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ANALISIS DE LA INVASIÓN A PANAMÁ

POR: HELINETH MEDINA

1. Reseña biográfica de Manuel Antonio Noriega

Manuel Antonio Noriega


(1934/02/11 - 2017/05/29)

Militar y político panameño

 Jefe Militar de Panamá (1983-1989).


 Rango: General
 Partido político: Partido Revolucionario Democrático
 Padres: María Moreno y Ricaurte Noriega
 Cónyuge: Felicidad Sieiro de Noriega (m. 1960–2017)
 Hijos: Thays, Sandra, Lorena
 Nombre: Manuel Antonio Noriega Moreno

Manuel Antonio Noriega nació el 11 de febrero de 1934 en Ciudad de


Panamá, Panamá. Hijo de María Moreno y Ricaurte Noriega, fue vendedor
de periódicos y asistió al Instituto Nacional. Escribió algunos poemas y
artículos que atacaban la presencia estadounidense en Panamá y desde muy
joven participó en política.

Cursó estudios en la Academia Militar de Chorrillos (Lima, Perú), tras lo


que regresó a Panamá y fue nombrado alférez de la Guardia Nacional.

Gracias a su amistad con Omar Torrijos, ascendió rápidamente y fue


nombrado jefe de los Servicios Secretos cuando Torrijos tomó el poder en
1969. En el tiempo que ejerció este cargo, se convirtió en el hombre más
temido del país.

Cuando Torrijos falleció en 1981 en un accidente aéreo, pasó a ser jefe del
Estado Mayor del general Darío Paredes, jefe de la Guardia Nacional. Tras
sucederle en 1983, se ascendió a sí mismo al grado de general y se hizo con
el control efectivo del gobierno panameño.

En 1986 se le acusó de narcotráfico, blanqueo de dinero y de ser un agente


doble de la CIA estadounidense y de los servicios secretos cubanos.
También se sospechaba su posible implicación en el asesinato de uno de
sus adversarios, Hugo Spadafora. Cuando respondió a las acusaciones
vulnerando las libertades y derechos civiles, en 1987, el Senado de Estados
Unidos instó al gobierno de Panamá para que le expulsara de su cargo e
investigara sus actividades. Se le procesó en 1988 por un gran jurado
federal de Florida acusado de infringir las leyes sobre crimen organizado,
estupefacientes y blanqueo de dinero. En diciembre de 1989, fuerzas
estadounidenses invadieron Panamá y le detuvieron, siendo trasladado a
Florida para ser juzgado. En 1991 se inició el juicio y la defensa de Noriega
se basó en su antigua relación con la CIA. Fue declarado culpable de ocho
cargos de tráfico de cocaína, crimen organizado y blanqueo de dinero. Le
condenaron a 40 años de prisión.

Francia solicitó su extradición y fue condenado en 2010 por la justicia


francesa a siete años de cárcel por blanquear dinero del narcotráfico. Se le
concedió la libertad condicional en septiembre de 2011, siendo extraditado
a Panamá el 11 de diciembre del 2011.

Casado con Felicidad Sieiro de Noriega, fue padre de Sandra, Thays y


Lorena Noriega.

Manuel Antonio Noriega, falleció en Panamá el lunes 29 de mayo de 2017,


a los 83 años de edad. Noriega había sido operado el pasado 7 de marzo de
un tumor benigno en el hospital público Santo Tomás de la capital
panameña.

2. Antecedentes de la Invasión Estadounidense a Panamá

En la madrugada del 20 de diciembre de 1989, Norteamérica invadió


Panamá. Se pretendía un golpe rápido que permitiese atrapar al general
Manuel Antonio Noriega, llevarle a los tribunales, restablecer la
democracia y dar el poder al elegido por las urnas: Guillermo Endara. El
presidente norteamericano George W. Bush justificó la intervención como
la “única opción”, una vez agotadas las vías pacíficas, para defender la
democracia y las vidas “amenazadas” de los 35.000 norteamericanos en
Panamá, así como combatir el narcotráfico. La calma internacional a la que
asistía el mundo tras el derribo del muro de Berlín y lo que se consideró el
final de la Guerra Fría en noviembre de 1989, se vio alterada por una
repentina y desproporcionada intervención norteamericana: “Operación
Causa Justa”. Con la invasión de Panamá daba comienzo a lo que a partir
de entonces se consideró la “doctrina Bush” y fue la oportunidad, según
algunos autores, que el presidente norteamericano utilizó para desterrar esa
imagen de wimp -pelele- que muchos le atribuían. Se estima que la
“Operación Causa Justa” se cobró la vida de más de cuatro mil personas, si
bien las cifras oficiales nunca llegaron a conocerse.

