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UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR

FACULTAD DE CIENCIAS MÉDICAS


CARRERA DE MEDICINA
PEDIATRÍA – EMERGENCIAS PEDIÁTRICAS

AHOGAMIENTO

Autor: Harold Daniel Agila Llumiquinga


Docente: Dra. Alexandra Rosero
Semestre: 9no – M03
2019 - 2019
Índice

1. Introducción………………………………………………………………………….2

2. Definición……………………………………………………...………………..…...2

3. Epidemiologia…………………………………………………………….....………2

4. Ahogamiento en Ecuador………………………………………………………….4

5. Mecanismos patogénicos y mecanismos subyacentes………........................4

6. Deportes relacionados al ahogamiento…………………………………………..6

7. Lesiones……………………………………………………………..………………7

8. Fisiopatología…………………………………………………..…………………...8

9. Diferencias entre ahogamiento accidentar e intencional………………....…..11

10. Diagnostico……………………………………………………….……………....12

11. Tratamiento……………..……………………….……………………………….13

12. Pronostico…………………………..……………………….……………………16

13. Prevención………………..…………………………………………….………..18

14. Recomendaciones generales….……………………………………………….19

15. Bibliografía………………..……………………………………………………...20

1
1. Introducción

El ahogamiento es una de las causas principales de muerte infantil en todo el


mundo, a pesar de que el tratamiento ha evolucionado en los últimos años. La
prevención constituye el paso más importante para disminuir las lesiones
causadas por ahogamiento. El pronóstico depende de la rapidez del rescate y
reanimación a los pacientes ahogados. Muchas víctimas aparénteme muertas
pueden ser salvadas si se les aplica intensa e interrumpidamente medidas de
resucitación. El ahogamiento es un evento tan importante como lo son los
accidentes automovilísticos, por lo inesperados, repentinos y catastróficos, sin
embargo, ambos son prevenibles (1,2).

2. Definición

En la literatura, la definición de ahogamiento es confusa o no existe.


Anteriormente, los incidentes de ahogamiento se describían como “húmedo” o
“seco” para designar si el liquido era aspirado o no, y “ahogamientos” o “casi
(3)
ahogamiento” para designar si al paciente que sobrevivió o no .

En su esencia, el ahogamiento se define como insuficiencia respiratoria que se


produce debido a la sumersión o la inmersión en un líquido. La conferencia de
consenso de Utstein en 2003 determino que esta definición implica cierto nivel
de aspiración, lo que hace que el término “ahogamiento seco” sea impreciso y
el termino “ahogamiento húmedo" redundante. Similarmente, según esta
definición, “ahogamiento” no implica la muerte, así que en lugar de usar “casi
ahogamiento” para describir la supervivencia, ahora los episodios de
ahogamiento deben informarse como “fatales” o “no fatales”. Cualquier evento
de inmersión o sumersión sin insuficiencia respiratoria debe ser considerado
como un “rescate” y no una variación de ahogamiento (4).

3. Epidemiologia

Edad: Una revisión sistemática que analiza la epidemiologia por ahogamiento


en países de bajos y medios recursos informa una mayor tasa de eventos de
ahogamiento por cada 100,000 personas en edades de 0 a 4 años y de 5 a 14
años, lo que quiere decir que los niños pequeños corren mayor riesgo de
ahogarse (5).

2
Género: El género masculino corre más riesgo de ahogarse que el femenino y
representa el 75 % de los casos totales analizados en los países de bajos y
medios recursos. Los hombres generalmente exhiben un comportamiento más
riesgoso que las mujeres y, por lo tanto, se exponen a situaciones más
peligrosos cuando están cerca de cuerpos de agua. Además, los varones
jóvenes son empleados más frecuentemente en embarcaciones y en trabajos
centrados en el agua. Por último, en muchas culturas, a los niños se les da más
libertad fuera del hogar y frecuentemente se bañan en estanques y arroyos,
mientras que a las niñas se les da menos libertad para deambular afuera y se
(5)
les restringe el baño dentro de casa .

Zona geográfica: Las áreas rurales en los países de bajos y medios recursos
representan un riesgo significativamente mayor que las áreas urbanas para las
posibles víctimas de ahogamiento. Las cisternas y los pozos se usan como
fuente de agua en comunidades rurales pequeñas. Por lo general, están cerca
de la casa y frecuentemente están descubiertos. Las corrientes y los estanques
también son características geográficas comunes en comunidades rurales y
suelen ser escenarios de juego para los niños. Estos pequeños cuerpos de
agua son la ubicación mas frecuente de los eventos de ahogamiento. Cabe
recalcar que existe un numero relativamente mas bajo de muertes por
(5)
ahogamiento en piscinas, en comparación con los países de altos ingresos .

