DAVID, REY DE JUDÁ

(2 S. 1:1-2:4a)

Verdad central: Las expresiones de tristeza y duelo de David por la muerte de Saúl nos enseñan acerca de la lealtad
hacia quienes Dios ha puesto como gobernantes del pueblo.
A. Fondo histórico:
Eventos relacionados con la muerte de Saúl. 2 S. 1 sigue la narración de los últimos capítulos del primer libro, es la
continuación del relato de lo que sucedió con Israel a partir del reinado de David. La historia de Israel de divide en
diferentes períodos:

PERIODO LIBRO
PATRIARCAL GÉNESIS 12- 50
EGIPTO – DESIERTO ÉXODO – DEUTERONOMIO
CONQUISTA – JUECES JOSUÉ – JUECES
MONARQUÍA – SAÚL 1 SAMUEL
MONARQUÍA – DAVID 2 SAMUEL
MONARQUÍA – SALOMÓN 1 REYES
MONARQUÍA – DOS REINOS 2 REYES

Implicaciones de ayudar a morir al “ungido de Jehová”. El acto de “ungir” era un acto solemne. El “ungido” era
alguien que había sido separado por Dios y que le pertenecía. Así debe entender la resistencia de David de hacer
algo contra Saúl aunque éste trataba de matarlo, porque hacer algo contra el ungido implicaba una culpa.
Expresiones de duelo oriental. Los pueblos orientales manifestaban su dolor por medio de lamentaciones o
expresiones visibles como: llorar a gritos, rasgar o romper los vestidos, manchar con ceniza o polvo la cabeza o
rostro, afeitarse la barba, raparse, andar descalzo, etc.
Hebrón. ‘confederación’, (antigua Quiriat-arba, “tetrápolis”), la ciudad más alta de Palestina, 927 m sobre el nivel
del Mediterráneo, 30 km al SO de Jerusalén. Hebrón misma y el territorio circunvecino fueron tomados a los
anaceos por Caleb, y le fueron dados como posesión de familia (Jos. 14.12). En Hebrón David fue ungido rey de
Judá y dos años más tarde también rey de Israel (2 S. 5.3); siguió siendo su capital por siete años y medio.
Énfasis:
David se entera de la muerte de Saúl, 2 S. 1:1-12. Después del castigo que David había dado a los amalecitas por
las incursiones en Siclag, permaneció en esa ciudad por algunos días. En ese momento recibió la noticia de la
derrota de Israel en la batalla contra los filisteos. El fracaso fue tan grande que en la misma ocasión murieron el rey
y sus tres hijos. El amalecita que había traído la noticia a David de la derrota, le cuenta la forma en que había
muerto Saúl y como él participó en la misma.
David castiga a quien ayudó a morir a Saúl, 2 S. 1:13-16. En su relato, el amalecita afirma que él fue el que ayudó
a morir a Saúl, David califica este acto como un asesinato y decide castigarlo usando su testimonio como prueba.
Lamento de David por Saúl y Jonatán, 2 S. 1:17-27. En este lamento por el rey muerto David ensalza su
importancia como líder de su nación, por ello pide que no se haga de esta noticia una nueva de alegría; también
enfatiza la unión entre Saúl y su hijo y la bravura de ambos en la pelea. También en este pasaje, en medio del
lamento por la pérdida de un amigo, se exalta la amistad entre David y Jonatán que fue cimentada sobre mucho
amor.
David es ungido rey de Judá, 2 S. 2:1-4a. David consulta a Dios sobre el camino a seguir luego de la muerte de
Saúl. Recibe la orden de ubicarse en Hebrón, allí es coronado rey por los habitantes de Judá.
APLICACIONES DEL ESTUDIO.
1. Debemos mantenernos fieles a nuestros principios. El amalecita “cambió de bando” cuando murió Saúl.
Debemos ser fieles a nuestros principios y a nuestros dirigentes.
2. Debemos respetar a los líderes designados por Dios. David reconoció que Dios había colocado a Saúl en esta
función por lo tanto debía aceptarlo aunque esto significaba que debía huir.
3. No debemos alegrarnos con los pesares de los que se nos oponen. David había sufrido la injusticia de parte de
Saúl y no por eso se alegró por su muerte, su cariño hacia él no estaba supeditado a cómo lo tratara.
 HOJA DE ESTUDIO
DAVID, REY DE JUDÁ
(2 S. 1:1-2:4a)

