Está en la página 1de 16

Página |1

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA


MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA DEFENSA
UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL POLITÉCNICA DE LA
FUERZA
ARMADA NACIONAL
PROGRAMA: MAESTRÍA EN GERENCIA AMBIENTAL

USO DE LA TECNOLOGÍA EN EL AMBIENTE

Alumno: Ing. For. Reina Prieto

Profesora: Dra. Alicia Hernández

III-2020
Página |2

INTRODUCCIÓN

El desarrollo de la ciencia y el uso de la tecnología le han permitido al hombre


transformar el medio ambiente. La explotación desmedida e irracional de los
recursos naturales, el empleo de los mismos en la satisfacción de sus
necesidades materiales y espirituales, la demanda sin precedentes a la que el
rápido crecimiento de la población humana y el desarrollo tecnológico someten al
medio ambiente, está produciendo un declive cada vez más acelerado en la
calidad de éste y en su capacidad para sustentar la vida. La protección del medio
ambiente se ha convertido en una prioridad, en una necesidad de primer orden
para garantizar el desarrollo económico y social y, sobre todo, para la salud y la
supervivencia de la especie humana en todo el planeta

En los últimos 25 años los gobiernos, empresarios, científicos, académicos,


algunas organizaciones no gubernamentales (ONGs) y los medios de
comunicación trabajan colectivamente para controlar la destrucción del ambiente.
Sin embargo, los esfuerzos realizados no tienen una base sólida, ya que se
fundamentan en consensos de compromisos débiles que no cuestionan las
políticas intergubernamentales sobre el control del poder económico.

Los instrumentos de política ambiental que se han diseñado hasta ahora se


basan en el mercado, porque éste es considerado como el mejor medio para
enfrentar problemas de largo alcance, como los problemas ambientales. Se
termina así abordando el tema como un asunto de competitividad. Sin embargo,
ningún sector puede resolver por sí mismo el problema del ambiente, ya que es un
bien común, y los sectores forman parte del problema y de la solución. Los
problemas ambientales son multisectoriales: su solución representa todo un reto
para las diferentes disciplinas pues debe proporcionarse un procedimiento integral,
capaz de involucrar a todos los actores y conciliar los diferentes intereses. Se
precisa de un debate público que establezca los pasos prácticos para la necesaria
transformación de los modelos de producción y consumo, así como un cambio en
Página |3

la forma en que nos relacionamos con el mundo natural y el poder de los Estados
y el capital.

En este mismo clima de problematización global de la relación entre


“desarrollo”, “población”, “tecnología”, “nación”, “recursos naturales” y “consumo”
también se movilizaron nuevos dispositivos y tecnologías informáticas que hicieron
de “la economía mundial” un ámbito para la proyección de escenarios. Ejemplo de
ello fue la iniciativa del Club de Roma, un grupo de científicos y políticos reunidos
desde 1968 alrededor de las preocupaciones por el desarrollo, que auguró una
crisis aguda de recursos para el año 2000 mediante el uso de computadoras. Los
resultados del denominado Modelo Mundo III, encargado al Massachusetts
Institute of Tecnology (MIT), fueron presentados en 1970 y publicados luego por
Dennis Meadows bajo el título Limites del Crecimiento.

En este sentido, el medio ambiente se ha concebido como uno de los


elementos definidores de la supervivencia. Este factor delimita las funciones
empresariales, en cuanto a la productividad de los recursos, implementación en la
obtención de bienes y servicios, las consecuencias cuantitativas y cualitativas en
torno a la utilización de materias primas, entre otros, los cuales van a reducir o
ampliar su campo de acción dentro de un sector determinado (Montoya, 2006).