Hora: La mayoría de los incidentes de ahogamiento ocurren en el día. Estos


eventos ocurren cuando las personas están fuera de sus hogares y por lo tanto
(5)
corren un mayor riesgo de ahogarse en un cuerpo de agua .

Habilidad para nadar: La revisión sistemática de Mathew et al encontró que el


86% de las victimas de ahogamiento no tenían ninguna habilidad para nadar, y
el 29% tenia cierta capacidad para nadar. Existe un beneficio en brindar a los
niños lecciones de natación para reducir la incidencia de ahogamiento, pero
desafortunadamente, las clases de natación no tienen prioridad en los países
de bajos recursos (5).

Supervisión: La supervisión de adultos evidentemente reduce la incidencia de


eventos de ahogamiento, sin embargo, en muchas comunidades rurales e
incluso urbanas, el adulto en el hogar, generalmente la madre, a menudo esta

3
ocupada con otros niños y las tareas domésticas. Como resultado, no pueden
vigilar a sus hijos todo el tiempo y en estos momentos de distracción los niños
corren mayor riesgo de ahogarse (5).

4. Ahogamiento en Ecuador

En un artículo publicado en 2017 y realizado por Yue Wu et al. se evidencia


una reducción en la tasa de mortalidad por ahogamiento entre los años 2000 y
2013 en 21 países, entre los cuales se encuentra Ecuador, quien experimento
una tasa de reducción correspondiente al 13 %. En general, los países de altos
recursos fueron quienes experimentaron un aumento en la disminución de la
(6)
tasa de mortalidad de hasta un 80% (Republica de Korea) .

En 10 años, la mortalidad en Ecuador fue sobre todo por ahogamiento no


especificado, seguido de ahogamiento en cuerpos naturales de agua, piscinas
y bañeras (Figura 1) (6).

Figura 1. Tendencias en la reducción de la tasa de ahogamiento involuntario


de menores de 20 años en Ecuador (6).

4
5. Mecanismos patogénicos y condiciones subyacentes

Los niños y ancianos suelen ahogarse cuando caen por accidente al agua de la
bañera, de la piscina o de fuentes naturales, siendo incapaces de salir del agua
por sí mismos, debido a la negligencia de sus cuidadores. También se ha
confirmado en varios estudios que diversos cuadros subyacentes se asocian al
ahogamiento, como:

A. Epilepsia: Individuos que tienen epilepsia tienen un riesgo hasta 19


veces mayor de ser victimas de ahogamiento. El riesgo de ahogamiento
en niños con convulsiones es máximo en las bañeras y en las piscinas
(2)
.
B. Etiologías cardíacas: Como arritmias, miocarditis y síndromes de QT
largo, se han detectado en algunos niños que fallecen súbitamente en el
agua, sobre todo en aquéllos con antecedentes familiares de síncope,
parada cardíaca, ahogamientos previos o prolongación del QT. Algunos
niños con síndrome de QT largo son diagnosticados erróneamente como
epilépticos (2).
C. Mal trato infantil: El ahogamiento también puede ser intencionado. La
historia del incidente, que cambia o que es incompatible con el estado
de desarrollo del niño, es la clave para reconocer un ahogamiento
intencionado. La exploración y otras lesiones físicas rara vez
proporcionan pistas. Los malos tratos infantiles suelen reconocerse más
en los ahogamientos que se producen en las bañeras. Los suicidios
suelen producirse en nadadores que practican a solas en aguas abiertas
(2)
.
D. Alcohol y drogas psicotrópicas: El alcohol es un factor de riesgo bien
conocido en los ahogamientos involuntarios, y las drogas psicotrópicas
pueden ser un factor de riesgo pasado por alto, debido a sus efectos
sobre la función psicomotora y la cognición. Entre el 30% y el 40% de
los adolescentes y los adultos que fallecen tienen valores de alcohol
positivos en sangre. El alcohol y las drogas puede deteriorar el juicio,
conduciendo a la adopción de comportamientos de riesgo, disminuye el
sentido del equilibrio y la coordinación y amortigua la capacidad de
respuesta cuando alguien se encuentra en problemas. Además, un

5
adulto intoxicado puede vigilar peor a los niños que están cerca del agua
(1,2,7)
.
E. Deporte y ocio: Una gran parte de ahogamientos mortales se producen
en el transcurso de actividades de ocio. El ahogamiento es la causa más
importante de muerte asociada al deporte sin origen cardíaco. El
consumo de alcohol es frecuente durante el ocio en el agua, al igual que
la falta de uso de dispositivos de flotación durante actividades náuticas
(2)
.

