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ABRAZAR AL FUTURO CON ESPERANZA P.

Amedeo Cencini

1 Cf Vita Consecrata, 110. P. Amedeo Cencini Es sacerdote canosiano. Cuenta con la licencia en Ciencias
de la Educación por la Universidad Salesiana, con especialización en metodología pedagógica, y un
doctorado en psicología por la Universidad Gregoriana. Después se especializó en el Instituto Superior
de Psicoterapia Analítica. Es un reconocido autor en publicaciones católicas por su fuerte interés en la
fusión de la psicología y la psicoterapia moderna con las ciencias de la formación religiosa. Es profesor
de los cursos de Formación integral y madurez vocacional, de Problemáticas psicológicas en la vida
religiosa y de Metodología del acompañamiento personal, además del curso Iglesia y escándalos
sexuales: causas, dinámicas y propuesta de formación continua del corazón en la Universidad Salesiana,
así como de Formación de la madurez emocional en el celibato consagrado en el Centro de Formación
de Formadores para la vida sacerdotal y religiosa de la Universidad Gregoriana. También es profesor en
el Studium, Escuela Interdisciplinaria para la formación del Magisterio eclesial y de la legislación
canónica sobre la Vida Consagrada, también colabora en el Claretianum. Desde 1995 es Consultor de la
Congregación vaticana para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica.
Conferencia Abrazar al futuro con esperanza Desde hace algún tiempo la Iglesia invita a la vida
consagrada (VC) para mirar hacia delante, al menos desde el último Sínodo que estuvo dedicado a ella,
como lo podemos leer en la exhortación post-sinodal Vita Consecrata 1. Allí, la invitación fue precedida
por una frase que posteriormente sería la más citada de todo el texto, en el que cuenta que no tenemos
sólo una historia gloriosa para recordar y contar, sino una gran historia por construir. Y es significativo
que también el papa Francisco no resista la tentación de retomar esta expresión en su carta a los
consagrados/as, llamados a escribir una gran historia en el futuro. No sé, francamente, si una gran
historia nos espera, ni cómo debe entenderse la expresión. Lo importante es que nos dejemos guiar por
el Espíritu, la fantasía soñadora y alocada de Dios, y entonces el futuro será lo que Él quiera, lo que
ahora no podemos ni siquiera imaginar. El futuro alguna vez dijo Roosevelt pertenece a quienes creen
en la belleza de los sueños.

Mi escrito, sin embargo, no teniendo yo mucha imaginación, está dividido en las tres partes ya
mencionadas desde el título. Para entender cómo llegar al futuro, en el presente de la Iglesia de papa
Francisco, ricos de la historia que nos ha dado origen. 1. Abrazar : Sociedad Post-Cristiana o Pre-
Cristiana? El verbo abrazar expresa la calidad de la relación. No se abraza a cualquiera o, menos aún, un
extraño, sino más bien una persona con la que ya existe una relación e incluso una cierta
confidencialidad, algo de afecto, y al mismo tiempo una relación de cierta manera a la par, en la que el
gesto se puede permitir. Hoy en día, parece que, después de los ataques terroristas y el clima de ira y
miedo que siguió, hay una gran necesidad de un cierto tipo de relación que nos permita recuperar el
contacto personal sin ira y miedo. Fue una prueba, entre otras cosas, la iniciativa llamada Con-tacto:
Abrazos gratis, que se celebró en Milán, en Plaza del Duomo domingo 6 de diciembre de 2015. Con este
pronunciamiento: Este año para Navidad llenaremos de abrazos, porque nada puede sustituir un abrazo
verdadero, sincero y ofrecido con todo el corazón y el afecto, incluso si se le da a un extraño, tal vez sea
precisamente entre las personas que no se conocen que el regalo se vuelve mágico. Un evento que
combina la magia de la Navidad, la magia de la donación y la magia del abrazo creando una receta para
ser felices, aunque sea sólo por un momento, así lo escribieron los organizadores del evento 2. Quién
sabe si sirvió para calmar un poco el clima y las relaciones. A nosotros nos interesa entender bien un
gesto que podría ser muy importante y decisivo hoy para nosotros los consagrados. Ante todo a quién
abrazar? El texto dirá al futuro. Claro que se trata de una metáfora, pero ya que no se abraza a una
entidad abstracta, ni el tiempo ni la historia, y el verbo habla precisamente de brazos, de brazos que se
encuentran en torno a 2 Que nos brinda esta información ( científica?): un abrazo dura en promedio tres
segundos, pero cuando dura 20 tiene en la mente y en el cuerpo un efecto terapéutico porque produce
oxitocina, la hormona del amor. 3

