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El ayuno de Daniel es muy famoso en la actualidad, muchas personas hoy en día desean
realizar algún tipo de ayuno para mejorar su dieta alimenticia, para mejorar su salud y es
muy utilizado para bajar aquellos kilitos de más que hemos subido. Sin embargo este ayuno
bíblico no tiene como objetivo mejorar nuestro cuerpo (aunque también es útil para eso) sino
acercarnos a Dios y crecer espiritualmente.
En la Palabra de Dios se habla de varios ayunos que realizó Daniel, en este artículo los
veremos y te daremos una guía de como hacer el ayuno de 21 días para que puedas
conseguir acercarte a Dios y mantener tu cuerpo completamente saludable.
Para hacer el ayuno de Daniel, es necesario hacer un ayuno parcial, evitando comer
cosas deliciosas y sabrosas. El objetivo gran objetivo es tener una verdadera
comunión con Dios en este tiempo, sacrificando el placer de comer por un tiempo. El
ayuno de Daniel puede ser más largo que un ayuno total de comida.
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El ayuno de Daniel es muy bueno para aquellas personas que no pueden dejar de comer
por ningún motivo. Este ayuno también es muy recomendado para aquellos que quieran
hacer un ayuno más largo, sin poner en riesgo su salud. La persona puede comer, pero
controlará su apetito, colocando a Dios por encima del placer de comer sus comidas
favoritas.
Daniel pidió permiso a sus superiores y se sometió a una prueba de 10 días para demostrar
que la dieta no comprometería su salud (Daniel 1:12-15). Aquí debemos recordar que el
enfoque de Daniel estaba en Dios, Daniel no ayunó para adelgazar de peso o para
demostrar que era mejor que alguien o para enfrentar o subyugar a otros.
Pasado los 10 días y demostrando su buen aspecto, Daniel y sus 3 amigos continuaron con
su dieta durante los 3 años de entrenamiento en el palacio babilónico.
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El ayuno de 21 días de Daniel se basa en el segundo ayuno que el profeta Daniel
realizó en Babilonia. En este ayuno que duró aproximadamente 3 semanas, Daniel no
comió carne ni cosas sabrosas y no bebió vino. También dice la Escritura que no se
perfumó durante ese tiempo. En esta ocasión, Daniel pasó los 21 días llorando y suplicando
a Dios (Daniel 10: 2-3 NVI).
El ayuno no tiene un propósito estético, ni debe ser una forma de demostrar ser «más
santo» que los demás (Mateo 6:16-18). El propósito de un ayuno es buscar intimidad con
Dios, santificarse y fortalecer la fe en Cristo (Mateo 6: 25-33).
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Alimentos que se deben evitar en el ayuno de Daniel
Tratamientos de belleza
Entretenimiento (redes sociales, televisión, cine, juegos…)
Relaciones sexuales (con el consentimiento del cónyuge. 1 Corintios 7:3-5)
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¡Atención!: Ayuna según tus posibilidades. Vea lo que puede hacer, de acuerdo con tu
salud y situación familiar. No necesitas abstenerte de todas estas cosas, pero haz el
compromiso de abstenerte de algo.
Usa tu tiempo libre en el ayuno para orar, leer la Biblia y buscar la guía de Dios. Este
es el propósito del ayuno. En medio de la incomodidad natural del ayuno, busque consuelo
en la Palabra de Dios (Mateo 4:4, Jeremías 15:16).
Para aprender más sobre cómo ayunar correctamente, lo que agrada a Dios, vea aquí:
¿Qué dice la biblia sobre el ayuno?
Paso No1. Defina el tiempo del ayuno. El ayuno es de 21 días comienza por ejemplo el
01/04/21 y termina el 21/04/21.
Paso No2. Elige la dieta durante el ayuno. Elija los vegetales y las frutas como una gran
alternativa de alimento en este período de tiempo, adicional también puede beber jugos y
sopas que aporten nutrientes para tu cuerpo.
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Paso No4. Realiza nuestra guía de ayuno. Con esta guía podrás acercarte a Dios por
medio de la lectura de los Salmos, saber el propósito de la lectura y tener acciones de
bendición con otras personas. Guía de ayuno de Daniel descargar aquí.
Ora y establece un tiempo para el ayuno. Si durante el ayuno sientes de parte de Dios que
debes detener o prolongar el tiempo, obedece a Dios. Lo más importante del ayuno es
seguir la voluntad de Dios y no solo cumplir las metas.
Sin lugar a dudas Dios te bendecirá durante el ayuno. No podemos saber exactamente qué
sucederá en ese tiempo, pero Dios actuará de acuerdo con tus peticiones y tu
necesidad. Quien busca a Dios lo encuentra (Jeremías 29:13).
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