Otras circunstancias para tener en cuenta son el tipo, temperatura y cantidad


de agua aspirada. El agua fría suele aumentar el período de tiempo en que la
víctima, especialmente en caso de niños, puede permanecer sumergida antes
del rescate, con posibilidades de ser recuperada. El agua fría, sin embargo,
puede también contribuir a la morbilidad y mortalidad por la producción de
hipotermia grave y arritmia cardiaca letal. La inmersión en agua muy fría puede
(1)
provocar un shock termo diferencial, responsable de muerte por inhibición .

6. Deportes relacionados al ahogamiento

Los deportes acuáticos, así como los deportes que se practican sobre el agua y
sobre el hielo, forman parte de la lista principal de practicas riesgosas, ya que
(8)
el entorno en si conlleva la posibilidad de muerte por ahogamiento .

Tabla 1. Deportes realizados en, sobre, cerca y debajo agua o hielo, que
pueden provocar el ahogamiento (8)
En el agua
Natación (piscina, agua natural, natación sincronizada, waterpolo y aeróbic
acuático), Surf y deportes de tabla (surf de remo, skimboard, kitesurf, esquí
acuático y otros)
Sobre el agua
Vela, canotaje, kayak y similares.
Cerca del agua
Pesca en roca, muelle y playa.
Bajo el agua
Buceo y apagón de aguas poco profundas.
Deportes de agua helada

6
(8)
Los mecanismos deportivos de ahogamiento son los siguientes :

A. Ahogamiento primario: Esta la situación más común en los deportes


acuáticos, que se produce al juzgar mal la capacidad para hacer frente
al entorno acuático o caer en el agua mientras se participa en el deporte
(8)
.
B. Ahogamiento secundario: Se clasifica como cualquier lesión/trauma o
enfermedad repentina que actúa como factor precipitante para que se
produzca la perdida de conciencia o que debilita mental o físicamente la
capacidad del atleta para enfrentar la situación acuática. El ahogamiento
en esta categoría se puede subdividir en tres clases: 1) Ahogamiento
causado por lesión/trauma. 2) Ahogamiento causado por cualquier
enfermedad repentina. 3) Enfermedad del buceo, que se puede dividir
(8)
por la necesidad o no de tratar con una cámara hiperbárica .

La "cadena de supervivencia de ahogamiento" se refiere a una serie de


intervenciones de seguridad del agua que, cuando se ponen en acción por
laicos o profesionales, reducen la mortalidad asociada con el ahogamiento
(figura 2) (8).

(8)
Figura 2. Cadena de supervivencia de ahogamiento .

7. Lesiones

Los hallazgos en las victimas fallecidas suelen ser muy diversos. Los tejidos
pueden presentar una coloración rosa pálida y la piel puede tener un aspecto
de carne gallina por acción del frio sobre los músculos pilo - erectores. El árbol
respiratorio suele presentarse lleno de un liquido viscoso como consecuencia
del edema pulmonar, que incluso puede salir por la nariz y la boca. A nivel
torácico y pulmonar se encuentran distendidos con abundantes petequias. El
examen microscópico puede mostrar elementos presentes en el agua del mar,

7
como arena, barro, algas o diatomeas. También puede existir congestión
capilar difusa en las paredes de los alveolos. El tracto gastrointestinal puede
estar lleno de líquido ingerido y de cuerpos extraños. También se pueden
observar diversos grados de alteraciones electrolíticas y los glóbulos rojos
están edematizados (1).

8. Fisiopatología

Las alteraciones más importantes derivan de los trastornos pulmonares y


equilibrio ácido base, de las alteraciones del volumen sanguíneo y electrolitos,
de la hemoglobina y hematocrito, de trastornos cardiovasculares y renales y,
(2)
finalmente, de las alteraciones neurológicas .

Alteraciones pulmonares y equilibrio acido-base: La consecuencia única


más importante del ahogamiento es la hipoxia. La hipoxia se produce tras la
aspiración de agua dulce o agua salada, pero los cambios fisiológicos que
contribuyen a la hipoxemia difieren en cada medio. En casos de aspiración de
agua salada o hipertónica, los alveolos se rellenan de líquido, pero permanecen
todavía perfundidos, con el resultado de un shunt intrapulmonar. Sin embargo,
el agua salada no altera de forma significativa el surfactante pulmonar. Si se
aspira agua dulce, el líquido es rápidamente absorbido, pasando a la
circulación. Este líquido hipotónico altera las propiedades del surfactante
pulmonar, de manera que su tensión superficial no desciende de forma
máxima. Estas alteraciones en el surfactante producen inestabilidad y colapso
alveolar, causa principal del shunt intrapulmonar e hipoxemia. Por otra parte,
además del agua, puede ser aspirado el contenido gástrico regurgitado,
(3,9)
provocando una neumonía añadida .

