MINISTERIO DE DEFENSA NACIONAL

POLICÍA NACIONAL

Retroalimentación normativa al personal de la Policía Nacional en temáticas de

protección y garantía de los Derechos Humanos, uso de la fuerza, atención y
acompañamiento a manifestaciones y control de disturbios en el servicio de
policía, con ocasión a la manifestación pública.

TEMAS A TRATAR

Objetivo

1. Derechos humanos

Resolución 03872 del 19 de noviembre de 2021 “Por la cual se adoptan los Lineamientos
para la Transversalización del Enfoque de Género en la Policía Nacional”

• Alcance
• Principios
• Lineamientos para la transversalización del enfoque de género en la Policía Nacional

Código 1IP-GU-0004 “Guía de actuación policial para la atención de poblaciones

vulnerables”

Directiva Operativa Transitoria 025 DIPON INSGE del 25 de agosto de 2021 “Parámetros
de actuación Policial de la Estrategia de Atención a Poblaciones en Situación de
Vulnerabilidad – ESPOV”

2. Uso de la fuerza

Ley 1801 del 29 de julio de 2016, modificada en su título por el artículo 6 de la Ley 2000
del 14 de noviembre de 2019, “Código Nacional de Seguridad y Convivencia Ciudadana”

Resolución 02903 del 23 de junio de 2017 “Por la cual se expide el reglamento para el uso
de la fuerza y el empleo de armas, municiones, elementos y dispositivos menos letales, por
la Policía Nacional”.

Resolución 01716 del 31 de mayo de 2021 “Por la cual se establecen los parámetros del
empleo de las armas, municiones, elementos y dispositivos menos letales para la prestación
del servicio de policía”.

3. Acompañamiento a la manifestación pública

Decreto 003 del 5 de enero de 2021, “Por el cual se expide el protocolo de acciones
preventivas, concomitantes y posteriores, denominado “Estatuto de reacción, uso y
verificación de la fuerza legítima del Estado y protección del derecho a la protesta pacífica
ciudadana””.

Resolución 03002 del 29 de junio de 2017, “Por la cual se expide el manual para el servicio
en manifestaciones y control de disturbios para la Policía Nacional”.

Resolución 01681 del 25 de mayo del 2021 ”Por la cual se adopta el protocolo de

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verificación en cado de captura y traslado de personas, durante el desarrollo de cualquier

Mitin, Reunión o Acto de Protesta suscrito entre la Procuraduría General de la Nación y la
Policía Nacional”.

Directiva Operativa Transitoria 008 del 01 de marzo de 2022, “Parámetros institucionales

para la activación del sistema de anticipación y atención de manifestaciones públicas y
control de disturbios en el territorio nacional”.

Objetivo

En el marco de la manifestación pública, es de vital importancia para la Policía Nacional

proporcionar herramientas que permitan mantener la seguridad e integridad en el servicio
de policía de los hombres y mujeres de la Institución, por ello la socialización del presente
documento permite la retroalimentación y actualización de conceptos frente al uso de la
fuerza y protección de los Derechos Humanos, permitiendo así, realizar procedimientos de
policía en el marco de las normas y reglamentos establecidos, por ello, se exhorta a cada
funcionario leer en detalle y dedicación, cada uno de los apartes de este documento, los
cuales le permitirán tener las bases normativas y de actuación, necesarias para afrontar los
diferentes motivos de policía que se presenten en el territorio nacional.

1. Derechos humanos

Definidos como inherentes a todos los seres humanos, sin distinción alguna de
nacionalidad, lugar de residencia, sexo, origen nacional o étnico, color, religión, lengua, o
cualquier otra condición. Todos tenemos los mismos Derechos Humanos, sin discriminación
alguna. Estos derechos son interrelacionados, interdependientes e indivisibles. Los
Derechos Humanos universales están a menudo contemplados en la ley y garantizados por
ella, a través de los tratados, el derecho internacional consuetudinario, los principios
generales y otras fuentes del derecho internacional.

