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Teletrabajo

El teletrabajo es una modalidad de prestación de servicios en la que una parte de la jornada


laboral se desarrolla de forma no presencial y mediante el uso de las tecnologías de la
información y la comunicación. Esta forma de organización del trabajo es un elemento
inequívocamente modernizador de las administraciones públicas.
En el ámbito de la Unión Europea, el 16 de julio de 2002 se firmó en Bruselas el Acuerdo marco
europeo sobre teletrabajo, adoptado, a iniciativa de la Comisión Europea, por los interlocutores
sociales más relevantes del ámbito europeo con la finalidad de impulsar esta modalidad de
prestación de servicios.
El artículo 47 del Real decreto legislativo 5/2015, de 30 de octubre, por el que se aprueba el texto
refundido de la Ley del Estatuto básico del empleado público, habilita a las administraciones pú-
blicas para el establecimiento de las jornadas de trabajo de los funcionarios públicos, y el artículo
51 prevé, en lo que se refiere al régimen de la jornada de trabajo del personal laboral, que se aten-
derá a lo dispuesto en este mismo texto legal y en la legislación laboral correspondiente.
En cuanto a la normativa laboral, la Ley 3/2012, de 6 de julio, de medidas urgentes para la
reforma del mercado laboral, reguló por primera vez el trabajo a distancia y modificó la
redacción del artículo 13 de la Ley del Estatuto de los trabajadores, actual texto refundido de la
Ley del Estatuto de los trabajadores, aprobado por el Real decreto ley 2/2015, de 23 de octubre.
El artículo 108.2.g) del Decreto legislativo 1/1997, de 31 de octubre, por el que se aprueba la re-
fundición en un texto único de los preceptos de determinados textos legales vigentes en Cataluña
en materia de función pública, establece que la jornada y el horario de trabajo se determinarán
por reglamento en función de la mejor atención a los administrados, de los objetivos señalados en
los servicios y del buen funcionamiento de éstos. De esta disposición se desprende que la forma
de prestación de los servicios en régimen del teletrabajo, dado que modifica el régimen general
de jornada y horario, debe regularse mediante disposición reglamentaria.
En las administraciones públicas, la prestación de servicios en la modalidad de teletrabajo
constituye un instrumento para reforzar la orientación del trabajo a los resultados, que
permite superar la cultura de la presencialidad y fomentar la confianza, la iniciativa y la
autonomía de los servidores públicos , elementos decisivos de cara a incrementar los niveles de
motivación y, consecuentemente, el rendimiento y la productividad. El teletrabajo, como medida
de flexibilidad laboral interna, también se convierte en una de las formas de captación y retención
del talento en la organización.
La optimización del tiempo de trabajo, aparte de tener un efecto positivo en la productividad,
genera mayor satisfacción en el personal, dada la disponibilidad de tiempo que comporta, y esta
mayor satisfacción revierte en la organización en términos de mayor implicación. Por último,
pero no menos importante, la implementación de esta forma de organización del trabajo contri-
buye claramente a los objetivos en materia de cambio climático y calidad del aire, en tanto que
facilita un modelo de movilidad sostenible con una clara reducción del número de desplaza-
mientos, de los costes añadidos y del consumo energético, evitando la emisión de gases de efec-
to invernadero y de otros contaminantes como las partículas y, al tiempo que reduce el nivel de
ruido de nuestros pueblos y ciudades. La prevención de los riesgos de accidentes laborales, así
como una mejor accesibilidad para las personas con movilidad reducida, son beneficios deriva-
dos de esta movilidad más sostenible. Asimismo, el teletrabajo contribuye a impulsar decidida-
mente la Administración electrónica, innovadora y digital a la que hace referencia el Plan de Go-
bierno de 25 de septiembre de 2018.
Teletrabajo

Es por todos estos motivos que el Ajuntament de Castelldefels entiende necesario impulsar la me-
todología del teletrabajo como una forma de organización del tiempo de trabajo de los empleados
públicos que permite avanzar en la orientación del trabajo a los resultados y ofrecer, a la vez, una
mayor flexibilidad en la organización del tiempo de trabajo sin que ello comporte reducir la
calidad del servicio público , sino incrementar, sin costes añadidos, la eficacia y eficiencia en la
prestación de los servicios.
Los riesgos que puede comportar implementar esta metodología han sido ampliamente analiza-
dos. En cuanto al posible aislamiento y pérdida de integración en la organización, se prevé un
sistema mixto, híbrido, que combina el trabajo presencial y el no presencial con un máximo de
tres jornadas diarias enteras de prestación de servicios en la modalidad de teletrabajo, siempre en
jornadas diarias enteras.
Por lo que respecta al riesgo de disponibilidad excesiva que puede implicar el uso de las tecno-
logías de la comunicación, se delimitan claramente las reglas preventivas con el establecimiento
de franjas horarias de disponibilidad obligatoria por interconexión y coordinación, siempre
dentro del horario de permanencia obligatoria , lo que permite garantizar, asimismo, el derecho a
la desconexión digital.

