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Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular
o de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de P
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Tratado de
Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular
PATOLOGÍA
o de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de P
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VASCULAR
Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular
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Tomo I
o de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de P
Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular
o de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de P
Carlos Vaquero Puerta, Ed.
Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular
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TRATADO DE PATOLOGÍA VASCULAR
Tomo I
TRATADO DE PATOLOGÍA VASCULAR
Tomo I
© Responsable de la edición:
Carlos Vaquero Puerta
ISBN: 978-84-09-31537-6
DL VA 531-2021
PRESENTACIÓN DE LA OBRA
Dr. Carlos Vaquero Puerta, editor
Valladolid, España
E
l que hemos denominado Tratado de Patología Vascular, era un
antiguo proyecto que ha podido llevarse finalmente a la realidad
y que tenía como fin editar un libro genérico y extenso sobre la
Patología Vascular. Hemos publicado numerosos libros, más de la vein-
tena, de aspectos parciales de la angiología y cirugía vascular, algunos,
los menos, con autoría única y el mayor número con autoría comparti-
da con numerosos colaboradores, dando la posibilidad de plasmar en
formato libro, el punto de vista especializado de numerosos autores,
con objeto de enriquecer la información aportada en los textos. En este
caso concreto, nuestra finalidad también fue una participación nume-
rosa de un colectivo que tenían los nexos comunes de ser angiólogos
y cirujanos vasculares y por otro lado expresarse en español. Han sido
varios los intentos para lograr colaboraciones, que en muchos casos
los compromisos han sido inmediatos, pero no así las aportaciones. No
obstante, con perseverancia y paciencia, al final se acaban consiguien-
do los objetivos. Sin embargo, no están todos los que deberían estar,
a veces por el mencionado incumplimiento de compromiso ligado en
muchas ocasiones al perfil latino, y por otro lado, seguro que nos he-
mos olvidado en la invitación de participación, de relevantes profesio-
nales del campo de la patología vascular, de lo cual seguro que en un
futuro lamentaremos.
■7■
Tratado de Patología Vascular
■8■
ÍNDICE
■ Presentación de la obra
Dr. Carlos Vaquero Puerta, editor ���������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� 5
■9■
Índice
■ DISECCIÓN AÓRTICA
Enrique M. San Norberto, Noelia Cenizo, Álvaro Revilla y Carlos Vaquero ��������������������������������������������������������������� 251
■ COARTACIÓN DE AORTA
Enrique M. San Norberto, Liliana Fidalgo Domingos, Elena García Rivera y Carlos Vaquero ���������������� 265
■ 10 ■
HISTORIA DE LA CIRUGÍA VASCULAR
Carlos Vaquero Puerta y Ana Vaquero Saldaña
■ 11 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 12 ■
Historia de la Cirugía Vascular
■ 13 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 14 ■
Historia de la Cirugía Vascular
Antonio Scarpa (1752-1832) en 1804, A finales del siglo XIX, Rudolph Ma-
publica su obra, donde incluye impor- tas, describe la técnica de aneuris-
tantes aportaciones sobre las diferen- morraf ía en el aneurisma de aorta
tes formas de aneurismas y su diag- abdomina.l
nóstico.
■ 15 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 16 ■
Historia de la Cirugía Vascular
En 1908, Leo Buerger (1879-1943), pu- alambre de plata o cobre dentro del
blica su libro con la interesante apor- aneurisma y electrocoagulación para
tación del cuadro de tromboangeítis producir trombosis, método al cual lla-
obliterante, llevando posteriormente ma electrólisis. Por otro lado, cubre con
su nombre. injertos venosos la pared interna del
aneurisma para asegurar un conducto
En 1911 Labey en París extrajo un ém- con el endotelio, realizando además la
bolo de la arteria femoral realizando la endoaneurismorrafía.
apertura y cierre de la arteria.
Robert E. Gross (1905-1988), en 1949
J. Hogarth Pringle en 1912, realizó in- aporta datos para la intervención de
jertos venosos en arterias humerales y coartación de aorta.
poplíteas.
Joao Cid dos Santos (1907-1975) en
En 1913, Bauer en Suecia extrajo con 1945 introdujo la técnica de la trom-
éxito una embolia de la bifurcación boendarterectomía.
aórtica.
Charles Dubost (1914-1991) en 1952 y
Durante la I Guerra mundial, cirujanos Henry Bahnson en 1953 para el trata-
alemanes tales como August Karl Gus- miento de un aneurisma de aorta ab-
tav Bier (1861-1949) y Hans von Haberer dominal roto, describieron la técnica
(1875-1958), trataron con éxito aneuris- de reconstrucción de aorta postaneu-
mas traumáticos. rismática con la implantación de injer-
tos homólogos. Ese mismo año Witney
El descubrimiento de la heparina por aporta la pletismografía con el anillo de
Jean Mc Lean (1890-1957) siendo estu- mercurio como método diagnóstico.
diante de Medicina en 1916, ha supues-
to un verdadero avance para prevenir Eastcott y Hufnagel en 1953 introduje-
la coagulación en cirugía vascular. ron segmentos vasculares congelados
y desecados para la sustitución de sec-
Rene Leriche (1879-1955) en 1923, reali- tores arteriales ocluidos de origen ho-
zó contribuciones a nivel de los aneu- mólogo y heterólogo.
rismas disecantes, aportando consi-
deraciones sobre la separación de las Las prótesis plásticas vasculares se in-
capas arteriales y señalaba que el tra- trodujeron en 1952 por Voorhoeve con
tamiento ideal para la patología aór- la utilización del vinilo, seguida del
tica es la sustitución del vaso. nylon y dacrón.
A partir de la II Guerra Mundial se de- En los años 1954 y 1955, De Bakey, Coo-
sarrolló con éxito técnicas a nivel de la ley y Cannon introducen la técnica de
cirugía vascular. endarterectomía semiabierta.
■ 17 ■
Tratado de Patología Vascular
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Historia de la Cirugía Vascular
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*Departamento de Cirugía. Facultad de Medicina. Universidad de Valladolid.
Valladolid, España
■ 27 ■
Tratado de Patología Vascular
que recibe el nombre de linfa de cons- dad torácica. Presenta distintos seg-
titución y características especiales mentos.
y que mediante un sistema de vasos
linfáticos también devuelve al corazón Aorta ascendente es la primera por-
por el sistema venoso (Fig. 1). ción de la aorta torácica. La aorta as-
cendente se encuentra envuelta por el
saco pericárdico, tiene su origen en el
SISTEMA ARTERIAL orificio aórtico, en el apex del ventrícu-
lo izquierdo, a nivel del borde inferior
Arteria Aorta del tercer cartílago costal izquierdo.
Posteriormente sigue un trayecto su-
Es el vaso más grande del organismo, perior, ligeramente hacia delante y ha-
nace del ventrículo izquierdo y tiene un cia la derecha hasta el segundo cartíla-
recorrido por el tórax a nivel del medias- go costal derecho, a nivel del cual entra
tino pasa por el diafragma y se distribu- en el mediastino superior y forma el
ye por la cavidad abdominal a nivel del cayado aórtico.
retroperitoneo donde termina dando
sus ramas terminales ilíacas primitivas El cayado aórtico, es la zona de la cur-
derecha e izquierda. En el tórax presen- vatura aórtica con forma de cayado
ta un trayecto ascendente cuyo origen que cruza por delante del bronquio
es la salida del corazón donde se sitúa principal izquierdo. Comienza aproxi-
la válvula aórtica o bicúspide o mitral. madamente a nivel del cuarto cuerpo
Se continua con otra porción que por vertebral torácico y se extiende hacia
su forma curvada recibe el nombre de la izquierda y hacia atrás. La concavi-
cayado. A nivel de su convexidad nace dad inferior corresponde con la arteria
de los denominados troncos supra-aór- pulmonar izquierda. De su curvatu-
ticos, tronco braquicefálico, carótida y ra superior emergen los troncos su-
subclavia derecha. De su convexidad a pra-aórticos, habitualmente el tronco
veces nacen pequeños vasos como los braquiocefálico o innominado, origen
bronquiales y algunos mediastínicos. Se común de la arteria subclavia derecha
continua con la aorta descendente. Esta y la arteria carótida común derecha,
arteria discurre camino del diafragma y y posteriormente de forma indepen-
como ramas principales, aunque de es- diente la arteria carótida común iz-
caso calibre son las intercostales, algu- quierda y la arteria subclavia izquierda.
nas mediastínicas y especialmente una
que nace de su posición más distal, que La aorta descendente, comienza en el
es la medular o arteria de Adankiewitz. borde inferior de la vértebra T4, termina
por delante del borde inferior de la vér-
La aorta una vez que pasa el diafragma tebra T12, donde pasa a través del hiato
se convierte en abdominal. A este ni- aórtico posterior del diafragma hacia el
vel da unas ramas colaterales impares abdomen. Superiormente se encuentra
o viscerales, las ramas pares o arterias a la izquierda de la columna vertebral,
renales y las arterias lumbares parie- se aproxima a la línea media inferior-
tales junto con otras de mucho menor mente, situándose directamente ante-
entidad. Termina como anteriormente rior a los cuerpos vertebrales torácicos
se ha comentado dando origen a las inferiores. A lo largo de su recorrido pro-
arterias ilíacas primitivas. porciona una serie de ramas: pericárdi-
cas, bronquiales, esofágicas, mediastí-
Aorta torácica, es el sector del vaso nicas, intercostales posteriores, frénicas
arterial que se encuentra en la cavi- superiores y arterias subcostales.
■ 28 ■
Anatomía de los vasos sanguíneos
■ 29 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 30 ■
Anatomía de los vasos sanguíneos
■ 31 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 32 ■
Anatomía de los vasos sanguíneos
Las arterias pueden tener un origen más Las arterias ilíacas comunes y externas
superior o más inferior a nivel de la aorta son muy constantes y apenas exhiben
(sobre todo en el caso de riñón pélvico). variaciones anatómicas. Sin embargo,
Así mismo, es muy frecuente encontrar la arteria ilíaca interna presenta una
variaciones anatómicas en el número de gran variabilidad anatómica en cuan-
arterias renales, pudiendo aparecer has- to a su ramificación. Generalmente se
ta en el 25-30 % de los casos.
Arterias ilíacas
■ 33 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 34 ■
Anatomía de los vasos sanguíneos
El sistema pulmonar está formado por Los ganglios linfáticos actúan a modo
la arteria pulmonar que nace a nivel del de filtros y se sitúan agrupados a nivel
ventrículo derecho donde está situada de determinados lugares tales como
una válvula pulmonar o tricuspide. Esta hueco poplíteo, región inguinal, retro-
arteria se divide en dos ramas una para peritoneo, axila o cuello en grupos muy
cada uno de los pulmones y posterior- definidos. Los ganglios linfáticos están
mente se va dividiendo en arterias loba- agrupados en zonas y de esta forma
■ 35 ■
Tratado de Patología Vascular
las más importantes son los poplíteos, Chiesa R, Melissano G, Tshomba Y, Civilini E,
los inguinales, los del eje ilíaco, los re- Marone EM, Bertoglio L, Calliari FM. Ten Yerars
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ANESTESIA EN CIRUGÍA VASCULAR
Felipe Muñoz Zurdo, Iciar Martínez Almeida Castaneda,
Ángel Fernández Collantes y M.a Magdalena Muñoz Zurdo*
■ 39 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 40 ■
Anestesia en Cirugía Vascular
Fármaco Antes de la punción/ retirada del catéter Después de la punción/retirada del catéter
Tabla 1.–Intervalos de seguridad para realizar técnicas neuroaxiales y fármacos que alteran la hemostasia
■ 41 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 42 ■
Anestesia en Cirugía Vascular
150-160 mmHg momentos antes del óxido nitroso si hay problemas cardia-
desclampaje es adecuado para preve- cos preoperatoriamente.
nir la hipotensión según algunos auto-
res. En la enfermedad oclusiva cuan- Durante el procedimiento vigilaremos
do se anastomosa en las femorales la y trataremos las oscilaciones del CO2
prótesis al despinzar una extremidad expirado, pues tenderá a bajar hasta el
antes que la otra tiene menores conse- desclampaje por la profundidad anes-
cuencias, siendo menos importante la tésica, la disminución progresiva de la
hipotensión. temperatura y el no retorno venoso de
las extremidades inferiores; recuperán-
Manejo Anestésico (8) dose tras el desclampaje.
■ 43 ■
Tratado de Patología Vascular
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Anestesia en Cirugía Vascular
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Tratado de Patología Vascular
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Anestesia en Cirugía Vascular
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Tratado de Patología Vascular
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Anestesia en Cirugía Vascular
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Tratado de Patología Vascular
■ 50 ■
Anestesia en Cirugía Vascular
■ 51 ■
Tratado de Patología Vascular
a la canalización de una vía central se- [9] Beattie C, Frank SM, Walker GV, et al. Anes-
gún las características del paciente o si thesia for major vascular surgery. In: Longnec-
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espinal y la administración de heparina.
Generalmente no es necesario revertir [11] Sessler D. Complications and treatment of
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la heparina al favorecer la permeabi-
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ENFERMEDAD ATEROSCLEROSA. ATEROMATOSIS
Y ARTERIOSCLEROSIS
José Antonio Rodríguez Montes
* El término arteriosclerosis fue introducido por el médico francés Jean-Frédéric Lobstein en 1829 para describir
la induración y pérdida de elasticidad de la pared arterial (3). El vocablo ateroma fue utilizado por primera vez en
1755 por el suizo Albrecht von Haller (1708-1777), aunque el concepto actual fue redefinido por la OMS en 1958 para
precisar la idea de aterosclerosis introducida por el patólogo alemán Felix Jacob Marchand en 1904 (4) con objeto
de resaltar la relevancia de la acumulación de elementos grasos en la pared arterial. Johann Georg Mönckeberg
estableció el concepto de calcificación de la capa media de las arterias y arteriolas que no necesariamente se
acompaña de aterosclerosis ni disminución del calibre de la luz vascular.
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Tratado de Patología Vascular
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Enfermedad aterosclerosa. Ateromatosis y arteriosclerosis
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Tratado de Patología Vascular
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Enfermedad aterosclerosa. Ateromatosis y arteriosclerosis
por sus siglas en inglés Low Density la lisis de la matriz extracelular. Las célu-
Lipoprotein) rica en colesterol. Esta li- las T producen TNF-alfa el cual previene
poproteína se puede acumular en la la síntesis de colágeno en las CML. Estos
capa íntima arterial debido a su capa- procesos pueden debilitar la capa fibro-
cidad para infiltrarse en el endotelio o sa y destruirla, exponiendo con ello al co-
adherirse a componentes de la matriz lágeno y lípidos al torrente sanguíneo, lo
extracelular como el proteoglicano. que favorece el depósito y adhesión de
plaquetas y la formación de trombosis lo
En la zona lesionada, el equilibrio en- que puede interrumpir súbitamente el
tre los distintos elementos de la matriz flujo arterial (23, 24).
puede alterarse; por ejemplo, entre los
tres grupos primordiales de proteogli- Los elementos de las placas ateroscle-
canos, el aumento relativo de molécu- róticas incluyen epitelio vascular, mús-
las de sulfato de heparina, respecto al culo liso arterial y linfocitos. El epitelio
sulfato de queratina y al sulfato de con- vascular reacciona con macromolécu-
droitina puede ocasionar la adhesión las y componentes sanguíneos para
de lipoproteínas; hecho que retarda el aumentar la transferencia de proteínas
proceso de salida de la íntima y acelera en el plasma. El mantenimiento de la
su acumulación (21). integridad vascular y el metabolismo
de productos sanguíneos, incluyen-
La formación de estrías grasas tiene do lípidos, y la secreción de citocinas,
cuatro pasos (20): atrapamiento de li- es esencial en el control del tono de
poproteínas-colesterol de baja densi- la pared arterial. Los linfocitos pueden
dad (LDL-C), activación de células en- participar en las reacciones inmunes.
doteliales, activación de leucocitos y El núcleo de la placa está formado por
formación de células de espuma (una restos celulares, calcio, ésteres de co-
variedad de macrófagos). lesterol, células espumosas y una masa
de sustancias grasas. El centro lípidico
Formación de ateroma.– La lesión grave es una pasta de color amarillo pálido
al tejido vascular ocurre cuando las cé- causado por pigmentos carotenoides.
lulas endoteliales y las CML adyacentes
secretan pequeños péptidos como ci-
tocinas y factores de crecimiento, como FACTORES DE RIESGO
interleucina 1 (IL-1) y el factor de necrosis DE ATEROSCLEROSIS
tumoral (TFN), que motiva el desarrollo
celular, y determinan que las CML mi- Se considera factor de riesgo cualquier
gren hacia el lado luminal de la pared rasgo, característica o exposición de un
arterial. En esta situación, la migración individuo que aumente la probabilidad
de las células del músculo liso y la matriz de sufrir una enfermedad o lesión, de-
extracelular sintetizada forman la capa finición que es válida para los factores
fibrosa, cuya cubierta está compuesta de riesgo cardiovascular; riesgo que au-
por tejidos y fibras ricas en colágeno, menta de modo sinérgico cuanto más
CML, macrófagos y linfocitos T. Todos factores estén presentes. Aunque no se
ellos configuran la placa aterosclerótica conocen con precisión las causas y los
madura y sobresalen en el conducto ar- factores de riesgo de la aterosclerosis, la
terial y reducen el flujo sanguíneo en los mayoría, incluidos la hipercolesterole-
vasos afectados (23). Se encuentran ma- mia y las LDL, el nivel bajo de lipopro-
crófagos y células T en los bordes de la teínas de alta densidad (HDL, por sus
placa formada. Los macrófagos secretan siglas en inglés: High Density Lipopro-
metaloproteinasa, la cual contribuye a tein) sanguíneo, la hipertensión arterial,
■ 59 ■
Tratado de Patología Vascular
el humo del tabaco, la diabetes melli- y glicerol en los capilares por la acción
tus, la obesidad y el sedentarismo, la de la proteína C y persisten como un
edad, el sexo, se pueden analizar y la resto de quilomicrones denominado
aterosclerosis se puede prevenir o re- «lipoproteína rica» después de la de-
tardar (10, 25). pleción de triglicéridos. Estos restos se
cederán al hígado, se unirán a sus re-
Hipercolesterolemia.–El colesterol es ceptores y LDL y se incorporarán rápi-
un lípido precursor de las hormonas damente a las células. La lipoproteína
esteroideas, ácidos biliares y vitami- de muy baja densidad (VLDL, por sus
na D; además es el mayor componente siglas en inglés: Very Low Density Lipo-
de las membranas celulares y elemen- protein) también se elabora en el híga-
to esencial de la mielina que recubre a do y transfiere triglicéridos, formados
los nervios. Una fracción del colesterol en el hígado a partir de lípidos y glúci-
procede de la ingesta, pero la mayoría dos, a tejidos extrahepáticos. Posterior-
se sintetiza en el hígado desde donde mente, los triglicéridos se separan de
pasa a la circulación general transpor- la VLDL por la acción de la lipoproteína
tado por las lipoproteínas. Puede ser lipasa y se transformarán en LDL. La
absorbido lentamente por el tracto unión de las HDL a zonas superficiales
gastrointestinal a través de los vasos específicas, que actúan como recep-
linfáticos del intestino. El colesterol tores de LDL, es otro recurso clave del
existente en el tracto digestivo es muy cambio de colesterol por HDL. Esta
soluble en grasa y puede formar éste- unión traspasa el colesterol intracelu-
res tras reaccionar con ácidos grasos lar a la membrana plasmática. El coles-
(el 70 % del colesterol plasmático se terol se transforma en LDL después de
encuentra en forma de ésteres de co- la esterificación (26).
lesterol). Se absorbe en el intestino y
llega a la sangre en forma de quilomi- Edad y sexo.–La edad avanzada ejerce
crones a través de la mucosa del trac- un papel importante en la aparición de
to digestivo. El colesterol se sintetiza la aterosclerosis, aunque las manifesta-
en el interior de las células y las can- ciones clínicas tempranas son cada vez
tidades excesivas son inhibidas por la más usuales. La aterosclerosis afecta
3-hidroxi-metil-glutaril-CoA reductasa a hombres y mujeres, con incidencias
(HMG-CoA reductasa). La esterifica- cambiantes y variables según el país y el
ción aumenta la síntesis de colesterol territorio vascular considerado. No obs-
y disminuye la síntesis de receptores tante, se admite que las hormonas se-
de LDL. Todos estos pasos regulan la xuales femeninas tienen un efecto pro-
cantidad de colesterol intracelular me- tector, que disminuye en la menopausia
diante un mecanismo de feed-back. y por el uso de anticonceptivos orales.
Los estrógenos en concentraciones nor-
El colesterol extraído de las células males actúan como factores protectores
puede ser absorbido por las HDL. Algu- de la mujer en la arteriosclerosis.
nos tipos de HDL contienen apoproteí-
na E y se unen a otras células junto con Herencia.–El componente genético es
los receptores de LDL. Transfieren el uno de los condicionantes en el pade-
colesterol de una célula a otra. Los qui- cimiento de la aterosclerosis, habién-
lomicrones en la mucosa intestinal lle- dose constatado la segregación fami-
gan a la sangre por los vasos linfáticos liar de la hiperlipidemia. La interacción
junto con la absorción de productos di- entre factores genéticos y ambientales
geridos con grasas. Estos quilomicro- podría explicar muchos aspectos de
nes se disocian en ácidos grasos libres la ateroesclerosis, de modo que la alta
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Heart Association, que divide las le- edad avanzada es común que la ate-
siones ateromatosas en seis estadios rosclerosis coronaria se acompañe de
(10): macrófagos espumosos aislados, una marcada atrofia de la capa media
estrías grasas, pequeños depósitos con la consecuente dilatación arterial:
de lípidos extracelulares, ateromas, fi- es la forma denominada dilatativa o
broateromas y lesiones complicadas senil; en cambio, en individuos jóvenes
con defectos tisulares en superficie; las lesiones que suelen predominar son
estadios que nos indican que la evo- escleróticas y estenosantes: es la nomi-
lución de la placa ateromatosa desde nada forma juvenil. Según el porcenta-
su inicio hasta la aparición de la sinto- je de reducción del calibre arterial se
matología tiene un tiempo de evolu- clasifican en estenosis grave (75-99 %),
ción largo, que puede rondar de tres moderada (50-74 %) y leve (25-49 %)
a cuatro décadas. Las placas tienen (10). Las reducciones menores al pa-
una distribución característica, suelen recer no tienen repercusión funcional
estar más implicadas las zonas de (lumen de reserva). Por otra parte, se
tránsito arterial más expuestas a las ha constatado que la evolución de las
fuerzas de cizallamiento y turbulen- placas hacia procesos trombóticos de-
cias del sistema arterial. En la aorta y pende más de la composición que del
sus ramas las lesiones suelen ser más grado de estenosis de la placa (27).
intensas en la sección lumbar. Las zo-
nas más involucradas son las arterias La clínica depende del territorio vas-
carótidas, las renales y la mesentérica cular afectado. En las coronarias se ex-
superior, hecho que puede generar presa por la aparición de angor, infarto
isquemia en los territorios respectivos. agudo de miocardio o muerte súbita.
