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CLASE COMISIÓN 5 – TÓTEM Y TABÚ

Audio de la clase correspondiente al espacio de comisiones de trabajos prácticos,

de la quinta semana del cronograma del 1er Conjunto Temático: "Tótem y Tabú".

Se considera el texto de Freud, S., Tótem y tabú: capítulo IV.

Dictado por Manuel Murillo

Hola ¿Cómo andan? Mi nombre es Manuel Murillo, soy ayudante de Trabajos

Prácticos del taller L y tengo a cargo esta clase sobre el texto de Freud “Tótem y tabú”.

Puede parecer, para el trabajo que venimos haciendo en las clases de trabajos

prácticos, puede parecer un giro o un pasaje un tanto loco, pasar de ver estos cuadros

de la psiquiatría clásica, a ver ahora, no solamente un tema psicoanalítico, sino un

tema que nos remonta a cierto mundo primitivo, porque vamos a hablar de clanes, de

tribus y de hordas primitivas. Entonces es bien importante preguntarnos cuál es el

sentido que tiene este texto y esta clase en este conjunto temático, y los temas que en

verdad vamos a ver en esta semana 5 y la próxima semana 6, tanto en prácticos como

en seminarios y teóricos, porque de hecho se trata de un tema, diría particularmente

importante. Es cierto que, por algún motivo, del recorte de la bibliografía y de los

temas que vemos, bueno, todos los temas son importantes, por eso están presentes y

están articulados en nuestro programa. Pero les diría que este tema de esta semana y

la próxima, del padre, la función paterna, el Nombre del Padre, la metáfora paterna,

es particularmente, singularmente importante porque es lo que por un lado organiza

el programa de nuestra cátedra y el eje que vamos a desarrollar en los próximos

conjuntos temáticos, no azarosamente sino porque la función del padre es

justamente algo que articula y organiza las estructuras que vamos a estudiar, las

estructuras clínicas. Piensen que el próximo conjunto vamos a estudiar psicosis y en


el siguiente neurosis, y lo que nos va a permitir establecer una diferencia y una

organización y una descripción de esas estructuras es la función del padre que es el

tema que estamos viendo estas semanas.

Respecto de, específicamente, Tótem y tabú, tenemos que ver en esta clase el

Capítulo 4 de todos modos les sugiero, si pueden leer el Capítulo 1, por ahí no entero

pero las primeras páginas como para tener una introducción al tema hecha por el

mismo Freud. Para ordenar un poco el recorte que vamos a hacer de la lectura de

este capítulo, de este texto, vamos a ver en este conjunto temático, estas dos

semanas, dos antecedentes freudianos del concepto de padre en Lacan: 

● El Edipo, el Complejo de Edipo, que ustedes van a estudiar a partir de los tres

tiempos del complejo de Edipo.

● El padre de la horda primitiva del cual habla Freud en este texto. El padre de la

horda primitiva y la función paterna que se pone en juego en la comunidad totémica,

eso es lo que vamos a ver.

Y les diría si ustedes quieren, como una orientación de esta clase, es que tenemos

que entender a que se refiere Lacan cuando dice que el padre simbólico es el padre

muerto. Es algo sobre lo cual Lacan va a insistir cuando se refiere a la función del

padre en la metáfora paterna, cuando diferencia el padre imaginario simbólico y real.

¿En qué sentido Lacan dice, o qué está pensando cuando dice que el padre simbólico

es el padre muerto? 

La palabra tótem se refiere a las sociedades totémicas, es decir, organizadas en

torno a la figura de un tótem. Vamos a ver en esta clase que significa el tótem como

un símbolo y como un objeto de culto. En el sentido más material es un monumento

construido en madera, madera tallada que tiene diferentes figuras de animales y de

arriba hacia abajo va localizando una descendencia.


En Capital Federal hay un tótem, está situado en la

plaza Canadá, frente a Retiro, se lo puede ver, está a la

vista como un objeto público, naturalmente ahora no

podemos ir a visitarlo, pero les sugiero que busquen

imágenes por internet y que vean imágenes de tótems, un

poco para armarnos un imaginario de lo que estamos

hablando. 