La hipoxia cerebral producida puede provocar, un grave edema pulmonar


neurogénico. Clínicamente es imposible diferenciarlo del edema causado por la
aspiración de agua (figura 3) (3).

8
Figura 3. A. Imagen característica de distress respiratorio agudo secundario a
ahogamiento. B. Alteraciones en el cerebelo de una niña ahogada en una
piscina (3).

Los gases demuestran la existencia de una hipoxia acompañada de


hipercapnia y acidosis. Aunque la severidad de la hipoxia arterial y de la
acidosis refleja la extensión de la lesión pulmonar, no debe utilizarse en la sala
(3)
de urgencias como valor pronóstico de supervivencia en ningún paciente. .

Alteraciones en el volumen sanguíneo y electrolitos: La aspiración de


líquido hipotónico (> 11 ml/kg) supone un aumento del volumen sanguíneo en
(3,9)
proporción directa con la cantidad aspirada .

La concentración de electrolitos en plasma puede variar dependiendo de la


cantidad y del tipo de líquido aspirado. Son necesarias grandes cantidades de
agua aspirada para que haya alteraciones significativas que amenacen la vida
del paciente (3,9).

Alteraciones en la hemoglobina y el hematocrito: Aunque estos hallazgos


no son frecuentes, en casos de aspiración de un gran volumen de líquido
hipotónico en un paciente hipóxico, se produce una importante hemólisis y
elevación de la hemoglobina plasmática, así como descenso del hematocrito
(3,8)
.

Alteraciones cardiovasculares y renales: En los casos de aspiración de agua


salada o dulce se pueden observar cambios en el trazado del
electrocardiograma. La fibrilación ventricular aparece en aspiración de grandes
volúmenes. La función renal se ve alterada excepcionalmente, puede aparecer

9
necrosis tubular aguda, inducida por la acidosis láctica y la hipoxia, así como
(3,9)
por la hemoglobinuria y la hemoglobinemia producidas por hemólisis .

8.1. Inmersión en agua caliente

La mayoría de los ahogamientos ocurren a temperaturas del agua por debajo


del punto de termo neutralidad. Termoneutral es el termino para la temperatura
del agua a la cual la perdida de calor es igual a la producción de calor, que es
de 35 °C. Sin embargo, algunos ahogamientos ocurren en las tinas de agua
caliente, mientras se vierte agua caliente sobre la cabeza o durante la natación
en agua tibia (9).

La termorregulación durante la inmersión en agua caliente es diferente de la


termorregulación en el aire ambiente caliente. En el aire ambiente, la
eliminación del calor corporal ocurre principalmente por evaporación del sudor
en el cambio de fase de un estado liquido a uno gaseoso. En la inmersión en
agua caliente, la alta humedad del aire ambiente alrededor de una bañera
permite una evaporación limitada del sudor por encima del agua, y, por lo tanto,
no contribuye al enfriamiento del cuerpo. Cuando aumenta la temperatura de
la piel, los termorreceptores cutáneos envían una señal al área preóptica,
causando vasodilatación cutánea, disminuyendo la resistencia vascular
(9)
periférica y aumentando la frecuencia cardiaca .

El aumento de la FC puede desencadenar arritmias ventriculares,


potencialmente peligrosas en combinación con vasodilatación periférica y
aumento de la viscosidad de la sangre. El ahogamiento por HWI es más
probable que ocurra durante una inmersión prolongada a alta temperatura y al
salir de la bañera (9).

8.2. Inmersión en agua fría

El agua fría se define como aquella que se encuentra a una temperatura de 15-
20 °C. Los niños tienen un riesgo mayor de presentar hipotermia debido a la
menor cantidad de grasa subcutánea y a la limitación de la capacidad
termogénica. Los efectos inmediatos de la inmersión en agua fría son
respiratorios y cardiovasculares. Las víctimas experimentan shock por agua
fría, que consta de una serie de respuestas fisiológicas cardiorrespiratorias que

10
pueden provocar ahogamiento. Incluso después de sobrevivir al shock por
agua fría, tras otros 5-10 minutos adicionales de inmersión en agua fría, la
víctima puede verse incapacitada. El enfriamiento de los músculos grandes y
pequeños imposibilita a la víctima para sujetarse a algo, para nadar o para
intentar protegerse a sí misma (2).