El trastorno en las arterias de los miem- En el cerebro cursa clínicamente como
bros inferiores está más marcado en un accidente cerebrovascular agudo o
diabéticos, en los que puede ocasionar como un accidente isquémico transi-
una gangrena isquémica por ulcera- torio y los episodios repetidos pueden
ción, trombosis u obstrucción. En las confluir en una demencia multiinfarto.
arterias vertebrales, la aterosclerosis es En las arterias periféricas, la expresión
más notoria en el área vértebro-basilar clínica es la claudicación intermitente
que en la carotídea y en hipertensos, o la isquemia aguda de los miembros
las lesiones se extienden también en inferiores. La forma de presentación
territorios distales. Las estenosis ate- puede ser crónica, por estenosis de la
roscleróticas múltiples constituyen el luz arterial, como en la angina estable
sustrato anatómico de la insuficiencia o la claudicación intermitente, o agu-
cerebrovascular, que pueden provo- da, por la rotura súbita de la placa y la
car infartos cerebrales sin oclusión, si formación de un trombo, como acon-
concurren otras circunstancias, como tece en los síndromes coronarios agu-
una hipotensión. Por otra parte, los fe- dos o en los ictus isquémicos.
nómenos trombóticos de las placas se
forman habitualmente en los segmen- Las complicaciones de la aterosclero-
tos proximales de las arterias. En las ar- sis incluyen la fisura, la erosión o la ro-
terias coronarias en general se afectan tura de la placa y la formación de un
más los segmentos proximales, esto trombo en su superficie, lo que facilita
es, el tronco de la coronaria izquierda su crecimiento y la aparición de isque-
o los primeros 2 cm de la descendente mia o necrosis. Este hecho causa parte
anterior, la circunfleja y coronaria dere- de sus manifestaciones clínicas. De ahí
cha; en hipertensos se afectan además que se utilice el término de enferme-
los segmentos distales. En sujetos de dad aterotrombótica, en un intento de
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Enfermedad aterosclerosa. Ateromatosis y arteriosclerosis
incluir ambos procesos en una misma fina (FACF), una característica distin-
entidad. tiva de la placa vulnerable. El FACF in-
flamado es la forma más habitual de la
La rotura de las placas ateroscleróti- placa vulnerable (37,39) y es causa del
cas y las consiguientes complicaciones 60-70 % de los episodios de trombosis
cardiovasculares son las causas princi- coronaria aguda (37). Un episodio de
pales de morbi-mortalidad en todo el trombosis coronaria aguda suele enjui-
mundo (28) cuya incidencia sigue au- ciarse como rotura de placa, otras cau-
mentando a pesar de los avances tec- sas incluyen la erosión de la placa y los
nológicos aplicados en la prevención nódulos calcificados (40). La erosión y
primaria y en la terapéutica (28, 29-31) la rotura de la placa son esencialmente
La aterosclerosis es una patología in- diferentes. La erosión de la placa tam-
munoinflamatoria sustentada por lípi- bién puede surgir si la contribución del
dos (32) en la que la placa ateroscleró- núcleo lipídico de una lesión. Un 75 %
tica se considera rasgo distintivo de las de todos los sucesos coronarios agu-
lesiones de aterosclerosis (31). La infla- dos son ocasionados por rotura de la
mación desempeña un papel relevante placa (38), la cual al parecer se asocia
en la progresión de la placa, en la que con una estenosis del 77 %, mientras
los factores inflamatorios tisulares son que la erosión de la placa tiene una es-
cooperadores esenciales a la trombo- tenosis de área media del 70 % (56, 57).
genicidad de la placa (34). No obstan- Se supone que la rotura ocurre cuando
te, el mecanismo de rotura de la placa la resistencia de la cubierta de la placa
y trombosis reflejan complejos proce- es superada por las tensiones en la mis-
sos celulares biológicos dinámicos (33), ma. La profundidad de los cristales de
evento que abarca básicamente varias colesterol en el interior de las placas de
etapas de modificación, activación y las arterias coronarias se ha propuesto
disfunción tisular (34). Se considera como un índice de vulnerabilidad de la
que la rotura de la placa ateroscleró- placa (41).
tica es la causa principal de infarto de
miocardio y de accidente cerebrovas-
cular agudo. La terminología para des- DIAGNÓSTICO DE LA ATEROSCLEROSIS
cribir la placa vulnerable ha sido estan-
darizada recientemente (35,36); se usa La anamnesis y exploración física
con frecuencia el término «vulnerable» evocan los síntomas y signos sugeren-
para denominar a la placa susceptible tes de arterias estenosadas, dilatadas
de romperse, lo que conduce a la trom- o engrosadas, entre ellos se incluyen
bosis. Se estima que las expresiones soplos arteriales, pulso débil o inexis-
«alto riesgo» y «propenso a la trombo- tente en la zona inferior de la arteria
sis» se aplican en gran medida como afectada y reducción de la presión ar-
sinónimos para describir «placas vul- terial en la extremidad dolorida; dolor
nerables». Autopsias retrospectivas su- en reposo, claudicación intermitente,
gieren que existen varios grados histo- trastornos tróficos en miembros infe-
lógicos de placas vulnerables (37). Las riores y oscilometría negativa o anó-
denominadas placas vulnerables se mala. Los resultados de la exploración
consideran lesiones coronarias silen- física indicarán la realización de una
ciosas y no obstructivas que de pronto o más de las pruebas diagnósticas:
se tornan obstructivas y sintomáticas Análisis de sangre, puede mostrar
(38). La combinación de una capa de hipercolesterolemia o glucemia ele-
fibrina y un núcleo lipídico grande se vada; el electrocardiograma puede
conoce como fibroateroma de capa revelar una lesión cardíaca previa;
■ 65 ■
Tratado de Patología Vascular
Figura 3.–Eco-Doppler del origen de la arteria femoral superficial. A) Estenosis con importante aceleración de la
velocidad de flujo Doppler. B) Cálculo de medidas para la planificación precisa del tratamiento. C) Angioplastia y
colocación de stent balón expandible para la corrección de la estenosis. Nótese la normalización de las velocidades y
el espectro de la curva Doppler
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Enfermedad aterosclerosa. Ateromatosis y arteriosclerosis
la presión arterial en diferentes puntos han demostrado que las MMP-2, MMP-
de la extremidad afectada, mediciones 8 y MMP-9 son proteasas que favorecen
que permiten evaluar el grado de este- la rotura y los eventos clínicos al debili-
nosis y la velocidad del flujo sanguíneo tar la estructura de la matriz de la pla-
arterial. ca). Estudios genéticos han identifica-
do nuevos biomarcadores potenciales
Los marcadores biológicos de lesiones de riesgo cardiovascular (40, 41). Se ha
de la placa aterosclerótica son básicos sugerido la asociación entre el genoti-
en la práctica clínica, por lo que se han po MMP3 GAGA y la aterosclerosis y que
propuesto para prevenir las secuelas el alelo 5A podría desempeñar una fun-
clínicas derivadas de la rotura sintomá- ción en la distorsión de la placa (42); se
tica. La PCR induce protrombosis y pre- ha comunicado el posible papel proate-
dice la progresión de la aterosclerosis rogénico del gen ADAMTS-7 en lesiones
(37, 38); una concentración elevada de aterocleróticas y se ha identificado un
la misma, puede predecir la eventuali- inhibidor tisular de la metaloproteina-
dad de que se desarrollen episodios is- sa-4 como un probable inhibidor fisio-
quémicos y, en ausencia de otros tras- lógico del ADAMTS-7 (43). También se
tornos inflamatorios, puede indicar un ha encontrado que el gen SPPA tiene
mayor riesgo de rotura o una trom- una asociación específica con la calci-
bosis progresiva en la placa, o puede ficación de las arterias coronarias y el
correlacionarse con un aumento de la accidente cerebrovascular (44). No obs-
actividad de los linfocitos y los macró- tante, a pesar de la importancia de los
fagos. La inhibición de IL-18 está aso- trabajos de asociación genómica para
ciada con una marcada reducción de identificar nuevos marcadores poten-
la aterosclerosis; lo que indica poten- ciales de la enfermedad aterosclerótica,
ciales beneficios para la estabilización su valor predictivo todavía no está di-
de la placa. Al existir una sólida vincula- lucidado. Respecto a los biomarcado-
ción entre los niveles de IL-18 y futuros res de imagen para la placa vulnerable,
eventos cardiovasculares en pacientes muchas técnicas diagnósticas han pro-
con patología coronaria; asimismo, los porcionado resultados «prometedores»
niveles elevados de fibrinógeno se han para detectar o predecir placas vulnera-
asociado con mayor riesgo de compli- bles, pero han sido poco desarrolladas
caciones cardiovasculares fatales (39). (45); entre otras se incluyen tomografia
La supresión de receptores de IL-1, co- computarizada, espectroscopia, palpo-
nocida como supresor de tumorigeni- grafía, histología virtual, tomografía de
cidad 2, ha emergido como un potente cohesión óptica, ecografía intravascular
biomarcador pronóstico en pacientes de alta frecuencia y resonancia magné-
con fallo o infarto cardíaco. Los niveles tica. Cada una las citadas, aporta venta-
altos de proteína plasmática asociada jas y tiene limitaciones para prevenir y
al embarazo pueden ser valiosos para garantizar la detección de todas las pla-
predecir la inestabilidad de la placa. cas proclives a la rotura (44).
También se ha considerado que la mie-
loperoxidasa (MPO) es una cooperado- Recientemente (46), se ha identifica-
ra principal en la formación y rotura de do una proteína asociada a la ateros-
las placas (37); no obstante, a pesar de clerosis que puede convertirse en una
que se dispone de varios ensayos de futura diana para el diagnóstico y para
MPO para uso clínico, no se ha postula- el tratamiento de la enfermedad car-
do su medición rutinaria en clínica hu- diovascular. Se trata de la proteína mi-
mana. Es destacable que los estudios tocondrial ALDH4A1, que se describe
de metaloproteinas de matriz (MPM) como un nuevo antígeno implicado en
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Tratado de Patología Vascular
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Enfermedad aterosclerosa. Ateromatosis y arteriosclerosis
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in vivo. J. Am. Coll. Cardiol. 2010; 55 (23): 2580-89. cortesía del Dr. Luis Riera del Moral.
■ 75 ■
PRINCIPIOS Y APLICACIONES DEL ECODOPPLER
María Antonia Ibáñez, Noelia Cenizo, Elena García Rivera y Carlos Vaquero
Para que la exploración sea fiable hay La ecografía puede usarse para evaluar
que tener unos conocimientos de los la circulación cerebral extracraneal en
principios técnicos y prácticos de la pacientes que por sus factores de ries-
exploración a nivel de diferentes sec- go cardiovasculares y sus enfermeda-
tores y conocer los artefactos que pue- des asociadas tienen riesgo de pade-
den dificultar la exploración y cómo cer enfermedad estenótica a ese nivel.
minimizarlos para conseguir que los Evalúa también la circulación extracra-
hallazgos sean fiables para realizar un neal en pacientes que han sufrido clí-
correcto diagnóstico. nica isquémica neurológica, en forma
■ 77 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 78 ■
Principios y aplicaciones del Ecodoppler
Figura 1.–Ecodoppler carotídeo Modo B: (a) placa isoecogénica, (b) placa hiperecogénica, (c) placa calcificada
Figura 2.–Ecodoppler color: (a) estenosis no significativa, (b) estenosis significativa, (c) doppler estenosis no signifi-
cativa
■ 79 ■
Tratado de Patología Vascular
Cada centro debería comprobar sus en la imagen que impide obtener in-
criterios a nivel local comparando los formación con el color y con el doppler,
resultados ecográficos con otras técni- por lo tanto la calcificación causa pro-
cas diagnósticas invasivas, como son la blemas para clasificar la enfermedad.
angioRNM, el angioTC o la angiografía. Para ello debemos ver la morfología
Usando la ecografía en modo B y en co- de la onda distal a la calcificación que
lor en los planos transversal y longitudi- puede ayudar a clasificar el grado de
nal, junto con las mediciones y cocien- estenosis. Si la calcificación es exten-
tes de velocidad se calcula el grado de sa una onda normal distal no permite
estenosis. Pero hay casos en los que las asegurar la ausencia de una estenosis
imágenes y la medición de velocidad significativa. Otro problema para obte-
son limitadas y no se puede definir la ner una imagen correcta es la tortuo-
gravedad de la enfermedad, dato que sidad del vaso, el cambio de dirección
debe quedar reflejado en el informe. del vaso requiere cambios regulares en
la inclinación del ángulo.
La arteria vertebral puede verse entre
la apófisis vertebrales. Su flujo discurre La ecografía vascular permite hacer
hacia la cabeza (flujo en dirección cefá- una vigilancia sistemática del postope-
lica) y la morfología de la onda doppler ratorio de la cirugía carotidea, donde se
es de baja resistencia. El flujo invertido han encontrado pequeñas diferencias
a este nivel sugeriría un síndrome de en la bifurcación carotidea operada, no
robo de la subclavia. Para confirmar se ve el aspecto de doble capa donde se
un flujo anormal o invertido de la ver- ha eliminado la placa, el parche utiliza-
tebral se pueden realizar maniobras de do hace que se vea la bifurcación dila-
provocación produciendo un hipera- tada y en caso de que se utilice parche
flujo en el brazo ipsilateral. protésico, éste se verá más brillante. La
ecografía también puede utilizarse en
Uno de los problemas encontrados al el seguimiento de pacientes tratados
estudiar con ecografía la arteria caró- con stent carotídeo. En la estas arterias
tida es la calcificación de la placa que tratadas con stent las velocidades en-
produce un sombreado significativo contradas en estos vasos son más altas
■ 80 ■
Principios y aplicaciones del Ecodoppler
que en las arterias normales, sin dispo- exploración por la arteria femoral co-
ner de un consenso con criterios diag- mún (AFC), ya que nos hará sospechar
nósticos establecidos. (Figura 3) patología a nivel ilíaco. Posteriormente
con un transductor curvo se irá proxi-
2.2. Exploración arterial de extremidad malmente realizando una exploración
inferior longitudinal de la arteria ilíaca externa,
la arteria ilíaca común hasta la aorta, la
Con la introducción del doppler y la aorta se explorará transversalmente y
imagen del flujo en color, la ecografía longitudinalmente. Para realizar la ex-
vascular se convierte en un método ploración de la extremidad, se girará
práctico de evaluación arterial de las la pierna hacia fuera con ligera flexión
extremidades inferiores. La ecografía de la rodilla. Se identifica primero en
dúplex proporciona unos hallazgos sección transversal el eje femoral para
diagnósticos comparables a la angio- posteriormente hacerse el estudio lon-
grafía, permitiendo a los cirujanos vas- gitudinal de la AFC, la arteria femoral
culares plantear la opción terapéutica. profunda y la arteria femoral superfi-
Hay que tener en cuenta que la eco- cial (AFS). La arteria poplítea se localiza
grafía es una prueba no invasiva que transversalmente para posteriormente
no tendrá las complicaciones de las girar a un plano longitudinal. Por últi-
pruebas diagnósticas invasivas. mo se exploran la arteria tibial anterior,
tibial posterior y peronea desde rodilla
En reposo, el doppler normal en las ar- a tobillo. A menudo, es más fácil locali-
terias de la extremidad inferior tiene zarlas a nivel de pantorrilla distal y lue-
un patrón de onda trifásico. Las ondas go seguirlas proximalmente hasta la
con un aumento del tiempo de acele- parte alta de la pierna.
ración sistólica son características de la
enfermedad proximal al punto de es- En modo B, en el interior de los vasos
tudio. Por el contrario, las ondas de alta se pueden ver áreas de ateroma sobre
resistencia y bajo volumen son indica- todo si se encuentran calcificadas, esta
tivas de enfermedad grave distal. ateromatosis puede ser extensa con
una distribución difusa que afecta espe-
La exploración de las extremidades cialmente a la AFS. Cuando la oclusión
no precisa ninguna preparación pre- de la arteria es crónica el vaso puede ser
via, en algunos casos se puede reali- de menor calibre, cuando es aguda se
zar ayuno si se van a explorar la aorta visualiza trombo reciente en la luz vas-
y las arterias ilíacas. Es útil comenzar la cular con pocos ecos en su interior.
■ 81 ■
Tratado de Patología Vascular
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Principios y aplicaciones del Ecodoppler
■ 83 ■
Tratado de Patología Vascular
Los aneurismas verdaderos son dilata- Primero se identifica la aorta y las arte-
ciones localizadas y permanentes de rias ilíacas en plano transversal y luego
una arteria en la que hay un incremen- en plano longitudinal. Para localizarlas
to mayor del 50% con respecto a la ar- a veces es necesario ayudarnos del co-
teria normal, si el incremento es menor lor. La forma de la aorta e ilíacas aneu-
se denomina ectasia. La ecografía es el rismáticas es variable pudiendo estar
método de elección de esta patología elongadas y tortuosas dificultando la
ya que es un método no invasivo, rápi- medición de su diámetro.
do y de bajo coste. El estudio se com-
pletará con otras pruebas invasivas La medición fundamental que realiza
cuando el aneurisma precise repara- la ecografía es el diámetro máximo
ción quirúrgica. La ecografía vascular de la aorta y de las arterias ilíacas. Las
puede usarse para el seguimiento de mediciones en un plano transversal se
la reparación intravascular de esta pa- pueden hacer en dirección anteropos-
tología. La localización más frecuente terior o lateral, estas medicines pueden
de la dilatación aneurismática es en sobreestimar la medida del diámetro
la aorta abdominal. El propósito de la del aneurisma si se realiza de manera
ecografía es determinar si existe un oblicua, por lo que se recomienda rea-
aneurisma que afecta a la aorta o al sis- lizarlas en el plano longitudinal. La me-
tema arterial periférico y monitorizar el dición lateral es propensa al error, ya
tamaño con exploraciones seriadas. que las paredes laterales producen una
mala imagen. Pueden verse imágenes
Para la exploración de detección del de trombo en el interior del aneurisma
aneurisma de aorta no se necesita nin- en forma de capas concéntricas con
guna preparación especial, aunque diferentes grados de ecogenicidad en
algunos departamentos realizan una función de su antigüedad y organiza-
preparación intestinal para mejorar la ción (Figura 6).
visualización. El paciente se coloca en
decúbito supino con elevación ligera Los aneurismas inflamatorios mues-
de la cabeza y los brazos a lo largo del tran una zona hipoecogénica de fibro-
cuerpo. En ocasiones es necesario ro- sis alrededor de la aorta en modo B.
tar al paciente para desplazar el gas
intestinal y mejorar la visualización de Las imágenes de fuga por rotura del
la aorta. La exploración se realiza con aneurisma por ecografía son difíciles
Figura 6.–Aneurisma de aorta abdominal: (a) trombo mural, (b) diámetro transverso, (c) diámetro longitudinal
■ 84 ■
Principios y aplicaciones del Ecodoppler
Figura 7.–Control ecográfico del tratamiento endovascular del aneurisma de aorta abdominal:
(a) modo B, (b) color, (c, d, e) endoleak con color
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Tratado de Patología Vascular
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Principios y aplicaciones del Ecodoppler
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Tratado de Patología Vascular
Figura 8.–Ecodoppler venoso: (a) VFC y USF modo B, (b) VFC y USF color, (c) VSE
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Principios y aplicaciones del Ecodoppler
Clínica
Criterios de
Wells
Clínica – Clínica +
Wells < 2 Wells > 2
Dímero D Dímero D
+ – – + + –
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Tratado de Patología Vascular
Figura 9.–Ecodoppler venoso modo B: (a) compresión, (b, c) trombo fases iniciales
■ 90 ■
Principios y aplicaciones del Ecodoppler
■ 91 ■
Tratado de Patología Vascular
neas sin haber objetivado una lesión del flujo color y deberá estudiarse de-
previa. talladamente con el doppler para ver el
grado de estenosis. Si no se detecta co-
La exploración de un injerto infrain- lor en el injerto se debe reducir la PRF
guinal no necesita una preparación para confirmar la oclusión.
especial. Se realiza con el paciente en
decúbito supino, con la pierna rotada La morfología de la onda doppler en
externamente y la rodilla flexionada los injertos normales puede variar
ligeramente. Antes de empezar la ex- considerablemente dependiendo de
ploración es importante conocer la lo- la antigüedad del injerto. Los injertos
calización y el tipo de injerto. En el in- realizados recientemente tienen una
jerto venoso in situ el cuerpo principal onda monofásica por una dilatación
es superficial en muslo localizándolo periférica en los momentos iniciales.
transversalmente, se sigue proximal- Con el tiempo el patrón de flujo se
mente donde estudiaremos en un pla- hace más pulsátil, llegando a ser tri-
no longitudinal la anastomosis y la ar- fásico. Es conveniente obtener infor-
teria aferente. A continuación se sigue mación de la onda doppler a interva-
longitudinalmente el injerto hasta su los regulares a lo largo del injerto, ya
anastomosis distal y la arteria eferente. que los cambios en la onda se deben
Los injertos venosos invertidos suelen a un problema próximo. Sin esteno-
ser más profundos pero la técnica de sis significativas no se producirá un
exploración es muy similar. La mayoría aumento significativo de la velocidad
de los problemas de los injertos sintéti- sistólica (VS), deben compararse las
cos se localizan en las anastomosis, por velocidades en áreas adyacentes de
lo que se hará una exploración detalla- diámetro similar, cuando se produce
da a este nivel y de la arteria aferente y un cambio de diámetro es normal que
eferente. se produzca un cambio de velocidad,
el diámetro y la velocidad son inversa-
En modo B el injerto sin patología es mente proporcionales. Es importante
uniforme con la luz libre de ecos. Es ha- seleccionar un buen ángulo doppler
bitual en los injertos venosos ver zonas para realizar una determinación co-
con una ligera dilatación que corres- rrecta de velocidad. Las estenosis de
ponden a las válvulas. En ocasiones es los injertos se clasifican de manera si-
difícil obtener imágenes claras de las milar a las estenosis de la arteriopatía
anastomosis debido al tejido cicatricial periférica de extremidades inferiores.
circundante. En los injertos sintéticos Se hace un cociente entre la VSM en
de PTFE se ve una doble línea y en los la estenosis y la VSM en un segmen-
de dacron se ve una estructura ondu- to normal del injerto proximal a la es-
lada. Muchas estenosis son difíciles de tenosis. Cocientes entre 2 y 2,9 se se-
identificar en modo B, se pueden ver guirán con controles, y cuando sean
cambios de diámetro del injerto que mayores de 3 precisarán intervención.
corresponden a zonas de estenosis. VSM menores de 45 cm/sg indican
disfunción del injerto. Injertos de gran
Al doppler color en los injertos no patoló- diámetro pueden producir una veloci-
gicos se producen trastornos e inversión dad baja en su interior sin ser patoló-
de flujo en las anastomosis por los cam- gicos.
bios de dirección en el flujo, pasada la
anastomosis el flujo muestra un patrón La oclusión de un injerto puede ser
sin alteraciones. Una estenosis significa- difícil de identificar en modo B, sobre
tiva del injerto causa un solapamiento todo en los injertos venosos que están
■ 92 ■
Principios y aplicaciones del Ecodoppler
■ 93 ■
Tratado de Patología Vascular
Las complicaciones tardías después del Moneta GL, Edwars JM, Papanicolau et al.