El totemismo en algún sentido es considerado la

primera forma de religión humana, o incluso también se

lo considera como una formación previa a los sistemas

religiosos que se desarrollaron después. Con lo cual

estamos en una temática que nos localiza, diría, en ese

terreno que son los orígenes de la constitución, la

institución de las primeras comunidades y organizaciones de lo humano.

 La palabra Tabú del título, se refiere a una prohibición, vamos a ver qué es lo que

está prohibido en juego, pero la prohibición no de cualquier objeto, sino de una que

por alguna característica reviste el valor de algo sagrado. Entonces es la prohibición

de algo sagrado.

Bueno, como vamos viendo ya, el tema de la clase de hoy es un tema de

articulación entre etnología, antropología, y psicoanálisis. Pero también como vamos

a ver, nuestro interés, así como el interés de Freud, es extraer de esto conclusiones de

relevancia y de aporte para el psicoanálisis, no en un sentido histórico, no tanto en un


sentido histórico, sino en el sentido de la clínica psicoanalista, y específicamente en

nuestros casos, pensar categorías que nos orienten en un sentido psicopatológico.

Hecha esta introducción, vamos a adentrarnos entonces un poco en algunas

referencias del Capítulo 1 y sobre todo del Capítulo 4 que es el que tenemos que ver. 

Freud parte de manera específica de algunas observaciones y descripciones de

tribus australianas, los pueblos melanesios, polinesios, himalayos, y Freud se hace

una pregunta bastante particular e interesante, porque observa que estos pueblos

que se alimentan de la caza, estas tribus se alimentan de la caza y de raíces que

desentierran, dice bueno estos pueblos o estas tribus tan primitivas, esto podría

hacernos pensar, dice que, en su vida sexual, en lo que respecta a su comportamiento

sexual, no encontraríamos mayores regulaciones, mayores miramientos éticos o

morales. Y sin embargo, lo que nos encontramos es lo contrario, encontramos que

rige para ellos la prohibición del incesto, es decir, relaciones o uniones entre

miembros de una misma tribu, de un mismo clan y el comportamiento o la unión por

exogamia, es decir, entre miembro de diferentes clanes. Y no solamente tienen esta

regulación de la prohibición del incesto, sino que lo que observamos es un marcado

horror frente a él, y un conjunto muy particular de medidas protectoras destinadas a

evitarlo. Lo que también describe es que son tribus organizadas totémicamente, esto

quiere decir por clanes, donde cada clan está organizado en torno a un tótem, son

nombrados por el tótem, que es un animal particular para cada tribu, del cual la tribu

entiende que desciende, en este sentido el animal totémico es una suerte de padre

ancestral del clan, el cual está por un lado prohibido tanto matarlo cómo comerlo.
En el caso de este tótem que les comentaba que está en la Plaza Canadá, arriba de

todo la primera figura animal tallada es un águila, entonces eso designa, digamos la

descendencia que viene hacia abajo, todos descienden del águila, son hijos del águila

en este tótem. Bueno, luego del águila hay una serie de animales, un león, una nutria,

etc. y a último término hay un rostro humano, que representa al jefe de la tribu, pero

fíjense que el jefe no es el que está arriba, sino que arriba está, digamos luego de

varios escalones y de figuras animales, está propiamente hablando el animal totémico

del cual toda la tribu desciende, en ese caso es el águila. Este animal, esta figura 

totémica, le brinda cuidado, protección y auxilio a todo el clan, y como contrapartida

de esto, los miembros del clan, lo respetan y está aplicada esta regla de que en tanto

que todos son hijos del águila, el águila es un animal que no pueden matar, ni comer,

porque justamente es de donde ellos descienden.

Esto también organiza los vínculos familiares, porque al ser todos hijos de este

animal totémico, se entiende que más allá de lo que podemos entender por vínculos

de sangre, se entiende que padre y madre son cualquier hombre o mujer adulta en el

clan, como también hermanos y hermanas, no solamente lo que podrían ser

hermanos y hermanas de sangre, sino todos los miembros del clan son en algún

sentido hermanos y hermanas entre sí, porque todos son hijos de este mismo padre

ancestral.