otra persona, el objeto del abrazo deben ser personas, hombres y mujeres que viven en este mundo,
esta sociedad en la que se nos da la gracia de vivir. Si queremos entonces que el gesto sea sincero, y no
se asemeje a la mano muerta del (falso) gesto de paz durante la misa, es necesario que coincida con lo
que sentimos dentro de nosotros, que sintamos afecto por esta realidad humana, verdadero afecto. El
afecto que viene del afecto al otro, como nos dice la psicología, y sólo entonces es verdad, de lo
contrario es ficción o simplemente compasión. Si no se evangeliza donde no se ama, de hecho, no se
ama donde no hay afecto a otro. Cuántos abrazos les podemos dar... Estimamos nuestra sociedad? Qué
idea tenemos de ella? 1.1. El dogma del post Por supuesto, la apariencia no es emocionante: el mal
parece reinar en todas partes y en muchas formas, parece casi que empieza un proceso de
deshumanización, como si se estuviera perdiendo la dignidad humana. En particular, hay una forma de
evaluar estos tiempos en términos de algo que se fue ejecutando poco a poco, llegando a un punto final,
que no parece dar lugar a algo nuevo. Sería el dogma de la post, que domina todas las lecturas
sociológicas e incluso filosófica, y no sólo eso, esta pequeña y terrible partícula que es en realidad un
nihilista y mortal (de hecho, hay quienes hablan de sociedad post-mortal 3 ), ya que no reconoce una
identidad nueva y única para los tiempos que estamos viviendo, sino sólo los síntomas de una
decadencia inexorable y fatal, como si viviéramos en una identidad ya pasada, o sin identidad. Y esto
sucede en varios ámbitos para los que esta sociedad (y cultura) serían post-industrial, post-capitalista,
post-marxista, post-moderna o post-secular, post-metafísica o post-ideológica, post-conciliar e incluso
post- humana, como si estuviera extinguida la especie humana, y, en el plano del creyente, post-
cristiana, como si el cristianismo fuera finito y los creyentes residuo de algo que ya está muerto y que no
tiene nada más que decir a los hombres y mujeres de hoy, y los consagrado/as cómo unos zombies,
seres extraños que aún no se han dado cuenta de que su mundo de creencias ya no existe y que nadie
quiere escucharlos. 3 Cf Los estudios de la sociología canadiense C. Lafontaine, Il sogno dell eternità. La
società postmortale: morte, individuo e legame cosiale nell epoca delle tecno scienze, Medusa, Milano
2009. 4

Sería realmente desastroso; sería desastroso incluso pensarlo. Pero reconocerán que a veces en
nuestras reflexiones y análisis de las diversas convenciones es este el juicio que damos de esta época, la
llamamos simplemente así: post-cristiana, sólo para sentirnos como gente fuera de lugar, inútiles,
especies en vía de extinción, todos nosotros consagrados/as un poco moribundos, algunos (institutos) ya
muertos y otros en el camino del fin, todos en una Iglesia que en lugar de evangelizar se hizo corromper
por el mal que prevalece. Perspectiva cualquier cosa menos excitante, de hecho, la perspectiva que nos
pone en una situación de conflicto con este mundo, visto como hostil y pagano, peligroso e infectado. En
vez de abrazos y besos... 1.2 Del post-cristiano al pre-cristiano Y aquí está el desafío: pero estamos
seguros de que esta es una manera correcta de leer la situación? Donde correcto es sinónimo de
creyente? Y si, en cambio, esta cultura fuera pre-cristiana? O en espera de algo, de alguien, de salvación,
de liberación del miedo, de la falta de sentido, de la muerte, del sufrimiento, de la guerra..., a la espera
de la felicidad, de vida plena, de verdad, para siempre? Obviamente, los hombres y mujeres de hoy
pueden no estar al tanto de toda esta expectativa, o reducirla a los 4 días que vivimos en esta tierra (sin
ningún tipo de proyecciones), sin referir esta espera a Dios, sin saber que en realidad todo esto significa
aquél deseo que está presente en el corazón de cada hombre y mujer. Pero precisamente ese es nuestro
trabajo, de nosotros los consagradas/ as. Precisamente por esto nació la VC: para decir que en el
corazón del ser humano, cualquiera, se encuentra este irreprimible deseo de ver su rostro, de escuchar
su palabra, la única que habla de vida eterna, de experimentar su amor, el único que puede satisfacer
plenamente la sed infinita de amor del corazón humano. Esta es la esencia de VC: revelar al hombre este
deseo, reconocerlo y llevarlo a cabo, incluso cuando es ignorado, olvidado, perdido, sofocado,
contradicho, negado, burlado... El concepto de sociedad post-cristiana es simplemente absurdo. Debido
a que todas las épocas siempre serán precristiana, siempre a la espera, incluso y sobre todo cuando no
lo sabe. Y es entonces necesaria la VC, que es la experiencia espiritual de aquellos que conocen el
camino que conduce a Dios, y sabe que este camino también pasa por diferentes fases alternas (de
duda, incertidumbre, tentación, indiferencia, rechazo...), 5

hasta el punto de ser capaz de ayudar a otros a reconocer el deseo y comenzar un viaje hacia Dios. 1.3.
El abrazo como símbolo de la Nueva Evangelización Y entonces el consagrado es cualquier cosa menos
un zombi, sino hermano/ hermana que se destaca por el amor hacia el hombre y la mujer de hoy,
siguiendo esta línea, que es quizás una nueva forma de evangelización. Nuevo por el estilo, por la
calidad de la relación, que ha de ser como un abrazo, por supuesto, dictada por el amor a este mundo,
no por el miedo, dictada por el afecto y la confianza por ello, no por el desprecio desconfiado. El abrazo
podría entonces convertirse en el símbolo del estilo relacional típico de la NE. Mencionemos sólo
algunas de las características de este estilo. Abrazar el futuro en relación con esta historia y las personas
reales que la viven (no el mundo, es demasiado fácil decir que abracen el mundo, es ilusorio) significa 4 :
a- No sufras el futuro, antes que todo, no lo avances pasivamente, sin preparar el futuro, dejando que te
arruine, o yendo al azar, navegando sin vela, sin un plan específico. Esto significa de alguna manera crear
ese futuro, o anticipar con clarividencia profética. Qué nostalgia por los profetas hoy en día! b- Y de
nuevo, abrazar al futuro en función de las personas significa no preocuparse demasiado de nuestra
supervivencia. Que, además de ser un nuevo miedo, al cual no estamos acostumbrados (y
psicológicamente presente en estos tiempos de ataques terroristas), sería así la preocupación pagana.
De hecho, nosotros nos reconocemos como una patente de inmortalidad, como entidades individuales.
Pero no es así. En todo caso, lo importante es entender cómo moverse en este tiempo, sin
lamentaciones, sin temor del tiempo y de la cultura en la que vivimos. Evitando leer solamente el mal,
sólo un proceso de 4 De acuerdo con el Gran Diccionario de la lengua italiana, abrazar tiene diversos
significados: ceñir, apretar con los brazos; ocupar, rodear (como las montañas que abrazan el mar, o el
silencio que envuelve un espacio determinado); mantener con sí, contener (por ejemplo, envolver con la
mirada, contemplar con una mirada total.); comprender, entender (con la mirada de la mente o del
corazón, encerrar, incluir (una serie de nociones, conceptos); aceptar una opinión con convicción, una
causa; recibir en el propio espíritu, dedicarse por completo a... (por ejemplo, para abrazar la Cruz);
promover, proteger (cf. S. Battaglia (eds.), Grande Dizionario della lingua italiana, vol. I, Utet, Torino
1961, pp.30-31). 6