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ULTRASONOGRAFÍA VELOCIMÉTRICA DOPPLER:
PRINCIPIO TÉCNICO Y APLICACIONES
Isabel Del Blanco, Celia Robles, Diana Gutiérrez y Manuel Diez
Los ultrasonidos se definen como on- Una sonda doppler con un cristal pie-
das mecánicas con una frecuencia de zoeléctrico (emisor) se sitúa en la piel
oscilación elevada (más de 20 kHz), a enfrente del vaso a explorar, emite un
las que se pueden aplicar las defini- haz de ultrasonidos, cuya penetración
ciones y las principales propiedades en los tejidos subyacentes es facilitada
de la óptica [1]. En diagnóstico médi- por la aplicación de gel en la piel. Los
co solo se emplean frecuencias entre ultrasonidos son reflejados por los eri-
1-20 MHz [2]. trocitos en movimiento hacia un se-
gundo cristal (receptor) [3, 4, 8, 9, 10]
Si se envía un haz de ultrasonidos ha- (Figura 1).
cia los glóbulos rojos circulantes en un
vaso, se produce el efecto doppler [1]. La piezoelectricidad es la propiedad
Este efecto o propiedad física se defi- de algunos materiales como el cuarzo
ne como el cambio aparente de fre- basada en la capacidad de transformar
cuencia entre un emisor y un receptor
cuando hay movimiento relativo de
ambos. Un ejemplo familiar es el tono
de la bocina de un coche cuando se
acerca o cuando se aleja de donde nos
encontramos [3].
■ 97 ■
Tratado de Patología Vascular
energía eléctrica en mecánica y vice- forma que solo los ecos detectados en
versa. Es por tanto la base de la ecogra- un estrecho intervalo de tiempo después
fia-doppler [2, 3]. del pulso y que corresponden a una de-
terminada profundidad, contribuyan a la
El receptor, entre todas las señales re- señal doppler [3]. Si se desplaza la venta-
cibidas, selecciona solo aquellas que na en el tiempo y se elige su duración, se
proceden de los hematíes en movi- modifica a voluntad la profundidad y el
miento y tras su amplificación, son di- volumen de medida, de este modo, pue-
rigidas a un altavoz que facilita la audi- den evitarse las interferencias originadas
ción y a un registro en forma de curva por estructuras en movimiento, como
de velocidad (curva velocimétrica) [9]. son las paredes vasculares, y por tanto
medir un perfil de velocidad [9].
La tecnología más sencilla basada en
el doppler es el doppler continuo [2] Si conocemos las características de los
(Figura 2) que se emplea en las explo- pulsos de ultrasonidos emitidos por la
raciones vasculares habituales en la sonda doppler, la velocidad con la que
práctica clínica. se desplaza por los tejidos (aproximada-
mente 1540 m/s) y registramos las modi-
En el doppler continuo la emisión de ficaciones producidas por el movimien-
ultrasonidos es continua, en contrapo- to del eco recibido, podemos deducir
sición al doppler pulsado que se emi- la velocidad a la que se estaba despla-
ten en forma de pulsos, ofreciendo una zando el objeto insonado. En caso de la
información cuantitativa de la profun- sangre podremos conocer la velocidad
didad a la que se produce el cambio del flujo sanguíneo [10]. Debemos tener
de frecuencia doppler, se conoce tam- en cuenta que la velocidad relativa de
bién como dúplex, puesto que los ins- los glóbulos rojos con respecto al trans-
trumentos que lo poseen muestran si- ductor depende además del ángulo
multáneamente la imagen en modo existente entre la línea que recorre el ul-
B y el análisis de la frecuencia doppler trasonido desde el transductor y la línea
[3, 10]. Este doppler pulsado se encuen- que determina la dirección hacia la que
tra incorporado en los equipos ecodo- se mueven los glóbulos rojos, relación
ppler actuales y que se desarrollará en expresada en la fórmula:
otro capítulo. El transductor doppler
pulsado es estimulado eléctricamen- V= FdxC/F0x2xcos θ
te para producir una breve emisión de V= velocidad del flujo sanguíneo
ultrasonidos (pulso) y después queda si- Fd= variación de frecuencia doppler
lente, a la escucha del eco antes de reali- C= velocidad de propagación del
zar una nueva emisión. Las señales reci- ultrasonido
bidas son filtradas electrónicamente de F0= frecuencia emitida
θ= ángulo de incidencia del sonido
con relación a la dirección del
flujo [8, 10].
■ 98 ■
Ultrasonografía velocimétrica doppler: principio técnico y aplicaciones
ángulo de incidencia es muy difícil con cada ciclo cardíaco (respuesta trifási-
el Doppler continuo, pero esta limita- ca), es pulsátil. El primer componente
ción está superada en los equipos de es una señal fuerte que corresponde a
ecodoppler actuales, ya que se realiza la sístole, seguidamente de un periodo
de manera automática [8, 11, 12]. corto de cambio de frecuencia que co-
rresponde a la diástole [13, 14].
Las sondas doppler que se utilizan
emiten generalmente una frecuencia La señal audible del flujo venoso nor-
entre 2-10 MHz. Las frecuencias más mal tiene un tono más bajo comparado
elevadas (5-10 MHz) son útiles para los con el arterial, varía con la respiración,
vasos superficiales (Figura 2) y las más no es pulsátil con las contracciones
bajas (2.0-3.5 MHz) para el estudio de cardíacas, es influenciable con manio-
los vasos profundos [8, 12]. bras de compresión [8, 13].
Figura 3.–Curva de baja resistencia, se observa la velocidad telediastólica por encima de la línea base
■ 99 ■
Tratado de Patología Vascular
Figura 4.–Curva doppler de una arteria de alta resistencia, se puede apreciar el flujo diastólico invertido
■ 100 ■
Ultrasonografía velocimétrica doppler: principio técnico y aplicaciones
Figura 6.–Imagen de curva doppler monofásica, donde no existe reflujo, con desaparición de la curva trifásica
■ 101 ■
Tratado de Patología Vascular
Figura 7.–Imagen curva doppler donde se observa el comportamiento del flujo venoso con la respiración
Figura 8.–Imagen con aumento del flujo venoso al comprimir la masa muscular distal a la vena
■ 102 ■
Ultrasonografía velocimétrica doppler: principio técnico y aplicaciones
Figura 9.–Imagen donde se aprecia un flujo venoso invertido mientras una maniobra de valsalva.
Figura 10.–Imagen con un flujo venoso continuo que no se modifica con los movimientos respiratorios
respiratorias influyen muy poco o nada y de la arteria, así como información he-
[8, 12]. La ausencia del flujo fásico tiene modinámica. Esto nos permite realizar
un 92% de sensibilidad en el diagnósti- un diagnóstico más fiable. También se
co de TVP en un segmento proximal [12]. está generalizando su utilización en los
Esto no se puede aplicar a la venas por hospitales y son empleadas por más
debajo de la rodilla, pues en la vena po- especialidades; no tienen contraindica-
plítea y venas distales la ausencia de flu- ciones, aunque este tema será desarro-
jo doppler no es significativo de TVP [12]. llado en otro capítulo.
■ 103 ■
Tratado de Patología Vascular
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■ 104 ■
USO DE PRUEBAS ECOGRÁFICAS COMO MARCADORES
NO INVASIVOS DE ATEROSCLEROSIS. TÉCNICAS Y APLICACIONES
Isabel Estévez, Enrique San Norberto, Cintia Flota, Isabel Del Blanco
y Carlos Vaquero
■ 105 ■
Tratado de Patología Vascular
El aumento del índice se hace más evi- carótida común ha demostrado ser un
dente a nivel de la arteria carótida, por marcador temprano de aterosclerosis
lo que en la práctica se utiliza el índi- generalizada (6-7). Además, el grosor de
ce del grosor íntima-media carotídeo, la íntima-media carotídea se considera
siendo ésta una técnica ampliamente un factor predictor de eventos cardio-
utilizada en la medición de la ateros- vasculares y cerebrovasculares (8-9).
clerosis en estadios tempranos. La me-
dición puede realizarse de forma ma- La medición del grosor de la ínti-
nual sobre la imagen congelada o de ma-media carotídeo se ha convertido
forma automatizada en tiempo real (4). en una herramienta muy utilizada en
distintos ensayos clínicos, particular-
Técnica de medición mente como una forma de monitorizar
el efecto de las distintas terapias medi-
La medición se realizará ecográfica- camentosas, como las estatinas, en la
mente mediante una sonda vascular modificación de la placa de ateroma.
lineal de 10 MHz a nivel de uno de los
últimos centímetros de la arteria caró- En el metaanálisis de Bedi de 2010
tida común antes del bulbo carotídeo. se evalúa el impacto de las estatinas
En primer lugar, se analizará la imagen en la progresión del grosor de la ín-
para describir la presencia o ausencia tima-media carotídeo. Se analizaron
de placas de ateroma, definidas como 102 estudios incluyendo finalmente
un ensanchamiento focal relativo a los en el metaanálisis 11 de ellos. Los au-
segmentos adyacentes que protruye tores concluyeron que las estatinas
en la luz más de 1.5 mm, con o sin cal- no sólo atenuaban la progresión de la
cificación. aterosclerosis carotídea sino que in-
cluso conseguían su regresión medi-
En una imagen longitudinal en dos da mediante el grosor íntima-media
dimensiones de la arteria carótida carotídeo, por lo que concluyen que
las paredes anterior (cercana) y pos- las estatinas tienen efectos benefi-
terior (lejana) de la arteria aparecen ciosos incluso en pacientes en esta-
como dos líneas blancas brillantes díos tempranos de la enfermedad
separadas por un espacio hipoecoi- valorados mediante técnicas no inva-
co. Estas líneas corresponden a dos sivas (10).
interfaces ecogénicas: la más interna
corresponde a la interfaz luz-íntima Se ha utilizado este índice como mar-
y la más externa a la media-adventi- cador predictor de aterosclerosis en
cia. El grosor íntima-media se identi- pacientes asintomáticos. En el estudio
f ica como la región entre la interfaz de Niu et al. se analizaron 173 sujetos
luz-íntima y la interfaz media-adven- asintomáticos desde el punto de vista
ticia. Se tomará como válida la media cardiovascular randomizados en dos
de tres mediciones en tres puntos grupos: individuos con tres o más fac-
próximos (5). tores de riesgo cardiovascular (n = 55) y
con dos o menos (n = 118). Se evaluó en
Aplicación ambos grupos el índice intima media
y la elasticidad arterial, encontrando
El grosor íntima-media carotídeo ha que la asociación de múltiples facto-
demostrado una correlación positiva res de riesgo tiene un mayor impacto
con la prevalencia de la enfermedad en el índice íntima-media carotídeo y
cardiovascular. El engrosamiento de la elasticidad arterial. Esto sugiere que
las capas íntima y media de la arteria los distintos factores de riesgo tienen
■ 106 ■
Uso de pruebas ecográficas como marcadores no invasivos de Aterosclerosis. Técnicas y aplicaciones
■ 107 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 108 ■
Uso de pruebas ecográficas como marcadores no invasivos de Aterosclerosis. Técnicas y aplicaciones
DMF( %)= [(Diámetro pico – Diámetro
basal) / Diámetro basal] x 100
Aplicación
■ 109 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 110 ■
Uso de pruebas ecográficas como marcadores no invasivos de Aterosclerosis. Técnicas y aplicaciones
Técnica
VELOCIDAD DE LA ONDA DE PULSO
Se han usado distintos métodos para
Las arterias de gran calibre no son sim- la determinación de la VOP, dentro de
ples estructuras de conducción tubu- ellos los más comunes son los méto-
lar. Son capaces de moderar el incre- dos mecánicos como SphygmoCor®
mento de presión sistólica y mantener o Complior®, los cuales requieren dis-
un nivel de presión diastólica suficien- positivos específicos y están limitados
te para garantizar la perfusión. Con la por la dificultad técnica para obtener
identificación de nuevas enfermeda- las mediciones. Calabia et al. propo-
des y factores de riesgo, se ha puesto nen una alternativa a estos dispositivos
de manifiesto que estas arterias pier- mecánicos para medir la VOP median-
den su elasticidad natural dando lugar te ecografía. Los autores evaluaron la
a unos niveles mayores de presión sis- concordancia entre la medición de la
tólica y menores de diastólica, lo que VOP mediante Ecografía Doppler y el
determina una mayor presión de pulso. método Complior. Se estudiaron 40 pa-
cientes procedentes de la Unidad de
Basándose en estas premisas, la rigi- Riesgo Cardiovascular e Hipertensión
dez arterial se considera hoy día un bio- del Hospital Universitario Doctor True-
marcador cada vez más importante en ta. A todos ellos se les realizó ambos ti-
la evaluación del riesgo cardiovascular pos de prueba para determinar la VOP
y en la detección de una enfermedad por dos investigadores. La concor-
vascular incipiente. Muchos estudios dancia entre ambos métodos fue alta
■ 111 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 112 ■
Uso de pruebas ecográficas como marcadores no invasivos de Aterosclerosis. Técnicas y aplicaciones
■ 113 ■
Tratado de Patología Vascular
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Uso de pruebas ecográficas como marcadores no invasivos de Aterosclerosis. Técnicas y aplicaciones
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TRAUMATISMOS DE LOS VASOS DEL CUELLO
Carlos Vaquero, Lourdes del Río, Enrique San Norberto, Miguel Martín
Pedrosa y Álvaro Revilla
■ 117 ■
Tratado de Patología Vascular
ETIOPATOGENIA
■ 118 ■
Traumatismos de los vasos del cuello
■ 119 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 120 ■
Traumatismos de los vasos del cuello
más simple que el que oferta la cirugía tación de marcapasos pueden con-
abierta convencional (31). Esta posibili- llevar lesiones iatrogénicas de estos
dad es más interesante en especial para vasos. Las grandes lesiones vasculares
la reparación de los vasos proximales a en agresiones, accidentes de tráfico,
nivel de su emergencia del cayado de accidentes laborales o deportivos, a la
la aorta y a nivel venosos de los tron- vez que comportan afectaciones de ór-
cos braquicefálicos o la propia cava. Así ganos localizados en el cuello, pueden
mismo es de interés en la reparación de también hacerlo a vasos en especial
arterias de difícil acceso y control como arteriales y venosos junto con nervios
las arterias vertebrales 6. En estos casos que en gran número se alojan en el
la colocación de stent cubiertos suele cuello (31, 33).
ser la norma, aunque en algunos casos
es preciso desarrollar procedimientos En muchos casos, las lesiones de las ve-
de oclusión endovascular. nas pueden ser tratadas de una forma
conservadora si el grado de lesión así lo
Lesiones venosas: permite, pero en otro es preciso actuar
sobre ellas, en ocasiones al tener que
Los vasos del cuello más relevantes son reparar otros elementos estructura-
las venas subclavias que confluyen con les del cuello, realizando la reparación
las yugurales internas para constituir quirúrgica y donde se puede admitir la
los troncos braquicefálicos venosos simple ligadura del vaso, teniendo en
derechos e izquierdos para a su vez consideración el gran número de ve-
formar la vena cava superior. La men- nas, existente en esta zona, sobre todo
cionadas venas yugulares internas que a nivel cervical, que permiten un dre-
transcurren a través del cuello proce- naje venoso por otras de las numero-
dentes del cráneo, siempre acompa- sas venas no lesionadas (31).
ñando en su lado externo a carótidas,
inicialmente interna y posteriormente La excepción a posicionamientos poco
común, las venas yugulares internas agresivos a la reparación, sería cuando
de localización externa subcutáneas la reparación comporta gran pérdida
en la parte lateral del cuello y otras ve- hemática u obstrucción de venas de
nas de menor entidad (32). mayor calibre. Esta situación se da fun-
damentalmente a nivel de los troncos
Su lesión o traumatismo, se suele de- braquicefálicos venosos y de su con-
ber de forma muy frecuente a lesiones fluente la vena cava (34).
iatrogénicas ocasionadas por el mé-
dico en procedimientos intervencio-
nistas ya sea como medio de acceso
terapéutico o diagnóstico. Punciones
para monitorización de pacientes, para
venoclisis o para vía de acceso de co-
locación de dispositivos a nivel venoso
con indicación terapéutica hace que
en ocasiones estos vasos puedan ser
lesionados derivando en las dos ma-
nifestaciones mas frecuentes desde el
punto de vista fisiopatológico y clínico
como son la hemorragia y la trombosis.
También actuaciones para lograr acce- Fig. 3.–Traumatismo iatrogénico de vena subclavia
sos para hemodiálisis o para la implan- post accidente de tráfico
■ 121 ■
Tratado de Patología Vascular
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Traumatismos de los vasos del cuello
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TRAUMATISMOS DE LA AORTA TORÁCICA
Carlos Vaquero, Diana Gutiérrez, Enrique San Norberto,
Miguel Martín Pedrosa y Noelia Cenizo
■ 125 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 126 ■
Traumatismos de la aorta torácica
■ 127 ■
Tratado de Patología Vascular
Fig. 1.–Imagen de AngioTAC de la ruptura contenida de la aorta torácica. Reconstrucción tridimensional de un an-
gioTAC donde se aprecia una ruptura de la aorta en la concavidad del vaso
sin hematoma tiene un valor predicti- Con esta prueba se pueden valorar al-
vo negativo del 99,9 %. teraciones intraluminales como flaps,
seudoaneurismas o hematomas subinti-
Puede haber falsos negativos por pro- males y de una forma indirecta valora la
blemas de técnica y algún falso posi- existencia de hematoma mediastínico.
tivo por artefactos respiratorios, movi- Su sensibilidad y especificidad son altas,
mientos, persistencia remanente del del 91 % y del 98 % para lesiones del istmo
ductus o placas ulceradas. aórtico. En muchas ocasiones es funda-
mental no para confirmar un diagnósti-
El TAC podría ser la única prueba nece- co, sino para controlar su tratamiento (16).
saria para realizar el diagnóstico y pro-
gramar el tratamiento (14) (Fig. 1). La calidad de la exploración es opera-
dor dependiente y no se debe de reali-
Angio RNM zar en casos de trauma facial severo o
fractura cervical.
Técnica de exploración diagnóstica,
alternativa del AngioTAC pero de una Sin hematoma la posibilidad de exis-
menor frecuencia de empleo pero que tencia de lesión aórtica prácticamente
en áreas o centros de uso habitual o no existe, con hematoma y comproba-
frecuente, puede aportar información ción de dicha lesión, el paciente debe
equivalente a la radiológica y que se de ir a quirófano. Solo en casos dudo-
podría utilizar en pacientes con alergia sos de hematoma mediastínico sin le-
a los contrastes iodados. sión aórtica visible se puede considerar
en la actualidad la posibilidad de an-
Ecografía transesofágica giografía, debido a esto esta prueba se
limita entre un 5-10 % de las sospechas
Es una técnica semi-invasiva, rápida, de rotura aórtica (17, 18).
que se hace a la cabecera del pacien-
te incluso en quirófano mientras el pa- Angiografía arterial
ciente es operado por otra patología.
Es muy útil en un paciente inestable • Es una técnica invasiva, que ha sido
(15) Topcu. considerada como la prueba de
■ 128 ■
Traumatismos de la aorta torácica
■ 129 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 130 ■
Traumatismos de la aorta torácica
■ 131 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 132 ■
Traumatismos de la aorta torácica
Fig. 4.–Reparación híbrida mediante cirugía endovascular y abierta en un traumatismo a nivel del arco aórtico, con
realización de by-pass aorto-subclavio y carotideo, carotido-carotídeo e implantación de endoprótesis en el arco aórtico
■ 133 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 134 ■
Traumatismos de la aorta torácica
Sin embargo, no hay diferencias relacio- cuenta que muchos de estos pacien-
nadas con el tipo de la técnica utilizada, tes son jóvenes, la zona aórtica donde
el tipo de asistencia circulatoria y la inci- se debe colocar la prótesis para lo-
dencia de paraplejia, que en esta cirugía grar el sellado de la pared aortica rota,
es del 10 %, mientras que con la realiza- puede presentar un calibre pequeño,
ción de técnicas endovasculares la tasa y discordante con el de los dispositi-
de paraplejia se encuentra entre 1-2 %. vos disponibles en el empleo, y por
otra parte suele tener estos enfermos
arterias femorales de pequeño calibre
DISCUSIÓN también que dificultan la navegación
hasta el punto de colocación de la en-
La ruptura de aorta torácica, se pue- doprótesis, lo que a veces requiere el
de considerar un proceso muy grave acceso a través de las arterias ilíacas
que en muchas ocasiones ocasiona (37).
la muerte del paciente. El tratamien-
to de estos enfermos puede realizar- Cuando la intervención se realiza de for-
se de forma inmediata o diferida, in- ma diferida la anticoagulación preope-
cluso al cabo de varios meses, según ratoria no supone ningún aumento de
sea la evolución del mismo. Escoger el riesgo de posibles hemorragias al tener
momento de la intervención es muy en ese momento un paciente hemodi-
relevante para conseguir la solución námicamente estable y con el resto de
más adecuada para el paciente. Por las lesiones ya tratadas. La anticoagu-
regla general en estos pacientes hay lación, es en muchos casos necesaria,
una alta incidencia de lesiones aso- ya que hablamos de pacientes jóvenes,
ciadas en otras áreas que en muchas susceptibles a espasmos y a posibles
ocasiones requieren un tratamiento lesiones de la pared arterial, o pacien-
urgente previo. Por parte de algunos tes mayores con lesiones arterioscleró-
autores han considerado que la mejor ticas ya instauradas (3, 7).
opción es demorar la intervención al-
rededor de dos semanas para cuando Si es necesario el tratamiento de for-
el paciente este estabilizado de otros ma urgente, la oclusión de la arteria
traumatismos generalmente conco- subclavia izquierda, se puede llevar
mitantes. a cabo, sin revascularización previa,
aunque cuando el tratamiento se rea-
El tratamiento clásico de estos enfer- liza de forma diferida con el paciente
mos ha sido el abordaje torácico de la estable, puede haber una recomenda-
lesión, generalmente por toracotomía ción de realizar de forma previa esta
izquierda de acuerdo a la ubicación revascularización para evitar preven-
más frecuente de la lesión y reparar tivamente la aparición de paraplejias
la misma, en la mayoría de ocasiones (23, 25).
sustituyendo el segmento lesionado
por un injerto protésico (36). Un punto importante del tratamien-
to es la sobredimensión que se debe
Sin embargo, el tratamiento endovas- utilizar en el dispositivo a implantar.
cular en este tipo de lesiones puede dar Cuando se trata de aneurismas, la so-
unos excelentes resultados, si bien hay bredimensión debe alcanzar el 20 %,
que tener en cuenta una serie de fac- en cambio cuando son traumatismos,
tores, de los que el más importante es esta sobredimensión debería de estar
el tamaño de los vasos a tratar y el pun- limitada alrededor del 10 %, y cuando
to o lugar de la ruptura. Teniendo en se trata de pacientes jóvenes hay que
■ 135 ■
Tratado de Patología Vascular
una morbilidad mucho menor y con [7] Gutierrez MV, Carpintero L, Carrera S, Va-
unos resultados a corto y medio plazo quero C. Traumatismo de aorta torácica. Revi-
buenos, si bien es verdad que no sa- sión y puesta al día. Rev Esp Inv Quir 2010; 2: 81-
4.
bemos la evolución a más largo plazo
de estos dispositivos en aortas en mu- [8] Gutiérrez V, San Norberto E, Martín-Pedro-
chos casos aún en periodo de creci- sa M, Cenizo N, Vaquero-Puerta C. Traumatis-
miento (38). mos de la aorta torácica. Rev Esp Inv Quir 2010;
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El seguimiento y control estricto de es- [9] O’Connor JV, Byrne C, Scalea TM, Griffith
tos pacientes es la única forma de evi- BP, Neschis DG. Vascular injuries after blunt
tar las posibles complicaciones que lo- chest trauma: diagnosis and management.