Una vez observado esto, Freud se pregunta por el origen, ¿Cuál es el origen del

totemismo? Y en ese sentido también ¿Cuál es el origen o cómo surgió la

prohibición del incesto y la exogamia? Es una pregunta, en algún sentido presente

para el estudio histórico, etnológico de este tema, pero es también una pregunta que

tiene interés y relevancia en un sentido específicamente psicoanalítico. Porque vamos

a ir viendo que preguntarse por el origen del surgimiento del totemismo, supone
entonces preguntarnos por la formación o la situación o la estructura previa al

totemismo y por cierto conjunto de transformaciones o situaciones de pasaje de una

hacia la otra, es decir, lo que había antes del totemismo y lo que llevó hacia el

totemismo, y eso es lo que tenemos que ver en esta clase.

Una primera hipótesis de Freud, que un poco esta ya presentada, es articular a

este tótem la figura del padre, pero específicamente lo que Freud hace es derivar de

esto una conclusión de interés psicoanalítico, porque dice: si el tótem es

efectivamente el padre, entonces podemos articular los dos mandatos más

importantes del totemismo, con los dos crímenes de Edipo. Esto es el respeto hacia el

padre, no poder matar al padre, y la relación incestuosa, en el caso de Edipo con la

madre, y lo que a lo largo de todo el texto, y a lo largo del Capítulo 4 también, uno

puede observar es un conjunto de paralelismos que Freud va haciendo entre el sujeto

primitivo, el sujeto de estas tribus, y el sujeto neurótico. Subrayemos la expresión

neurosis que es para nosotros una estructura de la cual nos vamos a dar cuenta.

Diría este paralelismo en dos aspectos muy importantes para nuestro tema: 

● Una articulación que se hace es entre el animal totémico, que pueden ser el

águila, pueden ser el lobo, el oso, el bisonte, del búfalo, etc. entre la figura de este

animal y la particular presencia de ese animal que aparece en las fobias infantiles, las

zoofobias. Vamos a estudiar, por ejemplo, en el tercer conjunto temático, el caso de

Juanito que tiene una fobia hacia los caballos, o hacia el caballo, y lo que se ve en las

fobias, tanto como en la relación que estos sujetos tienen con el animal totémico,

es una doble relación, bastante compleja e interesante, por un lado de cierta

atracción y a la vez cierto temor en algún sentido sagrado. 

● Por otro lado la articulación entre el tótem y el padre, y Freud acá va a

situar esa compleja relación que tiene el sujeto neurótico con el padre en términos de
una relación ambivalente, atravesada o dividida por relaciones de admiración y

amor, pero también de rivalidad y odio.

En el despliegue de esa pregunta, Freud se refiere al banquete totémico y a la

horda primitiva, que no son en principio elaboraciones o conjeturas de él, sino que

en el caso del banquete totémico lo toma de William Robertson Smith y de la horda

primitiva lo toma de Darwin, que se había referido en ese sentido.

●  El banquete totémico al que se refiere Smith es la conjetura desde el origen

del totemismo, habría tenido lugar una especie de banquete del clan, donde de

manera sacrificial y ritual, se mataba al propio animal del clan, pongamos por caso el

águila y se lo comían. Es decir que este animal sagrado, padre ancestral que estaba

prohibido matarlo y comerlo, excepcionalmente, en una suerte de fiesta o ritual, se lo

sacrifica y se lo come entre los miembros del clan. 

● Y el supuesto de Darwin que Freud toma de la horda primitiva, horda escrito

con H, se refiere a una formación comunitaria en algún sentido más primaria, o

antecesora de la noción de tribu o de clan que ya la suponemos como más compleja y

con otro grado de elaboración, de organización. Reforzado esto por el adjetivo

primitivo, ya horda ya designa algo más primitivo que la tribu, pero por las dudas

aparece en el texto adjetivada como una horda primitiva.