En esta tarea titánica, se han abocado diversos organismos internacionales,


organizaciones no gubernamentales (ONGs), entre otros, con el fin de adoptar
Tecnologías medioambientales (TMA) reduciendo las emisiones atmosféricas
industriales, en donde se incluyen regulaciones y políticas de orden ecológico en
la búsqueda de sinergias o círculos virtuosos que faciliten un desarrollo
sustentable en el que se minimice el impacto ambiental del crecimiento económico
en países abiertos al comercio internacional.
Página |4

ÍNDICE

Introducción…………………………………………………………………………pág 2,3

CAPÍTULO I. La Ciencia y la Tecnología…………………………………………pág 5

Definición de Ciencia………………...................................................................pág 6

Definición de Tecnología……………………………………………………………pág 6

Tecnologías Medioambientales…………..………………………………………..pág 7

Transferencia de tecnologías amigables para el medio


ambiente……………………………………………………………………………..pág 10

Beneficios de la Ciencia y la Tecnología en la Sociedad…………………........pág


11

CAPÍTULO II.
Conclusiones………………………………………………………………………..pág 12

Análisis del uso de la Tecnología en la solución de problemas de


ambiente…………………………………………………………………………pág 13,
14

Bibliografía…………………………………………………………………………..pág 15
Página |5

CAPÍTULO I. Desarrollo

La Ciencia y la Tecnología: han sido abordadas desde diferentes enfoques y


perspectivas, que van desde concepciones con marcado acento positivista hasta
visiones que tienen un carácter más crítico y menos cientificista, lo cual, como
acertadamente señala el destacado investigador y profesor Núñez Jover
(2007) “…resulta difícil ofrecer una caracterización breve y precisa de lo que
entendemos por ciencia. Se le puede analizar como sistema de conocimientos que
modifica nuestra visión del mundo real y enriquece nuestra imaginación y nuestra
cultura; se le puede comprender como proceso de investigación que permite
obtener nuevos conocimientos, los que a su vez ofrecen mayores posibilidades de
manipulación de los fenómenos; es posible atender a sus impactos prácticos y
productivos, caracterizándola como fuerza productiva que propicia la
transformación del mundo y es fuente de riqueza; la ciencia también se nos
presenta como una profesión debidamente institucionalizada portadora de su
propia cultura y con funciones sociales bien identificadas” y concluye “La razón por
la cual es posible apreciar tantas facetas diferentes de la ciencia es porque ella
constituye un fenómeno complejo cuyas expresiones históricas han variado
considerablemente. Por eso las definiciones de ciencia resultan escurridizas y a
veces inalcanzables”.

    Hasta los años cincuenta del pasado siglo fue dominante, en la comunidad
científica, un enfoque lógico-positivista de la ciencia, el cual, como bien expresa el
profesor Núñez Jover (2007) “…centra su atención en el sistema de conocimientos
formado, se interesa por la verdad y la búsqueda de la coherencia lógica del
lenguaje científico; este lenguaje se considera sólo si se refiere a hechos
Página |6

comprobables. De esta opción- empirista, fenomenalista y descripitivista- se deriva


un campo de análisis filosófico reducido: estudio del procedimiento de
comprobación de los fenómenos, formalización de las teorías científicas mediante
la lógica matemática y delimitación del lenguaje científico de otras expresiones
lingüísticas.”

    Sin lugar a dudas ésta resulta ser una definición reduccionista y empobrecedora
de lo que es la ciencia pues como, acertadamente, expresara el profesor Mario
Otero, esta postura realiza una “operación ideológica de ocultamiento que
presenta a la ciencia como autónoma, universal, extrahistórica”. (Núñez Jover,
2007)

    Es a partir de los años 60 del pasado siglo que comienza a abrirse paso un
enfoque más social de la ciencia, el cual concibe a la misma como un proceso
social estrechamente interrelacionado con la economía, la política, la educación, la
cultura, etc., donde el científico no es un ente encerrado en sí mismo y aislado de
lo social sino un individuo con una determinada posición ideológica y crítica
respecto a los diferentes objetos, fenómenos y procesos que le circundan y
situado en un amplio universo axiológico que le permite emitir determinados juicios
de valor sobre las múltiples realidades en las que está inmerso y de las cuales
forma parte.