El Derecho Internacional de los Derechos Humanos establece las obligaciones que tienen
los gobiernos de tomar medidas en determinadas situaciones, o de abstenerse de actuar
de determinada forma en otras, a fin de promover y proteger los Derechos Humanos y las
libertades fundamentales de los individuos o grupos. Lo anterior, establecido en los
lineamientos dispuestos en la Constitución Política de Colombia, las leyes y normas
internas del país, así como en los acuerdos y tratados internacionales ratificados por
Colombia, buscando el cumplimiento de los Derechos Humanos, Derecho Internacional
Humanitario.

Nadie debe ser sometido a torturas o a otros tratos o penas crueles, inhumanos o
degradantes, ya que, estos actos constituyen una tentativa de destruir física y mentalmente
a un ser humano, conductas que no pueden justificarse por ninguna circunstancia,
ideología, ni interés superior.

Aunado a lo anterior Colombia es un Estado social de derecho, que vela y garantiza el

respeto de la dignidad humana y el cumplimiento de los derechos fundamentales
consagrados en la Constitución Política de Colombia.

En desarrollo de la finalidad indicada anteriormente, se expidió la Ley 1801 de 2016 “Por la

cual se expide el Código Nacional de Seguridad y Convivencia Ciudadana”, cuyo objeto es

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determinar el ejercicio del poder, la función y la actividad de Policía, de conformidad con la

Constitución Política y el ordenamiento jurídico vigente.

Esta ley prevé la protección de los derechos de las personas, indicando no solo los
comportamientos que pueden poner en riesgo esos derechos, sino también las medidas
correctivas a aplicar por parte de la Policía Nacional, entendidas como las acciones
impuestas por las autoridades de Policía a las personas que incurran en comportamientos
contrarios a la convivencia o al incumplimiento de deberes específicos de convivencia, con
el fin de disuadir, prevenir, superar, resarcir, procurar, educar, proteger o restablecer la
convivencia.

Vale la pena resaltar que el Título V de esta ley desarrolla de forma particular la relación de
la Policía con grupos específicos de la sociedad, incluyendo niños, niñas y adolescentes
NNA y grupos de especial protección.

Resolución No. 03872 del 19/11/2021 “Por la cual se adoptan los lineamientos para la
transversalización del Enfoque de Género en la Policía Nacional”

La Policía Nacional, establece los lineamientos al interior de la Institución en materia de

igualdad de género y garantía de derechos para las mujeres y personas que no se ajustan
a las expectativas sociales de género, teniendo en consideración aspectos tales como: las
múltiples formas de ser, mujeres y hombres; la necesidad de reconocer las condiciones
sociales, políticas y culturales que aumentan la vulnerabilidad; la posibilidad de que todas
las personas puedan empoderarse y generar transformaciones sociales para la superación
de las desigualdades de género y el indiscutible reconocimiento de los derechos humanos
para lograr una garantía real y efectiva de estos para toda la sociedad.

Los principios que fundamentan la Transversalización del Enfoque de Género en la Policía

Nacional, se constituyen en el punto de partida que influye en la prestación del servicio de
policía que se desarrolla observando los cargos y funciones, los procesos, procedimientos,
actividades y tareas en los diferentes niveles institucionales del orden estratégico, táctico y
operacional, implementando en todo momento, los siguientes postulados:

• Igualdad de Oportunidades.
• Inclusión y no discriminación.
• Coherencia.
• Sostenibilidad.
• Transversalización.
• Progresividad y no regresividad.
• Respeto por los derechos humanos.

Los enfoques a partir de los cuales orienta sus acciones al interior de la Institución son:

a) Enfoque de género.
b) Enfoque de derechos.
c) Enfoque diferencial.

Código 1IP-GU-0004 Guía de actuación policial para la atención de poblaciones vulnerables

Tiene por objeto, orientar la actuación del hombre y mujer de la Policía Nacional con base
en la normatividad existente sobre la atención prioritaria y focalizada que se debe brindar a

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la población en situación de vulnerabilidad en virtud de garantizar sus derechos y libertades

conforme al ordenamiento constitucional, legal, reglamentario y de los tratados y convenios
internacionales.