la depravación, como si la historia estuviera yendo hacia un punto de pérdida progresiva. Perdiendo el
sentido de la encarnación de Dios en la historia, en cada historia y en todo momento; y la redención, la
redención de cada persona, de cada época. c- Abrazar positivamente, es un signo de amor, dijimos,
quiere decir, la relación positiva recíproca. Significa amar este mundo, los hombres y mujeres de hoy. Es
tener un prejuicio positivo hacia los demás, no negativo, de rechazo o de evaluación negativa.
Efectivamente esto significa que tener la capacidad, en primer lugar espiritual, y después psicológica, de
descubrir el deseo infinito y eterno del ser humano, lo que hace que esta cultura pre-cristiana llegue a
Cristo, alfa y omega, y cada hombre y mujer tal vez como nunca antes en la espera de su salvación,
incluso si no lo sabe... d- E incluso tal prejuicio positivo significa la convicción que, incluso en esta cultura
haya puntos de vista positivos y fructíferos, y por lo tanto la necesidad de un compromiso de nuestra
parte para comprender bien los valores de esta cultura, las aperturas positivas, puertas abiertas hacia
esta dirección, los signos del logos spermatikòs 5 y los signos de los tiempos en el fondo, a veces señales
poco claras y débiles en la intensidad que sólo las personas espirituales saben percibir... e- Y evitar por
todos los medios hacerse pesimistas, quejumbrosos, funestos, aves de mal agüero, terroristas del
espíritu, analfabetos incapaces de leer en el presente el camino hacia el futuro, nostálgicos por el
pasado y enojados con el presente, incluso con el Papa. Y en lugar de perder una gran cantidad de
energía en sentir lástima por sí mismo y ser un experto en el drama por el fin-del-mundo, más bien
aprendamos la lengua hablada hoy, aprendemos a expresarnos de acuerdo a la sensibilidad secular, para
poder entender el anuncio del Evangelio, para que nuestras palabras se entiendan, para que nuestro
testimonio resulte eficaz, para que nuestro mensaje llegue al corazón de quien lo escucha. También
porque el lenguaje religioso ya está muerto... 5 Cf S. Justino, según la cual el cristianismo mantiene y
desarrolla en su origen todas las pistas, las advertencias y las verdades, no siempre totalmente
evidentes. También presentes en las filosofías paganas. 7

f- Todo esto, finalmente, tiene que ver con la calidad de nuestra vida espiritual, en el sentido de que el
verdadero hombre y mujer espiritual sabe o debería saber, por experiencia, que la búsqueda de Dios
también pasa a través de la duda, la incertidumbre, la lucha, incluso el rechazo y la negación... Así
entonces debería ser experto en reconocer la sutil sed y el anhelo de Dios que a veces se oculta detrás
de las actitudes, aparentemente negativas hacia él. 2. El Futuro : Misterio o Enigma? La segunda parte
del título nos invita a confrontarnos todavía con el sentido del futuro, pero esta vez en sí mismo, como
un tiempo que nos espera, y no está conectado inmediatamente con la gente y cultura. Sin embargo, ya
hemos dicho que la invitación del Papa para abrazar el futuro debe ser vista como una provocación a no
permanecer atrapados en el pasado o para lamentarlo, insistiendo a verlo como el momento ideal,
como piedra angular de un presente y del presente destinado a perder la comparación con el pasado
glorioso y que por esto debería ser juzgado negativamente. Mirar hacia el futuro es un signo de
inteligencia creyente y realista, positiva y optimista. Se entiende que la historia está en las grandes
manos de Dios. Y el consagrado/a, en términos de tiempo, es un hombre/mujer del futuro, vive
proyectado/propenso hacia el mañana, el mañana de Dios. Eso significa, antes que todo, es decir, en un
nivel espiritual, apertura al sentido del misterio. Es interesante ver aquí cómo la actitud espiritual puede
también determinar-decidir la actitud psicológica, y, específicamente, cómo disponernos al futuro. Dios
es misterio, y no podemos pretender entenderlo, ni comprender lo que el futuro nos ha preparado (ya
que el tiempo pertenece a aquél que está fuera del tiempo). Pero aquí hay dos posibles lecturas o dos
formas de entender... lo que no se puede entender. 2.1. Exceso de luz o de tinieblas? Dios es misterio
porque hay demasiada luz en él, por un exceso de luz, de tal manera que el ojo humano no la puede
soportar. La idea de misterio es una perspectiva positiva, y llena de confianza y esperanza, ya que poco a
poco nuestro ojo puede adaptarse, puede ser educado para mirar al sol que es (el misterio de) Dios. Es,
en esencia, lo que se aprende a ver con 8