La definición de ciencia que presenta Krober, quien, situado explícitamente en


la tradición de Marx, plantea: “…entendemos la ciencia no sólo como un sistema
de conceptos, teorías, proposiciones, hipótesis, etc. sino también,
simultáneamente, como una forma específica de la actividad social dirigida a la
producción, distribución y aplicación de los conocimientos acerca de las leyes
objetivas de la naturaleza y la sociedad. Aún más, la ciencia se nos presenta como
una institución social, como un sistema de organizaciones científicas, cuya
estructura y desarrollo se encuentran estrechamente vinculados con la economía,
la política, los fenómenos culturales, con las necesidades y posibilidades de la
sociedad dada”. (Núñez Jover, 2007)
Página |7

    Respecto al concepto de tecnología igualmente han surgido enfoques y


perspectivas que tienden a oscurecer y crear confusión en torno a su verdadera
naturaleza. El profesor Núñez Jover (20074) plantea que “Hay por lo menos un par
de imágenes de la tecnología que limitan su comprensión: la imagen intelectualista
y la imagen artefactual.

    En la primera, la tecnología se entiende apenas como ciencia aplicada: la


tecnología es un conocimiento práctico que se deriva directamente de la ciencia,
entendida ésta como conocimiento teórico. De las teorías científicas se derivan las
tecnologías, aunque por supuesto, pueden existir teorías que no generen
tecnologías. Una de las consecuencias de este enfoque es desestimular el estudio
de la tecnología; en tanto la clave de su comprensión está en la ciencia, con
estudiar ésta última será suficiente”

    “Mientras tanto la imagen artefactual o instrumentalista aprecia las tecnologías


como simples herramientas o artefactos. Como tales están a disposición de todos,
y serán sus usos y no ellas mismas susceptibles de un debate social o ético, pero
resulta obvio que esta imagen reduce considerablemente el ámbito de la
evaluación de tecnologías. En el caso más extremo nos priva de la capacidad de
discutir los fines sociales y humanos que deben modelar el desarrollo tecnológico,
impidiendo su análisis crítico e ignorando los intereses sociales, económicos y
políticos de aquellos que diseñan, desarrollan, financian y controlan la tecnología”.

Tecnologías Medio Ambientales (TMA): las tecnologías medioambientales


incluyen las tecnologías integradas, que impiden que se generen contaminantes
en el proceso de producción, y las tecnologías de final de proceso, que reducen la
emisión en el medio ambiente de los contaminantes que se hayan producido.
También pueden incluir nuevos materiales, procesos de producción eficientes
respecto a los recursos y la energía, conocimientos medioambientales y nuevos
métodos de trabajo.

No existe campo o esfera de la vida humana en que no sean evidentes los


múltiples beneficios que el desarrollo de la ciencia y la tecnología han traído
Página |8

consigo. Saltan a la vista los grandes logros alcanzados en las comunicaciones, la


medicina, la construcción, la economía, la educación, por solo citar algunos, los
cuales, indudablemente, redundan de modo inmediato y eficaz en una mayor y
mejor calidad de vida de una buena parte de los seres que habitamos este
planeta. Sin embargo, desde hace ya algunas décadas, importantes
personalidades del mundo de la política, la ciencia, la educación, la filosofía y
otras ramas del saber, vienen alertando sobre los peligros reales y potenciales que
un mal uso de los logros de la ciencia y la tecnología acarrean y pueden acarrear
sobre el medioambiente.

La mejora constante de la protección medioambiental no sólo supone un reto


que las empresas deben afrontar sino una necesidad que obliga a una búsqueda
continua de nuevos sistemas de organización, de nuevos procesos, de nuevas
tecnologías aplicadas con el propósito de obtener el máximo nivel de calidad y
eficacia en la estrategia empresarial, minimizando el impacto negativo al
ecosistema.