La Guía de actuación policial para la atención de población en situación de vulnerabilidad,

se constituye como un instrumento en donde se encuentran los criterios para que el hombre
y la mujer policía en el desarrollo de sus actividades puedan prestar de manera oportuna e
integral una adecuada atención a esa población de especial protección, a través de
diferentes procesos y procedimientos institucionales.

La Policía Nacional le brindará a la población que se encuentre en el territorio colombiano

un trato respetuoso y digno sin importar su sexo, pertenencia étnico racial, color, orientación
sexual, identidad de género, religión, cultura, nacionalidad y condición social, estableciendo
acciones adecuadas y labores especializadas para prevenir todo tipo de discriminación,
vulneración y violencias, evitando proferir calificativos negativos, insultos y comentarios
degradantes. En efecto, la Policía Nacional, dentro del Estado Social de Derecho, está
obligada como institución a garantizar el ejercicio pleno de derechos y libertades de quienes
habitan y circulan en el territorio nacional, por ello sus integrantes deberán actuar de forma
respetuosa, con imparcialidad, legalidad, objetividad, eficiencia, profesionalismo y
honradez, respetando siempre y en todo lugar los derechos humanos.

El término “Población en Situación de Vulnerabilidad” comúnmente empleado a nivel del

Derecho Internacional de los Derechos Humanos, se refiere a aquellos individuos o
colectividades que se encuentran en circunstancias particulares y especiales por las cuales
les pueden ser vulnerados sus derechos a la igualdad, vida, integridad y libertad personal,
debido a múltiples circunstancias de tipo histórico, político o cultural, que conllevan a que
estas poblaciones padezcan situaciones de indefensión, marginalidad, exclusión o
discriminación.

El enfoque diferencial demanda que la Policía Nacional adopte un trato preferente, con
deberes especiales de atención y salvaguarda de los derechos fundamentales de las
poblaciones en situación de vulnerabilidad, esto no significa que dicho trato se pueda
considerar una discriminación hacia los otros grupos poblacionales, sino que por el contrario
en razón a las características particulares de esta población se deben garantizar acciones
afirmativas. Éstas son entendidas como aquellas medidas, políticas o decisiones públicas
por medio de las cuales se establece un trato ventajoso, y en cuanto tal formalmente
desigual, que favorece a determinadas personas o grupos humanos tradicionalmente
marginados o discriminados, con el único propósito de avanzar hacia la igualdad sustancial
de todo el conglomerado social.

La guía es de observancia general y obligatoria para todos los hombres y mujeres de la

Policía Nacional de Colombia, y establece unas consideraciones orientadas a proteger,
respetar y asegurar el cumplimiento por parte del Estado de la garantía de los derechos
humanos de las personas pertenecientes a poblaciones en situación de vulnerabilidad y a
sus organizaciones.

Directiva Operativa Transitoria 025 DIPON INSGE del 25 de agosto de 2021 “Parámetros
de actuación Policial de la Estrategia de Atención a Poblaciones en Situación de
Vulnerabilidad – ESPOV”.

La Policía Nacional en el marco del Modelo de Planeación y Gestión Operacional del

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Servicio de Policía, efectuó una revisión y actualización a la Estrategia de Protección a

Poblaciones en Situación de Vulnerabilidad -ESPOV, en cumplimiento a la Política
Nacional de Seguridad y Convivencia Ciudadana y al marco de Política Pública de
Protección Integral y garantías para Líderes y Lideresas Sociales, Comunales, Periodistas
y Defensores de Derechos Humanos, brindando un enfoque más preventivo e
investigativo atendiendo a la misionalidad institucional, de ahí su nombre como “Estrategia
de Atención a Poblaciones en Situación de Vulnerabilidad”, focalizando las acciones
Institucionales en el territorio nacional.

