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Clasificación de Kennedy

 Introducción.

En un estudio matemático realizado en 1942 por Cummer enumera más de 113.000 combinaciones
posibles de edentaciones parciales. Teniendo esto en cuenta, ningún método de clasificación puede
describir todas las posibilidades que pueden presentarse en un paciente parcialmente desdentado.
Como mucho ofrecerá una agrupación básica que permitirá orientar el diseño de los casos que
pertenecen a un grupo determinado. Esto obliga a recurrir a una clasificación en la cual cada grupo
definido a partir de unas determinadas características anatómicas obedezcan a los mismos principios
de tratamiento. Además esta sistematización debe ser sencilla y adoptada por la mayoría.

Cualquier clasificación, para ser útil, deberá satisfacer los siguientes requisitos:

 Debe permitir la visualización inmediata del tipo de arco parcialmente desdentado que se está
observando.

 Debe permitir la inmediata diferenciación entre la prótesis parcial removible dentosoportada y


mucosoportada.

 Debe de servir de guía para el tipo de diseño que se va a emplear.

 Debe ser universalmente aceptado.

Esta clasificación sirve para recordar los principios y los requisitos del diseño de cada uno de los
tipos de prótesis y puede sugerir un abordaje típico o habitual para cada diseño dental y es aplicable
tanto a modelos maxilares como mandibulares.

Aunque hay sistemas de clasificación más elevados, el de Kennedy cumple la mayoría de los
requisitos, sobre todo porque su simplicidad facilita la representación visual de las imágenes.

Aunque hay varias clasificaciones de las prótesis parciales removibles, la de Kennedy es la que suele
utilizarse porque facilita la visualización de las situaciones en las que con mayor frecuencia están
indicadas las prótesis parciales removibles o el paso a prótesis mixta.

Applegate considera que hay que tener en cuenta la capacidad de los dientes que bordea las brechas
para servir de soporte. Por ello, teniendo en cuenta que muchos modelos de dientes ausentes están
muy alejados de las áreas de clasificaciones básicas, definió áreas de modificación añadiendo ocho
reglas para aplicarlas a la clasificación de Kennedy.

 Regla 1: Toda clasificación se confeccionará después de efectuar las extracciones.

 Regla 2: Si un tercer molar está ausente y no se remplaza no debe ser considerado en la
clasificación.

 Regla 3: Si un tercer molar está presente y vamos a utilizarlo como pilar, debe considerársele en el
momento de clasificar el caso.

 Regla 4: Si un tercer molar está ausente y no va a ser remplazado por falta del antagonista no se le
considerará en la clasificación.

 Regla 5: El área o las áreas desdentadas posteriores serán las que determinen la clasificación.

 Regla 6: Las zonas desdentadas distintas de las que determinan la clasificación del caso recibirán el
nombre de zonas de modificación y se designarán por su número.

 Regla 7: La extensión de la modificación no debe ser considerada, solo será la cantidad de las zonas
desdentadas adicionales.
 Regla 8: No pueden existir zonas modificadoras en los arcos de clase VI.

 Clasificación de Kennedy.

La clasificación de Kennedy modificada por Applegate es el método más aceptado para la


clasificación de los arcos parcialmente desdentados. Fue propuesto en 1925 por Kennedy y se basa
en las relaciones entre las sillas o zonas edéntulas y los dientes destinados a recibir los retenedores.
La clasificación de Kennedy intenta clasificar los arcos parcialmente desdentados de forma que
sugiera o guíe el diseño de la prótesis parcial para una determinada situación. Definió 4 clases
principales y a las zonas desdentadas que no sean las que determinen las clases las designó como
espacios modificadores o modificaciones. En 1960 añadió las clases V y VI.

2.1) Clase I de Kennedy.

Es el grupo en el que las zonas desdentadas son bilaterales y quedan por detrás de los dientes de
anclaje remanentes naturales.

En la prótesis parcial removible de clase I, los dientes pilares están situados por delante de las áreas
edéntulas. Este tipo de prótesis recibe su soporte de los tejidos blandos y de los dientes residuales y
por lo tanto es mucodentosoportado.

Cuando se diseña una prótesis parcial removible de clase I hay que tener en cuenta la diferente
naturaleza del soporte disponible. Estas prótesis se van a realizar tanto en acrílico como en metálicas
y su soporte va a ser dentario en la zona anterior y mucoso en la posterior. Siempre van a existir
ganchos que pueden ser colados o forjados en la zona distal de las últimas piezas pilares y se va a
establecer una línea remanente sobre la que va a girar la prótesis y se va a llamar línea de fulcro.