la oración, que es una forma (o el modo) para aprender a contemplar el misterio, para ver a Dios para
dejarse mirar por él, o a dejarse envolver por su mirada brillante que ilumina todas las realidades de
nuestra vida, incluso aquellas que parecen difíciles e imposible de comprender, como el dolor, la
muerte, los fracasos, las injusticias, el mañana, las crisis... (y sería otro abrazo, que se refiere a la del
bebé que está en los brazos de su madre, y está sereno y satisfecho, no va en busca de grandes cosas, cf.
Sal 131). Incomprensible misterio por exceso de oscuridad sería más bien el enigma, que, precisamente,
es lo contrario del misterio luminoso. Son dos perspectivas completamente diferentes, como dos formas
diametralmente opuestas de ver, de cuya elección normalmente sólo implícita e irracional puede incidir
en gran medida en nuestra vida y nuestro testimonio. El Misterio es bueno porque es relacional, quiere
hacerse entender y comunicarse con el hombre, por lo que constantemente nos envía mensajes y
señales; el enigma por el contrario, no desea revelarse, es impenetrable, te aleja y rechaza si te acercas
demasiado. Con el Misterio puedes hablar, tratar de verlo y tocarlo; el enigma, es como un ídolo hecho
por manos humanas que tienen ojos, pero no ve, oídos, pero no oye, manos, pero no toca..., y nos hace
más y más como él. El Misterio no solo tiene los sentidos, sino que está lleno de sentido y te da la
capacidad de dar sentido a tu vida; el enigma es insensato y hace que todo carezca de sentido. El
misterio es sensible; el enigma es insensible. El misterio está lleno no sólo de luz, sino también de calor;
el enigma es frío y metálico. El Misterio te abraza; el enigma te ignora. El Misterio atrae y se puede
contemplar; el enigma no es atractivo y no ofrece la mirada meditativa. El Misterio te provoca, amplía tu
espacio y amplia tus horizontes, te da y juntos te pide grandes cosas, lo máximo que puede dar, por lo
que te ves tentado a resistirle, y también puedes luchar con el Misterio; el enigma no te provoca, ni te
pide que cambies, todo es plano y sin vida en el enigma. El Misterio te abre al futuro sentido como un
amigo, al que puedes mirar con esperanza; enigma es desesperación y miedo, es incertidumbre para un
futuro que no se sabe si existirá, y si por casualidad existe se le teme como a un enemigo hostil. El
Misterio es divino o conduce a lo divino; el enigma es diabólico y nos hace sombríos. Tal vez esto del
Misterio y enigma es un tipo de alternativa inusual, a la que no estamos acostumbrados y al que nunca
antes nos habíamos enfrentado. De hecho, todos decidimos, si bien no de manera consciente, 9

a cuál de las dos privilegiar. 2.2. Si Dios es enigma Por otro lado, es evidente que si así están las cosas
todos optamos por el misterio, y que a todos nos gustaría establecer una relación con Dios en la lógica
del misterio y de su apertura, pero es posible, e incluso probable, siempre y cuando estemos en esta
tierra, que en dicha relación también haya componentes enigmáticos que pesan, lo hacen difícil y
carente de pasión, inestable y frío, oscuro y superficial, poco confiable y tal vez incluso temeroso. Y sería
un problema muy serio. Pero es importante entender que, en la medida en que la relación con Dios
contiene componentes enigmáticos, habrá consecuencias en la vida del sujeto. Llegará a ser, de hecho,
en algún modo enigmático, incluso el creyente, desconocido y oculto a sí mismo, lejos de sí y de la
verdad misma; enigmática será su oración, poco abierta al diálogo y nada sincera, más parecida a la
presunción del monólogo del fariseo que al reconocimiento transparente del publicano arrepentido (cf.
Lc 18,9-14); enigmática será la lectura de la Palabra de Dios por parte de un lector poco dispuesto a
dejarse leer en profundidad por la Palabra, y por lo tanto será enigmático su anuncio de la Palabra, débil
e incapaz de tocar el corazón de quien lo escucha; enigmática será la formación que da a los demás, es
decir dispersa e incapaz de causar un camino hacia la conversión; sino que la relación con los demás será
oscura y carente de profundidad; por esto existirán comunidades y fraternidades enigmáticas, sin
transparencia y división de almas, anónimas y sin rostro; e incluso el apostolado podrá resultar igual,
confundido, sin pasión y sin poder transmitir a Dios y su amor, mientras que el apóstol será evaluado
como trabajador social, no porque se refiera al misterio, el testimonio dado por la VC será ineficaz y
ambigua, y la VC misma finalmente será enigmática, más apreciada para lo social que por el Misterio
que vive y que se vuelve, cada vez más incapaz de indicar la fuente misteriosa de su trabajo, de
comunicar la nostalgia de Dios con sus obras, de decir el amor, misterio y misericordioso del Eterno,
misterioso porque sigue siendo demasiado grande... En este punto es evidente que será difícil construir
el futuro. 10

