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Asignatura Datos del alumno Fecha

Di cultades de Aprendizaje Nerea Aragonés Artajo 14/10/2021

Foro: Actuaciones de los docentes ante las di cultades de


aprendizaje del alumnado en el aula ordinaria
Planteamiento de la ac vidad

Como maestro, ¿qué estrategias seguirías ante un caso de apego ansioso-ambivalente? (Los niños
con es los de apego ansioso-ambivalente son aquellos que buscan la proximidad de la gura
primaria y al mismo empo se resisten a ser tranquilizados, mostrando agresión hacia ella) ¿y ante
un alumno con patrón de apego evita vo? (Cuando los padres no están en sintonía afec va con sus
hijos, o son distantes o intrusivos, causan a éstos mucha angus a. Los niños se adaptan a este
entorno que los rechaza construyendo estrategias defensivas de apego en un intento de sen rse
seguros, para regular o atenuar estados emocionales intensos y aliviar la frustración y el dolor.) ¿e
inseguro-desorganizado? (La mayoría de los niños y adolescentes maltratados enen este po
apego. Sus experiencias han sido tan dolorosas y caó cas que ni siquiera les han permi do
desarrollar estrategias defensivas para sen r la cercanía de su cuidador)

Voy a lanzarme a la piscina, sin conocer mucho los conceptos apego ansioso-ambivalente, apego
evita vo y apego inseguro-desorganizado, pero viviendo diariamente situaciones semejantes en
mi trabajo, el sector sanitario, concretamente la radiología.

Para poder comprender las conductas de cada uno de los es los de apego, he querido analizar
casos reales de niños entre 3 y 10 años que vienen a realizarse pruebas radiológicas, como RM
(Resonancia Magné ca) TC (Tomogra a Computerizada) o una simple radiogra a, pero a las cuales
deben entrar solos, y eso les asusta. También me gustaría compar r con vosotros los métodos que
u lizamos para recibir a los niños y hacer de un hospital, un lugar entretenido.

Principalmente, creamos un ambiente infan l con dibujos en las paredes simulando la entrada de
unos astronautas a la nave especial. Cuando pasan por recepción, les entregamos un libro que
cuenta la historia de un viaje a la luna y un pinta-colorea del espacio. Anterior al Covid-19, los TSID
(técnicos superiores en imagen para el diagnós co) se disfrazaban de astronautas y simulaban que
los pacientes, en éste caso los niños, eran los compañeros del viaje espacial.

Ante una situación de apego ansioso-ambivalente, es muy importante crear una atmósfera de
con anza, tranquilidad y seguridad alrededor del niño. Por mi experiencia, muchos padres son los
que transmiten el miedo e inseguridad cuando les comunicamos que el niño debe entrar solo a la
máquina, y ese sen miento lo captan desde muy pequeños y se refugian en él. ‘‘Mi padre/madre
siente esto, debe estar bien, voy a sen rlo yo también’’. Por lo que evitaría el contacto directo
padres-hijos minutos previos a la entrada a la prueba médica. Por ello proponemos la lectura y el
dibujo, eso le evade de lo que sucede a su alrededor y se sienten en calma, concentrados y
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tranquilos.

En el caso del apego evita vo, he presenciado muchas situaciones idén cas a la descripción que
Míguela nos plantea sobre este apego: ‘‘Cuando los padres no están en sintonía afec va con sus
hijos, o son distante o intrusos, causan a éstos mucha angus a’’. Recuerdo un caso en par cular,
una niña de 8 años, venía con toda la familia (padre, madre, o, a, hermano mayor, abuela,
abuelo…) a realizarse una Resonancia Magné ca cerebral, por un posible tumor. Era una niña muy
retraída y vergonzosa, intenté hablar con ella, explicarle la historia del viaje a la luna y le entregué
el libro y el pinta-colorea. A los padres no los sen muy recep vos en ese momento (muchos
efusivos se lo entregan al niños y les dicen‘¡anda que chulo, da la gracias!’) pero entendí que no
era agradable la situación médica de su hija. Tiempo después observé a la niña en un asiento
alejada de sus padres, con el teléfono móvil, el libro y el pinta-colorea a un lado y muy decaída. Los
familiares sin contacto visual hacía ella, alguno incluso dándole la espalda o en la puerta de salida
fumando… Pensé que una niña de esa edad, ya podía conocer lo que sucedía en un hospital y más
aún necesitaría apoyo y cariño para sobrellevar la situación. Se sen a la despreocupación de los
padres a kilómetros y eso me dio mucha lás ma. No supe actuar en ese momento pero tras leer
vuestras intervenciones, sé lo que debería haber hecho:

• Respetar su espacio para que no sienta rechazo, pero mostrarle que puede con ar en mí, a
través de preguntas como: ¿cuál es tu comida favorita? o ¿cuáles son tus hobbies? Y
compar r los míos.
• Proponerle adivinanzas y valorar el esfuerzo al lograrlo, felicitándole o premiando con un
caramelo (por ejemplo)
• Y si tuviera más empo, le enseñaría cosas del hospital que no conociera y que así
pieda contárselas a su familia o amigos. Eso reforzaría su autoes ma.

Por úl mo, el apego inseguro-desorganizado:

Siguiendo con la línea de vivencias en el hospital, no hace mucho un niño de tan solo 5 años,
rompió el libro del viaje a la luna, hoja por hoja hizo una montaña de bolas y con ellas intentaba
encestar en una papelera. Chillaba, pataleaba, corría, saltaba… No había quién lo controlara,
literalmente, porque la madre (todo el empo al teléfono) no hizo nada. Se mantuvo al margen de
lo que ocurría con su hijo en la sala de espera, hasta el momento de la llamada por megafonía, que
lo agarró y casi arrastró a la sala de pruebas. Ahí mis compañeros, corregirme si me equivoco,
actuaron de la mejor manera posible. Calmaron al niño, cogieron otro libro y de forma autónoma
hicieron que se lo leyera, le preguntaron qué tal su día en el colegio y en casa, trabajaron la
seguridad dentro de la máquina haciendo simulaciones previas (tenemos un mbre por si el
paciente se agobia dentro, al ser una máquina muy estrecha) e incluso le retaron a que si adivinaba
cuántos minutos duraba la prueba, le dejaban ponerse el casco de astronauta.

Me ha gustado mucho este tema, creía desconocerlo por completo y no me atrevía a intervenir,
pero me he dado cuenta que en el hospital vivo diariamente situaciones relacionadas con el apego
y me he enriquecido de cada una de vuestras intervenciones.
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