La pérdida de calor durante una inmersión prolongada puede disminuir la


(2)
temperatura central hasta valores hipotérmicos .

 Hipotermia leve: La víctima presenta una temperatura de 34-36 °C, con


sus mecanismos termogénicos intactos (termogénesis con y sin tiritona,
vasoconstricción) y movimientos activos. Una temperatura central menor
32 °C deteriora la función cognitiva, la coordinación y la fuerza muscular
y, por tanto, la capacidad para salvarse a uno mismo. Si falla la
(2)
termorregulación no se producirá el recalentamiento espontáneo .
 Hipotermia moderada: 30 °C hasta menos de 34 °C, se pierde la
consciencia y empieza a aspirarse agua. La bradicardia progresiva, la
alteración de la contractilidad miocárdica y la pérdida del tono vasomotor
contribuyen a que la perfusión no sea adecuada, a hipotensión y
(2)
posiblemente a que aparezca shock .
 Hipotermia intensa: A temperaturas por debajo de 28 °C suele haber
una bradicardia extrema, que se manifiesta con disminución del gasto
cardíaco, y hay una gran tendencia a la aparición espontánea de
fibrilación ventricular o de asistolia. La depresión del centro respiratorio
que acompaña a la hipotermia moderada o intensa produce
hipoventilación y, en último término, apnea. Cuando la temperatura
corporal es muy baja (<25-29 °C) el coma profundo, con pupilas
dilatadas y fijas y con ausencia de reflejos, puede dar la falsa impresión
de muerte (2).
9. Diferencias entre ahogamiento accidental e intencional

Características generales: La edad media en los ahogamientos intencionales


es mayor (20-49 años) que la edad vista en los ahogamientos accidentales (0-9
años). También existen diferencias respecto a la ubicación en donde se
produce el ahogamiento, la mayoría de los pacientes que corresponden a

11
ahogamientos intencionales tuvieron incidentes en ríos o saltando desde
puentes, mientras que los pacientes del grupo accidental tienen incidentes en
cuerpos naturales de agua, piscinas y, aunque poco frecuente, también en
bañeras (10).

Características clínicas: En el artículo realizado por Seon Woo et al. No se


observaron diferentes estadísticamente significativas entre el grupo accidental
e intencional (P: 0.452) respecto al estado consciente en el momento de la
llegada al centro de emergencias, encontrándose en coma el 28.7% de los
pacientes (10).

Para ambos grupos, el mayor número de pacientes tuvieron su temperatura


inicial entre 34 ° C y 36 ° C. Sin embargo, en el grupo accidental tuvieron una
temperatura inicial superior a 36 ° C, y en el grupo intencional tuvieron una
temperatura inicial inferior a 30 ° C, mostrando una frecuencia
significativamente mayor que la del grupo incidental. También se observó en el
grupo intencional antecedentes de depresión, mientras que ninguno de los
(10)
pacientes en el grupo accidental tenía tal historia .

Figura 4. A. Método de ahogamiento en el grupo intencional. B. Lugar de


(9)
ahogamiento en el grupo accidental .

Comparación de las tasas de mortalidad: En el mismo estudio mencionado


anteriormente no se evidenciaron una diferencia estadísticamente significativa
con respecto a la tasa de mortalidad. En el análisis de sexo, se encontraron
más pacientes masculinos en ambos grupos. Ninguna de las muertes que
(10)
ocurrieron en el grupo accidental fue mayor de 40 años .

10. Diagnóstico

12
En el estudio realizado por Akira Hayawaka et al. se examinaron las
concentraciones de electrolitos (Na, Cl y Mg y proteína total) y el volumen de
líquido en el seno esfenoidal para determinar su utilidad para determinar si el
(11)
ahogamiento ocurrió en agua dulce o marina .

Las concentraciones de Na, Cl y Mg de líquido en el seno esfenoidal pueden no


verse afectadas sustancialmente por la entrada de líquido desde el exterior del
cuerpo después de la muerte. Sin embargo, se puede considerar que si el
líquido en los senos esfenoidales contiene concentraciones de Na < 90 mEq/L
y Cl < 70 mEq/L, se puede diagnosticar ahogamiento en agua dulce. Mientras
que las concentraciones de Na > 150 mEq/L, Cl > 120 mEq/L, y Mg > 20 mg/dL
indican ahogamiento en agua de mar. En este estudio, todos los casos con una
concentración de TP de ≥ 1,5 g/dL se encontraban en el grupo de
ahogamiento, y aquellos con una concentración de TP de ≥ 4,5 g/dL en el
grupo de no ahogamiento. Si bien la concentración de TP en el líquido del seno
esfenoidal podría tener algo que ver con el diagnóstico de ahogamiento, se
(11)
necesitará una mayor investigación de este mecanismo .