Además, se reconoce el concepto de defensor de Derechos Humanos para garantizar el

despliegue nacional de la ESPOV y como criterio orientador del desarrollo de la actividad
de policía en su carácter eminentemente preventivo y de apoyo judicial, fueron
referenciadas 23 tipologías de liderazgo que caracterizan la promoción y defensa de los
Derechos Humanos, de acuerdo con el consenso de la Oficina en Colombia de la Alta
Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos - OACNUDH, la Alta
Consejería Presidencial para los Derechos Humanos y la Organización No Gubernamental
“Programa Somos Defensores”; en armonía a lo dispuesto en el ámbito de la competencia
institucional frente al Marco normativo del Plan de Acción Oportuna PAO y de conformidad
a la población objeto de protección a cargo de la unidad administrativa especial del
Gobierno Nacional (Unidad Nacional de Protección –UNP), por situación de riesgo
extraordinario o extremo de acuerdo con el artículo 2.4.1.2.6 del Decreto 1066 de 2015, así:

1. Líder Comunal.
2. Líder Comunitario.
3. Líder de Restitución de Tierras.
4. Líder Campesino.
5. Líder de Mujeres.
6. Líder Afrodescendiente.
7. Líder Indígena.
8. Líder Sindical.
9. Líder Ambiental.
10. Líder Social.
11. Líder de Víctimas o Desplazados.
12. Líder Juvenil y de Ia Infancia.
13. Líder Cultural.
14. Líder LGTBI.
15. Líder en Salud.
16. Líder Minero Artesanal.
17. Comunicador Defensor (a) de Derechos Humanos.
18. Abogado Defensor de Derechos Humanos.
19. Defensor(a) o Líder Asociado a ONG.
20. Líder en Ia Implementación de Acuerdo de Paz.
21. Líder Movimiento Político.
22. Líder Programa de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito.
23. Líder Religioso.

2. Uso de la fuerza

El legislador expidió la Ley 62 de 1993 por la cual se disponen normas sobre la Policía
Nacional, con la finalidad de definir su marco de actuación a partir de lo establecido en el

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artículo 218 constitucional y disponiendo la obligación de intervenir frente a los casos de

Policía. (artículo 8).

De igual forma, la rama legislativa a través de la Ley 1801 de 2016 “Código Nacional de
Seguridad y Convivencia Ciudadana”, reguló aspectos como el poder, la función y actividad
de policía, mediante las cuales otorgó la facultad de limitar derechos y libertades (artículo
12), reglamentar el ejercicio de algunas facultades (artículo 16) y verificar el cumplimiento
(artículo 20), de lo antes dispuesto a las autoridades de policía.

A su vez, determinó el titular del uso de la Fuerza (artículo 22) en materia de convivencia y
seguridad, asignando esta responsabilidad a la Policía Nacional, de acuerdo a los
parámetros establecidos en la misma ley (artículo 166) y con base en los principios
internacionales sobre su uso, como son: legalidad, necesidad y proporcionalidad.

La Resolución 02903 de fecha 23 de junio de 2017 “Por la cual se expide el Reglamento

para el uso de la fuerza y el empleo de armas, municiones, elementos y dispositivos menos
letales, por la Policía Nacional”, estructurada a partir de lo señalado en el artículo 223 de la
Constitución Política, el cual dispone el monopolio en el uso de las armas por parte del
Estado, siendo la Policía Nacional como entidad encargada de conservar el orden Público
interno, así como la seguridad y convivencia ciudadana, en aras de garantizar el ejercicio
de derechos y libertades, el titular del uso de la fuerza y de las armas en materia de
convivencia, como lo dispone el artículo 22 de la Ley 1801 de 2016, a través de la cual a
partir de lo preceptuado en los instrumentos internacionales convencionales y no
convencionales sobre el uso de la fuerza, en conjunto con los principios de legalidad,
necesidad y proporcionalidad, dispone en concordancia con la normatividad constitucional
y legal, el uso diferenciado de la fuerza en momentos en que se presenten situaciones que
puedan afectar la vida e integridad de las personas y de los mismos funcionarios, el derecho
a la salud, la locomoción, el trabajo, la seguridad alimentaria, la propiedad privada y la
economía del Estado.

La Resolución define el modelo para el uso diferenciado y proporcionado de la fuerza, que

responde al nivel de resistencia del individuo, variando de acuerdo a las características de
cada procedimiento, siendo necesario mantener la autoridad y el dinamismo en su acción
por parte del funcionario de policía, este modelo contempla el uso de la fuerza preventiva
(presencia policial, comunicación y disuasión), al uso de la fuerza reactiva (fuerza física -
armas naturales, armas menos letales, armas de fuego).

