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Trabajo Final 

de
Psicología

Profesora: Chil María de los Ángeles


Turno: Noche Quilmes

Aspirantes: Castellanelli Carolina


                  Benitez Gabriel 
Bolof Federico
    Villarroel Facundo
Introducción
La psicología es la ciencia que estudia y trata de entender comportamientos,
pensamientos y emociones humanas a través de sus observaciones y análisis. 
En este trabajo analizaremos los distintos casos de rescates acuáticos, realizados por
grupos de guardavidas y los relacionaremos con las distintas teorías de la psicología y
psicología social. 
Daremos un enfoque integrador sobre la relación que tiene el cuerpo con la mente y la
salud mental del individuo. Esta se relaciona con la estructuración del aparato
psíquico, también busca las instancias que garantiza las necesidades internas y
externas para que el sujeto pueda adaptarse. Hablaremos sobre las emociones que
son necesarias para el buen accionar en una tarea tan importante como la de ser
guardavidas. 
Se analizará los procesos de comunicación que pueden existir entre los bañistas, las
víctimas y los guardavidas.
Por ultimo realizaremos también una clasificación de los diferentes grupos que
identificamos en el relato “Domingo súbito en Costa del Este”.

Desarrollo
Como ya hemos dicho la psicología es la ciencia que estudia y trata de entender
comportamientos, pensamientos y emociones humanas.
Una rama de esta es la Psicología Social que es la que se encarga más
específicamente de estudiar la conducta y el funcionamiento mental de un individuo
como consecuencia de su entorno social.
Al comenzar encontramos una situación de uno de los protagonistas de la
historia.  

“El flaco atlético nos puso en alerta comunicándonos que, a eso de las 16 horas,
se había roto un banco de arena en la segunda canaleta, variable que provocó
un complicado salvamento en el que tuvieron que participar seis guardavidas. 
Fue entonces que Leonardo Galván, con más de quince años de experiencia
como guardavidas, nos comentó: “tanta calma es sospechosa” y fue en ese
momento en que el flaco nos preguntó el estado de las mareas; yo, que siempre
he sido precavido, extraje de mi bolso la Tabla de Mareas y, al leer sus datos,
llegamos a la conclusión que estaba en Estoa, o sea, en ese momento no subía
ni bajaba, se estaba realizando el cambio que correspondía cada seis horas.” 
En este texto podemos encontrar que el guardavidas Leonardo Galván ha tenido una
percepción del problema , donde esta percepción depende de nuestros sentidos , de lo
que escuchamos y vemos , la misma opera en cuanto al conocimiento de la realidad.
También podemos hablar de una sensación en cuanto a la calma que se encontraba
en el mar gracias a sus años de experiencias él pudo darse cuenta de que algo era
raro, eso le provoco sensaciones de lo que a futuro les iba a pasar.
Sin estímulo no hay sensación, en la misma somos pasivos ya que nos limitamos a
recoger la información del medio.
En la historia narrada por este grupo de  guardavidas también encontramos un grupo
de jóvenes que están en la playa jugando con una pelota de tenis pasándolas unos a
otros en el mar. De por si estos no tenían el total conocimiento para desenvolverse en
el medio acuático según describen las personas que cuentan esta experiencia.
A este grupo de personas lo podemos definir como Grupo Secundario ya que son un
grupo de amigos que tienen diferentes intereses no directos. Si bien en este caso no
se sabe el vínculo afectivo de cada uno de ellos, en estos grupos a veces se dan
mayor o menor afecto unos con otros. No necesariamente el clima tiene que ser
afectivo en su totalidad, sino que esta la posibilidad de que sea un clima más
aséptico. 
Al continuar con el relato nos llamó poderosamente la siguiente frase:

 “A varios de estos grupos ya les habíamos hecho prevención, pero no todos

nos daban importancia.” 

Hace alusión a que al haber hecho la prevención y no recibir respuesta por parte de
esas personas puede encontrarse un disparador de situaciones que jugaban en las
cabezas de los rescatistas, pudiendo así utilizar, el yo, el superyó y el ello.
Cuando hablamos del ello en esta situación sería el que les dice en su cabeza que no
lo vayan a rescatar porque ya los advirtieron que se podían ahogar y ellos aun así no
les importo y siguieron jugando , pero el superyó, es el que lo evita ya que el deber del
guardavidas es el de rescatar y salvar vidas teniendo así que ir a rescatar igualmente
a esas personas que no escucharon la alerta y/o prevención de el o los guardavidas.
En cuanto al yo, es el que padece la disputa entre lo que está bien y lo que está mal.