Verdad central: Las expresiones de tristeza y duelo de David por la muerte de Saúl nos enseñan acerca de la lealtad
hacia quienes Dios ha puesto como gobernantes del pueblo.
Lee tu Biblia y responde:
1. La noticia de la muerte de Saúl, 2 S. 1:1-16.
David volvió a Siclag poco después de su incursión contra los amalecitas y en el camino se encontró con un
mensajero que regresaba de Gilboa trayendo las noticias de la muerte de Saúl y sus hijos. Se le pidió que detallara
lo sucedido y declaró que había encontrado a Saúl herido, que se había identificado con él como (v.8) __________
y que había matado al rey porque éste le pidió que lo hiciera por misericordia (v.__). Además el amalecita le
muestra los símbolos del reinado (v.10): “… y tomé la ________ que tenía en su cabeza, y la _________ que traía
en su brazo… ”. El hecho de que los tuviera éste en su poder era una evidencia segura de que el rey ya no estaba
para defenderlos, con la frase “… y las he traído acá a mi señor” demuestra su esperanza de recibir una recompensa
de parte de David por su acción.
El informe de este hombre difiere del registro de 1 S. 31, porque estaba mintiendo para congraciarse con David.
David se enojó tanto, que cuando disminuyó su dolor al final del día, ordeno que el amalecita fuera ejecutado (v.__)
2. Lamento por la muerte de Saúl y Jonatán, 2 S. 1:17-27.
La expresión pública del dolor de David por la muerte de Saúl y Jonatán quedó consignada en un poema: El canto
del arco. En el cántico de David que inicia y termina con la misma frase (vs. 19 y 27): “¡cómo han caído los
___________!”, David advirtió que nadie relatara la tragedia a los filisteos para que sus doncellas no se alegraran
(v.__), tal como años atrás las jóvenes israelitas habían cantado los triunfos de Saúl y David. Entonces maldijo a los
montes de (v. 21) ________ por haber sido el escenario dónde Saúl y Jonatán habían defendido a Israel con
heroísmo, aunque inútilmente, de sus enemigos.
La inquebrantable lealtad que sentía por Jonatán se expresa en una alabanza especial, en la cual David manifiesta la
relación del padre con su hijo (v.23): “Inseparables en su vida, tampoco en su muerte fueron separados; Más
ligeros eran que ________, Más fuertes que ________”.
Aunque Saúl había oprimido al pueblo en algunas ocasiones, el salmista dijo que también le había proporcionado
lujos y abundancia (v.__). Sin embargo, celebra su amistad con Jonatán con un sentimiento especial. Todos los
años de su inquebrantable amistad fueron resumidos en una conmovedora declaración (v.26): “Angustia tengo por
ti, __________ mío Jonatán, que me fuiste muy dulce. Más __________ me fue tu amor que el amor de las
mujeres”.
3. David es ungido rey de Judá, 2 S. 2:1-4a.
La muerte de Saúl trajo un profundo vacío de poder, particularmente en Judá ahora que había muerto Saúl y tres de
sus cuatro hijos. Por eso, David consultó a Dios, seguramente por medio del Urim y Tumim. Aún se encontraba en
Siclag, que era una ciudad filistea. Ya no le convenía seguir viviendo allí, era natural pensar en dirigirse a una de las
ciudades de Judá pues su familia pertenecía a esa tribu. David se dirigió a (v.1) ________ con todo el grupo que le
seguía y sus familias.
La frase (v.4a) “Y vinieron los __________ de Judá…” puede designar a los ancianos o a los representantes de
pueblo que ungieron a David, aunque ya antes (15 años atrás) había sido ungido secretamente por Samuel como
futuro rey. Cuando Dios selecciona a una persona para una tarea especial obra en su vida hasta cumplir sus
propósitos. (David fue ungido más tarde por tercera vez como rey de toda la nación, 2 S. 5:3). Ese fue un cambio
decisivo e importante, porque lo separó completamente de los filisteos, con quienes se había refugiado y hecho
convenios. Además, significaba que había una independencia relativa entre Judá e Israel, situación que culminaría
posteriormente con la división del reino después de la muerte de Salomón. Y por último, con esa ceremonia se
afirmó el reinado de David en oposición al de Is-boset, el hijo de Saúl, quien sucedió a su padre en las tribus del
norte.
APLICACIONES DEL ESTUDIO.
1. Debemos mantenernos fieles a nuestros principios. El amalecita “cambió de bando” cuando murió Saúl.
Debemos ser fieles a nuestros principios y a nuestros dirigentes.
2. Debemos respetar a los líderes designados por Dios. David reconoció que Dios había colocado a Saúl en esta
función por lo tanto debía aceptarlo aunque esto significaba que debía huir.
3. No debemos alegrarnos con los pesares de los que se nos oponen. David había sufrido la injusticia de parte de
Saúl y no por eso se alegró por su muerte, su cariño hacia él no estaba supeditado a cómo lo tratara.
 COMENTARIO BÍBLICO JAMIESON-FAUSSET-BROWN
CAPITULO 1
1-16. UN AMALECITA TRAE NOTICIAS DE LA MUERTE DE SAUL.
1. David… estuvo dos días en Siclag—Aunque reducida por los amalecitas, aquella ciudad no fue saqueada ni
destruida del todo, de modo que David y sus 600 seguidores con sus familias, pudieron hallar algunas comodidades.