A continuación, se presenta el modelo para el uso diferenciado y proporcional de la fuerza,

que le permite al policía tener un criterio valorativo de actuación frente a los procedimientos
policiales; los niveles de respuesta policial deben tener un objetivo legal y van aumentando
o descendiendo de acuerdo con el nivel de resistencia del individuo, la actitud, el riesgo, la
percepción y el escenario en el cual se interviene. El uso de la fuerza debe ser una medida
excepcional bajo los principios de necesidad, legalidad, proporcionalidad y racionalidad,
así:

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El Policía podrá optar por cualquiera de los niveles de respuesta policial de manera
ascendente o descendente de acuerdo con el objetivo legal que se persiga y bajo los
principios, una vez logrado el objetivo legal se procederá a descender los niveles de
respuesta a fin de mantener el control y la seguridad de las personas que intervienen en el
procedimiento policial.

En tal circunstancia, esta Resolución 02903 de 2017, que ha sido fruto de las reformas
propuestas en virtud de la mejora continua de la misma Institución, contempla en su
articulado la clasificación de las armas, municiones, elementos y dispositivos menos letales,
que puede emplear el personal de la Policía Nacional frente a situaciones de peligro
actuales o inminentes, contra su vida e integridad o la de un tercero, además de señalar los
niveles de resistencia para hacer uso diferenciado de la fuerza.

Finalmente, este acto administrativo dispone que estos elementos menos letales deberán
ser de única y exclusiva dotación por parte de la Policía Nacional, previa capacitación por
parte de la Dirección de Educación Policial reconocida por el Ministerio de Educación
Nacional como institución de educación superior.

La Resolución 01716 del 31 de mayo de 2021, “Por la cual se establecen los parámetros
para el empleo de armas, municiones, elementos y dispositivos menos letales para la
prestación del servicio de policía”, fue expedida por el director general de la Policía
Nacional, como instrumento complementario de la Resolución 02903 de 2017, donde se
postulan situaciones generales y específicas sobre el uso de estos dispositivos por parte
del personal uniformado debidamente capacitado en su manejo, así como formado y
entrenado en derechos humanos.

El acto administrativo muestra un avance pormenorizado de instrucción específica en la

operacionabilidad de armas, municiones, elementos y dispositivos menos letales, a partir
de las circunstancias de tiempo, modo y lugar, así como las condiciones de convivencia y
seguridad que rodeen la situación a valorar por el uniformado.

3. Acompañamiento a manifestaciones y protesta social

El Decreto 003 de 2021, “Por el cual se expide el protocolo de acciones preventivas,

concomitantes y posteriores, denominado Estatuto de Reacción, Uso y Verificación de la
Fuerza Legítima del Estado y Protección del Derecho a la Protesta Pacífica Ciudadana”,
expedido por el Gobierno, contempla la obligación de las autoridades del orden nacional y
territorial, así como compromisos de los Entes de control, y demás actores que participan
en la manifestación pública y pacífica, así como los parámetros de actuación para la Policía

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Nacional en pro de la garantía de este derecho, el cual contiene:

I. Acciones Preventivas

Son los actos dispuestos antes de una jornada de manifestación pública y pacífica a fin
de garantizar su libre ejercicio y permitir actividades de comunicación, organización y
prevención entre las organizaciones o movimientos sociales convocantes a una protesta y
las autoridades administrativas y de policía del orden territorial o local, el Decreto
estructurado por el gobierno en conjunto con accionantes y Entes de Control, destacando
los siguientes:

• Capacitación al personal de la Policía Nacional, en materia de Derechos Humanos.

• Instalación de mesas de coordinación Nacional, Departamental, Municipal, convocadas
por las autoridades nacionales y territoriales.
• Instalación del Puesto de Mando Unificado por parte del Gobernador o Alcalde.
• Las autoridades deberán priorizar el dialogo con los organizadores.
• Las autoridades convocaran una comisión de verificación de la sociedad para que hagan
parte de las mesas de coordinación.
• Verificación de elementos por parte del Ministerio Público.
• Aviso de la jornada de movilización por parte de los organizadores, a fin de generar los
protocolos de acompañamiento.
• Planeación del servicio por parte de la Policía Nacional para proteger el derecho a la
manifestación pública y pacífica.