Cita siguiente:
“A las 18 horas y 15 minutos, le manifesté a Leonardo Galván: 
— ¡Mira a esos jóvenes! 
—Ya los vi, déjame subir al mangrullo para observarlos mejor. Mientras yo subo,
vos Héctor, tranquilamente, acércate a esa zona. 
Héctor Patricio, el estudiante de letras, se puso en marcha. El docente
universitario comenzó a trepar el mangrullo, pero no llegó a su máxima altura
cuando y con voz grave y de mando me dijo “¡vamos a rescatarlos!” 
Héctor Patricio había avanzado unos quince metros por la playa hacia el Norte
cuando escuchó los pitazos que salían en forma intermitente de nuestros
silbatos. Se había dado la alarma general y el salvamento estaba en marcha. Con
sus veinte años corrió en forma veloz. Desde ese momento se acabó el
razonamiento pausado, se detuvo la tesis y la antítesis del pensar; el instinto y
la razón se fundieron para tratar de impedir el cegamiento de esas jóvenes
vidas.”

En esta situación lo que nosotros pudimos observar y analizar es una voz de mando
de un líder, en el cual está imponiendo que hacer, tratando de que sus compañeros
actúen de forma inmediata frente a esta situación de peligro. Además, pudimos llegar
a evaluar que está realizando una comunicación verbal no solo en lo que está
diciendo, sino también en como lo está expresando, donde alza la voz para que sus
colegas lo escuchen.
En la parte de los silbatazos logramos identificar otro tipo de comunicación “La
comunicación de socorrismo” en donde los guardavidas tocan de forma intermitente el
silbato.
Analizando el momento en donde lo realiza , su acción se basa en pedir ayuda a otros
socorristas con el salvamento acuático, donde en este caso se debe tocar dos pitidos
cortos.
Leonardo Galván, Héctor patricio y su compañero les surge un problema, es decir, una
problemática donde puede haber acuerdo o desacuerdos, a esto lo denominamos pre-
tarea. A raíz de esto, el grupo debe organizarse y tratar de llegar a una solución, que
en este caso sería la tarea. 
Acá volvemos a referirnos a un grupo, pero en este caso no referimos a un Grupo de
Trabajo, estos grupos son grupos orientados hacia una tarea como se mencionó
anteriormente, compuestos por un número pequeño de personas que están
organizadas de una determinada manera y que interactúan entre sí y con su ambiente
para alcanzar determinadas metas del grupo.
Dentro de un grupo podemos encontrar diferentes roles que ocupa cada uno de los
integrantes que componen esta clasificación.

Siguiente escenario:

“En ese instante me detuve y observé a mí alrededor: ahí vi tres jóvenes que
eran escoltados hacia la orilla por la guardavidas Ximena del Carmen, dudé en
quedarme para prestarle ayuda, pero la miré a los ojos y vi seguridad en ella. La
muchacha me dijo “adentro hay más”. La compañera tenía dominio sobre los
escoltados, además estaban a metros de donde no los taparían las aguas y
detrás de nosotros seguramente vendrían guardavidas desde puestos más
lejanos.” 

En esta escena también vemos una percepción por parte del rescatista hacia Ximena
del Carmen donde observa confianza y seguridad con la víctima, permitiéndose así
actuar ayudando a sus otros colegas y victimas que se encontraban en peores
situaciones

Acto seguido se complica la situación, el mar ya no era el mismo , todo había


cambiado:

“Esa masa de agua verde y tranquila era otra: el mar había cobrado vida, las
olas crecían enormes, el viento ahora era fuerte y costaba nadar pues las
corrientes viajaban en distintas direcciones. El batido de las olas provocaba
enormes manchas de espuma blanca, como esas flores rosas que quedan
desteñidas en los cementerios. 
Las grandes masas de agua que caían encima de mí, me hundían mientras yo
me agarraba del torpedo para salir a flote. Después de un instante me encontré
en el centro de la “olla”. Allí las olas eran altas y continuas pero lo peor era que
había corrientes en diferentes direcciones, el viento silbaba y yo me sentía como
una pluma empujada por un gran ventilador. En ese momento, había perdido a
mis compañeros y no divisaba nuevas víctimas, pero sabía que estaban allí.” 

Podemos distinguir como en este momento el rescatista se encuentra en un momento


de estrés en donde ya no visualiza a sus compañeros ni a las víctimas en medio de
esas enormes masas de agua, buscando constantemente salir a flote en busca de
lograr una mejor posición de la que se encuentra en ese momento.

