IMPRESIONISMO, OBRAS Y AUTORES

Movimiento artístico que surge en Francia en 1873 cuando realizan la primera exposición colectiva en
los salones del fotógrafo Nadar.

Los pintores impresionistas rechazaban los mandatos de la Academia Francesa de Bellas Artes, que
indicaba cómo había que pintar, y patrocinaba las exposiciones de los pintores clásicos. Por eso
realizaron su primera exposición en el que se llamó el Salón de los Rechazados en 1863, lugar en el que
expusieron quienes no eran aceptados en el Salón Oficial.

El pintor impresionista Claude Monet, con su cuadro “Impresión: sol naciente” 1872,  dio pie para que
un crítico, en un tono despectivo denominara “impresionistas” a todos los pintores que habían
participado en la exposición.

Partiendo de las investigaciones en el campo de la física y de la óptica, según los cuales la luz no es
blanca, sino que está compuesta por todos los colores, comenzaron a pintar observando y
representando la realidad que veían, de otra manera.

Era necesario para ello ver la luz en todas las cosas, y tratar de captar de manera rápida, el efecto fugaz
de la luz sobre los elementos. Todas las cosas tienen color, decían ellos, incluso las sombras (rechazan el
negro). Y partiendo de la composición de la luz por todos los colores, aplicaban sobre la tela pinceladas
yuxtapuestas de colores puros, pretendiendo que fuera el observador quien, en su retina, realizara la
mezcla del color buscado. La pintura realizada no podía ser demasiado elaborada, ni las formas
excesivamente definidas. Sólo se aplicaban manchas de color, y de manera rápida, con pinceladas
sueltas, ya que la luz sobre los elementos cambia a cada momento.

Captar la luz y la atmósfera fue el interés del pintor impresionista y también manifestar en la obra como
se siente el artista ante lo que percibe.

El tema central será el paisaje, realizado al natural. También se presentará el mismo motivo en distintos
momentos del día o de las estaciones del año. Se pierde la línea del dibujo, así la perspectiva, las formas
y los volúmenes son sugeridos por pinceladas de color, de esta forma se consigue la impresión fugaz.

Entre otros, fueron pintores impresionistas: la influencia de Edouard Manet, Claude Monet, Auguste
Renoir, Camille Pissarro, Edgard Degas,  y Alfred Sisley. Mujeres impresionistas: Berthe Morisot, y Mary
Cassatt. 

AUTORES

EDOUARD MANET (1832-1883).

Se le considera el precursor del Impresionismo, junto a Corot y los paisajistas de Barbizon. Los pintores
del grupo admiraban su obra, pero él no se veía dentro. Manet no descompone las formas ni aplica la
teoría del color como otros impresionistas, sino que usa tintas planas como en los grabados japoneses.
Su arte se alejaba de algunas características del Impresionismo, por como utilizaba la perspectiva,
pintaba con el color negro, se le reconoce también por utilizar el blanco, o que el tema protagonista
fuera la figura humana, y a diferencia de ellos, realizaba su obra en el estudio.
Después de pintar la obra Olimpia, viaja a España donde queda fascinado por la obra de Velázquez y
Goya. De vuelta a París, la pintora Berthe Morisot le presenta a los compañeros impresionistas.
Obras como “Estudio flotante” o “El bar del Folies Bèrgere” tienen una influencia impresionista. Otras a
destacar son “ Almuerzo sobre la hierba” 1863, “Olimpia”….
ANÁLISIS

EL BAR DEL FOLIES BÈRGERE 1882, óleo sobre lienzo.

Es una obra que nos muestra su último estilo, nos presenta en primer plano el retrato de una camarera,
utiliza el espejo como elemento compositivo. En una perspectiva imposible la camarera, con cara de
indiferencia atiende a un hombre que es el propio pintor. Todos los elementos están y sin embargo, de
un modo indefinido el resto, recordando algunas obras de Renoir. Todo es luminosidad, bullicio y
ambiente nocturno representado en perspectiva lineal. Las figuras de la derecha dan peso para que la
composición no quede tan centrada por la presencia de la camarera. Predominan los tonos neutros,
pardos, mientras que una ligera paleta de color se encuentra en el primer plano.
EL PÍFANO 1886, óleo sobre lienzo.

