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“En EE.UU.

la moda
transgénero se impone
entre las adolescentes”
Ima Sanchís 09/02/2022 00:00

Abigail Shrier,periodista, nos habla de “la locura transgénero entre las adolescentes”

Un estudio polémico

Su ensayo Un daño irreversible . La locura trasgénero que


seduce a nuestras hijas (Deusto), considerado uno de los
libros del año por The Economist y The Times , ha
provocado gran polémica en EE.UU., donde fue acusado
de transfobia e ignorado por muchos de los grandes
medios de comunicación. El libro es un estudio sobre
cómo el cambio de sexo en las adolescentes se ha
convertido en una manera de buscar consuelo a las
angustias de la adolescencia y en muchos estados
pueden iniciar su proceso de transformación sin el
permiso de los padres. “Los terapeutas no se atreven a
cuestionar el autodiagnóstico de disforia de género,
podrían perder su licencia. Según un ensayo clínico el
70% de los púberes prescritos con bloqueadores de la
pubertad lo habrían superado por su cuenta”. Atención a
los efectos psicosociales.

Es usted transfóbica?

Por supuesto que no tengo fobia a los trans, yo me he


limitado a estudiar un grave problema que estamos
viviendo entre las adolescentes en EE.UU.: la sensación
de grave incomodidad con el sexo biológico propio.

¿Hoy las chicas quieren ser chicos?

En el año 2016, en EE.UU., las mujeres representaron el


46% de todas las cirugías de reasignación de sexo. En el
2017 fue del 70%.

Definamos el problema.

Las niñas adolescentes de hoy día están atravesando la


peor crisis mental que hemos visto nunca.

¿Con que síntomas?

Las púberes tienen ratios muy altos de ansiedad, de


depresión, hay trastornos nuevos como las autolesiones,
el odio hacia sus cuerpos y su deseo de escapar de su
forma femenina. Y ahí es donde irrumpe la moda trans.
¿Están a disgusto con su sexo biológico?

Exacto, es lo que llamamos disforia de genero.


Normalmente empieza en la infancia
y es algo que históricamente se ha dado en niños. Hoy la
demográfica nos dice que fundamentalmente lo sufren
niñas adolescentes sin un historial en su infancia de
disforia.

¿De qué porcentaje estamos hablando?

Hace una década, una de cada dos mil alumnas se


identificaban como transgénero y hoy es una de cada
veinte, es decir se ha multiplicado por cien en solo una
década.

¿Niñas de entre 12 y 13 años?

Sí, suele suceder en la pubertad. Las adolescentes con


sus amigas afirman que odian su cuerpo, sus pechos y el
periodo, tienen ansiedad y depresión y creen que si
empiezan un tratamiento de testosterona y se convierten
en chico todo se arreglará.

¿De dónde surgen esas ideas?

Son niñas que nunca han experimentado incomodidad


alguna con su sexo biológico hasta que descubren la
comunidad de influencers y estrellas trans de YouTube.
Luego algún trans da una conferencia en las escuelas
sobre su experiencia, y les cala la idea de que serán más
populares si se declaran transexuales. Más que una
necesidad psicológica, son el resultado de estímulos y
sugerencias.

¿Con qué consecuencias?

La locura de diagnóstico actual de disforia de género lleva


a púberes a llenarse de testosterona y a extirparse los
pechos porque, mal aconsejadas, creen que la
incomodidad propia de la adolescencia se debe a que su
cuerpo y su sexo no se corresponden.

Según la ley, ¿a partir de que edad se pueden operar


sin el permiso paterno?

Varía según el estado. En Oregón, por ejemplo, es a partir


de los 15 años. Yo he investigado colegios, terapeutas,
trabajadores sociales, la cultura y el trasfondo que
apoyaba este contagio social tan rápido.

¿Qué ha averiguado?

Los adultos, excepto los padres, animan a las


adolescentes a tratarse con testosterona. Promocionan y
aceleran el cambio.

¿Está segura de lo que dice?

En EE.UU. los colegios han adoptado una ideología radical


respecto al género, proporcionada por activistas, y lo
incluyen en el currículo. Desde muy pequeños se les
enseña que pueden tener un “cerebro de niña en un
cuerpo de niño”, o viceversa. He recogido muchos casos
en los que el colegio llega a conspirar contra los padres.

¿Cómo?

Las niñas deciden cambiarse el nombre por uno


masculino y en el colegio lo asumen sin consultar a los
padres.

¿Cuántas llegan a extirparse los pechos?

En el 2007 había una clínica de género y hoy hay cientos.


Se puede llegar a dar testosterona en la primera visita, y el
Gobierno paga el tratamiento u ofrece un copago de 10
dólares al mes. La transición es muy fácil, barata y
celebrada. Algo muy tentador.

Otro negocio.

En TikTok los médicos hacen publicidad de ese tipo de


cirugía que es muy popular.

¿Cuál es el perfil social de estas adolescentes?

Blancas de clase alta o media alta, de familias


progresistas y que, criadas con pocos muros, buscan
barreras que derribar. El conflicto de fondo son las ganas
de encajar socialmente.

¿Cuál es el efecto de la testosterona?

A los pocos meses cambia la voz, se hace más profunda,


y eso es permanente, los hombros se ensanchan, los
rasgos se masculinizan, aparece vello facial y corporal, un
inicio de calvicie y el clítoris se inflama y crece, pero
también te sientes genial porque suprime la ansiedad y te
proporciona euforia.

Entiendo.

Los bloqueadores de la pubertad pueden causar


infertilidad permanente y tener efectos secundarios
bastante graves.

¿Expertos en adolescencia no dan la voz de alarma?

Han empezado a hacerlo, pero son tachados de


transfóbicos y son apartados. Aprendan de nosotros, es
un problema enorme.

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