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gre mantener la permeabilidad de los
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dispositivos (17, 23, 26).
[10] Ibáñez Marañá MA, Gutierrez Alonso V,
El papel del tratamiento urgente en- Cenizo Revuelta N, San Norberto García EM,
González Fajardo JA, Del Río Solá L, Carrera Díaz
dovascular de estos pacientes, es una
S, Vaquero Puerta C. Combined treatment, En-
posibilidad terapéutica efectiva en la dovascular and surgical treatment of postrau-
inmensa mayoría de los casos de los matic pseudoaneurysm in the aortic arch. Eur J
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TRAUMATISMOS VASCULARES DEL MIEMBRO SUPERIOR
Lourdes del Río, Noelia Cenizo, María Antonia Ibáñez, Isabel Estévez
y Carlos Vaquero
■ 139 ■
Tratado de Patología Vascular
brazo si las arterias no pueden ser re- Las causas ortopédicas más f recuen-
paradas. Mientras que la lesión vascu- tes se exponen en la Tabla I (7).
lar por sí misma puede manejarse con
relativa facilidad, las lesiones nervio-
Hay también traumatismos específi-
sas pueden causar alteraciones fun-
cos que lesionan los vasos del miem-
cionales importantes a largo plazo (7).
bro superior. Un gran número de trau-
matismos del miembro superior son
Debido a que el traumatismo de los bra-
causados por accidentes industriales y
zos es frecuente y a veces aparece sin
domésticos. Rotura de cristales suelen
signos ni síntomas, una lesión desaperci-
causar lesiones distalmente al codo. La
bida pueden causar gran morbilidad con
frecuencia de la utilización de la arteria
el tiempo, por lo que es importante es un
humeral para acceso vascular en pro-
óptimo tratamiento del paciente (1).
cedimientos endovasculares ha cau-
sado un incremento de lesiones iatro-
Las arterias que aportan sangre a los
génicas. También son frecuentes los
miembros superiores (la arteria subcla-
pseudoaneurismas de la arteria radial
via y la arteria axilar) están localizadas
por punciones de la misma para ex-
en el desfiladero torácico superior o en
tracciones sanguíneas.
el tórax, y si estos vasos se lesionan, las
consecuencias son más serias (8, 9).
Cualquier vaso traumatizado puede
causar hemorragia, trombosis o am-
ETIOLOGÍA Y FISOPATOLOGÍA bas. Transacciones, lesiones intima-
les y contusiones son más frecuentes
Los mecanismos causantes de los después de traumatismos no pene-
traumatismos de miembros superio- trantes, Los tejidos en la parte distal
res y del miembro inferior se pueden de los brazos son más susceptibles a
clasificar en mecanismos penetran- isquemia que los miembros inferiores.
tes y no penetrantes (o contusos). Las Las lesiones nerviosas concomitantes
heridas por arma blanca y por arma son la principal causa de mortalidad
de fuego causan lesiones penetrantes a lago plazo. Tales lesiones son igual-
(la más frecuente en la arteria hume- mente frecuentes después de trauma-
ral) pero también son frecuentes las tismos penetrantes y no penetrantes.
laceraciones secundarias a fracturas. En la literatura, 35-60 % de las lesiones
Los fragmentos óseos con frecuencia arteriales en el brazo están asociadas a
penetran en el vaso. Lesiones no pene- lesiones nerviosas y el 75 % están aso-
trantes ocurren en accidentes de tráfi- ciadas a lesiones nerviosas, óseas o ve-
co debido a fracturas o luxaciones (3). nosas (9).
■ 140 ■
Traumatismos vasculares del miembro superior
Incapacidad de movilizar en
brazo, la extremidad superior Incapacidad de discriminar la
Plexo braquial
cuelga con el codo extendido y sensibilidad en el cuello
el antebrazo en pronación
Incapacidad de discriminar la
Parestesias e incapacidad para
Nervio cubital sensibilidad de la parte distal
movilizar el 5.º dedo
del 5.º dedo.
Incapacidad de discriminar la
Parestesias e incapacidad de
Nervio radial sensibilidad de la unión entre el
movilizar el dedo pulgar.
dedo pulgar y el dedo índice.
■ 141 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 142 ■
Traumatismos vasculares del miembro superior
■ 143 ■
Tratado de Patología Vascular
cuando cuatro de los siguientes cinco Por lo tanto, el cirujano debe intentar
componentes estén afectados (piel, salvar la extremidad superior cuando
hueso, músculo y vasos) pero sólo exis- éste conserve capacidad funcional y la
ta una lesión nerviosa menor, se puede reparación quirúrgica suponga un ries-
intentar salvar el brazo. No debemos go aceptable para el paciente.
olvidar que el brazo necesita, al menos,
algún tipo de sensibilidad para ser fun- Existe una escala que gradúa la gravedad
cional. Los niños tiene gran capacidad de la lesión tanto en la extremidad supe-
de regeneración funcional comparado rior como en la extremidad inferior (Ta-
con los adultos, por lo que la actitud bla III). Se ha propuesto una puntuación
quirúrgica en los niños está siempre de 7 como punto de corte que indica la
recomendada. amputación primaria de la extremidad (7).
< 30 años 1
> 30 años 2
> 50 años 3
* Los puntos será multiplicados por dos en caso en una isquemia de más de 6 horas de evolución
■ 144 ■
Traumatismos vasculares del miembro superior
Preparación preoperatoria
Para los vasos distales, el control proxi-
mal puede ser conseguido median-
Los pacientes hemodinámicamente
te un manguito de presión colocado
estables serán colocados en decúbito
proximalmente e insuflado 50 mmHg
supino con la extremidad superior 90º
por encima de la presión sistólica del
en abducción, en la mesa de quirófano.
paciente. Se debe elevar el miembro
El antebrazo y la mano deben estar en
superior ligeramente para disminuir
supinación. Se debe coger una vía ve-
la hemorragia por congestión venosa.
nosa periférica o central en la extremi-
Posteriormente, la herida puede ser
dad contralateral. La hemorragia debe
explorada directamente en el sitio de
ser controlada con presión manual di-
lesión.
recta sobre la herida. Si el lugar de la
lesión es la arteria humeral o distal a
ésta, se puede colocar un torniquete Para las lesiones más proximales, el
proximal a la lesión para el control de control se realizará mediante la expo-
la hemorragia, antes se debe colocar sición quirúrgica del segmento arterial
un paño para evitar el contacto directo superior.
con la piel y para evitar lesionarla. Pri-
mero lavamos el brazo con suero fisio- Control de la arteria axilar por debajo
lógico y solución antiséptica. Debemos de la clavícula: Se realiza una incisión
tener la precaución de preparar una horizontal de unos 8 cm, 3 cm por
extremidad inferior, ya que en ocasio- debajo de la clavícula. Las fibras del
nes es necesario resecar la vena safena músculo pectoral mayor son divididas
interna. cerca de su inserción. El nervio que
cruza las fibras del músculo pectoral
Cuando la lesión es más proximal, co- menor puede ser dividido sin reper-
locaremos de igual forma al paciente. cusión. La arteria axilar se encuentra
El control, proximal de la arteria hu- justo debajo de la fascia. Debajo de la
meral proximal o de la arteria axilar arteria axilar se encuentra la vena axi-
puede precisar el control de las mis- lar y el fascículo lateral del plexo bra-
mas en la región clavicular o en el cue- quial está situado encima de la arteria
llo (7, 8, 10). (Figuras 3 y 4).
Figura 3.–Abordaje quirúrgico de la arteria axilar Figura 4.–Abordaje quirúrgico de la arteria axilar
■ 145 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 146 ■
Traumatismos vasculares del miembro superior
Tratamiento endovascular
■ 147 ■
Tratado de Patología Vascular
Manejo después del tratamiento del 99 % y todos los pacientes presen-
taron excelente resultados funcionales.
Se debe realizar monitorización posto- Entre los brazos que precisaron repa-
peratoria de la perfusión de la mano y ración nerviosa, el 64 % de los pacien-
del pulso radial cada 30 minutos du- tes presentaron empeoramiento de la
rante las primeras 6 horas. Cuando se función del brazo. Pero solo presenta-
sospeche de una función arterial dete- ron empeoramiento de la función el
riorada, debemos realizar un eco-do- 25 % de los pacientes que necesitaron
ppler para verificar o excluir problemas reparación músculo-esquelética.
postoperatorios. También debemos
explorar el edema y empastamiento Un estudio realizado en Gran Bretaña
de la extremidad para descartar un (14) incluyó 28 casos de lesiones en la
síndrome compartimental. Se reco- arteria humeral, de los cuales 6 fueron
mienda un tratamiento anticoagulan- contusiones. En este estudio, la mitad
te a dosis terapéuticas los primeros de los pacientes tuvieron una lesión
días del postoperatorio. nerviosa concomitante y fueron some-
tidos a una reparación quirúrgica in-
Se deben mantener la mano ligera- mediata. Todas las reparaciones arte-
mente elevada para evita el edema de riales fueron exitosas, pero la mayoría
la mano y del brazo, al igual que evitar de los pacientes sometidos a repara-
problemas de formación de hemato- ción nerviosa presentaron déficit fun-
ma alrededor de la herida. La moviliza- cional en el seguimiento.
ción precoz de los dedos facilita el flujo
sanguíneo del brazo y debe ser reco- Afortunadamente, parece que la fun-
mendada (7, 9, 10). ción mejora con el tiempo. El mayor
factor de riesgo para un empeora-
miento del resultado es la severidad
RESULTADOS de la fractura y de los tejidos blandos,
la duración del periodo de isquemia,
La permeabilidad de la reparación la severidad del daño neurológico y la
arterial en el brazo generalmente es presencia de lesiones asociadas (12).
excelente, pero a veces desafortuna-
damente, pueden producirse repercu- Lesiones yatrogénicas vasculares
siones en la función del brazo. Para la
mayoría de los pacientes en los que el La arteria humeral es cada vez más em-
trauma estuvo asociado a una lesión pleada en la canulación tanto para acce-
nerviosa y de tejidos blandos, la fun- so vascular como para procedimientos
ción del nervio es la que determina el endovasculares. En este último caso, a
resultado. Los resultados de la repara- veces se necesitan introductores largos
ción quirúrgica de los traumatismos lo que llevará asociado problemas rela-
vasculares se recogen en la bibliogra- cionados con ellos (Figura 8).
fía a través de estudios observaciona-
les y series de casos. Un ejemplo es la Las lesiones asociadas son la hemorra-
revisión en Estados Unidos de 101 pa- gia y la trombosis.
cientes con traumatismo penetrantes,
incluyendo 13 casos de lesiones en la La hemorragia se puede controlar me-
arteria axilar y la subclavia (9). La mitad diante presión manual directa, con
de los pacientes se asociaron a una le- posterior exposición quirúrgica y re-
sión nerviosa. Durante el seguimiento, paración generalmente mediante su-
la tasa de salvamento de miembro fue tura directa. La trombosis es menos
■ 148 ■
Traumatismos vasculares del miembro superior
■ 149 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 150 ■
Traumatismos vasculares del miembro superior
■ 151 ■
Tratado de Patología Vascular
fasciotomía, en cuyo caso se realizará [14] Thompson PN, Chang BB, Shah DM, et al.
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TRAUMATISMOS VASCULARES DEL MIEMBRO INFERIOR
Carlos Vaquero, Enrique San Norberto, Lourdes del Río, Joel Soriano
y José Antonio Brizuela
■ 153 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 154 ■
Traumatismos vasculares del miembro inferior
■ 155 ■
Tratado de Patología Vascular
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
TRATAMIENTO
■ 156 ■
Traumatismos vasculares del miembro inferior
COMPLICACIONES
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Tratado de Patología Vascular
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Traumatismos vasculares del miembro inferior
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ISQUEMIA AGUDA DE LOS MIEMBROS SUPERIORES
Mario Alejandro Fabiani, Andrea Becerril, Adolfo del Bosque
y Gabriela Cassagne
■ 161 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 162 ■
Isquemia aguda de los miembros superiores
Estudios Complementarios
■ 163 ■
Tratado de Patología Vascular
Embolectomía trans-braquial
Tratamiento
■ 164 ■
Isquemia aguda de los miembros superiores
pacientes. Sin embargo, el flujo pudie- residual, las arterias radial y cubital de-
ra no ser restablecido en caso de que berán ser expuestas. Un catéter 2F pue-
exista dominancia arterial por parte de de ser utilizado para extraer el coágulo
la arteria cubital, o si el catéter pasa a del arco palmar. De tratarse de un pro-
través de la arteria interósea común, la ceso crónico, la oclusión arterial podría
cual no provee flujo sanguíneo direc- no ser completamente resuelta con
to a la mano. Preferimos realizar una la embolectomía. En tal caso, podrá
arteriotomía transversal en la arteria completarse con otros procedimientos
braquial, para evitar así la estenosis a intravasculares, como la angioplastia
la hora de su cierre. Los coágulos, co- con balón, vía femoral o braquial para
múnmente situados en la bifurcación diagnosticar y tratar la lesión.
arterial, pueden ser fácilmente removi-
dos. El catéter se progresa por las ra- Trombolisis dirigida por catéter,
mas distales, tantas veces como sea asistida por ultrasonido,
necesario, para retirar la totalidad de tromboaspiración y trombectomía
los trombos y se irriga luego con solu- farmacomecánica
ción heparinizada. Uno de los riesgos al
introducir el catéter de embolectomía En la actualidad se cuentan con dife-
en sentido proximal es la movilización rentes herramientas endovasculares
de coágulos que puedan embolizar u para el tratamiento de la isquemia
ocluir la arteria vertebral. En caso de aguda (7). Si bien, como se aclaró en la
dudas, la angiografía con contraste sección anterior, la embolectomía con
es indispensable para una correcta vi- catéter de Fogarty es el tratamiento
sualización anatómica. Una vez que se más efectivo para el manejo de esta
establece el flujo sanguíneo, se realiza patología, la falta de un especialista
la arteriorrafía con polipropileno, en quirúrgico o por preferencia del ciruja-
sutura continua o puntos separados, no, puede optarse por el uso de proce-
según preferencia y riesgo de esteno- dimientos endovasculares (Figura 8).
sis post rafia. Ante cualquier duda, el
cierre arterial deberá realizarse con un Las trombolisis dirigidas por catéter
parche venoso. o asistidas por ultrasonido, tienen la
desventaja de demorar más tiempo
Tras el cierre, se deberá asegurar que en el restablecimiento de la circula-
exista un flujo sanguíneo adecuado en ción y no deben elegirse en aquellos
cada arteria. Para ello se utilizará Do- pacientes en los que la viabilidad del
ppler de onda continua intra-operato- miembro esté en riesgo. Como contra-
ria, US Doppler o angiografía (5), según partida, pueden ser más efectivas en
la disponibilidad y preferencia del ciru- los casos en que la trombosis alcanza
jano. En caso de que exista un coágulo vasos muy distales, inaccesibles a los
Figura 8.–Trombosis de arteria axilar por invasión tumoral, tratada con trombo-aspiración y colocación de stent cubierto
■ 165 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 166 ■
Isquemia aguda de los miembros superiores
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Tratado de Patología Vascular
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Isquemia aguda de los miembros superiores
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PATOLOGÍA AGUDA DE LA RAÍZ AÓRTICA
Y LA AORTA ASCENDENTE
Pablo César Prada Arrondo, Javier Montoto-López, Pilar Garrido Martín
y Rafael Martínez-Sanz
■ 173 ■
Tratado de Patología Vascular
Etiopatogenia
■ 174 ■
Patología aguda de la raíz aórtica y la aorta ascendente
■ 175 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 176 ■
Patología aguda de la raíz aórtica y la aorta ascendente
■ 177 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 178 ■
Patología aguda de la raíz aórtica y la aorta ascendente
1.
Estudios complementarios básicos
(83), incluido el D-dímero (84-88). La TC, gracias a su capacidad de rápi-
da triple discriminación mediante un
1.1. Estudios de imagen: único estudio (patología aórtica, em-
bolismo pulmonar y afectación arterial
1.1.1. Ecocardiografía. La ecocar- coronaria) y a la posibilidad de evaluar
diografía transtorácica (ETT) es una ex- otros sectores como el pericardio o las
celente herramienta rápida y no agre- ramas arteriales de la aorta, constituye
siva (89). En los casos de disección de la primera línea en el diagnóstico del
aorta tipo A la sensibilidad de la ETT se síndrome aórtico agudo (94). Su princi-
reduce al 77-80 % (aunque su especi- pal limitación es la necesidad del con-
ficidad sea del 93-96 %), por lo que la traste yodado intravascular que puede
no visualización del defecto estructu- producir reacciones alérgicas severas
ral aórtico no nos permite descartar la en pacientes sensibilizados (una alter-
existencia de un proceso agudo (90). nativa eficaz y segura en dichos pa-
La ecocardiografía transesofágica (91) cientes es la utilización de contrastes
(ETE) permite aumentar la sensibilidad derivados del gadolinio, como el gado-
de diagnóstico hasta el 99 % con una butrol) (95) o ser la causa –o empeora-
especificidad del 89 %. miento– de insuficiencia renal.
■ 179 ■
Tratado de Patología Vascular
Tabla II.–Datos útiles para evaluar la probabilidad a priori de síndrome aórtico agudo
■ 180 ■
Patología aguda de la raíz aórtica y la aorta ascendente
Figura 4.–Diagrama de flujo para el diagnóstico del síndrome aórtico agudo. SAA: síndrome aórtico agudo; DA: dis-
ección aórtica; ETT: ecocardiografía transtorácica; ETE: ecocardiografía transesofágica; TC: tomografía computeri-
zada; RMN: resonancia magnética nuclear
■ 181 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 182 ■
Patología aguda de la raíz aórtica y la aorta ascendente
■ 183 ■
Tratado de Patología Vascular
díaca (inferior a 60 latidos por minuto) ción de los pacientes a su vida cotidiana
(12, 14, 160). La dislipemia debe ser siem- siguiendo patrones de recuperación sa-
pre tratada (161). Será necesario imple- ludables (164). Rehabilitación y esfuerzo
mentar de forma progresiva, coordinada físico, supresión de hábitos tóxicos, con-
y multidisciplinar (162, 163) todas aque- trol dietético, adaptación y tratamiento
llas medidas encaminadas a la adapta- psicológico, etc. (165, 166).
ÍNDICE DE ABREVIATURAS
Abreviatura Descripción
ACC/AHA American College of Cardiology/American Heart
Association.
BIS Bispectral Index (análisis biespectral)
ESC European Society of Cardiology.
ETE Ecocardiografía transesofágica.
ETT Ecocardiografía transtorácica.
IRAD International Registry of Acute Aortic Dissection
(Registro Internacional de Disección aórtica)
NIRS Near-Infrared Spectroscopy (espectroscopía de
infrarrojo cercano)
PET Positron Emission Tomography (tomografía por
emisión de positrones)
RMN Resonancia Magnética Nuclear.
SAA Síndrome Aórtico Agudo.
SSEP Somatosensory Evoked Potentials (potenciales
somatosensoriales evocados)
TC Tomografía computerizada.