Según el número de espacios desdentados existentes entre los dientes remanentes, la clase I de
Kennedy se subdivide en clase I modificación I, II, III, IV.

2.1.1) Principio de las prótesis parciales removibles de clase I o arcadas de clase I de Kennedy.

Hay que poner retenedores en los dientes más posteriores en los lados de cada arcada. Por orden de
preferencia, los retenedores se dispondrán del siguiente modo:

 Retención disto-vestibular con un gancho de proyección vertical (por ejemplo la barra en “T”).

 Retención mesio-vestibular con un gancho de alambre forjado del calibre 18.

 Retención mesio-vestibular con un gancho circunferencial inverso.

 La retención lingual rara vez está indicada debido a la escasa longitud de los brazos del gancho.

 Para todos los ganchos colados de cromo cobalto, excepto cuando se trata de dientes
extraordinariamente grandes, basta una retención de 0.25 mm y para los ganchos de alambre forjados
deben utilizarse 0.5 mm.

 Un gancho que no está nunca indicado para arcadas de clase I es el gancho circunferencial colado
que encaja en una retención mesio-vestibular del diente pilar posterior.

 Cuando se ha producido pérdida de hueso en torno al diente pilar posterior, a veces hay que duplicar
los retenedores de ese lado de la arcada.

Las reglas que se han enunciado, se aplica al diente posterior, pero el diente anterior a este se puede
retener de la forma que se considere más conveniente.

2.2) Clase II de Kennedy.

Presenta una sola zona desdentada posterior unilateral con ausencia total o parcial de premolares y
molares. También presenta cuatro posibles modificaciones.
En las prótesis parciales removibles de clase II, existe una base distal de extensión solo en un lado
(silla de montar de extremo libre). El soporte lo proporcionan los dientes y el tejido blando, por lo
que será dentomucosoportado.

Se suele colocar un gancho en la última pieza que limita la brecha y suele tener una línea de fulcro
bien definida que va desde distal de la última pieza de la brecha hasta la pieza 7 ú 8 del otro lado.

2.2.1) Principio de las prótesis parciales removibles de clase II o arcadas de clase II de


Kennedy.

 Todas las reglas enumeradas para las arcadas de clase I, se aplica al lado de la edentación posterior.

 Para el lado que posee dientes, si no hay espacios de modificación, hay que utilizar dos ganchos: uno
para lo más anterior posible y el otro para lo más posterior posible. Que la localización del área
retentiva de cada diente sea mesio-vestibular o disto-vestibular, carece de significación.

 Si hay espacios de modificación en el lado que presenta dientes, hay que poner el gancho más
sencillo disponible en el diente adyacente y puede ser un gancho circular simple en una retención
disto-vestibular para el pilar posterior y en una mesio-vestibular para la anterior.

2.3) Clase III de Kennedy.

Hace referencia a una edentación unilateral limitada anterior y posteriormente por dientes que no
pueden asegurar por si mismo el soporte de las prótesis.

Cuando también faltan piezas anteriores pero el problema principal está en el grupo posterior sigue
siendo clase III. La clase parcial removible de clase III están soportadas principalmente por los
dientes naturales y es, por tanto, dentosoportado. Si se restaura con estructura metálica, pero si la
estructura es acrílica, será mucodentosoportada.

En los acrílicos, puede diseñarse sin ganchos debido a que va a haber suficientes soportes para evitar
la línea de fulcro.

2.3.1) Principio de las prótesis parciales removibles de clase III o arcadas de clase III de


Kennedy.

 Si no hay espacio de modificación, los dientes adyacentes al espacio edéntulo deben tratarse como se
ha indicado para el lado dentado de una arcada de clase II modificación I. En el lado en el que no
existe espacio, se puede colocar un gancho lo más anteriormente posible y otro posteriormente.

 Si hay un espacio de modificación en el lado opuesto de la arcada hay que poner el tipo más sencillo
de ganchos disponibles en los cuatro dientes pilares adyacentes a los espacios edéntulos.

 Cuando uno o los dos dientes pilares son débiles por la pérdida de hueso, a veces no conviene
colocar ganchos retentivos sino situar un apoyo oclusal para el soporte vertical y brazos de ganchos
no retentivos para impedir el movimiento lateral.

2.4) Clase IV de Kennedy.

La zona desdentada se sitúa en la parte anterior de la boca y es bilateral, generalmente de canino a


canino. Suele ser provocados por traumatismos. No tiene porque faltar todos los dientes del grupo
anterior.