2.3. En el corazón del Misterio Y luego hay que prepararse para el futuro... desde lejos, preparando a los
apóstoles del mañana como anunciadores del Misterio (y no como miembros de una ONG, como le
gusta decir al papa Francisco). Y la mejor y más coherente manera de formar adoradores-anunciadores
de Misterio es respetar sobretodo, el misterio de la persona humana y del llamado, con una formación
educativa que sepa llegar al corazón y a su sensibilidad, porque sean siempre más corazón y sensibilidad
del Hijo, del Siervo, del Cordero. Esto es, de hecho, el objetivo final de la VC. Lo que nos impide
continuar pensando la formación como un programa que sólo toca el lado exterior de la persona o que
se alegre de la corrección del comportamiento, es en cambio la formación que no tiene miedo de llevar
al individuo a descubrir sus propios demonios y todas las características enigmáticas, que lo hacen
mediocre y contradictorio, temeroso de revestirse de los sentimientos de Jesús, para ir al encuentro con
el misterio de su pascua de muerte y resurrección. Pero todo esto se vuelve aún más importante y
necesario si implementamos profundamente lo dicho en el párrafo anterior. Si nuestro anuncio de hoy
es dirigido a una sociedad que reconocemos y queremos reconocer como pre-cristiana, y a una cultura
en la que se aprende a identificar los rasgos de la espera en cuanto a inconsciencia de Dios 6, es decir, se
trata de desenterrar el deseo o el misterio de Dios sepultado quién sabe bajo cuántas capas de
sensaciones, atracciones, gustos, ambiciones, perspectivas existenciales, enigmas... contrarias, entonces
se necesita aprender y luego enseñar a alcanzar el corazón humano, a su misterio más profundo, el
misterio que el hombre es y que el ser humano siempre trae consigo. O pasar de la formación
enigmática (indiferente y superficial) a la misteriosa, que llega y cambia el corazón. Es esencial para
formar personas que han aprendido el camino del corazón, sobretodo, en su camino personal, y que
precisamente por esto saben hacer la misma operación con el corazón del otro. Debido a que el deseo
de Dios está presente en lo más profundo del corazón humano, a menudo cubierto por un manto de
sentimientos contradictorios, pero que nunca podrán borrarlo. Por lo tanto, es importante 6 No
podemos dejar de recordar el discurso de Pablo en el areópago de Atenas: Pablo, estando de pie en
medio del Areópago, dijo: «Hombres de Atenas, veo que en todos los sentidos son muy religiosos.
Porque pasando y observando los objetos de su culto, hallé también un altar en el que estaba escrito: AL
DIOS DESCONOCIDO. Sin embargo, lo que adoran sin conocer, es lo que yo les anuncio» (Hechos 17.22 a
23). Pablo reconoce que incluso los atenienses son bajo todos los aspectos extremadamente religiosos.
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formar consagrados/as que conozcan este camino del corazón y sepamos reconocer ese deseo de lo
divino. No es sólo cuestión de estrategia comunicativa, sino de camino ascético, del esfuerzo para
examinar los propios demonios, de valor por retomar cada día la peregrinación a las raíces del yo, le
point vierge de T. Merton, donde el deseo de Dios está intacto, más allá de todas las incrustaciones e
incoherencias, los temores y las barreras defensivas, incluso en confrontaciones de lo divino, y donde a
cada uno se le permite reconocerlo 7. Es necesario, más específicamente, concentrar la formación en la
formación de la sensibilidad, del mundo interior de la persona, que parte de la atención a los sentidos
(externos e internos), y tiene como objetivo evangelizar sensaciones y emociones, gustos y deseos,
afectos y pasiones, consciente e inconsciente...: todo este mundo interior es el lugar de conversión y
formación, si queremos llegar al corazón de los hombres y mujeres de hoy, o si queremos anunciar una
buena noticia y que dé alegría y sentido como verídica y vital. No es quizás este el verdadero problema
de la evangelización, nueva o vieja que sea? Tenemos una absolutamente extraordinaria noticia que dar,
que es lo que todo ser vivo, por su propia naturaleza enamorado de la vida, busca y quiere escuchar
decir, que vamos a vivir para siempre, en un reino de la luz infinita, amados por Dios para siempre. Sin
embargo, no logramos comunicarlo, no sabemos tocar el corazón, no hemos aprendido el camino del
corazón, a estar delante del misterio para guiar a otros. 2.4. Elección por el futuro Para ello son
fundamentales hoy en día las elecciones estratégicas para construir el futuro, para que no nos
encuentre desprevenidos, elecciones que tal vez podrían no parecer dar un resultado inmediato, sino
preparando personas fuertes y consistentes, que han aprendido a captar el misterio dentro y fuera de sí
mismos, capaces para afrontar el futuro en este tipo particular de cultura y de sociedad. Elecciones para
invertir en el futuro (con mucho ojo, detenidamente). Por ejemplo, una manera de prepararse para el
futuro es: a- preparar formadores, expertos en el programa educativo-formativo que hemos dicho,
personas que han formado su sensibilidad y que debido a esto saben acompañar a otros en el mismo
camino; 7 T. Merton, Diario di un testimone colpevole, Milano 1968, p.157, cit. in M. W. Higgins, Sangue
eretico. La geografia spirituale di Thomas Merton, Milano 2001, p.230. N.T. 12