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Y AORTA ASCENDENTE
Rafael Martínez Sanz, Javier Montoto López, Pablo César Prada Arrondo
y Juan José Jiménez Rivera*
■ 193 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 194 ■
Aneurismas crónicos de la raíz aórtica y la aorta ascendente
■ 195 ■
Tratado de Patología Vascular
Degenerativas
a. Aterosclerosis
b. Fibrodisplasia
c. Degeneración cística idiopática de la capa media de la pared aórtica
Disección aórtica
Infección
a. Aneurismas bacterianos (micóticos)
b. Aneurismas sifilíticos
Congénitos
Traumas
Pseudoaneurismas
■ 196 ■
Aneurismas crónicos de la raíz aórtica y la aorta ascendente
su conjunto es del 6,5 % (1). Hay comor- y aneurismas en arterias periféricas (23,
bilidades que pueden acelerar el creci- 24). La hipertensión arterial es muy fre-
miento de estos aneurismas, como son cuente y puede ser motivo del avance
ser mujer, hipertenso, edad avanzada, de los diámetros del aneurisma (10).
historia familiar de AAT o haber sufrido
una disección de aorta (21). Si se rom- Asociación con otras enfermedades
pe, las posibilidades de llegar vivo al no cardiovasculares.–Las enfermeda-
hospital son del 41 % (22). des autoinmunes (enfermedad de Taka-
yasu, lupus, espondilitis anquilosante),
Asociación con otras enfermedades algunas colagenosis (síndrome de Mar-
cardiovasculares.–Cuando se asocia a fan –SM), Loeys-Dietz, Ehlers-Danlos) y
válvula aórtica bicúspide, ésta se pue- cromosomopatías (síndrome de Turner),
de calcificar y estenosar (10). La insu- también las infecciones de la pared aór-
ficiencia aórtica degenerativa o mixo- tica (sífilis, endocarditis infecciosas), pue-
matosa está frecuentemente asociada. den ser parte de un AATA (10). Los AATA
Ambas patologías se retroalimenten pueden estar asociados a una VAB (es-
para terminar dilatando al anillo. La tenótica o no) y también lo pueden estar
pérdida de la unión sinotubular hace a una válvula aórtica estenótica (bicúspi-
que la función fisiológica de ésta des- de o no). En ese caso pueden desarrollar
aparezca, contribuyendo a la falta de angiodisplasia del colon o síndrome de
coaptación de los velos aórticos dando Heyde (25). Cuando, además, se asocia
insuficiencia valvular aórtica. Muchas la ausencia de factor VIII de la coagula-
veces reparando la dilatación del anillo ción de carácter adquirido (enfermedad
o recomponiendo la unión sinotubular de von Willebrand tipo II), se denomina
podemos reparar sin otras técnicas aso- síndrome de Heyde/Warkentin y es cau-
ciadas la insuficiencia aórtica (Figura 4). sa frecuente de rectorragias y motivo de
La insuficiencia aórtica produce un flu- anemización (26), que en más del 90 %
jo turbulento, no laminar, provocan- de los casos disminuyen o desaparecen
do el incremento de los diámetros del tras la sustitución valvular aórtica. Cuan-
aneurisma (10). Menos frecuentemente do el AATA se acompaña de insuficien-
puede asociarse a insuficiencia mitral cia aórtica puede existir sintomatología
degenerativa o mixomatosa. En Europa de insuficiencia cardíaca (disnea, sínto-
la asociación de valvulopatía mitroaórti- mas de bajo gasto cardíaco) (8).
ca y aneurisma se ve raramente (10).
Clínica.–Los AATA crónicos son habi-
Los AATA pueden ser parte de una en- tualmente asintomáticos hasta que se
fermedad polianeurismática, con aneu- complican (a diferencia de otros aneu-
rismas en otros segmentos de la aorta rismas de la aorta que pueden dar sín-
tomas al comprimir estructura veci-
nas), siendo raro el dolor retroesternal
en ausencia de complicaciones como
la rotura (20). Suelen ser un hallazgo
casual en alguna exploración radioló-
gica simple, tomografía computeriza-
da (TC), ecocardiografía (transtoráci-
ca o esofágica) o resonancia nuclear
magnética (RNM). Es poco frecuente
Figura 4.–Anillo dilatado con insuficiencia aórtica por la compresión de la vía aérea, con dis-
falta de coaptación de los velos (B) en comparación con nea, tos, sibilancias, hemoptisis recu-
un anillo normal (A). Modificado de David TE (107) rrentes, neumonías o atelectasias (1, 5).
■ 197 ■
Tratado de Patología Vascular
Raramente pueden existir síntomas de permite ver toda la aorta torácica, visua-
compresión de la vena cava superior; lizar la luz y las puertas de entrada en
y, de existir un hematoma crónico de la luz falsa, úlceras de la pared, hema-
la pared aórtica, pueden producirse fe- tomas y la íntima, y es una herramienta
nómenos embólicos, como ictus o em- diagnóstica muy útil en las disecciones
bolias periféricas (27). Los AATA agu- y en el síndrome aórtico agudo (32), así
dos forman parte del síndrome aórtico como también en la valvulopatía aórti-
agudo (SAA). Éste el que con más fre- ca (33). La angiografía por sustracción
cuencia tiene su localización en la aor- digital no tiene mucha aplicación en los
ta ascendente, pudiendo producirse aneurismas de la aorta ascendente. Si
en este caso de forma brusca un do- se va a realizar coronariografía, la aorto-
lor intenso en el cuello, retroesternal o grafía está indicada y es fácil de realizar
bien en otras zonas del tórax (27, 28). en la patología crónica (5). Todas estas
pueden informarnos de otras complica-
ciones, por ejemplo la obstrucción de la
vena cava superior (28).
■ 198 ■
Aneurismas crónicos de la raíz aórtica y la aorta ascendente
■ 199 ■
Tratado de Patología Vascular
Figura 7-I.–Representación del crecimiento asimétrico del aneurisma aórtico que provoca insuficiencia aórtica y
recolocación del plano valvular aórtico que corrige sin más técnicas asociadas la insuficiencia aórtica. (1a) Aorta
ascendente tubular aneurismática con la distancia entre el punto más profundo del seno no coronariano hasta el
borde proximal del ostium del tronco braquiocefálico. (1b) Tubo de Dacron, según técnica de Wheat, que reemplaza
el aneurisma de 1a, con dicha distancia acortada. (2a y 2b) Acortamiento tras sustituir el aneurisma de la distancia
ostium coronario izquierdo-borde distal del ostium de la subclavia izquierda. (3a y 3b) Normalización del diámetro de
la unión sinotubular tras sustituir el aneurisma. (4a y 4b) Normalización del diámetro de la raíz tras la sustitución.
(5a y 5b) Normalización de la falta de coaptación de los velos aórticos tras la sustitución. (A y B) Ángulos entre el plano
de la raíz aórtica y el eje largo de la columna vertebral. Modificado de Hetzer (109)
■ 200 ■
Aneurismas crónicos de la raíz aórtica y la aorta ascendente
hacerlo si se trata de un grupo III, con Para realizar estas intervenciones (Da-
retracción de los velos aórticos (49, 50- vid V o Yacoub-David II) (48), el tubo
52). Dentro de esta cirugía conservado- de Dacron a emplear puede ser recto
ra, se puede incluir la válvula (reimplan- o con senos de Valsalva de fábrica. Ob-
te) dentro de un tubo de Dacron (53-57) viamente los ostia coronarios se deben
(técnica de David V o de reimplantación anastomosar en todos estos casos al
aórtica) (48) o bien preservar solo la aor- tubo de Dacron (61). El extremo distal
ta correspondiente a las comisuras, ex- del tubo puede anastomosarse al seg-
cluyendo el resto de la pared de la raíz mento proximal del cayado aórtico di-
(técnica de Yacoub) (58, 59). El David V rectamente o mediante otro tubo de
tiene cuatro versiones previas, que en Dacron de menor diámetro interpues-
realidad son modificaciones de la téc- to) (62). La técnica más utilizada para
nica de Yacoub. Hay una variante del evitar el prolapso de los velos aórticos
David V, que por definición reconstru- es dar un punto próximo al borde li-
ye la unión sinotubular, frunciéndola, bre, cerca del nodo de Arancio o pun-
llamado David V-Stanford, que básica- to medio, que si está hipertrofiado se
mente consiste en anastomosar un se- debe resecar (punto de Trussler) (61),
gundo tubo de Dacron, más estrecho, o mediante resuspensión mediante
que finaliza al inicio del arco aórtico. En fruncido del borde libre con sutura de
la técnica de Yacoub, iniciada en 1979, Gore-Tex de 6/0, que también se debe
se utiliza un tubo de Dacron con tres dar en los pacientes diagnosticados de
escotaduras equidistantes, con una conectivopatías (63).
profundidad similar a la altura de las
comisuras. Es una técnica más simple Es fundamental para evitar recidivas
de hacer, pero con el inconveniente de de la insuficiencia aórtica medir bien
que el anillo aórtico puede seguir dila- la altura de las cúspides y el nivel de
tándose. Elkins tiene descrito un méto- coaptación entre los velos (61, 64-66).
do que consiste en una sutura circular Cuando estemos convencidos de pre-
subanular con monofilamento de 2/0, servar la válvula aórtica en un aneuris-
que se anuda fuera de la aorta, sobre un ma de la raíz aórtica o de toda la aorta
Hegar introducido en el tracto de salida ascendente, el dilema es qué técnica
del ventrículo izquierdo para impedir elegir, un David V o un Yacoub (1, 61,
fruncir el anillo valvular (60). 67). Cada vez son más los que eligen al
primero, pero si se practica una anulo-
plastia correcta, los resultados son si-
milares (61). Cuando la válvula aortica
es bicúspide puede ser estenótica, en
cuyo caso no queda otra opción que
sustituir esa válvula; o puede ser insu-
ficiente, en cuyo caso repararla puede
ser incluso más sencillo que en una tri-
cúspide (68-70).
Figura 7-II.–Raíz aórtica y aorta ascendente tubular Cuando no es posible preservar la vál-
normales (A) y dilatadas (B) con insuficiencia val- vula aórtica, sustituimos todo (Figura 8):
vular aórtica por falta de coaptación secundaria a la válvula, raíz y aorta ascendente, anasto-
dilatación de la unión sinotubular, que queda repa-
mosando los ostia coronarios en el tubo
rada al interponer un tubo de dacron que reconstruye
la unión sinotubular al tiempo que sustituye la aorta de Dacron (operación de Bentall-Bono)
ascendente tubular, técnica de Wheat (C). Modificado (71). Con una prótesis mecánica dentro
de David TE (107) de él o, menos frecuentemente, con
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Tratado de Patología Vascular
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Aneurismas crónicos de la raíz aórtica y la aorta ascendente
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Tratado de Patología Vascular
Tabla II.–Fármacos antihipertensivos en el postoperatorio de aneurisma y síndrome aórtico. RVS: resistencias vas-
culares sistémicas; VI: ventrículo izquierdo; PTD: Presión telediastólica
Esmolol ß-bloqueante Efecto cronotropo e ino- De elección con un gasto cardíaco, frecuencia
cardioselectivo. tropo negativos cardiaca y presión arterial elevadas. Especial-
mente indicado en la miocardiopatía hiper-
trófica obstructiva.
Labetalol ß-bloqueante no El bloqueo α sobre las ar- En pacientes hipertensos con cardiopatía is-
selectivo y α1-blo- terias periféricas → $RVS, quémica coexistente, al reducirse las resisten-
queante (1ß:7α). mientras el ß protege al cias periféricas disminuye la sobrecarga poste-
corazón de la respuesta rior miocárdica y la demanda de oxígeno.
simpática refleja.
Urapidilo Acción dual: Anta- Vasodilatador arteriolar Efecto lineal-dosis dependiente, la disminu-
gonista selectivo →$RVS, sin aumento re- ción de las RVS y de la circulación pulmonar
de receptores flejo de la frecuencia car- se acompaña de una reducción del consumo
α-1 adrenérgicos díaca. miocárdico de oxígeno y mejoría de la función
postsinápti- ventricular, que lo convierte en un fármaco
cos periféricos. seguro y eficaz en el contexto de la cirugía
Estimulador de cardiovascular. Aclaramiento del fármaco in-
receptores 5HT fluido por la función hepática y renal.
serotoninérgicos
a nivel central.
Nicardipino Bloqueante de Relajación del músculo Principal beneficio por volumen sistólico y el
los canales de liso vascular →$RVS flujo coronario (sin el efecto de robo coronario
calcio dihidropiri- del nitroprusiato) con un efecto favorable en
dínico de segun- el consumo de oxígeno miocárdico.
da generación.
Clevidipino Bloqueante de Actúa sobre los canales No reduce la precarga. Según el ensayo
canales de calcio de calcio tipo-L → $RVS y ECLIPSE, en cirugía cardiaca, es más efectivo
dihidropiridínico gasto cardíaco. y fiable que nitroprusiato, nitroglicerina y ni-
de tercera gene- cardipino.
ración
■ 204 ■
Aneurismas crónicos de la raíz aórtica y la aorta ascendente
Resultados a corto, medio y largo pla- te, pueden presentar deterioro del au-
zo.–La mortalidad a corto plazo se defi- toinjerto pulmonar, que actualmente
ne por el acrónimo MACE (mortalidad se puede reparar mediante un TAVI en
hospitalaria, infarto agudo de miocar- posición aórtica (101). Lo mismo con el
dio, ACV) (1, 35, 56). Las reintervenciones deterioro del homoinjerto pulmonar,
son más frecuentes entre los pacientes que puede ser reparado con un TAVI
que tienen una técnica de David o de derecho (102).
Yacoub, si falla la reparación o plastia
aórtica. Para evitar que el anillo valvu- Principales complicaciones en el se-
lar aórtico se dilate, una anuloplastia guimiento.–Las dehiscencias peripro-
debería impedirla (89). Si la principal tésicas, las insuficiencias valvulares
técnica de reparación de la insuficien- aórticas residuales o las nuevas y pro-
cia aórtica es solo la anuloplastia, ésta gresivas, los pseudoaneurimas del in-
a menudo puede fallar (90). Para evi- jerto tubular o en el implante de los os-
tar las reintervenciones ha de tenerse tia coronarios y las endocarditis sobre
en cuenta la profundidad de los senos la válvula o en la prótesis aórtica o bien
de Valsalva, la altura de las comisuras, sobre los injertos tubulares, precisarán
el área de coaptación de los velos, la en su mayoría una reintervención, con
rigidez o flexibilidad de los velos, las un riesgo quirúrgico elevado. En gene-
calcificaciones, las fenestraciones y el ral para estas reintervenciones se suele
diámetro de la unión sinotubular (91- preferir un homoinjerto para sustituir
93). Las fórmulas más empleadas para la válvula aórtica y/o la aorta. En caso
elegir el tamaño del tubo es la de me- de reintervención, la reesternotomía es
dir la altura de la comisura de la unión compleja, la disección del tubo de Da-
del seno coronariano izquierdo con el cron es difícil y en caso de homoinjer-
no coronariano, que nos define el diá- tos en posición aórtica, los autoinjertos
metro del tubo a emplear (61). La otra, pulmonares o los homoinjertos en po-
aún más simple, es la de elegir un tubo sición pulmonar, se pueden encontrar
de 32 cm para los varones y uno de calcificados (103). Los pseudoaneu-
28 cm para las mujeres, modificables rismas de las anastomosis proximal o
en función del tamaño del individuo distal del tubo de Dacron o en los ostia
y la experiencia del cirujano (61). Esto coronarios pueden obligar a entrar en
también es aplicable en VAB, donde la CEC antes de la esternotomía, o si he-
elección de la técnica puede condicio- mos hecho ésta ya, puede ser preciso
nar los resultados (94-98). Los reingre- para hacer la disección cardíaca de las
sos, la mejora de la clase funcional y de bridas, entrar en CEC e incluso realizar
la función miocárdica, las endocarditis una parada circulatoria en hipotermia
(bien en el tejido valvular o en el injerto profunda si tememos una rotura inmi-
tubular), las trombosis, embolias (ACV) nente (103).
y las hemorragias en nuestro medio
pueden consultarse en el excelente Recomendaciones al alta.–Tratamien-
trabajo de Forteza (99). to de la insuficiencia cardíaca postcar-
diotomía, hasta que ésta se recupere,
Para las operaciones con un bio-Ben- pudiendo precisar diuréticos y ARA II.
tall en el que la prótesis se deteriore El tratamiento para prevenir arritmias,
provocando insuficiencia o estenosis, siguiendo el protocolo pre y postopera-
cabe la posibilidad de utilizar un im- torio con amiodarona, lo mantenemos
plante de TAVI (en la variante de vál- por 10 días tras la cirugía. Actitud ante
vula en válvula) (100). Las operaciones la anticoagulación o antiagregación:
de Ross, poco empleadas actualmen- Si podemos salvar la válvula aórtica
■ 205 ■
Tratado de Patología Vascular
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Aneurismas crónicos de la raíz aórtica y la aorta ascendente
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SÍNDROME AÓRTICO AGUDO
Lourdes del Río Solá, Enrique San Norberto García y Carlos Vaquero Puerta
■ 213 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 214 ■
Síndrome aórtico agudo
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Tratado de Patología Vascular
■ 216 ■
Síndrome aórtico agudo
■ 217 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 218 ■
Síndrome aórtico agudo
■ 219 ■
Tratado de Patología Vascular
dolor o una falsa hipotensión por afec- primeras horas. El cambio en los sig-
tación de las arterias subclavias. nos clínicos puede alertar sobre la po-
sible extensión y progresión del canal
Es necesario realizar un estudio riguro- disecante (17).
so de los pulsos en las cuatro extremi-
dades ya que el 50 % de los pacientes
presentan una asimetría de los mismos. COMPLICACIONES DE LA DISECCIÓN
AGUDA
El soplo de regurgitación aórtica se ha
considerado un signo característico de Los principales riesgos de la disección
la disección aórtica aunque solo se pre- aórtica son la rotura y las complicacio-
sente en el 20 % de los pacientes. En la nes isquémicas. Ambas son habitual-
fase aguda, si la regurgitación es impor- mente letales, siendo la tasa de morta-
tante, la presión diastólica del ventrículo lidad en la fase aguda mayor del 30 %
izquierdo sube rápidamente, lo que da salvo que un tratamiento quirúrgico
lugar a un primer tono débil o ausente satisfactorio sea aplicado.
por cierre prematuro de la válvula mi-
tral y a un soplo diastólico corto. El soplo
Rotura
de Austin-Flint, si aparece, también es
corto. La existencia de un cuarto tono es
Aunque la adventicia es la capa más
poco frecuente debido a una elevación
resistente de la aorta, la incidencia de
importante de la presión telediastóli-
rotura de la falsa luz es elevada.
ca del ventrículo izquierdo. Excepto en
este contexto, la presencia de un cuar-
to tono es la norma. El soplo sistólico Los factores predisponentes para la ro-
aórtico raramente se da con thrill. Este tura incluyen una hipertensión arterial
aparece en pacientes con disección difícilmente controlable, flujo eleva-
de aorta ascendente y puede deberse do en la falsa luz, puerta de reentrada
a la formación de corrientes en forma inexistente o de pequeño calibre y un
de remolino por la especial disposición incremento del diámetro aórtico.
del colgajo o por estenosis supraaórti-
ca del canal verdadero. Los signos pe- La configuración habitual de la puerta
riféricos de insuficiencia aórtica grave de entrada y de reentrada explica por
suelen estar ausentes. La presencia de qué la mayoría de estas roturas ocu-
un soplo continuo indica la rotura de la rren en la cavidad pleural izquierda. Si
falsa luz al ventrículo derecho o a algu- se asocia rotura de la cavidad pleural,
na de las aurículas. Es preciso recordar se puede originar un masivo hemotó-
que el 10 % de los pacientes con disec- rax que desencadene el fallecimiento.
ción crónica de la aorta descendente La evolución es diferente cuando la ad-
tienen insuficiencia aórtica por dilata- venticia y la pleura se encuentran con-
ción del anillo aórtico secundario a la servadas y se produce un hemotórax
hipertensión arterial. En ocasiones pue- pequeño debido a la transudación.
de auscultarse un soplo en la región de
la columna vertebral o en el abdomen. La rotura también puede ocurrir den-
Cuando la disección se produce en un tro del mediastino, la cavidad pleural
aneurisma aórtico puede palparse una derecha, el espacio retroperitoneal o la
masa abdominal. cavidad peritoneal. Pero no es frecuen-
te la rotura dentro de la cavidad peri-
Es conveniente repetir la exploración cárdica, el esófago, el árbol traqueo-
física del paciente sobre todo en las bronquial y el pulmón.
■ 220 ■
Síndrome aórtico agudo
■ 221 ■
Tratado de Patología Vascular
Los datos de laboratorio son muy ines- Los signos radiográficos que apoyan
pecíficos. La creatinfosfocinasa es útil en la existencia de una disección aórtica
■ 222 ■
Síndrome aórtico agudo
Técnicas de imagen
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Tratado de Patología Vascular
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Síndrome aórtico agudo
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Tratado de Patología Vascular
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Síndrome aórtico agudo
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Tratado de Patología Vascular
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Síndrome aórtico agudo
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Tratado de Patología Vascular
Figuras 4 y 5.–Imagen angioTAC en 3D de paciente con disección aórtica tipo B tratada mediante tratamiento
endoluminal
■ 230 ■
Síndrome aórtico agudo
■ 231 ■
Tratado de Patología Vascular
En los pacientes hipertensos, el control [8] Vilacosta I, San Roman JA, Ferreiros J, Ara-
de la presión arterial dentro de unos lí- goncillo P, Méndez R, Castillo JA, et al. Natural
history and serial morphology of aortic intra-
mites normales es la forma más eficaz
mural hematoma: a novel variant of aortic dis-
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ca cuando el diámetro de ésta supera
[10] Nienaber C, Hans S. Intramural hematoma
los 6 cm. Otros la aconsejan cuando
in acute aortic syndrome: more than one va-
el diámetro es de 5 cm si se requiere riant of dissection. Circulation 2002; 106: 284-5.
sustitución valvular. En el síndrome
[11] Maraj R, Rerkpattanapipat P, Jacobs L,
de Marfan la presión arterial suele ser
Makornwattana P, Kother M. Meta-analysis of
normal y solo los betabloqueantes han 143 reported cases of aortic intramural hemato-
demostrado eficacia y se recomiendan ma. Am J Cardiol 2000; 86: 664-8.
su uso tanto en niños como en adoles-
[12] Nishigami K, Tsuchiya T, Shono H, Horibata
centes a las dosis más altas que pue- Y, Honda T. Disappearance of aortic intramural
dan tolerar. En estos pacientes la indi- hematoma and its significance to the progno-
cación quirúrgica se establece cuando sis. Circulation 2000; 102(Suppl III): III243-7.
el diámetro aórtico supera los 5 cm (17).
[13] Vilacosta I, San Román JA, Ferreirós J, Ara-
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HEMATOMA INTRAMURAL Y ÚLCERA AÓRTICA
PENETRANTE DE LA AORTA TORÁCICA
Alfredo Prego, Fernando Sciuto* y Martín Alvez
■ 235 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 236 ■
Hematoma intramural y úlcera aórtica penetrante de la aorta torácica
Es el procedimiento diagnóstico de
elección también para el seguimiento
de estas lesiones.
Angiografía (Fig. 2)
IVUS
Fig. 3.–Tomografía computada que muestra un hema-
toma intramural en la aorta descendente
El ultrasonido endovascular (IVUS) se
utiliza rutinariamente en algunos cen-
tros hospitalarios durante el implante Resonancia Magnética
de endoprótesis aórticas torácicas (TE-
VAR), pero no tiene un lugar estableci- La RM tiene también una sensibilidad
do en el diagnóstico (12). y especificidad cercana al 100 % en el
diagnóstico positivo, teniendo además
Tomografía Computada la ventaja de brindar información diná-
mica (16, 17).
Es el estudio imagenológico utilizado
con mayor frecuencia y para muchos No utiliza radiación ionizante ni necesi-
el «gold standard» con quien comparar ta contraste iodado.
las otras técnicas alternativas.
Recientes estudios muestran que el
La preferencia por este estudio se Gadolinio utilizado como contraste,
debe a la aparición de los nuevos equi- ha provocado reacciones cutáneas en
pos multicorte (64 hileras de detecto- ocasiones irreversibles en pacientes
res) que permiten reconstrucciones con insuficiencia renal.
