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LA DEIDAD DEL HIJO Y DEL ESPÍRITU

La palabra deidad viene del latín deitas, la cual denota divinidad o el estado de ser
Dios. La deidad del Hijo y del Espíritu Santo son dos de las doctrinas más
importantes del cristianismo. Simplemente no se puede ser cristiano sin reconocer
que el Hijo y el Espíritu Santo son Dios, la segunda y la tercera Persona de la
Trinidad [respectivamente]; el Hijo, quien se hizo carne para nuestra salvación, y el
Espíritu, quien mora en cada creyente. La verdad de la deidad del Padre es
raramente cuestionada. Incluso muchas de las sectas que niegan la deidad del
Hijo y del Espíritu afirman que el Padre es Dios (I Cor. 8:6). Por eso no tenemos la
necesidad de considerar los muchos textos que afirman Su deidad. Por otro lado,
la deidad del Hijo y del Espíritu han estado en constante ataque durante casi dos
mil años de historia cristiana. Por lo tanto, es absolutamente esencial que todo
verdadero seguidor de Cristo aprenda por las Escrituras que tanto el Hijo como el
Espíritu son plenamente divinos en el más estricto sentido del término.

1. EL HIJO ES DIOS

 En Juan 1:1 se encuentra uno de los textos más importantes en la Escritura


acerca de la deidad del Hijo de Dios. Lee el texto cuidadosamente y luego
completa el siguiente ejercicio:

Juan 1:1
1 En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.
a. En el p____________________. Esta es una referencia al principio de la
creación
(Gén. 1:1).

b. Era el V____________. Traducido de la palabra griega /logos/. En la filosofía


griega, se refería a una fuerza impersonal o razón que daba unidad y orden al
universo. En el Antiguo Testamento, se refiere a la comunicación o autoexpresión
de Dios. Él creó todas las cosas por medio del Verbo (Gén. 1:3, 9), y se revela a
Sí mismo a los hombres por medio del Verbo. Juan no identifica al «Verbo» hasta
el versículo 14. Allí vemos que el «Verbo» es el Hijo, quien se hizo carne y habitó
entre nosotros. El apóstol Pablo escribe que el Hijo existía antes de todas las
cosas (Col. 1:17) y que Dios creó todas las cosas por medio de Él (Col. 1:16). El
apóstol Juan escribe que es por medio del Hijo que Dios se ha explicado o se ha
dado a conocer (Jua. 1:18).
c. Y el Verbo era c________ Dios. Aquí aprendemos dos grandes verdades: (1) El
Hijo es una Persona distinta de Dios el Padre; y (2) el Hijo existía en perfecta
comunión con Dios el Padre antes de que todo fuera hecho.
d. Y el Verbo era D__________. Sería difícil, sino imposible, que Juan hiciera una
declaración más clara con respecto a la deidad del Hijo. Algunas sectas enseñan
que [este versículo] se refiere al Hijo como «un dios» en vez de «el Dios» porque
en el idioma original del Nuevo Testamento no hay un artículo definido antes de la
palabra «dios» (griego: /theos/). Su argumento es refutado por dos razones: En
primer lugar, en Juan 1:6, 12, 13, 18, la palabra griega /theos/ (Dios) es usada sin
un artículo definido y aun así claramente se refiere a Dios. El significado del
término es siempre determinado por su contexto. En segundo lugar, decir que el
Hijo es «un dios» contradice todos los demás pasajes que declaran que no hay
otro dios, de ningún tipo (Isa. 44:6, 8; 45:5, 21; 64:4; I Cor. 8:4).

 Juan 1:18

Nadie ha visto jamás a Dios; el unigénito Dios [l], que está en el seno del Padre,
18 

Él lo ha dado a conocer.

a. A D__________ nadie le vio jamás. Esta es una clara referencia a Dios el


Padre, quien habita en luz inaccesible (I Tim. 6:16). Todas las visiones de Dios en
el Antiguo
Testamento fueron solo revelaciones muy limitadas. Nadie ha visto ni puede verlo
en la plenitud de Su gloria (I Tim. 6:16).
b. El U______________________ H_______. La palabra «unigénito» se traduciría
mejor como solo o único y solo. El término griego es /monogenes/ (mono = uno +
genes = clase, especie o género), y denota singularidad o la naturaleza de algo
que es único en su clase. No significa que el Hijo nació o fue engendrado, sino
que Él es uno solo y el único. En algunas traducciones [como la RV60], la palabra
«Hijo» se encuentra el lugar de la palabra «Dios». Esto se debe al hecho de que
ambas palabras aparecen en diferentes manuscritos antiguos en griego. Sin
embargo, la palabra «Dios» [en esta frase] tiene un mayor respaldo. He aquí otra
versión que traduce «Dios» en este versículo: «Nadie ha visto jamás a Dios; el
unigénito Dios, que está en el seno del Padre, Él le ha dado a conocer» (LBLA).
c. Que está en el s______________ del P______________. Esta es una
descripción aún más hermosa de la verdad revelada en Juan 1:1: «el Verbo era
con Dios». El Hijo siempre habita en el más perfecto compañerismo de intimidad y
amor con el Padre y el Espíritu. La singularidad del Hijo es revelada en que Él
tiene una relación única en su clase con Dios el Padre.
d. Él le ha dado a c_____________________. Solo Dios puede comprender
plenamente a Dios o darlo a conocer plenamente. Solo en el Hijo habita la plenitud
de Dios (Col. 1:19). Solo Él es la imagen del Dios invisible (Col. 1:15), y solo Él
puede comunicarlo al hombre.

