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Universidad de Carabobo

Facultad de Ciencias Económicas y Sociales

Escuela de Administración Comercial y Contaduría Pública

Núcleo La Morita.

MOTIVACIÓN:

ELEMENTO CLAVE DE LA CULTURA ORGANIZACIONAL

Comportamiento Organizacional Autora:

Profa. Rosalinda Gómez María Claudia Escalona N.

Sección UN C.I. 29.527.356

La Morita, 01 de Diciembre 2021.


En la actualidad, la competitividad de una organización recae muchísimo en el
manejo de recursos humanos. Por ende, la gestión exitosa del talento que hace
vida en la empresa es fundamental para obtener altos niveles de rendimiento. Los
directivos enfocan parte de sus esfuerzos en determinar cuáles son las
necesidades de sus trabajadores, para construir un plan estratégico que les
permita motivarlos, y así contribuir en el cumplimiento de las metas
organizacionales.

Es allí, donde la Motivación, una palabra tan común, se vuelve relevante.


Muchas veces se escucha hablar de ella, pero pocas se entiende y comprende su
valor dentro de cada comportamiento y actitud que caracterizan a los seres
humanos. Es un fenómeno psicológico que convierte las habilidades en
rendimiento. Es el camino a la satisfacción laboral, por lo que es sinónimo de
objetivos y metas.

Dentro de este mundo, este concepto cobra sentido al distinguirla como


impactante, pues si se conoce y aplican las teorías, se estará a un paso menos del
manejo eficaz y éxito organizacional
Para Abraham Maslow, famoso psicólogo cuyo nombre todos alguna vez
habrán escuchado, la Motivación se define de forma elemental como la iniciativa o
el estímulo que tienen los seres humanos para satisfacer sus necesidades.

Al adentrarse en una visión más profunda de este concepto, el escritor


Chiavenato (1979), en su libro Administración de Recursos Humanos, explica que
la Motivación, nace de la interacción entre individuo y situación que hacen vida a
su alrededor. En otras palabras, es aquella idea compuesta por un conjunto de
impulsos y aspiraciones, que produce las actitudes y comportamientos específicos
de alguien, influyendo en todas las acciones que un individuo pueda llevar a cabo.

Dentro de las organizaciones, la Motivación aparece con el objetivo de propiciar


un ambiente en donde los individuos estén dispuestos a trabajar con interés,
iniciativa, fervor y de forma proactiva; llevando por delante siempre disciplina,
disposición, orgullo y un sentido del deber bien orientado, fomentando situaciones
de buena confianza y trabajo en equipo.

Dentro del área de estudio de la psicología, este impulso es visto como un


proceso que da inicio, guía y hace perdurar el comportamiento humano en pro de
lograr un objetivo o meta. Es tan simple como el querer hacer algo, yendo desde
lo más sencillo hasta lo más complejo; desde comer un rico almuerzo, pues
persiste el motivo de saciar el hambre, hasta cuando alguien dura años estudiando
una carrera, pues su motivo es convertirse en un profesional. El compromiso es la
base para resultados óptimos.

En ese sentido, de forma general, se encuentra que la Motivación está dividida


en cuatro tipos. El primero, la forma Extrínseca, referente a las posibles
recompensas externas que puedan recibirse, como lo es el dinero o un ascenso.
Luego, la Motivación Intrínseca, aquella que disfruta de realizar las actividades;
representativa por satisfacer deseos de autorrealización, aprendizaje y crecimiento
personal, que son vistos al enfrentar un reto. En un tercer puesto, la denominada
Interpersonal, esa que se presenta cuando se busca reconocimiento, aceptación y
valor social. Y para finalizar esta variedad, la Motivación Personal, esa que
muchos estudiosos consideran la más importante; es definida por la manera en
que los valores y prioridades, respectivos de cada individuo, transforman y otorgan
sentido al comportamiento humano, y dentro de una organización, se ve en esos
empleados que buscan integrarse con la misión de la empresa, son poco egoístas
y buscan una dinámica de equipo.

Ahora bien, la Motivación ha sido respaldada a lo largo de los años por distintas
teorías que buscan explicarla. Se pueden dividir en dos áreas: de contenido,
referentes al porqué de la motivación, y de procesos, que tienen que ver con el
cómo.