Coral Morera Hernández


(Anuario del Centro de Estudios Históricos “Prof. Carlos S. A.
Segreti” Córdoba (Argentina), año 9, n° 9, 2009, pp. 357-374. ISSN
1666-6836)

La invasión de Estados Unidos a Panamá fue precedida por un completo


programa de desestabilización en el cual se empleó el arsenal total de la
inteligencia estadounidense. El patrón intervencionista, ahora
perfeccionado, se remonta a 1950-1953, cuando la CIA diseñó el
derrocamiento de Mossadeg en Irán, para reemplazarlo por la horrorosa
tiranía del Sha; a 1954, cuando la CIA derrocó a Jacobo Arbenz en
Guatemala, para implantar gobiernos dictatoriales que diezmaron cientos
de miles de indígenas; a 1965, cuando invaden República Dominicana para
eliminar a Juan Bosch y derrotar a fuerzas constitucionalistas; a 1970-1973,
cuando la CIA intentó impedir la victoria en las urnas de Salvador Allende
y luego intervino en su derrocamiento, que ocasionó la muerte de más de
30,000 personas. Ni hablar de las intervenciones de la CIA en la península
coreana, Indonesia, Filipinas, y en toda la región latinoamericana y
caribeña. Estados Unidos satanizó y planificó el asesinato de los dirigentes
de Cuba, Libia, Irak y Yugoslavia y donó cientos de millones de dólares a
la oposición política en esos países. Estados Unidos bloqueó la mediación
de la OEA para una solución pacífica a la crisis en Panamá y bloqueó e
impidió el rol del Consejo de Seguridad como principal órgano responsable
por el mantenimiento de la paz y la seguridad en Cuba, Irak, Libia y
Yugoslavia.
Para entender el conflicto del pequeño país centroamericano es necesario
retrotraerse a 1823, cuando nació la Doctrina Monroe, en honor a su
creador James Monroe, que proclamó el lema: “América para los
americanos”. Desde entonces se fueron sucediendo las acciones militares
norteamericanas en el istmo amparándose en dicha doctrina.

En 1903, el canal y la zona de influencia fueron concedidos a EE.UU. “a


perpetuidad” así como la soberanía sobre la zona. El tratado fue modificado
en 1936 eliminándose la posibilidad de intervención norteamericana en el
país, aunque no fue hasta 1955 cuando EE.UU. concedió a Panamá una
mayor participación en los beneficios
del canal.
Ante la suma de oleadas antinorteamericanas en la zona, a principios de los
’60 hubo que forzar la apertura de nuevas negociaciones, que tomaron
forma en 1977 con el nuevo tratado firmado entre Jimmy Carter y Omar
Torrijos, por el cual se estipulaba el progresivo traspaso de la soberanía
marítima al país panameño.

Manuel Antonio Noriega era el comandante en jefe de la Guardia Nacional


desde 1985 y el hombre fuerte de la república centroamericana, quien
desde la desaparición de Torrijos había regido los destinos de Panamá al
más puro estilo de tirano corrupto. En el currículo del dictador panameño
se daban algunas incongruencias: por un lado, había sido colaborador de la
CIA durante veinte años, y por otro, se mostraba fiel admirador de los
enemigos más acérrimos de Norteamérica, Fidel Castro y Daniel Ortega.

La escena política panameña empeoró considerablemente en junio de 1987,


cuando uno de los hombres de confianza de Noriega, el coronel Roberto
Díaz Herrera, acusó al general de asesinatos, fraudes electorales y
conexiones con el narcotráfico.

El 15 de diciembre de ese mismo año, la Asamblea Nacional nombraba a


Noriega jefe del gobierno, con un mandato indefinido, sujeto a la duración
de la agresión norteamericana. A partir de ese momento la oposición
democrática, apoyada por EE.UU., trató de desalojar al comandante
Noriega, aunque la tensión máxima vino provocada en mayo de 1989,
cuando las urnas eligieron al líder de los demócratas, Guillermo Endara, y
la elección fue invalidada por los opositores liderados por Noriega.

Escasas semanas antes de la intervención norteamericana el clima empeoró.


El detonante pudo derivarse de las bases norteamericanas que hicieron que
el comandante Noriega declarase el estado de guerra contra EE.UU. y se
proclamase jefe del ejecutivo.
3. Mencione las causas anunciadas por Georges Bush para la
operación “Causa Justa”

Fueron cuatro los motivos, con los que Bush justificó la actuación:
 Proteger la vida de los ciudadanos estadounidenses que
residían en Panamá, específicamente en la Zona del Canal
 Respaldar el cumplimiento de los Tratados Torrijos-Carter,
sobre la protección de la vía interoceánica
 Defender la democracia y los derechos humanos
 Detener a Noriega para enfrentar delitos por tráfico de drogas.