Las prótesis parciales removibles de clase IV implica la situación de los dientes anteriores y en
consecuencia, la estética adquiere una importancia fundamental. Esta reposición de dientes se hace
en lo que se denomina en silla de montar o a tope y no lleva aleta vestibular de resina. Así se logra
una mayor estética. Si se restaura con una prótesis acrílica, el soporte es fundamentalmente mucoso
y si es esquelética o metálica, el soporte es dentomucosoportado, existiendo topes oclusales en los
dientes posteriores.

2.41) Principio de las prótesis parciales removibles de clase IV o arcadas de clase IV de


Kennedy.

 La situación en cuanto al movimiento en torno a una línea de fulcro se invierte totalmente con
respecto a las arcadas de clase I y II. Por ello, para conseguir retención hay que utilizar los dientes
adyacentes al espacio edéntulo localizando el área retentiva en la superficie mesio-vestibular de los
dientes más anteriores.

 Además conviene colocar otro gancho retentivo en cada lado de la arcada lo más posteriormente
posible y con una retención disto-vestibular. Estos ganchos actúan como retenedores indirectos
además de funcionar como retenedores directos.

2.5) Clase V de Kennedy (introducida por Applegate).

Se caracteriza por una edentación unilateral limitada anterior y posteriormente por dientes
remanentes pero cuyo diente remanente anterior no puede servir de soporte. Solo tiene un par de
molares en el lado edéntulo. Es dentomucosoportado.

2.6) Clase VI de Kennedy (introducida por Applegate).

Se caracteriza por ser una edentación unilateral limitada anterior y posteriormente por dientes que
pueden asegurar por si mismos el soporte de la prótesis.

 Modificaciones.

 Tratamientos.

De esta clasificación destacan tres orientaciones de tratamiento:

4.1) Tratamiento para prótesis parciales dentosoportada.

Las clases III, IV y VI presentan una disposición favorable para la utilización de los dientes como
único soporte, bien sea en tratamiento de prótesis removible o de prótesis fija. El soporte de la
prótesis va a ser casi exclusivamente dentario con los apoyos oclusales situados en las crestas
marginales o los cíngulos en los dientes anteriores, aunque a veces se puedan poner en otros sitios.
Es un tipo de prótesis que restaura pocas piezas.

4.2) Tratamiento para prótesis parciales mucosoportada.

El soporte de la prótesis es fundamentalmente mucoso, apoyándose en el borde alveolar. Los dientes


remanentes pueden llevar ganchos pero no van a soportar la prótesis ni llevan apoyos oclusales. Casi
siempre se realizan en acrílico. La resilencia de la mucosa libre o reborde alveolar va a ser mayor
que la de las piezas naturales insertadas en su alveolo.

* Resilencia: Capacidad de absorber presiones que tiene un cuerpo sin deformarse y volviendo a su
posición primitiva.

4.3) Tratamiento para prótesis parciales dentomucosoportada.

Las edentaciones posteriores unilaterales o bilaterales (clase I y II de Kennedy) no pueden ser


tratadas más que con prótesis removibles que utilicen simultáneamente vía de carga dentaria y
mucosa. El soporte es tanto dentario como mucoso, alternándose los apoyos dentarios con cargan
mucosas. Puede decirse que es una mezcla de los dos grupos anteriores.

4.4) Estudio del diseño.Los casos extensos de la clase III, IV y V para el tratamiento de las
cuales se necesita apoyo mixto, deben ser sistemáticamente estudiados.
Diseño y paralelizado de modelos de trabajo en un caso clínico

Todo diseño se basa en tres principios: Soporte, estabilidad y retención.


Soporte: Resistencia al hundimiento de la prótesis; mediante los apoyos en los dientes pilares y la
mucosa junto al hueso alveolar.
Estabilidad: Resistencia que ofrece la prótesis al movimiento horizontal.
Retención: Dada principalmente por los ganchos ó retenedores directos.
Ahora, apliquemos algunos conceptos en un caso clínico.

Foto 4. Los modelos definitivos y un diseño previo. Lo mejor es que el diseño se haga un modelo de diagnóstico
para evitar varios trazos que complican el diseño definitivo sobretodo en retenedores.
Los modelos tal como son enviados desde el consultorio (Foto 4), con un diseño que por zonas presenta
líneas dobles, algunas impresiciones y correcciones que complican el diseño final sobre el que vamos a
trabajar. En estos casos, lo mejor hubiese sido hacer este diseño en los modelos de diagnóstico para
nosotros trasladarlo al modelo de trabajo. Una solución es limpiarlo con un poco de alcohol y algodón,
aunque a veces no se logra borrar todo. Es más complicado si el diseño se hace con grafito o lápiz de
carbón, que se confunde con el ecuador y las líneas del paralelizado.