Destaca también que el teletrabajo pudiera estar operativo por un lado, como medida específica
en los casos de progresiva reincorporación por motivos de enfermedades de especial gravedad
propias o para acomodar la conciliación familiar en ciertas circunstancias que así lo requieran.
Por otro lado, episodios como el confinamiento decretado por las autoridades sanitarias durante
los meses de marzo, abril y mayo de 2020 han puesto sobre la mesa otros elementos de gran
importancia que hacen aún más evidente la utilidad del teletrabajo en situaciones de emergencia.
Teletrabajo

1.La regulación de la prestación de servicios en la modalidad de teletrabajo tiene como


finalidad avanzar en la orientación del trabajo a los resultados, potenciar la autonomía y la
iniciativa del personal en la realización de las tareas encomendadas y ofrecer mayor
flexibilidad en el uso y la distribución del tiempo de trabajo, sin detrimento de la prestación
del servicio público. También contribuye a los objetivos en materia de cambio climático y
movilidad sostenible, favoreciendo la conciliación entre la vida personal y familiar de los
empleados públicos.

- Requisitos
Requisitos para la prestación de servicios en la modalidad de teletrabajo son ocupar un puesto de
trabajo susceptible de ser desempeñado en la modalidad de teletrabajo, es decir, desempeñar un
puesto de trabajo que pueda desarrollarse de forma autónoma y no presencial, sin necesidad de
supervisiones presenciales o supervisión continuada, atendiendo a sus características específicas y
los medios requeridos para su desarrollo.
No serán susceptibles de ser desempeñados mediante la modalidad de teletrabajo los puestos
de trabajo cuya prestación efectiva sólo queda garantizada con la presencia física del
empleado o empleada en el centro de trabajo.
Se deben establecer jornadas de presencialidad obligatoria y horarios de disponibilidad para
garantizar la presencia de un mínimo de efectivos por unidad , servicio o área, o criterios
ante la concurrencia de solicitudes de acceso a la modalidad de teletrabajo estrictamente vin-
culados a razones del servicio o a otros criterios objetivos.
Antes de que finalice la autorización de teletrabajo y sin perjuicio de la evaluación continua o
periódica que se lleve a cabo de acuerdo con lo establecido en el plan personal de trabajo, la
persona supervisora emitirá un informe de evaluación del cumplimiento de los objetivos y, previa
solicitud de la persona interesada, la autorización de teletrabajo se podrá prorrogar por períodos
máximos establecidos, siempre que no existan cambios en las condiciones de trabajo y la
evaluación haya sido favorable.

- El plan personal de trabajo debe tener el siguiente contenido:


a)Relación de las tareas que se realizan en la modalidad de teletrabajo y los objetivos a conseguir.
b)Concreción de los días de la semana que se teletrabajará.
c) Fijación de las franjas horarias de disponibilidad obligatoria para la interconexión y
coordinación en el horario de permanencia obligatoria. El resto de la jornada en régimen de
teletrabajo admite una total flexibilidad, respetando las pausas y los descansos entre jornadas.
d)Régimen de control y seguimiento periódico de los objetivos del trabajo y evaluación periódica.

- Asimismo, en el plano personal de trabajo se establecerá expresamente que durante las jornadas de
teletrabajo, por necesidades del servicio debidamente justificadas y con un preaviso no inferior a 24
horas, se podrá exigir la presencia física en los centros de trabajo.

Régimen especial de prestación de servicios ocasionales en la modalidad de teletrabajo


1.Con carácter excepcional, podrá autorizarse ocasionalmente la prestación de servicios en
la modalidad de teletrabajo en los siguientes casos:
Teletrabajo
a) Cuando en razón de un servicio fuera del centro de trabajo habitual el desplazamiento resulte
ineficiente. En este caso la jornada restante podrá completarse en régimen de teletrabajo.
b) Cuando por necesidades del servicio se deriven encargos específicos y concretos que sea
necesario ejecutar en un breve período de tiempo y sea más efectivo y adecuado emplear la
modalidad de teletrabajo.
c) Por otros motivos que en opinión del supervisor o responsable del área justifiquen que se
pueda completar parcial o totalmente la jornada laboral en teletrabajo sin que eso suponga pasar
a tener un plan de teletrabajo establecido para el trabajador.