4. Causas que justificaron la invasión por parte de Estados Unidos.


Diversas fuentes indican que la invasión se dio en violación del tratado
constitutivo de las Naciones Unidas y de la Organización de Estados
Americanos. El 29 de diciembre de 1989, la Asamblea General de las
Naciones Unidas condenaba la intervención como una flagrante violación
del derecho internacional, con 75 votos a favor, 20 en contra y 40
abstenciones.

La acción militar estadounidense tenía como propósito desmantelar a las


Fuerzas de Defensa de Panamá y capturar a Noriega, dictador militar de ese
país desde 1983, quien además era un antiguo colaborador de la Agencia
Central de Inteligencia (CIA) y era requerido por la justicia estadounidense
por los delitos de extorsión y narcotráfico.

5. La acción militar de la operación Causa Justa

Los estadounidenses dispusieron de 26 000 soldados de las unidades de


élite, de los comandos navales, del ejército y la 82.ª División
Aerotransportada para la invasión. Las Fuerzas de Defensa de Panamá
sumaban apenas 12 000 efectivos y disponían de una minúscula fuerza
aérea.

Dos días antes del ataque, un soldado estadounidense fue abatido cuando
traspasó un retén frente al Cuartel Central de las Fuerzas de Defensa, lo que
fue considerado como el detonante del conflicto.

La invasión inició la madrugada del 20 de diciembre de 1989 con el


bombardeo de múltiples instalaciones políticas y militares. El objetivo del
ataque era anular cualquier respuesta del ejército panameño. El bombardeo
destruiría aeropuertos y bases militares como el aeropuerto Marcos A.
Gelabert en Punta Paitilla, el Cuartel Central en el barrio de El Chorrillo, el
Cuartel de Tinajitas, el Cuartel de Panamá Viejo, el Cuartel de Los Pumas,
la base militar de Río Hato (hogar de la Séptima Compañía de Infantería
"Macho de Monte" y la Sexta Compañía Expedicionario Mecanizada de las
Fuerzas de Defensa, además donde funcionaba el instituto militar Tomás
Herrera, que no era en realidad una escuela de formación castrense) y la
Base Naval de Coco Solo.

La Fuerza Aérea de Estados Unidos utilizó bombarderos furtivos F-117


Nighthawk y helicópteros de ataque AH-64 Apache. Se produjeron
numerosas muertes civiles al ser alcanzados muchos edificios no militares.
El ingreso de los soldados estadounidenses al barrio El Chorrillo terminó
con este, siendo particularmente incendiado y masacrado debido a su
cercanía con la Comandancia, causando el desplazamiento de alrededor de
2200 familias.

A pesar de las declaraciones hechas por Noriega ante la Asamblea


Legislativa días antes de la operación militar, no hubo ninguna declaración
de guerra formal y la acción fue condenada por la Asamblea General de la
ONU y por la Organización de los Estados Americanos. La operación duró
pocos días ante la superioridad del ejército ocupante y la poca resistencia
encontrada. Noriega logró escapar y buscó asilo en la Nunciatura
Apostólica. El 3 de enero de 1990 se entregaría a las fuerzas de ocupación
y sería puesto bajo arresto después de la operación Nifty Package.

Guillermo Endara fue nombrado presidente del país en una base militar de
EE. UU. durante la operación. En los días siguientes a la intervención,
debido a la ausencia de policía y ante la pasividad de las tropas
estadounidenses, se produjeron en varias ciudades saqueos y actos de
vandalismo que aumentaron las pérdidas materiales.

6. Consecuencias de la Invasión a Panamá

Consecuencias Civiles

Según fuentes nacionales panameñas, instituciones sociales, organismos


gubernamentales y sociedad civil, existen estimaciones de que hubo unas
3000 víctimas fatales entre soldados de las Fuerzas de Defensa de Panamá
y población civil.

En algunos medios de comunicación extranjeros se publicaron noticias que


indicaban de 300 a 600 los muertos como consecuencia de bombardeos en
el barrio El Chorrillo, sitio donde se encontraba ubicado la Comandancia o
Cuartel Central de las Fuerzas de Defensa y las oficinas del General
Noriega, y que más de 20 000 personas perdieron sus bienes y
pertenencias, solicitando compensaciones por parte del gobierno de los
Estados Unidos.

El Comando Sur del Ejército de los Estados Unidos reportó la muerte de


314 militares panameños, 202 civiles de la misma nacionalidad y 23
soldados estadounidenses. De acuerdo con el periodista Bob Woodwards y
la cadena de televisión CBS serían un total de 450 panameños los que
murieron durante el conflicto.

La Iglesia católica panameña ha estimado que en la invasión se produjeron


655 muertes por el lado panameño, de los cuales 314 eran militares y 341
eran civiles. Ellos estiman los heridos en 2,007, de los cuales tan sólo 124
eran militares panameños. Sin embargo, los datos recabados por el Instituto
de Medicina Legal de Panamá registraron 255 muertos y 93 desaparecidos.