Muchos países latinoamericanos se están enfrentando a problemas de este


tipo rápidamente con la creciente demanda de energía y de servicios de
transporte, industria o agricultura, entre otros, se ven obligados a tomar decisiones
importantes sobre tecnología como puede ser sustituir sus reservas de capital
para proporcionar esos servicios.

Por lo que la transferencia de estas tecnologías y prácticas ocurre todo el


tiempo a nuestro alrededor, principalmente a través de negociaciones e
inversiones directas del extranjero. El papel del sector empresarial es clave en
este proceso, pero los gobiernos pueden jugar un rol importante al influenciar la
calidad y cantidad de la transferencia de tecnología.

En el contexto de la globalización actual ninguna política industrial, comercial o


de servicios, al igual que la social tendrá éxito si desconoce la necesidad de
Página |9

incorporar los principios del desarrollo sustentable como guías del crecimiento
económico. Atrás quedaron las épocas en las cuales se usufructuaban los
recursos naturales y se producía al máximo sin considerar el impacto ambiental
que se generaba. En estos tiempos es necesario, adoptar apropiados métodos de
gestión del medio ambiente como respuesta a los drásticos cambios en los
sistemas de producción de las industrias; de los canales de comercialización para
los productos y en la redes de distribución de los servicios, igualmente la
afectación que produciría cualquier inserción tecnológica en el colectivo social
dentro del presente siglo y en venideros.

Acosta (1997) en su conferencia titulada El medio ambiente, víctima de la


ciencia y tecnología moderna sostiene: Nos corresponde vivir una época de
prosperidad que hemos llamado moderna por los últimos descubrimientos
científicos y tecnológicos en las ciencias biológicas, bioquímicas y biofísicas, que
han hecho posible al hombre lograr lo que antes no dejaba de ser un sueño, una
ilusión. Es así como hemos podido llegar a encausar la naturaleza, a explorar el
porqué de los acontecimientos, como también su interrelación.

La tecnología es en general la causa de diversos problemas


medioambientales y, a la vez, la clave que permite solucionarlos. Las tecnologías
contaminantes están minando nuestros recursos vitales básicos: el agua limpia, el
aire fresco y el suelo fértil. Ahora bien, en todos los sectores (económicos,
transporte, energía, industria y agricultura), hay nuevas tecnologías
medioambientales disponibles o están naciendo para remediar esto. En la última
década, gracias a nuevas soluciones técnicas, se ha podido eliminar gradualmente
materiales peligrosos, nocivos o escasos y sustituirlos por otros menos escasos y
más seguros (Cotec, 2003).

Siendo las tecnologías ambientales las que preserva la biodiversidad del


ecosistema a través de la aplicación tanto de alta como baja tecnología, cuya
utilización sea menos dañina desde el punto de vista medioambiental que las
alternativas pertinentes. En el marco del desarrollo sostenible, potenciar el grado
P á g i n a | 10

de tecnología inherente a las aplicaciones de baja tecnología es tan importante


como potenciarlo en las aplicaciones que ya son de alta tecnología.

Las tecnologías medioambientales son tan comunes y diversas en nuestra


economía, que es muy difícil definirlas con precisión. La definición varía con el
tiempo, debido a que toda tecnología que mejora la actuación medioambiental
existente es una tecnología medioambiental. Las tecnologías medioambientales se
ven principalmente impulsadas por planteamientos medioambientales, entre ellos
la legislación.

Toda inversión supone, sin embargo, una elección entre tecnologías más o
menos medioambientales. Esto es cierto incluso tratándose de las tecnologías
cuya finalidad principal no es el medio ambiente. Las tecnologías
medioambientales son, a menudo, doblemente positivas y permiten a la vez un
aumento de la actuación medioambiental y una mejora del rendimiento económico.

La disminución del consumo de recursos o de los desechos, como las


emisiones contaminantes puede reducir el impacto sobre el medio ambiente.
También puede resultar ventajosa para la empresa al reducir sus gastos
energéticos y de eliminación de residuos, disminuir así los insumos y los gastos de
descontaminación. Distintas empresas han determinado que un menor consumo
de materias primas puede redundar en un aumento de la rentabilidad y
competitividad.