- Puntos a reforzar para la gestión del teletrabajo y su rendimiento


1. Comunicación de equipos

Herramientas específicas para una comunicación dinámica entre el equipo sin necesidad de
largas cadenas de emails. Chats profesionales? Grupos de Whatsapp?

2. Plataformas para reuniones durante el trabajo en remoto.

Skype, Teams, etc. Es importante no desconectar del equipo durante el teletrabajo y poder
realizar reuniones dinámicas y eficientes.

3. Software de soporte para el teletrabajo.

Horizon, Anydesk, Teamviewer, etc.

4. Programas de gestión de proyectos

Programas que permitan una rápida y eficiente supervisión del equipo y de las tareas que se
están realizando (Trello, Asana, etc). Es obvio que sólo se podrá acceder al teletrabajo si se da una
necesaria autonomía del trabajador que le permite desarrollar sus tareas sin una supervisión
constante o muy frecuente.

También es importante reforzar las funciones de coordinadores o jefes de equipo que puedan
estar totalmente al día de las tareas de su equipo. Es complicado establecer métodos de
monitorización constantes del trabajo diario y es más fácil medir la consecución de objetivos. De
hecho es lo mismo que se hace cuando el trabajo se desarrolla en presencial. De forma no obvia lo
que se valida en las áreas es la consecución de objetivos (licencias, gestión del registro, obertura de
expedientes, instalación de programas informáticos, etc) y no se tiene un control diario de las tareas
de los trabajadores.

5. Apps de gestión del tiempo paras ser productivo en casa.

Podría ser importante tener apps que nos ayuden a centrarnos en el trabajo diario. Aunque
parece ser un hecho admitido por todos los trabajadores que desde casa es más fácil realizar tareas
que requieran una mayor concentración y que se puede aumentar la eficiencia en el teletrabajo

- Evaluar la calidad del tiempo trabajado


Teletrabajo
Otra manera de medir la productividad del teletrabajo puede ser manteniendo reuniones semanales
con los empleados remotos para definir una lista clara de tareas con plazos negociados.

6. Evaluar los resultados

Si se está midiendo el rendimiento correctamente en un entorno de oficina, habrá muy poca


diferencia en la forma en que evalúas a un empleado remoto. El rendimiento se determina mejor
por los resultados y si un empleado cumple con objetivos o puntos de referencia medibles.

7. Smart Working

El Smart Working es una metodología de trabajo basada en la confianza en el trabajador, aunque


también resulta de gran transcendencia que la plantilla conozca a la perfección cuáles son sus
objetivos.
Así, lo que pretende el Smart Working no es que el trabajador trabaje un número determinado de
horas, sino que este cumpla con ciertos objetivos y utilicen la tecnología para ello. Obviamente
hemos de establecer una franja de disponibilidad debido a la elevada necesidad de interacciones
entre áreas y dentro de la propia área para la consecución de los objetivos pero al final es esta
confianza en que el trabajador hará buen uso de esta nueva modalidad de trabajo y que puede
retribuir a la organización con una mayor eficiencia desde su propia responsabilidad y ética laboral
sin que haya un exceso difícil de encajar de mecanismos de control que por otra parte no deberían
ser muy diferentes de los que ahora ya se utilizan en el trabajo presencial

En la administración todos los departamentos tenemos un desempeño que está relacionado en la


mayoría de los casos con el resto de la organización: informes para expedientes, decretos que se
han de firmar, propuestas, mejoras o instalación de programas informáticos que las áreas reclaman,
etc. Toda esa interacción ya es un mecanismo de control en si mismo en el trabajo presencial. Si un
área se ralentiza por falta de eficiencia de algún trabajador o deficiencias organizativas de otra área
la alerta salta rápidamente. Eso en teletrabajo no debe variar ni variará. Es importante que haya una
supervisión más cercana pero al final la prueba de que el teletrabajo funciona y es incluso más
eficiente es que la rueda de la administración lejos de detenerse se acelera y da resultados más
rápidamente o, como mínimo, igual que en presencial.

Se podría aplicar el Test de Turing al trabajo en remoto o en presencial: si no se puede diferenciar


por calidad o rapidez de ejecución las tareas hechas en presencial de las realizadas en teletrabajo es
que teletrabajo es tan eficiente (o más) que el trabajo presencial.

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