Foto 5. Todo diseño debe considerar la relación con el antagonista para ver espacios donde colocar apoyos u
otros componentes de la PPR

Los modelos zocalados, mejor en yeso piedra. Ayudan a estabilizarlos sobre la mesa del paralelígrafo.
Se puede ver la relación entre ambos. Lo ideal hubiese sido hacer modelos de diagnóstico, articularlos en
un semiajustable con registros intermaxilares y hacer un encerado de diagnóstico. Lo ideal, pero sobre
todo cuando hay brechas más grandes y no hay guía incisiva. Se recomiendan secuencias de diseño,
todas sirven y uno puede acomodarse a cualquiera o hacer su propia secuencia. Recomiendo diseñar lo
que se pueda antes de llevar los modelos al paralelígrafo y terminar el resto en él:
El superior es Clase III. Modificación 1(Kennedy). En este caso la línea de fulcro no es importante ya
que es dento-soportado y no habrá movimientos rotatorios. Empezamos a diseñar las rejillas o mallas y
los apoyos con lápiz bicolor o de cera (azul).(Foto 6)
Foto 6. Las rejillas en vestibular hasta la línea media del reborde o más, dependiendo del antagonista. En
palatino paralelo al contorno palatino, se recomienda tomar de referencia una línea que pase entre el lateral y
central

Foto 7. En este caso el canino acoge un renedor directo (En barra) que también funciona como retenedor
indirecto, es decir será un tope que evita el desplazamiento hacia oclusal, por ejemplo en alimentos pegajosos

El inferior es Clase II modificación 1 (Kennedy). Aquí sí es muy importante la Línea de Fulcro( Cruza la


línea media y pasa por los pilares principales más distales), porque el caso es dento-mucosoportado y
habrá ligeros movimientos rotatorios en la función. La rejilla debe llegar hasta los 2/3  de toda la brecha
desdentada distal.(Foto 7)

Foto 8. Con una espátula de punta roma, una fresa redonda u otro instrumento se hace el sellado periférico
solo en casos superiores
Foto 9. Hay dos lechos en los cíngulos de los caninos que ayudan a fijar la placa lingual. Sin embargo es más
efectivo tallar lechos en todos los dientes que cubre la placa. En los inferiores no se hace el sellado periférico

En rojo hemos se ha rediseñado la extensión del conector mayor del tipo, franja o cinta palatina, que en lo
posible debe cruzar la línea media en ángulo de 90º. Hacemos el socavado o sellado periférico a una
profundidad de 0.5 a 1 mm (Foto 8). Esto se hace en todos los conectores mayores maxilares (superiores)
para evitar que los alimentos se filtren por debajo. Por más que esté perfectamente adaptado al modelo
de yeso, es necesario ya que en la boca son tejidos blandos más o menos depresibles según los casos.
No se debe socavar cerca de los márgenes gingivales (3-4 mm) o encima de un torus o un rafe medio
algo pronunciado, mejor evitar estas zonas.
En el modelo inferior diseñamos un conector mayor tipo placa lingual, en los casos inferiores no se
hace el sellado periférico (Foto 9).
Una luz superior frontal nos da las sombras y es un “paralelígrafo natural” que ayuda a delimitar el
conector mayor, en este caso una placa lingual. El piso de boca (límite inferior) debe ser marcado por el
odontólogo, el límite superior no debería pasar el tercio medio lingual de los incisivos.

Foto 10. El diseño debe ser pulcro y lo más perfecto posible.  En la mandíbula no se hace sellado periférico.
Foto 11. En el maxilar es  mejor evitar hacer el sellado periférico a nivel del rafe medio. Aunque aquí se hizo
considerando que no había prominencias que pudieran ocasionar molestias al paciente.

Todo lo que hemos podido avanzar antes de ir al paralelígrafo (Fotos 10 y 11): Rejillas (sobre los


rebordes residuales), Apoyos (mejor siempre sobre lechos preparados), conectores mayores (cruzan la
línea media y unen ambas hemi-arcadas), el apoyo mucoso siempre en clases I y II (flecha) para el
empaquetado del acrílico incluso podríamos avanzar con algunos conectores menores de tipo placa
proximal, pero ahora, vayamos al paralelígrafo.