Informes emitidos por Cotec (2002), presentan que para la reducción de


emisiones atmosféricas industriales se disponen de tecnologías medioambientales
(TMA), algunas implantadas ya comercialmente y otras en desarrollo, que se
podrían catalogar en dos grandes bloques como:

 TL (tecnologías limpias): Actúan sobre el proceso o sobre las materias


primas; por ello, a veces, se denominan también como medidas primarias.
P á g i n a | 11

 TC (tecnologías de corrección): Actúan sobre las emisiones propiamente


dichas; sobre los gases de escape o residuales (medidas secundarias; sin
que ello signifique menos importantes)

Transferencia de tecnologías amigables para el medio ambiente: incluye


herramientas y servicios blandos, como pueden ser servicios de consultoría,
asesoría técnica y legal, entrenamiento, entre otros, lo cual da como resultado una
reducción de las emisiones de gases de invernadero y que se eviten los impactos
del calentamiento global.

Beneficios de la Ciencia y la Tecnología en la Sociedad: No existe campo o


esfera de la vida humana en que no sean evidentes los múltiples beneficios que el
desarrollo de la ciencia y la tecnología han traído consigo. Saltan a la vista los
grandes logros alcanzados en las comunicaciones, la medicina, la construcción, la
economía, la educación, por solo citar algunos, los cuales, indudablemente,
redundan de modo inmediato y eficaz en una mayor y mejor calidad de vida de
una buena parte de los seres que habitamos este planeta.
P á g i n a | 12

CONCLUSIONES

 En América Latina aún prevalece las empresas que no han alcanzado


integrar los criterios medioambientales con la estrategia competitiva, lo cual
evidencia un retraso en materia tecnología medioambiental, a diferencia de
las empresas europeas y norteamericanas que han superado el umbral
entre la estrategia de producción con las acciones medioambientales, como
mecanismo para la obtención de ventaja competitiva.
 Una de las principales respuestas empresariales ante el desafío de la
sustentabilidad es la ecoeficiencia, que consiste en producir más con
menos deterioro ambiental (Ludevid, 2000, citado por Azqueta, 2002: 285).
En otras palabras, generar (a un precio competitivo) bienes y servicios que
satisfagan las necesidades humanas que contribuyan a aumentar la calidad
de vida, al mismo tiempo que reduzcan los impactos ecológicos y la
intensidad en el consumo de recursos durante toda la vida del producto o
servicio.
 Muchas de las tecnologías medioambientales pueden ayudar a mejorar el
entorno natural al tiempo que potencian la competitividad de las empresas.
Sin embargo, todavía existen limitantes en cuanto a su desarrollo, como
puede ser la complejidad para pasar de unas tecnologías tradicionales a
otras más modernas, y el acceso al capital.
P á g i n a | 13

 La estrategia de Ciencia y Tecnología se ha considerado fundamentalmente


e importante para sentar las bases de una nueva articulación entre todos
los sectores; incluyendo lo ambiental. Por tanto el desarrollo científico y
tecnológico debe orientarse a mejorar la situación socioeconómica
existente, utilizando el potencial humano y los recursos naturales que se
poseen con una visión de largo plazo e integral

ANÁLISIS DEL USO DE LA TECNOLOGÍA EN LA SOLUCIÓN DE PROBLEMAS


DE AMBIENTE

La necesidad de suplir las necesidades básicas (bienes y servicios) de la


población en las sociedades, generó como consecuencia el uso de los recursos
naturales sin tomar en cuenta el desequilibrio y deterioro de los ecosistemas,
representando una seria amenaza para todas las especies que habitan el planeta,
por ello surgen diferentes estrategias y avances tecnológicos establecidos luego
de una profunda investigación sobre las posibles soluciones a dicha problemática.