Dentro de la división contenido, participa la Teoría de Maslow (Jerarquía de


Necesidades), que propone una pirámide ilustrativa, y detalla que las personas
pretenden satisfacer primero sus necesidades básicas, como lo son las fisiológicas
y las de seguridad, para posteriormente ascender y encargarse de las
secundarias, aquellas del ámbito social, de autorrealización y autoestima, que son
más complejas.

En otra línea, Herzberg (Motivación e Higiene) para 1959, propuso que el


trabajo es la fuente de satisfacción más elemental para las personas; definiendo
dos tipos de factores, los intrínsecos, que son sinónimos de satisfacción, esos que
engloban el contenido del trabajo (reconocimiento, trabajo como tal, deber), y los
extrínsecos, que van a la par de la insatisfacción, relacionados al ambiente laboral
que rodee al individuo (paga, jefes, relaciones de trabajo). Este estudioso
argumenta que la presencia de factores intrínsecos significa individuos plenos, sin
embargo su ausencia no se relaciona a la insatisfacción. Ocurriendo algo similar
pero contrario con los factores extrínsecos, que hace referencia a trabajadores
desmotivados e insatisfechos, pero que si se encontraran presentes estos
factores, no garantizarían satisfacción.
En tercer lugar, la Teoría de McClelland (Necesidades Aprendidas), habla de
que existen tres tipos de necesidades: logro, quienes se distinguen y asumen
responsabilidades; afiliación, que analizan el desarrollo de su relaciones
personales; y poder, amantes del control y dar órdenes. Se caracterizan por ser
motivaciones sociales aprendidas inconscientemente por el ser humano al
enfrentarse al entorno que lo rodea.

En otro extremo, McGregor propuso dos teorías, la Teoría X y la Teoría Y; la


primera que explica que existe una tendencia humana a rechazar el trabajo, por lo
que deben ser obligados, amenazados y controlados para que así cumplan con los
objetivos de la organización. El individuo prefiere recibir órdenes y esquivar la
responsabilidad; así pues, los jefes imponen actitudes autoritarias y asumen la
carga de llegar a las metas empresariales, fomentando una relación recompensa-
penalización. Mientras que la Teoría Y, entiende que al individuo generalmente no
le incomoda trabajar, y que el control total no es la única forma de impulsar al
empleado. Estos se involucran con los objetivos organizacionales al recibir
recompensas por los logros, satisfaciendo sus necesidades personales y de
autorrealización, forjando una figura de líder participativo que crea condiciones
idóneas para el desarrollo de las habilidades de los trabajadores, creando una
relación ganar-ganar.

Ahora bien, entre las Teorías de la Motivación en base a procesos se halla la de


Locke (Establecimiento de Metas), que propone que las personas idean sus
objetivos, sueños y metas a perseguir, consiguiendo que entre mayor dificultad
para cumplirlos, mayor motivación existirá; siempre que la ideas sean precisas,
cercanas a la realidad y apartadas de lo imaginario y ensoñador. Por su parte, la
Teoría de Víctor Vroom (Valencias y Expectativas) refiere que la Motivación es
dependiente de la expectativa, la valencia y la instrumentalidad, conceptos que se
agrupan en base a un proceso cognitivo que cree que existe relación entre el
esfuerzo realizado, el rendimiento y la recompensa o resultado obtenido.
Por último, la Teoría de Skinner (Refuerzo), que explica la interacción entre
causas y consecuencias a través del uso de reforzadores positivos o negativos
con el objetivo de potenciar una conducta, centrándose en cómo es el
comportamiento humano dependiendo de los estímulos que reciba.

En otro orden de ideas, explicadas las teorías, es importante destacar la


relación entre Motivación y Satisfacción. En palabras de Martin (2017), “cuanto
más satisfecho está un empleado en su puesto de trabajo, más motivado se
muestra y mejor desempeño realiza”. Es decir, un individuo estará satisfecho en
cuento tenga cubiertas sus necesidades, mediante factores intrínsecos, como lo
son el reconocimiento y la realización de objetivos y metas, y factores extrínsecos,
esos que van de la mano de las relaciones laborales, los salarios, los directivos,
etc. Al ir escalando en su satisfacción de necesidades, irá construyendo nuevos
planes y metas superiores a los que cumplió, manteniendo la motivación
permanentemente viva. Es un ciclo constante y eterno en el que el individuo
generalmente siempre tendrá un sueño por cumplir. Según un estudio llevado a
cabo por Wall Street Journal y Opener Institute for People, sobre la felicidad de los
trabajadores, detalló que la satisfacción laboral produce un 36% de empleados
más motivados, y 31% más eficientes.