Tomando base en esto, hasta acá Freud introdujo algunas preguntas, arrimó todo

el planteo a su tema de interés, pero recién vamos a encontrar en el punto 5 del

Capítulo 4, la elaboración más importante que Freud hace del tema y lo presenta

como una hipótesis fantástica, una hipótesis particular y específica de Freud que él

la llama, literalmente una hipótesis fantástica, vamos a ver de qué se trata y esto es lo

que Lacan leyó como un mito, el mito de la horda primitiva y el mito del asesinato

del padre. ¿Por qué Freud lo presenta sin embargo como una hipótesis y no como un

mito? Bueno, porque él dice que en principio esto lo podemos conjeturar, pero no lo
podemos verificar, constatar empíricamente, entonces en ese sentido queda en un

plano fantástico. Pero, dice, en tanto hipótesis tiene la ventaja de establecer una

unidad entre elementos que hasta ahora aparentemente estaban separados y vamos

a ver más adelante de que se trata.

¿Cuál es esta hipótesis fantástica freudiana? Dice que en esta horda primitiva, a la

que se refiere Darwin, podemos suponer que un padre violento, a base de su propia

fuerza que eventualmente podría doblegar a la de los otros miembros de la horda,

posee a todas las hembras por un lado, y cuando algún otro macho o hijo quiere

disputar su lugar, bien, o lo expulsa de la horda o  lo castra o lo mata, dice Freud. Y

este pasaje quisiera leérselos, está en la página 143 dice “Un día, -sigue la hipótesis

fantástica freudiana- un día los hermanos expulsados se aliaron, mataron y devoraron al

padre y así pusieron fin a la horda paterna, unidos osaron hacer y llevaron a cabo lo que

individualmente les habría sido imposible”. 

Acá es interesante, en varios sentidos, esta hipótesis y esta expresión, por un lado

lo que Freud marca como límite de lo individual y lo que los hermanos solo pudieron

hacer en cierto lazo entre ellos, y cómo vamos a ver, lo que pudieron hacer que va

tomando la característica de una organización, de una institución de lo común y de lo

social entre ellos. Ahora, Freud advierte que una vez que el padre es asesinado, en

principio nada impediría que alguno de estos hermanos, tal vez con un poco más de

fuerza que los otros, simplemente quiera ocupar su lugar y devenir él entonces un

nuevo macho de la horda o un nuevo padre violento de la horda. Podemos conjeturar

que esto tal vez ocurrió y que esto se dio durante varios ciclos o periodos, pero en

tanto que esto ocurre, a nuestra conjetura, nuestra especulación, la situación

simplemente vuelve al punto de partida, porque basta que cualquiera de los

hermanos que ahora se erige como el nuevo macho o padre violento, es suficiente

para que el resto de los hermanos vuelva a unirse y lo maten. No hace falta mucho
para que eso vuelva a ocurrir. Entonces Freud empieza a conjeturar que en esta

historia, se produce una diferencia significativa cuando, efectivamente, ninguno de

estos hermanos ocupa el lugar del padre muerto. Acá ya nos vamos acercando al

terreno donde empezamos a entender qué significa que el padre simbólico es el

padre muerto, vamos más despacio, lo vamos a retomar unos minutos más adelante.

Otro elemento que Freud localiza a partir de la ambivalencia frente al padre, es que

estos hijos de la horda, por un lado rivalizaban con este padre y lo odiaban por que

les era un obstáculo, pero también lo amaban y lo admiraban, y en algún sentido

querían ser como él y ocupar su lugar. En función de eso, dice Freud, que luego de

que los hijos matan a este padre sienten culpa y este es, para Freud, uno de los

orígenes o de las interpretaciones de la culpa en las neurosis, la culpa del sujeto

neurótico. Pero un elemento importante que Freud observa es que una vez que el

padre es asesinado, está muerto, se vuelve más fuerte que cuando estaba vivo.

Fuerte evidentemente en otro sentido, porque lo que este padre les impedía hacer a

los hijos ahora ellos comienzan a prohibírselo, y esto es la prohibición del incesto.

Fíjense que en la horda primitiva no había prohibición del incesto, no había

prohibición y no había ley como tal, la única “ley” entre comillas que imperaba era la

fuerza de este padre, si es que cabe padre llamarlo padre, sino podemos llamarlo de

este macho de la horda.