2-12. vino uno del campo de Saúl—Como en el relato de la muerte de Saúl dado en 1 S. 31, es inspirado, debe ser
considerado verdadero, y el relato del amalecita como una ficción inventada por él mismo para congraciarse con
David, el supuesto sucesor al trono. La pregunta de David: “¿Qué ha acontecido?”, demuestra el gran interés que él
tenía en la guerra, interés que nacía de sus sentimientos de alto y generoso patriotismo y no de la ambición. Sin
embargo, juzgando el amalecita que David estuviese animado por algún principio egoísta, inventó un cuento
improbable e inconsecuente por medio del cual creía que conseguiría una recompensa. Habiendo visto el acto
suicida de Saúl, pensó utilizarlo para su provecho, y sufrió el castigo de su cálculo equivocado.
10. la corona—pequeña gorra metálica o banda, que servía como yelmo, con un pequeño cuerno que salía hacia
adelante como símbolo de poder, la ajorca que traía en su brazo—El brazalete llevado más arriba del codo, marca
antigua de dignidad real, todavía es llevado por los reyes en algunos países orientales.
13-15. David dijo a aquel mancebo: … ¿De dónde eres tú?”—El hombre había dicho al principio quién era, pero
ahora se le hace la pregunta formal y judicialmente. Podrá parecer demasiado severo el castigo infligido al
amalecita, pero el respeto tributado a los reyes del Occidente, no debe considerarse como la norma de lo que en el
Oriente se cree propio de la dignidad real. La reverencia de David a Saúl como el ungido de Jehová, estaba en su
mente como un principio sobe el cual él mismo había obrado varias veces en ocasión de grandes tentaciones. En
estas circunstancias fué especialmente importante que fuese conocido públicamente este principio suyo; librarse de
la imputación de ser en alguna manera cómplice del execrable regicidio, era para él motivo de preocupación siendo
juez justo, no menos que un buen político.
17-27. DAVID LAMENTA A SAUL Y JONATAN.
17. Endechó David… con esta endecha—Esta inimitable elegía triste, según suposición de muchos escritores, llegó
a ser una canción de guerra nacional, y era enseñada a los jóvenes israelitas bajo el nombre de “El Arco”, según la
práctica de muchos escritores hebreos y clásicos de poner títulos a sus canciones de acuerdo con el tema principal
(Salmos 22; 45; 56; 60; 80; 100).
19. la gloria de Israel—o “la hermosura”; literalmente, “la gacela”, o “antílope” de Israel. En el Oriente este animal
es el tipo de la hermosura o elegancia de forma simétrica. ¡Cómo han caído los valientes!—Esta frase forma el coro
del cántico.
21. ni rocío ni lluvia caiga sobre vosotros—Ser privados de las benéficas influencias atmosféricas, las cuales, en
estas colinas cultivadas, parecen haber producido bastantes primicias en las cosechas de granos, es mencionado
como la mayor calamidad que los sentimientos heridos del poeta pudieron imaginarse. Esta maldición parece estar
sobre ellos todavía, porque las montañas de Gilboa están desnudas y son estériles. allí fue desechado el escudo de
los valientes—Tirar el escudo era considerado como una vergüenza nacional. Sin embargo, en aquella fatal batalla
de Gilboa, muchos de los soldados judíos que habían mostrado un valor resuelto, olvidándose de su propia fama y
del honor patrio, tiraron sus escudos y huyeron del campo. Esta conducta deshonrosa y cobarde es mencionada con
tristeza delicadamente patética.
24. Hijas de Israel, llorad sobre Saúl, que os vestía de escarlata. La afición por el vestido que antiguamente
distinguía a las mujeres orientales, es todavía su característica. Se manifiesta en su amor por los colores claros,
alegres y variados, en la profusa ostentación de ornamentos y en otras formas diferentes. Los sentimientos más
íntimos del poeta se conmovieron, y su amable disposición se dejó ver en su fuerte deseo de celebrar las cualidades
de Saúl así como también las de Jonatán; pero las alabanzas a éste forman el estribillo del poema, que empieza y
termina hablando de aquel excelente príncipe.
CAPITULO 2
Vers. 1-4. POR MANDATO DE DIOS, DAVID SUBE A HEBRON, Y ES HECHO REY DE JUDA.
1. David consultó a Jehová—Por medio del Urim. El sabía su destino, mas sabía también que la providencia de Dios
allanaría el camino; y por lo tanto no quería dar ningún paso en esta crisis personal y nacional, sin buscar la
dirección divina. Le fue dicho que fuera a Judá y fijara su sede en Hebrón, a donde fue con su compañía que ya era
considerable. Allí sus intereses eran muy poderosos; porque no sólo estaba dentro de su propia tribu, y cerca de
jefes con quienes desde tiempo atrás había estado en relaciones amigables, sino que Hebrón era la capital y centro
de Judá, y una de las ciudades levíticas, cuyos habitantes le eran firmemente adictos, tanto por simpatía a su causa
desde la matanza en Nob, como por la perspectiva de realizar por medio de él la prometida preeminencia de ellos
entre las tribus. Los príncipes de Judá, pues, le ofrecieron la corona de su tribu, la cual él aceptó. Más no podía
hacerse con prudencia, en las circunstancias actuales de la patria.