está formado por tres
unidades: una molécula de azúcar llamada desoxirribosa, un grupo fosfato y uno de cuatro
posibles compuestos nitrogenados llamados bases: adenina (abreviada como A), guanina
(G), timina (T) y citosina (C). La molécula de desoxirribosa ocupa el centro del nucleótido
y está flanqueada por un grupo fosfato a un lado y una base al otro. El grupo fosfato está a
su vez unido a la desoxirribosa del nucleótido adyacente de la cadena. Estas subunidades
enlazadas desoxirribosa-fosfato forman los lados de la escalera; las bases están enfrentadas
por parejas, mirando hacia el interior, y forman los travesaños.

Los nucleótidos de cada una de las dos cadenas que forman el ADN establecen una
asociación específica con los correspondientes de la otra cadena. Debido a la afinidad
química entre las bases, los nucleótidos que contienen adenina se acoplan siempre con los
que contienen timina, y los que contienen citosina con los que contienen guanina. Las bases
complementarias se unen entre sí por enlaces químicos débiles llamados enlaces de
hidrógeno.

En 1953, el bioquímico estadounidense James Watson y el biofísico británico Francis Crick


publicaron la primera descripción de la estructura del ADN. Su modelo adquirió tal
importancia para comprender la síntesis proteica, la replicación del ADN y las mutaciones,
que los científicos obtuvieron en 1962 el Premio Nobel de Medicina por su trabajo.

Empaquetamiento

La estructura del ADN es en realidad mucho más larga que la del cromosoma, pero se halla
muy condensada. Ahora se sabe que este empaquetamiento se basa en diminutas partículas
llamadas nucleosomas, sólo visibles con el microscopio electrónico más potente. El ADN
está enrollado secuencialmente alrededor de cada nucleosoma formando una estructura en
forma de rosario. Entonces la estructura se repliega aún más, de manera que las cuentas se
asocian en espirales regulares. Por esta razón, el ADN tiene una configuración en espiral
enrollada, parecida al filamento de una bombilla.
Funciones

Las proteínas no son sólo los componentes principales de la mayoría de las estructuras
celulares, sino que también controlan casi todas las reacciones químicas que se producen en
la materia viva. La capacidad de una proteína para formar parte de una estructura, o para ser
una enzima que influye sobre la frecuencia de una reacción química particular, depende de
su estructura molecular. Esta estructura depende a su vez de su composición. Cada proteína
está formada por uno o más componentes denominados polipéptidos, y cada polipéptido
está constituido por una cadena de subunidades llamadas aminoácidos. En los polipéptidos
hay veinte tipos distintos de aminoácidos. Al final, el número, tipo y orden de los
aminoácidos en una cadena determina la estructura y función de la proteína de la que forma
parte.

ARN

Ácido ribonucleico (ARN), material genético de ciertos virus (virus ARN) y, en los
organismos celulares, molécula que dirige las etapas intermedias de la síntesis proteica. En
los virus ARN, esta molécula dirige dos procesos: la síntesis de proteínas (producción de
las proteínas que forman la cápsula del virus) y replicación (proceso mediante el cual el
ARN forma una copia de sí mismo). En los organismos celulares es otro tipo de material
genético, llamado ácido desoxirribonucleico (ADN), el que lleva la información que
determina la estructura de las proteínas. Pero el ADN no puede actuar solo, y se vale del
ARN para transferir esta información vital durante la síntesis de proteínas (producción de
las proteínas que necesita la célula para sus actividades y su desarrollo).

Como el ADN, el ARN está formado por una cadena de compuestos químicos llamados
nucleótidos. Cada uno está formado por una molécula de un azúcar llamado ribosa, un
grupo fosfato y uno de cuatro posibles compuestos nitrogenados llamados bases: adenina,
guanina, uracilo y citosina. Estos compuestos se unen igual que en el ácido
desoxirribonucleico (ADN). El ARN se diferencia químicamente del ADN por dos cosas: la
molécula de azúcar del ARN contiene un átomo de oxígeno que falta en el ADN; y el ARN
contiene la base uracilo en lugar de la timina del ADN.

Funciones

Sin embargo, antes de poder fabricar una proteína hay que obtener, de uno o más genes, las
instrucciones moleculares para lograrlo. Por ejemplo, en el ser humano un gen contiene la
información para la fabricación de la proteína insulina, la hormona que las células necesitan
para extraer glucosa del torrente sanguíneo, mientras que al menos dos genes contienen la
información para la síntesis del colágeno, la proteína que aporta resistencia a la piel,
tendones y ligamentos. El proceso de fabricación de las proteínas comienza cuando las
enzimas, en respuesta a una señal de la célula, se unen al gen que contiene el código para
toda o parte de la proteína necesaria. Las enzimas transfieren el código a una molécula
nueva denominada ARN mensajero, que transporta el código desde el núcleo hasta el
citoplasma. Esto permite que el código genético original permanezca seguro en el núcleo
mientras el ARN mensajero envía pequeños fragmentos y piezas de información del ADN
al citoplasma cuando es necesario. Dependiendo del tipo de célula, cada minuto se forman
cientos o incluso miles de moléculas de ARN mensajero.

Tipos

En la célula hay tres tipos de ARN. El ARN mensajero (ARNm) es una molécula en forma
de cinta, producto de la transcripción del ADN y portadora del código necesario para
sintetizar las proteínas mediante una reacción llamada traducción. Cada hebra de ARNm
tiene dos extremos, llamados 3' y 5', que determinan el sentido de lectura (desde 3' hacia
5'). Los ARN de transferencia (ARNt) son pequeñas estructuras en forma de hoja de trébol
que llevan cada una un aminoácido para integrarlo en una proteína en fase de síntesis. Para
ello se fija a un codón del ARNm (sucesión de tres elementos específicos del aminoácido
de que se trate) por medio de un anticodón (que es el 'negativo' del codón). La fijación se
produce por medio de los ribosomas, que 'leen' el ARN y se encargan de dirigir la síntesis
de proteínas. Por último, los ARN ribosómicos (ARNr) son los componentes principales de
los ribosomas. En la estructura de un ribosoma intervienen cuatro moléculas de ADN de
distinto tamaño. La subunidad mayor (o subunidad 60 s) lleva los ARN 5 s, 28 s y 5,8 s,
mientras que la pequeña (o subunidad 40 s) sólo lleva un ARN 18 s. (Las denominaciones,
por ejemplo, 5 s y 18 s, proceden de los experimentos de centrifugación en tubo de ensayo
de las subunidades ribosómicas y las moléculas de ARN; durante la centrifugación, los
elementos más pesados se acumulan en el fondo del tubo y forman el sedimento; el número
corresponde al coeficiente de sedimentación de cada componente.)

También podría gustarte