Entonces lo que Freud observa es que cuando los hermanos unidos asesinan al

padre, lo asesinan y lo devoran y ninguno ocupa su lugar, es en ese lugar del padre

muerto que queda vacío, que instituyen o localizan a un tótem, símbolo del padre

muerto. Y a partir, fíjense, a partir de este lugar vacío y del símbolo que se pone en

ese lugar, se instituye o adviene la ley. La ley en dos aspectos: en el sentido de la

prohibición del incesto y en el sentido del respeto al padre, de no matarlo. Si ustedes


quieren es una doble ley, pero que tiene una parte que aplica al objeto, y una parte

que aplica a la propia ley, como si dijéramos, esto no se puede hacer y además no se

puede transgredir esta ley que en un algún sentido funda la misma prohibición. 

Como decíamos antes, esta forma de culto, en algún sentido al tótem configura la

primer religión que podemos concebir o incluso la primer matriz a partir de la cual se

derivan las posteriores religiones, lo que Freud observa es como en muchas

religiones, muchos sistemas religiosos muy importantes que nos llegan hasta hoy,

vemos cómo se han desarrollado, prolongado y conservado muchos de estos

elementos. Piensen por ejemplo, en la culpa y en el respeto al padre, Freud se detiene

por ejemplo en el cristianismo donde es muy notoria la figura del banquete, en algún

sentido, la muerte de Cristo, en un sentido sacrificial y beber de su sangre y la

comunión digamos, el cuerpo de Cristo a través de la comunión o, si ustedes quieren,

el pecado original articulado también a la culpa en función de este asesinato

primordial al padre.

Freud extrae entonces de este padre, asesinado y del tótem que va a ocupar su

lugar, un origen común de ciertos elementos que parecian no estar conectados, que

son por un lado, lo religioso como tal, la organización social, la prohibición del

incesto y la exogamia y la trasmisión generacional que esto supone, porque los

nuevos miembros del clan, en algún sentido van heredando todos estos aspectos

desde el respeto al padre, la culpa hasta el propio crimen que dio origen a todo este

desarrollo.

Bueno y en qué sentido vamos ubicando en todo esto uno de los antecedentes del

padre en Lacan y de esto que situamos como el padre simbólico como un padre

muerto, como el padre muerto. Fijense lo que hemos situado es un símbolo: el tótem,
que no es el padre, sino que lo representa, es una manera de pensar lo que Lacan

llamó Nombre del Padre, el significante Nombre del Padre, uds van a ir viendo, irán

leyendo el seminario 3, el seminario 5 y en estas clases dedicadas a la función

paterna, que Lacan habla del padre, se refiera a la función paterna, pero que en algún

momento introduce una precisión que tenemos que destacar que es llamarlo Nombre

del Padre, y no meramente padre, no solamente el significante padre sino el

significante del nombre del padre, esto que parece una sutileza o una sofisticacion sin

embargo tienen toda su relevancia porque es, digamos, no el padre como tal sino el

acto o la función de alguien que interviene en su nombre, en nombre de ese

significante, a título de padre. Si lo articulamos con todo este desarrollo de tótem y

tabú podemos decir que es la función de un lugar vacío, aquel del padre muerto

desde donde se articula una ley.

Fíjense, la ley se funda, o parte, o se articula desde un lugar que se deja vacío,

aquel lugar del padre muerto. A lo que podríamos oponer o contrastar un lugar no

vacío, en algún sentido podríamos llamarlo lleno, ocupado, tomado por un padre que

no encarna la ley sino que ejerce su propio capricho, que incluso podríamos decir que

es abusivo llamarlo padre, podríamos decir que es el macho de la horda, porque

justamente lo que estamos articulando a la función del padre es la ley. 

● Respecto del primero, del macho de la horda, el sujeto queda tomado como

objeto de goce, goce de su puro capricho o arbitrariedad.

● En el caso del segundo, por la ley que precisamente prohíbe el goce incestuoso

es que el sujeto puede fundarse como tal. 

