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ELEMENTOS DE LA ESENCIA DEL NEGOCIO JURIDICO

RESPONDA DE MANERA SUSTENTADA LAS SIGUIENTES PREGUNTAS:

1. Que la oferta sea irrevocable, tal como dispone el artículo 846 inciso 1º del código de
comercio, ¿Significa que el oferente podrá verse compelido judicialmente a celebrar el
negocio jurídico propuesto?
R/ Existe una figura jurídica denominada oferta o propuesta, lo cual no es más que un
plan de la realización de un negocio jurídico que una persona le propone a otra,con el
propósito de realizar un negocio jurídico.

La oferta o propuesta se encuentra consagrada en el artículo 845 del código de


comercio, que la define en los siguientes términos:

«La oferta o propuesta, esto es, el proyecto de negocio jurídico que una persona
formule a otra, deberá contener los elementos esenciales del negocio y ser
comunicada al destinatario. Se entenderá que la propuesta ha sido comunicada
cuando se utilice cualquier medio adecuado para hacerla conocer del destinatario.»

Por su parte la Corte Suprema de Justicia sala de casación civil en sentencia de 4 de abril
de 2001 expediente 5716, se refirió al tema de la siguiente manera:

«No puede confundirse la “oferta”, esto es, el proyecto de negocio jurídico que una
persona formula a otra (artículo 845 del Código De Comercio) (que en cuanto reúna
los requisitos allí previstos, además de ser irrevocable, da lugar al nacimiento del
contrato, una vez ha sido aceptada por el destinatario), con cualquier invitación a
emprender negociaciones que una persona exponga a otra u otras, manifestación,
esta última que abarca múltiples posibilidades tales como los avisos publicitarios y
propagandísticos por medio de los cuales el comerciante anuncia sus productos, y a
los que el artículo 847 del mismo código les niega obligatoriedad, hasta las
proposiciones que una persona hace a otras para que le formulen verdaderas
ofertas, conductas todas ellas que apenas insinúan, como su nombre lo sugiere, el
deseo serio y leal de querer contratar y solamente darán lugar a la responsabilidad
propia de quien quebrante los deberes de corrección y buena fe que gobiernan la
actividad preparatoria de los contratos.»

Entonces la oferta, como bien lo ha dicho la Corte un ofrecimiento serio de querer


celebrar un negocio jurídico.

Irrevocabilidad de la oferta comercial.


La oferta comercial reviste la característica del ser irrevocable, es decir, que una vez la
oferta haya sido comunicada por el proponente, este no podrá retractarse.

Al respecto señala el artículo 846 del código de comercio en su primer inciso:

«La propuesta será irrevocable. De consiguiente, una vez comunicada, no podrá


retractarse el proponente, so pena de indemnizar los perjuicios que con su
revocación cause al destinatario.»

Teniendo en cuenta el carácter de irrevocabilidad de la oferta o propuesta, si el


proponente se retracta de celebrar el negocio que propuso, la consecuencia es resarcir
todos los perjuicios que dicha situación genere al destinatario, entendido esto el
oferente podrá verse compelido judicialmente a celebrar el negocio jurídico

2. Con la aceptación de la oferta de un contrato solemne, en cualquier caso, ¿solo se


perfecciona el consentimiento?

R/. No, el contrato solemne está sujeto a la observancia de ciertas formalidades


especiales, de manera que sin ellas no produce ningún efecto civil, tal y como lo establece
el art. 1500 del CC

La oferta y la aceptación manifiestan, la voluntad contractual de las partes. Por tanto,


deben cumplir con el requisito fundamental de la aptitud e idoneidad de expresar el
consentimiento constitutivo del contrato.

El consentimiento corresponde al acuerdo de varias y distintas voluntades que se unen


para formar un consenso.