Foto 12
Foto 13

Se parte de un plano horizontal, una platina de vidrio o de aluminio nos ayudará (Foto 12) y empieza el
análisis del modelo para ubicar el eje de inserción o para retomar un eje o trayectoria de inserción
determinados por un tripodismo (tres puntos) sobre el modelo.
Para el análisis o para trabajar la ppr metálica a partir de la primera posición con el plano de oclusión
horizontal a la mesa se continua con los siguientes pasos:

1) Mover el modelo en forma antero-posterior ó de adelante hacia atrás o viceversa (Foto 13) y


utilizando el analizador buscar los planos guía (si han sido previamente tallados en zonas proximales) o la
mejor posición donde los ángulos proximales sean mínimos e iguales en los pilares anterior y posterior.
(Fotos 14 y 15).

Foto 14

2) Mover el modelo lateralmente(de izquierda a derecha o viceversa) sin perder la posición anterior (1) y
buscar la mejor posición de los ángulos. (Fotos 16 y 17) retentivos para ubicar los retenedores también
usando el analizador, y también se puede usar los calibradores para un cálculo final más exacto de la
cantidad de retención (Foto 18). Después se volverá a usar el calibrador ya sobre el ecuador marcado.
(Foto 26).
Foto 15

Foto 16

Foto 17
Foto 18. Un retenedor corto en forma de “uña” requiere la mínima retención por eso usamos el calibrador de
0.25 mm

3) Una vez ubicada la trayectoria o eje de inserción (Foto 19) se procede a colocar la cánula y
elgrafito y se marca el ecuador de los dientes, llamado ecuador protético, si es que sobre él se va a
construir definitivamente la esquelética de Cromo-Cobalto (Fotos 20 . Siempre que se pueda, el grafito
debe marcar dos líneas: Una superior (Ecuador) y una inferior en la punta del bisel del lápiz (Foto 22).El
bloqueo con cera debe abarcar toda la zona ubicada entre estas dos líneas. Hay que recordar que el
ecuador a su vez divide al diente en dos zonas que son una retentiva hacia la zona cervical, y una
expulsiva hacia la zona incisal u oclusal. (Fotos 20, 21, 22 y 23)

Foto 19. Nótese que el eje de inserción final que elegimos no está con el plano de oclusión paralelo a la mesa
como al inicio como sería ideal y mejor. Pero el caso nos obligó con la ayuda del paralelígrafo a ubicar nuestro
eje más óptimo. Por eso la importancia de un modelo de diagnóstico y un paralelizado de diagnóstico, para
tratar de hacer que el eje de inserción sea el más cercano al ideal adecuando para ello la preparación
bioestática . Así el paciente tendrá más facilidad de sacarse y ponerse la prótesis sin forzar demasiado con el
riesgo de abrir los retenedores, aflojarlos y debilitarlos o romperlos
Foto 20

Foto 21

Foto 22
Foto 23

4) Con los calibradores ubicamos y marcamos la zona exacta donde terminará la punta del brazo
retentivo del retenedor directo (Foto 26), sea un circunferencial (acker, anular) o retenedor en barra
(d.p.i., en “y”, etc).

Foto 24

Foto 25
Foto 26

Foto 27

Foto 28
Foto 29

5) Bloqueamos todas las zonas retentivas por donde pasará el metal de la estructura esto incluye a zonas
de dientes y tejidos blandos (mucosa) y usamos la cuchilla para recortar el exceso de cera (Foto 30).

Foto 30

Foto 31

6) Quitamos o “pelamos” la cera de bloqueo solamente de la punta del brazo retentivo para que funcione
la retención, dejando una superficie que penetra en la zona retentiva. (Fotos 32 y 33 )
Foto 32

Foto 33. Una línea punteada determina la extensión de la base de acrílico. Siempre es mejor marcar este límite
(puede ser con lápiz carbón) ayuda a hacer un diseño preciso

7) El paso 6 puede hacerse también fuera del paralelígrafo, también fuera de él colocamos los alivios y
el bloqueo de las zonas retentivas del modelo con plastilina u otro material parecido (Foto 34).

Foto 34

8) Se procede al duplicado y se sigue el proceso de laboratorio hasta obtener las estructuras o


esqueléticas de cromo-cobalto ubicadas sobre los modelos de trabajo. No se deben llamar “bases
metálicas” ya que el concepto de base dice que está en contacto íntimo con la mucosa. Sí, hay bases
metálicas que se usan en algunos casos, en estos se usarán bases de acrílico sobre rejillas de metal.
Foto 35

Foto 36

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