■ 237 ■
Tratado de Patología Vascular
La real incidencia del HIM es desconoci- El dolor en la cara anterior del tórax, el
da. La misma varía según en los diferentes cuello y en la mandíbula se relaciona
■ 238 ■
Hematoma intramural y úlcera aórtica penetrante de la aorta torácica
con la participación de la aorta ascen- Las posibles evoluciones del HIM son
dente, mientras que el dolor dorsal y (24):
abdominal más a menudo indica afec-
tación de la aorta torácica descendente. 1. Progresión:
• A la disección con la aparición de
En los casos de dolor típico del SAA, ha la doble luz (28-47 %) y eventuales
sido llamado «dolor aórtico», para dife- complicaciones de la misma (20)
renciarlo del dolor provocado por la in- • Formación precoz de aneurismas
suficiencia coronaria que generalmen- • Rotura contenida (20)
te tiene una cadencia diferente (23). o Se consideran factores predictores
de progresión de los HIM (24):
Los síntomas de los HIM son muy simi- • Dolor persistente o recurrente
lares a los de la disección aórtica, pero (con tratamiento médico)
el riesgo de agregar un sindrome de • Presencia concomitante de
malperfusión (cerebral, mesentérico, UAP
renal o MMII) es menor; por lo que las • Diámetro aórtico > 50 mm
manifestaciones clínicas de dichas is- • Grosor del hematoma > 10-
quemias estarán ausentes y los pulsos 12 mm
distales presentes (24).
2. Estables sin reabsorción completa
Las complicaciones cardíacas (regur- del hematoma
gitación aórtica) son también menos
frecuentes que en la disección aórtica. 3. Reabsorción espontánea completa
con tratamiento médico (10 %) (26, 27)
El ECG es normal en el 45,6 % en los pa-
cientes con HIM. Estos hechos evidencian que el hema-
toma intramural es una patología con
El derrame pleural en la etapa aguda, una historia natural diferente a la di-
puede verse en un 40-50 % de los casos sección aórtica.
y puede ser seroso o hemorrágicos (25).
La evolución de los HIM en la fase agu-
La sospecha clínica precoz del sindro- da es muy dinámica, el sangrado puede
me aórtico agudo y su confirmación detenerse en la capa media o provocar
diagnóstica mediante la solicitud de la disrupción de la íntima y transfor-
estudios imagenológicos son de vital marse en una disección aórtica, como
importancia para el pronóstico del fue mencionado anteriormente.
paciente.
Esta progresión puede verse pocas ho-
Historia natural del HIM ras luego de su presentación clínica o
meses después, y es por esta razón que
Muchas de las controversias en el ma- el HIM es considerado un precursor de
nejo terapéutico del HIM se deben a un la disección aórtica clásica.
incompleto conocimiento de su histo-
ria natural. Diagnóstico imagenológico
■ 239 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 240 ■
Hematoma intramural y úlcera aórtica penetrante de la aorta torácica
■ 241 ■
Tratado de Patología Vascular
b) Seguimiento
Definición
■ 242 ■
Hematoma intramural y úlcera aórtica penetrante de la aorta torácica
■ 243 ■
Tratado de Patología Vascular
1. Clínicos
o Dolor refractario y recurrente
o Aumento del derrame pleural
2. Tomográficos
• Aumento del diámetro aórtico (>
50 mm)
• Aumento de diámetro de la úlcera
(> 20 mm)
• Profundidad de la úlcera > de
10 mm
• Hematoma periaórtico
• Rápido crecimiento de un seudo-
Fig. 11.–Asociación de UAP (flecha) con HIM (cabeza
aneurisma
de flecha)
Diagnóstico imagenológico
■ 244 ■
Hematoma intramural y úlcera aórtica penetrante de la aorta torácica
■ 245 ■
Tratado de Patología Vascular
Dado que estos pacientes suelen ser Con este plan terapéutico un número
añosos con múltiples factores de ries- significativo de pacientes (20 % aproxi-
go asociados, el tratamiento quirúrgico madamente) requerirán cirugía dentro
de las lesiones tipo B, continúa una alta del primer año del inicio del cuadro (39),
morbi-mortalidad a pesar del progreso generalmente debido a la transforma-
de las técnicas anestésico-quirúrgicas ción en una disección aórtica clásica.
y a los cuidados postoperatorios.
Si bien es claro que la mortalidad en los
Según algunos autores (30, 37), la mor- HIM tipo A es menor que en la disección
talidad oscila entre el 8-28 % y la mor- clásica, los pacientes que presentan ines-
bilidad grave entre el 30-60 %, con una tabilidad hemodinámica, hematoma pe-
tasa de paraplejía de hasta el 15 %. riaórtico, signos imagenológicos de rotu-
ra inminente o taponamiento cardíaco
3. Endovascular (TEVAR) deben ser operados de urgencia.
■ 246 ■
Hematoma intramural y úlcera aórtica penetrante de la aorta torácica
■ 247 ■
Tratado de Patología Vascular
Existen múltiples trabajos que con- La mortalidad de los HIM tipo A es alta
firman los buenos resultados del im- tanto con tratamiento médico como
plante de una endoprótesis torácica, con el quirúrgico.
en la mayoría de los casos se utiliza un
solo módulo (37, 47). El porcentaje de En la UAP tipo A existe consenso gene-
éxito técnico se encuentra entre el 95- ral en realizar el tratamiento quirúrgico
100 %, con una tasa de paraplejía cer- urgente por el alto riesgo de rotura.
cana a 0 % para la mayoría de los au-
tores. En el seguimiento a largo plazo, En la UAP tipo B no complicada se inicia-
por el contrario, todos los autores han rá el tratamiento médico y solamente en
■ 248 ■
Hematoma intramural y úlcera aórtica penetrante de la aorta torácica
A pesar de los avances de las técni- [12] Wei H et al. Potential interest of intra-aorta
cas diagnósticas imagenológicas en ultrasound imaging for the diagnosis of aortic
los últimos años (especialmente la penetrating atherosclerotic ulcer. The Interna-
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22: 653-656.
temprano de un mayor número de ca-
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■ 250 ■
DISECCIÓN AÓRTICA
Enrique M. San Norberto, Noelia Cenizo, Álvaro Revilla y Carlos Vaquero
Tabla I.–Mortalidad de la disección aórtica aguda en las primeras horas hasta la instauración de tratamiento.
■ 251 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 252 ■
Disección aórtica
■ 253 ■
Tratado de Patología Vascular
aorta afectada incluye tanto a las zonas una disección aórtica, algunos de ellos
con luz falsa permeable o trombosada, también influyen en la morbi-mortali-
asín como al hematoma intramural. Por dad a corto y largo plazo así como en la
ejemplo, una disección A10 se refiere a toma de decisiones (7, 8):
una disección cuya puerta de entrada
se sitúa en aorta ascendente y que se • Hipertensión: presente entre el 70 %
extiende hasta las arterias ilíacas comu- y 81 % de los pacientes que presentan
nes. Las disecciones tipo B incluyen a una disección aórtica aguda tipo B.
cualquier disección con una puerta de • Alteraciones genéticas: enfermedades
entrada en o distal a la zona 1. Además del tejido conectivo como son el Síndro-
se caracterizan por dos subgrupos el «p» me de Marfan, el Síndrome de Loeys-
que describe la zona aórtica afectada Dietz y el Síndrome de Ehlers-Danlos.
proximalmente y el «d» que describe a • Anomalías congénitas: como son la
la zona distal. Además, la disección tipo válvula aórtica bicúspide, la coartación
B también incluye a aquella con afecta- de aorta o el divertículo de Kommerell.
ción de la aorta ascendente, designada • Úlcera aórtica penetrante.
como B0,d, en la cual la puerta de entrada • Traumatismo: incluyendo ruptu-
se origina en las zonas 1 a 9 y se extiende ra intimal, hematoma intramural,
proximalmente a la zona 0. Si no se iden- pseudoaneurisma o ruptura aórtica.
tifica la puerta de entrada, la disección También se han descrito disecciones
se denomina indeterminada o «I». Los aórticas iatrogénicas tras cirugía car-
pacientes con una historia previa de di- díaca, TEVAR y otros procedimientos
sección tipo A o B tratada o no, que pre- endovasculares aórticos.
sentan una nueva disección aguda, de- • Drogas ilícitas: cocaína, anfetamina,
berían denominarse según la disección metanfetamina, MDMA (éxtasis).
actual y el calificativo de «residual». • Etnia: la disección tipo B es más fre-
cuente en afro-americamos que la
En cuanto a la cronicidad las diseccio- disección tipo A, la cual es predomi-
nes (tanto A como B) se clasifican en nante en otras etnias.
agudas (< 14 días) y crónicas (> 14 días).
Dicha clasificación se basa en la obser- Tradicionalmente los aneurismas de aor-
vación de Hirst y colaboradores en 1958 ta torácica y la disección aórtica se divi-
(6), en que la mortalidad disminuía sig- den en sindrómicos o no sindrómicos
nificativamente tras esos 14 días de evo- según la presencia o ausencia de anor-
lución. Durante los últimos años, y es- malidades a nivel de otros órganos. Los
pecialmente desde la introducción del casos sindrómicos son los causados por
tratamiento endovascular de esta pato- las alteraciones genéticas previamente
logía, se ha descrito una nueva fase su- citadas y poseen peor pronóstico. Los ca-
baguda que se define entre 15 y 90 días. sos no sindrómicos son más prevalentes
De tal forma, se describen actualmente y en hasta un 20 % de estos casos existe
4 fases dependiendo del tiempo desde una afectación familiar, que hace sospe-
el comienzo de los síntomas: hiperagu- char una posible etiopatogenia genética,
da (<24 horas), aguda (1-15 días), suba- en la que se han relacionado los genes
guda (15-90 días) y crónica (> 90 días). ACTA 2, MYLK, MYH11 y PRKG1 (9).
ETIOLOGÍA CLÍNICA
■ 254 ■
Disección aórtica
– Bypass aorto-carotídeo.
Subclavia – Retrasos de onda de pulso. – Bypass carótido-subclavio.
– Bypass arterial.
■ 255 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 256 ■
Disección aórtica
Tabla III.–Factores asociados a crecimiento aórtico y necesidad de intervención a largo plazo en disecciones aórticas
tipo B no complicadas
■ 257 ■
Tratado de Patología Vascular
Tabla IV.–Indicaciones para tratamiento quirúrgico abierto o endovascular de la disección aórtica aguda tipo B y del
hematoma intramural agudo
– Dolor persistente más allá de 5 días. – Progresión a disección aórtica f ranca duran-
te seguimiento estrecho (1 semana, 1 mes,
3 meses).
– Diámetro aórtico total > 44 mm.
■ 258 ■
Disección aórtica
■ 259 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 260 ■
Disección aórtica
– En caso de precisar la cobertura del En 2020 Hossack et al. (20), publica-
origen de la arteria subclavia se reco- ron un meta-análisis sobre el trata-
mienda la realización de un bypass miento médico o endovascular de las
carótido-subclavio con el objetivo de disecciones tipo B agudas o subagu-
disminuir el riesgo de ictus e isque- das no complicadas. En dicho estudio
mia medular. incluyeron datos de 14706 pacientes
(1066 TEVAR). A pesar de diversas li-
Tratamiento médico vs endovascular mitaciones metodológicas relacio-
de la disección aórtica aguda nadas principalmente con la división
y subaguda tipo B entre disección aguda y subaguda de
los estudios incluidos, no se encon-
El tratamiento de las disecciones aór- traron diferencias en mortalidad o
ticas tipo B no complicadas ha sido reintervención tempranas, mientras
tradicionalmente médico mediante que la mortalidad tardía fue signifi-
antihipertensivos y opioides. No obs- cativamente mayor en el grupo trata-
tante, se ha demostrado que existen do mediante TEVAR (HR 1.54, 95 % CI
un gran porcentaje de pacientes que 1.27-1.86, p < 0.001). Por lo tanto, en la
desarrollan complicaciones a medio y actualidad, no está completamente
largo plazo. Por su parte, con el avan- dilucidado el papel del tratamiento
ce del tratamiento endovascular de la endovascular de la disección aórtica
aorta torácica (TEVAR), se han publica- tipo B no complicada.
do excelentes resultados en cuanto a
la aparición de posibles complicacio-
nes y la remodelación aórtica. Existen ANEURISMAS POSTDISECCIÓN CRÓNICA
dos estudios randomizados que han
investigado los beneficios del TEVAR Una de las posibles complicaciones de
en el tratamiento de las disecciones los pacientes que sobreviven a la pre-
aórticas tipo B no complicadas: el es- sentación aguda de una disección aór-
tudio ADSORB y el INSTEAD. El estudio tica sin precisar intervención quirúrgi-
ADSORB incluyó pacientes con disec- ca es la dilatación a largo plazo de la
ción aguda (< 14 días) con seguimiento porción de aorta disecada y su ruptura.
a un año pero no encontró un benefi- En general, esos aneurismas afectan a
cio clínico significativo de TEVAR. Por pacientes más jóvenes que los aneu-
su parte el INSTEAD incluyó pacientes rismas degenerativos ateroscleróticos
con disección aórtica tipo B no compli- típicos. Además, el grupo de sujetos
cada, excluyendo a aquellos que desa- con aneurismas post-disección se ca-
rrollaron complicaciones en los prime- racterizan por factores de riesgo como
ros 14 días. Dicho estudio encontró al son la hipertensión, la válvula aórtica
seguimiento a 5 años una reducción bicúspide, la coartación de aorta o las
significativa del tratamiento mediante enfermedades de tejido conectivo.
TEVAR de la mortalidad específica rela-
cionada con la aorta, comparada con el Más del 30 % de las disecciones cróni-
mejor tratamiento médico disponible. cas que afectan a la aorta descenden-
De tal forma la guía práctica de la ESVS te y/o a la aorta abdominal progresan
del 2017 considera que el tratamiento a una degeneración aneurismática de
mediante TEVAR puede ser considera- la luz falsa, hasta diámetros que justifi-
do en la fase subaguda o crónica de la can intervención quirúrgica como son
disección aórtica tipo B no complicada diámetros de aorta > 55 mm o a 60 mm
para prevenir futuras complicaciones, y/o crecimiento rápido, definido como
con una evidencia clase IIa nivel B (4). > 10 mm en 12 meses (2-4).
■ 261 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 262 ■
Disección aórtica
La disección aórtica tipo A es una pa- [5] Li HL, Wu S, Chan YC, Cheng SW, Guo W,
tología muy grave con una mortalidad Xiong J. Early and mid-term mortality and mor-
bidity of contemporary international endovas-
quirúrgica aproximada del 20 %. En la
cular treatment for type B aortic dissection – A
fase aguda, los pacientes están expues- systematic review and meta-analysis. Int J Car-
tos a una mortalidad elevada que se diol. 2020; 301: 56-61.
estima que aumenta un 1 % cada hora
[6] Hirst AE Jr, Johns VJ Jr, Kime SW Jr. Dis-
que pasa desde la aparición de los sín- secting aneurysm of the aorta: a review of 505
tomas (24-26). En la actualidad el trata- cases. Medicine (Baltimore). 1958; 37: 217-279.
miento de elección es la cirugía abierta,
[7] Bossone E, Czerny M, Lerakis S, Rodrígue-
aunque existe un 10 % de pacientes que z-Paloares J, Kukar N, Ranieri B, et al. Imaging
no son subsidarios de dicho tipo de ci- and biomarkers in acute aortic syndromes:
rugía por su riesgo prohibitivo. En dicho diagnostic and prognostic implications. Curr
subgrupo de pacientes, el tratamiento Probl Cardiol. 2020; 00: 100654.
endovascular se ha ido convirtiendo en [8] Harky A, Singh VP, Khan D, Sajid MM, Ker-
los últimos años en una opción. En una mali M, Othman A. Factor affecting outcomes
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que consideró 31 artículos con un total review. Heart, lung and Circulation. 2020; 29:
de 92 pacientes, la mortalidad a 30 días 1668-81.
fue únicamente del 9 % (27). No obstan- [9] Ostberg NP, Zafar MA, Ziganshin BA, Elef-
te, la aparición de ictus fue del 6 % y de teriades JA. The genetics of thoracic aortic an-
endofugas del 18 %, con una necesidad eurysms and dissection: A clinical perspective.
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de reintervención del 15 %. La gran limi-
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COARTACIÓN DE AORTA
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INTRODUCCIÓN EPIDEMIOLOGÍA
■ 265 ■
Tratado de Patología Vascular
DIAGNÓSTICO
Fig. 1.–Reconstrucción tridimensional de una estudio Fig. 3.–Circulación colateral generada e inducida por
angioTAC de una coartación de aorta la coartación de aorta
■ 266 ■
Coartación de aorta
Fig. 4.–Tratamiento quirúrgico con interposición protésica en el tratamiento abierto de la coartación de aorta en un adulto
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CIRUGÍA DE LA CARÓTIDA. ENFERMEDAD OCLUSIVA
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Seguro Social. Universidad de Costa Rica, San José, Costa Rica.
*Servicio Vascular Periférico, Hospital de México, Caja Costarricense Seguro Social.
Universidad de San José, Costa Rica
■ 269 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 270 ■
Cirugía de la carótida. Enfermedad oclusiva
DIAGNÓSTICO
Figura 3.–AngioTAC de cuello, con reconstrucción 3D,
muestra arterias carótidas y su relación anatómica
Ultrasonido Dúplex
■ 271 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 272 ■
Cirugía de la carótida. Enfermedad oclusiva
■ 273 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 274 ■
Cirugía de la carótida. Enfermedad oclusiva
Tipo de anestesia
■ 275 ■
Tratado de Patología Vascular
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Cirugía de la carótida. Enfermedad oclusiva
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Tratado de Patología Vascular
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ENFERMEDAD DE LOS TRONCOS SUPRAAÓRTICOS
PROXIMALES: TRATAMIENTO QUIRÚRGICO ABIERTO
Lourdes del Río Solá, Diana Gutiérrez Castillo, Laura Saiz Villoria
y Carlos Vaquero Puerta
■ 283 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 284 ■
Enfermedad de los troncos supraaórticos proximales: tratamiento quirúrgico abierto
■ 285 ■
Tratado de Patología Vascular
REVASCULARIZACIÓN
La revascularización transtorácica es
preferible para los pacientes con en-
fermedad multivaso y un riesgo qui-
rúrgico razonable. Los aneurismas
proximales y las lesiones traumáti-
cas también se tratan mejor con un
bypass desde la aorta ascendente a las
arterias braquiocefálicas implicadas,
especialmente cuando no son anató-
micamente adecuadas para la repa-
ración endovascular. Las infecciones
que afectan a las arterias innominada
y carótida común proximal pueden
Figura 1.–Enfoque técnico de la revascularización
ser tratadas mediante esternotomía
transtorácica. (A) Creación de un bypass aorto-in-
media y resección con revasculariza- nominado. (B) Injerto de derivación lateral a la arteria
ción posterior. carótida izquierda. (C) Injerto de derivación lateral a
la arteria subclavia izquierda
Revascularización transtorácica
■ 286 ■
Enfermedad de los troncos supraaórticos proximales: tratamiento quirúrgico abierto
■ 287 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 288 ■
Enfermedad de los troncos supraaórticos proximales: tratamiento quirúrgico abierto
Bypass carotídeo-carotídeo
■ 289 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 290 ■
Enfermedad de los troncos supraaórticos proximales: tratamiento quirúrgico abierto
de los orígenes de los vasos. La causa puede permitir a menudo una planifica-
más común de estenosis del arco vas- ción completa del procedimiento antes
cular es la aterosclerosis, pero incluso de realizar la angiografía convencional.
esto ocurre con relativa poca frecuen-
cia. En las evaluaciones de la enferme- Arteriografía
dad oclusiva de la bifurcación carotídea,
La angiografía suele realizarse como
solo entre el 5 % y el 15 % de los pacien-
parte de la intervención terapéutica
tes presentan una enfermedad conco-
para tratar la enfermedad identificada.
mitante en los vasos del arco [16].
Hay que ser cuidadoso a la hora de rea-
lizarla debido a la existencia de placas
Otras causas menos frecuentes de en-
de ateroma que se pueden desprender
fermedad del arco aórtico incluyen la
y provocar una embolia cerebral.
arteritis de Takayasu, la lesión inducida
por la radiación, el aneurisma y la di-
La imagen del arco se realiza mejor en
sección.
una proyección oblicua anterior izquier-
da para «abrir» el arco en la pantalla de
Estudios de imagen
imagen, mientras que el catéter de la-
vado se coloca mejor proximalmente
Ecografía dúplex
al origen de la arteria innominada. A
La ecografía de los vasos del arco aórti- menudo es útil girar el brazo de adqui-
co suele ser la modalidad de diagnós- sición de imágenes con un cable en el
tico por imagen inicial. Podemos estu- catéter colocado a través del arco para
diar el grado de estenosis, así como la permitir la optimización del plano de
existencia de calcificación arterial. Sin imagen para la máxima visualización.
embargo, se precisan otras técnicas de Las imágenes obtenidas de la aorto-
imagen para plantear el tratamiento grafía se utilizan para ayudar a identi-
endovascular. ficar los orígenes de los vasos, el grado
de estenosis de los mismos y el tipo de
Angiografía por tomografía catéter o guía que puede ser necesario
computarizada y resonancia para canular y obtener imágenes de
magnética los vasos individuales del arco.
Los métodos más utilizados para eva-
La imagen angiográfica de la bifurca-
luar la anatomía del arco aórtico son la
ción de la arteria innominada se realiza
angiografía por tomografía computa-
mejor en una proyección oblicua an-
rizada (CTA) y la angiografía por reso-
terior derecha de aproximadamente
nancia magnética (ARM), junto con la
20 grados con un catéter selectivo co-
angiografía estándar. Las modalidades
locado en la arteria innominada proxi-
de imagen axial tienen la ventaja de evi-
mal. Esta orientación suele separar al
tar la manipulación de catéteres dentro
máximo los orígenes de las ramas de
del arco aórtico y sus posibles compli-
la arteria innominada, lo que permite
caciones; pueden detectar tanto la en-
una evaluación individual de los oríge-
fermedad aneurismática como la ate-
nes de la carótida común derecha y la
rosclerosis. También puede estudiar la
arteria subclavia.
circulación intracraneal. En la mayoría de
los casos, las imágenes de origen pue-
Ecocardiografía transesofágica
den reconstruirse en imagen 3D del arco
aórtico y sus ramas para permitir una ex- La ecocardiografía transesofágica pue-
celente visualización de la anatomía. La de utilizarse para obtener imágenes
información obtenida de estos estudios del arco aórtico. Esta modalidad de
■ 291 ■
Tratado de Patología Vascular
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Enfermedad de los troncos supraaórticos proximales: tratamiento quirúrgico abierto
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Tratado de Patología Vascular
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Enfermedad de los troncos supraaórticos proximales: tratamiento quirúrgico abierto
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Enfermedad de los troncos supraaórticos proximales: tratamiento quirúrgico abierto
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Tratado de Patología Vascular
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Enfermedad de los troncos supraaórticos proximales: tratamiento quirúrgico abierto
Tras la intervención es importante man- [4] Frykberg ER, Crump JM, Dennis JW, Vines
FS, Alexander RH. Nonoperative observation of
tener un seguimiento continuo. Estos
clinically occult arterial injuries: a prospective
pacientes tienen un riesgo del 15 % al evaluation. Surgery. 1991; 109:85-96.