b- hacer bien los discernimientos vocacionales (atentos a la selección adversa, a la posibilidad, por lo
general vinculada a la mediocridad de los testimonios, para atraer a las personas menos adecuadas a
vivir la consagración), no detenerse en el análisis conductuales superficiales, ser justamente estrictos en
los criterios vocacionales y en el modo de vida usual de un llamado que no puede ser para todo el
mundo, y que tiene en ella algo de dramático, ya que pide seguir al Hijo obediente, al Siervo sufriente, al
Cordero inocente; c- Proponer caminos pedagógicos que unan el camino de búsqueda personal de la
propia verdad, con el estar delante del misterio de Dios, es decir, caminos que sepan unir el aspecto
humano con el teológico, lo psicológico con lo espiritual, la identificación de las propias debilidades con
el descubrimiento que en ellas se esconde una gracia misteriosa, la acética con el trabajo sobre su
propia sensibilidad... para preparar siempre más consagrados que sean verdaderos hombres, verdaderas
mujeres, que vivan con toda la riqueza de su humanidad, la relación con Dios y su misterio, libres de
encontrar nuevas formas para ir a Él y hacer sentir su presencia con el rico armamento dado en dotación
al hombre (consagrados místicos, poetas, artistas de la relación con Dios, sino también apóstoles de la
caridad, defensores de los pobres frente a los poderosos, los mártires y testigos de la verdad...); d- Otra
elección estratégica es el crear finalmente proyectos reales y de verdadera formación permanente como
programas de formación para las diferentes edades de la vida. Pero a partir de la formación del corazón
docibilis, que ha aprendido a aprender la vida por medio de la vida por toda la vida. Y dejar de pensar la
FP como cursos de actualización, espiritual o pastoral. 3. Con Esperanza : Misioneros o No? Finalmente
la carta del Papa nos muestra la actitud con la que abrazar el mundo y construir el futuro: la esperanza.
Estas son sus palabras: La esperanza de la que hablamos no se basa en los números o en las obras, sino
en Aquél en quien hemos puesto nuestra fe (cf. 2 Tim 1:12) y para quien «nada es imposible» (Lc 1,37).
Esta es la esperanza que no defrauda, y permitirá a la vida consagrada continuar escribiendo una gran
historia en el futuro, al que debemos mirar, conscientes que es hacia este a lo 13

que nos empuja el Espíritu Santo para continuar haciendo con nosotros cosas grandes. No caigan en la
tentación de los números y de la eficiencia, menos aún en confiar en las propias fuerzas. De la esperanza
podemos tener una ligera idea, poco realista, un poco pasiva, casi temerosa... Claro que si la esperanza
es débil lo son también la fe y la caridad, sus hermanas virtuosas, mientras que afirmativamente una
esperanza fuerte no sólo dice el excelente estado de salud de las otras dos, sino que de alguna manera
les da a ellas, y a la persona optimista, un cierto color y calidez, que por lo general también es
contagioso. La virtud de la esperanza, la virtud pequeña, como la llamaba C. Peguy, es lo que sorprende
a Dios aún hoy en día 8. Virtud que todos sentimos una gran necesidad, que dice realmente lo que nos
falta y parece faltarnos cada vez más. Virtud que es el alma del verdadero misionero, que le da fuerza y
valor para enfrentar las situaciones más difíciles, para reconocer las zonas donde más pesada es la
desesperación. Virtud que nos determina si somos misioneros o no. Incluso podremos no saber si la VC
tendrá futuro o, más bien, si nosotros consagrados/as de hoy vamos a tener un futuro, pero una cosa es
cierta: si reconocemos y aceptamos la desesperación que actualmente amenaza el mundo actual,
tratando de responder con el corazón compasivo, porque estamos convencidos de la fuerza que viene
de lo alto, vamos a construir la esperanza y habremos respondido plenamente a nuestra vocación. De lo
contrario, también podremos contaminarnos de este terrible virus: la desconfianza, y lo que es peor lo
difundiríamos a nuestro alrededor. Veamos concretamente un área donde hoy se nos pide cada vez más
ser hombres y mujeres de esperanza, donde encontramos montones de desesperación. Estar presente
en esta área significa concretamente ser misioneros en este mundo de esperanza y en la Iglesia del papa
Francisco; de lo contrario, significaría renunciar a nuestra misión. 8 La fe no me sorprende, no es
sorprendente. Yo brillo en mi creación. En el sol y en la luna y en las estrellas. En todas mis criaturas... La
caridad es evidente. Para amar al prójimo sólo hay que dejarse ir, sólo hay que mirar tanta desolación.
Para no amar al prójimo es necesaria solo lastimarse, torturarse, atormentarse, contradecirse.
Endurecerse. Hacerse daño. Desnaturalizarse, mirar hacia atrás, ponerse en marcha atrás. Recuperarse.
La caridad es totalmente natural, toda efusiva, toda simple, toda buena. Es el primer movimiento del
corazón. Es el primer movimiento que es bueno. La caridad es una madre y una hermana... Para no amar
al prójimo, niña, se necesitaría taparse los ojos y los oídos. A tantos gritos de desesperación... Pero la
esperanza, dice Dios, la esperanza, sí, que me sorprende. A mí mismo. Eso sí que es sorprendente. Que
estos pobres hijos vean cómo van las cosas y crean que mañana será mejor. Que vean cómo van las
cosas hoy y crean que va a mejorar mañana en la mañana. Eso sí que es sorprendente y es sin duda la
más grande maravilla de nuestra gracia. Y yo mismo estoy sorprendido. Y debe ser porque mi gracia
realmente tiene una fuerza increíble (C. Peguy, Il portico del mistero della seconda virtù, Medusa 2011).
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3.1. El valor de llorar (o de hacer ruido ) No sabía que en sánscrito, lengua-madre de las lenguas
indoeuropea, las lágrimas son las que hacen ruido. Si, entonces, Qohelet dice que hay un tiempo para
llorar (Eclesiastés 1,4), podríamos decir que este es el momento para hacer ruido. Ruido para qué? Pues
bien, estamos acostumbrados a llorar más o menos ruidosamente por nuestros problemas, por la
disminución de las vocaciones y la pérdida de nuestro peso político-social y tal vez también eclesial. No
sé si esas sean lágrimas benditas, aquellas que Dios junta en su odre (Sal 56,9). Ciertamente, son
lágrimas muy autorreferenciales. Pero son otras las lágrimas que ahora deberíamos llorar, y justo en el
auténtico sentido de la expresión, como hemos visto, o lágrimas ruidosas, o haciendo de algún modo
ruido gritando, si es necesario. Por qué? Por la violencia que nos rodea. Los diferentes tipos de violencia
contra los débiles, de los que no pueden defenderse, contra los inmigrantes, contra los pequeños,
contra los que no pueden venir a la vida 9, contra las mujeres, contra los pobres, contra la tierra y contra
sus bienes, contra el ciudadano indefenso..., violencia que logra cada vez más poner en peligro el bien
precioso para la vida de cada hombre que es la paz, la armonía relacional. Violencia que se está
volviendo más y más terrible, terrorismo, guerra, una especie de 3ª guerra mundial en pedazos, dice el
papa Francisco, que ya tiene demasiadas lágrimas derramadas. Son problemas más grandes que
nosotros, dirá el típico realista, enfermo de aquél maldito realismo que no sabe soñar y que tan a
menudo conduce a la inmovilidad. Nos parece muy cómodo ese realismo, pero también nos cuesta un
precio muy alto: el de nuestra credibilidad. 3.2. Cuál credibilidad? Qué puede hacer la VC? Qué podemos
hacer quienes rezamos todos los días por la paz? Pero cuando pensamos se pregunta provocativamente
alguien y nos preguntamos todos nosotros de dónde viene esa paz? 9 En Italia desde el año 1978 se
estima que hubo aproximadamente 6 millones de abortos! Esto es uno por cada 5 niños nacidos. La cifra
es impactante. Al mismo tiempo, sin embargo, parece que los certificados de aborto real son más bajos
en las entrevistas en los consultorios de las diversas ASL. Esto quiere decir que quien se presenta para
un aborto no siempre, después de la entrevista, decide llevarlo a cabo. Por lo tanto es importante la
acción que se hace en los consultorios. A pesar de que los consultorios a menudo son acusados de ser
simplemente centros de información sobre los métodos abortivos (A. Cassetti, desde el sitio In terris,
26/XI/2015). No podría ser esta un área para intentar estar más presente como VC (mujeres en especial,
pero no exclusivamente)? 15

