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SE CLAUSURA LA PANTOMIMA DEL PDGE (su VII congreso) EN NGOLO, BATA.

Ayer, 24 de noviembre, se clausuró el VII congreso del PDGE en Ngolo. No hubo sorpresas, como
se sabe de toda dictadura, a pesar del interés y las expectativas que suscitaba porque muchos
creían que era la ocasión para que Teodorín, “su delfín” y Vicepresidente del partido y del
gobierno se hiciera con el partido y, en consecuencia, liderar en un futuro no muy lejano, la
jefatura de estado.

Todo ha sido lo mismo de siempre: loas al dictador, arengas en su honor, halagos al tridente
familiar… una competición de parte de las distintas delegaciones para encontrar cuál de ellas
ensalzaba mejor al dictador y a toda su familia. Aquí podemos decir que todas las delegaciones
lo prepararon mejor hasta que el jefe de ceremonias, Anacleto Oló Mibuy, invitaba a suprimir
las arengas, poco sirvió porque el PDGE no existe sin arengas al dictador.

Esta pantomima no iba a ser especial, no iba a aportar algo novedoso que no fuera el culto al
dictador y a su familia y la búsqueda, de parte de los delegados, de quién daba mejores arengas.
En este encuentro, algunos episodios podemos remarcar, tales como:

- Las llamadas “conferencias”: como tales, no fueron. Podemos considerar estas sesiones
como meras elucubraciones de cómo ensalzar la figura de Obiang, su mujer e hijo, ya
que todas acababan demostrando que las actuaciones de sus amos se orientaban en
este sentido. Llamó la atención las intervenciones del alcalde de la provincia de Djibloo,
Florentino Ncogo, alias ENKOKE, y del Ministro de Minas, Gabriel Mbega Obiang,
“GABRI”, su hijo; quienes cuestionaron la LIBERTAD social que se predica ya que, a
opinión de ellos, “los inversores externos no pueden trabajar en este clima y, desde
dentro, hay muchas dificultades para tramitar un documento en la administración: “son
demasiadas barreras que no permiten el turismo, por lo que habría que
DESBLOQUEAR el País”. En el mismo orden de ideas, dijo el Exministro de Trabajo,
Estanislao Don Malavo, quien puntualizó que: “En el ranking del Banco Mundial sobre
clima de negocios, Guinea ecuatorial estaba en el puesto 178 de 190 países
clasificados, o sea en la cola”. No sabemos si fueron traicionados por el subconsciente
o, simplemente, tuvieron que atender a la verdad. Esperamos que no se les califique de
“enemigos internos que no ven con buenos ojos el desarrollo que experimenta Guinea
Ecuatorial gracias a su Excelencia Presidente fundador, HM Obiang Nguema”.

- No hubo presentación de candidaturas, las intervenciones de las delegaciones dejaban


claro que sin Obiang, no existe, ni existirá el PDGE. Era otra pantomima de la
Continuidad. Recondujeron a todos e introdujeron a otros y a otras. Quizá hay que
destacar algunas confesiones de Obiang en su discurso de apertura y de clausura:

- Obiang, usando parábolas, dijo: “un alumno no puede sustituir a su profesor, sino
cometería muchos errores”. Aquí despejó la incógnita de la sucesión y muchos
interpretaron como un dardo a su hijo. Así es la gente mala. Lo son para todos. Como si
no le entendiésemos, recurrió a su vieja máxima: “Más vale un mal amigo conocido,
que uno bueno por conocer”. Aquí lo deja claro: es el mal amigo que todos ya conocen
y dice la verdad.

- Obiang subrayó todo lo que decían los delegados al congreso: arremetió contra TODO:
personas e instituciones, redes sociales, algunos partidos que no forman parte de su
coalición, a activistas… nada nuevo aportó, pero confesó que: “la celebración de este
congreso violó las medidas de confinamiento decretadas por su propio gobierno” ya lo
dijeron algunos actores políticos y fueron calificados como enemigos, ahora bien,
¿Obiang también es enemigo de su propia obra? Sin dudas que sí.

En resumen: era previsible. Los congresos del PDGE no son para evaluar la acción política llevada
al cabo, ni para analizar los problemas sociales más acuciantes, ni propuestas para solucionarlos.
Es el claro ejemplo de la falta de una Ponencia marco, la discusión de la gestión de la ejecutiva
saliente, las comisiones de trabajo para la introducción de propuestas. En fin, lo de siempre: el
canto, las arengas, la bebida, el sexo, el despilfarro del bien común, la ostentación del lujo para
mostrar lo que se tiene, en realidad de lo que carecemos, LA PAZ, LA LIBERTAD.

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