Está en la página 1de 5

Tejidos conectivos

Este es también conocido como tejido de sostén, puesto que es el esqueleto que sostiene a
otros tejidos y órganos. De igual forma, el tejido conectivo conforma una masa coherente
entre el sistema vascular sanguíneo y todos los epitelios, debido a eso, todo intercambio de
sustancias debe realizarse a través de dicho tejido, por lo que puede ser considerado como el
medio interno del organismo.

Por otro lado, el tejido celular aparte de tener células, también contiene sustancias
extracelulares que en condiciones normales, representan una proporción de tejido mayor que
el de las células mismas que suelen ser secretadas por uno de los tipos celulares llamados
fibroblastos. Hay que tener en cuenta que en conjunto, las sustancias extracelulares se
denomina matriz extracelular, compuesta por fibras incluidas en una matriz amorfa o
sustancia fundamental que contiene líquido tisular.

Es así como las fibras de tejido conectivo se dividen en tres tipos:


❖ Fibras colágenas
❖ Reticulares y
❖ Elásticas.
La matriz amorfa está compuesta por glucosaminoglucanos y proteoglucanos que forman
geles muy hidratados, en los cuales están incluidos los demás componentes.
En la matriz extracelular también hay glucoproteínas multiadhesivas, como por ejemplo
fibronectina y laminina. Los numerosos tipos celulares se clasifican en células fijas y células
migrantes.
Tejido conjuntivo I: Tejido hematopoyético

El tejido hematopoyético es el responsable de la producción de células sanguíneas. Existe


tejido hematopoyético en el bazo, en los ganglios linfáticos, en el timo y, fundamentalmente,
en la médula ósea roja, el centro hematopoyético más importante del organismo.

Aunque a simple vista, la médula ósea aparece roja o amarilla, cabe recalcar que la médula
ósea roja tiene actividad hematopoyética y el color se debe al contenido de eritrocitos y sus
precursores con hemoglobina abundante, mientras que la médula ósea amarilla casi no tiene
actividad hematopoyética y hay predominio de adipocitos, que le confieren la tonalidad
amarillenta.

Cabe aclarar que las médulas óseas amarilla y roja pueden transformarse entre sí, según las
necesidades. En los neonatos y en los niños pequeños, toda la médula ósea es roja, pero a
partir de los 5 a 6 años comienza a transformarse en médula amarilla en los extremos de los
huesos largos y en la edad adulta, sólo se encuentra médula ósea roja en el esqueleto axial.

Características del Tejido hematopoyético:

En la médula roja, el compartimiento hematopoyético está ocupado casi en su totalidad por


células hematopoyéticas incluidas en un escaso tejido conectivo reticular, denominado
estroma de la médula ósea. En la porción central de la médula, alrededor de los grandes vasos
se observa gran cantidad de grasa, dado que la hematopoyesis es más activa en la periferia.
En la médula ósea amarilla, la grasa ocupa casi todo el compartimiento hematopoyético,
donde sólo se distinguen algunos megacariocitos.

Por otro lado, el compartimiento hematopoyético a la luz del sinusoide tiene lugar
directamente a través de la célula endotelial, donde en los sitios más aplanados se forma un
poro de migración transitoria. Estos poros son relativamente pequeños respecto del tamaño de
las células migrantes y desaparecen en cuanto pasa la célula sanguínea. Las células del
compartimiento hematopoyético sólo pasan a la sangre cuando han alcanzado cierto grado de
diferenciación.
Tejido conjuntivo II: Tejido Sanguíneo

La sangre es considerada como tejido conjuntivo fluido debido a que está constituida por
células y una "sustancia intercelular" líquida, esta misma circula a través del organismo por
los vasos sanguíneos. Cabe recalcar que la cantidad total de sangre en un adulto es de
alrededor de cinco litros.

Componentes y formacion de celulas sanguineas:


Sus componentes son los glóbulos rojos, plasma, glóbulos blancos y plaquetas. Los
elementos de la sangre forman tres capas, la inferior, roja, está compuesta por los glóbulos
rojos o eritrocitos, por encima, se distingue una capa delgada grisácea formada por plaquetas
o trombocitos y glóbulos blancos o leucocitos. En la parte superior, se observa el plasma
sanguíneo, que es un líquido translúcido amarillento.
➢ Plasma: El plasma es el componente líquido de la sangre en el cual están suspendidos
los glóbulos rojos, los glóbulos blancos y las plaquetas.
➢ Glóbulos rojos (eritrocitos): Los glóbulos rojos (eritrocitos) constituyen el 40% del
volumen sanguíneo. Contienen hemoglobina, la proteína que confiere a la sangre su
color rojo característico y que le permite transportar oxígeno desde los pulmones
hacia todos los tejidos del organismo.
➢ Glóbulos blancos (leucocitos): Se encargan principalmente de la defensa del
organismo contra las infecciones. Existen cinco tipos principales de glóbulos blancos;
○ Los neutrófilos son el tipo más numeroso, y ayudan al organismo a protegerse
contra las infecciones, matando e ingiriendo bacterias, hongos y otros detritos
externos.
○ Los linfocitos, con tres tipos principales: las células T (linfocitos T) y los
linfocitos citolíticos naturales, que permiten al organismo defenderse de las
infecciones víricas, así como también detectar y destruir algunas células
cancerosas, y las células B (linfocitos B), que se transforman en células
plasmáticas y producen anticuerpos.
○ Los monocitos ingieren células muertas o dañadas, y ayudan en la defensa
contra gran cantidad de microorganismos infecciosos.
○ Los eosinófilos eliminan los parásitos, destruyen las células cancerosas y
participan en las reacciones alérgicas.
○ Los basófilos también participan en las reacciones alérgicas.
La mayor parte de los glóbulos blancos y las plaquetas se producen en la médula ósea, que es
el tejido blanco graso que se encuentra en las cavidades de los huesos. Dentro de la médula
ósea, todas las células sanguíneas se originan a partir de un mismo tipo de célula no
especializada denominada célula madre. Cuando la célula progenitora o célula madre se
divide, inicialmente da origen a glóbulos rojos inmaduros, a glóbulos blancos inmaduros o a
células productoras de plaquetas. Las células inmaduras se dividen, continúan madurando y
se convierten finalmente en glóbulos rojos, glóbulos blancos o plaquetas.

Tejido conjuntivo III: Linfoide defunción


Los linfocitos circulan en la sangre y la linfa, aparecen aislados en el tejido conectivo y los
epitelios o forman densas masas en el tejido conectivo laxo, que reciben el nombre de tejido
linfoide o linfático.

➢ Función: La inmunidad adaptativa mediada por linfocitos, que incluye la formación


de anticuerpos y linfocitos activados que destruyen o neutralizan microorganismos y
sus toxinas, reconocidos por pequeños detalles moleculares que no se encuentran en el
organismo hospedador. Así, el sistema inmunitario es capaz de diferenciar entre lo
"propio" y lo "no propio " en forma muy precisa como base de una respuesta
inmunitaria ante el ingreso de microorganismos o moléculas extrañas en general.
➢ Componentes: Los tejidos y órganos Linfoides primarios comprenden la médula ósea
y el timo, donde tiene lugar la maduración de las células madre linfocitarias a
linfocitos inmunocompetentes, mientras que los tejidos y órganos linfoides
secundarios son las partes del sistema inmunitario donde ocurren las reacciones
inmunitarias, e incluyen los ganglios linfáticos, el bazo y varias agrupaciones de
tejido linfoide asociado con las mucosas.

También podría gustarte