 El artista muestra a un pequeño instrumentista vestido con el uniforme de la Guardia Imperial.

 La figura se recorta sobre un fondo neutro que nos separa de los espacios indefinidos de la pared y del
suelo; sin embargo, el joven no resulta una figura plana ni se eleva sino que, al contrario, es muy
volumétrica y se asienta perfectamente en el espacio. Esta sensación es conseguida al situar una
pequeña sombra entre sus piernas, que recuerda al cuadro Pablo de Valladolid que había hecho más de
dos siglos atrás el genial Velázquez y que Manet había admirado profundamente. También incorpora
novedades, aquí se observa claramente la influencia de la estampa japonesa, especialmente en los
pantalones, planos y realizados con manchas lisas de color Es destacable cómo retoma su afición por los
contrastes entre tonos claros y oscuros, que refuerza mediante la supresión de las tonalidades
intermedias.
ESTUDIO FLOTANTE 1874, óleo sobre lienzo.

Esta obra supone un emotivo homenaje de Manet a su amigo Claude Monet,  protagonista de esta
escena con su esposa Camille. El empleo de tonalidades más claras que de costumbre, la pincelada
rápida y suelta, y el deseo de captar la luz natural indican un importante cambio en el estilo del
maestro. Las dimensiones del lienzo indican que se realizó en el estudio, a pesar de la técnica libre
empleada. También resulta destacable el efecto fotográfico de la imagen, una de las novedades del
momento. Luminosidad, y los colores complementarios habituales, azules-naranjas, verdes-magentas,
componen la imagen.
DESAYUNO EN LA HIERBA. 1863. Óleo sobre lienzo.

Este gran lienzo fue expuesto y criticado en el Salón oficial llamado el de Los Rechazados. A pesar de
haber visto cuadros clásicos de mujeres desnudas junto con hombres vestidos, como en el Concierto
campestre de Tiziano, en esta obra la imperante luminosidad del cuerpo desnudo en contraste con los
colores oscuros sin valor de los trajes de los hombres, hace mas impactante la imagen del contraste.
Pero en verdad es la posición social burguesa de la mujer, al igual que la de los acompañantes lo que
además se diferencia de los cuadros clásicos donde las mujeres desnudas solían ser musas.

Apreciamos un gran foco de luz en la escena donde a pesar de ello no crea sombras, al igual que las
estampas japonesas. La dirección lumínica nos lleva a la mujer en el Sena, y en esa perspectiva cónica se
abocetea un fondo paisajístico al igual que Velázquez, tan admirado por Manet.

Cabe reseñar los negros que aparecen y que en su momento fueron criticados al no considerarlo color.

Las direcciones de las miradas dan dinamismo a la escena campestre.

CLAUDE MONET (1840-1926)

Su obra es ejemplo de pintura impresionista. Su pintura es una experimentación de la luz y el color al

aire libre. Establece los principios o planteamientos del impresionismo y anima a Pisarro, Renoir o Sisley
a exponer juntos en el estudio de Nadar.
Su cuadro “Impresión, sol naciente” de 1874 expuesto en el salón de los rechazados, fue criticado como
impresionismo pero dio nombre al movimiento.
Inicialmente incorpora la figura humana, pero se centrará en el paisaje en el resto de su obra,
centrándose en los efectos de la luz y el color en la naturaleza.
Contemplamos su interés por expresar paisajes que cambian por el efecto de la luz. Esto le llevará a
pintar series de un mismo tema a distintas horas del día o distintas épocas del año.

Conocemos obras como: La catedral de Ruán, El Parlamento, Las amapolas, El puente de Argenteuil..