Por todo lo anterior, los autores concluyeron que para dilucidar si hubo
ahogamiento en agua dulce o en agua de mar, las concentraciones de
electrolitos (Na, Cl y Mg) de líquido en el seno esfenoidal podrían servir como
indicadores útiles, incluidos otros hallazgos de ahogamiento, así como la
(11)
ausencia de hallazgos indicativos de otras causas de la muerte .

11. Tratamiento

Existen dos posibilidades en la mayoría de las personas ahogadas: sobreviven


espontáneamente o no se puede hacer nada por ellas cuando se inicia la
reanimación. La resucitación y el tratamiento son, sin embargo, posibles dentro
de un marco de variantes fisiológicas. Si es posible debe realizarse una historia
que recoja los datos del momento del accidente, duración de la inmersión, tipo
y temperatura del agua y si existió aspiración o vómitos. No obstante, el tiempo
que la víctima ha estado sumergida es un factor de escaso valor para indicar
las posibilidades de recuperación del enfermo. Se debe distinguir el tratamiento
inmediato, administrado en el lugar del accidente y el tratamiento dispensado
en el hospital (12).

13
11.1. Tratamiento inmediato en el lugar del accidente

En primer lugar, se debe verificar la existencia de movimientos respiratorios. Si


la persona está consciente y la tos y los movimientos respiratorios son
vigorosos, lo más probable es que la hipoxia haya sido mínima y que la
cantidad de agua aspirada sea pequeña. Sin embargo, la persona afectada
debe ser llevada al hospital y observada durante 24 horas por la posibilidad de
(12)
aparición tardía de síntomas .

Si no existen movimientos respiratorios, la acción debe ser inmediata. No se


debe hacer ningún intento de drenar el agua de los pulmones. La faringe se
limpiará rápidamente con los dedos y se iniciará la ventilación boca a boca. De
hecho, aunque contengan algo de agua, los pulmones pueden ser ventilados
con estas maniobras. El líquido tragado por el paciente será regurgitado
cuando se logre una presión superior a la del esfínter esofágico inferior. No se
debe intentar vaciar el estómago, ya que lo único que se logra es que el líquido
regurgitado sea aspirado por el pulmón. Una vez insuflado el pulmón en forma
repetida se busca en la carótida la existencia de pulso y si este está ausente se
inicia el masaje cardiaco, combinado con ventilación asistida, y se procede a
trasladar a la víctima a un hospital (12).

El masaje cardiaco se practica a razón de una compresión cada segundo sobre


el esternón, combinada con la insuflación boca a boca, una cada 5 segundos.
Es importante tener en cuenta que todos los pacientes semi ahogados deben
ser inmovilizados hasta que un estudio radiológico excluya la posibilidad de
lesión en la columna vertebral. Los signos que indican lesión espinal son
respiración abdominal sin movimientos de músculos intercostales, priapismo,
hipotonía y bradicardia, entre otros (12).

(12)
Tabla 2. Atención prehospitalaria al paciente semi ahogado .
Precauciones para la columna vertebral
Liberación de las vías aéreas
Reanimación cardiopulmonar: boca a boca y masaje cardiaco
Oxígeno complementario a todos los pacientes
Acceso venoso lo antes posible
Transportar a todos los pacientes al hospital

11.2. Tratamiento hospitalario

14
Una vez la victima se encuentre en el hospital, se debe asegurar una
oxigenación adecuada, se confirmará la integridad de la columna vertebral y se
(1)
buscarán otras posibles lesiones . Los problemas frecuentes que se deben
resolver son:

 Insuficiencia pulmonar: En caso de que existe insuficiencia pulmonar


aparecen disnea, taquipnea y uso de músculos accesorios para la
respiración. Todos los pacientes deben recibir oxígeno complementario
durante la valoración, al 100% si es necesario, hasta comprobar que la
oxigenación es la adecuada. Si un flujo de oxígeno de 40 a 50% no
puede mantener la PO2 arterial por encima de 60 mmHg en adultos, o
de 80 mmHg en niños, los pacientes deben ser intubados y se
administrará ventilación mecánica (1).
Por lo general, los pacientes intubados requieren presión positiva al final
de la espiración (PEEP), o presión positiva continua en la vía respiratoria
(CPAP). Será necesario paralizar la actividad muscular en algunos
pacientes y, a veces, una restricción moderada de líquidos e
hiperventilación, con PCO2 de 30 mmHg, ayudan a controlar el edema
cerebral. En ocasiones, un paciente sólo requiere mayor oxigenación y
CPAP sin ventilación mecánica. Solo las personas conscientes y con
pocas probabilidades de sufrir vómitos son candidatas para ventilación
CPAP con mascarilla (1).
 Hipotermia: La hipotermia puede inmovilizar a la víctima, y puede
causar ahogamiento, fibrilación ventricular primaria y otras
complicaciones metabólicas. Frecuentemente la hipotermia grave indica
inmersión prolongada y es un signo de mal pronóstico. No obstante, hay
pacientes que sobreviven tras una inmersión prolongada, de hasta 40
minutos, en agua fría (1).
Las víctimas de semi ahogamiento que están hipotérmicas y son
reanimadas deben calentarse al menos a 30-32 º C antes de abandonar
los esfuerzos de reanimación (1).

Adicionalmente, se deben determinar los gases arteriales y la oximetría de


pulso para dirigir el tratamiento de las alteraciones pulmonares y establecer la

15
administración de bicarbonato sódico. Se recomienda realizar una radiografía
(1)
de tórax para buscar un edema pulmonar .

Si aparecen broncoespasmo, desequilibrio electrolítico, convulsiones,


hipotermia, arritmias, hipotensión e hipertensión intracraneal, se debe aplicar el
tratamiento específico en cada caso (1).

Se debe vaciar el estómago con sonda nasogástrica, para prevenir el vómito.


También se debe colocar una sonda de Foley para controlar la diuresis. El
empleo de corticoides y antibióticos no altera la evolución de la neumonía por
aspiración ni la del edema pulmonar. No obstante, en el caso de aguas
contaminadas, pueden estar indicados la ampicilina, gentamicina, vancomicina
o cefalosporinas, después de recoger muestras de material expectorado y de
sangre para cultivos (1).

Tabla 3. Atención hospitalaria al paciente semi ahogado (1).


Laboratorio: Hto, Hb, gasometría, electrolitos, glucosa, coagulación, orina
Radiografía de tórax
Electrocardiograma
Control pulmonar: O2, alto flujo de O2, intubación, presión positiva (PEEP,
CPAP)
Sonda nasogástrica
Sonda de Foley
Vigilar: oxigenación, equilibrio acido básico, temperatura corporal
Valorar y tratar: función renal, situación cerebral, hipoglucemia, hipotermia

12. Pronóstico

El pronostico es bimodal en las victimas de ahogamiento: en la la gran mayoría


de las víctimas es bueno (intactos o secuelas neurológicas leves) o malo
(secuelas neurológicas graves, estado vegetativo persistente o muerte),
mientras que muy pocos casos presentan lesiones neurológicas intermedias al
alta hospitalaria. La evaluación posterior de los supervivientes que obtuvieron
buenos resultados puede identificar a aquéllos con un déficit cognitivo
persistente. De los niños ahogados hospitalizados, el 15% fallece y hasta un
(2)
20% sobrevive con daños neurológicos graves permanentes .

Se evidencia una supervivencia sin alteraciones o con un deterioro neurológico


leve en el 91% de los niños con una inmersión inferior a 5 minutos de duración

16
y en el 87% de aquéllos en los que la reanimación duró menos de 10 minutos.
Los niños con un ritmo sinusal normal, reactividad pupilar o reactividad
neurológica en el lugar del suceso tuvieron casi siempre un desenlace
satisfactorio (99%). El pronóstico es malo en los pacientes con coma profundo,
apnea, ausencia de respuestas pupilares, con inmersiones de duración
superior a 10 minutos y falta de respuesta a medidas de RCP realizadas
durante 25 minutos (2).

En cuanto a la calidad de vida asociada a largo plazo y el rendimiento escolar


en aquellos que recibieron RCP por los testigos o por personal del servicio
médico de urgencias, fue mejor cuando la duración de la inmersión fue menor
de 10 minutos, mientras que la calidad de vida y la morbimortalidad era peor
(2)
cuando superaba los 10 minutos .

La puntuación de la GCS tiene cierta utilidad para pronosticar la recuperación.


Los niños con una puntuación mayor o igual a 6 en el momento del ingreso
suelen tener un desenlace favorable, mientras que aquellos que tienen 5 o
menos tienen una probabilidad mucho mayor de un resultado neurológico malo.
La mejoría progresiva de la puntuación de la GCS en las primeras horas de
hospitalización puede indicar un mejor pronóstico. En general, la GCS no
permite diferenciar de modo adecuado los niños que sobrevivirán sin secuelas
(2)
de aquellos que lo harán con una lesión neurológica importante .