Desde arriba? Desde los cielos de los dioses? 10 En realidad no es nuestra consagración a Dios por los
hombres y las mujeres de nuestro tiempo que podríamos ponernos a gritar, a hacer ruido, de tener el
valor de hacer nuestra parte para ser constructores de la paz? No podemos permanecer inertes, sin
hacer prácticamente nada, sin levantar la voz, sin sentirnos obligados a crear o mantener una cultura,
una mentalidad y sensibilidad o programas pedagógicos que vayan a una precisa dirección. No es ésta
nuestra misión? Hemos celebrando el año de la vida consagrada, pero de este año quién se dio cuenta
en la Iglesia? Se puede quizás hablar de una atención eclesial, que involucró el pueblo de Dios, hacia
esta forma de vida tan importante en la historia? Así que si no prestaron atención nos preguntamos,
sobretodo a nosotros mismos, sin ofendernos demasiado, sobre ésta extraña afasia nuestra o pérdida
de la capacidad de testimoniar el sentido de la consagración. Debido a que la VC es tan silenciosa, dando
la impresión de ser casi indiferente o neutral, corre el riesgo de convertirse poco a poco, a veces
cómplice de esta violencia, en un monstruo de muchos tentáculos? Cómplice de la falta de valor de la
denuncia. Pero también cómplice en un sentido muy real, porque en realidad tenemos por desgracia
nuestra contribución a esta lógica de la violencia. Ves los tristes episodios de los escándalos y abusos,
sexuales, y financieros, a manos de hombres de Iglesia, y de consagrados/as, en particular. Episodios
gravísimos en sí mismos, pero también, y tal vez incluso más, para la reacción o para el tipo de
interpretación que le ha dado la mayoría de los consagrados (es decir, todos nosotros): reacción
defensiva, muy poco sufrida, e incluso menos arrepentida, especialmente preocupada de tomar
distancia de aquél que haya cometido estas transgresiones, sin asumir ningún tipo de responsabilidad
por estos escándalos, tratando de minimizar su gravedad, como si se refiriera únicamente a una
pequeña minoría de pervertidos o enfermos, como si ya no fuera cierto que cuando se suceden estas
cosas horribles en una institución como la Iglesia, la responsabilidad es un poco de todos, porque la
caída escandalosa de unos pocos es generalmente resultado de la mediocridad de muchos. Tal vez este
es el verdadero escándalo: esta falta de responsabilidad o esta lectura escandalosa. Y la falta de
rendición de cuentas se encuentra, a su vez, la no conciencia de la 10 A. Potente, C è un tempo per
piangere, c è un tempo per fare rumore, en Combonifem. Mondo, donna missione, 81(2015)11, 31. Me
inspiré en este artículo para este párrafo. 16