II. Acciones Concomitantes

Se desarrollan mediante actos supeditados al cumplimiento de la Constitución, la ley y los

reglamentos que se ejecutan por parte de las autoridades de policía, así:

• Acompañamiento a movilizaciones por parte de las autoridades.

• Actuación Policial.
• Etapa de diálogo y mediación a través de entes de control, gestores de convivencia,
comisión de verificación de la sociedad y Policía Nacional.
• Aviso del uso de la fuerza frente a hechos de violencia ajenos a la manifestación.
• Uso de la fuerza (Principios de legalidad, necesidad, proporcionalidad, racionalidad), para
garantizar la manifestación y derechos de quienes no participan, frente a hechos de
violencia.
• Actuación de la fuerza disponible.
• Actuación del Escuadrón Móvil Antidisturbios, única y exclusivamente cuando se
presentan hechos de violencia que afectan derechos y previa orden de la autoridad
administrativa ubicada en el PMU.
• Prohibición de portar armas de fuego para el acompañamiento de las manifestaciones.

III. Acciones posteriores

Aquellas realizadas por las autoridades de policía cuando la manifestación pública haya
terminado.

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• Presentación de informes y comunicaciones públicas, Finalización del Puesto de Mando

Unificado – PMU, Explicación pública y Canales de denuncia.
• Rendición de informes a las autoridades competentes como los entes de control y
autoridades judiciales cuando corresponda.
• Comunicados de Prensa por parte de las entidades informando los procedimientos
llevados a cabo.
• Explicación pública a la sociedad por parte de la Autoridad Administrativa sobre todos los
procedimientos realizados.
• Rendición de cuentas a la sociedad sobre investigaciones adelantadas por parte de los
entes de control, autoridades judiciales, oficinas internas de la Policía Nacional.

La Policía Nacional, como autoridad es garante de los derechos de reunión y manifestación

pública, gracias a la planeación, permite anticipar, prevenir, mitigar y contrarrestar aquellas
actuaciones que vayan en contravía de la materialización efectiva de tales máximas
constitucionales.

Resulta imperioso expresar que la Policía Nacional, como entidad que contribuye a la
convivencia y seguridad ciudadana en los escenarios de manifestación pública y pacifica
dispone del acompañamiento de quienes participan de la movilización en aras de garantizar
el ejercicio de los derechos y libertades públicas frente actores externos que puedan afectar
dicho derecho.

En tal circunstancia la institución dispone de Dispositivos Mínimos de Intervención Básicos,

conformado por personal adscrito a la fuerza disponible de cada unidad o personal que
cumple labores administrativas en la Policía Nacional, todos ellos debidamente capacitados
y entrenados en la protección y respeto de los derechos humanos, así como en la atención
de los diferentes motivos de policía, quienes portan elementos de protección personal como
lo dispone el marco internacional, los reglamentos internos y en ningún caso armas de fuego
potencialmente letales.

Cabe reiterar que este personal busca salvaguardar las garantías de quienes participan en
el ejercicio legítimo de la misma, así como de quienes no lo hacen, eventos en los cuales
el cuerpo policial desde ninguna perspectiva hace intervención a través del uso de la fuerza.
El derecho a manifestarse es objeto de protección hasta tanto el mismo no pierda su
concepción de pacífico, el cual fue delimitado por el constituyente y se traduce en la
realización de reuniones, manifestaciones o protestas sin porte de armas de fuego
potencialmente letales, sin tener la finalidad de promover la alteración del orden o el
desconocimiento del Estado Social de derecho. Bajo estos supuestos generales, puede
decirse que el ejercicio de estos derechos implica necesariamente, el respeto de los
principios fundamentales de la Constitución Política de Colombia.