25 % de riesgo de estenosis recurrente
[5] Charlton-Ouw KM, Azizzadeh A, Sandhu
en los primeros 3 a 5 años, y aproxima-
HK, et al. Management of common carotid ar-
damente la mitad de estas recidivas tery dissection due to extension from acute
son sintomáticas. El seguimiento debe type A (DeBakey I) aortic dissection. J Vasc Surg.
consistir en una evaluación en la con- 2013.
sulta externa realizando una explora- [6] Criado E, Berguer R, Greenfield L. The
ción física que incluya la determinación spectrum of arterial compression at the thorac-
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SÍNDROME DEL ROBO DE LA SUBCLAVIA
Sergio Benites Palacio e Isidoro Barrios Cedrún
Servicio de Angiología y Cirugía Vascular del Hospital Español. Ciudad de Mexico. Mexico
■ 301 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 302 ■
Síndrome del robo de la subclavia
Ultrasonido Doppler
■ 303 ■
Tratado de Patología Vascular
Tabla 1
ESTADÍOS DEL SÍNDROME DE ROBO DE LA SUBCLAVIA Y EL FLUJO VERTEBRAL (34)
Etapa Categoría Doppler A. Vertebral
Etapa 1 «Pre-robo de Subclavia» Desaceleración sistólica
■ 304 ■
Síndrome del robo de la subclavia
Tabla 2
PATRONES DE FLUJO CEREBRAL EN ROBO DE LA SUBCLAVIA (10)
Patrones de Flujo Sanguíneo Síntomas
Compensación vertebro-basilar es adecuada Ninguno
• Flujo invertido en arteria vertebral ipsilateral
• Flujo proveniente de la a. Vertebral contralateral
• Flujo en arteria basilar sin cambios
• Flujo a través de a. Carótida ó Polígono de Willis sin cambios
Compensación en A. Vertebral y Basilar es suficiente Ninguno
• US demuestra alteraciones en el flujo de a. Basilar
o Turbulencia
o Baja velocidad
o Flujo invertido
• Aumento del flujo en a. Carótida interna
• Polígono de Willis con calibre y patrón normal
Flujo Vertebral, Basilar y Colateral de la carótida por Polígono de Síntomas
vertebro-
Willis es suficiente para compensar
basilares
• La a. Carótida interna compensa brazo x Polígono Willis a través de la a. Basilar y
vertebral.
• Flujo en a. Basilar y Vertebral es inverso
Flujo Vertebral, Basilar y Colateral insuficiente Síncope
• Flujo cerebral es generalmente disminuido
• Flujo en a. Basilar invertido
• Existen anormalidades vasculares cerebrales
o Estenosis de a. Vertebral
o Estenosis u obstrucción de a. Carótida interna
o Anomalías congénitas de a. Vertebral o Basilar
■ 305 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 306 ■
Síndrome del robo de la subclavia
a largo plazo que oscilan entre 80 % y realizar un doppler carotídeo, sobreto-
90 % (48-51). Sin embargo, la angioplas- do, cuando se registre en el paciente
tia sola se va a asociar con un elevado una diferencia entre la presión arterial
índice de recurrencia (20 % durante los de ambos brazos mayor a 20 mmHg.
primeros 5 años), con un éxito técnico El diagnóstico definitivo se determi-
inicial entre el 80 % y 100 % para obs- nará tras realizar una angiografía o
trucciones mayores al 50 %, y con un angioresonancia magnética.
riesgo de embolización cerebral del 1 %
(52). En caso de identificar algún pacien-
te con esta patología, será necesario
Aunque la colocación de un stent ha descartar la presencia de enfermedad
demostrado mejorar los resultados de carotídea concomitante; ya que de ser
una angioplastia sola, no ha sido supe- así, se deberá prevenir un accidente
rior si se compara con los procedimien- vascular cerebral mediante el inicio de
tos quirúrgicos. En un estudio realizado antiagregantes plaquetarios o endar-
por el Dr. AbuRahma y colaboradores terectomía carotídea dependiendo de
(53), que comparaban la permeabili- su grado de obstrucción. Además, este
dad de la cirugía contra la angioplastia procedimiento también va a ayudar a
con stent, demostraron una diferen- mejorar la perfusión cerebral.
cia significativa en la permeabilidad a
largo plazo a favor a la derivación ca- En la actualidad, tanto la terapia endo-
rótido-subclavia, mientras que a corto vascular (angioplastia y colocación de
y mediano plazo, los resultados eran stent), como la reparación quirúrgica
muy similares. Las permeabilidades a 1, mediante una derivación extranatómi-
3 y 5 años fueron 93 %, 78 % y 70 % para ca, son ampliamente aceptadas como
el grupo endovascular y 100 %, 98 % y alternativas de tratamiento. Así mismo,
96 % para el grupo quirúrgico, respec- es esencial conseguir la modificación
tivamente. de los factores de riesgo (dejar de fu-
mar, controlar la hipertensión, diabe-
Sin embargo, en la actualidad, la te- tes e hipercolesterolemia).
rapia endovascular es considerada de
primera elección para el SRS, debido
a un menor índice de complicaciones,
BIBLIOGRAFÍA
una corta estancia hospitalaria y resul-
tados favorables. Además, en caso de [1] Contorni L: Il circolo collaterale vertebrale
presentarse una estenosis intra-stent, nelle obliterazione dellarteria succlavia alla sua
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CIRUGÍA DE LA ARTERIA VERTEBRAL
José Miguel Martín Pedrosa, José Antonio Brizuela, Álvaro Revilla Calavia,
Enrique María San Norberto García y Carlos Vaquero Puerta
■ 311 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 312 ■
Cirugía de la arteria vertebral
Pico (PSV) > 2.2 ha sido validada como reemplazado por estudios de imagen no
el criterio óptimo para el diagnóstico invasivos, especialmente la Angio-RNM
de una estenosis de la arteria verte- y el Angio-TAC. Ambas pruebas permi-
bral proximal ≥ 50 %, con una sensibi- ten la visualización completa del siste-
lidad y especificidad del 96 % y 89 %, ma vertebrobasilar, de este modo de-
respectivamente (10). Más allá del gra- tectan simultáneamente lesiones de la
do de estenosis, si el diámetro de la ar- arteria vertebral intra y extracraneal y
teria vertebral difiere > 25 %, se consi- estenosis de la arteria basilar (6). En un
deran no simétricas (11). Hipoplasia en estudio comparativo entre Angio-TAC,
el segmento V2 intravertebral, se defi- Angio-RNM y eco doppler, frente a la ar-
ne como un diámetro ≤ 2.5 mm y una teriografía, el Angio-TAC y la Angio-RNM
disminución significativa en la veloci- tuvieron una más elevada sensibilidad
dad del flujo, comparado con la arteria y especificidad y fueron mejores que el
vertebral contralateral y un incremen- eco-doppler a la hora de valorar las arte-
to > 0.85 en el índice de resistencia al rias vertebrales (10) (Fig. 2).
flujo ipsilateral (12).
Por lo tanto la Sociedad Europea de
Históricamente, la arteriografía fue el Cirugía Vascular, recomienda el uso
«gold standard» para el diagnótico de del eco-doppler como primera prue-
la enfermedad arteriosclerótica de la ba diagnóstica en paciente con sospe-
arteria vertebral. Sin embargo, se tra- cha de patología vertebrobasilar, pero
ta de una prueba no exenta de riesgo se debe utilizar el Angio-TAC o la An-
de provocar un ACV, por lo que se ha gio-RNM antes de decidirse a realizar
una intervención quirúrgica (13).
PREVENCIÓN SECUNDARIA
EN PACIENTES ASINTOMÁTICOS
Antiagregantes plaquetarios
■ 313 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 314 ■
Cirugía de la arteria vertebral
menos 4 semanas después del procedi- más benigno que los carotídeos. En con-
miento y después continuar con terapia secuencia, los pacientes eran estudia-
antiagregante indefinida como preven- dos de forma menos rigurosa y no siem-
ción secundaria. La doble antiagrega- pre recibían una adecuada prevención
ción con aspirina y clopidogrel a largo secundaria. Sin embargo, las evidencias
plazo, no se recomienda en pacientes recientes, sugieren que las estenosis de
tras intervención quirúrgica endovas- la arteria vertebral están asociadas con
cular o abierta de la arteria vertebral, a unas tasas más elevadas de accidente
no ser que tenga indicación cardiológi- cerebrovascular de recurrencia tempra-
ca. La protección con pantoprazol debe na y con un riesgo similar o peor que la
ser considerada en los pacientes que enfermedad carotídea. Las evidencias
toman clopidogrel y tienen uno o más sugieren que el riesgo a los 90 días, de
factores de riesgo que incrementan el recurrencia de ACV es del 7 % en pacien-
sangrado gastrointestinal, como son tes sin estenosis de la arteria vertebral,
sangrados previos, pacientes de edad del 16 % en pacientes con estenosis ex-
avanzada, infección por Helicobacter tracraneal de la arteria vertebral y del
pylori, uso concomitante de aspirina o 33 % en aquellos con estenosis de la ver-
aines, anticoagulantes inhibidores de la tebral intracraneal o de la arteria basilar
serotonina y esteroides (13). (15).
■ 315 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 316 ■
Cirugía de la arteria vertebral
arteria vertebral distal, así como la una mortalidad del 0.3 % y una tasa
transposición de la arteria vertebral de ACV perioperatorio del 1.3 %. Existe
distal en la arteria carótida interna. una baja tasa de ACV recurrente anual
0.6 %, aunque se observó una tasa de
Segmento V4 reestenosis del 25 %. En cambio, la an-
gioplastia o stent de la arteria vertebral
Incluye la porción intracraneal e intra- distal estuvo asociada con una alta
dural de la arteria vertebral que co- morbilidad (10.6 % en stent, 7.1 % en an-
mienza en la membrana atlantoocci- gioplastia), con tasas de mortalidad del
pital y termina como las dos arterias 3.2 % y 3.7 %, respectivamente (23).
vertebrales emparejadas que conver-
gen para formar la artéria basilar. En una revisión sistemática, de 1000 pa-
cientes tratados con stent en la arteria
La exposición quirúrgica en el segmen- vertebral extracraneal, se objetiva un
to suboccipital requiere la resección de riesgo de ACV periprocedimiento del
la apófisis transversa de C1 y parte de 1.1 % (24). Sin embargo, se observaron
su arco posterior. La reconstrucción a altas tasas de restenosis (25-30 %) en el
este nivel se limita al bypass con vena stent del origen de la arteria vertebral.
safena desde la arteria carótida inter- También se observó en esta revisión
na distal. Esta cirugía es tecnicamente que los stents liberadores de drogas
exigente y se ha requerido en tan solo (DES) se asociaron con una tasa baja de
el 4 % de los casos de reconstrucción restenosis, comparados con los stents
de la arteria vertebral distal. de metal (BMS) (11 % vs . 30 %) tras un
seguimiento de 24 meses (23), aunque
Los únicos datos disponibles de resul- no en todas las series se observo esta
tados de la cirugía reconstructiva, pro- asociación (25, 26). Los datos disponi-
vienen de estudios no controlados, no bles sugieren que las intervenciones
randomizados, por tanto se trata de sobre estenosis de la arteria vertebral
casos clínicos publicados con resulta- intracraneal se asocian con un mayor
dos favorables. Estos publican tasas de riesgo durante el procedimiento que
complicación temprana de 2,5-25 % en las lesiones extracraneales.
reconstrucciones de la arteria verte-
bral, con tasas de mortalidad periope- Existen pocos ensayos clínicos rando-
ratoria de 0-4 % y tasas de mortalidad mizados. CAVATAS randomiza 16 pa-
del 2-8 % para reconstrucciones dista- cientes con estenosis sintomática de
les de la vertebral (19-22). la arteria vertebral tratados mediante
angioplastia o BMT (Best Medical The-
rapy: Optimo Tratamiento Médico) (16).
TRATAMIENTO ENDOVASCULAR Ninguno desarrollo recurrencia de los
DE LA ARTERIA VERTEBRAL síntomas, pero muchos de los pacien-
tes fueron reclutados tras meses del
Stenting vs tratamiento médico último ACV.
■ 317 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 318 ■
Cirugía de la arteria vertebral
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Tratado de Patología Vascular
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Cirugía de la arteria vertebral
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PATOLOGÍA OCLUSIVA DEL SECTOR AORTO-ILÍACO
Luis Fernando Flota
■ 323 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 324 ■
Patología oclusiva del sector aorto-ilíaco
■ 325 ■
Tratado de Patología Vascular
AngioTAC Arteriografía
■ 326 ■
Patología oclusiva del sector aorto-ilíaco
o para valorar otras posibilidades te- A nivel del tronco celíaco: origen de ar-
rapéuticas, principalmente en casos teria frénica inferior del tronco celíaco
de pacientes con enfermedad arterial (50 %), arteria gástrica izquierda precoz
multisegmentaria, y con ateroesclero- desde tronco celíaco seguido de bifur-
sis generalizada, es muy importante cación hepatoesplénica (50 %), trifur-
considerar que su utilidad potencial, cación «clásica» (25 %), tronco hepato-
tiene limitaciones, tales como detec- esplénico con salida independiente de
tar el tamaño de aneurismas asociados la gástrica izquierda.
y/o la presencia de trombos asociados,
ya que sólo estudia la luz arterial. Este Puede existir una arteria hepática iz-
método no es capaz de detectar con quierda con nacimiento desde la gás-
exactitud la calcificación aórtica y de trica izquierda (10-25 %) que cruce el
las arterias ilíacas, lo cual es un aspec- epiplón menor.
to muy importante si nos planteamos
una reparación endovascular. No es ya La arteria renal a veces es doble o tiene
una prueba imprescindible en la plani- una rama más pequeña (polar) adicio-
ficación del procedimiento quirúrgico y nal. Dado que la circulación es termi-
para la toma de medidas con vistas a la nal, el sacrificio de alguna implica pér-
elección de los dispositivos adecuados dida de parénquima.
en cada caso, ya que su información es
fundamentalmente longitudinal, y es- Variantes de la vena cava inferior (VCI)
tos datos nos los puede proporcionar y la vena renal izquierda (VRI) es im-
una buena reconstrucción del TAC. El portante, de cara a evitar su lesión con
acceso vascular más empleado es la ar- riesgo de hemorragia severa. Entre
teria femoral común, a través de la cual ellas: VRI retro-aórtica, VRI-collar, VCI
se usa un introductor de 5F y un catéter doble y VCI izquierda. Prevalencia en
calibrado. La arteriografía diagnóstica general < 3 %, aunque la VRI-collar es
debe incluir imágenes de la aorta ab- aproximadamente 10 %.
dominal, ramas viscerales (no debe me-
nospreciarse su utilidad en visualiza- La vena ilíaca común izquierda en su
ción de la arteria mesentérica superior, origen cruza la arteria ilíaca común de-
principalmente en el ostium), vasos pél- recha proximal. El uréter cruza los va-
vicos y femorales, para verificar no solo sos ilíacos en su bifurcación. La aorta
las lesiones, sino también las arterias a abdominal, el tronco celíaco y la me-
través de las cuales se van a introducir sentérica superior están envueltas por
los dispositivos endovasculares. tejido denso (linfático y nervioso auto-
nómico) que dificulta su disección (15).
Patrones de distribución
Recomendaciones de Diagnóstico por
Localizadas al segmento aortoilíaco 5 a Imagen en pacientes
10 %. con enfermedad de extremidades
inferiores (EEI) (ESVS) (15)
Enfermedad con extensión a ilíaca ex-
terna 25 %. Dupplex Vascular Indicado en la pri-
mera línea para el Diagnóstico EEI, I C.
Enfermedad Multisementaria extendida
a hipogástrica y zonas infrainguinales. Dupplex, AngioTAC y/o Angioresonan-
cia recomendadas para caracteriza-
Variantes anatómicas a nivel de los ción anatómica y guía para revascula-
troncos viscerales: rización optima en lesiones EEI, I C.
■ 327 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 328 ■
Patología oclusiva del sector aorto-ilíaco
■ 329 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 330 ■
Patología oclusiva del sector aorto-ilíaco
■ 331 ■
Tratado de Patología Vascular
TASC II
Lesiones A
Estenosis unilateral o bilateral de la AIC.
Estenosis unilateral o bilateral > 3 cm de la AIE.
Lesiones B
Estenosis > 3 cm de la aorta infrarrenal.
Oclusión ilíaca unilateral.
Estenosis única o múltiple 3-10 cm
que incluye la AIE y no la AFC.
Oclusión unilateral de la AIE que
no afecta a la AFC ni hipogástrica.
Lesiones C
Oclusión de AIC bilateral.
Estenosis unilateral de la AIE 3-10 cm
que afecta a AIE y no la AFC.
Estenosis unilateral de la AIE que
engloba la AFC.
Oclusión unilateral de la AIE que
engloba la AFC o hipogástrica.
Oclusión unilateral seriamente
calcificada de la AIE.
TASC II
Lesiones D
Oclusión de la aorta infrarrenal.
Enfermedad difusa de la aorta
infrarrenal y ambas ilíacas.
Estenosis difusa unilateral que afecta
a AFC, AIE y AIC.
Oclusión unilateral de AIC y AIE.
Oclusión bilateral de AIE.
Estenosis ilíaca en paciente con AAA
que requiere tratamiento quirúrgico
no endovascular
■ 332 ■
Patología oclusiva del sector aorto-ilíaco
Los índices de permeabilidad con la im- conectados a las vías laterales de los
plantación de stents en las arterias ilíacas introductores para evitar la formación
se comparan favorablemente con los de de trombo in situ y pericatéter.
la revascularización quirúrgica abierta.
La opción de escoger stents expandibles Durante el procedimiento el paciente
por balón frente a stents autoexpandi- debe estar cubierto con antiantiagre-
bles principalmente se determina por gantes plaquetarios y mantener esta
la preferencia del operador. Las princi- situación de por vida. Las pautas ac-
pales ventajas de los stents expandibles tualizadas aconsejan que ésta se lleve
por balón son la mayor fuerza radial y la a cabo con A.A.S. y Clopidogrel duran-
implantación más precisa, que es espe- te 3-6 meses, aunque en nuestra expe-
cialmente importante en las lesiones en riencia utilizamos otros antiagregantes
bifurcación. En la arteria ilíaca externa, se como el Trifusal y la Ticlopidina que no
prefiere una estrategia de implantación requieren asociarse con A.A.S. y que tie-
de stents primaria utilizando los autoex- nen una cobertura mayor que el clopi-
pandibles en lugar de stents expandibles dogrel, cuyos estudios (clopidogrel) de
con balón, debido al menor riesgo de di- tratamiento se han dirigido más a las
sección y retroceso elástico. arterias coronarias y que a largo plazo
tienen efectos adversos como la os-
Procedimiento Quirúrgico teoporosis. El tratamiento debe de con-
tinuare permanentemente de acuerdo
El procedimiento suele llevarse a cabo a lo descrito. Tomado en cuenta que la
bajo anestesia local, infiltrando sobre el ateroesclerosis es una enfermedad me-
sitio de punción; en algún caso extremo tabólica, degenerativa y progresiva.
puede ser necesaria sedación y, en los
casos de cirugía combinada puede ser Cuando las lesiones son muy cerradas,
necesaria la práctica de anestesia lo- la presencia de fibrosis por cicatrices
co-regional. previas y obesidad puede dificultar la
palpación del pulso y hacer necesaria
Se recomienda la heparinización a do- la ayuda de un dupplex vascular, agu-
sis completas durante el procedimien- jas-doppler sensibles para guiar la pun-
to y posteriormente, en caso de cirugía ción o de un pequeño abordaje quirúr-
asociada, proceder a neutralización gico. El paso previo en cualquier técnica
con sulfato de Protamina. Igualmen- percutánea al igual que en la cirugía
te, es aconsejable la utilización de So- abierta, es obtener el consentimiento
luciones Heparinizadas presurizados informado del paciente. Es importante
Abordaje Técnica Seldinger Introducción de Guía y Catéter Cambio de Cáteter (Pigtall) Angiografía de Control
■ 333 ■
Tratado de Patología Vascular
Modalidades de tratamiento
– Angioplastia.
– Colocación de stent.
– Stent balón expandibles.
– Stent autoexpandibles.