En la actualidad, la exploración neurológica y la evolución durante las primeras


24-72 horas son los datos que mejor indican el pronóstico neurológico a largo
plazo (2).

17
Figura 5. Escala de coma de Glasgow (GCS)

13. Prevención

El ahogamiento es un desafío importante para la salud pública a nivel mundial,


y se necesitan estudios rigurosos y bien diseñados que utilicen una
terminología consistente para demostrar soluciones de prevención efectivas,
sin embargo, existen pocos estudios que emplean métodos rigurosos y altos
niveles de evidencia para evaluar el impacto de las intervenciones diseñadas
(13)
para reducir el ahogamiento .

Una revisión sistemática realizada por Bellinda Wallies et al. demuestra que las
intervenciones como la educación, el cercado de piscinas, la natación y la
seguridad en el agua son posibles estrategias efectivas para evitar que los
(13)
niños se ahoguen, en particular los de 2 a 4 años . Estas medidas se ven
respaldadas por las recomendaciones del Comité de Seguridad y Prevención
de las Lesiones en la Infancia y la Organización Mundial de la Salud:

18
 Aconsejar a los padres y cuidadores que bajo ningún concepto se puede
dejar al niño solo o al cuidado de otro menor mientras esté en la bañera,
(14)
piscinas o cerca de cualquier boca de riego .
 Recomendar el vaciamiento de cualquier recipiente con agua después
(14)
de su uso, como por ejemplo los cubos del trapeador .
 Recordar que, para prevenir ahogamientos en los inodoros, no se debe
(14)
dejar a los niños pequeños en el cuarto de baño sin supervisión .
 Advertir de que cuando bebés o niños pequeños estén dentro o
alrededor de agua, bien sea piscina o cualquier superficie abierta de
agua (lagos, mar, ríos, etc.), deben de estar al alcance y supervisados
(14)
por un adulto con experiencia .
 Recordar que, en caso de una urgencia, el adulto supervisor debe saber
(14)
nadar, realizar un rescate, iniciar maniobras de RCP y pedir ayuda .
 Preguntar de manera específica sobre la existencia de piscinas
portátiles, o aquellas construidas sobre la superficie puesto que no
suelen estar valladas (14).
 Recordar a los padres que las clases de natación no son una garantía
(14)
para prevenir los ahogamientos, sino una estrategia más .
 Aconsejar a los padres que deben enseñar a sus hijos a que no naden
(14)
nunca sin la supervisión de un adulto .
 Recomendar que, siempre que los niños monten algún tipo de
embarcación o realicen un deporte acuático, (aunque sepan nadar),
deberán llevar un dispositivo personal/individual de flotación (PFD),
como un chaleco salvavidas (14).
 Informar a padres y niños que saltar o tirarse de cabeza en el agua
puede producir lesiones graves (14).
 Advertir a los adolescentes del riesgo que supone consumir alcohol o
drogas mientras se practica la natación o cualquier otra actividad
deportiva acuática (14).
 Aconsejar que los niños que padezcan ataques epilépticos sean
(14)
supervisados cuando naden o se bañen .
 Instalar barreras que controlen el acceso al agua (15)
.
 Capacitar a los transeúntes en rescate y resucitación seguros (15)
.

19
 Fortalecer la conciencia pública sobre el ahogamiento y resaltar la
(15)
vulnerabilidad de los niños .
 Establecer y hacer cumplir las normas de navegación segura, envíos y
transbordadores (15).
 Desarrollar un plan nacional de seguridad hídrica (15)
.

14. Recomendaciones generales


Se recomienda realizar más esfuerzos para reducir el ahogamiento de niños en
todo el mundo, y especialmente en los países de bajos y medios recursos, con
atención a los mayores riesgos en cada país. Por ejemplo, las organizaciones
no gubernamentales, tales como la OMS y la FAO, podrían promover la
cooperación internacional entre los países desarrollados y en desarrollo para
mejorar la capacidad de prevención de ahogamientos en los países en
desarrollo. También se recomienda realizar esfuerzos para mejorar la calidad
de los informes de muertes por ahogamiento a nivel mundial y nacional,
incluida la integridad, la especificidad de la causa, la precisión de la
clasificación de las causas, la puntualidad y el acceso abierto a los datos de
(6)
mortalidad por ahogamiento .

15. Bibliografía
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