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SEMANA 22
Actividad: Reflexionamos sobre la importancia de la oración en
nuestra vida de comunión con Dios y con los demás.
Querido estudiante, gracias por conectarte y ser parte de Aprendo en casa de Educación
Religiosa. Iniciamos nuestra actividad poniéndonos en la presencia de Jesús que nos ama y nunca
nos abandona.
.
Señor Jesús, antes de iniciar este día quiero ponerme en tu presencia y pedirte perdón por las veces que te he
fallado. Fortalece mi espíritu para abandonar todo aquello que me haga daño. Ayúdame a ser generoso, sencillo,
humilde de corazón y que la oración sea mi alimento día a día. Amén.

En esta actividad, reflexionaremos sobre la importancia de la oración en nuestra vida de comunión


con Dios para mejorar la convivencia con mi familia y los demás.

Identifica la situación
cuestiónate.

Lee el diálogo y
responde: ¿Qué
reflexión puedes hacer
sobre la práctica de la
oración en tu familia?

Infórmate y reflexiona. Leemos el siguiente texto bíblico:


Jesús en el Evangelio nos enseña que debemos orar en todo tiempo y sin desanimarnos. La
oración es siempre expresión de la fe.

La oración es la relación viva de los hijos de Dios con su Razones por las que la oración es
Padre infinitamente bueno, con su Hijo Jesucristo y con el importante:
Espíritu Santo. CEC. 2565. 1. Nos permite dialogar con Dios.
2. Nos sirve para pedir ayuda a Dios.
¿De dónde viene la oración del hombre? Cualquiera que sea 3. Nos ayuda a adorar, alabar, bendecir y
el lenguaje de la oración (gestos y palabras), el que ora es dar gracias a Dios.
todo el hombre. Sin embargo, para designar el lugar de donde 4. Porque es eficaz para para tener la paz
brota la oración, las Sagradas Escrituras hablan a veces del verdadera y ayudar a los demás.
alma o del espíritu, y con más frecuencia del corazón. Es 5. Nos permite vivir en libertad.
el corazón el que ora. Si este está alejado de Dios, la
expresión de la oración es vana. CEC. 2562.

En tiempos difíciles nos sentimos llamados a orar permanentemente; solos, en


familia, o en grupo por medio de internet con el único fin de hablar con Dios nuestro
Padre y pedirle su misericordia en estos momentos difíciles. El Evangelio nos invita a
orar con insistencia y sin desanimarse. La fe nos asegura que Dios escucha nuestra
oración y nos ayuda, aunque a veces no lo veamos. La oración ha de ser siempre
esperanza, fe en el poder de Dios, que es amor y no nos abandona. El Señor siempre
responde a la plegaria del que suplica con fe. No obstante, hay quienes dejan de orar
porque piensan que su oración no es escuchada. No oremos exigiendo ver los
resultados. Dios no es un medio para conseguir lo que deseamos, es nuestro Padre
que nos da aquello que más nos conviene. Por tanto, no nos aflijamos si no recibimos
inmediatamente lo que le pedimos. Quizá Dios quiere sacar un mayor fruto para
nuestras almas por medio de la perseverancia en la oración. Jesús mismo es quien
ora por nosotros, y le presenta al Padre nuestras peticiones desde la cruz. ¿Y tú por
quiénes oras? ¿Qué le pides a Dios? Si nuestra oración se une a la de Jesús en la
confianza obtendremos si es la voluntad de Dios todo lo que pidamos en su nombre.

Acomódate en el espacio de tu casa asignado para realizar con tranquilidad tus


actividades.
Orar permanentemente con insistencia y sin desanimarse ayuda a
expresar mejor nuestras emociones y a fortalecer la convivencia en la
familia y con los demás porque la oración me une íntimamente a Jesús.

Ahora tienes el siguiente reto:


1. 1. Con ayuda de los miembros de tu familia ambienta un pequeño espacio de tu casa
y realiza una oración familiar pidiendo a Dios por tus necesidades y la de los demás.
2. Finalmente toma una foto o grafica a tu rincón de oración y guarda tu evidencia en
tu portafolio. ¡Excelente trabajo!

RECUERDA: La oración brota del corazón, en todo tiempo y sin desmayar,


pero si éste está alejado de Dios, la oración es vana.

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