Consecuencias económicas

La invasión causó daños materiales por la acción militar y una crisis


económica producto de las acciones de saqueo al comercio en general por
parte de la población temerosa de un desabastecimiento de alimentos y
artículos de primera necesidad.

El barrio de El Chorrillo, constituido principalmente por viejos caserones


de madera edificados en la época de construcción del canal, fue destruido
casi en su totalidad, debido a los incendios producidos por el bombardeo al
Cuartel Central. No obstante, existen versiones de que algunos grupos
organizados por Noriega conocidos como los Batallones de la Dignidad
incendiaron parte de El Chorrillo durante los enfrentamientos. Otras
fuentes indican que fueron militares norteamericanos los que
coordinadamente incendiaron las casas en la vecindad del cuartel general.

Consecuencias políticas

Noriega fue llevado a Estados Unidos, enjuiciado por el delito de


narcotráfico y condenado a 40 años de prisión. También, en Panamá, fue
juzgado en ausencia y condenado a 15 años por el asesinato de Hugo
Spadafora, 20 años por la Masacre de Albrook y el fusilamiento de
miembros de las Fuerzas de Defensa de Panamá, 20 años por la ejecución
de Moisés Giroldi, cinco años por delito contra la libertad individual de
Humberto Macea y 18 meses por corrupción de funcionarios.

Guillermo Endara, ganador de las elecciones generales en Panamá de 1989,


prestó juramento como presidente desde la base militar estadounidense de
Fuerte Clayton, dando por terminada la dictadura militar iniciada en 1968 y
llevando al país a elecciones democráticas, ejercidas hasta el presente. El
documento de juramentación fue firmado por Endara, Ricardo Arias
Calderón, Guillermo Ford, y los dirigentes de la Comisión Panameña de
Derechos Humanos Osvaldo Velázquez y José Manuel Faúndes, estos dos
últimos por ausencia de un juez. Presentes en la juramentación se
encontraban también Teresa de Arias, Dora de Ford, el encargado de
negocios de los Estados Unidos John Bushnell, la funcionaria de la
embajada norteamericana Patricia Perry y varios oficiales militares
norteamericanos.

Por medio de reformas constitucionales, Panamá declaró abolido su


ejército. El 31 de diciembre de 1999, en fiel cumplimiento a los tratados
Torrijos-Carter, se produjo la salida del último soldado estadounidense de
territorio panameño y el regreso del territorio de la Zona del Canal al
territorio soberano de la República de Panamá.

7. ¿Realiza un análisis propio y expón su fue justo o no realizar esta


invasión para poder arrestar a Noriega? Sustenta tu respuesta.

La invasión a Panamá no tiene justificación alguna. Manuel Antonio


Noriega era un dictador creado y formado por los Estados Unidos (como lo
eran todos los dictadores latinoamericanos de la época), fue entrenado en la
infame Escuela de Las Américas y por la Agencia Central de Investigación
(CIA), ambos entes al servicio de los intereses estadounidenses.

Para mí la verdadera causa de la invasión a Panamá, fue destruir el


monstruo que ellos mismos habían creado: la industria del narcotráfico
puesta en manos de militares. Es decir que, para desarmar la maquinaria
militar debían destruirla desde sus cimientos. Además, Los Tratados del
Canal de Panamá establece que la defensa de la importante vía
interoceánica la harán Panamá y USA en conjunto, pero si Panamá no tiene
ejército, ¿cómo puede defender el Canal? Esto da pie a que los Estados
Unidos pueden hacer uso de su prerrogativa de anular Los Tratados…
punto que aún hoy pende sobre el país como una espada de Damocles. Por
otro lado, necesitaban probar armamentos sofisticados y de nueva
generación debido a que en pocos meses desatarían la Guerra contra Irak
(Operación Tormenta del Desierto) que por ese entonces era el quinto
ejercito del mundo.

Noriega era una excusa y la salvaguarda de vidas norteamericanas era una


falacia, todos vivían en fuertes y protegidos por más de 20 mil soldados, no
veo la necesidad de semejante uso de la fuerza.

La invasión a Panamá simplemente fue una masacre clara, planificada y


metódica por parte del Ejército Norteamericano.

Webgrafía

https://es.wikipedia.org/wiki/Manuel_Antonio_Noriega

https://www.buscabiografias.com/biografia/verDetalle/6507/Manuel
%20Antonio%20Noriega

https://www.laestrella.com.pa/nacional/140817/bush-cuatro-motivos-
autorizar-operacion

https://es.wikipedia.org/wiki/Invasi%C3%B3n_estadounidense_de_Panam
%C3%A1#La_acci%C3%B3n_militar

https://storymaps.arcgis.com/stories/8f2c1ae7af594c508e2d025373237c57

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