3. Sustente lo adecuado o inadecuado que se puede encontrar en el siguiente enunciado. La


determinación del objeto se refiere solo a la plena identificación del sustrato sobre el cual
recae la prestación, o la especifica descripción de la conducta de hacer o no hacer de la
obligación esencial que debe realizar el deudor, en virtud de la celebración del negocio
jurídico.
R/: El objeto es un elemento esencial del negocio jurídico y es preciso que la persona
exprese la voluntad de manera racional y consciente, siempre que no haya lugar a dudas
sobre el acto que se quiere realizar y los efectos que se desean, señalando además que
este acto declarativo debe realizarse por la persona que reúna las condiciones que exige el
Derecho, conocida también como "capacidad". Entendemos que el objeto es la cosa o el
derecho sobre el cual las partes crean, modifican, transmiten o extinguen una relación
jurídica. También es definido por los autores como la prestación que una de las partes se
ha comprometido a efectuar en beneficio de la otra parte y debe ser posible, lícito,
determinado o determinable.

El objeto no solo es la plena identificación del sustrato sobre el cual recae la prestación,
dado que esta debe ser clara, expresa y exigible, en cambio en el hacer y no hacer de la
obligación esencial, esta especificado claramente lo que se debe realizar. le podríamos
añadir.

4. Con fundamento en lo consagrado en los artículos 1518, 1869 y 1870 del C.C determine
de manera sustentada si en los siguientes eventos se configura o no el objeto del negocio
jurídico.

4.1 Alicia, reconocida cosmetóloga de la ciudad de Medellín, se obliga personalmente


con Gabriela de 69 años de edad, a aplicarle un tratamiento facial que le permita
reducir todas las líneas de expresión en solo una hora.

R/. Como es un contrato precario por lo tanto el resultado es incierto, ya que el


procedimiento requiere de tiempo y no sabemos si va a ser efectivo en conformidad
con el articulo 1869 cc, en caso de que lo acordado no haga efecto, Alicia
reembolsara el dinero, los daños y perjuicios a Gabriela por no haberse dado el
resultado esperado, según el artículo 1518 cc
4.2 A través de una audiencia de conciliación, celebrada entre Esteban (deudor) y Ramón
(acreedor), se suscriben un acta de conciliación en la cual se establece lo siguiente:
“Esteban pagará a favor de Ramón una suma de dinero cuando buenamente pueda o
esté en condiciones de hacerlo”.

R/: El acta de conciliación presta merito ejecutivo y hace tránsito a cosa juzgada, por
lo tanto, este contrato se perfeccionará según lo estipulado en dicha conciliación,
cumpliéndose cuando Ramón reciba el dinero en conformidad con el artículo 1870 cc

5. ¿Cuándo en el artículo 1524 del C.C. se dispone que la pura liberalidad o beneficencia es
causa suficiente, se está consagrando la causa en sentido impulsivo, como presupuesto de
validez del negocio jurídico? Si, no, ¿por qué?

R/. Si hay validez del negocio jurídico.


Inicialmente debemos entender que, la causa impulsiva se define como la razón o motivo
que en un determinado momento nos inclina a hacer alguna cosa. Con este significado
podemos referirnos a la causa impulsiva como la conocida desde el punto de vista
jurídico como la causa ocasional. Esta causa es un presupuesto de validez de la
obligación. El verbo “obligue” demostraría que la causa debe existir en la obligación y
validez del negocio jurídico.

No puede haber obligación sin una causa real y lícita. Esto significaría que la obligación
es la que debe tener causa; y si la causa y la voluntad son una misma cosa, entonces si
falta la causa es como que faltara la voluntad o el consentimiento y en esta hipótesis el
negocio jurídico no nacería a la vida jurídica.

Según Jean Domat y Roberto José Pothier. Vid. León (1961) El móvil o motivo concreto
tiene el lugar de causa con respecto a las liberalidades y la mera liberalidad es un motivo.
También es importante anotar que en el Código Civil no se exige la sola causa como un
requisito de validez del negocio, ya que en el artículo 1524 del Código Civil se refiere
específicamente a la “causa real y lícita”. Esta causa sirve para justificar a la obligación
(entendida como el “interés económico” que pretenden las partes al contratar), lo que
supone darle vida al requisito de la realidad de la causa y, al mismo tiempo, utilizarla
como sinónimo de “motivo”, lo que permitiría entender la licitud de esta.

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