mediocridad generalizada, aquella mediocridad que ya es un escándalo en sí misma (y que tal vez toca
estas dos áreas tan estratégicas: la virginidad y la pobreza), y que nos quita inevitablemente autoridad
en denunciar todo tipo de violencia, o incluso el derecho de denuncia. Así es como se cierra el círculo. Es
por eso que estamos mudos ante la violencia en general que hay en el mundo, por lo que no somos
testigosmártires suficiente, y que nos conformamos con susurrar palabras con devoción y de oración,
salmos e invocaciones... litúrgicamente acordes para el terrorismo, la violencia de todo tipo, los abusos
sobre los más débiles, el hambre en el mundo, la degradación del medio ambiente..., pero palabras e
invocaciones que no pueden llegar al corazón del Dios de la paz, y sin ningún tipo de credibilidad ante el
mundo, como lágrimas que no hacen ruido. Y como bien sabemos, aunque no nos guste. Perder
credibilidad, de hecho, es volverse insignificante, es arrojar el sentido de misión, como dejar de serlo. Es
perder capacidad de atracción, de atracción vocacional. O llegar a ser enigmáticos, retomando el punto
anterior. Dice un proverbio africano: las lágrimas hacen daño cuando regresan a los ojos, es decir,
cuando no expresan dolor sincero por los demás y sólo hablan de frustración subjetiva, y entonces no
sirven para nada y caen sobre sí mismo. Las lágrimas son buenas y hacen bien, en cambio, cuando caen
a la tierra y la empapan para que nazca una nueva y hermosa realidad. Lágrimas fecundas! 3.3. Cuál
formación? Hoy en día ya no es el coro modulado de palabras dulces y delicadas, coros alternos. Ahora
es el momento de levantar la voz, con el cielo y la tierra, con piedras y plantas, dando voz a quien no la
tiene o a quien no es escuchado... Es imposible decir que no estamos involucrados, toda esta historia
dramática de guerras, violencia, terrorismo... no se trata de nuestras decisiones, que para nosotros estas
cosas no importan, que otros deben intervenir. Al igual que es imposible decir, ya lo hemos dicho, que
no tienen nada que ver con los escándalos y los reverendos abusos (que muy poco tienen de reverendo
en realidad) de diversos tipos. Y en todo caso, tenemos que preguntarnos, dado que hablamos de
formación: qué lugar hay para estas cosas en una vida de formación a la VC, mientras enseñamos
hermenéutica bíblica, lenguas clásicas, normas 17

jurídicas, los rituales litúrgicos? Hay un dolor semejante a mi dolor?, Escribió el profeta en las
Lamentaciones. Y lo escribió porque no lograba decirlo, porque el escribir era como romper el silencio
en las paredes, en las piedras, en los muros, en los teclados de nuestras computadoras, en la tinta de
nuestros bolígrafos. Pero, qué eco tiene este dolor en los espacios formativos dedicados a... aprender, a
aprender qué? De qué formación, es decir «forma de acción», estamos hablando? 11. Es la formación de
tener en sí mismos los sentimientos, las emociones, los deseos, los pensamientos, los gustos, la
sensibilidad, la pasión y la compasión del Hijo obediente, del Siervo sufriente, del Cordero inocente...,
formación dramática, en perspectiva pascual, que inevitablemente va a durar toda la vida..., o la
formación es meramente superficial, se alegra de la conducta adecuada, es poco exigente y está mucho
más preocupada por la cantidad y no por la calidad? La primera forma el corazón, la segunda forma
monstruos, diría sin rodeos el papa Francisco. Gracias a la primera podemos experimentar nuestros
pecados de la Iglesia y el mundo, y tenemos el coraje y la honestidad que llorar por ellos, para pedir
perdón y compasión por las víctimas 12 ; la segunda nos hace duros como una piedra. 3.4. Dejarse
formar por la vida Y no podría ser esta, entonces, una buena oportunidad para comprender finalmente
que formación permanente significa dejarse formar, sí, dejarse educar, provocar, ponerse en crisis,
regañar hasta... dejarnos bofetear por la vida, por la misión, por los demás..., y en particular por las
situaciones de la vida que parecen totalmente negativas o enigmáticas, pero que podrían llegar a ser
misteriosas, como el dolor del mundo? No sería una buena oportunidad para reconocer y realmente
llorar por nuestras fallas y contradicciones, y aprender así de nuestros errores? Para no repetirlos, por
supuesto, no para sentirnos mejor que los demás, sino también para experimentar la misericordia que
es el corazón de nuestro anuncio misionero y nos hace misericordiosos en un mundo implacable y
hambriento de misericordia como el nuestro. Especialmente en este año, si queremos que sea de
Jubileo. Cómo podríamos hacernos, en este tiempo santo, misioneros de la misericordia? 11 Ibidem. 12
Papa Francesco invocó la gracia de llorar de frente a los pecados de los miembros de la Iglesia, en su
homilía del 7/VII/2014 en Sta. Martha, durante la misa en la cual participaron seis víctimas de abusos
sexuales por parte de eclesiásticos. 18

1. Abrazar : Sociedad Post-Cristiana o Pre-Cristiana?........... 1.1. El dogma del post. 1.2. Del post-cristiano
al pre-cristiano. 1.3. El abrazo como símbolo de la Nueva Evangelización. 2. El Futuro : Misterio o
Enigma?.......................... 2.1. Exceso de luz o de tinieblas? 2.2. Si Dios es enigma 2.3. En el corazón del
Misterio. 2.4. Elección por el futuro. 3. Con Esperanza : Misioneros o No?........................ 3.1. El valor de
llorar (o de hacer ruido ). 3.2. Cuál credibilidad? 3.3. Cuál formación? 3.4. Dejarse formar por la vida. 3 4
5 6 8 8 10 11 12 13 15 15 17 18 19

Jornada de Vida Sacerdotal y Consagrada 26 de noviembre 2016 Universidad Pontificia de México


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