ANÁLISIS

IMPRESIÓN, SOL NACIENTE 1872, óleo sobre lienzo

En esta obra el autor nos muestra tres botes de remos que navegan por el puerto de la Havre, mientras
al fondo, entre la niebla matinal y la humareda de las chimeneas de las fábricas, sale el sol.
Con una pincelada suelta y vigorosa, el pintor prescinde del dibujo centrándose en los efectos que la luz
del amanecer ejerce sobre los objetos. Los botes y las personas que navegan en ellos quedan reducidos
a simples manchas y la técnica utilizada es fruto de la espontaneidad e inmediatez que exige la pintura al
aire libre, además del deseo de captar no la representación real del amanecer en el puerto, sino la
impresión causada por el amanecer y los efectos que la luz matinal provocan en el agua, mientras el
horizonte donde el humo expulsado por las chimeneas, símbolos de la era industrial, se mezclan con la
neblina matinal. En una gama tonal alta, el color saturado del sol se complementa con los azules
dotados de mas y menos valor, en un paseo descrito a través de una perspectiva lineal.
EL PASEO 1871, óleo sobre lienzo

No es muy habitual encontrar obras de Monet en las que la figura humana tenga mayor relevancia que
el paisaje. Los protagonistas vuelven a ser Camille, su compañera, y Jean, su hijo. Vistos desde una
perspectiva contrapicada y situados sobre una loma donde el viento es mayor. El contra luz provoca una
sombra malva que domina toda la figura mientras que la sombra que ella proyecta es más oscura. Los
verdes iluminados por el sol son saturados, y como color quedan equilibrados en la sombrilla. Mientras
que Jean lo pinta más difuminado en el fondo, apreciándose apenas el color sonrosado de sus mofletes.
Una vez más la pincelada rápida, a base de pequeñas comas, se convierte en la configuradora del
conjunto, eliminándose las formas y dando dinamismo a esta luminosa obra.
LILAS DE AGUA 1915, óleo sobre lienzo

Los lirios, las ninpheas, los nenúfares, son una serie de 250 obras aproximadamente, realizadas entre
los años1890-1925.
A esta serie de cuadros Monet, le dedica sus últimos años, prescinde de referencias generales del
paisaje y los objetos, dejando solo el color de las plantas y los reflejos en el agua de un jardín diseñado
por él mismo en Giverny. Parte de esta obra la pintó con la enfermedad de cataratas en sus ojos.

Una saturada paleta de color dibuja con pinceladas que dibujan con soltura y determinación un espacio
encerrado de plantas y flores flotantes sobre un estanque. De nuevo los elementos determinantes del
Impresionismo, el agua y sus posibilidades de color y reflejos; el instante lumínico que muestra los
dorados en primer término y la pincelada grácil que muestra la frescura y a la vez el análisis de como se
siente el autor ante el detalle del momento.

CAMILLE PISSARRO (1830-1903).

Su obra inicial está influida por la pintura al aire libre de Corot y Millet, paisajistas de Barbizon. A pesar
de ser el decano de los impresionistas y haber sido maestro de Cézanne, Gauguin o Mary Cassatt,
compañero de Monet en Londres y ser el único junto con Berthe Morisot en haber participado en las 8
exposiciones del grupo, su nombre ha permanecido eclipsado por los otros grandes pintores. Su obra se
centra en el paisaje, tanto rural como urbano, pintando en ellos a la gente en sus tareas, tratando otros
temas como bodegones o figuras. En sus últimas obras su pintura se acerca más al puntillismo.

Conocido también por sus escenas urbanas como la serie del Bulevar de Montmartre, de París, es un
ejemplo de sus escenas urbanas. Representa la misma vista del bulevar bajo distintas condiciones de
iluminación y atmosféricas.

RECOLECTA DE HENO EN ERAGNY 1901, óleo sobre lienzo.

ALFRED SISLEY (1839-1899)

Procedente de Inglaterra. La guerra franco-prusiana de 1870 arruina a su familia y le obliga regresar a

Londres. A partir de este momento decide dedicarse a la pintura, pero con una situación económica muy
frágil de la que no despegó hasta su muerte.
La Pintura de Sisley es comparable con la Monet un paisajista a plein air intentando captar los
momentos fugaces de los elementos. 
Como Monet disuelve las formas en colores formando un mensaje estético de cualquier situación
incluso en momentos dramáticos, como los cuadros que realizó de las inundaciones de Port-Marly.
Igual que Monet capta el mismo paisaje en diferentes épocas del año, y al igual que Pissarro en algunos
de sus paisajes aparece un toque humanista con personajes en ellos.

NIEVE EN ARGENTUIL 1878, óleo sobre lienzo

En una clave tonal alta describe esta perspectiva lineal con una paleta de color determinada por el
neutro blanco, grises y los cálidos pardos. La nieve como tema novedoso y lumínico.