Esta diferencia entre un lugar vacío desde donde se articula una ley y un nombre,

recuerden que el tótem es lo que los nombra a los miembros del clan, esto se puede

articular con otra manera como Lacan define a la función paterna en el Seminario 22,
donde dice que el padre es un agujero que como un torbellino puede tragar. Pero

también es un agujero desde donde sale un nombre. Bueno,  este nombre es al que

Lacan se refiere como nombre del padre, función, donde se articula una ley.

Hay que resaltar que cuando decimos padre, nos referimos a una función y no a la

figura parental de un hombre o de un varón, si ustedes quieren, como también ocurre

con la madre, en la metáfora paterna vamos a hablar del nombre del padre y del

deseo de la madre.

Bueno son funciones, no debemos imaginalizarlos, incluso si ustedes quieren hay

una confusión que puede darse porque si pensamos en Tótem y tabú, e intentamos

localizar la figura del deseo y del goce del otro, esto parece encarnado en la figura del

padre y si lo imaginarizamos es un varón, pero en la metáfora paterna, sin embargo,

esto parece localizado en la madre nuevamente si lo imaginalizamos, es el deseo de la

madre. Entonces, bueno, es la madre o es el padre ¿no? Este lugar donde se localiza

un deseo y un goce, donde el sujeto puede quedar tomado como objeto. No es en

sentido de las figuras parentales, de la madre o del padre, sino como funciones, la

función de estructura, la función de la ley y la función del deseo. La ley en tanto que

permite la constitución de una comunidad, en Tótem y tabú es el clan totémico, y

fundar un sujeto posible a partir de la exogamia.

Llegados a este punto, si volvemos sobre esta hipótesis que Freud plantea como

fantástica, precisamente porque no puede contrastar empíricamente, podríamos

decir que para el psicoanálisis ya pierde, y en algún sentido, interés verificar o

contrastar históricamente esta hipótesis, en todo caso ese puede ser un trabajo para

la historia, la etnología, y se vuelve relevante la lectura que hace Lacan de esta

construcción como un mito. La función de un mito en tanto que localiza o instituye un

valor de verdad para el sujeto, y en lo que venimos trabajando en este conjunto


temático como una clínica de la escucha y no de la mirada en el sentido de lo que

podría ser en este caso la mirada como la observación empírica de contrastación

empírica histórica, sino lo que puede escucharse, bueno, cuando un paciente habla,

en lo que dice, y localizar ahí lo que puede ser la lógica de un texto por un lado, y

articulada a esa lógica que economía libidinal se pone en juego, poder localizar más

específicamente la función de este símbolo o de este significante. Símbolo y

significante son cuestiones muy distintas en el marco de esta clase las estoy tomando

como si fueran sinónimos para hacer esta articulación del significante del nombre del

padre con este tótem que en algún sentido es un símbolo del padre.

Entonces les decía la lógica de un texto y una particular economía libidinal,

podríamos hacer un contrapunto entre dos coordenadas: 

● Por un lado un lugar vacío que es origen de una ley, donde se pone en juego la

referencia al padre muerto o 

● Por otro lado un lugar que podríamos llamar no vacio, en algún sentido lleno,

ocupado o si ustedes quieren, no atravesado por la ley, por la prohibición del incesto

y a partir del cual el sujeto es tomado como objeto. Referencia que podemos,

siguiendo la tensión con el padre muerto, articular con un padre vivo, con lo que

puede estar de vivo del padre.

Metafóricamente si ustedes quieren en nuestro lenguaje existe la expresión

“hacerse el vivo” y podríamos decir que se articula como una posición en algún sentido

que se entiende más allá o por encima de la ley, en este caso de Tótem y tabú o en

algún sentido de bueno, uno de estos hermanos que ocupa el lugar que se presupone

debe permanecer vacío, es decir el lugar del padre muerto que se deja vacío, que

ninguno ocupa porque desde ahí es desde donde se instituye una ley. Hacerse el vivo
supone también en algún sentido pretender ocupar el lugar que debe permanecer

vacío.