La Ciencia y la Tecnología han sido de gran provecho, trayendo múltiples


beneficios para las sociedades, sin embargo, en paralelo han causado
indiscutibles daños al medio ambiente, por lo cual es indispensable reorientar la
misma hacia un modelo de desarrollo sostenible.

A nivel latinoamericano las empresas muestran un retraso con respecto a la


utilización de tecnologías medioambientales que las haga estar dentro de un
mercado competitivo a diferencia de empresas europeas y norteamericanas. A
pesar de ser participantes de protocolos, convenios, tratados, aún les falta mucho
P á g i n a | 14

por adecuar, debido a que toman estas tecnologías como más costosas y
rigurosas para seguir produciendo.

En Venezuela, el uso de tecnologías no escapa a la realidad de los otros


países latinoamericanos, debido a que estas han generado en su mayoría
impactos negativos. Sin embargo, existen algunas iniciativas impulsadas desde el
sector público que buscan la transferencia tecnológica como lo son el
asesoramiento, acompañamiento y uso de las mismas minimizando daños
ambientales, tales como: la producción de cultivos orgánicos, producción de
alimento balanceado para animales, producción de energía solar a través de
paneles, la recuperación y producción de semilla ancestral a través de técnicas
que no impactan al ambiente, sin embargo es necesario resaltar que estamos
empezando a transitar por un camino desconocido y en el cual apenas estamos
experimentando y documentando. Es importante resaltar que bajo nuestra cultura
netamente capitalista, querer incorporar estos nuevos paradigmas representa un
reto en cuanto a investigación, experimentación, educación, difusión,
implementación y aceptación por parte de la población. Sin embargo, todavía
existen limitantes en cuanto a su desarrollo, como puede ser la complejidad para
pasar de unas tecnologías tradicionales a otras más modernas, y el acceso al
capital.

Por lo anteriormente mencionado, las Políticas de Estado deben ser no solo


reformuladas sino también verdaderamente aplicadas y evaluadas de manera
constante y continua, con el fin de aplicar los correctivos a tiempo, antes de que el
daño ambiental ocasionado por tecnologías inadecuadas sea irreversible. Así
mismo, el estado debe garantizar que estos avances científicos sean estudiados y
aplicados desde la interdisciplinariedad y diferentes enfoques integrando los
actores no solo económicos y científicos, sino sociales, culturales, educativos,
ambientales, desde un carácter más crítico que científico; además del manejo de
políticas transparentes a todo lo que tiene que ver con lo ambiental a corto,
mediano y largo plazo. De la misma manera, es indispensable que haya un nuevo
sistema de organización, de procesos, de nuevas tecnologías aplicadas con el fin
P á g i n a | 15

de garantizar el máximo nivel de eficacia minimizando el impacto negativo al


ecosistema aprovechado.

BIBLIOGRAFÍA

 Peñaloza, M, y Cohén F, Daza R. (Junio 2009). Revista de Ciencias


Sociales, vol 15, núm 2, Impacto de la gestión tecnológica en el
medioambiente, primera edición. Consultado en fecha 17/11/2020. Hora:
11:00. Disponible en: http://ve.scielo.org/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1315-
95182009000200010

 Cabrera, L, y Herrera R, Rivero E. (Marzo 2015). Revista Digital. La Ciencia


y la Tecnología y sus impactos en el medio ambiente. Año 19, núm 202.
Hacia un nuevo modelo de desarrollo. Consultado en fecha 17/11/2020.
Hora: 14:00. Disponible en: https://www.efdeportes.com/efd202/ciencia-tecnologia-
y-medioambiente.htm
P á g i n a | 16

 Bernardo A, (21 de Abril de 2016). Revista Openmind. Las tecnologías que


pueden salvar el medio ambiente. Consultado en fecha 17/11/2020. Hora:
15:00. Disponible en: https://www.bbvaopenmind.com/ciencia/medioambiente/las-
tecnologias-que-pueden-salvar-el-medio-ambiente/

También podría gustarte