El estrés es la respuesta fisiológica, psicológica y de comportamiento del cuerpo


humano a presiones tanto internas como externas, es el estímulo que afecta a nivel
emocional o físico, ante situaciones de peligro ya sea real o no, pero que lo pueda
percibir como tal. Cuando hablamos del estrés hablamos de que es una respuesta
natural y necesaria para la supervivencia, en pequeñas dosis puede ser positivo donde
este nos ayuda a ser consiente de nosotros mismos y cuando es demasiado
prolongado resulta perjudicial para la salud.
“…Al observar que tenían dos roscas y que ese era un hombre con bastante
experiencia tomé la determinación de apoyar al dúo que se debatía
valientemente para mantenerse a flote…”

Acá podemos observar en primera instancia la percepción de un problema. Luego hay


un análisis de la situación que desemboca en una toma de decisiones y una ejecución
de las acciones.

“…Todo bien, ya pasó el peligro, vamos hacia fuera” le dije con voz segura. Los
ojos de Héctor Patricio se comunicaron con los míos que supieron decirle que,
si bien estábamos juntos, el mar nos estaba tragando…”

En esta ocasión se pueden observar los dos tipos de comunicación:

 Comunicación verbal al mencionar que el peligro ya había pasado y que ya


podían salir.
 Comunicación no verbal donde con el contacto visual entre compañeros
entienden la realidad de la situación.

“Pero fue imposible, la enorme ola nos había impulsado hacia abajo varios
metros. La víctima se movía con fuerza, había activado su instinto de
supervivencia. Él quería salir a flote por sus propios medios. Después de un
instante me faltaba el aire, busqué calmarme para controlar mejor mi respiración
y guardar energías; sabía que, de aquí en adelante, las técnicas de salvamento,
el entrenamiento y sobre todo la fortaleza anímica, serían los pilares en los
cuales nos sustentaríamos”.

Acá podemos observar un excelente control del estrés por parte del guardavida donde
gracias a sus saberes y entrenamientos previos logra superar una situación que
podría haber llegado a una crisis y haber causado un episodio desafortunado.

“Pero se nos suscitó un problema: el inexperto nadador era muy alto y a la vez
tendía a permanecer vertical, tal vez sería por miedo o no sé por qué, pero no se
tendía boca arriba y esta era la forma como nos habían enseñado a remolcar en
la Escuela de Guardavidas del Partido de la Costa; este método es muy bueno
porque al quedar boca arriba y con las piernas extendidas, proporcionaba
menor resistencia al roce con el agua, lo que permite desplazarse mejor. Con un
ligero movimiento de cadera, lo posé en mi cintura y le apliqué una patada de
karate debajo de los glúteos”
En este escenario logramos identificar la percepción de un problema por parte del
rescatista , donde observa que la víctima permanecía en una posición vertical lo cual
complicaba la ejecución del remolque , acto seguido podemos observar una ejecución
de acción , donde el guardavida instintivamente realiza un movimiento que posiciona a
la víctima correctamente para poder ser remolcada.
Conclusión 
Probablemente como personas comunes pensemos o imaginemos que la psicología
es una ciencia inservible o que en muy pocos casos encuentra soluciones simples y
concretas.
Pensando en una profesión como es la del Socorrista Acuático o Guardavida donde lo
que se ve, no es en realidad todo lo que sucede realmente.
Es decir : como Bañista o en este caso Aspirantes quizá miremos un rescate y
digamos “wauw, que excelente condición física debe tener ese guardavidas para poder
correr, nadar y remolcar y poner a salvo a esas personas(víctimas)” y lo dejemos en
solo una observación y apreciación de sus cualidades meramente físicas. Si bien
nosotros como Aspirantes debemos entrenar durante un año, superando nuestras
condiciones físicas día a día, semana a semana para lograr un estado óptimo de
rendimiento, esto puede ser en vano si no logramos paralelamente una construcción
mental de nuestras posibles acciones futuras o patrones motores.
De los apuntes de la cátedra rescato la frase “ El cerebro es el que tiene el mando” 
y en cierto punto es muy realista.

¿Cuántas veces hemos sufrido sucesos en nuestra vida que nos han cambiado
inmediatamente nuestro bienestar mental y físico ? A veces recibimos malas noticias
antes o durante la comida y después tenemos malestares estomacales , o cuando nos
preocupamos por algo que no logramos resolver y terminamos con dolor de cabeza.
“Hay una conexión invisible entre nuestra mente y nuestro cuerpo. Es una comunicación que se
produce en forma de impulsos nerviosos en el cerebro y reacciones bioquímicas en el cuerpo.
Nuestro cerebro puede traducir nuestros pensamientos y sentimientos en impulsos químicos y
eléctricos que se envían a través del cuerpo y causa una reacción bioquímica. Esta reacción es
la forma en que nuestro cuerpo responde a lo que está pasando dentro de nuestra cabeza . Este
proceso ocurre de forma casi instantánea y la respuesta de tu cuerpo a menudo es proporcional
a la
fuerza de tus pensamientos o emociones. Nuestro estado emocional sea cual sea se manifiesta
en
nuestro cuerpo.”

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