Hagamos entonces una síntesis de las ideas que fuimos desplegando, un poco

reconstruyendo el sentido general. Recuerden que el texto de Freud va desplegando

en los primeros puntos una descripción del planteo del tema, va planteando

preguntas, va relevando conjeturas y es en el punto cinco específicamente, donde

elabora una hipótesis muy específica, muy singular y van a ver que en los puntos 6 y 7

va extrayendo conclusiones de esta hipótesis. Hagamos entonces una reconstrucción:

Partimos del supuesto de una horda primitiva, dominada por un padre violento, o

si ustedes quieren un macho violento de esta horda, porque en el sentido estricto

vamos a reservar la palabra padre para articularla con la ley y en ese sentido no

asociamos la presencia de una ley a este macho de la horda, que posee todas las

hembras y que, dice Freud, expulsa, castra o mata a los hijos o a los otros machos que

quieren disputar su lugar. Esto se da en esta coordenada hasta que el resto de los

hermanos, de los machos se reúnen en alianza, lo matan y se lo devoran, dice Freud,

en un gesto digamos, la devoración, en un gesto de identificación con él. Pero como

además de rivalizar con él y de odiarlo por eso, también lo amaban y en algún sentido

lo admiraban y querían ocupar su lugar, sienten culpa, dice Freud, por el crimen que

cometieron, por eso en este punto, como muerto, padre tiene más fuerza que como

vivo, más fuerza y más eficacia, porque lo que estando vivo les impedía, el acceso a

las hembras, ahora como muerto son ellos mismos los que se lo prohíben pero

ahora en su nombre. Fíjense como es una prohibición que actúa no por la fuerza del

padre, sino por la fuerza de su nombre.

De esta manera entendemos que el padre simbólico al que se refiere Lacan es

el padre muerto y no precisamente el padre vivo. En el lugar de este padre


muerto, lugar que nadie ocupa, que se deja vacío, sitúan un tótem que

simbólicamente lo representa. Y respeto al padre se expresa en la prohibición de

matar y comer a este animal totémico que ahora adquiere un valor y un

carácter sagrado. El banquete totémico es, en algún sentido, la excepción que

sostiene en este sentido esta regla, no que la transgrede sino que la sostiene en este

caso, porque como un acto ritual conmemorativo, el banquete totémico, se da

excepcionalmente que se mata y se come a este animal totémico entre todos los

miembros de la comunidad y del clan en un gesto que manifiestan una unión y una

identificación entre ellos. De esta manera entonces se funda para Freud, por un lado

la prohibición del incesto y la exogamia, pero también el respeto a la ley del padre

como tal.

Bien, como conclusión general entonces de esta clase, y ya camino a una

articulación con lo que van a ver en la próxima clase sobre la función del padre como

una carretera principal, y lo que están viendo esta semana y la próxima en clases de

teóricos y seminarios, la metáfora paterna y los tres tiempos del Complejo de Edipo,

tengamos entonces presente que lo que hemos visto son, en algún sentido, dos

tiempos y dos coordenadas: 

● En primer lugar un primer tiempo de la horda primitiva donde no opera en

sentido estricto ninguna ley, sino podríamos decir el capricho o la fuerza de uno que

está como exceptuado, 

● Luego a efectos de su muerte y la instauración de un tótem, un segundo

tiempo donde se pone en juego una ley, ley que ya no es el capricho de uno, sino que

es una institución, que como tal, los atraviesa a todos y los constituye como clan y

como comunidad.
Por otro lado en términos estructurales, de las grandes estructuras que vamos a

estudiar en los próximos conjuntos temáticos, el conjunto de psicosis y el conjunto de

neurosis, este texto de Freud nos ofrece dos grandes coordenadas estructurales, en

algún sentido diferentes y también dos economías libidinales diferentes, esto es lo

que estamos estudiando ahora a través de la función del padre como ley en la

metáfora paterna, y cómo esto se pone en juego en una dialéctica con el deseo y con

el goce del otro.

Bueno, me despido entonces, les mando un saludo, espero haber sido lo más claro

posible, cualquier consulta me pueden hacer llegar y desde ya espero que lectura

mediante el texto de Freud continúen trabajando el tema con vuestros docentes de

Trabajos Prácticos.

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