Ahora bien, cuando en el contexto del ejercicio de estos derechos se suscitan focos de
violencia o conductas delictivas, necesariamente el Estado a través de la Institución policial
a partir del mandato constitucional y la función legal asignada, tiene la obligación de
intervenir para preservar o restablecer el orden público con los medios de policía, en aras
de evitar la afectación de garantías, así como impedir el desequilibrio del orden social, la
tranquilidad y la salubridad medioambiental.

La Resolución No. 03002 del 29 de junio de 2017, “Por la cual se expide el manual para el
servicio en manifestaciones y control de disturbios para la Policía Nacional”, contempla en
su articulado, el fundamento jurídico internacional y nacional sobre la necesidad que las

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autoridades del Estado colombiano, tengan en cuenta las estrategias del servicio para
garantizar el ejercicio del derecho de reunión y manifestación pública y pacífica, frente a lo
cual se establecen directrices claras, legales, necesarias y proporcionales, para realizar los
acompañamientos a quienes ejercen el derecho, propendiendo por protegerlos en su
ejercicio con personal idóneo y debidamente capacitado en derechos humanos.

El acto administrativo en comento, establece de manera clara la prohibición que el personal

destinado para el acompañamiento de manifestaciones públicas y pacíficas porte armas de
fuego potencialmente letales (artículo 13), aunado a la posibilidad de contar con medios de
apoyo que permitan prevenir comportamientos contrarios a la convivencia o conductas
punibles de quienes no hacen parte de la manifestación.

La reglamentación dispuesta por la Policía Nacional como entidad del Estado colombiano
que contribuye a la convivencia y seguridad ciudadana, en coordinación con las autoridades
nacionales y territoriales, señala el paso a paso para la actuación policial en el antes,
durante y después (artículo 15), de una manifestación pública y pacífica, así como la
obligatoriedad de intervenir cuando personas ajenas al evento, pretendan afectar el mismo
o los derechos de quienes no hacen parte de la movilización y pueden resultar afectados
en su locomoción, trabajo, vida e integridad, salud o seguridad alimentaria.

Cabe agregar, que el acto administrativo en cita, pone de presente la necesidad de

coordinar con las autoridades territoriales, los entes de control como el ministerio público,
así como la Fiscalía General de la Nación, gestores de convivencia y los organizadores, a
fin de buscar los diálogos necesarios previos y durante el desarrollo de la manifestación, en
aras de evitar situaciones que puedan afectar el ejercicio del derecho a través de actos de
violencia de terceros ajenos al evento (Artículo 15.2), que obliguen al empleo de personal
especializado para controlar las mismas.

Precisamente esta Resolución, establece la participación de un grupo especializado en el

control de disturbios, con los elementos de protección que debe utilizar como lo dispone el
numeral 2 de los principios básicos sobre el empleo de la fuerza, a fin de disminuir la
necesidad de usar las armas de fuego potencialmente letales, el documento dispone
taxativamente como última ratio el empleo de este grupo especializado, indicando la
obligación de ubicarlo en sitios estratégicos para ser empleado solo por órdenes expresas
del comandante y posterior al haber agotado el diálogo con los gestores de convivencia, y
únicamente frente a hechos de violencia que afecten el orden público, la convivencia y
seguridad ciudadana.

Resolución 01681 del 25 de mayo del 2021 ”Por la cual se adopta el protocolo de
verificación en cado de captura y traslado de personas, durante el desarrollo de cualquier
Mitin, Reunión o Acto de Protesta suscrito entre la Procuraduría General de la Nación y la
Policía Nacional”, corresponde a la integración entre la Policía Nacional y la Procuraduría
General de la Nación, en el Puesto de Mando Unificado o Puesto de Mando Institucional,
en los eventos que se vayan adelantar expresiones ciudadanas, en aras de generar
mecanismos de coordinación permanente que permitan ejercer un control inmediato y
efectivo de las personas involucradas en comportamientos contrarios a la convivencia o
conductas penales, que deban ser trasladadas a sitios previamente destinados por las
autoridades administrativa o a las Unidades de Reacción Inmediata (URI).