Filipenses 2:6
6 el cual, aunque existía en forma de Dios, no consideró el ser igual a Dios como
algo a qué aferrarse,

NOTA: La palabra «forma» traduce el término griego /morphé/, el cual se refiere


no solo a la apariencia exterior o externa de algo o de alguien, sino también a su
carácter esencial o realidad subyacente. El Hijo no solo «parece» ser Dios en
apariencia, sino que «era» Dios en realidad. La palabra «igual» traduce el vocablo
griego /ísos/, el cual significa ser igual en cantidad o calidad. Esta es una
referencia inequívoca a la deidad de Cristo. Él existía por toda la eternidad en
forma de Dios y siendo igual a Dios en todo sentido. Incluso, cuando Él se despojó
de Sí mismo y se hizo hombre, no dejó de ser Dios (Flp. 2:7). Se despojó de los
privilegios de la deidad, pero no de la deidad misma.

Colosenses 1:15
15 Él es la imagen del Dios invisible, el primogénito[o] de toda creación.

NOTA: La palabra «imagen» traduce el vocablo griego /eikón/, el cual se traduce


correctamente como imagen o semejanza. ¿Quién sino Dios puede ser la
«expresión exacta» (Heb. 1:3, NBLA) o «imagen misma» (Heb. 1:3, RV–1960) de
Dios? Ningún ser inferior sería una verdadera imagen de las infinitas excelencias
de Dios, sino solo una deformación lejana y distorsionada. El Hijo puede ser la
imagen de Dios solo porque «Él es el resplandor de Su gloria y la expresión
exacta de Su naturaleza» (Heb. 1:3). La palabra «primogénito» viene del griego
/protótokos/ (protos = primero + /tíkto/ = dar a luz), y a menudo ha sido usada
erróneamente para negar la deidad de Cristo. El apóstol no usó este término para
mostrar que el Hijo era una criatura, sino para probar que Él tenía un rango muy
por encima de toda la creación y era distinto de esta. El verdadero significado de
«primogénito» con respecto al Hijo es ilustrado con claridad en el Salmo 89:27,
donde el término es usado para mostrar un rango en vez de origen o nacimiento.
Refiriéndose a David, Dios declara: «Yo también lo haré Mi primogénito, El más
excelso de los reyes de la tierra». Está claro que David era el «primogénito» de
Dios en el sentido de que tenía un rango superior al de todos los demás reyes. De
manera similar (pero mucho más trascendental), el Hijo de Dios es el
«primogénito» en el sentido de que Él está por encima de toda la creación.

Colosenses 1:19
19 Porque agradó al Padre que en Él habitara toda la plenitud[s]

NOTA: La plenitud del océano no puede ser contenida en un vaso que pueda ser
sostenido por la mano de un hombre. Tampoco sería posible que la plenitud de
Dios habitara en algún ser [que sea] menos que Dios.

2. EL ESPÍRITU ES DIOS

Hechos 5:3-4
3 Pero Pedro dijo: «Ananías, ¿por qué ha llenado Satanás tu corazón para mentir
al Espíritu Santo, y quedarte con parte del precio del terreno? 4 Mientras estaba
sin venderse, ¿no te pertenecía? Y después de vendida, ¿no estaba bajo tu
poder? ¿Por qué concebiste este asunto en tu corazón? No has mentido a los
hombres sino a Dios».
Corintios 3:16
16 ¿No saben que ustedes son templo[e] de Dios y que el Espíritu de Dios habita
en ustedes?

Corintios 6:19
19 ¿O no saben que su cuerpo es templo[i] del Espíritu Santo que está en
ustedes, el cual tienen de Dios, y que ustedes no se pertenecen a sí mismos[j]?
NOTA: En estos dos textos tenemos una poderosa afirmación de la deidad del
Espíritu. En I Corintios 3:16, el creyente es llamado «templo de Dios», pero en I
Corintios 6:19, [las Escrituras] se refieren al creyente como «templo del Espíritu
Santo». Sería impensable que el apóstol Pablo usara estos dos términos de
manera intercambiable [es decir, sinónima], si no viera al Espíritu como Dios
plenamente y una Persona real de la Trinidad.

Romanos 8:9
9 Sin embargo, ustedes no están en la carne sino en el Espíritu, si en verdad el
Espíritu de Dios habita en ustedes. Pero si alguien no tiene el Espíritu de Cristo, el
tal no es de Él.

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