Angioplastia
■ 334 ■
Patología oclusiva del sector aorto-ilíaco
■ 335 ■
Tratado de Patología Vascular
situación de por vida. Las pautas más angiograf ía debe ser de la mejor cali-
actuales aconsejan que ésta se lleve a dad y la instrumentación debe de ser
cabo con A.A.S. y Clopidogrel durante manejado por técnicos perfectamen-
3-6 meses, aunque en nuestra expe- te entrenados. Al iniciar el procedi-
riencia utilizamos otros antiagregan- miento debe realizarse una valoración
tes como el Trifusal y la Ticlopidina que exhaustiva, debiendo seleccionarse la
no requieren asociarse con A.A.S. y que mejor proyección radiológica. Toma-
tienen una cobertura mayor que el clo- do en cuenta que las arterias a tratar:
pidogrel, cuyos estudios de tratamien- son La Aorta, La Arteria Ilíaca Común,
to se han dirigido más a las arterias La Arteria ilíaca Externa.
coronarias y que a largo plazo tienen
efectos adversos como la osteoporo- Instrumentación: Sistema de punción
sis. El tratamiento debe de continua- tipo Abocath™ del número 16, Intro-
re permanentemente de acuerdo a lo ductores cortos de 5F a 10 French de
descrito. Tomado en cuenta que la ate- grosor dependiendo de los dispositi-
roesclerosis es una enfermedad meta- vos que se van a utilizar (3.3 mm). In-
bólica, degenerativa y progresiva. troductores largos de 5-6 French para
realizar procedimientos en arterias
Cuando las lesiones son muy cerradas, contralaterales. Guías Hidrofílicas tipo
la presencia de fibrosis por cicatrices Terumo™ con punta recta o acoda-
previas y obesidad puede dificultar la da dependiendo de las preferencias
palpación del pulso y hacer necesa- del cirujano de 0.035’’, y de cada caso
ria la ayuda de un dupplex vascular, en particular, Guías Rígidas Amplatz
agujas-doppler sensibles para guiar Super Stiff™ para lograr más soporte
la punción o de un pequeño abordaje en la aplicación del procedimiento de
quirúrgico. El paso previo en cualquier 0.035’’ de grosor. Catéteres diagnós-
técnica percutánea al igual que en la ticos para cateterización de avance y
cirugía abierta, es obtener el consenti- navegación selectiva tipo recto para el
miento informado del paciente. Es im- avance en determinadas lesiones crí-
portante revisar todo el material nece- ticas, catéteres multipropósito, Pigtail,
sario, guías, catéteres, balones, stents... catéteres calibrados para medición de
y estar seguro de que podemos hacer las lesiones y marcaje, catéteres guía
frente a las posibles complicaciones. El para angiografía, jeringa anillada con
conocimiento de los materiales es de- loek-luck. Un buen Arco de angiogra-
cisivo para alcanzar el éxito del proce- fía puede marcar la diferencia en el re-
dimiento. Una ligera variación de la fle- sultado del procedimiento. El contras-
xibilidad de una guía o en el extremo te radiológico es de suma importancia
distal de un catéter puede convertir un tanto en su calidad como en la respon-
procedimiento complejo en sencillo sabilidad de su utilización y también
o viceversa. El conocimiento correcto del conocimiento.
de los materiales y la selección de los
mismos ayuda al ahorro de material y La arteria femoral común ipsilateral es
del tiempo de utilización del quirófano, la puerta de entrada de elección en la
y el menor tiempo de exposición a los mayoría de los casos para el abordaje
rayos X. endovascular del eje ilíaco y aorta ab-
dominal. El abordaje contralateral será
El paciente debe estar monitoriza- recomendable para los casos que así lo
do con control electrocardiográfico requieran. Se requiere de Anticoagu-
constante, tensión arterial, satura- lación sistémica a dosis de 1 mg/kg de
ción de oxígeno y pulso. El equipo de peso corporal.
■ 336 ■
Patología oclusiva del sector aorto-ilíaco
■ 337 ■
Tratado de Patología Vascular
El Tratamiento Actual debe valorar, (de- [6] Belcaro G, Nicolaides AN, Ramaswami
bido a su condición multisegmentaria) G, Cesarone MR, De Sanctis M, Incandela L, et
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en el plan de tratamiento un adecuado
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flujo de entrada y también un adecua- low risk subjects: a 10-year follow-up study
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Introducción Fisiopatología
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Tratado de Patología Vascular
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Enfermedad esteno-oclusiva de la aorta infrarrenal
Fig. 1.–Imágenes angiográficas del síndrome de Leriche, observándose en la de la izquierda la oclusión total de la aorta
infrarrenal
monofásicas a nivel de los ejes arteriales clerosa sobre todo de los lípidos séricos
extremitarios, indicativo de una perfu- como colesterol total, LDL, HDL, TG o
sión por circulación colateral. en los diabéticos los niveles de HbA1c
(si es diabético), lipoproteína A y ho-
Los datos biológicos aportan informa- mocisteína.
ción sobre la enfermedad base ateros-
La exploración con ecodoppler nos da
datos sobre el estado estenótico de la
aorta, arterias ilíacas y periféricas, siendo
factible detectar el grado de oclusión.
■ 343 ■
Tratado de Patología Vascular
Fig. 3.–Tratamiento endovascular con la implantación de stent en una oclusión total de la aorta infrarrenal
■ 344 ■
Enfermedad esteno-oclusiva de la aorta infrarrenal
■ 345 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 346 ■
Enfermedad esteno-oclusiva de la aorta infrarrenal
Tratamiento
■ 347 ■
Tratado de Patología Vascular
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■ 348 ■
PATOLOGÍA OCLUSIVA DEL SECTOR FEMORAL
Marta Lavirgen y Luis Riera
■ 349 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 350 ■
Patología oclusiva del sector femoral
■ 351 ■
Tratado de Patología Vascular
oral en cuanto a reducción de riesgo crónica ha hecho que sea un pilar fun-
cardiovascular y disminución de sín- damental en su tratamiento, tratándo-
tomas o tasa de amputación. se en muchos casos de manera exclu-
Control de los niveles de colesterol.
– siva y exitosa mediante este método.
Varios estudios han demostrado que Por otro lado, se estima que un porcen-
las estatinas de alta y moderada in- taje muy alto de los pacientes, alrede-
tensidad mejoran el pronóstico car- dor del 20-35 % necesitará una cirugía
diovascular de los claudicantes y de abierta en algún momento, porcen-
los pacientes con isquemia crítica. Se taje que posiblemente se reducirá en
recomienda un nivel de colesterol LDL los próximos años debido al continuo
por debajo de 100 mg/dL (2.59 mmol/L) avance de la tecnología endovascular.
en pacientes con EAP e incluso por de-
bajo de 70 mg/dL (1.8 mmol/L) en pa- Aunque la cirugía abierta puede ser
cientes de alto riesgo cardiovascular. la estrategia primaria de elección
La terapia antiplaquetaria está muy en algunos casos como pueden ser
recomendada para todos los pacien- aquellos relacionados con sectores
tes con EAP sintomática para reducir anatómicos específicos como la arte-
el riesgo de padecer un evento cardio- ria femoral común, en otros sectores
vascular. Se recomienda el ácido acetil como el ilíaco por ejemplo, la tenden-
salicílico a baja dosis o el clopidogrel cia actual es optar por ella cuando han
en monoterapia como tratamiento de fracasado uno o varios procedimientos
primera elección. Últimamente tam- endovasculares. Además, hay que te-
bién el rivaroxaban 2,5 mg c/12h aso- ner en cuenta otros factores a la hora
ciado a ácido acetil salicílico. No está de decidir la mejor opción terapéutica
recomendado de rutina el tratamiento inicial, como la edad, el pronóstico y la
con antagonistas de la vitamina K. situación basal de partida, el patrón de
la enfermedad o la capacidad del equi-
La pentoxifilina fue uno de los primeros po quirúrgico.
fármacos utilizados en el tratamiento
de la claudicación intermitente por su Las guías actuales recomiendan que
efecto sobre la viscosidad sanguínea, en pacientes con riesgo aceptable, la
aunque actualmente no está clara su decisión se tome teniendo en conside-
eficacia, por lo que no se recomienda ración la severidad de la enfermedad
su uso. Por otro lado, el cilostazol que (medición mediante escalas tipo WIfI),
es un inhibidor de la fosfodiesterasa III la distribución anatómica (por escalas
y vasodilatador directo, ha demostrado tipo GLASS), y la disponibilidad de vena
mejorar los síntomas de claudicación, safena autóloga. Para pacientes de alto
aunque se desconoce el mecanismo riesgo quirúrgico, en general, optare-
exacto. La recomendación actual es in- mos por manejo endovascular como
dicarlo en pacientes con claudicación primera opción.
incapacitante que no responden al tra-
tamiento médico inicial y no son can-
didatos a cirugía de revascularización; Las dos principales indicaciones para
está contraindicado en pacientes con la revascularización de miembros in-
insuficiencia cardíaca congestiva (6). feriores, ya sea quirúrgica o endovas-
cular, son la isquemia crítica y la clau-
Tratamiento quirúrgico dicación muy incapacitante que no
permita realizar las actividades básicas
El gran avance de los últimos años en de la vida diaria y que no responda al
el manejo endovascular de la isquemia manejo médico óptimo.
■ 352 ■
Patología oclusiva del sector femoral
– Revascularización quirúrgica en el
sector femoral.
■ 353 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 354 ■
Patología oclusiva del sector femoral
– Revascularización endovascular.
■ 355 ■
Tratado de Patología Vascular
nos aporta la ventaja del efecto del fár- suele utilizarse como terapia comple-
maco y sin dejar ningún material ex- mentaria para disecciones intimales
traño metálico, con la posibilidad de limitantes de flujo que hayamos provo-
combinarlo con otras técnicas como el cado con la angioplastia simple, o para
stenting o la aterectomía. Muchos estu- mejorar malos resultados anatómicos
dios demuestran la superioridad de esta con estenosis residuales después de
técnica con respecto a la angioplastia la angioplastia. En nuestra experien-
simple en términos de permeabilidad, cia, sobretodo en los casos con más
sin embargo no es así con todos los dis- calcificaciones de pared tampoco es
positivos con Paclitaxel. Esto posible- despreciable el riesgo de reestenosis
mente se deba a diferencias en cuanto intrastent.
al tipo de excipiente utilizado y a la con-
centración del fármaco (2.0 µg/mm 2, Existen muchos tipos de stent diseña-
3.0 µg/mm 2, 3.5 µg/mm2). dos para el sector femoral superficial.
La mayoría están hechos de nitinol y
Por otra parte, el uso de DEB esta ac- son autoexpandibles, vienen monta-
tualmente en revisión desde la alerta dos en una triple vaina retenedora que
que creó el metaanálisis de Katsanos permite una colocación precisa y casi
(«Risk of Death Following Application todos precisan introductores de 6F de
of Paclitaxel-Coated Balloons and calibre. Uno de los stents autoexpandi-
Stents in the Femoropopliteal Artery of bles de nitinol más conocidos es el Li-
the Leg»: A Systematic Review an Me- feStent (Bard®), un stent de bajo perfil
ta-Analysis of Randomized Controlled (5F), aprobado para su uso en arteria
Trials” JAHA 2018) en el que concluía femoral superficial y poplítea gracias a
que podría haber una relación entre su capacidad para adaptarse a torsio-
esta terapia y un aumento de la mor- nes, compresiones y elongaciones de
talidad a 2 y 5 años, en pacientes con los vasos. El primer estudio en el que
enfermedad arterial periférica tratados estuvo involucrado fue el RESILIENT,
con esta técnica (tanto angioplastia con unos resultados prometedores y
DEB como stent liberador de Paclita- una permeabilidad primaria a 12 me-
xel) en la arteria femoral superficial. ses del 81 % frente a un 37 % del grupo
Esta relación podría establecerse en angioplastia (11) (Figura 5).
función de la dosis del fármaco, o del
uso de determinados excipientes por
permanecer el fármaco mayor tiem-
po en la pared del vaso, aunque los
resultados no fueron concluyentes en
este sentido. En la actualidad nuestro
grupo sigue usando estos dispositivos
pero con una especial cautela y expli-
cando estas circunstancias con mucho
detalle a nuestros pacientes (10).
■ 356 ■
Patología oclusiva del sector femoral
Otro stent muy utilizado a este nivel es En cuanto a los stents recubiertos, qui-
el stent Innova (Boston Scientific®), au- zás la endoprótesis Viabahn (Gore®)
toexpandible de nitinol, especialmente sea la más utilizada. Se trata de un
adaptado para su uso en la arteria femo- stent recubierto autoexpandible de
ral superficial y poplítea proximal, distin- PTFE indicado en oclusiones totales
guiéndose por su elevada fuerza radial, crónicas de la femoral superficial. Es
su flexibilidad, un índice de fractura muy extremadamente flexible y resisten-
reducido y una gran facilidad de intro- te a la fractura, lo que le aporta cierta
ducción. Su alta efectividad y seguridad ventaja con respecto al stent libre. Se
a largo plazo (12 meses) se ha demostra- utiliza en recanalizaciones largas y ar-
do en el estudio SuperNOVA (12). Tam- terias muy enfermas que se sobredi-
bién es muy conocido el stent Pulsar-18 latan después a su diámetro nominal
(Biotronik®), utilizado en el mismo sec- previendo la rotura de algún segmen-
tor que los dos anteriores. Destaca por to de la arteria, que quedaría cubierto
su alta flexibilidad multidireccional, su por esta endoprótesis, de alguna for-
sistema de liberación de bajo perfil (4F) ma como un «endo-bypass».
y el diseño segmentado del stent, con
struts finos, reduciendo las tasas de re- Aún no esta claro si tiene mayor per-
estenosis. El estudio BIOLUX4EVER eva- meabilidad el stent metálico autoex-
lúa los resultados a corto y largo plazo pandible o los stents recubiertos, lo que
(hasta 24 meses) en lesiones sintomáti- sí es cierto es que se están desarrollan-
cas oclusivas o estenóticas del sector fe- do diversas técnicas para minimizar el
moropoplíteo (13) (Figura 6). potencial desarrollo de hiperplasia inti-
mal llevando a una reestenosis intras-
tent (doble antiagregación, las caracte-
rísticas de las fuerzas radiales, cambios
en el diseño del stent, etc.). Algunos es-
tudios como el VIBRANT (prospectivo,
multicéntrico y randomizado) no en-
cuentran diferencias significativas en
cuanto a permeabilidad entre ambos,
por lo que se suele reservar el empleo
de stents recubiertos para pacientes
que desarrollan importantes reesteno-
sis intrastent o incluso como tratamien-
to de primera línea para lesiones oclu-
sivas de la femoral superficial, teniendo
en cuenta el alto coste y el cierre de la
colateralidad que provocamos, como
factores negativos (14).
■ 357 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 358 ■
Patología oclusiva del sector femoral
■ 359 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 360 ■
Patología oclusiva del sector femoral
Figura 9.–Eco-Doppler que muestra una estenosis en arteria femoral superficial, la toma de medidas previa a la
angioplastia con stent y el resultado morfológico y hemodinámico final
■ 361 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 362 ■
PIE DIABÉTICO NEUROVASCULAR
Guillermo Aguilar Peralta, Frida Sofía, Zamudio León,
Casandra Aguilar Mendoza y Elia Pérez Núñez
■ 363 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 364 ■
Pie diabético neurovascular
adecuada perfusión, lo que puede pre- greso del 50 % de las úlceras del pie
disponer a un falso diagnóstico para el diabético y desempeña un papel su-
paciente como para el médico de pri- mamente importante en el 70 % de la
mer contacto. mortalidad entre los pacientes diabé-
ticos (10, 16). La arteriopatía periférica,
La neuropatía también induce a tras- puede presentarse de manera aisla-
tornos de tipo motores, por lo que sue- da o en combinación con la neuropa-
le producir atrofia y un desequilibrio tía periférica en hasta el 45 % de ulce-
muscular extensor eventual teniendo raciones de los miembros inferiores
como resultado el desarrollo de una (17). Es indispensable que durante la
deformidad equina. La localización exploración f ísica se examine colora-
más común donde acontece la ulce- ción, temperatura, textura, presencia
ración es el antepié neurotrópico. Se de vello corporal y pulsos periféricos,
ha estudiado que los pacientes con e interrogar si existen síntomas de
neuropatía somática diabética aislada claudicación.
tienen un riesgo siete veces mayor de
ulceración del pie en comparación con Para valorar la existencia de isquemia
otros pacientes. en extremidades, se puede utilizar el
índice brazo tobillo o índice de Yao.
■ 365 ■
Tratado de Patología Vascular
Figura 2
PIE DIABÉTICO
NEUROVASCULAR
SÉPTICO
No
2 DÍAS
Identificar INTRAHOSPITALARIOS
factores Hospitalización Sí Reposo absoluto
predisponentes Laboratorio
Gabinete
Sí
Estabilización
Clasificación Control metabólico
¿Neuropatía? según status Corrección de
¿Artropatía? infeccioso comorbilidades
¿Isquemia? Antibioterapia
Sí
¿Infección? Desbridación quirúrgica
en las primeras 12 h
del ingreso
No
Cuidados
preventivos del
pie
■ 366 ■
Pie diabético neurovascular
■ 367 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 368 ■
Pie diabético neurovascular
Clasificación de Meggit-Wagner
Grado Lesión Características
0
l Ninguna, pie de riesgo. Callos gruesos, cabezas de metatarsianos
prominentes, dedos en garra, deformida-
des óseas.
ll Úlceras superficiales. Destrucción del espesor total de la piel.
lll Úlcera profunda más absceso (ostiomie- Extensa y profunda, secreción, mal olor.
litis).
lV Gangrena limitada. Necrosis de una parte del pie o de los de-
dos, talón o planta.
V Gangrena extensa. Todo el pie afectado, efectos sistémicos.
■ 369 ■
Tratado de Patología Vascular
Clasificación de Texas
Etapa A Sin infección o isquemia
Etapa B Infección presente
Etapa C Isquemia presente
Etapa D Infección e isquemia presente.
Clasificación PEDIS
Grado 1 Grado 2 Grado 3
Perfusión Sin datos de enferme- Síntomas o signos de en- Isquemia crítica de la
dad arterial perfiérica. fermedad periférica, pero extremidad.
sin isquemia crítica
Clasificación WIfI
1. Herida (wound)
Grado Úlcera Gangrena
0 No úlcera No gangrena
Descripción clínica: dolor isquémico de reposo (síntomas típicos + grado 3 de isquemia); no
lesiones
1 Úlcera/s pequeña/s, superficial/es No gangrena.
en pie o pierna distal; no exposi-
ción del hueso, a no ser que esté
limitado a la falange distal.
Descripción clínica: pérdida menor de tejido. Abordable con amputación simple (1-2 dedos) o
injerto de piel
2 Úlcera profunda con exposición Gangrena limitada a los dedos.
del hueso, generalmente sin afec-
tación del talón; úlcera superficial
en talón, sin afectación del calcá-
neo.
Descripción clínica: pérdida mayor de tejido abordable con amputaciones digitales múltiples
(≥3 dedos) o amputación transmetatarsiana estándar ± injerto de piel
■ 370 ■
Pie diabético neurovascular
2. Isquemia (ischemia)
Grado ITB Presión sistólica en PD, TcPO2, en mmHg
tobillo, en mmHg
0 ≥ 0,8 > 100 ≥ 60
1 0,6-0,79 70-100 40-59
2 0,4-0,59 50-70 30-39
3 ≤ 0,39 < 50 < 30
■ 371 ■
Tratado de Patología Vascular
ADMINISTRACIÓN.
PRINCIPIOS GENERALES
■ 372 ■
Pie diabético neurovascular
■ 373 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 374 ■
Pie diabético neurovascular
■ 375 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 376 ■
Pie diabético neurovascular
■ 377 ■
Tratado de Patología Vascular
Debido a la afectación de la arteria tibial, Sin embargo, hasta el 30 % de los pa-
los objetivos distales pueden incluir las cientes diabéticos no poseen una
ramas plantares medial y lateral y otras vena safena apropiada para derivar a
■ 378 ■
Pie diabético neurovascular
■ 379 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 380 ■
AMPUTACIONES DE MIEMBRO INFERIOR POR CAUSA VASCULAR
Rafael Fernández Samos, Marta Ballesteros, Nuria Sanz Pastor
y Andrés Zorita
■ 381 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 382 ■
Amputaciones de miembro inferior por causa vascular
■ 383 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 384 ■
Amputaciones de miembro inferior por causa vascular
■ 385 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 386 ■
Amputaciones de miembro inferior por causa vascular
■ 387 ■
Tratado de Patología Vascular
El pie diabético (11) es el que condicio- A nivel de pie y dedos, las incisiones cu-
na el mayor porcentaje de amputacio- táneas deben ser limpias y sin bisel, los
nes menores, con la concomitancia de bordes óseos deben quedar sin frag-
neuropatía, deformidades y artropatía, mentos y sin esquirlas o bordes agu-
isquemia e infección. La infección re- dos, seccionar los tendones para faci-
quiere la realización de amputaciones litar su retracción, lavados frecuentes,
abiertas (preamputaciones) para per- cierre de bordes de piel sin tensión, su-
mitir eliminar el tejido infectado y ne- turar solo la piel, usar drenajes y evitar
crosado y delimitar un borde proximal el bisturí eléctrico.
cutáneo y óseo que permita la realiza-
ción de otra amputación más proximal En general, las amputaciones de an-
por tejido sano. tepie y dedos permiten una deambu-
lación correcta del paciente y una pro-
La gangrena seca sobreinfectada es la tetización del pie que permite adaptar
mionecrosis característica del pie dia- incluso un calzado normal.
bético, en el que concurren procesos
arteriales complejos, neuropatía sensi- La pérdida de uno o varios de los cuatro
tiva y motora, resistencia deprimida a la últimos dedos no tiene consecuencias
infección y lesiones graves, por la locali- importantes sobre la estática del pie.
zación y la extensión. En el pie diabético Por el contrario, el primer dedo juega
concurren antecedentes de ulceración un papel importante en la marcha y en
previa, neuropatía periférica, enferme- el equilibrio.
dad vascular isquémica, retinopatía o
nefropatía, deformidades óseas, ante- I. Amputaciones de dedos (Figura 3)
cedentes de exceso de alcohol, aisla-
miento social y personas ancianas. 1. Amputación del primer dedo. El nivel
de amputación se decide en base a la
Las amputaciones de dedos o de an- afectación cutánea u ósea, presencia
tepie en muchas ocasiones son com- de infección, etc. Se puede amputar
plementarias y secundarias a cirugía la falange distal, la falange proximal o
de revascularización de la extremidad, ir directamente a una transmetatar-
para eliminar tejido necrosado y con- siana del primer dedo, incluyendo los
seguir muñones sanos y no infectados. sesamoideos, con incisión en «raque-
Muchas de estas amputaciones pue- ta». Decidir correctamente el nivel de
den realizarse con anestesia local o con amputación para dejar los colgajos
bloqueo del tobillo. cutáneos correctos: a este nivel los
colgajos de piel serán dorsal y plan-
Dejar el apoyo del primer dedo íntegro, tar. Es frecuente la presencia a este
parece decisivo para favorecer una co- nivel de lesiones a nivel del «juanete»,
rrecta deambulación. por lo que la inclusión de la cabeza
del primer metatarsiano en la ampu-
Antes de su realización debe asegu- tación es mandatoria (Figura 3-a).
rarse una buena vascularización, in- 2. Amputación de 2.º a 4.º dedo (Figu-
fección controlada, técnica correcta, ra 3-b). Todos estos dedos tienen tres
conocimiento anatómico, gran expe- falanges, por lo que la decisión del
riencia y estudio radiológico previo. nivel de amputación en base a su
Son criterios clínicos de elección del ni- tamaño, debería hacerse como míni-
vel de amputación a este nivel el color mo a nivel de la segunda falange, o
y calor de la piel, el relleno capilar o el bien transfalángica proximal. Los col-
relleno venoso. gajos plantares pueden decidirse de
■ 388 ■
Amputaciones de miembro inferior por causa vascular
■ 389 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 390 ■
Amputaciones de miembro inferior por causa vascular
■ 391 ■
Tratado de Patología Vascular
■ 392 ■
Amputaciones de miembro inferior por causa vascular
REAMPUTACIONES
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Tratado de Patología Vascular
■ 394 ■
Amputaciones de miembro inferior por causa vascular
■ 395 ■
Tratado de Patología Vascular
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ogía Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología V
Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratad
ogía Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología V
Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratad
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Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratad
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Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratado de Patología Vascular Tratad