Así pues, es vital crear una Estrategia de Motivación en una organización,


partiendo de la premisa que para motivar a un trabajador a que realice sus labores
de forma óptima, se le tiene que permitir satisfacer sus necesidades insatisfechas,
por lo que el directivo a cargo de elaborar un plan debe conocer cuáles son.

De esa manera, se debe hacer un estudio dentro de la organización para


observar y analizar cuáles son las insatisfacciones y carencias de los empleados,
pues una decisión sin información es inestable. El gerente a cargo, conocerá
cuales son las condiciones en las que el trabajador puede ser motivado a que
cumpla su trabajo, siempre estando en línea con los objetivos organizacionales.
De forma general, se puede trazar un Plan Estratégico Motivacional en base a los
siguientes pasos. Por ejemplo

Primero, recompensas físicas a quienes hayan logrado los objetivos de forma


óptima. Al primer lugar, se le dará un bono con cierta cantidad de dinero; al
segundo, un cupón de descuento para algún producto de una marca aliada más
una cesta con rubros alimenticios; y al tercero, un almuerzo todo incluido en algún
restaurant de la ciudad. A su vez, se otorgarán los reconocimientos respectivos en
las redes sociales de la organización a quienes hayan demostrado un buen
rendimiento.

Se tendrá flexibilidad laboral. La última semana de cada mes, no se laborará el


día viernes, permitiéndoles a los trabajadores disfrutar de tres días libres.
Asimismo, se respetarán las jornadas establecidas, evitando que empleados
deban quedarse a terminar trabajos pendientes fuera de hora, permitiendo un
equilibrio entre sus vidas privadas y lo laboral.

Se hará hincapié en dar beneficios sociales a quienes hacen vida en la empresa


y a sus familias, con ideas tales como regalar entradas para el cine, tomar algunos
domingos al año para realizar eventos recreativos a los que asistan todos, celebrar
las festividades con almuerzos o fiestas y para quienes tengan hijos, se
planificarán Planes Vacacionales. En el área de beneficios de salud, cada
trabajador, junto a su núcleo familiar, contará con un seguro médico.

Para finalizar, el conocimiento del talento humano debe estar a la par de los
nuevos avances, por lo que se darán cursos de capacitación en distintas áreas, y
de esta manera aprovechar por completo las habilidades de los trabajadores.
Serán cursos sobre sus áreas de especialización, junto con otros orientados a
aprender y conocer sobre Inteligencia Emocional, así como la introducción o
práctica del idioma Inglés.
La Motivación es una forma interna que poseen los individuos que dirige, activa
y mantiene en el tiempo una conducta y comportamiento orientados a la
realización de metas y objetivos. Es un impulso que obliga a alguien a realizar
ciertas actuaciones, y no rendirse en pro de conseguir lo deseado. Llena de
energía y dirección a las personas, es la causa y razón del comportamiento
humano.

En ese sentido, está dirigida hacia el cumplimiento de los objetivos, en un


proceso continuo que puede ser positivo o negativo. Es para las organizaciones un
punto importante a tener en cuenta, y los niveles directivos deben crear
estrategias y planes para amparar métodos sistemáticos que permitan al talento
humano desarrollar una motivación intrínseca para con los objetivos de la
organización. Así, de esta forma, se logrará un mayor índice de satisfacción
laboral, mejores resultados y se aprovecharán eficientemente los recursos de la
empresa, fomentando una relación donde ambas partes ganan.

Finalmente, la Motivación y sus relacionados son un tema extenso y


encantador, que a veces se dan por sentados, no tomando en cuenta el valor que
su complejidad posee en cualquier ámbito de la vida. Es sinónimo de convicción,
proactividad, contribución, confianza, trabajo en equipo y compromiso, adjetivos
que la convierten en un elemento clave de la cultura organizacional.
:
REFERENCIAS

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