La Directiva Operativa Transitoria 008 del 1 de marzo de 2022, es un acto administrativo de

carácter doctrinal emitida por el Director General de la Policía Nacional de Colombia, el cual

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tiene como finalidad fijar parámetros institucionales para la activación del sistema de
anticipación y atención de manifestaciones públicas y control de disturbios en el territorio
nacional, documento a través del cual se establecen instrucciones a las Regiones,
Metropolitanas y Departamentos de Policía, así:

ANTES (Alistamiento)

Los comandantes de Región, Metropolitanas y Departamentos de Policía, analizarán la

apreciación de inteligencia para preparar los planes de contingencia, con el fin de evitar
posibles amenazas o riesgos de diversa índole.

Coordinar el apoyo necesario con las autoridades político administrativas y militares de la

jurisdicción.

Reforzar la seguridad en los puntos críticos de las jurisdicciones.

Promover a nivel regional, departamental y municipal, la realización de Consejos de

Seguridad y comités de vigilancia según corresponda con las entidades gubernamentales.
Solicitar el acompañamiento de los entes de control necesarios (Procuraduría, Personería,
Defensoría del Pueblo, Fiscalía General, Contraloría, Oficiales Delegados de Naciones
Unidades en Colombia. entre otros), como garantes ante el acompañamiento y posibles
actuaciones de la Fuerza Pública en el uso racional, necesario y proporcional de la fuerza
y demás unidades de apoyo en los puntos previos de concentración o bloqueo establecidos,
de acuerdo con las instrucciones que para cada caso imparta la Dirección de Seguridad
Ciudadana, con el fin de prevenir el bloqueo de las vías.

Coordinar de manera previa con la Fiscalía General de la Nación el proceso de

identificación, individualización y judicialización de las personas que de alguna u otra forma
alteren el orden público durante el desarrollo de las jornadas de manifestación social.

DURANTE (Ejecución)

Garantizar el derecho a la manifestación, proteger el patrimonio público y privado, y

contrarrestar las alteraciones del orden público que se puedan presentar, son las primacías
que deben tener presente en el desarrollo de los eventos.

Dar amplia instrucción al personal que interviene en los procedimientos, (recordar el respeto
por los Derechos Humanos, uso diferenciado de la fuerza, correcta utilización de los
elementos para el servicio, medidas de seguridad), indicar el objetivo del procedimiento, e
informar al personal quienes son las autoridades administrativas que participan en el
procedimiento, entre otras.

Adelantar acciones de disuasión y prevención frente a posibles hechos de vandalismo

contra instalaciones públicas, lugares aledaños a estas instalaciones, entidades
financieras, establecimientos comerciales, evitando saqueos, realización de grafitis, daño
de fachadas, ruptura de vidrios, entre otras actuaciones que afecten el bien general.

Las movilizaciones serán acompañadas por equipos básicos de intervención de personal

adscrito a la Fuerza Disponible de cada unidad o en su defecto por el personal de la Plana
Mayor, quienes deben recibir inducción (teórica y práctica) en el manejo y control de
multitudes.

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Realizar seguimiento a las jornadas de manifestación social a través del Puesto de Mando;
en consecuencia, las unidades policiales comprometidas deberán reportar oportunamente
las novedades al mismo, desde las salas CIEPS, para ser comunicadas inmediatamente al
mando institucional, con el fin servir como referente para la toma de decisiones.

DESPUÉS (Evaluación)

Mantener la presencia policial hasta tanto se normalice la movilidad y el orden público.

Informar oportunamente al puesto de mando las novedades presentadas durante las

actividades desarrolladas dentro de las manifestaciones.

Al término de las jornadas de manifestación social y desinstalación de los dispositivos

policiales de prevención y atención, efectuar la evaluación institucional y reporte de
novedades al mando institucional, elaborando informe ejecutivo destacando los aciertos y
desaciertos y recomendaciones frente a la prestación del servicio, con el propósito de
ajustar los servicios y procedimientos policiales.

Los comandantes de metropolitanas y departamentos de policía, coordinarán las acciones

necesarias para facilitar el retorno del personal uniformado que apoyaron los diferentes
servicios en cada una de sus jurisdicciones hasta su lugar de origen.

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